Contestacion de Agravios (Recurso de Casacion) Km51
Contestacion de Agravios (Recurso de Casacion) Km51
Contestacion de Agravios (Recurso de Casacion) Km51
000347-ORP1-2016-CV
DE LA REGIÓN AUTÓNOMA DE LA COSTA CARIBE NORTE (RACCN). EXCELENTÍSIMA SALA CIVIL DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA DE NICARAGUA. Yo, JUAN MANUEL ZUÑIGA AMADOR, mayor de edad, casado, Abogado
y Notario Público, con domicilio en esta ciudad de Bilwi, Puerto Cabezas, identificado con cédula de identidad número:
601-121279-0000C, con carné de la Corte Suprema de Justicia no. 11,601, ante usted comparezco y expongo:
I. ACREDITACIÓN Y REPRESENTACIÓN LETRADA. Tal y como he acreditado en cuaderno de segunda instancia del
presente asunto, demuestro ser APODERADO GENERAL JUDICIAL de los señores: BERNARDO VÍCTOR REYES
ÁLVAREZ, EVARISTO ÁLVAREZ GARTH, GERMAN ÁLVAREZ GARTH, SONIA ÁLVAREZ GARCÍA y CRUZ REYES
KIATH, de generales de ley y calidades que constan en autos y vecinos todos de la comunidad indígena de Yarawas
(también conocida como Km 51), Territorio Indígena Twi Waupasa, jurisdicción del municipio de Puerto Cabezas,
Región Autónoma Costa Caribe Norte, según consta en Escritura Publica número Catorce (14) PODER GENERAL
JUDICIAL, autorizado en la ciudad de Bilwi, Puerto Cabezas, Región Autónoma Costa Caribe Norte, a las ocho de la
mañana del cinco de octubre del año dos mil dieciocho, ante los oficios del Notario Marcos Clemente Funes Escobar,
testimonio que adjunto en original y fotocopias, para que al ser cotejada se me devuelva el original, por lo que desde ya
pido se me tenga como tal apoderado y se me otorgue la debida intervención de ley, en las presentes diligencias de
RECURSO DE CASACIÓN el que fuera interpuesto por la parte contraria representado por el Licenciado Julio Enrique
Rodríguez Castillo, según consta en diligencias del Asunto No. 000321-ORP1-2018-CO. II. NOTIFICACIÓN DE
ADMISIÓN DE RECURSO DE CASACIÓN. Que en fecha diecinueve de octubre del corriente año dos mil veinte a las
diez y cuatro minutos de la mañana, fui formalmente notificado del auto dictado por el TRIBUNAL DE APELACIONES,
CIRCUNSCRIPCIÓN DE LA REGIÓN AUTÓNOMA DE LA COSTA CARIBE NORTE (TACAN) el uno de octubre del año
corriente años dos mil veinte a las diez y veinticuatro minutos de la mañana, donde se Admite a trámite el Recurso de
Casación bajo los motivos fundamentados en el arto. 562 CPCN y que fuera interpuesto por el Licenciado Julio Enrique
Rodríguez Castillo, en su calidad de Apoderado General Judicial del señor Roberto Wilfredo Melgara Rugama, mediante
el cual Recurre de Casación en contra de la Sentencia No. 12-2020-CO, dictada por la Sala Civil del T ribunal de
Apelaciones, Circunscripción de la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte (TACAN) a las doce horas del dieciocho
de agosto del dos mil veinte. Auto dictado por Vos donde se me confiere el plazo de veinte días para presentar
contestación de los agravios presentados por el perdidoso; plazo esté que comenzó a correr desde el veinte de octubre
de los corrientes, fue interrumpido por Acuerdo de la Corte Suprema de Justicia No. 109 del tres de noviembre del
corriente año, donde se suspendieron todos los términos judiciales en la Costa Caribe Norte y Triangulo Minero por los
embates causados por los huracanes ETA e IOTA, y que posteriormente fueran rehabilitados mediante Acuerdo de la
Corte Suprema de Justicia No. 116 y que surte efecto desde el veintisiete de noviembre del corriente año dos mil veinte,
por lo que estando en tiempo y forma para la contestación de agravios ordenadas por vos, mismos que contesto de la
siguiente forma en el presente escrito. III. CAUSAS DE INADMISIBILIDAD DEL RECURSO, DE CONFORMIDAD CON
EL ARTO. 569 CPCN. Honorable Sala Civil, de conformidad con lo establecido en el artículo 569 párrafo segundo del
Código Procesal Civil (CPCN), el que a la letra dice: “… Dentro del plazo de veinte días, la parte recurrida podrá
exponer las causas de inadmisibilidad del recurso que considere existentes y contestará los agravios en el mismo orden
que fueron presentados. No se admitirá la adhesión de la parte recurrida al recurso de casación”. A continuación enlisto
y justifico las causas por las que considero que el presente recurso interpuesto por el Licenciado Julio Enrique
Rodríguez Castillo debe ser declarado inadmisible de mero derecho, mismas que son: Primero: El Arto. 563 CPCN
determina cuales son las resoluciones judiciales que son recurribles de casación y entre ellas se encuentran las
sentencias dictadas en segunda instancia, “Conforme la cuantía fijada por la Corte Suprema de Justicia” (Arto. 563 núm.
