INTRODUCCIÓN

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INTRODUCCIÓN

El siguiente caso clínico es de preclamsia la cual tiene como objetivo determinar


los factores de riesgos y disminuir las complicaciones maternas, mediante la
identificación de los factores de riesgo se aplicara el proceso de atención de
enfermería, se identificara los problemas reales, de riesgo y de bienestar, a través
de la información de fuentes primarias y secundarias de madres con preclamsia y
de esta manera realizar diagnósticos de enfermería jerarquizados para aplicar los
cuidados de enfermería individualizados y humanizados con el fin de evitar
secuelas a corto y largo plazo.
La preeclampsia es un síndrome multisistémico de severidad variable, específico
del embarazo caracterizado por una reducción en la perfusión sistémica generada
por vaso espasmo y activación de los sistemas de coagulación. Se presenta
después de la semana 20 de gestación, durante el parto o en las dos semanas
posteriores a este. Según el MSP la tasa de preeclampsia varía entre 5 % y 10 %
en los países desarrollados, pero esta cifra puede alcanzar un 18 % en algunos
países en vías de desarrollo. La preeclampsia persiste como una causa principal
de morbimortalidad materna y perinatal en todo el mundo. En algunos países en
vías de desarrollo, la preeclampsia representa entre 40 % y 80 % de las muertes
maternas. Además, la mortalidad perinatal se quintuplica en las mujeres con
preeclampsia, con frecuencia debido a la restricción del crecimiento intrauterino y
a los partos pre-término. Alrededor de la mitad de las mujeres con preeclampsia
severa se presentan en el centro de salud antes de las 34 semanas de gestación,
con un peso fetal estimado de menos de 2 000 g. Aproximadamente la mitad de
las que se presentan antes de las 34 semanas de gestación requieren que se
determine la finalización de su embarazo por razones fetales o maternas dentro de
las 24 horas del ingreso al hospital. La mitad restante contará con un promedio de
nueve días más antes de que reciban indicación de nacimiento.
Se clasifican en Hipertensión pre-gestacional que se presenta antes del embarazo
o aparece antes de la semana 20, preeclampsia presión arterial por encima de
140/90mmHg asociado a proteinuria (más de 30 mg en muestra única o más de
300mg en muestra de 24 horas el cual es diagnóstico de elección) por encima de
la semana 20 de gestación, hipertensión crónica con preeclampsia sobreañadida
paciente hipertensa crónica que en algún momento del embarazo desarrolla
preeclampsia y eclampsia situación potencialmente grave poco frecuente que
incluye hipertensión con convulsiones durante el embarazo.
Los principales factores de riesgo para la causa de la preeclampsia son:
preeclampsia en el embarazo anterior, síndrome antifosfolipido, periodo
intergenésico mayor a 10 años, antecedente de enfermedad renal o proteinuria,
embarazo múltiple, antecedente de Diabetes mellitus, hipertensión, trombofilia,
enfermedades del colágeno, nefropatía, obesidad, Infecciones en el embarazo,
menores de 20 años o mayores de 35 años.
La Organización Mundial de la Salud define que la preeclampsia es un trastorno
hipertensivo que puede ocurrir durante el embarazo y el posparto y que tiene
repercusiones tanto en la madre como el feto. A nivel mundial, la preeclampsia y
otros trastornos hipertensivos del embarazo son una de las principales causas de
enfermedad y muerte materna y neonatal. La OMS indica que más del 20% de las
muertes maternas son provocados por problemas hipertensivos.
Para el cuidado prenatal es esencial el diagnóstico y manejo de la preeclampsia.
Algunos síntomas asociados a esta enfermedad son la hinchazón, el aumento
repentino de peso, los dolores de cabeza y los cambios en la visión.
Para la prevención y el tratamiento de la preeclampsia y la eclampsia la OMS
recomienda el consumo de calcio en la dieta es bajo, se recomienda la
administración de suplementos de calcio durante el embarazo (en dosis de 1,5 a
2,0 g de calcio elemental por día).
También recomienda la administración de ácido acetilsalicílico en dosis bajas, las
mujeres con hipertensión grave durante el embarazo deben ser tratadas con
antihipertensivos.

