Moda Femenina Castellana-Moderna
Moda Femenina Castellana-Moderna
Moda Femenina Castellana-Moderna
mnievesfresneda@hotmail.com
Palabras clave: Moda, Vestido, Tocados, Calzado, Arte Baja Edad Media
Abstract: This work studies the impact of late medieval costume in Castilla on 20th and
21st century fashion design. This includes the dress as well as the headdress
and footwear. Furthermore, it highlights the importance of dress in general,
as well as fashion in hairstyle and accessories. These are essential tools for del-
ving into different areas of knowledge such as history, history of art, sociology,
economy or archaeology, without forgetting the ever growing world of scenic
arts, historic cinematography and theatre. On the other hand, it also explores
the usefulness of late medieval attire and adornment for dating and affiliating
works of art in those cases in which the chronology of the pieces is questionable.
Key Words: Fashion, Costume, Headdress, Footwear, Art of the Late Middle Ages.
. 95
I. Introducción. II. Influencia de la
moda bajomedieval
en la de nuestros días
Prestigiosos diseñadores desde Hay que destacar la gran trascen-
comienzos del siglo XX, como Paul dencia de la indumentaria bajome-
Poiret (1879-1944), Valentina Sanina dieval, -generalmente olvidada por
(1904-1989) o Vivienne Westwood, la gran dificultad que entraña su
así como otros más actuales, entre estudio-, ya que, como han señala-
los que se encuentran John Galiano do prestigiosos especialistas en la
o Alexander McQueen, han investi- historia de la indumentaria, el siglo
gado épocas y vestimentas pretéritas XIII supuso el comienzo de una nue-
en busca de inspiración, al igual que va era en Europa debido a la nueva
han hecho importantes producciones situación social, originada por el
cinematográficas de cine histórico. desarrollo de las comunicaciones
internacionales, la potenciación de
El objeto de este trabajo es analizar los intercambios económicos y la
la repercusión de la moda bajome- presencia de mercaderes y artesanos
dieval castellana en el diseño de los en el marco urbano1. A raíz de todo
siglos XX y XXI, tanto del vesti- ello, una vez iniciado el siglo XIV, el
do, como del tocado y el calzado. lujo en la vestimenta, limitado hasta
entonces a la aristocracia, se extien-
de a la incipiente clase burguesa, que
tratará de imitar a aquella para legi-
timar de este modo su pujante esta-
tus social. Hay que señalar asimismo
que fue durante los siglos XIII y XIV
cuando se produjo el nacimiento de
la “moda”, entendida ésta como un
deseo de armonizar la indumenta-
ria con los sucesivos gustos estéti-
cos. A partir del siglo XIII, con el
gran avance de la Reconquista y la
anexión a la Corona de Castilla de
territorios musulmanes, los respec- Fig. 2. Detalle del brial encordado de
tivos usos indumentarios se vieron doña Leonor de Castilla (fallecida en
mutuamente influenciados, apor- 1244).
tando una riqueza única en Europa.
Foto Monasterio de Santa María la Real de las Huel-
En cuanto a la influencia que ha gas (Burgos).
ejercido la moda bajomedieval cas-
tellana en el diseño de los siglos XX
Fig. 1. Catedral de León. Puerta de San y XXI, podemos afirmar que es un y cuadros-, del fuerte orientalismo
Juan (ca. 1265-1275) (detalle de la arqui- hecho constatable, ya que si bien es a finales del siglo XX, ciertos dise-
volta central). cierto que el gusto por ciertos ele- ñadores de gran relevancia como
mentos exóticos del atuendo podría es el caso de Valentina Sanina, han
Foto Autor. deberse a la influencia, -en grabados vuelto su mirada hacia ese momen-
. 96
to concreto de la historia para crear
sus diseños. Por otra parte, y dentro
del cine histórico, las películas de
ambientación medieval, inscritas en
la tradición historicista de las artes
visuales y en la imagen convencio-
nalmente exótica que se remonta a
la estética romántica2 , constituyen
un nexo entre ambas épocas, aun-
que sea de forma indirecta, ya que,
entre los requisitos técnicos que
más influyen en una ambientación
histórica se encuentra la indumen-
taria, de ahí que a este tipo de cine
se le denomine también “cine de
vestuario”3 , que se basa, a su vez,
en las mismas fuentes que los histo-
riadores, a saber, vidrieras, mura-
les y obras literarias de la época4 .
