El Delito de Feminicidio (2024)

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 32

Implementada por

Con el apoyo de
Cofinanciado por
la Unión Europea

Cuadernillo de trabajo N.º 2

El Delito de Feminicidio:
Problemas en su aplicación
práctica y posibles soluciones

Documento de trabajo
El Delito de Feminicidio:
Problemas en su aplicación práctica y posibles soluciones
Documento de Trabajo

Poder Judicial del Perú


Av. Paseo de la República S/N Palacio de Justicia, Cercado, Lima – Perú
T: (51-1) 410 1010
http://www.pj.gob.pe/

Programa Presupuestal orientado a Resultados de Reducción de la Violencia contra la Mujer en el Poder Judicial
Av. Paseo de la República 291, piso 6, oficina 607, Cercado de Lima - Perú
T: (51-1) 410 1010 anexo 11341
https://www.pj.gob.pe/wps/wcm/connect/pporrvcm/s_rrvcm/as_inicio

Elaboración de contenidos
Julio Rodríguez Vásquez, Profesor de Derecho e Investigador del Grupo de Derecho, Género y Sexualidad de la PUCP
Av. Universitaria 1801, San Miguel - Lima, Perú
T: (51-1) 626 2000
https://www.grupo.degese@pucp.edu.pe

Diseño y diagramación
Contexto Consultores
Lima - Perú
https://www.contextogyc.com

Fotos
@comvomujer / @Shutterstock

La elaboración y publicación de este documento ha sido posible gracias al apoyo técnico brindado por la
cooperación alemana para el desarrollo, implementada por la Deutsche Gesellschaft für Internationale
Zusammenarbeit (GIZ) GmbH y con el cofinanciamiento de la Unión Europea a través del Proyecto Fortaleciendo
la prevención y la justicia frente a la violencia de género contra las mujeres – Componente “Fortalecimiento del
Sistema Especializado de Justicia de Género - ForSNEJ” liderado por el Poder Judicial.

El contenido de esta publicación es responsabilidad exclusiva de los autores y no necesariamente refleja los
puntos de vista de la Unión Europea.

Impresión
Impresso Gráfica S.A.
Av. Mariscal La Mar 585 - Miraflores

Hecho el depósito legal en la Biblioteca Nacional del Perú Nº xxxxxxxxx


Todos los derechos reservados. Se autoriza la reproducción total o parcial de esta publicación, bajo la condición de
que se cite la fuente.

Mayo 2024
1ra Edición impresa
Índice
01 Presentación -pág 03

02 Introducción -pág 04

03 Cuestiones preliminares -pág 05

04 Planteamiento del problema -pág 07

05 Abordaje de los problemas


identificados y posibles soluciones -pág 11

5.1. El elemento por su condición de tal -pág 11

5.2. Los elementos de contexto -pág 15

5.3. El sujeto pasivo y el sujeto activo del


tipo penal de feminicidio -pág 20

5.4. Problemas concursales relacionados


al tipo penal de feminicidio -pág 22

06 Conclusiones -pág 26

07 Bibliografía -pág 27
01
Presentación

La tipificación del delito de feminicidio en el Código Penal peruano, ha significado un aporte normativo
relevante en la comprensión de la violencia ejercida contra las mujeres en un contexto de discriminación
estructural grave y complejo. Pese a ello, su incorporación ha traído consigo un conjunto de cuestionamientos
relacionados con su fundamento, interpretación y elementos para su configuración.

La jurisprudencia en torno a este tipo penal, ha sido variante. Se ha ido perfeccionando con el tiempo,
nutriéndose de doctrina especializada en el tema, investigaciones y legislación comparada. A la fecha, se
vienen sumando esfuerzos para lograr uniformidad de los criterios interpretativos necesarios para asegurar
un abordaje adecuado en este tipo de casos y en el que incorpore el enfoque de género como hilo conductor
de análisis.

En este contexto, y en el marco del Proyecto “Fortaleciendo la prevención y la justicia frente a la violencia de
género contra las mujeres” - Componente “ForSNEJ”, que se viene ejecutando con el apoyo de la Unión
Europea y la cooperación alemana para el desarrollo, implementada por la GIZ, se ha considerado importante
elaborar un documento de trabajo que recoja las bases para la interpretación del delito de feminicidio, formule
las problemáticas suscitadas y plantee las posibles alternativas de solución.

En ese sentido, se pone a disposición este valioso aporte académico elaborado por el docente e investigador,
Julio Rodríguez Vásquez, abogado experto en esta temática. Se espera que esta publicación contribuya a mejorar
la comprensión de este delito, y proporcione las herramientas necesarias para que todos los y las operadoras el
sistema especializado de justicia, desde sus respectivos roles aborden adecuadamente este delito.

Elvia Barrios Alvarado


Jueza Suprema Titular
Coordinadora Nacional del Programa Presupuestal
orientado a Resultados para la reducción de la violencia
contra las mujeres del Poder Judicial - PPoR1002

Presentación Pág. 03
02
Introducción

El presente documento de trabajo plantea los problemas y las posibles soluciones en torno a una cuestión
práctica que enfrentan diariamente operadores y operadoras de justicia del Sistema Nacional Especializado
de Justicia para la protección y sanción de la violencia contra las mujeres e integrantes del grupo familiar
(SNEJ). Se trata de la interpretación y abordaje del delito de feminicidio.

El delito de feminicidio se encuentra regulado en el artículo 108-B del Código Penal. La jurisprudencia nacional
evidencia problemas respecto a sus elementos. En esta medida, existen distintas posturas sobre cómo
interpretar el elemento por su condición de tal, el sujeto pasivo, el sujeto activo, los elementos de contexto y
el dolo. Además, la jurisprudencia nacional también evidencia problemas ante casos en los que el delito de
feminicidio se superpone, o aparente superponerse, con otros delitos, como el homicidio por emoción
violenta, las lesiones, los homicidios calificados y la violación sexual.

El análisis de la jurisprudencia nacional revela que muchos de los problemas interpretativos antes indicados
se originan en la aplicación incorrecta del enfoque de género o, simplemente, en su no aplicación. En este
escenario, el presente documento de trabajo aborda la interpretación de los elementos del tipo de feminicidio,
tomando como base su naturaleza de violencia basada en género contra las mujeres y la evolución de la
jurisprudencia de la Corte Suprema en la materia.

Según lo anterior, el documento se estructura en tres grandes partes:

Primera: Segunda:
Plantea la base para la interpretación del Presenta el planteamiento del problema.
delito y responde a la interrogante sobre
cuáles son los bienes jurídicos que protege. Tercera:
Aborda cada uno de los problemas identificados.

Introducción Pág. 04
03
Cuestiones
preliminares

La interpretación en materia penal está estrechamente vinculada con el principio de legalidad y,


específicamente, con uno de sus subprincipios o garantías: la tipicidad. En este sentido, es frecuente que la
doctrina penal más tradicional señale que la garantía de tipicidad exige que la interpretación en Derecho penal
se limite a reconocer el significado más restrictivo acorde con el texto del precepto penal.

Sin embargo, la doctrina más contemporánea ha identificado severos problemas con este planteamiento.
En primer lugar, como lo indicó el Tribunal Constitucional del Perú, el lenguaje, como sistema de
1 códigos a través del cual se pretende fijar el límite de la función interpretativa, no es inequívoco o
exacto. Así, el citado tribunal indicó, en la sentencia recaída en el expediente 010-2002-AI/TC, que “la
naturaleza propia del lenguaje, con sus características de ambigüedad y vaguedad, admiten cierto
grado de indeterminación, mayor o menor, según sea el caso”, ello debido a que “ni siquiera las
formulaciones más precisas, las más casuísticas y descriptivas que se pueden imaginar, llegan a dejar
de plantear problemas de determinación en algunos de sus supuestos” (2003, fundamento 46). Por
este motivo, “descubrir” el sentido de la norma penal solo a partir de su “tenor literal” es una tarea
imposible.

En segundo lugar, la idea de que la interpretación literal se deba imponer, pese a que sea
2 irrazonablemente restrictiva o ilógicamente extensiva, no se colige con los estándares jurídicos
contemporáneos. En esta línea, se plantea que una interpretación respetuosa de la garantía de
tipicidad debe tomar el texto literal como base, pero, además, debe ser un medio para que la norma
penal alcance su objetivo de protección de bienes jurídicos (Montoya, 2020, pp.129-134). Esta
exigencia es la que permitirá escoger qué interpretación es la correcta. Por el contrario, el texto solo
será el “punto de partida” para la interpretación (Silva, 2006, p.381).

En síntesis, la interpretación de los elementos de un tipo penal, como el feminicidio, no debe limitarse
a un análisis restrictivo de los criterios gramaticales empleados por el legislador. La interpretación
constituye una tarea por la que se le asigna un sentido al texto legal, lo que se debe realizar
tomando en cuenta, sobre todo, el objeto de protección de la norma (Meini, 2018, p.164).

Sobre la base de lo antes dicho, ¿cuál es el objeto de protección de la norma penal que prohíbe el feminicidio?
Dicho de otro modo, ¿qué bien o bienes jurídicos protege? De acuerdo con el Acuerdo Plenario
01-2016/116-CJ, la norma penal que prohíbe el feminicidio protege la vida. Esta postura, sin embargo, no
explica por qué el tipo penal no se limita a requerir que se ponga en peligro la vida -mate- a la víctima, sino que
exige que este actuar sea desencadenado por la condición de mujer de la víctima. Tampoco responde a la
naturaleza del feminicidio como una forma de violencia basada en género.

Cuestiones preliminares Pág. 05


No obstante, el Acuerdo Plenario 01-2016/116-CJ reconoció, implícitamente, que el injusto del feminicidio va
más allá de la puesta en peligro o lesión a la vida humana independiente. Así, la Corte Suprema, en dicha
ocasión, admitió lo siguiente:

i) el feminicidio es una forma de violencia de género o, en los términos de la Convención Belén Do Pará,
violencia basada en género contra las mujeres; ii) el feminicidio es un mecanismo social que refuerza la
situación de subordinación de las mujeres; iii) el feminicidio es un supuesto de discriminación contra la mujer
(2017c, fundamentos 1-7).