1) y el caso sub judice el recurrente en su interposición no presento ningún avalúo o forma de tasar el bien objeto de
Litis, a como lo estipula el arto. 393 num. 2, por lo que esta omisión procedimental incumple el Acuerdo CSJ No. 30 del
treinta de marzo del año dos mil diecisiete, el que define la cuantía de Juzgados Civiles, mismo que en su numeral 5
determina: “Los autos que pongan término al proceso y hagan imposible su continuación y las sentencias dictadas en
segunda instancia, no admitirán recurso de casación, si la cuantía no fuera igual o mayor a doscientos mil córdobas (C$
200,000.00). Dicha cuantía no aplica al recurso de casación por interés casacional”, ello de conformidad con el arto. 882
CPCN. Por lo que solicito: SEA DECLARADA LA INADMISIBILIDAD DEL RECURSO PRESENTADO POR EL
RECURRENTE. Segundo: El recurrente expresa en su recurso que la Sentencia No. 12-2020-CO (Sentencia por la que
recurre de Casación), le fue notificada el treinta y uno de agosto del año dos mil veinte (ver papel sellado Serie “H” No,
3332619, líneas 20-21), sin embargo en escrito presentado en ORDICE del Complejo Judicial de Puerto Cabezas por el
mismo recurrente el dieciocho de septiembre del dos mil veinte a las once y catorce minutos de la mañana (ver papel
sellado Serie “H” No, 3330594, líneas 11-12), expresa que dicha Sentencia le fue notificada el día nueve de septiembre
del dos mil veinte, HABIENDO AMBIGÜEDAD Y OSCURIDAD EN SU RECURSO y queriendo confundir a la honorable
Sala, y si nos atenemos a la literalidad de su dicho (de que fue notificado el treinta y uno de agosto del año dos mil
veinte) la interposición de su recurso fue extemporáneo, pues desde el treinta y uno de agosto (fecha en que le
notifican) al veintiocho de septiembre (fecha de interposición del recurso) han pasado más de veinte días. Por lo que
casación, con arreglo a lo establecido en este Código”. Así mismo el Arto. 563 CPCN expresa: “Solo serán recurribles
en casación los autos que pongan término al proceso y hagan imposible su continuación, y las sentencias dictadas en
segunda instancia en los siguientes casos:…” En dicha norma se estipula que el recurso debe interponerse contra la
resolución judicial dictada (autos que pongan fin al proceso o sentencias) y no contra el proceso, mucho menos sobre la
participación o no de las partes y menos sobre el hecho de si al recurrente le fue entregado copia de dicha resolución
que pretende impugnar. El recurrente en sus agravios 10 y 20 del presente recurso lo que mal debidamente reclama es la
participación de la Procuraduría General de la República (PGR) en las diligencias de Segunda Instancia, desconociendo
los Arto. 64, 67, 779 CPCN, PERO EL RECURRENTE NUNCA HACE REFERENCIA A LA SENTENCIA MISMA POR
LA QUE ESTA RECURRIENDO, dicho de otro modo no CONCATENO cuales Considerandos de la sentencia es
violatoria a los derechos que reclama (Sentencia que tiene XI Considerandos), por lo que su recurso ES
IMPROCEDENTE, IMPERTINENTE y carece de la Tecnica Procesal adecuada para recurrir. Por lo que solicito: SEA
DE AGRAVIOS PRESENTADO POR EL RECURRENTE. Honorable Sala, por mandato de Vos, contesto los agravios
de la siguiente forma: Con respeto al PRIMER AGRAVIO, lo contesto así: Sobre los motivos 1.1 y 1.2: Tal parece que el
litigante desconoce el actual Modelo de Gestión de Despachos Judicial que con eficiencia ha llevado acabo la
Excelentísima Corte Suprema de Justicia, modelo mediante el cual las sentencias son notificadas mediante cedulas, y
que en el caso de la Certificaciones y Ejecutorias de sentencias, se dispone del Acuerdo CSJ No. 400 del veintiséis de
agosto del año dos mil dieciséis que determina el procedimiento y el costo de certificaciones judiciales, por lo que no
hay tal vulneración del Derecho a la Defensa consignado en el Arto. 34 Cn y 8 CPCN, pues el litigante INCUMPLIÓ con
