Tesis - Sandra Infante

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UNIVERSIDAD DE CIENCIAS MÉDICAS DE HOLGUÍN.

HOSPITAL PEDIÁTRICO UNIVERSITARIO

“OCTAVIO DE LA CONCEPCIÓN DE LA PEDRAJA”

Propuesta de intervención psicoeducativa para


adolescentes deprimidos en hogares sin amparo
familiar

Autora: Dra. Sandra Infante Calderón

Residente de Psiquiatría Infantil

Tutora: Dra. Doralkis Leonor Alfonso Guerrero

Especialista de primer Grado en Psiquiatría Infantil y Medicina General Integral

Máster en Atención Integral al Niño y en Salud Mental Comunitaria

Tesis para optar por la condición de especialista de primer grado en


Psiquiatría Infantil

2021
´´Solo si se sabe,
se puede divisar el bien´´

Sócrates.
Dedicatoria

A mí querida familia que siempre me ha apoyado.

A mis profesoras por sus enseñanzas y dedicación.


Agradecimientos

Al terminar un trabajo de esta índole son muchas las personas que han
colaborado; mencionarlas a todas es imposible, olvidarnos de algunas sería
imperdonable; por ello, reciban todas en representación de los aquí
mencionados nuestro eterno reconocimiento.
A la doctora Doralkis Leonor Alfonso Guerrero por sus enseñanzas y estímulos
constantes en la realización de este trabajo.

A la Licenciada en Psicología Nayla González Portelles por su colaboración en


la investigación.

A nuestros pacientes, por su colaboración anónima, en quienes habrá de


revertirse lo positivo de esta investigación.
RESUMEN

Introducción. El polimorfismo clínico de la depresión infantil presenta un


desafío profesional que exige conocimiento científico, manejo clínico,
compromiso y conciencia social, por lo que se debe fomentar la investigación
en el área. Objetivo. Diseñar propuesta de intervención psicoeducativa para
adolescentes deprimidos en hogares sin amparo familiar de la provincia de
Holguín. Método. Se realizó una investigación cuasi experimental con
metodología mixta en adolescentes pertenecientes a dos hogares sin amparo
familiar del policlínico “Manuel Díaz Legra” de la provincia de Holguín en el
período desde marzo 2020 hasta febrero 2021. El universo estuvo constituido
por 20 adolescentes y la muestra por 19 adolescentes, por criterios de
exclusión, donde uno no se estudió por presentar Discapacidad Intelectual
moderada y no poder cooperar con la entrevista ni con instrumentos
psicológicos aplicados. Resultados. Predominaron los adolescentes del sexo
femenino (52.63%), en la etapa intermedia del desarrollo (47.37%),
pertenecientes al municipio de Holguín (68.42%). Los trastornos mentales más
frecuentes fueron el TDA/H y los rasgos anómalos de personalidad (31.58%)
en lo personal y en lo familiar el alcoholismo (42.11%) y la Esquizofrenia
(31.58%). Se diagnosticó depresión subclínica en el (52.63%) y la totalidad
refirió como necesidades sentidas la demanda afectiva de su familia,
dificultades en el afrontamiento a los problemas y en las relaciones
interpersonales. Conclusiones. Se diseñó una propuesta de intervenciòn
psicoeducativa para la atención a los adolescentes deprimidos, mediante
criterios de especialistas y se tomó como punto de partida las características de
la muestra.

Depresión infantil, Hogares sin amparo familiar, adolescencia,


Intervención psicoeducativa.
ÍNDICE

INTRODUCCIÓN ............................................................................................... 1
MARCO TEÓRICO ............................................................................................. 9
OBJETIVOS ..................................................................................................... 27
DISEÑO METODOLÓGICO ............................................................................. 28
ANALISIS Y DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS .......................................... 35
CONCLUSIONES............................................................................................. 49
RECOMENDACIONES .................................................................................... 50
BIBLIOGRAFÍA ................................................................................................ 51
INTRODUCCIÓN
Los seres humanos se relacionan o comunican al nivel emocional y reaccionan
de manera similar ante determinados estímulos estresantes negativos, de ahí
que el entendimiento de las emociones sea una de las principales metas de la
ciencia actual, unido a la comprensión y el análisis.1
La depresión se relaciona con el estilo de vida moderno y en la actualidad la
comunidad científica especializada plantea que esta entidad en la infancia ha
cobrado gran importancia y es vital su estudio y tratamiento adecuado porque
cada día va en aumento, así como sus complicaciones fatales. 2
La depresión es un síndrome con diferentes componentes sintomáticos dados
por decaimiento del estado de ánimo, disminución de la capacidad de
experimentar placer y de la autoestima con manifestaciones afectivas,
ideativas, conductuales, cognitivas, vegetativas y motoras. Este trastorno del
humor puede disminuir el rendimiento o limitar la actividad vital habitual
independientemente que su causa sea conocida o desconocida .3
La teoría de la depresión enmascarada en 1972 supuso un avance en el
reconocimiento de la depresión infantil. La observación de un estado de ánimo
irritable o disfórico en numerosos problemas propios de la infancia y de la
adolescencia, como dificultades en el aprendizaje escolar, hiperactividad,
conducta antisocial, ansiedad de separación, anorexia nerviosa, rechazo
escolar, llevaron a hipotetizar que la depresión era un trastorno latente que se
manifestaba de diferentes formas.4,5
Muchas personas no reúnen los criterios para el diagnóstico de un episodio
depresivo mayor pero sí presentan síntomas depresivos claves, esta
condición recibe distintos nombres en la bibliografía: depresión subclínica,
depresión menor y depresión subsindrómico.5
La depresión subclínica es una condición que presenta importantes
implicaciones para el funcionamiento y el bienestar de los pacientes. Se ha
observado que los sujetos con depresión subclínica tienen un deterioro de su
calidad de vida y presentan menor rendimiento laboral, mayor riesgo de sufrir
depresión mayor y de dependencia del abuso de sustancias que aquellos sin
depresión subclínica.5

1
La depresión subclínica es un trastorno con una gran relevancia en la práctica
médica habitual, pero con un escaso reconocimiento en los manuales
diagnósticos actuales, que lo incluyen dentro de la categoría de «trastorno
depresivo no especificado».5

Aunque hay una gran heterogeneidad de definiciones en la literatura, según el


número de síntomas y su duración, y el impacto asociado, se acepta la de Judd
et al en 1994 como definición de referencia: «dos o más síntomas simultáneos
de depresión, presentes la mayor parte del tiempo, al menos durante dos
semanas, asociados a evidencia de disfunción social, en un individuo que no
cumple criterios para el diagnóstico de depresión menor, depresión mayor y/o
Distimia.5

Los criterios de definición de depresión subclínica difieren ampliamente en


cuanto a la cantidad de síntomas y el tiempo de duración, esto dificulta la
comparación entre estudios.5

Las tasas de prevalencia de depresión subclínica reportadas son muy


variables; los relevamientos en la población general reflejan tasas de
prevalencia de entre 1,4% y 17,2%.5,6

En la bibliografía norteamericana existen inclusiones de los equivalentes


depresivos, siendo éstos un peldaño más en la extensa escala de síntomas
depresivos que amagan los dos polos “psique-soma”, existiendo una sola
entidad nosológica “una depresión”. 7

En las manifestaciones enmascaradas de la depresión, de vez en cuando se


observan estados patológicos pertenecientes al círculo depresivo, pero que
tampoco permiten reconocer al cuadro depresivo “clásico”, así como tampoco
se caracterizan por síntomas somáticos, sino por una sintomatología psíquica
atípica sin matiz depresivo. En estos casos, se habla de depresiones
enmascaradas, pero en esta ocasión la máscara cambia.5, 6

Si se considera lo anterior, la noción de una depresión enmascarada se


definiría de la siguiente forma: son todos aquellos cuadros no observables a los
usuales síntomas psíquicos de la depresión, pero con determinados
2
indicadores indirectos que pueden delatar su pertenencia al círculo depresivo;
esta pertenencia se interpreta en sentido de una variedad formal de la
depresión, con una base biológica común.6

En la depresión enmascarada hay que partir del polifacetismo de sus


manifestaciones, se infiere que cualquier órgano o sistema orgánico puede
estar afectado; así como la patoplastia se puede llegar a servir de cualquier tipo
de síntoma. Con base a investigaciones científicas realizadas tanto en Estados
Unidos de América como en Europa se determinan las siguientes
manifestaciones:8
- Molestias funcionales y síntomas vegetativos: predominancia de molestias
físicas, sufridores frente a diversos diagnósticos formulados con ligera
sospecha del cuadro depresivo después de haber sido atendidos por médicos
internistas.

- Molestias hipocondríacas: profunda ambivalencia frente a los trastornos,


incesantes e inoportunas quejas somáticas, todas ellas en su mayoría
mezcladas con cierta agresividad abierta u oculta. Además de una exagerada
autoobservación, insistencia de que sus males son de naturaleza orgánica,
desconocen automáticamente la posibilidad de que sus molestias tengan un
origen psíquico.

- Equivalentes depresivos: psicopatológicamente carecen de elementos del


síndrome depresivo, lo general se trata de enfermedades independientes, en
ocasiones con una génesis evidente psicosomática o bien orgánica. Algunos
sufridores presentan síntomas que permiten hipotetizar el fundamento
depresivo y responden a una terapéutica farmacológica antidepresiva. En este
grupo se encuentran algias y parestesias como cefaleas y dorsalgias difusas,
lumbalgias, braquialgias, dolores dentales, mialgias, parestesias, dolor facial
atípico, migrañas, acatisias y síndrome de las piernas inquietas (restless legs).

- Sintomatología psíquica atípica: en ella la depresión no se enmascara por


somatismos, sino por manifestaciones psíquicas atípicas, como agresividad
injustificada de forma repentina, rasgos obsesivos y fóbicos, alteraciones de la
realidad con despersonalización, disolución de la realidad, transitivismo,

3
alucinaciones e ideas delirantes sin un contenido depresivo específico.
También algunos casos de adicción a drogas, alcoholismo, comportamiento
disocial psicopático y conducta sexual anómala. Por supuesto que la
concatenación de estos trastornos y la depresión son altamente complejas y
difíciles de evaluar y diagnosticar.

- Otra forma de diagnosticar este tipo de enmascaramiento es mediante la


evolución o el carácter periódico que sostienen como son las oscilaciones
diarias, con despertar prematuro, molestias exacerbadas en las primeras horas
de la mañana y con una mejoría hacia la tarde, ello conlleva a un diagnóstico
diferencial frente a una distonía vegetativa que curse con molestias análogas.
Las oscilaciones anuales son menos frecuentes, con aparición o intensificación
de las molestias en primavera u otoño, siendo la anamnesis de fases análogas
un indicio importante a situaciones externas y más aún, al presentarse
oscilaciones diarias se puede asegurar de la existencia de un
enmascaramiento depresivo. Por otra parte, se debe considerar que la
depresión enmascarada sintomatológicamente puede modificar su contenido
en el curso de una misma fase y enriquecerse paulatinamente con síntomas
depresivos típicos o bien revelarse de repente como una depresión
francamente manifiesta.8

Los trastornos depresivos son trastornos prevalentes, recurrentes y con una


alta tasa de comorbilidad. Empobrecen el futuro psicosocial de quienes los
padecen y se acompañan de un alto riesgo de suicidio y de abuso de
sustancias. 9

Los adolescentes constituyen uno de los grupos etarios que presentan mayor
probabilidad de sufrir síntomas depresivos, en esta etapa se llevan a cabo
procesos de cambios físicos, cognitivos, afectivos y socioculturales, que
demandan de los jóvenes el desarrollo de estrategias de afrontamiento que les
permitan establecer un sentido de identidad, autonomía, así como éxito
personal y social. 10

Es la adolescencia el periodo de desarrollo más importante para la


adquisición y el mantenimiento de patrones de comportamientos saludables,

4
que disminuyan el riesgo y prevengan el desarrollo de trastornos clínicos
durante este periodo y la edad adulta.10
La prevalencia de la depresión infantil es similar a la de la depresión en los
adultos. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud estima que un
3% de la población infantil sufre depresión, que representa entre el 10 y el 15%
de las consultas de psiquiatría infantil según diferentes autores.11
El síndrome depresivo alcanza un rango de 3 a 4 % en la población general y
solo el 10 % llega a la consulta de psiquiatría; el 90 % restante es atendido por
internistas o médicos de familia por síntomas somáticos, que deben valorarse
como depresiones subclínicas, entre las cuales se encuentran: desmayos,
cefaleas, dolor torácico o abdominal, cansancio físico o decaimiento, anorexia,
trastornos del sueño, entre otros y que son frecuentes en la adolescencia. 11
Aproximadamente un 5%, o uno de cada 20 niños y adolescentes, tendrán un
episodio depresivo antes de cumplir los 19 años. La realidad es que menos de
la mitad de estos niños reciben un tratamiento adecuado. Los estudios
muestran que los padres suelen subestimar seriamente la intensidad de la
depresión de sus hijos.
En Europa los estudios concluyen que los trastornos mentales incurren en
costos económicos sustanciales, generando gastos directos e indirectos a
través de la asistencia sanitaria y social, además de generar también
importantes afectaciones en lo individual (Wykes et al., 2015).12

Antes de la pubertad sufren este problema aproximadamente el 2 % de los


niños; pero, cuando empieza, ese porcentaje llega al 3,4-5 % en el caso de la
depresión mayor, “aunque hasta un 10 % de los adolescentes presentan
sintomatología depresiva subclínica”, explica Sara Lera, psicóloga clínica del
Hospital Clínico de Barcelona. Esta enfermedad aumenta en las niñas, se
estima que la incidencia es el triple en ellas.13

Los trastornos depresivos y en general los problemas de salud mental,


no solamente afectan a las personas que los sufren y a su entorno, sino
que también tienen un fuerte impacto social y económico y a pesar de
los avances en sistemas de prevención y en los tratamientos, se estima

5
que cuestan 50 mil millones de dólares anuales a la economía de los
Estados Unidos.14

