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RÍOS VOLADORES

1. INTRODUCCIÓN

Los ríos voladores no son cuerpos de agua en el sentido tradicional, son


una corriente masiva de vapor que asciende desde la vegetación
amazónica y luego se desplaza a miles de kilómetros, como si fueran
ríos en el cielo corrientes de aire que transportan vapor de agua desde
la Amazonia, en la zona ecuatorial del norte de Sudamérica, hasta el
norte de Argentina. La humedad transportada por estos “ríos voladores”
es responsable de gran parte de la lluvia que cae en el centro-oeste,
sudeste y sur de Brasil.

Al entrar en contacto con determinadas condiciones meteorológicas,


como por ejemplo un frente frío, esta humedad (que ni siquiera
notamos) puede transformarse en lluvia. Lluvia que es de vital
importancia para la vida en general y para la economía del país, regando
los cultivos, llenando los verdaderos ríos terrestres y las represas que
nos proporcionan energía.
Por sorprendente que parezca, la cantidad de agua transportada por los
ríos voladores podría ser igual o incluso mayor que el caudal del
poderoso Amazonas.

El término “ríos voadores” o ríos voladores, también conocidos como


“ríos aéreos”, fue popularizado en Brasil por el Dr. José Marengo (CPTEC)
para describir un fenómeno meteorológico conocido técnicamente como
“chorros de bajo nivel”, corrientes de aire que transportan vapor de
agua a través de la Amazonia y por el flanco oriental de los Andes hacia
otras regiones de Brasil e incluso hasta el norte de Argentina.

Los ríos voladores fueron descritos por primera vez a finales del siglo
pasado por unos investigadores del Instituto Tecnológico de
Massachusetts, quienes detectaron un movimiento inusual en los
patrones del viento en la región amazónica y descubrieron unas bandas
estrechas de miles de kilómetros de longitud compuestas por vapor que
aparecieron en unas imágenes satelitales.

“Las masas de aire del Atlántico, fluyen hacia la cuenca del Amazonas y
luego chocan con los Andes donde se desvían y aceleran, en ese punto
parecen un río”, de ahí el nombre de Río Atmosférico, Corriente en
Chorro de Bajo Nivel o, el más popular, Ríos Voladores”, explica el
científico y climatólogo peruano José Marengo.
Carlos Rodríguez, director de la fundación Tropenbos Colombia, y
conferencista del Simposio Universidades y Amazonía que organizó en
septiembre de 2022 la Pontificia Universidad Javeriana en asocio con la
Universidad de la Amazonía en Florencia, Caquetá, explicó para Hoy en
la Javeriana que “la región amazónica, llamada comúnmente el pulmón
del planeta, debería compararse más con las funciones de la vejiga y el
riñón ya que, más que regular el oxígeno, se encarga sobre todo de
regular la lluvia. Además del trabajo tan importante que hace esta parte
del planeta con el agua del Océano Atlántico, que al entrar al amazonas
genera unos cambios de presión que son físicamente imposibles y
fundamentales para la transpiración del planeta y la circulación del
agua”.

A pesar de su importancia, los ríos voladores enfrentan una serie de


amenazas en la actualidad. La deforestación y la degradación del
bosque amazónico han reducido la cantidad de vapor liberado en el aire,
disminuyendo la formación de nubes y las precipitaciones en las áreas
receptoras.

Con el fin de hacer evidente los diversos riesgos que tiene la región
amazónica y ampliar el conocimiento mutuo entre investigadores,
académicos y actores locales que adelantan proyectos en la Amazonía,
así como el papel de las universidades, es que se realizará el Simposio
Amazónico: universidades y Amazonia, el 25, 26 y 27 de octubre 2023
en el campus de la Universidad Javeriana. Para esta ocasión el tema del
simposio será: Debates y perspectivas sobre el cambio climático, la
deforestación y el buen vivir en la amazonía.

A lo largo de los tres días del Simposio se profundizará sobre la


recuperación ambiental y social del cambio climático en la Amazonía; la
relación entre la deforestación, la reforestación y la economía en la
región amazónica; y las iniciativas sobre desarrollo humano y buen vivir.

2. ¿Que son los ríos voladores y cómo se forman?