La conexión lógica entre estas tres características del feminicidio ha sido detallada por el Comité para la
Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (Comité CEDAW, en adelante) en la Recomendación General
N°35. Así, el Comité CEDAW resaltó que el feminicidio es una forma de violencia de género contra las mujeres
(2017, fundamento 34) y que, como tal, es uno de los medios a través de los cuales “se perpetúa la posición
subordinada de la mujer con respecto al hombre y sus papeles estereotipados” (2017, fundamento 10). Dicho
de otro modo, el feminicidio, como toda forma de violencia basada en género contra las mujeres, tiene un
resultado lesivo particular: mantiene vigente una sociedad que se estructura sobre la base de roles y
estereotipos de género que subordinan a las mujeres frente a los hombres. Este efecto es, evidentemente,
discriminador y, como lo sostiene el Comité CEDAW, constituye un “grave obstáculo para el logro de la
igualdad sustantiva entre hombres y mujeres” (2017, fundamento 10).

Así, el carácter discriminador del feminicidio revela que este delito tiene en el centro del plus de
desvalor, que lo diferencia del homicidio común, la afectación a la igualdad material de género. Por
tanto, si bien el Acuerdo Plenario planteó que el feminicidio es un delito mono-ofensivo que protege la
vida humana independiente, su fundamentación permite reconocer sin problemas que se produce una
afectación adicional a la igualdad material. Entonces, el delito de feminicidio es uno pluriofensivo.

El carácter pluriofensivo ha sido sistemáticamente reconocido por la jurisprudencia de la Corte Suprema


posterior al Acuerdo Plenario. Así, por ejemplo, la Sala Penal Permanente, en el R.N.453-2019/Lima Norte,
indicó lo siguiente:

Octavo. El delito de feminicidio […] es un delito pluriofensivo, pues protege, de forma general, los bienes
jurídicos igualdad- material- y vida; igualdad porque -ampliando la interpretación establecida en el Acuerdo
Plenario 001-2016/CCJ-116- busca combatir los actos de discriminación estructural que sufren las mujeres y
pretende proscribir los estereotipos de género (2019c, fundamento octavo).

Así, la Sala Penal Transitoria, en la ejecutoria suprema del 2 de marzo de 2022 recaída en R.N.154-2020-Lima
Sur, indicó que el feminicidio es un delito pluriofensivo, ya que protege la vida y la igualdad material (2022a,
fundamento 19).

Finalmente, se debe indicar que no solo la jurisprudencia actual de la Corte Suprema reconoce que el tipo
penal del feminicidio protege la vida y la igualdad material. El Tribunal Constitucional del Perú, en la sentencia
del 5 de marzo de 2020 recaída en el expediente 03378-2019-PA/TC, indicó que el delito de feminicidio
“refuerza el proceso de discriminación estructural de las mujeres” y, por tanto, “constituye un acto
discriminatorio” (2020, fundamentos 71-72).

Cuestiones preliminares Pág. 06


04
Planteamiento
de los problemas

El feminicidio se regula en el artículo 108-B del siguiente modo:

Artículo 108-B

Será reprimido con pena privativa de libertad no menor de veinte años el que mata a una mujer
por su condición de tal, en cualquiera de los siguientes contextos:
1. Violencia familiar.
2. Coacción, hostigamiento o acoso sexual.
3. Abuso de poder, confianza o de cualquier otra posición o relación que le confiera autoridad al agente.
4. Cualquier forma de discriminación contra la mujer, independientemente de que exista o haya
existido una relación conyugal o de convivencia con el agente (...).

Para comprender los problemas prácticos que plantea la interpretación del feminicidio, se tomó como base un
estudio realizado en 2022 de la evolución de la jurisprudencia de la Corte Suprema sobre la materia
(Rodríguez, 2022). Para evidenciar estos problemas prácticos, se han diseñado casos-tipo:

Caso 1

“Ana” es una mujer que ocupa un cargo de dirección en una empresa trasnacional, por lo que tiene poder
y dinero. “Bernardo” trabaja en la misma empresa de “Ana” como encargado de limpieza. Una noche,
mientras “Ana” se encontraba sola en su oficina trabajando, “Bernardo” la ataca con el objetivo de violarla.
En esas circunstancias, “Bernardo” asfixia a “Ana” y luego la viola. “Ana” muere producto de la asfixia.

“Bernardo” no presentaba antecedes por delitos contra la libertad sexual, ni tampoco había
cometido un acto de violencia contra la mujer previo. De acuerdo con diversos testimonios,
“Bernardo” mantenía buenas relaciones interpersonales con su madre, sus hermanas y sus
vecinas. El Ministerio Público no ha logrado recabar ningún medio de prueba que vincule a
“Bernardo” con algún compartimiento o ideas misógina previa al hecho.

Preguntas: ¿“Bernardo” ha matado a “Ana” por su condición de tal?

De acuerdo con la jurisprudencia de la Corte Suprema, la interpretación del elemento por su condición de tal
puede generar las siguientes alternativas:

1 2 3

Matar por su condición de tal a Matar por su condición Matar por su condición de
una mujer implica que el autor de tal a una mujer tal a una mujer implica
Alternativa de tenga mayor poder con la víctima, implica que el autor odie, hacerlo en un contexto de
interpretación de modo que existe una relación desprecie o menosprecie imposición de estereotipos
asimétrica de poder entre ambos. a las mujeres. de género subordinantes.

Planteamiento de los problemas Pág. 07


No se constató el elemento No se acreditó el elemento por Se mató por su condición de
por su condición de tal, ya su condición de tal, ya que no se tal a “Ana”, ya que se le
que “Ana” presentaba mayor probó que “Bernardo” odia a impuso el estereotipo de
poder que “Bernardo”. Por las mujeres o las menosprecia. género “las mujeres son
Calificación tanto, el hecho no califica Por tanto, el hecho no califica objetos para el placer sexual”.
del Caso 1 como feminicidio, sino como como feminicidio, sino como Por tanto, el hecho califica
homicidio calificado. homicidio calificado. como feminicidio agravado.

Caso 2

“María” estuvo casada con “Piero” por 10 años. Ambos tienen una posición económica buena y,
durante la relación, no se presentó algún episodio de violencia entre ambos. “María” y “Piero” se
divorcian y abandonan cualquier tipo de relación o contacto. “Piero” se encuentra con “María” en
una fiesta luego de varios meses. En ese momento, un amigo le informa que “María” vende, a través
de una conocida página web, fotografías y videos de contenido sexual. “Piero”, enojado, se aproxima
a “María” y le dispara con su revolver. “María” muere.
Caso: El Ministerio Público no logra acreditar ninguna relación de confianza, poder o
autoridad entre “María” y “Piero”. Vínculo exigido por la Ley 30364 al momento de definir la
violencia contra integrantes del grupo familiar. Por otro lado, la defensa de “Piero” alega
que la noticia impactó transitoriamente en el autocontrol de él. Presentan una pericia que
acredita que “Piero” es un hombre de valores tradicionales y que es razonable que el hecho
de haber tomado conocimiento que su expareja venda contenido pornográfico haya
nublado transitoriamente su capacidad de autocontrol.
Preguntas: ¿Se constata alguno de los elementos de contexto del feminicidio? ¿El suceso
es subsumible en el homicidio por emoción violenta o en el feminicidio?

Respecto a la primera pregunta, surgen las siguientes alternativas de interpretación:

1 2

Los elementos de contextos son una lista Los elementos de contextos son una lista
cerrada, de modo que el hecho atribuido debe abierta, ya que se incluye cualquier contexto
Alternativa de enmarcarse en: violencia familiar; coacción u de discriminación contra la mujer. Matar a
hostigamiento sexual; relación de confianza, una mujer por su condición de tal es matarla
interpretación
poder o autoridad. El suceso fáctico no calza en un contexto de discriminación.
en ninguno de estos contextos.

No se constató alguno de los elementos de “Piero” mató a “María” en un contexto en


contexto. El hecho no califica como feminicidio, que le impuso el estereotipo de género “las
sino como parricidio. mujeres deben ser recatadas en su
sexualidad”. Por tanto, la mató por su
Calificación condición de tal, lo que equivale a decir que
del Caso 2 se la mató en un contexto de discriminación.
El hecho califica como feminicidio.

Con relación a la segunda pregunta planteada sobre el caso 2 se refiere a la eventual aplicación del homicidio
por emoción violenta. Se presentan las siguientes opciones de interpretación y calificación:

1 2 3

El artículo 109 se aplica El artículo 109 se aplica El artículo 109 se aplica cuando
cuando una persona actúa cuando una persona actúa una persona actúa en un estado
en un estado en el que su en un estado en el que su en el que su autocontrol se ha
autocontrol se ha reducido autocontrol se ha reducido reducido por una emoción
Alternativa de por una emoción causada por por una emoción causada por causada por un hecho externo.
interpretación un hecho externo. Incluye un hecho externo. Incluye Sin embargo, el artículo 109
emociones provocadas por emociones provocadas por exige que las circunstancias
el incumplimiento de el incumplimiento de hagan excusable la reacción,
estereotipos de género. estereotipos de género. por lo que no incluye reacciones
violentas ante incumplimientos
de estereotipos de género.

Planteamiento de los problemas Pág. 08


Se produce un concurso de leyes entre el Se produce un No se produce ningún
feminicidio y el homicidio por emoción concurso ideal de concurso de leyes o de
violenta. Surgen, a su vez, dos delitos entre el delitos con el homicidio
alternativas: i) Se debe aplicar el delito feminicidio y el por emoción violenta.
Calificación que favorece más al reo, esto es, el homicidio por El hecho constituye
homicidio por emoción violenta; ii) en emoción violenta. feminicidio.
del Caso 2
virtud del principio de alternatividad, se
debe aplicar el feminicidio.

Caso 3

“Claudia” es una mujer trans que se dedica al trabajo sexual. Ella ofrece sus servicios sexuales en una calle
colindante a la casa de “Mariana”. “Mariana” insulta constantemente a “Claudia”, ya que considera que sus
actos son inmorales y denigran la imagen de las mujeres. Una noche, “Mariana” se encuentra a “Claudia”
sola. De manera abrupta la golpea con un bastón de metal en la cabeza, provocándole la muerte.

Caso: El Ministerio Público, a través de múltiples testimonios y de documentos, acredita


que “Claudia” se identificaba como mujer e interactuaba con su entorno social como tal.

Preguntas: Pese a ser mujer, ¿se le puede imputar a “Mariana” la autoría de un feminicidio?
En el caso de “Claudia”, ¿puede ser víctima de un feminicidio o el hecho de ser una mujer
trans la excluye del radio de protección del artículo 108-B?

