Juzgado Civil y Comercial 2 DAÑOS Y PERJUICIOS
Juzgado Civil y Comercial 2 DAÑOS Y PERJUICIOS
Juzgado Civil y Comercial 2 DAÑOS Y PERJUICIOS
Carátula: FERRARI JUAN MANUEL C/ INC SA Y OTRO/A S/ DAÑOS Y PERJ. INCUMP. CONTRACTUAL (EXC. ESTADO)
Sostiene que cansado de las idas y vueltas decide iniciar el reclamo ante la oficina de defensa
del consumidor de la Provincia de Buenos Aires, formándose el expediente administrativo nro.
22400-31445/15.- Luego de dos audiencias de conciliación e intimación de por medio, el
organismo con fecha 20 de octubre de 2016 imputó a la empresa INC S.A. presunta infracción a
los arts. 8 bis, 10 bis y 11 de la ley 24.240.- Entendió la autoridad administrativa que hubo trato
indigno ante el desinterés manifestado por la empresa Carrefour a la hora de presentarse al
conflicto, además de haber entendido que existió en el caso incumplimiento contractual,
habiendo entregado un producto que no funcionaba y cuyo servicio técnico de la vendedora
constató tal circunstancia.-
Al momento de determinar los daños por los que reclama, peticiona el resarcimiento de
privación de uso por $ 70.000- (pesos setenta mil), daño emergente por las erogaciones
realizadas para tener que reclamar en la demandada y en lo organismos administrativos de
defensa del consumidor por lo que reclama $ 7.000- (pesos siete mil), lucro cesante como
consecuencia de dejar de trabajar como remisero y tener que ocupar el tiempo en los
diferentes reclamos estimando en $ 3.600- (pesos tres mil seiscientos), daño moral en la suma
de $ 200.000- (pesos doscientos mil), y daño punitivo estimado en $ 1.000.000- (pesos un
millón).-
II) Que a fs. 45 asume la intervención procesal como fiscal de la ley el representante del
Ministerio Público Fiscal (art. 52 LDC).-
III) Que a fs. 59/64 se presenta la Abog. Verónica Linda MARIÑO (Tomo LVIII Folio 321 CALP) en
el carácter de letrada apoderada de la empresa INC S.A., a efectos de contestar demanda de
daños y perjuicios iniciada en su contra, a cuyo efecto realiza una negativa general y particular
de todos los hechos, circunstancias y documental acompañados en escrito de inicio.-
El consumidor compró una heladera nueva, que en la normalidad de los casos está destinada a
que funcione normalmente y el disfrute del mismo por la familia como un artículo de la vida
familiar de nuestros días, y no por el contrario como en el caso, recibirla con daños de
abollones, rayaduras, y encima que no funcione correctamente.- Nadie compra una heladera
nueva, y la paga para que no ande, y encima se sometido a una secuencia de reclamos ante el
vendedor y/o la garantía.- El accionante compró un electrodoméstico para un mejor confort y
no adquirir un problema.-
TRATO INDIGNO
Así entiendo que tratándose de una relación de consumo deberán aplicarse las disposiciones
de la Ley Nacional de Defensa del Consumidor que en su art. 8 bis “Los proveedores deberán
garantizar condiciones de atención y trato digno y equitativo a los consumidores y usuarios.
