Santivañez, Roger - Santificado Sea Tu Nombre. Poesía Reunida

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ROGER SANTIVÁÑEZ

SANTIFICADO SEA TU NOMBRE

[POESÍA REUNIDA 1977-2017]

EDICIÓN Y PRÓLOGO DE ALEX LIMA


ÍNDICE

Poema 7, Mariela Dreyfus 13


Misa calata: Poesía reunida de Roger
Santiváñez, Alex Lima 14

ANTES DE LA MUERTE 21
Martín Adán/Oda
Las persianas
Las armas perdidas
La batalla
SOLEDADES
I. Piura
II. Piura
Alejandro/el tío
TRES POEMAS PARA DESCIFRAR
I. La sombra se veía
II. En el taller
III. Ejercicios espirituales
En el tiempo
Homenaje a Ernesto Che Guevara
Del reparto
Canción para Aicamlad
Poema al desierto
Estudio de poesía

HOMENAJE PARA INICIADOS


Conversación con mi padre en su lecho de
enfermo
Homenaje para iniciados
CH
Cuando principia el invierno
Cómo escribirte el poema
Para escribirte un poema de amor
No me habría provocado escribir
Muchachos echados en 2 camas paralelas
Escribo sobre papel rayado
Escrito en la oficina
Rimbaud en Abisinia

EL CHICO QUE SE DECLARABA CON


LA MIRADA
1.

3
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.

INSANE ASYLUM
Sobredosis
Chicas
Luis Hernández Ludik
Ars Poeticae
Dos textos
Final
Noticia

SYMBOL
I. PODER
Odio
Soledad
Pueblo
Guerra
II. MATAR
Deseo
Solución
Triunfo
Liberación
III. IMAGINAR
Sucumbir
Delirio
Viaje
Aventura
IV. ALLUCINAR
Placer
Alegría
Risa
Paz
Colofón

COR CORDIUM
1.

4
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
Envío

LAUDERDALE
LAUDERDALE
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.

SANTA MARÍA
Kilowatt / Pase a la gloria
I.
The House of Santa María
Piura, 1967
Twilight
Corazón de durazno
Dos Patios
Matinal
Las cosas
Colán
La lata china
La víspera
II.
Antero & el USI
La chica Furuno

5
Diabla García
III.
Dos Santos
1. Loli
2. Yovera
Lectura Final

EUCARISTÍA
Sajonia
1.
2.
3.
Cántico
1.
2.
3.
4.
5.
Eucaristía
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10 .
11 .
12 .
13 .
Adonáis
1.
2.
Lúdica
Bordado de encaje
Lied
1.
2.
Gema
Egus

AMASTRIS (2007)
La insolación interior

6
1.
2.
3.
4.
5. (Perfecto mediodía)
Sub Nocte
1.
2.
BERRUECOS SUDACAS
Estigia
Icono
Gate
Yardbird
Pastoril
Muerte de Luzmila
Triángulo isósceles
Venado asesinado
Oro peinado
Amastris
Ars poetica

LABRANDA
HALL
Sretti
1.
2.
1. WINTER
Sandie & Lucy
Snow Snob
Modesto Garage
1. Agenor
2. Ángel (a)
Aglae
2. SPRING
Camotal
1.
2.
Almost Olmos
1.
2.
Oscila ya
Es pesar
Costumbres indígenas
1. Chucaque
2. Verano colonial
3. Villacampa

7
3. SUMMER TIME (CANON MISSAE)
Labranda
1.
2.
3.
4.
5. (Ideología Marina)
Portrait of Lady (Kathy en Ocean city)
Myrtho
1.
2.
Piscina Roberts
1. Nimpha
2. Estío
Inter Densas
1.
2.

4. AUTUMN
Jazmín
Trinitras Fabricatrix
1.
2.
Adorno Bosqueto
1.
2.
Delicias Domine
1.
2.
Piurensis Solis
Nobile castello
Once again
1.
2. (Memoria)
3.
Homenaje a Ezra Pound (Ars poetica)
Loca Montis

AMARANTH
Concepción
1. Estación
2. Rimac’s lumpen
3. Saint Peter’s Beach, wake up
Sacra privata
1. Infancia
2. Ancestro

8
3. Carretera a Sullana
Amaranth nyz
1.
2.
3.
Un oscuro dulce limano (Homenaje a Pablo Guevara) 110
1. Grifalta
2. Tamales calientes
3. Centro de Lima
4. Pueblo Joven
Ornamento funerario
1. Camiche
2. Ringo
Cinco estudios
1. Gloria
2. Mitylene
3. Trisagio
4. Estudio de unos labios
5. Estudio de unos ojos
Rivolti al monte
1.
2.
3.
Valmar
1.
2.

ROBERTS POOL CREPÚSCULOS


I. ROBERTS POOL CREPÚSCULOS
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
14.
15.
16.
17.

9
II. DANTE'S READING
1. Plegaria
2. Aganipe
3. Hipokrene
III. FINAL AUN
1. Little Winter
2. Canorum ver novum

VIRTÚ
I. SEA ISLE
1.
2.
3.
4.
5.
II. DOLOR
1.
2.
3.
4.
5.
III. ROMA
1.
2.
3.
4.
5.
IV. ROBERTS POOL [SEGUNDA ESTACIÓN]
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
V. OCEAN CITY
1.
2.
3.
4.
5.
6.
VI. PISCINA ROBERTS [SEGUNDA ESTACIÓN / VUELTA]
1.
2.
3.
4. Campos de Penn, desde un Greyhound

10
5. Durante

VII. EPÍLOGO / HOMENAJE A JOSÉ MARÍA


EGUREN
A la manera de JM Eguren [Erotizado]

SYLVA
I. COOPER RIVER ORILLAS
1. [Dríades]
2. [Hamadríades]
3. [Helíades]
4. [Dirce]
5. [Ixotta]
6. [Dinámene]
7. [Nise]
8. [Climene]
9. [Sandy]
II. SUMMERTIME
Eros
1.
2.
III. AUTUMNALES
1. [Huerta]
2.
3.
4. [En el día que murió Antonio cisneros. Homenaje]
IV. PEQUEÑAS PLAYAS
1.
2.
3.
4. [Día de Acción de Gracias]
5.
6.
7.
V. RAVEN HILL
Introducción
1.
2.
3.
Ravenhill Mansion / 4
Sonetti / 5
6.
7.
Mansion Inside, again / 8
9.
10.

11
VI. HOMENAJE A JOSÉ MARÍA EGUREN
Homenaje a JM Eguren [Con sus propias
palabras]
VII. ITE MISA EST

NEW PORT
LA TABA TÓXICA [HOMENAJE A ANTONIN
ARTAUD & WILLIAM BURROUGHS]
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.

ASGARD
ASGARD
1.
2.
3.
4. [Poclús]
5. [Damozel]
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
Vessica Piscis
1.
2.
3.
4.
Barmos
1.
2.
3.
4.
Discurso del cristal agudo [Homenaje a
Gerardo Deniz in memoriam]
1.
2.

12
BALARA
I. POMEGRANATE
Santidad
1.
2.
3.
Modificación de las nubes
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
II. POMPA
El fulgor fugaz
1.
2.
3.
4.
Mar-nan-otha
1.
2.
Poesía en forma de rosa
1.
2.
III. DROMENA
Poluphboisbos
1.
2.
3.
Marecchia [Tema & variaciones]
1.
2.
3.
4.
Madrigal
1.
2.
Hortulo
1.
2.
Marigold
1.
2.
3.

13
4.
IV. EPIFANÍA
Theoreia
1.
2.
3. [Homenaje a Eielson 90]
Dos Ars Poéticas
1. La forma de la playa
2. La forma de la piscina

POEMAS NO RECOGIDOS EN LIBRO


La canción del amor / Ligeras huellas
de Martín Adán
Canción
Poema
Sissi Heart
Las estaciones
1971 / Elegía del barrio
Los incipientes
Lima
Baja presión
Estudio a Ginsberg
Atleta
1975
Simpatía por Michaux
Mujer-niña
Reflexiones junto a la tumba del Loco
Vicharra
De Reyes en el caos
Obreros guerrilla es tu camino
3x6
Primera muerte
Poema para Abraham Valdelomar
Pound / Frazer + Piura (Get Back)
La forma del corazón (Ex abrupto en
blue-jean)
En las zanjas cavadas del asfalto
Elogio
Cor Cordium
Oración x Pamela
1.
2.
La pasión según San Tiváñez
1.
2.
3.

14
Quíntuples
1.
2.
3.
4.
5.
Ode
El perfume del jazmín
Piura revisitada
1. La Plaza Pizarro
2. La sala
3. El árbol de Panamá
4. San Teodoro
5. Pamela
6. San Pedro
Una fecha
Postal
1.
2.
3.

POEMAS ENCONTRADOS

HEARTBREAKER
Marianne
Simpatía por la nada
1968
Un poeta inédito
Michaux
Muerte de la pureza

DOS HALLAZGOS
San Pedro nunca vuelto a visitar
A la manera de un poema de Apollinaire
1.
2.

15
POEMA 7

Roy empieza a loquearse con los seis siempre


buscando alianzas sorpresivas un sitio que
nos guarezca a todos un empíreo de palabras
y sonidos rebotando de los acordes de su
guitarra eléctrica al cielorraso de la habitación
o retumbando al interior del auto en el garaje
donde nos esconde luego de recogernos de la
esquina para leernos versos terribles como
ángeles y luego sale la tía anciana a espiarnos
nos toca la puerta que lleva al resto de la casa
invadida de nuestros ritmos tensos filamentos
de una locura que se desborda por las teclas del
piano de Lennon o de Mingus oímos la estridencia
vamos también leyendo en pleno a Artaud cuando
la vieja tía en bata de florones nos exige silencio
pero ya somos siete conmigo acomodados tres
adelante cuatro atrás sobre el tapiz rojo del
Taunus Siena David Gonzalo Pomar Alberto
Roy y yo hemos firmado un pacto nos amamos.

[Mariela Dreyfus, La edad ligera]

16
MISA CALATA: POESÍA REUNIDA DE ROGER SANTIVÁÑEZ

La experiencia de leer el corpus poético de Roger Santiváñez se asemeja a la sensación que tenemos
al contemplar la fachada de la Catedral de Salamanca, con su exceso ornamental, sus enredaderas
redundantes, con su collage de motivos clásicos a la par de motivos añadidos en cada etapa de
restauración es decir, en cada etapa de renovación del lenguaje. Se podría decir que el exceso
sinestésico de la poesía de Santiváñez representa de igual manera un reto al silencio, al temor de
dejar las cosas entredichas, para evitar que de una grieta se produzca un agujero negro que nos
succione en el vacío del olvido.
Con la publicación de Antes de la muerte (1979) nos adentramos a esa catedral, a esa
edificación berraca y barroca que es la obra poética de Santiváñez, serenos y dispuestos a confesar
nuestras transgresiones con el anhelo de alcanzar una renovación del espíritu a partir de la
desintegración del lenguaje. En esta temprana obra detectamos residuos del tono confesional
hispanoamericano aunque se distancia de lo coloquial y de la poesía social para dar prioridad a la
belleza del lenguaje, a la melodía verbal, a la musicalidad característica de casi toda su obra. En clave
de poeta maldito, la oda a “Martín Adán” ilustra este estado de angustia y contemplación del terreno
baldío donde un muchacho gritaba “Decadencia Decadencia / Yo escuché decir El mundo qué es esto
/ y por la noche brotaron los disparos y las ratas / lamían los bellos cuerpos muertos”. La lírica de
Santiváñez es esencialmente una poesía urbana que se retroalimenta continuamente de la literatura
clásica así como de la lengua de germanía o lumpen, con el objetivo de contrarrestar la violencia en
todas sus manifestaciones “entre tierras desconocidas y países / que a veces se parecen a la muerte o a
la voz de las / ametralladoras”.
Antes de la muerte representa también una suerte de glosario poético, ilustrado con motivos
de la infancia, elementos recurrentes en casi toda su obra posterior: el algarrobo, el tamarindo, los
chilalos, el padre, la madre, el hermano, las muchachas de éter y la locura. En el imaginario poético
de Santiváñez existen dos puntos de referencia inamovibles, correspondientes a su adolescencia en
Piura y su traslado a Lima para continuar con sus estudios en la Universidad de San Marcos.
Concebido a orillas del río Rímac, Antes de la muerte es una reflexión de esos años formativos
aunque sin llegar a caer en la trampa idealizadora del terruño natal. En este constante vaivén espacial
detectamos también recursos y estrategias que informarían su obra posterior: el verso gongorino, el
desplazamiento onírico lezamiano, la multiplicación fantástica cortazariana y la mitificación lírica de
su entorno familiar es decir, su vivencia personal como génesis de su obra poética.
A orillas del Rímac también concibió su segundo poemario titulado Homenaje para iniciados
(1984) en el cual lo autobiográfico informa una poesía profundamente personal y cuya forma es
sumamente experimental. Es inevitable la comparación entre las "Coplas a la muerte de su padre" de
Jorge Manrique y el poema que da inicio a esta colección, "Convesración con mi padre en su lecho de
enfermo", donde la voz poética anticipa que "En este último verso del poema / sé que parto al
hospital y voy a reemplazar al viento". Como en Vallejo, la desintegración del ser se manifiesta
también en la desintegración del lenguaje, a lo Trilce, "Skrr vndhert / ndepifleks zackers / destein
skrr" a la vez que se intercalan citas eruditas en latín con otras referencias intertextuales a la manera
del sermón medieval, reubicando al lector en esa comunión transparente que es la poesía de Róger
Santiváñez. Y al igual que el astronauta añadido a la fachada de la catedral salamanquina, Santiváñez
interpola elementos representativos de la época: un blue-jean rosado, las prendas de nylon, la
telenovela y la noche de neón, enumeración pseudo-barroca pero aún insuficiente para rellenar el
tremendo socavón cavado por la muerte, de un poeta perdido en un viento que "ya no es literatura ni
poesía ni soledad / sino la indiferencia de Dios".

17
Tras superar el annus horribilis de 1987, año marcado por la bohemia maldita, un ataque de
pánico que le anunciara la muerte y un cuadro psicótico que obligó a internarlo en el manicomio de
Piura, publicó el libro que lo lanzó a la fama y con el cual todavía se recuerda al poeta de esta etapa
inicial. El chico que se declaraba con la mirada (1988) no es una colección de poesía light, como la
describe el mismo autor, sino de una poesía en prosa en la que el flujo de conciencia disipa la
distinción entre espacios y elementos disímiles Lima / Piura, cultura elitista / cultura popular, inglés /
español, lo pequeño-burgués / la marginalidad. Es decir, se trata de lo que Julio Ortega identificara
como una posmodernidad periférica, en el sentido que en los países en vías de desarrollo coexisten,
como si se tratara de universos paralelos, elementos de la modernidad con prácticas anacrónicas. De
esta manera Santiváñez configura una serie de imágenes tipo collage que adquieren significado
mediante su habilidad de concatenar elementos disímiles: "Acaso un amor fugaz. Farewell", "el
firmamento nonsense de la historia", "Y el loco Älvarez, sacando / partido de su aire a Mick Jagger.
Un Jagger Cholo. Pero Rock". Intertextualidad, mestizaje, musa híbrida, son meramente etiquetas que
le podemos asignar a una poética explosiva, por momentos visceral pero siempre comprometida con
la consigna de renovar un lenguaje que ya no era suficiente para contrarrestar la arremetida de las
distintas formas de violencia de los ochenta, desde la psicológica, la bélica, culminando en el
desplazamiento económico de una clase media venida a menos.
De la residencia en el manicomio surgieron los poemas dementes de Insane asylum (1989)1
que aparecieron en forma de plaqueta en Lima y varios de los cuales nunca habían sido publicados
hasta esta edición. En este breve compendio sobre la locura asistimos al ingreso de una serie de
personajes cuyos alaridos “rompen la quietud del hospital” pero cuyo delirio no les ha desprovisto de
su humanidad puesto que al ver entrar a otro paciente nuevo la voz poética concluye que “quizá sólo
padece / una depresión subpsicótica / & entonces habría que abrazarlo”.
Con la publicación de Symbol (1991) presenciamos una poesía más experimental que hasta
cierto punto establece un diálogo con Contranatura de Rodolfo Hinostroza, en lo que corresponde a
la descomposición del lenguaje, la manifestación lírica de un poeta que había vuelto a recaer en el
consumo de la pasta básica. Se podría decir que este libro marca una justificación, una apología de la
droga, de una poesía más cercana al realismo sucio por lo que el autor se ganó a pulso el calificativo
de poeta maldito de Lima. No obstante, la "recomposición del yo" se inicia a partir del sinsentido, de
la cacofonía, de la interpolación de múltiples lenguas y giros dentro del marco del verso gongorino:
"Mas el crepúsculo la despertaba sensitiva / Dando vida y amor en sus canciones cantadas en el
ñoba". En estos dos versos se resume la búsqueda poética de Santiváñez, de representar en un mismo
plano la alta cultura con la cultura popular, de potenciar la musicalidad de las palabras
independientemente de su origen y de llegar al lector u oyente con una sonrisa cómplice. Symbol
marca también el inicio de una segunda etapa poética de Santiváñez, de una voz original que apuesta
por una versificación más recargada, casi neobarroca pero sin tener plena conciencia de ello. A
diferencia del pastiche posmoderno en el que superponen marcos y géneros disímiles casi al azar, las
piezas cacofónicas de la poética de Symbol encajan una vez que el lector se acopla al hilo sonoro
subyacente en cada sílaba: “No sé que sé yuyachkani un vacío en el supaypawawa, / la wawa nos
llevó a sus caderas revoloteando”. La acumulación y la enumeración no sólo cumplen una función
ornamental, de relleno frente al vacío ontológico, sino que también sirven para incomodar, para
incitar cierto sentido autocrítico: "De driblear su ritmo, mangiare like p.t. dixit”.

1
Plaquette publicada por el Instituto Cultural Peruano-Soviético, en el marco del ciclo de Poesía Peruana
Contemporánea en Lima, 1989.

18
Cor Cordium (1995) es una suerte de secuela de Symbol, escrito a lo Jack Kerouac, tres días
encerrado sin parar, inspirado en la misma musa que nos regalara la colección anterior, una mujer del
Rímac pero elevada a dimensiones místicas, a la alucinación religiosa, a la bohemia salvaje que se
retroalimenta de la violencia extrema de las calles, la violencia ubicua de Sendero Luminoso y el
sufrimiento ante el rechazo de una mujer. A diferencia de su poemario anterior, Cor Cordium es un
estudio de las posibilidades líricas de la jerga limeña junto a la descostrucción de la dicotomía virgen
/ puta, tema recurrente en nuestras letras: "Si ya eres la Virgen calata / Que se masturba pensando en
este canto”. La voz poética potencia la fluidez del mito mariano valiéndose de elementos
concernientes a la parte inferior del cuerpo, a la degradación de lo inmaculado, disipando esa trillada
antitesis entre lo profano y lo sagrado.
El lector ideal de la poesía más reciente de Santiváñez precisa ser multilingüe y multicultural,
abarcar el espectro de las culturas ancestrales, los códigos semióticos de oriente y occidente, entender
que el zorro del norte dialoga constantemente con el zorro del sur, que el lector de Dante y Pound
tiene que también ser capaz de descodificar los giros callejeros. Con la publicación de Lauderdale
(1999) detectamos unos primeros indicios de la estética neobarroca. El poeta confiesa que entra en la
“onda neobarroca” sin saberlo, imbuido quizás por el espíritu de la época que favorecía a la poesía
del lenguaje, y en el caso concreto de Santiváñez, una poesía cargada de mística negativa y lo erótico:
“con dios kon las piernas abiertas / tiksi viracocha in Magdalena swing revuelta al viento de la
carretela trocada / en los banjos”. En esta poesía finisicecular, todo es válido, todo se puede reciclar
para mantener la fluidez de un verso que le teme al silencio.
Antes de partir a Estados Unidos para continuar con sus estudios doctorales en la
Universidad de Temple en Philadelphia, Santiváñez publica una colección de poemas titulada Santa
María (2001), poemas concebidos muchos años antes de su publicación durante su encierro de un año
en la casa familiar en Piura, enclaustrado en la biblioteca de su padre. Este año sabático coincidió
también con la pérdida de su amigo, el cantante “Kilowatt”, evento trascendental que acentúa el
acecho de la muerte en su obra. La poesía incluida en esta colección es una vuelta a la poesía
conversacional, casi meditativa, sin mucha experimentación y bajo la influencia de la poesía
borgesiana que Santiváñez recuperara por aquel entonces: “Hoy día es cumpleaños de mi hermano
José. / Le llevaré estos versos de regalo”. Nada más alejado del verso ametrallador y nonsense de sus
colecciones sonoras anteriores. La voz poética evoca los recuerdos de la infancia a través de objetos:
la lata china, la plancha de carbón, la cocina de su madre. Nostalgia a full, sin reparos ni tapujos.
Varios estudiosos han propuesto que la estética posmoderna representa el resurgir cíclico de
lo barroco es decir, de un cambio de paradigma aglutinante como respuesta a las grandes narrativas
oficiales, mediante la utilización de la parodia y el pastiche. No obstante, la poesía de Santiváñez nos
demuestra que existen distancias abismales entre una propuesta y otra. Por ejemplo, la nostalgia a flor
de piel de la poesía de Santiváñez se distancia por completo del carácter aséptico de la nostalgia
posmoderna que apuesta por lo retro y lo vintage como simulacro de un pasado idealizdo, como
parodia consumista más cercana al espíritu del disfraz de Halloween. De igual manera, tal como lo
hemos indicado anteriormente, la acumulación silábica del pastiche neobarroco fluye y se construye a
partir de la sonoridad por muy disímiles que parezcan sus componentes, a diferencia del pastiche
posmoderno que superpone marcos disímiles casi al azar, en una apuesta más cercana al espíritu
dadaísta.
Aunque publicada mientras el poeta ya estaba radicado en Estados Unidos, Eucaristía (2004)
fue concebida inmediatemente después que Lauderdale pero se quedó en el tintero debido a los
trámites para mudarse a este país, tiempo que aprovechó para armarlo y trabajarlo con plena
conciencia neobarroca, en la línea de Eduardo Espina, José Kozer y Reynaldo Jiménez. En clave de
misa barroca, el poeta comulga con las múltiples posibilidades poéticas a partir de las dislocaciones

19
del significado y el significante: “Para ser quechuas o sea bien / Llamas en llamas se incendia mi país
/ 4 paredes albicantes de su celda Vallejo”. A esto le añadimos un regreso a la mística negativa y un
fuerte componente erótico donde la droga se personifica como la mujer vulcaína, ya musa lírica, ya
destructora: “En el sagrario lames mis / waynos escrotos reynos / Edén pastoreado por the /
Inspiración de su dulce / soledad”. Trozos disimiles reagrupados por el ritmo y la armonía silábica,
así como el caos del universo retoma su orden a partir de la atracción de los cuerpos celestiales.
En los poemarios posteriores asistimos a una faceta más molecular del lenguaje poético de
Santiváñez, configuración concebida a partir de dos estrategias recurrentes: un desprendimiento
silábico más frecuente y el uso recurrente del encabalgamiento multilingüe. En Amastris (2007), el
poeta recicla elementos bucólicos del culto a Venus para brindarnos un collage inédito: “Silueta de
conchita on the beach cueva de algún crab / haciendo crack en la sopa del crepúsculo And she said
chicken / tacos”. La onomatopeya disipa la distinición entre el inglés y el castellano logrando un
efecto sinestésico que culmina con la serenidad fugaz del haikú. Otra estrategia recurrente en la lírica
de esta etapa creativa es la interpolación de mayúsculas a mitad de verso, indicándole al lector que
realice una pausa al respirar, un cambio de marchas para superar un circuito con curvas agudas y
rectas silábicas. En Labranda (2008), Santiváñez vuelve a ensayar con algunas de las estrategias
anteriores dentro del marco de la cadencia gongorina: “Retornas sur los sures Soñados leche azur
zurita Azul / solita en tu blue-jean”. El poeta nos confirma en esta colección que su credo se resume
en el dictum: la musicalidad sobre todas las cosas. De nuevo, la melancolía transpira por los poros de
estos versos con el eterno retorno al Piurensis Solis, a los algarrobos, a sus “acholadas ninfas”. Esta
nostalgia explosiva alcanza su mayor expresión en Amaranth (2010), colección concebida a partir de
los orígenes primigenios de una voz poética que reflexiona, en clave onírica y neobarroca, sobre la
condición del individuo transnacional. En esta colección reaparecen varios de los motivos del
glosario poético de Santiváñez (el jardín, el algarrobo, la marimba) aunque representados de forma
fragmentaria como los “chi Lalos” desmembrados de forma semántica. El libro se lee como una
suerte de misa barroca con instrumentación rockera y del punk “Metálicas guitarras se alzan pasando
Moluscos sobre el palacio”.
Las ninfas grecolatinas descienden sobre New Jersey y se bañan en la piscina pública que
frecuenta el autor. La colección Roberts Pool Crepúsculos (2011) es la primera de una serie en la que
el poeta adapta ciertos motivos bucólicos a situaciones actuales mediante la utilización del verso
kilométrico (de veinte sílabas) y su característica disección del lenguaje. Los lugares frecuentados,
como “Cooper River Park”, evocan situaciones referentes al tópico del locus amoenus “en la verde /
orilla Suavísimo repliegue acuático mi / Niatura dibujada por la diosa in Visible oculta tras la fronda
/ ce Leste que a la bóveda se funde”. Existe cierto magnetismo entre las sílabas dispersas, como si
esta desconexión las atrajera más en vez de repelerlas. Esta atracción también se manifiesta en la voz
poética voyeurista que contempla a estas ninfas terrestres pero inalcanzables, hecho que a la vez nos
hace reflexionar sobre la fugacidad de la vida: “Memoria de tus hombros perfectos tocados Por
intactas gotas de luz en / la marea más Sana & sin embargo despiadada con un / Poeta & su canción”.
En Virtú (2013), Santiváñez continúa re/creando esos mundos bucólicos y sus ninfas se
desplazan a otros espacios frecuentados por la musa. En las playas de “Sea Isle” la voz poética
dialoga con una sirena: “Nadie como tú para ser dibujada en el poema Bañada por la verde /
transparencia recuerdo de Pamela dejándose la truza metida en el misterio / Redondo como el mundo
en que agonizo Mirando el pulcro reflejo en / tus hombros Del sol que sin roche acaricia”. Es quizá
esa superada distinción entre alta cultura y cultura popular en lo que más coincide el neobarroco con
el posmodernismo. Santiváñez amalgama elementos de la cultura popular y el lenguaje coloquial
peruano (la truza, sin roche) para concebir una imagen sumamente erótica, en movimiento, dentro del
marco clásico de la égloga.

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Sylva (2015) representa la culminación de esta propuesta poética heterodoxa, heredada de la
poesía aurisecular pero actualizada a partir de la plasticidad aglutinante de la textura neobarroca.
Podemos concebir a esta colección como una suerte de misa, una partitura compuesta de cinco cantos
poundianos (Cooper River Orillas, Summertime, Autumnales, Pequeñas Playas y Raven Hill), un
homenaje a José María Eguren, y la despedida. En la primera parte la voz poética invoca a las ninfas
asociadas con el culto a Dionisio y lo bucólico. En el segmento dedicado a las Hamadríades el poeta
retoma su continuo homenaje a Dante y nos ofrece otra clave metapoética: “Finos foliolos se
refrescan / exquisitos & las gotas resbalan terza rima”. De igual manera, Santiváñez inscribe al
huracán Sandy en el catálogo mitológico de los desastres a la vez que ofrece un testimonio de su
tiempo. En el movimiento correspondiente al otoño asistimos a su destreza de concebir una poética
utilizando un Spanglish latinizante: “a mi Paso las primeras hojas muertas / se divisan O se pisan
tristemente hago un zoom / Through las ramas & las chicas cruzan Remando”. Tras haber comulgado,
escuchado el sermón y asimilado algunos pasajes de la liturgia poética de Santiváñez, el texto le
indica al lector que puede ir en paz “Ite, misa est”.
A pesar de que Santiváñez ensaya con la prosa poética en varias instancias de su carrera, no
es hasta New Port (2015) que contamos con una cosecha concebida completamente en este género. El
autor adapta las mismas estrategias de su poesía (fragmentación, nostalgia, code switching
multilingüe) a este manojo de poemas que nos remonta a la textura de Insane asylum y de Symbol. En
esta colección resurge la faceta de poeta maldito pero meditativo, reflexionando al borde de la locura
con “los patas echados cual romanos en el brain obnubilado la neurosis perseguida pero las sienes ya
no sienten nada”.
Las últimas dos colecciones incluidas en este libro representan una suerte de summa poética
en las que se recapitulan varias de las técnicas y motivos de su producción anterior. En Asgard (2018)
y Balara (2018) detectamos el predominio del endecasílabo con tercetos des/encadenados con rima
interna. En “Asgard”, versión nórdica del Olimpo, el poeta recupera la musicalidad barroca “Ejidos
tejidos a la vera del río”; la nostalgia “La alacena de mi madre cómo / Me gustaba su sonido”; la
memoria de su hermano Raúl “Lo recuerdo en su caballo Gringo”; y la sierra piurana que “Nunca
volví pero ahora he vuelto / en el poema”. Y es quizás este último verso lo que resume en parte la
creación poética de Santiváñez, el regreso al locus amoenus de la infancia o a un lugar que sólo existe
en su edificación poética, en la caída libre hacia el vacío: “Sueño sin soñar sueña la soña soñada en el
bosque / De Santa Isabel”, barrio de la infancia reconstruido en su maqueta onírica.
La versificación de los poemas incluidos en Balara es más uniforme que los de su
producción anterior. El poeta reflexiona en endecasílabos, de forma casi mística, en torno a las
experiencias y lecturas que han definido su voz poética: “Mas yo puedo recordar las playas / Del
norte del Perú dormilonas / Pendientes de sechuranas recostadas / En Matacaballo o preciosas pitucas
/ De Colán mares calientes que / El Señor guarda entre las fotos / Del perdón”. Y es precisamente ese
el objetivo de gran parte de la poesía de Santiváñez, de redimirse ante los excesos del pasado,
verbosidad que apuesta por la textura neobarroca para asegurarse que no queden vacíos en la foto
compuesta de versos pixelados, fotografía que revela el rostro pensativo del autor.
Balara es ese lugar lejano, exótico a la manera modernista, donde el poeta se exilia para
reflexionar sobre su escritura que es la vida misma. De ahí que esta colección contiene ciertos
aspectos metapoéticos que nos ofrecen pautas para descodificar la obra poética del autor. En cuanto a
la versificación, la voz poética recalca que “Cuantificar las sílabas vibrando en los / Espejos que me
miran destruyéndose / Una piscina llena de clamores perdidos”, sílabas maleables, centrifugadas a
sus mínimas partículas para separarlas del resto de las frases hechas, para potenciar sus posibilidades
semióticas. Detectamos también en este poemario una preocupación recurrente con la fugacidad del
tiempo, con la fugacidad de la vida en estampas de ninfas terrenales que inspiran composiciones que

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culminan con una sensación de abandono similar a la de los haikús: “des / Apareció por la puerta de
su salón / Para quedarme yo solo con mi canción” y “Ya se acaba el semestre es probable / Que nunca
jamás vuelva a verla”. No obstante, el poeta cuenta con los negativos originales de la memoria, “Pero
a mi me queda la imagen / De sus preciosos pies tocados de / Un cuero brillante”, secuencia de versos
que componen un celuloide lírico para contrarrestar el olvido, como dice el poeta Gerard Malanga, la
fotografía adquiere otro significado después de la muerte.
Cada colección del corpus poético de Roger Santiváñez es un testimonio de cada etapa de la
vida que le tocó vivir, de los distintos cambios de paradigma que han informado su obra lírica. El
simple gesto de aquella muchacha “sentadita sobre / Un taburete absorta haciendo texting” queda
grabado sobre la fachada de la edificación barroca que es la poesía de Santiváñez, un espacio donde
podemos entrar a comulgar con el alma desnuda, sin las ataduras binarias entre alta cultura y cultura
popular, entre lo profano y lo sagrado. Una misa criolla, aglutinante, con instrumentos y voces
provenientes de tiempos y lugares aparentemente disímiles pero que adquieren sonoridad sinfónica en
su conjunto, como suele ocurrir tras los grandes desencuentros de la humanidad.

Alex Lima

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ANTES DE LA MUERTE
(1979)

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a Lola y Aníbal

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Qué soledad sin soledad siquiera
Juan Luis Velásquez

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MARTÍN ADÁN / ODA

Por la Plaza de Armas y el Bar Cordano


algunos extranjeros caminaban sin zapatos
y el solo bocinazo, la paloma, el vino tinto
En la Plaza San Francisco los muchachos
conversaban y decían: abrirse las hebillas
mientras las luces de una ciudad
en ese instante desconocida y aborrecible
castigaban con soledad al campanario

Extranjeros, solitarios, ninguno que aguarde la luna


los bares son baratos les dijeron y el licor duerme
como un límite que ansiara el desnudo de los muertos
Centro de Lima. Sucio y maldito. Bello ritmo y pavimento
Jirones golpeados y escupidos
¿Hay algo más hermoso que la oscura fragancia del gentío?
¿Suda la multitud y va latiendo solitaria?
¿Qué miedo resbala en tu imberbe efervescencia?
Rabia y droga, rameras y asaltantes
Calles enormes en que deambulas ebrio de la soledad

Y he estado recordando la barba descuidada en tu retrato


viejo de mirada perspicaz, viejo Adán, Martín Adán
he pensado que podría encontrarte como
en mis sueños, la visión del artista adolescente
que recorre las calles buscando lo que nunca encontrará
Seguro me odiarías por nombrarte
pero tal vez iríamos bebiendo y riendo asqueados de amargura
He pensado pero sé que tú ya no andas por aquí
Yo soy de los que llegan tarde
No habrá forma de cansarte con mis pláticas ámbar de
cerveza y euforia, limpieza en destrucción y deseo
Yo podré hartarte con mi pánico y mi torpe inseguridad
y estaré nervioso emborrachado, sorbiendo
a cada instante un trago
mientras tú echarías un vistazo a la basura
que se ve por la ventana

Silencioso escucharás mi intensa violencia


y dirás muchacho; pronunciarás con fruición desmesurada
entre un espacio cruzado de botellas
Viejo sé que tú tiemblas y resistes

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porque por los bares y neones convulsivos
derrumbados y furiosos por las avenidas y ventanas
entre hoteles y cuartos de pisco y música
y muchachas cansadas y vueltas de gritar y desprendidas
de su amplia soledad enfrascadas en ritos prohibidos
como rehenes de un amor que sabe a guinda o a macoña
muchachas desnutridas o bellísimas con algo de oratorio
entre las piernas, sagrado y espasmódico
con la soledad de los hombres que no hablan
sino con los edificios y los transeúntes más desprevenidos
en la bruta soledad de sus papeles y en los cantos
más audaces o en los cantos más absurdos o en los
frutos inventados entre tierras desconocidas y países
que a veces se parecen a la muerte o a la voz de las
ametralladoras apareciendo por los patios como espumas
diciendo a gritos tirándose de los cabellos sin asco
o sin dolor casi dormidos con la piel y el sueño
ellos los jóvenes, los poetas jóvenes te aguardaban

Pero no aparecerías porque ya han cansado tu sombra


y te persiguen, viejo increíble y sucio
sabes cómo huelen los sótanos o piensas en adorar
la carencia de dioses, tu infierno
y la fuerte visión de un animal sediento
entre las ventanas más grandes de la oscuridad
la que te desnuda libremente y corres
y no abres la boca para comer mientras
sensuales enfermeras te persiguen para darte una cucharada
de un extraño brebaje, viejo artífice
lúbrico e intranquilo como un adolescente
ya estarás aquí bebiendo y la utopía entre tus ojos
Lo que nadie ha creado o lo que nadie ha pensado
Yo soy un intruso que rasca esta máquina
arrancando fiesta frenética al aislamiento y la apatía

Ahora ellos se acercan y ansían caminar por las calles


durante unas cuatro noches y entonces la gasolina circula
y refresca con su olor a las muchachas y a los adolescentes
que corren a verlas mientras ellas se desnudan entre
algunos jardines y las veredas se llenan de flores
con sus faldas y sostenes hermosos y el sol que nunca

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fue tan latigazo brilla en la punta de los pezones

Y un muchacho gritaba Decadencia Decadencia


Yo escuché decir El mundo qué es esto
y por la noche brotaron los disparos y las ratas
lamían los bellos cuerpos muertos
Completamente borracho recordé un amor que ahora
era un poema demasiado triste o una canción para
espantar la euforia o la amargura
sin entender quiénes eran los asesinos
o sabiendo que ocultos jamás serían juzgados
entonces comprendimos lo que significa la noche profunda
como la muerte profunda, viejo Adán escucha
con tu cuerpo tendido sobre una explanada de césped inconforme
la rabia y los temblores y ese viento
que es más que una ansiedad por construir una belleza
y el tiempo será como tu cabeza poblada de flores
y nosotros destruiremos las flores porque las amamos
y crearemos de otras: seremos

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LAS PERSIANAS

Nuestros padres vinieron de lejos


atravesaron valles, arenales, sembríos rezumando a caña
limpias praderas de arroz, puentes metálicos
y por fin se establecieron en el desierto más vasto que encontraron
Habían abandonado la metrópoli, el silencio de los dioses
marcharon sobrios y fecundos a la busca de un país,
un lado de la tierra en que las lluvias fueran buenas
Así conocieron la canícula y el polvo de una década
sus noches fueron la brillantez del sueño más hermoso
sobre los débiles focos de una ciudad incipiente

Mis hermanos no eran aún adolescentes


y el lugar duraba lo que una vuelta en bicicleta
sus plazuelas solitarias deshojando tamarindos
viejos algarrobos que sólo conocían las iguanas
barrios impecables y pequeños, familias enteras
tomando el fresco a la puerta de la calle
Oh noches del verano como muchachas de éter
tiempo de lluvias salvajes, oh mi aldea
y recuerdo a la gente apostada sobre el Puente Nuevo
midiendo el terror de una posible inundación
el caudal abrumador del río que enfurecía cada siete años
y los primeros avisos luminosos reflejaban
su eléctrico esplendor sobre las aguas
Pueblo mío, infancia, estadio irresponsable
la belleza de los padres como un dulce manto
protegiendo algún temor, alguna sombra amarga
esa soledad al terminar la vermouth
o al quedarme solo en las aglomeraciones
Oh locura de correr por mis calles, mi adorable geometría
Que creí, adónde ir a buscar un calmante a mi muerte
Adónde ir, papá, mamá, hermanos, dónde.

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LAS ARMAS PERDIDAS

Amo lo entrañable de las flores de plástico


y las cortinas que en la noche ocultaban a los grillos
y a mi soledad
Desde estos versos recuerdo la luz solar del patio
el aire largo que de él sentía en las noches de verano
y cabía el entusiasmo en la máquina encendida
mi hermano preparaba raspadilla, hermoso o moreno
después de la siesta
como un detenimiento
A esa belleza de silencio
de luz que duerme bajo el vestido de las chicas acostadas
de ventana abierta a las 5 y 30 de la tarde,
al lejano motor del automóvil que pasará por la avenida
me remito
y que no habrá nada más por un buen rato
sobre el tiempo que mis padres me han legado

Ya no he vuelto por allí, sin embargo he comprobado


que las piedras de la pista ya no brillan (que hay cemento)
y que el piano está tan desafinado que da risa (o que lloramos)
pero lo hacemos ocultos (yo por ejemplo en estas líneas)
pretendiendo no herirnos, no dolerse
sino tomarnos una foto bajo un cielo de algarrobos
al frente de la incertidumbre, que sonreímos
y que estos muchachitos van frescos o melancólicos

¡Salud! alcanzamos a decir


como que normalmente hemos permanecido solitarios
pero hemos sabido qué soñaban los taxistas,
los mecánicos, el portero del Hospital Obrero
y los he visto trabajando para llegar con algo por la tarde

Era mi calle, no lo olvido


y yo quería cantar con lo más íntimo de su esfuerzo
volver a caminar por el barrio antes que las casas mueran
cuando son las 4 de la tarde y hay una resolana inmóvil
hay una muchacha que ya no volveré a tocar
y tendremos canícula, viento viento

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LA BATALLA

Allí en la calle empedrada, en la Junín


fui testigo de la tierra del Elías
seguro mi cuerpo al lado Ángela
¿Quién grita así como la Ronca?
Críspulo, el viejo Alcantarilla
nombres que pronuncio con amor
y nadie sale a responderme, ni el garage
ni los pavos, ni los pollos
y ese silencio de la noche me sigue
como si el taller de mecánica fuera de carburo
y no me deja soñar, no me deja caminar
no puedo respirar y tengo náuseas
grito entonces Hey, Ramos ya no pinte al duco
por favor, no ve que me duele el corazón
y rasguño este poema como puedo
y Usted está morado, está azul, para negro
y se va y no lo veo esta noche ni ninguna
bajo la ventana en que escondo
este sol que me cae implacable y me destroza
Ahora me limpio el sudor y cojo un pedazo
de masa y me lanzo hasta el fondo del horno de Manolo
quisiera mancharme de harina las espaldas
pero debo contenerme con cantar a la puerta del garage
pero no me río y tengo miedo de no reconocer a nadie.

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SOLEDADES

I. PIURA

Miro los altos árboles y percibo un viento fuerte


en esta esquina, en esta sombra suave que me guarda del sol
Qué pensaré, oh qué diré a esta hora
mi antigua y soleada aldea ya no me reconoce
Han llegado gerentes con mujeres flamantes
las tierras, el petróleo, los desfiles
Ya todo está dispuesto
Ninguna belleza, nada resplandeciente
sólo sucios microbuses enrumban hacia barrios marginales
Y la casa que mis padres construyeran
solitariamente doblados por ocho horas de tiza y oficina
Qué diré de su postigo y su jardín
pisoteados por la tercera generación de destructores
Ahora que el atardecer desciende
sobre este patio en que sólo permanece
el sueño de los padres
adherido a estos versos
Y no importa que se siga bebiendo
Y no importa que el sol nos arda sobre el pelo

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II. PIURA

Apareció bajo el umbral de mi puerta


¿Te esperé meses, años, libros, conversaciones?
Un encuentro en la perra ciudad
era un buen pretexto para tomar una cerveza
Y me contó de una triste hembrita de cabellos oscuros
era como la novela que estaba escribiendo
era como el silencio cerrado

No he hablado con nadie en meses –me dijo


Aquí no hay nada–
y tomamos cerveza sin cesar
Y es terrible se piensa mucho en la muerte,
Fui maestro en un pueblito del desierto–
Ahora terminada la licencia
encuentro sabiduría en sus movimientos
y nuestras vidas adónde irán a parar
Odio minuciosamente las calles de esta ciudad –me dice
y entonces nos levantamos. En el bar, amanece.

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ALEJANDRO / EL TÍO

Alguna vez lo vi en una esquina


alto y su uniforme
Los ojos azules me llevaron
a estadios brillantes
Sorbía un vaso de cerveza
me buscaba palabras en el diccionario
o reíamos

Su bondad limpió mi corazón


largas temporadas con nosotros
viejos atardeceres melancólicos
y compartió mi soledad
Gran belleza y en sus
rudas manos acariciando
cantaba la chiroca

En la mañana fue adelgazando


sobrio, duro
(Los pasillos de los hospitales son tan fríos)
Se lo llevaron
Aprendí
que los geranios habían sido regados por él.

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TRES POEMAS PARA DESCIFRAR

a la manera de José Lezama Lima.

I. LA SOMBRA SE VEÍA

Al amanecer nos armamos de valor, simulamos


pertenecer aún a la extremidad helada del sueño,
deseando vislumbrar entre este encierro guardado
del motivo que embutiría cápsulas destinadas
a combatir la corriente desmesurada de los cuerpos
que imperceptiblemente trastocan su belleza
en oscuridad de invitaciones nunca aceptadas
horadadas en un miedo permanente.
Las muelles recepcionistas del cansancio
o el sueño, empinan su horizontalidad
para expulsarnos de un instante en el que
veríamos una anatomía preocupando nuestra curiosidad,
debida a la posibilidad no gozada
de nuestro callado favorecedor de movimientos,
poroso castigado a pesar vestimenta que impide
clausurar la distancia no conversada.

II. EN EL TALLER

Escuchábamos los ruidos de las latas estropeadas;


una muchacha nerviosa vertía sobre nuestra casa
el infame olor del carburo
por haber estrellado los faros de su increíble
bebedor de gasolina contra la impaciencia de
un repartidor de anhelos hechos de plástico
para trastornar las noches de quienes no saben
de su propia placidez, anudados a la ceguera
que dulcemente va labrando el afán inquieto
de cruzar dichas efímeras, temerosos de recibir
un golpazo igual al que en verano
nos despierta del párpado suavísimo, transportados
sobre un lecho que extensamente no cabe jamás
en la numérica mente de los hombres y es dorado,
casi erótico al permitir que las muchachas
plasmen lo que lleva a los adolescentes

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a enviarse miradas de lujuria.
Ruidos practicados por las tardes de hábiles artesanos
eficaces devolviendo belleza
a un asiduo trajinador de pavimentos.
Los insomnes hombres embadurnados con pintura al duco
jamás desprendidos del halo azuloso del chisguete
destructor de las pupilas más agudas.
Soportamos una presencia olfativa nauseabunda;
sólo a la hora más brisácea del día
nos abandonaban a la caída,
esa carencia de fierros torcidos sonando.

III. EJERCICIOS ESPIRITUALES

La oscuridad del recinto donde un anciano


bebía vino creído que era sangre, persiguió
nuestras mentes como una exigencia palpable
de hallar una caída saludable después de
bajar en vórtice hacia ningún lugar.
Producida la certeza del miedo:
el afán de aullantes invitaciones en
esas profecías: estaciones incandescentes
o babosas nubes acariciantes
casi orgasmos no eróticos complacidos
en la visión de manzanas suspendidas
sin aire ni vergüenza, asistimos
haciendo fila en una casa alejada
donde la disposición solitaria de las monjas
resbalaba con el ritmo que la mano
de una muchacha logra al tratar de
aliviar la responsabilidad de su belleza
con un toque improvisado de cabellos.

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EN EL TIEMPO

in memoriam Luis Hernández

No lo conocí.
Sé que destruyó sus músculos
sus jardines.
Tuvo la soledad de un ciclista.
La risa como un manantial.

Tal vez su único odio


fuera su bondad. No lo sabemos.
(Ellos dijeron que estaba enfermo)
Durmió solo en su hotel.

En su paz partió de una esquina


al encuentro de un disfraz
para ser acaso el mar suave, el gentío
o el finísimo desierto.

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HOMENAJE A ERNESTO CHE GUEVARA

Partimos en el silencio de la madrugada,


la noche ocultó sus siluetas y su dulce
cartera roja,
el invierno abrió nuestro antiguo amor,
los brillantes filos del lenguaje nos quedaron
como láminas de una intensidad recóndita.

Ahora caminamos limpios y serenos,


el viento aceraba el cuerpo de quien
canta invitado por el sol.
Amamos el olor de la tierra y lo que pronto
conocimos del mar.

En el sueño de las muchachas


que bajan con su frentes heridas y deslumbrantes
como el deseo de los pueblos marcados
por el dolor, los solitarios van aprendiendo.

Eso está en el sonido de las ramas,


en el poniente que apacigua la batalla,
lejos del calor de una blusa concreta.

