EDUCACIÓN SEXUAL PARA PADRES Segunda Edición

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Rol de los Padres en la

Educación Sexual de
sus Hijos

Jorge Patpatian
Editorial ACUPS
Legales
ISBN: 978-9974-94-558-6
Editorial ACUPS. Setiembre 2019.
Asociación Cristiana Uruguaya de Profesionales de la Salud
Bvar. Batlle y Ordóñez 5603
Montevideo, Uruguay
Teléfono + 598 99 68 96 26
Derechos Reservados por Editorial ACUPS
Presentación

La Asociación Cristiana Uruguaya de Profesionales de la


Salud (ACUPS) tiene el agrado de presentar y publicar esta
segunda edi-ción de un tema tan diverso y controversial como
es la sexualidad humana. Este libro es un apoyo del programa
Sexualidad para la Vida que la Institución promueve a través de
cursos, seminarios y conferencias sobre esta temática.
Su autor es médico y sexólogo. Desarrolla una intensa y
com-prometida actividad con la comunidad a lo largo del país y
en el exterior. Expone charlas y seminarios para adolescentes,
jóvenes, matrimonios, padres y docentes sobre temas de
sexualidad y aspec-tos conexos.
Esta publicación aporta a los padres y adultos en general, una guía
y orientación sobre actitudes, conductas y respuestas que debe-mos
tener en cuenta para la formación sexual de nuestros menores.
Esta segunda edición también incluye aspectos que tienen
que ver con los vertiginosos cambios de la Educación Sexual en
los úl-timos años basada en la perspectiva de género.
Educación que hoy es estimulada y promocionada en la
sociedad e impartida en cen-tros de estudios, teniendo una
actitud reflexiva y critica frente a esta realidad.
Estimulamos la reflexión de los conceptos vertidos en esta obra
con la seguridad de que los mismos contribuirán al enriquecimien-to
del desarrollo integral de las niñas, niños y adolescentes.

-5-
Índice

Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9

Educación Sexual. Definición y conceptos. Rol de la familia . .

13 Sexualidad Infantil y Adolescente . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19

Mitos de la educación sexual . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27

¿Cómo transmiten los padres los conceptos sexuales? . . . . . . 31

Algunas pautas para hablar de sexo con los hijos. . . . . . . . . . 43

Factores de riesgo que demandan la intervención de los padres


Sexualidad y TV, Internet y Sexualidad, Música y Sexualidad . 47

Preguntas frecuentes que hacen los niños. . . . . . . . . . . . . . 55

¿Qué hacer en diferentes situaciones? . . . . . . . . . . . . . . . . 63

Masturbación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67 Abuso

sexual. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 71 Iniciación Sexual

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 79

Cómo empoderar a los adolescentes a decir no cuando no están


preparados para tener relaciones sexuales . . . . . . . . . . . . . 83

La Educación Sexual en el Sistema Educativo . . . . . . . . . . . 87

-7-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

El alcance de la perspectiva de género sobre


la educación sexual . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93

Mensaje del Colegio Americano de Pediatría a Directores


de Colegios. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 97 Talleres

sobre diversidad sexual en escuelas publicas . . . . . . . 99 Guía

didáctica Educación y Diversidad Sexual . . . . . . . . . .105

Respuestas y Reacciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 111

Bibliografía Consultada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .125

-8-
Introducción

Los temas sexuales en sus múltiples expresiones están en cons-


tante transformación. Son numerosas las evidencias que así lo
cons-tatan. Por ejemplo, el auge mundial de movimientos
feministas, los grupos de diversidad sexual que reivindican
derechos, las personas que voluntariamente desean cambiar su
sexo y solicitan la rectifica-ción quirúrgica de los órganos genitales,
así como de su partida de nacimiento para que se reconozca su
nueva identidad sexual. Estas son algunas expresiones de un tema
que está cubierto de un gran manto de inquietudes y desconcierto.
Por otro lado, el advenimiento del SIDA a partir de la
década de los 80 ha producido temores que han contribuido a
modificar conductas. Así también, el culto a las expresiones
estrictamente fí-sicas de la sexualidad ha exagerado en forma
desmedida la inclina-ción hacia todo lo que rodea al cuerpo y a
su búsqueda placentera, limitando el enfoque sexual a lo
corporal, descontextualizando el sexo de la totalidad del ser. La
búsqueda de placer sexual a través de la exhibición: “mírame y
no me toques” es una nueva forma de disfrutar el erotismo y de
derivar la energía sexual a otras formas sutiles de placer.
Sumado a estos elementos las estadísticas denuncian el
incre-mento de abuso sexual, violencia y prostitución
particularmente en niños y adolescentes. Hoy también somos
testigos del creciente número de embarazos en adolescentes,
llevando a un claro aumento de madres a muy temprana edad.

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

El sistema familiar también ha cambiado en forma


vertiginosa. En Uruguay de acuerdo con las estadísticas hay un
incremento de hogares constituidos por familias
monoparentales, generando otras formas y conductas de vida
familiar y sexual a las que antaño no estaba acostumbrado.
Todo demuestra que la sexualidad humana es un fenómeno
complejo, donde convergen una serie de consideraciones que
van más allá de lo biológico. De lo que estamos seguros hoy, es
de la falta de un marco de referencia.
¿Qué es lo más adecuado en materia sexual? La gente cada vez
lo sabe menos. La sociedad contribuye a la ignorancia a través de
los medios de comunicación, mostrando un tipo de sexualidad
irreal y tergiversada que empaña una correcta formación y que
deforma aún más conceptos y actitudes sexuales.
También existe un exceso de producción pornográfica a través de
internet que a modo de tsunami nos invade sin buscarlo cuyo daño
sobre el crecimiento y desarrollo sexual del menor es imprevi-sible.
El acceso que puede tener un menor a material sexual y por-
nográfico explícitos de fotos, texto y videos, se convierte en un gran
tema de discusión que deberá regularse muy estrictamente

Para muchos menores, el grupo de amigos ha sido la forma


más común de información y aprendizaje sexual, siendo la
mayoría de las veces inadecuada.
Esta realidad transita en una población joven que la mayoría
de las veces es ignorante y no bien informada del tema, con
carencias de comunicación y sobre todo una gran dosis de
soledad a la hora de evacuar dudas y preocupaciones.

-10-
Jorge Patpatian

No podemos dejar de mencionar la influencia que en los últimos


años ha tenido la educación sexual en centros de estudios, cuya base
ideológica se funda en la perspectiva de género. Una educación emi-
nentemente sesgada y parcializada hacia una forma de ver la fami-lia,
la sexualidad y el matrimonio de una manera diversa y amorfa. Una
perspectiva que tiene como objetivo la deconstrucción cultural de
todo lo que sea familia tradicional, histórica y heterosexual con el
objetivo de ostentar la construcción de un marco teórico más li-bre y
diverso donde la heterosexualidad ya no sea más la norma.
Pretendiendo tildar de homofóbico y anacrónico toda pretensión de
continuar viviendo en una sociedad donde el varón sea cada vez más
y mejor varón y la mujer sea cada vez más y mejor mujer.

Estas evidencias confirman la necesidad de que los padres,


in-tervengan más activamente en la formación sexual de sus
hijos. Estamos convencidos que la familia es el ámbito básico
de la educa-ción sexual y el lugar más propicio para realizar una
actividad edu-cativa. El papel de los padres en el hogar es
insustituible y de ello debemos ser muy conscientes.
¿Qué actitud tenemos que tomar los padres frente a la
sexuali-dad de nuestros hijos? ¿Cómo hablar con ellos? ¿Qué
decir como respuesta a las frecuentes preguntas e inquietudes
que surgen en la vida del menor? ¿Cómo ayudarles para que en
el futuro tengan los mínimos errores que los adultos a menudo
tienen? En algún mo-mento estas son algunas de las
interrogantes que aparecen y respon-derlas no es una tarea fácil.
Muchos temores y prejuicios se levantan como barreras para ha-
blar de sexo con los hijos. La historia personal de los padres no siem-
pre es satisfactoria y dificulta aún más una docencia adecuada. La
repulsión, el miedo y otros sentimientos negativos afloran en algún

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

momento. Se trata de disimular por medio de las conversaciones


que salen por las tangentes. Decirle a un niño “cuando seas grande
ya vas a saberlo”, “otro día te lo voy a contar» son respuestas que
en este tiempo están totalmente fuera de lugar.
Estas páginas pretenden abrir respuestas y reflexionar sobre
al-gunas de las inquietudes que particularmente los niños tienen
hasta su pubertad. No solo que contemple los aspectos
anatómicos y fisio-lógicos de la sexualidad sino también que
incluya una dimensión ética y moral basada en la libertad, así
como en la responsabilidad y el respeto hacia los demás.
No puedo negar mi concepción cristiana sobre la vida, la
sexua-lidad, el matrimonio y la familia. Aun sostengo firmemente
que la sexualidad y el matrimonio estable y permanente es el
modelo ideal y más adecuado de convivencia familiar.
Si la presente publicación despierta la reflexión y facilita una
me-jor comprensión sobre el compromiso que tienen los padres y
quie-nes trabajan con niños y adolescentes para la construcción
sexual de los mismos habrá logrado con creces sus objetivos.
Jorge Patpatian

-12-
Educación Sexual

Definición y conceptos:

La educación sexual es un proceso vinculado a la transmisión y


formación de conceptos sexuales que producen a lo largo del
tiempo actitudes, expresiones y conductas sexuales definidas,
cuyos princi-pales objetivos a nuestro juicio son los siguientes:
1. Estimular el desarrollo de actitudes positivas hacia sí
mis-mo y la aceptación de la propia sexualidad. Incluye
des-cubrir, conocer y desarrollar una imagen positiva
de sí mismo.
2. Aceptación del sexo opuesto, en un plano de igualdad y
respeto. Los procesos discriminatorios que la sociedad
históricamente ha incorporado, particularmente a la mu-
jer produce daño y deben ser desterrados.
3. Incorporar valores como compromiso, respeto, fidelidad y
amor. Para que la sexualidad no sea meramente instintiva,
egoísta e inmadura sino una experiencia enriquecedora,
complementaria, madura, perdurable, responsable y fiel.
4. Incluir la preparación para los cambios físicos y psicoló-
gicos que pronto ocurrirán con el devenir de la pubertad.
Los menores no deben sorprenderse cuando ocurra la
menarca o las primeras emisiones nocturnas. Las carac-
terísticas sexuales secundarias descolocan al menor y son

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

fuente de incertidumbres y miedos. ¿Seré normal?


¿Qué me está pasando? Son preguntas que angustian.
El niño debe reconocer que todos estos cambios son
normales. La educación sexual debe proporcionar
seguridad y contri-buir positivamente en su desarrollo.

5. Advertir la existencia de abuso sexual. La información


adecuada y a tiempo podrá protegerlo de situaciones
ne-fastas a las que no está preparado. El menor debe
aprender que tiene partes íntimas que le pertenecen y
sobre las cua-les nadie tiene derecho sino solo él.
6. Brindar educación sexual para satisfacer su natural curio-
sidad. La curiosidad sexual en los primeros años de vida
es normal. El sexo es un tema como cualquier otro. Las
acti-tudes negativas comienzan a surgir cuando tiene
dudas y nadie sacia su necesidad de información.

El desarrollo sexual del menor y su construcción educativa debe


desembocar en el logro de su madurez. La Prof. Dra. Irma Gentile-
Ramos en su clásico libro Puericultura y Pediatría Social menciona-ba
un concepto que consideramos importante resaltar: “la madura-ción
sexual no es solamente un acontecimiento orgánico ligado a cambios
morfológicos y psicológicos ni a determinadas aptitudes”, “es
fundamentalmente un logro afectivo y social: la aceptación de la
sexualidad corporal, la interiorización de los conceptos, las acti-tudes
y el comportamiento acordes con un “rol” sexual determina-do
(masculino o femenino), la capacidad de dar y producir amor, la
aptitud de formar pareja con un ser de otro sexo y de la misma

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Jorge Patpatian

generación y de unirse “para la felicidad y el infortunio”, con un


sentido maduro de responsabilidad individual y social y la
potencial capacidad de concebir y criar hijos”.
Los padres y la familia a través de su gestión educativa tienen el
privilegio y la responsabilidad de contribuir con este rol.

No podemos esconder que hay otra realidad en la transmisión


educativa de la sexualidad. Hoy la educación sexual impartida en
los centros de enseñanza está basada en las teorías de género.
Ahondaremos este tema con más detalles más adelante.

Rol de la familia

Diversos son los factores que intervienen en la educación


sexual, pero los padres son los de mayor influencia. A través de
su conduc-ta, actitudes y transmisión de conceptos influyen
sobre el menor. Aunque no siempre de la forma más adecuada.
Los padres comienzan la educación sexual desde el momento que
el niño nace. Nuestras acciones u omisiones, los gestos y expre-siones
al momento de encarar el tema, son factores que influyen y
determinan nuestra intervención educativa. La valoración del sexo y
el cuerpo de nuestros hijos, las actitudes que tenemos hacia sus
genitales, la forma como manejamos el control de sus esfínteres, la
aceptación o no de toda su persona son algunos de los múltiples fac-
tores por los cuales los padres influirán en sus conductas sexuales.
Los padres tenemos derecho a no saberlo todo, pero debemos ser

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

conscientes que nuestras actitudes serán siempre mensajes


docentes para nuestros hijos.

Ya veremos que las primeras impresiones de solidaridad,


honra-dez, respeto por su vida, aceptación y estima adecuada
serán algu-nas bases sólidas para desarrollar buenas actitudes
sexuales. Si por el contrario las primeras experiencias familiares
están cargadas de maltrato, abuso, discriminación por sexo,
violencia familiar u otras expresiones de patologías sociales y
familiares, serán un caldo de cultivo para que en su vida adulta
reproduzca los mismos males que ha vivenciado.

Si medimos la educación sexual en términos de resultados


con-cluimos que aún queda mucho camino por recorrer. Los
indicado-res de desajuste personal y social son el producto de
factores multi-causales que se agravan ante una inadecuada
intervención familiar. Ejemplo de ello son las enfermedades de
transmisión sexual, abor-tos, embarazos en adolescentes,
madres niñas, familias monoparen-tales, aumento de
prostitución infantil, violencia y el abuso sexual, entre otros.

Diversas ventajas sobrevienen a partir de una educación


sexual que tiene una participación positiva de los padres:
Si un menor maneja suficiente información, no la buscará en
otras fuentes como la pornografía, medios de comunicación, de
sus pares, etc.

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Jorge Patpatian

Hablar de sexualidad con los hijos es demostrarles que la


misma es un aspecto normal de la vida humana. Esta es una forma
de des-mitificar la sexualidad, ella forma parte de la cotidianeidad.

La educación sexual está atravesando una importante crisis.


La información sexual que proviene de profesionales o
docentes espe-cializados está siempre sesgada por la filosofía de
quien lo imparte y es natural que puedan tener una manera de
pensar distinta de la que tienen los padres. Cuando éstos
imparten información sexual están transmitiendo valores que
según entienden son los más apro-piados para sus hijos.
Nuestra intervención adecuada impide que los menores estén a
merced de vientos y tendencias ideológicas que los confundan.

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Sexualidad Infantil
y Adolescente

A partir de las investigaciones de Freud se conoce la existencia de


la sexualidad infantil como una condición humana presente ya antes
del nacimiento. A partir de la concepción se suceden una serie de
procesos cromosómicos, hormonales, gonadales y genitales que
determinan biológicamente nuestra sexualidad. William Masters en
1980, descubrió la existencia de respuestas sexuales en el medio
intrauterino con la comprobación de erecciones reflejas. En las ni-ñas
se comprobó a partir de las primeras horas de vida la existencia de
erecciones clitorídeas. Desde el nacimiento se añaden los factores
psicológicos, familiares y socioculturales que sumados a los facto-res
genéticos y hereditarios determinan las actitudes y conductas sexuales
del ser humano.
De las múltiples expresiones de la existencia de sexualidad infan-
til destacamos la preferencia que tienen los niños por el progenitor
del sexo opuesto. La niña puede amar más al padre y tiene senti-
mientos parecidos a los celos frente a su madre. Estas preferencias
constituyen importantes eventos del desarrollo infantil denomina-do
“complejo de Electra” para la niña y “complejo de Edipo” para el
varón. Habitualmente estos complejos son superados y no originan
alteraciones en la conducta sexual.
El buen desarrollo de la sexualidad infantil pregenital es base y
sostén de una sexualidad adulta saludable. Si continuamos los con-
ceptos de la escuela psicoanalítica podemos señalar que la sexuali-dad
infantil se caracteriza por ser autoerótica, es decir, no se orienta

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

hacia otras personas, sino que se satisface en el propio cuerpo. Por lo


que no tiene finalidad de coito. Las zonas erógenas no son nece-
sariamente las genitales, estando éstas vinculadas con una función
física importante, tales como la alimentación, la defecación y la
micción. Freud ha destacado la existencia de zonas placenteras que
marcan una serie de etapas diferenciales en la sexualidad infantil. A
partir de las teorías psicoanalíticas se distinguen básicamente tres
etapas en la evolución de la sexualidad infantil y un cuarto periodo
denominado de latencia, hasta iniciar la adolescencia.
Sucintamente pasamos a describir cada una de ellas:

Etapa oral (0 a 18 meses)

Constituye la primera etapa de la vida afectiva del niño y está li-


gada a sus necesidades básicas, fundamentalmente la alimentación.
El contacto con el mundo se realiza a través de la boca convirtién-
dose ésta en centro del placer y de conocimiento. La satisfacción
que produce el contacto cuerpo a cuerpo, las caricias que recibe y
la seguridad del regazo materno proporcionan al menor una buena
base para su evolución psicoafectiva. Allí encuentra las primeras
ex-periencias que lo harán sentirse amado, aceptado y seguro.
Podrá sentir placer también con la introducción de otros
objetos en su boca, así como su mano o dedos. Durante esta
etapa el niño descubrirá también sus genitales por la
manipulación que de ellos realice.
Durante este periodo los padres pueden tener en cuenta algunos
aspectos que contribuyen a una adecuada educación sexual:

r Aceptar el sexo biológico del niño.

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Jorge Patpatian

r Contribuir lentamente al desprendimiento de


conductas orales como uso prolongado del chupete,
succión del pul-gar, etc.
r Valorar todo el cuerpo, inclusive sus órganos genitales.
r Utilizar un vocabulario correcto hacia los genitales.
r No censurar al niño cuando manipula su región genital.

Etapa anal (18 meses a 3 años)

A partir de los 18 meses el niño comienza el control y


concien-cia del esfínter anal. Las sensaciones placenteras se
producen por la regulación y la eliminación de las heces. El
niño descubre las di-ferencias sexuales entre adultos y niños y
adquiere en esta etapa su identidad sexual y el rol de género, es
decir, el papel que juega su sexo en la sociedad.
En esta etapa es importante el aprendizaje del control de los
es-fínteres y su manejo adecuado con paciencia y tranquilidad.

