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    Pastorela Obra Profes Navidad

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    Fernanda Enríquez
    La obra presenta una apuesta entre el ángel Gabriel y el demonio sobre si el bien triunfará sobre el mal. El demonio intenta tentar a unos pastorcitos para que no vayan a ver a Jesús recién nacido, pero el ángel Querubina los protege y guía hacia Belén.

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    Fernanda Enríquez
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    La obra presenta una apuesta entre el ángel Gabriel y el demonio sobre si el bien triunfará sobre el mal. El demonio intenta tentar a unos pastorcitos para que no vayan a ver a Jesús recién nacido, pero el ángel Querubina los protege y guía hacia Belén.

    Descripción original:

    Obra teatro navidad

    Título original

    Pastorela Obra profes Navidad

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    La obra presenta una apuesta entre el ángel Gabriel y el demonio sobre si el bien triunfará sobre el mal. El demonio intenta tentar a unos pastorcitos para que no vayan a ver a Jesús recién nacido, pero el ángel Querubina los protege y guía hacia Belén.

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    Pastorela: La apuesta.

    Acto I

    (Sale el Demonio bailando) (Música: Las diabluras, Jorge Velosa)

    Demonio: ¡No, no y no! No lo puedo creer. Ay! Detesto esta épocas: la gente se da regalos, olvida
    sus rencores, anda pagando sus deudas y hace sus fiestas y reuniones familiares, me chocan. Pero
    este año, no me importa a cuántos de ustedes tenga que sobornar, pero no habrá navidad, no, no
    y no.

    (Suena música celestial: Coro Celestial (Efecto de Sonido) (Demonio se asusta)

    Demonio: ¡A ver, a ver,a ver DJ! Cambiale de rola no? Ponte un rock and Roll o un Reguetón.

    Angeles (Voz en off): ¡Ya Gabriel! ¡Esperanos!

    Demonio: (riendo) Ay, sí, Gabriel, esperanos… Que los espere su abuela, yo ya me voy. ¿Me voy o
    me quedo? Y no es que me encante el chisme… ¡Me requetencanta el chisme!

    (El Demonio se esconde, sale el ángel Gabriel). (Suena música de la Rosa de Guadalupe y entran 2
    ángeles más)

    Gabriel: Ya pueden pasar…

    Ángel 1: Ay, ya Gabriel. ¡Déjate de rodeos y dinos ya qué quieres!

    Angel 2: O sea sí, Gabriel, espero que tengas un buen misterio, porque justo estábamos viendo la
    Rosa de Guadalupe, estaba bue-ní-si-ma.

    Gabriel: Las traje hasta aquí, para evitar los espías…

    Ángeles: ¿espías?

    Gabriel: Así es. Porque tenemos una misión

    Ángel 2: ¿Y ahora qué?

    Gabriel: Pues tenemos que cuidar a…

    Ángel 1: Otra vez niñeras… No, yo no quiero…

    Gabriel: Pues son órdenes superiores

    Ángel 1: Ay, bueno pues. Y ¿a quién hay que cuidar?

    Gabriel: A unos pastores, que van camino a Belén

    Ángel 2: Y ¿por qué van camino a Belén? ¿con este frío?, ¡qué oso!

    Gabriel: Van a adorar al Niño…

    Angel1: Ay, ¿ya nació?

    Gabriel: No, pero esta noche nace


    Ángeles: ¿esta noche?

    Gabriel: Así es, así que tú Querubina (Angel 1) te encargarás de que los pastores lleguen sanos y
    salvos a Belén.

    Ángel 1: Okay

    Ángel 2: ¿Y yo? ¿Qué hago? Ah, ¡ya sé! ¿Le organizo el Baby Shower? Sí, y hacemos concurso de
    vestir al bebé… y de tomar el biberón… y…

    Gabriel: (interrumpiendola) Eh, no mira, tú tendrá una misión especial, te encargaras de que la
    estrella de Belén no se apague, para que los 3 reyes magos no se vayan a perder.