Después nos tendidos y fumamos en secreto


o hablamos para no olvidar los nombres señalados.
Mi rostro había vuelto a ser el mismo
con el trazo agudo de un corazón mortal y fresco,
con las flores que junté para tirar del gatillo
y remover el plumaje de la sangre y la melancolía.

39
DEL REPARTO

Hemos concluido por pensar ya sin dudarlo


que fue alta la cerveza que bebimos,
que nuestros ojos se oscurecieron entre el vaho
a la hora en que ellos –los que podían hacerlo
dirigieron a todos los habitantes
con la metálica voz de sus megáfonos.
Nosotros conversábamos celebrando algo
que todavía ignoramos,
en ningún momento oímos nada
por eso no pudimos evitar un suave estremecimiento
cuando descubrimos que los otros
abultaban sus vientres sobre cómodas hamacas,
utilizando los diferentes tonos y modulaciones
de la voz para cada circunstancia
decían frases que nosotros no entendíamos
notamos sin embargo que en las inflexiones de sus gestos
afloraba una extraña creencia en su poder.
Recién entonces vimos que la noche había cambiado
como aquél que ya está impedido de conversar y
sólo grita ferozmente ajeno a nuestra contemplación.
No logramos siquiera arranciar de entre
los nuevos idiomas, una canción completa
y tendríamos que hilvanar los trozos que
cada uno guardaba en su mente
para solazarnos durante la soledad
mientras los otros controlaban nuestras risas
hábiles en sofocarnos
eficaces en atrofiar nuestras extremidades
para burlarse viéndonos hacer el amor
o tratando de beber agua
casi ciegos ya, arrinconados por ahí,
por generaciones.

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CANCIÓN PARA AICAMLAD

Aicamlad, Aicamlad
tú caminas con tus secretas
y tus altas piernas
sin hablarme
son las 6 de la mañana o las 6
de la tarde
en tu aparente dogmatismo
y me dices que habrá
un tiempo de inocencia

II

Hay una sombra imperceptible


sobre tus párpados
sabré
que es el amor, el más amor encantador
tu vientre de poema, tus puntos y mis puntos
de vista discrepantes

Ahora recuerdo mi redondo y mente


y corazón de mástil solitario
ahora sé
que tus corrientes me ayudaron, tus azules
y no otros, tu boca de marimba

Fue el verano, escribí


los hoteles del siglo XIX

III

Tiene el pelo negro, negro Aicamlad


¿será el sol, será? me pregunto
en la penumbra sus 2 pezones los
4 ángulos, posiciones, la política
sus odios repentinos, un país de Sudamérica

41
IV

No comeremos nada esta semana


porque no hay plata, ni
oro de Catacaos
la filigrana, Aicamlad
abrázame no suscribas los
comunicados del tiempo, su no
dicha manera de roer

Que algo tuyo te queme adentro, Aicamlad


ninguna joya te haga más bella
que la blancura
del semen increado, el ritmo trágico y travieso
de estas líneas
lejos de ejecutivos, propietarios y etc.

Si esto es una guerra, tabernas, ya no


barco depositado en medio del agua, ya no
podemos evadirnos
para nuevas batallas y canciones
entregarse
entregarse (y no sólo)
en el abismo de nosotros 2

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POEMA AL DESIERTO

Blanco, tostado
siempre en movimiento
diseñas las formas de la muñeca grande
dormida o desleída de una noche para otra
En tu joven aridez
hay animales puros, Sechuras transparentes
con torres y tejados y túneles que van al mar
Desierto nunca estás tranquilo
no es por lo dorado del viento, no
por Letirá cuyas esteras padecen de tropismo,
ni tu silencio de fiera repentina
pero yo sé
que das tu odio y tu amor al mismo tiempo
apasionadamente, con mirada de fanático.

Cordel de calma a cierta hora


los pescadores tiran garra y te conocen
te han contado de Matacaballo
cuyas mujeres cocinan acostadas
tal vez felices
muy lejos, lejísimo de Helena Rubinstein
Simbilá
Narihualá
Tangarará
la dulce materia de estos nombres
Yamunaqué o Querevalú
hermosos
como el vaho en la noche de la tierra
cuando estás solo y te atreves a soñar
un beso, un polvo de agua
con los últimos laureles de Vice,
cuando tu labio subterráneo es
una muchacha en el asiento de un Volkswagen

Desierto trabaja a favor del mar


como nosotros a veces juntamos
nuestras sombras maquilladas
por verlas destruidas, ajadas
por el limpio sudor de tu nobleza
Desierto

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que no han malogrado los ejecutivos
quienes parcelan tu costa –que era
más libre que un hombre entregado a los ensueños–
Desierto
escucha tu poema
líquida sustancia voladora
que los nervios de los pueblos han tensado.

44
ESTUDIO DE POESÍA

Una muchacha entre la multitud


es la imagen que guardo de ti
Esta muchacha lanza una pedrada
y en la muñeca lleva una flor
Cae un cartel publicitario
cae la muchacha
y de la flor brota otra flor y otra
vuelve a crecer sobre el polvo
Una lluvia de granadas en el cielo de Lima

Oh dónde estabas tú
que sabías que para cada uno de ellos
había un caballo de la muerte,
una tragedia que mancharía de sangre tu poema
Ahora
aprendiste la dulce manera de morir de los muchachos
tu corazón intranquilamente descoyuntado
la piel que te obliga a espantar el dolor, a suprimirlo
Ah como si acaso tu visión no incendiara
tu estómago después del microbús
que aplasta la belleza y vuelve a recrearla

Porque digo esto ahora, en esta época


y me revuelvo en la cama sin hacer, agachado
para comer, los que sudan con pelo negro tomarán las armas
Yo soy el odio y soy tu odio
y soy tu viento más translúcido. Si tú amas
el asfalto en la podredumbre de sus perros
aviéntalos, limpios y apestando
con aroma que ha de arder entre la noche
y apéstame apéstame
/No habrá más belleza/

45
HOMENAJE PARA INICIADOS
(1984)

46
a Dalmacia

47
-Y si no te sentías poeta ¿por qué publicaste tus primeros libros?

-Porque me sentía un Rimbaud sin ser poeta. Es que Rimbaud era...y no tomaba mucho ah,
nada casi. Algunos dicen que es un arcángel, los más atrevidos claro. ¿Por qué fue así
Rimbaud al final, por qué lo hicieron así si él lo merecía todo? O sea, la sociedad ni siquiera
está mal: no hay sociedad. Sino que Rimbaud hubiera acabado con las armas, con los
monopolios, con todas esas cosas, si hubiera sido alguien en vez de poeta.

Luis Hernández

48
CONVERSACIÓN CON MI PADRE EN SU LECHO DE ENFERMO

Ahora tal vez la muerte no sea una bella palabra.


Tus ojos negros me miran, se aferran suavemente
a un hilo de vida, al silencio de tus labios
en el que leo mi nombre pronunciado con amor y
una flecha de soledad disparada al mundo,
a esta hora de la tarde en que me encuentro
solo contigo y comprendo que el oxígeno,
el suero, las agujas rompiendo tus dulces venas
son también los días reunidos
en que paseábamos bajo los algarrobos frente
al Mercado Viejo, una manzana de sol dorando
la belleza de tus gentes/ Piura
Viento de las seis besa el corazón de Aníbal
como él besó la tierra caliente, llámalo
hacia la vida, recuérdale a las muchachas
cuerpo-cántaro de agua fresca, dile que tú
has superado todos los controles del hospital
haciendo el amor a enfermeras irascibles
y que ahora estás acariciando su cabello lacio
aunque él no pueda darse cuenta y duerma dominado
por la fiebre y la diabetes / ¿Cómo habrá pasado
la noche? En este último verso del poema
sé que parto al hospital y voy a reemplazar al viento.

49
HOMENAJE PARA INICIADOS

"Skrr vndhert
ndepifleks zackers
destein skrr"
Paranoia
me dije
tempus loquendi
tempus tacendi
Te supplices exoramus
pro anima famuli tui ezra
Palladio de San Giorgio Maggiore
35 enormes rosas coral
)era un viejo testarudo(
La góndola avanzó
rítmicamente
por los canales de Venecia
bajo la protección
de Apolo Leskhenorios
patrón
de poetas y filósofos
fue así como supimos
que el silencio
terminaba en la noche
cuando le gustaba
leer a viva voz
13 años durante los que estuvo
encerrado
entre catatónicos
Y el cargo de traición
lo compartía con
Blake Dante Sócrates
fragmentos apilados contra nuestra ruina
"La usura"
le oí decir
una tarde en St. Elizabeths
"Ojalá no hubiera oído
nunca
la maldita palabra"
Los apasionados llamados de
Fourier Thoreau Marx
sobre

50
la esclavización del hombre
en fábricas y bancos
Y
quién es el pata?
un satírico menor
que habría contribuido
algo al refinamiento
del idioma

"Skrr vndhert
ndepiflecks zackers
destein skrr"

51
CH

Bésame con los besos de tu boca


tan rico
tu olor en la luz del mediodía de verano
muslos que irán donde yo vaya
mi cabeza
entre tus pechos grandes como faros de mar
en la noche de la aventura más loca
más perfecta
puros
desnudos bebiendo la sal de tu cuerpo
tu lengua
dulcísima
en la punta de nuestra sexualidad entregada
como esta flor
la más libre lanzada al viento de los años malditos
nada más cierto
que tus ojos claros
en la puerta de mi tienda de campaña
tu blanco
tu pequeña boca
tu chicle lindísimo despegado
sanguinolento fruta de Dios íntegra
sobre el parquet
esta canción en tren
hasta encontrarte
a unos pocos Km de Tenderland
& tu corazón
mecido como los campos sembrados
por la libertad
O recordarte aparición virginal
concha de plata
atravesando el cielo
de la poesía.

52
CUANDO PRINCIPIA EL INVIERNO

Cuando principia el invierno


dejo correr mis ojos sobre el agua helada
y me veo en el fondo del lavatorio
y los lentes se me pegan al rostro
y ya no sé quién se mira en el espejo ovalado
ni para qué
porque al fin sigo pensando en ti
como la única salvación posible
y no hay salvación
Esto puede ser un
chiste o no lo es,
un pretexto para escribir el poema,
para contemplar ensimismado
la bombilla de luz de 50 watios
y a los lejos
el silencio que posee la calle
cuando un automóvil ha pasado
sin dejar huella alguna
sin dejar una inquietud
en forma de muchacha

Esta es la historia por todos conocida


la historia del amante solitario
el que no va con ella
y sin embargo
dime, canción
qué hay de íntimo en el invierno
que me hace recordarla
al saber que Lima se abre para mí
como la imagen de la Nada
en los libros de la infancia
Y el viento,
el viento con sus plumas sensuales
ya no es literatura ni poesía ni soledad
sino la indiferencia de Dios
para con quienes han conocido el amor
y hoy contemplan sus zapatos
engalanados con el frío
porque a veces uno llega a la conclusión
de que el Infierno no es el Fuego

53
sino el silencio con que se toma
el té a las 6 en una casa de pensión.

54
CÓMO ESCRIBIRTE EL POEMA

Cómo escribirte el poema


que te ajuste tanto perfectamente
como el brassier de seda
"¿No me los pone muy erguidos?"
No, pequeña
no hay mejor belleza
que la posibilidad de poseerte
sin decir palabra
dejando sólo fluir
el manso acoplamiento de los cuerpos
sobre el mismo lecho en que Diosa Neurosis
se hizo presente
y nos arrojo sin remedio
a las praderas del hastío

Oh persecución de automóviles en la Vía Expresa


ríos de cemento que terminan
boqueando entre la arena y el mar
como joven cadete inexperto
en los bares de playa el sábado a la medianoche

Liliana, Mariel, otra Liliana


cuerpos acariciados
por la extraña frecuencia del amor
retratos del verano o del instante
que fueron tiempo y soledad
en un mismo vaso
aquel que perdió su contenido
como la arena succiona con sed
el líquido que cae
derramado
por las muchachas que viajan solas
en buses y plazas y alamedas
con un maletín de pandora
y la frente inclinada
sobre el parabrisas
Como tú, pequeña
con tu blue-jean rosado
en la memoria de los días
altos a la altura de tus caderas

55
silenciosas por la casa de cristal
reino equidistante del amor
acurrucada bajo mi hombro izquierdo
dispuesta a perder otra vez la virginidad
porque ya no hay nada que pueda detenernos
ni la más dulce canción
de los suburbios

56
PARA ESCRIBIRTE UN POEMA DE AMOR

Para escribirte un poema de amor


o mejor, una declaración o un ensayo
para enamorarte, para escuchar tus
zapatillas subiendo y bajando escaleras,
en ajustado blue-jean o corduroy
marrón, elegante, y verte sonreír
con la coquetería de los 15 años,
embellecido tu joven rostro en el tocador;
esa soledad no tiene nombre, Niña
esa soledad se lleva como una rosa
en tu recién peinado cabello,
bucles de peluquería naif,
en la pobre avenida más concurrida del distrito,
porque para ti yo he compuesto
mi canción
aunque la oigas tal vez muy tarde
cuando haya volado de tus labios
la sonrisa que un día motivó el poema,
pero quede allí tu sortija
como el fino sudor de tu cuerpo virgen
impregnado al pijama que contemplo
en arranques de fetichismo
en las frías mañanas
cuando no me aguarda
sino el recuerdo de Dios o de la Nada;
la casa está vacía, Niña
y estas palabras no pueden llegar hasta
tu corazón
quedarán como las hojas de un libro
arrastrado por Abril
hasta que una forma del viento
seas tú
y así las aperciba.

57
NO ME HABRÍA PROVOCADO ESCRIBIR

No me habría provocado escribir


sobre ti, pero ahora lo hago
y es en homenaje a la delectación morosa
Frate Porcospino
Tomas de Aquino dixit
el cuerpo exquisito
tendido sobre las noches de
los encuentros fugaces, del amor
no buscado ni perdido ni hallado
sino la extensión de tu forma de mujer
en los paraísos de la yerba y
la primera vez
la primera flor de sangre
abriéndose al vacío del amor
El amor que pudo brotar
como recuerdo de tus ojos
tan bellos a la luz
de tu inocencia
y la soledad de quien te amaba
y no se perdonaba no quererte
como esa alegría inalcanzable
de neón vista al amanecer desde el automóvil
volviendo del motel
o por las anchas veredas solitarias
bajo árboles innombrados
bañando con su frescor
el cuerpo quemado del maldito
aquel que no sabía querer
y colgó su corazón a las gasolineras
abandonadas,
como una medalla entre esta sombra
y tu belleza.

58
MUCHACHOS ECHADOS EN 2 CAMAS PARALELAS

La jovencita de 14 años duerme al otro lado


de la verja y posa su cuerpo tibio
en la memoria de nuestros remordimientos:
los ataques de Dios para hundirnos
–en bandada gigantes helicópteros artillados–
La jovencita
cubre de espaldas con el filo de la falda
la parte resaltante rubicunda de su pose
y por supuesto no sabe que ahora la soñamos
que es un sueño perdido encadenado
a otro más feroz que la sueña sin flores ni
vestidos ni sonrisas
tan sólo con el arma fría de un poema
una daga silenciosa
penetrando lo suave que es la carne
entonces el que escribe
decide que su rara faena ha terminado
y recomienza la historia de la chica
de los muslos puros; sólo que ese
es ya otro sueño
en el que "vientos huracanados"
como afirman los informes de la TV
levantan la falda de las miles de muchachas
que en los buses se pegan al parante
y dejan que el aire fuerte sea
cálido con ellas y acaricie
no sólo el nylon de las prendas
sino la fresca tersura de las nalgas
como pasta
algo especial
en la oscuridad de nuestras almas.

59
ESCRIBO SOBRE PAPEL RAYADO

"Mi amada" escribo sobre papel rayado


Yo no tengo amada,
escribo en el jardín interior de la casa
(viendo florecer los pistilos)
sin más luz
que el sol sobre las hojas verdes
)los pajarillos cantan(
y ya se aproxima el mediodía
en los altos las mujeres trabajan
y discurrren sobre muebles y cosméticos
–"Primero la tierra,
después ya lo remoja para hacer el almuerzo"
–"Si pues
porque hay que aprovechar el día"

Los pocillos de fierro enlozado


se acumulan en el lavabo
y la vajilla de plástico/
No hay
ninguna riqueza en esta casa.
La miseria mete el hocico
como "Nerón" por los rincones
y bajo la falda de las muchachas
pero las flores de carey
conservan su belleza
y se aduermen junto al sofá
sin reparar
en la rica historia de los abuelos
"Quichuay" "Millpo" "Alapa"
voces que hoy sólo son nostalgia de la sobremesa
entre los roles de la telenovela
y la tía Leonor

Avanza la soleada mañana de Mayo


como la risa del fontanero
enyesando el codo de la cañería quiñada
y los leves pasos de la tía
anuncian Muerte
(la cuculí en el fondo del jardín)

60
y "Nerón" desesperado escarbando la tumba
en la que mi padre fue a dormirse
después de su última sonrisa.

61
ESCRITO EN LA OFICINA

Para escribir un poema


sentado en la oficina
Qué hacer
revisando archivos, fichas, soledades
de papel membretado y pelikanol

"Sí, Buenos Días"


"De parte de quién?"
Canción que fue a perderse
por los hilos telefónicos, aullido de un perro
en la vecindad

Esto es para llorar


y no hay ningún consuelo
entre papeles quemados en mi memoria
y tableteo de metrallas en las zonas liberadas

La canción queda varada por las innombradas


calles, por las innombradas y silenciosas avenidas
iluminadas amplias autopistas en la noche neón
y mercurio sombras de neblina rocío de los
cuerpos en el frío y la aproximación de la
madrugada
Oh qué hacer
los buses cansados se pierden en la distancia
y no hay nada que se parezca a la vida ni
a la muerte nada que merezca ser
recordado ni escrito ni cantado
entonces qué canto aquí en mi canto
sino el vacío de las páginas en blanco
los próximos poemas un juego inútil sensitivo
para tocar como el viento urbano
la falda de las muchachas
y ya no habrá manera de recordar un amor
de estampar el silencio en la mañana de Junio
diosa de la belleza
de los deseos y las apariencias inesperadas

el tableteo de las máquinas calculadoras


obsede mi suave esparcimiento solitario

62
el olor a tinta fresca en la pituitaria
me recuerda mi nombre mi oficio
mi silencio de fiera repentina
pero
quién será qué será
en estos días cuello de botella

la ciudad es una concha gigantesca la bahía


un mar que la golpea sin misericordia ni
crueldad
y yo la veo caminar bajo los árboles
hacia la cita con su amante
compacto el frío en las casacas ajustadas
pero qué sola se ve una flor
en su maceta
entre 2 muros y el parquet
)de nada para nadie en el hueco del amor(
la flor se tiende sobre mí
y acaricia la sombra de la luz
en las baldosas y se deja remecer
por el aire tibio que acaso llega
desde dónde no sé
sino que al salir me esperan
las amplias avenidas silenciosas con semáforos
y soledades de asiento roto en microbús
al trote de un caballo

la ciudad se extiende como una peste


o una maldición
y los relojes se acercan a las 12 m
al viento muerto que respiro
como cáncer de monóxido

63
RIMBAUD EN ABISINIA

En este cuento del amor


yo no sé si habré cantado
yo no sé si mi canción
será de amor o
soledad o frío de noche
por la noche
Oscuridad de Rimbaud
en Abisinia
sin ningún amigo en París
sin nada sin nadie
paria como tanto senderista
puro
solo
oskuro
duro
pasteleado
pastelero
refugio
rolling
stone
Aún
Vivo

64
EL CHICO QUE SE
DECLARABA CON LA MIRADA
(1988)

65
–film en
II espexos–
a
Lourdes

66
1

Con Jimmy en el 7 1/2


Yo, Roy. Tú, Jimmy
La primera vez que fui. Yo estaba parado en la esquina:
Casa de los Linares. Viernes, después del colegio. Soledad. Pateando
latas. Muchacho varado por la marea de una adolescencia sin nadie. Los años, los quince
años. Un cielo encapotado rojo turbio. Mis sueños de
carey poblando el vacío del aire. Me quería inmiscuir en el viento.
Pronto vendría la noche, oscura como la muerte. Sería un viernes más,
una muerte sin nombre y sin fecha en el firmamento nonsense de la Historia
Leonel Valdiviezo –Pulga– saca la cabeza por encima de la luna que
está terminando de bajar desde el interior del automóvil. Celeste.
Toyota nuevo. La trompa izquierda ha frenado topando levemente uno de
mis muslos cubierto por el blue-jean. La sonrisa de Paco al timón es ostensible.
–¿Vamos al Chongo?– dice Pulga
Con un escalofrío en el estómago subo al asiento posterior del carro.
Erguido sobre el marroquín negro, observo mi nerviosismo en la consola delantera. Música
del tocacintas. Paco –mayor que nosotros–
maneja con soltura. No es como Pulga en el Impala de su viejo. Belair.
Haciendo señas al trailler que se nos viene encima con el carro
atravesado en la pista. Carretera a Sullana. Un día que quisimos ir al
burdel y no pudimos. Masturbación. La fijeza del falo contra el espejo
de una mujer desnuda. Triunfa la calatería. Paco sonríe con sus bigotes zambos.
Yo: Oye, pero yo todavía no he comido
Pulga y Paco: Acá vas a comer
Yo: ¡Che!
Y acelera sin respetar las leyes del laberinto. Los semáforos de Delfos
envían mensajes para nadie. A esa hora la ciudad se esconde,
comienzan los amores secretos. Se han prendido los verdes
fluorescentes del Km. 7. En la oscuridad del arenal son una promesa
para el pasajero. Camiones desordenados. Los choferes y el chulillo
bajan a echarse un polvo. Acaso un amor fugaz. Farewell. El Toyota se cimbrea sobre el
desvío. Se eleva la tierra del afirmado. Se detiene. A
la intemperie, junto a las columnas rosadas, reposan con la puerta de
la habitación abierta, las doradas prostitutas.
Diana con ensortijada peluca rubia. Sostén y calzón de nylon. Sobre el catre, levanta el cuello
y las nalgas. Pero nada sucede.
Karina, imponente zamba de zapatos blancos. Un bikini de vedette de
boite barata de Lima. Lentejuelas sin brillo, despegadas. Muslos duros
de negra joven todavía, sonrisa fresca. Los pasillos huelen a orines
acumulados. La luz rojiza desvanece el rostro de los putañeros. El

67
viento limpia la violencia de los corazones. Los taxis hacen cola en el
pequeño patio central. Las losetas en blanco y negro apenas se
perciben; sólo cuando un Datsun desvencijado prende sus faros y
penetra en él alguna prostituta acompañada del caficho. Pulsera de oro.
Lentes ahumados. Afuera ella es madre de familia. Dios no existe.
Los tres caminamos lentamente. Paco juguetea con el llavero. Pulga
con las manos en los bolsillos. Yo, contemplando a una negra riquísima.
Pasan. Pasamos. La negra lleva puesto un bikini a rayas, descolorido.
Playa de Chuyiyache, 1965. Lindaura, pistolera. Maroquera. Falda beige
tubo. Vuelvo a pasar delante de ella. Sonríe. ¿Se habrá dado cuenta que es la primera vez que
vengo? Desaparezco.
Estoy solo. Un viejo con un chicote en la mano camina detrás mío. Me
sigue. Me está tasando. Pero no dice nada. ¿Querrá expulsarme por
menor de edad? Sudo. Es el Diablo.
Lo siento bramar. Tiene los pelos revueltos y huele a cañazo. Su saliva
resbala por la comisura de los labios. Guarda distancia y me mira sin
atreverse a hacer nada.
Paso por última vez. La negra, que ya es sólo el recuerdo de una
infantil arrechura, me besa en el aire, y con su alma de sogas
acariciando el torso de su piel me alejo buscando a mis amigos. Qué
miedo. Ya no están. Volaron a los paraísos equidistantes de la
memoria.
Me abrazo a mi camiseta desteñida en azules concéntricos estallando.
Un nudo en la garganta. Joe Cocker en Woodstock. Cine Variedades.
Carry Snodgress.
Diario de una esposa desesperada. Con Jimmy en el 7 1/2. La primera
vez que caché. Jaime Estrada/Antonio Ruiz, "Morena". 75 soles
peruanos.
2 años después. Coca está en cuclillas al umbral de su cuarto. Lleva un
corto vestido de flores marrones, escotado por detrás y por delante.
Chata. Ronca. Carnes algo suaves. Algo tiernas. Leche y transparencia.
Sensual. Curvilínea. Acepta mi proposición. Estoy decidido. Ellos
piensan que yo ya fui. No saben que es la primera vez, aunque se los he
insinuado. Cada quien se pierde en el silencio. La puerta cerrada.
Desvístete.
Ella se sorprende cuando le cuento que es la primera vez. Acércate
dice, coge el falo dormido, lo corre y aprieta despacio, alumbra con
una linterna de otorrinolaringólogo. Otra vez. Ya, sonríe. Su vientre
avanza y se estrecha al mío. Hay música. Me abraza y despejando el
rostro con un ademán en el que rítmicamente contemplo el vuelo de los
cabellos negros. Coca junta su cuerpo al mío y bailamos desnudos el
bolero, el rock lento que sale del radio sin saber qué soledades

68
alumbra bajo el cielo de Piura, la ciudad del Deseo.

Piura, la ciudad del Deseo. Toña Cordero espera mi llamada telefónica.


Es Venus. Shocking Blue. Azul belleza putrefacta. Recuerdo. La memoria
quema los envolventes recuerdos. Chamizo. La fuerza de Dios. Yo pienso
en ti, Toña, a esta hora del sol. Escucho el sonido múltiple y triste de
los pájaros en los jardines de al lado. Escribo y reconstruyo el mundo.
Almacenes Sol y Mundo. Canal 2 de TV. Escándalo. Un jovenzuelo que
ostentosamente se proclama poeta, ha osado atacar, vituperar a
nuestro Presidente de la ANEA. Ahora sólo tu imagen Toña, en short de
jersey verde y tus caderas de Yacila sobre el pavimento 2 de la tarde,
esquina de Santa María y calle A. Una sonrisa tuya y el polo
desmanchado. Joe Cocker. La primera vez. "Siempre hay una primera
vez". Nuestras llamadas telefónicas. Una guitarra para ti, la lluvia de
este viernes de marzo. La noche de San José.
Night of San Juan. Che Guevara en Bolivia. Mis artículos políticos en revistas a
mimeógrafo. Tus alados comentarios. Tus inocentes. Puro
lenguaje. Un diamante engastado. El amor. Toña, esta carta para tu
silencio tuyo, de ti atravesando el silencio que rodea la Muerte. El
cadáver de mi padre. Helado. Tito's. Camino a la playa. ¡Roysito, ya está
servido!
Hay soledad en los caminos mondos, hay soledad en los vahos siderales.
O quizá mi amor me está aguardando. Toña. Dónde. ¿En el laberinto
psicodélico de estas páginas? En el horizonte de verano 71. En la
lluvia y los timbres electrizados. AMHOR.

Ipa. Tus mini-pool. El Teatro. En la glorieta de Santa Isabel, mi cabeza


de pelo negro. Rock'and roll. Entre tus muslos. Pantalón azul marino y
mocasines de chiquilla bien. Soñadora. Voladora. Un gusto extraño por
las cartas. Escribir poemas. Uno para esta noche a las 8. Y fumm allí
sobre antiguas veredas y columpios y sauces. Destrozados. Ana María
Iparraguirre. Canción que se fue como el viento en el aeropuerto. En la
nada de las próximas páginas.
Tengo 16 años. Pienso en Toña. Pienso en tu sexo. Vallejo. México.
Estudio en el Colegio San Ignacio de Loyola. Masturbación. Soy un
solitario. Soy un asesino en potencia. Stephen Hero. Muerte. Quiero

69
escribir una Canción. Algo realmente divertido. Something Big. Cine
Municipal. Luis Bruno Seminario. Plazos. Fuiti Guzmán. Abimael
Guzmán. Quiere decir "Bueno". Hombre bueno. Barba gorda. Jefe
supremo. Dios. Semi-dios. Matar. La historia comienza un día de sol
sobre los jardines limpios de Santa Isabel, la urbanización del mal.
¿Por qué del mal? ¿Te confiesas? ¿Qué le dices al cura? Que te
masturbas 7 veces seguidas, mismo Larsen? O una claraboya en la infancia ilumina de sol el
recinto donde soy acariciado por una perra
joven. Dulzura de verano. Refugio de los dementes, de los descalzos, de
los desesperados, de los azules, de los mortales, de los falsificadores.
Hurí. Punkt.
A ella la conocí en un bar. Tocaba la guitarra con la mano izquierda. En
su boca yum yum las pastas eran sensitivas. Más que una canción
cantada a media voz para no despertar a los viejos poetas borrachos
con sus panzas prominentes. Piura, estupidez fantástica. Soledad de
masturbación, Mariguana, Martha Wanda. Pampería. Una tal Elena. Con
Jimmy en el Tiburón. La Muerte es una bella palabra. Vamos volando al
burdel en el Fiat 600. Los colmillos del Diablo. Persecución.
Aquí en la carretera uno se siente bien. La mente se libera de piedras y
palos traídos por el mar de San Pedro, tanta soledad, tanta arena,
tanto oceáno recibiendo el esperma. Bajo el agua, bajo la trusa naranja
de Ena, la belleza y mi corazón desnudo entre las ruinas. Ámbar. Otra
cerveza. El pelado Onasis. Ena se sumerge en el olvido. Sus ojos negros
y dormidos se funden en el mar. No hay nada, sino divagaciones
pérfidas, en la noche estelar. En el vaho del oscuro hueco. Inmensa
sepultura. Este hombre está gobernado por la Muerte. Hay que
liquidarlo, desprenderse de él. Puede contagiar. Hacha con él. Alegría.
Himnos. Aleluyas. Ceremonia secreta. Perfección de los sentidos
descontrolados. Inauguración de un cuerpo. Fruta nueva. Selva.
Cemento. Óxido. Neurosis.
Acostumbraba a llamarla por teléfono después del colegio. Su vestido
azul me gustaba. Un conjunto rojo de flores. Su sonrisa: Su trompa
joven. Sus labios. Sus dientes en punta. Lo rubio que había en ella. La
alegría de saber que existía. Que podía llamarla y escuchar su voz
adolescente, su voz de 12 años, de Primero de Media. Toña, canción de
Traffic Sound. América. Chicama Way. Guitarra tu cuerpo. Amor
platónico.
En el club Grau, una noche de Bingo, te acercaste a la fiesta de Knaup y
entraste al salón cuando Aroma preparaba un rock lento. Eso hiciste y
tus cabellos volaban con las ondas de Chica Pagana en el punteo del
Chino Montenegro. Campolo a todo trance que yo toque bajo. Y el loco Álvarez, sacando
partido de su aire a Mick Jagger. Un Jagger Cholo.

70
Pero Rock.
Tu voz en el teléfono. La suavidad de la tarde. Entraste a la fiesta. Y te
recogí recién desembarcada. Inocencia. Maravilla. Hermosamente
abrazados junto a la música, dentro de la música, en el vértigo
ancestral, mágico y delirante del deseo, la música. La única vez que
estuviste desfalleciente entre mi corazón y el tuyo, bajo la tela
pequeño-burguesa de nuestra juventud dorada.

Ipa. 5º de Media. La camioneta celeste. Un veterinario. Sortija de oro.


Apareces a las 9 de la noche atravesando mi ventana de aprendiz de
brujo, escribiendo este libro, la velocidad de tu pelo elevándose en el
marco del timón y tu perfil. Tu polo incaico. La manzana que adorna tu
frente. Frenada. A ras del suelo raspa la greda en la llanta. Apago el
fluorescente. Estoy frente a ti. Me levantas. Soy un levante. Un puto
inútil. A tu lado vuelo por las pistas de Santa Isabel. Las casas son
rosadas. Los postes se desintegran en mi visión de cloretilo. Un
corazón que lo sostenga. Beso tu sombra, Ana. Lo parco y lo bello y lo
triste. ¿Te acuerdas del Yio? La yugoslava te llevó el biberón que se
quedó en el parque. La leche. Ese vestido Maternity rojo, azul,
amarillo que llevabas la noche de Semana Santa en que bebí por
primera vez. Los senos. El escote adecuado. En el Chechento, el amor
existe. La muerte de Dios. El Vacío. La camioneta se detiene por el
Cementerio Nuevo. La gasolina es refrescante. Ahora pones tu cabeza
sobre el respaldar y el marco de la ventana, en el vértice donde la
incertidumbre poseyó nuestras almas, a esa hora de la tarde o de la
noche cuando cada silueta es más hermosa que el tiempo levantado
sobre la arena caliente. Arbustos removidos y el aire suave con
nuestras caricias sobre tu cabello y la soledad. Yo, poeta. Tú, Ana.
Anita, sólo para el momento más sublime, jugadora de basket, con tu
polo deportista en la oscuridad del "53". Ron con Coca-cola. Night Club.
Parejas. Chapes. Tú & Yo. Sudada. Calor. Piura en Diciembre. Caminamos
por la calle Arequipa. En la profundidad de la noche, cadáveres, sexos
mutilados, cuerpos sangrantes, hachas, polillas, curas. Teatro Municipal. Plaza Salaverry.
Vicky Boni. Sandwich de pavo. Infancia. 5 soles. Un polvo, 5 libras. Y para ti Anamaría
241490, una carta con
plumón negro. Tu alma de Academia Brown y María Goretti.

71
5

Escribir, una pasión lúcida. Lúdica. Ludo. "Estrella" la prosti, como


decía Tato Cortés. La Mayte. Nombres así. Desgranados en la
temperatura de los recuerdos, los informes. El cura Cobos. Se quitó.
¿Quién se queda? Al final los concurrentes abandonan la reunión en
medio de lágrimas y pensamientos puros. No era lo que habíamos
soñado para ti. Los dioses, los padres: Los policías. Los calzones. La
segmentación de la corriente interna del habla. Mental. Sabor a mentol.
¿Para qué/Para ké ssssscccrrriiiibbbbiiiirrr
Omphalos. He allí la Música. La divina pomada. La quinta esencia. La
última Coca-cola helada en el desierto. Y Cuál es tu proyecto? Nunca llegarás a nada.
Anamaría, tu estrella blanca sobre el fondo en la
fotografía, tenía ese aire nuevo de los vientos en la Av. Grau junto a la
Bombonera, en un tiempo que precedió a la desaparición de la belleza.
Criatura. Dulce Caridad. El sonido de los autos. Oh Dios. Odios.

Piura, canción de Los Yorks en la esquina de Santa Inés, el barrio del


Atleta. Me enamoré de ella en una fiesta. Tenía un blue-jean gastado y
polo a rayas. Una cara antigua y sin embargo joven. Rulos. Oval. Caderas
de churre y baile de más de 20. Queríamos ser grandes, adultos,
circunspectos. Nunca lo conseguimos. ¿Qué conseguimos? ¿Qué
conseguí yo acaso nada "conseguir" "lograr" palabras de dinero,
palabras doradas de putrefacción. Charo, así se llamó tu sister Atleta
y la guitarra del chiquillo Perich en la azotea de tu casa, con el gringo
Tom del Peace-Corps (CIA) la mano gorda y roja sangrante y el Chino
con la chaveta automática "A ver, para probarla" y zas a
la palma abierta del gringo y el estupor en el rostro del Chino, Carlos
García. Adónde fueron nuestras últimas conversaciones en la puerta de
la percepción pay Pachitea por las afueras de la noche. Tierra, alcohol,
tus palabras queriendo expresar lo que tu corazón sabía. Es música,
Chino, el amor y el silencio nos conmuevan bajo la inocencia de las
estrellas en el cielo de las adolescencias perdidas, a la luz de
ingenuos preceptos, administrados desesperadamente por quienes
creían salvarnos, mientras nos castraban, domesticando belleza. Pero
he aquí que Omphalos y nosotros continuamos erguidos como la puta
del vestido rojo y la cartera roja. En Lima. Una mujer es prostituta.
Avanza unos pocos pasos, se cimbrea, se calla, se muere, se ríe. Pero
es joven y maldita. Tan solitaria en la noche de autos robados y

72
corazones. Heartbreaker, Grand Funk, 72. Ayo Rivasplata. Carlos Silva,
enigmas de la memoria. Laberintos de rock'and roll en el colirio E-
yemo de los nuevos románticos. Música. Todo es música. La calle, los
cantos del micrófono del frutero, la voz de Rosa, la de piernas blancas
y cerebro obtuso. Oh qué haré con Lindsay Anderson en las montañas de
mi mente. El Dr. –genio loco de Hospital Britannia se bebió un vaso de
jugo nutritivo de cerebro humano. Algo delirante. Charo García. Sólo tu
cuerpo de jovencita idealizada en cuatro fiestas seguidas. Querías que
fuera un personaje de tu diario. Te olvidaste de mí tan rápido como me
entusiasmaste. Ah canción de 15 años, muerta como amor que renace al
conjuro de mi escritura, de mi música, un fuego en el latido del vacío.
Sólo para matar hombres, humanos. Vallejo atravesando dormido estas
páginas. Este es mi libro. No otra voz en el TV. En el vuelco del corazón
cuando te vi. Y quise amarte como diosa cotidiana, diosa eterna.

Cuando Pachy De Armero se fue de Santa Isabel, algo del viento dulce
de las casuarinas salvajes a las 6, se fue con él, con sus lentes vidrio
botella. Pachy De Armero y sus chimpunes. Las chicas de la Quinta
Cúneo. Los balines. El verano de Patricia del Valle. Y el verano de otros
nombres que desaparecieron en el frío del silencio, cuando las
canciones que bailaban Giuliana Cereghino o Elisa o Nadie o las piernas
de Marcela Zapater. Qué soledad Pachy ahora que recuerdo tus amores,
mis amores, los amores de Pulga, Choza, Yoyo Amico: Loco Ball. Qué
alucinante. El Pato Hilbeck. Palitos. El fútbol. El amor, el deseo, la
arrechura, la chiquilla de la tienda, la del escote celeste y la cintura
quebrada, plateada a la luz del baño de la tienda. Los plátanos, los
víveres, las nauseas, los espermas, los confesionarios, el carey de los
curas en el cuello. La locura poética y marítima de Porfirio, el cura
geógrafo. ¡Falta! ¡Chispazo! La Veneno. El amor de Guido Seminario.
Pato, trae la dum-dum de tu abuelo. Nombres y señales, desnudeces y limpiezas. Uno escribe.
Y muere. Pachy De Armero se fue a México. A
volar joven. Santa Isabel ya no era la urbanización de las amapolas
girantes, tipo ojos azules-verdes de Ana Cecilia Sebastiani. Juan-Ro
de ti me acuerdo en este instante, de tus camisas de flores plomas y
tu dulzura. Te fuiste a morir una tarde de Diciembre y yo lo único que
pude ver fue tu bicicleta, tu bici, la que te acababan de regalar por
Navidad, doblada, con sangre en la puerta de tu casa. Pero tú ya no
estabas, Juan-Ro, y tus barquillos que llevaban lagartijas muertas,
cazadas por ti, en el pozo que hacía un jardinero, el que había

73
sembrado las casuarinas en el desierto, allí donde acababa la ciudad.
Tú Juan-Ro, y Anacecilia parados junto a mí, una tarde de 1965,
contemplando el viento y la ligereza del silencio en la nada del cielo
rojizo que encapota estas imágenes, fotos de un corazón solitario,
bañado por el haz de luz de los carros en las desiertas avenidas de
Lima en la madrugada. Pienso en Juan-Ro, en su pelo castaño cerquillo
cayéndole sobre la frente, y su rostro azul y su estilo calmo para
conversar, para mirarme; en ese crepúsculo y en otros hacia donde nos
llevaban los primeros días de nuestra infancia en la desolación urbana
de Santa Isabel, en ese tiempo.

¿Recuerdas ahora los jardines limpios y las mayólicas encajetadas,


después del amor en construcciones abandonadas, sin piso, sin
ventanas, en las nuevas manzanas de Santa Isabel? No, no recuerdas. El
pasado ha muerto, te repites. El tiempo no es una muchacha montando
en bicicleta por el parque y la glorieta. ¿Qué es entonces? Sino el
susurro del amor que esperabas ocurriera en tus oídos como bálsamo
de piedras fragantes y caricias de muñeca.
Oh posible desnudez de la muchacha de enfrente. Oh visiones de pálido
neón sobre el atardecer impávido de los muertos. Un rictus de belleza
en el rostro de mi padre, en ese tiempo sonriendo con mi madre
llegando en el Plymouth a visitar la casa nueva. Y la primera noche
dormimos sin chapa porque Bruce nunca apareció. Mi padre no debió
morirse nunca. Los cielos ahora me contemplan como un paria
recordando estas angustias. Lo sobrio que hay en mí. Los crímenes
pensados. La muerte creada por el hombre. La Cruzada Eucarística
Misional. El cura Fernández gustaba tomar el pene de los niños entre
sus manos y sentirlo como algo que era suyo y sin embargo su temblor
era excitante. El deseo de los cuerpos. La suavidad de la piel y las
cortinas bastas tras la mampara de vidrio en que decía Gabinete
Psicotécnico.

74
9

Yo estoy con mi padre entrando al Club Grau, siento el fresco entre la


puerta de vidrio, son las 5.30 de la tarde, domingo de Carnaval, voy
disfrazado de Dominó, así quiso mi padre, con su sonrisa íntima y
perfecta, hoy volada como flor arrancada por un viento demasiado
fuerte o demasiado bello, nunca lo sabré, vagaré desnudo por los
techos de mi imaginación desolada y no hallaré nada parecido a él,
acariciando mis cabellos en los lejanos días del amor sencillo y la
emoción palteada. Oh corazón de María, virgen de la inmaculada concepción. Divinidad
herida en el costado, fumando echado en la cama
nupcial con M. mixtos interminables enfrascados en los programas
nocturnos de la TV, dísticos reunidos por encontrarle un sentido al vacío de los cuartos y las
habitaciones abandonadas por quienes viajan
a ningún lugar, los muertos, los difíciles, los que nunca esperan ya
nada, los que siguen escribiendo como un tormento asumido por deseo,
por muerte, por enfermedad. Yo entro al Club Grau de la mano de mi
padre, tengo 5 años o menos o todavía no he nacido. Busco belleza en el
aire de esa tarde y veo que frente a mí tuve un amor impresionante, lo tuve
como se tiene una salida al mar en la nave desierta de la noche. Volví a
encontrarme con lindas niñas de Piura subidas en motocicletas
giratorias, hechas un amor con las faldas levantadas y los blue-jeans
abiertos con las piernas retocadas por el sol de Colán. Oh nunca
computé mi soledad, mi pánico, mi canción escrita. Estos días de
silencio son el fuego en donde amé tu silueta dispuesta sobre carteles
iluminados con faros amarillos, en noches repletas de gente en
microbús, por todo el tiempo, mandolina de juguete, despierta,
desmádrate, huevos de paloma mía.
Ahora lloro al recordarlo.
Siento una pena horrible como un puente que no va a ningún sitio, quizá
el viento, seguro que no, al vacío de los pensamientos torturantes y
las voces apagadas. Las sábanas cubiertas por la pena inútil, la
sensación de perder la vida sin darse cuenta; una luz intensa de ovni
posea este corazón y lo mate.

10

Caleidoscopio. Toña se acerca y me mira tocando la guitarra. ¿Quién es


este muchacho asustado que toca una canción como Black Magic
Woman? Soledad de ti.
No escribo por placer, sino por venganza. Por liquidar esta noche

75
maldita con unos cuantos recuerdos. Así hacía a los 14, a los 17
fui por primera vez al burdel. Ya conté esa historia en solitarios
versos que nunca llegaron a manos de Karina, ni de Coca, ni de Irene
Salazar o Gloria, seguramente la más bella de cuantas atravesaron
estas páginas cuadriculadas. Y de los vestidos de Toña y su nariz
respingada guardo el recuerdo de la heroína que abandonó la felicidad
el día de la lluvia más fuerte ocurrida en ese verano, donde habitó la
incertidumbre.
Todo es ofensa en esta noche enferma en que me desangro por puro
gusto. Por la soledad de quien no escucha nada en la aproximación de la
madrugada. En el canto de un poema que quise escribir para conquistar
a Toña y que ella jamás llegó a leer. Cuánta soledad para llenar lo que
se supone es un libro de amor, un ajuste de cuentas con una
adolescencia podrida en los sótanos de las casas-hacienda, allí donde
los funcionarios de la Reforma Agraria no llegaron nunca.
Pobre Juan-José te dejaron loco por no permitirte un amor. Fuiste el
chivo expiatorio de una clase que no supo sobrellevar su decadencia.
Así mueren los héroes ¿no? como la película del Municipal, allí donde
comenzaba la pampería. La chica Higginson. La yegua Fossa nos decía
que era muy bonita de cara, pero que al abrazarla le apestaban los
sobacos y debía abandonarla en la oscuridad de la sala. La rata muerta.

y 11

Piura, soledad de la bolichera a las 6 de la mañana. Qué odio: el


colegio. Estoy seguro que el cura Casey se masturba.
Ah canción de adolescente. Lourdes hermosa con sus ojos violeta me
aguarda a la salida de la misa. Las monjas del Santa María ya saben
que me muero por ella. Ella afirma que soy el chico que se declara con
la mirada.
En la esquina de las casa de los Linares esperamos la bolichera. El
chofer le da a Pulga un papel con una declaración de amor y odio
firmada por La Sombra. Cecilia Anticona. Yo me río y me pierdo con
mi soledad. Son las 3 de la mañana y yo sigo escribiendo. Ahora entro
al garage de la calle Junín, donde vi por primera vez el sexo de una
mujer y salí corriendo a comunicarle el extraordinario descubrimiento
a mi madre: Mamá, Ángela no tiene pipí, sino una raja. Supongo que
estoy pensando en una banca verde de la bolichera cuando quería hablar
con Tato Cortez de nuestra admiración por Los Saicos, cuando aparecieron en el Canal 2 de
TV en 1965 y aún antes en los orígenes más
remotos del rock en el Perú: los Pepper Smelter.

76
Mas lo único bello de esos días fue Lourdes con sus bermudas crema, el
día que la llevé al Country en bicihonda. Y aún antes cuando me
esperaba en la ventana de su cuarto en el segundo piso para verme
pasar y sonreír. Ella me dijo: en vez de escribir un libro hazme el
amor, pero se arrepintió al final. Chica Piurana.

77
INSANE ASYLUM
(1989)

78
SOBREDOSIS

Julie Christie llegó al hospital


muy de mañana y en sus ojos amarillos
brilló el deseo al mirarme en sesgo

Yo no hice nada yo sólo contemplé


su chompa rubia blanc bleu y
el sonido de los golpes del martillo
no logró desviar mi atención

Así pasaron las horas y en


ningún instante volvió la angustia
como en los días soleados en que
destrocé la alegría que mi padre
tuvo a bien heredarme

Ahora todo es luz en la comarca

Vino la Madre y me habló con suaves


palabras persuadiéndome con
su túnica impoluta. Yo acepté
rememorar mis días en la Enfermedad
y ofrecerlos como un ramo de rosas rojas
a quien escuchara estas negras
imágenes de extraña sabiduría

Por más que esperé a Julie, creo que ella


nunca entró. Me vi entonces obligado
a dedicarle una canción de mediodía
(mirando de reojo la TV)
como quien no quiere la cosa

Y en el frugal almuerzo conocí a Jacqueline


quien cogiéndome con delicadeza la muñeca
me dijo ¿Te gustan las canciones?
sonreí recordando
recordando
lo que quizá quisiera olvidar
pero ya veo que siempre uno vuelve
al lugar donde nació
para nacer de nuevo

79
"Tú eres el nuevo"
me dijo el patita
y yo sólo asentí con la cabeza
y pensé la rueda sigue su
motor sin fin/
Así sea.