Estudios realizados en el Hospital Pediátrico Universitario Juan Manuel


Márquez en La Habana por la Dra. Nureybis Caballero, en su tesis de grado
para la terminación de su residencia, destaca que el síndrome depresivo fue el
diagnóstico a nivel sindrómico más frecuente realizado por el psiquiatra de
guardia, no obstante en la mayor cantidad de casos, no fue la tristeza, como
síntoma, el motivo de consulta más frecuente en los individuos estudiados,
donde predominó más que la tristeza clínica, las conductas agresivas e
inapropiadas, el rechazo social y la irritabilidad.15
Al implementar la Guía de Prácticas Clínicas para el manejo de los trastornos
depresivos en la Unidad de Intervención en Crisis del Hospital Pediátrico
“Octavio de la Concepción de la Pedraja” de Holguín el pasado año existió
subregistro en el diagnóstico de los trastornos depresivos (7.03%). 16
La institucionalización debería ser una medida de protección, de carácter
provisorio y excepcional, utilizada en situaciones de maltrato que impliquen una
amenaza o violación de los derechos de los niños o de los adolescentes, y
puede o no constituir un riesgo para su desarrollo, dependiendo de los
mecanismos a través de los cuales los niños tendrían que encarar los efectos
negativos que de ahí advienen.17

Las adversidades crónicas o agudas, así como el contexto donde el niño y


adolescente viven y sus características individuales, son algunas variables que
pueden interferir en su desarrollo. Así, las instituciones asumen un lugar central
en la vida de los niños y adolescentes acogidos y por este motivo es necesario
invertir en este espacio de socialización. Se vuelve determinante promover
relaciones más estables y afectuosas en este ambiente.17

Antes del triunfo revolucionario de enero de 1959, la atención a niños y


adolescentes que quedaban desamparados se ofrecía en los llamados
Orfelinatos o Casas de Beneficencias que como regla estaban en la capital del
país.18

En el año 1953 a raíz de los sucesos del Moncada por primera vez se analiza

6
la crudeza de la sociedad cubana. En la Historia me Absolverá, Fidel expuso la
situación en la que vivían los niños y adolescentes cubanos. Con el triunfo de la
Revolución y dando cumplimiento al programa del Moncada se promulga la Ley
No.459 del 14 de julio de 1959, que entre sus por cuantos establecía que unas
de las grandes preocupaciones del país es la protección de la infancia. 19

Luego la Ley 1323 de 30 de noviembre de 1976´´Ley de Organización de la


Administración Central del Estado´´, facultó al Instituto de la infancia para la
creación de los centros de asistencia social para niños y niñas sin amparo filial
y posteriormente, la Institución 3 de 1979, regula la metodología para estos
fines.20

Hasta que el 20 de enero de 1984 el Consejo de Estado dictó el decreto Ley


76/84 mediante el cual se dispuso la creación de una red nacional de centros
de asistencia social, donde alojar y atender a menores de edad, carentes de
amparo familiar, ya sean huérfanos o abandonados, proporcionándoles
condiciones de vida que se asemejen a las de un hogar. Ese mismo año el
MINED dicta mediante la Resolución Ministerial No.48/84 disposiciones
complementarias al decreto Ley 76 y emite un folleto con la Metodología para
la Organización y Funcionamiento de los Hogares.21

Se crea además la Comisión de Prevención y Atención Social, reforzada con el


apoyo de fiscalía, organizaciones políticas y de masas y la sociedad en su
conjunto para la atención y protección de estos menores.21

En Cuba hay unos 400 niños y niñas sin amparo familiar viviendo en
instituciones las cuales son regidas por el Ministerio de Educación. El Estado
aporta recursos humanos, materiales y financieros para que la vida de estos
niños se desarrolle de la manera más cercana posible a las condiciones de un
hogar familiar. El hogar de niños sin amparo familiar es una institución social
muy importante que refleja el carácter profundamente humanista que ha
seguido siempre la política social de la Revolución.18

En Holguín existen 4 hogares para niños y adolescentes sin amparo familiar y


asumen un papel fundamental en la vida de estos, allí se les brinda atención
reforzada, proporcionándoles condiciones de vida favorables y se intenciona el
7
trabajo para incorporarlos a la sociedad de la mejor manera posible; pero la
interrupción del apego familiar a edades tempranas favorece en ellos la
aparición de trastornos mentales, en algunas ocasiones invisibles, como la
depresión subclínica.

Por lo que es importante enfatizar la necesidad de aumentar la sensibilización


referente a este tema en menores institucionalizados y en especial formar y
contar con equipos multidisciplinarios de profesionales con el objetivo en primer
lugar de mejorar su prevención y posteriormente la detección precoz para
brindarles opciones de tratamiento y seguimiento. La presencia de la depresión
en niños y adolescentes está comprometiendo su calidad de vida y bienestar,
motivación suficiente para que esta investigación estudie este problema de
salud y le brinde visibilidad.

Campo de estudio: Depresión Infantil.

Problema científico ¿Cómo una propuesta de intervención psicoeducativa


influirá en el estado de salud de los adolescentes deprimidos de hogares sin
amparo familiar?

Novedad científica: La novedad de la investigación consiste en que nunca


antes se había desarrollado una investigación relacionada con la salud mental
en estos escenarios, la estrategia psicoeduativa en los adolescentes
deprimidos repercutirá en su estado de salud mental, prevendrá sus
complicaciones, favorecerá la resolución de conflictos, tendrán visión positiva
de sí mismo y de lo que les rodea lo que los hará personas más adaptadas.

Resultados: Con esta investigación se obtuvo un producto de gran utilidad que


permitió una vez diagnosticados los adolescentes con depresión subclínica, el
diseño de una intervención psicoeducativa que prevendrá futuras
complicaciones con la repercusión en lo individual y lo social. Además premitió
la opción al título de especialista de primer grado en Psiquiatría Infantil y la
presentación de estos resultados en eventos científicos.

8
MARCO TEÓRICO
Las teorías patogénicas acerca de la depresión continúan girando en espiral a
lo largo de la historia, pasando de la magia a lo religioso, de la química a la
mecánica, del animismo a lo orgánico, del humor a la electricidad, de lo
ambiental a lo genético, de lo espiritual a lo vital, del espíritu animal a los
neurotransmisores, su cuadro clínico, lo descriptivo, permanece estable pero
sigue siendo la gran epidemia silente.1

Antecedentes históricos y filosóficos de la Depresión


Se considera que la depresión ha persistido a lo largo del desarrollo de la
humanidad. En la antigüedad, su símil recibió el nombre de melancolía y sus
síntomas fueron descritos en casi todos los registros literarios y médicos. La
Biblia, por ejemplo, cuenta el fin del rey Antíoco Epifanes (Macabeos 1ª, 6), su
tristeza y sus palabras después de una derrota militar: "Huye el sueño de mis
ojos y mi corazón desfallece de ansiedad".1
La palabra melancolía nació como término médico, fruto de la doctrina
humorista, que ocupó la mayor parte de la historia de la medicina. El
humorismo era la doctrina médica antigua, definida por Hipócrates en el siglo V
a.n.e., que explicaba la salud y la enfermedad por la acción equilibrada o
desequilibrada de los humores en el cuerpo. La crasis era el equilibrio entre los
4 humores básicos: sangre, flema, bilis y atrabilis −humor negro o melancolía;
así mismo, la expulsión de los humores mediante el sudor, los vómitos, la
expectoración, la orina y las deyecciones, se conocían como crisis.1

Los griegos antiguos ya hacían mención a un estado de locura delirante, con


ánimo exaltado. Soranus (I a.n.e.) había comprobado una posible relación entre
el estado de locura delirante y la melancolía, e incluso describió los episodios
mixtos.Areteo de Capadocia, siglo I n.e., escribió: "La melancolía es una
alteración apirética del ánimo, que está siempre frío y adherido a un mismo
pensamiento, inclinado a la tristeza y la pesadumbre"; causada también por la
bilis negra.1
Además, describió la conexión entre episodios depresivos y maníacos: "la
melancolía es el principio y parte de la manía"..."algunos pacientes, después de

9
ser melancólicos, tienen brotes de manía de manera que la manía es una
posible variedad del estar melancólico". Para él la melancolía era la forma
fundamental de locura, de la que derivarían las otras variedades. Cuando la
enfermedad se agravaba, se producía una afectación del cerebro por vía
simpática, que daba lugar a la aparición de la manía.
El fuerte desequilibrio de alguno de los humores era la génesis de la aparición
de distintas enfermedades; el leve predominio de un humor sobre los otros
determinaba un temperamento, una manera de ser. Para los griegos, 4 eran las
esencias: tierra, aire, fuego y agua; 4, los puntos cardinales; 4, las estaciones;
4, las edades del hombre: infancia, juventud, madurez y vejez, y 4 los
temperamentos: sanguíneo, colérico, melancólico y flemático. 1

El temperamento es una predisposición que se manifiesta ante la impresión


provocada por una idea, un recuerdo, un acontecimiento exterior; es una
manera repetitiva de reaccionar. El melancólico es sensible y poco reactivo,
pero de guardar por mucho tiempo sus impresiones, se torna pesimista y
pasivo.1
Un aforismo de Hipócrates sintetiza la postura griega que hoy día se puede
traducir como: "Si el miedo y la tristeza se prolongan, es melancolía". Lo negro,
lo agrio, lo pesado, lo triste, encerrados en un término, melancolía. 1, 22
Al parecer, Hipócrates también tuvo razón al relacionar 2 síntomas propios de
la melancolía: el temor y la tristeza. Como consecuencia de esta tristeza, los
melancólicos odian todo lo que ven y parecen continuamente apenados y
llenos de miedo. El modelo imperante del pensamiento médico griego, que
influyó por más de 2 000 años, estaba aferrado a las variaciones hereditarias
que afrontaban a las diferentes noxas.1, 22
Los romanos tenían su propia manera de nombrar la bilis negra (atrapa bilis),
pero prefirieron llamarla como les sonaba a ellos la fonética, es decir,
melancolía. Así mismo, la palabra depresión se deriva del latín de y premere
(apretar, oprimir) y deprimere (empujar hacia abajo). 1,22
Otros pensadores como Galeno de Pérgamo (131-201) describieron la
melancolía como una alteración crónica, que no se acompaña de fiebre y
presenta síntomas como temor, miedo o desesperación, suspicacia,
misantropía y cansancio de la vida, entre otros.22

10
En Bagdad, siglo X, el árabe Isaq ibn Imran la refirió como: "un cierto
sentimiento de aflicción y aislamiento que se forma en el alma debido a algo
que el paciente cree que es real pero que es irreal, además de todos estos
síntomas psíquicos, hay otros somáticos como la pérdida de peso y sueño. La
melancolía puede tener causas puramente psíquicas, miedo, aburrimiento o ira,
de manera que la pérdida de un ser querido o de una biblioteca insustituible
pueden producir tristeza y aflicción tales que tengan como resultado a la
melancolía."22
Constantino, el africano, siglo XI, planteó: "La melancolía perturba el espíritu
más que otras enfermedades del cuerpo. Una de sus clases llamada
hipocondríaca, está ubicada en la boca del estómago; la otra está en lo íntimo
del cerebro. El cuerpo sigue al alma en sus acciones y el alma sigue al cuerpo
en sus accidentes".22
Aldous Huxley, entre literario y descriptivo trató el tema de esta manera: "Los
cenobitas de la Tebaida se hallaban sometidos a los asaltos de muchos
demonios. La mayor parte de esos espíritus malignos aparecía furtivamente a
la llegada de la noche. Pero había uno, un enemigo de mortal sutileza, que se
paseaba sin temor a la luz del día.22
Los santos del desierto lo llamaban Daemon meridianus, pues su hora favorita
de visita era bajo el sol ardiente. Yacía a la espera de aquellos monjes que se
hastiaran de trabajar bajo el calor opresivo, aprovechando un momento de
flaqueza para forzar la entrada a sus corazones. De repente a la pobre víctima
el día le resultaba intolerablemente largo y la vida desoladoramente vacía. Iba
a la puerta de su celda, miraba el sol en lo alto y se preguntaba si un nuevo
Josué había detenido el astro a la mitad de su curso celeste.22
Regresaba entonces a la sombra y se preguntaba por qué razón él estaba
metido en una celda y si la existencia tenía algún sentido. Volvía entonces a
mirar el sol, hallándolo indiscutiblemente estacionario, mientras que la hora de
la merienda común se le antojaba más remota que nunca. Volvía entonces a
sus meditaciones para hundirse, entre el disgusto y la fatiga, en las negras
profundidades de la desesperación y el consternado descreimiento. Cuando tal
cosa ocurría el demonio sonreía y podía marcharse ya, a sabiendas de que
había logrado una buena faena mañanera".22

11
Por otra parte, en nuestra América, según las narraciones de los
conquistadores españoles, recopiladas por Elferink, la depresión era la
enfermedad mental más frecuente entre los incas, quienes tenían un afianzado
conocimiento de las plantas medicinales y los minerales que se empleaban
contra la enfermedad, así como los ritos mágicos y religiosos para combatirla .1
El español Poma describió así a la esposa del tercer gobernante inca: "La
tercera Coya fue miserable, avarienta y mujer desdichada, y no comía casi
nada y bebía mucha chicha y de cosas insignificantes lloraba, y de puro mísera
no estaba bien con sus vasallos; era triste de corazón". 1