    Ángel 2: Ay, ¿y si se pierden? ¿A mí qué? Trio de losers.

    Gabriel: ¿Cómo que a mi qué? ¿Quién les traería juguetes a los niños que se portan bien?

    Ángel 2: Uy, eso si que no. Yo les encargué el Iphone 15 y el nuevo disco de La Bichota.

    Gabriel: Sí, sí, claro. Mejor ve a realizar tu misión…

    (Salen los Ángeles)

    Gabriel: ¡Señor! ¡Señor!

    Señor (Voz en off): ¿Qué diablos quieres Gabriel?

    Gabriel: Señor, de tu hijo será el trono de David y reinará en la casa de Jacob eternamente, y su
    reino no tendrá fin.

    (Aparece el demonio en escena interrumpiendo)

    Demonio: ¡A ver, a ver, aver! ¡Pérate! ¿Quién se tronó al David, la reina o el Jacob? Y a ver,
    explícame a quién tiernamente el rey va a tentar al fin.

    Gabriel: ¡Así empiezan los chismes Satanás..! ¿qué haces aquí?

    Demonio: Ah, lo mismo que tú Gabriel.

    Gabriel: Has de saber que yo vengo en representación del bien.

    Demonio: Yo también vengo a representar… pero al mal.

    Gabriel: es bien sabido que el bien, siempre triunfa sobre el mal ¿o no es así?

    Demonio: eso solo pasa en la Rosa de Guadalupe.

    Gabriel: Falso. Aquí el que obra bien.

    Demonio: Ah, sí. Es que tuvo buena digestión,

    Gabriel: No, quiero decir. El que obra mal…

    Demonio: Se le pudrió el tamal.


    Gabriel: ¡Bueno, ya! ¡Basta de charlas! Dime, ¿qué haces aquí en Nazaret?, aparte de estar
    chismeando…

    Demonio: Gabrielito, yo pasaba nomás por saludarte

    Gabriel: No te creo vil marrano

    Demonio: Vayamos al grano. Mira Gabrielito, se me ha informado del acontecimiento de esta


    noche.

    Gabriel: ¿y?

    Demonio: y según me informan, unos pastores van camino a Belén a adorar al niño de… ay, tu
    Dios.

    Gabriel: ¿y?

    Demonio: pues ¿qué te parece si hacemos una apuesta?

    Gabriel: ¿Apuesta?

    Demonio: tú siempre dices que el bien siempre triunfa sobre el mal. Pero yo apuesto que no es
    así.

    Gabriel: ¿y qué apostamos?

    Demonio: ¿Traes dinero?

    Gabriel: No…

    Demonio: Yo tampoco…

    Gabriel: pobre diablo…

    Demonio: pero sí podemos apostar, tú tus alitas y yo, mi colita.

    Gabriel: pues me parece.

    Demonio: Pues venga esa mano para sellar la apuesta.

    Acto II

    (Salen de escena, entran pastorcitos)

    Pastorcita 1: Hola ve, ¿qué es eso que está allá arriba?

    Pastorcita 2: Ay, no, qué miedo, ¿qué será eso?

    Pastorcita 1: Uy, eso como que es un asteroide, que viene directico hacia nosotros, no, ¡qué
    miedo!

    Pastorcita 2: ¡Padre Santo! ¡Ampárame! (se santigua)

    (Ambas se ponen a rezar. Entra Ángel 1) (suena música celestial = a pág. 1)

    Ángel 1: Mis queridos pastorcitos, ¿qué están haciendo?


    Pastorcita 1: Uh, pues, rezando, no ve que se acerca el Apocalipsis

    Pastorcita 2: sí, ¿no ve esa luz grandota allá arriba?

    Ángel 1: no, mis pastorcitos, esa es la estrella de Belén, que anuncia el nacimiento del niño Jesús,
    nuestro salvador.