De acuerdo con el Observatorio Regional Amazónico, los ríos voladores


son corrientes de vapor de agua que se generan en la selva amazónica y
fluyen a través de la atmósfera, transportando humedad hacia otras
regiones de Sudamérica.
Este fenómeno se produce debido a la evapotranspiración. Según un
informe realizado por Periodistas por el planeta, este proceso consiste
en lo siguiente:
1. La evaporación del agua de la superficie oceánica sube a la
atmósfera en la zona del océano Atlántico tropical.
2. Luego, a medida que avanza el recorrido continental de la nubes, se
complementan con la evaporación de las plantas en la zona selvática
del Amazonas.
3. Una vez formadas las corrientes de aire que transportan esta
humedad, chocan con la cadena montañosa de los Andes que, junto
a los vientos alisios, provocan la formación de los ríos voladores.
4. Estos ríos viajan por el continente generando precipitaciones en
áreas lejanas a la fuente original. Principalmente, en el sur de Brasil,
Uruguay, Paraguay y el norte de Argentina.

De esta manera, el fenómeno se construye como un círculo perfecto: al


mismo tiempo que necesitan de dicha flora y fauna para formarse, los
ríos voladores son un fenómeno atmosférico fundamental para la
distribución del agua en el continente sudamericano y la preservación
de la biodiversidad en la región.
3. Importancia Ecológica

a. Regulación del Clima: Los ríos voladores son esenciales para


la regulación del clima en Bolivia y en regiones circundantes.
Contribuyen a las lluvias que sustentan ecosistemas y la
agricultura.
b. Biodiversidad: La Amazonía es uno de los lugares más
biodiversos del planeta. La humedad transportada por los ríos
voladores permite la existencia de una amplia variedad de
especies de flora y fauna.
c. Recursos Hídricos: Estos ríos voladores son una fuente de
agua para muchos ríos y cuerpos de agua en Bolivia, lo que es
vital para las comunidades locales y la agricultura.

4. ¿Cómo un árbol contribuye a este proceso?

a. Evaporación: Cuando el sol calienta el suelo y el agua en la


superficie, parte de esta se evapora. Sin embargo, los árboles
juegan un papel crucial en la liberación de agua a través de la
transpiración.

b. Transpiración: Los árboles absorben agua del suelo a través de


sus raíces. Esta agua se transporta a través del tronco y las ramas
hasta las hojas, donde se libera como vapor de agua a la
atmósfera a través de pequeños poros llamados estomas.

c. Contribución a la humedad atmosférica: A medida que


muchos árboles transpiran, generan grandes cantidades de vapor
de agua. Este vapor se acumula en la atmósfera, aumentando la
humedad en la región.

d. Formación de nubes: El vapor de agua asciende y se enfría a


medida que se eleva. Cuando alcanza altitudes donde la
temperatura es más baja, el vapor se condensa en pequeñas gotas
de agua, formando nubes.

e. Corrientes de aire: Estas nubes pueden ser transportadas por


corrientes de aire, formando los llamados "ríos voladores". Estos
ríos de vapor de agua pueden trasladar grandes cantidades de
humedad a largas distancias, a menudo hacia áreas donde se
producen precipitaciones.

f. Precipitación: Cuando el vapor de agua se condensa lo


suficiente, puede caer a la tierra en forma de lluvia, completando
así el ciclo del agua.

Este proceso es fundamental para el mantenimiento de los ecosistemas


y la disponibilidad de agua dulce en muchas regiones.
Un árbol grande puede bombear del suelo y sudar más de mil litros de
agua en un solo día! Las raíces son succionadores sofisticados
extremadamente inteligentes que buscan el agua subterránea. Además
de fijar el cuerpo de la planta al suelo, chupan esa agua y sales
minerales (savia bruta) que encuentran. Los xilemas dentro de los
troncos desafían la gravedad y hacen subir esa savia por 40 a 60 m. En
las hojas, se realiza la fotosíntesis y la magia de la transpiración,
transfiriendo agua en forma de vapor a la atmósfera. La selva del
Amazonas transpira 20 mil millones de toneladas de agua por día. Eso es
más que el volumen vertido en el océano Atlántico por el río Amazonas,
de 17 millones de toneladas al día.