Santo Tomás (1225-1274) sostenía que la melancolía era provocada por


demonios e influencias astrales e incluso por el pecado de pereza. 1
En la Edad Media los líderes religiosos creían que la depresión era causada
por posesión de los espíritus malos. El reformador religioso alemán, Martín
Lutero, escribió: "Toda la pesadez de la mente y la melancolía vienen del
diablo." A lo largo de los siglos, la depresión ha sido tratada con diferentes
remedios como azotes, sangrías, exorcismo y baños. Durante la Edad Media
este demonio fue conocido como acedia. Aunque los monjes seguían siendo
sus víctimas predilectas, realizaba también un buen número de conquistas
entre los laicos.1, 22
La acedia o taedium cordis era considerada como uno de los 8 vicios capitales
que subyugaban al hombre. Algunos desacertados psicólogos del mal solían
hablar de esta como si fuera la llana pereza. "Más la pereza es tan solo una de
las numerosas manifestaciones del vicio sutil y complicado que es la acedia.
Los que pecaban por acedia irían a encontrar su morada eterna en el quinto
círculo del Infierno. Allí se les sumerge en la misma ciénaga negra con los
coléricos, y sus lamentos y voces burbujean en la superficie.1, 22
San Isidoro de Sevilla indicó 4 derivadas de la tristeza: el rencor, la
pusilanimidad, la amargura y la desesperación; y 7 de la acedia propiamente
dicha: la ociosidad, la somnolencia, la indiscreción de la mente, el desasosiego
del cuerpo, la inestabilidad, la verbosidad y la curiosidad. 22

Evagrio Póntico describía al acedioso diciendo que era "flojo para la oración y
ciertamente jamás pronunciará las palabras de la oración; como efectivamente
el enfermo jamás llega a cargar un peso excesivo, así también el acedioso

12
seguramente no se ocupará con diligencia de los deberes hacia Dios: a uno le
falta, efectivamente, la fuerza física, el otro extraña el vigor del alma. 22
La paciencia, el hacer todo con mucha constancia y el temor de Dios curan la
acedia. Dispón para ti mismo una justa medida en cada actividad y no desistas
antes de haberla concluido, y reza prudentemente y con fuerza y el espíritu de
la acedia huirá de ti". En el siglo XIV, Paracelso se refirió tanto a la depresión
endógena como exógena. En 1621, Robert Burton escribió su libro La anatomía
de la melancolía e hizo referencia a los aspectos, hasta entonces conocidos,
sobre el padecimiento donde era fácil identificar los estados depresivos. 22
Thomas Willis (1621-1675) desdeñó la teoría de los humores como causa de la
melancolía y, siguiendo los conocimientos de su época, atribuyó el origen de
esta enfermedad a las alteraciones químicas producidas en el cerebro y el
corazón. Mencionó 4 tipos de melancolías, de acuerdo con su origen: por
desorden inicial del cerebro, derivada de los hipocondrios (bazo), la que
comprende todo el cuerpo y originada en el útero.22
En 1679 Bonetus escribió Manía de la melancolía y en otra publicación que
data de 1686 trató la relación y significación patogénica existentes entre la
melancolía y la manía; este mismo concepto se mantuvo en Inglaterra en el
siglo XVII.
En 1725 Richard Blackmore se refirió a "estar deprimido en profunda tristeza y
melancolía". En 1764, Robert Whytt relacionó la depresión mental con el
espíritu bajo, la hipocondría y la melancolía.22
En 1784 Chiarugi propuso y defendió la idea de que durante la evolución de
una misma enfermedad se pueden suceder diversos estados psíquicos.
Estableció la hipótesis según la cual existían 3 formas de locura: la melancolía,
la manía y la demencia, que para este autor era una forma de delirio con
alteraciones cognoscitivas y volitivas.22
En 1808 Haslam se refirió a aquellos que se encontraban bajo la influencia de
las pasiones depresivas. Ya en esa época el término depresión ganó terreno y
se utilizó junto al de melancolía para designar la enfermedad, mientras que
esta última siguió conservando su uso popular y literario. Así mismo, Wilhem
Griesinger introdujo el término estados de depresión mental como sinónimo de
melancolía.1, 22

13
A inicios del siglo XVIII, Pitcairn explicó que el desorden de la hidrodinámica de
la sangre afectaba el flujo de los espíritus animales de los nervios y provocaba
pensamientos desordenados y delirios en la melancolía. En esa misma época,
William Cullen asoció los conceptos de carga y descarga en los cuerpos
sometidos a electricidad y los aplicó al cerebro, en el sentido de mayor o menor
energía (excitación y agotamiento) cerebral; la melancolía fue relacionada con
un estado de menor energía cerebral, conocido actualmente como hipoergia o,
más radicalmente, anergia. A su vez y en relación con las causas de la
depresión, a principios del siglo XIX Philippe Pinel señaló como causas
posibles de la melancolía, en primer lugar, las psicológicas y en segundo, las
físicas. En el siglo XVI la melancolía fue aceptada como una enfermedad
mental y Bartolomeus Anglicus la definió como la afección de la parte media de
la cabeza, con privación de la razón. "Es una afección que domina el alma y
que proviene del miedo y de la tristeza que daña la razón". Robert Burton la
definió como "un delirio sin fiebre que se acompaña de miedo y tristeza sin
causas aparentes". 22
El siglo XIX supondría el período de máximo apogeo en el desarrollo de la
psicosis única. Así, el autor belga, Guislain, defendió la tesis según la cual la
melancolía era el fenómeno inicial. A esta seguirían la manía, las ideas
delirantes y, finalmente, la demencia. Sus ideas ejercieron una notable
influencia en la psiquiatría alemana, donde se destacaron 3 autores: Zeller
(1840), quien consideró que la melancolía era la forma fundamental de la
mayor parte de las enfermedades mentales, por lo que las demás afecciones
como la manía, la paranoia y la demencia, supondrían agravaciones sucesivas
de la primera. 1
Después le sucedió Griesinger (1861), cuya idea de la psicosis única llegó a
alcanzar su máximo apogeo. Para este autor, solo se podía hablar de formas
de trastornos psíquicos, susceptibles de ser agrupados en perturbaciones
afectivas y perturbaciones del pensamiento. Las primeras precederían,
normalmente, a las segundas. La melancolía y la manía formarían parte del
primer grupo. La paranoia y la demencia, del segundo.1
A mediados del siglo XIX y casi de forma simultánea a Griesinger, aparecieron
los trabajos de Hoffmann (1861) y Snell (1865). Dichos autores comenzaron

14
con el ocaso del concepto de psicosis única, pues para ellos la paranoia no
siempre ten- dría un carácter secundario a la melancolía, de manera que
existía la posibilidad de la paranoia primaria. Esta idea obtuvo su consagración
definitiva en el Congreso de Berlín (1893), donde se estableció que la paranoia
era un trastorno en el que los afectos tendrían una función muy poco
relevante.1
En 1863, Kahlbaum acuñó y empezó a utilizar el término distimia, tan difundido
actualmente entre los profesionales de la salud mental. Kraepelin, uno de los
psiquiatras más eminentes de su tiempo, también habló de la melancolía. En
una de sus clasificaciones nosológicas empleó el término locura depresiva, sin
desprenderse del término melancolía para designar la enfermedad, y reservó el
de depresión para denominar un estado de ánimo. Él consideraba que las
melancolías eran formas de depresión mental, expresión que le pertenece. 1
Kraepelin en1899 usó como categoría diagnóstica la locura maníaco-depresiva.
Así mismo, hizo una de las mayores aportaciones a la psiquiatría, al diferenciar
la enfermedad maníaco-depresiva de la demencia precoz; además, fue uno de
los primeros en señalar que el estrés psicológico puede precipitar los episodios
iniciales de manía y que los episodios posteriores ocurren de forma
espontánea.1
Conforme fue avanzando el tiempo, los conceptos y términos utilizados para
referirse a la melancolía o la depresión eran más acertados y específicos. De
esta manera, Meyer propuso eliminar totalmente el término melancolía y
reemplazarlo por el de depresión. Así, en esta puja semántica se llegó a la
redundancia de nominar depresión con melancolía cuando los síntomas eran
suficientemente graves como para nominarlos simplemente como depresión.1
En 1863, el término ciclotimia fue empleado por Kahlbaum para designar las
variaciones de las fases depresiva y maníaca, remedando los ciclos.
Finalmente, la melancolía fue aceptada como concepto de depresión, y dio
lugar a otros más que especifican las diferentes ramas o clasificaciones de
esta, como se demostró en la primera cuarta parte del siglo XX, cuando los
conceptos se desglosaban en ansiedad, depresión, histeria, hipocondría,
obsesión, fobia y trastorno psicosomático, entre otros. 1

15
En 1911 Freud publicó su trabajo Duelo y melancolía, en el cual se
establecieron las diferencias entre la enfermedad y el proceso de duelo que
tiene lugar cuando se sufre por la pérdida de un ser querido, donde es normal
la depresión, siempre y cuando esta se resuelva entre 6 y 12 meses, y no
incapacite a la persona en el desarrollo de sus actividades normales . 1
En 1924 Bleuler se apartó de la línea de Kraepelin, al plantear que la relación
entre la enfermedad maníaco-depresiva y la demencia precoz era parte de un
continuo, sin una línea clara de delimitación. Por último, Meyer creía que la
psicopatología surgía de interacciones biopsicosociales.1
A partir de esta conceptualización, reflejada por el DSM-I en 1952, se incluyó el
término reacción maníaco-depresiva. En 1957, Leonhard observó que algunos
pacientes presentaban tanto historia de depresión como historia de manía,
mientras que otros manifestaban solamente historia de depresión.23
En observaciones sucesivas notó que los pacientes con historia de manía
(aquellos a los cuales llamó bipolares) tenían una elevada incidencia de manía
en sus familias, cuando los comparaba con aquellos que tenían solamente
historia de depresión a los cuales llamó monopolares.23
En 1976, Dunner y colaboradores sugirieron subdividir el trastorno bipolar de la
manera siguiente: tipo I, pacientes con historia de manía lo suficientemente
severa como para requerir hospitalización (muchos de estos cuadros se
acompañan de síntomas psicóticos) y tipo II, pacientes con una historia de
hipomanía, además de presentar una historia previa de depresión mayor, que
requirió hospitalización. En 1980, la distinción bipolar-unipolar fue incorporada
formalmente en el sistema americano DSM-III.24
Otras de las formas clínicas de nombrar la depresión fue neurosis depresiva,
mientras que la otra, psicosis maníaco-depresiva. A partir del DSM-III, en el
Manual de diagnóstico y estadística de la Asociación Psiquiátrica Americana,
publicado en su tercera edición en 1981, se cambiaron los nombres por
trastorno distímico y trastorno depresivo mayor. 24
Al igual que la tuberculosis, esta enfermedad fue elevada a la categoría de
sublime por el romanticismo. Estuvo presente en nuestra cultura y nuestra
lengua desde siempre, y sufrió diversas modificaciones (melangía, metralgía,
melarchía...), que no prosperaron. Debido a su interés, la melancolía ha sido

16
objeto de obras literarias y pictóricas. Tirso de Molina compuso la comedia El
melancólico, la cual suscitó un gran interés para el público porque veía en el
protagonista al enigmático y melancólico Felipe II. 1

Factores etiopatogénicos

La psicopatología de la depresión no sólo varía entre los distintos pacientes


sino también entre los distintos episodios dentro de la vida de un mismo
paciente. Este polimorfismo clínico constituye un importante desafío en el
estudio de su etiopatogenia.25

En el origen de la depresión interactúan factores genéticos y ambientales. Su


heredabilidad se ha estimado en estudios de gemelos entre 31-42% con una
contribución ambiental de 58-67%. Los modelos biológicos de la depresión
incluyen una larga serie de genes, siendo uno de los más estudiados el que
codifica el transportador de serotonina. Además, se ha visto que los subtipos
de depresión se relacionan con patrones específicos de alteración.25

Las experiencias traumáticas infantiles pueden contribuir con la aparición de


depresión en la adultez, especialmente en aquellos individuos más vulnerables,
incluso se ha postulado la existencia de subtipos neurobiológicos de depresión
dependiendo de la presencia o ausencia de eventos tempranos adversos.
Recientemente se ha sugerido que diversos procesos inflamatorios jugarían un
rol en la etiopatogenia de la depresión no sólo como precipitantes sino también
como factores mantenedores de la sintomatología.25, 26

Sigmund Freud distinguió por primera vez los dinamismos psicológicos que
subyacen a las reacciones afectivas de duelo y los síntomas de la depresión
melancólica, planteó que lo característico de la melancolía es una pérdida de la
autoestima manifestada clínicamente por la presencia de autorreproches.
Posteriormente, el modelo cognitivo-conductual de la depresión postuló la
existencia de una serie de cogniciones conscientes pero erradas o
distorsionadas respecto a la manera de interpretar las experiencias. 26

17
Aunque las hipótesis evolucionistas sobre el origen de la depresión se han
postulado desde hace algún tiempo, no han dejado de ser controversiales. En
la depresión, entendida como un fenómeno adaptativo, el desánimo y los
síntomas asociados contribuyen con el manejo de situaciones inapropiadas o
potencialmente dañinas, por ejemplo, comunicando una necesidad de ayuda o
actuando como señal de sumisión en conflictos sociales en torno a la jerarquía
cuando no existen posibilidades de resultar victorioso.26

En situaciones de trauma o abandono, el valor evolucionista de la depresión


reside en la posibilidad de terminar con un estado de angustia de separación
prolongado y, por lo tanto, evitar los efectos psicobiológicos deletéreos. En ese
sentido se postula que la depresión corresponde a una respuesta ante la
amenaza de los vínculos afectivos, lo que se traduce en una alteración de la
capacidad de mentalización respecto a los deseos y motivaciones propias o de
los demás. Específicamente, el apego inseguro se ha relacionado con una
mayor vulnerabilidad para el desarrollo de depresión y conducta suicida. Por lo
tanto, existe una estrecha relación entre el estilo de apego, el estrés y la
mentalización en la etiopatogenia de la depresión.26, 27

En consecuencia, pensamos que el conocimiento de los mecanismos


etiopatogénicos de la depresión es importante para el médico ya que le permite
abordar su tratamiento contando con un modelo comprensivo que considere,
por ejemplo, la relevancia de la carga genética, la necesidad de considerar el
antecedente de trauma infantil o el valor adaptativo que puede tener el
desánimo y la angustia.27

Se han admitido también factores hormonales en relación con trastornos del


tiroides, de la hipófisis, de las gónadas y de la corteza suprarrenal, secuencia
de una serie de golpes psicológicos o traumas para el individuo, variaciones
en el tono o balance vegetativo, determinados patrones del pensamiento que
afectan las reacciones de las personas frente a los acontecimientos.27