80
CHICAS

Los alaridos de Jacqui


rompen la quietud del hospital
atraviesan –mismo láser–
la silenciosa madrugada en que
los enfermos duermen.
Ahora vuelve a gritar más fuerte
es ya un aullido de bestia acorralada.
Yo me pregunto porqué
tendrá que sufrir así,
porqué no la dejan libre
en su cautiverio mental,
para que ya no sufra más,
para que encuentre el sol
divino que alumbre la
oscuridad de sus ojos volteados

II

En esta tarde Miryam todo es bello:


Hay un sol como para Harrison.
Ya lo sabíamos la niña pelirroja y
de muslos progresivos era hija de la Coca
¿Y el apellido inglés de dónde lo sacaste?
No sé, quizá fue un vaporino que encalló
en el Llauca. Allí nació Madonna full
cariño y bondad de alma de leche humana.
Pero a ti que me cierras a cada instante
deslizándote entre los muebles y también
los enfermitos, a ti que no me hablas
o que me niegas una simple sonrisa,
a ti te escribo estas líneas desoladas
cuando ya la tarde es sólo un viento
audaz que anhela sacar de raíz
a los algarrobos más viejos/ aquellos
que inspiran secreta música, para
hacerte revivir Miryam.

81
III

Jacqueline las casuarinas 297


aún resuenan en tu soledad
las tardes rojizas que hieren
nuestros ojos cuando trato de
encontrarte y al final sólo
queda tu belleza aparentemente
páramo por la locura

82
LUIS HERNÁNDEZ LUDIK'

El mar de agua dulce


es como la playa inexistente
allí donde no existe el roche

no llores no es por llorar


es el agüita simple de la mar
pensé que quizá nuestro corazón
se había olvidado

83
ARS POETICAE

Yo camino por calles oscuras por calles


psicodélicas por puentes donde alguna
vez uno creyó conjurar su absurdo designio

Cuchita no me ama
no importa ya
me querrá
y entonces quizá
la soledad sólo sea el recuerdo antiguo
de sus muslos de plata
y la seducción de su sonrisa
el aire que respiro hoy

Bajo tu media sonrisa niñita


nunca crezcas quédate así chiquita
para soñarte cuanto antes

Vuelven los días en casa de Ana Mollet


de quien me enamoré sin saber leer ni escribir
quizá ese fue el motivo por el cual nunca
me dio sino su sonrisa de suiza y callados ojos

Señorita de ajados pliegues en el corazón


sigue llorando la tristeza de tus malas grabaciones

Me fui a las guaringas


a destruir el hechizo.

84
DOS TEXTOS

Otra canción para el "Niño Dios"


aunque ya no esté en el Crempt
y lo hayan sacado zanahoria,
su alma permanece junto a la fuente
revolotea por encima del jardín
y el algarrobo antiguo que me da
su sombra filtra la caída del tamarindo,
dulzura de la prostituta asesinada
por su amante-macró que se creyó
traicionado e inmediatamente agarró suicidio:
Quedaron ambos inertes cruzados
y el recuerdo de "Niño Dios"
se esfumó en el aire como un slide
que se destiñe bajo la canícula,
más Brando arranca ya su auto
y sólo piensa en el timón
que aprieta entre sus jóvenes brazos.

II

Hoy día abandonaré mi celda.


Estoy curado. Ahora
debo retornar a mis negocios pero
ya no más heroína, sino sólo el
suave murmullo del caño goteando
en la oscuridad. Así cambiando el
sentido de las cosas pueda quizá
que lleguemos a lo que nada somos,
sino risa y cuerpo y soledad
y una vez que me rebota el pensamiento,
porque no todos tratan de cerrarte
por la flor del rímac / y todavía
lo niega.

85
FINAL

Ahora hay un loco que camina por el hospital.


No lo conozco. Parece demasiado ario. Busca
cigarros ¿Cuál será su síndrome?
me pregunto, en el instante en que
lo he sentido deambular tap tap tap
sólo con medias y sujetándose la ropa
con la mano. No se sabe nada de él.
Pero quizá no sea tan salvaje
como lo pintan, quizá sólo padece
una depresión subpsicótica
& entonces habría que abrazarlo/
mismo brothers in arms.

86
NOTICIA

Escribir poesía –qué duda cabe– constituye el mayor acto de la lucidez


humana. Por eso quizá los poetas han buscado dominar el habla. Porque
locuacidad quiere decir locura o quizá quiere decir lucidez. Las palabras se
parecen pero son distintas. Las fronteras son a veces límites inaccesibles. Por
ello mejor es permanecer en la sobria embriaguez de un trago. Eso lo
aprendimos de Dylan Thomas, aquel que jugaba con las canciones que sus
padres en la iglesia le enseñaban para alegría de sus horas bajo los bosques
de leche. Quizá esa sea la única razón para existir. Una manera diferente de
querer. Yo que he estado, que he vivido un tiempo –el suficiente, el necesario–
en un hospital para enfermos mentales; reivindico no sólo la famosa frase de
Martín Adán: "Allí adentro se está mejor que afuera", sino el amor conque
uno aprende a vivir luego de esa experiencia. Amor que quiere decir
muchacha, amor que quiere decir: "Ni matar ni morir", como me dijo una
tarde de amistad y poesía Rodolfo Hinostroza/

&&&

87
SYMBOL
(1991)

88
A Rosa
éste es mi cuaderno músico

89
PARTE 1
PODER

90
ODIO

Amar a la persona radiante


Atrasar el tiempo
Tu nombre de cada esquina
¿Es o no es?

Descubrías tu amor en el silencio


De la falsa y la verdad
Karicia / Limpieza
En destrucción & Deseo

Algo así como la redondez:


Mara a ver Emma
Adorada Mul-ben
Riviera Tracta

Azur quitaron sin saber


(Se prendió el friser)
Como el abrazo del oso
Pero el manto brilló en tus pupilas

Cantaste por cantar


Negra en Puna
Esperanza dices “Cuándo”
Pasión, ya pues Tota-Lola

Luna Exquisita
Quieres brillar-sín
No te comunicas
Qué amor, es no buscar

Te dio risa y elegancia supina


“Juega a la mano cagada”
!Estáte quieto! –said la abuela
Te fuiste y me desolaste.

91
SOLEDAD

Cuéntame un cuento, Mini, como


El dulce olor de tus ingles.
TV distrae pavimento (
Exigías una palabra que
Se demorara en aceptarte

Toda la patota te amaba


Mas no supo expresártelo
Sólo fue el dichoso afán
“La luz armada” , la oscura curva
De tu falda en las piernas,
Paradas como un pincho-bandeira:
33 diga 33 y ella sólo existía,
Detenida en la puerta del baño
De hombres, con su perra pituca
Negra rubieza aviesa a campo traviesa
& curiosa
A despecho de tu inocencia
(Tu búsqueda desesperada de Amor)
Era el síntoma de estos versos
Que no se parecían a nada,
Sino a lo que tú poseías
En tus muslos redorados,
Tocados por el verano-sol y
El fluorescente de tu expuesto
Resplandor, blindado pero no ciego

Creación Combo. ?? ZZ /
Las negras hablan en la encru-
cijada: ¿Dónde queda Lima?

Te vas sola, es la recomposición


Del Yo, en la suma de experiencias
Interpretativas / Destrúyete Momento
Existe /

92
PUEBLO

Recuerda un año. No te das cuenta


Si te valz máquina en poesía no te sueñes
Te olvidas de quererme como el tiempo mata tu belleza.
Rosa roja de mi pukto corazón álzate calata

Ama sin mecer trata de besar tu sagrada inocencia


Palpita bajo sostén-rí secreta coherencia pájaros
En el amanecer inteligencia la más linda puta del
Diablo / pronunció una palabra en un idioma muerto

Mas vivía como sierpe en alto relieve / Podía ser


La más zorra “perezosa” una vez me leíste un poema
Que hablaba del blanco nivela tu nivel, chica mini vamp
Ira chupa sangre el hijo te la da graciosamente sin llorar

¿Pueblo? ¿Una figura de putamadre para Nadie?


Vuela mosca a otra selva dale el tse-tse
No creo si ella está más arrecha que Virgen María
Que tú amaste –en la venda sin rostro de tus nombres

No sé que sé yuyachkani un vacío en el supaypawawa,


La wawa nos llevó a sus caderas revoloteando
Como el pelo de Enigma (que bailaba rock & roll)
“Personae” se llenaba la boca desconocida /

Fresca Doctor-Loco dictas al viento


La maldad la llevas como un roche en la solapa –Mírala
Oh Margx-mar –diga 33- intentaba una lucha sin engañar:

poema: Mónica deliciosamente en el crepúsculo


Se dejó caer en el nombre discreto de sus puros sueños
Aceptó su belleza de mona humana recién perfeccionada
Por la tierra, el mar, el aire las antennas de tv, gózala en la finura del gesto

La búsqueda del dulce estilo nuevo donna única coronada


Santo amore poesía es omiso o que no tse-tung
“Ya no jodas” dijo la matrona en escencia bondadosa
No era chinita, sino que la color se creaba en su plena risa.

93
GUERRA

La Poesía es un texto contra el Mundo


Demasié asaltó el cielo. Encuentro. Verdad. Fusión
“Oye, qué estás hablando” y allí fue donde citó
Esa rara relación relativa einsteniana entre poetas y militares

Se recuperó tu lindísimo cuerpo sólo escuchando la música


De las paleteadas más arrechas en el íntimo del reverso
De tus calzones, hábilmente quitados con la furia de la mujer
Alejada en la nitidez del clip que he grabado para tu paja

Porque un hombre solitario es también un hombre


Y si redacta internos documentos aprende otra experiencia
Quizá la del amor a golpes de muchacha con manos de greda
En escándalo callejero cantando con tu perra voz

Dorada en el reflejo del vaso de cerveza y tu histeria


Qué hacías buscando guerra un sábado por la noche
Mientras el rioba se desbordaba desgranándose
Y las muchachas descifraban su música tristísima

Tú –una de ellas– pura imaginación radio curie


Que te limpió ese día de toda tu amargura y eso
Deberías agradecérselo al Señor (en su negro precipicio
De dolor) y tu eléctrico soto, urbano en short color de tu nombre

Hagas lo que hagas, perdóname con tu plisada caída


Que era de la abuela, quien te quiso no más que mi
Alma encadenada a tus axilas de vampira peruana
En el rímac ausculten sus designios religiosos

Esta es una arquitectura simple como tu lenguaje


¿Qué es la guerra? preguntaste ¿Siempre no hemos estado
En es? ¿En qué, ah? Decía como acariciándose el rompeolas
En el que magnificó sus días y escondió su inocencia.

94
PARTE 2
MATAR

95
DESEO

Tan sólo quería arrancarle unos bellos versos


A un destino que se negaba a pesar de su belleza
Mas el crepúsculo la despertaba sensitiva
Dando vida y amor en sus canciones cantadas en el ñoba

Oídas en un rito impalpable “en hu-mitos” -XX Salazar dixit-


Brujamente al m.o.m.a. new york perú país del mañana !Cuándo!
Todos los presidentes todos los presidiarios todos los prisioneros
Se rayó rayer decía maría bajo el umbral detenido por amor

No debes contar, pero te saca la vuelta el lenguaje


Oh romántico por joder dijo pensé que había llegado
“¿En qué estado eres?” –preguntó bárbaro antiguamente
Conocía la inteligencia del deseo aunque no la viera

Sábado eternidad del instante musician de la medianoche


Una canción solitaria no es violencia o es el amor
Que se transforma como silueta contra el horizonte
En un mar que nunca comprendiste por luchar contra el viento

Yo no me meto con una persona que usa lentes


La rareza del deseo no te desquitaba de allí me iba solo
Tiempo dónde mora tu secreta concha dórame en tu caca
Triste dentuda que bailaba escupiendo cadáveres

Todo me quitaste y todo me diste soledad sin tus hijas


Ya no tendré alegría sino sólo polución urbana
Pero no me corro aprendo fuego azul que Dios responde
Un momento fanzine escoge tus palabras y las ama

El mundo te ha de perdonar a su manera pura bajar


Por el silencio de ella has de redactar este documento
Por su quite de pista como puta bajo el faro de la noche
Extraña postura de la lengua en la punta de tu boca

Ochoita estaba descalzo por los Descalzos pero son dos


Ambos y los peores se quebraban y resurgitaban con su odio
En esquinas “donde aún se ignora a la incertidumbre”
Alguien mencionó tu nombre y el sol fue un dulce latigazo.

96
SOLUCIÓN

Química de los días echados en tu cama


Oh negra proposición lo más bravo lo conozco
Ya estuve y no fui ese botón que nadie te quiso ofrecer
Porque esperó que la fragancia de tu concha de rosa

Sea flor ensimismada en tu descansado ritmo


Oh morbidez del trópico peruano pueda ser se dijo mirándolo
Fuiste o no fuiste esta noche bajo los primeros síntomas
Escucharás y tocarás ese tema que te devolvía no sé

Otra opción sería la madrugada funesta como el fango


Sangrienta y fértil like a rolling stone hay una playa
Llamada Marilú que si llegas, ya ni el sonido del silencio
Calma la muerte. Porque de todos modos ángel en el tiempo

Te acercas al país del “Nunca Jamás” bajo la dictadura del


Proletariado, aproximándote al ocaso del nuevo atardecer
Escribiendo estos versos cuando ya la noche se pierde
Y las brujas me visitan desoladas para darme su perdón

Cómo entrarle al delicado tema delicioso de luxe


Con suave dignidad romana placía la esperanza en
Cuarto creciente en el pleno azur. Firma desusada:
“La noche será blanca & negra”, sin sobresaltos

Oscura para que no sea sino sólo música subterránea


Que otra se la lleva, yo no conozco nada / ni me interesa
En su silencio quizá compute el sonido del viento
Contra el mar que fabrica la ola que se arrastra

Amar es sencillo como un sol inexistente


Lo difícil es odiar, es dable el odio con ternura
Sino ándate a Israel. A ver si así no te va tan mal peruana
Pero ya te lo comiste, y no te atreviste a romper con la colonia

Ese fue tu pecado, ese fue tu son escondido:


Tu alma brillante en la avenida y viniste a escribir
Las palabras escabullidas en la nada del olvido
Pero ni así lograste callar tu desnudo amor por él.

97
TRIUNFO

Nunca pensé llegar a esta palabra nunca me dijo nada


Tan sólo apagar y prender la luz ya era una señal
Extraña como la madre delicada y quieta en su noche perfecta:
Nadie debía penetrar los recintos sacros del poema

Uno tiene que cumplir sin decir nada y dejar sonar


Tu ritmo en la camioneta del deseo (que odias)
Y lo buscas para liberarte de tus fantasmas exquisitos
Algo has de lograr pero no lo que tu alma te exige

Para ver el sol te oscureces usas otro dialecto


Sales hasta donde te aguarda esa abierta puerta
Que es lo mismo que soñar con estos versos
Hundidos en tu bella soledad perdida iluminada

Por tu neón chibolo bajo el tintineo de la incertidumbre


Pero así continuabas amando con los símbolos
De tu ríspida tristeza color rosa de amargura urbana
Caminando con tu puta belleza desolada

El triunfo llegará así ni tú ni yo lo comprobemos


No te prostituyas más de lo recomendado
Acuérdate del pájaro solitario y su dulce condición
No desesperes en hallar un bar abierto en la midnight

Siempre es una forma distinta en la reja de tu sensualidad


O es la llamada del padre “alta como un penacho de plumas”
Destruyendo tu lucha interna / tu blanca vestimenta
Obligándote a una lúcida apariencia sin rencor

Levantarse es volver a sentirte como canto


Lluvia que me baña con tu lindura todo fin
Menos el amor que se parece a la victoria pero
No es aún el designio equidistante sino tu bella

Aparición en blanco comunión sin reservas


Con la frecuencia modulada de tu divina agonía
Nada estalla sólo vibra la noche de tu útero
Oculta como madre que se quita sin despedirse.

98
LIBERACIÓN

Tu primera respuesta fue el llanto o unas voces


Que a esa hora ya no tenían base, sólo Dios
Decía su sabiduría fresca, su son diurno
Superando la separación de las duras paredes

Que en tu sensitiva alucinación era distinta


Pero similar al pensamiento que te invoca día a día
O es la madrugada la flor renaciente de tu extrañeza
No lo sabes, si lo supieras no escribirías poesía

Para avanzar sobre la noica de los brazos


Impones tu sencilla rebeldía y despachas sin violencia
Al salir haces un ruido icomputable revelas tu nada
O la prefiguración de las universales paradojas

A esta práctica llamarás provocación o nueva estrella


Lo bello y lo triste una llamarada que nunca se extinguió
Tus batallas por el lado de la luna, divertida
Lucidez que ibas aprendiendo con sólo desear

Así temías el agua de tus ojos, el reino de la


Dorada y putrefacta incertidumbre casi amoenus
Divisada en el insomnio de la máscara impaciencia
No te salgas de tu sangre y verás sin mácula ni odio

Los puntitos rosados en el hombro de tu alma son


Historias dibujadas en el sol vibrátil de tu sombra
Buscada entre los perros cuando escapan por calor
Si asciende tu alcohol es entonces que el ángel continúa

Sabías que era un sinuoso y largo recorrido


Aspiraste el dolor de todo un pueblo y
Rezando en el imperio de la infancia divertida
Como el viento remueve las prendas colgadas del alambre

Nunca púas nunca heridas una voz que te dictaba entre sueños
Y su risa te pudo dar lástima porque en su hueco
Expresaba otro sentimiento que atraparás el día de la porciúncula
“Ya me cachaste” dijo en la puerta de la iglesia

99
Doctrina no te encuentro no me bacila tu falsa minifalda
No sé lo que me gusta de tu cara llena de monos
De efigies arrancadas a la cábula de tu pierna izquierda
Colocada como un picasso sobre el ocaso de tu beso

Juega me decías no te canses porqué no te burlas


Como yo de ti y de tu amor cojudo como burro en primavera
Es que yo no soy vallejo yo soy santiváñez el que no
Comprendió el feo saludo del lumpen cuando nadie lo detesta.

100
PARTE 3
IMAGINAR

101
SUCUMBIR

El corazón habla en lo oscuro o se remece


Es lo mismo mientras nadie se te acerca
Porque nosotros olemos a esa fiera repentina
Que ya no se usa tiembla la palabra cuando

Quiere no hacerse ver, ser discreta como ella


Por fin en su errabunda sin razón de virgen denunciada
Por su propio padre, lo que no explicaba sino
La hipocrecía desalmada de una sociedad desnuda

Por los ángeles del Señor tirando para cabros


Pero inigualables amantes de la Rosa preocupada
Por las apariencias hay oro en la oscuridad
La que tú gobiernas, la que nunca finita

Recuerda el verano con su barquimiel de barrio


Preso sólo de amor like Señor Cautivo de Ayabaca
Adornado con flores y petardos y corona de espinas
Porque escribí estoy vivo, no se acerquen

Me aleccionaba la samaritana y me exigía revisión


No es el número que representaste sino el cual
Creabas a cada instante justificando auto
Conciencia que te mataba con caricias espeluznantes

Debidas al dolor que te producía tu negra sociedad


Lo posible obsedió tu mente hasta el rico delirio
Sin amor también te puedo amar los pasos que transcribas
No te buscan sino te hacen brillar únicamente

No hay pronunciamiento que te pueda dar


Yo sé que tú quieres tocamiento como niñita azul
Lo tendrás a tu loca disposición vital o distraída
Nadie conocerá tu fiera sólo el poeta o sea

A ti qué te importa cuando termina la noche


Aunque sí intuyes en tu blanca destrucción
La alegría de saberte amada sin límites
Con la geografía de tu cuerpo no hay pierde.

102
DELIRIO

Suena la puerta de Euxebia si bastara con el nombre


Qué lindo sería dijo y su bocota no contemplaba
Sino el deseo de saber de conocer otra feliz igualdad
De caracteres diseminados como amantes entristecidos

Por la falta de espacios donde la distancia se desplazara


En círculos suavena el diablo es tu animal vital
Confite de callejuela montero con mabel la del veinte
Y su raya cleopatra cabeza de casco y boca de toulusse-lautrec

Habiendo recordado la orden del sol de tu luna de paleta


Urbanera distinguida por no se qué cómputo de olmo
Violando tu himen de papel olvidado como una fiesta
Que acaso nunca existió sólo fue la mordedura de la

Bestia sagrada brassiere de seda lúbrica echando agua


Por las santas huevas contra el frío pavimento
Tan sólo por lucirte era tu lindura más pura y más puta
Te arreglabas para hacerlo mejor te pintabas de rojo el culo

O eras la coleccionista de ese film que no te gustó


Y sin embargo recordaste en homenaje al día inesperado
Hablaban de la guerra como de una sucia palabra
Pero al doblar la vuelta de tus cartas te sorprendes

De tu tinta en soledad lo que brota espontáneamente grama


Junto a tus multa gracilis te puer in rosa expulsses
Decía –por no asistir a reuniones que ellos convocan
¿Pero acaso no tienes la debida información

Acerca de los movimientos no dichos?


Sólo el gruñido de los gatos ataca la ternura de la noche
¿Y en qué plano ensayabas tu disciplina radical?

En el ritmo y todo por una santa no se puede


Avanza virgilio te pasó el yara yara compare
La nota brava de matar en el mapa inexistente
Iba dejando una sucursal del cielo y el infierno.

103
VIAJE

Arranca tu limpieza y no pide cuentas no pide ni


Un solo saludo ni se quita ni se va porque la
Extraña damita abra los tres trapecios por llegar
A su madre una verdulera que no podíamos conversar

Mientras la cojuda no te crea será mejor eso lo adivinas


Y no es ni medio canto el que vibrará mi talento
Tú podías creer o seguir meciendo recordando
Tu pútrida marxiana te vive dulce y amargamente

“Como yo que soy tu avellana erguida”


Wayno awayta aguanta tu angustia observa la luna
Que seguro es tu más calata forma de ser cual
Je suis antivariólico –pero eso era tan añejo

Como dos viejos y acolchonados amantes que rechazan


La muerte como tú a los dorados veinte años de tu edad
Tampoco-tampoco mi libro será robado porque
Practico eutanasia al toque como el churre de Muñoz

Quién te ha leído la mano dijo Drácula agitando su negra capa


Un afán exorcista del poeta porque para redactar
Este documento no requiero ni de tiempo
Cuál es la sustancia metafísica no es la risa de

La mujer ni la del hombre ni la del niño


La bulla nos despierta entonces una eléctrica
Quién sabe porqué hace las cosas la gente
Quizá ella sabe allá en su frígido verano

Date cuenta que conmigo no es frase pendeja


No sumas ni restas sólo vives soleándote
Abriendo las tres ventanas de Tampu-tokto
Los caminos se bifurcan como en la sierra maestra

El silencio manda en las esquinas dulces donde golpeaste


A tu cariño puro y no obligo a nadie ni quiero
Que me confundas con tus arrechos sueños
Fresca como carne límpiate el odio y bésame.

104
AVENTURA

Averigua o nunca averiguarás deslavazada


Sin documentos vagas por las pitucas soledades
Inteligente como el brillo de la luna
Lo rico se va solo no perdona sólo trata

De driblear su ritmo, mangiare like p.t. dixit


Mas no sabía tocar poetry tirar pal monte
O escribir desoladamente como nerval el abolido
Y hasta hoy rememorado sólo con tu cuerpo divino

Una palabra de tu boca repintadita en rouge


Bastará para seguir luchando porque sino
Qué es la musa entonces pregunta difícil
Pero no imposible una casa es quizá la noica

Azul con que has soñado tus quince años sin


Piñata te dolió más que mi agresivo amor
Que era en realidad puro cariño sin reservas
Una pasión lúcida o lúdica o quizá la cábula secreta

Mejor siempre es el silencio es elocuente


Porque entre tú et muá ya no habrán voces ni gritos
Sino la sombra pura de tus ojos en la reja
¿Tengo monos en la cara? Cuando yo digo lo que voy a hacer es que

De todos modos será y me da asco el comercio con la cultur


Dormir soñando contigo es dulcísimo píntate
Dicen que no has salido y ya sé que sólo me aguardas
Para lo que tú ya sabes sin pensarlo onírica y veraz

Difícil trabajo asumido con toda honestidad


Por la poesía abuela confite te he de visitar
Avanzaré sostenido potro salvaje en la pradera
Si tu amor me es negado ya Dios vengará

La sabiduría de tu malditez desnuda en las paredes


O igualito te subes a los micros a dejarte arrechar.

105
PARTE 4
ALLUCINAR

106
PLACER

Ven a mí sabor de mi alma negra robusta


Saca la risa con hueco que me diste una vez
Olvida las ofensas prefiere la caricia
Humedece tus ojos como soledad en la cimbreante madrugada

Si sales a tomarle el pulso a la noche


A veces hallas tristezas de muchacho abandonado
Con su chica de quince deambulando sin tener dónde ir
Y aún resuena algún tono perdido entre la tierra

La poesía justifica tu lujuria insatisfecha


El miedo a la cola de chancho el fraude de la historia
Es tu síndrome irreal cosmos donde habita tu amargura
Discreta porque ya no es tiempo del escándalo

Ahora sólo la seria sonrisa en tu recuerdo


Es el aire que me das aunque no quieras
A fuer de frescar la sombra de tu rosa falda
Fonte frida de tus nalgas triunfa la calatería

“Estoy haciendo un artículo” –dijo por llamar


A su hermano en / y le contó que sólo
Hasta el mediodía / se saltó la cinta
se soltó la cinta

Escucha mi cassette y luego tócame


Prepara un toque suenan tus cavidades
Se abre el mar arde la mixtura de tu nombre
Qué linda se te veía con tu blanco imaginario

Atardecer puro en la declaración directa del símbolo


Erecto tierna postura de tus curvas invioláceas
Amar ser destruir la muerte darte vida tu cuerpo
No respiras con tu humanísima condición de muchacha

Oh belleza no te decía porciúncula


Era el aire de tu enredado cuore que
Alegró mi martes trece rico como tú
Y triste por tu amor queridísmo.

107
ALEGRÍA

Eres la loca ya casi no tengo inspiración para ti


Aunque tú siempre sabes loquearme no lo podía creer
Tú te ríes a tu sana puta manera que no te interesa
Sino sólo en el instante en que tu mejilla se pone rosa de lima

Pero qué rara hora del verano te sacó a mostrarme


Tu dulzura de luxuria que recordaba recto cariño
Desde lejos también se ama desde la esquina
O sobre tus cierres laterales me vacié suavemente

Like your mind voz de medianoche sincera


Levantando el torso más silueteado, tu pureza pura
De virgen intocada por el ángel del apocalípsis
Vista sólo como la imagen de ti misma

En el día de Ringo te luciste por la vida


Que engañabas sólo por mecer tu culo cuando
Al contacto del falo hacías tus necesidades en mi
Boca dedicada y creada por Dios para tu alegría sin límites

A veces pienso que tú no quieres y lo haces


Onírica y decidida me arrodillo y te cacho
A tu estilo novo dime porqué lo hiciste sin saber
O ya sentías en / tú sabes que sólo me aniquilas

Con tu orgasmo de sangre sudor lágrimas y caca


Vida te la enseñé y apreciaste y la memoria
Del agarre sacudió tu contradicción principal
Esa luz solar que te llevó hasta la contemplación del falo

Rosa roja incomprensible en la nada eres triste


Bellísima cabaretera del “Voltaire” esquiza más
O yo te enseñaré siempre en tu corazón amado
A odiar como se debe la basura de las calles

Pero allí reinaste sin saberlo enquistada


Sin ropa portando la bandera negra de tu calzón rojo
Así me hablaste con húmedas fragilidades
Y no te gustaba despedirte sino ser destrozada por la pluma del amor.

108
RISA

Fresca te abriste el faldón izquierdo para darme


Tu iluminada soledad saludando al lumpen
Luego ya no lo vas a querer pero en el hueco
De ti misma te ríes con tu rojísima boca abierta

Caía el semen y te adornaba las cejas te depilaba


El delicia delicioso de tu modelo nocturno
Abría tu Tampu-tokto de par en par y parías
El nuevo ser soñado por los clásicos

Tu fibra blanca vibraba silenciosamente


Gustabas guarapear con título de noble
El gato te nombró desde pequeña y te azulaste
Rosada hada madrina de todos los deseos

Si algo te alegra corre ve y dile no le digas nada


Mejor suéltale una frase en su idioma guardado
Va a mirar por la ventana con persiana peruana
Y deja su copa de plástico en la cumbre de su sueño

El padre observa controla su soledad


Pero ella sabe cómo hacerlo y me reclama su gracia
La luz será apagada en penumbra y tu flota feliz
Surcará mis mares callejeros donde reina la frialdad

Una sola vez se ama y para siempre Rosa roja


Como la concha de mi madre / No me abandonarás
No te alejarás porque ya has encarnado semillasiembra
Hembra pura de los ojos arriba el corazón dilecto

En vano como tu jugo derramado en el sacromonte


De venus para el raya que no es quien realmente te raya
Sino tu propia sombra arrecha que es tu poeta
Salgo a ver tu silueta escondida en tu sola luz

No se ve nada además tú quieres sorprenderme


Y ver cómo reacciono pero ya sabes que tú con tu rosísima
Flor provocativa se pronuncia en tu sólido lenguaje
La verdad que reniega en tu pukto calzón de corazón rojo.

109
PAZ

La palabra se funde con el viento


Y de pronto ya no quiere expresar nada
Ha de ser el secreto que te revelara durante la boda
El influjo de tu alma sobre esta poesía

En la noche plástica el noctívago se prende


Y busca calma pero no la paz de los panteones
Menos el silencio de las celdas para alta peligrosidad
/Es un ritmo por donde la vida continúa/

Las ventanas de Tampu-tokto suenan a clarín de berlín


Y tú sientes el amor convertido en calle, en ti
Que eres la sin rostro, la que sólo con la chukcha
Mueve la bandera de sangre de su pueblo desolado

Y es virgen like you Rose, mil veces


Arrancada y todavía pura y todavía puta
Para ennoblecer la dignidad de la noche
Y dejar el semen cubrir la entera tierra

Porque te sigo sólo hasta el calzón en los tobillos


Y atraco en el sokotroko de tu vulva
“Tú estás enamorado” sentenció mi Lola
Mientras yo te negaba afirmando tu experiencia sutil

Hacer el bien no cuesta nada –escuchó


“Yo no quería una cerveza” y tomó
Mejor excelente / O peor divertido
No has perdido nada. Sólo lo blanco te curaba

Tenebrae si pecas con ella es


El miedo al suicida, el silencio de la calle
La sangre que se derrama por ti, la luz
Que sigue a la sombra te hace vivir

Senté a la cerveza en el paladar


Y la encontré amarga y la injurié
Ya son las once ya las doce campanadas
De las canículas penetrando el marzo:
Oi Konchetumá ¿Te lo has comido?

110
111
COLOFÓN

Este libro está escrito en peruano; es decir en el castellano


Hablado en esta parte de América Latina, que se llama el
Perú. Pero, más exactamente, está escrito en el idioma que
Se habla por las calles de Lima, después de la medianoche.
Por eso nombro aquí a Félix C. y a Carlos V. con quienes
Aprendí a caminar por la filuda punta de esa lengua.

El Autor.

112
COR
CORDIUM
(1995)

113
A Rafael Guevara de la Cruz,
San Francisco de Asís Alcázar Miranda,
hermano lobo,
the abuelo of ASALTO.

114
1

La Belleza no tiene ninguna culpa


Es sólo la floración del Señor
En forma de cavidad craneana

La expulsión del Extremismo


Se manifestaba en círculos
Pero todavía no entraba Homo Erectus

Poesía y no desaba herederos


Luchaba por saber si su ser merecía ese sufrimiento
Por eso a ella le enseñó su dolor para curarse

Mas he aquí que Virgen sólo se es la víspera


Cuando el silencio se impone como la muerte
O el corazón del sueño latiendo entre los asesinos

¿Quién que no haya amado no ha matado


aunque sea con la teoría? Teoría y
Praxis dijo mi padre y le dio tanta
Ternura a la madre, que la noche amaneció

EN SUS BRAZOS

115
2

Esta es la historia de un hombre solo


Cuyo oficio es la Poesía. Busca entonces
Alguien de corazón sin razón más clara

Luz Ariadna desenrolló el ovillo


Con su alegre fe, con su pura
Inocencia sentida tal la hermosura de mi madre

Una hermosura que a ella dedicaré


Por salvarme la vida con sus golpes
Tan suaves yo sé pero no hablaré

Sino cantaré y canto con el don del Señor


En su morada enamorada monje
De sí mismo narciso que no miró el espejo

En el fondo de la Poesía la Virgen ya


Estaba por aparecer en Cova de Iría
Pero prefirió el plan de los niños santos

No fue a Ninguna Parte, sólo César


Comprendió que Poesía es efecto de la causa
Del que fue su causa hasta que brotó la

SANGRE

116
3

Limpia siempre fue su sunrise


Hasta cuando regresaba adolorida
Porque ya estaba en la última forsam

Y era la Virgen que se iba transformando


Primero era la niña de rosada capa
Que una matinal soledad se dejó acariciar

La frente divina por la Santa sensualidad


Que hasta hoy extraña extrañamente
El expreso imaginario del sexo

Pero esta soledad no es por la sencilla


Tristeza que me produjo lo que le contaste
Al Ángel de la Bella Vista. Sin embargo

Tú sabes que era para convertirte


En la chiquilla Fátima que cuando
El poeta hacía caca en el bacín

Delante suyo tú te levantabas


El vestido y querías ponerte en cuatro
A la altura de la virgen

PERO SÓLO ERA


UN INTENTO
DE ENTREGA

117
4

Oh Virgen no quieres ni que te cante


Sino sólo hasta hacerme oír el secreto
del uater acercándote al cuartito

De la Anunciación, mas tu surgimiento


Tu apariencia iluminada es la
Coronada cúpula dorada que comprende la Poesía

A pesar del sufrimiento ha de llegar


El instante de Fátima, o sea la preparación
Del Estado de Gracia cor cordium que ardió contigo

Fátima se bajó el calzón y yo santo varón


Atiné solamente a meterle la cara
Y el recuerdo de su sexo gordito
Pleno de orines niños es lo que
Hasta hoy conduce mi poesía

Porque el Señor firma sus obras


Con letra de primarioso, pero
Poseedora de la Belleza virginal

DE LA QUE
HABLA EL
POEMA

118
5

Apareció la Virgen adolescente


Vestía sólo uñas cochinas
Que hicieron dudar de su virginidad

Pero al enseñarle la poesía


La Virgen se trocó en una magnífica
Y gigantesca Rosa abierta al mundo

En círculos concéntricos alivió su dolor


Con su delicada escatología
Escindida entre la TV y sus movimientos

Canto esta bella canción que sea aún más linda


Para ti para que vuelvas a ser la Virgen de Fátima
Que yo amé con toda mi alma desolada

De los 15 años ante tu muñequeo de deseo


Ninfular diciéndome "si quieres te bajo el pantalón"
Pero lo decías sin malicia o tal vez con

La coquetería pura del placer


Sincero de la libertad previo a
Toda forma de represión. A esa

PUREZA
ME REMITO

119
6

Si ya eres la Virgen haz entonces


El Milagro o sea subir al Cielo
De tu trono y depositar tu oro

Sólo así expulsarás la clandestinidad


Si ya eres la Virgen calata
Que se masturba pensando en este canto

Serás de todos modos Virgen eterna


Y te dedicaré todo el lagrimal trifulca
Porque para que se cumpla Tampu-Tocto

Estaré a tu lado como tu Ángel


Alias invisible e intocable
Hasta la muerte – como

Dibujo de tu puchero de bebé


[La chaposa más sabrosa]
Ahora que la sociedad no me

Deja verte, eres la Virgen de Fátima


En su nuevo estilo consagrado, para ti

Y LLENO
DE AMOR

En mi cuarto de monje por ti aún poeta

120
7

Imaginaria cascada de tus ojos


Cuando alguna noche diecinueve me
Miraste con ternura de Cova de Iría

Nunca se fue la Luz-Ma contigo Virgen


Se podrá acabar la mística
Pero no el pero que

Me pusiste Virgen humana


El día santo de la semana
Parada en un short antiguo

Porque el nuevo el amado del Señor


Había sido rociado tres veces
Con leche porque la

Leche no ahoga el amor


Sino lo alimenta, así
Como las voces de la noche
A nuesta poesía. Y eso fue

Denominado seguridad interior


En la calma de tu blanca
Virginidad revelada

RÊVE

121
8

Entonces tu nocturna experiencia de un solo cambio


Vuelcó. Volviste a ser la Virgen Impoluta
Que soñó Emma la dulce cuando

Eras niña y respetó tu integridad física


tu inmaculada Virginidad
Que hoy el poeta te confiere honoris causa
En la noche bonita de la Virgen de Fátima

Oh estado de gracia plena


Virgen Rosa en la noche clara
De la aparición de la Virgen de Fátima

Bájate el calzón y acaricia


Suavemente mis huevos y que
El mundo sepa de la He-

Catombe final - Fátima dixit


Mas la calle triste aún podría
Brindar abrigo a la soledad

De cantar la imposibilidad de
tu inalcanzado sueño

MUÑECA
ROSA

122
9

Una tarde se te presentó la Virgen


En la forma bella de los gentiles
Me iba a bañar y tú ya te

Habías rendido a mi acoso sexual


Así que volteaste a mirarme
Delante del espejo; Yo

Narciso me adoré la pinga


Y allí viste a tu Señor
Virgen la primera vez

Ahora recuérdalo y bájate el calzón


Asume la personalidad de la Virgen Loca
Virgen sin odio

Pura bondad a mí lo que me placía era enseñártela


Así te hice Virgen

Porque sólo la viste Fátima


Puntita que tocaste
Con tu anito de plástico

V. R. F.

123
1O

Así te lleven a Cachiche serás Virgen


Así te viole el violador (y tú publicitaste
Aquella historia falaz) mas
Al final con el Ángel Recio

Hablaste la verdad desde tu boca de oro


Un día antes de la Madre Putria
La noche anterior a la performance rock

Jeans sobre el techado negro


Del auto fantástico inútil utilería
Quizá era el dulce crepúsculo

Como la mandarina con la que Virgen Rosa


Se la corría, preparándose siempre
A esta suave enseñada de pinga

Crepuscular y particular todos los días


De ese verano (Tan silencioso
Soy que sólo tu ano dándome
el oro más cargado –

Pero de Virgen) sobre mi pichulita


Que nada más así crecía un poquito
No más para no asustarte, para

Que no digas que soy un violador,


Soy feliz cuando pienso en tu amor
Tanto te amo callado que
Cualquier memoria de ti
Me permite la dicha para

HABERME TARDE EXPERIENCIAM

124
11

Se fue la luz y ya no llamarás


Sino al Arzobispo para que le acaricie
La lucrecia nada más al prelado

Con tus manos de cera del Pino


La que le puso el Doctor Vent a la
Doña que gobierna la vía de San Miguel

Y lo calma como el amor de la Virgen Rosa


Santo cielo es cachada por el ano
Condenada Musa te gustaba
Hacerlo delante mío por complacerme
Y comparecerte a mi madre

Dame a luz para yo a mi


Vez hacerte dar a luz
Pero ¿cuál es la Poesía?

Apuntó casi por no comprometerse


La soledad en la belleza

Lo triste y el estado de gracia


No son la pureza que
La madre –en esencia bondadosa–
inculcó a su Virgen amiga

ALLÍ FUE EL MILAGRO

125
12

Virgen eras una especie


De Ángel Exterminador
Tu sacro día fue consagrado
Por el odontólogo que se hizo el

Loco después de la Fe que Luz


Le dio con una vela juntos hasta
La tumba –como dos hermanitos–

Este es un homenaje a la Chola Elvira


Recibió el don virginal
Sobre su sostén bazar suelo

Y después aquí Rosa Santa


With Chola Gladys
Vieron pingas norteamericanas
A su regalada vista

ALLUCINANDO

Para qué verte Virgen


Si ya estás al borde

DE CAILLOMA

126
13

He allí la pureza
Nunca te abres sino
Masturbarte voyerista
Y exquisita mano

Lengua y corazón
Por eso estás virgen

EN VIRGEN TE
CONVERTISTE

LO SIGUIENTE
SERÁ

MISA
NEGRA

para poseer
lolitud tu Muerte

127
ENVÍO

El día duró dos días


Lorenita nueva Virgen

YA LLEGA PUES
A CAYLLOMA

Y

LA PUTA MÁS COCHINA


DE
LIMA

y sin embargo pura la Rosa


que este documento expone

VIRGEN
DE
FÁTIMA

en tu santo.

128
LAUDERDALE
(1999)

129
LAUDERDALE

A Mabel

Lauderdale. Es lindo este lugar.


Me placen los parques del barrio obrero.
Ver a las camaradas repartiendo volantes
para la marcha contra el presidente
y contra el alcalde. También descubro
mi extraña soledad. Mi oscuro no hacer
nada. Esta canción de rebeldía,
leída más allá de los árboles y del
policeman dirigiendo el tránsito
desde su caseta en medio de la
encrucijada. Los tejados tipo england
dejan una alfombra para los pájaros
marrones posados como un don del
Señor. Lauderdale mi barrio favorito.

Música hermosamente tocada olorosa


portio domine fruta desprovista de inhibición
rocío gota a gota que nunca nos agota
fucsia que preparo para amar noise
oratorio creado en el silencio de la noche
solitaria espacio sacro diseñado por la caricia
envuelta privilegio de esta canción.

Pozo, este es el pozo déjame mirarte y


acariciar tu terminal fino me gusta son
risa arrodillada rezo la oración de tu sexo caliente.

Karl Marx aromaba sobre techos de Sur América


dijo por decir su corazonada presagio de la
mayor finitud histeria colectiva Joe Cocker.

Poesía me buscas en tu vulva válvula variada

130
de la floración rosa eclesial nunca hollada quizá
perdida en la fácil rumorosa leve penetración te haré.

Mi niña fotografiada ahora que rememoro


tu puntual deseo de todos modos eres tú aunque no
quieras o sí quieres querer queriendo quererme

Como yo te quiero esta noche de ti brotada


fuente de soda del parque japonés
plenitud de vida a la palabra que aprendo

De tu botánica descendida calma pura


crecida pluma más bella artificial pero bella
ave arenal del paraíso que eres tú

Con dios kon las piernas abiertas


tiksi viracocha in Magdalena swing revuelta
al viento de la carretela trocada en los banjos

Dispuestos por tu deliciosa compañía


xilofón girondo espejo admiral soledad
contigo convertida al catolicismo de tu perfecta

Apariencia de monja del claustro de mi verso


sagrado rosario mostrábale divina indiferencia
lena de la melena de tu león posóse en el mar
veritae profundis beatus vir quie non setit
in cinema fluxus soñar esa perfección es afán
del oro conquistado sperma logos enhiesto
prefiero silencio sonido en voz desnuda
y recita la canción nuevamente fresca más celeste
que la neblina acompañando los versos
que para ti compuse en posición de

Camino perfumado cueva que mi lengua hace sacra


mento que arrodillo para conocer su ser imbuido
de tu melancolía poéticamente húmeda y nueva
tal si fuera la iluminación de adviento perfecto

131
única unidad sexual en tu nombre forjado sin
mácula sino imaginaria predilección de tu cuerpo
alcanzado a la diestra del Señor carne curvada
tiempo reunido a los corazones de tu divinidad
eres la travesura mejor soñada por amorcillos
volando alrededor del pubis método de mi canción

La soledad de esta prohibida manzana


puesta por tu cariño en el cielo de la
lenta creación de tus purísimas palabras
estrella rezada en el orat místico
bésame con tu alegre pasión mojada oh toco
la flor cuyos pétalos acarician la paz celestial
calma zona lame la piel de tus labios dormidos
recordados prufundis paradito clitoris amoroso
augusto poder verte en la cima de azur

Luz devuelta por el reflejo de la luna en el mar


de estos versos recibidos por un don siempre divino
suavemente placentero gruta en que la sirena
se enamoró de una cúpula resulta de aquella canción
inmóvil en el frontispice ingrávido decoro seminal
shell en suma descendida perfecta storia que resuena
en el corazón rezado como oratio dominus virginalis
pudibundus exordio brotado de un designio del Señor
esta poesía por ti plasmada en el aire de tu placenta
inviolada intimidad hallada por sanctis destinae con
tu égida ancestral panorama su amorosa palabra
así desplaza su corazón enamorado por coelis mundi

Corriente azúcar despacio hembrichi sándalo demudado


frescor lamido como club sandwich boca que en mi
boca nunca se equivoca visión de araña y privilegiado
afán de penetrar esta definida paraísa isla soleada olfato
imposible de mi deidad en forma de pescado cuya desnudez
plateada es ópalo de mi plenitud rajada pastor resumido

132
en el desierto de tu química infinita ad revolution broken heart
distinguido sabor a verano anciano viajando por las orillas

Al compás de la procesión de la Virgen de Chapi


hemos ido llegando a los dos frentes de ella son
suaves como el musgo protege primero los labios divinos
más al fondo los labios de adentro corona
boquita de molusco rosario de la extraña expresión
ezrahíta arriba soy la airón que puedo
recitativo lago rosado si introduzco mi meñique
elástica la onda curva incuba ahora arrodillada
crystal de la noche fresco aroma perfumando la soledad
escribo tu rico en posición de buceo desde la escafandra
de tu cintura llega a tu cadera stella de la luz del mar
besando la costa de aquella playa redorada que
tú sabes redimir santo río seminal guardado
dos días de soledad para ti esta canción

10

En el atardecer crepuscular amarre


para su signore siga el verso que
pueda conmorverlo no azore el azur azorado
o achorado en qué esquina tuve que enseñarte
violencia tan extraña que no tenía porqué conocer
pero ya está en la society prosigue mi paranoia
envuelta en celofán o carey that is the question dijo
un loco por mi casa su inocencia era sólo comparable
a la mía farrow de San Juan por amor a los ancestros
oratio nobis in the cinema beatnick Anik Berkin
toma sol truinfa la calatería qué es poesía

11

Domine especiale etérea espuma noche


llena de la gracia del Señor queda clara
la composición de los astros fugaces
impenetrables como indómito forcejeo
de tu sol veo el ritmo desnudo empinado
por su dulce requerimiento espíritu que en

133
el jardín interior de tu corazón retocado
pudo armar tu extraña paráfrasis resuelta
a bajarme la tela inmóvil inocencia bella
como ella escribiendo las palabras que
declaro por la invención del Señor

12

Levantado tu curvo e histérico sacro


encarnas en mi buceo innombrable
beso nuestro eclesiástico arrodillada
el candor surtido de mi amorosa canción
sexual hallazgo de mi cielo aroma enhebrado
a la formidable tristeza inseparable que fulguró
tu absorta brillante espalda cántaro sonido
lento como la parábola en el claustro

13

Postura abierta ora pro nobis


gusta de mirar el mar sagrado
brota de tu canción de brisa
muestra en el twilight la creación
diva de tu diván exquisito
diestro marino al recordar
revuelto amor como saltado
en la esquina más dulce de la ciudad
olvidar los días en que la sombra
diseñaba el resplandor enmudecido
de la prez intocada niña junto a mí

(Hueso Húmero Nº 35. Lima, diciembre de 1999)

134
SANTA MARÍA
(2001)

135
A la memoria de Josémari Recalde (1973-2000), héroe.

136
Sound Slender, quasi tinnula
Pound

137
KILOWATT / PASE A LA GLORIA

Los muchachos preguntan por ti en la avenida.


