Clases de Laboral
Clases de Laboral
Clases de Laboral
2) Principio de Irrenunciabilidad: establece que será nula y sin valor toda convención
de partes que suprima o reduzca derechos contenidos en la ley, en el estatuto o en el
convenio. Eso mismo decía la LCT antes de la reforma. Luego de la reforma en el
artículo 12 se agregó que será nula y sin valor toda convención de partes que suprima o
reduzca derechos contenidos en la ley, en el estatuto, en el convenio o en los contratos
individuales de trabajo, ya sea al tiempo de su celebración o de su ejecución, o del
ejercicio de derechos provenientes de su extinción.
El silencio del trabajador en ningún caso puede generar una presunción en su contra,
no puede entenderse que ha consentido determinada situación.
Este principio establece que cuando exista duda entre la continuación o no del contrato
de trabajo, o respecto de su duración, se debe resolver a favor de la existencia de un
contrato por tiempo indeterminado; el contrato es de tracto sucesivo, desarrollándose
por medio de prestaciones repetidas en el tiempo. Tiende al mantenimiento de la fuente
de trabajo: el contrato tiene vocación de permanencia, lo que otorga cierta seguridad y
tranquilidad al trabajador desde el punto de vista económico y psicológico y se relaciona
con el concepto de estabilidad, esto es, la expectativa de conservar su empleo mientras
cumpla adecuadamente con las obligaciones contractuales a su cargo. El Art 10 de la
LCT dispone que “en caso de duda, las situaciones deben resolverse en favor de la
continuidad o subsistencia del contrato”. En el Art 90 se establece el principio general
de que los contratos son por tiempo indeterminado y las demás formas de contratación
resultan una excepción al principio general.
4) Principio de progresividad: tiene que atenerse a la regla de la progresión legislativa
regional. El legislador tiene que tender a efectivizar los derechos económicos y sociales
reconocidos en Argentina y en los pactos internacionales.
6) Principio de buena fe: no es un principio exclusivo del derecho del trabajo, pero
adquiere especial relevancia ya que esta referido a los deberes de conducta recíprocos
de las partes, ya que el contrato no solo contiene prestaciones de carácter patrimonial.
Comprende el deber de actuar con fidelidad y adoptar conductas adecuadas en el
cumplimiento de sus obligaciones y se aplica durante toda la relación laboral. Esta
definido en el Art 63 “Las partes están obligadas, activa y pasivamente, no sólo a lo que
resulta expresamente de los términos del contrato, sino a todos aquellos
comportamientos que sean consecuencia del mismo, resulten de esta ley, de los
estatutos profesionales o convenciones colectivas de trabajo, apreciados con criterio de
colaboración y solidaridad”.
Por otro lado, el Art 17 bis establece que “Las desigualdades que creara esta ley a favor
de una de las partes, sólo se entenderán como forma de compensar otras que de por sí
se dan en la relación”. Es decir, la norma reconoce la existencia de una disparidad
negocial entre las partes, que es compensada por normas protectoras de los derechos
de los trabajadores. Implica el reconocimiento normativo del poder estatal para
introducir desigualdades jurídicas, como mecanismo de nivelación de la disparidad
negocial existente entre las partes de la relación jurídica contractual laboral. El
empleador también puede premiar los méritos de un trabajador por encima de la
remuneración establecida en el convenio.
Para otros, fuentes es el formato que adquiere la norma. Es una función normal
normativa (ley, decreto, resolución, etc) a través de la cual se expresa un órgano
institucional.
Por ejemplo, la CN (no está mencionada en el art. 1 de la LCT) pero no cabe duda de
que es una fuente del derecho del trabajo, ya que es la ley suprema en nuestra
estructura jurídica.
Lo mismo sucede con las normas internacionales (art 75 inc 22 CN) que tienen
jerarquía similar a la de la CN o jerarquía supralegal (que están por debajo de la CN
pero que están por sobre la ley de la nación). También sucede con disposiciones o
resoluciones emitidas por el P.E en relación a la materia laboral (Decretos
reglamentarios, DNU).
3. Fuentes supletorias: relativas al art. 11 de la LCT, el cual establece que cuando una
cuestión no pueda ser dirimida por la aplicación de una norma reconocida u omitida
(este pilar se aplica en ausencia de una fuente reconocida o de una omitida), allí
supletoriamente podremos aplicar la siguiente serie de fuentes:
El juez tiene la potestad de definir por cuál de estos principios va a sustentar su decisión
dando una resolución a ese conflicto que tiene que resolver y que no pudo encuadrarse
en las dos primeras fuentes. Sea cual sea, son los parámetros que el art. 11 de la LCT
le da al juez para poder resolver una cuestión en ausencia de norma. Si no existiera
este artículo, el sistema laboral sería incompleto. La importancia de este artículo es
trascendente ya que es el cual le da una completitud para dar respuesta al
ordenamiento en cualquier situación que se pueda presentar (o se resuelve con una
norma o se resuelve con un principio mencionado en el art. 11).
Puede pasar que varias normas coexisten en un mismo momento. Si todas estas
normas de carácter obligatorio coexisten en un mismo momento y no habría ningún
problema en aplicar cualquiera de ellas, ¿Dónde está la situación de conflicto?
Cuando coexisten distintas normas con distinto contenido.
No tiene que dar lo mismo aplicar ‘’a’’ que aplicar ‘’b’’ porque la solución va a ser
diferente. Esto genera conflictos que hay que solucionar para que las distintas normas
armonicen y para que se sepa cuál es la regla aplicable en un supuesto de conflicto de
concurrencia de distintas normas con distinto nivel de protección.
Cuando analizamos cuestiones de normas hay que tener presente dos criterios
fundamentales:
o Orden cronológico/temporal: donde hay que tener presente qué es lo que ya existía
y qué norma fue dictada con posterioridad (cual era el nivel de protección vigente y cuál
es el nuevo nivel de protección que viene de la mano de una nueva norma dictada).
o Los pro y contra: aquello que pudo haber venido después con el tiempo pudo
mejorar o desmejorar los niveles de protección existentes. La idea es que los niveles de
protección siempre vayan a ser cada vez mejores. La cuestión está en que las
soluciones difieren de acuerdo sea el tipo de norma que se aplique. La mejor desplaza a
la peor.
