Historia de La Marca FIAT

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 6

Historia De La Marca FIAT

Un oasis en el desierto (1899-1900)


Fiat (Fabrica Italiana Automobili Torino) nace en Turín el 11 de julio de 1899, en un
momento en el que no existe industria automovilística como tal en Europa. La mayoría
de los 32 millones de italianos trabaja en el campo; el coche da sus primeros pasos. La
fundación de esta empresa supone un reto para el ex-oficial de caballería Giovanni
Agnelli, el más decidido de entre todos los accionistas. Pronto destaca en el consejo de
Dirección gracias a su visión estratégica y a su determinación.

El crecimiento y los primeros modelos (1900-1910)


Agnelli es elegido director general en 1902. Su filosofía: diversificación de la
producción y atención a los mercados emergentes. El primer coche es el 4 HP, al que
pronto suceden el 8, 10 y 12 HP en 1901, el 24 HP Corsa en 1902, el 60 HP, el 100 HP
y el 130 HP, que alcanza en 1907 una velocidad máxima de 160 kilómetros por hora.
En 1903 Fiat fabrica el primer camión y en 1908 se exporta el taxi ‘1 Fiacre’, del que se
manufacturan 1.600 unidades, que comienza a prestar servicio en las calles de París,
Londres y Nueva York. En pocos años, la planta original en Corso Dante, cerca del río
Po, va creciendo. En 1906 ya ocupa 50.000 metros cuadrados y da empleo a 2.500
personas.
Automóviles para la gran guerra (1910-1920)
En esta década aparecen siete nuevos modelos: S70 Record (1911), S74 Corsa (1911),
Zero (1912), 70 (1915), 2B (1918), 1T (1920) y 510S (1920). En 1912 un coche de Fiat
vence en las 500 Millas de Indianápolis y en el American Grand Prix, y en 1913 la
fábrica aumenta de tamaño, hasta los 130.000 metros cuadrados y los 4.000
trabajadores.
En 1914 construye el camión 18 BL, que fue destinado al ejército italiano en la I Guerra
Mundial.

La crisis golpea fuerte (1920-1930)


Se viven tiempos de crisis en los que Fiat se ve obligada a reducir personal y costes.
Aun así, en 1921 aparece el SuperFlat, el único coche con propulsor V12 construido por
la marca, y un año después se lanza el 519, además del primer motor eléctrico para
ferrocarril. Pero en 1923 la recesión pasa y Fiat (el primer fabricante que utiliza
cilindros de aluminio de serie en sus vehículos) abre la planta de Lingotto; en los años
siguientes presenta el 503 y el 520. En 1929 se ponen a la venta dos modelos más: el
514 y el 525, así como un autobús articulado para recorridos interurbanos.
Internacionalización de la fabricación (1930-1940)
Esta década se caracteriza por la implantación de fábricas fuera de Italia: hay en España,
Francia y Polonia. También por la construcción de quince nuevos modelos, algunos de ellos
convertidos en símbolos de la marca, como el Topolino, de atractivas líneas redondeadas.

En 1939 se inaugura una nueva planta, Mirafiori, que introduce los principios más avanzados
de organización industrial y confirma el objetivo de la compañía: centrarse en la producción en
masa. En la actualidad tiene una superficie de más de tres millones de metros cuadrados.

De nuevo, la guerra (1940-1950)


La II Guerra Mundial obliga a Fiat a reducir la fabricación de coches para dedicarse a
construir tanques, aviones y barcos, aunque sigue produciendo locomotoras, una de las
cuales bate el récord de velocidad en 1940 (160 km/h).
Durante 1944 las plantas son casi destruidas por los bombardeos. En diciembre de 1945
muere Agnelli y Vittorio Valleta ocupa el puesto de presidente de la compañía. A partir
de ese año, la manufactura de automóviles se restablece y la plantilla crece hasta los
71.000 trabajadores. Fiat se convierte en uno de los actores más importantes de la
economía italiana.
El primer coche diésel (1950-1960)
Fiat alcanza los 85.000 trabajadores. Los modelos de más éxito son el 1400 diésel de
1953, el primer coche de gasóleo de la marca; el 600 (1955), un automóvil con motor en
posición trasera; el Bianchina, producido por Autobianchi (compañía fundada por Fiat
junto a Pirelli y Bianchi), y el nuevo 500, premiado en 1959 por su original diseño y las
modernas soluciones técnicas.