su obligación de presentar la boleta de depósito por Ciento cincuenta córdobas netos (C$150.00) en la cuenta en
córdobas del BANPRO No. 10010306171103 a nombre de la Corte Suprema de Justicia. Sobre los motivos 1.3 y 1.4: El
recurrente expresa que la familia Melgara posee dichas tierras desde el año 1935, sin embargo ni existe ningún
documento ni de primera o segunda instancia que prueba dicha aseveración. Por otro lado expresa que la Intendencia
de la Propiedad (IP) “brindo insumos para que para la inscripción [de la Escritura Publica número sesenta y nueve (69)
inscripción jamás mencionan la palabra: Propietario. En el cuaderno de primera instancia (folios 01 al 06) podemos
observar que el trasfondo y motivación de la acción del actor fue pretender reivindicar DERECHOS POSESORIOS, que
según el mismo actor, posee la familia Melgara sobre un bien inmueble ubicado en comunidad indígena como lo es la
comunidad de Yarawas (también conocido como Km 51) Territorio del Gobierno Territorial Twi Waupasa y basa su
acción en base testimonio de Escritura Publica numero sesenta y nueve (69) PROTOCOLIZACIÓN DE DOCUMENTO
Puerto Cabezas a las cuatro y diez minutos de la tarde del veintitrés de agosto del año dos mil once ante los oficios del
notario Kemil Evenor Coleman Alvarado, documento que inscrito el siete de septiembre del año dos mil once con el
numero:3470, Tomo: 021, Asiento: Primero (1) del Libro de Propiedades del Registro Público de Puerto Cabezas. De la
simple lectura del mismo encontramos que dicho documento: jamás se debió permitir inscribir, pues la Protocolización
de un Documento Privado no lo convierte en Público y no es posible abrir cuenta registral a menos que no sea a modo
de un título con características para tal. Nuestro Código Civil establece en el artículo 1447 C que: “La acción
reivindicatoria puede ser ejercida contra el poseedor de la cosa, por todos los que tengan sobre ésta un derecho real
perfecto o imperfecto como el del mero tenedor y otros semejantes”, en tal sentido y concatenándolo con lo estipulado
en los artículos 5 y 89 de nuestra Constitución Política, mismos que reconocen las formas de propiedad de las
comunidades de la Costa Caribe, así mismo desarrollado en el arto. 4 de la Ley No. 28, mismo que establece: “Las
Regiones en donde habitan las Comunidades de la Costa Caribe gozan, dentro de la unidad del Estado Nicaragüense,
de un Régimen de Autonomía que les garantiza el ejercicio efectivo de sus derechos históricos y demás, consignados
en la Constitución Política”, encontramos suficientes asideros legales para afirmar que los recurridos como miembros de
una comunidad indígena, como lo es la comunidad de Yarawas (conocido como Km 51), no son meros tenedores, ni
poseedores ni menos que hayan despojado al Actor de dicha parcela de tierra, pues los mismos son los LEGÍTIMOS
PROPIETARIOS, por así disponerlo disposiciones legales partiendo desde la Constitución Política de la Republica de
Nicaragua, La Ley No. 28, la Ley No. 445 y convenios internacionales de Derechos Humanos y de Derechos de los
Pueblos Indígenas, entre ellos: El Convenio No. 169 Sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes de
la Organización Internacional del Trabajo (OIT), suscrito el 27 de Junio del año de 1989 y debidamente ratificado por el
Estado de Nicaragua mediante el Decreto A. N. No. 5934, publicado en La Gaceta No. 105 del 04 de junio del año 2010
y la Declaración de las Naciones Unidas Sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, debidamente ratificada por el
Estado de Nicaragua mediante la Declaración A.N. No. 001-2008, publicada en La Gaceta No. 68 del 11 de abril del año
2008; dicho esté que demuestran FEHACIENTE, LEGAL Y EXISTENTEMENTE con el debido TITULO DE PROPIEDAD
COMUNAL No. 019-19-04-2013 extendido en debida forma y bajo el amparo de la Ley No. 445 por la Comisión Nacional