Clasificación
● Técnicas limitativas de la autonomía de la voluntad
Esta técnica es de las más importantes ya que es uno de los instrumentos de protección
centrales en el Derecho del Trabajo. Las limitaciones están dirigidas tanto al trabajador
como al empleador y a la limitación de la autonomía de cada uno, aunque siempre
prevalece la limitación a la autonomía del empleador pq es quien realmente tiene una
verdadera autonomía para modificar las condiciones laborales.
La autonomía de la voluntad del trabajador que el legislador busca limitar para tener un
cierto cumplimiento del ppio de protección es la de la renuncia de sus derechos que está
principalmente relacionado con el principio de irrenunciabilidad.
También es importante establecer que se limitara a ambas partes como un conjunto.
Una de las formas de efectivizar esta limitación es con la intervención estatal, mediante
las normas imperativas.
Otra manera de limitar esta voluntad es mediante los Convenios Colectivos de Trabajo
que también ya no van a tener en cuenta el trabajador en manera individual sino que en su
conjunto.
● Técnicas antifraude
“Art. 29 LCT Interposición y Mediación. Los trabajadores que habiendo sido
contratados por terceros con vista a proporcionarlos a las empresas, serán
considerados empleados directos de quien utilice su prestación.
En tal supuesto, y cualquiera que sea el acto o estipulación que al efecto concierten,
los terceros contratantes y la empresa para la cual los trabajadores presten o hayan
prestado servicios responderán solidariamente de todas las obligaciones emergentes
de la relación laboral y de las que se deriven del régimen de la seguridad social.
Los trabajadores contratados por empresas de servicios eventuales habilitadas por la
autoridad competente para desempeñarse en los términos de los arts. 99 de la
presente y 77 a 80 de la Ley Nacional de Empleo, serán considerados en relación de
dependencia, con carácter permanente contínuo o discontínuo, condichas
empresas.” Es decir, el principio general es que cuando el empleador no es quien toma a
los trabajadores sino que este reclutamiento lo hace un tercero, la ley entiende que en
realidad el trabajador no es un dependiente del tercero sino que es un dependiente directo
de quien utiliza su prestación. A la ley solo le interesa para quien efectivamente el
trabajador presta servicios sin importar quien lo contrato.
Como garantía adicional entre el tercero contratante y el empleador la ley sostiene que
estos son solidariamente responsables. El responsable principal será el empleador y
solidariamente responsable será el tercero.
Art. 29 bis “El empleador que ocupe trabajadores a través de una empresa de
servicios eventuales habilitada por la autoridad competente, será solidariamente
responsable con aquélla por todas las obligaciones laborales y deberá retener de los
pagos que efectúe a la empresa de servicios eventuales los aportes y contribuciones
respectivos para los organismos de la Seguridad Social y depositarlos en término.
El trabajador contratado a través de una empresa de servicios eventuales estará
regido por la Convención Colectiva, será representado por el Sindicato y beneficiado
por la Obra Social de la actividad o categoría en la que efectivamente preste servicios
en la empresa usuaria.” Esta es otra de las garantías para el trabajador eventual, el
legislador entiende que si una empresa no toma directamente a sus trabajadores y lo hace a
través de un tercero (empresa de servicios eventuales), en realidad, el empleador realmente
es la empresa usuaria salvo que pueda demostrar que lo hizo por una eventualidad y que es
algo imprevisto y monetario pero además deberá probar que la empresa de servicios
eventuales estaba habilitada para brindar este servicio.
Hay 2 situaciones:
Cesión: cede parte de su establecimiento a otra empresa tercerizada. No tiene nada que ver
con el giro de la empresa principal. No es solidariamente responsable.
Contratación / subcontratación: en este caso la empresa si es solidariamente responsable.
CONTRATO DE TRABAJO
Es un acto que crea / le da existencia a la relación de trabajo. La relación de trabajo es el
cúmulo de derechos, obligaciones, poderes, etc. creada por el contrato.
A diferencia de un contrato en general el contrato de trabajo tiene como regla la limitación
de la autonomía de la voluntad de las partes.
Rasgos descriptivos
● Contrato de cambios: existen intereses económica y jurídicamente contrapuestos.
● Objeto: es complejo pero el principal es el trabajo, por un lado la prestación de la
persona que trabaja y por el otro la obligación del sujeto empleador de pagar una
retribución por el estado en disposición de esta persona.
● Ajenidad: la persona trabajadora presta el servicio a cuenta de otra persona.
● Dependencia: dependencia de la persona trabajadora respecto del sujeto empleador.
Características
● Consensual: se perfecciona con el consentimiento de las partes.
● Bilateral: obligaciones recíprocas.
● Oneroso
● Tracto sucesivo
● Autónomo: tiene una propia rama del derecho para regular.
● Nominado y típico
● No formal: en el caso de los contratos de plazo indeterminado la formalidad es ad
probatio.
Tesis relacionista
Para los que siguen esta tesis el vínculo laboral no es un contrato de trabajo sino que es
meramente una relación de trabajo.
Sostenían que la persona que trabaja no tiene la voluntad de hacerlo sino que es una
necesidad, por lo que la persona que trabaja no estaría contratando con el empleador sino
que se integra a este. Además el contenido de esta relación no lo da un contrato sino que lo
aporta una ley.
Tesis contractualista
Estos formularon una crítica a la tesis anterior y sostienen que si hay un contrato es porque
existe la constitución de una relación a partir de un consentimiento recíproco de la partes.
Dependencia
La LCT sólo regula los contratos que sean en relación de dependencia. El titular de la
empresa es quien define a qué sujetos físicos va a contratar y a cuáles no.
Si existe dependencia, existe C.T en cualquiera de sus modalidades. La relación de
dependencia es un tipo de conducta, forma de trabajo tipificada en los C.T.
B) Faceta económica: retribución del trabajo en favor del otro, el trabajador dependerá de
ese ingreso. Además hay otro dato que se llama Ajenidad de lo producido, todo aquello que
realiza el trabajador en cumplimiento del C.T no es para él, sino para el patrocinio del
empleador.
Se lo piensa como una triple ajenidad:
- Ajenidad en los frutos: los frutos que obtiene el empleador del trabajo del trabajador.
- Ajenidad en los medios: la persona trabajadora no es titular de los medios de
producción.
- Ajenidad en el riesgo: tiene relación con que el que asume el riesgo de los
resultados del trabajo es el empleador, éste no puede pagarle menos de lo pactado,
al trabajador, independientemente del resultado de los frutos.