Etapa genital o fálica (3 a 5 años)

Durante este período aumenta el descubrimiento y la explo-


ración del propio cuerpo y se incrementa la curiosidad sexual,
así como las actividades masturbatorias. La escuela
psicoanalítica ha insistido que esta es una etapa importante en el
contexto de la se-xualidad infantil ya que entra en juego la
triangulación edípica que pasamos a describir.

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

La etapa fálica en el varón se caracteriza por una


identificación con el padre y un amor del niño por su madre.
En consecuencia, se pone celoso de su padre a quién percibe
como un rival. Esta si-tuación en la que el niño anhela la
posesión sexual exclusiva de su madre y siente antagonismo
hacia el padre recibe el nombre de com-plejo de Edipo.
La etapa fálica en la niña se caracteriza por un debilitamiento
del amor hacia su madre (su primer objeto amoroso,
característi-co de las etapas anteriores) y una mayor preferencia
hacia su padre. Ella ama a su padre y esta celosa de su madre.
Este es el complejo de Electra. Este complejo es superado con
la madurez y por el re-conocimiento de la imposibilidad de
poseer al progenitor del sexo opuesto.
Este período se caracteriza también por interrogantes
relativas a las diferencias que existen en el varón y las niñas y
que será nece-sario canalizar. La transmisión de información de
los padres debe incluir el concepto de la igualdad de derechos y
oportunidades de cada sexo. Aparecen en esta etapa otras
manifestaciones comunes tales como, masturbación,
curiosidades sexuales, exhibicionismos, juegos sexuales, etc.

Etapa de latencia (6 años hasta la pubertad)

Este periodo de latencia no significa que no tenga manifestacio-


nes sexuales. Pero la ampliación de los intereses del niño, coincidien-
do con el período escolar, disgrega sus manifestaciones sexuales.
Los intereses sexuales están centrados en curiosidades sobre el
nacimiento de los niños, los embarazos, rol de los padres en la

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Jorge Patpatian

reproducción, etc. Los padres deben satisfacer la necesidad de


cono-cimiento e información sobre estos temas.
El período de latencia culmina con la aparición de la
menarca en la niña y las primeras eyaculaciones en el varón,
dándose inicio a la etapa pubertad.
En suma, para el psicoanálisis la sexualidad infantil:

r Es mucho más amplia que la genitalidad.

r Tiene una historia personal cuando llega a la pubertad,


iniciándose ya desde el nacimiento o antes.
r La energía libidinal pasa por distintas zonas en
diferentes momentos del desarrollo.

Desarrollo de la sexualidad en la adolescencia

La adolescencia comienza con los cambios puberales producto


del inicio de los caracteres sexuales secundarios. Este desarrollo se
inicia más temprano en la niña y un poco más tarde en el varón.
La pubertad marca el inicio de la adolescencia, un periodo más o
menos prolongado, de límites imprecisos que comienza a partir los
10-11 años y se prolonga según algunos autores hasta los 20 años. Un
periodo crítico de cambios significativos a nivel corporal y psi-
cosocial. Los rápidos cambios corporales que se producen en el or-
ganismo descolocan al adolescente, que lo inquietan y lo angustian,
sobre todo a sus nuevos aspectos corporales que hacen referencia a
su sexualidad. Busca respuesta, pero no siempre la encuentra. Su de-
seo de independencia y emancipación y sus cuestionamientos sobre la
autoridad de sus padres hacen que la relación con ellos no siempre

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

sea fluida y abierta. Además, los padres mismos comienzan a


des-concertarse y a rechazar muchas de sus conductas y
reacciones. Si la comunicación no ha sido fluida hasta entonces
la tormenta podrá ser mayor.
Una actitud comprensiva, empática y tolerante por parte de los
adultos contribuirá para mejorar los canales de comunicación y po-
der intervenir positivamente en la vida del adolescente. El asincro-
nismo de estos cambios puede generar algunas dificultades emocio-
nales que habitualmente ceden en el comienzo de la edad adulta.
Durante la adolescencia se distinguen varias etapas:
1. Aislamiento. Esta etapa comprende entre los 12 y 14
años y es aquí donde ocurren los cambios puberales más
signi-ficativos que desconciertan al menor. En el aspecto
social hay una tendencia en el varón a compartir con
amigos de su propio sexo. La niña por el contrario tiene
la tendencia de buscar el sexo opuesto. En este periodo
es frecuente las burlas relacionadas con el sexo, el
lenguaje obsceno y las prácticas masturbatorias.
2. Incertidumbre. Durante esta etapa comprendida
entre los 14 y 15 años, el adolescente comienza a
buscar figu-ras identificatorias fuera de las parentales.
Es un tiempo de idealización, de buscar al amigo
íntimo. Lo sexual se manifiesta a través de cuentos,
chistes, confidencias, mas-turbación, entre otras.
3. Apertura a la heterosexualidad. Entre los 15 y 17 años
hay una afirmación de su identidad sexual y un fuerte
narcisismo. Aparecen vínculos entre ambos sexos que son

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Jorge Patpatian

ambivalentes, con mucha intensidad, pero poco


compro-metidas y fugaces.
4. Consolidación. Más allá de los 17 años la identidad y la
orientación sexual está consolidada en una amplia ma-
yoría de adolescentes. Comienza una mayor estabilidad
emocional, con la perspectiva de un objeto amoroso úni-
co, con capacidad de dar y recibir amor. La elección de
pareja puede comenzar a ser de largo plazo y definitiva.
Acompasando estas etapas pueden existir otras situaciones.
Por ejemplo, la atracción sexual a personas del mismo sexo,
confusión o disforia de género, con la consiguiente necesidad
de corregir su cuerpo. Más adelante veremos estos aspectos que
despiertan dudas e incertidumbres en los padres.

-25-
Mitos de la Educación Sexual

El Diccionario de Sexología del Dr. Flores Colombino define un


mito sexual como un relato fabuloso con apariencia de realidad que
contiene información sexual equivocada o carente de valor cientí-
fico, aunque sea de gran predicamento popular. Por generaciones
existen estas falsas verdades. Los mitos dificultan la enseñanza de la
sexualidad y multiplican la ignorancia. Veamos algunos de ellos.

La educación sexual consiste en brindar información


sobre anatomía y fisiología sexual
Esto no es totalmente cierto. La educación sexual no se limita
exclusivamente a impartir información sobre aspectos anatómicos o
fisiológicos de la reproducción. Este solo es una parte de la educa-
ción. El aspecto formativo que se transmite a través de las actitudes
de los padres comienza mucho antes que el niño formule sus inte-
rrogantes y tienen un importante papel en su formación. La infor-
mación puede omitirse en el proceso educativo, pero las actitudes de
los padres se transmiten siempre y dejan huellas sobre el menor.

La sexualidad tiene que ver solo con el coito


La sexualidad no se reduce a lo estrictamente genital. No po-demos
confinarla exclusivamente a la procreación, así como tampoco a su función
erótica. La sexualidad es una dimensión más amplia que incluye todo
nuestro ser siendo resultado de la interacción de factores biológicos, psico-
lógicos, socioeconómicos, culturales, éticos y religiosos. Nuestra sexua-lidad
se expresa en todo lo que somos, sentimos, pensamos y hacemos.

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Los niños y los adolescentes


están informados sobre sexo
No siempre es así. El sensacionalismo sexual que presentan los
medios de comunicación vende la idea que todos conocen el tema.
Lo cierto es que muchos carecen de información que provea
ele-mentos para tener una conducta sexual apropiada. La
desinforma-ción es más pronunciada cuando los padres evitan
hablar sobre el tema. El menor buscará saciar su curiosidad en
fuentes no fieles. Posiblemente de sus amistades o de internet a
través de la porno-grafía y en los ejemplos que observe de la TV
o del ambiente que lo rodea. En esta situación el menor tiene
mayor riesgo de cometer errores que podrán marcar su futuro.

Estimular a un adolescente para acelerar experiencias


sexuales contribuye a su madurez sexual
No es cierto. Apurar a los hijos para que asuman roles y conduc-
tas sexuales activas en una edad en la que no están preparados tiene
consecuencias. Aun si el menor tiene las condiciones biológicas para
ejercer su genitalidad, esto no significa que tenga la madurez sufi-
ciente para hacerlo. Se debe prestar especial cuidado de las primeras
relaciones sexuales, muchas de las cuales crean frustración e insegu-
ridad y no se realizan en las mejores condiciones.

Los encuentros sexuales constituyen siempre una


experiencia gratificante
La idea que muchos individuos tienen, de que las relaciones se-
xuales constituyen siempre una experiencia emocional sumamente

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Jorge Patpatian

gratificante. En realidad, así tendría que ser, pero la experiencia de-


muestra que esto no siempre ocurre. En ocasiones el encuentro se-
xual está envuelto de una serie de circunstancias que se acompañan
de frustraciones, temores, miedos, dolor, amargura, resentimientos,
etc. Debemos tener en cuenta estos sentimientos y conocer aquellas
conductas que pueden desembocar en consecuencias negativas. Lo
que las telenovelas y otros medios nos venden, que la sexualidad es
solo amor, romance, fascinación y placer es también un mito que no
podemos asimilar. Una relación sexual satisfactoria requiere un buen
preludio, inicio y desarrollo satisfactorio, un final también
gratificante, seguido de la satisfacción que produce el recuerdo. No
siempre todas estas etapas se cumplen y cuando esto ocurre, el en-
cuentro sexual no ha sido realmente una experiencia gratificante.

La sexualidad es solo tema para adultos


A partir de los aportes del psicoanálisis se sostiene que la sexuali-
dad humana existe mucho antes de la maduración y la aparición de
los caracteres sexuales secundarios. La influencia de los padres sobre
la sexualidad de los hijos comienza desde el momento que se acepta
el embarazo y el nuevo ser y la aceptación sea cual sea su sexo. Luego
del nacimiento el aprendizaje es continuo y permanente y se funda
mucho antes de comenzar la edad adulta.

La curiosidad es morbosa
Esto también es un falso concepto. El interés que un niño tiene
sobre asuntos sexuales forma parte de la curiosidad normal y de su
crecimiento. Esto no representa ningún signo de anormalidad. Lo
que no es aconsejable para el niño es dejarle dudas o no responder
sus interrogantes. Por este motivo uno de los objetivos de la
educa-ción es satisfacer su normal curiosidad.

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Hablar de sexo con los menores estimula la


actividad sexual y aumenta la promiscuidad
En realidad, es lo contrario. Está demostrado que la falta de edu-
cación adecuada es una de las causas por las que muchos tienen un
mal manejo de su sexualidad, lo que puede traducirse en disfun-
ciones sexuales, embarazo precoz, abortos, enfermedades de trans-
misión sexual, entre otros. El desconocimiento sobre sexualidad y
reproducción, sumado a conceptos populares falsos y estimulados
por los medios masivos o agravados por modelos negativos, traen
como consecuencia que las primeras exploraciones sexuales sean
inesperadas, irresponsables y negativas.
Diversos estudios han demostrado que los adolescentes bien
in-formados tienen mayor habilidad de postergar las actividades
se-xuales y comportarse con mayor responsabilidad. Cuanta
más in-formación maneje un menor sobre temas sexuales
proveniente de su hogar, menos la buscará en otras fuentes, y
probablemente el inicio de su vida sexual se postergue para ser
realizado en condiciones más seguras y responsables.

Se debe aprender de la experiencia


La experiencia no siempre es el mejor camino para aprender
sobre sexo. Por el contrario, una experiencia negativa que
ocurre inesperada y precozmente suele falsear el conocimiento
y dar una idea equivocada sobre lo que es la sexualidad dejando
huellas que marcarán su conducta futura.

-30-
¿Cómo transmiten los padres
los conceptos sexuales?

Los padres siempre comunican conceptos sobre sexualidad a


sus hijos y esta transmisión depende de varios factores:
1. Depende de cómo sienten y experimentan su
propia sexualidad
Los sentimientos y emociones que tengan los padres sobre el
sexo son determinantes. Una actitud positiva redunda en
beneficio para el menor. Por el contrario, los sentimientos de
fracaso, prejui-cios, tabúes, miedos y culpas, afectan la función
educativa dejando también huellas en los hijos.
2. El niño recibe formación acorde al modelo que
per-cibe de sus padres
Aun aquellos que no hablan sobre temas sexuales con sus hijos,
imparten educación sexual. El modelo que el niño percibe diaria-
mente, las actitudes de los padres hacia sus propios cuerpos, los
roles que cada uno de ellos cumple, la relación afectiva y sus
manifesta-ciones, son el principal modelo que consciente o
inconscientemente seguirán o rechazarán los hijos en el futuro.
Todos estos aspectos se inician mucho antes de que los padres
brinden información verbal. Este modelo que se transmite nutre
diariamente su vida. Esto es lo que “respira en el ambiente fami-liar”
y es la base sobre la cual, los demás elementos de socialización

-31-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

(escuela, amigos, medios de comunicación social) intervienen y


producen sus efectos.
3. Los padres transmiten a través de sus actitudes y
gestos
La actitud que tienen los padres a la hora de brindar
informa-ción es primordial. La comunicación no verbal que
acompaña lo expresado en palabras trasluce aprobación o
rechazo y otorgan de-terminados valores a la información.
La motivación, el tono de voz, el contacto visual, ya sea directo,
evasivo. La postura relajada o tensionada; los silencios, omisiones o
indiferencia; así como el miedo o el nerviosismo frente a las inquie-
tudes y preguntas, son elementos fundamentales.
4. Transmisión a través de la comunicación verbal
Lo que decimos y la forma de expresarnos que acompañan nues-
tros sentimientos, gestos y actitudes son factores determinantes. Las
palabras que están impregnadas de honestidad, apertura al diálogo
cuando hay inquietudes, coherencia entre lo que se hace y lo que se
dice, confianza, respeto, seriedad, la naturalidad con que encaramos el
tema son cualidades que debemos perseguir.
Entre los elementos negativos que debemos evitar, destacamos
la ignorancia simulada, indiferencia, ridiculez, jactancia cuando
hace preguntas sobre el tema, o repudio o intimidación.
Ahondaremos con un poco más de detalles sobre algunas
actitudes positivas y otras negativas por parte de los padres.

-32-
Jorge Patpatian

Actitudes Positivas de los Padres

1. Modelo conyugal
La relación de pareja y lo que el niño percibe del vínculo de
sus progenitores es el ejemplo más importante que seguirá. Las
caracte-rísticas personales del padre del mismo sexo, la forma
de vincularse con su cónyuge, el manejo de sus roles, entre
otros factores, son las bases que marcarán la conducta sexual
del menor. El niño imitará o rechazará lo que él vea de esta
relación y del ejemplo que haya perci-bido de cada uno de ellos.
La relación de la pareja, el amor, el respeto mutuo, la tolerancia,
condiciona la conducta de los hijos en el futuro. Un niño que ha vis-
to y experimentado el amor de los padres entre sí y hacia él, tendrá un
camino más llano y seguro para creer y experimentar el amor que
otros puedan tener por él en su vida adulta.
La presencia de conflictos familiares que no se pudieran
resolver o manejar en forma adecuada, actuarán como elementos
negativos y tendrán la marca de lo que no se desea para la vida. La
falta de confianza y seguridad de que a él podría ocurrirle lo
mismo será una realidad latente. Todo esto condiciona la elección
y la convivencia en su vida de pareja, sus prácticas sexuales y la
relación que él tendrá con sus hijos en los siguientes años. En gran
parte su vida estará marcado por el sello que ha recibido.
Cada niño reacciona de manera distinta cuando los vínculos
afectivos de la pareja no son las mejores y no podemos generalizar
porque esta reacción dependerá de otros múltiples factores. Entre
ellos, el momento evolutivo donde el conflicto aparece y de la po-
sibilidad de afecto que el niño observa a través de otras personas.
Ante esta situación siempre debemos evitar críticas y juicios de

-33-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

pareja delante de los hijos. Esto menoscaba la imagen de los


padres y es perjudicial para el menor.
Una familia estable que tiene adecuados vínculos afectivos, cuyos
miembros se valoran tendrá mayor garantía para el desarrollo de un
niño y adolescente más sano, libre y sexualmente más responsable.
2. Buena comunicación padres-hijos
A no menos que exista una buena relación padres-hijos y diá-
logo adecuado, será difícil encarar el tema en forma satisfactoria.
Diversas situaciones impiden una comunicación abierta intergene-
racional. Un estudio realizado a estudiantes de secundaria en Perú
indicó que sobre diez mil alumnos entrevistados con la pregunta:
¿A quién acudes cuando tienes un problema serio?, el 37% de los
adolescentes entre 11 y 15 años dice no acudir a nadie. Esta
investi-gación revela la gran soledad que sufren los menores.
Muchos de los menores que consultan no lo hacen con sus padres
cuando tienen dificultades. Por esta razón es necesario enfatizar la
importancia de tener una mayor comunicación familiar. Esto no se
adquiere de un día al otro. Cuesta mucho trabajo crear y mantener
buenos cana-les de comunicación familiar. Es un proceso
complejo que requiere esfuerzo.
Los especialistas indican algunas pautas para mejorar la
comu-nicación familiar: entre ellas se destacan:
r Las reglas que los padres imponen sin una correcta
rela-ción pueden derivar en rebelión de los hijos.
Antes de dar reglas es necesario una buena relación.
r Compartir tiempo y espacio con ellos.

-34-
Jorge Patpatian

r Escuchar en forma adecuada, atendiendo sus


emociones y sentimientos.
r Dar confianza. Tener por norma en el vínculo con el
niño de que él es inocente hasta que se demuestre lo
contrario en todas sus circunstancias.
r Cuando se necesite corregir, hacerlo en privado. La
crítica pública humilla y daña la comunicación ulterior.
r Ser consecuente pero flexible y aprender a ceder en
deter-minadas circunstancias.
3. Amor incondicional
El amor incondicional de los padres hacia los hijos es fundamen-
tal en fomentar bases sólidas para su autoestima y salud emocional.
Esto significa aceptarlo por lo que es y no por lo que tiene o hace. El
niño no debe ganarse el amor de los padres. El amor debe ser tácito y
sin condiciones. Si un niño presenta carencias afectivas precoces
tendrá un terreno propicio para cultivar enfermedades mentales y
patologías sexuales. Se describen cuadros psiquiátricos graves como
depresión y esquizofrenia, en estas situaciones. Las carencias afecti-
vas que se desarrollan en la vida del menor ya sean por disgregación
familiar, ruptura, abandono o deserción de los padres en su respon-
sabilidad, entre otras múltiples situaciones, tienen su expresión en
trastornos en la esfera afectiva que puede llevar a la inmadurez para
establecer vínculos sociales estables, satisfactorios y duraderos.
La ausencia de afecto y amor incondicional, sumada a la
percep-ción que él es un estorbo para los padres puede crear
serias frustra-ciones y complicaciones futuras.