Respecto a la primera pregunta sobre el caso 3 -vinculada al sujeto activo del feminicidio-, surgen las
siguientes alternativas de interpretación:

1 2

La naturaleza del feminicidio lo hace un El feminicidio no es un delito especial, por lo que


Alternativa de delito especial, ya que solo puede ser puede ser cometido por cualquier persona, con
interpretación cometido por hombres contra mujeres. independencia de su sexo, género, identidad de
género o cualquier otro factor personal.

“Mariana” es mujer, por lo que el hecho El hecho califica como feminicidio, ya que
no califica como feminicidio, sino como “Mariana” mató a “Claudia” y reafirmó el
Calificación homicidio. estereotipo de género de “La mujer debe ser
del Caso 3 recatada en su sexualidad”.

Con relación a la pregunta sobre el sujeto pasivo del delito, se presentan las siguientes opciones de
interpretación y calificación:

1 2

El elemento “mujer” es uno El elemento “mujer” es, en la actualidad, uno normativo.


descriptivo que debe ser Debe ser interpretado a la luz de los estándares sobre
Alternativa de
entendido en términos biológicos derechos humanos, el que obligan a tomar en cuenta la
interpretación y basado en la genitalidad. identidad de género. Además, el feminicidio constituye un
delito de violencia basada en género, no basada en el sexo.

La genitalidad de “Claudia” En términos normativos, “Claudia” es mujer y, por tanto,


impide calificarla como mujer, por el hecho califica como feminicidio. Se la mató y se
Calificación lo que el hecho no califica como reforzó el estereotipo de género “la mujer debe ser
del Caso 3 feminicidio, sino como homicidio. recatada en su sexualidad”.

Finalmente, un último caso problemático es el siguiente:


Caso 4

“Mariella” vive sola en un departamento. Una noche, “Lucas” la sigue desde que ella bajó de un
autobús. Cuando “Mariella” esta a punto de entrar a su departamento, “Lucas” la empuja, ingresa al

Planteamiento de los problemas Pág. 09


inmueble y cierra la puerta. “Lucas” se lanza sobre “Mariella”, le rompe la blusa, y luego de bastante
forcejeo, le baja el pantalón. Posteriormente, “Lucas” se quita el pantalón e intenta violarla. Ella se
opone con mucha fuerza, por lo que la empieza a asfixiar. “Mariella” pierde el conocimiento, pero en
ese momento los vecinos, alarmados por los gritos, rompen la puerta y evitan que “Lucas” la
continúe asfixiando. “Mariella” sobrevive y, producto de la presión en el cuello, sufre lesiones que
ameritan 15 días de descanso según prescripción médica.

Caso: “Lucas” confiesa que intentó violar a “Mariella”, pero indica que no deseaba matarla.
La pericia médica indica que “Mariella” pudo morir o presentar daños cerebrales si la asfixia
se prolongaba unos segundos más.
Preguntas: ¿el hecho se corresponde a un delito contra la salud o a un delito contra la vida
en grado de tentativa? Además, el ataque contra la libertad sexual ¿exige la aplicación de
un delito o basta con aplicar el delito de feminicidio?

Las preguntas planteadas revelan problemas que, parecen, ser concursales. Respecto a la primera pregunta sobre
si es aplicable un delito contra la salud o uno contra la vida, surgen las siguientes alternativas de interpretación:

1 2

El dolo de matar se refiere a la intención El dolo de matar no se descubre en la mente del


o animus necandi del autor. El dolo se autor. El dolo de matar no se refiere a un animus,
Alternativa de descubre en la mente de la persona. sino a un vínculo subjetivo imputado a partir del
interpretación contexto objetivo. Este consiste en realizar un
hecho consciente de que constituye un riesgo
para la vida. Esta consciencia se atribuye a partir
de las circunstancias y el contexto objetivo.

No se ha podido demostrar que “Lucas” El asfixiar a alguien constituye un hecho objetivo


quiso violar a “Mariella”, siendo que permite atribuir el dolo de matar. El acto de
consciente que ahorcarla podía “Lucas” constituye tentativa de feminicidio, ya
lesionarla. Por tanto, el hecho no califica que intentó matarla en un contexto de
Calificación como una tentativa de feminicidio u imposición del estereotipo de género “la mujer
del Caso 4 homicidio, sino como lesiones leves. es objeto del placer sexual del varón”.

Finalmente, la última pregunta exige analizar si, en casos como el 4, se debe aplicar algún delito contra la
libertad sexual o si el ataque contra dicho bien jurídico queda subsumido por otro delito.

1 2

El ataque a la libertad sexual queda El ataque a la libertad sexual no queda abarcado


abarcado por el delito de feminicidio, por el delito de feminicidio. Los contextos no son
ya que este reconoce el contexto de desvalorados por el tipo, únicamente son una
Alternativa de coacción y hostigamiento sexual. lista referencial de lo que realmente se desvalora
interpretación junto al ataque a la vida: la imposición de
estereotipos de género.
Se aplica solo la tentativa de Se aplica tanto la tentativa de feminicidio como la
feminicidio, ya que se produce con tentativa de violación sexual, ya que se produce
concurso de leyes con la tentativa de un concurso ideal de delitos.
Calificación violación sexual que cederá en virtud
del Caso 4 del principio de consunción.

A manera de recapitulación, la interpretación del artículo 108-B del Código Penal genera los siguientes problemas:
1. ¿Cómo se debe interpretar el elemento por su condición de tal del tipo de feminicidio?
2. ¿Cuál es la naturaleza y contenido de los elementos de contexto del tipo de feminicidio?
3. ¿Quién puede ser sujeto activo y quién puede ser sujeto pasivo del tipo de feminicidio?
4. ¿Es aplicable el homicidio por emoción violenta para casos en los que un hombre mata a una mujer por celos
o por una presunta o real infidelidad?
5. ¿Cómo se resuelven los casos en los que el tipo penal de tentativa de feminicidio confluye con el tipo penal
de lesiones o con el tipo penal de tentativa de violación sexual?

Planteamiento de los problemas Pág. 10


05
Abordaje de los
problemas identificados
y posibles soluciones

Para el desarrollo de este apartado, se seguirá el siguiente orden:


5.1. El elemento por su condición de tal
5.2. Los elementos de contexto
5.3. El sujeto pasivo y el sujeto activo del tipo penal de feminicidio
5.4. Problemas concursales relacionados al tipo penal de feminicidio

5.1. El elemento por su condición de tal

Como se dijo antes, la jurisprudencia de la Corte Suprema ha planteado tres alternativas de


interpretación del elemento por su condición de tal. La primera de estas opciones es la siguiente:

Alternativa 1: El elemento por su condición de tal equivale a que se produzca entre el agresor y la víctima
una relación desigual de poder en favor del primero

La jurisprudencia de la Corte Suprema del período 2017-2018 revela que esta interpretación provocó la
no aplicación del tipo penal de feminicidio en casos en los que el Ministerio Público no acreditó la relación
de poder en favor del agresor (Rodríguez, 2022, p. 64). Esto se evidencia en el siguiente extracto de la
ejecutoria suprema recaída en el Recurso de Nulidad 3270-2015/Junín:

[…] ella le dijo que terminaría con la relación (sentimental) porque tenía a otro (hombre) mejor y
que él no valía NADA, porque era vago y ocioso, profiriéndole otros adjetivos descalificantes,
momento en el que el procesado se molestó, y con la escopeta que tenía le disparó a la
agraviada a la altura de la cabeza, causándole la muerte […] consideramos que el acto de matar
a una mujer, per se, no necesariamente constituye delito de Feminicidio; debe contener un
determinado plus para que sea considerado un feminicidio; y este plus es que la muerte violenta
de una mujer, sea ocasionada en el contexto de las relaciones de poder entre hombres y
mujeres; es decir, en el ejercicio del dominio de la mujer. En el caso de autos, según la acusación
fiscal, el acusado […] no mató a la agraviada por su condición de tal […] (2017b, pp.2-7)

Ante esto, se debe tomar en cuenta que la inexistencia de una relación de poder entre agresor y
víctima no excluye la calificación de feminicidio. De hecho, existen múltiples ejemplos en los que la
víctima podría tener una situación concreta de poder respecto a su agresor antes del acto feminicida. El
plus de lesividad o la particularidad del feminicidio radica, como ya se dijo, en la afectación a la igualdad
material. Este bien jurídico se remite a una situación estructural de subordinación que es
retroalimentada o validada por el feminicida.

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 11


Por lo tanto, el bien jurídico “igualdad material” puede ser lesionado con independencia de la relación
concreta entre agresor y víctima. A continuación, se plantearán algunos ejemplos:

Tabla 1:
Dos ejemplos de casos de feminicidio en los que no hay relación de poder o dominio
entre agresor y víctima

¿Existe un vínculo de
¿Es un caso de
Ejemplos poder /dominio entre
feminicidio?
agresor y víctima?

“A” es una mujer que ocupa un alto cargo “A” y “B” no se Como se verá más
en el Estado, por lo que tiene poder y conocían, por lo adelante, el caso
dinero. “B” es un hombre pobre, adicto a que no existe constituye un supuesto
sustancias tóxicas y que se dedica a relación de de feminicidio porque se
cometer delitos patrimoniales. “B” dominio. Además, mata a “A” y se impone
ingresa a robar a la casa de “A”, quien se “A” tiene mayor el estereotipo de que las
encuentra sola. “B” decide violar a “A”. poder que “B”, por mujeres son objetos
“B” mata a “A” a través de la violencia lo que no existe para el placer sexual
desplegada para violarla. relación de poder. del hombre.

“A” es una mujer que tiene una relación de “A” tiene mayor Como se verá más
pareja con “B”. “A” tiene más poder que “B”, poder que “B”, por adelante, el caso
ya que es una empresaria de mucho capital lo que no existe constituye un supuesto
económico y social. “B”, en cambio, es un relación de poder de feminicidio porque se
hombre desempleado. “A” le dice a “B” que o dominio entre mata a “A” y se impone
terminará la relación con él, ya que se ha ambos. el estereotipo de que las
enamorado de otro hombre. “B” mata a “A”. mujeres son posesión de
sus parejas o exparejas.