Modelo de Adaptación de Callista Roy


Valoración de la Adaptación. - Enfermería evalúa la capacidad de la paciente
embarazada para adaptarse a la preeclampsia severa y sus efectos en la salud.
Esto implica la evaluación de sus signos vitales, síntomas, niveles de dolor,
angustia y capacidad para entender la situación
Intervención y Apoyo. - Enfermería diseña intervenciones para ayudar a la
paciente a adaptarse a su condición. Esto puede incluir la administración de
medicamentos antihipertensivos, la monitorización continua de signos vitales, la
gestión del dolor y la promoción del bienestar emocional.
Evaluación de la Adaptación. - Las enfermeras evalúan continuamente cómo la
paciente se está adaptando a la preeclampsia severa y si las intervenciones están
siendo efectivas. Esto implica el monitoreo de la presión arterial, la función renal,
los niveles de proteína en la orina y la respuesta al tratamiento.
Educación y Apoyo. - Las enfermeras brindan educación a la paciente y su familia
sobre la preeclampsia severa, sus riesgos y el plan de cuidados. También ofrecen
apoyo emocional para ayudar a la paciente a lidiar con la ansiedad y el estrés
asociados con esta condición.

Modelo teórico
La preeclampsia se caracteriza por la presencia de hipertensión y proteinuria
después del vigésimo séptimo día de embarazo. Generalmente se acompaña de
edema, sin embargo, la presencia de edema no es importante para ser analizado.
Es una enfermedad característica del embarazo y sus efectos secundarios pueden
ser tratados, sin embargo, debe ser restaurado con el final del embarazo y en el
caso de que no se trata como se esperaba que puede causar graves dificultades
tanto para la mujer embarazada y el embrión.
En la mujer embarazada, puede convertirse avanzando en eclampsia, o puede
mostrarse con la imagen grave de la condición de HELLP, pero además como
hemorragias cerebrales, edema neumónico intenso, decepción renal, y así
sucesivamente, que tiene sentido de por qué es una de las cuatro razones
significativas de mortalidad materna, incluso en las naciones creadas.
En el bebé, suele ir acompañada de una deficiencia placentaria que suele
manifestarse por una disminución o limitación del desarrollo intrauterino, aunque
puede provocar la muerte del feto. Es normal que la afección fetal, en caso de que
la circunstancia de la apuesta materna no lo haya hecho en la actualidad, obligue
a finalizar el embarazo antes de término, por lo que, junto con la rotura prematura
de capas, es una de las razones más conocidas de imprudencia escandalosa.
La preeclampsia puede producirse hasta en un 10% de los embarazos,
normalmente en el segundo y tercer trimestre y después de las 32 semanas.
Aunque es interesante, algunas mujeres pueden tener indicios de toxemia a partir
de las 20 semanas. Es mucho más normal en las mujeres con su embarazo más
memorable, hasta el 85% de los casos se dan en primigrávidas y la tasa
disminuye de forma impresionante en el embarazo posterío.
Se ha observado que la maternidad en el siguiente embarazo disminuye el riesgo,
además de en mujeres con antecedentes familiares de embarazos hipertensos, y
sin embargo, el riesgo aumenta con la edad materna, por lo que estudiar el
impacto real de la paternidad en el riesgo de preeclampsia ha sido problemático.
El riesgo es varias veces mayor para las mujeres en cuyas familias ha habido
casos de la preeclampsia.
El principal riesgo de toxemia es haber padecido toxemia en un embarazo anterior.
La toxemia es más frecuente en mujeres con hipertensión y diabetes antes del
embarazo, enfermedades del sistema inmunitario (por ejemplo, lupus eritematoso),
pacientes con trombofilias, insuficiencia renal, mujeres con antecedentes
familiares de toxemia, mujeres con sobrepeso y mujeres con numerosos
embarazos (gemelos, por ejemplo). El riesgo es dos veces mayor en las personas
de color.
Es posible que se produzca toxemia después del parto, entre 6 y 2 meses
después. Por lo tanto, debe prestarse atención a las 24-48 horas posteriores al
parto para distinguir los posibles efectos secundarios e indicios de toxemia.
El deterioro y la mortalidad maternos en la toxemia son consecuencia de la rotura
de órganos terminales, el drenaje cerebral y la eclampsia, mientras que para el
bebé son la limitación del desarrollo intrauterino y el bajo peso al nacer debido al
temblor. La toxemia se analiza cuando una mujer embarazada presenta de forma
inesperada un aumento del pulso en dos lecturas separadas requeridas algo así
como 6 horas separadas de 140/90 mmHg o más y un nivel de proteínas en orina
de 300 mg o más. Una altura de tensión circulatoria de 20 mmHg de valor sistólico