El vestido
En la época del románico tanto las
mujeres cristianas como las judías que
vivían en su mismo entorno utilizaron
prendas sencillas y holgadas, que ser-
virían de inspiración –a principios del
siglo XX- a las mujeres de los círculos
artísticos, entre las que se encuentra
la musa prerrafaelita Jane Morris
(1839-1914). Todas ellas ignoraron
las rígidas convenciones del vestido
de su tiempo y promovieron un esti-
lo más libre, permitiendo que la tela Fig. 3. Detalle de las tablas funerarias del sepulcro de don Sancho Sainz de Carrillo
cayera suelta desde los hombros hasta (fallecido después de 1295). Proceden de la ermita de San Andrés, en Mahamud de
el bajo5. A lo largo del siglo XIII los Esgueva (Burgos)
vestidos fueron ciñéndose al cuerpo,
utilizando para ello distintos méto- Barcelona, Museo Nacional de Arte de Cataluña.
. 97
Diseño de Moda
dos. Uno de los más populares fue el tipo de tejido aparece en los vestidos
empleo de cordones o cuerdas6 que que lucen las plañideras reflejadas en
ajustaban la prenda, bien en el cos- las tablas funerarias que decoraban
tado, generalmente el izquierdo, bien el sepulcro de don Sancho Sainz de
en la zona de la espalda. Los ejemplos Carrillo (fallecido después de 1295),
iconográficos bajomedievales son (fig. 3). Tejidos que presentan una
muy numerosos; así, por ejemplo, en gran similitud con ciertos modelos de
la catedral de León, lo viste Salomé, nuestro siglo, entre los que se encuen-
representada en la arquivolta central tran los diseñados por la alemana
de la Puerta de San Juan (ca. 1265- Jil Sanders para su colección Prima-
1275), donde se narra la vida del san- vera-Verano, del año 2011 (fig. 4).
to (fig. 1). Afortunadamente contamos
también con piezas arqueológicas de
gran valor, como es el caso del brial7 Los tocados
que perteneció a doña Leonor de
Castilla, reina de Aragón, fallecida
en 1244 (fig. 2), que va provisto de En el capítulo de los tocados, prendas
una abertura en el costado izquierdo del adorno femenino tan de moda
que se cierra con un cordón en zig- en los años 40 y 50 del siglo XX,
zag. Este tipo de prenda encordada se es evidente la influencia de aque-
puso de moda en el siglo XIII, perdu- llos utilizados por las damas de la
rando su uso hasta el Renacimiento. Baja Edad Media; así, por ejemplo,
Más tarde, ya en los siglos XVIII y la gran diseñadora rusa Valentina
XIX se utilizó para ajustar los corsés, Sanina (1904-1989), introdujo -entre
y en los siglos XX y XXI lo vemos 1930 y 1940- distintos tipos de toca-
en distintas prendas del vestido. dos de inspiración medieval10, como
fueron los bonetes complementados
El color y la decoración de los ves- con gorgueras (fig.5), muy similares a
tidos bajomedievales han inspirado los que vemos reflejados, por ejemplo
igualmente a los diseñadores de moda en el Códice Rico de las Cantigas de
de nuestros días. Este es el caso, por Santa María, de ca. 1275 (fig. 6). Los Fig. 4. Detalle de la Colección Primave-
ejemplo, del “viado”, que está pre- bonetes bajomedievales, utilizados ra-Verano 2011 de Jil Sanders.
sente tanto en los textos como en la por las mujeres europeas de todas las
iconografía bajomedieval de todo el clases sociales, eran una especie de
occidente Cristiano. El término “via- gorro que cubría la parte superior de
do” podía emplearse en la Baja Edad la cabeza. Estaba compuesto por un
Media como adjetivo o como sustan- armazón rígido de forma circular, de (fig. 8), que gozó de gran populari-
tivo8; en el primer caso designaba mayor o menor anchura, realizado en dad en Castilla durante la segunda
cualquier tejido de rayas, en contra- lino grueso almidonado11; posterior- mitad del siglo XIII. A partir de la
posición a los denominados planos, mente se forraba con distintos tipos siguiente centuria sus representacio-
es decir, de color liso y sin dibujos9. de tejidos. Este tipo de tocado solía nes iconográficas son inexistentes.