-35-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

4. Fomentar su autoestima
La autoestima es el valor y la aceptación adecuada de sí mismo.
Según tenga esta capacidad podrá valorar y aceptar a los demás.
Quien se siente amado y valorado desde los primeros años de su
vida, experimenta la sensación de aprecio y adquiere una saludable
sensación de importancia y valía personal. Todo esto contribuye
para que, en su futuro, tenga la sensación y la seguridad de que
otros lo amarán a él. Cuando la baja autoestima se consolida,
aparecen sentimientos de rechazo cuyas manifestaciones se harán
ostensibles en múltiples áreas de su vida, entre ellas la sexual.
La ausencia de manifestaciones positivas por parte de la familia
hacia el menor, pueden traducirse tarde o temprano en trastornos
de conducta o en desconexiones afectivas. La pérdida de
confianza en sí mismo también es un factor de riesgo para buscar
sustitutos como el alcohol y la droga con la ilusión de encontrar
un sentido y seguridad que su familia no ha podido brindar. La
autoestima adecuada en un menor es una vacuna que inmuniza y
que otorga anticuerpos frente a estas situaciones.
5. Contacto físico adecuado
El amor incondicional y una buena comunicación se expresan a
través de un adecuado contacto físico. Necesitamos expresar
afectos a través de abrazos, caricias y besos. El menor necesita ser
abrazado y acariciado por los padres. Esto no constituye en seres
responsables y con adecuadas intenciones ninguna forma de abuso
sexual. Es más, la comunicación y la transmisión de afectos a
través del contacto adecuado estimula la confianza y la autoestima
y es una base ade-cuada para su futuro rol sexual.

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Jorge Patpatian

6. Aceptar el sexo biológico del niño


El niño debe ser aceptado cualquiera fuere su sexo y debe
ser tratado y educado con los roles culturales de su género.
Cambiar esta norma, es confundir al niño. También debemos
tener en cuen-ta una diferenciación al elegir su nombre. Es
mejor no dar lugar a confusiones.
7. Aceptar todas las regiones corporales como naturales

Con especial referencia aludimos a los órganos y funciones se-


xuales. Cuando un padre tiene la convicción de que hay partes del
cuerpo que son malas, sucias y ocultas, y distintas al resto, es un
falso concepto que no contribuye a una educación sexual
adecuada. Las actitudes correctas que un menor tenga de su
propio cuerpo y de sus órganos genitales, dependerán de lo que
percibe a través de las miradas, actitudes y respuestas recibidas. El
cuerpo humano no tiene partes buenas y malas, limpias ni sucias.
Una aceptación ade-cuada de todo el cuerpo y del ser es una base
firme para transmitir conceptos sexuales positivos.
8. Transmitir valores y no solamente información
biológica
Los padres deben transmitir una formación sexual acorde a
sus principios y valores. No pueden dejarlo librado a las
tendencias ideológicas de otras personas o las que primen en
este momento en la sociedad. Los padres pueden dar
orientación y límites necesarios que el menor debe recibir en
materia sexual. Esto es responsabilidad de los padres.
Debemos tener en cuenta que la sexualidad no es un instinto
animal, por lo que no todos responderán de la misma manera. Por

-37-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

lo tanto, el proceso de formación y transmisión de valores es


decisi-vo en las actitudes y comportamiento sexual futuro.

Actitudes negativas de los padres

1. Reprimir y no hablar del tema


Propiciar el silencio no es saludable. El niño tiene la
sensación de que sus interrogantes no pueden ser satisfechas
por lo que lo trans-forma en un tema tabú y vergonzante.
Es frecuente que los padres se sienten inseguros cuando se
trata de dar a los niños información sobre sexo. A veces,
justifican esta actitud y señalan que no han hablado porque el
niño no se los ha preguntado, aunque en otras situaciones
humanas los padres ten-demos a tomar la iniciativa. El niño se
percata de ello cuando no se satisfacen sus inquietudes y
aparecen respuestas, tales como: “eso no se pregunta, son cosas
de grandes”, “en otro momento te lo diré”. Las estadísticas
señalan que la mayoría de los niños recibe más in-formación
sobre sexualidad fuera de su hogar que de sus propios padres.
2. Actuar con falsedad e incoherencia
Es una actitud que los padres debemos evitar. El niño tarde
o temprano se dará cuenta de la manera que actuamos y sabrá la
ver-dad de que ha sido engañado por aquellos de quienes
confiaba y esperaba más sinceridad.
3. Adelantarse a su madurez sexual
Algunos padres se adelantan a la sexualidad de sus hijos. Todos
hemos sido testigos de adultos ansiosos por el comportamiento

-38-
Jorge Patpatian

sexual de sus hijos y que consideran que ya les ha llegado la hora de


hacerse hombres o mujeres. Llevarlos al prostíbulo o estimularlos a
comprar anticonceptivos no es un acto de buena docencia.
4. Inseguridad y temores acerca del comportamiento
sexual futuro de los hijos
Muchos padres temen sobre el comportamiento sexual de sus
hijos en el futuro. Algunos tienen temores sobre su orientación o
identidad sexual que tendrán sus hijos. La mayoría de las veces sin
ningún fundamento, pero los temores repercuten en las reacciones
y actitudes de los adultos frente a los hijos.
5. Reírse y festejar sobre actividades relacionadas con
la sexualidad
Los padres deben cuidarse de no utilizar los comportamientos
y actitudes sobre asuntos sexuales como si los tales fueran trofeos
para sus hijos y/o para ellos. La contrapartida de ridiculizar o
reba-jar al niño frente a sus actitudes también es perjudicial.

Factores de riesgo familiar

Existen situaciones familiares que pueden interferir en la


educa-ción sexual del menor. Por ejemplo:
r Los conflictos en la pareja que se expresan por
descalifica-ción hacia la imagen del otro progenitor.
r Familias con historia de prostitución, alcoholismo,
drogadicción.
r Dificultades en la relación padres-hijos, caracterizadas
por rigidez, inflexibilidad y violencia.
-39-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

r La sobreprotección que no permite el crecimiento y


desa-rrollo madurativo de los hijos.
r Absentismo de uno de los padres con falta de identifi-
cación con el progenitor del mismo sexo. Este puede ser
un factor de riesgo en la identificación sexual. En el caso
de progenitores fallecidos la identificación sexual puede
completarse sanamente cuando el padre o madre
fallecido queda integrado al imaginario familiar (tu padre
era muy trabajador, a tu padre le gustaba la lectura) y el
hijo/a hará su identificación con ese ser ahora ausente.
r Hijos no deseados con rechazo hacia el menor.
r Hijos que son el producto de uniones frágiles, efímeras.

r Niños que tuvieron separaciones prolongadas que


dificul-taron el apego.

Factores de riesgo socioculturales

Machismo
Nuestra sociedad está impregnada de conductas machistas.
Nuestra herencia cultural ha propiciado el mito de la
superioridad masculina. El machismo desvirtúa la sexualidad, la
limita al campo de la utilización de la mujer como un objeto de
posesión del va-rón, perjudicando la imagen femenina, siendo
víctima de atropellos múltiples que la sociedad justifica.
Los medios de comunicación y la publicidad que la
acompaña basan con frecuencia sus mensajes en este concepto.

-40-
Jorge Patpatian

Cuando los padres perpetúan actitudes machistas en el hogar


se sobredimensiona el problema; es probable que el niño repita
en el futuro lo que ha visto en su hogar.
Sobredimensión de la maternidad
Las expresiones tales como ¡¡madre hay una sola!! pueden impre-
sionar y sobre valorar a la mujer, pero no es necesario hacerlo al pre-
cio de minimizar la paternidad. La mujer debe cuidar esta actitud
frente a sus hijos y valorar el rol de la paternidad.

-41-
Algunas pautas para hablar de
Sexo con los Hijos

Hablar de sexualidad con los hijos no es una tarea fácil ¿Cómo


responder a sus preguntas e inquietudes? El desconocimiento y el
temor menoscaban las posibilidades de un diálogo adecuado.
Estas resistencias deben ser superadas y se requiere esfuerzo a la
hora de compartir con los niños. Describimos algunas sugerencias
y reco-mendaciones que pueden ser útiles:

Encarar el tema con naturalidad

Un ambiente sereno y abierto que canalice el tema con naturali-


dad y confianza, sin tabúes y prejuicios es la situación ideal. Es
nece-sario reconocer que los niños, la temática sexual es como
cualquier otra. Cuando ellos preguntan sobre alguna inquietud, lo
hacen con total naturalidad. Para los padres debiera ser lo mismo.
En princi-pio el niño no tiene la carga emocional que arrastran los
adultos cuando se hablan estos temas.
El silencio, las explicaciones oscuras y la evasión hacen creer
al niño que ha tocado un tema del cual le hubiera sido mejor
haberse callado. Sus dudas e interrogantes continuarán, pero no
será fácil la comunicación cuando percibe que no tiene un
terreno familiar propicio.

-43-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

También nos preguntarnos: ¿Cuándo debemos comenzar a


abordarlo? El mejor momento para iniciar el tema es cuando el
niño demuestra interés y cuando inicia el diálogo sobre alguna
inquie-tud. También nosotros los padres podemos conducir
una conversa-ción en situaciones especiales. Por ejemplo, la
presencia de un nuevo embarazo en la madre o en algún
integrante de la familia o amigos cercanos. La Prof. Irma
Gentile-Ramos en su libro Puericultora y Pediatría Social señala
lo sorprendente que es la naturalidad con que los niños aceptan
las explicaciones cuando también las respues-tas a sus preguntas
son explicadas en forma clara y sin sentido de culpa.

Hablemos sin complicaciones

Contar historias imaginarias de semillas y jardineros, contarles


el cuento de la cigüeña o responder que los bebes vienen de París
y que se encargan desde un supermercado pudieron ser respuestas
de antaño. Hoy sabemos que no constituyen una adecuada
docencia. Esto conduce a una información no solo errónea sino
nociva a largo plazo porque estamos perdiendo la confianza frente
a estas menti-ras. Es más recomendable hablar abiertamente, sin
rodeos ni com-plicaciones hasta el límite de su comprensión según
el momento de su desarrollo.

Siempre la verdad

Debemos tener franqueza cuando hablamos de sexualidad. No


debemos mentir ni engañar, Las mentiras pueden llegar a producir
desconfianza e inseguridad sobre el tema y lo que es peor hacia los
mismos padres. De todas formas, los menores buscarán respuestas,

-44-
Jorge Patpatian

pero en otra parte y no siempre las más adecuadas y


beneficiosas para su formación. Las verdades a medias dichas a
sus oídos suma-dos a los recursos de su imaginación no son
herramientas adecuadas para su formación.

Usar terminologías correctas

Cuando hablamos de sexualidad, debemos usar una terminolo-gía


adecuada. Esto significa que debemos llamar las cosas por su
nombre. Un vocabulario correcto demuestra naturalidad y otorga
sensación de seguridad al niño que nos está escuchando. El uso de
palabras y terminologías que sustituyen los nombres correctos se ha
hecho una costumbre muy popular. Lejos de ser de beneficio para el
niño, conduce a imaginaciones erróneas, produciendo inseguri-dad y
confusión. Particularmente, para las niñas es peor aún no dar
nombres a sus órganos femeninos. Citar la vulva como “la cosa” y no
asignarle su nominación correcta es perjudicial, ya que, en el es-
quema corporal, el órgano femenino es interno, escondido y secreto y
es muy importante para toda niña su identificación.

Responder sus inquietudes y no adelantarse


a su posibilidad de comprensión
No debemos ir más allá, pero tampoco quedarnos cortos.
Debemos atender sus inquietudes y preguntas y responder todas
sus inquietudes conforme a su comprensión. Es saludable mante-
ner su capacidad natural de preguntar y explorar aquello que le in-
triga e inquieta. Para esto, es necesario responder de acuerdo con
su madurez satisfaciendo su necesidad de conocimiento. Cuando

-45-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

reconocemos que el niño queda conforme puede ser una señal


que respondimos en forma adecuada.

Respuestas breves

Las explicaciones muy extensas tienden a confundir a los


niños. Es adecuado dar respuestas concisas y dejar el espacio y
el ambiente para que el menor se sienta libre para seguir
indagando de acuerdo con su necesidad.

Volver hablar del tema

Retomar la conversación al cabo del tiempo puede ser valioso.

¿Cómo procesó la información? ¿Entendió lo que le explicamos o


generó durante ese lapso nuevas interrogantes? Los chicos pudie-ron
haber cambiado, las conversaciones con sus compañeros pueden
producir nuevas inquietudes. Sus propias fantasías pueden generar
nuevas dudas que serán necesarias evaluar y disipar. Es adecuado
preguntarle al chico qué otra cosa quiere saber y que nos cuente
cómo se imagina las situaciones que le están preocupando.
Estas son algunas de las actitudes que pueden ser útiles cuan-do
deseamos encarar en forma adecuada nuestro rol y compromiso
educativo. Cada padre puede buscar o crear otras estrategias.
En suma, una respuesta clara, sincera, honesta y natural,
cohe-rente a las interrogantes e inquietudes del menor, teniendo
la ca-pacidad de volver al tema cuando sea necesario, darán los
mejores resultados y beneficios para el crecimiento y desarrollo
de sus con-ceptos sexuales.

-46-
Factores de riesgo que
demandan la
intervención de los
padres

Sexualidad y TV

Estamos saturados con programas de TV que contienen una


carga erótica muy destacada. El erotismo como es una expresión
de nuestra sexualidad y tiene un lugar legítimo en el ámbito
privado, pero extrapolado al ámbito público y a relaciones de
cualquier na-turaleza, cuyo único fin es la autosatisfacción puede
resultar en una distorsión del ideal para el cual mejor puede ser
utilizado, que es nutrir y recrear el vínculo de la pareja.
La pantalla chica imparte una imagen distorsionada de la rea-
lidad. Un saber temprano que no es el más adecuado. Así como
la represión sexual crea frustraciones y conductas sexuales
inapropia-das, la exageración de imágenes sexuales impulsada
por los medios brinda una información sexual que deforma.
¿Cuáles son algunas de las tendencias sexuales que la TV señala
y exagera?
1. En el lapso de un año un menor que mira habitualmente
la TV puede llegar a observar más de diez mil relaciones
sexuales simuladas o reales. Estos encuentros sexuales
son en más del 90 % extramatrimoniales, irresponsables,
-47-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

frecuentemente con personas desconocidas, sin ninguna


protección y cuyos protagonistas tienen múltiples y varia-
das parejas. Esto demuestra que la TV promueve la pro-
miscuidad. Este lastre de conceptos se exagera en el
menor por ser realizados por personajes profesionales
cargados de belleza, elegancia y omnipotencia.
2. A través de la publicidad, la TV muestra
frecuentemente una imagen distorsionada de la mujer.
La reduce a un ob-jeto sexual atractivo y descartable.
3. El discurso televisado presenta mensajes contradictorios
con respecto a la homosexualidad. Por un lado,
promueve y exalta las conductas homosexuales no solo
como alter-nativa de vida sexual, sino con frecuencia
también como preferible. Pero por otro lado y en forma
lamentable, tam-bién la TV ha transmitido mensajes que
menoscaba y de-grada a la persona homosexual.
4. La TV vende la idea que existen mecanismos para au-
mentar el vigor y la atracción sexual. Tal es el caso de
la publicidad de ciertos medicamentos, bebidas
alcohólicas y tabaco, que siendo mentiras se dan por
cierto en la men-talidad infantil.
5. La TV dice muy poco sobre las consecuencias que pro-
duce la conducta sexual que promueve. ¿Qué dice acerca de
las enfermedades de transmisión sexual que produce la
promiscuidad sexual? ¿Qué enseña de los embarazos
precoces e inesperados que cada día más aparece en los
adolescentes? Es evidente que no es responsabilidad de los
medios, pero sí de la conducta sexual que promueve. La
situación se agrava cuando reconocemos que el niño no

-48-
Jorge Patpatian

tiene aún una maduración sexual desarrollada y se


expone a escenas y situaciones en forma prematura,
sin tener una adecuada capacidad crítica y reflexiva
ante los medios. Con excepción de programas
referidos a la naturaleza o de tipo científico como los
que se transmitían similares a los de Cousteau, que son
formativos para la educación sexual del menor,
afirmamos que globalmente la TV es nociva y deforma
los conceptos sexuales en los niños y adolescentes.
6. La TV muestra personajes que otorgan una desmedida
preocupación por todo lo que sea estético y corporal
re-emplazando el ser, por el tener o parecer. Esto
afecta la atracción entre los sexos. El énfasis en lo
corporal lleva a la obsesión de la estética, dejando de
lado aspectos emocio-nales, intelectuales y éticos que
la pantalla chica no pro-mociona. Por ende, la
frivolidad y el hedonismo invaden el pensamiento
adolescente promocionando actitudes categóricamente
perjudiciales para la sexualidad y la con-ducta humana.
Marcamos la urgencia que tenemos en responder a estas
realida-des con una participación más comprometida, madura y
responsa-ble frente a la pantalla chica y a lo que se observa en ella.

Internet y Sexualidad

El fácil acceso a imágenes y literatura sexual que se cuenta a tra-


vés de Internet son de alto contenido pornográfico. La oferta y la
diversidad de opciones como a grupos de discusión sobre temas se-
xuales, el contacto con personas desconocidas por chat, el material

-49-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

sexual en CD que ofrece distintas opciones individuales o con


pa-rejas que aparecen en la pantalla y que con el mouse puede
hacer un clic en algún lugar del cuerpo y satisfacer todo tipo de
curiosidad, se constituye en una ventana sin límites. Los niños y
adolescentes están expuestos en forma permanente y sus
consecuencias son im-previsibles. Esto constituye un caldo de
cultivo para la adicción a la pornografía.

Algunas recomendaciones

1. Reconocer el tiempo de inversión que los menores


dedi-can en Internet y discutirlo con ellos.
2. Si encontramos a nuestros hijos con imágenes que
pueden ser inadecuados, busquemos esta oportunidad
para con-versar sobre el tema.
3. Es recomendable no tener acceso a los programas
“chat” e instalar un programa con filtro que impida el
acceso a páginas pornográficas.
4. Mantener la computadora en un área pública del hogar
y no en el dormitorio de los menores.
5. Es necesario indicar a los niños que no den
información personal: nombre, dirección, número de
teléfono, tarjeta de crédito de algún familiar, ni otros
datos que alguien se los solicite por computadora. etc.
6. Estimular a que hable de lo que ve o lee en Internet y
dis-cutirlo juntos.