La familia y el entorno social tienen un importante papel, una atmósfera


familiar negativa, estresante o infeliz puede afectar la autoestima y llevar a la
depresión, condiciones sociales como la pobreza, la falta de hogar y la

18
violencia en la comunidad pueden aumentar las posibilidades de que las
personas se depriman. En algunos adolescentes, los problemas de
aprendizaje no diagnosticados pueden impedir un buen desempeño escolar
así como los cambios hormonales propios de la etapa pueden afectar su
estado de ánimo.28

Maduración, afectividad y depresión

En una óptica explicativa es fundamental considerar los cambios del humor


dentro de un proceso de crecimiento que, a partir de los aspectos
constitucionales y de los procesos de apego, lleva a la construcción de una
organización de significado personal específica para todo sujeto. Es, por lo
tanto, oportuno tratar brevemente las principales relaciones que interactúan
entre el cambio del humor y los procesos madurativos adolescentes. 29

La adolescencia no es solamente el período del ciclo de vida en el cual se


verifican los mayores cambios psicofísicos, sean en el plano cuantitativo o
cualitativo donde se produce una maduración de las características sexuales
primarias y secundarias, del pensamiento abstracto, entre otras
características, sino que es también un período heterogéneo, con un inicio y
término difuso y, por esto mismo, difícilmente delimitable. 30

En la sociedad occidental el paso de la infancia a la llamada preadolescencia


es cada vez más precoz y a su vez, el ingreso a la sociedad adulta, en
términos de autonomía, tiende progresivamente a ubicarse más adelante, de
tal manera que la adolescencia llega a ser, por consecuencia, un período muy
amplio y, más aun, muy multiforme.30

En este período de grandes transformaciones se define progresivamente el


ensamblaje de los esquemas emotivosafectivos e ideativos que configuran el
cierre organizacional y, por lo tanto, la emergencia de una organización
estable de significado personal, peculiar para cada individuo.30

La variabilidad de los recorridos maduracionales y las posibles alternancias


de períodos de evolución más continua y tranquila, con fases más turbulentas
y de crisis, hace difícil un encuadramiento, sea el individuo singular, como en

19
sus manifestaciones psicocomportamentales, si se desea utilizar los criterios
descriptivos estándar del enfoque nosológico tradicional.30,31

Para comprender la dinámica evolutiva de los trastornos observados es decir


el aspecto “procesal” es necesario seguir un modelo explicativo, actualizado
epistemológicamente y dúctil en el plano clínico, que pueda integrar el
enfoque nosológico tradicional y que proporcione modalidades clínicas de
intervención de urgencias, atendiendo a las específicas problemáticas de
cada sujeto.31

La maduración emocional y afectiva se realiza a partir de formas generales de


reactividad a lo largo del eje placidez-agresividad y de activaciones positivas
o negativas a lo largo del eje placer-displacer. Esto permite el reconocimiento
y memorización de los estímulos ambientales, los cuales, de esta manera,
activan reacciones subjetivas específicas en relación a las propias
expectativas que se expresan, ya sea a través de manifestaciones
comportamentales o mediante comunicaciones no verbales y, posteriormente,
verbales.31

En el curso del desarrollo, a partir de la relación de apego, las emociones son


utilizadas en la construcción del sistema representativo del sí mismo y de las
otras figuras significativas; de este modo, la autorrepresentacion de las
emociones es decir, su representación a nivel consciente constituye el
elemento central en torno al cual se articula la construcción del sí mismo
respecto al espacio intersubjetivo en el cual el individuo se encuentra
viviendo.31

Bajo el perfil adaptativo, las funciones emotivas y afectivas orientan, por lo


tanto, los procesos cognitivos especialmente la atención y el aprendizaje),
proporcionando a tales procesos una valoración subjetiva que condiciona
también las modalidades con las cuales se expresan en los otros ámbitos
de las relaciones significativas.31

En el grupo familiar se presentan disímiles eventos que continuamente


modifican y determinan las interacciones de los miembros que la integran,
produciendo resultados que cambian no solo la dinámica y el funcionamiento
familiar; sino, además, el desarrollo armónico de cada uno de sus miembros,
20
fundamentalmente de los hijos, sobre todo si son pequeños o con edades
inferiores a la juventud.32

La violencia intrafamiliar es uno de los fenómenos que pudiera afectar


notoriamente el funcionamiento familiar. Se define como toda acción u
omisión cometida por algún miembro de la familia, que viole el derecho al
desarrollo pleno y al bienestar de otro miembro, impida el ejercicio de su
autonomía, atente contra su autoestima y puede producir lesiones o daño
físico, psíquico y hasta la muerte.32

Este es un fenómeno que ha permanecido invisibilizado, debido a que en


ocasiones no se registra adecuadamente, no se reconoce como problema de
salud pública. Sólo se reconocen algunas de sus manifestaciones. Se reduce
a un problema privado e individual de la familia y no se toma como un asunto
de la sociedad.33

La violencia intrafamiliar de acuerdo a quién va dirigido puede ser el maltrato


hacia los niños y niñas, maltrato conyugal o en la pareja, maltrato hacia la
mujer o violencia de género, violencia cruzada ,violencia hacia el hombre,
maltrato hacia los ancianos y ancianas.33

Signos y síntomas de detección, clasificación


El desarrollo de las ciencias atraviesa un largo período paralelo al desarrollo de
la humanidad y en el caso del tema en estudio, la Depresión, resulta
interesante que las clasificaciones se acercan cada vez más no solo a la
etiopatogenia del trastorno que no siempre se conoce, sino a la forma en que
se presenta el cuadro clínico en relación a la edad del paciente. 34
El diagnóstico de la depresión infantil según la CIE-10 sigue los siguientes
criterios: 35
• La duración del episodio depresivo debe ser como mínimo de dos
semanas y no estar relacionado con el consumo de ninguna sustancia.

• Presencia de dos de los siguientes síntomas:

Humor depresivo: los niños y adolescentes, pueden presentar un estado de


ánimo deprimido o irritable. Los más pequeños, además, a menudo no son
capaces de describir cómo se sienten y suelen quejarse de molestias físicas

21
imprecisas, y mostrar una triste expresión facial o una escasa comunicación
visual. El ánimo irritable se puede manifestar con una conducta agresiva o
acciones que demuestren hostilidad o cólera. En los adolescentes mayores los
trastornos de ánimo pueden tener síntomas parecidos a los de los adultos.
Pérdida de interés hacia el entorno, o incapacidad para disfrutar con el juego
o con las actividades escolares.
Falta de energía: no juega, rechaza ir al colegio, en casa se le ve desanimado,
no habla, etcétera.
Presencia de uno o más de los siguientes síntomas:
Pérdida de confianza y autoestima, y sentimientos de inferioridad.
Reproches: en los niños se refleja mediante una autodesvalorización o un
sentimiento de culpa excesivo o inapropiado.
Ideas o intentos autolíticos ,autodestructivos: en los niños y adolescentes se
observan signos no verbales de conducta suicida como realizar acciones en las
que corre riesgos de forma reiterada, a veces como si se tratase de un juego ,o
adoptar comportamientos autolesivos, por ejemplo arañarse.
Incapacidad para concentrarse o tomar decisiones, que en el caso de los
niños se traduce en problemas de conducta o un bajo rendimiento académico.
Actividad psicomotriz agitada o inhibida.
Alteraciones del sueño.
Variaciones de peso, en los niños generalmente se da un aumento.
Quejas somáticas como dolor de cabeza, abdominal, palpitaciones entre
otros. Este criterio es muy frecuente en niños.
En niños.
Más síntomas de ansiedad como fobias y ansiedad de separación, más quejas
somáticas y alucinaciones auditivas. Irritabilidad episódica y rabietas. Menos
delirios y menos conductas suicidas que en los mayores.
En adolescentes.
Más trastornos del sueño y del apetito, ideas deliroides, pensamientos y actos
suicidas. Más problemas de conducta y menos síntomas neurovegetativos
comparados con los adultos.
La Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y problemas
relacionados con la salud en su Décima Versión (CIE10-1992): incluyen en F3

22
los trastornos el humor (afectivos) en sus distintas variantes, en F4 los
trastornos neuróticos secundarios a situaciones estresantes y somatomorfos, y
en F9 los trastornos del comportamiento y las emociones de comienzo habitual
en la infancia y en la adolescencia. Contempla las formas atípicas de la
depresión reconociéndolas como frecuentes a estas edades: ansiedad,
malestar, agitación psicomotriz, irritabilidad, consumo excesivo de alcohol,
presencia de comportamientos histriónicos, preocupación hipocondríaca,
exacerbación de las fobias o de síntomas obsesivos persistente.
CIE-10. Incluye los trastornos del humor desde F30 hasta F39.
F30 Episodio maníaco.
F30.0 Hipomanía.
F31Trastorno bipolar afectivo.
F32 Episodio depresivo.
F32.0 Episodio depresivo leve.
F32.1 Episodio depresivo moderado.
F33 Trastorno depresivo recurrente.
F33.0 Trastorno depresivo recurrente, episodio actual leve.
F33.1Trastorno depresivo recurrente, episodio actual moderado.
F33.2 Trastorno depresivo recurrente, episodio actual grave sin síntomas
psicóticos.
F33.3 Trastorno depresivo recurrente, episodio actual grave con síntomas
psicóticos.
F33.4 Trastorno depresivo recurrente actualmente en remisión.
F34 Trastornos afectivos persistentes.
F34.0 Ciclotimia.
F34.1Distimia.
F 38.Otros trastornos afectivos.
F39.Trastorno afectivo sin especificar.
Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales en su quinta
edición. (DSM 5-2013):
- Exclusión del duelo.

- El trastorno Bipolar adquiere categoría propia, separado de los trastornos del


estado de ánimo.
23
- Distimia entra en la categoría de trastorno depresivo persistente.

- Se incluyen trastornos depresivos nuevos: trastorno disruptivo de


desregulación emocional (después de los 6 años y hasta 18 años).Existe
irritabilidad persistente y frecuentes episodios de descontrol conductual
extremo. Se incluye además trastorno disfórico premenstrual.

Existen también en la American Psychiatric Association en su Diagnostic and


Statistical Manual of Mental Disorders (DSMIV-TR-2002) 36 otras
especificaciones del episodio depresivo actual como son:
Leve: síntomas que provocan sólo una ligera incapacidad laboral, en
actividades sociales habituales o en las relaciones con los demás.
Moderado: síntomas de incapacidad funcional entre leve y grave.
Grave sin síntomas psicóticos: síntomas que interfieren notablemente en las
actividades laborales o sociales habituales, o las relacionadas con los demás.
Grave con síntomas psicóticos: ideas delirantes o alucinaciones, de ser posible,
especificar si los síntomas psicóticos son congruentes o no congruentes con el
estado de ánimo.
Existen con frecuencia particularidades o enmascaramientos de los cuadros
depresivos en los adolescentes donde se manifiestan con más frecuencia
irritables que tristes, las fluctuaciones del afecto y la labilidad son más
frecuentes que en el adulto quien tiene mayor uniformidad en sus expresiones
anímicas, tienen mayor tendencia a presentar excesos de sueño ,es decir
hipersomnias y no insomnios, tienen mayores posibilidades de manifestar
quejas físicas al sentirse deprimidos, muestran episodios de violencia y
conductas disociales como expresión de dicho trastorno anímico. 37
La sintomatología psicológica subclínica se refiere a alteraciones que no se
expresan con signos y síntomas detectables; pero se revelan a partir de los
efectos que generan en el desempeño y funcionalidad general del sujeto.
Aunque la sintomatología subclínica no cumpla con los criterios necesarios
para poder establecer un diagnóstico psicopatológico (cantidad, duración y
frecuencia), también se puede evidenciar a partir de la aplicación de pruebas
psicométricas, donde la prevalencia encontrada, a menudo supera las
expresiones clínicas o psicopatológicas habituales.37

24
Trastornos de interiorización como la depresión y la ansiedad poseen
manifestaciones subclínicas. La sintomatología subclínica de la depresión
tiende a aparecer como una respuesta inadecuada ante las crisis evolutivas y
eventos que naturalmente se dan en la vida de todas las personas. 37

Los efectos de la institucionalización reflejan la forma en que los niños y los


adolescentes perciben y expresan sus sentimientos. El entorno institucional, a
veces, no constituye el mejor entorno de desarrollo, ya que refleja la debilidad
de la red de apoyo social y emocional, lo que representa algunos de los
aspectos relacionados con las pérdidas que la experiencia institucional puede
operar en los niños y adolescentes.38

La distancia de la unidad familiar puede producir la interrupción de vínculos


afectivo con los objetos primarios y centrarse negativamente en el desarrollo
saludable en la infancia.38

Dada la transición de los niños y adolescentes de sus casas de orígenes para


los “abrigos”, se puede observar que la institución ha sido y continúa siendo
un espacio para la construcción de nuevas relaciones sentimentales
signifiativas con diferentes dimensiones de esos experenciados anteriores. Con
respecto a los contextos de desarrollo, familiares e institucionales, algunos
estudios han vinculado la atención institucional a las dificultades en el
comportamiento y la personalidad.38

Tratamiento integral

Para el tratamiento de la depresión subclínica, una vez realizado el diagnóstico,


se hace imprescindible que la depresión sea estudiada desde una perspectiva
de múltiples dimensiones, donde además de las alteraciones biológicas en el
funcionamiento del cerebro, no deberían perderse de vista aspectos
psicosociales, espirituales, ambientales y culturales, con una óptica holística
para evitar enfoques y manejos simplistas.39

Después de que el paciente asista a la consulta por psiquiatría y psicología, la


calidad de vida puede mejorar ostensiblemente. El médico psiquiatra podrá

25
establecer si la depresión es consecuencia de una enfermedad orgánica,y por
tanto tratar la afección de base.39

En general, la terapéutica tiene varios componentes: por un lado, en algunos


casos se requiere solamente de psicoterapia, donde se trabaja sobre aspectos
inherentes al pensamiento, la regulación de las emociones, la conducta y así
lograr que pueda mejorar en diferentes áreas de la vida social, familiar, escolar
y laboral. Adicionalmente, si es necesario, se puede iniciar un tratamiento con
terapias de acción biológica, donde la más conocida es la de los
medicamentos. .
Se recomienda vencer el mito y el sesgo de generalización de que los
medicamentos producen dependencia; se ha comprobado en la práctica clínica
que no se puede caer en la universalización de los casos.39

Otros pacientes requieren el apoyo de terapia ocupacional y física. La


colaboración del área de trabajo social contribuye a fortalecer los vínculos de
las personas con su entorno, con familiares y redes de apoyo. Dicho
tratamiento integral puede tardar unas semanas en cumplir su acción
terapéutica.39

La depresión es una enfermedad recurrente, frecuentemente crónica y que


requiere un tratamiento a largo plazo.38, 39

26
OBJETIVOS
General:

Diseñar propuesta de intervención psicoeducativa para adolescentes


deprimidos en hogares sin amparo familiar.