Elaboración propia

La segunda alternativa de interpretación fue planteada por el Acuerdo Plenario 01-2016/CJ-116 cuando
indicó que “al conocimiento de los elementos del tipo objetivo, se agrega un móvil: el agente la mata
motivado por el hecho de ser mujer. El feminicidio deviene así en un delito de tendencia interna
trascendente” (2017c, fundamento 48).

Alternativa 2: El elemento por su condición de tal equivale a un elemento subjetivo adicional al dolo
referido al odio, menosprecio o desprecios a las mujeres que siente el autor

La interpretación antes desarrollada presenta los siguientes problemas y errores:

Tabla 2:
Problemas y errores de interpretar el elemento por su condición de tal como el odio,
menosprecio o desprecio a las mujeres

Razones para no interpretar el elemento por su condición


Fundamento
de tal como odio, menosprecio o desprecio a las mujeres

1. La acreditación de estados mentales, como el odio o Presunción de inocencia;


menosprecio misógino, es tan compleja que coloca al juez ante la prevención, persecución
disyuntiva de realizar especulaciones o de inaplicar el feminicidio y sanción de la violencia
en todos los casos (Rodríguez, 2022, p.65; Vázquez, 2019, basada en género
p.2018; Vázquez-Portomeñe, 2018, p.233; Alonso, 2019, p. 119).

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 12


2. La exigencia de estos móviles pervierte la extensión del radio Prevención, persecución
de la norma, siendo en ocasiones irrazonablemente restrictiva y sanción de la violencia
y deficitaria (Rodríguez, 2022, p.65). En esta medida, no es basada en género
difícil de imaginar casos en los que el autor mate a una mujer
por razones de género, pero motivado no por el odio, desprecio
o menosprecio a las mujeres. Por ejemplo, aquellos casos en
los que el feminicida actúa motivado por el placer sexual, por
venganza o por la creencia de que su honor ha sido mancillado.

3. El agravar el homicidio sobre la base de los sentimientos o Culpabilidad


emociones del autor puede constituir una infracción al principio
de culpabilidad y a la garantía de prohibición de derecho penal
de autor (Rodríguez, 2022, p.65). Se debe recordar que en un
derecho penal de hecho no se sanciona a las personas por sus
ideas, pensamientos o sentimientos, sino por sus actos.

4. El código penal peruano no emplea los términos “odio”, Legalidad; prevención,


“desprecio” o “menosprecio” a las mujeres. Interpretarlo de persecución y sanción de
esta manera sería restringir el tipo penal irrazonablemente, la violencia basada en
evitando que la norma penal proteja correctamente los bienes género
jurídicos afectados.

Elaboración propia

De lo antes dicho se desprende que existen serios problemas jurídicos con asumir que el matar por su
condición de tal hace referencia a un móvil misógino. Por estos motivos, un importante sector de la
doctrina especializada niega que el contenido del elemento por su condición de tal sea de carácter
subjetivo o que se refiere a un móvil del autor (Pérez, 2018; Alonso, 2019; Rodríguez, 2022).

La tercera alternativa de interpretación es la que desde el 2019 ha recogido la Corte Suprema en


reiteradas sentencias, incluso en el Acuerdo Plenario 09-2019/CIJ-116. Dicha alternativa es la siguiente:
:
Alternativa 3: El elemento por su condición de tal equivale a imponer o exigir el cumplimiento de
estereotipos de género que subordinan a las mujeres

Pero ¿Qué es un estereotipo de género? De acuerdo con la Corte IDH, estos se refieren a
preconcepciones de atributos o características poseídas o papeles que son o deberían ser ejecutados
por hombres y mujeres (2009, fundamento 401). Los estereotipos de género son prescriptivos o
normativos, en la medida que les imponen a las personas cómo deben de actuar, qué roles deben
asumir en la sociedad y qué atributos deben de tener (Cook y Cusack, 2009, p. 21). Además, en lo
referido a los estereotipos femeninos, estos tienen la particularidad de que imponen atributos, roles y
conductas que subordinan a las mujeres en sociedad. Dicho de otro modo, el cumplimiento de los
atributos, roles y espacios de género femeninos provoca, por ejemplo, que las mujeres sean más
cosificadas sexualmente, dediquen más tiempo a tareas del hogar y tengan más problemas para
desenvolverse en el espacio público. En esta medida, matar a una mujer por su condición de tal
significa lesionar su vida y, a la vez, reafirmar aquellos atributos, roles y conductas que se espera de
las mujeres y que las subordina en sociedad.

La interpretación antes planteada es correcta y presenta diversas bondades con relación a las dos
interpretaciones resumidas anteriormente. En este sentido, en el siguiente cuadro se puede visualizar

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 13


cómo interpretar el elemento por su condición de tal como incumplimiento o imposición de estereotipos de
género subordinantes cumple con las garantías y principios que las otras interpretaciones transgreden:

Tabla 3:
Aciertos al interpretar el elemento por su condición de tal como incumplimiento
o imposición de estereotipos de género

Razones para interpretar el elemento por su condición de tal


Fundamento
como incumplimiento o imposición de estereotipos de género

1. No le impone al Ministerio Público una tarea imposible, como Presunción de inocencia;


acreditar más allá de toda duda razonable que el actor actuó prevención, persecución
motivado por odio o desprecio hacia las mujeres. Por el contrario, y sanción de la violencia
el Ministerio Público deberá probar, en lo que se respecta al basada en género
elemento por su condición de tal, que el acto contra la víctima se
realizó en un contexto objetivo de quebrantamiento o imposición
de estereotipos de género. Como todo delito, el Ministerio
Público, en el plano subjetivo y como se verá más adelante,
deberá atribuirle al agente el conocimiento sobre todos los
elementos del tipo, incluido el elemento por su condición de tal.
Es decir, deberá acreditar que el agente conoció que con la
muerte se le imponía a la víctima atributos, roles o conductas
que, objetivamente, constituyen estereotipos de género
subordinantes. Lo que no constituye una infracción a la
presunción contraria a las garantías del imputado.

2. Evita la generación de vacíos de impunidad irrazonables. Por Prevención, persecución


el contrario, se incluye toda forma de violencia basada en y sanción de la violencia
género que provoca un riesgo para la vida de la mujer, con basada en género
independencia de que el autor actúe motivado por misoginia o
por otras emociones o ideas -que no son elementos del tipo-,
como el restablecer el “honor”, humillar a la víctima, satisfacer
deseos sexuales o causarle dolor.

3. Permite castigar al autor por un hecho y no por un Culpabilidad


sentimiento o pasión. Así, se le reprocha y sanciona al autor el
haber impuesto a la víctima un estereotipo de género a través
de la violencia y, con ello, facilitar el mantenimiento del sistema
de género que subordina a las mujeres. En esta medida, el
elemento por su condición de tal es el que evidencia el plus de
lesividad recaído en el ataque al bien jurídico igualdad material.

4. Además, es una interpretación razonable desde el texto literal, Legalidad; Prevención,


y permite, a diferencia de otros planteamientos, la mejor Persecución y Sanción de
protección del bien jurídico vida y el bien jurídico igualdad la violencia basada en
material. género.

Elaboración propia

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 14


En la Casación 851-2018/Puno y en el R.N. 453-2019/Lima Norte, las Salas Penales de la Corte Suprema
hacen un esfuerzo adicional e identifican seis estereotipos de género que se deberán evaluar ante un
eventual caso de feminicidio:
Figura 1:
Concreción del elemento por su condición de tal

Ser responsable tareas


de cuidado

Ser posesión de su
pareja/ex pareja

Ser objeto para placer


sexual masculino
¿Cómo se determina ¿Se le impusó a la víctima
el elemento por su un estereotipo de género
condición de tal? subordinante? Ser recatada en
su sexualidad

Ser femenina

Ser sumisa frente a


varón con autoridad

Elaboración propia

5.2. Los elementos de contexto

El artículo 108-B del Código Penal coincide con otras legislaciones internacionales e incorpora una lista de
contextos en los que se debe configurar el feminicidio. Así, señala que el feminicidio acontece en los siguientes
contextos: violencia familiar; coacción, hostigamiento o acoso sexual; abuso de poder, confianza o de cualquiera
otra posición o relación que le confiere autoridad al agente; cualquier otra forma de discriminación contra la mujer.

El Código Penal de Perú no incorpora un numerus clausus de contextos, sino un numerus apertus. Esto
se evidencia en el hecho que, en el numeral 4, incluye el elemento cualquier otra forma de discriminación
contra la mujer. Así, todo homicidio de una mujer por su condición de tal en un contexto de discriminación
es un supuesto de feminicidio. Por este motivo, es metodológicamente correcto empezar definiendo qué
se entiende por cualquier forma de discriminación contra la mujer.

De acuerdo con la Observación General N.° 18 del Comité de Derechos Humanos, la discriminación se
refiere a toda exclusión, restricción o preferencia que se basa en motivos prohibidos y que tiene por objeto o por
resultado el menoscabo del reconocimiento, goce o ejercicio de derechos fundamentales (1989, párr.7). Dentro
de los motivos prohibidos se encuentran, por ejemplo, la raza, la etnia, la clase social y, evidentemente, el género.

¿Qué sucede cuando se mata a una mujer por razones de género o por su condición de tal? Como se dijo
antes, el elemento por su condición de tal concreta la protección a la igualdad material y, por tanto,
manifiesta el carácter discriminatorio del feminicidio. De este modo, matar a una mujer por su condición
de tal es tratarla de manera diferenciada sobre la base de un motivo prohibido -el género-, cuyo resultado
es el menoscabo al ejercicio del derecho fundamental a la vida. Dicho de manera directa: matar a una
mujer por su condición de tal, siempre y en todos los casos, es hacerlo en un contexto de discriminación
basada en género, por lo que la acreditación de los elementos de contexto es irrelevante y superflua.

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 15


Figura 2:
Irrelevancia de los elementos de contexto
Matar por su condición de
tal es matar en un contexto
de discriminación

Claúsula de El feminicidio es matar


extensión analógica: a una mujer por su
cualquier contexto de condición de tal
discriminación

Elementos de ¿Se requiere


contexto de algo mas?