Ahora que sólo eres esa voz en el casset
eras la sonrisa
en los parques & en las noches el
misterio de tu soledad joven &
la rebeldía en tus blue-jeans
perdidos como la canción más
hermosa del viento en los barrios
& callejones & plazas italias &
Tawantinsuyus en rock bajo
la inspiración de tu fina figura
de bailarín o diablillo fugaz
del amanecer en la neblina
de la mala-noche /amanecida/
deboleto en que tú sacabas fuerzas
increíbles & resucitabas
en bares donde aún se ignora
la felicidad: un ave azul lindando
con el smog de Lima & su espuma en
el mar / estas palabras
en vez de llorar, broder.

(a 20 días de la muerte de Kilowatt


–el legendario Edgard Barraza– con quien tanto quisimos)

138
I

139
THE HOUSE OF SANTA MARIA

Un poeta solo en su patio interior


observa el techo verde de las hojas
removidas suavemente por el viento.

En silencio alaba la sensación


del crepúsculo que no existe aún
en la memoria de la bella literatura

pero se avecina frágil en el tiempo


de rato en rato mece su ramaje
el sonoro susurro de una copa:

El árbol cuyo nombre es un enigma


-Nicaragua o Panamá- sólo sé que fue
sembrado por mi madre quien le dio

su corazón a la forma del foliolo


en la dorada resolana y es acaso
su única herencia en el ocaso.

140
PIURA, 1967

La enredadera. Sobre el muro hoy desnudo.


El hall de afuera y su viento recobrado.
Jardín antiguo que ningún poema
puede retornar a su magia original.
Las horas infinitas de mi espera.
Otro absurdo atardecer sin pena
ni gloria, salvo un rojizo sol naranja
entrevisto en la nada de la infancia.
El portón del carro de mi viejo.
Sus llegadas y un sublime
para mí en las noches del verano
donde el cielo se ilumina y las estrellas
son fugaces recuerdos del amor.
Oscura es la sonrisa del aire
a esta hora y sin embargo pura
como el roce de los árboles con
los cables de alumbrado público.
Pronto el poste nos dará su luz.
Un resplandor sobre el pétalo
de humildes chabelas al pié de la vereda.
La muchacha regando sus macetas.

141
TWLIGHT

El perpetuo movimiento de las ramas


al caer del crepúsculo en el viento
los muros de este patio delantero
los cables de alta tensión y
unas flores celestes como el cielo

Desconozco el nombre de esas bellas


fragantes inspiradoras de urbana poesía
diluyéndose hacia el color de la noche
a esta ambigua hora intermedia
en que el sol ya se fue pero
la luna no se refleja todavía

Un fuerte remezón del aire en los ramajes.


Entreluces las hojas vuélvense oscuras.
Un matiz indescifrable suspende todo
lo que existe y es extraño el brillo
inmóvil de la eléctrica experiencia

A escasos segundos de la nocturnidad


la nostalgia es mi único refugio.
Qué duda cabe: diariamente me
siento en este patio refrescante
y en su noble material estampo
las imágenes de este poema por ejemplo.

142
CORAZÓN DE DURAZNO

El sutil perfume del jazmín


que Lola de Vivanco trajo consigo
desde Lima, se esparce suavemente
desde el fondo del jardín
hasta el patio delantero donde escribo

Y en la biblioteca de mi padre
acaricio los libros de mi socialista
adolescencia. Observo otros volúmenes
que acaso nunca leeré, sueños del
gato apuñuscado en la persiana
malograda por los usos del tiempo

La casa es una vieja costumbre.


La luz solar del patio al mediodía.
El aroma del durazno en manos
de los niños, mis sobrinos nietos

De pronto corre el viento y se encañona


de la puerta principal a la mampara.
Hay revuelo de cortinas y de un solo
corazón. En una de las pozas del patio
los niños han sembrado la pepa del durazno.

143
DOS PATIOS

El perro duerme ahora en las losetas


tierno su húmedo hocico puntiagudo

Ausente el almendro del jardín. Los años


han pasado pero el lugar es el mismo

En la vasta inmensidad del tiempo


la silueta de mi madre se aproxima
revive por acción de la memoria y el poema

Desde aquí la visión es más amplia


sólo un muro me separa de la calle

En lo alto la mitad de un algarrobo


alambres, el poste y un jacarandá

Hoy día es cumpleaños de mi hermano José.


Le llevaré estos versos de regalo.

144
MATINAL

La fresca mañana se aposenta


en el jardín del sueño. El alba
fue una brisa de tierra y
la tímida ausencia del sol.

En el hall un vientecillo intima


con la soledad de los cuerpos.
Es ligero entre la brizna
y el vacío de las rosas,
los confortables de plástico.

Quiero atrapar la fugaz


impresión de la mañana
que cuando escribo el poema
está dejando de serlo. Ya fue.

Y en la transparencia del tiempo


detenido entre el jardín y la mampara,
la quietud del mediodía. Ni un chilalo.

145
LAS COSAS

Cuando pasa el botellero gritando


por los objetos que recoge, yo
vengo a sentarme en el garage.
Desde allí imagino el fuego en
la plancha de carbón de antaño.
Era bonita en la antesala
de la puerta del postigo
¿En qué tarde como ésta
fue a perderse en el olvido?
Las cosas de mi madre, budas,
elefantes, y el aroma del jazmín.
Su espíritu reina todavía
entre los muebles de esta casa
y es su música Regresa, Only you
un éxtasis del viento en su jardín.

146
COLÁN

Busco el sonido en las olas perfectas.


De su ritmo brota escalada fresca
luz que me devuelve a la apacible
dulzura de esta mañana frente al mar

¿No escuchaste entrechocar en la noche


su espuma inquieta con las rocas
por volver a soñar bajo un marino techo?
Aduerme alondra en el bosque inminente

Y en el murciélago que habita la casona


oscura vida, revuelo eterno y nocturnal.
Por las suaves ondas de la alta marea
se desliza un césped fragante e insólito

He allí el flotante vino curvo


delicado como el beso de una quinceañera
derramándose en la arena con la sed
de un sol quemante y bronceador

La ciudad no existe. Los destellos


del líquido abruman mi visión.
Sólo un sueño me queda por venir
sólo la frontera de tu cuerpo en el vacío.

147
LA LATA CHINA

Aún conserva el fino aroma del té.


Increíble su constancia en una esquina
de la vieja cocina de mi madre.
A través de los años y los viajes
la he visto inmóvil en su sitio,
encima del lejano aparador
en la casa de Junín 381, muerta
niñez y pubertad infinita aquí
en Santa Isabel de nuevo la alacena,
el lavadero y la esquina con su lata.
Nadie la usa. Olvidada permanece y
es roja y es negra y es dorada.
La miro diariamente y no entiendo
qué hace allí embadurnada de tiempo.
No he podido tocarla, quizá si la abro
brote un genio oriental
el espíritu de este fino atardecer,
su dueña original.

148
LA VÍSPERA

Ya no está el jardín como antes.


Al declinar el sol, las voces apagadas
la suave soledad del atardecer ¿Dónde
estará la bella poesía del jazmín?

¿De qué color fue el cielo


que dejé al perder la zona
donde habitó esta nostalgia?

Hace sólo unos minutos. Azul


que se aboveda con luz incomparable
un tránsito inasible suspendido
entre el dolor y mi noche.

Sin roche se adueñó la oscuridad.


Las horas del insomnio se aproximan
y el cambiante e infinito resplandor
de la TV. Una pesadilla.

Volveré al amanecer, lucero del alba.


Lucero mi sobrina predilecta
se casa con Enrique este crepúsculo.
Sea profético el deseo del poeta:
Que coman perdices.

149
II

150
ANTERO & EL USI

Santa Isabel, primeros tiempos. Tengo nueve años, la urbanización vacía. Los mayores
forman su collera. Helados de verano. Los mayores se juntan en el parque: Los Murillo,
Roberto y Rubén. Los Figueroa, Alfonso y Carín. Antero, solitario. Es el rey de la noche
estival. Alegre, hablador, entusiasta. ¿Dónde estarán esas noches del parque? Ondulante
verano del niño que paraba con los grandes. Mascota del USI. Los sábados tempranito a jugar
con los Aguiluchos. Esa fue mi fantasía: el team de fulbito de mi barrio. Nadie en la calle,
sólo Antero en ropa deportiva empujando a todos los muchachos. Bicicletas y rodilleras,
pomos de agua. La infancia es un atardecer, suave deslizándose en la noche y al frente se
enciende el neón original: Elizabeth Market hasta quebrar. Luego enrejan el parque, la
inocencia del fresco nocturno. Aparece la bella Rosina y Antero se vuelve cuñado de toda la
collera. Pero mi sueño de esos días era escaparme con el USI para verlos jugar, vivir los
partidos que Antero me contaba. Héroes, ídolos del pequeño amigo. Primero en la celebración
por la noche en el parque. Infancia que se fue esfumando, los muchachos se casaron o
viajaron. Adiós USI. Chau Antero. La vida cambia, mas yo nunca pude verlos jugar: esa
teoría me desgarra.

151
LA CHICA FURUNO

Pacífico estero del balneario. Soledad de la playa celeste, transparencia de adolescentes


bronceados: ella lleva un gracioso gorro estampado con la marca de un tractor. Un lindo
adorno: a los lados sobresale su intensa cabellera negra. Y en su rostro moreno, los ojos
vivaces. Un amor va flotando diariamente con el vaivén de las mareas que copan las islas.
Amanece un gran charco sobre el piélago y luego con el viento del deseo San Pedro se llena
de agua. Un inmenso mar reverberante cuando el sol se oculta, postre de naranja al fondo de
la ínsula mayor. A esa hora el juego, la excitación y la alegría. Tierna es la noche para una
ilusión de pubertad. Nuestro amor corrió como los zorrinos veloces por las casas, ocho casas
dispersas en la vastedad de la llanura. En los dos extremos la bahía sin término. La catedral de
Sechura es un espejismo en la lejanía desértica y la opuesta bocana del río, el mar de verdad
con su estruendo de olas y espumas relucientes. Allí te toqué delicada canción de mi guitarra,
mammy blue en tu living de verano. Aún recuerdo tu enterizo –short de flores azuladas y
amarillas. Tu presencia desafiante, las perlas de tu risa. ¿Dónde estás Furuno? Sobre la arena
dorada del mediodía se deslíe tu nombre en mi bobo. Un amor impecable en la húmeda orilla
recién besada por la ola. Delicia de aquel frescor.

152
DIABLA GARCÍA

La chica más linda. No puedo recordar su nombre pero sí su uniforme del Lourdes, azul
profundo y la insignia dorada, igual a su pelo adolescente. Belleza de una muchacha a los
quince años, al costado de mi casa. Contemplarla subiendo al ómnibus de su colegio, guardar
cada una de sus frases -piezas de oro- en el fulgor de un atardecer en los vidrios de Santa
Isabel. Vivía ella en su reino de pureza e inocencia, antes de la Reforma Agraria. Reinaba con
la suave delicadeza de quien se sabe perfecta. En malla negra -a la vera del jardín- despachaba
a sus pretendientes, jóvenes audaces con los ojos verdes. Hubo sábados de rock y muchachos
convertidos en Jim Morrison para ella. Recuerdo a Gonzalo Higueras deslumbrando con una
blanca guitarra eléctrica, la noche más bacán de la última primavera. La ola instantánea de la
Reforma clausuró ese paraíso. Sentí la pena en el corazón de mi vecina. Su hermosura
inasible -ansiedad de los conquistadores- marchó a la Argentina. Piura perdió su prístina
tersura intocada. Yo era un niño todavía/todavía la recuerdo: coqueta y esquiva. No se la
agarró nadie.

153
III

154
DOS SANTOS

1. LOLI

La casa de mis padres. Cumpleaños


de mi hermana Lola. Un leve viento
se filtra entre las briznas de la noche.

Mayo en el otoño del hemisferio sur,


víspera de María Auxiliadora, viandas y
potajes en la plazuela Merino. Las bandejas

de platino van y vienen y en las copas


rinde un Tacama semi-seco; tengo sueño.
No hablo. Bebo el vino por si acaso.

2. YOVERA

Desde Nariwalá contemplo la llanura extensa


Catac Caos y la superficie verdi-dorada
bajo un sol intenso y el viento calmo, chicha

en la garganta. La luz del cielo en las


arábigas palmeras, frutos castaños. Mec Nom
rompe el aire y en El Rancho una visión

del ciruelero, césped y la amarilla claridad:


denso verde en los mechosos algarrobales
con Oki, May y Lelis, ceviche de cachema.

155
LECTURA FINAL

La divina Pamela se acerca en mis sueños.


No puedo volver a soñarla como es mi deseo.
Leo a Darío y su música leve me alcanza,
perfecta añoranza de la belleza esquiva.

El cielo está claro, de un mórbido plomizo.


Son las seis de la tarde en que agonizo
viendo las ondas del aire suavísimo
mover los alambres, mar de fuego escondido

y solitario; antiguo amor


deseos fugaces como puros,
encajes inolvidables del olvido.

156
EUCARISTÍA
(2004)

157
Para Kathy

158
la que en el torcido
luciente nácar te sirvió no poca
risueña parte de la dulce fuente

Góngora & Argot

159
SAJONIA

Sajonia me busca intensa / débil


como las plumas de Adán
a quien vi desnudo en las cimerias torres de alabastro

No conozco a su padre ni a su madre


sólo sé que viven aplazados en la desunión de entreríos
férvidos procaces emolientes azúcares limeños

No me gusta la palabra ennegrecida


tampoco los rieles de la pátina invisible
donde reinan –infelices– los moros destruidos

los bacanes / los templados fugaces adoradores


del estío. Allí en barcas insurrectas veo
a Nívea / recordando sus placers pervertidos

ninguno es como el nuestro


ninguno cabe en el corazón
se derrite el detritus por mórbidas muñecas
en biscuít desaliñadas
en Sajonia aún no existo

Soy el carmen que canta en el canto del chilalo


soy el ascua de mi sombra desfilando
directo al camposanto

Es de noche en la mansión
y el despropósito cunde cual manzanas
por Newton envueltas en granadas

Mi canción es triste por el viento de esta hora


en que escucho la porfía de Míriam
por irse a los United. Ya no hay pasto

160
ya no hay guerra ya no sumo ni
resto los cadáveres. Hoy me vuelvo
a sonreír en los espejos de mi madre

Voy por los caminos seguramente fútbol


desprovisto de linternas, de rigurosos esfínteres
cerrados. Abarco la pasión de Cristo
en los poblados de Sajonia, ella no
habla ni ríe ni se persigna como yo
ante los altos altares consagrados
Es atea
es igual a las costas del ebúrneo / inclina
párvulos por si vienen a besar sus albos ataúdes

Es mi tranca y ya no paso.
Mi deseo se troca en agravante
el pulcro rin de la mañana.

Ahora acepto la maravilla de cartón


no hay problema / sí me gusta
sí me quieres perdida
redorada magnitud de mi persona

Doy luz verde a los fastos del relieve

Aquí es el tono de la franca indiferencia


aquí la pista en que Juan murió atropellado

más canchita exigieron los designios


duraderos –más paltas– más queridas

ni una pus
ni un periplo
envíame

tu talla sobretodo tus menjurges

que los días son ligas invisibles


que los días

161
CÁNTICO

Salutación íntima
Soy surtidor purísmo/
brota a borbotones
el agua de mi doncel
¿Quién es él?

Es príapo mortal
en mi salina canción.
Hacia él voy con mis
olas frescas de luz /
hacia él para nada
por su amor de mujer.

Silencio fortuito.
Sorbo de la fuente
de mi soledad

gotas fugaces en la dorada


piel de aquella desnuda
perfección

Imposible caricia
deliciosa amante
de mi amor búscala
entre sus delicados
brazos rodeando mi cuello.

Suavísima antiquísima
poesía son tus ojos
mis mejores augurios
dátiles jugosos
o
lágrimas secadas
para esta música

162
combinada imperfecta–
mente a tu oscuridad
sentimental

En ti está el ritmo
bajo la cantidad azul
dándole amor a los
cuerpos soñados

Eso es lo frágil.
He allí la pureza
etérea enviada
de tus labios
bañados en dulzor

Oteros acurrucados
tras ficus y cipreces

Vuela perla-aire
marítima vacíame

así abrirán nostalgias


las venideras bondades
de tus azules –Lourdes
vestidos – para
este canto

163
EUCARISTÍA

Poesía aquí me presento


Luz sesgada imagen / dársena
De tu izquierdo cordial

Espacio vacío nombro tu soledad


Desdén sonoro junto a tu monte
Son dos cosas & el amor

Vuelta al sueño destruido


Recupera esa forma del corazón
No pienses escribe & llora

Azur bóveda ingrávida perfección


Que dó naturaleza muerta stella
maris que Paris no pudo alcanzar

Vía sacra es esta hendidura


Que toco roco de tu película
Dorada & suave como nylon

Portio mea lamo el túnel grace plena


Pétalo sé mi canción exquisita
Squizofrénica forado escape divino

Hacer poesía lingua franca vulva


Volada pasionaria honoris causa
En este triste sino de tu signo

Sonido flor pesca de un mar celeste


Como el cielo que en Colán frikeó
Consigo fusión de un sunset bajo Dios

Quería hablar de tu figura / solaz


De las olas de la soledad / spuma
Que volví a refrescar santuario in

164
3

Un mar celeste como el cielo que en Colán


Fundó contigo silueta fijada / horizon carré
Línea frágil entre tú el cielo & el mar

Un mar celeste & un cielo marino / brisa


De la risa de ti misma brotada en el surtidor
De la fuente de la juventud

Créame pura en la pureza purificada


En la purificación de tu rebeldía
Ahorrada en sangre miseria milagrosa

Ribera river dale fluido bello & músico


Dial de la melancolía / pernocto docto en
Sacadita lis de la flor de mi sagrario

Borde presionado & de todos modos virgen


Te siento pero subo en el cielo de tu aire
Lo nuevo es difícil carnoso yo tu oso perezoso

El extraño cuore es mi dolor-es


Del río / mi abuela en Yo-wanka o Álapa no
Sabrá si supo saber sé que sí o quizá

Máscara derretida es la mejor canción


Sacramento preparado con el fuego que
Tú dibujas con sólo recibir los versos

De esta poesía escrita desnuda mente &


En la forma húmeda que ahora ofrecemos
Por tu religión de mí / das flor resurrección

Fluxus aún no existe es el susurro de un viento


Santo / plácido recuerdo de una soledad que
Olvido sin saber / soy o no soy el

165
Llamado a recrear el sentido de rozar tu
Cuenco en mi pensamiento / tu silencio es un
Ánima viva que brilla con sus gotas de rocío

De miel rosa oscura tejido frambuesa


Inspiración bendita / solitude yo te primo
& me rayo contemplándote bajo el parque

Visión absorta enigma acariciado por la


Saliva del paraíso / sé tú el altar de mi
Oratorium serena / marem magenta de ti sun

Así entramos descalzos a tu mundo Vulcaína


Danos el reino urbano donde mora la
Incertidumbre cierta como mi vida de Moro

Te pedimos a través de esta diáfana celestía


Vuelvas a la luz de la que en su seno
Brotaste rebelde como adolescente en plena

Crisis corpus sombreado por el árbol más


bello del campo dorado en que el orín
De los ángeles llovía dulcemente en mí

Mi ser expreso digo es música


Rítmical session perdura perdona
Poesía yo sé tú lo sabes lo sabe el pueblo

Vox Dei allegrum Vulgus –dijo Pound


En el arte de la poesía en la noche
Nosotros elevamos un cántico hacia ti

Para ser quechuas o sea bien


Llamas en llamas se incendia mi país
4 paredes albicantes de su celda Vallejo

Y en el rocío

166
De la familia en la madrugada se
Confundió reconociendo

A los vecinos y notarios públicos que diga


Púbicos tus bellos versos leídos en el
Recital de tu Velvet Underground

Pentagrama clave de fa–


Ser el amor ven tel mabel la miel tienes
El dominio teórico & práctico tienes la

Creación pura aunque ni la poesía sea


Pura pero qué es la pureza qué es dime
Todo esto / Ahora que sólo el sonido del mar

Resuena en Magdalena
Fue el siempre oscuro afán de amar
El sueño de un deseo poética mente

Storia de la poesía ser esta


Recobrada cascada de cariño húmedo igual
Que el olor al musgo & formación de tu pez

Sino eres tú entonces dime quién suscita


Citas de amor aromática sacra paraísa
Ezrahíta el americano he celebrado por 35

Enormes rosas coral / Venecia A Lume Spento


Pudo visitar el Castillo religare
En la correspondida calma del alma del Señor

Rezado en la belleza de una canción siempre


Poesía sabor de tu íntimo mare ídolo per
Nocta en la sabia creación eso es lo deseado

Orgasmo de una pasión pura como la pose que


Puedo crear para ti en tu noche ideal caricia
De tu piel de nuevo virgen en la sola maniera

167
10

Ese divino hoyo fiebre de una nueva


Oh este es el rosa & palo santo
Madre me lloraba bajándome vorágine

Eres mi mejor devota la más


Dulce & suavena militante de
Este corde pudibundu

Sine qua non óbice oratorio


Seguro nota musical delicada
Mae te amo te quiero con

Mi soledad que se vuelve hermosa


Cuando rosa se abre & se cierra
Como tu risa en la boca que puedo

Tocar sólo como estilo para vivir

11

Sólo para tu carita de estambre que se


Revienta en millares de hojas esparcidas
Extraños sueños siniestros

Me hicieron doler pero reconocer que


El dolor político no es otro tema de
Mi canción nunca me metí en la trinchera

Me fui hui huyendo como dijo Heraud


Aunque él sí murió por nosotros
Soy hinostroziano no creo

En las guerras no creo en nadie soy


Un lumpen maldita la hora en que hablé
Con un lumpen no soy un lumpen soy

12

Tiempo recuerda esta luz que es tuya


Ábrete lienzo en que puedo leer mi canción

168
Sí un caminito manantial cuya fuente

Veo Creedence Clearwater Revival


Selva que huele a amor humana presea
Labios tocados por el sol

Perdido entre vainas me da


Música veneciana palafitos invulnerables
Húmeda de nuevo transparente afán

Pervive azúcar furiosa mar que la golpea


Sin misericordia ni crueldad qué inencontrado
Ritmo escarba esta poesía

13

La dulzura de tu plácida sagacidad


Estrategia puramente documental
Sombra impura desnuda como el mar

Sume sus ondulaciones resacas espumosas


No sé qué es esta poesía o canción egoísta
Solitario afán que no pueden mis manos recrearte

Estación iridiscente
Fresca ambrosía
Chimbote

169
ADONÁIS

Lienzo lamido lexus puedo contemplar


Purísima aparición religiosamente viva
Pace rebaño en el silencio del cordero

Visor encarnecido rombo de rodillas


Coelis sanctus en descomposición

Gema o jerma ábrete corral corrido


Warike lampo cachina huida
Lámpara ampara Mara

Mármara murmura radio futura


Hiena herida hiende tu risa
Freshca free frágil preferida

Frugal aposento de la nueva especie

Succionas címbalo in resurrection


Sino amara mar slowly ara–
Ñaba sed hidrtada melancolía sub

Pop ululaba el ulular popular


Del viento veloz perforada
Privación de un fecundo mástil

Huelo el mar nunca cruel


Hiende leda húmeda levedad

Parábola para el amor sume


Pastor en memoria de esbelta
Mansedumbre oratio in soul

Primavera pestañas suyas robadas


Adonis del invierno has muerto
Suéltense lágrimas Adonáis ya no estás más

Sea la armónica de la visión más pura

170
LÚDICA

Oh santa rósel in my heart


You are my pendejita azul
Eres la arrodillada virgen li

Mensi in santuario fresh


Me brotas líquido profético
Lux behavior humana

Mente hazme en domingo


Tu homenaje sacramentado
Reliquia de la custodia

En el sagrario lames mis


Waynos escrotos reynos
Edén pastoreado por the

Inspiración de su dulce
Soledad por ella sólo
Rompida en la noche

De Lima canción que


Supo recoger en su
Nueva salida de verano

171
BORDADO DE ENCAJE

La mansión duerme su discreta alegría es correcta


Ultimatum biblos in that poetry yo me resurrecto
Escribo scribens estos versos recordados
En la base de una desesperación suave de todos modos
Involuntariamente negra retruécano de una esfera
De Nuevo bella como rock inmerecido

Si te hallé no podría hacer otra cosa que amarte


No es mi culpa amarte con cierta locura urbana
& proletaria se nivela la familia
Se vuelve a soldar en la diferencia

La sangre fluye & es luz & es clara & semeja stella stevens
Con sus tetas como potosí / sólo la puntita de tu inmoral morales
Oscurece húmeda músician de tu boca filigrana vuelta re
En el bordado encaje de la coqueta sacra siena
En que nos encontramos siempre en el tiempo temporal
De la última & soleada temporada en Colán

Ellas me pidieron echadas sobre la playa solitaria


Que el sol de Colán se plasme entre mi falo dorado
& sus labios hermosamente fotografiados por la poesía
En la putrefacción de su modernidad post-zacatecas

172
LIED

Días redorados como el Mantaro dulcificado


En el remanso recodeado de dispuesta madre
A soñar la caricia secreta de esta noche

Así me pusiste tu corazón en cuatro campañas:


Aquí es el reino de una sacra voluntad
Explícita como el aire de la divina paz
Amorosamente puesta lycra que me acomodo
Para ser tú en este momento próximo

En esta luz invernal


Escucho la música urbana de mi soledad en Lima:
Es una poesía escrita en el níspero del arrobado sentimiento
Por su exquisito esquizofrénico deseo recuperado

Señor de los Temblores es tu cumbre andina


Seguramente misterio & milagro
De un arte personal
Enhebrado al tejido
paracas de su amor

Canción inmaculada sobre el paisaje


De la invicta soledad invisible bon
A vides frecuencia de la ola
Frente al solo azul de su unidad

Un canto de acanto en el llanto agazapado de Canta

173
GEMA

Rosa preconcebida échate en el suave


Apacible morador de ti misma
Es como historia viva tu sueño soñado

Por el soñador que liberó a la


Cautiva soña en el bosque de
Tu laberinto ya desaparecido

Veo los recónditos recodos en que


Cobijó nuesta canción / desenchufado
Afán que no volviste a sonreír

No sabría escribir tu poesía


Sacra mi música misteriosa &
Dulcificada por el confíteor

Que se prende en ti / en las


Americanas soledades mamas que
Adhiero con la herida lanceada
de ti

Mas mística profano en tu altar


Donde en santo & rosa como
Azur envuelto en la seca

Sed de tu amor dormido


Después de volver a descubrirlo
Virgen imaginada en el techno

174
EGUS

Poesía me encuentra tu luz ojo quebrado anís de la melancolía


síndrome antesala barrunto oh la música que anudó el pistilo
de la innombrada flor aún poseída después de la revelación

175
176
AMASTRIS
(2007)
LA INSOLACIÓN INTERIOR

Ear, ear for the sea-surge;


Pound
1

Olas olas enfermas seductoras


Nieve novísima en revoltijo
Fugaz cercanía burbujeante en mí
Solar aparición in tenso tambor
De corazón tan tierno curvas
Adecuadas a la luz de tu delicia
La más bonita azul inhóspita
Bajamar ahora verde en los destellos
Dorados de su extraña canción
Esa es la pregunta que me haces
Antiguo jovencito de ruidosas formas
Patas aguadas sal de mi oración

Volvió súbitamente la calor


Hay una luz tan pura tan solar
como la rubia risa del aire
Sobre esta húmeda arena nada
En los cristales ahumados sin
Mondongo truzitas pasan con
Su discreto marino ritmo
Esto no es lo que ha de interesar
Te estoy mojando ahora en
Una caricia nibelunga sos
Vos me arrulla la fresca re
Fréscame este infierno interior

Ondas periódicas izan me


Levemente inside y aquí la
Sombra de una gaviota zass
Is un vuelo incaico in the
Atlántico norte not yet
& entonces qué es?
Silueta de conchita on the beach
Cueva de algún crab haciendo
Crack en la sopa del crepúsculo
And she said chicken tacos
This is the best time comadritas
Redoble de oleaje junto al muelle

Ortega y Gasset y cassett


Luis Hernández

Mar de altos mundos adentro


Ondas periódicas cíclicas heladas
Fino orvallo beso de la brisa
Estatua de Deméter huye sin sogas
En el jardín nocturno cual canto
Al revés de las sirenas para salvarme
Oh la curva de tu aérea excursión
Fluencia mansa el último día
Sophía adios de la épica ribera
Arrecifes ingrávidos rizo encaje
Zonas de piel aún intacta
Dos soñados cerezos en mi boca

5 (PERFECTO MEDIODÍA)

Iluminada devoción frente a mí


Quietud sacra sobre el césped
Dorado en el vuelo inesperado
De un pequeño país forma
Del pacífico esplendor insectos
Diminutos en el sosiego aire
Impoluto de mi amor inmóvil
como ramas en su suave vaivén
& un cielo en el trasfondo azul
Tul de tu cadera nos alcance
De súbito se apaga el verdor
& claridad que vuelve con más ardor
SUB NOCTE

A la sombra de la luz
Fluencia pluvial indostán
Vahos vahos del aire sur
Arriba flores perfectas sexy
Bañando dulzura corazona
Del pecho a los muslos redorados
Torrentadas invisibles vírgenes
Bulliciosas almidóns desérticas
Sechuras inclinadas in Matacaballo
Y oímos el cioco mañanero
Un chicoco que a ella la turbaba
Ruiseñor lejano demasiado lejos

La niebla constela al fondo


De mi visión la austeridad
De los árboles divinos son
Plateada luz sobre el agua
Un instante en la velocidad
Del aire helado auto
Móvil viceversa desde
Un sonido en el planeo
Del ave más azul inquieta
Igual al corazón desnudo
& buscado por doquier o
Estas palabras recibidas en
El canto atribuido a esta
Ancestral voz encima de
Mí y que no me pertenece
BERRUECOS SUDACAS

ESTIGIA

Por tu corazón oscuro corre un viento


Sufriendo soledades puras en su cierta
Alabanza albana después de las ninfas
Bien bañadas en el río Piura calatitas
Oh eso fue el en tiempo del bonsur
colambo que se me quedó dormido
Apresta aura a seguir la rumba del vaivén
Un sandwich saperoco a la medianoche
Nadie vino a recordarlo quién se lanza
Pistilo de intocada dulzura fresca &
celeste en la zona amarga del pastel
Poison abrevado en cada atardecer
Llovizna no es la nieve nunca fue
Su deuda con las tibias ponzoñas
claro quiébrate un pocito como
dicen Mis alumnas & crespusculares
Mas solares sobre el río azul donde
Manzana ofrece sierpes derretidas
Por un canto de capuchas negras
Y sobadas cerca de esta silva silens
ICONO

Sortilegio suave sonoro sentido


Bajo el sueño sonreído de tu fresca boca
Es siempre el río cooper que me baña
con dorada lluvia cual perfecta Dánae
Estrella de puntas romas en la cima
De un agudo clima que me quema
Desde el fondo de tu corazón tan
Blanco el bello azúcar de tu quena
Reconozco las notas de aquella canción
Viene de Arcardia ombligo de dibujado putti
O en la nieve intocada del país andino
Nadie toca la canción solo yo & la memoria
De tus formas presas bajo seda
O blue-jean chicha el amor en cana
GATE

La orilla del río luce brillante


Pero ignoro su nombre celeste
Las gaviotas cantan & se van
Ahora que el río queda inmóvil
& nadie lo contempla sino yo
Enredándose en las frondas
como el viento en tus cabellos
Alborotados por un súbito deseo
Nadie habrá de acariciarlos
Salvo las estrellas nocturnas
Que ya no veremos brillar
Aunque tú poseas su fulgor
El cielo desnuda estos versos
Oigo el viaje del mundo
Mi propio destino blasfema
& asustado regreso al hogar
YARDBIRD

Nunca el ave vuela implume


Muchacha intocable e invisible
Sutil voló sobre el río
Inagotable fuente del vacío
Palo santo apologize blanco
Se esfumó en el viento
Moño levantado imposible
A lo lejos lejana reunión
He soñado quise soñar
Quiebra sauce tu pecado
cielo versos de un loco
Sonrisa dentro de los ojos
Mas allá del corazón solo
Tendré rosado recuerdo
PASTORIL

Soledad de esta noche belleza


contemplada azul fugaz
Silbido en la oscura
Mar espesura brotada
De luciérnagas no hay
Un canto no hay sinceros
Veneros risadas de amargura
Adónde vas cielo feroz
Pulguiento como en Lima recondita
En sus ánforas de Malambito
Dehesa artificial prendida
Hasta la madrugada
Para besar los ríos y la nieve
Así hago el amor contigo
Fuimos a bañarnos dulcemente calatos
& a nadie le interesa
Un poco la dorada tarde
Los soles de este invierno
Brillan más chiquillos &
chiquillas en su opacidad
Bien metida como un postre
En la boca de su amor
MUERTE DE LUZMILA

En el musgo del tapiz


Sobre la porcelana anciana
Discurre blandamente la mañana
Son las horas del juguete / de la bacinica
Sentados contemplando las figuras
Que no se parecen a ti
Pero ahora son tú / manzana
Pulpa de lúcuma en el helado
De mi madre su verano
Morada penumbra tornasol
De marzo entre las lámparas
Por allí buscamos soldaditos
Y no los encontramos sino olores
De la viejísima madera retocada

Mármoles / bomboneras / la gran


Fuente de loza empapelado cielo
Todo eso me arrebata
Y al fondo tu cuarto impracticable
Llegamos al balcón inusitado
Ya es mediodía y la luz se
Inclina a su favor quemándonos
Macetas vivas se allegan
A lo sumo media hora el brillo
Del mantel del zumo su naranja
Desvestida y no lloramos todavía
Mas será seguro que en tu
Blanca y rica piel serrana
De limeña parida por María Pampita
Donde enjugue el esplendor de
Lo mentido / azúcar o viruta
Mecida por los vientos en el
Hall de la noche tierna
¿Quién sabe? Pero allí estás
Matienzo y ella no se
Despierta por más que le grito
En los oídos no se despierta
TRIÁNGULO ISÓSCELES

Rompe los vidrios a qué te sabe tu té


Dime si anochece en ti rompe los vidrios
compré galletas rosadas para tu mejor
Amanecer pero no volviste a sonreir
Eso ya fue otro sino ¿cómo te llamas?
Nunca te has llamado frente a la ciudad
De Lima rompe el mar y hallas
Nombres diseminados por la playa
Es que allí fue el amor el acto más
Lindo de la noche en un Volkswagen
Nosotros tres yo ella & ella nada
Existe solo las olas los vidrios rotos
VENADO ASESINADO

La cornamenta furtiva poetiza


Detrás de la floresta o encima
Una procesión de nubes agoniza
Es el antiguo tema del poema
Una especie solitaria en extinción
Lo inalcanzable al alcance del azul
Ahora queman boñiga perfumando
La brisa vespertina de la sierra
Porque somos de aire & de mareas
Suena un rondín por las márgenes
Sullón en Sullana llama la Capullana
Y nadie dispara ni escucha el disparo
ORO PEINADO

Los tirantes están listos sobre la mesa


Es un horizonte de verde fluorescente
Quién desee hacerlo que lo haga
La madrugada se filma deliciosa
Son dos los jardines del rocío
Delicuescente claridad rosada
De la casa vendida tras la muerte
De su mejor amante a quien Rosa
Ofrecía uvas de Italia escogidas
Belleza del ciprés & los manteles
Suculentos lonches a las seis p.m.
columpio del cielo allí estuvimos
AMASTRIS

En tu griego grito mediterráneo


Está el lugar en llamas de Utopía
cocido a la espuma franca por
Los dulces vericuetos alzados sin
contornos ni aristas quebradas
En sus velos susurrantes encima
Todavía del Egeo regalado
Una tarde con toda su belleza
corazones mojados por la garúa
De Lima cuando un roce en rock
Atisba amantes inigualablemente
Tiernos bajo cornisas coloniales
Desiertos sechuranos cáliz de
Brujos embrujados por la hundida
Luz de esta memoria imperfecto
chuyiyache jamás vuelto a visitar
En la distancia disímil de tu debida
Dulzura yo encuentro álbum nupcial
Desde Lhymnos hoy suave celebra
Un sol delicado tu exquisita piel
ARS POETICA

En el parque donde inquieto silencio


Azula el fresco resonar de los altos árboles
con sus copas inalcanzablemente verdes
& el sol que no existe en Lima
De todos modos veíase tras los esmeralda
Frambuesa o no sé qué turquesa diamante
Perdernal de la piedra del cielo blanco
De la ciudad sol siempre en tu refracción
Eres mimbre del membrillo que solo tú
Llegaste a computar en los días más níveos
Una palabra exigía su nueva guitarra
La profunda puesta del sol de una poesía
Adolescente desprovista de todo intererés
Ajeno a la belleza he allí la auténtica
Ilusión de un ideal recuperado en la paz
De los mares del solitario sur
LABRANDA
(2008)
A la memoria del poeta Juan Ramírez Ruiz
(1946-2007), muerto trágicamente en Virú

modernorum nobilissimus institutor


No puedo evitar la sensación
de que paseo por un espacio escrito,
de que he ido haciendo historia
de estas cosas y ahora me miran
como un lugar interior.

Miguel Casado
HALL
r
STRETTI

Aguas parpadeantes inquietas avanzan


Sus pájaros planean & sucumben ante
El fragor del súbito sol en penumbra dorada

Silbidos variopintos abren la tersura


De intocado pétalo albur de la estación
Dársena que visito solo por mojarme

En el pecho del petirrojo desaparecido


& siguen los cantos en pluma leve
junto a innombrados tallos removidos

Es el viento inmigrante clandestino


Flameantes verdes nuevecitos & su
Fragancia imperceptible en la ribera

Suavísmo repliegue ondula delicado


Arrullo del murmullo chullo en la
Frontera gotas me salpican en la orilla
2

Ruma de hojas enhiestas arriba


Remos reman rubios & soleados
Plenitud muscular la espuma atrás

Polinización de atardecer cantos


Por doquier inusitados cada
Uno en su nota se concentra

& es feliz en la helada brisa


Diminuta brizna crin de la yerba
Sol silente trina entre su vuelo

Amor abrigo trenzado a estos versos


Lupinas parvas orladas en Piedra
Horadada ya no volví a la esquina

Se escurre el tiempo stereo


Haz noctámbulo & rutilante ya
Viene en ti su soñado desatino.
1
WINTER
SANDIE & LUCY

El corazón de plástico en la Junín


¿Dónde está? Desapareció en el desván
Inexistente sería una ola y su espuma
Salobre solitaria sobre nada sin memoria

Eran dos corazones en el azar soleado


Estrechez del patio desnudo en la oscura
Fotografía que se fue perdiendo cachivaches
Desportillados finalmente no los sepultamos

Frágiles y blandos cuerpos aunque suaves


Tenían sus nombres gringos esplendores
De T.V. recien llegada a los dorados arenales
Nadie sabe dónde se escondieron porque

candelaria la noche que jugó al ampay


Soltó una risa resonante tenebrosa pero
No se los llevó sería ébano en contraste
Si hubiera sido dulce robadora de ese sueño

Escena de ambos en su repisa bien


Sentados y vestidos contemplando muebles
Paredes u hornacinas arrimados nichos
Solo en el sutil espíritu de un poema
SNOW SNOB

Mientras la noche en su guarida


Abre sus compuertas de sonido
Ve hacia el centro plexo solar y
Oculta sigilo azul en sus manzanas

Entonces el brillo de la nieve se


Venía con la venia del poniente
Oh frazadas en chisporroteo divino
Ya se escucha tu rumor perfecto

No es amor pero describe la pará


Bola del prístino encaje desnudado
Siesta también despierta por el sueño
Hoy volvió el perdido afán y sombra

Suya es la dulzura de los frutos


Invisibles olvidándose después de
La juntura cuya fragancia te en
Simisma y no la busques solícita

En los rayos helados oscilantes sin


Párpados celestes que huyan del
Deseo más anhelante y poseído
Esta fue tu derretida canción fugaz
MODESTO GARAGE

1. AGENOR

Lejanía de tu nombre cual espina


Que llevas dibujada en la pretina
Más antigua recordada en la divisa
Por las galladas temprano en la sola

Mañana y las domésticas jugadas


Nos fuimos al colegio uno tras otro
Las pocas flores augustas son
Rieron en la vasta tierra

Sumergida precoz iluminación


De la señal ingrávida pre
Fijada por tu ceño circunspecto

Nunca en la tarde meció la


Nada como esta memoria iría
A la blasón de tu pura inexistencia mía

2. ÁNGEL (A)

Suspiros detenidos vitrina de caoba


Brillan en la seda impoluta del pelo
Más azul que peina la Modesta
Con la gracia gris frasco y fresa

Todos los días vuelven a ese sueño


Bruno y chino en la luz de unos
Ojos ardidos en perol de la natilla
Hirviente cielo motas pura pampa

Y grasa entreverada pollos la


Garza fallecida elegantísima
Estrella de los soles negados
Al viento del vergel oscurecido

Verano tras verano embarrados


Felices inconcientes tesoros de
Mamá no me encuentran en
La fina página que escribo. No.
AGLAE

Deseo sube sobre noches dudas


Por nubes traviesas de la sierra
Mojada Aglae dormida para siempre

Mató el anhelo del velado velo y


En su cielo brilló la pluma de una
Luna jamás vista. Hasta la vuelta

En su mansión de boscajes y encajes


Excitantes como húmeda hendidura bendita
Voló la bóveda bordeada por un fauno

De mi mente se hizo poesía con


Frenar el borboteo sagrado pero
Deleite al fin de su regalado sueño
2
SPRING
CAMOTAL

Adolescente en jumper salida


Del tren de las seis a Lima
Hermosura difícil de alcanzar
Siempre al borde de la mar azul

Nunca le des la espalda fue el


consejo mil años después en Yacila
Entre cholos bolicheras & el alisio
Que a Alicia dejó senos al aire

Memorias chiquitas de las playas


Donde Madre me mimaba con
Azul fulgor de nueva ropa’e baño
Volver a su callao deseo eterno

Vivir en la mar sabrosura de


Pintura más refresca & pactada
En la nada de un poema & en
La rada en que fallece la gaviota

Jamás se dio el regreso murió


En otro cielo más travieso
& el desierto supo de percebes
corales caracoles estrellas

Invocadas fui llevado a conocer


Su Puerto mas no fue constitución
Sino el Nuevo Puerto de la yerba
Reunida con Jimmy a la volada

Hendrix a todo volumen en la radio


& el auto sometido a redada policial
Qué belleza de la mar hirviendo
& todo el movimiento de la Brava

Oh chucuito salvó a mi hermano


En los tiempos de la polio incurable
Pero a mi quién me salva
Del recuerdo de este camotal.
ALMOST OLMOS

Al soñar mi suave arrechura


Sus formas se suceden dulce oleaje
Se abren broches pernoctando
Muchachas palteadas por las puras

Infinitas aladas mariposas


Adivinan los enhiestos pechos
Delicadeza en fresa delineada
Dedica su canción y-es caricia

En el sueño sin roche se desnuda


La calata ensoñación inusitada
Es marina desértica divina
Florescencia nocturna ligerísima

Oscurece el espacio de la nada


Se hace luz inadvertida curva
Musgo o almeja quién te canta
Sino yo acostado entre las tumbas

Plumaje flotante con quietud soleada


Nuevamente cantos en el aire planos
Del río hasta el filo de la tierra muerta

Es la moza buenamoza diva en las


crisálidas como prístina otra vez
Afternoon ahora extraña nieve

I know but the patos enarbolan


Sus cuellos a la brisa en la miel
De la estacion gozada tan boreal

& ascienden las briznas vésperas por


La bruñida especie fascinante bordes
O umbral tibio pezón dispuesto

En tu frágil renacer sobre concha


De su madre oh velos transparentes
Súbita ya está en todas las corolas
OSCILA YACILA

Dobladas raquíticas brillan


De súbito jamás rectas
Temblorosas pendientes pajaritos
Mariposean entre ellas a merced

De un viento cuelgan peladas


Nervios en el aire brazos
Quebrados bailan en balanceo
Intermitente afirman o niegan

Se iluminan muertas tímidas


Renovadas son y griega invertida
cayado oblongo toditas enredadas
Peripecia climática quieta ondulación

Amaru imaginario desprendiéndose


Hacia tierra remecidas rápido
columpio que pronto será floresta

Oscurecidas ahora son más tristes


Húmedas desabrigadas móviles
Ese balanceo obsede la canción
ES PESAR

Napo, in memoriam

En el silencio de mi hermano yo me inclino


Hay flores retocadas ignoradas por
La muerte, su dulzura viene de ti

Ya no tengo lágrimas sé que la


Profundidad se hace presente
Es tu caricia & me hace falta

Si así es la sombra hoy los ángeles


Son un viento semejante a esta
Memoria & el stigma que me marca

Solo el corazón solo el sueño de tu


Risa se aparece en la belleza
& se esparce coincide frente

Al vértigo del aire que nos dejas


José Uriel fulgor & forma reunidos
calmas mi sollozo manantial

Que te adelantas nos avisas


Permanece & se ilumina tu
Morada bajo este sol tan puro

como el habitado espíritu de


Tus cosas al frescor in
Grávido vasija de tu amor
COSTUMBRES INDÍGENAS

1. CHUCAQUE

Dolor de vientre te dobla la cerviz


Viene entonces la Bella más gorda &
Rozagante te frota cual caliente

Fritura con sus cholas manos re


Gordetas te frecuenta con íntima
Ternura rezando sin parar hora

Tras hora se va la pena o tu angustia


En el atardecer despedida del hermano
Mayor que vuelve a Lima tras jugar

contigo con amor todo un verano


Ya sea por vergüenza o ausencia
Anunciada la oración masaje te

cura es la caricia india del Ejido


& la Bella feísima alegre & alegosa
repite lavandería Tersol
lavandería Tersol

lavandería Tersol

2. VERANO COLONIAL

Balbuceo sumado a la luz


Se opone al mundo orozco
Pon naviera frágil carabela

De Colón punteada en mar


Sombrío toca madera su canción
En la constancia de Constanza

Respira sin cesar indicando


Humo en el mástil culminante
Formas invictas anticipadas

Quiebran nubes & su chorro solar


Desciende desprovista de vestido
cuerpo sucesivo dueño del espacio

Sueño postergado en la unción


Recóndita fantasía veloz sobre
Luna colgada del alba en su vapor
3. VILLACAMPA

A la prima hora de la noche


Las tías suben a su cuarto

Lola hace mi cama con su mano


Lisiada siembra rosas al crepúsculo
Sonrie niña corto pelo lacio

mientras

Enma se arrodilla ante el Obispo


Dirige a Porfi & la Petiza sus ahijadas
En el vaivén de la plaza a la cocina

Las losetas lustradas de la sala


Huelen a cera sus simétricos
cuadrados rojo & negro & en el

Espejo ovalado me contemplo


cuchita juega la pelota toma
Su leche en único uniforme

& de noche caen al patio derretidas


Las estrellas unas lágrimas ro
Dando en sus mejillas amorcillos

Gracia & lisura la del Rímac fil


Trándose al Yowanka del abuelo
Memoria guardada que canta

este poema
3
SUMMER TIME
(CANON MISSAE)
LABRANDA

tu flor, temblando, te olí


Juan Ramón Jiménez

Primer encuentro milagro devuelto


En tu boca despertada supo el sol
Ocultarse en la brisa blusa de uva

Talle de rosa firme en lo cenizo


De tu piel papel escrito & retocado
Reventazón de mástil bajo toalla

Así se alzó tu mano en el


Antiguo confite antes del baño
Espalda intacta destrenzada

La siesta suspendida por doquiera


Su chisguete se dispara curvilínea
Adormida la paloma más secreta

Conducta del cielo bajada en


El repliegue de torso & muslo
Acerca a Dios ceñida diosa

& en un canto de espumas


Mares blancos que se tejen al
Solaz de tu inocencia adivinada

Ganada la mañana no suave a tarde


Ser vacío de tu pensada piel a
ceras santas escribanas fuimos

Enigma aliento ténue descubre


Blue-jean durante dulce dócil
Mente quitado holandas tersas

Ya no habrá la flama en fusión


Que vio la ave más rara del
Amor su corta nube misteriosa

Ni un mate de noche serenada


En la salva marina de tu concha
Ocaso casi al borde de mi tumba
Tus aureolas paradas que
cantares advienen al poema
Luces férvida anudada in

Quieta parecían rosales firmes


Labranda sin prisa adorada
cuota dada en sacra romería

Pelo negro sobre tus hombros blancos


Anochece sobre nosotros abrazados
Difumínase el día en la bóveda santa

Entreluces luces rosada rosa lozana


A la luz del crepúsculo crecen tus crespos
Ocultos en la seda angelical

Un silbo del aire se aproxima luna


Sobre el cielo de Lima brilla & rebrilla
Nimbo plateado bañando tu cabellera

En la quietud curvada ancestral


Retama viva & nocturnal surgiendo
En la penumbra recogida en tu regazo

Esplendor de tu espalda esbelta &


Recostada brote en la fuente verdi
Dorada adherida al bordado carmesí

Volvió su corazón al mío


Aire & respiro dióme su flor
Fragancia gozosa apasionada

Altura de ola sutra & rezo


confiere la figura del alisio
Perdita nel oscuro & el dorado

Retornas sur los sures


Soñados leche azur zurita
Azul solita en tu blue-jean

Perdura deseosa fresca la


Matina alcanzada en su
Pantalla otra vez leída
Misiva alada in verso afán
Do huye la noche desolatrix
Serenado mar flotante renacido
5 (IDEOLOGÍA MARINA)

Espuma en el cielo que miras


Tendida sobre la arena besada
Expropia la delectación de los astros

Artificio converso en la canción


Se ha perdido vidrio nocturno
O antifaz helado por la brisa

Trópico acaricia el sentimiento


Límite del aire sucumbe ante
El contorno delicado rubor

& ficción sumergida en el


Anillo interior que se hizo
Espejo sobre flama ardida

De su amor saliva constelada


Fulgor quebradizo que a la inversa
Aloja bengala de las olas resaqueadas
PORTRAIT OF A LADY
(KATHY EN OCEAN CITY)

Caída castaña recogida por el


Brillo ondulante que se posa en
Mi poema soñado ante tu rostro

Pink bajo el sol de azúcar


Puesto en ti con bruñida luz
Oh memoria egea que me toca

Sonrisa en su arrullo más volada


Fue cornisa donde el ángel susurró
Sonámbula estrella mar secante

Altura anima el planeo del ave


Sobre ingle dormida que despierta
He aquí insaciable su calor calma

& oscurece en los cristales anhelos


Otra vez amanecer en el primor
cuerpito de alabastro eterna luna
MYRTHO

Plateado resonar ante ninfas,


Reluciente líquida porción suave
Mente escalada de tumbo en tumba

Encrucijada de corrientes frío destino


Que baña la aproximación rever
Berante gotas sobre el bronxeado

De Venus la canción de Shocking Blue


Ey Mom –habla la brisa encaballán
Dose de pronto en los rizos de

Perfecta angustia levantada anguila


De estas ondas helando la dulzura
Luz topacio espuma desaparecida

Se me viene se me acerca húmeda


Mantilla o patina de vidrio que en
El sol se mira & me fascina

Planicie celeste en que refleja


Solar sus ondas destellantes
Las Tres Gracias danzan rubias

Innombrada alegría juego corporal


Ancestro de divina playa griega
Relucen cintura & pechos abrazados

Sensual movilidad en la superficie


Jamás quieta parpadeo permanente
Es eterna en la sombra desta luz

Nítido verde en lo dorado del césped


Extendido hacia el confín de las bellas
Espaldas bajo toallas indiscretas

Bonitos montículos se cubren apenas


Por las sanas magnolias cuyo pétalo
Presiente la infinita tristeza de la tarde.
PISCINA ROBERTS

1. NIMPHA

Puedo mirarte a mi regalado gusto.