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Jorge Patpatian

7. No alentar la práctica de “surfear” durante períodos pro-


longados por Internet sin objetivos claros y sin supervisión.
Es asombroso el enorme salto tecnológico que ha
significado Internet. No obstante, los peligros son reales. Todo
depende del uso que los menores tengan de este instrumento.

Música y Sexualidad

A lo largo de la historia la música siempre ha sido expresión de la


cultura y de los sentimientos de los pueblos y su gente. No cabe duda
es una forma de comunicación y fuente de aprendizaje de modelos y
comportamientos humanos. Cuando analizamos la música que
escuchan nuestros niños y adolescentes y, fundamentalmente su
contenido, comprobamos un lamentable deterioro en los temas mu-
sicales principalmente, aunque no en forma exclusiva, en la música
rock. Algunos de estos temas son perjudiciales para el crecimiento y
desarrollo del menor y deforman su educación, por ejemplo:

r La promoción del uso de drogas y alcohol.

r Los temas relacionados con el suicidio presentado


como una posible salida a los problemas de la vida.
r Los asuntos que tienen que ver con ocultismo, canciones
relacionadas con poderes satánicos y sacrificios humanos
que se representan en sus conciertos.

r Los temas sexuales y sus aspectos conexos son


también ar-gumentos habituales.
La sexualidad para nada está ajena al tipo de música que gene-
ralmente más atrae. Es lamentable que se exalten asuntos sexuales

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

negativos como, por ejemplo, el sadismo y masoquismo, el incesto, el


menosprecio de la mujer, la superficialidad en las relaciones y los
vínculos. Por el contrario, los afectos, el amor maduro, adulto, res-
ponsable y comprometido muy poco está presente.
Con frecuencia se citan partes del cuerpo en forma totalmente
despectiva. Las cosas no se llaman por su nombre por el contrario
abundan las groserías cargadas de expresiones agresivas, violentas
y fuera de lugar. Muy poca música se escucha en la cual se
promueva el respeto, el compromiso y el amor maduro. ¿Cuál es el
resultado? Qué otra cosa sino más deformación, superficialidad y
deshumani-zación de la sexualidad a un contexto puramente
pasajero, efímero que se viste de placentero pero que nada de esto
tiene a largo plazo, promoviendo la falta de valorización del
cuerpo y la inestabilidad en las relaciones.
Estos motivos son más que suficientes para que los padres tengan
una activa participación en los intereses musicales de sus menores.
Algunas recomendaciones podemos citar:
1. Debemos prestar atención a los deseos musicales, lo que
quiere que se le compre, lo que escucha y lo que ve.
2. Es importante conversar con ellos sobre sus gustos y
pre-ferencias musicales.
3. No criticar, sino interpretar su música desde su punto de
vista, con una actitud abierta y comprensiva, mantenien-
do fluida la comunicación que muy fácil puede perderse.
4. Promover una actitud reflexiva y crítica con respecto a
la música y fundamentalmente a la letra y al contenido.

-52-
Jorge Patpatian

5. Ayudarles a identificar las tendencias destructivas en


los temas musicales.
6. Conocer la vida privada de quienes son protagonistas
de esta música puede ayudarles a no dejarse engañar.
Si un niño o adolescente demuestra tener una preocupación
des-medida con música de contenido destructivo y tiene
cambios en su comportamiento, como aislamiento, depresión
y/o uso de sustan-cias adictivas como alcohol y drogas se debe
hacer una evaluación profesional.

-53-
Preguntas frecuentes que hacen
los niños

Una serie de cuestionamientos pueden habitar en la mente de


los menores cuya respuesta debemos considerar. A continuación,
señalamos algunas de ellas. Son aproximaciones que no agotan las
interrogantes, pero son útiles para la reflexión y para estar prepara-
dos cuando enfrentemos las siguientes situaciones.

Los varones pueden preguntar: ¿porque las niñas no


tienen pene?
Los preescolares hacen esta pregunta. Se debe señalar que justa-
mente esta es la diferencia que existe entre las niñas y los varones.
Esta respuesta puede satisfacer la curiosidad del menor y general-
mente en estos momentos no será necesario dar más detalles. El
momento del baño es oportuno para responder esta interrogante.
Debemos aclarar algunas nociones equivocadas que comienzan a
gestarse en esta edad. Por ejemplo, el varón puede suponer que per-
derá su pene en algún momento y la niña puede creer que lo tuvo o
lo tendrá en su futuro. Estas nociones deberán ser aclaradas.

¿De dónde vienen los niños? ¿Cómo se forman los


bebes? ¿Cómo nací yo?
Para muchos niños es un misterio pensar como entró y salió del
vientre de su madre. Pero también para los padres estas preguntas
desconciertan y se tornan difíciles de responder. Hagámoslo en

-55-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

forma clara, honesta y evitando todo tipo de fantasías.


Tampoco se trata de entrar en complejas explicaciones. Para
responder estas in-terrogantes tengamos también en cuenta el
grado de conocimiento que tiene el menor.
Se sugiere en primera instancia, responderle con la misma pre-
gunta: y a ti... ¿qué te parece? Una vez conocido su grado de enten-
dimiento nuestra respuesta podrá ser más acertada. Por ejemplo, las
primeras respuestas pueden ser: tu papito y yo nos amamos mucho,
un día decidimos tenerte y así fue como él puso dentro de mí algo
como si fuera una semillita que se unió a mi cuerpo y como resul-
tado de esto te fuiste formando en mi cuerpo hasta los 9 meses. Una
vez crecido el médico me ayudó en el hospital a que nacieras. Nuestra
respuesta debe incluir algunos aspectos importantes:
1. El niño debe conocer que los dos padres intervienen
en la formación del bebe.
2. Los dos son necesarios e indispensables para su formación.

3. La unión de ambos forma un bebe.


4. Esta unión es fruto del amor y del placer que esto origina.

5. Por lo tanto, su llegada ha sido esperada y aceptada


por los padres.
Siempre debemos cuidar el tono, la expresión y el grado en que se
comunican los sentimientos en relación con sus antecedentes de
gestación. Tal vez no haya significado una buena experiencia, muy
dolorosa física o afectivamente. Pero una niña que oye a su madre
hablar con calma, tranquilidad y alegría otorgará una actitud posi-tiva
para su hija. Esto no significa que debemos ocultar el grado de
sufrimiento que significa el parto y otras situaciones eventuales que

-56-
Jorge Patpatian

puedan ocurrir. Pero puede explicarse con claridad, que la


alegría del producto de gestación es mayor que el sufrimiento
transitorio que pudo experimentar.

Una vez que los niños se forman en el vientre de


mamá, ¿por dónde sale?
Debemos decir la verdad. Mamá tiene un orificio, al igual que
todas las niñas y mujeres, por donde salen los niños, distinto por
donde se orina o se defeca. El nombre de dicho orificio se llama
vagina (recordamos que debemos mencionar los órganos y sus
fun-ciones con terminologías correctas) y se dilata cuando el
recién na-cido está pronto para salir, volviendo luego a su tamaño
habitual. Recalcamos cuidar los sentimientos que acompasan esta
explica-ción. La descripción de dolores, molestias y sufrimientos
pueden atemorizan desmedidamente este acto.

Preguntas sobre el acto sexual


Se puede explicar que mamá y papá se quieren mucho por lo
que además de abrazarse y besarse, pueden unir estrechamente
sus cuer-pos y ambos sentir mucho placer. Por este motivo este
acto se llama hacer el amor, dejando bien claro que justamente
es un acto de amor que ambos tienen entre sí.

En cuanto al papel del padre, ¿cómo pone papá la


semilla para formar un bebe?
Es importante señalar la acción masculina en la formación de los
hijos. El niño tiene derecho de saber que el padre también tiene un
rol decisivo en la gestación. La explicación hasta donde pueda
comprender, que un hijo es el resultado también de la existencia de

-57-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

la erección, penetración y eyaculación del hombre acompañado


de mutuo amor y placer y que esto trae como resultado un
nuevo ser, será muy enriquecedor.

Cuando papá no está


El menor debe entender claramente que tiene papá. Jamás se
debe negar al padre. Debe saber que hubo razones por las que
am-bos padres no pudieron vivir juntos. Él no tiene ninguna
respon-sabilidad sobre las causas que originaron que el padre
no esté con ellos.

¿Cómo puede una mujer que no tiene pareja y vive


sola, tener un bebe?
Cuando tienen esta curiosidad será necesario aclarar que
tanto el hombre como la mujer están aptos para la procreación
sin necesi-dad de que ambos estén conviviendo.
Sin embargo, es importante comunicar el concepto que todo
niño tiene el derecho de tener padre y madre y ambos con un
com-promiso amoroso y aun legal para que él pueda crecer y
desarrollar-se en las mejores condiciones.

Inquietudes que comienzan en la pubertad


A partir de la pubertad las inquietudes pasan por muy diversas
temáticas. En esta etapa es fundamental la transmisión de actitudes y
el desarrollo de valores que sustentarán su conducta. Acompasar
nuestra docencia con nuestro ejemplo y coherencia darán los mejo-
res resultados a la hora de encarar sus inquietudes e interrogantes.

-58-
Jorge Patpatian

Las siguientes son algunas de las posibles turbaciones que


esta-rán en su conciencia y sobre las cuales girarán sus dudas:
1. Sobre lo que sucede en mi cuerpo. Cambios puberales.
Clarificación de ideas sobre menstruación y
eyaculación. Tamaño de sus genitales. Aparición de
vello, tamaño del crecimiento mamario. Variaciones
normales en el desa-rrollo humano ¿Seré normal?
2. Conceptos de sexualidad. Soy mujer. Soy hombre.
Diferencias de uno y otro sexo.
3. Sensaciones Sexuales. Deseo sexual. Masturbación.
Clarificación de ideas.
4. ¿Podré formar pareja?
5. ¿Por qué se vive en familia?
6. ¿Podré procrear? Características de la reproducción.
Embarazo. Edad ideal para la procreación.
7. ¿Cómo es una relación sexual? ¿Cuáles son sus objeti-
vos? La función afectiva, de comunicación, de placer y
reproducción.
8. ¿Qué es la homosexualidad? ¿Cómo se produce?
9. Enfermedades de Transmisión Sexual. ¿Cómo
prevenir-las? Formas de contagio. Conductas de
riesgo. El VIH/ SIDA.
Algunas de estas interrogantes comenzarán durante esta
etapa y los padres tendrán que manejar estos temas y pedir
ayuda, aun antes que ellos las pregunten.

-59-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Acerca de su menarca y menstruación

Entre las múltiples interrogantes descritas citamos algunas con-


sideraciones sobre la menarca y los periodos menstruales. La mens-
truación es un hecho biológico normal en toda mujer en edad genital
y se denomina menarca a la primera menstruación. Habitualmente
ocurre entre los 9 y 12 años. A pesar de ser un hecho fisiológico sigue
teniendo connotaciones de prejuicio y oscuridad en muchos secto-res
de la población, inclusive en los propios niños y adolescentes.
Estos son algunos elementos que se deben tener en cuenta a la
hora de transmitir información sobre la menstruación en las niñas:
1. Reflexionar como vive la madre su propia experiencia
menstrual y qué es lo que está transmitiendo con sus ges-
tos, actitudes, sentimientos cuando habla sobre el tema.
2. Aclare todas sus posibles dudas y curiosidades sobre el
sangrado menstrual. Existen fantasías, tabúes,
prejuicios y falsos conceptos que seguramente sus
pares le mencio-naron y que será necesario responder.
3. Hay que explicar que la menarca constituye una señal de
que esta transitando por el camino que lleva de la niñez a la
adultez. y que durante los primeros meses el ciclo podrá ser
irregular como una “señal de ajuste” de su aparato re-
productor. Le luego seguramente su ciclo se regularizará.

Con relación a las emisiones nocturnas en los varones

Antes que llegue la pubertad los niños debieran saber qué les suce-
derá llegado este tiempo. Los cambios físicos y emocionales pueden

-60-
Jorge Patpatian

ser descritos con anterioridad para que no los tome desprevenidos.


Con relación a las emisiones espontáneas nocturnas de semen
debe-rán conocer el hecho como totalmente natural y fisiológico
durante este tiempo. Esto les dará tranquilidad y evitarán temores
y descon-cierto. Manchar su ropa interior o su cama no le debe
engendrar culpabilidad ni temor a ser descubierto. Un ambiente
natural sobre el tema le ayudará a tener un concepto adecuado.

-61-
¿Qué hacer en algunas
situaciones?

Algunas situaciones que se presentan en el diario vivir


pueden presentarse con alguna dificultad para responderlas.
Veamos algu-nas de ellas.

Rivalidad con el progenitor del mismo sexo

Entre los 3 y 5 años aparece la etapa edípica que se caracteri-za


por un “enamoramiento” con el progenitor del sexo opuesto.
Paralelamente hay una rivalidad con el padre del mismo sexo ya
que quiere competir con él para desplazarlo de su lugar. Con amor
y firmeza se debe demostrar al menor que no puede combatir por
el puesto. Él tendrá que esperar hasta encontrar también una
pareja como lo hizo su mismo progenitor. Esta situación se
resuelve en la medida que la niña quiere ser tan femenina como su
madre y el va-rón tan masculino como su padre.

El niño abre la puerta del dormitorio cuando sus


padres están manteniendo una relación sexual

Ante todo, evitemos que esta situación suceda. El niño debe


aprender a no entrar al dormitorio de sus padres si ellos no lo auto-
rizan previamente. Él debe golpear la puerta y esperar la respuesta
antes de entrar. No obstante, si así ocurrió debemos decirle al niño

-63-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

que se retire del dormitorio, cerrar la puerta y luego atender el


im-pacto que esto ha producido en el menor y hablar con él si
fuera ne-cesario. Debemos aclarar sus dudas de acuerdo con su
edad. Hacer consciente al niño que este es un acto natural y
expresión de amor entre los padres.

Cuando el niño desea dormir en la cama con


sus padres
Lo ideal es que un niño no duerma en el dormitorio de sus pa-
dres mas allá de los 6 meses de edad. A partir de esta edad es con-
veniente que el menor duerma en un lugar separado. El
dormitorio de los padres debería estar aislado de los demás
sectores de la casa. Debe tener una buena cerradura que se
controle de adentro. El niño debe aprender que no debe ingresar
al dormitorio de sus padres cuando la puerta está cerrada. Aunque
hay excepciones, en general no debemos satisfacer el deseo de ir al
dormitorio de sus padres. Hay circunstancias válidas en que el
menor lo reclama. Por ejem-plo, ante miedos nocturnos y cuando
el niño está enfermo y tiene temor a estar solo. En tales
circunstancias, es mejor que los padres acompañen a su hijo a su
dormitorio y no permitir que el niño vaya al de sus padres.

Adultos desnudos frente a sus hijos

La desnudez de los adultos frente a los niños despierta una curio-


sidad natural por parte del menor. Esto llama la atención del niño.
Por otra parte, el deseo de que un niño quiera ver cierta parte del
cuerpo de un mayor es también natural y no debe alarmar a los pa-
dres. Así como la curiosidad por ver partes del cuerpo escondidos

-64-
Jorge Patpatian

por la ropa, deben ser considerados normales, también debe ser


considerada como normal, negarle su curiosidad. Es
conveniente no reprochar su inquietud al negarle su demanda,
ni tampoco hacerlo sentir culpable por su curiosidad. Tampoco
debe sentirse culpable luego que ha visto desnudo a alguno de
sus padres, en forma casual y circunstancial. Los adultos deben
evitar el exhibicionismo de su cuerpo delante de los hijos.

Cuando los niños manipulan sus órganos genitales

Es frecuente observar a un lactante de pocos meses manipular sus


genitales como consecuencia del reconocimiento que hace de su
propio cuerpo. Esta experiencia produce satisfacción y debe ser
considerada normal como parte de su desarrollo. Cuando el niño
alcanza los 4-5 años también ocurre con frecuencia este hecho. Para
manejar esta situación los padres deben tener en cuenta evitar la
represión y el pánico. Por supuesto que esto debe tener sus límites.
Debemos evitar que esta experiencia ocurra en un lugar público, lo
que en tal situación podremos decir al niño que esto lo haga en casa.
Si este acto se realiza con cierta frecuencia, puede simbolizar
alguna frustración que el niño está tratando de compensar con
la gratificación que la manipulación de sus genitales produce.

Tocarse los genitales entre niños

En la infancia puede ocurrir la manipulación de genitales y las


exploraciones sexuales entre amigos del mismo sexo. Esto no signi-
fica una determinada orientación sexual ni posibles inclinaciones
homosexuales. Cuando es un hecho aislado, no debe alarmar más

-65-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

allá de la significación del interés que demuestran en este


aspecto de su vida.

Presencia de un embarazo en la madre

Un nuevo embarazo despierta interés y curiosidad en la concien-


cia del niño. ¿Cómo se trae un bebe? ¿Qué pasa dentro de la barriga?
¿Cómo saldrá de allí? Son interrogantes que emergen de la men-
talidad infantil. No debemos inventar fantasías sino responder pun-
tualmente sus dudas. Por ejemplo, si el niño pregunta qué hay en el
vientre de la madre, se deberá contestar que hay un bebe. Quizás no
sea necesario responder todo lo que sucede para que se produzca un
bebe. Para cada pregunta específica debe corresponder una respues-ta
igual y tal vez con una simple y sencilla respuesta podrá satisfacer por
el memento su curiosidad.

-66-
Masturbación

La palabra masturbación deriva del latín, masturbare, que signi-


fica procurar por sí mismo la satisfacción sexual, a través de la
mani-pulación de los órganos genitales y/o regiones erógenas. Las
activi-dades auto eróticas existen desde los primeros días de vida.
Ejemplo de ello es la succión del chupete o del dedo pulgar que
constituye una forma de placer auto erótico. Alfred Kinsey afirmó
a través de sus estadísticas que 9 de cada 10 hombres y 6 de cada
10 mujeres pasan por períodos que practican la masturbación. Son
diversas las formas de realizar este acto, entre las que se destacan:
1. Caricias o frotamientos de genitales utilizando manos
u objetos como almohadones.
2. Introducción de objetos en la vagina.
3. Juegos y fantasías sexuales individuales o compartidos,
utilizados como estímulo sexual.