Deberán abstenerse de desplegar conductas que coloquen a los consumidores en situaciones
vergonzantes, vejatorias o intimidatorias… Tales conductas, además de las sanciones previstas
en la presente ley, podrán ser pasibles de la multa civil establecida en el artículo 52 bis de la
presente norma, sin perjuicio de otros resarcimientos que correspondieren al consumidor,
siendo ambas penalidades extensivas solidariamente a quien actuare en nombre del
proveedor”; el art. 10 bis “El incumplimiento de la oferta o del contrato por el proveedor, salvo
caso fortuito o fuerza mayor, faculta al consumidor, a su libre elección: a) Exigir el
cumplimiento forzado de la obligación, siempre que ello fuere posible; b) Aceptar otro
producto o prestación de servicio equivalente; c) Rescindir el contrato con derecho a
restitución de lo pagado, sin perjuicio de los efectos producidos, considerando la integralidad
del contrato”; el art. 40 “Si el daño al consumidor resulta del vicio o riesgo de la cosa o de la
prestación del servicio, responderán el productor, el fabricante, el importador, el distribuidor,
el proveedor, el vendedor y quien haya puesto su marca en la cosa o servicio… La
responsabilidad es solidaria, sin perjuicio de las acciones de repetición que correspondan…”; y
art. 40 bis en cuanto al daño directo “Es todo perjuicio o menoscabo al derecho del usuario o
consumidor susceptible de apreciación pecuniaria, ocasionado de manera inmediata de sus
bienes o sobre su persona, como consecuencia de la acción u omisión del proveedor de bienes
o del prestador de servicios…”.-
RUBROS INDEMNIZATORIOS
DAÑO EMERGENTE: Que reclama en demanda la reparación del daño emergente los gastos de
traslado y los que ha incurrido para defender sus derechos en la Dirección Provincial de
Consumidor, así como lo que ha debido gastar para concurrir a realizar sus reclamos ante la
sede del vendedor Carrefour.-
Conforme ello, estimo que el daño emergente está constituído por el precio de compra de la
heladera que con fecha 12/12/15 resultó por la suma de $ 17.820- (pesos diecisiete mil
ochocientos veinte).-
LUCRO CESANTE: Que reclama en demanda el resarcimiento como lucro cesante la pérdida de
horas de trabajo como chofer de remisse, y que las habría perdido como consecuencia del
tiempo destinado a realizar los reclamos ante las oficinas de Carrefour, así como tener que
asistir a tres (3) audiencias conciliatorias en la Dirección Provincial de Defensa del
Consumidor.-
PRIVACION DE USO: Que reclama como privación de uso los perjuicios derivados de no
disponer por hace más de dos (2) años con la heladera que ha comprado nueva.-
Y siendo que la sola indisponibilidad del producto y su posible no uso no generan de por sí un
daño que deba ser resarcido, sino que deber ser acreditado un perjuicio cierto y concreto.-
En éste caso resulta acreditado que el destino de la heladera era para uso familiar, y que no se
acredita que se debió realizar otras erogaciones sustitutiva o provocado pérdida económicas
por su no uso (Por Ej. Si era un comercio).-
Que el daño moral es la reparación de las molestias, angustias, así como la pérdida de la
tranquilidad de espíritu que el incumplimiento de una obligación legal o convencional se
deriva.- En nuestro caso particular, si bien se trata del daño moral que se deriva del
incumplimiento contractual de una compraventa de un electrodomésico, y por el que la
doctrina resulta reticente al reconocimiento del daño moral en materia de contratos, no es
menos cierto que esa estrictez propia de los contratos en general, no debe ser la misma
apreciación valorativa en los contratos de consumidor.-
Como ya quedó establecido ut supra la relación jurídica que unió a las partes del litigio, se trata
de un contrato de compraventa de un electrodoméstico, amparado por las disposiciones de la
Ley Nacional de Defensa del Consumidor y además de las disposiciones del Código Civil y
Comercial en lo relativo a los contratos de consumo.- Y en tal inteligencia, los consumidores –
como la actora de autos- resultan la ´parte más débil de la relación jurídica por los que la ley
acude en su protección.-
De las constancias de las presentes actuaciones se observa que el accionante como comprador
de un electrodoméstico nuevo, y que pagó por ello, lejos de disfrutar de la compra y que
estaba destinada a un conforme personal de la familia, ha debido comenzar un recorrido de
reclamos contra el vendedor en sus oficinas de venta, más luego en el reclamo administrativo
ante la Dirección Provincial del Consumidor y actualmente en éste proceso judicial.- Y lejos de
allanarse al problema que se le ha planteado se optó por llevar al consumidor a que ejerza
todos los reclamos administrativos y judiciales para que le sea reconocido su derecho a una
heladera nueva y que funcione.-
¿Cómo pensar que se encuentra una persona que compra un electrodoméstico nuevo, y lejos
de funcionar como tal observa que no funciona? ¿Cómo sentirse que se pago algo como nuevo
y no funciona? ¿Cómo sentirse frente a reclamos ante el vendedor que no son oídos?