C) Faceta jurídica: el empleador según la ley tiene facultades para desarrollar (organizar y
dirigir la unidad), organizar la empresa, dirigir a los trabajadores (impartir instrucciones del
trabajo).
En una razonable directiva impartida, si un trabajador no la cumple, el empleador puede
sancionarlo. Sólo una de las 2 partes del CT puede sancionar al otro si se incumple esta
directiva. Acá es donde es notorio que las partes del contrato no son iguales.
Las sanciones pueden ser leves o graves siempre dependiendo del incumplimiento. Un
trabajador incluso puede llegar a perder el trabajo sin indemnización (sólo se paga la
liquidación, al igual que cuando uno renuncia) si es despido con causa.
Esta faceta tiene relación con la subordinación de la persona que trabaja con el empleador.
La dependencia es muy importante porque es la que marca si un vínculo está protegido por
la LCT o no. En caso de conflicto quien decidirá si existe o no dependencia será el juez.
El art. 25 de la LCT define al trabajador como ‘’ la persona física que se obligue o preste
servicios en las condiciones previstas en los artículos 21 y 22 de esta ley,
cualesquiera que sean las modalidades de la prestación’’.
El art. 26 de la LCT define al empleador como ‘’la persona física o conjunto de ellas, o
jurídica, tenga o no personalidad jurídica propia, que requiera los servicios de un
trabajador’’, dando 4 alternativas posibles.
Esos dos sujetos, para ser sujetos del CT, necesitan tener ciertas capacidades:
● Para ser sujeto trabajador:
Edad mínima para trabajar: 16 años (bajo ciertas condiciones: si bien puede trabajar, para
celebrar ese contrato necesita de la autorización de un responsable legal que avale la
celebración de ese contrato, ya sea padre/madre/tutor, etc. Con excepción a que ese menor
viva de modo independiente de sus padres, caso en el cual la ley presume que el menor se
encuentra capacitado para trabajar para afrontar los gastos de mantenimiento del lugar
donde está viviendo) (solo pueden trabajar 6hs diarias o 36hs semanales) (NO trabajo
jornada nocturna).
Otra excepción es que el trabajo provenga de una empresa familiar (empresa conformada
por el padre, la madre, el menor y los hermanos del menor. Caso que ocurre entre los
menores entre 14 a 16 años) o si se trata de un menor de edad emancipado.
En éste último caso el menor no puede trabajar más de 15 horas por semana (si tiene
menos de 18 años es porque todavía tiene que cumplir el ciclo escolar) ni cumplir una tarea
que fuera insalubre o riesgosa para su salud física. No es la idea que el trabajo aleje al
menor de su esquema estudiantil.
El titular del establecimiento debe dar una presentación ante la autoridad laboral
correspondiente a la zona donde está el establecimiento donde trabajará el menor, para
blanquear que en dicho establecimiento va a haber un menor trabajando, ya que hay una
norma penal que tipifica como delito el trabajo infantil. El artículo 189 bis de la LCT,
establece ‘’Cuando, por cualquier vínculo o acto, o mediante cualquiera de las formas
de descentralización productiva, la empresa del padre, la madre o del tutor se
encuentre subordinada económicamente o fuere contratista o proveedora de otra
empresa, no podrá obtener la autorización establecida en esta norma’’.
Otra excepción es la que viene de las actividades artísticas y siempre respetando que el
propósito no es poner obstáculos (ley 24.650/Convenio 138 de la OIT).
A partir de los 18 años: toda persona puede ser trabajador sin autorización porque el
ciudadano es responsable de sus actos.
El artículo 29 BIS establece ‘’El empleador que ocupe trabajadores a través de una
empresa de servicios eventuales habilitada por la autoridad competente, será
solidariamente responsable con aquélla por todas las obligaciones laborales y deberá
retener de los pagos que efectúe a la empresa de servicios eventuales los aportes y
contribuciones respectivos para los organismos de la Seguridad Social y
depositarlos en término. El trabajador contratado a través de una empresa de
servicios eventuales estará regido por la Convención Colectiva, será representado
por el Sindicato y beneficiado por la Obra Social de la actividad o categoría en la que
efectivamente preste servicios en la empresa usuaria’’.
En estas hipótesis hay 3 sujetos, lo cual es contrario al artículo 21 de la LCT.
La empresa usuaria tiene una obligación de control, deberá retener las cargas sociales que
le corresponden a esos trabajadores y depositarlas en la seguridad social. Tienen que
registrar en un apartado especial de su libro, a los trabajadores eventuales.
Cámara consideró que: la apelante no desvirtuó los fundamentos del fallo de primera
instancia para extender la responsabilidad, sino que "por el contrario, ellos son claramente
corroborantes de la segmentación de su proceso productivo, proceder que bien puede
responder a una estrategia empresarial pero NO puede servir de argumento válido para
declinar la responsabilidad solidaria que en el marco de la ley de contrato de trabajo y de la
realidad le cabe en virtud de la segregación de funciones que le son propias o con las que
no se concibe un acabado cumplimiento de su giro comercial, a otras empresas"(Art 30
LCT). Art 30= La responsabilidad solidaria de "quienes contraten o subcontraten,
cualquiera sea el acto que le dé origen, trabajos o servicios correspondientes a la actividad
normal y específica propia del establecimiento, por las obligaciones laborales del contratista
o subcontratista. El actor se hallaba vinculado laboralmente a Compañía Embotelladora,
empresa dedicada, según surge de la sentencia de primera instancia, a la fabricación, venta
y distribución de gaseosas de la línea Pepsi. La recurrente se dedica a elaborar los
concentrados de las bebidas gaseosas, vendiéndolos a su vez a otras empresas.
Compañía Embotelladora compraba a Pepsi esos extractos, elaboraba el producto final, y lo
vendía y distribuía. (estas circunstancias relativas a la actividad comercial normal y real de
ambas empresas no se encuentran controvertidas en la causa).
Art. 38 LCT Servicios excluidos. “No podrá ser objeto del contrato de trabajo la
prestación de servicios ilícitos o prohibidos.”
Art. 39 LCT Trabajo ilícito. “Se considerará ilícito el objeto cuando el mismo fuese
contrario a la moral y a las buenas costumbres pero no se considerará tal si, por las
leyes, las ordenanzas municipales o los reglamentos de policía se consintiera,
tolerara o regulara a través de los mismos.” Si algún contrato lo tuviera éste será nulo y
esta nulidad no traerá consecuencias para ninguna de las partes.
