Ficha de Actividad Ccss 1ero-Semana 2-1
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De la Monarquía a la República
La civilización romana se forjó asimilando elementos culturales provenientes de distintos pueblos vecinos al suyo.
Con el tiempo, su cultura se extendió por gran parte del mundo antiguo e influyó en su desarrollo histórico
posterior. El espacio romano El territorio romano se dividía en tres zonas:
• Zona continental. Comprendía los territorios ubicados entre los ríos Arno y Rubicón al sur, y los Alpes al norte.
• Zona peninsular. Estaba constituida por la región ubicada entre los mares Adriático, Tirreno y Jónico.
• Zona insular. Se encontraba conformada por las islas circundantes, como Córcega, Cerdeña y Sicilia.
El periodo monárquico
Desde su fundación hasta el siglo VI a. C., en Roma se sucedieron siete reyes: Rómulo, Numa Pompilio,
Tulio Hostilio y Anco Marcio eran de origen latino, y Tarquino el Antiguo, Servio Tulio y Tarquino el
Soberbio, de origen etrusco. Se considera a los cuatro primeros como legendarios. Durante este periodo,
conocido como Monarquía, la sociedad romana estaba dividida en tres grupos: los patricios conformaban
la clase más poderosa; los plebeyos, el sector sin privilegios; y los esclavos, el escalón más bajo. En lo
político, la mayoría de las decisiones involucraba a tres instituciones:
• El rey tenía funciones judiciales, administrativas, militares y religiosas. Su cargo no era hereditario.
• El Senado elegía al rey y lo aconsejaba en la toma de decisiones. Estaba compuesto por los jefes de las
gens (conjunto de familias) principales. Los senadores pertenecían a las familias patricias más poderosas
y ocupaban su cargo de por vida.
• La Asamblea tenía derecho a aprobar o rechazar la designación del nuevo rey propuesta por el Senado.
Estaba integrada por todos los varones adultos de las curias, pero eran los patricios quienes tomaban las
decisiones.
La instauración de la República
El último rey de Roma, Tarquino el Soberbio, emprendió una serie de exitosas campañas militares. No
obstante, fue muy impopular, pues vulneró las facultades del Senado, relegándolo a un papel secundario.
En respuesta, los patricios se rebelaron y lo expulsaron en el año 509 a. C. Esto dio inicio a la etapa
conocida como República, y al nuevo régimen político que lleva el mismo nombre. La palabra república
proviene del latín y significa ‘cosa pública’ (res: ‘cosa’, publica: ‘pública’), es decir, indica que el gobierno
es un asunto público y no de un solo hombre. Sin embargo, la república romana no fue democrática, sino
oligárquica, pues solo los patricios podían acceder al poder. Ello originó graves conflictos y
enfrentamientos con los plebeyos.
Luego del fin de la República, Roma se convirtió en el imperio más poderoso del mundo de entonces. En el
periodo imperial se distinguen dos subetapas: el Alto Imperio y el Bajo Imperio. Las guerras civiles y el fin de la
República Hacia mediados del siglo II a. C., surgieron conflictos sociales que originaron una gran crisis política en
Roma. La conquista de nuevos territorios incrementó la riqueza, pero amplió la brecha entre ricos y pobres. En
estas circunstancias surgieron nuevos actores políticos: los populares buscaban reformas que favorecieran a los
plebeyos, como el reparto equitativo de la tierra y de los bienes recién adquiridos; los optimates, representantes
del partido de la aristocracia agrupados en el Senado, buscaban limitar el poder de la plebe; los caudillos
militares eran personajes que adquirieron prestigio en las guerras de conquista y que se aliaban tanto con los
optimates como con los populares. Pero todos estos actores no resolvieron el descontento social. En el año 79
a. C. ocurrió, incluso, una gran rebelión de esclavos dirigida por Espartaco. Para detener el desorden y evitar la
concentración del poder, el Senado formó triunviratos o alianzas de tres militares que compartían el mando.