No se puede desconocer, y tampoco debe desconocer la demandada, que uno de los pilares de
las relaciones con los consumidores es el derecho a la información, y el trato digno (art. 8 bis
Ley Nacional 24.240; art. 1095 CCyCN).- Trato digno que no se observa que haya sido
beneficiado el accionante en autos, todo por el contrario.-
Conforme ello, estimo justo y equitativo que conforme como se ha desarrollado los hechos del
presente caso, se indemnice en concepto de daño moral la suma de $ 50.000- (pesos cincuenta
mil) que se fijan a valores de fecha de sentencia (art. 1741 CCyCN).-
DAÑO PUNITIVO: Que en el escrito de demanda se solicita se indemnice el daño punitivo del
art. 52 bis de la Ley Nacional de Defensa del Consumidor.-
Así el art. 52 bis dispone “Al proveedor que no cumpla sus obligaciones legales o contractuales
con el consumidor, a instancia del damnificado, el juez podrá aplicar una multa civil a favor del
consumidor, la que se graduará en función de la gravedad del hecho y demás circunstancias
del caso, independientemente de otras indemnizaciones que correspondan. Cuando más de un
proveedor sea responsable del incumplimiento responderán todos solidariamente ante el
consumidor, sin perjuicio de las acciones de regreso que correspondan…”.-
La jurisprudencia ha sostenido que "El daño punitivo ha sido definido como las sumas de
dinero que los tribunales mandan pagar a la víctima de ciertos ilícitos, que se añaden a las
indemnizaciones por daños realmente experimentados por el damnificado, que están
destinados a punir graves inconductas del demandado y a prevenir hechos similares en el
futuro. El instituto abastece tres funciones: i) sancionar al causante de un daño inadmisible; ii)
hacer desaparecer los beneficios injustamente obtenidos provenientes de la actividad dañosa,
iii) prevenir o evitar el acaecimiento de hechos lesivos similares al que mereciera la punición.
CC0203 LP 126465 RSD-260-19 S 12/12/2019 Juez SOTO (MA) Carátula: Delia Carlos Pablo C/
Volkswagen S.A. De Ahorro Para Fines Determinados Y Otro/a S/ Cobro Sumario
(exc.alquileres, etc.) Magistrados Votantes: Soto-Larumbe Tribunal Origen: JZ0000SO; "La
norma es clara en cuanto a que exige para su aplicación un solo requisito para la procedencia
del daño punitivo: que el proveedor no cumpla sus obligaciones legales o contractuales con el
consumidor. Esta disposición, apartándose de las sugerencias efectuadas a nivel doctrinario,
no exige un grave reproche subjetivo en la conducta del dañador ni un supuesto de particular
gravedad caracterizado por el menosprecio a los derechos del damnificado o a intereses de
incidencia colectiva ni a los supuestos de ilícitos lucrativos. Sólo dispone que procede cuando
se incumplen obligaciones legales o contractuales. CC0202 LP 124946 154 S 18/06/2019 Juez
BANEGAS (SD) Carátula: PAOLI PABLO ORESTE C/ BANCO CREDICOP. COOP. LTDO. Y OTRO/A S/
DAÑOS Y PERJ. INCUMP. CONTRACTUAL (EXC. ESTADO) Magistrados Votantes: Banegas-
Hankovits Tribunal Origen: JC0700LP; entre otros.-
Así, teniendo en cuenta la gravedad del incumplimiento, la conducta asumida ante los
reclamos del consumidor, así como tampoco hasta el presente no se ha dado solución al
reclamo que se le ha realizado, estimo justo y razonable aplicar una sanción punitiva de $
200.000- (pesos doscientos mil) a valores a la fecha de la presente sentencia (art. 52 bis Ley
Nacional 24.240 y modif.; art. 790, 804 CCyCN).-
En estos precedentes citados –aún tratándose de causas de naturaleza laboral, y que se aplica
según doctrina de la SCBA la tasa de interés pasiva- ha sostenido que “…Sentado lo expuesto,
corresponde abordar el cuestionamiento que gira en torno a la parcela del fallo en el cual el