En cuanto a la palabra viado como complementarse con la gorguera,
sustantivo significaba un tejido de pieza de tejido que cubría comple- Por otra parte Paul Poiret (1879-1944)
lana a rayas, formadas por colores tamente el cuello, parte de la cara y puso de moda -entre otras cosas-, los
distintos en la trama y la urdimbre, los hombros. Esta misma diseñadora turbantes, a raíz del éxito en 1909 de
de forma que según fuera el corte, puso también de moda el que yo he los Ballets Rusos de Serguéi Diágui-
dichas líneas se verían horizontal o dado en llamar “tocado alto caste- lev, cuyos decorados y vestuario lle-
verticalmente. Uno de los numero- llano”12 (fig. 7), especie de bonete de nos de exotismo causaron una gran
sos ejemplos bajomedievales de este cuerpo enormemente desarrollado impresión en toda Europa. Más tarde,
. 98
Teoría e historia de la indumentaria
tras La Exposición Colonial de París, La Virgen del Comendador, del Maestro no, especialmente durante los siglos
celebrada en 1931, la moda se inun- de Sijena (fig. 10), del siglo XIV. Este XIV y XV, como se desprende de
da de exotismo asiático; así, si toma- tipo de tocado denominado “crespi- las numerosas fuentes iconográficas
mos como ejemplo un fotograma de na” en la Baja Edad Media, era una y documentales. En otro fotograma
“Maldad bajo el sol” (fig. 9), película especie de cofia de origen bizantino, de la ya mencionada película “Mal-
basada y ambientada en la obra de que solía confeccionarse con tejidos dad bajo el sol” (fig. 11) vemos a una
Agatha Christie de 1941: Evil under finos, normalmente seda, sobre la que de las protagonistas tocándose con
the sun, podemos observar a una de se sujetaba una estructura de retícula un turbante muy similar al que apa-
las protagonistas luciendo un tocado de alambre, realizada generalmente rece en la iconografía bajomedieval
prácticamente idéntico al que vemos con materiales preciosos como oro, en numerosas ocasiones, un ejemplo
reflejado en numerosas ocasiones en plata o piedras preciosas. La utiliza- lo tenemos en el fol. 38 v. del Libro de
la iconografía bajomedieval. Así, lo ción de este tipo de tocado fue muy Ajedrez, Dados y Tablas, códice datado
vemos, por ejemplo, en el retablo de habitual en todo el occidente cristia- en 1283 (fig. 12). Este tocado o toca,
denominado “almaizar” en la Espa-
ña musulmana, e introducido en al-
Ándalus en el siglo IX13, consistía en
una especie de banda o faja, con la
que se envolvía un armazón hasta
cubrirlo por completo, dándole for-
ma de turbante, el cual se colocaba
sobre la cabeza a modo de casco.
Es importante señalar que este tipo
de tocado no sólo fue utilizado por
hombres y mujeres musulmanes,
sino que se extendió por toda Euro-
pa, gozando de gran popularidad
entre las cristianas, hasta aproxi-
madamente mediados del siglo XV.
Fig. 5. Valentina Sanina luciendo un to- Fig. 6. Bonete con gorguera. Códice
cado de inspiración bajomedieval. Rico de las Cantigas de Santa María.
www.dreamtheend.com
. 99
Fig. 9. Fotograma de la película “Mal- Fig. 10. Maestro de Sijena: Retablo de Fig. 11. Fotograma de la película “Mal-
dad bajo el sol”, basada y ambientada la Virgen del Comendador (1367-1381) dad bajo el sol”, basada y ambientada
en la obra de Agatha Christie: Evil un- (detalle). en la obra de Agatha Christie: Evil un-
der the sun (1941). Barcelona. Museo Nacional de Arte de Cataluña. der the sun (1941).
El calzado
. 100
a prolongarse hacia mediados del
siglo XIV14, llegando a grandes exa- III. Conclusiones
geraciones en el último cuarto de la
centuria, solía rellenarse a base de En primer lugar, se ha de señalar
musgo, pelo o borra para mantener que de las investigaciones realizadas
su forma. En la fig. 14 vemos un tipo se pone de relieve la influencia que
de calzado de plena actualidad que ha ejercido la moda bajomedieval
guarda una gran semejanza con el castellana en distintos diseñadores
denominado “chapín” medieval, relevantes de los siglos XX y XXI.