Art. 40 LCT Trabajo prohibido. “Se considerará prohibido el objeto cuando las normas
legales o reglamentarias hubieren vedado el empleo de determinadas personas o en
determinadas tareas, épocas o condiciones.
La prohibición del objeto del contrato está siempre dirigida al empleador.”
No tiene causas para el empleado pero si para el empleador, en estos casos el contrato
también será nulo pero también esta nulidad puede ser parcial.
El objeto también puede ser prohibido (contratar menores de 16 años, darle trabajo a una
mujer 45 días antes del parto o 45 días post parto, darle trabajos riesgosos e insalubres a
menores, etc). Las prohibiciones están dirigidas siempre al empleador. Si se detecta tal
prohibición, el trabajador no pierde los derechos ya que quien incumplió fue el empleador.
Art. 43 LCT “Prohibición parcial. Si el objeto del contrato fuese sólo parcialmente
prohibido, su supresión no perjudicará lo que del mismo resulte válido, siempre que
ello sea compatible con la prosecución de la vinculación. En ningún caso tal
supresión parcial podrá afectar los derechos adquiridos por el trabajador en el curso
de la relación.”
Art. 44 LCT “Nulidad por ilicitud o prohibición. Su declaración. La nulidad del contrato
por ilicitud o prohibición de su objeto tendrá las consecuencias asignadas en los
artículos 41 y 42 de esta ley y deberá ser declarada por los jueces, aun sin mediar
petición de parte. La autoridad administrativa, en los límites de su competencia,
mandará cesar los actos que lleven aparejados tales vicios.”
Art. 48 LCT “Forma. Las partes podrán escoger libremente sobre las formas a
observar para la celebración del contrato de trabajo, salvo lo que dispongan las leyes
o convenciones colectivas en casos particulares.”
Establece la libertad de formas, la ausencia de esta jamás traerá la nulidad del contrato.
Cabe aclarar que hay ciertas modalidades contractuales que deben ser escritas pero la falta
de ésta no tendrá como resultado la nulidad sino que tendrá otras consecuencias.
Se prohibe:
1. Alterar los registros correspondientes a cada persona empleada.
2. Dejar blancos o espacios.
3. Hacer interlineaciones, raspaduras o enmiendas, las que deberán ser salvadas en
el cuadro o espacio respectivo, con firma del trabajador a que se refiere el asiento y
control de la autoridad administrativa.
4. Tachar anotaciones, suprimir fojas o alterar su foliatura o registro. Tratándose de
registro de hojas móviles, su habilitación se hará por la autoridad administrativa,
debiendo estar precedido cada conjunto de hojas, por una constancia extendida por
dicha autoridad, de la que resulte su número y fecha de habilitación.”
PRUEBA
Art. 23 LCT “Presunción de la existencia del contrato de trabajo.
El hecho de la prestación de servicios hace presumir la existencia de un contrato de
trabajo, salvo que, por las circunstancias, las relaciones o causas que lo motiven se
demostrase lo contrario.
La presunción contenida en el presente artículo no será de aplicación cuando la
relación se trate de contrataciones de obras o de servicios profesionales o de oficios
y se emitan los recibos o facturas correspondientes a dichas formas de contratación
o el pago se realice conforme los sistemas bancarios determinados por la
reglamentación correspondiente. Dicha ausencia de presunción se extenderá a todos
los efectos, inclusive a la Seguridad Social.”
Periodo de prueba
El periodo de prueba tiene una duración de 3 meses, finalizado este plazo el trabajador
adquiere una protección ante el despido arbitrario. Lo que previó el legislador es que en
esos tres primeros meses son de utilidad para el empleador para ver si el trabajador tiene la
aptitud para el desempeño en esas tareas asignadas. Pero para el trabajador también lo es.
Art. 92 bis LCT “El contrato de trabajo por tiempo indeterminado, excepto el referido
en el art. 96, se entenderá celebrado a prueba durante los primeros Tres (3) meses de
vigencia. Cualquiera de las partes podrá extinguir la relación durante ese lapso sin
expresión de causa, sin derecho a indemnización con motivo de la extinción, pero
con obligación de preavisar según lo establecido en los arts. 231 y 232.
El período de prueba se regirá por las siguientes reglas:
1.- Un empleador no puede contratar a un mismo trabajador, más de una vez,
utilizando el período de prueba. De hacerlo, se considerará de pleno derecho, que el
empleador ha renunciado al período de prueba.
2.- El uso abusivo del período de prueba con el objeto de evitar la efectivización de
trabajadores será pasible de las sanciones previstas en los regímenes sobre
infracciones a las leyes de trabajo. En especial, se considerará abusiva la conducta
del empleador que contratare sucesivamente a distintos trabajadores para un mismo
puesto de trabajo de naturaleza permanente.
3.- El empleador debe registrar al trabajador que comienza su relación laboral por el
período de prueba. Caso contrario, sin perjuicio de las consecuencias que se deriven
de ese incumplimiento, se entenderá de pleno derecho que ha renunciado a dicho
período.
4.- Las partes tienen los derechos y obligaciones propias de la relación laboral, con
las excepciones que se establecen en este artículo. Tal reconocimiento respecto del
trabajador incluye los derechos sindicales.
5.- Las partes están obligadas al pago de los aportes y contribuciones a la Seguridad
Social.
6.- El trabajador tiene derecho, durante el período de prueba, a las prestaciones por
accidente o enfermedad del trabajo. También por accidente o enfermedad inculpable,
que perdurará exclusivamente hasta la finalización del período de prueba si el
empleador rescindiere el contrato de trabajo durante ese lapso. Queda excluida la
aplicación de lo prescripto en el 4° párrafo del art. 212.
7.- El período de prueba, se computará como tiempo de servicio a todos los efectos
laborales y de la Seguridad Social.”
No existe una fecha cierta lo que se conoce es la eventualidad, cuando esta eventualidad
termina se termina el contrato.
El contrato eventual no requiere la existencia de una contratación a través de una empresa
de servicios eventuales.
El plazo máximo con el que el trabajador podrá cumplir es de 6 meses, esto pq el legislador
no cree que exista una eventualidad mayor a ese plazo. Si se contrata con una empresa de
servicios eventuales por medio.
Trabajador
Estar a disposición
Principal deber de la persona humana que trabaja.