Espectacular crecimiento (1960-1970)


Los 85.000 empleados de la década pasada se duplican en ésta. En 1966 Fiat entra en
Rusia para fabricar el Vaz; ese mismo año, Giovanni Agnelli, el nieto del fundador, se
convierte en presidente de la compañía. Es una etapa de exitosos modelos, como el
1800B, el 1500 Cabriolet, el 850 o el 124, elegido Coche del Año en 1967. Sin
embargo, también se incrementan los conflictos con los sindicatos: en 1969 se alcanzan
15 millones de horas de huelga.
Mecanización de las fábricas (1970-1980)
Siguen apareciendo modelos, como el 127 en 1971, y las fábricas continúan
modernizándose: en 1972 entran los 16 primeros robots en Mirafiori, en lo que se
conocería más tarde como ‘Robogate’, un sistema que ensambla las carrocerías.
También se descentraliza la compañía: se fundan Fiat Ferroviaria, Fiat Avio, Fiat
Trattori, Fiat Engineering, Magneti Marelli...

Los primeros coches eléctricos (1980-1990)


La década se caracteriza por la adquisición de Alfa Romeo (1984), el desarrollo de
componentes electrónicos y nuevos materiales, así como por una mayor atención a la
protección del medio ambiente. No en vano, Fiat crea vehículos eléctricos o alimentados
por metano. En 1980 se presenta el Panda, diseñado por Giorgio Giugiaro y, dos años
después, el Uno, que en 1985 incorporaría el revolucionario motor Fire (Fully
Integrated Robitized Engine). 1989 fue el año del Tipo y de otros modelos de éxito
como el Regata y el Croma.
Renovando la gama (1990-2000)
Los años noventa se caracterizan por la entrada en producción de nuevos modelos, que
renuevan la gama al completo. Vehículos como el Cinquecento en 1991, el Punto o
el Fiat Coupé en el año 1993. Un año mas tarde, Fiat lanza con gran éxito el Ulysse,
el primer monovolumen de gran tamaño en colaboración con el grupo francés
PSA. Otros vehículos lanzados en esta década son: el Fiat Barchetta (un pequeño spider
diseñado por Andreas Zapatinas), el Fiat Bravo y Brava (sucesores directos del Fiat
Tipo), o el Fiat Marea (derivado del Fiat Brava y heredero del éxito del Fiat Tempra).

La adquisición de Chrysler (2000-2010)


El año 2008 queda marcado por la profunda crisis económica, con origen en los
Estados Unidos y, desde entonces, extendido por todo el mundo. Una de las industrias
más afectadas por este fenómeno es la industria del automóvil. En 2009, el grupo Fiat
firma un acuerdo preliminar con el grupo Chrysler.
Meses más tarde, los dos fabricantes de automóviles anuncian que han cerrado
una alianza estratégica global: con este acuerdo, el grupo italiano adquiere el 20% del
grupo estadounidense, con la posibilidad de alcanzar un 35% si cumplen determinados
objetivos establecidos.Gracias a este acuerdo, el Grupo Fiat puede utilizar las
plataformas de Chryslerpara sus modelos más emblemáticos (por ejemplo, el Chrysler
300C), mientras que la compañía estadounidense amplía su gama de productos. De
esta manera, ambos fabricantes explotan sus redes comerciales para expandir su
presencia.

También podría gustarte