Elaboración propia

Sin perjuicio de lo antes dicho, ¿cómo se deben definir los tres primeros contextos reconocidos por el
artículo 108-B? Respecto a la violencia familiar, en la doctrina existen dos posturas acerca de su
interpretación. La primera de ellas es la siguiente:

Alternativa 1: La violencia familiar requiere de los siguientes elementos extratípicos: i) motivación


destructiva del agente; ii) verticalidad en el vínculo entre el autor y la víctima; iii) la ciclicidad en los actos
de violencia, es decir, que el acto violento se enmarque en un contexto mayor; iv) la progresividad o
escalonamiento en la intensidad de la violencia; v) la vulnerabilidad de la víctima (Rivas, 2019, pp. 49-55)

La teoría antes planteada presenta desaciertos y problemas interpretativos:


Tabla 4:
Desaciertos y problemas interpretación con la propuesta de basada en el círculo de la violencia

Razones para no asumir la propuesta interpretativa Fundamento

1. Exige elementos extratípicos, es decir, no requeridos por el legislador. Principio de


Esto podría significar un peligro respecto al principio de legalidad. Solo legalidad
estaría justificada tal exigencia si, así, se permite una mejor protección de
los bienes jurídicos protegidos. Sin embargo, como se verá más adelante,
este criterio no se cumple.

2. Los elementos exigidos por este sector de la doctrina se basan en una No encuentra
teoría -la del círculo de la violencia- dirigida no a describir una realidad soporte
criminológica, sino a construir herramientas para el tratamiento y abordaje criminológico
de las víctimas. Más aún, esta teoría no ha sido construida en el Perú ni con en Perú
base en data recolectada en nuestro país. De hecho, los pocos estudios
criminológicos realizados en el Perú sobre violencia contra las mujeres
revelan que varios de los elementos exigidos por este sector de la doctrina
no son característicos del feminicidio en el ámbito familiar y de pareja. Por
ejemplo, la evidencia muestra que en el Perú, la violencia contra las mujeres
no se caracteriza ni por el escalonamiento, ni por la ciclicidad (Hernández y
Morales, 2019, p.47), ni por el móvil “destructivo” (MINJUS, 2019, p.65).

Elaboración propia

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 16


Frente a esta teoría, se debe tomar en cuenta que matar a una mujer a través de la violencia
-discriminatoria- basada en género puede realizase con independencia de la motivación del autor, de la
vulnerabilidad de la víctima o de la relación entre la víctima y agresor. En el siguiente cuadro se pueden
ver algunos ejemplos de ello:

Tabla 5:
Tres ejemplos de casos de feminicidios “íntimos” que no cumplirían con los elementos
exigidos por la doctrina del círculo de la violencia

¿Existe un vínculo
Ejemplos de poder /dominio entre ¿Es un caso de
agresor y víctima? feminicidio?

“A” es esposo de No existe ciclicidad, Constituye un supuesto de


“B”, quien es mujer. ni progresividad o feminicidio, se mata “B” para
“A” nunca ha escalonamiento, ya imponerle el estereotipo de
violentado a “B”. que es el primer acto género “la mujer es posesión de su
“A” se entera que violento. pareja”.
“B” le es infiel y la
mata.

“A” es esposo de “B”. No existe ciclicidad, ni Constituye un supuesto de


“A” es desempleado, progresividad o feminicidio, se mata a “B” para
mientras que “B” es escalonamiento, ya que imponerle que su espacio de género
una trabajadora de es el primer acto violento. es el ámbito privado/familiar, no el
éxito que tiene No existe, además, público. Así, le impone los
importantes ingresos verticalidad en el vínculo estereotipos de género “la mujer
económicos. “A”, entre el autor y la víctima, debe ser femenina” y “la mujer debe
celoso del éxito de “B”, quien no es visiblemente ser responsable de tareas de
la mata. vulnerable. cuidado”, ya que se la mata porque,
en vez de desarrollarse en el espacio
de género femenino -el privado-, se
desenvuelve en el espacio de género
masculino- el público-.

“A” es esposo de “B”, No existe ciclicidad, ni Constituye un supuesto de


quien es mujer. “A” y progresividad o feminicidio, se mata “B” para
“B” son trabajadores escalonamiento, ya que imponerle el estereotipo de género
de éxito igualmente es el primer acto “la mujer debe ser recatada en su
ricos. Se separan. “A” violento. No existe, sexualidad”.
toma conocimiento que además, verticalidad en
“B” tiene sexo casual el vínculo entre el autor y
con varios hombres. la víctima, quien no es
“A” mata a “B”. visiblemente vulnerable.

Elaboración propia

Por los motivos antes indicados, es preferible entender el término violencia familiar del siguiente modo:

Alternativa 2: La violencia familiar se debe interpretar a la luz la Ley 30364 y de violencia contra
integrantes del grupo familiar

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 17


En esta medida, se debe tomar en cuenta que la citada ley indica lo siguiente:

Artículo 6. Definición de violencia contra los integrantes del grupo familiar


La violencia contra cualquier integrante del grupo familiar es cualquier acción o conducta que
le causa muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico y que se produce en el
contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder, de parte de un integrante a
otro del grupo familiar. […]

Artículo 7. Sujetos de protección de la Ley


Son sujetos de protección de la Ley:
[…]
b. Los miembros del grupo familiar. Entiéndase como tales, a los cónyuges, excónyuges,
convivientes, exconvivientes; padrastros, madrastras; ascendientes y descendientes; los
parientes colaterales de los cónyuges y convivientes hasta el cuarto grado de
consanguinidad y segundo de afinidad; y a quienes, sin tener cualquiera de las condiciones
antes señaladas, habitan en el mismo hogar, siempre que no medien relaciones
contractuales o laborales; y quienes hayan procreado hijos en común, independientemente
que convivan o no, al momento de producirse la violencia.

En síntesis, se aplicará este contexto -violencia familiar- cuando se mata a una mujer por su condición
de tal y se cumplen los siguientes elementos:

La víctima tiene con el feminicida alguno de los vínculos definidos el literal b del artículo 7 de la
1 Ley 30364.

Existe una relación de responsabilidad, confianza o poder entre el feminicida y la víctima. Esto
2 se acreditará, por ejemplo, cuando ambos conviven, mantienen bienes en común o existe una
relación de dependencia económica. Y, ¿qué sucede si esta relación no se acredita, pero se mata
a la víctima mujer por su condición de tal? Como se dijo antes, se estará ante un feminicidio,
pero el contexto aplicable será cualquier forma de discriminación contra la mujer.

Respecto al contexto de coacción, se acredita cuando el feminicidio ocurre luego o mientras que el
agente emplea violencia o amenaza para obligar a la víctima a hacer algo contra su voluntad (Díaz,
Rodríguez y Valega, 2019, p.71).
Tabla 6:
Ejemplos de casos de feminicidios en contexto de coacción

Ejemplos

"Anibal" mata a "Belinda", su pareja, al querer forzarla a retomar la relación con él y le impone
el estereotipo de que “las mujeres son posesión de sus parejas/ ex parejas”.

"Abel" mata a "Brenda", su pareja, al querer forzarla para que abandone su trabajo y le impone
el estereotipo de que “las mujeres deben debe ser responsable de las tareas de cuidado”.

"Amalia" mata a "Bruna", su hijastra, al querer forzarla a tener una expresión de género
femenina y le impone el estereotipo de que las “mujeres deben ser femeninas”

Elaboración propia

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 18


Respecto al hostigamiento y acoso sexual, se produce un feminicidio en este contexto cuando se mata a
una mujer por su condición de tal en un escenario en el que el agente, de manera previa o durante el
ataque, vigila, persigue, asedia o busca acercarse a la víctima para tener con ella actos de contenido
sexual, según la definición planteada en el artículo 176-B del Código Penal.

Tabla 7:
Ejemplos de casos de feminicidios en contexto de hostigamiento/acoso sexual

Ejemplos

“Antonio” no conoce personalmente a “Blanca”, pero la ha visto en varias ocasiones y siente


atracción sexual por ella. Un día, y de manera intempestiva, la golpea mortalmente con fines
de forzarla a tener acceso carnal. De este modo, “Antonio” mata a “Blanca” y le impone el
estereotipo de que “las mujeres son objetos para el placer sexual”.

“Aarón” mata a “Bianca” al querer forzarla a recibir un tocamiento de carácter sexual y le


impone el estereotipo de que “las mujeres son objetos para el placer sexual”.

“Abelardo” mata a “Brittany” al querer forzarla a recibir un beso y le impone el estereotipo de


que “las mujeres son objetos para el placer sexual”.

Elaboración propia

Finalmente, el contexto de abuso de poder, confianza o de cualquier otra posición o relación que le
confiera autoridad al agente se produce, en primer lugar, cuando se mata a una mujer por su condición de
tal en supuestos en los que el sujeto activo tiene una posición de poder, jurídicamente reconocida -jefe
laboral, mando militar superior o padre, entre otros- o de carácter social -padrinos, familiares, líderes
religiosos, profesores, entre otros- (Diaz, Rodríguez y Valega, 2019, p. 71). Con relación a la relación de
confianza, este contexto se aplica cuando el feminicida es amigo, amigo de la familia, enamorado, novio
o realiza un oficio que genera confianza en la ciudadanía, como policía o funcionario público (Díaz,
Rodríguez y Valega, 2019, p. 72).

Es preciso reiterar que, si se mata a una mujer por su condición de tal, pero no se evidencia un contexto
de violencia familiar, coacción, acoso o hostigamiento sexual o relación de poder o confianza, se
estará, de todos modos, ante un supuesto de feminicidio. En estos casos, se debe aplicar el elemento
de contexto cualquier forma de discriminación contra la mujer.

Algunos ejemplos que no calzan en los tres elementos de contexto expresamente estipulados, son
los siguientes:
Tabla 8:
Ejemplos de casos de feminicidios en contextos distintos
a los tres primeros numerales del artículo 108-B

Ejemplos

“Benjamín” mata a su expareja “Carmen”, porque ha cuestionado su capacidad sexual. No se


acredita relación de confianza, poder o autoridad entre ambos, ya que tienen varios meses
separados y ambos son independientes. Es discriminatorio porque se afirma el estereotipo de
“la mujer debe ser sumisa frente al varón”.

“Braulio” mata a “Cindy”, una trabajadora sexual a la que acaba de conocer. Al momento de
matarla, la insulta por ser una mujer involucrada en la prostitución. No se acredita hostigamiento
u acoso sexual previo, ni relación de autoridad, poder o confianza. Es discriminatorio porque se
afirma el estereotipo de “la mujer debe ser recatada en su sexualidad”.