    Pastorcita 1: Ah, sí vez, yo te dije, miedosa…

    Pastorcita 2: ¡qué va! Si yo no tenía miedo… Ah, entonces, ¿hoy nace el niño Jesús?

    Ángel 1: Sí, y yo voy a acompañarlos en el camino para que sean las primeras en visitarlo, están
    protegidas, no se preocupen.

    (Aparece Gabriel) (Suena música celestial = a pág. 1)

    Gabriel: ¡Querubina! Antes de que se pongan en camino, debo advertirte que el Demonio vendrá
    a tentar a los pastorcitos, así que mucho cuidado.

    Ángel 1: Sí, Gabriel, no te preocupes, yo cuidaré de ellos.

    Gabriel: confío en ti Querubina… (Sale de escena)

    (Los pastorcitos, acompañados del Ángel 1 se dirigen hacia Belén, aparece el Demonio en escena)

    Demonio: ja, ja, ja. Ahí van los pastorcitos, voy a tentarlos… ¡buajajajaja!. Pastorcitos, ¿a dónde se
    dirigen?

    Pastorcitos: vamos a Belén, a ver al niño Jesús, que hoy nace.

    Demonio: ¿A Belén? ¿A ese pueblo de pobretes? Ay, no, en ese pueblo no hay nada…
    (mostrándoles oro o dinero) mejor vengan conmigo, por acá les ofrezco mucho oro, platica,
    billullo, vengan acompáñenme…

    Pastorcito 1: ¿Son pobres? Ah, no, entonces sí vamos mejor por este lado… (se acerca al demonio,
    Ángel 1 los interrumpe)

    Demonio: sí, sí, sí, ven… ven…

    Ángel 1: ¡No, mi pastorcita! No te dejes tentar por esas cosas, lo material se acaba, pero el amor
    de Dios es infinito, vengan, continuemos nuestro camino…

    Demonio: ¡Ah! Este metiche… Ay, no, además ese tal Belén huele muy mal, ¡fo!, vengan por acá
    tenemos incienso, que huele delicioso…

    Pastorcitos: ¿huele mal? No, no, pero aún así vamos a ver al niño

    Demonio: No, pastorcitos, también tengo mirra, miren, vengan… vengan…

    Pastorcita 2: ¿Mirra? ¿Dijiste mirra? No, entonces yo si voy (se acerca al demonio)

    Demonio: eso, ven… ven…

    Pastorcita 2: por cierto, ¿para qué sirve la mirra?


    Demonio: ay, no sé, pero tengo mucha, mira, mira.

    Pastorcita 1: ¡No, no vayas!

    Ángel 1: Pastorcita, no hagas caso a las tentaciones de este demonio cacreco, todo lo que te
    ofrece no es nada comparado con la gloria y el amor de Dios. A su lado, el gusto es pasajero, pero
    con Dios estarás llena de todo su amor y de los que amas…

    Pastorcita 2: ay, sí, es cierto, vamos pastorcita, continuemos nuestro camino.

    (Los pastorcitos siguen su camino con el ángel tomados de gancho. Salen de escena. Demonio
    hace una pataleta. Aparece Gabriel)

    Demonio: ¡Ay, no! ¡Esa Querubina metiche! ¡Casito los tiento!

    Gabriel: ¿Qué pasó Demonio? ¡Ya viste que el bien siempre triunfa sobre el mal!

    Demonio: pues aún no estoy tan convencido…

    Gabriel: Pues no pudiste tentar a los pastorcitos y has perdido la apuesta… Así que, venga es colita
    de diablo para acá…

    Demonio: ¿apuesta?, ¿cuál apuesta? Mejor me voy, me acordé que dejé el infierno solo y debe
    estar hecho un caos… Nos vemos Gabrielito…

    (El demonio se va corriendo y Gabriel lo persigue)

    Gabriel: ¡Ey, no! ¡Demonio! ¡Ven para acá, bandido…!

    FIN

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