Consideraciones históricas:

En algunos diccionarios la palabra onanismo figura como sinó-


nimo de masturbación. La palabra onanismo se origina en Onán,
un personaje bíblico que realizó un acto que en realidad no res-
pondió a lo que entendemos por masturbación. El texto bíblico
nos relata que la tradición judía tenía por ley cuando dos herma-
nos habitaban juntos y uno de ellos moría sin dejar descendencia,
la mujer del muerto debía tener descendencia con su cuñado y el

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

primogénito que de ella tenga debía llevar el nombre del hermano


muerto. Esta era la ley del levirato (del latín levir, cuñado), que orde-
naba que el hermano del que murió sin hijos se casase con la viuda,
así no se interrumpía la continuidad de la familia. (Deuteronomio
25: 5-6). El caso de Onán refiere que, al recibir el mandato de fe-
cundar a Tamar, la mujer de su hermano muerto se negó volcando
su semen en tierra y dice la Biblia que “El Señor se disgustó
mucho por lo que Onán hacía”. ¿Qué fue lo que en realidad
disgustó? Se ha interpretado este acto de verter en tierra como
sinónimo de mas-turbación. De las diversas interpretaciones
teológicas se concluye que la condenación no fue tanto verter en
tierra o de cometer un acto sexual sino la desobediencia de Onán
al mandato del levirato. Es decir, su negación y voluntad de no
querer dar descendencia a su hermano. (Génesis 38: 8-10). Su error
fue no obedecer la ley, no la de verter en tierra su semen. En
realidad, este no ha sido un acto masturbatorio, sino un coito
interrumpido con la intención de evi-tar la procreación.

Mitos y conceptos falsos acerca de la masturbación

La masturbación con frecuencia ha sido entendida como una


actividad patológica, enfermiza y vergonzosa. Su práctica se ha
aso-ciado con consecuencias que van desde trastornos físicos y
emocio-nales hasta la imposibilidad de establecer una relación
heterosexual satisfactoria en el futuro. Estos conceptos son tan
falsos como fre-cuentes. Los temores son múltiples y van desde
la aparición de oje-ras y de acné‚ hasta volverse ciego, sin pelo
en el cuero cabelludo o estéril.
La recriminación de esta práctica y los juicios que se emiten hacia
los adolescentes aún se puede seguir escuchando: En el varón, por

-68-
Jorge Patpatian

ejemplo: “Si te masturbas te vuelves tartamudo”, “te puedes volver


loco”, “no creces y te quedas petiso”, “eres un vicioso”. En la mujer
los mitos también ocurren: “vas a terminar prostituta, ningún hom-
bre te va a poder calmar”, “tu marido se va a creer que te estuviste
acostando con muchos hombres”, “se agranda la vagina y después
vas a tener problemas para tener hijos”. “eres una loca”.

Todos estos juicios y conceptos son falsos, y no hacen más


que generar incertidumbre, temor y complejos que los padres
debemos evitar. Por el contrario, nuestra intervención debe
contribuir para mitigar sus inquietudes y ansiedades.

Algunas consideraciones sobre la masturbación

Existen tres períodos en el desarrollo de la sexualidad en que


la masturbación es más frecuente.
1. Etapa de Lactancia. La manipulación de los órganos ge-
nitales puede originarse en forma accidental, percibiendo
una sensación agradable que tiende a repetirlo.
2. Etapa Preescolar. Entre los 3 - 5 años puede darse
también con frecuencia esta práctica.
3. Período puberal y adolescente.
Desde el punto de vista médico, el hábito en sí mismo no
produ-ce ninguna repercusión. La excepción a esta verdad es
que su prác-tica aún sigue ocasionando culpabilidad y ansiedad,
siendo esto la mayor consecuencia negativa sobre las personas.
En el entendido de ser una etapa transitoria, pasajera, salvo si-
tuaciones especiales no debe considerarse un acto patológico. Por

-69-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

lo tanto, los padres no deben tener una actitud punitiva frente a


este acto. Cuando un niño pequeño recibe esta prohibición, el
acto puede convertirse en un acto de rebeldía, oposición y
llamada de atención hacia ellos en el futuro. En algunos casos el
menor puede depositar en esta acción, su culpa, ansiedad y
evasión frente a sus frustraciones.
En el adolescente la masturbación también puede ser conside-rada
un acto a través del cual se liberan tensiones constituyéndose en
algunas situaciones una manifestación de conflictos, donde la práctica
actúa como alivio de cargas internas y se constituye en una “salida
limpia a sus tensiones”. Así el adolescente puede recurrir a esta
práctica en situaciones de estrés, depresión, aburrimiento y so-ledad,
presiones en sus estudios, conflictos con los padres, etc.
Helen Kaplan en su libro “La nueva terapia sexual” resume este
tema señalando que: “En realidad, la masturbación representa un solo
peligro: la culpabilidad y la vergüenza que sienten algunas per-sonas
debido a ella. Si un individuo se siente culpable por el hecho de
masturbarse, si ello le provoca un conflicto, si se preocupa por las
fantasías que acompañan a este acto, estos sentimientos negativos
pueden quedar asociados con todas sus ideas y emociones y esto,
evidentemente, no puede ser bueno para su vida sexual”.
Frente a esta situación los padres deben evitar el error de casti-
gar, asustar o amenazar al menor. En tanto que estas situaciones
pueden alterar su psiquis, una actitud comprensiva, que imparte un
clima de seguridad afectiva será un medio propicio para atravesar
este período sin mayores consecuencias. Por este motivo, cuando
sea posible, los padres deberían conversar este tema con sus hijos
ayudándoles a aliviar sus tensiones y angustias sobre esta práctica.

-70-
Abuso Sexual

El abuso sexual a un menor es toda forma de encuentro sexual


ejecutado por un adulto en posición de poder. Tiene como único
objetivo la utilización del menor para su gratificación sexual. Su
real significado es incomprendido por la víctima por su falta de
capaci-dad para consentir el acto al que está siendo sometido.
Es un atentado violento a toda la estructura emocional del
niño que, aunque aparente ser superado, es difícil su
cicatrización. En la mayoría de los casos el abuso no se revela.
La persona muere en el secreto.
Todo abuso sexual debe considerarse siempre una responsabili-
dad del adulto que lo comete. Los menores no están en condición
de maduración suficiente para saber con exactitud el significado y
las consecuencias que estos actos implican.
Los actos abusivos pueden ir desde formas menores de toca-
miento y manoseo hasta la violación y no son siempre producidos
por la fuerza. Los engaños, halagos, chantajes, amenazas, temores,
secretos, o cualquier otra forma de violencia psicológica, son
ejerci-dos con frecuencia por el abusador.
Según datos internacionales aportados por el Programa
Claves publicados en el libro Ingresando al Terreno de la
Esperanza, las estadísticas muestran que hasta un 40% de
menores han sufrido al-guna forma de abuso, predominando
las niñas en una relación de 2 a 1 sobre los varones.

-71-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Los padres deben estar alertas ante esta lamentable problemática


humana y advertir a sus hijos sobre el peligro del abuso sexual sin
crear desconfianza y falsos temores, siendo vital su prevención por el
daño emocional y psicológico que a largo plazo provoca.
La mayoría de los niños, no reciben información sobre la posi-
bilidad de ser víctimas de abuso sexual por parte de los adultos. Si
son advertidos la mayoría de los padres lo hacen en relación con el
cuidado que deben tener hacia los extraños. Sin embargo, las esta-
dísticas dan cuenta que son los propios familiares y allegados del
niño los que cometen los mayores atropellos. Es frecuente el abu-
so sexual dentro de la familia con familiares directos, padrastros u
otros parientes. Puede ser un vecino, niñero/a, profesor, etc. El
85% de los abusadores son conocidos por la víctima y el 95% de
los abusadores son de sexo masculino. Estos pueden hacer que el
niño se sienta temeroso y culpable por hablar y será difícil que se
abra el tema con libertad.
El abuso no es un hecho aislado. Deviene de una serie de conduc-
tas graduales y prolongadas en el tiempo. Las situaciones aisladas y
únicas ocurren ante extraños al niño y son los menos frecuentes.

Prevención

Una labor preventiva requiere que el niño internalice algunos


conceptos sobre sí mismo y los demás, que pasamos a destacar.
1. El niño debe conocer su cuerpo y sus regiones genitales
con sus nombres y terminologías correctas. Debe saber que
tiene partes íntimas o privadas. Enseñarles que las mismas
son las que están cubiertas por la ropa interior. Debe
aprender que las partes íntimas solo le pertenecen a

-72-
Jorge Patpatian

él. Nadie tiene derecho a tocar o realizar actos sobre él


que lo hagan sentir extraño y culpable.
2. Debe aprender a respetar a las demás personas, pero esto
no significa una obediencia ciega a la ejecución de actos
pedidos o solicitados por otros. Por esta razón, no debe-
mos enseñar a un niño que siempre tiene que hacer lo
que le ordene un mayor, la maestra, cuidadora o
cualquier otra persona. El niño también debe tener la
noción que hay adultos que no tienen una buena
conducta. Asimismo, debe aprender a cuestionar lo que
los adultos hacen por lo que será necesario capacitarlos
señalando que pueden existir adultos a su alrededor que
él conozca que quieran jugar o acariciar sus partes
íntimas y aprender a no ceder a estas invitaciones.
3. Los adultos no debemos decir al niño “eres un tarado” “no
sabes nada”. Esta es una forma de despreciar su valor como
persona. Si para los padres, lo que dice el niño no tiene im-
portancia, su autoestima será distorsionada y será difícil que
se abra ante una situación de abuso.
4. Enseñar al niño a expresar sus emociones libremente.
Aprender a discriminar aquellos que son ambivalentes.
Así ocurre en el abuso, donde se mezclan emociones
de placer con otros sentimientos extraños que lo
perturban. Estas emociones no deben estar en el
secreto, sino deben expresarse.
5. Los padres debemos estar preparados para escuchar en
forma adecuada. Debemos crear el ambiente para que
comente en forma inmediata todo acto que pueda hacer
sospechar algún tipo de abuso sobre su cuerpo. Para esto

-73-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

se requiere una actitud comprensiva, calma y sin


juicios ni prejuicios a la hora que el menor se abre
frente a estos temas.

Síntomas de abuso sexual

Los síntomas de abuso sexual en los niños están relacionados con


una variedad de sentimientos angustiosos que se expresan a tra-vés
del cuerpo y de sus emociones. Los siguientes síntomas, aunque no
son exclusivos del abuso, pueden encontrarse con frecuencia:

r Cambios de conducta. Debe hacer sospechar una situa-


ción de abuso, lo que no significa que sea la única causa.
r Culpabilidad. Es frecuente y aparece reforzado por las
si-guientes situaciones:
r Cuando hubo respuesta sexual al estímulo
provocado por el abuso.
r Por sentir que rompió la promesa de mantener el
se-creto del abuso.
r Por no haberlo dicho antes.

r Cuando existen reacciones adversas luego de


cono-cerse los hechos.
r Una baja autoestima está presente en el abusado y pro-
voca desconfianza, modificando sus conductas
sociales. Muchos se vuelven tímidos y apocados.
Puede llevar al autocastigo y la autoagresión,

-74-
Jorge Patpatian

r Sentirse dañado físicamente o miedo de tener un daño


futuro.
r Puede desarrollar retraimiento y desconfianza con los
adultos.
r Demasiado interés o por el contrario evitan todo lo
relati-vo a la sexualidad.
r Depresión, con o sin tristeza, llanto, trastornos del
apeti-to, alteraciones del sueño.
r No querer ir a la escuela y/o tener bajo rendimiento
escolar.

Signos físicos de abuso sexual

Los signos físicos dependen de la edad del niño y del tipo y fre-
cuencia a los que ha sido sometido. Algunos signos pueden ser:
r Ropa interior manchada o rota que no puede
explicarse por otra razón.
r Sangrados, fisuras en zonas erógenas.
r Signos físicos inexplicables.
r Conductas de regresión: Enuresis, Encopresis.

r Comerse las uñas sin haberlo hecho anteriormente.


r Olores extraños en la zona genital.

r Dolor en la vulva, pene o ano.

r Dificultad para caminar o sentarse.

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Consecuencias del abuso sexual

r Aceptación de la culpa por los hechos cometidos por


el abusador.
r Ocultar y mantener el secreto de lo que ha acontecido.

r Tendencia de protección hacia quien ha perpetrado el


hecho.
r Incapacidad de sentir placer por temor a que la
satisfac-ción devenga en tragedia.

r Disfunciones sexuales en el futuro.


r Miedo a intimar con otra persona
r Comportamientos compulsivos.

r Conflictos con su sentido de pudor y privacidad.

r Trastornos psicosomáticos.

¿Qué hacer cuando nos enfrentamos con un


niño abusado?
1. Debemos tener en cuenta que no es fácil para un niño
abrirse frente al abuso, producido por alguien que
segura-mente es querido por él o muy conocido.
2. Cuando el niño lo expresa, debemos afirmarle que hizo
bien en contarlo. En estas circunstancias, debemos
mos-trarle afecto, cariño y amor.

-76-
Jorge Patpatian

3. El enojo y la ira que el hecho produce a los padres no


debe ser dirigido hacia el niño.
4. Cuando los niños se animan a hablar sobre este tema,
salvo situaciones excepcionales no están mintiendo.
Debemos confiar en lo que dice. No debemos
responder con preguntas que ponen en duda lo que el
niño expresa. Por ejemplo: ¿me estás diciendo la
verdad o me estás min-tiendo? ¿Estás seguro?
5. El niño debe saber que no es culpable y no tiene respon-
sabilidad sobre lo que le ha acontecido. Incluso detrás de
este acto, un menor puede sentirse asustado por las ame-
nazas que el abusador le haya indicado y el chantaje
puede ser frecuente. Debemos sacar la culpa al niño y
expresarle que el responsable ha sido el adulto.
6. Se debe animar al niño para hablar libremente sobre la
situación que le ha ocurrido. Debemos estar
dispuestos a escuchar. Pero no debemos presionar
para que nos relate todos los detalles de lo sucedido.
7. No debemos recriminar al niño de por qué no lo contó
antes. Esta es una enfermedad secreta que se oculta por
mucho tiempo. Recordemos que muchos lo llevan consigo
a la tumba sin haberlo compartido nunca con nadie.
8. La respuesta que los padres damos ante sus declaraciones
es crucial para resolver la situación y mitigar las conse-
cuencias del problema. Una actitud comprensiva que no
añada vergüenza, culpa o castigo será más beneficioso. La
recuperación del niño también dependerá de la reacción

-77-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

que tenga el entorno familiar, del apoyo que reciba o


de las críticas o juicios que el niño perciba.
9. Se debe identificar el problema y terminar con el abuso y
el niño debe recibir ayuda y asistencia profesional.
10. Debemos asegurar al niño que se encuentra bien y no tie-ne
ningún trastorno físico. Es probable que se sienta daña-do,
enfermo o lastimado y una consulta con su médico o
pediatra de confianza será de alivio para el menor.
11. También los padres del niño necesitan ayuda. Sus ansie-
dades, temores y preocupaciones sobre los hechos cono-
cidos producen desequilibrios que no se deben descuidar.

-78-
Iniciación Sexual

Los padres debemos reflexionar sobre la iniciación sexual de


nuestros hijos y tener algunos conceptos claros. Una vez comenzada
la pubertad con la menarca en la mujer y la presencia de poluciones
nocturnas en el varón, ambos están físicamente aptos para comen-zar
su vida genital. Sin embargo, sabemos que el ejercicio de la se-
xualidad va más allá de la genitalidad y aquí encontramos algunos
inconvenientes para el ejercicio precoz de las relaciones sexuales.
Tradicionalmente la sociedad ha estimulado al varón para
que se inicie temprano porque “debe hacerse hombre” y
“demostrarlo”, “no sea cosa que se haga homosexual”. Además
“el varón debe tener experiencia”, porque la cultura del
machismo le ha impuesto tener la responsabilidad de hacer
docencia en el lecho conyugal. En cam-bio, cuando la mujer ha
demostrado experiencia la sociedad la ha condenado.
El varón ha tenido que pagar un alto precio para mantener
este mandato cultural. Cuando iniciaba su vida sexual, la
mayoría de las veces lo hacía con una prostituta. Esta
experiencia suele produ-cir tensión, ansiedad y apuro (y
seguramente también lo apurarán). En las mejores condiciones
el varón creerá que no solo él ha estado satisfecho sino también
su circunstancial pareja. Es probable que adquiera la idea de que
“todas las mujeres son así” y si no siguen su ritmo es porque la
mujer falla. Con estos conceptos acuñados es probable que
tenga dificultades sexuales en su futura relación de pareja.

-79-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Actualmente esta noción ha sido relegada por otra y aunque pa-


rezca menos nociva tiene también sus dificultades. Muchos adoles-
centes comenzarán sus experiencias sexuales con su pareja de turno.
Muchos jóvenes tienen el concepto de que practicar el sexo con una
trabajadora sexual es de tipo mercantil y no un acto amoroso. Con
frecuencia esto también sucede en forma prematura sin estar prepa-
rado para ejercer el acto sexual en las mejores condiciones. Es proba-
ble que el acto se realice en un lugar inadecuado sin la privacidad y
seguridad necesaria. Habrá también apuros, tensiones y seguramen-te
no faltarán los fracasos y la insatisfacción.
El ejercicio de la genitalidad que no está acompasado de respon-
sabilidad, compromiso y madurez suficiente es potencialmente ge-
nerador de consecuencias nocivas. El acto sexual es una expresión de
entrega, pasión y sobre todo un acto de amor por lo que necesita un
marco sólido para su plena realización.
Igualmente, muchos adolescentes tendrán relaciones sexuales
en forma precoz, por lo que debemos instruir acerca de la
prevención de enfermedades de transmisión sexual y de evitar los
embarazos. No somos partidarios de enseñar exclusivamente el
uso de preserva-tivos o de anticonceptivos orales y luego que
tenga relaciones sexua-les, cuando quiera, como quiera y con quien
quiera. Esta es una de las razones por las que las enfermedades de
transmisión sexual y los embarazos no deseados son cada vez más
frecuentes. Pero si esta lle-ga a ser su elección deberán prevenirse
más complicaciones. Muchos sostienen que se debe prodigar la
libertad sexual por derecho. Pero se olvidan de que la verdadera
libertad incluye no solamente la gra-tificación personal sino
también la libertad del otro y el de posibles terceros que pueden
surgir como fruto de esa relación y que también tienen derechos.

-80-
Jorge Patpatian

Hay motivos para orientar a los adolescentes a la abstinencia y


no estimular en forma precoz el inicio de las relaciones sexuales.
El ejercicio de una vida sexual segura, comprometida, fiel y
per-manente, condiciones que pueden desarrollarse sin límites
en el contexto del compromiso mutuamente consensuado, es el
camino ideal que debemos indicar claramente. Por este motivo,
ayudar a los adolescentes a posponer las relaciones sexuales
hasta que estén preparados y desarrollar en ellos actitudes que
sirvan de resistencia frente a la presión de sus amigos es un
trabajo que debemos realizar ya desde edades más tempranas.
Decir “no” a las relaciones sexuales y postergarlas puede llegar a
ser una decisión muy difícil para ellos. La presión de los amigos, el
bombardeo de los medios de comunicación masiva y los frecuentes
mitos sexuales que ha incorporado poseen en muchas ocasiones una
influencia negativa. El 73% de las chicas sexualmente activas y el 50%
de los varones, dicen que la principal motivación para tener su
primera experiencia sexual fue la presión de los compañeros.
Por esto, se hace necesario habilitar a los adolescentes para que
asuman una actitud más crítica frente a sus presiones ambientales. En
el siguiente capítulo compartimos un valioso material para for-talecer
a los adolescentes para decir “no” si aún no están preparados.