Específicos:

1. caracterizar a los adolescentes según edad, sexo, lugar de procedencia,


motivo de ingreso al hogar, APP, APF y tiempo de permanencia.

2. Identificar depresión subclínica en adolescentes.

3. Determinar necesidades sentidas en los adolescentes.

4. Proponer intervención psicoeducativa para adolescentes deprimidos en


hogares sin amparo familiar.

27
DISEÑO METODOLÓGICO
Tipo de estudio a desarrollar: Se realizó una investigación cuasi
experimental, con metodología de tipo cualitativa y cuantitativa en adolescentes
pertenecientes a dos hogares sin amparo familiar del área de salud del
policlínico “Manuel Díaz Legra” de la provincia de Holguín en el período
comprendido desde marzo 2020 hasta febrero 2021con el objetivo de diseñar
una propuesta de intervención psicoeducativa para adolescentes deprimidos en
hogares sin amparo familiar.

Universo y Muestra:
La investigación se desarrolló en el hogar sin amparo familiar ubicado en San
Carlos 48 entre Ángel Guerra y Peralejo donde conviven 11 adolescentes y el
otro hogar se encuentra en calle Narciso López entre Martí y Luz Caballero,
donde conviven 9 adolescentes. Se escogieron estos escenarios por ser
adolescentes de riesgos porque además de estar institucionalizados, todos
tienen algún trastorno mental. Al pertenecer a la misma área de salud están en
seguimiento por la misma Psiquiatra Infantil lo que favorece la intervención.

El universo estuvo constituido por los 20 adolescentes de los dos hogares sin
amparo familiar y la muestra por 19 adolescentes que cumplieron con los
criterios de inclusión y exclusión, donde un adolescente no se estudió por
presentar Discapacidad Intelectual Moderada y no poder cooperar en la
entrevista ni con los instrumentos psicológicos aplicados.

Criterios de inclusión: adolescentes pertenecientes a los Hogares sin Amparo


Familiar que estuvieron de acuerdo en participar en esta investigación en el
período y lugar que se realizó, previo consentimiento informado del personal
del centro. (Anexo1).

Criterios de exclusión: Adolescente que presenta un diagnóstico psiquiátrico


que no le permite cooperar con la entrevista ni test aplicado.

En todo momento se conservaron los principios de la ética hacia los pacientes,


para las investigaciones médicas en humanos establecidos en la declaración
de Helsinki. Se dio el consentimiento por los directivos de ambos hogares y la
investigación fue aprobada por los correspondientes consejos científicos. 40
28
Métodos utilizados

Teóricos:
Análisis y Síntesis: para el procesamiento de la información en la elaboración
teórica y empírica, en la revisión documental, así como en las conclusiones
parciales y generales.
Histórico: para determinar antecedentes históricos de la depresión en niños y
adolescentes, su problemática en el mundo, sus particularidades clínicas y
tratamiento.
Hermenéutico: Para la correcta interpretación de los conceptos, la
comprensión del estado real y actual para la depresión en niños y adolescentes
en Holguín, Cuba y el mundo.
Enfoque de sistemas: para la elaboración de los presupuestos teóricos y el
abordaje de forma sistémica de la interacción de los distintos aspectos que
integran la investigación
Método experimental:
Diseño de la intervención psicoeducativa.
Métodos empíricos:
-Observación.
-Revisión documental: Se revisaron textos básicos, revistas y artículos
científicos publicados recientemente sobre el tema en estudio, Historia clínica
del paciente y Expediente de estatus legal.
-Examen Psiquiátrico.
- Test Psicológicos (Test IDEREN).
Procesamiento estadístico:

-Con los datos recogidos se confeccionó una base de datos, previa


comprobación para evitar error, duplicidad y omisión de los mismos. Una vez
recopilada la información se diseñó una base de datos mediante el programa
Microsoft Excel 2015.La información recogida se procesó y analizó a través de
técnicas de estadística descriptiva: frecuencia absoluta, frecuencia relativa y
porcentajes.

29
Fases de la investigación:
A. Caracterización de la muestra.
B. Diseño de la propuesta de intervención psicoeducativa para adolescentes
deprimidos.
Fase A. Caracterización de la muestra
Para dar cumplimiento al objetivo No. 1, de caracterizar a los adolescentes
según edad, sexo, lugar de procedencia, motivo de ingreso al hogar,
antecedentes personales y familiares de trastornos mentales y tiempo de
permanencia en el hogar, se realizó revisión documental de los expedientes de
estatus legal y las historias clínicas individuales y se llevaron a un registro de
recolección de datos. (Anexo 2)
Para dar cumplimiento al objetivo número 2 de identificar depresión subclínica
se le dio salida mediante examen psiquiátrico e Inventario de autoevaluación
depresión rasgo/estado (IDEREN). (Anexos 3 y 4). Se estableció correlación
clínico psicológica de los resultados encontrados
Cuestionarios de depresión .41
Son instrumentos cuyo objetivo es realizar un registro de los sentimientos e
ideas recientes, así como hacer un repaso, más o menos exhaustivo, sobre las
distintas áreas/dimensiones que pueden estar afectadas: afectiva, conductual
y/o fisiológica.
Los cuestionarios de evaluación de la depresión tienen diferentes utilidades:
cuantificar la intensidad de la sintomatología, establecimiento de áreas
conductuales problemáticas, detección de cambios sintomatológicos como
monitorización de síntomas, realizar cribado e incluso, diferenciar el tipo
concreto de trastorno depresivo.41
Descripción de las técnicas y test utilizados

Inventario de Depresión Rasgo-Estado (IDEREN): Es un test para estudiar la


presencia o no de depresión. Consiste en un inventario de autovaloración
dividido en dos partes (Grau, Martín, Ramírez, 1989). Diseñado para evaluar
dos formas relativamente independientes de la depresión: la depresión como
estado (condición emocional transitoria) y la depresión como rasgo (propensión
a sufrir estados depresivos como una cualidad de la personalidad relativamente
estable).
30
La escala que evalúa la depresión como estado permite identificar de manera
rápida a las personas que tienen síntomas depresivos, así como sentimientos
de tristeza reactivos a situaciones de pérdida o amenaza.42
Tiene 20 ítems cuyas respuestas toman valores de 1 a 4. La mitad de estos
ítems por su contenido, son positivos en los estados depresivos, mientras que
la otra mitad son ítems antagónicos con la depresión. El sujeto debe
seleccionar la alternativa que mejor describe su estado en ese momento y tiene
cuatro opciones de respuesta: No en lo absoluto (que vale 1 punto), Un poco
(vale 2 puntos), Bastante (vale 3 puntos) y Mucho (vale 4 puntos).42
La escala de depresión como rasgo permite identificar a los pacientes que
tienen propensión a sufrir estados depresivos y también ofrece información
sobre la estabilidad de los síntomas depresivos.42
Consta de 22 ítems que también adquieren valores de 1 a 4 puntos y las
opciones de respuesta son: Casi nunca (que vale 1 punto), Algunas Veces
(vale 2 puntos), frecuentemente (3 puntos) y casi siempre (4 puntos).
Los valores oscilan entre 20 y 80 puntos para la escala estado y 20 y 88 puntos
para la escala rasgo.

Para dar salida al objetivo número 3 relacionado con las necesidades sentidas
de los adolescentes se utilizó como técnica participativa la de lluvia de ideas
según metodología establecida (anexo 5)

Fase B. Diseño de la propuesta de intervención psicoeducativa para


adolescentes deprimidos de hogares sin amparo familiar

Esta fase contempla el objetivo 4 donde se diseñó la propuesta de intervención


psicoeduativa para adolescentes deprimidos, para ello se realizó una amplia y
actualizada revisión bibliográfica sobre la temática y se tuvo en cuenta las
necesidades sentidas de estos adolescentes, sus características y criterios de
especialistas de Psiquiatría infantil, con más de 10 años de experiencia en el
tema y trabajo con adolescentes. (Anexo 7)

En cada sesión psicoeducativa se trazaron objetivos para intentar mejorar la


adaptación social de estos adolescentes que tienen una visión distorsionada de
sí mismo y de lo que les rodea. Se propone que la intervención se realice con

31
una frecuencia semanal, con una duración de 45 minutos, con un total de 13
sesiones, como modalidad terapéutica la cognitivo conductual y un estilo de
dirección mixto. Se utilizaron técnicas de presentación, de animación y de
reflexión o análisis.

La investigación se condujo por dos coordinadores y además se contó con una


Licenciada en psicología la cual aplicó el Inventario de autoevaluación
depresión rasgo/estado (IDEREN). Con metodología exploratoria y directiva, se
realizaron discusiones, durante seis meses y como técnicas de trabajo grupal:
lluvia de ideas y entrevistas.

Operacionalización de las variables:


Variables:
Variable dependiente: intervención psicoeducativa (Cualitativa nominal
dicotómica).

Intervención psicoeducativa: Una intervención psicoeducativa es entendida


como el conjunto de actuaciones, de carácter motivacional, pedagógico,
metodológico y de evaluación, que se desarrollan para llevar a cabo un
programa cuyo objetivo es intentar que las personas o grupos con los que se
interviene alcance los objetivos propuestos. Es un proceder que se realiza para
promover un cambio, generalmente de conducta en términos de conocimientos,
actitudes o prácticas, que se constata al evaluar los datos antes y después de
la intervención. 43

Variables independientes:

-Edad: variable cuantitativa continúa, se establecieran tres grupos (según años


cumplidos):
• 10 a 12 años (hasta 11 meses y 29 días)

• 13 a 15 años (hasta 11 meses y 29 días)

• 16 a 18 años (hasta 11 meses y 29 días)

-Sexo: variable cualitativa nominal dicotómica, se refiere al sexo biológico.


• Masculino

32
• Femenino.

- Lugar de procedencia: Ubicación geográfica, procedencia de los pacientes


según lugar donde vivían.
(Variable cualitativa nominal)
- APP: enfermedad psiquiátrica de base (variable cualitativa nominal)
- APF: enfermedades Psiquiátricas que padece la familia (variable cualitativa
nominal)
- Motivo de ingreso al hogar: causa por la cual entraron al hogar sin amparo
familiar (variable cualitativa nominal)

• Abandono de la familia

• Muerte de los padres o tutores

• Padres reclusos

• Madre con trastorno psiquiátrico y padre desconocido.

• Otras

Tiempo de Permanencia: se refiere al tiempo que llevan en la institución los


adolescentes (variable cualitativa nominal).
- Diagnostico psiquiátrico: enfermedad de base del paciente por historia clínica
(variable cualitativa nominal)

Depresión subclínica. (Cualitativa nominal politómica).

Depresión subclínica: es aquella que no cumple con los criterios específicos


de la depresión ni por el CIE10 ni por el DSMIV sino que presenta otros
síntomas dados por alteraciones en el comportamiento y trastornos
psicosomáticos como, somatomorfos: dimorfismo corporal, de conversión,
hipocondría, de somatización, de dolor somatoforme, además de
Psicofisiológicos y Ficticios.35

Se debe sospecha Depresión Subclínica ante un adolescente que presente


manifestaciones psicosomáticas recurrentes o persistentes como dolor de
cabeza, dolor abdominal, dolor torácico, síncope, mareos, letargia, pérdida de

33
peso, trastornos del sueño, alteraciones en el apetito, hipertensión arterial y
síntomas específicos como ausentismo escolar, fuga del hogar, desafío de la
autoridad, conducta autodestructiva, delincuencia, abuso de drogas e
inactividad sexual. 35

- Necesidades sentidas: Necesidad es la carencia de algo que se calmará con


su satisfacción. (Variable cualitativa nominal)
En el diseño de la intervención psicoeducativa e utilizaron: Técnicas de
presentación, de animación y de reflexión o análisis.44

Técnicas de presentación: son instrumentos muy valiosos para lograr que los
miembros del grupo se conozcan de una manera agradable y dinámica, son de
corta duración.44

Técnicas de animación o dinamizadora: se realiza con el objetivo de activar,


estimular, al grupo cuando se han realizado grandes reflexiones o se necesitan
de éstas, cuando deseamos elevar el estado de ánimo. Provocan dinamismo,
alegría, mejoran la ansiedad, tristeza y cansancio.44

Técnicas de análisis o reflexivas: son para pensar y llegar a posibles


soluciones, constituyen el cuerpo fundamental del sistema de técnicas a
emplear. Propician las modificaciones de actitudes, estados de ánimo, estilos
de vida, de comunicación, favorecen el intercambio, la profundización en el
abordaje de temas necesarios.44

34
ANALISIS Y DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS
La depresión puede hacer que la tarea más pequeña y sencilla se convierta en
algo difícil de lograr. Sin embargo, muchos adolescentes con depresión van a
negar encontrarse tristes o ni siquiera van a ser conscientes de la tristeza y
esto no significa que no estén deprimidos.45
La presentación de los resultados así como el análisis de los mismos, se
realizó dando cumplimiento a los objetivos propuestos en la investigación, se
tuvo en cuenta el tamaño, la representatividad y las características inherentes
al grupo de riesgo estudiado, el cual estuvo conformado por 19 adolescentes.