5. ¿Cuál es el recorrido del Río Volador de Sudamérica?

Una parte de este aire logra superar la cordillera y deposita lluvia en


el oeste del Perú. Otras masas de aire viajan hacia el norte desde la
cuenca del Amazonas, pasando por Colombia, Venezuela, Guyana,
Guayana Francesa y Surinam

6. ¿Dónde nace el río amazonas?

El río Amazonas se encuentra en la parte norte de América del Sur y


fluye de oeste a este. El sistema fluvial se origina en la cordillera de
los Andes de Perú y recorre Ecuador, Colombia, Venezuela, Bolivia y
Brasil antes de desembocar en el océano Atlántico.

El sistema más extenso, con diferencia, está formado por el río


Amazonas , que se extiende unos 6.400 kilómetros por la Sudamérica
ecuatorial. El volumen de agua que transporta supera al de todos los
demás ríos y constituye una quinta parte del total de agua dulce que
fluye en el mundo.
7. Ubicación de la selva amazónica

Casi el 60% de la selva tropical se encuentra en Brasil, mientras que el


resto se comparte entre otros ocho países: Bolivia, Colombia, Ecuador,
Guyana, Perú, Surinam, Venezuela y la Guayana Francesa, un territorio
de ultramar de Francia.

La Amazonía es fundamental para el mantenimiento del equilibrio


climático mundial tiene una gran influencia en el transporte de calor y
vapor de agua para las regiones localizadas en latitudes más elevadas.
Además tiene un papel muy importante en el secuestro de carbono
atmosférico, y con ello contribuye a la reducción del calentamiento
global.
Todo lo que se dice respecto a la Amazonía es inmenso, grande,
desafiante y muchas veces inmensurable. Los retos del pasado y del
futuro se nos imponen en el presente. Para actuar en beneficio de la
región es imprescindible conocer sus peculiaridades y características.
Representa más de la mitad del bosque húmedo tropical del planeta y es
la mayor floresta tropical del mundo. La región representa entre 4 y 6%
de la superficie total de la Tierra y entre 25 y 40% de la superficie de
América.
La Amazonía es también sinónimo de diversidad cultural, la cual es
resultado de un proceso histórico de ocupación del territorio e
interacción entre grupos humanos de distinta procedencia étnica y
geográfica.
El Ciclo Hidrológico Amazónico alimenta un complejo Sistema de
acuíferos y aguas subterráneas, que puede abarcar un área de casi 4
millones de km2 entre Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y
Venezuela.
La Amazonía alberga una gran variedad de especies de flora y fauna,
que ha permitido establecer marcas mundiales de diversidad biológica.
También es un área importante de endemismos, lo que hace de ella una
reserva genética de importancia mundial para el desarrollo de la
humanidad.
8. a importancia del bosque tropical amazónico para el clima
local y mundial

Bajo condiciones naturales, las plantas extraen el CO2 de la atmósfera y


lo absorben en la fotosíntesis, un proceso creador de energía que
produce: oxígeno, el cual es liberado de nuevo en el aire y… carbono, el
cual permite que la planta crezca. Por lo tanto, sin bosques tropicales el
efecto invernadero probablemente sería aún más pronunciado, y es
posible que el cambio climático empeore aun más en el futuro.1

Los bosques tropicales y las regiones boscosas (por ejemplo, sabanas)


intercambian grandes cantidades de agua y energía con la atmósfera, y
se cree que juegan un papel importante en el control de los climas
locales y regionales. El agua liberada por las plantas sube hacia la
atmósfera por medio de la evapotranspiración (evaporación y
transpiración de las plantas) y fluye por el aire a diversas partes de
América en verdaderos “ríos voladores”. Este fenómeno sumado a la
gran cantidad de agua que la cuenca aporta al océano, influye en el
clima mundial y la circulación de las corrientes oceánicas.