juzgador de origen dispuso la aplicación de la tasa que paga el Banco de la Provincia de Buenos
Aires en las operaciones de depósito a treinta días a través del sistema Banca Internet
Provincia, esto es, la tasa pasiva en la indicada variante denominada “digital”.-
Desde esta perspectiva, no se verifica vulnerada la doctrina legal de ésta Corte que denuncia y
cita la apelante elabora en torno a la tasa de interés, pues precisamente ella se ampara en el
fallo de origen.- Sin perjuicio de ello, en atención a la crítica que porta el recurso, se advierte –
en rigor- que la quejosa plantea su disconformidad con la decisión en su expresión
cuantitativa, agraviándose de la aplicación del aludido índice sin poner –por lo demás- cuál
sería –a su criterio- el que considera correcto.-
De todos modos, aún en ésta última hipótesis, éste Tribunal ya se ha expedido sobre el tópico
en la causa RI 118.615 “Zoccaro”, resol. Del 11-3-2015, en donde se ha establecido que el
planteo traído conduce a una discusión irrelevante en el plano jurídico , pues subyace en él
una cuestión insustancial limitada a una ecuación estrictamente económica derivada de la
aplicación de una determinada alícuota en el marco de variantes que puede ofrecer el tipo de
tasa de interés pasiva, lo que, más allá de su magnitud pecuniaria, carece de trascendencia
para merecer atención de ésta Suprema Corte, en virtud de la elevada misión que le cabe (art.
31 bis Ley 5827 y modif.; conf. Doct. Causas C 103.088 “Campi”, sent. 13-VIII-2014; C 109.560
“Spinetta”, sent. Del 4-IX-2013; C 107.383 “Barigozzi”, sent. Del 22-VIII-2012).-
Que no debe perderse de vista que la reparación de los daños y perjuicios debe ser completa,
total, y reparadora en su integridad, procurando recomponer patrimonialmente al acreedor de
la obligación al momento previo a la ocurrencia misma del evento dañoso.- Y para ello no se
trata de reajustar la obligación dineraria ni indexarla ni repotenciarla, sino simplemente seguir
los criterios de la doctrina de la Suprema Corte de Justicia Bonaerense que aplicando la tasa
pasiva y dentro del menúes de variantes que permite el Banco Oficial (Banco de la Provincia de
Buenos Aires).- Y ello se cumple con la aplicación de la denominada tasa pasiva digital, la que
comenzó a ser utilizada por el Banco de la Provincia de Buenos Aires a partir del 19 de agosto
de 2.008.-
Pero cabe preguntarse ¿Qué tasa de interés debe fijar el Banco Central de la República
Argentina?, ¿Cuál de todas las tasas de interés?, ¿Será de las denominadas tasas activas o
tasas pasivas?.-
Así nuevamente el Código Civil y Comercial de la Nación nos trae una zona de penumbra e
imprecisión, que será esta magistratura quien deba aportar claridad, precisión y certeza en su
resolución acerca de qué tasa de interés debe aplicarse.-
En cuanto a la vigencia temporal del Nuevo Código Civil y Comercial de la Nación tengo que el
mismo resulta de aplicación para el futuro, no siendo de aplicación retroactiva (art. 7), siendo
que las leyes se aplican a partir de su entrada en vigencia, aplicándose a las consecuencias de
las relaciones y situaciones jurídicas existentes.- No escapa a ésta magistratura que el Banco
Central de la República Argentina aún no ha publicado ni difundido los índices o tasas de
interés que corresponde a lo dispuesto en el art. 768 inc. c) del Nuevo Código Civil y Comercial
de la Nación por lo que debe acudirse a su integración judicial frente a la falta y ausencia de
determinación.-
Y frente a ello, la Corte Suprema Provincial recientemente en fallo “Cabrera Pablo David c/
Ferrari Rubén Adrián s/ Daños y Perjuicios” C119.176 del 15/6/2016 ha sentado postura –por