Tu linda cabecita emerger del agua
Brillante como tu dorada cadera
Perfección esbelta al filo celeste

Ahora danzas con tu caminar


Siempre al borde fina silueta
Que en la pileta se moja &
Se esculpe sol embelleciéndote

Aún más mientras cubres & des


cubres tus pechitos alisándote
Veloz pasas corriendo rostro puro
En el vergel & la líquida planicie

La luz resplandece oh superficie


De tu piel húmeda & divina
Acariciada por insólitos destellos
Sobre espalda & hombros impregnados

De una miel tan tersa que ni el sol


Quisiera irse de este día agonizante
Por no dejarte jugando & riendo feliz
Entre los chicos de la azul piscina

sumergida

2. ESTÍO

Brisa memoria azur azúcar


De la piscina fina mar o
Tibia mejilla que se moja
Rosa en su idilio de estrella

Increado sol cercado por la


Nube callada canta ligero
Venero venerado en su solo
Esplendor infinito danzak rock
Pálpito dormido fúlgida belleza
Huye entre el remanso escondido
cazador flechado por el brote
Blanco & su rubieza desnudada

Dios del club enardecido pensa


Miento al soñar virtuoso ocaso
Torna la dulzura más lejana
Urna primera herida cual rocío

Sobre muslos invisibles albor


De la próxima estación entriste
cida que ni el sida infecta la
Dicha inesperada solitaria rara
INTER DENSAS

y la célebre ola hace lo suyo: reventar


Enrique Lihn

Blanco irisado manto cubre la ubre


Del mundo umbría umbrella de la
Mía sorella en el solsticio agonizante

Retumba el eco sonoro de las olas


Las solas & refrescantes cristalinas
Marinas pías sobre espumoso devenir

Estallan ellas senos bamboleantes


cromo somas solícitos soleados inauguran
Iluminada azul horizontal que me persigue

Trueno líquido avizora la otra luz


Que en la mañana porfía su añoranza
& de tarde va a morir segura sobre el muelle

Ya no habrá esta canción sumergido sol


corriendo niño rubio por la nieve playa
Esposa mía que se moja el piecesito

Marcha brillo disperso en la empinada


& vacío absoluto de mi ser cilindro in
Frecuente sin cesar puerta metálica

Desenrrolla & enrrolla su fresco resonar


Zambullida me libera del intento por
captar tu dulce ritmo mar divino

Columna echada se levanta se va


Elevando es una onda verde oscuro
Pared de gravedad sonora que cae

Va cayendo suavecito para reventar


Blanco tapiz cual encaje en
Supremo intento capta mi lenguaje
Parpadeo de la brisa en la movida
Superficie rota a cada instante por
La cordillera mojada & sus nieves

Diluidas otra vez nunca existidas


A lo lejos delfino desaparecido en
La inmensa batea salta & se re

crea su figura solitaria nos


Distrae el degradé más sucesivo
Mezclándose en la arena revuelta

Destinos susurrados renacen a


Hora oquedad llena mas estruendo
Ocular ocupa mis oídos se extiende

A ras del suelo amada playa


Alfombra lavando la alabanza sal
Picada en la baranda contemplante

Rumor salvaje regado oh riesgo


Entrechocar de rocas metidas en
Tu alma húmeda hamaca detergente
Pak At Mpuamp Ah Ah Ah Ah Ah
4
AUTUMN
JAZMÍN

Vagancia callejera absurda juguetona


Se alegra de súbito ante impoluta forma
Felina tersa piel tan blanca al sol

Piurano en el regazo de mi madre


Ya no volveré ya nunca más esa
Ternura impalpable en las manzanas

Recorridas solo por fugar de la melanco


Lía a nadie mi canción fugaz & fina
Suave en la caricia gatuna runrunea

& mi corazón se va hasta Sudamérica


Sin saber que ahora dibujo a ese pata
Quien un buen día se fue a morir

Por los techos desolados para dejarme


En el vacío con cual este evening
comparo la música de su albo

& elástico caminar tras de mí solito


Quedándose en la infancia remota
Igual al sol de Piura renacido

Idilio posterior en Filadelfia


& me araña con raro dulzor
en la barra de un pub enardecido
TRINITAS FABRICATRIX

Hay un brillo oculto entre la siesta


cuando aduerme alondra parca
cantan por doquiera los perros

Nunca norte volvió a soñar


Si tal vez lloraba sobre el
Hueco de un nacer a solas

Huye la pampa sintiéndose


caldito & chilcano en Chilca

Por las púberes angélicas


Húmeda en el aguajal
De su perdido país no nato

Paces manzanedas son noveles


Rapsodia en la pregunta sin cachita
con su suerte un corazón regresaba

Por fragancia de fragata desvaída


A ese mar & marea bien mareada
Muca e’ Yapatera suma cadera

Goza el horizonte chapoteando


El aire le pegaba el mandil a
Piel marrón abierta altanera

Pura en la región que te em-


Peñaste por la luna de los días
Un clavo achorado la muerte

Me invitaba
ADORNO BOSQUETO

El sol se esconde entre las nubes


Sus destellos auscultan el río del brillo
El rito de mi mismo en espera de la nieve

cosmos caótico es melódico silvestre cual


Los patos aleteando por alcanzar la orilla
chilla la patina y es matina amanerada

Hasta que ya no haya donde volver la


Mirada se asienta el sofoco del aire
En tus pulmones el vacío ofrecido

Desnudado en la frecuencia del gesto


Hay un gusto moribundo atrabiliario
Una nada nadando en aguas serenadas

Cuando contemplo las aguas solares del río


cardenales amanecen amansan la caída del día
Ya no nombra las sombras el eco de un ekeko

Guayacán se retuerce en su indómita dureza


Adentro abrasa azúcar haciendo la finta del
Amor constelación de espaldas de muchachas

Tanta música alcanzada desfigura tu rostro


carcomido cada minuto insuperable canta su
Elevación suspenso & muerte refrescante de

Tente porque no es siniestra cima nevada o


Sicuri enfilando tampoco desértica aplanada
Sé la rosa coloración de tu piel en los trigales
DELICIAS DOMINE

En la noche contemplo mariposas


celestes nimbando tu silueta azul
Praderas exquisitas adoradas son

Enigma perfeccionado en ti cón


cava aparición virginal belleza
convulsiva bretoniana existe

Solo en el silencio del amor


& la luz vertida por tu sombra
Fugaz nada se parece a ti sino

Estos versos en la cima ardorosa


Del soñado tocamiento feliz intacto

Estrellas brillan en tus ojos sacros


Inocencia en la forma de un clavel
& rosa sobre el ansia de ti misma

Virtud destaca destinada al esplendor

Olor dormido despierta en lejanía


Salvaje selvaggia póstuma tutuma
Aparece en la tristeza de invierno

Voces interrogantes sacuden flores


Insanas bruma que la luz sucumbe
Su relumbre ese film de los espejos

Tu vieja máquina seca el plato secreto


Allí donde la costra angustia lo bravo
El mar magenta sitia la brisa de ti

Misma mientras los rosales buscan


Tu nombre & el azar sería suspiro
Osado al cantar diosdado decaído
Era otra vez la ola supurada en la
Seda de tu seno pequeño inquieto
Sauce llorón sembrado por la tía

Emmita
PIURENSIS SOLIS

Soledad sinuosa saca de esta noche


ciega belleza astringente en el viento
Fuerte en el traspatio traspasado de

Estrellas yendo más lejos levemente


Hacia tumba jatun-runa running
Pura por su corazón serrano sana

Seco de chabelo sigue a la fragancia


De un pleamar amado surco o rica
Papa abierta suculenta al amanecer

Se viene solita sin cachársela


Estela vela en el velorio del amor
Oscura rareza intervenida avanza

Llantos solanos sierpes semejan


Sucumbir a las finales frágiles
Apenados apenas ya después en

su nada
NOBILE CASTELLO

Susurra silente silueta en mi mente


Soplo embotellado del último polvo reunido
cisne en el recuerdo de tu franca risa

Olvida su mentida quimera reverbera


En el cielo desta noche finiquita riquifita
Rosas flotando en la orilla playa insomne

A tu sombra empezada diluida dalia


In media res un nudo en la garganta
Pantorrillas pensando pulirse en el amor

Su alzamiento arriba planea las estrellas


Paisaje & garúa rizados lagrimones nos
Embadurnamos la cintura de tu cabellera

Afirma lo presentido en la nota herida


Que pulcra vulva retrotrae memoria viva
ONCE AGAIN

La primavera vuelve, vuelve y se irá


César Abraham

Causas Amorosas

Al atardecer suavizo mi dolor


Escribiendo una canción a tu cuerpo
Idílicas orillas junto al río
Reposan mi corazón de la sola

Rosa sueña la sonrisa solita bien echada


Susurrando cimbrea mimbre pleno’e fruta
Encima del cielo & la suda seda o neblina

Rayada por fierrito en su ensenada


Apresura arbusta umbrosa & arándano
Furtivos penetrantes hilados al gemido

Sus pantorrillas divinas alzan amaneceres


En la penumbra dorada de su perfecta pose
Un silencio azul atmósfera el reciento ardiente

Ruca alegría pasan las horas sudacas


Vuelve el olor del jazmín & la belleza
Infinita cuya calma obsede la razón

Ropa enamorada de tus formas


Fanales afanadas durante décadas
Por mi poema abstraído sin ti

Salmodia vespertina ya en tu trono


Alpacas arribando a la playa inexistente
Solloza el beso la arena del estero
2 (MEMORIA)

Mi sillón azul acerca su nada azulada


Para amar esa amargura musical que ya
Nadie escucha avanza santo en su hormacina

Tronchos ya se fueron volando solos hacia


El cielo bordado donde bordas las labores
Sobre lienzo templado en redondel costeño

Así la madre extraña su dulzura viva


& me manda al altar salesiano cada
Domingo aunque luego el yucún se

Rompa en mis rodillas como tétano


Vacunado después de la caída en bici
Cleta me descletan jugando ñocos al

Fondo de las palmas embriagadas por


Ablución que curaría la angustia ungida
No seas wamán si estás hasta la

Coronilla standar cicatriz ya no


Hubo mazamorra morada todo lo con
Traigo en la sonrisa de mi madre

Silba el gallo de la plancha de carbón


Vaho mezclas chispas alocadas sobre
El corredor de la puerta falsa amiga

De los chapes sin embargo sin chapas


En plena libertad rasguñada a cada
Rato por la solapa negativa del Amor

I am in God’s presence night and day,


And he never turns his face away
Blake

Encima del aire azúcar dormido


Trina el silencio viento cobrizo
Una muchacha se hace al crespúsculo
Alondra sonora en mi mente esquiva
Inclina amorosa cerviz sobre césped
Donde yace la luz que sola se oscurece

& ya son los párpados cerrándose


Joya tu sombra subterranean sonríe
Porque tienes la nobleza del sonido

Divinamente volada en tu distante


Rosa fuente que en su afluente
Se desliza Ofelia hasta el Azur
HOMENAJE A EZRA POUND
(ARS POETICA)

LOCA MONTIS

Bona domna, Deu cug vezer


Quan lo vostre gen cors remir
Peire Vidal

Entre el blando pasto bajo algarrobos


Corre el Piura pleno de acholadas ninfas

Al fin fueron violados los ritos de Dionisio


& por la lengua mochada e’ Filomena sus
Hermanas se volvieron chilalos en el monte

Soleil plovil a forro cada siete años natura


Se presenta cual lluvia dorada por Danae

Terrazas de Ecbatana estrellas perfectas


Rutilantes cunizza in Paradise cantó

Campestribus locis aguas de purificación


Belleza difícil mundo divino & misterioso
Dentro & fuera de la mente & El Tiempo

De Piura como detenida stella axial


Memorias de mi niñez en Churrilandia
Eternos estados de desolación todas

Las cosas que son, son luz como


crece la hierba plura diáfana

El valle del Piura está lleno de ti con


Flores con frescos algarrobales con sol
Brilla el agua parda flotan las hojas

Escribo el dulce canto de los pájaros


Del jardín su lindo azul sonido
Música quena alma lágrima viva

[Praderas de New Jersey, fluir del Río Cooper, 2006-2007]


AMARANTH
(2010)
Ya encarnado el descrédito de la realidad
Ildefonso Rodríguez

Hablaban en clave inclusive delante de los pájaros


Julio Eutiquio Sarabia

entrando en la espesura de un lenguaje por el hueco


Eduardo Milán
CONCEPCIÓN

1. ESTACIÓN

El invierno sabe suavizarse en los cristales


Ahora sueño soledades matinales acordes a
La prestancia del vacío vagando vihuelas va
Hasta la luz cual zenith inmolados oferentes

Se apachurran ansiosos hospedajes maritales


Han vuelto al bobo latido descreído diferente
Los soles socarrones en las playas auristela
Vetusta amarillenta acicalada niña antigua

Sacaría de ella su panal sicomoros sobre


Sáficos semáforos preñados rico ñabre
Para ser las ancestrales marimoñas oñoñoi
Sitio cirujano que manchó la nieve ardida

2. RIMAC’S LUMPEN

Confortada plurabelle vente viento enhorabuena


Siena asiática del ático onde vendía Tico-tico
Desengrases nocturnos palatales consecuentes
Se paltearon los bribones al final de la mentida

Días divorciados dosajes en los gajes del oficio


Acaricio tercipelo a pesar de tu dorado medio
Pelo las cáscaras del maldito cascarita aunque
Me atraque a puro pulso cada madrugada

Cielo oscuro cúrame el dolor de amor


Bruñida moneda no es ñanga en el ñeque
Morador del escapado patuleco cual gallina
Culeca caldo & cebollita china bajo toldo abrigador
3. SAINT PETER’S BEACH, WAKE UP

Amanece el frescor en la playa húmeda


Rito acuático tempranito solloza frágil la
Jerga líquida espumosa huyendo instantánea

Tatuaje transparente sobre borde concéntrico


Burbujas impalpables desaparecidas chupadas
Por el hueco del cangrejo rojo & bebito no

Más verdor en el montículo onde me siento


A delinear los flamencos bailarines a lo lejos
Mejor recojo conchas milenarias quebradas con

El tacto empujo la balsa ante obstinada


Ola impaciente e indeciso sol reposando aún
El fragor de una luna enloquecida pez

Diminuto que vara el estero órbita quieta


Sin mejillas sonrosadas árida planicie
Enmudece mi canción cual nube bañadita

Imposible en el tormento adolescente rozado


Mentalmente por angélicas ternuras femeninas
Vislumbre del gusto acrisolado desértico

Un derroche de belleza a dicha hora


Albur volado en la olvidada pluma
Que se encuentra perdida & muerta

Sur la arena
SACRA PRIVATA

1. INFANCIA

Junto al almendro perezosas


Digamos el jardín de mi mamá
Allí donde amainó la lluvia
Y creció la luz del sol en cada día

Eso sería en marzo en el verano


Fúlgido ofertorio cimbreando
Las lechuzas al poste anochecer
Venían del bosque & calmaban

Su ansiedad

Solo la seca calidez del viento


Ausente ardor de arena & algarrobos
Avista la iguana tornasol de mis
Amores churres chiflados por chifles

Crocantes coronados con chichita


Catacada onde la amiga de mi viejo
Gertrudis ojos rojos cecina & costillar
Mosca-mosca que no olvido nicaragua

2. ANCESTRO

Vivo silencio sumido vuelo ardido


Hablando sin lágrimas estilizadas
Se hacen un poema salto amoroso

Rumbo del disfraz en mí poseído


Chapas muy aseguradas hasta el
Barandal en que se posa la ardilla

Soledad trabajada por el viento


Aparadores aparatosos derretidos
En su extraña belleza embaucada
Las hojas marchitas cristales son
Devueltas al orígen del río quema
Puedo oir el piano lejano de mamá

Artistas de circo fascinantes cabritos


Tapados para el goce de una quena
Pan de molde en la mesa de un

Serrano lonche

3. CARRETERA A SULLANA

Se te voló la azotea avisa


Pero nunca supo solar su noc
Turna urna taciturna al fin

Todavía cardenales & petirrojos vario


Pintos acuden al llamado de la llama
Inalcanzable en su calmada cumbre

Otra vez amado el brillo injerto


Puede ascenderse miserables parajes
Destinados al sur más encrespado

Mas tiene su música escape


Imaginario flotante memorión con
Tínuamente inimputable & alojamiento

Recorrido cual densa danza sa


Turnal son observables antiquísimas
cabras en el monte el arenal

Masticando su papel
AMARANTH NYZ

Viaje mar incomprendido ade


Mán de la garza salpicada por
Doquiera quiso apropiarse de

La rosa

En la lejana espalda de su amor


Remoto reino equiparado a un
Corazón vuelve mar con brisa

Salerosa transparenta fluido mag


Nético noble dominio callado en
El desierto sechurano expresa

Nítido fantasma no hay ninguna


Sobradera o ladrido ‘e perro-lobo
En la distancia solo tu fragancia

Sutil salina me repone el ama


Dor callejero extraviado en lan
Das cinerarias o dormita el ere

Mita coronado su placer de

Insana flor

Fugar fugazzis hasta la vieja estación


Destilado en su estilo el amanecer
Peces de la corriente más oscura

Sobrexplotación mineral arrastra


Lavaderos chinos ahogándose en
La nieve con música finita su silencio
Terrazas esparcidas por el último
Respiro de un chilalo apurando la
Sonrisa que conquista la canción

Detenida de tu rosa

Caligrafía líquida a la fresa de una


Boca destinada que te priva del
Suicidio & se prende del aire im

Posible en las falanges disecadas


Hay un ánima viva recordándote
Rotos rotten esperados el azul lado

De los Hados

Hay una flor melancólica cuyo nombre


Ignoramos atravesada pleamar barrunta
Horizontes helados copia de unos labios

Escondite anaranjado cardinals & chi


Lalos frutos sobrevuelan la planicie
De agua suculenta interminable ar

Teria artística me sume en la tristessa


Muchedumbre de aullidos finos que el
Atardecer desciende como falda de

Una chica estallando en mil colores


Pasión blanda oh cerrojos en ruptura
Se duermen sobre almohadones signos

Radiantes filamentos mercuriales


Ciervos diagonales cruzando la auto
Pista patos silvestres se disuelven en

El cielo ascensor
UN OSCURO DULCE LIMANO
(HOMENAJE A PABLO GUEVARA)

1. GRIFALTA

Ansiosa periquilla niña sutil


Emboscada vez que extrañas
Marimba en tus contornos

Ritornello fugaz azás oculta


Bajo orégano su yerba mentida
Asalta corazones burlados sin

Piedad sin asco vocifera matinal


Alada al lado del quemado edredón
Querubín indígena victorioso te

Salva atento amoroso americano


Mas tú siempre vuelves al desgaste
& otra vuelta nada en la cajita

De lata

2. TAMALES CALIENTES

Una amada lejana aproximándose


Abraza antiguas imágenes perdidas
Queridas amantes anacrónicas

Alegrarían a las muertas visiones


canciones escuchadas al volver
La vista atrás trazando vértigos

Vírgenes genéticamente puras pitas


Pallas donde vayas hay agallas
Galladas diluidas irrecuperables

Allá por las rimeñas riñas de


Faites flacuchentos frecuentes al
Frescor de la noche malsana
Catana que un raya te dio
Inolvidable encanto del amanecer
celaje del patrullero celador

O el grito de un pregón moreno


Voluptuosa curva bajo la bóveda
Líquida luz de tu lucero súbitamente

Aparecido

3. CENTRO DE LIMA

Anticuchera abofetea mis labios proferidos


Mientras suben las nubes exquisitas tras
Bambalinas lindas de anilina en el Paseo

La pileta con sus niños calatos rodaviíza


El verano oquendiano & la calor de niña
Del Villa María me sorprende esperándome

Preciosa huida de las gordas columnas


De la Justicia almibarada bajo máscaras
Andinas donde nadie recuerda su pasado

Ver si los corderos fueron ya sacrificados


Nocturna umbría selva del pastel azafranado
Pelo rubio que caía sobre pubis machiguenga

4. PUEBLO JOVEN

Mientras rauda desvencijada desventaja


Penetra al fondo hay sitio nadie dice nada
Soñolientos concubinos se apresuran

Huecos elaborados rupestres confirman


La subida hasta la punta’el cerro
Yastán tibios cervecean yunza buena

Ni una china te queda en el rubí de


Esos alcoholes ataúdes de pollada
Flores revertidas que hoy la nieve
De acanga te aproxima pututo
Resonado intensa rosa rebrotada
Acariciable marea marital amena

Zando todo Lima chullpa refina


Miento procreando el ofertorio escin
Dido lácteo que ya tu corazón cincela
ORNAMENTO FUNERARIO

1. CAMICHE

Mañana de calor en punta curva


Tras lluviosa madrugada voltea
Sudores retintos no impiden seda

De tu retocada piel angosta against


Verano piurano tendido en la toalla
De felpa onírica gracia desprevenida

Desapareció bronceada esa cintura


Venérea Venus benemérita re
Naces en los rubios hazes botti

Cellis cada tardecita difícil


Luces ténues tierna tienes
En mi oscura memoria sub

Noche bordada en escote oh


Diseño redondo muy perdido
Orilla mansa en que boquea

El poema

2. RINGO

Metálicas guitarras se alzan pasando


Moluscos sobre el palacio submarino
Hechizo de Ringo & su jardín o su asesino

Tractor por un traspié premonitorio allí


Donde la harina de pescado nos dejó sin
Consultorio rock que se desmaya &

Se queda dormido para siempre dorados


Besos que Elizabeth nunca consiguió
Con su uniforme punk la más solitaria
Hembra montada en una sopa de choros
Tu mano buscando el fierro curvo
Surcar avenidas madrugadoras cerradas

Epifanios sumergidos con la pura luz


De su tristeza no hubo moderación en
El desmadre inclina el surtidor franco

Duelo
CINCO ESTUDIOS

1. GLORIA

Cabellera dorada ante mis vistas.


De su escape nadie se escapa si
No yo mismo azur contemplativo

De sus ojos sales rosales celestía


Azules celuloide divino transpa
Rente parentela asesinada in New

York del niño su nada amante soñada


Se fue volviendo abuela & madre
Para film disparó huyendo de esos

Maleantes que en la cumbre de


La muerte recordada la dejaron
Sumergida en el nuevo & radiante

Amor Perdido

2. MITYLENE

Callado vino rojo sube al talle de


Un desvelo por amor constelado
& luego comprimido en la crecida

El mar siempre será una diosa


Cuyo seno suavemente se recoge
La playa más dorada de tu sueño

Con fresco verdor la ola blanca en


Romería sacia la seda de azur que
Copa encima solar brillor celeste

Evanescente destello por los tumbos


Sonidos solos siempre en mi canción
Ella estuvo a mi lado recostada en

Dulce Sardis
3. TRISAGIO

Viejo empedrado rompido por Blanquillo


Canto por la iguana recordada on la arena
Azul música del aire se quema carbón
O subido promontorio tocado por Wayama

Silencio súbito en las tardes del adobe


Ya que lagrimales volvieron sueños solos
& el asombro colmó la calma desolada
Aun el terciopelo de los besos solitarios

Indices marcaban marcabriana parentela


Mas en la tutela del amor cristalino
Brillo marino se escondió en la tibieza
Que en tu pieza anida la morada

De ti misma enamorada

4. ESTUDIO DE UNOS LABIOS

Gaviota horizontal a lo Man Ray


Tenían vida sola su propio
Sino eran de luz sobre la noche

De mesa agitan hoy mi poesía


caramel creando un divino ritmo
Temprana avemaría revolotea

En su forma recordada & es


Máquina blanda de tus frases
Humorosas cual estreno en

Pincelada frágil fragante frati


Cida no nostalgia que palpita
& pita cerrada hasta los

Aros aromados o es el carmesí


Que no me alcanzará & eso
Me entristece centro de tu rostro

Enmielada tentación o tersura


Que no toco pero puedo estar
Preso original virgen virginal
Una especie de saludo oprime
El pecho solitario humedecido
En esa fresa medida del poema

Medita suspiro estación des


Hecha hay algo bello & desolado
En cantar la visión de dos horas

Para siempre grabadas

5. ESTUDIO DE UNOS OJOS

[S. E. C.]

Luzca la luz pura para el


Cielo ‘onde esconde su amor
La poesía que por ti escribo

Escape encima de los bosques


Sirena apacible entre la roca
Atisbo del verde resplandor

Volver a verlos silenciosamente


Brillando bajo dorados fluoescentes
Como un signo ocasionado & feliz

Hay una esencia fina en su color


Un vuelo orando quieta dulzura
Involucra ansiosas márgenes

D’ellos un esbozo quisiera esta


Canción ser su claror irresistible
Anegado en ciertas lágrimas

Distantes
RIVOLTI AL MONTE

la luce in terra dal mio destro canto


Aligheri

Azulina voz consume consomé tiznado


Dulces maniobras corolas del manubrio
Vista nube enferma por ocasos vanos
Con rayos rayados pasea triste urbana

Patricias niñas besaron amarillo patito


En despedida pubertad árboles venideros
Calor acorazonado sabor de un chup final
Escrito en los pétalos bañistas llorados

Último aguacero temporal sobre tu blusa


Blues susurrante enardecido vestíbulos
Ofreciendo vuelos volados hacia cielos

Donde entregas las fanegas hechas luz


Luciola amante en el fragante fino piano
Lontano ya se fue corriendo sol piurano

Fue un deseo de rosas desbordándose


En mares retirados diariamente hacia
La isla & el estero vacío onde jugamos

Núbiles muchachas se voltean a


Mirarse en el espejo huidobriano & en
El barro de su tarro hicieron flor

En~canto de durazno en pluma


Los flamencos fijados en el écran
Del cielo rosado & celeste al fondo

Alfombrado zénit que no puedo tocar


En el hueco más desértico ardiendo
Atrás por horizontes perdidos sechuras

Transparentes
3

Oscuridad asombra luces quietas


Alcanza inalcanzable
Sound divino Brotada lejos de un amanecer añil

Volvió la primavera con su ocaso


Piel desnuda igual al vacío de
Una forma amada ya en el cielo

Aires avanzados donde planean


Los plateados peces en la nada
De su río seducido por la orilla

Hay música en los apus arbolados


Que ya no escucharán sus propios himnos
Pero la dulce inmensidad será su viento

Tentando adivinar las figuras privadas


Esquivo rozamiento de silueta femenina
Orna alusión cifrada tu boca deliciosa

Porque reserva la brisa su saber marino


Así se inclina la clínica ritual & calma
Tundra del hastío filtrado en cada

Corazón latido
VALMAR

fresca rosa novella


Guido

Por las frondas azafrán corrió el


Venado más triste destas landas

No tenía barbas ni era estrecho


Su corazón manzana acaecida

Dorado ósculo perdido en llanuras


Calvas cavilaban sus sentires

Instrumentos de un campo soñado


No llegaba música sino oída crema

& pálpito que se enredaba con


Las flores de un afán traficante

Frontera rebuscó caninas dichas


Pasajeras de ómnibus interprovincial

Humedades desapercibidas marinas eras

En el chapoteo furioso de la marea


Ingrávida gaviota surca lo más sur

Manzanas arenosas sonríen en la


Boca desa niña amada rutilante sol

Al mediodía lejos del postigo donde


Un viento raro bate la puerta solitaria

Especie de beso que se pierde voluta


De aire asciende suave savia azul

Oleaje espumante de estío amante


Cuyo oscuro atardecer murió de amor
La isla de todos modos dorada
Alcanzaba el océano de guitarras

Ensortijadas aguas diurnas revueltas

[Compuesto en los Estados Hundidos de América. Ciudad del Príncipe,


Casa de Orange, Fall 2008-Winter 2009]
ROBERTS POOL CREPÚSCULOS
(2011)
She like a great shell curved
Pound
I

ROBERTS POOL CREPÚSCULOS


1

COOPER RIVER PARK

& el destello del brillo del río


Contemplo inmóvil en la verde orilla
Suavísimo repliegue acuático mi

Niatura dibujada por la diosa in


Visible oculta tras la fronda ce
Leste que a la bóveda se funde

En mi dolor terrestre como la


Nube majestuosa desaparecida
Recién al formarse & ser deli

Cuescente presencia frágil nada


En la silente extensión flotante
O suspenso suspiro de incomprendida

Rosa

Refulgen ninfas sobre las aguas pardas


& las hojas susurrantes hacen su son
La floresta divina a la brisa estival se

Entrega es una solitaria rosa perfecta


Entre nubes perla quemada & azul por
Los arrecifes del cielo encendido & ya

Crespuscular plomizo en el fondo de sí


Mismo constelado algodón-azúcar en su
Boca deliciosa derretida incomputable

Allí donde su luz fue el secreteo de las


Horas ondulantes forma del anhelo en
Extinción que sin embargo aún canta su

Canción
3

El atardecer mientras lo vivo en el jardín


Va cayendo en la instantánea resolana fugaz
Es una luz que viene & va capricho del

Solsticio entre la rosa más amada


& las bellotas abiertas en sus labios
Cardinals sobrevuelan el antiguo esplendor

Entre las dos aguas memoria almendrada


Con el dulce blancor en terrazas azulado
La noche se aproxima gimen unas voces

Mística edad de senos pequeños desliza


Delicada tu delicia mental sobre este calmo
Agonizar lejano en el césped inconforme

Los arbustos son perfectos danzan


Solitarios ante mi susurrada canción
No me dicen sino dulzura enhiesta

En la finestra destinada a su infinito


Vaivén inescapable a esta hora mori
Solo el sonido de las ramas cruzadas

Por el viento se percibe en el adviento


De una noche más en el verano del
Confín tan olvidado presto a la sola

Despedida que es mi canto fúnebre &


Sin embargo feliz hasta la sonrisa de
Una rimense monalisa tiempo intocada

Se va la luz se va la forma
Amada solo el azul inmóvil
Se queda arriba se torna
Celeste sin que nadie se dé
Cuenta ahora es albo humo
O un estallido de plata

Un reburbujear semejando hielo


Seco en la lejanía desvaída &
Vuelta a crear la rosa más tierna

Por un instante desbordado de


Perlas en la tersa piel ingrávida
Perfección solar cuya belleza me

Ensimisma & se desaparece

En tal suavidad surca la noche clara


El sueño de tu cuerpo puttino & desasido
Despierta bañado en lágrimas sonoras

Viento respirado en tu flotante cabello


Era mar con su oleaje envolvente
O neblina de Lima a la hora más húmeda

La orilla tintinea de burbujas solares


Serena soledad cual gaviota planeando
Contra la cresta más verde de las olas

Estabas tú con uvas italia entre las manos


Ofreciéndome el paraíso porque en tu cuerpo
De diosa portabas a Dios blancura de rosa

En la playa soñada

Formas femeninas en la mar de la piscina


Ondulación alfombrada intermitente svástica
Donde el canto fraseo es de tu alámbrica voz

Ennobleciendo las sílabas notables pacíficas


A través de continentes continuados ofrecidos
A la destrucción del amor que no se vence
En las quimeras dictas sol yaciente lunar
Ya te aproximas sobre la grama nebulosa o
Navegar de mi sueño por el pórtico de tu

Rosada risa infalible pétalo en tu bahía


Inquieta submarina que solo calma el swing de
Tus muslos deslizándose en las aguas claras

SEA ISLE

Remolinos rubios sobre estallido insomne


Escalas albas grecas salpicando la
Silueta de un amor ajeno recordándote

Robo del sol es la belleza de una niña


Feliz saltando entre la espuma fiel
A su lindura mojada con órfica sinrazón

Ahí viene azul en sus pasos preciosos


Curvas núbiles a un ritmo esculpido
Por los dioses infinitos formando su

Inocencia frente al poema que solo aspira


A retratarla invicta jugando con la
Arena húmeda & las conchitas recogidas

Por el océano a sus pies

La planicie empinada posee tres andenes en línea


Nivelados rutilantes avanzan para acá paracas del
Atlántico los convierten en tapiz brillante nímios

Resuellos de un solar agonizante redivivo glitter


Pequeños instantáneos en la dulcísima piel rosada
Manda la diosa desde el fondo hasta la orilla

Una canción fugaz como la ola que fallece


Solita en su esplendor magnánimo a la hora
De las brisas calladas & su estallar plac roar
Ese resonar no cesa never ever se ex
Tiende en el tiempo que me resta para re
Vivir su son aquí en la página que escribo

10

Volviste a aparecer niña diosa de las


Olas refrescantes ahora con celeste re
Zumar & dorada bliss en tus pechitos

Revoloteando al viento tu castaño cabello


& la blusita marina traviesa como ninguna
Deja tu ombligo sonreír desde imaginadas

Romerías playeras por el borde en que


Deslizas tu forma ondina sobre la onda
Suavizada hasta rendir la pátina & su

Sed de ti conspirando conmigo por


Dibujarte corriendo cada tumbo cur
Va pronunciada en cada verso d’esta

Canción

11

Redondeada estrella solaz te inclinas


Sobre la corriente seda de encajes
Llena & tu carrera contra el océano

Absoluta venus entrechocada por la


Espuma en su punto de reventazón oh
Muslos bañados por el sino del bendito

Son errático ahora sentada al filo de ti


Misma adorada por las algas verdolaga
& el rebrote de tu figura detenida en la

Memoria de tus hombros perfectos tocados


Por intactas gotas de luz en la marea más
Sana & sin embargo despiadada con un

Poeta & su canción


12

Crespúsculos de la piscina, again

Hablar contigo después de observar las


Rosas del jardín te hace la más bella
Entre ellas la más exquisita flor de

Un secreto paraíso esa luz crespus


Cular & culear que contigo viene a la
Hora del atardecer cuando avanzan

Las nubes hacia este lado del corazón


Que me está doliendo en la entrecortada
Respiración cuya subte memoria son tus

Pétalos bonitamente envueltos & olorosos


A la profunda desesperación de amarte &
Ser el ave que se posa en el centro de tu

Pistilo azul

13

Esférica plenitud se hunde en el azur


Redonda como la curvada & encendida
Insinuación de su oculto horizontal per

Fume inasible que ronda luciérnaga fugaz


Quietud fantasmal del río contínuo sin
Embargo color serrano en su brillor

Espléndida la última luminosidad terrestre


Aves tempraneras de agosto & la calor chuerq
Respondido chuerq en otra rama no lejana

Ninfa rosada de sensuales pantorrillas


Te tiendes de espaldas entregada al
Movimiento que provoca tu belleza
14

Agua mayólica fluctuando inquieta


Parece fluir pero danza inmóvil es una
Inquebrantable abstracción perpetua sin

Detenimiento tiembla infinita superficie nim


Bada de agitación suprema extensa plana
La luz ya no es del sol sino del aire umbría

El líquido se azula solitario bajo árboles llorando


Un sollozo sweet & seco conmueve la cóncava
Alusión al cielo santo en su profundidad in

Alcanzable enorme concha de nácar en derredor


Vacía de piernas sagradas & potitos lejanos cam
Bia de color la suavidad fúlgida cae la oscura

15

Con los últimos dorados del cielo rosa


Rumba entre la fragancia palpitante
De su talle & tallo fresco rocío se resbala

Anuda cimbreante botón al aire puro


Dormida en buzo verde curva rubicunda
Agita floral caricia silencioso soplo

En la estación tibieza de la pieza donde


Reza tu belleza de rosa echada en el
Casto jardín sosegado orlando pétalos

Siesta húmeda del valle intenso allí la


Testa demora a tu capricho sopa por
Ternura brote en punta deshojada

16

Aroma tristeza circunda la pileta


Idénticas arboledas se escuchan
A sí mismas lentamente susurrar
Nítido cromatismo va diluyéndose
Ante el arribo de la primicia tímida
Brinda reflejo flexible su perenne

Mareo en la densa transparencia


Que nado a veces nada pespunteo
De rosa entramada a su deseo sutil

Peripecia curvilínea que convida orvallos


Llantos a la hora declina & caleta de un
Partir inminente que irá solito a

Hospedarse

17

Vespertino candor me aguarda en el


Vacío de callada rosa dueña por virtud
Sobre destino insania aurora de aura

Que corolas distiende en mi trovar a


Solas figura brunette en púber mameluco
Avenida arrulla ausente tocamiento

O recuerdo en el jardín de Villacampa


Caramelo de limón surge suma blanca
Nylon seduce matinales soledades

Abrumada gravedad causa de sacro precepto


Matiza la muerte de una tarde enferma
Lecho de risueña eucarística psycho rose
II
DANTE’S READING
1. PLEGARIA

Amo tu sonrisa de rosa sobre mí


Moviéndote eres un mar devastador
Que posee entera paradisíaca luz

En la penumbra densa & ligera


Brillas como del firmamento
La más lejana estrella sur

Monte deleitoso me das el dulce estilo


Ahora que el aire es leve brizna q’se mueve
& me abre las compuertas del deseo

Un ansia enferma mi corazón esmalta


Como a los arrozales el surtidor alcanza
O la neblina ciega el amanecer en Lima

2. AGANIPE

Esmeralda superficial cubre los cuatro


Puntos cardinales mi visión amplía se remonta
Utópica horizonte alucinado & el viento preci

Pita cadencia recurrente en mis oídos gigan


Tesco caracol a través del salino perfume el
Chapoteo feliz de rizada niña rubia por

La ingávida sinrazón o silueta cuántica


Adhiere espejos a millares bajo el sol candente
Ilumina a forro amanecer andino truqueado

La gaviota se pasea en mi delante & el dueño


Del ritmo sigue interpretando su canción inmóvil
Incesante marea que aluniza en el poema

& lo derrite
3. HIPOKRENE

Repisas acuosas una tras otra surcos cobalto


Alfombras de espuma sucesivas brinca barroca in
Vasión atropellándose deglusión ourobórea máquina

Montubia albo impecable avanza & se resaca en


Ondular insomne su voz forjada al viento se re
Tuerce & superpone en infinita & alocada melódica

Rítmica reiterativa indescifrable rumores redi


Vivos redoble de tres tiempos helados en la ele
Vación que rápidamente se deshace renaciendo

Estruendo rock otra vez inusitada suavidad


Al llegar a su final despliega brevísimo silencio
De nuevo atravesando superpuesto recomienzo es

Cuchar nunca va a acabar


III
FINAL AUN
1. LITTLE WINTER

Aspiro el aire que en tu boca


Respirada se detiene a soñar
La súbita brisa del río dispensada

Solo espero la risa del vaivén de


Las flores suavemente removidas
Por un viento nacido de tu seno

Son las ondas circulares en el


Agua la mansión que el poema
Te recrea luz de tu frente azur

Húmeda sequedad del invierno


En los ramajes muertos son poesía
Si tu leve cadera se apercibe

Sobre la grama iluminada por tu


Ansiosa carrera hacia la orilla yo
Distiendo la morosa caricia de’sta

Canción solaz

2. CANORUM VER NOVUM

Sol mío me encantas con tus ondas


Reflejadas en el móvil fluido trasminar de
Los patos silvestres & su erguida navegación

Alejándose para dejarme solo con tu


Brillo estelar hacia la otra orilla im
Palpable vista con luz Parkinson ad

Herida a las marrones playas verdes pro


Metidas en el débil incipiente florecer
Saludado por el viento anillo dorado

Fui hí fui hí fui hí tuu tuu grck grck


Chuí-chuí-chuí-chuí tai tai tai
Fui hi fui hi fui hi fui hi fui hi fui
El deleitoso misterio de las fuentes que no se resolverá jamás
Lezama Lima

El delicioso enigma de la piscina

[Praderas de New Jersey, Cadahus, en son us, 15 de julio de 2010]


VIRTÚ
(2013)
I believe that a light from Eleusis
Pound
I
SEA ISLE
1

Manto verde o pardo iluminado pes


Puntean fugaces chicharras diamantes
Levísimas ondas mueren de brillor ol

Vidan su rizo platino desaparecido otra


Vez resaltan & se esconden piel flagrante
Encima del díscolo e inmenso inestable

Dios helado cuyo son ritma sin cesar


Mancha inusitada pleno nerviosismo có
Mo se mueve tu perfecto balanceo no

Se inquieta nunca tu inquietud & sigue


La enorme cantidad en movimiento pla
Neando novísimas crestas que revientan

Sobre niñas doradas dulcemente sacu


Didas por tus blancos bucles stelares
Súbitamente solos en el écran de

Las nubes al fondo en fila donde el


Sol estila su divina materia dibujar
Ofrece una canción la brisa azul

Never la luz se puso al mediodía


Como hoy del mar sintió el clamor
De una belleza tan real impresa

En la resaca de un tumulto an
Cestral ingrávido prendido a las
Estrellas dormidas todavía si

Nuosas en su cielo ampayado de


Todos modos por las sabias orillas
Mojadas & desnudas tras el aire

Blandido suavemente revoltijo que


Se desata en mi corazón & lo hace llorar
3

Seda sonora silencio solo sale


De ti en la oquedad de las olas
Una tras otra tersura tierna

Que en su fresco resonar admite


Voces apagadas un susurro del
Viento colmado de belleza femenina

Palabras inventadas por marea


Franca & la gaviota caminando
Solita en los concéntricos bordes

Se decide a volar & es hermosa


Sobre espumas serranas en su
Cumbre o en un velero que se va

Se va yendo se pierde en el
Cuadrado horizonte lo retumba
El fino atardecer lo va matando

Hi! Me dijo una sirena niña


Echada en su tabla roja deslizán
Dose sonriente on the silk-screen

O trastocada por el refrescante dulzor


Hasta la húmeda arena perfectamente
Impresa tu silueta forma de un racimo ciprés

Nadie como tú para ser dibujada en el poema


Bañada por la verde transparencia recuerdo de
Pamela dejándose la truza metida en el misterio

Redondo como el mundo en que agonizo


Mirando el pulcro reflejo en tus hombros
Del sol que sin roche te acaricia

Inolvidable sinrazón marcando oleajes


De ternura desasida íntimo deseo
Perdido en la tristeza del ardiente mediodía
5

En la luz blanca del mareo final


La niña bate su cuerpo en el estruendo
Cimbrea el cielo bajo tiempo intocado

Gaviotas flotantes dormidas en tus hombros


Cristales fijados rielan la cadencia trobar-clus
De tus cejas delineadas en tu rostro de nube

Un bote solitario que se halla por la playa nos


Adentra en las líquidas fauces del mar sediento
Tendida en el petate de mi sola fantasía

Hay conchitas rotas a millares en la orilla


Igual que murmullos recortados por el viento
La flor desnuda abriga su vacío desolado

& de todos modos canta sombra sin sol


Que en el silencio un pálpito invisible
Hacia purísimos riesgos permanence
II
DOLOR
1

La estrella de noviembre trajo


El ocaso de aquella belleza inesperada
Su rosado atuendo al viento volado

Lo ví en la pantalla de tu foto
Grafía abrazada al vacío original
Donde el solo lagrimal urdía su versión

