Tus Ofrendas Hablan
Tus Ofrendas Hablan
Tus Ofrendas Hablan
Muchas veces pensamos que las ofrendas o las primicias que le damos a Dios
tiene que ver únicamente con lo que se deposita en el canasto de la ofrenda en los
cultos de nuestras iglesias, que es simplemente algo que es parte del culto y que
hay que hacerlo para colaborar en las cosas de la iglesia.
Pero este pensamiento es muy simplista, pensar que las ofrendas tienen que ver
únicamente con dinero es una visión muy corta de algo tan importante en la vida
cristiana como lo es la ofrenda y los diezmos que le damos a Dios.
Pero la realidad Bíblica y espiritual es que nuestras ofrendas hablan de lo que hay
en nuestro corazón para Dios, es decir que no tiene que ver solamente con un
billete o una moneda que depositamos en un canasto, como lo vemos en el texto
que hemos leído sobre la ofrenda hecha por Abel, aunque Abel murió en manos
de su hermano Caín su ofrenda sigue hablando hasta hoy de la fe que Abel tenia
en Dios.
Por medio de este mensaje vamos a reflexionar sobre lo que hablan nuestras
ofrendas, lo que nuestras ofrendas le dicen a Dios de lo que hay en nuestro
corazón.
Desde los orígenes del pueblo de Dios podemos ver que dar a Dios nuestras
ofrendas y diezmos es parte de nuestro agradecimiento, por su bondad
manifestada en nosotros sus hijos (Genesis 28:20-21)
La máxima muestra del amor de Dios para nosotros los pecadores es que nos
ha dado a su hijo unigénito para que podamos ser salvos.
Muchas veces las personas se preguntan cuánto será la cantidad que las
personas muy ricas ofrendaran y diezmaran, pero si de algo podemos tener
seguridad es que no hay ninguna ofrenda que supere la ofrenda que el Padre
celestial hizo para nosotros, es una ofrenda que nos habla del gran amor de
Dios para los hombres.
Dios dio para nosotros lo mejor que tenía, el padre celestial dio lo máximo que
podía dar, dio a su único hijo.
Nuestras ofrendas tienen que hablar de eso mismo para Dios, nuestras
ofrendas tienen que hablar de amor para Dios.
Nuestras ofrendas hablan de amor cuando damos lo mejor, como nuestro Dios
lo hizo para nosotros (Números 18:29)
Lo mejor que tu puedes darle este día al Señor es tu corazón, tu vida, declara
hoy que el es el Rey de tu vida (Proverbios 23:26)