mayoría de miembros- sostuvo que frente a la vigencia del Nuevo Código Civil y Comercial de
la Nación (Ley Nacional 26.994 y modif.) será de aplicación a las deudas en mora -cuando no
existiese convención de partes ni remisión normativa- la tasa de interés pasiva más alta de las
que fije el Banco de la Provincia de Buenos Aires, al decir en voto mayoritario sostenido por la
Dra. Kogan “... Por otra parte, el nuevo Código Civil y Comercial, dispone en su art. 768 inc. “c”,
de modo subsidiario, la aplicación de las tasas que se fijen según las reglamentaciones del
Banco Central.- En este contexto, entiendo que la evolución de las distintas tasas de interés
pasivas aplicadas por el Banco de la Provincia de Buenos Aires, que se hallan determinadas en
el marco reglamentario de la mencionada institución oficial (art. 768 inc. “c” Cód. cit.), impone
precisar el criterio que éste Tribunal ha mantenido hasta ahora en carácter de doctrina legal,
en pos de la referida finalidad uniformadora de la jurisprudencia.-
Por tal razón, considero que los intereses deberán calcularse exclusivamente sobre el capital,
mediante la utilización de la tasa pasiva más alta fijada por el Banco de la Provincia de Buenos
Aires en sus depósitos a treinta (30) días, vigente al inicio de cada uno de los períodos
comprendidos y, por aquellos días que no alcancen a cubrir el lapso señalado, el cálculo debe
ser diario con igual tasa, desde la fecha del hecho dañoso hasta el día de su efectivo pago (arts.
622 y 623 C.C. Vélez Sarsfield; 7 y 768 inc. c CCyC; 7 y 10 Ley 23.928 y modif.)…”.-
Ello resulta así en tanto los montos resarcitorios que se determinen en la sentencia se
corresponda con una tarifación en valores históricos, determinados a la fecha de ocurrencia
del evento dañoso, y no cuando se fija la indemnización a valores de actualidad a la fecha de la
sentencia judicial. En este último caso la Suprema Corte Provincial en sus precedentes “Vera”
C120.536 del 18/4/18 y “Nidera” C 121.134 del 3/5/18, estableció como doctrina judicial que
las indemnizaciones fijadas en valores de actualidad se le devengará un interés del 6 % anual
desde la fecha del hecho y hasta la sentencia, y más luego la tasa pasiva más alta que fije el
Banco de la Provincia de Buenos Aires.-
Por lo expuesto, teniendo en cuenta las prescripciones del Código Vélez Sarfield (art. 622) y el
Nuevo Código Civil y Comercial de la Nación (art. 768 inc. c), en una aplicación transitoria de
uno y otro marco legal (art. 7 CCyC), y teniendo como norte y sentido de justicia que debe
propenderse a la reparación integral (art. 17, 19, 33 y cc. Constitución Nacional; art. 11, 31 y
cc. Constitución Provincial; arts. 1068, 1071 y cc. Cód. Civil), estimo que en el caso de los daños
cuya indemnización se determina en valores vigentes a la fecha de sentencia corresponde la
aplicación del 6 % de interés anual desde la fecha de la compra de la heladera (12/12/15) hasta
la fecha de la presente sentencia, y a partir de allí, a la tasa de interés pasiva más alta que fije
el Banco de la Provincia de Buenos Aires en sus operaciones de depósito a 30 días; y en el
supuesto de indemnización por los daños materiales fijada a valores históricos (valor de
compra de la heladera), corresponde la aplicación de la tasa de interés pasiva más alta que fije
el Banco de la Provincia de Buenos Aires en sus operaciones de depósito a 30 días hasta su
efectivo pago.-
j- Documentación en poder de terceros: Fabiana Apaza, expareja del actor en autos. Que se la
cite a fin de que corrobore la autenticidad de las capturas de pantalla salientes de su casilla de
mail dirigidos a la demandada.