Musica en Llas Reducciones Jesuitiicas
Musica en Llas Reducciones Jesuitiicas
Musica en Llas Reducciones Jesuitiicas
Investigación tema:
Investigadores
ORCID: 0009-005-2477-5964
ORCID: 0009-0007-1633-1778
Jorge Bedoya
Maestro de capilla del Museo de Arte Jesuítico de San Ignacio Guazú
ORCID009-0008-0665-3148
Año 2024
1
I-MARCO INTRODUCTORIO
1.1- Tema: Capillas musicales en las Misiones Jesuíticas
del Paraguay
Uno de los mayores problemas para comprender las actividades del periodo reduccional
y por sobre todo colonial es la tendencia a considerar a todos los indígenas como seres
explotados y mano de obra esclava y además ignorante , e ignorar que en la colonia
tanto en territorio se los conquistadores como los jesuitas se preservaron las elites
locales e insistieron en su formación.
Un ejemplo fuera del ámbito de las reducciones es el caso de ello son los caciques
Fernández Guarachi, en especial Gabriel que estuvo activo entre 1644 a 1647 en el Perú
y que en su testamento deja bienes para la construcción de iglesias y José Fernández
Guarachi que estudió en el colegio de la Compañía de Jesús de La Paz y en San
Bernardo del Cuzco siendo mallku de Machaca, fue designado alcalde de los cuatro
suyus y se le concedió el uso del escudo de armas en virtud de su ascendencia inca.
Esta familia indígena fue quien se encargó de hacer pintar las series de San Antonio
Abad y las Postrimerías en la Iglesia de Caquiaviri. (Mazzini, 2013)
Por último la película británica “La Misión” de 1986 ha instalado un imaginario de una
reducciones jesuíticas llena de indígenas con taparrabos, que a juzgar con los
documentos y actuales investigaciones no tienen nada que ver con el esplendor de vida
de entonces.
2
Pregunta general
Guaraníes?
Preguntas específicas
1609?
Objetivo general
de los Guaraníes.
3
Objetivos específicos
Jesús antes de la fundación de San Ignacio Guazú, primera reducción fundada en 1609.
el año 1767.
1.5- Justificación
Contribución a la musicología hispanoamericana , nos comenta que hay países con las
arcas repletas de archivos musicales que contienen nuestro pasado musical, pero que
preocupación es efectiva, pero insuficiente. Puede que aún queden resabios de una
Es por eso que una gran parte de la población paraguaya ( fenómeno igual se da en
Argentina y Brasil) no identifica la música que hace 400 años sonaba en sus territorios
en gran parte porque esto ha sido propiciado durante los dos siglos de aparición de los
educación de la época a partir del primer experimento reduccional que es San Ignacio
Guazú donde funcionó la primera capilla musical de la región mediante la presencia del
La tarea realizada por Berger convirtió a San Ignacio Guazú en un centro musical de
extraordinaria importancia y notoria fama por todo aquel territorio. De ello son buena
muestra las múltiples noticias que existen sobre las frecuentes actuaciones de los
II-MARCO TEÓRICO
2.1-Marco Conceptual
del Paraguay” nos cuenta que en la ceremonia de la ascensión de las nuevas autoridades
del cabildo entre los símbolos del poder como estandartes, el bastón de mando del
corregidor y otros figuraba lo que hoy llamaríamos la batuta del maestro de música, y
Describiendo la sesión de asunción al mando del nuevo Cabildo el mismo Cardiel nos
relata: Acabados de nombrar todos los del Cabildo, nombra los que pertenecen a la
Iglesia: sacristán, maestro de Capilla, etc. y otros jefes de otros oficios políticos y
solemnidad.