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 19


“Benito” mata a “Clementina”, a quien no conocía, porque se vestía “como hombre”. No se
acredita hostigamiento u acoso sexual previo, ni relación de autoridad, poder o confianza. Es
discriminatorio porque se afirma el estereotipo de “la mujer debe ser femenina”.

Elaboración propia

5.3. El sujeto pasivo y el sujeto activo del tipo penal de feminicidio

¿Solo las mujeres pueden ser autoras de este delito? ¿es el feminicidio un delito especial? Como se ha
planteado en una ocasión previa (Rodríguez, 2022, p. 54), el análisis de estas preguntas pueden ser
abordadas desde la obra de Víctor Gómez sobre el fundamento de los delitos especiales. Para este autor,
los delitos especiales son aquellos que restringen el círculo de autores a determinados grupos de
personas (Gómez, 2012, p.21). La primera clase de delitos especiales la conforma los “delitos especiales
con elemento meramente tipificadores”, los que se caracterizan porque la restricción del círculo de
autores se fundamenta en la constatación empírica de que las conductas prohibidas frecuentemente
son realizadas por determinados grupos de personas (Gómez, 2012, p.28). En cambio, en los “delitos
especiales de posición” la restricción se fundamenta en una posición especial que ocupan determinadas
personas frente a un bien jurídico en específico (Gómez, 2012, p.21). En este marco, un sector de la
jurisprudencia plantea la siguiente alternativa de interpretación:

Alternativa 1: El feminicidio es un delito especial, toda vez que, para ser sujeto activo, se debe ser hombre

En este marco, ¿cuál es el fundamento de hacer del feminicidio un delito especial pese a que hay tal
exigencia típica? La posición de garante no se puede fundamentar en el sexo del agente, ni siquiera en la
sola relación matrimonial con la víctima (Lascuráin, 2002, pp,125-127; citado por Rodríguez, 2022, p.
54). Por tanto, el feminicidio no puede ser un delito “especial de posición”, sino uno con “elementos
meramente tipificadores”. No obstante, el hecho de que la pena del feminicidio sea mayor que la del
homicidio no puede descansar en una constatación empírica que no es responsabilidad del sujeto activo.

Existen argumentos para oponerse a esta alternativa de interpretación (Rodríguez, 2022, pp.67-68):

Tabla 9:
Razones para no interpretar el delito de feminicidio como uno especial

Razones para no asumir la propuesta interpretativa Fundamento

1. Limitar el círculo de autores a los varones provocaría que el Principio de culpabilidad


tipo penal tome en cuenta el sexo del autor para agravar el
delito. Esto podría constituir una expresión de Derecho penal
de autor, el cual se encuentra prohibido bajo el principio de
culpabilidad (Toledo, 2009, p.77).

2. Limitar el círculo de autores a los varones provocaría efectos Prevención, persecución


político-criminales negativos, ya que se excluiría feminicidios y sanción de la violencia
cometidos por mujeres. El núcleo del feminicidio yace en que, con la basada en género
muerte de la mujer, se refuerza, comunicativamente, las normas
culturales que subordinan a las mujeres en sociedad. Este es el plus
del injusto que lo diferencia del homicidio y, por tanto, la pregunta
clave es ¿pueden las mujeres reafirmar estos estereotipos de
género subordinantes a las mujeres? (Rodríguez, 2022, p.68).
Claramente, una mujer puede matar a otra para imponerle
estereotipos de género como el recato sexual o el ser femeninas.

Elaboración propia

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 20


Por estos motivos, es preferible asumir la segunda alternativa de interpretación asociada al sujeto activo del delito:

Alternativa 2: El feminicidio es un delito común, por lo que puede ser cometido por cualquier persona,
con independencia de sexo o de su identidad de género

El Tribunal Constitucional, en la sentencia emitida el 5 de marzo de 2020 en el Expediente


03378-2019-PA/TC, indicó que no solo los hombres pueden cometer actos de violencia basada en
género. Así, señaló lo siguiente:

56. La violencia basada en el género incluye como perpetradores o sus activos no solo a
hombres, y como víctimas o sujeto pasivos no solo a las mujeres. Esta violencia que se
agrava por la discriminación que la acompaña, se ejerce contra todas aquellas personas que
cuestionan el sistema de género imperante y enraizado en las relaciones sociales, con el
propósito de impedir que este sea desmontado.

Sobre la base de lo antes dicho, el feminicidio es un delito común que puede ser
cometido tanto por hombres como por mujeres.
Respecto del sujeto pasivo del delito, un sector de la jurisprudencia considera que el feminicidio solo puede
ser cometido en contra de una mujer cisgénero, esto es, una mujer bajo parámetros únicamente sexuales
o, más específicamente, genitales. Este ha sido la propuesta del Acuerdo Plenario 01-2016/CJ-116:

Alternativa 1: El feminicidio solo puede ser cometido por mujeres en términos biológicos. De manera
específica, el criterio empleado sería la genitalidad, por lo que solo puede ser víctima del feminicidio
quien, al momento de nacer, tenía vagina, útero, trompas de falopio y ovarios

La exclusión planteada por la Corte Suprema de la República debe ser superada, toda vez que excluir a las
mujeres trans de la esfera de protección del feminicidio es un desacierto (Rodríguez, 2022). Los
argumentos en contra de esta postura pueden ser visualizados en la siguiente tabla:
Tabla 10:
Razones para no interpretar el delito de feminicidio como uno que excluye
a las mujeres trans de su esfera de protección

Razones para no asumir la propuesta interpretativa Fundamento

1. El elemento mujer no constituye un elemento descriptivo del tipo, es decir, Legalidad. Prevención,
no sujeto a interpretación jurídica. De hecho, el Tribunal Constitucional del persecución y sanción
Perú ha indicado previamente que las categorías hombre y mujer no deben de la violencia basada
ser interpretadas únicamente a la luz de la biología -la que, además brinda en género
más de un criterio diferenciador-. Así, el máximo intérprete de la Constitución
ha señalado, en la sentencia del 21 de octubre de 2016 recaída en el
Expediente 06040-2015-PA/TC, que no se debe determinar el concepto
hombre o mujer únicamente desde la genitalidad, sino que se debe
considerar cómo la persona ha decidido desarrollar su vida y, en ese sentido,
su identidad de género (2016, párrafos 13 y 14).

2. El telos del delito de feminicidio yace en que el feminicida, con su acto violento, Lesividad. Prevención,
no solo atenta contra la vida de una mujer, sino que comunica la vigencia de persecución y sanción
estereotipos de género que subordinan a las mujeres. En este sentido, lo de la violencia basada
importante no es el llamado sexo biológico de la víctima, sino el pertenecer al en género
colectivo que sufre los estereotipos de género femeninos subordinantes. Una
mujer trans puede ser asesinada en un contexto de imposición o
quebrantamiento de estereotipos de género que subordina a las mujeres y, con
ello, el sujeto activo tiene la oportunidad de reafirmar estas normas culturales, tal
y como sucede en el caso de mujeres cisgénero (Rodríguez, 2022, p.82).

Elaboración propia

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 21


Por estos motivos, es preferir asumir la segunda alternativa de interpretación asociada al sujeto activo
del delito:

Alternativa 2: El feminicidio abarca, en su radio de protección, a las mujeres cis y transgénero

Es preciso recordar que, como se ha dicho antes, el feminicidio se impone a las mujeres que quebrantan
o incumplen los estereotipos de género que prescriben una correcta forma de ser, sentir, actuar y
comportarse en sociedad. En este escenario, autoras como Pérez Manzano resaltan que las mujeres
trans expresan el cuestionamiento constante a un patrón social patriarcal y, por tanto, son víctimas
frecuentes del feminicidio (Pérez, 2018, p. 181).

En nuestra jurisprudencia existen dos sentencias de la Corte Suprema en las que se ha reconocido,
implícitamente, que el feminicidio puede ser cometido contra mujeres trans: la ejecutoria recaída en el R.N
325-2018/Lima Norte del 8 de enero de 2019 y la recaída en el R.N 125-2015/Lima del 15 de diciembre de
2016 (Rodríguez, 2022, p. 125). En ambos casos se reconoció que el transfeminicidio es un tipo o clase de
feminicidio, del siguiente modo: “El feminicidio presenta varios tipos, además del íntimo: no íntimo […] el
femicidio transfóbico y el femicidio lesfóbico” (2019a, fundamento 3.8; 2016, fundamento décimo séptimo).

5.4. Problemas concursales relacionados al tipo penal de feminicidio


A. Feminicidio y homicidio por emoción violenta
Como se dijo antes, existen situaciones en las que aparentemente confluyen el feminicidio y el
homicidio por emoción violenta:
Tabla 11:
Ejemplos de casos en los que aparenta confluir el feminicidio y el homicidio por emoción violenta

Ejemplos

“Carlos” mata a “Diana”, su pareja, inmediatamente luego de tomar conocimiento de que le


ha sido infiel.

“Claudio” mata a “Delia”, su expareja, inmediatamente luego de tomar conocimiento de que


ha tenido sexo con otros hombres.

“Clinton” mata a “Danuzca”, con quien tuvo sexo en el pasado, inmediatamente luego de
tomar conocimiento de que está embarazada y se niega a abortar.

Elaboración propia

En las situaciones antes descritas, se podría pensar lo siguiente:

Alternativa 1: El feminicidio y el homicidio por emoción violenta entran en un concurso de leyes


cuando se reacciona ante una emoción provocada por el quebrantamiento de estereotipos de género

Pero, ¿es posible afirmar un concurso de delitos o de leyes entre el feminicidio y el homicidio por
emoción violenta en los sucesos en los que se mata a una mujer por su condición de tal bajo los
efectos de una emoción violenta? No, debido a que uno de los elementos del tipo del homicidio por
emoción violenta no se concreta, por lo que no podemos hablar de ningún tipo de concurso, ni de
delitos ni de leyes (Escuchuri, 2001, pp. 253-254). Este elemento es el referido a las circunstancias
que hacen excusable la reacción del agente. Actualmente, el quebrantamiento de expectativas basadas
en estereotipos de género pueden provocar emociones violentas, pero estas no son circunstancias
que hacen excusable las reacciones homicidas. De hecho, la tipificación del feminicidio manifiesta este
cambio en la valoración social de los hechos. Esto último es más evidente si se toma en cuenta que,

Bibliografía Pág. 23
Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 22
desde la tipificación del feminicidio, la Corte Suprema del Perú dejó de aplicar el homicidio por emoción
violenta en casos en los que un hombre mata a su pareja o expareja por celos o infidelidad, real o
aparente (Rodríguez, 2022, p. 127). Por tanto, la alternativa correcta es la siguiente:

Alternativa 2: El homicidio por emoción violenta no es aplicable cuando no se concreta el elemento


“que las circunstancias hacen excusable”, como sucede ante las reacciones provocadas por el
quebrantamiento de estereotipos de género

En síntesis, el hecho de matar a una mujer por su condición de tal bajo los efectos de una emoción
violenta debe ser tratado como un caso de feminicidio, no de homicidio por emoción violenta. La
alteración de la capacidad de autocontrol en estos supuestos se deberá valorar no en la tipicidad del
acto, sino en la culpabilidad del agente. Es decir, la defensa del imputado de feminicidio deberá
acreditar que su defendido actuó bajo una situación de inimputabilidad o imputabilidad reducida, bajo
los parámetros del artículo 20.1 y 21 del Código Penal.