Fidelidad y obediencia
La primera: es un deber de la persona que trabaja íntimamente relacionado con la
obligación de reserva o secreto. La segunda: es un deber de la persona que trabaja como
resultado lógico del poder de dirección que ostenta el empleador en el seno de la empresa.
Formacion Profesional
Es un derecho de la persona que trabaja, reconocido a nivel constitucional, internacional y
legal y tiene por objeto mejorar las aptitudes de la persona que trabaja a los efectos de
influir positivamente en su desempeño laboral y acceder a cargos superiores.
Protección de bienes
Es un derecho de la persona que trabaja derivado del principio de indemnidad, en particular
dirigido a su patrimonio. Refiere a una mirada preventiva.
Reparación de los daños
Es un derecho de la persona que trabaja derivado del principio de indemnidad, en particular
dirigido a su patrimonio. Refiere a una mirada resarcitoria.
Inespecíficos o fundamentales
Se trata de aquellos derechos humanos que se aplican al contrato de trabajo y que, por ser
inherentes a la persona humana, poseen una denominación especial. También es utilizada
por la OIT.
Empleador
Dirigir la producción
Poder fundamental del empleador, vinculado con la organización libre de la empresa.
Deber de control y sanción
La primera: poder del empleador, derivado de su poder fundamental (punto 22), para
evaluar la asistencia, puntualidad, rendimiento, salud, seguridad de los bienes de la
empresa y de las personas que ella se desempeñan, y demás aspectos propios de la
producción. La segunda: constituye un poder concedido al empleador para urgir de modo
coactivo el cumplimiento de las obligaciones genéricas que surgen del vínculo laboral;
sinónimo de disciplinario.
Ius Variandi
Latín. Poder del empleador para modificar el contenido del contrato de trabajo en forma
unilateral.
Carácter funcional
Carácter con el cual deben ser ejercidos los poderes del empleador. Se determina según las
necesidades de la producción o actividad.
Razonabilidad
Carácter con el cual deben ser ejercidos los poderes del empleador. Límite específico a la
potestad de alterar las condiciones de trabajo en forma unilateral (art. 66 de la LCT).
Relación adecuada entre medios y fines.
Art. 66 LCT “Facultad de Modificar las Formas y Modalidades del Trabajo. El
empleador está facultado para introducir todos aquellos cambios relativos a la forma
y modalidades de la prestación del trabajo, en tanto esos cambios no importen un
ejercicio irrazonable de esa facultad, ni alteren modalidades esenciales del contrato,
ni causen perjuicio material ni moral al trabajador.
Cuando el empleador disponga medidas vedadas por este artículo, al trabajador le
asistirá la posibilidad de optar por considerarse despedido sin causa o accionar
persiguiendo el restablecimiento de las condiciones alteradas. En este último
supuesto la acción se substanciará por el procedimiento sumarísimo, no pudiéndose
innovar en las condiciones y modalidades de trabajo, salvo que éstas sean generales
para el establecimiento o sección, hasta que recaiga sentencia definitiva.”
Dignidad
Aspecto inherente a la persona humana y a su trabajo. Los poderes del empleador deben
ser ejercidos respetándola debidamente (art. 68 de la LCT).
“Art. 68 LCT Modalidades de su Ejercicio. El empleador, en todos los casos, deberá
ejercitar las facultades que le están conferidas en los artículos anteriores, así como la
de disponer suspensiones por razones económicas, en los límites y con arreglo a las
condiciones fijadas por la ley, los estatutos profesionales, las convenciones
colectivas de trabajo, los consejos de empresa y, si los hubiere, los reglamentos
internos que éstos dictaren. Siempre se cuidará de satisfacer las exigencias de la
organización del trabajo en la empresa y el respeto debido a la dignidad del
trabajador y sus derechos patrimoniales, excluyendo toda forma de abuso del
derecho.”
Condiciones especiales
Se trata de un límite específico al ejercicio de los poderes de modificación unilateral del
contrato de trabajo. Estos poderes no pueden alterar estas modalidades (art. 66 de la LCT).
Comunes
Principio de Buena Fe
“Art. 63 Principio de la Buena Fe. Las partes están obligadas a obrar de buena fe,
ajustando su conducta a lo que es propio de un buen empleador y de un buen
trabajador, tanto al celebrar, ejecutar o extinguir el contrato o la relación de trabajo.”
Este principio está presente en todo tipo de contratos (no solo los de trabajo) y en la
negociación colectiva.
Deber de colaboración
“Artículo 4.- Concepto de Trabajo. Constituye trabajo, a los fines de esta ley, toda
actividad lícita que se preste en favor de quien tiene la facultad de dirigirla, mediante
una remuneración. El contrato de trabajo tiene como principal objeto la actividad
productiva y creadora del hombre en sí.
Sólo después ha de entenderse que media entre las partes una relación de
intercambio y un fin económico en cuanto se disciplina por esta ley.”
“Art. 62 Las partes están obligadas, activa y pasivamente, no sólo a lo que resulta
expresamente de los términos del contrato, sino a todos aquellos comportamientos
que sean consecuencia del mismo, resulten de esta ley, de los estatutos
profesionales o convenciones colectivas de trabajo, apreciados con criterio de
colaboración y solidaridad.”
Deviene de la visión humanista que caracteriza al contrato de trabajo y se trata de un
criterio de apreciación que la ley establece respecto al comportamiento de las partes de la
relación de trabajo (art. 4 y 62 de la LCT). Es definido como la acción de trabajar con otra u
otras personas en la realización de una obra (RAE).
Deber de Solidaridad
Deviene de la visión humanista que caracteriza al contrato de trabajo y se trata de un
criterio de apreciación que la ley establece respecto al comportamiento de las partes de la
relación de trabajo (art. 4 y 62 de la LCT). Es definido como la adhesión a la causa o a la
empresa de otros (RAE).
Deber de Diligencia
“Art. 79 LCT Deber de Diligencia e Iniciativa del Empleador. El empleador deberá
cumplir con las obligaciones que resulten de esta ley, de los estatutos profesionales,
convenciones colectivas de trabajo y de los sistemas de seguridad social, de modo
de posibilitar al trabajador el goce íntegro y oportuno de los beneficios que tales
disposiciones le acuerdan. No podrá invocar en ningún caso el incumplimiento de
parte del trabajador de las obligaciones que le están asignadas y del que se derive la
pérdida total o parcial de aquellos beneficios, si la observancia de las obligaciones
dependiese de la iniciativa del empleador y no probase el haber cumplido
oportunamente de su parte las que estuviese en su cargo como agente de retención,
contribuyente u otra condición similar.”