(el valor más elevado) y 15 mmHg de valor diastólico (el valor más bajo),
independientemente de que llegue a la necesidad de 140/90, se considera
enorme, a pesar de que generalmente no se cree que sea indicativo.
Inicialmente, la dilatación edematosa, en particular de las manos y la cara, se
consideraba una indicación de importancia demostrativa en la toxemia, aunque en
la práctica clínica actual sólo se espera encontrar hipertensión y proteinuria.
Independientemente de esto, el agrandamiento extraño, especialmente en las
manos, los pies o la cara, perceptible al dejar un espacio mientras se presiona
sobre la zona a la que se hace referencia, debería considerarse crítico y
contestarse a los servicios médicos competentes. Una mamá con toxemia tiene
una inclinación única a la acumulación de plaquetas y a la elevación de los niveles
séricos de serotonina. A pesar del hecho de que la eclampsia es posiblemente
mortal, la toxemia es generalmente asintomática, por lo que su descubrimiento
depende de los signos investigados, cada signo debe ser visto como significativo y
no juzgado erróneamente. El tormento epigástrico, que refleja un problema
hepático y es normal en el trastorno HELLP, puede confundirse con una
indigestión, un problema extremadamente normal en el embarazo. Sin embargo, el
tormento epigástrico no es realmente un tormento de consumo como la
indigestión, no se aventura en la garganta, está relacionado con la delicadeza del
hígado, puede transmitirse a la espalda, y no se siente mucho mejor por los
neutralizadores de ácidos.
Muchas veces es una agonía extrema, retratada por ciertos pacientes como el
tormento más horriblemente terrible que han sentido en algún momento. Por
cierto, algunos especialistas aluden a estos pacientes a un especialista para
descartar una intensa sección media o colecistitis.
Generalmente ninguno de los indicios de toxemia es explícito, incluso las
convulsiones en el embarazo son en muchos casos provocadas por cuestiones
diferentes y no por la eclampsia, así que el hallazgo se basa en el incidente de
unos pocos puntos culminantes preeclampsia, y la prueba decisiva es que se
siente mucho mejor por el transporte. En ciertas damas se produce una elevación
del pulso sin proteinuria, circunstancia denominada hipertensión provocada por el
embarazo o hipertensión gestacional. Tanto la toxemia como la hipertensión
gestacional son circunstancias difíciles que requieren la observación tanto del
embrión como de la madre.
Agrupación
1) HTA previa (persistente): Analizada antes de la gestación o durante las 20
semanas iniciales de crecimiento. Persiste cuando se evalúa 12 semanas después
de la transmisión.
2) TH gestacional: Analizada tras las 20 semanas de desarrollo en una paciente
anteriormente normotensa que no presenta proteinuria positiva. La conclusión
subyacente debe ser cautelosa ya que aproximadamente la mitad de las mujeres
con un hallazgo de hipertensión gestacional presentan proteinuria positiva más
adelante en el embarazo y fomentan la PE. Suponiendo que la paciente aconseje
después de 20 semanas de incubación, el hallazgo autoritativo se hace cuando la
PA vuelve a cualidades típicas después de 12 semanas post embarazo,
separándola de la HT persistente.
3) Preeclampsia: HTA analizada tras 20 semanas de desarrollo y proteinuria ≥
300mg/24 horas, en una paciente anteriormente normotensa. La lesión es
multisistémica incluyendo placenta, riñón, hígado, cerebro y diferentes órganos.
4) PE superpuesta a una HTA constante: Paciente con HTA constante sin
embargo tras 20 semanas de crecimiento se analiza proteinuria. Suponiendo que
presenten proteinuria pasada o consejo tardío, la presencia de una expansión
inesperada en los valores de PA o pródromo de eclampsia podría ser útil para su
hallazgo.
5) Eclampsia: Presencia de convulsiones en una gestante con hallazgo de PE.
Clave Azul. - Protocolo que se activa en el momento que acude o se capta a una
paciente gestante con trastornos hipertensivos del embarazo.
 Identifique a la paciente con signos de gravedad.
 Si la paciente se encuentra convulsionando, realice medidas de protección y
permeabilidad de vía aérea.
 Active la CLAVE AZUL
 Realice examen físico completo que incluya signos vitales completos,
especialmente la presión arterial.
 Realice evaluación de la vitalidad fetal con auscultación o Doppler fetal si dispone.
 Asegure vía aérea: proporcione oxigeno suplementario para conseguir saturación
mayor a 90 %.
 Asegure dos accesos venosos con catéter N° 16, N°18 o N°20.
 Coloque catéter urinario con bolsa de recolección.
 Inicie impregnación con sulfato de magnesio, continuar con mantenimiento.
 Iniciar terapia antihipertensiva si PAS ≥ 160 mmHg y PAD ≥ 110mmHg