B. Tentativa de feminicidio y tentativa de violación sexual


El Acuerdo Plenario 01-2016/CJ-116 se pronunció sobre la norma concursal aplicable cuando el
agente, luego de tener acceso carnal no consentido con la víctima, la mata por su condición de tal.
Como resalta la Corte Suprema, se está ante hechos distintos, por lo que se estaría ante un
concurso real heterogéneo (2017c, párrafo 69). Sin embargo, esta figura concursal deberá ceder
ante la agravante específica regulada en el numeral 4 de la párrafo 2 del artículo 108-B: “Si la
víctima fue sometida previamente a violación sexual o actos de mutilación”.

Sin embargo, ¿qué sucede si se intentó violar a la víctima a través de un acto que la mato o que puso
en peligro su vida? A continuación, algunos ejemplos:

Tabla 12:
Ejemplos de casos en los que confluye la tentativa de feminicidio
y la tentativa de violación sexual

Ejemplos

“Daniel”, para lograr tener acceso carnal con “Emma”, la asfixia.

“Diego”, para lograr tener acceso carnal con “Emperatriz”, la golpea con un objeto
contundente en la cabeza.

“Dino”, para lograr tener acceso carnal con “Encarnación”, le realiza una perforación en
el vientre con un arma punzo cortante.

Elaboración propia

Las situaciones antes descritas incluyen una acción que puede ser subsumida en dos tipos penales: el
delito de feminicidio -artículo 108-B- y el delito de violación sexual -artículo 170-. La Sala Penal
Permanente de la Corte Suprema en la Casación 278-2020/Lima Norte del 15 de septiembre 2021,
planteó la siguiente alternativa de interpretación:

Alternativa 1: El feminicidio en contexto de coacción/hostigamiento sexual desvalora el ataque


contra la vida, la igualdad material y, además, contra la libertad sexual. Por tanto, la situación debe ser
tratada como de concurso de leyes y, en virtud del principio de consunción, se debe aplicar
únicamente el feminicidio

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 23


La solución brindada por la Corte Suprema es errónea por los siguientes motivos:
Tabla 13:
Razones para no aplicar el concurso de leyes

Razones por las que, en el caso planteado,


Fundamento
se estaría ante un concurso ideal y no ante uno de leyes

1. Los elementos de contexto no son elementos desvalorados por el tipo penal Naturaleza de
de feminicidio, ya que constituyen una lista abierta que solo busca visibilizar los los elementos
escenarios en los que se mata comúnmente a una mujer por su condición de tal. de contexto
Evidencia de ello es que estos delitos tienen bienes jurídicos protegidos distintos:
uno protege la vida/igualdad material y otro la libertad sexual.

2. La Corte Suprema en la sentencia antes citada aplicó el principio de Principio de


consunción del concurso de leyes, el cual se aplica cuando el injusto de un delito consunción
comprende a otro (Escuchuri 2001, p.325). Sin embargo, el feminicidio no del concurso
comprende a la violación sexual, ni la violación sexual comprende al feminicidio. de leyes
Probablemente, la Corte Suprema quiso aplicar el principio de consunción ante
lo que se conoce como hechos acompañantes del tipo. En esta línea, un sector
de la doctrina considera que, cuando se estima que se está ante un hecho típico
que en la práctica suele acompañar a otro principal, el acompañante queda
embebido por el segundo (Escuchuri, 2001, p.327). Sin embargo, no existe
evidencia de que la violación sexual acompañe comúnmente al feminicidio.
Tampoco queda claro porque la tentativa de feminicidio es el hecho típico
principal y la tentativa de violación sexual el hecho típico secundario, cuando,
como ya se dijo antes, son actos con desvalores completamente distintos: el
primero pone en peligro la vida e igualdad material, el segundo la libertad sexual.

Elaboración propia
Por estos motivos, la alternativa correcta es la siguiente:

Alternativa 2: El feminicidio en contexto de coacción/hostigamiento sexual solo desvalora el ataque


contra la vida y la igualdad material, de modo que si, el mismo acto produce un ataque grave contra la
libertad sexual, se estará ante un concurso ideal de delitos

C. Tentativa de Feminicidio y Lesiones


La jurisprudencia muestra que es común que se produzcan situaciones en las que no hay claridad sobre
si se debe aplicar la tentativa de feminicidio o las lesiones agravadas por violencia contra las mujeres:
Tabla 14:
Ejemplos de casos en los que aparenta confluir la tentativa de feminicidio y las lesiones

Ejemplos

“Eder” asfixia a “Felicita” en un contexto en el que le exige ser recatada en su sexualidad.


“Felicita” pierde el conocimiento pero sobrevive.

“Erick” dispara a “Frida” en la cabeza luego de haber descubierto que le era infiel. Sin
embargo, “Frida” hace un movimiento y la bala le perfora la clavícula. “Frida” sobrevive.

“Emanuel” golpea con un bate en la cabeza a “Fátima”, luego que toma conocimiento que
va a romper su relación. “Fátima” sobrevive.

Elaboración propia

La jurisprudencia asume de manera homogénea que la diferencia entre la tentativa de feminicidio y


lesiones se encuentra en la presencia del dolo de matar. Sin embargo, la distinción radica en cómo se
concibe el dolo de matar.

Alternativa 1: El dolo de matar del feminicidio supone el animus necandi, es decir, la intención de
matar que se descubre en la mente del sujeto activo

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 24


La primera alternativa concibe al dolo como una realidad natural de carácter psicológico que debe ser
descubierta en el interior del agente (Sánchez Málaga, 2015, p. 64). El problema con esta
interpretación es que descubrir las intenciones que se encontraban en la mente del agente en el
momento de los hechos es una tarea retrospectiva imposible para el proceso penal (Ragués, 199,
p.520) o, al menos, científicamente no validada (Sánchez Málaga, 2018, p.319). En el caso concreto
del feminicidio, la Defensoría del Pueblo ha mostrado su preocupación ante el hecho de que la
exigencia de probar el animus necandi ha provocado la absolución injustificada de casos producidos
en el Perú (2015, p.173; citado por Rodríguez, 2022, p. 129).

Frente a ello, surge una segunda alternativa:

Alternativa 2: El dolo de matar del feminicidio equivale a la conciencia de que se realizan los
elementos del tipo objetivo del feminicidio, lo que se atribuye sobre la base de criterios objetivos

La segunda alternativa es conocida como la perspectiva normativa y considera que lo relevante es


atribuir el dolo a una determinada conducta a partir de criterios de imputación (Sánchez Málaga, 2015,
p. 64). En esta medida, dota a la interpretación del dolo de mayor previsibilidad y de mayor coherencia
con el proceso penal y los estándares de prueba. Las ejecutorias supremas que han atribuido el dolo del
feminicidio desde la perspectiva normativa lo han hecho sobre la base del contexto objetivo en el que
se cometió el delito. Así, se ha resaltado los siguientes ejemplos (Rodríguez, 2022, p.130):

El uso de armas punzocortantes para afectar zonas vitales del cuerpo, como el vientre, el cuello o
la cabeza.
El uso de armas de fuego para afectar zonas vitales del cuerpo, como el vientre, el cuello o la cabeza.
El empleo de la asfixia.

A continuación, se colocan dos ejemplos de la jurisprudencia en la que se aplicó la tentativa de


feminicidio y no las lesiones:
Tabla 15:
Ejemplos en la Jurisprudencia en los que se aplicó la tentativa de feminicidio

Motivos por los que se aplicó la tentativa de feminicidio Expediente

1. Esteban Vásquez Ruiz era pareja de L.E.J.H (agraviada). Luego Recurso de Nulidad
de una discusión motivada por los celos, la golpeó y le dijo “Hoy se 350-2021/Lima Sur
acaba todo; yo me voy preso y tú te vas al cementerio”. Luego, la
agredió con un hacha en las manos y cabeza. Después de que se le
cayó el hacha, la amenazó con un cuchillo y la intentó asfixiar. La
Sala Penal Permanente consideró que había tentativa de
feminicidio, entre otros motivos, porque las lesiones “fueron
realizadas en zonas vitales del cuerpo” y “no resulta razonable que
se intente agredir a una persona en la cabeza, cuello o el pecho con
un ánimo distinto al de asesinarla” (2022b, fundamento 7.1).
También se tomó en cuenta que se usaron armas mortales como
el cuchillo y el hacha de cocina (2022b, fundamento 7.2).

1. Alberto Tello Casa era conviviente de S.Q.C. (agraviada). Casación


Mientras la agraviada se encontraba trabajando, Tello Casa se le 2215-2021/Cusco
acercó por detrás, le amarró la cara hacía atrás con una manta e
intentó asfixiarla. La agraviada se logró liberar, pero A.T.C. se
colocó encima de ella y la ahorcó con las dos manos hasta que
perdió el conocimiento. La Sala Penal Permanente consideró que
había tentativa de feminicidio, entre otros motivos, porque la
atacó sorpresivamente, la intentó asfixiar con una manta y, luego,
la asfixió hasta perder la consciencia con sus manos (2023,
fundamento sexto). Estos elementos fueron considerados como
“indicios graves de esa voluntad de matar” (2023, séptimo).

Abordaje de los problemas identificados y posibles soluciones Pág. 25


06
Conclusiones

Matar a una mujer por su condición de tal significa lesionar su vida y, a la vez, reafirmar aquellos atributos,
roles y conductas que se espera de las mujeres y que las subordinan en sociedad.