“Art. 84 LCT Deberes de Diligencia y Colaboración. El trabajador debe prestar el
servicio con puntualidad, asistencia regular y dedicación adecuada a las
características de su empleo y a los medios instrumentales que se le provean.”
Las partes deben actuar de esta forma, manteniendo la puntualidad, asistencia regular,
dedicación adecuada, y cumpliendo con las obligaciones establecidas (art. 79 y 84 de la
LCT)
Protección de la Maternidad
“Art. 178.- Despido por Causa del Embarazo. Presunción. Se presume, salvo prueba
en contrario, que el despido de la mujer trabajadora obedece a razones de maternidad
o embarazo cuando fuese dispuesto dentro del plazo de Siete y Medio (7 y 1/2) meses
anteriores o posteriores a la fecha del parto, siempre y cuando la mujer haya
cumplido con su obligación de notificar y acreditar en forma el hecho del embarazo
así, en su caso, el del nacimiento. En tales condiciones, dará lugar al pago de una
indemnización igual a la prevista en el art. 182 de esta ley.”
La causa “Etcheverry, Juan Bautista c/ PEN s/ Amparo Ley 16.986” fue iniciada ante la
Justicia en lo Contencioso Administrativo Federal por un padre y una madre, ambxs
trabajadorxs de una empresa con más de mil empleados. Argumentaban que era necesario
que se reglamente el artículo, declarando la inconstitucionalidad por omisión reglamentaria
del art. 179 de la LCT. Luego del rechazo en primera instancia, la Cámara Contencioso
Administrativa Federal hizo lugar al planteo.
El artículo aludido establece en su parte final: “en los establecimientos donde preste
servicios el número mínimo de trabajadoras que determine la reglamentación, el empleador
deberá habilitar salas maternales y guarderías para niños hasta la edad y en las
condiciones que oportunamente se establezcan”
La norma, que forma parte del capítulo VII de la Ley de Contrato de Trabajo titulado
“Trabajo de Mujeres” tiene una sola destinataria: la mujer trabajadora.
Consecuentemente con su visión androcéntrica de las relaciones laborales y el mundo del
trabajo, al momento de su sanción, la LCT puso exclusivamente en cabeza de las mujeres
trabajadoras el cuidado de los hijos. Se trataba de un modelo donde el eje central en la vida
de las mujeres estaba signado por la dedicación a la familia y sus cuidados, siendo el
trabajo remunerado un eventual complemento.
Sin perjuicio de ello, la CSJN reconoce que aunque la LCT limita el derecho a la presencia
de trabajadoras en los establecimientos, reproduciendo su rol de exclusivas cuidadoras, las
leyes deben ser interpretadas con visión de futuro y con perspectiva de género y derechos
humanos. Por lo que entiende que no debe haber distinciones entre trabajadoras y
trabajadores con responsabilidades familiares, en consonancia con lo dispuesto por el
convenio 156 de la OIT, ratificado por Argentina.
La responsabilidad en las tareas de cuidado debe ser compartida entre padres y madres,
siendo responsabilidad de los Estados la eliminación de la carga desigual que impera.
En ese orden, afirma la CSJN, los Estados deben incluir entre los objetivos de su política
nacional el de permitir que las personas con hijos/as a su cargo, que desempeñen o deseen
desempeñar un empleo, ejerzan su derecho a hacerlo sin ser objeto de discriminación y sin
conflicto entre sus responsabilidades familiares y profesionales.
Ello, en virtud del mandato constitucional expreso, establecido en el art. 75 inc. 23, en el art.
11 la CEDAW y en los convenios de la OIT, entre otras normas internacionales incorporadas
a la misma.
Asimismo, se reconoce el derecho de los niños a ser cuidados, establecido en el art. 18 inc.
3ro. de la Convención de los Derechos del Niño.
Fallo Puig
La decisión se dio en los autos “Puig, Fernando Rodolfo c/ Minera Santa Cruz S.A. s/
despido”. En el caso, la Sala VI de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo confirmó
el rechazo al reclamo de la indemnización especial por despido por causa de matrimonio
promovido por el trabajador tras ser desvinculado sin expresión de motivos.
Los jueces de la causa, sobre la base de la doctrina plenaria del fuero, admitieron que tanto
los empleados varones como las empleadas mujeres tienen derecho a la indemnización del
artículo 182 de la LCT en caso de despido por causa de matrimonio, pero sostuvieron que la
presunción contenida en el artículo 181 sólo se aplica a los supuestos de trabajadoras
mujeres de manera que, para obtener el resarcimiento agravado, los varones deben probar
que la desvinculación obedeció al hecho de haber contraído enlace.
Contra ese pronunciamiento, el trabajador interpuso el recurso extraordinario, cuya
denegación dio origen a la queja en examen ante la Corte. El apelante sostuvo, entre otras
cuestiones que lo decidido “vulnera las garantías de igualdad y no discriminación y la
protección de la familia que cuentan con consagración constitucional así como en diversos
tratados internacionales de derechos humanos”.
El Máximo Tribunal discrepó con la Cámara laboral y concluyó que “no constituye derivación
razonada de las normas examinadas en los dos considerandos precedentes pues, como
quedó claramente expuesto, la ley no restringe su protección a las hipótesis de despido de
trabajadoras mujeres”.
“No hay en la literalidad de los arts. 180, 181 y 182 de la LCT (…) elemento alguno que
autorice a excluir de sus disposiciones al trabajador varón”, advirtió el Tribunal y destacó
que la propia ley “prohíbe cualquier tipo de discriminación entre los trabajadores por motivo
de sexo”.
La Corte sostuvo, además, la restricción consagrada en el fallo apelado se revela como
“producto de una inteligencia regresiva”, sin consideración a las nuevas condiciones y
necesidades de la comunidad.
EL SALARIO
Es la contraprestación que percibe el trabajador por poner su tiempo a disposición del
empleador para la realización de una obra o la prestación de un servicio (lo debe percibir
incluso aunque no se hubiera realizado la prestación de servicios, por la mera puesta a
disposición). Este no podrá ser inferior al salario mínimo vital (art. 103). Por otra parte el
trabajo no se presume gratuito (art. 115)
La remuneración puede fijarse en dinero o en especie. La parte en especie no podrá
superar al 20% del total de las remuneraciones y deberá expresarse en dinero (tener una
valuación que permita corroborar el porcentaje) (art. 107)
Naturaleza jurídica
El salario constituye el medio de sustento del trabajador y de su familia, por lo que tiene
carácter alimentario. Se debe percibir en forma íntegra, oportuna y asegurar su libre
disposición.
