¿Qué es el arte?

El concepto de arte es amplio, ambiguo y cambiante. Hace referencia a una serie de producciones que,

generalmente de manera metafórica, expresan ideas, emociones, sentimientos, sensaciones o,

simplemente, se realizan con el objetivo de producir en el espectador un efecto determinado que puede ser

tanto el disfrute estético como emociones que van desde el temor hasta la experiencia religiosa.

Dentro de las producciones artísticas se pueden considerar distintas disciplinas como la música, el teatro,

la literatura, el cine, el paisajismo, la arquitectura y las artes plásticas (pintura, escultura, dibujo, grabado,

etc.), entre otras.

El estudio de las producciones artísticas ha sido abordado desde distintos campos del pensamiento, como

la filosofía, la historia, la semiología y la antropología, pero no existe consenso, ni siquiera en el interior

de cada una de esas áreas de estudio en definir qué es el arte y cuáles son sus características. Algunas

definiciones ponen énfasis en la actividad del artista; otras, en las características de la obra y otras, en el

efecto que las producciones artísticas provocan en el receptor.

Una de las dificultades a la hora de definir el fenómeno artístico es que los objetos que en la actualidad se

consideran obras de arte, han tenido funciones y valoraciones diferentes en distintas épocas. Por

ejemplo, se considera que las pinturas en las paredes de las cuevas durante el Paleolítico tenían una

función mágica; mientras que un fresco en una iglesia medieval tenía una función religiosa; un mural en

un palacio del siglo XVII, una función estética y una pintura como el Saturno devorando a su hijo,

realizada en la pared de su casa de campo por Francisco de Goya, tenía una función

expresiva y personal.

Así, la función de esos objetos, la valoración que las personas les daban, el concepto que tenían de

quienes los producían y el rol que los artistas ocupaban en la sociedad no siempre fue igual.

El concepto actual de arte comenzó a constituirse a partir de la Edad Moderna, cuando durante el

Renacimiento, el espíritu humanista de la época hizo que la sociedad comenzara a valorar las obras de

arte por su belleza y considerara a quienes las producían como miembros relevantes de la sociedad. Pero

fue recién a partir del siglo XVIII, cuando surgieron disciplinas como la Historia del arte y la Estética,

que tomaron el arte como objeto de estudio, buscaron delimitarlo y sistematizar sus contenidos.
 Los filósofos del siglo XVIII comenzaron a reflexionar sobre la especificidad de la experiencia artística.

Entre ellos, Alexander Baumgarten utilizó por primera vez la palabra Estética para referirse a esta rama

de la filosofía.

La Historia del arte

Desde el siglo XIX, el concepto de Historia del arte se refiere en general a las artes plásticas. La

historia de otras disciplinas artísticas como la música, el teatro, el cine o la literatura, son estudiadas por

ramas específicas de esas disciplinas como la Historia de la música, del teatro, etc.

La Historia del arte es el estudio de las producciones artísticas considerando el marco histórico de su

producción. A través del estudio de similitudes formales, es decir de los elementos que componen la

obra; temáticas, y hasta ideológicas, los investigadores han organizado las producciones artísticas de

todos los tiempos en períodos, a los que se llama corrientes, estilos o movimientos, que comparten

características similares.

Es importante tener en cuenta, que la periodización tradicional del arte está realizada con una mirada

eurocentrista, ya que fue en Europa donde se inició el estudio de la Historia del arte.

La cultura europea occidental ha tomado como modelo la tradición clásica, de la que es heredera, y ha

juzgado las producciones artísticas tomando ese modelo como referencia. Pero otras culturas tienen una

relación diferente con las imágenes, por lo tanto, para ser analizadas requieren de otros criterios y

deberían ajustarse a otro tipo de ordenamiento.

La Historia del arte ha considerado tradicionalmente a las imágenes que no se ajustan a su modelo de

referencia como exóticas, pintorescas, curiosas o primitivas. Como consecuencia, han quedado excluidas
de la periodización de las producciones artísticas extensas áreas del planeta como el arte de las distintas

culturas africanas, de China, Indochina y Japón, de la India y de los pueblos de Oceanía y de la América

precolombina, entre otras.

Máscara Baoulé de la región Bouaké, Costa de Marfil.

Estatua de Coatlicué, deidad mexicana precolombina.

La prehistoria es el período durante el cual aparecieron las primeras manifestaciones artísticas en forma

de animales pintados en las paredes de las cavernas y pequeños objetos que se consideran rituales. Las

pinturas más antiguas que se conocen tienen unos 35.000 años de antigüedad, pertenecen al Paleolítico y

están en la cueva de Chauvet en Francia.

Durante el Mesolítico y el Neolítico, las producciones artísticas se diversificaron y complejizaron.

Comenzó a tener importancia la representación de la figura humana y se construyeron los

primeros monumentos de piedra.

Pinturas rupestres en la cueva de Chauvet, Francia, de unos 30.000 años de antigüedad.

El arte de la Edad Antigua corresponde a las producciones de las grandes civilizaciones de ese período.

Las obras de arte que perduraron suelen estar asociadas al poder político o religioso y en muchos casos

son monumentales. Se destacan el arte de las civilizaciones mesopotámicas como el sumerio, el asirio y

el babilónico y el del antiguo Egipto.

A la Edad antigua también pertenece el arte de las antiguas Grecia y Roma que fue la base del arte y la

cultura occidentales a partir de la Edad Moderna.

conservan en el Museo de Pérgamo en Berlín, Alemania.