El relato de la calidad de estos maestros y sus músicos varia ente la Charlevoix citado
por Furlong cuando cuenta que : “Aunque aprenden a cantar, levendo la música de las
piezas más difíciles, casi se podría decir que son cantores por naturaleza” (Furlong,
1962) hasta la de una carta atribuida a Francisco Riveros a Francisco Ricardo, ambos
jesuitas y que mediante estudios del contexto histórico se fecha en el año 1651cuando
(Illari, 2006)
6
¿Quiénes eran estos congregantes?, ¿Por qué hay piezas dedicadas a ellos conservadas
música?, ¿De qué clase de asociación formaban parte? Y si dilucidar la relación de los
1584 el Papa Gregorio XIII dio carta de naturaleza a esta Congregación de Estudiantes
esta p Dos años más tarde, Sixto V le concedió al General de la Compañía la facultad de
Estudiantes solos, o de otros Fieles solos, o de unos, y otros juntos con el Título de la
espirituales.
orden jesuítica, que buscaba “unir virtud y letras”, dedicando especial atención a
capacidad”y agrega que En numerosas cartas anuas, tanto de pueblos de guaraníes como
En las misiones de la provincia jesuítica del Paraguay, ¿quiénes fueron los elegidos por
los méritos necesarios para formar parte de una Congregación Mariana? Tal vez estas
palabras del padre Juan Bautista Hornos, escritas el 27 de febrero de 1629 en la carta
8
anua del pueblo de San Ignacio del Paraná, pueda ayudarnos a conjeturar una respuesta:
Con los cantores, como gente de más calidad, se tiene mayor cuidado de que se vayan
creciendo en virtud.
Otra pregunta que se hace esta investigadora es : ¿Eran los músicos considerados líderes
de sus comunidades y por lo tanto los especiales destinatarios de los cuidados de los
padres? Las palabras iniciales de la carta nos dan lugar a pensar que al menos “los
cantores” lo eran. Es conocido ya el status privilegiado del que gozaban los músicos en
los pueblos de las misiones bajo la tutela de la Compañía; está probado que en las
escuelas de música y letras tenían precedencia los hijos de los caciques y principales de
los pueblos, hecho que pone en relación directa a la clase dirigente indígena con el
ministerio musical. Se sabe también que los músicos ocuparon cargos de preeminencia
conserve escrita al pie de una particela de bajo continuo con la firma del maestro de
capilla en ejercicio a principios del siglo XIX, Julián Arayuru, refuerza nuestra intuición
de que existía una relación muy íntima entre músicos y Congregantes. En las cartas
anuas el trato para ambos es uniforme, como si ser congregante fuera sinónimo de ser
músico.
Por último se pregunta la autora de este artículo: ¿todos los congregantes eran músicos?,
¿todos los músicos eran congregantes?, ¿en todos los pueblos había congregantes-
sirvió como instrumento para hacer que “se vayan creciendo en virtud y aprovechando
noticias de que las mujeres hayan sido admitidas por los jesuitas para ejercer el
ministerio de la música.
Finaliza la autora con una opinión personal diciendo: Mi imagen del congregante-
músico indio de una misión chiquitana condice lo que el Padre Comentali escribe en una
de sus cartas a propósito de los cantores guaraníes de San Ignacio de Paraná, aquellos
mismos que dos años más tarde le suplicarían hacerse siervos de María. De su devoción
y bondad no digo más que lo que dijo el P. Antonio Moranta en viéndolos que son como
el que en una carta atribuida a Francisco Riveros a Francisco Ricardo, ambos jesuitas y
que mediante estudios del contexto histórico fecha en el año 1651, en la Reducción de
Itapúa.
Dicha carta versa sobre un grupo de músicos que deben viajar para una presentación y
buen ensamble por lo menos a la medida de lo que se esperaba. esta carta presenta la
particularidad única de dejar entrever los problemas reales con las que se enfrentaban
los maestros de música y los organizadores, puesto que generalmente los relatos de la
época tienen un carisma romántico y evitan revelar cualquier conflicto interno que
10
podría darse en las Reducciones. este documento hallado por el investigador revela
situaciones cotidianas que dictaban del relato oficial, como la afirmación de no poder
contar con los músicos de la reducción de San Nicolás pues su maestro no sabía cantar
ni tocar.