El pago del salario es una obligación estipulada en favor del empleador en la ley de contrato
de trabajo. Esta obligación tiene 2 requisitos: Debe cumplirse íntegramente, no vale un
cumplimiento parcial de la obligación (integralidad). La otra se encuentra vinculada con el
tiempo, el salario no puede ser pagado en cualquier momento, sino que debe ser
oportunamente, lo que quiere decir que para los mensualizados dentro del cuarto día del
mes (oportunidad).
3. Prestaciones complementarias:
● Habilitación (art. 110) o Participación en utilidades (art 111): se computa en
proporción a las ganancias o utilidades netas del empleador. Generalmente se
abonan anualmente ya que suponen la confección previa del balance del
establecimiento.
● Gratificaciones → Su pago no está sujeto a ninguna condición (a diferencia del
anterior o las comisiones).
● Premios → por superar un determinado nivel de rendimiento.
● Viáticos (art. 106) → son gastos en los que incurre el trabajador con motivo de
viajes.
● Propinas (art. 113) → son sumas de dinero que un tercero entrega al trabajador por
la prestación de un servicio.
Conceptos remunerativos
Constituyen todo ingreso (en dinero o especie) que sea retribución o compensación, o con
motivo de su actividad personal (como producto de su trabajo), en concepto de:
● Sueldo
● SAC
● Honorarios
● Comisiones
● Participación en las ganancias
● Habilitación
● Propinas: son remunerativas si son habituales (es decir, no accidentales y estén
correspondidas con el trabajo del empleado) y no prohibidas.
● Gratificaciones y suplementos adicionales que tengan el carácter de habituales y
regulares: Son un pago voluntario y subjetivo del empleador, que puede ser otorgado
por diferentes motivos. En la medida que sean regulares y habituales, serán
consideradas como remuneratorias y computadas en el mes de pago. En caso de
que posean una periodicidad de pago mayor a un mes, para liquidar sueldo anual
complementario, indemnización por antigüedad y vacaciones, se computará solo la
incidencia mensual, es decir, la parte que se devengó en el mes (o meses) en
cuestión. Si la gratificación es extraordinaria, será un concepto no remuneratorio. Y
si es con motivo de extinción del contrato de trabajo, se computará como
remuneratorio el monto igual al promedio anual de las percibidas anteriormente en
forma habitual y regular.
● Viáticos y gastos de representación: constituirán remuneración cuando el trabajador
NO esté obligado a presentar los comprobantes para su reintegro, ya que
significaran para el trabajador una ganancia extra que se adicionara a su
remuneración básica. En cambio, si dichos gastos son reintegrados al trabajador a
cambio de la rendición con comprobantes, no constituyen un concepto
remuneratorio.
● Casa-habitación: acá hablamos de la vivienda otorgada por el empleador al
trabajador para que resida mientras desempeña sus actividades. En general se trata
de un concepto remuneratorio, que tiene tope, para que el empleador no haga
abuso, y el trabajador pueda recibir la mayor parte de su retribución en dinero. Se
considerará no remuneratorio cuando se trate de una propiedad del empleador
entregada en comodato ubicada en barrios circundantes al lugar de trabajo, o
cuando el empleador contrate la locación de vivienda (alquile una propiedad) en
caso de que sea muy difícil ubicar al trabajador en ese lugar, porque es un lugar
inhóspito.
● Otras, percibida por servicios ordinarios o extraordinarios prestados en relación de
dependencia.
Conceptos no remuneratorios
No resultan del trabajo del empleado, sino que se corresponden con otras razones y
hechos. Son:
● Asignaciones familiares
● Beneficios Sociales
● Indemnizaciones por extinción de contrato
● Indemnizaciones por vacaciones no gozadas
● Indemnizaciones por incapacidad permanente provocada por accidente del trabajo o
enfermedad profesional
● Subsidio por suspensiones derivadas de falta o disminución de trabajo o fuerza
mayor (artículo 223 bis): también llamada prestación por desempleo, se determina
libremente por el acuerdo individual o colectivo (entre el empleador y el gremio
correspondiente, lo cual debe ser homologado). Al ser no remunerativo esta
prestación no está sujeta a aportes o contribuciones, lo único que se le exige al
empleador es mantener los aportes y contribuciones de la obra social, para que
tenga la prestación medica el trabajador y su familia.
● Asignaciones pagadas en concepto de becas
● Gratificaciones vinculadas al cese de la relación laboral: será no remuneratorio el
importe que exceda el promedio anual de las asignaciones percibidas anteriormente
y en forma habitual y regular.
Beneficios sociales
Son prestaciones no remunerativas, no dinerarias, no acumulables ni sustituibles en dinero,
que brinda el empleador al trabajador, por sí o por medio de terceros, que tienen como
objetivo mejorar la calidad de vida del trabajador o de su familia a cargo. Son:
● Servicio de comedor de empresas
● Reintegro de gastos médicos (previa presentación de los comprobantes)
● Provisión de ropa de trabajo y equipamiento para uso exclusivo en la actividad de la
empresa
● Reintegro de gastos de guarderías (con comprobantes)
● Provisión de útiles escolares al inicio del periodo escolar
● Cursos y seminarios pagos
● Pago de gastos de sepelio de familiares.
El empleador no está obligado a otorgarlas, pero si decide hacerlo debe darlas a todos los
trabajadores, no a un grupo específico o determinado.
El fallo se enmarca dentro de la línea doctrinaria que el Máximo Tribunal de la Nación viene
sentando desde sus pronunciamientos en las causas “González, Martín Nicolás c/
POLIMAT S.A. y Otro” -en el que declaró la inconstitucionalidad de los Decretos N° 1.273/02,
2.641/02 y 904/03 dictados por el Poder Ejecutivo Nacional, en cuanto habían establecido el
pago de “sumas no remunerativas”-; y en la causa “PEREZ, Aníbal c/ Disco S.A.”, en la que
declaró la inconstitucionalidad del hoy derogado artículo 103 bis, inciso c) de la Ley de
Contrato de Trabajo, señalando así el carácter salarial de los vales de alimentarios y
canastas de alimentos, que la norma mencionada definía como beneficios sociales no
remunerativos.