Vasija de tu amor se bebió el deseo


De la innombrada fuente próxima
A la muerte & su misterio retenido

Días vendrán solitarios como aves


Desbandadas picoteando el pecho
De amor oculto en pulcra nube

Allí donde Dios me dio tu nombre


Para escribirlo de nuevo en
La perfecta rosa de ti misma escapada

Ahora recuerdo tu mameluco rosado


Color de tu nombre de pétalo de rosa
Niña sentada a la vera del umbral en

El verano más dulce que conoció el


Cielo de tu chompita blanca labrada
Con florcitas azules dispuestas en tu

Pecho, aquel que me mostraste abrién


Dote el escote para darme su prís
Tina belleza intocada, su luz

Todavía me acompaña & es la claridad


De esta mañana despertándome con tu
Imagen flotando entre estos versos

Así te veo a cada instante reina


De tu inocencia, inquieta mariposa
Fugaz, la alegría que me diste vi
Bra en el efluvio de mi sangre
Va conmigo baila en ti a los dos
Pertenece como cada latido de nues

Tros corazones separados

Frágiles fragancias refrescan


La mañana splendor surcan
El límpido cielo en cytheria citado

Allí donde nació la diosa augusta


Convertida en rosa por el río Rímac
Para ser de sí la nube inalcanzable

Regia en blue-jean a mi morada


Volvió lejana al instante desaparecido
Párpado desliz, curva deslizada

Flor de lis reverdecida en la estación


Húmeda al contacto del poema
Se abre sola serena en su

Visita al amor que vuelve & la


Negra lycra ajusta el triángulo
Divino en el espasmo prohibido

Eres otra vez la dama del Myrtho


La preciosa chiquilla’e Villacampa
Nadie sabrá que hiciste en Roma

Solo Poesía
4

Atlántico helado posees la canción


Capaz de volarme hasta costas de Lima
Gaviota de mi memoria se oscurece

En la playa que el mar diseña para ti


El sol sin embargo prende la armonía
De tus formas en tu biquini azul

Con albos pespuntes aquel atardecer


Fueron signos de un evadido deseo
Rosas volviéndose una sola rosa sub

Secreta luz que acompaña soledades


En adviento por los ángeles cantado
Se torna dichosa noche nebulosa

Tierno & salvaje brillo de sus ojos


Callada sonrisa más leve que la brisa
Solo tú dueña del vacío hoy

Cuando el poema a su destino incierto


Se entrega & solitas las olas quedarán
Golpeando las rocas que un día posaron

Tus muslos redorados

En el atardecer del último marzo


El sol se filtró por las cortinas
E iluminó tu cuerpo como un verso

Tendido en la superficie de un mar


Imaginario flotando sobre el lecho
Amantes destinados al misterio o

El prado en que creció la rosa más


Dulce más fresca & más fragante
Donde nadie supo amarla como este
Poema escrito en el rocío de los parques
De Lima en la madrugada tierna
Igual a la memoria de la misma niña

Que ella es con su falda azul plisada


Obsequio de la tía Emmita & la lejana
Fiesta de aquel club serena tu son

Risa delicada hechizo que en el ansia


De las horas sobrevive & sobrepone
La angustia de perderte & recuperarte

A cada instante
III
ROMA
1

El silencioso incienso de su aroma


Es maroma aromada a la manera
En que Amor se calza zapato de cristal

Mientras amorcillos cazan corazones


En la bóveda vedada brilla la luz
Estás echada bien cachada a tu solaz

Horas horadadas en el solitario frío


Que con dulzura se aposenta & junta
Los cuerpos deliciosos chilly chilla

Amor en la línea curva de su espejo


Se mira se adora se perfora el anillo
Solar rumor inverso del pubis apretado

El cielo de ti misma apareció


Constelado en claraboya azur de sur
Prismáticos pezones dibujaban con

Céntricos rebordes retoques suspendidos


Encima de Minos gustaban los cupidos
Cromáticos volando en el anteparaíso

Pleno fugaz huía el día hacia la


Pura poesía de tu nocturno sudor ver
Ano cuya suave carne se abría

Con el moño recogido solo tú eras


Diosa que se posa en cuatro & vol
Tea la cabeza en dos tiempos succionada

Una flor se escapó de tu nombre


A medianoche el humo fue impregnado
Requisito exquisito de tu pelo
Primera parada antes de volver al
Area clara donde ungido al crepús
Culo adorado bebí la luz dorada

Jardín de adentro te alcé del talle


Terso algodón de tu calzón talló
El berrueco pliegue de los bobos

De mi bobo empotrado en la
Hornacina hacinada en el Santuario
En que Amor perdió por siempre la razón

Triángulo sobre piel blanca en contraste


Frente a mi soledad feliz aquel instante
De belleza ingrávidazul zumo celestial

Cedida al deseo respira tu aliento sobre el


Tiempo que aspira a tenerte para siempre
Disfrutando del más dulce imaginado

Resplandor un ansia que se esparce


En el aire inicial solaz de mi falo entre
Tus labios casi sin tocarlo sosiego in

Descriptible tu voz en mi oído transpor


Tada a la púber afternoon de tu tibieza
Aún en el verano ochentaidos & el short

Granate o turquesa brindados por la virgen


De Lima a la divina & secreta relación
Por ella protegida como sílabas de una

Cábula insólita imposible de olvidar


A la manera en que escucho tu joven
Canción cada instante renovada por el

Hálito del oleaje & sus tumbos inmortales


Arribando a lo lejos cordilleras ancestrales
De nuestro santo apellido que flota mudo

En el más raro paraíso


5

Porque si hay una canción yo la


Escucho callado con las ondas
Magnánimas acuáticas del corazón

Donde moran los dioses ocultos su


Mergidos en la mayólica celeste a
Ratos lucinda por el sol esposo de

La luna o supremo Señor do Natura


Exhibe su terrible biquini de Amor
Consagrado al deseo que es un vi

Ento suave en la oquedad deste paraíso


Desnudo como un atardecer bañado
Por la inmovilidad de los árboles

Atrapados en el espacio incontemplado


Pero templado de ti toda mi vida
Entonces escondo mi linaje de nube

O me tiendo sobre la yerba perfecta


A soñar con la luminosidad extinta
Que sin embargo pinta de azul la

Noche aproximándose recóndita ha


Cerse un día de nuevo otra vez cin
Cel de la bajada en trineo por la

Dulce ondina andina


IV
ROBERTS POOL
[SEGUNDA ESTACIÓN]
1

Diminuta brizna solar sobre césped


Impoluto silvestres tallos olorosos sil
Ban aromático esplendor desciñen

Lazos con la libertad del día en que


Cada árbol presiente exquisita
Soledad levemente enfermo del

Amor más sano como si fuera cierto


El río de tu risa en la ribera rubi
Cunda columpiada en el swing

De la medianoche almíbar que ningún


Melocotón pudo alcanzar sigilo ce
Remonial cuyo rito vuelve sobre ti

Misma once again en la pequeña muerte


O sea viento en arremetidas pastorales
Sucesivos polvos esparcidos en la atmósfera

Majada

Sombra que alumbra la penumbra umbría


De tu luz querida quizá soul inesperado
Albaricoque albano beso de tus labios en

Verano cintilante raudo resonar ali


Viando el crucero de las hojas navegando
En el estanque abrazos a tu torso

Cuando sopla el alisio del este hasta


Tu corazón gozoso en la nívea laxitud
Falleciendo atardeceres cómo eres

Dímelo ahora por estampa o por


Armónica ilusión marchita inmarcesible
Cosmética infinita asiste su deseo
Ajusta el ansia naciendo de tus piernas
Elevadas hacia el descenso con que
Arrulla la marea su trinar a solas

Para las dulces muchachas de neón


Una piscina, suavidad acuática, zam
Bullidas. Sol del crepúsculo salpica

Hasta el poema la gota de tu amor


Bajo el cielo de la luz nebulosa lá
Grima solita en el verano más triste

Cuando el césped verdea en dorado &


el atardecer se hila al horizonte
Azul el almendro de mi madre en

Mi memoria piurana pequeñas luces


Encendiéndose a lo lejos prix del aire
Son las briznas demudadas junto a mí

Florece la glorieta de Santa Isabel


& aquí estelas puras on la tapa del
Vaivén flamas o pinos canorum

Ver Novum

Perfectas son las piernas de la ninfa en short


Sobre el césped redondea el mundo de un oro
Más dulce que cualquier canción de amor

El cielo enlaza nubes a la azul rutilante


Precocidad asume que el verano se pro
Longa en su cintura ice-cream & en el

Borde de los muslos flota un agua purísima


Los chiquillos le ponían los cabellos en la
Frente mientras uno a uno la punteaban
Ligeros jugueteando en el fondo del jardín
& ella sonreía a mi visión llena de jacintos
La grama más clara hacia el atardecer

Perfume inadvertido del jazmín lejano


Ritmo impreso en el morir del día con
La fronda al compás del aire refrescando

El pequeño bosque rodea la piscina


Su verdor me alcanza con augusta
Brisa sáfica brizna el tapiz ex

Tenso donde fulgen t us doradas formas


Apenas cubiertas por inusitados aires
Núbiles preñándose de ausencia del

Arbol desconocido brotaron los frutales se


Escucharon los arpegios más lindos previos
Al silencio total que viene con la noche

El tiempo sucumbe ante los rápidos vanitas


Más celeste que las propias aguas intranquilas
Donde busco el enigma de un día de dolor

Para sondear la densa liquidez & sentir


La refrescante tibieza helada de una
Belleza chiquita & calatita deshaciéndose

Memoria del almendro en mi jardín


Su sombra todavía me enternece si
Escribo del verano adolescente para

Qué las hojas caen sobre el pasto


Se vuelven amarillas muertas cómo
Suenan si camino sobre ellas plash
Plash & el mundo está nítido a esa
Hora perfecta vientos del desierto lau
Reles de Vice al final de la civilizada

Vía cerca del mar el insólito balneario


Brisa que alegra los flamencos a lo lejos
Hacen línea al fondo en la orilla de

La isla perfume de caballa frita


& el sol que se prende en tus pe
Zones dorados no me queda sino

El dibujo bajo la lycra

Cielo quieto con nubes como mechones


Blancos se estiran zambos en alas angé
Licas anglicanas forman infiernos ca

Vidades profanas costillas isleñas es


Ternón llorado trozos de carne plomiza
Una pluma que se abre o una punta

Que se va se amontonan los cerros


Como un perro esqueleto de pescado
Ahora ya no se mueven las olas

Una equis en el pecho & no sé si


Celeste o azul o turquesa la portu
Guesa siempre rondando las nuevas

Aguas la transparencia de un zorro


Hocico resolviéndose en canto le sa
Le una trompa & allí manca el poema
V
OCEAN CITY
1

Liviano me lanzo en el oceáno


Las muchachas saltan a mi lado
Sirenas que no cantan mas planean

Surcando las mansas aguas crestas


& la espuma azula oscura la blancura
Escucha mi canción más triste enferma

Poesía retoca la playa como pies primeros


Es el puro resonar que viene del mar
Movimiento originario vuelvo a tu sol solaz

En la extensa soledad orilla infinita


Niñas de truza diminuta refulge la ola
& en su piel se adorna la mañana gris

Una gaviota desciende a refrescarse


Picotea la muerte de una onda terminando
Nada más & el silencio del atardecer

En mí

& me senté en mi lazy-boy frente al mar


Ciertos dioses se acercaron a saludarme
Emergieron sobre las deliciosas olas

Sol resplandece en la espuma amenazante


Argentinas gotas se disparan hacia el aire
Murmullos rumorosos rielan con dulzura

El barro que aposenta tu cuerpo caliente


Mediodía de fresa fresca difuminado en azul
Eres la innombrada diosa que esperaba anfi

Bia misma cocha brillando junto a los delfines


Santos saltarines alegran la ondulada parda
Venida en fa tramonto sonoro pulpa de
Limón enclave en el que flota la diosa
Acuática arrecha por el rico baño marino
& llega hasta la arena donde asume ahora

Vida Nueva

La luz suavecita nel inicio del atardecer


Ruido inmejorable música del oleaje o
Quedad del aire en mis oídos fino sonido

& las olas fallecen mientras renacen sin


Parar son hilitos de agüita mansa junto
A mi canción que te recuerda ataviada

De sarmientos en la soñada campiña mito


Del corazón austral blancura cristalina al
Fombra la húmeda soledad requiebre la

Brado que inmediatamente se deshace no com


Prendo cómo se forma & al toque rueda
En serranías tubulares son los mares los

Más extraños dadores consignando esta ruca


Poesía robada del atlántico deleitándote
Calata con toda la gracia en pleno in

Terminable verano

Para escuchar el sonido del mar


Voy a pulir las olas revueltas se
Renadas en mi nada solitario nado

Dos niñas rubias jalan sus desliza


Dores dorados bajo el sol burbu
Jeante en la extendida onda cer

Ca de mis pies como un manto ol


Meca sobreviene corriendo olvidos
Brillos verde-claro súbitos felices
& la línea posterior a los tumbos
Es tan lejana que las nubes rayadas
Extrañan la acumulación celeste

Quiero captar aquí las voces marear


Cifrar la jerga incomputable traída
Por el viento oir el sueño nacido de

La espuma coelis

Porción acuosa emite su son solar


De pronto se oscurece humo cobalto o
Tra vez la iluminación precoz son cinco

Movimientos seguidos avanzan mágicos ali


Sios redoblan ah ah ah revolotean en
Diablada blancura entremezclándose unas

A otras se comen se relajan ahora solo


Ondulan splash revientan & en su canto
Puedo extasiarme sin computar ni jota

Montadas rebrincan Ace en la batea


Rocío de raro mundo qué dice su es
Belta armonía seda marrón perfecta

Mojada unos suspiros quedan reso


Llando cuando papitas apretadas los pisan
Paseando por el borde & el canto del en

Canto canta una mujer

Manto de claveles sobreviene luces navideñas


Carne trozada hielada manojo de burbujas re
Picando una invasión armada de frescor

& arena movediza recíprocos arrecifes rielan


Los montes a la carrera vidrios cortados mon
Tón de líquido empinándose & su lechada
Cresta revienta & se echa sostenida por
El solo sonoro que se yergue intenso co
Mo golpe suavemente feroz con la pulpa

Del insomne pájaro dormido ahora amado


Por las ondas normandas devueltas una &
Otra vez spray en cortina que camina

Negación de sí misma ensartada ensortija


Revolución revuelta con la fuerza del abismo
Ceros rebelándose airados hasta hacerse

Silencio total sobre las playas


VI
PISCINA ROBERTS
[SEGUNDA ESTACIÓN / VUELTA]
1

Otra vez contemplo el atardecer en el


Aire flotante sobre las puras sombras
Angustiantes con rubias muchachas que

Caminan por el filo del tiempo como


Diosas escogidas por la tentativa del
Poema mas el líquido en movimiento

Obsede la melancolía de un morir a solas


Recobrado en el temblor del agua & su
Ondulación sin principio ni final haces

Ardientes romboidales si buceo en la


Callada grama aceptando el capricho de
Esta imagen perseguida día a día en las

Líneas del desdén árboles intocados profunda


Mente verdes inmolados al crepúsculo de mi
Propia sangre derretida rachi-rachi de mi país

La trinchuda grama por el sol iluminada


& el snorkel cerca de su cintura enhiesta
Pude ver la fiesta de los sordellos cercanos

Sobre la pileta sic loquitur poeticus en


Atica reverbera Apolo de Belvedere no
Se sabe porqué subiendo atmósfera declina

Marear levísimo del agua en la piscina


Subceleste & truzas rosadas en mayólica
Montículo onde resbalan húmedos muslos

Manantial de nínfulas estación tan pura


Caderas echadas jazmines en el aire ya
No hay nadie se acaba estío sin motivo

Mérito correspondido en la belleza de un


Error de fábula en su última delicia fas
Cinante prenda pendida de ti perfecta

Curva caminando
3

Eres amor la hierba azul que pisa


El sol de este verano oculto tras las
Frondas rubíes nuevamente frescas

Al amanecer perfecto con la prístina luz


Embriagando los aires respirados por la
Libélula diurna & su metálico zumbar

Rostro de feliz pureza acariciante cada


Vez un sueño floreciente & blanco reco
Riendo la mañana al despertar fugaz

Señor hay nubes donde moras & enamoras


Cálidas efigies me transportan al columpio
De las ingrávidas planicies donde una rosa

Se desnuda con los hálitos del viento &


Nada se escurre sino el afán interior oh
Adoración secreta incendiándose en el cielo

4. CAMPOS DE PENN, DESDE UN GREYHOUND

Ultima visión preñada de amor


Regalo cerrado entre árboles crecientes
Es dulce tu pasión primera adoles

Cencia temprana que te otorga


Adoración altar con pétalos elaborado
Por ti fulge el sol de un día pirro

Donde el cielo conquista nubes francas


Acaso en el ocaso pulcras frases baña
Das por súbita lluvia tropical & al

Arco iris invita esparcido e intactas


Risas de muchachas suenan como espuma
Que el viento nos dejara en su ola redimida

Bosques esmaltados de seres azulísimos


Hasta su fondo llega el poema & llora
Con todo lo que ya se fue de una vez &

Para siempre
5. DURANTE

Si yo supiera que la rosa del


Poema eres tú entonces tendría
Pureza todavía para besar la

Luz del disco de fuego muriendo


En las colinas lejanas traspasadas
De verde angustia & doble astral

En mis ojos bizcos qué pena


En el segundo sobre la página
Inclinado ya no está más él

Pero otra vez resurge naranja


Esplendor luz de coche bomba
En Lima en los 80s & después

Nada sino Dist-Trans-co


VII
EPÍLOGO
HOMENAJE A JOSE MARÍA EGUREN
A LA MANERA DE JM EGUREN
[EROTIZADO]

En el jardín de Villacampa
Dulce caramelo de limón
Aparece la púber blanca
Con su rico short de nylon

Linda & contrita sonríe


Con sus labios que son de rosa
Mientras el carmín de su mejilla
Se enciende a flor de fresa

Celeste insinuación sobre la grama


Cae el sol & la embellece aún más
Que su propia luz e inclina
Sus rompeolas de costado

Cada mañana de verano


Sentada en el sofá frente al TV
Me regala la utopía de su ser & lo
Tomo como su rostro entre mi mano

Un día levantó el paño del deseo


Encanto del amor posado en el azul
Paraíso descendido o tu forma
Recuperada al filo de esta canción

[Los poemas que conforman Virtú fueron escritos durante 2010 en los Estados Unidos de
América, o como decía mi hermana mayor Lola, la primera en venir, en los Yunaites y en mi
mente veía danzar naipes, y hasta todavía]
SYLVA
(2015)
For my beloved wife & lover
Kathy Kangas,
without her love, support
and care of me,
this book could never have
been written.

Amor vincit omnia


Do not move
Let the wind speak
That is Paradise

Pound
I
COOPER RIVER ORILLAS
1 [DRÍADES]

A la sombra selvaggia canto silente


Quietud amena transparencia de
La orilla su son en avanzada sol

De súbito sobre la grama en


Soledad & la corriente hacia
Dónde va todo es verde en trozos

Refulgentes melódicos silbidos


Que no acierto a descifrar los
Gansos-bebé en fila india surcan

La clara superficie marrón & la


Canción se hace brisa en los
Guijarros translúcidos al repliegue

De las ondas mínimas concéntricas


Mientras la estela vibra imper
Ceptible una pequeña bahía es

Luz inusitada sobre el césped


Árboles plenos de verdor aves
De pecho naranja iluminación oh

Diminutas albas mariposas a ras


Del colibrí sombra otra vez aca
Ecida en la Natura que me in

Vade el corazón & lo paltea


2 [HAMADRÍADES]

Cardenales dispersos sobre el pasto


Saltan solitos hacia el verde oscuro
Ramas romanas rumorean rígidas

Erguido vergel delicadeza de pistilos


Alberga espíritu del bosque vallas
Inclinadas gnomos invisibles & el agua

Burbujeante percibe ritos montaraces


Finos foliolos se refrescan exquisitos
& las gotas resbalan terza rima

Manzanilla besada por la flor de


Un día axilas rotas flotan cubriendo
El débil vaivén ondulado frente a

Tierra con el estanque lleno en el


Olor a floresta humedecida troncos
Quebrados declive panorámico en

Que parpadea la añoranza de las


Horas sin regreso muévese la mar
Tranquila todavía no hay destellos

Ahora sí ya llegó Sun King con luz


Dorada en el planeo incesante del
Pájaro-campana o sea se acabó

El poema
3 [HELÍADES]

Intenso calor raquetas oxidadas


Foráneas raíces chapoteo de olitas frescas
Golpean el entrevero palos & plásticos

Hay una playa enana un rizoma azul


Sobre aplastada paja la inmensa diosa
Parda una entrada al junco indi

Visible faena bruñida al reluciente sol


Latente arañazos en mis brazos plu
Ma fuente anuncia poniente van

Desapareciendo los trinos se callan


Latas viejas otra vez en la explanada
Colchón forestal te recuestas en el

Aire desta penumbra mañanera en la


Manera que tiene Dios de ser el río
Aposentado pacíficamente dócil a las

Tiernas marejadas abiertas sobre amplia


Sin razón de belleza amada des
Quicia la movida subte en remos

Cadenciosos planeando volar oh yeah


Panorama al fondo de uno mismo
Nublado como esta umbría matutina

Inmóvil pero nunca muerta


4 [DIRCE]

Qué susurran las altas copas qué


Dirán el esplendor de la mañana
Si pudiera transcribir el canto

Chuerk Chuerk que anida entre


El aire volado parecen cho-ke-kos
& también sui-sui-sui trui-trui-rui

Un concierto con la brisa pronta a


Despertar la ternura de los árboles
Mecidos como si fuera el jardín

Memoria del jazmín de mi mamá


& en el verdín del pequeño pantano
Cimbra la amarilla flor equi

Distante en el instante del Amor


Rebalsa omipotente el lago cuasi
Plateado echadas de espaldas

Las muñecas miden el caudal leves


Ondas tan frescas se iluminan al dorado
Soplo del extravío conteo final &

Los kayaks rompen la líquida

Quietud
5 [IXOTTA]

Vuela un cardinal casi a ras del grass


Planea el viento empujando las hojas sil
Bos silvestres boqueo de bobitos sobre

Piedras niñas que respira la ribera salta


Otro pecho-naranja hacia la nada donde
Sesga sagaz la saga Sagesse de

La plática silenciosa sssssssssssssssssss


Bóveda encima recordada siempre
Bonsai maderas & vainitas a la vera

Matinal con rubicundas dulzuras dor


Midas plano mojado resaltan brillos
Fugaces fumados hacia el sol sucumben

Sufren sólamente acumulando espuma


En el retoque del rompiente se
Quiebran los arbustos lloran lágrimas

Briseidas & llegan a dejar su líquido


Ferviente corto verano de la anarquía
Extraña concurrencia pétalos

Pink que guardo en mi

Cuaderno
6 [DINÁMENE]

Diálogo cantábile friesillo impronta


La corteza pelada del tronco más
Antiguo inclinado sobre las aguas

Corrientes chap-chap imperceptibles


En el baile verdolaga piel porosa
Empujada hacia un costado diluyén

Dose en el nervioso temblor enamora


Do del recuerdo fúlgido tras la pro
Mesa de una nube oscura recogida

Niña-flor que baña la cantidad marrona


Almohada néctar de la soledad ce
Rada en la maquilla dársena

De plumas olvidadas por la tierra


Que con triste canto el ave adorna
& al extremo opuesto flota una

Cinta en la calzada siendo luces


De un auto inesperado bajo frondas
En constante movimiento sin sol

Unas horas windy en las que es


Cribo sin cesar qué hacer ni
Porqué existo para huir de mi

Mismo para ser uno de los prófugos

Del Mundo
7 [NISE]

Bajo el silbo de los pajarines ocultos


Radia Dios la altura brillante &
Las copas principian a susurrar con

Placentera dulzura cantada pero


No comprendo su lenguaje aunque
Lo percibo en el múltiple concierto

Homenaje al silencio de la grama


Callada & la débil atracción por la
Inquieta armonía de las aguas man

Sas al borde de un caudal a solas


Aires que trascienden las mechas tor
Cidas & su ansiosa ensoñación ha

Cia el frescor orillado enrejadas pie


Dras con el arco pétalo lila a
Islada tersura reinando en la

Galaxia & música sagrada es


El musgo sumergido al reporte
Back and forth que cunde cunda

En la playita replegada por nadie


De memoria gravitando sino el
Puro estilo de marear soledades

Sobre el río augusto


8 [CLIMENE]

Deshechos ramajes floresta podada pero hay


Nimios arbustos de juvenil textura fresco
Verde clarito casi amarillo ahora mojada

& la paz del río tintinean las suaves &


Rápidas gotas dejan sus huellas fugaces
Agujeros de bala flores púrpura ex

Tasían la canción soñada bajo truenos


De verano los pétalos más blancos
Leves pisadas sobre el diminuto grass

Crecido por la lluvia seda señera


En la amplitud del ancho márgen
El dulce color del mundo por

Las aguas tranquilas pátina bri


Llando antes que el sol designe los
Bellos surcos marinos donde aquellas

Aves flotarán erguidas a la luz


Equinoccial del fondo más celeste
& en el manto plomo que la niebla

Traspasa veo un corazón humedecido


Batir inusitadas palmas por el día
Advenimiento inasible de alejadas voces

Que sin embargo escucho todavía


9 [SANDY]

El río está puro tras el paso salvaje de


Sandy la humedad gruesa de la tierra

Ha sido el lecho de las aguas desbordadas


Mas el bordado de las hojas autumnales
Son fractales sarduyanas a la luz de

La mañana un jovencito sol dora la


Orilla de enfrente aún frondosa & claro
Verde claridad sorpresiva nitidez

De la corriente nuevas fronteras


Ichu gringo en las márgenes del pantano
Arbustos trasnochados mochos en Moche

& en el cielo paralelas de nube cruzan


El lodo seco revuelto con palos astillados
Empieza el invierno quizá distinto modo

De abrevar los aires del silencio


II
SUMMERTIME
EROS

La punta circunscripta se prepara


Penetra sobre el aire esa dulzura
Que solo tú posees entre las formas

Plegables por las dos vías corazón


Avanza la canción más deseada
Albricias te abres cual manzana

& en la vulva perla una gota de


Alegría sopita peruana sabor a
Mar marisco que al recto camino

Conduce cuando te haces la flor


Cerrada divinamente plástica
Enhiesta en la finestra dibujada
2

Su belleza la dulzura pura


Robo & arrobo del cariño
Dorada cadencia sinuosa

De su cadera azul jean e in


Sinuante espléndido de nubes
Curvas brilla su oculta bella

Estrella bajo la malla rosa trans


Parente umbral del soñado cón
Cavo encantamiento de la vez

Primera diáfana adolescente


Tocaste mi mente virgen impoluta
A la sazón de pubertad infinita

Gracia en tus mejillas de inocencia


Realiza Amor caricia firme ondas
Lascivas o una lágrima perla

Del costado exquista nez por la


Memoria lejana que abate el

Solitario atardecer
III
AUTUMNALES
1 [HUERTA]

Mi corazón es la nube más azul


Nada alcanza sino que es donosura
Alegría de componer una canción

La tarde se cae a pedazos una


Rosa se desnuda fresca inútil plena
De infinita belleza la rosa fulge

La noche encima del huerto aspiración


De bocas instantáneas susurrante
Silencio de los árboles pájaros dormidos

Anhelo de encontrarte el césped


Acaecido prendado del aire más
Tierno bagatelas de mi razón

Diadema de la mañana soleada


Astucia con que el río llama mi
Tristeza volar de una vez

Ser oculto panegírico del vacío


Anegada orilla que las aguas
Nunca tocan pervierten párvulos

Recuerdo del estero feliz de nuevo


Compungido mentira divina suspendido
Flamenco diseñado en azur
2

Se despierta el mundo las copas


Arboladas suenan intensas en su
Inquieta gratitud con el viento

Las aguas permanecen inmóviles con


Céntricas & en la orilla la brisa triste
Dobla los arbustos cada día hay

Un matiz distinto en la superficie


Del río un brillo plateado hacia
Los márgenes o estelas de opacidad

Por el centro de su torrente pestañear


Todavía es el verano no sé porqué un
Concierto cerrado de grillos me recibe

Ante el caudal bajando en forma de


Playas arenosas & restos de pic-nics
Muertos entre pétalos aún granates

Anchuroso recodo empieza a reflejar


Tras la nube perla & humus la dulce
Aparición solar pero es falsa menos

El blando césped cuyo color me asiste


Un remanso de verdor brizna que
Soy en la intimidad solitaria del

Otoño aproximándose
3

Cordilleras pequeñas nimias ondas mueren


Dulcemente con esféricas espumas flota la verde
Inusitada canción voces de las niñas practicantes

En el borde cierta arcilla hilación cubista


Entre el quieto movimiento de las hojas junto al río
Motitas artesonadas cadillo de recuerdos

El viento en mis oídos exhala con las copas


Su sonido de belleza & las seagulls a lo lejos
El ritmo apacible de los árboles susurrando

Envuelven la paz del mundo bóveda


Rodeada por el gorjeo de cientos de pájaros
Oscuros decorando el azur inclinado

Sobre la corriente que no cesa & a mi


Paso las primeras hojas muertas se divisan
O se pisan tristemente hago un zoom

Through las ramas & las chicas cruzan


Remando remanso donde escribo preso
De la brisa feliz & las súbitas burbujas

Unas sílabas que dicen las ondas leves


Cuando fallecen en tierra final es como
Un woup ante la majestad del río vivo
4 [EN EL DÍA QUE MURIÓ ANTONIO CISNEROS. HOMENAJE]

Agua empozada reflexión de las copas


Sobre el espejo vibrante todavía luces
En la orilla del frente el canto remanente

De la grillada una gota de lluvia cae


En mi poema pero no lo borra sino dulcifica
Su son amanecido manecillas del divino

Reloj ahora en el apetecido balbuceo


La paz de las aguas elevándose aunque
Alguna de sus ramas ya carecen del verde

Resonar sigue resonando el viento de esta


Mañana eterna en arcadia marginal
Allí donde Butter & yo disfrutamos la

Intima soledad de los parques mientras


Cae la hojarasca por millares & en los
Mares rubicundos muere una esperanza

Mas aún puede la canción especular sobre


La luz dorada persistiendo entre la sombra
Quieta de los árboles congénitos a la ilusión

Recóndita nuevamente afecto sauces inclinados


En la orilla por el viento voceo de las ninfas
Que aspiran a seguir aunque el césped cada

Vez se cubra más por las caídas hojas muertas


IV
PEQUEÑAS PLAYAS
1

Debris desolados troncos fúnebres des


Trozados sobre la arena húmeda aguas
Tranquilas llenas de hojas muertas flotando

Un millón de palitos en el suelo ramas


Recordadas por la pendiente circular del
Nimio acantilado hendidos restos plás

Ticos amontonados deshechos solitarios


Finura de la orilla lozana terraplén
Precioso con piedritas sumergidas tras

Lucido amanecer veloz como ese pata


Remando en medio de la corriente fresco
& la belleza del antiguo Apu inclinado

Sobre la futura sombra del borde movién


Dose en el río vidrios de botella de cerveza
Una alfombra autumnal cubre el grass

& el caudal avanza superficie ondulante


Es una rareza su brillo incesante entre
Verde oscuro & marrón difícil escamas

Amansadas tiernas como mano de mujer


El vuelo de la hoja que aterriza se irisa
La realidad todavía el canto de un pá

Jaro a lo lejos todavía matinal la cadencia

Del aire en el poema


2

La fresca iluminación de la mañana


Riela entre las riberas la plateada
Estela donde brilla el haz del sol cautivo

Preso del deseo ahora la niebla invade


Los contornos difuminados árboles se pelan
Sobre un lecho de piedras pequeñas apenas

Bañadas por un toque del pliegue & repliegue


En la humedad palustre después del huracán
Que expone las gruesas raíces al aire de la

Tierra mojada repleta de palos retorcidos


Vainitas enhiestas se van volviendo paja
Pero es paja de todos modos el sol en

Su reflejo en el pantano renovada luz


Sobre el campo devastado caídos árboles
Entrevero de pasto & detritus ramas

Rotas troncos superficiales & sin embargo


Orejas de elefante lechugas doradas a
Esta hora la marea hace su canto

Vocaliza en la orillada laxitud sols


Ticio matinal cuyo césped interior todavía
Es el insólito verdor & su rocío en mil

Destellos convertido
3

Arrumacos arrumados de hojas liquidadas


Terrosas rosas muertas entrecruzamiento
Radical & las ondas privadas titilan

Canela enroscada & todavía un foliolo erguido


Sobre un lecho de chicos troncos fenecidos
Piedritas transparentes son un piso multi

Color en los bordes anhelantes negra


Claridad temblando acuática por la sombra
Agitada de la marrón dulzura pendiente

De súbito trui trui trui schwi schwa


Hay un solitario canto sobre cierta des
Conocida copa cuando ya marrona firme

Se posa en las frondas & las deshace


El invierno cada vez más se come la
Envoltura arbolada que orilla la corriente

Pero heráclito piensa lo mismo apoyado


En la frontera de las aguas soberanas
Todo fluye aunque ahora parezca estancado

Escondidos trinos continos diluyen el


Claror de la mañana más abrigada que
Ayer flotación de fojas alfombra muelle

Resonancia del caminar construyendo el poema


4 [DÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS]

Reflejo de los árboles cuasi pelados


Invertidos en la planicie helada
Tan clara en la quietud del ritmo

De las hojas cayendo suavemente de


Las ramas resecas hoy día parece
Empozada el agua solo ondas su

Tiles se deshacen cuando reciben


Una caída más en la silente mañana
Un gorjeo distrae el aire & puede

Haber belleza en los troncos desnudos


En los senderos regados por la floresta
Desasida & aún el grana vivo de

Agonizantes colgados ramilletes huecos


Ante la marea crecida en el anchuroso
Fluido vibrante cerritos serranos

Movidos bajo la potencia solar iluminada


Página del poema lontano el cambiante
Matiz de los bosques inclinados gente

Corriendo hacia dónde irán a la hervida luz


Del sol en el recodo reverberando césped
Picoteado por los gansos reunidos previos

Al vuelo que inexorables emprenden

Ahora
5

Me reciben los vientos audaces resonando arriba


Ni bien salgo a las calles cubiertas de rocío
Me enfrento a unos árboles totalmente pelados

Rocío que ayer tapizaba el césped de los parques


Hoy ha volado con los rayos del sol supongo
& llego a la pequeña playa donde sucesivas

Estriban las ondas riberiades brillo marítimo


O el río está removido saliva empotrada
Junto al acopio de hojas podridas regresando

A su lugar de orígen & la débil marea las


Golpea formas albas proteicas formatea
Parece la batea ante el embate de las

Márgenes perpetuas en su acuático rito


Fonético & magnético sobre la empedrada
Alfombra en vez de arena confitado piso

Traslucido a mi visión pulido por el ritmo


Del suavísimo marear flotan las ramas
Quebradas sin embargo hay zonas

De arena intocada tersas como una


Epifanía o nalga de mujer revolcón del viento
En las aguas alocadas concierto feroz

De los aires revueltos con el choque del


Ímpetu del río contra los tubos carcomidos
& el fierro de los huecos oxidados retorcidos

En los juncos el ronco silbo del oleaje


6

Es dulce el silencio del sonido fino


De la pleamar en la ribera chica
Se expande el agüita aguita incesante

& vuelve a renacer & a morir virginal


Dejando acariciada la húmeda mini
Bahía curva oro líquido ondas que

Se forman metálicas jugando con el


Viento cantan su letanía al reiterar
Arribo & otra vez partida un siesnoes

Sumergidas leaves mezcla de irre


Gulares ramas hacen innumerable equis
Entre la tierra & el río que las mueve

Cerca del árbol caído en derredor fi


Guras geométricas achinan picassianas
Batir de alas del pato en la corriente

De súbito las muertas hojas de las copas


Todavía pueden resonar & lo hacen
Hablándome con sus sílabas silbadas

En esta sylva soleada de hoy día


Mientras trato de captar lo que me
Dicen las espumas asustadas por

El arranque intempestivo de los pájaros


Celestes escondidos en las ramas del poema
7

Transparencia marear de ondas acariciando


El filo de la arena en que la espuma se
Acumula pedregosa planicie chongo

De palos retorcidos en la rada fresco


Que se estrella simultáneo verde
Amarillo granate se aclara el rumbo

Por donde el clima va dejando fila


Mentos secos desprovistos de floresta
Aguas que bañan el deshecho de las hojas

Pencas candelabros ramificados claman


Hacia el cielo un dolor a solas resuelto
En la proximidad del invierno aventura

Fanal frente al extendido río inmenso


Que se platea en su trasminar incesante
Ahora plástica redondela varada sub

Casuarinas se escapan solas sobre un


Lecho de guijarros blanquecinos pero
Dulces son las hojas flotando en su

Aislamiento allí donde ardiera lo


Deseado desea floración súbita
& surge un estambre perdido en

La llevada del viento que lleva lleva

A la Urba
V
RAVEN HILL
INTRODUCCIÓN

Césped cubierto de hojas otoñales


Ciertas ramas en lo alto ya están secas
Su ocre color entre el verde primaveral
Resistiendo la metamórfosis combina

O puede ser un raro grosella que


Tal vez a ella le encantara en
La intimidad de esta mañana con
Templativa una ardilla sube por

La rueda de una bicicleta en su


Parqueo y la luz es tan clara
Aún sin sol mas algo ensombrece
Súbitamente el mundo enloda

Su quietud bañándolo de impercep


Tibles gotas celestes cada vez más
Locas me impelen a dejar esta

Terraza color de las estrellas ausentes


Ahora en la luciérnaga del diurno
Afán por registrar la dulzura

Impregnada tras los cristales serenos


Donde brilla la calma y se limpia
La muerte transformada en belleza

Una fresa que con toda su pereza


Se derrama en la boca del amor
2

Ahora es casi roja la rama extrema de la


Copa izquierda & cerca de ella principian
Los verdes a tornarse primero pardos des

Dibujado amarillo hacia el marrón claro


Protestan con el viento en derredor mas
En otra esquina mi visión aus

Culta ramajes ya completamente se


Cos muertos dulce papelillo aún
No desprendido del tronco leve

Mente suspendido en el aire móvil


Junto a la tristeza de las negras
Fallecidas ramificaciones perdidas

Ya todo el árbol es rojo pero se ve


Desnudo pleno de una quietud insana
En la paz de los foliolos débilmente

Removidos por súbitas pequeñas ventiscas


Sonrisas de las chicas que pasan
Bancas vacías & hacia el fondo

La perfecta longitud del césped inusual


Mente verde tal un campo de fresas
En verano mas ahora no solo la dulzura

Del templado clima llega a esta sima


3

El campo es infinito declive del poniente


Ignorada corriente en los pinares una lástima
El árbol grosella casi ha desaparecido

Solo el costado izquierdo del ramaje


Se muestra amarillento e imperceptible
Viento ondea el cabello de la niña

Que camina enigmática por el bosque


RAVENHILL MANSION

Limpio nítido verdor helado


Cae la hoja solitaria las negras
Ramas cruzadas cimbran su

Soledad ya están algunas muertas


Otras aún se encienden antes de
Secarse totalmente cuando el clima

Va enfriando el mundo & su belleza


Se torna triste claridad de la mañana
Ausencia en las amontonadas hojas no

Recogidas en medio del bosque des


Asido invierno que te aproximas
Busca modos de existir en la

Callada quietud invita a la soñada


Refracción de la luz inmóvil sobre co
Pas no más ardientes & sin embargo

Frescas núbiles en su delicado esplendor


Naïve resistiendo el embate del frío
De la estación frugal brillo negado

Por el escondido sol cercano al mediodía


Los matices del verde representan las va
Riables subjetivas del poema antes de

Morir en la estampa de un desnudo cielo


SONETTI

El sol enmarca el arco en la ventana


Muévense dorados los altos ramajes otoñales
Levísimas hojas descienden sus vuelos rituales
Mientras trato de escribir la zona lozana

Donde mora el secreto capullo de la tarde


Escondido entre los gnomos seguro imaginarios
Reales cuando el verde & azul cielo arde
Al exacto compás de ingrávidos anuarios

Visión templada cerca del paisaje amarillo


Creando la ilusión de un bosque oculto
En la ciudad que olvida & abre su pestillo

Tiempo sin memoria oscura será consulto


Nitidez tan clara sume su bordado anillo
Siendo pleamar soleado de Amor insepulto
6

Los foliolos amarillos brillan dorados todavía


Forman ligeras filigranas que el cielo ansía
Ramas raquídeas se extienden hacia el negro
Tiempo de morir solo en el azul yo integro

Los distintos colores heridos a su modo


Por un sol frío y lejano que acomodo
A mi canción tan triste como ella
En el declive de los ángeles grosella

Angeles larvados pronto en el invierno


Liberados por la nívea caída de la nieve
Para darme fugaces el sonido eterno

Que las niñas guarden en su seno


Cuando sientan que habrá nadie que lleve
El vacío duradero que ha de poseerse pleno
7

Ya no hay más brillo en las altas copas


Solo un pqueño árbol anaranjado se enciende
A un costado de mi visión que nadie entiende
Solo rosas azules desoladas en su sola razón de opas

Viento levanta & transporta las hojas perdidas


Otras caen recien de los apus tristes verdolaga
O se amontonan oscurecidas como miel que empalaga
El otoño & su poesía depre aún así las horas queridas

Las ramas cada día más peladas y desnudas


Atraviesan la inmóvil agonía del frío paisaje
Vuelan sus hojas como el ave nueva soltando su plumaje

Hay tanta paz a esta hora de la mañana partida


Hacia qué estelas viajará de impalpaple azur
Nadie lo sabe sino este canto que viene del sur
MANSION INSIDE, AGAIN

Soledad mirando las hojas muertas volar


Amontonarse en un rincón por la máquina del
Tiempo el césped retoma su limpidez

Verde intenso al tocamiento inmaterial de


La luz apolínea & su dorado esplendor fugaz
Unas horas pletóricas antes de morir también

Con todo lo que existe & canta sin embargo


Una canción al final del día recordada si
No memoria de un afán perdido & recobrado

Solo en el instante del poema remolino de


Las hojas deprimidas igual a lo que se va
Sin dejar rastro rápido tránsito de quien

No regresa jamás a un lugar a un amor


En el que fue feliz un atardecer cuya
Fecha se deshizo hoja seca de este otoño
9

Y están peladas las ramas de arriba


Semejan lanzas erguidas o neuronas crispadas
Mezcla de retorcidos ramajes selva umbría

Contemplo tras el ventanal transparente


El laberinto vegetal de viejas maderas
Resecas cortezas cuarteadas agrietan

El tiempo de los versos finales se aproxima


Llora en silencio el bosque suavizado por un
Sol que no quema ni calienta pero ilumina

Iluminaba porque hoy todo está sombrío


& sin embargo lúcido en una claridad
Especial líquida pura nitidez celeste

Solo se siente la aireada soledad


El trazo instantáneo de la brisa sobre
Cierta danza parpadeo de foliolos

Todavía verdes un poquito resistiendo


El rumbo inexorable de los astros
Desconocido afán insisten rubios

Pétalos mas se destiñen papelillo


Trozado montones del olvido en
El que muere el poema plural
10

Hitos posicionados en la amplitud de mi visión


Se abre el mundo a la nueva estación súbita
Mente proyectada en la luz cascada matinal

Esta sería la canción con que sueña el


Ruiseñor una sola vez perdido por su
Deseo virginal sugerido rito del amor

Donde muere la rosa más pura de este


Bosque visitado en las tempranas horas
Desoladas quietud escondida como tú

Al volver a recordar el planeo de la


Nada en la premura divina del in
Minente descenso cocido al corazón

Hielo derretido sin las huellas de


Nadie mentido anhelo procura frío
Abrigo del vértigo ancestral aproxima

Clamores anunciando amores extinguidos


Hacia el fondo de la verde extensión
& los troncos falleciendo inmortales pre

Téritos trémulos recortados cual figuritas


Para el álbum nuevamente níveo nunca
Más albo que alveólos albaricoque

Albricias alban alabando la banda azul


VI
HOMENAJE A JOSÉ MARÍA EGUREN
HOMENAJE A JM EGUREN
[CON SUS PROPIAS PALABRAS]

La niebla del río respira begonias brumosas


Espuma estelar en los bordes conéntricos ritmos
Argentan maitines simétricos de hielo esmaltados

Grama dormida enigma circunda luciolas vice


Oquedad modula postigos cerrados encanto así
Rumores vespertinos pinares desciende sol

Sobre tardío candor arpegios de la floresta


Umbría gélida extasía trova encajes féminos
Sauces nevados núbiles pubis adorables

Libélulas fanáticas de su propia intensa luz


Cimbran centellas por ellas ceñidas son
Risas mieladas peregrinas del oscuro monte

Andinas coyas calatitas festivas tatúan


Silvestres moradas enardecidas aposentan
La luna en el aire con sus furias egeas

Relente nocturno fulgores serranos en


Pleno apalache americano imagina vías
De místico escape hacia nimbus confines

Lámparas lejanas memorizan olvidos piuranos


Borrosa duna dulcificada por engreída niñez
Que se disipa solita en el invierno del río

Que miro obnubilado


VII
ITE, MISA EST

[compuesto en cooper River Park, Ocean city, y Ravenhill; dos estados. Mayo-diciembre 2012]
NEW PORT
(2015)
LA TABA TÓXICA
[HOMENAJE A ANTONIN ARTAUD & WILLIAM
BURROUGHS]

DESPERTÉ a la Enfermedad soy un adicto terminal a la pasta básica


de cocaína soy prácticamente un cadáver un animal salvaje de las
noches que actualmente lanza sus diatribas solitarias contra un mun-
do que se deshace suavemente como el humo del pastel en las madru-
gadas augustas no volveré a hacerlo digo como lennon en cold turkey
I am gonna be a good boy mi cuerpo es una vergüenza desolada ya
no me da la cabeza ya no puedo escribir un poema

Es inútil tratar de autoengañarme estas tardes inconclusas me baño


en lágrimas sonoras como las de eielson contemplo formas locazas
en el cielo de mi absurda materia congelada soy un criadero de ner-
vios pero no en la cárcel de Trujillo sino en un patuleco del rico
new port he profanado todos los santos altares mi sucia ropa calci-
nada en noches descompuestas por el frío de la soledad me dejo
caer en mi colchón del piso

No hay perfección sino putrefacción retrocede la canción de los vien-


tos rosados mi masa encefálica queda chorreada en el pavimento
azul de la poesía nocturna llena de cabros inquietantes que cachan
en las bermas por una tola embadurnada de placer halaga la frescu-
ra de las hojas transparentes en los parques del avión por el ajeno
tránsito que dictamina el olvido me tienes una arruga dijo el burro
tany y le vació el estómago de un solo chavetazo
2

TENGO el síndrome voy al almacén del chino rayuela estamos en el


séptimo círculo el blanco de la pasta brilla en la noche blanquecina
recogimos nuestra ración de paraíso paz dixit pero excluidos nos
fugamos por las raudas plantaciones de prostitutas embravecidas por
el alcohol de pésima calidad te espero allá en el suelo hubo robos
predilectos pusieron la licorería helada nocturna organismos des-
ahuciados prendidos a la angustia replegada en el consumo

Gozosas pulpas de hembras relucientes en la fiesta de pastel en plato


hondo símbolos soñados de mi joven energía agua que me quemo
gritaba el cholo mazamorra y pujaban los desesperados bigote por
ejemplo pero nadie se iba a compadecer ni aunque laguna pusiera
cara de yo te la chupo por una pitada instálate en tu hueco medi-
tación en el estruendo de las bombas lejanas apagón total deriva-
ciones de las mentes bifurcadas