La Corte Suprema de Justicia ha reconocido los siguientes estereotipos de género que pueden ser reafirmados
en casos de feminicidio: la mujer debe ser responsable de tareas de cuidado; la mujer debe ser posesión de su
pareja/ex pareja; la mujer debe ser objeto para el placer sexual masculino; la mujer debe ser recatada en su
sexualidad; la mujer debe se femenina; la mujer debe ser sumisa frente a un varón con autoridad.

El Código Penal de Perú no incorpora un numerus clausus de contextos, sino un numerus apertus. Esto se evidencia
en el hecho que, en el numeral 4 del artículo 108-B, incluye el elemento cualquier otra forma de discriminación
contra la mujer. Matar a una mujer por su condición de tal es tratarla de manera diferenciada sobre la base de un
motivo prohibido -el género-, cuyo resultado es el menoscabo al ejercicio del derecho fundamental a la vida. Por
tanto, matar a una mujer por su condición de tal, siempre y en todos los casos, es hacerlo en un contexto de
discriminación basada en género, por lo que la acreditación de los elementos de contexto es irrelevante y superflua.

El feminicidio es un delito común que puede ser cometido tanto por hombres como por mujeres.

Respecto del sujeto pasivo del delito, se debe superar la propuesta interpretativa de limitar su aplicación a
mujeres cisgénero. En ese sentido, las mujeres trans pueden ser víctimas de feminicidio cuando se las mata
para reafirmar un estereotipo de género femenino subordinante.

El hecho de matar a una mujer por su condición de tal bajo los efectos de una emoción violenta debe ser
tratado como un caso de feminicidio, no de homicidio por emoción violenta. La alteración de la capacidad de
autocontrol en estos supuestos se deberá valorar no en la tipicidad del acto, sino en la culpabilidad del agente.

El feminicidio en contexto de coacción/hostigamiento sexual solo desvalora el ataque contra la vida y la


igualdad material, de modo que si, el mismo acto produce un ataque grave contra la libertad sexual, se estará
ante un concurso ideal de delitos.

La tentativa del feminicidio se distingue de los delitos de lesiones por la presencia del dolo de matar. Este
equivale a la conciencia de que se realizan los elementos del tipo objetivo del feminicidio, lo que se atribuye
sobre la base de criterios objetivos.

Conclusiones Pág. 26
07
Bibliografía

Libros, capítulos de libros y artículos:


Alonso, Mercedes (2019). El delito de feminicidio Razones de género y técnica legislativa. En Monge, Antonia (coord.).
Mujer y Derecho Penal (pp. 91-130). Barcelona: Bosch.

Coock, Rebecca & Cusack, Simone (2010). Estereotipos de género: perspectivas legales transnacionales. Bogotá: Profamilia

Diaz, Ingrid; Rodríguez, Julio y Valega, Cristina. (2019). Feminicidio. Interpretación de un delito de violencia basada en
género. Lima: CICAJ-PUCP.

Escuchuri, Estrella. (2001). Teoría del concurso de leyes y de delitos. Bases para una revisión crítica. Granada: Comares.

Guerra, Luis; Rodríguez, Tadeo; Flores, Christian; Sánchez, Maholy; Vogt, Oriana y Vega, Fernado (2019). Víctimas y
victimarios del Feminicidio. Un estudio desde los perpetradores del delito. Lima: Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.

Gómez, Víctor. (2012). Delitos de posición y delitos con elementos de autoría meramente tipificadores. En Revista
Electrónica de Ciencia Penal y Criminología, RECPC 14-01 (2012), 1-29.

Hernández, Wilson y Morales, Hugo. (2019). Violencia contra las mujeres en relaciones de pareja: patrones de
victimización y tipologías de agresores. Lima: CIES.

Mendoza, Francisco (2019). ¿Contexto de violencia? Delito de agresiones: artículo 122-B del Código Penal. Gaceta Penal
& Procesal Penal, Septiembre 2019, N°123, 11-18.

Meini, Iván (2018). Sobre la interpretación en Derecho Penal. En Liber Amicorum Estudios Jurídicos en Homenaje al Prof.
Dr. Dr.h.c. Juan Terradillos Basoco (pp.159-172). Valencia: Tirant lo Blanch.

Mir, Santiago (2016). Derecho Penal. Parte General. 10ª edición actualizada y revisada. Barcelona: Reppertor.

Montoya, Yvan (2020). Derecho Penal de Principios. Los Principios Penales Fundamentales. Tomo II. Lima: Palestra.

Laurenzo, Patricia (2015). “¿Hacen falta figuras género específicas para proteger mejor a las mujeres?” Estudios Penales
y Criminológicos, vol. XXXV, 783-830

Lascuráin, Juan Antonio (2002). Los delitos de omisión. Fundamento de los deberes de garantía. Madrid: Civitas.

Luzón, Diego-Manuel (2016). Lecciones de Derecho Penal. Parte General. 3ª edición, ampliada y revisada. Valencia: Tirant lo Blanch.

Pérez Manzano, Mercedes (2018). La caracterización del feminicidio de la pareja o expareja y los delitos de odio
discriminatorio. En Derecho PUCP, N°81, diciembre-mayo, 163-196.

Rodríguez, Julio y Diaz, Ingrid (2019). Sobre la interpretación del delito de feminicidio y el enfoque de género. Análisis
comparado de la jurisprudencia penal y colombiana más importante. En Revista Electrónica de Estudios Penales y de
Seguridad, N Extra 5, 2019, 1-12.

Rodríguez, Julio (2022). Justicia Penal y Violencia Feminicida: Un estudio de la aplicación de la categoría feminicidio por
parte de la Corte Suprema de Justicia de Perú. Tesis para sustentar el grado de Magíster en Derechos Humanos. Lima:
Pontificia Universidad Católica del Perú.

Rivas, Sofía (2019). El contexto de violencia y sus características. Comentarios al Acuerdo Plenario N° 06-2019/CIJ-116.
Gaceta Penal & Procesal Penal, Diciembre 2019, n°126, 45-57.

Bibliografía Pág. 27
Russell, Diana (2005). Definición del feminicidio y conceptos relacionados. En: Comisión Especial para Conocer y Dar Seguimiento
a las Investigaciones Relacionadas con los Feminicidios en la República Mexicana y a la Procuración de Justicia Vinculada
(Compiladora). Feminicidio, justicia y derecho (pp. 135-149). México D.F: Editoras. (Obra publicada originalmente en 2001).

Sánchez Málaga, Armando (2015). El dolo: ¿fenómeno espiritual o atribución normativa? Themis, Núm. 68, 61-76.

Sánchez Málaga, Armando (2018). Una teoría para la determinación del dolo. Premisas teóricas e indicadores del dolo.
Buenos Aires: BdeF.

Silva, Jesús María (2006). Sobre la interpretación teleológica en Derecho Penal. En Estudios de filosofía del derecho penal
(pp.365-395). Bogotá: Universidad Externado de Colombia.

Toledo, Patsilí (2009). Feminicidio. México D.F.: Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los
Derechos Humanos.

Vázquez-Portomeñe, Fernando (2018). “Sobre la tipificación del feminicidio en España. Algunas consideraciones
críticas”, UNED. Revista de Derecho Penal y Criminología, 3era Época, N°20, 207-247.

Jurisprudencia, normativa y otros documentos legales:


Comité de Derechos Humanos (1989). Documento del 10 de noviembre. Observación General 18 relativa a No Discriminación.

Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (2017). Documento del 26 de julio. Recomendación general
num. 35 sobre la violencia por razón de género contra la mujer, por la que se actualiza la recomendación general num.19.

Corte Interamericana de Derechos Humanos (2009). Sentencia del 16 de noviembre. Caso Gonzáles y otras (“Campo
Algodonero”) Vs. México.

Corte Suprema del Perú (2023). Sentencia del 2 de agosto de 2023. Recurso de Nulidad. Expediente 2215-2021/Cuzco
de la Sala Penal Permanente.

Corte Suprema del Perú (2022a). Sentencia del 2 de marzo. Recurso de Nulidad. Expediente 154-2020/Lima Sur de la
Sala Penal Transitoria.

Corte Suprema del Perú (2022b). Sentencia del 8 de junio de 2021. Recurso de Nulidad. Expediente 350-2021/Lima Sur
de la Sala Penal Permanente.

Corte Suprema del Perú (2021). Sentencia del 15 de septiembre. Casación. Expediente 278-2020/Lima Norte de la Sala
Penal Permanente.

Corte Suprema del Perú (2019a). Sentencia del 8 de enero. Recurso de Nulidad. Expediente 325-2018/Lima Norte de la
Sala Penal Transitoria.

Corte Suprema del Perú (2019b). Decisión del 12 de junio. Acuerdo Plenario 9-2019/CJ-116 del XI Pleno Jurisdiccional de
las Salas Penales Permanente, Transitoria y Especial.

Corte Suprema (2019c). Sentencia del 29 de octubre. Recurso de Nulidad. Expediente 453-2019/Lima Norte de la Sala
Penal Permanente.

Corte Suprema del Perú (2019d). Sentencia del 5 de noviembre. Casación. Expediente 851-2018/Puno de la Sala Penal
Transitoria.

Corte Suprema del Perú (2017a). Sentencia del 20 de febrero. Recurso de Nulidad 3155-2019/Lima de la Segunda Sala
Penal Transitoria.

Corte Suprema del Perú (2017b). Sentencia del 10 de marzo. Recurso de Nulidad 3270-2015/Junín de la Segunda Sala
Penal Transitoria.

Corte Suprema del Perú (2017c). Decisión del 12 de junio. Acuerdo Plenario 1-2016/CJ-116 del X Pleno Jurisdiccional de
las Salas Penales Permanente y Transitoria.

Corte Suprema del Perú (2016). Sentencia del 15 de diciembre. Recurso de Nulidad. Expediente 125-2015/Lima de la
Sala Penal Transitoria.

Ley 30364, Ley para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres y los Integrantes del Grupo Familiar.
El Peruano, 23 de noviembre de 2015.

Tribunal Constitucional (2020). Sentencia del 5 de marzo. Expediente 03378-2019-PA/TC.

Tribunal Constitucional (2016). Sentencia del 21 de octubre. Expediente 06040-2015-PA/TC.

Tribunal Constitucional (2003). Sentencia del 3 de enero. Expediente 0120-2002-AI/TC.

Bibliografía Pág. 28
UNIÓN EUROPEA

También podría gustarte