Laicos Adultos y Jóvenes

LAICOS ADULTOS Y JÓVENES
ESPIRITUALIDAD COMPARTIDA
La alegría en la vida diaria
como lugar del encuentro con Dios
Equipo de Pastoral Juvenil

INTRODUCCIÓN
En este artículo queremos abordar la “espiritualidad compartida con el
ABOUT
mundo juvenil” desde un foco muy actual y gratificante para el
hombre de hoy, en particular de los jóvenes. Aquello que está en el
ADN del ser joven: Vivir en clave de alegría, la vida cotidiana1.
Decimos que es “una espiritualidad compartida” ya que desde el

mundo adulto que acompaña a los jóvenes quedamos impregnados
con la vitalidad, energías, alegría y cuanto sentimiento irradian los
jóvenes que pareciera un contagio por osmosis.
1
Descripción que he agilizado con algunos subtítulos, subrayados y preguntas para la
propia revisión personal y/grupal con quienes compartimos la misma tarea educativa.
Acercamiento desde la Psicología
La alegría como estado del alma
La psicóloga Paula Serrano2 nos hace una interesante descripción de
ABOUT
este estado del alma que llamamos la “Alegría”. Palabra que común-
mente expresamos en la vida cotidiana como “contentos, todo anda
bien, buena época…etc. Tendemos a hablar también de “felicidad”
como la meta buscada por el hombre y la más misteriosa. La alegría es
uno de los caminos que nos ayudan a ser felices. Es un estado de
ánimo, o sea, un estado del alma, que se caracteriza por ser ni tan du-
radera ni tan profunda como la felicidad, pero que es un estado mara-
villoso al que todos deberíamos querer acceder.
Es un sentido claro, aparentemente sencillo, de agradecimiento de la

vida. Nace en la parte más inconsciente de las personas y al hacerse
consciente se va a la piel- la alegría es un asunto de piel- que, a pesar
de su modestia, tal vez de su humildad porque no pretende perman-
ecer, produce momentos largos y cortos que pueden parecer eternos,
de extremado gozo y alegría.
2
Revista “Ya” . El Mercurio N° 1819. 31 Julio 2018.
La alegría no siempre tiene razones, la felicidad sí. Esta falta de razón
ABOUT
es una gran razón para cultivarla y cuidarla, porque puede ser una ac-
titud capaz de sobreponerse a las circunstancias más adversas.
La historia, con mayúsculas pero también nuestra pequeña historia,

requiere a veces de sentires que no están de moda, para acceder a la
alegría. La conciencia del deber permanente es el peor enemigo. Por
eso recudimos al alcohol, a todo aquello que no parece razonable ni
apretado, para atrevernos a sentir la alegría…la gratuita, la alegría
porque sí. No la compra el dinero, una pena en estos tiempos que todo
parece comprarse y venderse.
El renacimiento incorporó la alegría como gozo de la belleza, en el

óleo y el mármol. Después vienen muchos siglos de guerras donde la
alegría era más un escape que un sentimiento verdadero. Y después,
la razón, dueña y señora de nuestro siglo. La alegría no siempre tiene
razones o no siempre sabemos cuáles son. Hay una forma de ex-
presión de alegría que ayuda mucho a saber cuán verdadera es…la
sonrisa. No la risa. Es interesante mirar a la gente en la calle, tratar de
ABOUT
adivinar si hay alegría, ahí, en ese momento.
Ahora que está de moda el ahorro habría que tener pequeñas reservas
de alegrías. Habría que tener un espacio de reserva con los recuerdos
y momentos alegres, que nos permita traerlos de vuelta, por un
instante. Hay que recuperar la alegría, la verdadera, que no es eufórica
ni se hace notar. Es dulce y es sana.
¿SOY UNA PERSONA ALEGRE? ¿CÓMO LA EXPRESO? LOS
DEMÁS ¿SE DAN CUENTA DE MI EXPRESIÓN DE VIVIR ALEGRE?
A partir de esta descripción, cómo no traer a la mente la exhortación