Dedos enfermos como el libro de la hoz trataban de acercarse a las


nubes sensacionales mas el cuerpo incorpóreo proyecta su miseria
en la dependencia ciega que no confía en nadie ni en las luciérna-
gas felices que rondan por el poste de los comprimidos the birds
are going crazy en el ascensor del edificio malogrado se malogran a
forro el error de los afectos escribo en mi máquina olivetti sobre-
mesa de medianoche pásame la merca decía tico-tico

CANTIDAD de pay en la cama de sole con cadete y los patas echados


cual romanos en el brain obnubilado la neurosis perseguida pero
las sienes ya no sienten nada son solo ricuras del despropósito an-
helado deducciones inminentes de una intervención que nos llevaría
de frente a canadá he allí la hipotenusa de los excitados miembros
juveniles de la banda más abyecta extrañeza procesada en la ilusión
consciente del espacio translucido

La noche de los tiempos finales caracolean los caballos envueltos


por el rifle de los disparos del sargento preston milico pastelero com-
pacto ausculta siempre mordiendo desde la esquina entreveros de
callejas imposibles deshechos técnicos de las formas entusiastas re-
suena el lucero del alba qué tal celaje indescriptible creo que por
eso nomás yo fui adicto precioso decorado de un amanecer intras-
cendente camote y chicharrón

Sobrevivencia malsana cuál es tu gracia bordes concéntricos barro-


cos llenos de barro ensimismado estamos adiestrados en paita y ma-
deras el sabor se me cuela por los poros melcocha barca barca barca
barca burbujas transportadas canciones escuchadas al final de la ave-
nida no hay deseo posible en la placenta del envión sino oratorios
sagrados que se cuecen convictos envenenados piedad contenida en
el cráneo tumbas de santana

DUELEN todos los músculos el negro vanessa así como el culo tiene
la cabeza aprendió a poner para seguir fumando mató un búho cuando
chambeaba de guachimán subyacente cariño acomodado al insom-
nio mentol de corazonadas palpables el chiquillo sánguche muerto de
hambre por los basurales astrales expelidos en los vericuetos limi-
tados plenos de plusvalía pluviosa textura de poesía franca encade-
nada a un sentimiento atroz

Elucubra decía la marmaja por los contornos de la nocturnidad úni-


ca belleza percibida en la tibieza de la concha cuya nómina furtiva
se abrió al designio de las puertas clausuradas desbordes emociones
palteadas órganos mutilados contra la pared un tombo te separa las
piernas a patadas soy periodista soy periodista gritas retenido en la
longitud del alba entredisuelta impermeable a la garúa porfiada se
abisma una flor en el cemento

Pensamientos en su pútrido esplendor desafiaba la pulmonía con


el torso desnudo divagaba versos americanos en la sublimada gue-
rrilla de los deseos enjutos predicados por la entrañable risa de la
sangre más llorada fabula una predicción tania calata en la cómica
el día de los secuestros simetrías serranas y zambas germinadas dul-
cemente en el acento ansioso de los ketes adivinados romerías san-
tas y cierta desazón pausada en el ritmo del corazón palpitando

HE PERDIDO el equilibrio ya no me salen los versos más hermosos


sino las oscuras algodonas llenas de sangre en el retrueco churri-
guerezco de los difuminados pastos atardeceres convertidos en es-
quinas fumonas trastabillando la desmembración de los conductos
indios impolutos igual a raíces escuchadas en la sensorial perdición
en la que ya no se domina el ritmo al caminar eres ecuánime dentro
del gravísimo estado terminal eres la habilidad para morir joven

Puedes latear con los negros negrazos decía montaña pero no le en-
traba a la danza macabra parar los oídos anegados por la pureza más
impura de la pelona triste toda tu mente colgada en los alambres
donde kola inglesa dejó sus shorts apretaditos labios que ya no pro-
fieren palabra alguna cerebelo seco se extendía la visión no se can-
saba jamás no podía diseñar un poema solo aldabas inquietas
tocaban a rebato y las perillas de las puertas detonaban

Años de años metido en esa vaina tan sensible como el sueño del
uso de las lenguas brotes inmaculados transpasando los techos re-
pletos de antenas y cachivaches derrotas avisadas eficaces síntomas
de las perdices inencontradas un dubby para el dubby y me agarraba
la canción asesina con su guitarra 64 volvíamos a la célula se creían
lo máximo no sabes lo lameculos que eran mandaba el instinto bo-
tellas con orín anisado de los ángeles estrellas condensadas como la
leche nestlé
6

PARECÍA IRREVERSIBLE aquella vida despotricada se cambiaban de


vereda cuando me veía venir pero mis vocablos seguían sonando
bajo la gran noche sudamericana taladro que le abrió el pecho al
hermano de un repucho ay chucha y ahora ni un chim pum callao
te salva pensamientos la retina se llena de anilina en el febrero acia-
go pero no había nada completo apelativos cuyos warikes eran tá-
citas estalactitas de las covachas más desgraciadas del río

Sabías que pronto volabas a otros paraísos falsos tan ciertos como
las vendimias de cualquier valor mientras las cristalinas aguas en la
noche recorrían su cauce inadvertido infiltrados rayas en la placita
nada lograban sino inspirarse desaparecidos en la eventual tierra de
los predicados agónicos voluptuosas mozas del partido reían a cal-
zón quitado vislumbradas por las luces finitas en filamentos de mer-
curio con su broster más antes de llegar al horizonte

Laxitud dorada que en los músculos se asienta funerales exquisitos


demudados frenéticas jugadas buitres por las pistas rituales bendi-
tos que sin embargo se alzaban en violencia inusitada se encaballa-
ban cuando ya nadie podía respirar nada más la página brillaba en
su oscuridad de lámpara azul proliferando memorias enlazadas ad-
heridas a la herida de mi alma encadenada pero las lágrimas ya no
son trifulca momias üdas socorro dije help como el 65

TENÍA que quitarme antes de mancar en amancaes acá todos somos


pendejos y el más pendejo es un huevón dijo coqui un espectro de
cadáveres se excluye sumergidos supresión de los acápites
enrique- cidos autonomía rumorosa como la rosa de la más
turbada incohe- rencia cohesión de la mente y los sollozos
abultados en las verijas ya no teníamos más qué hacer ni adónde ir
florecía despacito la dul- zura de la zanahoria
Hubo un aterrizaje simbólico en lo no dicho del amor pero no pe-
netración tergiversadas puntuaciones en el dormido espacio exco-
mulgados fronterizos en el cielo firulete deforme organismos que
arrancan a funcar como las piedras incas allí te hinca la inyección
vital volvieron las primas carmelitas el tizne de los días se hacía aire
con la mentira de lo suscitado la impronta del corazón no servía sino
quizá el plumaje acurrucado de los detenimientos

Médula que se bulboraquídea planicies serranas antediluvianas piu-


ranas desérticas almohadas categorías existidas previamente a la des-
composición del yo carnívoro el encé-falo grama perfora la lluvia de
lima aspas versátiles chupan los dátiles esbozos de mi soledad sub-
terránea parietal prenatal psicósis felices escribiendo de madrugada
conciencia las olas de la mar brava se magnifican sorna y lorna archi-
vadas en la santidad de mi canción

[Compuesto en los Estados Unidos, terminado en Collingswood,


New Jersey South, donde aún se ignora la incertidumbre,
a instancia del poeta Miguel Ángel Coletti. 25 de mayo de 2014]
ASGARD
(2018)
A woman drew her long black hair out tight
And fiddeled whisper music on those strings

Eliot
ASGARD

Había una fuente feliz en la plazuela


Briznas que en la brisa bailaban
Aromática asmática perseguía
La sin razón angustiada de la noche

Ejidos tejidos a la vera del río


Pastoral de pastoras de cabras
Abra andina ya baja desde Aypate
Un canto celeste de chilalos

Resplandece oscura la neblina


Avanza turbia tarántula en la vía
Vive la vasija de chicha loca
La espesura a los costados llora

Había un níspero oloroso el color


Plomo de Canchaque pinceladas
De intimidad en el aire & veo
La alacena de mi madre cómo

Me gustaba su sonido que se


Abran las mamparas hasta la
Frontera nos vamos con Porfirio
Los ganados de Poclús maraña

De imágenes sobrevenidas las monturas


Del caballo gringo de mi hermano
Su galope hasta el invernadero
Embadurnada miel de los recuerdos

Salen las losetas del piso


De la sala brotan las memorias
Extinguidas que aquí renacen
La chiroca canta todavía

Es un amarillo tan bonito su


Plumaje ronda al mediodía
& es guardada al fino atardecer
Reclina bajo un manto dicha luz

4 [POCLÚS]

A mi hermano Raúl

Lo recuerdo en su caballo Gringo


Vibrante jinete bajo el poncho de aguacero
& con los aperos de plata brillante

Baja del invernadero allí donde el


Toro de lidia permanece & deambula
En la verde explanada el caballo

Tan blanco cabriolea su fineza mientras


Raúl comenta la nobleza del soberbio
Albor de su apostura cuando apura

Al toro herido hacia la manga del


Corral mediodía de la sierra piurana
Nunca volví pero ahora he vuelto

En el poema

5 [DAMOZEL]

A su bikini perfectamente ajustado


A sus senos & caderas lo exaltaba
La terza licra oscura en contraste

A la rosa blanca de su tez limana


La negra cabellera rodando sobre
Pezones & espalda brillaba azabache

Su escote seguramente abrigó más


Que el sol la frescura de las aguas
Celestes de la límpida piscina

Delicada forma de tu brazo doblado


& en la palma las líneas de tu mano
El destino común de nuestro ancestro

Nieva entre los pastos & la orilla


Las aves dulzaínas huyen a otro mundo
Son las más heladas horas desterradas

Brotaban de las ondas del río


Rayos luminosos llegando hasta
Los verdes susurrantes desolados

Cae la fina garúa del cielo de Lima

He let him pa handon leofne fleogan


hafoc wio paes holtes and to paere hilde stop

[Dejó que el querido halcón volara de su


mano al bosque, y entró en la batalla]

Balada de Maldon

La luz & el aire & el cielo solían


Ser el pasto por fiebre recordando
Luz otra vez textil inadvertido

Belleza en agonía alzada do


Quiera oculta radical el solo
Cabellera pura del fresco chubasco

Cara acaecida imagen vidriera


En la memoria sombra se desliza
Antifaz playa nocturna removida
9

Caracoles cacerolas hubo risas


En la sedada seda dada a dos
Amantes furtivos congelados

Suspiros estivales como ascienden


Solitarias las fugas de la muerte
Taciturna se sumergen ya

Ceñidos mojadas fintas en


El mimbre bimembre alternan
Relucientes ráfagas andinas

10

Horizonte almidonado en la fila


Final bordea la marca serrana
Enmielada canción de su lozana

Postura nítida escondida yer


Gue verdores en la nube diva
De su son suele un silbo silbar

Melodía no escuchada cuando


La sombra de la noche afirma
Balbucenado valses balvanera

11

El río de larga finura fragante


Ausculta con tránsfuga acuática
Dulzura la risa del aire demudada

La otra zona del tiempo cercena


La siesta del confín o de la prisa
No el azul del deseo hacia la rosa

Transfigura su sonrisa en balanceo


De senos adyacentes a la luz foránea
Que brota de tu boca ensimismada
12

El calor cultiva los abismos


Donde asoma el río cobre su
Pasar a solas brujerías

Suspiros recogidos del rocío son


El ocio más dulce de tu belleza dis
Tendida & las flores desmedidas

A tu paso se deleitan en tus


Curvas ninfa entre nenúfares
Alados al desvío de la muerte

13

Sigilosa oscuridad esférica sinuosa


Erótica te acercabas dulzura
Oscilando inmóvil marina sonreiste

Azucarado soplo en el tobogán


Que con su swing alivia tu ninfo
Manía de sopearte sin causa &

Tenerte sin rumbo como las hojas


Volantes del otoño susurrante
En la anunciada primavera aquí está.
VESSICA PISCIS

Cintura resolana de la tarde


Acostada alcoba cuya espuma
Se eleva solitarios senos con

Vertidos a las olas de la luz solar


Vessica piscis devorada por
Arrecha luna dominio mareado

De fresca rosa se llena el verano


Se lleva la calma en las bisagras
El sonido del aire suena sinuoso

& en el rumbo perlado del orfebre


Misiquilla que riza una sola risa
Cree oscuro su diamantino fulgor

Nylon & encaje frutos del deseo


Recupera demente su pasión parada
Iza cornucopia ilustra mi cuaderna

Vía acecha el fagot la flama azul


Nacida en los estanques repletos de
Flores dispersas acaban muertas

Como siempre ansiosa baila mora


Por las tardes donde canta el petirrojo
Un sentimiento se afina en desquiciar

Paisajes abrumados por estrellas de mar


Resplandecen ciervos heridos en las leves
Audacias deprimidas sin la nimia pausa

Que la voz necesita cocida al corazón


Helado en el urdimbre que en el mimbre
Bruñido semeja pubis ajenos a los rayos

Que del cielo se abren escasos


Cirrus abrigados por el sol de invierno
Aislado en el arrayán de su hornacina

Inasible mediodía publica a su manera


Los ancestros del poema & el sosegado
Sonambulismo de los humos exquisitos

Blanden las blandas bondies al contagio


De infinito aroma niquelado por los nardos
Recogidos a la luz de los aros de Satuco
BARMOS

Algarrobos verdes algarrobos


Removidos por el viento
& sus hojas sus ramas
Se ladean a ritmo incierto

Sueño sin soñar sueña la soña soñada en el bosque


De Santa Isabel cabras comiendo papel camino
A los ejidos & los mugidos de las vacas resuenan

En la tarde moribunda abunda la soledad pica


Los huecos de la iguana corretada en la arena
Hirviendo antes todavía tibia al fresco del

Desierto sacrificio tentativo o estirpe de la brisa


Eco en el silencio bautizado por nuevos labios
Fluyen chispas de la plancha entrañable cons

Tela callada donde aprieta la mojada esquina


Las aves nocturnas descubren barandales pál
Pitos para escuchar la extinción del parpadeo

Hálito sobrevive en la espuma del picapedrero


Al volver del bosque visto ocasión mortal
Dársena de angustia carente de piel puro

Interior visceral en ayunas varias lunas


Nulas nublan el pellejo Vallejo eran
Buenos polvos respirados en el remanso

Del Amor

Gente a favor de la llegada fugaz


Carros luces colgados al filo del mar
Tus hombros hermosos voltean viajan
En lo endeble de la noche Valencia
Que se aleja en la cercanía de la
Rinconada grabando su exhibición
Detenida entre los pájaros encendidos
Deambulan por los huecos escritos

Frontis hablador de la floresta divina


Predestinado aguacero alivia el olor
Cuando cabe sonora frescura atizar
Aguzada dormida en que se esconde

Enigmas despertados son los dados


En que respira plácida cacería
De ariscas novatas durante el
Desprevenido avance acuerda
Llamaradas remos contra la corriente

Faces humosas en la cristalina


Inminencia de tus formas frases
Deslizadas umbelas donde lluvia
Fue franja bordeada por solitas

Retazos del bagazo chorrean aún


Incesante dulzura distraida dic
Tamina delta de rumores calmados
Membranas de miembros amados

Las flores cerradas volverán a abrirse pronto


Caminemos por la planicie fresco de rosas ter
Za rima filtra la brisa de la orilla pagana

Ahora te recuerdo ataviada de blanco


Abriendo la reja de tu jardín delantero
Eras caricia del aire delicia traslucida

Aun en la noche regabas tus rosas


Había ardor en tus suspendidos brazos sos
Teniendo el surtidor a la sombra de

Tu misma rosa ansia cóncava o perfume


Que viene de tus piernas centradas con
Cha constelada en nocturno cielo de
Estrellas azulejos lejos absorta en la
Adoración de ti misma dejando soñar
Por esta poesía disuelve la silueta

De antigua soledad florecida en la


Pupila inalcanzable exaspera el deseo
En el remoto Rímac mimarte calatita

Márgenes incontinentes cardíaco tiempo


Arakné esponjosa concebida en la dis
Tancia cuya fragancia zozobra mi inquietud

Al filo de tu curva la dulzura desta flor

Totoras recordadas flotando en el oleaje


Convencen la sonora cimbreante estrella
De las aguas tiernas con sus gotas secuaces

Delicia del viento que cubre los cre


Púsculos dorados cuyo cielo acerca
Serenas sirenas silbando por las crestas

Espumas divinas de la Venus chola


Cifrando en sus brazos cetrinos el
Trino de las aves marinas más

Finas afinan su fineza & pluamje


Memoria prístina del lejano país
Playa exhibida por la arena

Caliente donde un amor se tiende


En el deseo convierte la canción
Por la orilla pura humedecida
DISCURSO DEL CRISTAL AGUDO
[HOMENAJE A GERARDO DENIZ
IN MEMORIAM]

Mar nacarado azúcar oscuro


Entre una canción canto puro
Aguas azules espumas de sol
Rada en silenciosa luz la brisa

Cálido sonido con sino destino


Callada Aspasia ciela tu cielo
Por el hielo que camina la nieve
Leve iluminación portátil africa

Humo circula ronda redonda


Amanecida en la dulzura ca
Liente de los murmullos dorados
Palabra que se dice climática

Noche azulada en la invisible


Frescura sutura la herida
Tan querida por Amors afin
Se borran las nubes solitas

Acordes del cordio soñado


En la concordia infinita
Nocturna risueña alicia
El alisio sinuoso frutillar

Follaje acerca lenguaje a la


Volada del ave que canta
Inmóvil mojada fisura azul

Oscura calma obsedida se cierra


En la arena besos salpicados so
Bre arrecifes dormidos frecuentes
Soles afinan la canción ciprés
Que arrulla estas cabuyas so
Lícitas asidas a la luz pri

Mera en alcanzar amaneceres


Volteados nebulosos sin recuerdo
Alisios albados por surtidores

Apasionantes imposibles gélidos


Nos reducen risas rizomáticas
A la reverberación pusilánime

Soy memoria de tiempo finito


Extraña serena rítmica afir
Mado yucún rompe rodilla

Vuelve vuelta oblícua sesga


Abarca solitaria dimensión
Que se eleva & se recrea
BALARA
(2018)
A las intenciones de su inmaculado corazón
La singularité est subversive
Edmond Jabès
I
POMEGRANATE
SANTIDAD

Auto-tune your next book of poems


Kenneth Goldsmith

Mar discurre solito & sonoro


Acuesta su ritmo en la fresca
Lisura estrambótica mientras

Frigios fratellos cuyo rostro


Se extingue mojan oh dulce
Pantorrilla sagrada aligeran

Los ritos riquísimos videntes


Arpegios que regios dirimen
Su entorno contigo se cimbran

Armados azul tú & yo diseño


Que el frío circunda subida
Wakos & wakas olía el jardín

Taxi demente albricias del


Nombre del ave en la forma
O tu cuello latía en silencio

Una especie de albur poseía


Escondida ciudad desasida
Libra un azúcar campestre

Inusitada red en lejanía


Convierte viajeros en su
Llanto extravío & vapores

Devienen islas memorias


Tu silueta soñada segmento
Del deseo en su oleaje
Divina en tu risa mar alcanza
Su sol por tu cielo recompone
& abraza de la seda tu luz

Frecuencia rítmica césped enarbola


Caricias brotadas sur equinoccios
Dorados ojos son la sola canción

La piel de tus labios susurra nubes


Asume corrientes cascadas planean
Placenteras & esparcen el viento

Viajando a tu continente pasajeros


Selectos escogen revoltijos de cantos
Tocados por el suave & puro disenso

De las hojas dormidas en la orilla


De la flor más intensa se ignora
Su celeste condición se aloca en

El ardor íntimo & rojo de la prenda


Secreta desliza imperceptible una
Pizca de Lima su rocío precoz.
MODIFICACIÓN DE LAS NUBES

Interioridades precipicios preciosos preclaros


Quiero nombrar la nada obsecuente seguida canción
Deshaciendo la luz envuelta en mi práctica música
Echadas azules centinelas del desdén brillos ele

Mentales paladares ciegos regreso al vacío de


La madre en esencia bondadosa sintiendo lo
Oscuro tembloroso traspasado de finitud un

Río piura reseco en la niñez que yo perdí


La proporción & la desproporción surgida por
Esta espontánea hilación tardía del estío

Fuego humano acercándome & alejándome mientras


Todo desvanece nata fresca materia que provoca
La cara más hermosa lista para un polvo enamorado

Días & nocturnos afanes afanando la nube dispersa


Adivina la riqueza de la desaparición esparcida
Llega a un dios del adios & reconforta su

Escalones transparentes cartones cortados


La forma de una voz en el viento sofocante
Una canción esquiva las presencias reales

Ahora recuerdas la mañana de sol una


Suave envoltura de carey en la bocatoma
De la luz concéntrica por el deseo sinuoso

Porque esta tarde también ha de sucumbir


Aunque la frágil impostura de los árboles
Sea un viento dulce como la mujer más pura

Hay claves sonoras que rondan el rondín


Del apagado eclipse invisible para la
Reunión de las célicas divinas argentinas
Cuando el cielo se junta con la sílaba ideal
& se hace noche aparte incorpórea superficie
Donde aposenta su belleza la diosa más cansada

Invidencia salvo la visión de su vista


Detrás resbalándose en la urna tro
Pical equilibrio esmerilado & extinto

Son las líneas quemantes en la dulzura


De un verano inexplicable rendido
A la cintila seda segada de los diez

Mos encriptados coincidentes desprenden


Prendedores en sus pechos relucientes
O la sonrisa muerta en la comisura de

Tus labios ilesos acaso conmovidos por


Los trozos de un agua desvirgada can
Tan sumergidos balanceando el rocío

Del amanecer incubado por tu lencería


Más sutil desquitada de ti misma
Ruptura que expide haces felices

& enigmáticos

Siguen las ondas oscilantes como esposa


Posada en el umbral de la tormenta tro
Pical andina sílabas sibilantes si acaso

Se aproxima sintagma tejido en el aire


Porque oías las voces de las olas oleoginosas
& los chicos lindos de torsos anhelantes

Un raro idilio aroma de la yerba íntima


En su Kandinsky plasmación serrana
& serenada cual contorno ingrávido
Pero las horas se van & cambias
El ardor por las nubes recordadas igual
A un dios inestable convencido de su muerte

Hablamos de lo que pasa presos de la luz


Nadie sabe su paradero sino el dolor con
Tenido resplandece en la costumbre de

Su olvido final

Elaborar pinos con la chaira escuetos en


El cielo declive reunido a la sazón técnica
& en el silencio polarizado se expanden las

Frecuencias memoria situada o líquida pre


Sente en la máquina de la aproximación
Un repiqueteo de diablillos cedido

Por el pespunteo y extrañeza difundidos


Cabeceándote tras el diálogo nocturno
Habrá presagios ramilletes dedicados

Residuo del verano imposible callecitas


Donde mezcla chicha & rock la cordillera
Trastocan faces son testigos los

Ocasos en que uno escribe su en


Ferma denominada pelvis otra vi
Sión redimida por la fachosa figura

Adolescente rubia reina al atardecer

Lo que el tiempo labra se deshace


Una & otra vez en la memoria co
Mo recuerdo pronto desprendido &

Talla cuneiforme plazos inconformes


En la tábula rasa acontecida por
Orales avenencias tan raras sin

Embargo que los días se las llevan


Rozagantes igual a mellas o roces
& paran flotando por recónditos

Barrios populares elegidos a la discreción


Del amor & sus voluntades de ceniza
Gráfica diversa con espesor facundo

Ofertorio de tu cuerpo en la disección


Azares expuestos en un privado apo
Calípsis realizado ornamentos que para

Qué se filian en sonoras

Cuantificar las sílabas vibrando en los


Espejos que me miran destruyéndose
Una piscina llena de clamores perdidos

Murmullo de los árboles detrás mío


Desalojan fúnebre soledad en dirección
Contraria a la luz que ya declina

Cartas de la iluminación precoz sin


Embargo asaltan las removidas briznas
& el azur permenece sin fondo aunque

Todavía una sweet presence simétrica


Encarnación preciosa al borde de los
Bordados bordes triángulo rojo desafío

La belleza que ella misma pasea & la

Exhibe eterna
8

En los bordes de las nubes asiduas


Al amor creado en la nada espectral
Vuelven estos versos de raro verano

Recopilación de sueños que el tiempo


Desvanece cuerpos espejo esparcidos
Por la música inquieta incertidumbre

Del timbre en el mimbre & almohadón


Donde el gato se recrea o palidece la
Luz vespertina & en la mandolina de

La infancia una cuerda llora usurpando

El silencio del poema


II
POMPA
EL FULGOR FUGAZ

Muerte solitaria sobre corazón


Pura carne penetra la oscura
Solapa se escribe su canción

Trémula llama vive en el


Plumaje del pájaro volátil
Hilos de sangre me alcanzan

Ahora mares se entreveran


Se sucumben en olvido no
Guijarros saltando entre el oleaje

Cosas lívidas esparcidas con la mística


De una obsesión translúcida soy el
Poema dormido el aire de esta nieve

Firmamento que el río refleja esquirlas


Rumores idílicos soleados soledosos
No hay nadie en mi experiencia personal

Vallejo

Fuego oculto corazonal sangres


Rumbo de la rumba añosa que
Dulce mañosa empluma abisal

Por el barrio te encontré primor


Con tus cables chicoteados &
Un naranjal quemado por recuerdo

Pomada untas en la sola tarde


De tus orines sacros melancólicos
Fascinantes chorrean por tus muslos

Ahora que el aura de la aurora


Aurea alcanza tu cholo pelo lacio
Nadie me conoce empuña el
Mástil como tú durante césped
Mental en menta que la mente
Lamenta porque fue un lloro demudado

Al final

Muere una canción flores vivas


Bailan sobre el sol azules frescas
Por la tarde en la memoria del

Almendro mis padres se aduermen


Volvió el Mantaro & la noble rubieza
Como el planeo de hermosas aves

Silvestres en la luz de una soledad


Disfrazada de belleza otoñal con
Otro hemisferio cerca de mi sombra

Rebota el deseo del poema


& dibuja la ansiedad del vacío
Extranjera noche escucha rock

Renace albaricoque de la infancia


Sonidos de Simona pechos calientes
De dulce chola abrasándose a esta

Angustia

Armonía copas arboledas susurran sin


Cesar & la esposa se cimbra silenciosa
Inclinada sobre el río a recoger sus

Solas palabras para darme un rumbo


En los ojos griegos memoria del mar
Egeo que no veo ni conozco sino

En la mente de dios oculta & encima


Del mundo frutales alamedas raras
Sueños devorados por insomnia pertinaz
Pacen cabritos piuranos recordados
En su regazo de misionera fecunda
& en su pequeño & dulce cuerpo

Crece la canción que no había oído


En la orilla fina caricia del aire a
Corde a la tendencia inasible del

Vient
MAR-NAN-OTHA

Sol dorado sobre el frío invierno


Tibieza de la persiana cerrada
Perfume recóndito aumenta sola

Mi soledad suaviza simétrica


La cándida ciencia de tu gracia
Nimbo oculto se ilumina rosa

Cordial memoria de un candor


Que en el insomnio fue fulgor &
Sortija con tu pubis un obsequio

Espumante frecuencia de la playa


Adonde fuimos para verte en tu bikini
Evasión fílmica renace o iris

Celeste cielo solitario del mar


Crestas azules advienen al poema
Afinan mi angustia antigua

Prístino subir de las olas vagas


Sobre la playa feliz del pasado
Sosiego cifrado en arena infinita

Gaviotas previas al morir a solas


Pasan de súbito de cúbito se
Tiende la mañana estreno del sol

En la fresca liquidez desliza


Dora la marea alzada al
Vacío del próximo mediodía

Nace Amor en la forma de mujer


& se cubre con el myrtho del deseo
Calatita & húmeda aire flotante
POESÍA EN FORMA DE ROSA

Esta terraza donde escribo posee


El color de las aguas de la piscina
Ellla tenía los ojos tranquilos mientras

Leves gotas de lluvia caían sobre mi


Cuaderno & la mariposa blanca pasó
Volando al ímpetu del viento. Qué

Tibieza podríase agregar a la


Belleza de una tarde como ésta?
Quizá la de aquella niña rosa

Con sensual zambullida haciendo


Llegar al cielo sobre la purísima
Superficie celeste brisa suavecita

En las ondas inquieta permanece


Con el nombre de nuestra familia
Guardado entre los labios ego

Scriptor carmennae si aún


Tenías sueños entonces flo
Taban en calma en las

Acuáticas cundas refrescantes


¿Estarán las nubes abiertas
De nuevo? Eterno descenso

Del sol sinuoso en la pileta.

Qué pureza la seda del atardecer


La luz más perfecta se aposenta
Infinita atracción del dorado res

Plandor del ocaso que nos estremece


Cual soña de Piura dejándose caer
Dormida ante el balín de los mu
Chachos recuerdo de rosa saciada
Por la última dulzura de su canto
Mientras lucina alucina su pronto

Despertar porque tal vez sea la crisálida


Que aguarda inmemorial tras la tor
Menta de verano yo te reconoceré

Por tu modo de caminar & te


Veré como la más hermosa de
Las plegadas algo se recordará

En el jardín de eucaliptos en Alapa


Fundo familiar donde el Mantaro hace
Un recodo & el puente sobre

Los árboles cuyas ramas se elevan


Quizá con la brisa impertinente
Llega hasta esta berma & aquí

Se detiene.
III
DROMENA
POLUPHBOISBOS

Contemplo el mar qué puede decirme


Este océano helado con sus gaviotas
Planeando por la playa & sus niñas

Rubias de anteojos ahumados saltando


Entre los charcos por ellas mismas cons
Truidos a la luz de parejas amantes

Paseando por la vera acuática con


Dorados cuerpos elásticos qué línea
Del horizonte traza su lejanía tan

Linda detrás de la blanquísima espuma


De las olas del fondo reventando para
Finalmente desaparecer en la inmensa

Cantidad líquida desdobladas en


Novísimas olas que llegan hasta
Esta orilla donde vuela otra gaviota

Solitaria en el rebrillo de los tubos


& las crestas de un verde tan claro
Mientras la muchacha de bikini celeste

Se suelta la cabellera semejando


La Nascita Pound dixit en la más
Amplia luz que la divina resolana

Nos concede Azur del Señor

El mar me sigue diciendo no sé qué


Pero me sigue hablando de sus frescas
Ondas subiendo & bajando cuando

Entro en sus aguas procelosas con


Un ritmo inmortal las olas recrean
La canción marina atrabiliaria pare
Cida a una diosa de contornos muy
Sensuales la hermosa mar se
Despliega con sus mantos refulgentes

Juguetea cual infante en el borde


Iluminado por el sol impreso a la
Arena húmeda allí donde las horas

No avanzan sino esperan el


Silencio de la noche con su solo
Resonar de oleaje ya olvidado

Mas yo puedo recordar las playas


Del norte del Perú dormilonas
Pendientes de sechuranas recostadas

En Matacaballo o preciosas pitucas


De Colán mares calientes que
El Señor guarda entre las fotos

Del perdón.

Alegría de llevar de la manito a


Su niño chiquito por vez primera
A los bordes del mar sobre la

Orilla dulce como la más fresca


Brisa por la infancia deseada
Van & vienen las chicas del

Océano recogen su bote de plástico


& la voz sonora de las olas
Llega hasta el poema & lo convierte

En canto música que sólo yo es


Cucho por su belleza de mujer cami
Nando frente a mi contemplación

Marina en espera de la próxima


Marea que ha de llenar mi corazón
A solas en el solaz de todos modos
De la infinita paz sumida en el frío
Clima de pronto desvanecido el ardor
Del sol teenager cómo hacen las olas

Para persistir tan raro sin parar


Rompiéndose entre ellas perdidas
Seguramente por un amor que se

Perdió.
MARECCHIA
[TEMA & VARIACIONES]

En la fresca liquidez desliza


Dora la marea alzada al
Vacío del próximo mediodía

Nace Amor en la forma de mujer


& se cubre con el myrtho del deseo
Calatita y húmeda aire flotante

Celeste cielo solitario del mar


Crestas azules advienen al poema
Afinan mi angustia antigua

Prístino subir de las olas vagas


Sobre la playa feliz del pasado
Sosiego cifrado en arena infinita

Gaviotas previas al morir a solas


Pasan de súbito de cúbito se
Tiende la mañana estreno del sol

Su divino movimiento a través de


Las orillas espumosas convierte a las
Olas en el brillo de su azul cabellera

Aves del mar murmuran la más delicada


Canción en los oídos mojados del deseo
Por los bordes inquietos soleado sonido

Transparencia de rosas fugadas marinas


Inquilinas en la quietud celeste desmedida
Tumbo ondulante dulzura del oleaje

Serenidad resuelta en la fresca humedad


Allí dormita solícita la dicción exquisita
Que me brinda a solas el tenso amanecer
3

Amanecer disípase bajo la pura


Aparición solar sobre el césped do
Rado a dicha hora del amor sutil

Allí en el jardín donde brilla el


Verdín me encontró la fresca rosa
Cuyo aroma me maroma en su

Deseo pertinaz o sea haz


De luz en mi oscura cura de
Sueño como rimeño que soy

Se asoma el río en la paloma


Ploma que alcanza a llorar
En las lágrimas lejanas de mi

Exilio

Hay un corazón constante


Que a todas luces se oscu
Rece para estallar oculto en

Adoración de su amada lejos


Porque así como el sol se o
Culta para irse con su luna

La antigua flama arbores


Cente vuelve a la mañana
Siguiente de tu amor para

El fervor feroz del deseo


Impermeable a la distancia
Vivo como tu única fragancia
MADRIGAL

El atardecer proclive hacia la oscura


Noche ligera del verano cimbra suave
Las ondas envolventes cuyo cristal afana
Tu virginidad perfecta su rosa nave

Encanto acaso de un ocaso fugaz


Inquieto en la fragilidad de tu boca
Capullo abriéndose a la fragancia su
Gerida alcoba cerrada con tus curvas

Invisibles en la tensión solana va


Creciendo el sueño de ti misma espontánea
Cabellera revolviéndose en el aire sutil
Al crisol de los rizados matices

El tiempo se alza sobre las corolas


A través de vientos claros caricias
Desteñidas en la transparencia del gris
La nieve alcanza tu irisada risa

Y el brillo del candor sublima la


Divina epifanía de la orilla dormida
Suspiros de azúcar pura en la vitrina
Entre cintas ornada tu miel bucólica

Alcanza la mañana vera en la


Retina de las aguas cristalinas
Esparcidas en ondas expansivas
Sobre el río posado en tus pupilas
HORTULO

En el jardín donde escuché el rondín


Brilló el jazmín de mi mamá aunque
Fue preferida la rosa & su dulzura

De pétalo de gamuza como la musa


Cuyo frescor celeste devino preste de
Mi dolor agreste por la divina & breve

Estancia de la rosa cuya fragancia par


Tió en dos la historia ante la nube
Que sube al cielo & nos transtorna

Es un suspiro nomás el que me brota


Del corazón cuando te miro lejana
Rosa que en la mejilla del tiempo

Una lágrima se posa & con dulzor


Me acompaña cóncava regresa
A la imagen que me diste jazmín

& rosa en el jardín soñado con


Tal gracia de tu propia fineza
Que hoy mi poema reza niña

Dulcísima la cadencia de tu risa.


MARIGOLD

Qué hermosura de muslo izquierdo posado


En diagonal sobre el borde del sofá con
Las piernas flexionadas, botas de gamuza

Marrón y las rodillas romas envueltas en


Malla negra translúcida la niña lee un
Libro muy atenta agarra el volumen con

Las dos manos y una ñizca de la falda


Se asoma bajo la camisa pero lo más
Dulce es el reverso del muslo casi en

El aire mórbida preciosa imagen que


Se imprime en mi poema como una suave
Invitación al deseo en la clara mañana

Del otoño cuando el tímido sol acerca otra


Muchacha curvilínea y rebelde prefiero
Volver a la visión de ese muslo eterno y

De todos modos divino

Aquellos zapatitos ricamente posados


Envuelven la dulce piel de esta muchacha
Como buena oriental me pidió permiso

Para sentarse a mi lado en el sofá


Luego extendió sus esbeltas piernas
Hacia el zócalo del gas de la ventana

Entonces vi la delicadeza de su empeine


Una crema límpida y espigada con
La horma de un zapato negro de

Tacón bajo y leve seda repujada en


Los bordes interiores contra el sol
Brillaba en contraste con la der
Mis espléndida de pronto escondió
Los pies quizá se dio cuenta del
Poema pensé pero no podía

Saberlo ahora ya se fue levantó


Su campo y partió para siempre
Pero a mi me queda la imagen

De sus preciosos pies tocados de


Un cuero brillante y la tersura del
Pie desnudo que grabo aquí solito

En mi canción

Tengo otra vez a la belleza del otro día


Ahora está a la izquierda sentadita sobre
Un taburete absorta haciendo texting

Es rubia su cabello dorado cae hacia


Ambos lados del rostro son rizos dulce
Mente dispuestos en el aire luce cual

Madonna in Hortulo said Pound ese


Tipo de hermosura medieval y una
Mirada entre tierna y desconcertada

Se recoge coqueta los rizos hacia atrás


Mientras cruza las piernas enfundadas
En el mismo pantalón negro del poema

Anterior ya se paró y caminó a su clase


Moviendo el mundo palmas de ensueño
Sobre los botines cabritilla de otro color

Sabía que yo la estaba mirando y le


Componía este poema enigmática des
Apareció por la puerta de su salón

Para quedarme yo solo con mi canción


4

Me gusta mirar el cielo de Filadelfia


A esta hora es blanco transparente
Y los árboles se van volviendo verdes

A fines de abril la quietud es leve


Brizna que el delicado viento mueve
Y la soleada tarde de la risa aterriza

En la fresca muchacha salida del salón


Ahora sentada a un costado de este Hall
Envuelta en pañoleta de colores y

Pantalóon granate se entrega al texting


Con las piernas cruzadas y zapatos llanos
De gamuza espera su clase escu

Chando también sabe Dios qué música


En los audífonos incorporados a su
Rubia y rizada cabecita escribe

Preocupada con sus dedos portando


Una sortija se levanta en este
Instante muy resuelta pero vuelve

Al sofá pa’ recoger su casaca que


Casi se le olvida entra a su salón
Ya se acaba el semestre es probable

Que nunca jamás vuelva a verla


IV
EPIFANÍA
Out of Erebus
m’elevasti
Pound
THEOREIA

Hoy concreto yo lo divino


como una conciencia única,
justa, universal de la belleza
Juan Ramón

Las aguas de la piscina en calma


Dulzura del viento en los cipreses
Cristales celestes yace la grama

Al borde memoria de los desiertos


Azules de la infancia delicados como
Dunas de mujer nubes para el

Ocaso móviles plomo oscuro en


La melodía del atardecer hiende
Fresco los vacíos extinguidos &

Esa luz que nos dejó difusa es el


Laurel que en tu suave fantasía
Se reclina huyendo del deseo

Porque la concha del cielo se posó


En las inquietas aguas & la
Soña voló con su plumaje irresistible

Los jardines están plenos de luz


Mechones de árboles dorados re
Verdecen los cipreses sobre estas

Pequeñas colinas donde una niña se


Acomoda el short mojado de la piscina
Mordiendo el fruto prohibido pomona

Que en el agua se embellece


Lleva tanta felicidad en los senos
Erguidos a la hora de la caída
Del sol celestes reflujos quietud
En su desplazamiento por las
Bollas flotantes toda húmeda

Sensualidad de sus formas


Encanto de la zambullida
Exhibe un instante el per

Fecto round ass aire benigno


Por una secreta divinidad cre
Hada en la nada de este

Atardecer

3 [HOMENAJE A EIELSON 90]

Serranas desiertas azúcares almi


Donados silencio en la puna galaxia
Oblícua luz señuelo simbiótico

En los coños tocados sin premura


Azules zulúes divinos dorados
Danzando desnudos secretos linajes

Cielos perlados sonando siluetas


Sureñas por las playas costeñas
Caricias caritativas a punta de

Pistolas humeantes extremidades


Profanas lunáticas sentimentales
Frutas deseosas al borde de tumbas

En las pampas de alpacas maritas


La niña sufrida sigfrida paiteña
Observa el ardor debido a las olas

Revientan contra la escollera


Donde van a morir las sirenas
Selváticas cae la snob snow
Sagrada aloca el rocío del
Semen recibiendo su fresca

Canción religada
DOS ARS POÉTICAS

LA FORMA DE LA PLAYA

Este es el reino de la pureza


Del aire & de la luz en el brillo
De las crestas por las ondas re

Cogidas en su espuma desplegada


Con dúctil sutileza transparencia
Acuática sobre la arena perfectamente

Fina tersa sin mácula alguna traza


La alfombra fúlgida que el sol de
Clina hacia el nocturno afán tan estre

Llado cual destello de ahora en la


Pleamar distante salino fragante
Tubo redivivo que enhebra mi canción

LA FORMA DE LA PISCINA

Las aguas de la piscina en calma


Dulzura del viento entre los cipreses
Cristales celestes yace la grama

Al borde memoria de los desiertos


Azules de la infancia delicados como
Dunas de mujer nubes para el

Ocaso móviles plomo oscuro en


La melodía del atardecer hiende
Fresca los vacíos extinguidos &

Esa luz que nos dejó disfusa es el


Laurel que en tu suave fantasía
Se reclina huyendo del deseo
Porque la concha del cielo se posó
En las inquietas aguas & la
Soña voló con su plumaje irresistible

Todas las rosas son la rosa


Guillén

[Escrito en los Estados Unidos de nuestra América, 2016-2017. Era de Aquarium]


POEMAS NO RECOGIDOS EN LIBRO
LA CANCIÓN DEL AMOR / LIGERAS HUELLAS
DE MARTÍN ADÁN
Aux seuls aux uniques souvenirs sexuels
César Moro

Adhesiones
todos pedimos adhesiones
Comienza a soltar tus partículas
tus dulces partículas
¿Tus palabras?
pequeños restos de lo que fue tu cuerpo
antes de mi ataque
Ella empieza a moverse lentamente
¿Tus palabras?
la inexperiencia te pone nerviosa.

La poesía se está muda


se está azul tras la ionósfera
¿Dónde está la estratósfera?
detrás de tu sostén excesivamente blanco
pululan los deseos
tus senos como dos poemas dormidos
abrigados
por una blusa de flores estilizadas
flores como insectos
¿Te das cuenta del paseo hecho al estilo de los insectos voladores?

Adhesiones continuamos
pidiendo adhesiones
firmas y objetos
para proclamar nuestro amor en los dos costados del Universo
nuestros dos corazones.

(Sueños de Ecce Homo, Piura, julio de 1974)


CANCIÓN

En la ciudad
es posible aún
disfrutar de un bello y rojo atardecer.

Sin embargo hay un problema;


es lo único que queda
el atardecer
y algún libro encima de mi mesa, de mi euforia.

Leo una historia de Joyce


y de la página siempre en silencio
emerge la punzante soledad
que resbala inevitablemente
del hastío
del tedio impreso en las ventanas.

Pese a que puedo añorar


la grata Noche de la Infancia,
veo que de nada sirve
y escribo estos versos
sin tener ningún camino.

Finalmente, sólo quiero que la vida


sea como una canción
(atada, perdida)
pero una canción y esparcida sobre la lluvia
como tus cabellos en mi cansancio
después del amor.

(Niebla Púrpura, Piura, setiembre de 1974)


POEMA

Desde lejos
solo y conmigo
contemplo la belleza de las calles
que terminan en parques.

Amo los charcos


donde la lluvia
cree que no ha muerto.

Y soy siempre
el que está mirando y
que prefiere la noche;
entonces es la vida
el fuego que emana del fuego
o una muchacha de aros y pañoletas, caminando.

(Plaquette La peca de la jirafa, Piura, octubre de 1974)


SISSI HEART

para Jenny

Nodrizas inmaculadas y tristes jardineros


Fueron tu sueño matutino
Junto al gris otoñal de otros hemisferios
Que anhelabas con encendido silencio
Contemplando a los gnomos y las hadas
Sonreir en el castillo de tu infancia.
Y fue desde allí
Desde la frescura de tus pulcras sábanas
Que te perdiste entre la hierba y la arena
Convencida de la dulce eternidad de la vida.
Ahora y tras la adolescencia:
El amor que fue como el verano
Limpió las canciones de tus años oscuros
Fumando para plasmar en un óleo
Las cenizas de unas páginas, de otros tiempos.
La huella del placer está en tus ojos
Y bajo el árido canto de la noche
Caminas despreciando a la tristeza
Que a veces consumes masoquista
En espasmos de felicidad. Adoras la idea de besar
La boca en trance de Mick Jagger y
Columpiarte en los bigotes de Dalí:
Deseos del Reino de los Sueños
En el que inmersa respiras la insatisfacción.
Cansada del Orden Sissi ni las fotos
O el verdor del agua en la campiña del Cuzco
Te interesa, sino las brillantes noches de Ginebra.
La vida para amar el Támesis, sin esperar ya nada
Combatiendo el frío londinense con un whisky
Bella y desnuda para leer este poema.

(Auki Nº1, Piura-Lima, marzo de 1975)


LAS ESTACIONES

Los viejos caballeros brotan deslizándose


a la turbia instantánea de la tarde
y deambulan la ciudad perdida, aspirando
el sopor de los cafetines y de otros cuerpos.
Les vendieron la última vitrola,
no suena más el cristal en la vajilla
sino el sordo desdén del plástico,
una cintura de mujer bajando o caminando
surca sus sueños impermeables
intentando hacerlos doblar por la nostalgia
y son los que no saben dominar un automóvil,
demasiado innecesarios hasta en sus corazones.
El tiempo para ellos es sólo
una conversación plagada de ¿te acuerdas?
y sus sonrisas un verano de éter y confeti.
En su suave arrogancia permanece
la belleza del criminal que no lo sabe,
persiste la mirada soñadora
aunque ya no haya a quién conquistar
entre la invisible reciedumbre del gentío,
empujones en la sucia esquina de los buses
donde una adolescente, la perla del país
soltó una flor hacia los jóvenes tranquilos.
Y son muchos los automóviles alucinando
un paisaje que hace tiempo huyó de sus palabras.

(Garcilazo, la palabra cultural de Ojo, Lima, 1976)


1971 / ELEGÍA DE BARRIO

Beatriz vivía cerca de mi casa;


nuestra adolescencia era la crisis
su cuerpo ya dibujado para el amor.
Sonreía como suelen sonreír
las muchachas antes de los quince,
más azules sus ojos al atardecer.
Yo amé cada día en el que su voz
llegó hasta mi teléfono
para contarme sus historias
para oír de mi soledad las palabras
que hacían más bella su belleza:
La ilusión de esos años tuvo un nombre,
unos meses de obsesión y poesía.
Sin saberlo
el verano, la nada, el cielo estrecho
me alejaron
de la sonrisa con que hoy la veo
a veces, fugaz sobre una moto,
más azules sus ojos al atardecer.
No sé de sus sueños, ni sabré:
Fue hermoso todo aquello que fue inútil
tan inútil, en fin, como el poema.

(La sagrada familia Nº 1, Lima, abril de 1977)


LOS INCIPIENTES

Permanecimos oscuros. El sol encendió su fracaso sobre


nuestros cerebros. La hirviente visión de la ciudad
caía de la última ventana destellante. Las casas en el
Cerro parecían escombros de un tiempo miserable.

Caminamos respirando la fragancia de las frutas, lozanía


del alba lentamente penetrada por la náusea de las
calles embarradas.