de Demarcación y Titulación (CONADETI), en esta ciudad de Bilwi, Puerto Cabezas, Región Autónoma de la Costa
Caribe Norte a los diez y nueve días del mes de abril del año dos mil trece, Titulo Real
debidamente inscrito el dos de agosto del año dos mil trece con el numero: Tres
mil novecientos trece (3,913), Tomo: Veintiséis (026), Asiento: Primero (1), del
según Diario número: Diez mil doscientos sesenta y siete (10,267), Tomo: Veinticinco (025), Folio: sesenta y cuatro y
sesenta y cinco (064-065), todos del Registro Público de la Propiedad Inmueble y Mercantil de Puerto Cabezas. Por lo
que no hay tal derecho violado a la Familia Melgara, ni se violentó el debido proceso, y menos que el Arto. 74 de la Ley
No. 698 ampare su derecho como proseedor. Sobre los motivos 1.5, 1.6, 1.7, 1.8 y 1.9: El litigante parece desconocer lo
preceptuado en el Arto. 68 CPCN (Intervención de la Procuraduría General de la República), el que a la letra dice: “La
Procuraduría General de la República siempre será parte en los procesos en materia de derechos fundamentales y
además, cuando en el procedimiento se tutelen derechos de los concebidos no nacidos, niños, niñas y adolescentes,
personas con discapacidad, personas declaradas judicialmente incapaces o quienes estén en situación de ausencia
legal”, desconociendo por tanto que la Procuraduría General de la Republica (PGR), es una institución del Estado de
Nicaragua con independencia funcional y tiene a su cargo la representación legal en lo que concierne a los intereses y a
las materias que la ley determine, en cumplimiento a los Artos. 89 y 99 Cn., por lo que no hay tal falla de forma, no hay
violación al principio de justicia rogada, no hay rompimiento de forma por la intervención de la PGR en las diligencias de
segunda instancia, toda vez que fue notificada de la sentencia, se le brindo intervención de ley y fue parte en las
actuaciones, en cumplimiento a su mando contenido en la Ley No. 411 Ley Orgánica de la Procuraduría General de la
República y la Constitución Política de la República, tampoco hay tal prueba ilícita a como el litigante expresa, primero
porque no se evacuaron pruebas en la segunda instancia, no se hace análisis alguno en la Sentencia recurrida y porque
la mera intervención de la PGR como procurador del Estado de Nicaragua, representando los intereses del mismo
Estado y de las Comunidades Indígenas para el cumplimiento de su mandato de ley y de compromisos internacionales
en materia de derechos humanos y de propiedad de grupos vulnerables como lo es las comunidades étnicas y
COLECTIVOS. SEGUNDO AGRAVIO, lo contesto así: Sobre el motivo 2.1 y 2.2: No hay tal violación al debido proceso
y en todo caso, la sentencia recurrida SI DISPONE de una fehaciente motivación jurídica, lo que si se encuentra en el
recurso presentado por el recurrente, es una mala actuación del recurrente, expresiones injuriosas al Estado y
República de Nicaragua, pues se lee en su recurso: “… fue conformada en los años ochenta, como producto del
operativo navidad roja que desplazo a los Miskitos de las márgenes del Rio Coco”… (Ver reverso del papel sellado Serie
“H” No. 3332620, líneas 01 a la 03), por otro lado en tono burlesco, bufón y de mofa, llama “Fantasma” a la honorable
Procuraduría General de la Republica (Ver reverso del papel sellado Serie “H” No. 3333386, líneas 24-26), estas
expresiones llenas de odio visceral al Estado de Nicaragua riñen con el Arto. 15 de la LOPJ y por ello pido un llamado
de atención el recurrente para que haga una disculpa en su próximo escrito o lo que su excelencia determine como
causal de suspensión. Sobre el motivos 2.3, 2.4 y 2.5: No hay tal transgresión al Arto. 31 Cn, pues al darle intervención
a la PGR en las diligencias de segunda instancia no se viola ningún derecho de la parte recurrente, no hay tal nulidad