Por otra parte la selección de los músicos de distintas agrupaciones para conformar un
ensamble viable para una presentación las situaciones que esto genera brinda una
una metodología “hermenéutica” utilizada por otros musicólogos, al faltar lugar y fecha
el investigador ha puesto en contexto otros datos para logra arribar a una conclusión
sobre estas faltantes así como que , Viveros se muestra insólitamente bien informado de
funcionamiento del aparato didáctico-musical jesuítico ya que la carta muestra que los
jesuitas preocupados por la práctica musical de los pueblos fueron muchos más que los
Concluye el autor: Una carta proveniente de las reducciones jesuíticas de Guaraníes, sin
fecha ni firma, es tal vez el más raro de los documentos sobre música jesuítica que han
sobrevivido. Este artículo identifica su autor y propone una fecha tentativa y un posible
lugar de origen. La carta confirma que, hacia 1650, la práctica musical de las
vihuelas de arco y vientos, pero no todavía el arpa. Muestra también gran- des
sus augusto soberanos Carlos IV y María Luisa de Borbón. Este estudio muestra la
manera en la que los indígenas de las antiguas misiones jesuitas celebraron la llegada al
trono de Carlos IV: Las Composiciones músicas que los canichanas y moxos realizaron
para el soberano y para la Reina María Luisa de Borbón permiten indagar en el sentir
misiones, estas obras, y el informe que las acompaña, revelan el trabajo de las capillas
documentos musical.
atención solamente porque celebran desde los confines amazónicos el poder real, sino
moxeña. Estas obras rompen el anonimato instituido por los jesuitas sobre sus
misionales de Moxos y otras tantas del archivo de Chiquitos, las que fueron enviadas a
España y se hallan en el Archivo de Indias, son las únicas en poseer tres firmas “de
Ycho y Juan Josef Nosa. Aunque no volvemos a tener huella del trabajo de estos
descendientes: los últimos maestros de capilla indígenas, los cuales formarían parte de
Bolivia.
III_MARCO METODOLÓGIVO
3.1-Descripción del lugar de investigación
La investigación se realizará en el espacio geográfico denominado Paraquaria o
Misiones Jesuíticas del Paraguay que comprende aquellas que conformaba el territorio
de las misiones de los 30 pueblos y que hoy se encuentran distribuidos entre Paraguay
realizar un estudio que se refiera solamente a el territorio de las misiones jesuíticas que
los habitantes actuales de las áreas donde se encuentran las antiguas misiones jesuíticas.
participante en capillas de música que han sido reactivadas en la actualidad como los
13
de herencia jesuita.
CRONOGRAMA
Enero ---Elaboración y presentación del anteproyecto del proyecto
Febrero- Recolección de datos y redacción del borrador
Marzo- Presentación del proyecto y correcciones finales
Abril- Socialización con referentes y ultima corrección
Mayo- Presentación de la Investigación en la Asamblea de 30 Pueblos.
14
Bibliografía
(s.f.).
Alonso, M. L. (s.f.). Real Academia de la Historia-España. Obtenido de
https://dbe.rah.es/biografias/13679/luis-berger
Antezana-Hanel, L. (2016). Capillas musicales de las misiones jesuitas: El homenaje de
los indios Canichanas y Moxos a sus augustos soberanos Carlos IV y María
Luisa de Borbón. e-Spania Revue interdisciplinaria d´etudes hispaniques
mediévales et modernes.
Cadogan, L. (1960). Mil apellidos guaraníes. Aporte al estudio de la onomástica
paraguaya. Asunción : Editorial Toledo.
Cardiel, J. (2023). La breve Relación de las Misiones Del Paraguay. Obtenido de Portal
Guaraní:
https://www.portalguarani.com/1631_jose_cardiel/22261_la_breve_relacion_de_
las_misiones_del_paraguay__por_jose_cardiel_.html
Castagna, P. (2006). Canto der organo en casas y aldeas jesuíticas Brasileñas en los
siglos Cvi y XVII. Revista del Instituto de Investigación Musicológica "Carlos
Vega", 71-96.
Claro, S. (1967). Hacia una definición del concepto de musicología. Nrcista musical
chilena, 8-25.
El jesuita francés Luis Berger: un artista del Paraguay en los albores del siglo XVII.
(2016). Temas Antropológicos, Revista Científica de Investigaciones
Regionales-, Universidad Autónoma de Yucatán, 67-87.
Furlong, G. (1962). Misiones y sus pueblos guaraníes. Buenos Aires.
Illari, B. (2006). Carta de Misiones-Sobre la música Jesuítico-guaraní en 1651. Revista
del Instituto de investigación musicológica "Carlos Vega", 97-113.
Mazzini, A. (2013). El tercer espacio en las pinturas de Caquiaviri. XIV Jornadas
Interescuelas/Departamentos de Historia. Departamentode Historia de la
Facultad de Filosofía y Letras. Universidad Nacional deCuyo, Mendoza.
15