Tabla 1. Distribución de los adolescentes que conviven en Hogares sin Amparo


Familiar de Holguín según edad y sexo.
Grupos de edades Sexo
M % F % T %
10-12 años 3 15.79 4 21.06 7 36.85
13-15 años 4 21.06 5 26.31 9 47.37
16-18 años 2 10.52 1 5.26 3 15.78
Total 9 47.37 10 52.63 19 100
Fuente: Registro de recolección de datos.
Al analizar la tabla 1 se aprecia que en los adolescentes que conviven en los
hogares sin amparo familiar existe predominio del sexo femenino (52.63%), el
sexo masculino estuvo representado con un 47.37%.Por lo que no existe una
diferencia manifiesta.
Investigaciones realizadas en México y Argentina en adolescentes
institucionalizados coinciden con este estudio, donde hay discreto predominio
del sexo femenino.46, 47
En Cuba la distribución porcentual de adolescentes por provincias oscila entre un
9.7% y 17,5%, con mayor número en las provincias de La Habana, Santiago de
Cuba, Holguín y Granma, con mayor representación en el sexo masculino que
oscila en estas provincias referidas entre un 14.5 % y 11,3 %, en comparación
con el sexo femenino que se encuentra entre 9,9 % y 11, 8 %. 48

Según datos estadísticos del 2019, la población total de adolescentes en la


Provincia Holguín es de 121324 adolescentes para una distribución porcentual

35
de 11.8 % con ligero predominio del sexo masculino, indicador que coincide
con la del país.
Relacionado con la edad el 47.37% se encuentran en la adolescencia
intermedia, etapa donde se presentan importantes cambios psicológicos que
los lleva a mecanismos negativos de afrontamiento. 48
La OPS/OMS llama a que se preste mayor atención a la salud de los
adolescentes para evitar muertes y mejorar su salud. A nivel mundial, la
depresión es la primera causa de enfermedad y discapacidad en este grupo de
edad, y el suicidio ocupa el tercer lugar entre las causas de mortalidad. Según
varios estudios realizados, una de cada dos personas que desarrollan
trastornos mentales presenta los primeros síntomas de depresión a los 14 años
de edad. Si los adolescentes con problemas de salud mental reciben la
atención que precisan, se pueden evitar muertes y un sufrimiento de por vida. 48
La autora considera que es vital poner mayor atención en este grupo etareo
objeto de investigación no solo por los cambios que se presentan en lo
biológico, lo psicológico y social sino por la vulnerabilidad que presentan por
sus factores de riesgos lo que hacen que se afecte con frecuencia su salud
mental.

Tabla 2. Distribución de los adolescentes que conviven en Hogares sin Amparo


Familiar de Holguín según lugar de procedencia.
Lugar de procedencia. N %
Holguín. 13 68.42
Mayarí. 2 10.53

Cacocum. 2 10.53

Antilla. 1 5.26

Calixto García. 1 5.26

Total 19 100

36
Fuente: Registro de recolección de datos.
Al analizar la tabla 2 se aprecia que existe un predominio de adolescentes del
municipio de Holguín en los hogares sin amparo familiar.
Resultados similares fueron encontrados en estudios en adolescentes
institucionalizados por Cintra Zouza en Brasil donde la mayoría de estos
proceden de área Urbana.49

Se ha producido un incremento durante las últimas décadas principalmente en


los núcleos urbanos y esto ha conllevado al deterioro progresivo de la calidad
de vida en las ciudades, ha ocurrido migración de personas del campo a la
ciudad. Hoy el vértice que genera la vida moderna es abrumador y demanda
muchas exigencias a las familias actuales.48

Hay un incremento del cambio social en cuanto a una creciente presencia de


costumbres ambiguas y discordantes derivadas de la inseguridad en el futuro,
la movilidad, la inmigración, elementos que erosionan los valores tradicionales
de la sociedad, dentro de los que se encuentra el no asumir una paternidad
responsable o lo que es peor no asumirla.48

Se considera por la autora que al ser Holguín el municipio cabecera a pesar de


que la institucionalización de niños sin amparo familiar es una protección que la
Revolución creo para todos los menores, en este municipio esta fortalecido el
trabajo de la Comisión de Prevención y Atención Social, reforzado con el apoyo
de fiscalía, organizaciones políticas y de masas y la sociedad en su conjunto
para la atención y protección de estos menores.

Tabla 3. Distribución de los adolescentes según motivo de ingreso al Hogar sin


Amparo familiar.

Motivo de ingreso. N %
Madre con trastorno psiquiátrico y padre 6 31.58
desconocido
Abandono familiar 5 26.32
Muerte de ambos padres, sin otra red de apoyo 3 15.79
Padres recluidos 3 15.79

37
Otros 2 10.52

Total 19 100

Fuente: Expediente de estatus legal.


Al analizar los resultados que muestra la tabla 3 se aprecia que el 31.58% de
los adolescentes ingresaron al hogar sin amparo familiar por tener a su madre
con trastorno psiquiátrico , que la mayoría cuando se revisaron los expedientes
de estatus legal obedecía a trastornos con funcionamiento psicótico y además
sus padres eran desconocidos , un 26. 32% fue abandonado por su familia y el
15.79% ambos padres habían fallecido y no tenían otra red de apoyo.
Son disimiles las investigaciones49, 50,51 que plantean que la institucionalización
debería ser una medida de protección, de carácter provisorio y excepcional,
utilizada en situaciones de maltrato que impliquen una amenaza o violación de
los derechos de los niños o de los adolescentes, y puede o no constituir un
riesgo para su desarrollo, dependiendo de los mecanismos a través de los
cuales los niños tendrían que encarar los efectos negativos que de ahí
advienen. En estos estudios las principales causas de ingreso son el maltrato
infantil.

Las diferentes teorías psicoanalistas abordan el tema de la madre como punto


de anclaje, por tanto el desarrollo del niño junto a la madre es vital, esta sirve
de sostén, por lo que las fallas durante el proceso de desarrollo repercutirán
según la precocidad con que se manifieste.52

El núcleo familiar representa un sistema, en el cual cada integrante ejerce


influencia sobre los demás miembros y va moldeando su manera de actuar o
de pensar, se considera que cuando los padres no logran cumplir
adecuadamente sus roles o solucionar sus dificultades, se generan
consecuencias negativas a nivel emocional o personal en los niños y
adolescentes.53
En Cuba numerosas investigaciones coinciden que las familias disfuncionales,
con interacción violenta, maltrato físico, discordias frecuentes entre sus
miembros, quiebra en la parentalidad con graves fallas en la socialización y en

38
la comunicación intrasistémica son responsables de muchos de los trastornos
mentales que aparecen en la infancia y adolescencia.53, 54

Tabla 4. Distribución de los adolescentes según tiempo de permanencia en


Hogares sin Amparo familiar de Holguín
Permanencia N %
Más de 5 años 15 78.94
De 2 a 5 años 3 15.79
Menos de 1 año 1 5.27

Total 19 100

Fuente: Registro de recolección de datos.

Al valorar los resultados de la tabla 4 se aprecia que el 78.94% de los


adolescentes han permanecido en la institución por más de 5 años, la mayoría
provienen de otros hogares sin amparo familiar que acoge los niños desde que
nacen o desde edades muy tempranas.
Estos resultados coinciden con Carinhanha y Garcia que muestran que en los
adolescentes acogidos en un “abrigo” municipal de Rio de Janeiro
predominaron los que se encuentran alli casi desde su nacimiento.55

Los efectos de la institucionalización refleja la forma en que los niños y los


adolescentes perciben y expresan sus sentimientos. El entorno institucional, a
veces, no constituye el mejor entorno de desarrollo, ya que refleja la debilidad
de la red de apoyo familiar y emocional, lo que representa algunos de los
aspectos relacionados con las pérdidas que la experiencia institucional puede
operar en los niños y adolescentes.55
La distancia de la unidad familiar puede producir la interrupción de vínculos
afectivos con los objetos primarios y centrarse negativamente en el desarrollo
saludable en la infancia.55
En la transición de los niños y adolescentes de sus casas de orígenes para los
“abrigos”, se puede observar que la institución ha sido y continúa siendo
un espacio para la construcción de nuevas relaciones sentimentales

39
significativas con diferentes dimensiones de esos experenciados anteriores,
con respecto a los contextos de desarrollo, familiares e institucionales, algunos
estudios han vinculado la atención institucional a las dificultades en el
comportamiento y la personalidad.56

Tabla 5. Distribución de los adolescentes según antecedentes patológicos


personales de trastornos mentales.
Antecedentes patológicos personales N %
TDA/H 6 31.58
Rasgos anómalos de personalidad 6 31.58
Trastornos por ansiedad 5 26.32
Discapacidad intelectual leve 1 5.26
Trastorno de adaptación depresivo 1 5.26

Total 19 100

Fuente: Registro de recolección de datos.

En la tabla 5 donde se representan los antecedentes patológicos personales de


los adolescentes se observa que la totalidad tienen trastornos psiquiátricos ,
dentro de estas patologías prevalecen el Trastorno por Déficit de Atención con
Hiperactividad y los rasgos anómalos de personalidad con un 31.58% cada
una, seguidos de los trastornos por ansiedad con un 26.32%.
El Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad tiene una prevalencia
conocida entre 3-10% y hasta en un 60%, según diferentes estudios. Muchos
investigadores han subrayado que este trastorno nunca se presenta sólo, los
distintos subtipos se asocian con diferentes perfiles de comorbilidad. Se ha
encontrado que alrededor del 50% de los niños que presentaban el subtipo
combinado, suelen manifestar problemas de conducta etc. En cambio, los niños
que presentan el subtipo Hiperactivo-Impulsivo tienen una probabilidad mayor
de diagnosticarse con dislexia, discalculia y suelen sufrir problemas de carácter
internalizantes, tales como: ansiedad, depresión, inhibición o timidez.57, 58

40
Diversos estudios59, 60,61, la mayoría de ellos multicéntricos, confirman la
frecuencia de comorbilidad psiquiátrica sobre todo entre trastornos depresivos
y de ansiedad, con los trastornos de personalidad, existiendo un riesgo relativo
del 10.6 para presentar cualquier otra patología psiquiátrica además de la
depresiva, del 9.3 para la comorbilidad con los trastornos de ansiedad, y del 2.1
para el diagnóstico adicional de abuso o de dependencia alcohólica.61
Asimismo, los trastornos depresivos también se caracterizan por un alto
índice de comorbilidad con otras patologías. Los pacientes con trastornos
somáticos funcionales presentan significativamente una mayor prevalencia de
depresión mayor.61
Se considera por la autora que dado que la mayoría de los trastornos mentales
son multifactoriales y estamos ante adolescentes con una gran carga genética
de primer orden, así como un número importante de factores de riesgos como
deprivación emocional, disfunción familiar, se ha forjado su identidad a partir de
la exclusión y padres con conductas adictivas, en la totalidad de estos
adolescentes están presentes trastornos en la esfera mental.

Tabla 6. Antecedentes patológicos familiares de trastornos mentales de los


adolescentes que conviven en hogares sin amparo familiar
Antecedentes patológicos familiares N %
Alcoholismo 8 42.11
Esquizofrenia 6 31.58
Trastornos de personalidad antisocial 3 15.79
Conducta suicida 1 5.26
Discapacidad intelectual 1 5.26

Total 19 100

Fuente: Historia Clínica.

Como muestran los resultados de la tabla 6 la totalidad de los padres presentan


trastornos psiquiátricos donde predomina el alcoholismo (42.11%) seguido de
la Esquizofrenia (31.58%) y los trastornos de personalidad antisocial (15.79%).

41
Los múltiples estudios 62, 63,64 en adolescentes institucionalizados revisados se
refieren a el efecto sobre la afectividad y la protección social que se les brinda
ante el abandono familiar por disimiles causas donde coinciden con estos
resultados que destacan el alcoholismo.
La autora opina que estos antecedentes patológicos de los padres unidos a la
falta de red de apoyo así como la disfunción familiar severa como se refleja en
los expedientes de estatus legal fue lo que impuso la institucionalización de
estos adolescentes y su estado mental actual.

Tabla 7.Diagnòstico de Depresión subclínica en adolescentes de hogares sin


amparo familiar.
Diagnóstico. N %
Sin trastorno depresivo 10 52.63
Depresión subclínica 8 42.10
Otros trastornos depresivos 1 5.27

Total 19 100

Fuente: Historia Clínica, Examen Psiquiátrico y Test IDEREN.

En los resultados que muestra la tabla 7 se aprecia que el 42.10 % de los


adolescentes presentan Depresión Subclínica y al evaluarlos no referían estar
tristes pero mostraban sentimientos de desesperanza, conductas rebeldes sin
causa que lo determine, percepción de tener más fracasos que los demás,
preocupaciones hipocondriacas y trastornos del sueño.
Estos resultados coinciden con estudio realizado por Rodríguez Prieto Leticia 65
que determinó Depresión atípica en adolescentes expuestos a situaciones de
riesgos en la ESBU “Playa Baracoa de Bauta”,donde más de la mitad de la
muestra de los adolescentes presentó depresión.
Frecuencias de depresión del 29.8 % fueron reportadas por Leyva-Jiménez et
al.66 Investigaciones en la Argentina indican que del 30% al 40% de los
adolescentes muestra signos de depresión.67,68,69.