por ello y no se viola su derecho a la defensa, y aunque el litigante menciona que en dicha propiedad objeto del proceso
la familia Melgara ha poseído desde el año 1935, no aporto ninguna prueba ni en primera o segunda instancia parta
probar su dicho, antes bien debió cumplir con la Jurisprudencia nacional, específicamente la Sentencia CSJ número 37
del veintiséis de mayo del dos mil cuatro de las nueve y treinta minutos de la mañana que dice: “La prueba por
excelencia de la ACTIO REIVINDICATIO es la prueba diabólica, prueba mediante la cual el que pretende reivindicar
debe comprobar no sólo que es dueño, sino además que sus antecesores tenían el dominio y el derecho de transmitirlo,
este Supremo Tribunal ha señalado que: “es necesario demostrar que aquél de quien ha adquirido el comprador era
realmente el propietario del inmueble; y aunque se demostrase esa circunstancia; se necesita probar también que el
vendedor anterior era igualmente propietario, y así sucesivamente, porque el que no tiene el dominio de una cosa no
puede transferírselo a otro, NEMO PLUS JURIS IN ALLIUM TRANSFERRER POTEST QUAN IPSE HABET”. Cosa que
el litigante nunca observó y por ello su acción debe de ser desestimada en casación y confirmar la Sentencia No. 12-
2020-CO, dictada por la Sala Civil del Tribunal de Apelaciones, Circunscripción de la Región Autónoma de la Costa
1. Se me tenga como parte en las diligencias de Casación, en mi calidad de APODERADO GENERAL JUDICIAL
de los señores: BERNARDO VÍCTOR REYES ÁLVAREZ, EVARISTO ÁLVAREZ GARTH, GERMAN ÁLVAREZ GARTH,
2. Que en mi calidad referida, se me otorgue la debida intervención de ley que en derecho corresponde, en
3. Que se admita el escrito de Contestación de Agravios del recurso de Casación presentada contra la Sentencia
No. 12-2020-CO, dictada por la Sala Civil del Tribunal de Apelaciones, Circunscripción de la Región Autónoma de la
Costa Caribe Norte (TACAN), pues considero haber cumplido con los requisitos de ley.
4. Que de conformidad al Arto. 570 CPCN, por contestado los Agravios del recurso interpuesto, sea remitido el
expediente a la Honorable Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia para lo de su cargo e inicie el plazo para el
5. Que habiendo llegado los autos a la Honorable Sala Civil de la Corte Suprema
POR
LAS CAUSALES QUE EXPRESO EN EL PRESENTE ESCRITO, por tanto se confirme la sentencia recurrida y se
6. Que mediante un fallo razonado SE CONFIRME EN SU TOTALIDAD la Sentencia No. 12-2020-CO, dictada el
dieciocho de agosto del dos mil veinte a las doce horas del mediodía, por la Sala Civil del Tribunal de Apelaciones,
7. Que mediante un fallo razonado SE FALLE QUE NO HAY NULIDADES QUE DECLARAR en la Sentencia No.
12-2020-CO, dictada el dieciocho de agosto del dos mil veinte a las doce horas del mediodía, por la Sala Civil del
8. De conformidad a los artículos 221 y 222 CPCN, SOLICITO que la PARTE RECURRENTE EN CASACIÓN SEA
CONDENADA EN COSTAS, hasta por el VEINTICINCO POR CIENTO (25%) del valor de lo litigado.
Así dejo expresado las causas de inadmisibilidad del presente recurso de Casación contra la Sentencia No. 12-2020-
CO, dictada el dieciocho de agosto del dos mil veinte a las doce horas del mediodía, por la Sala Civil del Tribunal de
Apelaciones, Circunscripción de la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte (TACAN), y la Contestación de los
VI. NOTIFICACIONES. Señalo lugar para recibir notificaciones, mis siguientes direcciones: En la ciudad de Managua:
en la siguiente dirección: Barrio La Fuente, del PALI cuadra y media al norte, en la Oficina de Leyes de la Lic. Yamileth
Salmerón. Así mismo al correo electrónico: jumaza79@gmail.com. En la ciudad de Bilwi, Puerto Cabezas: en la
siguiente dirección: Barrio Libertad, frente a la entrada principal del mercado San Jerónimo. Bilwi, Puerto Cabezas,