Modelo de Adaptación de Callista Roy


Valoración de la Adaptación. - Enfermería evalúa la capacidad de la paciente
embarazada para adaptarse a la preeclampsia severa y sus efectos en la salud.
Esto implica la evaluación de sus signos vitales, síntomas, niveles de dolor,
angustia y capacidad para entender la situación
Intervención y Apoyo. - Enfermería diseña intervenciones para ayudar a la
paciente a adaptarse a su condición. Esto puede incluir la administración de
medicamentos antihipertensivos, la monitorización continua de signos vitales, la
gestión del dolor y la promoción del bienestar emocional.
Evaluación de la Adaptación. - Las enfermeras evalúan continuamente cómo la
paciente se está adaptando a la preeclampsia severa y si las intervenciones están
siendo efectivas. Esto implica el monitoreo de la presión arterial, la función renal,
los niveles de proteína en la orina y la respuesta al tratamiento.
Educación y Apoyo. - Las enfermeras brindan educación a la paciente y su familia
sobre la preeclampsia severa, sus riesgos y el plan de cuidados. También ofrecen
apoyo emocional para ayudar a la paciente a lidiar con la ansiedad y el estrés
asociados con esta condición.
Referencia:
las 2 primeras de introducción
1. Herrera Sánchez K. Preeclampsia; Revista Médica Sinergia Vol.3 Num:3
marzo 2018 pp: 8 – 12 ISSN:2215-4523 EISSN:2215-5279.
2. García A. JimenezmBaez M. González Ortiz G. De la Cruz Toledo P.
Sandoval Jurado L. Kuc Peña L. Características clínicas, epidemiológicas y
riesgo obstétrico de pacientes con preeclampsia-eclampsia; Rev Enferm
Inst Mex Seguro Soc. 2018;26(4):256-62.
Estas 2 de marco teorico
3. PREECLAMPISA [Libro]. [citado 16 de marzo de 2023]. Disponible en:
https://www.medigraphic.com/pdfs/sinergia/rms-2018/rms183b.pdf
4. Álvarez-Fernández I, Prieto B, Álvarez FV. Preeclampsia. Laboratorio
Clinico. 1 de abril de 2018;9(2):81-9.

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