Gritos y navajas. Ocultos, incrustados en botellas transparentes,


ser extraños en los ojos de la gente era infierno
y alivio de un cansancio agobiante.

El silencio fue la ruta, el desvío al que llegamos por


el miedo. Inútil cantar. Demasiado melancólica la presencia
de una adolescente disputada entre sangre y carcajadas.

Sudor era la esquina. Bajo árboles en su hora susurrante


surgió hacia la rabia, el rígido temblor de las constelaciones.
Y cabezas brillantes en la noche.

(La Sagrada Familia Nº 1, Lima, abril de 1977)


LIMA

Oh ciudad de Lima
por el centro viejo y destrozado
masas de obreros a las 6 a.m. repletan omnibuses
mercaderes ambulantes rompen sus gargantas
y en la noche viajan a sus cerros
y las solas barrocas catedrales ya no brillan
ni los patios coloniales

Son los edificios, el aluminio


las lunas polarizadas, las cortinas
este es el centro
y ahora las antiguas familias han huido
cercadas por el cordón airado
que cayó sobre Lima cucufata
zaguanes hoy tugurizados
sus dueños escaparon y hoy modelan
los nuevos barrios de los ricos

Y el Rímac, río detritus


autopistas, consorcios, compañías
oh ceniza y seguimos trabajando
para ellos, porque no tenemos nada
con nuestros sueldos solitarios calcinados
al ritmo de las rápidas tanquetas por las calles.

(La sagrada familia Nº3, Lima, agosto de 1978)


BAJA PRESIÓN

In memoriam Alfredo Madrid

Y entonces era como esa tarde que nos encontramos


caminando o quizá vagando por La Colmena cuando
te hablé entusiasmado de un poema acerca de
las dulces y oscuras muchachas que atienden
la soledad de los clientes en los clubes nocturnos
Ahora escucho tu grave voz, hermosa voz atravesando
los techos de la ciudad, las antenas de TV
cuando me dijiste parado frente al viento
a las cinco de la tarde en plena Plaza Unión:
Esto es Sudamérica y sentimos ambulantes gritos cláxons
desesperación frío sudores calor zócalos basurales
paredes derruidas grama pisoteada pescado frazadas
obstrucción del tránsito barro microbuses repletos
frutas discos y odio insatisfacción en muchos rostros
y supe de tu participación en movilizaciones estudiantiles
antes de conocerte sentado en una banca del Patio de Letras
aliviando mi hipocondría con tus palabras de
estudiantes de medicina y era como en Luis Hernández:
Poesía es evitar el dolor, una muchacha que miramos juntos
un libro de poemas que se presta compartiendo su belleza
al borde del mar en Magdalena una noche de verano
deslumbrados por el sonido del mar contra los acantilados
y yo debí escribir ese poema que comenzaría:
Hay una cierta tristeza en las ciudades (dedicado a ti)
y pensamos que era bellamente literario
haberte llevado al hospital luchando, sin saberlo
contra la muerte, aún sudando por las danzas dionisíacas
soñadas junto a bellas muchachas de cabellos
largos excitados y libres y anhelantes
Creímos literario sortear el Toque de Queda
pasar la noche ebrios intoxicados vistos por médicos
(que no se dieron cuenta de lo que en realidad tenías)
Era literario marchar a un night-club vivir
la segunda parte del poema fascinados por las copetineras
brillantes en la noche y esa límpida risa
exagerando hasta el absurdo alguna situación
como un bar en que se intenta volver a la noche inacabable
un paradero de La Colmena donde siguen rodando insensibles
los microbuses que abordaste con el cuello del saco
levantado y era cierta tu vitalidad o tu soledad
Era un tema literario la intensidad del trago
el síndrome guevara/ discusiones / destrucción
Así debía ser el poema y nada podría fallar
menos el corazón (y fue tu corazón, Alfredo, tu corazón)
porque a veces uno nunca piensa en lo terrible
y lo que soñó se puede acabar en un segundo,
hacerse todo allí tan difícil / tan incomprensible.

(La Sagrada Familia Nº 3, Lima, agosto de 1978)


ESTUDIO A GINSBERG

Allen Oh loco léeme tus poemas


respira hondo y cruza de nuevo Yage

Estuve a tu lado en el Mercado Mayorista


te acompañé por sitios calurosos y asfixiantes
vamos, lleguemos por el parque Cánepa
Américo Mudarra te dará de beber
y pedirá que hables a los jóvenes que pernoctan su Biblioteca
y tú atacarás a la OXY SEARS GENERAL MOTORS

Cuando tú viniste esa vez nosotros vagábamos en coche


tirando dedo por la Carretera Central
otros desperdicios amoldaban la soledad
de un sol apabullante y seco

Y era la reciente penetración imperialista


el Gral. Odría chupaba con los gringos, Allen
tu pendejada es conocida por todos
y pusiste bombas contra la guerra en Vietnam

Soy viet-kong dijiste soy negro soy indio


y de qué sirvió todo eso -dime rosquete de qué-
si tu brillantez volátil se esfumó por los campos anarquistas
de Nueva York
sembrando tu yerbita solito con Peter Orlowsky

Seguro dirás
quién es este salvaje que se atreve
a lanzar panfletos contra yo dulcísimo ángel

Ah cabro

(Macho Cabrío Nº 0, Lima, 1980)


ATLETA

Yo le dije chau Atleta


a Jorge García Díaz una tarde en que tocamos a morir
tocamos con la batería de los Wanes
y la guitarra de un chiquillo cuyo nombre no recuerdo
Chau Atleta le dije
me voy a la poesía
me voy para no volver
y él me dijo pero si un día vuelves
acuérdate de los pinos del segundo piso
de Lady Madonna y de la fábrica de jabón
acuérdate de los jóvenes obreros que fumaban
con nosotros / y amaban a Jim Morrison
Ese Atleta /
Y tu hermana Charo me apuntó unas declaraciones
en su diario, fui su amor en dos fiestas seguidas
y de allí pasé al olvido, olímpicamente
como por un tubo de Kolynos -que nunca usé-
Te botaron del paraíso Atleta
te botaron con saña
te acusaron de drogadicto perdido enfermo desquiciado
te acusaron de salvaje odioso cara con sarna
y tú tranquilo seguías punteando tu guitarra
oliendo cloretilo en el museo de taxonomía
Había belleza en esos días -yo lo sé-
Yo lo reconozco
y ahora escribo este poema en tu homenaje
Atleta, que me rompiste la boca.

(Ómnibus Nº 12, Arequipa, mayo de 1981)


1975

Paruro 4to. piso al fondo


puerta celeste losetas frías
el más dulce esperma de tu aceite

La orquesta del San-Joy-Lao


desperdicios a las 2 a.m.
quitarte la blusa y el sostén
dejarte en caderas

El aire putrefacto 19 años

Caer cansado en el Mokambo


besando las paredes del local
despegando tu tierna correa de plástico

Abrazado a tu manera de enamorar a los hombres


y a mi manera de escapar de la realidad
y eras frágil como una puta sin caficho

Mi vida prostibularia
y en tu ritmo la mejor poesía
(Te llegaba al pincho la poesía)

Apreciarte brillando
en tu calzón de nylon blanco

Querías largarte del país


tuviste que prostituirte

Te volví a computar un día


pero ya te habías comercializado
y tuve nostalgia de tu antigua inocencia

Fuiste una pared limpia de Lima


donde lloré golpeándome contra la oscuridad
tú me dejabas entrar en ti
con las piernas abiertas
sobre mi sacón azul de corduroy

Y me reconfortabas
diciéndome dame tu leche papá
dámela poco a poco

y eso sucedió en el tiempo de la crisis


antes de largarte a Alemania

(La casa de cartón Nº 3, Lima, agosto de 1981)


SIMPATÍA POR MICHAUX

El sol.
El sol, después del ruido.
El sol desciende oscuro y me acaricia, bajo el fresco yo lo desconozco.
Sé que soy nadie, escucho nítidas palabras cinceladas por el miedo. Sueño en incendios,
magníficas destrucciones, bestialismos amorosos como en los campos. Guardo para la
melancolía.
La noche rodeada de mugidos, cielos inútiles cruzados por un buho. Lechuza prendida de un
alambre me agradaba. Cuando vuelven las luciérnagas, yo me obligo a vomitar. Deseo el asco
para mi vergüenza, me escondo para gozar con un asesinato a mansalva. Debo frecuentar los
naranjales hacia el amanecer.
He necesitado abrir un poco mi coronaria. Con el viento proclive al desnudo, descubrí que me
había vaciado totalmente. Alguien ya no. Sin embargo encontré yerbas fumables. Mordiendo un
caballo, duraré como un trago que nos arde para siempre en el estómago.
Amo el ridículo. Doy dolor. Buscaré el olor que me separe. Visito la caverna desde la que
nadie ha de reconocerme. Los otros, ellos, los que yo miro y huelo. Siento una hermosa secreta
satisfacción de no necesitarlos. De estar desvinculado.
Abro el corazón ahora que compruebo mi vida en el centro del pánico. Y lo abro porque nadie
osará acercarse. Hundido por completo no comprendo cómo fue que desperté. Negado por el
tiempo. Lluvia que gocé corriendo cantando. Espasmos al contacto con el follaje. Cantando
absolutamente solitario. Modulo mi bellísima voz para escucharme y verme discurrir sin planear
nunca nada.
Me señalan. Soy censurado.
Apoteósis de mi triunfal perdición.
Y los escucho bramar. Y yo bramo. Me aviento hacia el más extraño verdor.
Soñando negarme, escupido, frenético.

(Ómnibus, Arequipa,1982)
MUJER-NIÑA

Te confieso que diariamente hago un


esfuerzo, hago un poema, para seguir
viéndote como antes, para seguir viviendo
porque a veces me rayo y no me
entiendo, de pronto me descubro
contemplándote, suavizado por
tus largos cabellos húmedos temprano
en la mañana de verano, después del
shampoo y después de calzar zapatos
rojos, y la belleza de tus piernas
ofrecida a dios, al aire, a la tierra,
a mí mismo solitario de boca tan
sensual como la tuya, porque en
ese instante amo tus vinchas arribistas,
tus sueños de grandeza, tu blancura
bajo el sniker; todo
lo que crees merecer por
tus ojos negros, por tu joven soledad
mezclada a la vida de los protagonistas
de la TV. Yo lo sé. Yo conozco
tu inquietud desde los cumpleaños en
la infancia, en que respirabas con hondura
y mirabas a cualquier lado y no sabías qué
hacer y te dejabas caer en el sofá
con el cuello reclinado y de repente
los zapatos de taco alto usados por
primera vez. Y no querías que te viera
y avanzas y retrocedes –me sonríes y
me odias– y el otro día me dijiste
tierna y desconcertada ¿Qué miras?
Qué sino tu extraño corazón cotidiano,
tus muñecas.
Déjame tu malla negra:
déjame decirte que toda esta música
no es sino un pretexto para
que sepas querer limpiamente mis palabras.

(Diario La República, Lima, enero de 1983)


REFLEXIONES JUNTO A LA TUMBA DEL LOCO
VICHARRA

Cuando veo tu nombre en los periódicos


pienso en la muerte, en la sorda muerte
que no sabe, que no oye, que no
escucha, que es como latón oxidado
a mis preguntas: Porqué no hubo
alguien que te diera una sonrisa,
en vez de recluirte abruptamente
en el Reformatorio, cuando habías
robado 15 libras en la bodega
de tu barrio por palomillada,
por jugarle una pasada al destino;
el destino es como un viejo caficho
que nunca da la cara. Y así fuiste
perfectamente destruido en Maranga,
y allí tampoco hubo nadie que
te hablara, porque los cancerberos
de todo Reformatorio, Cárcel, Asilo, Manicomio
son lo mismo: la enfermera antihumana
de Atrapados sin salida. Pero tú
no eres Jack Nicholson interpretando
un papel, sino José Asunción Vicharra
Sánchez, un muchacho de la esquina
al que ¿cómo recluyen? para hundirlo
más y más: De palomilla a Enemigo Público Nº 1
Y el abandono posterior, la collera te dió la
espalda y no supiste sino alcoholizar tu
dolor, buscar una música entre la jerga del choro,
porque nadie quiso mirarte sino de soslayo,
murmurando basura lumpen ratero asesino
y allí sí que todo fue irreversible;
después del primer disparo ya no hay
regreso posible, además, regreso ¿a dónde?
si todos los corazones te fueron cerrados
si en cada recodo de tu vida, justo
en el momento en que necesitaste
una mano, nadie te la quiso dar,
por eso yo ahora te ofrezco la mía
aunque ya sea el reino de la muerte
aunque quede tendida en el vacío
como la sensación final de este
canto de rebeldía.

(Diario La República, Lima, enero de 1983)


DE REYES EN EL CAOS

Mariela escúchame:

Ya sé que estás cansada de la autoridad de tu padre, y sin embargo no


puedes dejar de amarlo. Ya sé que nunca serás la cuarta oveja en el redil, dulcemente dispuesta y
dócil a las órdenas dirigidas vía satélite, en el sofá del hall frente a la TV. Nunca aceptarás
convertirte en esa apacible ama de casa, sin problemas (o sólo con problemas domésticos).
Nunca entenderán además, que tu llanto nocturno en la soledad del cubre-cama o en la mañana
más pura y más helada, era sencillamente llanto, eran solamente lágrimas corriendo sobre tus
mejillas y que no sabías porqué y que no te interesaba y que nunca interesó saber, de dónde te
venía esa pena y se agarraba fuertemente del corazón y te clavaba las uñas por encima de la blusa
y te la rompía y al final sólo te quedaba el tocador para sentirte inútil yendo a enseñar inglés, a
enseñar cualquier cosa.

Ah Mariela
cuando en realidad lo que buscabas era mirar fijamente tus ojos
negro-boliche en el espejo y averiguar por qué el amor te estaría aguardando, la poesía, en la
siguiente esquina, acaso en la misma estrechez del pasaje Conococha. Y que ya había pasado
suficiente tiempo concediendo, tratando –sin conseguirlo– de ser la chica ideal que el sistema
exigía. Por ese amor que tal vez nunca conseguimos, pero sí entrevemos, en la melancolía veloz
de los autos que vuelan por la Vía Expresa, desde aquí, desde este puente, desde estos versos que
yo a veces junto para ofrecértelos, sin miedo, con el fluido magnético que dan en mí tus ojos, tus
más antiguas lágrimas, cuando comprendes tu destino impreso en los periódicos, en los papeles
que el mundo desecha, en las canciones que te devuelven a un tiempo tan fugaz, como la cinta
del primer enamorado, en los parajes transparentes donde el amor reinaba y volvía a volar y
aterrizaba entre los sonidos de la realidad –viento ladridos caídas de agua caricias en tu pelo– el
motor de un Ford acelerando, hasta una mariposa, qué sé yo. Qué puedo saber yo además, de tu
vida, qué realmente de tus blue-jeans, de tus axilas, de tus botas en el filo de la cama, de tus
dedos limpios, de tu apache soledad.
Morada del río, morada de
las piedras relucientes y las luces
de la caseta en la hidroeléctrica
Urb. Niágara –Chaclacayo–
Siempre encuentro silencio entre estos muebles,
no brillantes pero dueños del frescor
con que ahora siento que puedo escribir,
aunque sea unas líneas iniciales
el primer canto del poema, aunque
luego tenga que salir, abandonar
este trozo de tiempo detenido y
en un micro Lima-Ricardo Palma
ser testigo de una declaración de amor:
Él, delgado, pelo corto, voz quebrada
por la circunstancia. Ella, azul,
segura, voz natural con una
tímida ternura, musical, urbana

Él: ¿Por qué estabas tan sola? ¿Por qué?


Ella: Me molesta, me aburre. No sé.
Él: ¿No te gustaría salir, conversar?
Ella: Desde Ventanilla se ven esas luces.
Él: Sí, es como si estuvieran en el aire.

Un rato después, ella ha puesto


su mano sobre la de él, encima
del respaldar del asiento. La
de ella sólo se distingue de la de él
por el cuidado que presentan las uñas.
De Huampaní a Lima, un
viernes al anochecer, en el
pasadizo de un microbús
renació el amor en dos jóvenes
de mi país. ¿Y Edith Lagos?
¿Quién es Edith Lagos? ¿Sarita Colonia? El rostro
de ella me hace recordar al de ella,
el mismo trazo oval, el mismo pelo lacio
en los costados de la frente

Ella dice: ¿Vamos a una discoteca? ¿En Lima o Miraflores?


Él: Las de Lima son monse.
Ella: Pon el cassette de Amanda Miguel.
OBREROS GUERRILLA ES TU CAMINO

Así reza una inscripción en la pared


de una fábrica. De pronto, tomo
conciencia de que estoy en la Carretera Central.
Una tras otra, las fábricas se suceden
(Ya no soporto el penetrante olor
del polvo acumulado entre los libros
dispersos en mi mesa)
Cerros de libros / cerros habitados,
en El Agustino veo
el cambiante resplandor de un TV
iluminando en lo alto una ventana
El micro
da la vuelta en el paradero final.
Se acerca el cobrador y detiene a
una muchacha antes de bajar y
dice: Espérese, no baje.
Yo: ¿Qué pasa?
El cobrador: Allí está el policía.
Yo: ¿Cuál policía?
Él: Cómo que cuál policía.

(Hueso Húmero Nº 17, Lima, abril-junio de 1983)


3x6

Este es el poema de una dulce muchacha solitaria


sentada en el sofá azul añil en el divino
resplandor del sol al mediodía en el suburbio

Ella lee el periódico hoy domingo de tallarines


en la mesa, y en el alma un sinfín de flores y
ciervos arrollados por bussings bicicletas o

fieras que en tu corazón yo sólo dominaré


con mis palabras acariciando tu cuerpo como
el viento blanco lucero en noche de pasta

y un círculo de soledad alrededor de tu cabeza


una cinta rosada que nadie pudo desgarrar el
día señalado mas hoy te canto y te embellezco

más aún que tu desnuda belleza en panty


ayer por la tarde cuando el sol dió en ti
y fuí un fauno mental entre palabras cruzadas

oh duerme ya maldito corazón no te yergas así


en medio del vacío ya no hay nada bello azul
en el lugar donde no exista el roche allí mancar.

(Ojo de Agua Nº 0, Lima, noviembre de 1984)


PRIMERA MUERTE

Mi nombre es Nenfas.
Vivo en Pachitea. Mi suegra todo el día
me dice serrano. Regreso de traer algarroba
y ella me grita serrano.

Esta tarde
frente a un viejo algarrobo donde a veces
lloro mi desdicha o me alegro el corazón
con las soñas y los chilalos diré déjame
algarrobo tu sombra para que yo pueda
colgarme tranquilo y ya no me digan más
serrano y me verá róger santiváñez
a los 12 años y 13 años después él cantará
con la soledad que yo le entregué
esa noche de verano cuando me vió ahorcado
y en la arena aún correteaban
las iguanas.

(Maestra vida Nº 5, Lima, junio de 1985)


POEMA PARA ABRAHAM VALDELOMAR

Tomábamos yerbaluisa en la noche


para limpiarnos con su humeante fragancia verdolaga
oh palabra de Abraham y su collera
los que se echaban éter a granel en la solapa
y salían a romperle el cerebro a la ciudad
a la aldea oligárquica y en extremo modernista
con Rubén y el art nouveau
en boca de las mujeres cisne y el miedo a las turbas
Abraham tu morfina fue anarco
sindicalista yo sé que tu agresiva
tristeza de pisco de muelle de grabado
alcanzo a diluirse
en las riberas que cruzamos
saltando tapias sobre un río muerto
por el Reyna Farje
casas cuyo viento renueva el golpeteo en los visillos y
las persianas de rato en rato a las 6 p.m. polvareda
y hueco por las calles terrosas
la fatiga de la pista y lo frondoso de los árboles

Eso hacía que a esa hora nos sintiéramos libres


y había belleza en esa libertad sin nadie

(Maestra vida Nº 5, Lima, junio de 1985)


POUND/FRAZER+PIURA (GET BACK)

‘En Magnesia, sobre el río Meandro,


se ha encontrado, según dicen, una imagen de Dionisos
dentro de un sicomoro partido por el viento’
‘Zeus bajo la forma de una serpiente visitó
a Perséfona, que concibió a Zagreus’
IO ZAGREUS
o sea a Dionisos, un niño cornudo

Los Titanes traicioneros


con las caras blanqueadas de yeso (como tombos)
le atacaron con sus cuchillos
mientras él se miraba en un espejo

las granadas se suponían brotadas de la sangre de Dionisos


por eso las mujeres evitaban
comer granos de granada en el Festival de la Tesmoforia

Según algunos al mandato de Zeus


Apolo reunió los separados miembros de Dionisos
y los enterró en el monte Parnaso

Hasta aquí no se menciona la resurrección del dios asesinado


Now the sea, o sea
la luna de Paita &
el sol de Colán

Ahora es el poema del regreso


la casa está vacía y vuelta a visitar
tal vez para decir Adiós
una forma de querer difícil
sol degollado en la carretera de mi muerte
Tears for fears
una soledad de Semana Santa
& putrefacción
escribir una canción las más hermosa
escribir unas palabras robadas al tedio
del mosquitero y llorar
por los recuerdos abandonados
como los muertos en San Teodoro,
joven disoluto herido de gravedad a los 20 años

(Diario El Comercio, Lima, noviembre de 1986)


LA FORMA DEL CORAZÓN
(EX ABRUPTO EN BLUE-JEAN)

Las vibraciones de un corazón solitario

escribir o leer
en soledad

Oscuridad bajo el invierno


y las risas cachosas en la cantina

es el rioba

La luz de un poste triste


alumbra apenas el frío
de una angustia sucia
música diluida en el aire

Déjame cantar mi canción


baila conmigo y dame tu carisma
no permitas que el tiempo
no permitas que nada /
taquicardia

(La Ultima Cena, Poesía Peruana Actual. Lima, 1987)


EN LAS ZANJAS CAVADAS DEL ASFALTO

De manatural yo insulté al Presidente,


Tola. Torombolo. Coquito. Chancho. Torero.
Cerros oscuros bajo tierra. Félix. Búho. Culón.

Te besé y se me pudrió la boca.


Ni siquiera existen. Ya se fueron.
Se perdieron. Se azul quitaron
como cadáver de mi padre en el
obsceno diciembre finis desolatrix.

Semana Santa

Muerte Dadá. Barro y Clarito.


Las Jañaperas. Gato. Las Cachacas.
Mándame Queso –dixit the Doctor–
mas el trafic don’t le hizo caso

Omiso

Los campos verdes de algarrobos llenos


y su corazón flotando al aire valdelomar
en la Plazuela. Está que duerme.

Rico Pie.
Tenia. Sancta Santórum.

Napoleón
Lelis Tanis
El silencio

En Lima no llueve
y no tengo ganas de vivir
corazón

(La Última Cena, Poesía Peruana Actual. Lima, 1987)


ELOGIO

Dueño únicamente de mis palabras


Encerrado en esta soledad de la poesía
Yo construyo mi canción:

Róger Santiváñez niño lindo niño bonito


Vuelto al regazo de la madre matrona
Dulce y en escencia bondadosa
Ya no habrá más canción que pueda recordarla

El tiempo es cruel
El tiempo mata.

(Caretas, Lima, mayo de 1987)


COR CORDIUM

En la Avenue Tarapacá, acodado en la ventana de "El Cholo Ademar" bebo un cognac.


Son las 2 de la mañana y hace una noche fresca, preludio del verano –que pronto llegará
con sus rayos dorados–. Sir Gawain se acerca con sus alegres pasos de Félix, los ojos
brillantes, levemente refulgen en su pura soledad.

–Alabado sea el Rey Roy– dice con unción.


–El Hada Rosa Madrina nos contemple– contesto levantando el puño sobre la cabeza.
–Ya no hay fiestas arriba– melancólico, Sir Gawain recuerda la casa robada, inmune a la
sensación de muerte que pugnaba por apoderarse de su ser. Invitó una copa al primer
mozo que se aproximó.

(Demasiado robona está la Lorena). La voz de la muchacha insulta la miseria de Pachitea


acostada de culo lavando la lavanda, bajo la sucia luz de un poste cualquiera donde
trafico mi destino sub-urbano: Veo el Centro, con sus comelones hábitats descubiertos sin
vajilla feudales tragan trigo en La Colmena.

Rapsodia en Blus/a. Mi atardecer crepuscular.

El ruido de los autos poblando la Avenida,


el aire del niño de Dios que quiso convertirse
escribe gozosa y perversamente. En la luz que
musica esta canción en su hora. "Bien Fatal", escuchó,
la muda floración de las rosas ocultas
oprimidas
como seno bajo brassiere

Basta de sirena. Audio de mi tenor esternón ronco fuma que fuma.


La reja de la Botica se cae sobre
el hombro del tatuado –enséñame
Divino Marqués
Condesa de Lautreamont

A chorro volvoreta escueta respeta


Meta retreta de tu retrete
(pronóstico reservado)
cristal casi diría celeste,
otro día solo como un perro Diógenes Laercio
es quien nucna existió.
–"Denver". Combinado, eran mozas del Partido.
Vagabundo que cobarde presuntuoso gentil caballero sin caballo.

Don Ameche sirvió en Amotape circa los


primeros fluorescentes noctámbulos de azúcar rubia,
bala detenida por el suspenso del deseo
en los límites de la descendida paz
sexual que al odio irrita
Maskay – Pacha

oe, oe dónde estás yendo

(Transparencia Nº5, Lima, diciembre-enero, 1991)


ORACIÓN X PAMELA

Frente al Santuario
Espero a mi amada
Hemos venido en peregrinación
A visitar los santos lugares
Donde ella sacrificó lo mejor
De su juventud por nosotros
Por nuestra triste y desolada
Manera de caminar por la Av. Tacna
Bandereándose con un trago en la mano

Así te aguardo; con la suave certeza


De que llegarás. Con la luz
Crepuscular de este invierno maldito
Tu silueta será un recorte
Del aire en la oscura sin razón del corazón

Como digo, en la vasta seguridad


De la fe que me hace redactar
Este documento al filo del pozo
En que se perdió la llave
Del candado del pueblo

Y no se supo jamás
Y no se escuchó sino
La respira discreción
De tu rubia cabeza
También coronada
Con rosas rojas recogidas
En el verso de esta poesía

En el templo, todo es tan


Místico y sagrado
Que el alma no resiste
La tentación de pecar,
Más ello no debe amilanarnos,
Sino al contrario dará
Sustento a la guerra
Que es la vida, porque cada
Acto que tú hagas
Será para otro su muerte
O su resurrección -entonces
Azúcar impalpable
Pastilla para soñar
No importa la ecuación
Que a ti te lleve al desvarío,
Sino sólo saber cuándo,
De qué modo y en qué forma
Se habrá perdido tu alma
O llegado la hora de su salvación.

(escrito en el lugar sacro -y Coxis-)

(Polvo enamorado Nº1, 1992)


LA PASIÓN SEGÚN SAN TIVAÑEZ

Si yo escribo tu nombre en el verdor


De nuestra paz interior es porque
Aún continúa viva la clepsidra
Por ti bebida en los días iniciales

Es por eso que me anima el viento


Que nace bajo la pura sombra
De tu silueta bailando en la burbuja
Incomprensible de estos versos

Bajo la soledad del Paraíso


Recuerdas la pristina floración
De tus pupilas allí no más
Donde tuviste la dicha entre tus manos

Camelia de la diamela por camila


Halló Imperator la forma de seguirte
Amando, de otro modo, desde el cielo
De tu blue-jean desde la fragilidad

De la sonrisa cuando expresa el ritmo


Del corazón, amén de tus azules venas
Dejándose acariciar por el aire.

Ella apareció con su tul morado


Me habló en el idioma que nosotros
Conocimos el Deseo la dulzura dedicada

A ti aunque sea este dolor que nos causamos


Ya vivimos la pasión que te expulsó hacia
Esta poesía. Tú eres la respira condición

De mi sueño la más bella imagen


Revisión de todos nuestros matrimonios sagrados.
3

Porción de campesino sol, rubio rol


Enmienda la silueta red & blue
Qué sientes sinestesia zona en

brote de tu oro mácula del mensajero


hermafrodita antes del boicot peliroja

xunto a tu amanecer.

(Plaquette La pasión según San Tivañez, Editorial Logos. Lima, 1993)


QUÍNTUPLES

To Pam

Sólo el petirrojo que albergó nuestro amor


Hoy endulza tibiamente la mañana azul
No hay otra belleza más pura ni más
Linda exhibición de tu recóndita ternura

Esta es tu poesía mía canción de ti


Aprendida en la soledad de la página
Amarte sólo eso quizá alivia este dolor

Que si no lo ves como el alma líquida


De estos versos por tu amor en mí creados
Yo no sé qué manera habré compuesto
De la música en tus labios la mejor

Palabra susurrada en tu nimbo


Siempre de oro igual que una virgen
Casi eres Rosa de Lima en tu sun
Rise arco iris de tu libertad divina

Esta mañana azul en que te escribo


No es tan pura como el aire de tu poesía
Que es la misma plenitud en ti concebida
O acaso neblina de Lima entristecida no sé

Nunca estuvo tan linda la mañana


Nunca fui ese loco que asustó a las niñas
Llegué hasta tu interno principio y
Besé tu cabeza roja y dorada por su seda

Y sucedió mi nueva creatura predilección


De tu augusto deseo impoluto fúlgido
Encima del cielo de tu ciudad bendita
Iluminada sombra que en penumbra me dio
su Luz
3

La llamada de tu corazón tan claro


Como tu misma voz templada en mi oído
Te escuché me tomo la palabra para ti
Sólo en la memoria de tu nombre algún día

No me digas que no te vea no puedo sino


Cantar en el día de la virgen por tu bel
Dad me oh poesía el poderío de tu azur mil

Agro súbito en tu presencia tan querida


No te olvides inolvidable silueta inter familiae
Amor que en ti se anida aguardando la
Alborada

Estas nuevas canciones no sé qué


Música intocable me dan por tus ojos
Recepción de la inhallada estrella
Por tu cálida respiración bajo mi pecho

Esta soledad que te ofrezco en el


Santuario de nuestra bella relación
Elevo una plegaria en el altar de tu

Inquietante paz qué lindo escribirte


Un poema ser de ti la creación
Dormida que de pronto despierta con sólo
Verte

En el papel que Agustín usó para


Envolver la paz que día a día
Me otorga. Yo escribo un poema
Contemplando tu bello rostro inmaculado

Eres Rosa de Lima en silencio posada


Poseída por el fuego eterno del deseo
Que no excluye nuestro amor palteado
Tú usaste dicha para torturarme
Con el esquivo cuerpo de la santidad
Pura e inocentemente corrompida en
Un verano que se hizo poesía

Esta es la música zanahoria


Que el sacerdote le comulgó

A la Santa.

(Killka Blues Nº 1, Lima, octubre de 1995)


ODE

Veo tu dulce rostro Claudia aguardando


Por tu belleza escribo esta poesía sa-
cada no sé cómo ni por dónde pero sí
es tuya como blonda tarde para mí en

El boulevard toqué el azul del cielo


en el muslo de tu blue-jean ceñido
suave sin aspaviento moldeando coqueta-
mente esa estrella que paso a paso

Camina hacia mi desolado verso im-


Perfecto / ángel rebelde / pura inspiración
desde lejos por ti reclamada en Jerusalem
A la divinidad única de este reino:

El amor, esa criatura loca que dispara


sus flechazos sin escrúpulos ni discreción.

(Hipocampo de Oro Nº 1, Lima, 1997)


EL PERFUME DEL JAZMÍN

En las tardes de Junín


Se hacía una luz densa
En la morada sala sola

Los objetos relucían con


La clásica música de papá
& la atmósfera infinita rosaba
Las paredes rosas / el dulce
Barniz del piano & sus bombillas
Doradas sólo en las fiestas

Ahora mamá toca una canción


Nadie la escucha / sólo yo
Desde el otro lado ella ha
Vuelto a dicha tarde tibia

Sus manos se deslizan finas


Sobre el negro y el marfil
Una tarde rara / no hay
Nadie en casa / Dominique
Es la canción / yo trato de
Acercarme a su vestido azul
A su collar de perlas mikimoto
A su peinado de reina de Inglaterra

Pero sólo accedo a su perfume


De jazmín / casi imperceptible
Todo se desvanece –me digo–
No hay imágenes / la memoria
Es esta poesía

(Diario La República, Lima, 20 de febrero de 2004)


PIURA REVISITADA

1. LA PLAZA PIZARRO

Aún recuerdo que al frente


estaba el Mercado Viejo
con sus puertas de hierro
altas resonando en el cielo.
Aquí mordía una manzana
esperando la salida de mamá
y los churres cargando las talegas.

La Mogosa estacionada
aguarda con el motor apagado
mientras mi padre
me hace tomar algunas fotos
con el marco retocado
por la magia de las cajas ambulantes.
Ahora la palaza está remodelada
incluso lleva un sonoro nombre
nuevo, pero a mí lo que me
importa son los árboles,
la lenta caída de la tarde
y una niña veloz -con su
suelta cola de caballo-
luchando por coger
el colibrí inalcanzable.

El Mercado Viejo fue


demolido, pero no mi
infancia; sólo se fue
con la Mogosa a otra
parte. No sé dónde es.
2. LA SALA

Estamos frente a la TV, pretérita


descansa la radiola telefunken,
ignoro el nombre de la tela
de los muebles, sólo sé
que son rugosos
y de un azul fosforescente,
como la memoria
del pasado esplendor: hoy
desvencijados rodean el bronce
y el mármol de la mesa
de centro, ausente el aroma
del jazmín que Madre
procuró. Un gobelino
del buen pastor y Las Meninas
–souvenirs del tour
de mis padres por Europa–
y los retratos en plaqué:
Mis viejos jóvenes, ella
a lo Bonnie and Clyde
y sobre todo el óleo de Álapa
–Qué verde era mi valle– decía
mi padre ensimismado, como
en el film de Hollywood, pero
era su Mantaro perdido
para siempre en estos
finos desiertos desolados.
Ahora queda el cuadro,
nada más, la sala
desordenada y todos cautivos
frente al TV por cable
hasta morir.
3. EL ÁRBOL DE PANAMÁ

Con sus hojas amarillentas


del invierno y ramas curvas,
secas, vencido el tallo
por los años de Madre
en otro tiempo que
nadie recuerda, vengo
todas las tardes a
sentarme en el patio
de la casa: me gustan
las losetas negras y
sus ribetes abstractos
son brillantes cuando
el crepúsculo se abate
y el viento remueve al Panamá
al borde del jardín
sábilas, macetas que Emmanuel
tumba con su pelota de carey.
Como hubiera alegrado
a mi padre este niño –pienso–
pero ahora muere el tiempo
se va con Papaníbal
sobre su silla de ruedas
en las fotos, se pierde
al fondo del hall. Ya no hay nadie,
ni mamá guarda la chiroca. Sólo el Panamá
permance –mudo– dejando caer
sus amarillas hojas muertas
en las losetas del patio.
4. SAN TEODORO

Allí está con sus muros, rejas y mármoles.


No sé si entrar; pocas veces en verdad
he penetrado ese recinto de losas y
granito: quizá tuve miedo
a la muerte / era un campo
macabro, innecesario en mis
horas felices. Pero luego no
me pude escapar de visitarlo
al llevar en hombros el atáud
de mi padre; la sonrisa
intacta serenísima de mamá
–separados por vez primera–
cada quien en su cuartel.
A él no le gustaba
estar solito –me dijo Coty
llorando cuando salíamos
del lugar, entre inscripciones
sacras de las augustas
familias de Piura. Mamá
dormía inmóvil bajo el vidrio,
velada en el comedor provenzal
de su casa, descolgadas las
frutas de Cezanne. Cada uno
en su nicho, entre los vericuetos
eternos, tan difícil de ubicarlos
que yo me perdería si no fuera
por Matilde Seminario que ahora
me guía –bajo este sol ardiente–.
Y así sé que aquí están
los mayores. Con ella oramos
y colocamos flores frescas
en todos los recuerdos
–los abuelos y los jóvenes–.
Por fin llegamos a la
calle, Lola y Aníbal
están separados. Hay
un espacio adquirido
aguardando por el mausoleo.
Sé que mi madre pidió
tres tumbas. Allí hay
un sitio para mí.
5. PAMELA

Canción que vuela en el horizonte del mar


Acércase a mi pura y recóndita soledad
No me dicta nada ni me hace sufrir
Sólo toca su música / silba con el viento

Del atardecer chocando con las olas.


Es tan sincera como las rocas tiernas
envueltas en el celofán de tu nombre
lejanamente escrito en los cielos del sur

Así voy volviendo a escribir poesía


A paladear las santas palabras del amor
No conozco otro ritmo para seguir
En este reino equidistante del morir

Suprema música inquieta el alma


Desvestida cual mágica fotografía
Oculta en la paráfrasis de un divino
Don solar por los requiebros de mi sombra

Antigua forma de verte soñar y caminar


Bajo la luz de tus pequeños pies distintos
A los dibujos de Dios en un aire pleno
de incógnitas y difíciles praderas

donde el verde y el azul se funden


igual que en mi corazón partido
sin caminos ni súbitas promesas.
O sea nada. Nada en la emboscada.
6. SAN PEDRO

la playa vuelve a mí como una celeste visión nocturna. claudia es pequeña y ha


vuelto de un viaje a lima, me abraza con su tímida inocencia infantil. la recuerdo con su
cha-chá azul y su lacio pelo cortito, jugando por la mañana sobre la arena purísima –
intocada– a la orilla del mar entre los rojos cangrejos desplazándose rápidos,
desapareciendo en sus huecos bajo tierra. claudia lleva un balde amarillo de plástico y
observa a lontananza la bocana de San Pedro, junto a su áma de aquel verano. El día se
presenta hermosísimo frente a la fresca brisa marina. el estero en marea baja nos permite
entrar a sus aguas como una piscina, sin olas y con islotes de barro hasta donde llegan
garzas y flamencos ofreciendo el espectáculo de una belleza inédita.

claudia es una niña tranquila y de brillantes ojos grandes. ahora corre por la orilla
mientras yo le lanzo la pelota de colores que el viento se quiere robar. y un día lo hace, y
es imposible retenerla cuando vuela y se va rauda hacia los confines del desierto, por
detrás de las pocas casas del balneario. pero claudia no llora, se limita a mirarme con una
expresión interrogante y luego torna a contemplar la extensión inconmensurable de las
dunas. por fin sonríe y camina con sus sandalias blancas hasta la sala de su casa y me
llama para tomar el lonche. escuchamos radio onda corta bajo la estrellada noche de la
pacífica playa del Bajo-Piura. un receptor alemán punto azul nos pone en contacto con el
mundo entero. claudia y su familia esperan el encendido de las límpidas lámparas de
kerosene para ir a pasear por la orilla y ver los fuegos fatuos del mar: duran un segundo
como este recuerdo feliz.

(Hueso Húmero Nº 44, Lima, mayo de 2004)


UNA FECHA

Son las cinco & cuarenta de la tarde


21 de junio. Comienza el verano, como reza
el hermoso poema de Paz, que siempre citaba
en el Perú. Hoy me ha tocado justamente
escribir este día
& me parece recordar
que fue el poeta puro Armando Rojas
quien me hizo notar el ritmo de ese verso
leyendo en clase Viento Entero
que es el poema de Paz
donde está el verso
O es Ladera Este
Ahora ya no lo recuerdo
Con precisión
Ahora ya no recuerdo nada
Ni quiero recordar.

(Tse-Tse Nº 14, Buenos Aires, mayo de 2004)


POSTAL

Recuerdo de Natalia en Ottawa.


Si ellos quisieran que me case
gustoso yo lo haría / fazer un amor
nuevo a mi viejo corazón, mi service
mi cerviz de sam adams en Boston:
el cielo del sol entre la nieve.

Mr. Jones es un loco por la TV


(pompas de jabón en la manzana
de Raficus que camino extrañamente)
Now in the train I see the roots
"Mystic Station" en el regreso a Cambridge.

Well, now I am in Miami


Tomándome una cervezota de $ 5.16
‘ta carioco, but ya ke chucha
I await my destiny to Lima
Hoy día hacen 100 días
que Bush Jr. tomó el Power
One Cuban boy with floreada camisa
in Florida of course
Han arrived negritos for Eleusis
said Pound, and in Grollier bookstore
with Barbara in Massachussets Avenue
I saw "The Pound Era" Wow!
And one old lady spoke about Ginsberg
–En las rocas– I hear and my heart
se resucita going to the rest-room.

(Plaquette La alineación de los planetas, Boston, 2005)


POEMAS ENCONTRADOS
HEARTBREAKER
(1974)
MARIANNE

Dime muchacha hoy


Qué es lo que perdura de esas noches
Si acaso la joven pureza de lo prohibido
O los suaves botones de tu blusa
Con la cual deshojamos lentamente
La incertidumbre que ahora me persigue.
Fue quizá
La sola luminosidad de un edificio
El viento de los parque perdidos o
La obscuridad de las iglesias,
El encanto que moldeó aquellas citas:
El delirio de escapar
Tu velocidad y el Basquet del amor;
Una época para los álbumes
Una historia que no finaliza
Y ya no puedo ni olvidar
Lo sabes tú Marianne
No nos salvaremos jamás
El uno del otro.
SIMPATÍA POR LA NADA

Durante toda una noche


He esperado los versos de Alfonsina
Desde el muelle
Frecuentado por el silencio
Y la obscura estela que sigue a la vida solitaria.
He visto desde el alcohol
Que Alfonsina Storni viajaba entre las olas
Y quise hablarle, hacer poesía
Para llevar a la noche con nosotros
Más allá del mar: Acabo siempre
Absurdamente contemplando
La lejanía de las constelaciones;
He perdido el entusiasmo
Y me puedo consumir entre proyectos
Nunca emprendidos, sin una canción y
Sin ella que siempre me acompañó hasta aquí
Imaginando versos que jamás escribiría
Deambulando en el hueco de las horas:
Alfonsina duerme en Mar del Plata
Y la muchacha que yo tuve
Se fue a caminar por el Brasil:
Creía en el amor de un día o quizá de un mes.
1968

Ha finalizado la época de las canciones


Aquellas sonrisas que volaban desde los discos
Difícil otra vez los Beatles colmando
El descubrimiento de la vida que mis ojos
Recién atrevían. Corto el goce.
Ya no vendrá ni Josiane
No estoy libre de las horas
Que me acosan siempre largas.
Josiane sin ninguna palabra
Recuerdo que ya no escribía. Qué iba a escribir
Si todo ya lo había escrito tu silueta
Y así
Todo pierde su belleza o tal vez
Todo se hace tristemente bello.
No está tu short blue-jean antiguo
Ni la libre cadencia de tu pelo
Dónde recordarás las tardes de ese verano
Acaso estas calles del barrio se han borrado
Así como el pequeño jardín delantero
Donde secretamente fuiste
La ilusión de las miradas y el sonrojo. Corto el goce
Y hasta para escribir este poema.
UN POETA INÉDITO

En una calle de Turín


Qué lejos Buenos Aires
Cómo resuenan en la noche
Los paraguas de la húmeda avenida.
Alguien habló de la Rosa o el Destino
Mientras Lima era para la soledad
El fugaz esplendor de una muchacha
En un bussing tras el vidrio indiferente
Nunca la alegría
Nunca la tristeza.
Nocturno de Turín
La sonrisa incompleta de quien vaga solo
La ironía de un afiche
El cine que ya hace años
Fue como la vida y no dejó ni la ilusión.
Una muchacha oliendo a Lima
Un sudamericano apoyado en la lluvia
Cuelgan sus pies en un Tiempo
Que aún no se manifiesta
¡Ah los pueblos que amaron la belleza!
La memoria del viejo barrio y finalmente
El posible muerto que jamás llegará
A ningún cementerio, a ninguna Antología.
Una muchacha oliendo a Lima
Guardaba en su silencio
El desigual ritmo de estos versos.
MICHAUX

Allá
Región del silencio
Donde se oye el abismo del silencio
Y el sol abrumándome hasta la náusea.
Yo recuerdo una esquina
Completamente lejos de todas las calles
Y desde allá
No pude reconocer nada
Ni siquiera la belleza
No habían rumbos
Tampoco sueño ni olvido
A ratos puro recuerdo de la muerte
Dorada por una angustiosa penumbra
Era una esquina
Y Allá pude quedarme
Perderme en aquella región donde
Podía establecerse mi ser como un pájaro
Separada la sonrisa
Yo dejé de ser yo
No estuve
Mi identidad se disolvía como el viento
Mi voz ya no era mía
Henri esa Otra Realidad.
Hoy ha vuelto. Ha sido suficiente.
MUERTE DE LA PUREZA

Pensando en nada
La pureza no existe
Y no hay otro modo de cantar
Que en el delirio
Y para eso la pureza ha muerto
Yo desdeño la pureza
La idea cristiana que supe excelsa
El amor mata la pureza
La pureza no cuenta para amar
El que ama con pureza
ama desviándose
Los amantes no aman con pureza
Aman con amor.
DOS HALLAZGOS
(1984)
SAN PEDRO NUNCA VUELTO A VISITAR

Ahora ya no sé cuántos veranos


viví entre la marea de las 6
y la marea de las 6
remontaba el mar la colina
de algas y no tenía para mí
El jardín del pulpo
con una chica
flotando los cabellos al viento
igual que la pelota de colores
que un día arrastró
el desierto
entre las dunas
y se llevó los nombres de las
muchachas que tomaban cerveza
y aguardaban la caída
de la noche entre las
casas nuevas a medio construir

Todo fue en un tiempo


en que las balsas entraban y
salían del mar
con peces de plata
y las horas bastaban
para echarse a volar
siguiendo el filo de la playa
hasta la Bocana o la Pescana

Allí acaba el mundo/


comienza el día en el balneario
el motor-honda duerme
como la infancia de Claudia o Aníbal III
o mi propia adolescencia
muerta repartida
en las tinajas de agua fresca
que nadie se acordó de recoger
el día del regreso a la ciudad
A LA MANERA DE UN POEMA DE APOLLINAIRE

Hay un poeta que sueña con la pequeña


Hay una pequeña exquisita en la vasta Lima
Hay una cama de dos plazas donde dejaste
que besara tus lindos senos
Hay toda la vida
Y yo te adoro

Te amo mi pequeña
Te amo mi querida luna de enfrente
Te amo cuerpo delicioso de 16
Te amo vulva cerrada
Te amo seno izquierdo paradito
Te amo seno derecho blanco
Te amo pezón derecho bajo el fino polo
Te amo pezón izquierdo como la puntita
de un iceberg dorado
Os amo nalgas delicadamente colocadas
sobre la cama para que yo las contemple
Te amo trenza castaña
Os amo axilas frescas niñas
Te amo curva de los hombros dulcemente
redonda cuando te volteas y me miras
Te amo muslo de alabastro
sentada al filo de la cama
poniéndote el blue jean que me gusta
Os amo orejitas para las que preparo
mis más lindas frases de cariño
Te amo cabellera negra rescátame
de los amores perdidos
Os amo pies rosados uñas rosadas
Te amo lomo imponente y tan frágil
como tu nombre de pétalo de rosa
Te amo espalda de vírgen que me dejaste
levantar curvándote con
la suavidad del desmayo
Te amo boca oh mi sueño mi corazón
latiendo locamente
Te amo mirada tierna e inteligente
Os amo manos cuyo movimiento
cuando hablas me hechiza
Te amo nariz con 2 huequitos negros
Te amo con tu caminada desafiante y ondulada
Oh pequeña te amo te amo te amo
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