muy de moda en todos los países del Fig. 13. San Bernardo (Valladolid), mo- Por otra parte, se hace también evi-
Occidente Cristiano. Los denomi- nasterio cisterciense de Santa María de dente el valor que tiene el estudio
nados chapines o “tapines” según la Valbuena (ca. 1244-1249). (Detalle de del vestido y el atuendo como parte
grafía aragonesa15, eran una especie las pinturas murales). fundamental de la cinematografía
de chanclo, provisto de una suela, que histórica, al recrear la época de igual
según señala Covarrubias, estaba for- modo que han venido haciendo la
mada por “tres, o quatro corchos: y algu- iconografía, la arquitectura o la lite-
nos ay que llevan treze…16”. Dicha suela, ratura. Tema este completamente
cuyo grosor llegó a ser considerable ignorado en España, en otros países
en los siglos XV y XVI (fig. 15), podía ha despertado el interés de distintos
ir forrada de cordobán o de tejidos autores de gran relevancia que han
lujosos, yendo adornada con distin- dedicado años a estudiar la analogía
tas decoraciones, siempre muy ricas. entre la historia y la historia medieval
en el cine17. Entre ellos se encuentra
Robert Rosenstone, catedrático de
Historia en el California Institute of
Technology, Division of Humanities,
que tras una década dedicada al estu-
Fig. 14. Zapato con plataforma. dio de dicho tema, afirma que tanto
la Historia como la Cinematografía
www.modaymujeres.com (consultado 15 de marzo son dos vías para narrar el pasado,
2014). y a pesar de que ambas son suscep-
tibles de error, puede afirmarse que
los realizadores cinematográficos
“pueden y de hecho son historiadores”18.
Fig. 15. Chapín italiano (1550-1650).
Para finalizar, quisiera destacar el
Brooklyn Museum Costume Collection at the Metropo- hecho de que el estudio del atuen-
litan Museum of Art, Gift of the Brooklyn Museum, do en general, así como la moda
2009, New York (U.S.A.) www.metmuseum.org en el peinado o los accesorios cons-
tituyen una herramienta esencial
para profundizar en distintas áreas
de conocimiento como son la histo-
ria, la historia del arte, la sociología,
la economía o la arqueología de la
Baja Edad Media, sin olvidarnos
de la utilidad del atuendo y el ador-
no personal bajomedievales para la
datación y filiación de obras de arte
en aquellos casos en los que la cro-
nología de las piezas es dudosa19.
. 101
Diseño de Moda
Bibliografia Referencias
ANDERSON, RUTH MATILDA (1942): The History of the Mohammedan dynasties in Spain, 1. Martínez, 2003: 42 y ss. Véase también Boehn,
“Pleated headdresses of Castilla and León (12th. And extracted from the Fahu-t-tib min Ghosni-l-Andalusi- 1928-1029 tomo I: 231.
13th Centuries)”, en Notes Hispanic, 1942. New York, R-Rattib wa Tárik Lisánu-D-Din Ibni-L-Khattib, by 2. Entre dichas películas cabría destacar Robin Hood
The Hispanic Society of America, págs. 50-75. Ahmed Ibn Mohammed al-Makkarí, a native of Te- (1922) El ladrón de Bagdad (1924), La vida privada
lesmán. London, Printed for the Oriental Translation de Enriqe VIII, (1933), El Alcón y la fecha (1950)
ARIÉ, RACHEL (1965): Fund of Great Britain and Ireland, 1840-1843 (2 o El Cid (1961).
“Quelques remarques sur le costume des Musulmans vols.). 3. Prólogo de Román Gubern, al libro de ALBERICH,
d’Espagne au temps des Nasrides”, en Arábica, tome Enrich: Películas clave del cine histórico, Ediciones Ro-
XII/3, Leiden, pp. 244-261. GUAL CAMARENA, MIGUEL (1976): binbook, Barcelona, 2009.
Vocabulario del comercio medieval. Colección de aran- 4. Orgaz, 2006: 291-306.
BOUCHER, FRANÇOIS (2009): celes aduaneros de la Corona de Aragón (siglos XIII y 5. VV.AA. 2013, pág. 214.
Historia del traje en Occidente. Editorial Gustavo Gili, XIV). Barcelona, ediciones El Albir, 1976. 6. No hay que confundir con “cintas”, ya que en los
SL., Barcelona. documentos de la época esta denominación se aplica ge-
HAYDON, FRANK SCOTT (ED.) (1863): neralmente a los cinturones.