Los diez siglos que abarcó la Edad Media, al mismo tiempo que la disgregación del territorio

mediterráneo, produjeron manifestaciones artísticas con características muy diferentes entre sí. El aspecto

común a casi todas ellas fue su carácter religioso basado en una concepción teocéntrica del

mundo. Así, en el medioevo se desarrollaron los siguientes estilos artísticos:

 El arte bizantino: es el conjunto de manifestaciones artísticas del Imperio bizantino.

 El arte paleocristiano: se produjo asociado a las primeras comunidades cristianas

especialmente en las ciudades romanas de occidente entre los siglos I al V d. C. Se

caracterizó por la confluencia del estilo clásico romano con la cosmovisión

cristiana. Es un arte caracterizado por su simbolismo.

 El arte germánico: son las manifestaciones de los pueblos germánicos que, a partir

de las invasiones bárbaras, entraron en contacto con la cultura clásica y

el cristianismo. Se caracterizó por el desarrollo de la orfebrería.

 El arte islámico: es el arte desarrollado por el islam a partir del siglo VII. Ante la

ausencia de imágenes propia del arte islámico se dio gran protagonismo al uso de la

línea y el color como elementos ornamentales.

 El arte carolingio: es el arte producido en torno de la corte de Carlomagno durante

el Imperio carolingio. Sus principales obras fueron palacios, residencias reales e

iglesias.
  El arte románico: fue un estilo artístico que se difundió en gran parte de Europa

entre el siglo XI y los primeros años del siglo XIII, coincidente con el feudalismo.

 El arte gótico: este estilo surgió en Francia a mediados del siglo XII y se difundió

por toda Europa durante los siguientes tres siglos.

El concepto de arte moderno tiene dos acepciones. Por un lado, se considera arte moderno al producido

durante la Edad Moderna y buena parte de la Edad Contemporánea. Por otro, a un momento específico

entre finales del siglo XIX y mediados del XX.

Durante la Edad Moderna, como consecuencia del paso de un sistema de pensamiento teocéntrico hacia

uno antropocéntrico, se desarrollaron formas artísticas que buscaron su fuente en la antigüedad clásica

teniendo a lo humano como modelo y medida de las producciones.

El arte tendió hacia la representación naturalista no solo de la realidad concreta sino también de las

ideas abstractas y las experiencias espirituales.

Los estilos vigentes en este período fueron los siguientes:

 Renacimiento.

 Manierismo.

 Barroco.

 Rococó.

 Neoclasicismo.
 Las bodas de Caná, pintada por el artista manierista Paolo Veronese en 1563. Museo del Louvre, París,

Francia.

A partir de los últimos años del siglo XVIII y hasta el siglo XX, se sucedieron profundos cambios

sociales, políticos, en las formas de producción y en la ocupación del territorio. Desde la Revolución

francesa y la Revolución industrial hasta las Primera y Segunda guerras mundiales, cada etapa del período

presentó manifestaciones artística propias.

Se aceleró la sucesión de movimientos y corrientes artísticas, muchos de los cuales plantearon discusiones

acerca de la función del arte y el rol del artista. Entre los estilos más relevantes de la primera mitad del

siglo XIX, encontramos el Romanticismo y el Realismo.

Durante las últimas décadas del siglo XIX, se profundizaron los cambios en la concepción del arte y de la

actividad artística, así como el impulso de ruptura con las tradiciones anteriores. En términos generales, el

arte se transformó en el medio expresivo de los artistas, quienes se liberaron de las imposiciones de las

academias de arte y de la dependencia con los poderes institucionales para buscar la libertad artística.

A ese período, que llegó hasta mediados del siglo XX, también se lo conoce como Arte moderno o arte de

la modernidad e incluyó los grupos, estilos y movimientos que se enumeran a continuación:

 Impresionismo.

 Postimpresionismo.

 Modernismo.

A partir de comienzos del siglo XX, las vanguardias artísticas cuestionaron el arte del pasado y plantearon

una ruptura con la historia. Estos movimientos fueron:

 Primeras vanguardias: Expresionismo, Fauvismo, Cubismo, Futurismo.

Constructivismo, Neoplasticismo, Surrealismo.

En el Moulin Rouge, del artista postimpresionista Henry de Toulouse-Lautrec. Hacia fines del siglo XIX, comenzaron a tener gran

influencia en el arte europeo las imágenes provenientes de otros contextos culturales como las máscaras africanas y y la estampa

japonesa.

Arte contemporáneo

Después de la Segunda guerra mundial, a partir de la segunda mitad del siglo XX, el centro de la dinámica del arte se desplazó de

Europa a los Estados Unidos de América. Este período se caracterizó por la globalización y la dispersión de las tendencias

artísticas. Entre los movimientos de vanguardia de la posguerra se pueden mencionar el Informalismo, la Nueva figuración, el arte

cinético, el Pop art, el arte de acción (performance, instalación, etc.), el Arte povera, el Minimalismo, el Arte conceptual, entre otras.

Desde las últimas décadas del siglo XX, a partir del surgimiento de la posmodernidad, y durante el siglo XXI conviven numerosas

tendencias plásticas.

La característica más importante es la ausencia de corrientes estilísticas, el aprovechamiento de toda la tradición artística sin

condicionamientos, la utilización de distintos medios desde los tradicionales, como la pintura, hasta los más innovadores como

materiales efímeros, intervenciones urbanas, acciones personales, etc.

El arte en la actualidad es interdisciplinar, transversal, multicultural y muy diverso. Se destacan los grandes eventos

internacionales como la Documenta de Kassel, la Bienal de Venecia, la Bienal de San Pablo, entre muchos otros, en los que, con

distintas consignas, se exhiben las últimas tendencias.