-81-
Como empoderar a los
adolescentes a decir “no” si no
están preparados para tener
relaciones sexuales

¿Cómo podemos ayudar a los adolescentes a fortalecer su


deci-sión para decir “no” si aún no están preparados?
Podemos pedir a los adolescentes que piensen cómo
responde-rían si alguien empleara los siguientes argumentos
para tratar de convencerlos de tener relaciones sexuales:
r “Si tienes relaciones sexuales, gozarás de más simpatías”

r “No tienes que estar enamorado/a para tener


relaciones; puedes tenerlas sólo por el placer físico.”
r Si no tienes relaciones sexuales, la gente pensará que
eres homosexual.”
r “Todos tienen relaciones sexuales. Tú también
deberías tenerlas.”
r “Debes tener tu primera relación sexual sólo para salir
de eso.”
r “¿Te han dicho tus padres que no tengas relaciones
sexua-les? Si los escuchas, tienes que ser un bebé.”

-83-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

r “No hay una buena razón para posponer las relaciones


se-xuales. Deberías tenerlas ahora.”
r “Si realmente me amaras, tendrías relaciones sexuales
conmigo.”
Cuando analice estas situaciones hipotéticas con los
adolescen-tes, usted puede ayudarles a reconocer lo siguiente:
r Las relaciones sexuales son una decisión muy personal.
La decisión de tenerlas o no tenerlas está únicamente
en ma-nos de cada persona. Nadie puede tomar la
decisión por otro.
r Es normal y natural desear ser amado, y es normal y
na-tural tener sentimientos sexuales. Los jóvenes
pueden decidir actuar basándose en sus sentimientos
sexuales o esperar.
r El acto sexual tiene consecuencias físicas y emocionales,
y no es la única manera de expresar amor.
r Existen buenas razones para posponer las relaciones
se-xuales. Es posible que deseen evitar un embarazo o
una Enfermedad de Transmisión Sexual (ETS), o que
simple-mente no estén preparados para tener
relaciones sexuales ahora.
r Los jóvenes no deben sentirse presionados a pagarle a
al-guien con relaciones sexuales por una invitación,
una co-mida o un regalo costoso.
r Es posible que otros adultos puedan ayudarles. Es
posible que los jóvenes quieran hablar con sus padres,
un docente o un líder religioso.

-84-
Jorge Patpatian

r Deben ser conscientes de que las películas, la


televisión, la radio o las revistas no siempre presentan
una imagen muy realista de las relaciones sexuales. Los
programas o los ar-tículos hacen hincapié en que las
relaciones sexuales son agradables, pero no siempre
explican las consecuencias de dicha actividad.
r No deben tomar decisiones acerca de las relaciones sexua-
les cuando han bebido alcohol o usado drogas, puesto que
estas sustancias dificultan pensar clara o racionalmente.
Para ayudar a los jóvenes a aprender a decir “no” a las relaciones
sexuales, usted puede animarlos a adoptar los cinco pasos siguientes
si alguien los presiona para que tengan relaciones sexuales:
Paso 1: Exprese claramente sus intenciones.
Paso 2: Diga “no” y determine el problema o la cuestión.
Paso 3: Diga “no” y determine las consecuencias.
Paso 4: Sugiera otras posibilidades
Paso 5: Impóngase.
Por ejemplo, si una persona propone tener relaciones
sexuales porque “todos lo están haciendo”, a continuación, se
propone lo que un joven podría responder:
Paso 1: “No, no quiero tener relaciones sexuales.”
Paso 2: “¡No! No todos están teniendo relaciones sexuales.
Algunas personas hablan de sexo, pero eso no quiere decir que
ten-gan relaciones sexuales. Algunas personas no dicen la
verdad acerca de sus experiencias.”

-85-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Paso 3: ¡No! Si tengo relaciones sexuales ahora, podría correr


el riesgo de un embarazo no planificado, de contraer una ETS o
el VIH. Un embarazo no planificado podría hacer que tenga que
dejar de estudiar. Una ETS podría causarme problemas de salud
graves. El VIH podría causarme la muerte.”
Paso 4: “Me voy a mi casa ya mismo”.
Paso 5: “No estoy preparado/a para tener relaciones
sexuales ahora.”
O, si alguien propone tener relaciones sexuales para que el
jo-ven o la joven le demuestre “el amor que le tiene”, se puede
decir lo siguiente:
Paso 1: “Te quiero, pero no estoy preparado/a para tener
relacio-nes sexuales.”
Paso 2: “No, si me amaras, te importaría lo que es
conveniente para mí.”
Paso 3: “No, si tenemos relaciones sexuales ahora correríamos el
riesgo de un embarazo no planificado o de una ETS.” Paso 4: “Hay
otras formas de demostrarnos que nos amamos. Hablemos de ellas.”
Paso 5: “Me importas, pero también me importa lo que me
pase a mí. Quiero esperar”.
Extraído y adaptado de la Guía para prestar servicios de salud
reproductiva a los adolescentes: Barbara Barnett- Jane Schueller.

-86-
La Educación Sexual en el
Sistema Educativo

Educación Sexual basada en la Perspectiva de Género

La Educación Sexual en el sistema educativo tiene a la perspec-


tiva de género como base fundamental de su marco teórico. Un
sistema de pensamiento que intenta deconstruir y transformar la
cultura y la sociedad a través de una manera distinta de ver la sexua-
lidad humana. Veamos algunas consideraciones sobre esta realidad.
Las teorías de género comienzan a conocerse a partir de la dé-
cada de 1960. En un principio, surge como una reacción de grupos
feministas frente a la problemática de la mujer en la sociedad.
Cuando esta teoría fue presentada en conferencias sobre la
mujer de las naciones unidas tuvo una gran aceptación. La idea de
género intentaba redefinir los conceptos femenino y masculino
respecto de identidad y roles, donde una de las mayores
propuestas fue la igual-dad y la lucha contra la inequidad sexual.
Esta reacción teórica vis-lumbró la posibilidad de dar solución al
problema de la inequidad de la mujer en la sociedad.
A lo largo de los años, han surgido diferentes visiones y énfasis
alrededor de esta ideología. Actualmente existen múltiples y varia-
dos matices que en su conjunto constituyen las teorías de género.

-87-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Lo cierto es que las ideas van más allá de la defensa


comprensible y justificada de la mujer. Se propicia no solo la
equidad de género sino la deconstrucción social de todo lo que,
según sus postulados, perpetúan una forma desigual e injusta.
Según estas teorías, la masculinidad y la feminidad no están
determinadas por el sexo biológico, sino por un condicionamiento
cultural. Como sabemos, el término sexo hace referencia a la natu-
raleza biológica e implica dos posibilidades (varón y mujer). En
tan-to que el término género proviene del campo de la lingüística
donde se aprecian tres variaciones: masculino, femenino, neutro.
Las diferencias entre el hombre y la mujer no corresponderían,
pues, fuera de las obvias diferencias morfológicas, a una naturaleza
“dada”, sino que serían meras construcciones culturales “hechas”
(¿Qué quiere decir género?, J, Burggraf, 2004:9).
Se postula que el género es lo adquirido. No existe una esencia
femenina o masculina natural. Y los roles y conductas que se es-
peran de cada uno han sido impuestos por la sociedad, pero que
debería ser una decisión libre y personal. Por lo que cada uno
puede elegir y construir su género no importa su sexo.
En este postulado la biología (el sexo) no ata al género. Esto sig-
nifica que no existe un parámetro social, cultural o moral (como la
sociedad pretende) que norme la conducta del varón o la mujer.
Todas las diversas apetencias y conductas humanas son per-
mitidas con esta visión ideológica. Solo la sociedad a través de la
cultura, la educación y la religión han normalizado una forma de ver
al mundo y a las personas y que ha llevado como consecuencia la
perpetuación de un androcentrismo que esclaviza, discrimina y
reprime a la mujer. Además de todas las otras formas de diversidad

-88-
Jorge Patpatian

sexual que no se pueden expresar libremente en la sociedad por


pre-valecer la heteronormatividad y por considerarse ésta como
pará-metro normal y normatizante.
Para poder cumplir con estos postulados y hacerse realidad
en la arena social se han marcado algunos objetivos:
1. Deconstrucción de las ideas hegemónicas. Dicho más
cla-ro, la destrucción de ideas hegemónicas, denunciando la
cultura imperante y persuadir a cada uno a creer que sus ideas
son cons-trucciones sociales equivocadas. Dos ideas
hegemónicas que serán necesarias derribar:
A. El poder y el control masculino sobre la mujer. La
idea del patriarcado y todas sus manifestaciones deben ser
totalmente derribados.
B. La heterosexualidad obligatoria. Es decir, forzar a las per-
sonas a creer que el mundo está dividido en dos sexos. Pero lo cierto
es que, si bien en muchas culturas la homosexualidad era aceptada, la
historia ha revelado la ponderación del matrimonio heterosexual, en
muchas tribus, civilizaciones, fiestas y celebraciones de muy di-
ferentes contextos, a la hora de pensar en lo que es un matrimonio.
2. Deconstruir el concepto de familia clásica y tradicional,
por ser enemigo de estas ideologías que apoya y perpetúa el
sistema patriarcal y heterosexual. Destruir el matrimonio natural y
elimi-nar las palabras, esposa, marido, madre y padre contribuirá a
que el mundo sea más justo. Eliminando también las celebraciones
tradi-cionales como el día de la madre.
Todo intento de mantener la relación de una mujer con un hom-
bre es perpetuar la opresión. La relación entre un hombre y una

-89-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

mujer es una lucha de clase y no es una complementariedad ni


un elemento de riqueza, realización y satisfacción humana.
Según esta ideología, el matrimonio es una institución opresora
inventada por el hombre y tener hijos esclaviza a la mujer.
3. Agresividad hacia conceptos religiosos. El objetivo es de-
construir la religión y sus fundamentos por ser la principal causa de la
opresión de la mujer. “nada ha hecho más por constreñir a la mu-jer
que los credos y las enseñanzas religiosas” “El fundamentalismo
religioso es una amenaza para la mujer” La religión es androcéntri-
ca”. Estas son algunas ideas que propicia la teoría de género.
4. Derechos sexuales y reproductivos. Fomentar la libre
elec-ción y derecho a decidir sobre asuntos de reproducción
(por ejem-plo, aborto a petición) y estilos de vida (promoción
de la homose-xualidad y otras conductas).
Habilitar el derecho a que las lesbianas tengan hijos por insemi-
nación artificial. Derecho a determinar la propia identidad sexual.
5. Sexualidad no determinada ni definitiva desde el naci-
miento. Los hombres y las mujeres pueden tener deseos sexuales
dirigidos a cualquiera, no necesariamente al sexo opuesto.
Según estas teorías el ser humano no nace con un deseo sexual
natural hacia el sexo opuesto, sino que también es producto del
con-dicionamiento de la sociedad. Así el deseo sexual puede
dirigirse a cualquiera, no necesariamente al sexo opuesto.

-90-
Jorge Patpatian

Discriminación: un hecho real

Vemos con preocupación que personas con esta amplitud de


expresiones en su sexualidad, son etiquetados y marginados en
la sociedad y en sus propias familias. Entendemos que esta es
una si-tuación injusta que lamentablemente la sociedad ha
propiciado a lo largo del tiempo y del cual es necesario cambiar.
Esto no está exento de consecuencias negativas para las perso-nas
discriminadas. La pobreza, los encuentros sexuales riesgosos, el
mayor índice de depresión y los intentos de suicidios de personas
homosexuales, transexuales y travestis, entre otros, se ven con más
frecuencia que en la población general. Por lo que nos enfrentamos
en general en estas situaciones a una conflictiva sicológica y social.
Pero no podemos dejar de mencionar que también vemos con
mucha preocupación que esta discriminación sea utilizada como
caballo de batalla para reivindicar derechos y censurar otras
formas de convivencia familiar tradicional y natural que fueron y
son el sustento de la humanidad a lo largo de la historia.
Particularmente hoy vemos la injusticia de una
discriminación en reverso. El que no está de acuerdo con estas
ideas es “crimina-lizado”, tildado de homofóbico y retrógrado.
No se puede pensar diferente. Quien entienda que la familia
natural, formada por un hombre y una mujer, es el ámbito más
beneficioso para los indivi-duos y la sociedad y quiera propiciar
esta enseñanza, probablemen-te, reciba el pago de la
discriminación. Una encrucijada de la que no será fácil salir.

-91-
El alcance de la perspectiva
de género sobre la educación
sexual

En los últimos años la perspectiva de género ha


desembocado en la Enseñanza formal a través de las Guías
Educativas de Educación Sexual dirigidas a docentes y alumnos,
que tienen la intención de promover una forma de pensamiento
ideológico, sesgado, avasallan-te y adoctrinador.
Ya no se puede contemplar con buenos ojos otra forma de
ver la sexualidad, la familia y el matrimonio fuera del contexto
ideológico del género, tildando a cualquiera que piense
diferente como homo-fóbico, retrogrado y anacrónico.
Llama la atención que un país laico y democrático en sus expre-
siones ideológicas no considere como válidas otras formas de ver la
sexualidad humana y así también lo comparta o divulgue con igual
fuerza. En la práctica, lo que sucede es que no se aceptan otras pers-
pectivas aun cuando los padres en su mayoría lo pudieran consentir.
Este tipo de docencia ideológica enfatiza algunos principios
basados justamente en estas teorías. Basados en estas teorías,
por ejemplo, ¿Cuáles son algunas de las enseñanzas que se
enfatizaran en la educación sexual?
1. Se enseña que la identidad de género es lo que la persona
siente que es, independientemente de sus genitales y carga

-93-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

cromosómica. Y que, por lo tanto, cada uno puede


elegir su identidad, siendo esta una decisión personal y
volun-taria que no depende del sexo que está
determinado en forma definitiva desde la concepción.
2. Enfatizar la enseñanza que la heterosexualidad es una de las
formas de orientación sexual, pero no la única ni la más
relevante para la humanidad. Por eso se exhibirán con de-
talles láminas donde se muestren imágenes de dos niñas o
dos varones besándose en la boca con la misma intensidad
docente y al mismo nivel que las parejas heterosexuales.
3. A los docentes se les exhorta a mostrarse lesbianas, gays,
bisexuales y transexuales, “saliendo de su armario” y que
hablen de sus parejas como lo hacen los heterosexuales.
Demostrando su alegría por tener estas identidades y
orientaciones, orgullosos por serlo, pero todavía discrimi-
nados por una sociedad homofóbica y retrograda.
4. Llama la atención que la educación sexual se base
funda-mentalmente en la lucha contra la transfobia y la
homo-fobia, más que en otros aspectos mucho más
importantes para la vida sexual del alumno.
5. Estos énfasis tan notorios en los objetivos docentes dan
la sospecha, según algunos analistas, que en el fondo se
quie-re transmitir es una verdadera “heterofobia”.
Impresiona que el mensaje final, lamentablemente, es el
rechazo a la heterosexualidad, más que la defensa y la no
discrimina-ción a las minorías sexuales.
6. Por medio de una crítica de los roles sexuales se pone en
evidencia una forma docente de transmitir el error de

-94-
Jorge Patpatian

toda diferencia entre varones y mujeres, ignorando aun


las biológicas, estimulando a la mujer a la liberación de
la maternidad y de las tareas denominadas hogareñas y
co-menzar a ocupar otros roles.
7. Este tipo de docencia tiene el potencial peligro de pro-
ducir un conflicto de orientación e identidad sexual,
que muchos no se plantearían si no fueran expuestos a
estos lineamientos ideológicos.
8. En el fondo nos parece que una generación de niños y
ado-lescentes está siendo forzada y “usada” a tener una
forma de pensar sobre su vida y su sexualidad de acuerdo
a obje-tivos e intereses ajenos al bien del menor.
9. Debemos preguntarnos ¿Qué habrá detrás de esto? ¿ será
ésta la mejor enseñanza para nuestros hijos? Los adultos
responsables ¿ tendremos la misma forma de pensar ?
10. Todas estas consideraciones nos obligan a tomar
posicio-namientos y un rol más activo en nuestra
responsabilidad como padres.

-95-
Mensaje del Colegio
Americano de Pediatría a
Directores de Colegios

En relación a la Educación Sexual basada en la perspectiva de


género, el Colegio Americano de Pediatras ha emitido una opinión
que nos parece importante de transcribir para esclarecer algunas
ideas adiciones. Transcribimos el comunicado textualmente:
El Colegio Americano de Pediatras comparte con usted, su
per-sonal, padres y otras organizaciones profesionales la meta
común de proveer un ambiente saludable a sus estudiantes.
Estamos muy preocupados porque en muchos casos los
esfuer-zos para ayudar a aquellos estudiantes que muestran
atracción del mismo sexo y/o confusión de género están
basados en información incompleta e incorrecta.
r ¿Cuáles son los hechos, basados en el conocimiento cien-
tífico, sobre el desarrollo de la atracción no heterosexual
y la confusión de género entre los jóvenes?
r ¿Cuál es el rol apropiado de la escuela en el trato con
los estudiantes que están experimentando situaciones
de des-orientación sexual y confusión de género?
r ¿Cómo pueden las escuelas ayudar de una manera mejor a
un estudiante y a su familia en relación con estos temas?