de San Pablo en su Carta a los Filipenses, “Estén siempre alegres en
el Señor; les repito, estén alegres. Que todo el mundo
los conozca por su bondad. El Señor está cerca. Que nada los angustie;
al contrario, en cualquier situación presenten sus
deseos a Dios orando, suplicando y dando gra-
cias”. (Fil. 4, 4-6).
“Una espiritualidad pascual
de la alegría y del optimismo”3
ABOUT
SUSTENTO TEOLÓGICO DE LA ALEGRÍA
La verdad decisiva de la fe cristiana es el Señor resucitado. La gloria

eterna es nuestra meta última ya desde ahora, porque se ha hecho
realidad en el cuerpo de Jesucristo. La espiritualidad juvenil salesiana
es pascual y escatológica.
Las tendencias más arraigadas en el corazón de la persona son el

deseo y la búsqueda de la felicidad. La alegría es la expresión más
noble de la felicidad y, junto con la fiesta y la esperanza, es carac-
terística de la espiritualidad salesiana. La fe cristiana es por vocación
un anuncio de felicidad radical, promesa y concesión de “vida
eterna”, sin límites de espacio, de tiempo ni de aspiraciones. El des-
cubrimiento del Reino y el encuentro con Cristo se convierten en
bienaventuranzas del hombre.
3
CRPJ pág. 94-95
Sin embargo, estas realidades no son una conquista, sino un don.
ABOUT
Dios es la fuente de la verdadera alegría y de la esperanza. Sin excluir
el valor pedagógico de la alegría, se afirma ante todo su valor
teológico.
¿CUÁL DE ESTAS CARACTERÍSTICA TEOLÓGICAS NOS QUEDA

POR PROFUNDIZAR?
3
CRPJ pág. 94-95
ABOUT
¿CÓMO LA ENTENDIÓ DON BOSCO?
Don Bosco ve en ella una manifestación imprescindible de la vida de

gracia.
Don Bosco entendió, e hizo entender a sus jóvenes, que compromiso

y alegría van unidos, que santidad y alegría son un binomio insepara-
ble. Don Bosco es el santo de la alegría de vivir y sus jóvenes aprend-
ieron bien su lección de vida, en lenguaje típicamente oratoriano: la
“santidad consiste en estar siempre alegres”4 La Pastoral Juvenil Sale-
siana propone un camino de santidad sencilla, alegre y serena5 .
4
(cfr. CG23, n. 165).
5
(cfr. Const. 17; CG23, nn. 165- 166; Carta de identidad carismática de la Familia Salesi-
ana, n. 33).
ABOUT
CAMINO PEDAGÓGICO A LA EXPRESIÓN
DE LA ALEGRÍA
Apreciar la alegría como acción del Espíritu Santo, fuente de compro-
miso y fruto suyo, exige que se fomenten en los jóvenes algunas acti-
tudes y experiencias:
- la experiencia gozosa del afecto a las personas en un ambiente

de participación y de relaciones sinceramente amistosas y fra
ternas;
- la libre expresión en las fiestas juveniles y en los encuentros de
grupo;
- la admiración y el gusto por las alegrías que el Creador ha
puesto en nuestro camino: la naturaleza, el silencio, el deber
cumplido conjuntamente con sacrificio y solidaridad;
- la gracia de poder vivir la cruz y el sufrimiento bajo el signo y el
consuelo de la Cruz de Cristo.
¿CUÁL(ES) DE ESTAS 4 ACTITUDES Y EXPERIENCIAS TENGO
MÁS O MENOS CULTIVADAS?
3
CRPJ pág. 94-95

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Decimos que es “una espiritualidad compartida” ya que desde el

Es un sentido claro, aparentemente sencillo, de agradecimiento de la

La historia, con mayúsculas pero también nuestra pequeña historia,

El renacimiento incorporó la alegría como gozo de la belleza, en el

A partir de esta descripción, cómo no traer a la mente la exhortación

La verdad decisiva de la fe cristiana es el Señor resucitado. La gloria

Las tendencias más arraigadas en el corazón de la persona son el

¿CUÁL DE ESTAS CARACTERÍSTICA TEOLÓGICAS NOS QUEDA

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- la experiencia gozosa del afecto a las personas en un ambiente

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