Terrario Miniatura
Terrario Miniatura
Terrario Miniatura
MINIATURA
Un terrario es un espacio, que puede ser un recipiente de estilo pecera, en el que
se intenta reproducir, de manera artificial, las condiciones de un hábitat
específico para crear un pequeño ecosistema. Este ecosistema es como
un pequeño jardín en el que se busca provocar ciertos fenómenos que permiten
la auto sustentabilidad.
Un terrario bien hecho es un sistema autónomo que genera casi todo lo que
necesita para seguir viviendo. Los terrarios pueden ser desérticos, selváticos,
tropicales, entre muchas otras opciones que presentan diferentes grados de
dificultad, tanto para su diseño como para su mantenimiento.
- Paisajismo
- Diseño
- Jardinería
- Biología
Sus creaciones están vivas y, para que lo sigan estando, deben crear ambientes
donde las plantas puedan prosperar. Muchos artistas se atreven a ir aún más lejos
y diseñan piezas en los que se pueden controlar variables como si se tratara de
estaciones.
Tipos de terrarios
Existen dos tipos de terrarios:
Los terrarios cerrados
Los podemos llamar también terrarios húmedos. Suelen recrear
condiciones de vida tropicales. A través de un complejo y sorprendente
sistema de condensación ellos mismos se encargan de mantenerse húmedos
y generar la mayoría de las variables que necesitan para vivir.
Los terrarios
abiertos
Podemos llamarlos
también te rrarios áridos o
secos. En este tipo de creación se utilizan cactus y suculentas de colección.
La resistencia de estas plantas hace que, aunque no se genere agua, el
ecosistema también sea prácticamente autónomo. El mantenimiento que
este tipo de diseño requiere es mínimo.
Decoración: Los terrarios son una excelente opción para decorar espacios
interiores, ya que brindan un toque de naturaleza y belleza. Pueden ser
colocados en estanterías, mesas o colgados en la pared, añadiendo un
elemento vivo y colorido al ambiente.
Estudio y observación: Los terrarios son una herramienta ideal para
investigar y aprender sobre el ciclo de vida de las plantas y los animales.
Permiten observar de cerca cómo se desarrollan y se relacionan entre sí,
fomentando el interés por la ciencia y la naturaleza.