El bosque tropical amazónico ha sido reconocido por largo tiempo como


una reserva de servicios ecológicos no sólo para los pueblos indígenas y
las comunidades locales, sino también para el resto del mundo. Se trata
además del único bosque tropical que queda de ese tamaño y diversidad
9. Recurso Hídrico
 Reserva hídrica regional y mundial
 Regula el clima planetario y regional (absorción de carbono y procesos
de evapotranspiración)

10. La "bomba biótica de humedad"


Los científicos han descubierto recientemente que una combinación de
una "bomba biótica de humedad" y "ríos voladores" de la selva
amazónica trae lluvias a Bolivia. A menudo se dice que la selva
amazónica es el "pulmón del planeta", pero este bosque también
funciona como el "corazón de la madre tierra" bombeando humedad del
océano hacia el interior del continente y alimentando el gran sistema
cardiovascular de los ríos, tanto terrestres (las venas) como
atmosféricos (las arterias). Este corazón sólo hace eso gracias a la
cubierta forestal casi continua desde la costa hasta el interior del
continente.

Así el bosque sirve como un acueducto hasta los Andes y mucho más
allá.
El bosque natural de la Amazonía tiene alrededor de 600 mil millones de
árboles, y cada uno actúa como una gran máquina de evaporación
alimentada con energía solar. Estos árboles gigantescos bombean agua
subterránea desde sus raíces profundas hasta sus hojas donde lanzan
hasta 1.000 litros de vapor de agua a la atmósfera cada día. Un metro
cuadrado de bosque nativo puede contener entre 8 a 10 metros
cuadrados de hojas y por tanto producen flujos de vapor de agua que,
por unidad de superficie, son típicamente más de diez veces superior a
pastos o tierras de cultivo, e incluso superan de manera significativa lo
de aguas abiertas. A fuerza de interceptar y reciclar la escorrentía, los
árboles mantienen el agua en el aire, donde se sopla por los vientos
dominantes por miles de kilómetros en lo que se conoce como "ríos
voladores" de vapor de agua invisible.

Los Yungas de La Paz, donde los “ríos voladores” se encuentran con la


barrera de los Andes
En total, los árboles de la selva amazónica bombean un increíble total de
20 mil millones de toneladas de agua (20 kilómetros cúbicos) del suelo a
la atmósfera todos los días, lo que es más que la descarga de líquido del
propio Río Amazonas. Todo eso se alimenta de forma natural por una
cantidad increíble igual de energía solar. Calculando solamente lo que
evapora el bosque amazónica boliviano, la cantidad de energía solar
utilizada sería equivalente a casi cincuenta veces la producción total de
electricidad de Bolivia. Ese es un muy gran esfuerzo proporcionado
gratuitamente por los servicios ecológicos del bosque un valor oculto
del que la mayoría de las personas no se da cuenta.

El bosque natural no sólo bombea la humedad a la atmósfera, sino que


su abundancia de plantas y hongos también liberan sustancias químicas
(compuestos orgánicos volátiles biogénicos y sales de potasio) que
siembran las nubes que provocan lluvias. Así, el bosque tanto recibe
como genera lluvia.
Los "ríos voladores" de la selva amazónica
Estos procesos extensos de evaporación y precipitación en el bosque
también crean baja presión atmosférica que se jala constantemente al
aire húmedo del océano, de ahí el nombre de "bomba biótica de
humedad." Pero esta bomba sólo funciona en los bosques naturales
prístinos. Ni la vegetación de los bosques clareados artificialmente y
explotados, ni de las plantaciones, pastizales o cultivos son capaces de
activar la bomba biótica y mantener la humedad suficiente para la vida
óptima.
Pero el corazón de la madre tierra no sólo riega al Amazonas, brinda
las lluvias que dan vida a decenas de millones de personas más allá de
la selva tropical. Cuando los ríos voladores de vapor de agua alcanzan la
barrera de los Andes, lluvias fuertes caen al pie de las montañas. Los
árboles continuamente interceptan la escorrentía y, como ascensores,
alzan y lanzan esa agua a la atmósfera para que llegue hasta los
glaciares y lagos en lo alto de los Andes.
Los ríos voladores también giran hacia el sur y traen la humedad vital
hasta Paraguay, el norte de Argentina y el centro y el sur de Brasil, -
una región vibrante que representa el 70% del PIB de América del Sur.
De esta manera, el corazón de la madre tierra proporciona el agua para
la mayor parte de la agricultura que alimenta la población de
Sudamérica, y agua potable para las ciudades más grandes del
continente.