42
Alonso-Fernández asegura que la forma más frecuente de comienzo es
como cuadros larvados, y que en la medida que la depresión toma cierta
intensidad van apareciendo síntomas en otras dimensiones, lo cual es un dato
demostrativo de la interdependencia recíproca que existe entre las cuatro
dimensiones, sin embargo alguna vez ocurre que la afectación intensa de una
dimensión no arrastra a las otras dimensiones hacia el hundimiento depresivo,
siendo este el origen de muchos cuadros depresivos que pueden ser
considerados como depresiones atípicas. Al no afectarse la dimensión del
humor en la mayoría de la población estudiada se produce el enmascaramiento
del cuadro depresivo.70

Los padres o personas mayores a través de sus conductas de imposición y


dominación, negligencia configuran en los hijos pautas agresivas y de miedo,
hecho que implica y se exterioriza en las actitudes hostiles y de pesimismo que
se acentúa con la tristeza aprendida a lo largo de la vida.70
Diversos estudios 71, 72,73 evolutivos indican que muchos problemas de
adaptación social pueden estar asociados a la calidad de las relaciones de la
primera infancia, y es que sin duda este es un periodo crítico para el
aprendizaje de habilidades sociales. Aproximadamente un 5%, o uno de cada
20 niños y adolescentes, tendrán un episodio depresivo antes de cumplir los 19
años.
En el municipio de Holguín desde el año 2014 se están realizando
investigaciones desde el escenario escolar para prevenir la conducta suicida y
dentro de los principales factores de riesgos se encuentra la depresión, de
forma mayoritaria con cifras por encima del 88% y prevalece la disfunción
familiar. Estos escenarios escolares pertenecen a las secundarias básicas
“Juan José Fornet”, “René Ibarra”, “Blas Soler Ledea”, y “Alberto Sosa
González. 74, 75,76
El equipo investigador considera que en estos adolescentes de riesgo, que
presentan depresión subclínica se impone de forma inmediata realizar
intervención psicoeduativa para mejorar sus mecanismos de afrontamiento a
los problemas, donde se fortalezcan los factores de protección individual para
evitar comorbilidades dentro de ella la más temida la conducta suicida, evitar se
desplacen estos síntomas hacia formas más severas de depresión, formar
43
nuevos lazos afectivos y así lograr una mejor adaptación social de estos
adolescentes.

Tabla 8. Necesidades sentidas de los adolescentes.

Necesidades sentidas No %
Demanda afectiva de su familia 19 100
Dificultades en el afrontamiento a los problemas 19 100
Dificultades en las relaciones interpersonales 19 100
Autoconocimiento y autoestima 8 42.10
Aceptación por el grupo 8 42.10
Formación vocacional. 7 36.84
Relación de pareja, sexualidad 5 26.31
N=19

Fuente. Técnicas participativas.

La tabla 8 muestra las necesidades sentidas identificadas por los adolescentes


donde la totalidad presentó demanda afectiva de su familia fundamentalmente
de sus padres, reflejaron en sus opiniones la añoranza por su familia incluso
reconocieron las dificultades de estas para tenerlos y el buen trato que se le
brinda en la institución.

Así también la totalidad de los adolescentes presentaron dificultades en el


afrontamiento a los problemas y en las relaciones interpersonales. Estos
resultados coinciden con múltiples estudios 77,78,79 realizados en niños y
adolescentes institucionalizados donde se reflejan diversas manifestaciones
afectivas y se destaca la añoranza por pertenecer a una familia, la tristeza, la
inseguridad y los sentimientos de minusvalía por su condición.

El adecuado funcionamiento de la familia es un factor de salud mental en el


desarrollo del niño y el adolescente. A lo largo de la vida, todos los miembros
de la familia tienen la oportunidad de desarrollar un sentido de su propia

44
identidad, de equilibrio y bienestar personal. Para ello, aspectos como una
adecuada autoestima y autonomía son fundamentales y ayudan a afrontar los
conflictos y las situaciones estresantes de la vida con madurez. También es
importante la calidad de las relaciones de apego que las personas adultas han
tenido desde su niñez, relaciones de las que se derivan diferentes márgenes de
seguridad y de confianza en sí mismos y en los demás para plantear las
relaciones de apego en la vida adulta.77
En torno a la familia gravita toda la vida de los individuos, representa una
continuidad simbólica que trasciende a cada individuo y generación, enlaza
tiempo pasado, tiempo presente y tiempo futuro. En su conformación eslabona
generaciones sucesivas, articula las líneas de parentesco mediante un
complejo tejido de fusiones sociales de gran importancia en todas las
sociedades, es un fenómeno universal y matriz de las civilizaciones; tiene entre
otras funciones proteger la vida y la crianza, favorecer el desarrollo sano de
cada uno de sus miembros, así como la transmisión de las costumbres y las
tradiciones que conforman la cultura original de cada pueblo. 78, 79
Si la familia no cumple sus funciones básicas y no quedan claras las reglas y
roles familiares se dificulta el libre y sano desarrollo de la personalidad del
adolescente. Es necesario que exista un soporte familiar abierto, capaz de
asimilar los cambios requeridos para la individualización del adolescente. No se
debe obviar la concepción sistémica de la familia la cual postula su
organización en relación con sus miembros, características y con el medio
social en que se encuentran insertados, lo que posibilita una influencia
recíproca y se consideran las necesidades socio afectivas de los hijos y
padres.78,79
La autora piensa que estas necesidades afectivas y las dificultades que
presentan estos adolescentes de riesgos en sus relaciones interpersonales se
puede trabajar a través de la psicoterapia de grupo donde se mejore su
autoconcepto, resiliencia y en sentido general se doten de factores protectores
con peso en lo individual.

45
Estrategia Psicoeduativa para adolescentes deprimidos
Primera sesión:

Objetivos:

1. Establecer contrato terapéutico.

2. Definir objetivos de la estrategia.

3. Presentación de los participantes: adolescentes, trabajadores y equipo médico.

Para dar inicio a la primera sesión de esta investigación la coordinadora realiza


la presentación del grupo de trabajo y expone los objetivos de la intervención.
Se utiliza la técnica en la que cada uno de los participantes se presenta
diciendo su nombre y con una palabra o frase expresa que es para él la vida.
Segunda sesión.
Técnica de presentación: Nombre y si no fuera persona que me gustaría ser.
Técnica de análisis: Sondeo de motivaciones
Objetivo: Precisar sus principales problemas, se toma como punto de partida
las necesidades sentidas identificadas con anterioridad, estado de ánimo en
que se encuentran y cuáles son sus expectativas en relación al grupo de
psicoterapia.
Tercera sesión:
Técnica de presentación: “Por persona “.
Técnica de análisis: Mi heráldica.
Objetivos: Ayudar a los adolescentes a considerar sus características, a
identificarse y tomar conciencia de sí mismo.
Cuarta sesión:
Técnica de presentación: Actividad que más disfruto realizar.
Técnica de análisis: Lluvia de ideas.
Objetivo: Reflexionar acerca de las consecuencias negativas de enfrentar
incorrectamente los problemas.
Quinta sesión:
Técnica de presentación: Presentación cruzada.
Técnica de análisis: Psicodrama.
Objetivo: Mejorar el nivel de resiliencia de los adolescentes.
46
Sexta sesión:
Técnica de presentación: Describir como me gustaría que fuera mi amigo ideal.
Técnica de análisis: El espejo.
Objetivo: Estimular la reflexión de los adolescentes acerca de la imagen que
tienen de sí mismo, mejorar la autoestima.
Séptima sesión.
Técnica de presentación: Nombre y si no fuera persona que me gustaría ser.
Técnica de análisis: La comunicación positiva.
Objetivo: Promover que los adolescentes expresen pensamientos y
sentimientos mediante el uso de frases que permitan una buena comunicación.
Octava sesión.
Técnica de presentación: Definir con una palabra como me siento hoy.
Técnica de análisis: Corbata en la espalda.
Objetivo: Mejorar la autoestima y favorecer el desarrollo de las relaciones
interpersonales del grupo.
Novena sesión.
Técnica de presentación: La cadena de nombres.
Técnica de análisis: Inventario de asuntos personales.
Objetivo: Que los adolescentes tomen conciencia de sus cualidades positivas y
negativas y mostrarles cómo, utilizando las primeras, pueden resolver las
segundas.
Décima sesión.
Técnica de presentación: A través de la expresión facial reflejar mi estado de
ánimo.
Técnica de análisis: Debate, carta de despedida de Gabriel García Márquez.
Objetivo: Evaluar nivel de resiliencia y estado emocional.
Oncena sesión: Técnica de presentación: Nombre y decirle un elogio al
compañero que tenemos a la derecha.
Técnica de análisis: La tienda mágica.
Objetivo: Ayudar a los adolescentes a tomar decisiones, conciencia de quien
es, que desea y el precio que está dispuesto a pagar por ello.
Duodécima sesión
Técnica de Animación:” cola de vaca”

47
Técnica de análisis: “La catástrofe “
Objetivos: Estimular la toma de decisión individual y colectiva, fortalecer
autoestima en los adolescentes.
Decimotercera sesión.
Técnica de Animación: “Abrazos musicales cooperativos “
Objetivo: Dinamizar el grupo elevando su estado emocional.
Posteriormente se realiza entrevista psicológica y el examen psiquiátrico a
cada paciente con el objetivo de valorar su evolución. Se realiza cierre y/o
reapertura.

48
CONCLUSIONES
- Predominaron los adolescentes del sexo femenino, en la etapa intermedia del
desarrollo y pertenecientes al municipio de Holguín.

- El Trastorno por déficit de atención con hiperactividad y los rasgos anómalos


de personalidad fueron la comorbilidad psiquiátrica más frecuente en los
adolescentes y en los familiares, el alcoholismo y la Esquizofrenia.

-Los principales motivos de ingreso al hogar sin amparo familiar fueron: tener
madre con trastorno psiquiátrico y padre desconocido, abandono familiar y
muerte de ambos padres sin otra red de apoyo; la mayoría con un tiempo de
permanencia de más de 5 años.

-La Depresión subclínica fue diagnosticada en casi la mitad de los


adolescentes estudiados y la totalidad presentaron como necesidades sentidas,
la demanda afectiva de sus familiares, las dificultades en el afrontamiento de
los problemas y en las relaciones interpersonales.

-Se diseñó una propuesta de intervención Psicoeducativa como parte de la


atención a los adolescentes deprimidos.

49
RECOMENDACIONES

-Implementar la estrategia psicoeducativa en adolescentes deprimidos y


extender esta investigación a los demás hogares sin amparo familiar.

-Brindar los resultados de la investigación a los directivos de los hogares sin


amparo familiar.

50
BIBLIOGRAFÍA
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Editorial Ciencias Médicas. Citado 5 septiembre 2017. La Habana 2011.
Disponible http://rinconmedico.me/depresion-generalidades-y-particularidades-
ignacio-zarragoitia-alonso.htm

2-Rey J, Bella-AwusahTolulope T, Liu J. IACAPAP Textbook of Child and


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[citado 12 ene 2017] [pp 1-36]. Disponible en: http://iacapap.org/wp-content/
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3-Costello EJ, Mustillo S, Erkanli A, Keeler G, Angold A. Prevalence and


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4-Norberto Aldo Conti, Historia de la Depresión. La Melancolía desde la


Antigüedad hasta el siglo XIX, Buenos Aires, Polemos, 2007, ISBN 978-987-
9165-81-2.

5-Barrionuevo, J (2016). Adolescencia. Clínica psicológica y psicoanalítica


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R&D=lth&EbscoContent=dGJyMNLr40Sep7U4y9fwOLCmr02ep69Ssa64TLSW
xWXS&ContentCustomer=dGJyMPGnr06vr7JJuePfgeyx44Dt6fIA

60
ANEXOS

Anexo 1.

Consentimiento informado:
Yo: _________________________________ Directora del Hogar sin amparo
familiar conozco que se desarrollará una investigación acerca de los Trastornos
depresivos en los adolescentes. Se me ha informado que la misma contará con
el personal suficientemente calificado y tendrá en cuenta las evidencias
científicas disponibles, los resultados del estudio respetaran los principios
éticos. Conozco también que mi participación contribuirá al mejor estudio y
conocimiento de este trastorno; que se revertirá en un mejor estado de salud
mental de estos adolescentes y para bien de la sociedad, por lo antes
planteado en este documento y habiendo aclarado todas mis dudas, expreso
mi consentimiento en que se desarrolle esta investigación ofreciendo todos los
datos que se me soliciten, para que así conste, firmo el presente documento:

_____________________________
Firma de director
_____________________________
Firma del investigador

Dado a los ___________ días del mes de _______________ del año_______.


Consentimiento Informado de los adolescentes.

Yo: _________________________________conozco que se desarrollará una


investigación acerca de los Trastorno depresivos. Se me ha informado que los
datos de mi entrevista y los resultados del estudio solo serán conocidos por los
investigadores y no serán revelados a ninguna persona sin mi autorización ni
serán usados en otras investigaciones no relacionadas con esta. Conozco
también que mi participación contribuirá al mejor estudio y conocimiento de
este parámetro; que los resultados serán utilizados para el bien de nuestra
sociedad, y que de no aceptar participar en la investigación esto no afectará la
relación médico - paciente.
Conociendo lo antes planteado en este documento y habiendo aclarado todas
mis dudas expreso mi disposición a participar en esta investigación ofreciendo
todos los datos que se me soliciten para que así conste, firmo el presente
documento:

_________________________
Firma del adolescente.

_____________________________
Firma del investigador

Dado a los ___________ días del mes de _______________ del año_______.