BOEHN, MAX VON (1928-1929): Eulogium (Historiarum sive Temporis): Chronicon AB 7. Brial, sinónimo de “çiclatón” (Francia: “cote”;
“Edad Media”, en La Moda. Historia del Traje en Orbe Condito Usque Ad Annum Domini M.CCC. Inglaterra: “cote”, “tunic”): Prenda que se vestía di-
Europa desde los orígenes del Cristianismo hasta LXVI., A Monacho Quodam Malmesburiense Exa- rectamente sobre la camisa, similar a la saya, con la
nuestros días, vol. I. Barcelona, Salvat Editores, S.A. ratum. Acedunt Continuationes due, Quarum Una Ad diferencia de que el brial siempre estaba confeccionado
1928-1929. Annum M.CCC.XIII. Altera Ad Annum M.CCC. con tejidos ricos y adornado con gran lujo, por lo que era
XC. Perducta Est. Publised by the authority of the vestido por las clases socialmente más elevadas. (Fresne-
CASTRO, AMÉRICO (1921-1923): Lords Commissioners of her Majesty’s Treasure, under da, 2012, tomo II: 1123; Fresneda, 2016: Capítulo
“Unos aranceles de aduanas del siglo XIII”, en Revis- the direction of the Master of the Rolls. Vol. III. Lon- I: El Vestido).
ta de Filología Española, tomo VIII, 1921, pp.1-29 don: Longman, Green, Longman, Roberts, and Green, 8. Martínez Meléndez, 1989: 232.
y 325-326; tomo IX, 1922, pp. 266-276; tomo X, 1863. 9. Castro, 1921-1923, tomo X: 121.
1923, pp. 113-136. 10. Benbow Pealzgraf, 2002: 679-680.
LÉVI-PROVENÇAL, E. (1999): 11. Viollet-Le-Duc 2004, tomo III, pág. 78; Ander-
COVARRUBIAS OROZCO, SEBASTIAN Histoire de l’Espagne Musulmane, tome 3: Le siècle son1942, pág. 60.
DE, (1611): du Califat de Cordoue, Paris, Maisonneuve et Larose, 12. Fresneda, 2012, tomo II: 618; Fresneda, 2016.
Tesoro de la lengua castellana o española. Impreso en 1999 (primera edición, 1950). Capítulo II: El Tocado de la mujer cristiana.
Madrid, por Luis Sánchez, impresor del Rey N.S. Año 13. Gayangos 1840-1843, vol. I, libro II, capítulo I:
del Señor M.DC.XI. MARTÍNEZ, María (2003): 116; Arié 1965: 246 y 253; Lévi-Provençal 1999:
“Indumentaria y Sociedad Medievales (ss. XIII- 427-428.
FRESNEDA GONZÁLEZ, Mª DE LAS NIE- XIV)”, en En la España Medieval, nº 26, año 2003, 14. Villet-Le-Duc 2004, tomo III: 66; Haydon,
VES (2012): pp. 35-59. Frank Scott 1863, vol. III: 230-231.
Atuendo, Aderezo, Pócimas y Ungüentos femeninos en la 15. Gual Camarena 1976: 436.
Corona de Castilla (siglos XIII-XIV) (2 vols.). Tesis MARTÍNEZ MELÉNDEZ, Mª DEL CAR- 16. Covarrubias Orozco 1611: 291 v.
doctoral dirigida por Mª Victoria Chico Picaza. Biblio- MEN (1989): 17. Puede decirse que la obra de John Aberth: A Knight
teca Digital Complutense. Tesis UCM 2012. Los nombres de los tejidos en castellano medieval. Gra- at the movies, en 2003, es el primer libro en lengua in-
nada, Publicaciones de la Cátedra de Historia de la glesa dedicado por completo al tema. Un año más tarde,
FRESNEDA GONZÁLEZ, Mª DE LAS NIE- Lengua Española, Universidad de Granada, 1989. en 2004, el eminente historiador francés François Amy
VES (2016): de la Bretèque, publicó su obra: L’imaginaire médieval
Moda y belleza femenina en la Corona de Castilla du- VIOLLET-LE-DUC, E. (2004): dans le cinéma occidental
rante los siglos XIII y XIV. Editorial Dykinson, S.L., Dictionnaire raisonné du mobilier français: de l’époque 18. Rosenstone, 2006: 7-8.
Madrid. carlovingienne à la Renaissance. Tome III: Le Costume 19. Gracias a los datos aportados por la indumentaria
médiéval. Paris, Librairie Centrale d’Architecture, An- me ha sido posible proponer nuevas cronologías para dis-
GAYANGOS Y ARCE, PASCUAL DE (TRA- cienne Maison Morel; Editions Heimdal, 2004 (pri- tintas obras. (Véase Fresneda, 2012, tomo II: 1.004-
DUC.) (1840-1843): mera edición: 1872). 1.008).
. 102