El gran Río Amazonas, la principal “vena” del “corazón de la Madre


Tierra”
Ya está previsto que el cambio climático impactará severamente la
disponibilidad de agua en los Andes debido a efectos tales como el
derretimiento de glaciares y nieve debido a la subida de temperaturas
de aire. Bolivia es considerada como uno de los países más vulnerables
a futuras reducciones en los suministros de agua porque cuenta con
varias grandes ciudades situadas por encima de 2.500 m.s.n.m. que
dependen de las reservas de agua de gran altitud, como los glaciares,
bofedales y lagos para complementar las escasas precipitaciones
durante la época seca. Es por ello que la deforestación constante en
las tierras bajas del Oriente sería muy imprudente. Se necesita el
bosque natural de la Amazonía para llevar el aire húmedo a los Andes y
traer la lluvia. Si esta selva esté dañada y destruida, las arterias de los
ríos voladores serán cortadas y el corazón de la madre tierra se romperá

11. Desafíos y amenazas

 Deforestación: La tala de árboles para la agricultura y la ganadería


reduce la cantidad de evapotranspiración, lo que puede disminuir la
formación de ríos voladores.

 Cambios en el Uso del Suelo: La expansión de la frontera agrícola y


las actividades industriales afectan la integridad del ecosistema
amazónico.

 Políticas Inadecuadas: La falta de implementación efectiva de


políticas ambientales y la corrupción pueden exacerbar la situación.

Las cifras son devastadoras: el 18% de los bosques amazónicos se ha


perdido por completo y un 17% adicional está degradado. Por si fuera
poco, los datos de la primera mitad de 2022 muestran que la pérdida
sigue creciendo.

La Amazonía está en crisis: sus bosques están amenazados debido a la


deforestación, los incendios y la degradación; el agua superficial se ha
perdido; y los ríos están cada vez más desconectados y contaminados.
Esta inmensa presión, si no se reduce o detiene, dañará
irreversiblemente la Amazonía y el planeta en general en un futuro muy
cercano.

Con el lanzamiento de su Informe Amazonía Viva 2022, WWF sintetiza la


información más reciente sobre la región, el vital rol que desempeña a
nivel mundial, las amenazas que enfrenta y las soluciones que requieren
un compromiso global sin precedentes para detener la destrucción de la
Amazonía.
Lo que está en riesgo

El Amazonas es un bioma complejo e incomparable por ser el sistema


fluvial y de bosque tropical más grande del mundo:

Personas: 47 millones de personas viven en la región amazónica y


dependen de ella para su sustento. Esto incluye a 2.2 millones de
pueblos indígenas de más de 500 grupos diferentes.
Biodiversidad y vida silvestre: El Amazonas alberga una
impresionante variedad de especies del mundo: 9% de mamíferos, 14%
de aves, 8% de anfibios, 13% de especies de peces de agua dulce y 22%
de especies de plantas vasculares. Muchas de estas especies no se
encuentran en ningún otro lugar del mundo, y los científicos estiman
que hay lugares en el Amazonas donde aún no se ha descubierto hasta
el 90% de las especies del Amazonas.

Si bien existen muchos ríos que fluyen libremente en la cuenca del


Amazonas, cientos de represas dentro de la red fluvial amenazan la
conectividad y la calidad del agua.