Anexo 2. Registro de recolección de datos.
Los datos aquí registrados se tomaron del expediente de estatus legal y las
historias clínicas individuales.
Sexo----
Edad-----
APP de trastornos psiquiátricos-------------------------------
APF de trastornos psiquiátricos---------------------------------
Motivo de ingreso al hogar-----------------------
Tiempo de permanencia en el hogar--------------------------------
Anexo 3.
Examen psiquiátrico tradicional.
I. Descripción general del enfermo.
(Valores, hábitos, críticas, comunicación y actitudes)
a) Dificultad o no en el contacto interpersonal.
b) Higiene personal (pelo, uñas, dientes, rasurado, ropas, cabellos).
c) Mímica
d) Actitud ante la entrevista
e) Comunicación verbal
f) Somatotipo
g) Edad aparente
II. Funciones de síntesis e integración.
A. Nivel de vigilia.
a) Alto
b) Normal
c) Bajo
B. Atención
1. Pasiva
a) Hipervigilante
2. Activa.
a) Distractibilidad
b) Hiperconcentración
C. Memoria.
1. Trastornos cuantitativos.
a) Hipernesia
b) Hipomnesia
c) Amnesia
2. Trastornos cualitativos.
a) Falsos recuerdos
b) Confabulación
D. Orientación
1. Alopsíquica
2. Autopsíquica
III. Funciones de relación.
a) Relación consigo mismo
b) Relación con los demás
c) Relación con las cosas
IV. Capacidades intelectuales.
a) Altas
b) Promedio
c) Bajas
V. Funciones cognoscitivas.
A- Sensopercepciones.
1- Trastornos de las sensaciones
a) Hiperestesia
b) Hipoestesia
c) Anestesia
d) Cenestopatía
2- Trastornos de las percepciones
a) Ilusión
b) Alucinación
c) Psuedoalucinación
d) Metamorfosis
e) Trastornos del esquema corporal
f) Desrealización
g) Despersonalización
h) Transformación
B- Pensamiento
1. Trastorno del origen.
a) Pensamiento autista o con tendencia autista.
b) Interpenetración
2. Trastorno del curso.
a) Lentificación
b) Aceleración
c) Bloqueo
d) Perseveración
e) Proligidad
f) Fuga de ideas
g) Divagación
h) Disgregación
i) Incoherencias
3. Trastornos del contenido
a) Ideas sobrevaloradas
b) Ideas fóbicas
c) Ideas fijas
d) Ideas obsesivas
e) Idea delirante o delirio
- Según su temática
▪ Daño
▪ Persecución
▪ Referencia
▪ Grandeza
▪ Influencia
▪ Hipocondriaca
▪ Otros
- Según mecanismo de producción
▪ Deductivo
▪ Interpretativo
▪ Inductivo o primario
4. Trastorno de la capacidad de abstracción
a) Positivas
- Sobreinclusión
- Metonimia
b) Negativos
- Déficit en la capacidad de abstracción

5. Trastornos de las operaciones


a) Contradicciones
b) Pensamiento de Vom Domarus.
c) Pensamiento simétrico
d) Pensamiento mágico

VI. Funciones afectivas


A. Trastornos cuantitativos
a) Hipertimia
b) Hipotimia
c) Atimia
B. Trastornos cualitativos
a) Ansiedad
b) Apatía o indiferencia
c) Incongruencia o disociación
d) Irritabilidad
e) Euforia
f) Disforia
VII. Funciones conativas
A- Fase Psicomotriz o de acción implícita
a)Hiperbulia
b)Hipobulia
c) Abulia
B- Fase de conducta manifiesta o de acción explícita
1. Trastorno de la actividad motora
a)Hipercinesia
b)Agitación
c) Hipocinesia
d)Acinesia
e)Catalepsia
f) Esteriotipia
g)Manerismos
h)Obediencia automática
i) Flexibilidad cérea
j) Compulsión
2. Trastorno de las necesidades
a)Necesidades del sueño
- Disomnias
- Insomnio
- Hipersomnias
- Trastornos del ciclo sueño- vigilia
▪ Parasomnias
▪ Pesadillas
▪ Terror nocturno
▪ Sonambulismo
b) Necesidades de alimentación.
▪ Anorexia
▪ Bulimia
▪ Coprofagia
c) Necesidades de defensa
▪ Pusilanimidad
▪ Algofilia
▪ Automutilación
▪ Suicidio
d) Necesidades sexuales
- Hipererotismo
- Hipoerotismo
e) Necesidad de relación
- Retraimiento
- Hipersociabilidad
3. Trastornos de lo hábitos
a) Deterioro de los hábitos estéticos
b) Deterioro de los hábitos higiénicos
c) Deterioro de los hábitos alimentarios
d) Deterioro de los hábitos sexuales
e) Deterioro de los hábitos recreativos
f) Deterioro de los hábitos laborales
g) Deterioro de los hábitos culturales
h) Deterioro de los hábitos interpersonales
4. Trastornos del lenguaje
a) Disfemia
b) Taquilalia
c) Coprolalia
d) Ecolalia
Anexo 4.
MINISTERIO DE SALUD PÚBLICA
SERVICIO DE PSICOLOGÍA
INVENTARIO DE AUTOEVALUACIÓN DEPRESIÓN RASGO/ESTADO
INFANTIL - IDEREN
Autores: A. Lorenzo, J. Grau, M. Martín (Variante del Test IDERE de Grau,
Martín)
Apellidos------------------------------------------------------- Nombres--------------------------
-------------
Edad----- Sexo------ Dirección-------------------------------------------------------------------
------------
Escolaridad------------------------- Fecha-------------------- Historia Clínica---------------
--------------
INSTRUCCIONES
A continuación les presentamos un conjunto de expresiones, las cuales con
frecuencia son utilizadas para transmitir nuestro estado de ánimo. Léalas
detenidamente y marque con un círculo (O), aquellas que para Usted refleje
“COMO SE SIENTE EN ESTE MOMENTO”. No hay respuestas buenas ni
malas. Intente seleccionar las respuestas que con mayor exactitud caractericen
a su estado de ánimo en este momento.
I PARTE.
EXPRESIONES No Un Suficient Muy
existe poco e fuerte

1. Pienso que mí futuro es desesperanzado 1 2 3 4


y mí estado de ánimo nunca mejorará.

2. Yo me siento con confianza en mí mismo. 1 2 3 4


3. Pienso que yo no tengo nada de que 1 2 3 4
arrepentirme.

4. Yo me siento seguro. 1 2 3 4

5. Yo me siento muy preocupado. 1 2 3 4

6. En la sexualidad no tengo dificultades. 1 2 3 4

7. Yo quisiera poderme separar de todos 1 2 3 4


mis problemas.

8. Me siento insatisfecho. 1 2 3 4

9. He perdido toda la confianza en mí 1 2 3 4


mismo.

10. Siento tener necesidad de vivir. 1 2 3 4

11. No me siento en nada culpable. 1 2 3 4

12. Duermo bien. 1 2 3 4

13. Me canso con facilidad. 1 2 3 4

14. Se me hace difícil cumplir el más 1 2 3 4


sencillo de los trabajos.

15. Me canso con más facilidad que 1 2 3 4


anteriormente.

16. Ahora no tengo deseos de llorar. 1 2 3 4

17. Yo siento que ahora ya nada me alegra 1 2 3 4


como antes.

18. Yo quisiera quitarme la vida. 1 2 3 4

19. Me despierto con más facilidad que 1 2 3 4


antes y se me hace difícil volver a quedarme
dormido.
20. Yo quisiera ser tan feliz como le parezco 1 2 3 4
a las demás personas que me rodean.

II PARTE.
EXPRESIONES No Un Suficiente Muy
existe poco fuerte

21. Pienso que no puedo lograr nada de lo 1 2 3 4


que me proponga.

22. Sufro cuando no logro el 1 2 3 4


reconocimiento de las personas que me
rodean.

23. Con facilidad me sorprendo ante los 1 2 3 4


fracasos.

24. Pienso que tengo muchos más fracasos 1 2 3 4


que los demás.

25. Yo sufro por no haber logrado hacer 1 2 3 4


realidad mis sueños.

26. Me pongo triste, deprimido con 1 2 3 4


facilidad.

27. Considero haber tenido suerte en la 1 2 3 4


vida.

28. Pienso que el futuro todo será bueno 1 2 3 4


para mí.

29. Yo tengo confianza en sí mismo. 1 2 3 4

30. Por regla general, yo soy de los que se 1 2 3 4


inclinan a verle las partes malas a las cosas
de la vida.

31. Los problemas a mí me inquietan más 1 2 3 4


de lo necesario.

32. Yo he logrado cumplir con mis objetivos 1 2 3 4


más importantes.

33. Me siento aburrido. 1 2 3 4

34. A mí todo me interesa. 1 2 3 4

35. Ante fuertes sensaciones no reacciono. 1 2 3 4

36. Por lo general observo las partes 1 2 3 4


buenas de las cosas.

37. Los fracasos me hacen sufrir tanto que 1 2 3 4


no logro sacármelos de mi cabeza.

38. No me alcanza la confianza en sí 1 2 3 4


mismo.

39. Considero que las demás personas me 1 2 3 4


estimulan lo suficiente.

40. La más mínima dificultad me presiona y 1 2 3 4


oprime.

41. Soy una persona alegre. 1 2 3 4

42. Pienso que las demás personas no me 1 2 3 4


estimulan lo suficiente.

“LE AGRADECEMOS SU COLABORACION Y LA ATENCION PRESTADA”

HOJA DE CALIFICACIÓN.
• I PARTE. Escala de Depresión Estado (D-E):
“A” - Ítems Positivos Directos (+) = 1, 3, 5, 8, 9, 12, 13 14,
15, 16, 17, 20.
“B” - Ítems Negativos Inverso (-) = 2, 4, 6, 11, 18, 19.
Fórmula: (A - B) + 35= Valor D-E
Valor Mínimo D-E= 20 puntos.
Valor Máximo D-E= 80 puntos.

Por Niveles: ----- Bajo (20 a 35 ptos).


----- Medio (36 a 50 ptos).
----- Alto (51 a 80 ptos).
• II PARTE. Escala de Depresión Rasgo (D-R):
“A” - Ítems Positivos Directos (+) = 21, 22, 23, 24, 27, 28, 30. 33, 37. 38. 40.
42.
“B” - Ítems Negativos Inverso (-) = 25, 26, 29, 31, 32, 34, 35, 36, 39, 41.

Fórmula: (A - B) + 50= Valor D-R


Valor Mínimo D-E= 22 puntos.
Valor Máximo D-E= 88 puntos.

Por Niveles: ----- Bajo (22 a 37 ptos).


----- Medio (38 a 54 ptos).
----- Alto (55 a 88 ptos).

Evaluador--------------------------------------------------------------------------------
Anexo 5.
Técnica participativa: Lluvia de ideas.
Objetivo: identificar necesidades sentidas en los adolescentes de gran valor en
el diseño de la estrategia psicoeducativa.
Participantes: se aplica en un grupo de 19 adolescentes, se selecciona un
facilitador (encargado de mantener el orden en el uso de la palabra) y un
registrador (responsable de llevar la memoria gráfica del ejercicio a un lugar
visible para el resto de los participantes)
Material: pizarra, tiza, papel y lápiz.
Duración del ejercicio: 45 minutos, se debe tener en cuenta que a partir de este
tiempo disminuye la creatividad.
Desarrollo: se explica de manera sencilla en qué consiste, se solicita a los
presentes que expresen los problemas más importantes que perciben en la
realidad que se analiza, los comenten de forma muy breve, debiendo
expresarse:
-¿Cuáles son los problemas de los adolescentes relacionados con el estado de
ánimo.
-¿Cómo son los problemas?
-¿Por qué se produjeron y qué consecuencias pueden traer? Esto permitirá
diferenciar las causas de los efectos.
-Expresar sus capacidades y expectativas.
Una vez expuestas todas las ideas se procede a realizar una selección de
aquellas que tienen similitud, con el objetivo de reducir el listado, conformando
así una lista con las principales necesidades sentidas del grupo, las cuales se
tendrán en cuenta en la propuesta de diseño de la estrategia psicoeducativa.
Anexo 6.
Juicio de Especialistas.
El método de juicio de especialistas brinda la posibilidad de ofrecer con un
máximo de competencia, valoraciones conclusivas sobre la necesidad de
fortalecer factores protectores en el plano individual al no poder modificar el
factor de riesgo ausencia familiar en estos adolescentes vulnerables.
Se realizaron valoraciones sobre el efecto, aplicabilidad, viabilidad, y
relevancia que pueda tener en la práctica la solución que se propone y brindar
recomendaciones de qué hacer para perfeccionarla.
Se presenta el grupo ejecutor el cual está integrado por 5 especialistas
que son:
1. Edeltes Cuenca Doimeadios. MsC en Ciencias Sociales y Axiología.
Especialista de segundo grado en Psiquiatría Infantil.
2. Damaris González Martínez. MsC en Atención Integral al niño. Especialista
de segundo grado en Psiquiatría Infantil.
3. Teresita de Jesús Hidalgo Rodríguez. MsC en Educación Superior.
Especialista de segundo grado en Psiquiatría Infantil.
4. César Enrique Prego Beltrán. MsC. Especialista de segundo grado en
Psiquiatría Infantil.
5. Doralkis Leonor Alfonso Guerrero. MsC en Atención Integral al niño.
Especialista de primer grado en Psiquiatría Infantil y en Medicina General
Integral.
- Posteriormente se hace presentación de las características de la muestra con
énfasis en el diagnòstico de la depresiòn subclínica en la adolescencia
mediante power point y se establece análisis y debate. Por consenso del grupo
de especialistas es prioritario en la intervención psicoeducativa trabajar con:
-Autoconcepto y autoestima.
-Resiliencia,
-Relaciones interpersonales.
-Proyectos futuros creativos.
Anexo 7.
Estrategia psicoeducativa para adolescentes deprimidos

Primera sesión: Contrato terapéutico y se definen objetivos


Segunda sesión: Motivaciones y expectativas
Tercera sesión: Autoconcepto y Autoestima
Cuarta sesión: Consecuencias del enfrentamiento inadecuado a los problemas
Quinta sesión: Resiliencia
Sexta sesión: Autoconcepto y Autoestima
Séptima sesión: Comunicación
Octava sesión: Relaciones interpersonales
Novena sesión: Autoestima
Décima sesión: Evaluar resiliencia y estado emocional
Oncena sesión: Toma de decisiones y consecuencias
Duodécima sesión: Estimula la toma de decisiones individual y colectiva y
fortalece autoestima
Décimotercera sesión: Se evalúa estado emocional
El diseño de la estrategia psicoeducativa con sus objetivos se encuentra en el
análisis y discusión de los resultados.
Anexo 8.

Diagnòstico de Depresión subclínica en


adolescentes de hogares sin amparo
familiar.

5.27 % Sin trastornos


depresivos 10
42.10 % 52.63 % Depresión
subclínica 8
Otros trastornos
depresivos 1

Fuente: Tabla 7.

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