El fallo bajo análisis hace particular hincapié en la definición amplia que el artículo 1° del
Convenio N° 95 de la OIT, ratificado por nuestro país, adopta sobre el concepto de salario,
caracterizando al mismo como “la remuneración o ganancia, sea cual fuere su
denominación o método de cálculo, siempre que pueda evaluarse en efectivo, fijada por
acuerdo o por la legislación nacional, y debida por un empleador a un trabajador en virtud de
un contrato de trabajo, escrito o verbal, por el trabajo que este último haya efectuado o deba
efectuar o por servicios que haya prestado o deba prestar”.
En virtud de la doctrina judicial que desde hace algunos años viene adoptando la Corte
Suprema de Justicia de la Nación, al momento de analizar si determinado concepto reviste o
no naturaleza remuneratoria, no debemos agotar nuestro estudio en los artículos 103 y 103
bis de la Ley de Contrato de Trabajo ni en el artículo 6 de la Ley N° 24.241, sino que
debemos incluir en el análisis al Convenio N° 95 de la OIT.
No podemos dejar de pasar por alto la importante gravitación que el fallo que analizamos
puede tener sobre todos aquellos acuerdos salariales en los que las partes acuerdan el pago
de una suma “no remunerativa”, -generalmente acotada a un plazo determinado- que luego
se va incorporando paulatinamente al salario. Este tipo de sumas se observa en la gran
mayoría de acuerdos de recomposición salarial.
Dicha herramienta viene siendo utilizada por las comisiones paritarias desde la salida de la
convertibilidad, como un mecanismo para morigerar el costo final de los aumentos;
alternativa que ha sido aceptada por el Ministerio de Trabajo, y que no ha recibido
cuestionamientos de fondo por parte de la Administración Federal de Ingresos Públicos.
Estos empleadores se ven obligados, por un lado, a dar estos incrementos y pagar esas
sumas “no remunerativas” a su personal dentro de convenio; pero, por otro lado, se
encuentran expuestos a una contingencia laboral que en muchos casos puede tener un
impacto económico de considerables proporciones, ya que se les podría llegar a imputar
que están abonando “salarios no registrados”.
Es decir que, por cumplir con sus obligaciones legales y convencionales, el empleador
puede terminar expuesto a juicios laborales por “salarios no registrados” y además a que la
AFIP le formule cargos por los aportes y contribuciones omitidos sobre dichas sumas.
Así, por ejemplo, una ley que, sin restarle naturaleza salarial a las sumas que se acuerden en
el marco las negociaciones colectivas, establezca un régimen de exención o de reducción de
aportes y contribuciones durante un período determinado en el tiempo, podría ser una
solución a esta situación a la que hoy se encuentran expuestos los empleadores.
El Tribunal declaró inconstitucional el art. 103 bis inc. c) de la Ley de Contrato de Trabajo
(texto según ley 24.700), en cuanto niega naturaleza salarial a los vales alimentarios, pues
su texto no proporciona elemento alguno que, desde el ángulo conceptual, autorice a
diferenciar a la concesión de los vales alimentarios asumida por el empleador de un mero
aumento de salarios adoptado a iniciativa de éste, ni tampoco surge de las alegaciones de
la demandada ni de las circunstancias del proceso.
La naturaleza remuneratoria se basa en lo previsto en el Convenio 9 OIT, con jerarquía legal
de acuerdo a lo establecido en el art. 75 de la Constitución Nacional y dado que no puede
considerarse a la alimentación como un beneficio social, sino que esta debe ser asegurada
dignamente por el salario.
Los jueces Highton de Nolasco, Fayt y Argibay consideraron que llamar a los vales
alimentarios como “beneficios sociales” lleva a mutar al trabajador en beneficiario y al
empleador en beneficiador, suplantar como causa del crédito o ganancia al contrato de
empleo por un acto del empleador ajeno a este último e introducir en un nexo oneroso para
ambos celebrantes una suerte de prestación gratuita por parte del empleador, todo lo cual
traduce una calificación poco afortunada, carente de contenido y un evidente contrasentido.
Entendieron que la base de cálculo de la indemnización salarial debe guardar razonable
proporción con los elementos que componen la remuneración, por lo que la indebida
exclusión del vale alimentario dentro de la noción de salario que brindan tanto las normas
internacionales ratificadas por la República Argentina, como la propia legislación nacional,
afecta el principio constitucional de retribución justa, que se encuentra en correlación con la
base remuneratoria que compone el derecho, también constitucional, a la protección contra
el despido arbitrario.
● Frente a los acreedores del empleador: el empleador puede llegar a una situación
límite, pudiendo presentarse a concurso preventivo o declararse en quiebra.
1. Dentro del concurso preventivo (no está en la quiebra) para proteger al trabajador
existe lo que se denomina pronto pago laboral, una medida por la cual el empleado
puede solicitar al síndico del concurso que analice toda la documentación laboral en
donde aparecen los créditos que el empleador le debe al trabajador. Luego de la
verificación de la certeza de la deuda y la aprobación del juez, se le paga al
trabajador (si se cuenta con los fondos, ya que de otra forma el trabajador tendrá
que recurrir a verificar su crédito).
2. En presencia de una quiebra el trabajador puede acceder a un privilegio especial o
general para proteger sus derechos. Los créditos laborales tienen privilegios y
preferencia frente a otros acreedores del empleador.
Disposiciones de tutela del pago del salario: el lugar de pago,es uno de los elementos de la
obligación de pagar y de recibir, hacen a la tutela de las dos partes. Ej: el salario no puede
pagarse cerca de lugares que vendan bebidas alcohólicas.
Sin salario no hay contrato de trabajo, esta es una obligación de dar y es esencial.
Sueldo básico, normalmente está estipulado por el convenio colectivo de trabajo pero
también puede aparecer como SMVyM o puede ser una arreglo entre trabajador y
empleado.
Viáticos
Los viáticos serán considerados como remuneración, excepto en la parte efectivamente
gastada y acreditada por medio de los comprobantes, salvo lo que en particular dispongan
los estatutos profesionales y los convenios colectivos de trabajo.
Regulado en el art 106, esto puede ser o no una ventaja patrimonial. Lo será cuando es una
suma establecida por convenio colectivo que las partes acuerdan a pagarse en este caso es
parte del salario. No será una ventaja patrimonial cuando se reintegra por recibo, contra
recibo y por un monto determinado el viático es no remunerativo y no salarial.