Derecho Romano en La Monarquia
Derecho Romano en La Monarquia
Derecho Romano en La Monarquia
SEMESTRE 2023- II
Cusco – Perú
2024
PRESENTACION
El propósito del presente trabajo es dar ha conocer al los presentes lectores los
fundamentos y raíces de los fundamentos jurídicos peruanos contenidos en su
mayoría en el Derecho Romano y vinculados al desarrollo sistemático y actualizado en
materias jurídicas vinculadas al derecho público y al derecho privado y a las nuevas
especialidades incorporadas por los procesos de la globalización y los cambios
tecnológicos.
Además, la visión histórica que nos brinda el derecho romano es el punto de partida de
una visión jurídica histórica general. Sin embargo, cabe mencionar que la historia del
derecho romano no es la historia del derecho, pero sí, parte importante de ella,
también podemos considerar que el derecho romano es piedra angular de nuestro
derecho actual.
EL DERECHO ROMANO EN LA MONARQUIA
Dice la leyenda que Ascanio, hijo del héroe troyano Eneas (hijo de Venus y de
Anquises), habría fundado la ciudad de Alba Longa sobre la orilla derecha del río
Tíber. Sobre esta ciudad latina reinaron muchos de sus descendientes hasta llegar a
Numitor y a su hermano Amulio. Éste destronó a Numitor y, para que no pudiese tener
descendencia que le disputase el trono, condenó a su hija, Rea Silvia, a ser
sacerdotisa de la diosa Vesta para que permaneciese virgen.
A pesar de ello, Marte, el dios de la guerra, engendró en Rea Silvia a los mellizos
Rómulo y Remo. Cuando éstos nacieron y para salvarlos fueron arrojados al Tíber
dentro de una canasta que encalló en la zona de las siete colinas situada cerca de la
desembocadura del Tíber, en el mar.
Una loba, llamada Luperca, se acercó a beber y les recogió y amamantó en su guarida
del Monte Palatino hasta que, finalmente, les encontró y rescató un pastor cuya mujer
los crió. Ya adultos, los mellizos repusieron a Numitor en el trono de Alba Longa y
fundaron, como colonia de ésta, una ciudad en la ribera derecha del Tíber, en el lugar
donde habían sido amamantados por la loba, para ser sus Reyes.
Se dice que la loba que amamantó a Rómulo y Remo fue su madre adoptiva humana.
El término loba, en latín lupa, también era utilizado, en sentido despectivo, para las
prostitutas de la época.
LA MONARQUIA ROMANO
La Monarquía romana fue la primera de las tres etapas en las que se dividió el
desarrollo del gobierno de la Antigua Roma. Durante el período monárquico, entre el
753 a. C. y el 509 a. C., gobernaron siete reyes.
Los siete monarcas de Roma se destacaron por emplear una gran fuerza militar que
les permitió ocupar más territorios y ampliar su imperio. Además, a través de alianzas
estratégicas con poblaciones cercanas pudieron incrementar el número de tropas.
La tercera y última etapa fue el Alto Imperio que tuvo lugar entre el 27 a. C. y el 476 d.
C. Se caracterizó por un gobierno autócrata que decidía sin tener en cuenta leyes ni
poderes que lo regulen.
LA DISNASTIA DE LA MONARQUIA ROMANA
La dinastía romana gobernó durante 244 años y estuvo conformada por siete
monarcas. El primero fue Rómulo, quien fundó la ciudad de Roma. El resto de los seis
reyes fueron elegidos por el senado en representación del pueblo, y no por el linaje de
sangre.
Rómulo. Gobernó entre el 753 y el 716 a. C. Fue el monarca que fundó la ciudad
de Roma y que implementó el sistema de gobierno monárquico. Realizó grandes
atrocidades por el afán de poblar su territorio, convocando a diversos pueblos y
grupos, como los esclavos, los prófugos y los refugiados, a través del engaño y por
la fuerza.
Numa Pompilio. Gobernó entre el 716 y el 674 a. C. Fue un monarca que se
interesó por las instituciones legales, religiosas y que logró instruir a la población
para rendir culto a sus dioses. Realizó ajustes en el calendario planteado por
Rómulo, como agregar los meses de enero y de febrero. Además, construyó el
templo de Jano.
Tulio Hostilio. Gobernó entre el 674 y el 642 a.C. Fue un guerrero al estilo de
Rómulo y se alejó de la doctrina y del culto a los dioses que había fomentado su
antecesor, Numa Pompilio. Su afán en el arte de la guerra, en especial contra los
albanos (sabinos), hizo que Roma se convirtiera en la primera potencia de la
región.
Anco Marcio. Gobernó entre el 642 y el 617 a. C. Fue un monarca religioso y
pensador que supo fomentar el comercio con los pueblos vecinos. Construyó
prisiones, murallas, puentes y el puerto de Ostia en el río Tíber que permitió que
Roma se convirtiera en un centro de intercambio de mercancías.
Tarquinio Prisco. Gobernó entre el 617 y el 578 a. C. Fue el primer rey de origen
etrusco y logró ganar numerosas guerras que le permitieron ampliar el territorio
romano. Introdujo el arte y la religión etruscos en la cultura romana, por lo que se
considera a ese período como el más ilustrado de la etapa monárquica. Además,
construyó una red de alcantarillado, el forum romano, el circo máximo y los
cimientos del templo de Júpiter.
Servio Tulio. Gobernó entre el 578 y el 534 a. C. Fue uno de los monarcas más
apreciados por la población, entre otras cuestiones, porque elaboró una nueva
constitución que reconocía la distinción entre clases sociales según su nivel de
riqueza. Llevó a cabo el primer censo de la historia y el derecho a voto fue
establecido según la riqueza económica, por lo que el poder seguía reservado a
una elite.
Tarquino el Soberbio. Gobernó entre el 534 y el 509 a. C. Fue un monarca de
origen etrusco que ejerció su poder y control mediante la violencia y el terror de
una manera sin precedentes en la historia de la Antigua Roma. Enloqueció y
ejecutó a varios senadores. Su despotismo fue la razón por la que cayó el sistema
monárquico y no hubo ningún otro rey luego de su mandato. Entre sus importantes
obras logró finalizar la construcción del templo a Júpiter.
El rey. Era la máxima autoridad que ocupaba el rol de sacerdote supremo, juez y
jefe militar. El rey era elegido por la asamblea popular con la intervención del
Senado.
La asamblea popular. Estaba integrada por los ciudadanos y era convocada por
el rey para aprobar o rechazar las leyes por aclamación unánime. La convocatoria
tenía lugar en el Capitolio.
El senado. Estaba conformado por trescientos ancianos patricios padres de familia
que cumplían la función de aconsejar al rey y de presentar a los candidatos para la
sucesión al trono. Consistía en un cargo vitalicio, es decir, que lo ocupaban
durante toda la vida.
Los patricios u hombres libres. Conformaban la clase aristocrática que tenía plenos
derechos de ciudadanos, eran descendientes de los fundadores de Roma.
Los plebeyos. Conformaban la clase más numerosa integrada por extranjeros,
libertos, vagabundos y habitantes de las ciudades Se dedicaban a la agricultura, al
comercio, la industria y pagaban impuestos al gobierno a pesar de que estaban
privados de varios derechos.
Los esclavos. Conformaban una clase social privada de sus derechos de manera
total, hasta el punto de ser tratados como objetos. Eran prisioneros de guerra
comprados en los mercados para ser usados en trabajos forzados.