-97-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

La adolescencia es una época de agitación e inconstancia. Los


adolescentes experimentan confusión en muchas áreas, incluyendo la
orientación sexual y la identidad de género, y estos son particular-
mente vulnerables a las influencias de su medio ambiente.
Estudios rigurosos demuestran que la mayoría de los
adolescen-tes que inicialmente experimentan atracción
homosexual, o están sexualmente confundidos, no experimentaran
tales atracciones a los 25 años. En un estudio, un 26%, de niños
de 12 años reportaron no estar seguros de su orientación sexual.
Sólo un 2-3% de adultos se identifican como homosexual.
Por lo tanto, la mayoría de los jóvenes que cuestionan su orienta-
ción sexual en última instancia adoptan una identidad heterosexual.
Incluso los niños con Desorden de Identidad de Género (cuando
un niño desea ser del sexo opuesto) por lo general perderán este de-
seo en la pubertad, si este comportamiento no es reforzado.
Los investigadores, Zucker y Bradley, también establecen que
cuando los padres u otros permiten o estimulan a un niño a
comportarse y ser tratado como del sexo opuesto, esta confusión
es reforzada y el niño estará condicionado a una vida de dolor y
sufrimiento innecesarios. Aun cuando esto sea motivado por
intenciones nobles, las escuelas, irónicamente, pueden desem-
peñar un papel perjudicial si se refuerza este desorden. El tex-to
completo y original en idioma ingles puede encontrarse en
www.bestforchildren.org y en http://factsaboutyouth.com/ wp-
content/uploads/SuperintendentLetterC_3.311.pdf

-98-
Talleres sobre diversidad sexual
en escuelas públicas

A continuación, transcribimos del libro Temas de Sexualidad


desde una Perspectiva Cristiana, ( Editorial ACUPS, 2016) algu-
nos de los capítulos escritos por Gianella Aloise, como ejemplo
de lo que el sistema educativo hoy pretende impartir en los
centros de estudios.
El 12 de setiembre de 2013 el Semanario Búsqueda, publicó
en la página 15, una nota titulada “Niños de escuelas públicas
reciben talleres sobre la diversidad sexual y realizan afiches
contra la homo-fobia y transfobia”.
La nota explicaba que el 17 de mayo es el día de lucha contra
la homofobia y la transfobia.

-99-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

En ese marco más de 200 alumnos de 5º y 6º año de cuatro es-


cuelas públicas de Montevideo (Prado, Centro, y Punta Carretas)
recibieron diversos talleres sobre “diversidad sexual y género”.
Los talleres los brindaron estudiantes de la Facultad de
Humanidades y Ciencias de la Educación, integrantes del Programa
de Extensión Universitaria: Género, Cuerpo Sexualidad, siguiendo las
pautas del Programa de Educación Inicial y Primaria elaborado en
2008 por la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP).
(http://www.anep.edu.uy/anepdatosportal/0000005732.pdf)
Los niños realizaron afiches, 10 de los cuales fueron
presentados a partir del 13 de setiembre siguiente en una muestra
de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación.
Algunos puntos que me interesa destacar de la nota:

r El programa de Primaria (antes mencionado) llama a


“desnaturalizar” las construcciones culturales vinculadas
a los roles de género y cuestionar el rol de la escuela
“como agente de reproducción” de modelos existentes.
En las materias Ética y Derecho, algunas de las temáticas
abor-dadas son:
r Los medios de comunicación en la promoción de
modelos de orientación sexual

r La opción sexual: la tensión entre lo natural y lo


cultural r El derecho a la opción sexual
r Los derechos sexuales y reproductivos

-100-
Jorge Patpatian

La entrevistada en la nota, una estudiante de Ciencias


Antropológicas, que formó parte del proyecto, expresó: “es
mucho más fácil trabajar estas temáticas con los gurises que con
los adul-tos”. Dice que “a los niños les encantó” que sin
embargo “encontra-ron dificultad con las maestras, a quienes
‘todavía les falta bastante información’”.
El objetivo de estos talleres fue una reflexión crítica y
sensibiliza-ción acerca de la diversidad sexual.
Las etapas teóricas consistieron en:
1°. Shrek 3: Utilizaron escenas de esta película para abor-dar
el tema de forma “didáctica” (introducción del elemento
homosexualidad)
2°. Actividad plástica, haciendo referencia a noticias
sucedidas en Uruguay a partir del matrimonio igualitario y
cambio de iden-tidad; explicando a los niños de qué se trataba
el Día Internacional contra la homofobia y la transfobia.
3°. Se les propuso crear un afiche para intentar comunicar lo
que habían aprendido.
Asimismo, la nota informa que el Colectivo Ovejas Negras
ha-bía realizado a setiembre de 2013, 28 talleres a docentes
sobre temas de diversidad sexual.
El sábado siguiente a la publicación de la nota, por la
mañana asistí a la Facultad de Humanidades y Ciencias de la
Educación a ver la exposición.
Tomé fotos de la misma, algunas de las cuales se aprecian
aquí, y hacen explícito lo aprendido por los niños.

-101-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

No he podido dejar de pensar en las consecuencias que los


ta-lleres han tenido en la vida de los más de 200 niños, ellos
mismos han dibujado las imágenes que se pueden apreciar, y
han afirmado, como se aprecia a continuación, su identificación
tanto con la ho-mosexualidad, transexualidad, bisexualidad.
¿Qué consecuencias tienen estas afirmaciones? Es relevante
tener en cuenta lo que la Dra. Magdalena Hermida comparte en
este mismo trabajo( referencia al libro Temas de Sexualidad
desde una Perspectiva Cristiana), sobre la adolescencia, para
llegar a entender los efectos que pueden en es-tas vidas.

Contenido de materiales sobre educación sexual publicados


por la ANEP:
r HACE CLICK
http://www.uruguayeduca.edu.uy/Portal.Base/Web/Ver
Contenido.aspx?ID=217373
De acuerdo al portal de Uruguay Educa, “Hace click” “significa
un avance en los objetivos comunes de producir materiales educati-
vos que impacten en la formación de las y los docentes dedicados al
abordaje de la Educación Sexual en el sistema educativo nacional.”

Algunos textos del material: “¿Quién debe gustarnos según


los mensajes sociales?

-102-
Jorge Patpatian

Socialmente se cree que la única orientación del deseo “correc-


ta” es la heterosexual. Se marca así una pauta que no es válida para
todo el mundo. La tiranía de esta concepción excluye las vivencias
afectivosexuales, normales y saludables, de muchas mujeres y
hom-bres que sienten atracción, vinculación, enamoramiento hacia
otras personas de su mismo sexo o de ambos sexos
¿Alguna vez has sentido atracción, deseo de sentir placer con
otra persona, de sentirte acompañado/a, te has sentido enamora-
do/a de alguien, has querido crear proyectos con otra persona?
¿Cómo te sentirías si te negaran estas experiencias? ¿Si te desca-
lificaran por querer vivirlas con la persona que tú eliges? A muchas
chicas y chicos se les niega o descalifica sólo por querer compartir sus
experiencias sexuales con personas de su mismo sexo.
Lo fundamental es tener claro que tu vivencia sexual ha de ayu-
darte a resolver tus necesidades de intimidad y vinculación, y que
tanto la homosexualidad como la heterosexualidad y la bisexuali-
dad son opciones igualmente válidas, satisfactorias y saludables

r ¿QUIERES SABER MAS? – LA ORIENTACION


SEXUAL
Trabajar desde una perspectiva de diversidad implica superar
la consigna de la “tolerancia”, toleramos lo que nos molesta, lo
que nos incomoda, lo que difiere de nuestra manera de pensar.
Muy por el contrario, valorar lo diverso implica celebrar la
exis-tencia, expresión y reconocimiento de la diversidad, sin un
modelo desde el cual se define lo diferente. Todo tiene el
mismo valor y por lo tanto merece el mismo respeto
r MARCO CONCEPTUAL Y METODOLOGICO

-103-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

La heteronormatividad o la heterosexualidad obligatoria im-puesta


por el patriarcado utiliza diferentes mecanismos de dis-ciplinamiento
y agentes represores, marginalizan, invisibilizan, persiguen, generan
estigma y discriminación a aquellas prácticas se-xuales, formas de
expresión de la sexualidad, maneras de ser varón o mujer, identidades
sexuales y de género, orientaciones sexuales que no cumplen con el
módulo hegemónico de sexualidad.”
De Módulos Docentes, Modulo 1 - La educación sexual -
Marco Conceptual y Metodológico, pág. 19

-104-
Guía didáctica
Educación y Diversidad Sexual

La coautora Gianella Aloise del libro Temas de Sexualidad


des-de una Perspectiva Cristiana también realiza algunos
comentarios sobre las nuevas Guías de Educación Sexual que
nos parece oportu-no transcribir. Aloise dice:
En setiembre de 2014 un diario publicaba una nota bajo este
titular: “Políticas públicas, gobierno analiza serie de políti-cas
trans obligatorias para colegios” http://www.elpais.com.uy/
informacion/gobierno-analiza-serie-politicas-trans.html
A continuación, algunos detalles de las políticas:

r La eliminación de baños señalizados como


“hombre/mu-jer” y de uniformes según el género,
r Cambio de programas de biología y materiales de
lectura o juego para la primera infancia.

-105-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

r Formación obligatoria de docentes en diversidad sexual.

r Uso del Plan Ceibal para difundir “material sobre


diversi-dad sexual y derechos de las personas trans”
r Que los docentes “puedan expresar sus identidades y
se-xualidades libremente (porque) tener referentes
diversos ayuda a encontrar espejos en los cuales
encontrarse en la construcción identitaria”
r “Prestar especial atención a las instituciones de educación
privada y asegurarse de que den cumplimiento a las dis-
posiciones que rijan para todo el sistema educativo en
esta línea; ayudar a que los procesos aterricen en las
mismas y promover, si es necesario, medidas específicas
orientadas hacia estas instituciones”

r Que se reconozca el nombre “social” de las personas y


capacitaciones a docentes que “inhiban que el adulto
centrismo interfiera en el derecho de niños, niñas, ado-
lescentes y jóvenes de ser reconocidos como quieren
serlo, que sean respetados en sus pedidos sin
exponerlos frente a pares y familia”.
r “Revisar las prácticas de socialización de género en
educa-ción inicial y primaria, evitando la reproducción
de mo-delos hegemónicos de ser “niño” y “niña”
desde los juegos, materiales de lectura, cartelería, etc.”.
El 31 de octubre de 2014 se realizó la presentación de “Primera
Guía en Educación y Diversidad Sexual” (https://drive.google.
com/file/d/0B3xksL_pufurME00ck41NVdsRVk/view) en el
marco de las VIII Jornadas de Género, a la que asistieron docentes
comprometidos y motivados por una educación diversa, donde se

-106-
Jorge Patpatian

reflexionó en torno a la diversidad sexual y su abordaje en los


cen-tros educativos.
La guía consistió en un trabajo conjunto con el Ministerio de
Desarrollo Social (MIDES), INMUJERES, Red de género de la
ANEP, Dirección de Derechos Humanos, Programa de
educación Sexual de la ANEP y el Colectivo Ovejas Negras, en
la que promue-ven el respeto, la integración y la diversidad
como derecho funda-mental de la educación.
Está dirigida a docentes, maestros, educadores, y demás
referen-tes de la educación. Su finalidad es difundir, de manera
sistemática y ágil, una serie de recomendaciones prácticas de
cómo trabajar el tema de la diversidad desde una perspectiva de
derechos e igualdad en los centros educativos.

Contenidos

La publicación se encuentra dividida en tres partes, para su me-


jor abordaje: un marco teórico de la temática; una sección práctica,
donde se proponen diversos talleres para trabajar con los estudian-
tes; y por último diferentes materiales de apoyo tales como
gráficos, bibliografía, recursos multimedia y aspectos normativos.
La guía se nutre de los avances normativos que ha alcanzado
nues-tro país, como por ejemplo la Ley 18.104 de Igualdad de
Derechos y Oportunidades entre hombres y mujeres en la República;
la Ley 18.620 de Derecho a la Identidad de género y al cambio de
nombre y sexo en documentos identificatorios y la Ley 19.075 de
Matrimonio igualitario; que mandatan al Estado a garantizar la
igualdad de tra-to, oportunidades y derechos entre mujeres y varones.

-107-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

En este marco, la guía busca contribuir al reconocimiento,


in-tegración y respeto de la diversidad sexual en el ámbito
educativo como un derecho humano fundamental.
Por cierto, que estamos totalmente de acuerdo con el principio
de educación sin discriminación, por el cual toda persona tiene de-
recho a la educación sin discriminación, pero no sólo basada en la
orientación sexual y/o identidad de género.
Sin embargo, no estamos de acuerdo en los contenidos de
esta Guía.
En su prólogo se lee: “Consideramos que el ámbito educativo
es un espacio privilegiado para deconstruir estereotipos y
promover relacionamientos libres de discriminación”
Qué significa: “deconstruir estereotipos”? Su objetivo declarado
es que la actividad docente se oriente a “deconstruir” y “desnatura-
lizar” los modelos clásicos y mayoritarios de “masculinidad” y “fe-
mineidad” y las nociones tradicionales de “familia” y “pareja”.

Destaca la importancia que los docentes “puedan expresar sus


identidades y sexualidades libremente (porque) tener referentes

-108-
Jorge Patpatian

diversos ayuda a encontrar espejos en los cuales encontrarse en


la construcción identitaria”

Que se reconozca el nombre “social” de las personas y


capacita-ciones a docentes que «inhiban que el adultocentrismo
interfiera en el derecho de niños, niñas, adolescentes y jóvenes
de ser recono-cidos como quieren serlo, que sean respetados en
sus pedidos sin exponerlos frente a pares y familia”.
“Actividades propuestas para niñas y niños de 1º a 3º” (de
primaria)
“Objetivo específico: Reflexionar sobre los modelos de masculi-
nidad y femineidad construidos a lo largo de la historia personal de
las/os niñas/os para deconstruirlos y desnaturalizarlos.”

“Familias diversas, diversas familias”

“Objetivos específicos: Reflexionar acerca del modelo de familia


que las niñas/os tienen incorporado a sus emociones, sentimientos y
pensamientos. Promover la deconstrucción del modelo hegemónico
de familia y de pareja, valorando la riqueza de la diversidad.”

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

Actividades propuestas para niñas y niños de 5º y 6º

Dividir al grupo en subgrupos. Cada grupo sacará una


fotogra-fía de un sobre. En todas las imágenes aparece una
pareja besándose. Pág. 45 y 46
Proponerles que creen la historia de las personas que aparecen
en la foto, para luego contarla al resto del grupo. Sugerirles que
piensen en quiénes son, cómo se llaman, en qué trabajan, cómo se
conocie-ron, qué piensan y cómo se sienten en ese momento.
Sugerimos observar el link que contiene la guía: Cristina
Aguilera “Beautiful”, por Christina Aguilera. Discriminación,
diversidadhttps://www.youtube.com/watch?v=eAfyFTzZDMM
&list=TLt0Igi2lTSyPe4uFOzylWJLLG FVUYp&index=5
Es importante que padres o tutores tengan en cuenta que este y
otros son recomendados como materiales didácticos para sus hijos.

-110-
Respuestas y Reacciones

Transcribimos a continuación tres documentos sobre el conteni-


do de la Guía Didáctica Educación y Diversidad Sexual, realizados
respectivamente por el Consejo de Representatividad Evangélica del
Uruguay (CREU), por un grupo de padres de alumnos y otro de
docentes, dirigidos a las autoridades del Consejo Directivo Central de
la ANEP, que les solicitaban no autorizar la distribución de la Guía
en virtud de los fundamentos que se expresaban.

1. CONSEJO DE REPRESENTATIVIDAD
EVANGELICA DEL URUGUAY (CREU)

Señores Miembros del Consejo Directivo Central


de la Administración Nacional1. CONSEJO DE
REPRESENTATIVIDAD EVANGELICA DEL URUGUAY
Señores Miembros del Consejo Directivo Central de la
Administración Nacional de Educación Pública (CODICEN-ANEP)
Ref.: Educación y Diversidad Sexual - Guía Didáctica Por cuanto la
Guía Didáctica -Educación y Diversidad Sexual (en adelante ‘La
Guía’) pretende ser un insumo para los docentes de todos los
subsistemas de ANEP (Primaria, Secundaria, UTU y Formación
Docente) a la hora de tratar en los Centros Educativos la diversidad
sexual; siendo el CODICEN “la institucionalidad y, por ende,
garantía para padres y alumnos” y corresponderle entre sus
cometidos “definir las orientaciones generales de los niveles y mo-
dalidades educativas que se encuentran en su órbita”, dando certeza
en cuanto a que los materiales que llegan a esos Centros cuentan

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

con aprobación de carácter técnico, les solicitamos no aprobar


la distribución del referido material, en base a las
consideraciones y fundamentos que pasamos a exponer.

1. La enseñanza es laica - ‘La Guía’ no tiene que ver con li-


bertades individuales -de lo que cada persona hace con su
vida-, sino con lo que los docentes enseñan a los alumnos.
En nuestro país desde principios del siglo XX, la enseñan-
za es laica en el ámbito público. Esto implica que no queda
comprendida dentro de la función docente promocionar a
los alumnos sus opciones ideológicas, religiosas, políticas,
tampoco sus opciones sexuales, ‘saliendo del armario’ –
como propone ‘La Guía’; porque la función docente no
tiene que ver con el derecho del docente. Sí tiene que ver
con que el alumno (“sujeto de derecho”) sea respetado, no
discriminado en razón de las opciones de vida que realice

Promover la opción sexual de los docentes a sus


alumnos no está comprendido en la función docente.

2. Educación sexual libre de ideologías. Que el término


“educar” proviene del latín educa -re y significa dirigir, en-
caminar. Vemos con preocupación que los docentes asu-
man la responsabilidad de intervenir en la formación de
niños y adolescentes en un tema de tanta sensibilidad e
intimidad como la educación sexual. Vemos con mucha
preocupación que ‘La Guía’ presenta la Sexualidad y la
Diversidad bajo una clara perspectiva ideológica. Obliga al
docente a presentar una postura sesgada y no plura-lista,
descartando otros matices sobre el tema que son
tácitamente rechazados y discriminados por esta forma

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Jorge Patpatian

de enseñanza. Aunque no rechazamos la enseñanza de la


sexualidad en centros de estudios, la enseñanza ideologi-
zada del tema debe necesariamente estar reservada al
seno familiar, a los padres o quienes tengan el ejercicio
de la patria potestad y por lo tanto los derechos y
deberes que acuerda nuestra Constitución claramente en
su artículo 411, el Código Civil y las leyes en esa materia.
Que no vemos conveniente la intromisión del sistema públi-
co de enseñanza en la formación y orientación de valores que
son propios del ámbito familiar, sobrepasando la frontera de dar
información sobre un tema a la de subjetivar posiciones y
conductas, pudiendo ingresar en la generación de conf lictos
con posiciones religiosas o filosóficas de los padres, promovien-
do problemas en el seno familiar además de incitar a la discri-
minación o desprecio de otros ideales o concepciones de vida
que la mayoría de la población uruguaya sigue sosteniendo.
3. Conflictos familiares. La mayoría de la población sigue
practicando una forma de matrimonio, formado por un
pacto entre hombre y mujer que por amor y convicción
se expresan y prometen fidelidad mutua de por vida.
Entendemos que la sociedad en general tiene la certeza
de seguir viviendo esta forma de convivencia. Este
matrimo-nio es el único que puede concebir hijos en su
seno para así formar la familia, que incluso de acuerdo a
nuestra Constitución en el artículo 402 es presentada
como la base para nuestra sociedad.
Con el contenido de ‘La Guía’, gran parte de la sociedad nos sen-
timos discriminados, como un ‘estereotipo a deconstruir’. ¿Cómo
formar nuestras familias sin conflictos cuando en la enseñanza

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

pública ‘se puede’ (porque quedará librado a la voluntad de cada


docente) llegar a promover una ideología y en los hogares principios
y valores opuestos a aquella? ¿Cómo habremos de congeniar la obli-
gación que como padres tenemos de que nuestros hijos asistan a la
enseñanza primaria y media cuando transversalmente se implanta una
educación sexual opuesta a nuestros principios y valores? ¿No se está
vulnerando el derecho que consagra el último inciso del artí-culo 68
de la Constitución de la República?
Entendemos que debemos apoyar, motivar y afianzar con
respeto y cuidado, el desarrollo de nuestros hijos, hombres y
mujeres emocional, psicológica y biológicamente.
4. Nos preguntamos: - Si las Políticas Educativas del
Quinquenio con proyecciones mantienen una postu-ra
desde los Derechos Humanos, que implica por ejem-plo el
derecho a salud, en el sentido amplio que le da la
Organización Mundial de la Salud, salud social y mental
también, ¿se ha evaluado al redactar ‘La Guía’ en las alte-
raciones y patologías que se enmarcan en todo lo que tiene
que ver con sexualidad, desde lo social, psicológico, etc.?