• El primer triunvirato (60-49 a. C.) estuvo formado por Julio César, Craso y Pompeyo. Esta alianza fracasó
porque, tras luchar entre sí, se impuso Julio César, quien se hizo nombrar dictador perpetuo. No obstante, sus
enemigos republicanos lo asesinaron en el año 44 a. C.
• El segundo triunvirato (43-33 a. C.) estuvo formado por Marco Antonio, Lépido y Octavio. Luego de una guerra
civil, se impuso Octavio.
A pesar de que Caracalla otorgó la ciudadanía a todos los hombres libres del imperio, la sociedad
romana mantuvo profundas desigualdades determinadas por la riqueza y el prestigio familiar.
Durante este periodo, la población se dividía en tres clases sociales:
• Los honestiores u honorables. Clase constituida por las familias patricias, la burguesía provincial y
la élite militar. Desde que el gobierno del emperador Vespasiano dispuso la venta de los cargos
públicos, los honestiores monopolizaron el poder político.
• Los humiliores o humildes. Clase compuesta por la plebe urbana, los campesinos y los individuos
libres que carecían de propiedades. Su pobreza les impedía acceder a cargos públicos.
• Los esclavos. Aunque alcanzaron algunos beneficios, como la prohibición de encarcelarlos y de dar-
les muerte sin motivo, estaban sujetos al poder de sus amos.
El lugar que ocupaban las mujeres en la sociedad romana constituía un caso especial. Ellas,
independientemente de su riqueza o su origen, no eran consideradas ciudadanas. Siempre estaban
tuteladas por un varón: primero por su padre o, si este fallecía, por su hermano u otro pariente;
cuando se casaban, quedaban bajo la tutela de su esposo.
Los romanos creían que el papel de las mujeres era la crianza de los hijos. No obstante, ellas podían
tener propiedades, regentar negocios y participar en las fiestas y espectáculos. Durante el Imperio
adquirieron algunos derechos adicionales, como poder divorciarse y administrar su dote en caso de
viudez.
La economía fue fundamentalmente agrícola. Se desarrolló bajo dos modalidades: la que estaba
destinada para la subsistencia era realizada por pequeños propietarios; mientras que la designada
para el comercio era practicada por grandes terratenientes que empleaban mano de obra esclava.
El Estado también era propietario de tierras, las que obtenía mediante confiscaciones y
donaciones. Otras actividades económicas importantes fueron la artesanía, que se desarrollaba en
las ciudades, y la minería, que se centraba en la explotación de oro, plata, hierro, cobre, estaño,
plomo y mercurio.
Asimismo, se desarrolló un intenso comercio gracias a las rutas marítimas existentes en el
Mediterráneo y a los caminos que conectaban a las principales ciudades del imperio. El uso de una
misma moneda, el denario, permitió la estandarización de los precios y la efectividad de los
intercambios comerciales.
El legado cultural de Roma
La familia en Roma
El concepto de familia en Roma era más amplio que en la actualidad. Componían la familia todos
los miembros sujetos a la autoridad del pater familias (padre de familia):
la madre, los hijos, los nietos y demás descendientes.
El padre de familia tenía una autoridad prácticamente absoluta. Esa autoridad recibía el nombre
de patria potestas (patria potestad), principio jurídico según el cual el padre de familia...
− Tenía autoridad sobre la mujer.
− Podía aceptar o rechazar a un hijo recién nacido.
− Tenía autoridad sobre los hijos, incluso al derecho de vida o muerte.
− Era dueño absoluto de la propiedad familiar (patrimonio) y el único con la facultad de comprar
o vender.
− Era el único de toda la familia que poseía personalidad jurídica.
SOCIEDAD
IMPERIO
ESCLAVOS
ECONOMÍA
COMERCIO
ESTADO
CIUDADES
FUNDACIÓN
VIVIENDAS
DOMUS
INSULAES
VILLAS
CAMPESINOS
Estoy en ¿Cómo sé
Lo
Criterios de evaluación proceso de que lo estoy
logré
lograrlo logrando?
Reconocí la importancia de los orígenes de la civilización
romana
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