Algunas alteraciones:
Introducir en el área cognitiva los conceptos de ‘La Guía’ pro-
ducirá una alteración severa en el niño y adolescente puesto que
además de provocar rupturas de los modelos instan al
desequilibrio personal siendo que si se plantea este modelo
innovador se debe-ría también plantear con tal claridad el modelo
“clásico”, que no se plantea, no se considera y se desecha.
En el área afectiva, la alteración de la construcción de la afec-
tividad como constructo psicológico siendo que se están desde la

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Jorge Patpatian

concepción construyendo vínculos paternales y maternales que


van delineando la masculinidad y femineidad desde lo orgánico,
pero también desde lo psico-social, desde la matriz del
pensamiento, como en el establecimiento de los vínculos.
En el área actitudinal se introducen elementos que debilitan
aún más en el alumnado la actitud frente al proyecto de vida,
todavía que debido a los aspectos generales de la postmodernidad
se han visto opacados... mucho más con estos aportes.
r ¿Si como claramente se ha manifestado en los medios de
comunicación, los docentes tendrán la facultad de com-
partir los contenidos de la ‘La Guía’ a sus alumnos o no
hacerlo, se está provocando distorsionamiento de las rela-
ciones sociales dentro de las instituciones educativas?

r Si ‘La Guía’ ha sido desarrollada sin el aval


institucional de CODICEN, como resulta de las
diversas notas de prensa, ¿qué formación han recibido
los referentes de sexualidad que la han redactado?
r Si otro organismo del Estado (MIDES) y una
organiza-ción de la sociedad civil están incidiendo en
la educación pública, se está atentando contra la
autonomía y cogobier-no de ANEP.
Por su solvencia y temas de Educación solicitamos
tengan en cuenta, al evaluar, la salud en sentido amplio de
nuestras futu-ras generaciones.
5. Objeción de conciencia en el ámbito educativo. En
tanto el contenido de ‘La Guía’ lleva implícito una for-
mación moral apoyada en una concreta ideología y an-
tropología con carácter adoctrinador, lo que implica una

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

intromisión del Estado en un ámbito que, como


señala-mos anteriormente, no le compete. Frente a ello
se justifica la objeción de conciencia de los padres,
titulares exclusivos del derecho a elegir la formación
moral de sus hijos, que esté de acuerdo con sus
convicciones religiosas, filosóficas y pedagógicas.
Por lo expuesto, a los Señores Consejeros, pedimos que: Se
desista del uso en los Centros Educativos de los contenidos de la
Guía Didáctica – Educación y Diversidad Sexual, suspendién-dose
en consecuencia su distribución en todos los subsistemas de
ANEP (Primaria, Secundaria, UTU y Formación Docente).

2. GRUPO DE PADRES DE ALUMNOS, CON


ENFOQUE EN LA OBJECION DE
CONCIENCIA Noviembre de 2014
Señores Consejeros del CODICEN (Consejo Directivo Central de
la Administración Nacional de Educación Pública) Por la pre-sente y
en nuestra calidad de padres de alumnos de los diferentes niveles
educativos de la Enseñanza Pública, hacemos llegar hasta Uds.,
nuestro descontento y oposición a la distribución de las Guía
Didáctica de Educación y Diversidad Sexual en todos los subsiste-
mas de ANEP (Primaria, Secundaria, UTU y Formación Docente)
por las siguientes consideraciones y fundamentos legales:
1) En primer lugar porque entendemos que existe una diferencia
entre los conceptos “educar” y “enseñar”; efectivamente el término
“educar” se refiere a un proceso de formación integral de la persona-
lidad del ser humano, de ahí que educar específicamente (en su sen-
tido más estricto) significa encaminar, dirigir, formar íntegramente

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Jorge Patpatian

a una persona para asegurar la formación y el desarrollo del ser hu-


mano, lo que adquiere su mayor importancia cuando nos referimos a
“educar a niños, adolescentes y jóvenes”, tarea que sin lugar a du-das
está asignada a LOS PADRES como referentes inmediatos y bajo los
cuales se encuentran legalmente esos niños, adolescentes y jóvenes,
situación natural que se da por pertenecer a la familia y que es
reconocida por la propia ley nacional e internacional, como lo es
nuestro Código Civil que recoge el instituto de la Patria Potestad que
es “el conjunto de derechos y deberes que la ley atribuye a los padres
en la persona y en los bienes de sus hijos menores de edad” (art.
252),y que será ejercida por ambos padres.
Es necesario destacar que este derecho de los padres sobre los
hijos menores de edad, es tan preeminente que se continúa ejercien-
do aún en el caso de separación o divorcio de los progenitores; y el
mismo Código Civil refuerza en el artículo 258 dicho derecho al
expresar que “Los padres dirigen la educación de sus hijos y los
representan en todos los actos civiles”, la propia Constitución de la
República (máxima ley del Ordenamiento Jurídico de nuestro país)
dispone en su artículo 41: “El cuidado y educación de los hijos
para que éstos alcancen su plena capacidad corporal, intelectual y
social, es un deber y un derecho de los padres….”, por citar al-
gunos textos legales que forman parte del derecho nacional. Pero
como expresamos antes, también los Tratados Internacionales que
fueron ratificados por nuestro país y por ende, forman el derecho
vigente y de aplicación obligatoria para todos los ciudadanos uru-
guayos, son muy claros en afirmar lo que venimos diciendo, así la
Convención sobre los Derechos del niño ( ley 16.137/1990 expresa
en el artículo 14 inc.2 “ Los Estados partes respetarán los de-
rechos y deberes de los padres y en su caso de los representantes
legales, de guiar al niño en el ejercicio de su derecho de modo con-
forme a la evolución de sus facultades; el inc.3 dice” La libertad de

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

manifestar la propia religión o las propias creencias, estará sujeta


únicamente a las limitaciones prescriptas por la ley que sean necesa-
rias para proteger la seguridad, el orden, la moral o la salud pública o
los derechos y libertades fundamentales de los demás”. Por su par-te,
la Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto San José
de Costa Rica ley 15.737/1985) en el artículo 12 inc. 4 mani-fiesta:
“Los padres y en su caso los tutores, tienen derecho a que sus
hijos o pupilos reciban la educación religiosa y moral que esté
de acuerdo con sus propias convicciones”. Hasta aquí hemos
citado algunos textos legales que son el fundamento para declarar que
los contenidos de la Guía de educación y diversidad sexual son
ilegales porque violan las leyes que amparan nuestro derecho como
padres a “educar” a nuestros hijos en el estricto sentido del concepto
como lo hemos expresado antes, y que una de las prioridades como
tales, es educar en valores.

Por otro lado, entendemos que el concepto “enseñar” se


refiere a impartir conocimiento, instruir, informar acerca de
datos, desarro-llar habilidades técnicas, y esta tarea sí debe ser la
labor del Estado, de donde se deduce que con la aplicación de la
Guía (llamada didác-tica y por lo tanto apta para “enseñar”), se
confunde la enseñanza con la educación y el Estado se abrogaría
para sí la educación, vio-lando las normas de carácter nacional e
internacional que de acuer-do a la mayoría de la doctrina
nuestra, los Tratados Internacionales son de rango superior
2) En segundo lugar también se viola la “laicidad” garantizada por
nuestra Constitución en el art. 5 y enunciada en los principios básicos
de la reforma educativa de José Pedro Varela y que consiste en
impartir “todas las ideas”, todas las filosofías, doctrinas, religio-nes
y/o creencias sin exclusiones dogmáticas, definición de laicidad que
recoge nuestra ley de Educación vigente (ley 18.437/2009) que

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Jorge Patpatian

en su capítulo IV bajo el Titulo “Principios de la Educación


Pública Estatal”, el artículo 17 expresa” El principio de laicidad
asegurará el tratamiento integral y crítico de todos los temas
en el ámbito de la educación pública, mediante el libre
acceso a las fuentes de información y conocimiento que
posibilite una toma de po-sición consciente de quien se
educa. Se garantizará la plurali-dad de opiniones y la
confrontación racional y democrática de saberes y creencias”
De lo expresado antes y si tomamos por válida la pretensión de la
Guía de confundir los conceptos de “educar” y “enseñar”, se estaría
ante una clara y manifiesta transgresión de la propia ley de Educación
Pública al pretender imponer una posición correspon-diente a una
ideología exclusivamente, perteneciente a un co-lectivo
sustentado en una ONG y que por su naturaleza, dicho
programa no pertenece a ningún Plan docente de la Educación
Pública…; por lo cual no estaría garantizando la pluralidad de
opiniones y la confrontación racional y democrática de saberes
y creencias de acuerdo a la ley.
3) En tercer lugar, como ciudadanos defensores del sistema
de gobierno democrático republicano y pluralista, no podemos
admi-tir que una “minoría” imponga una concepción individual
en un sistema de Enseñanza Pública ,en aras de lograr un
objetivo que no tiene en cuenta el interés general de la
sociedad (único fun-damento legal para ser privado del goce y
ejercicio de los derechos fundamentales como lo es la libertad
de enseñanza, de pensamien-to, de conciencia y libertad de
religión, consagrados en nuestra Constitución).
Reconocemos que en un sistema democrático como el nuestro el
gobierno elegido representa a la “mayoría del pueblo” y gobierna de

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

acuerdo a esa mayoría, respetando los derechos de la minoría


(por-que en eso consiste la verdadera democracia) pero no es
legítimo que la minoría o las minorías se impongan “doblando
la mano del gobierno” para obtener sus objetivos individuales.
4) Finalmente, queremos mencionar al respecto de la materia
“educación sexual” y de los contenidos de la Guía Didáctica de
Educación y Diversidad Sexual, que es comparable con la materia
llamada Educación para la Ciudadanía (EpC) que en España fue
implantada por la Ley Orgánica de Educación (LOE) del año 2006
y que diera lugar a un vivo debate social que se trasladó también al
ámbito judicial. La entrada en vigencia de dicha materia dio origen
a miles de “Objeciones de Conciencia” porque llevaba implícita
una formación moral apoyada en una concreta ideología y
antropolo-gía, con carácter adoctrinador, lo que implicaba una
intromisión del Estado en un ámbito que no le compete, y
justificó la Objeción de Conciencia de los padres, titulares
exclusivos del derecho (ampa-rados por normas de rango
superior) a elegir la formación moral de sus hijos que esté de
acuerdo con sus convicciones religiosas, filosó-ficas y pedagógicas.
Es de hacer notar que finalmente se logró poner fin a la asig-
natura en los centros educativos de España a comienzos del año
2012, dicha asignatura fue sustituida por el Ministerio de Cultura y
Educación por otra materia denominada “Educación Cívica y
Constitucional” libre de cuestiones controvertidas y no susceptible de
adoctrinamiento ideológico, según lo afirmó el ministro de di-cha
Cartera. Esto motivó que organizaciones y personalidades de todo el
mundo recibieran con beneplácito la noticia, y se espera que esta
noticia sea un precedente para todos los países en los cuales muchos
padres están viendo vulnerados sus derechos más caros, ya que se
trata de invalidar la transmisión de sus valores y/o creencias,

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Jorge Patpatian

derechos éstos que hacen a la dignidad humana proyectándose


en las generaciones futuras.
5) Como defensores también de todos los derechos humanos,
defendemos el derecho de Objeción de Conciencia como protec-ción
jurídica del derecho de “libertad de conciencia” que es un de-recho
fundamental, inalienable inderogable, imprescriptible, que se impone
por sobre los Ordenamientos Jurídicos de los Estados
La Objeción de Conciencia es un mecanismo útil de tutela de
las conciencias, participamos de la opinión de la doctrina que
sostiene que el obligado por una norma (ley, decreto, acto
administrativo o reglamento) que violente su conciencia individual,
podrá invocar la Objeción de Conciencia, aun cuando no esté
prevista en la ley, fun-dándose directamente en fuentes supra
ordenadas: Constitución, Derecho Internacional y principios
fundamentales del derecho, que constituyen el Bloque de
Constitucionalidad o Bloque de los Derechos Humanos que
tutelan la libertad de conciencia, de reli-gión y/o creencias
Por todo lo expuesto, solicitamos a los Señores Consejeros
que: Se cancele en forma definitiva la distribución de la Guía
Didáctica de Educación y Diversidad sexual.

3. GRUPO DE MAESTROS Y EDUCADORES

Montevideo, 1 de diciembre de 2014.


A las autoridades de CODICEN y ANEP:
A través de esta carta queremos expresar nuestra preocupación
y profunda tristeza ante la posibilidad de que se apruebe y sea dis-
tribuida por las autoridades de ANEP Y CODICEN la Guía de

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Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

diversidad sexual que redactó el grupo denominado Ovejas


Negras y Mides.
Como maestros y educadores que dedicamos gran parte de
nues-tra vida a enseñar no solamente conocimientos sino también
valo-res, queremos manifestar nuestra total desaprobación a los
conteni-dos de esta guía por los siguientes motivos:
1) Si observamos en la totalidad de sus páginas, no se educa en
sexualidad sino para fomentar y promover exclusivamente lo que
sus autores denominan y definen con la sigla LGBTI
(Lesbianismo, homosexualidad, bisexualidad, transexualidad,
opción trans e in-tersexual, página 11 de la guía) dejando de lado
por completo la opción de heterosexualidad. Es más, en varios
puntos de la guía se refiere en forma despectiva y con términos
que denotan desprecio al modelo de familia tradicional (Mamá /
mujer - Papá /hombre), cuestionando los valores de este tipo de
familia a la cual pertenecen la mayoría de los uruguayos.
2) Presenta casos y ejemplos que tienden a confundir por com-
pleto la mente de los niños y adolescentes: Uno de los casos que
se citan de ejemplo es el de un niño de 2 años llamado Pablo que
quiere ser niña, y a los 4 años lo asumen como niña cambiando su
nombre por el de Mariana y vistiéndolo como una nena. Nos
parece sumamente confuso que se tome este caso como un
ejemplo a seguir y promover, ya que solamente ¡TIENE 4 AÑOS!
Sinceramente nos cuesta entender cómo no son capaces de darse
cuenta de que esas actitudes lo único que apuntan es a la confusión
de alguien tan chiquito, y no solamente eso, sino que la intención es
tomar como un ejemplo a seguir algo tan incoherente como quitarle
la verdadera identidad y algo tan valioso como es su nombre.

-122-
Jorge Patpatian

3) Este material plantea situaciones y opciones que los


alumnos deberían evaluar en su juventud y edad adulta, cuando
tengan la madurez necesaria para decidir sobre lo mejor para
sus vidas y no en la niñez o adolescencia. Por favor pensemos
también en el impac-to psicológico que esta guía estaría
teniendo sobre nuestros niños y adolescentes.
4) No es tarea nuestra, de los docentes, inculcar ni
promover ningún tipo de opción sexual ni tampoco forzar a
nuestros alum-nos a que hablen y expongan algo tan íntimo
como es su sexualidad como promueve esta guía. Si se requiere
que seamos laicos, seamos laicos en todos los sentidos y
respetemos a nuestros alumnos y su privacidad.
5) No entendemos porqué y desde cuándo un colectivo
parti-cular tiene el derecho de redactar una guía y material con
el único objetivo de imponer sus opciones y formas de pensar a
los más dé-biles que son los niños atropellando por completo
su inocencia y la opinión de sus familiares.
6) La guía estimula a que los docentes homosexuales trans o
bi-sexuales den a conocer su orientación sexual y contar sus
experien-cias. Al leer esto no entendemos porque los alumnos
deben enterar-se de los gustos y opciones sexuales de sus
compañeros, maestros y profesores.
Consideramos nuevamente un atropello al derecho que
tienen los padres y tutores a elegir la educación de sus hijos y
que es men-cionada y contemplada en nuestra Constitución.
Por todos estos motivos queremos pedirles encarecidamente que
como autoridades NO APRUEBEN el uso y distribución de esta guía
en ningún centro de enseñanza y le queremos expresar nuestra

-123-
Rol de los Padres en la Educación Sexual de sus Hijos

total desaprobación a que se enseñen este tipo de contenidos en


NINGUN otro texto.
Desde ya muchas gracias y confiamos en su sentido común y
que en honor al amor y compromiso hacia nuestros niños y
adolescentes van a decidir lo correcto.
El CODICEN, por resolución del 24 de febrero de 2015, ex-
presó que él es responsable de definir las políticas y orientaciones
educativas en los niveles correspondientes, que tiene el deber de im-
plementar las acciones pedagógicas y didácticas para el desarrollo de
las políticas mandatadas por las leyes vigentes, entre las que se
encuentra la educación de la sexualidad y de la diversidad sexual, sin
perjuicio de ser garantía para todos los sectores y organizaciones con
demandas y expectativas razonables y legitimas en la materia.
Asimismo, resolvió crear una Comisión Técnica de Inspectores
de los diversos subsistemas del Ente con la finalidad de elaborar
una Guía de Educación y Diversidad Sexual, para su uso en los
centros educativos de la ANEP y adaptada a los distintos niveles
educativos y edades de los estudiantes.
Que la Guía a elaborarse deberá ser un instrumento eficaz
para desarrollar políticas activas de reconocimiento de la
diversidad se-xual, de respeto a la libertad de orientación sexual
y de no discri-minación ni trato humillantes de ninguna especie
en la materia. Que enfatizará como acción educativa el respeto
y consideración a la dignidad de todas las personas.

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Setiembre, 2019. Depósito Legal Nº 376.398/19
www.tradinco.com.uy

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