Bosques: Sin sus bosques, la región amazónica perdería su


biodiversidad, liberaría cantidades masivas de carbono, sufriría erosión
del suelo y enfrentaría devastación hidrológica y climática. Sin sus
servicios ecosistémicos, las comunidades locales y las personas de todo
el mundo se enfrentarían a la pérdida de medios de subsistencia,
bienestar y estabilidad ecológica.
Clima: La Amazonía es un importante sumidero de carbono que regula y
ayuda a estabilizar el clima del planeta. Cualquier pérdida o degradación
de sus bosques significa un aumento en las emisiones de carbono. Hoy,
la conversión de tierras y los incendios en la región ya están liberando
parte de ese carbono a la atmósfera a niveles récord.
Alimentos: Los “ríos voladores” del Amazonas transportan la humedad
fuera de la cuenca hacia la parte sur del continente, brindando las
condiciones necesarias para la agricultura en Argentina, Paraguay,
Uruguay y el sur de Brasil. La salud y la vitalidad de la cuenca del río
Amazonas también son fundamentales a nivel local para los millones de
personas que dependen de sus vías fluviales para pescar.
Agua dulce: El Amazonas es el río de flujo libre más grande del mundo.
Por albergar el 20% del agua dulce que se descarga en los océanos del
mundo, el Amazonas debe mantenerse saludable y fluyendo libremente.
Su conectividad y la calidad del agua impactan no solo en la cuenca del
río, sino también en la salud humana, la seguridad alimentaria, los
medios de subsistencia y los manglares y humedales circundantes por
los que pasa el río en su camino hacia el Océano Atlántico.
Conocimiento ancestral: La gente ha vivido en la Amazonía durante
más de 12,000 años, lo que convierte a la región en un rico depósito de
historia humana y cultura ancestral.

Los ríos y bosques del Amazonas albergan casi el 10% de la


biodiversidad del mundo, incluyendo los monos ardilla.

Las bayas de Acai son uno de los muchos recursos del Amazonas
producidos para el consumo humano.

La salud de la Amazonía tiene impactos tanto locales como de largo


alcance. Perder la Amazonía cambiaría drásticamente el clima de
América del Sur, empeoraría la seguridad alimentaria, intensificaría la
crisis climática y, en última instancia, afectaría a todo el planeta. La
emergencia climática global se aceleraría ya que sería imposible
mantener el calentamiento planetario por debajo de 1.5 grados
centígrados.

11.1. Impacto del cambio climático

El cambio climático afecta la dinámica de los ríos voladores. El


aumento de temperaturas y la deforestación pueden alterar la
evapotranspiración y, por ende, la cantidad de vapor que se
transporta. Esto puede llevar a una disminución de las
precipitaciones, afectando tanto a la biodiversidad como a las
comunidades que dependen de estos recursos.

11.2. El modelo de desarrollo y el cambio climático amenazan


la Amazonía

El cambio climático tendrá fuertes consecuencias para la Amazonía


Boliviana. Se espera que la temperatura en esta región aumente entre 2
a 5 grados hasta el año 2050, trayendo consigo consecuencias
desastrosas en forma de mayores sequías e incendios en la época seca,
y mayores inundaciones en la época de lluvia.

Estudios recientes además han demostrado que años extremadamente


secos provocan una alta mortalidad entre los árboles en la Amazonía y
varios estudios incluso estiman que hasta 2100 gran parte de la
Amazonía boliviana se convertirá en pampa. En vista de estas
amenazas, actualmente ya se vienen ejecutando algunos proyectos de
reforestación, pero debido a las condiciones biofísicas y
socioeconómicas adversas, los resultados de los esfuerzos realizados por
lo general son limitados.

“Asimismo, pese a las inundaciones que la región sufrió en 2014 –de las
peores en siglos- y que afectaron a todos los sectores productivos y a la
población rural y urbana, los SAF en gran medida han logrado sobrevivir,
lo que muestra también su importancia y capacidad de resiliencia ante
esa y otras manifestaciones del cambio climático”, comenta Lorenzo
Soliz Tito, director general del CIPCA en el prefacio al libro.

El estudio demuestra que los Sistemas Agroforestales (SAF) no


solamente constituyen una alternativa productiva económicamente
viable, pero que también presentan un alto potencial para la mitigación
del cambio climático.

Los SAF son una alternativa muy promisoria para la reforestación ya que
los beneficios económicos a corto y mediano plazo a partir de los
cultivos anuales y especies frutales, garantizan una presencia continua
en las plantaciones y por ende una mayor probabilidad de éxito que en
el caso de plantaciones forestales típicas. Además ya existen varias
experiencias en la región, donde los productores de las comunidades
campesinas e indígenas aplican los conocimientos y habilidades
desarrollados en la agroforestería para iniciativas de restauración
ambiental con enfoque más integral y una visión de paisaje. Por ejemplo
se han logrado resultados muy positivos con la apertura de fajas de
seguridad reforestadas con especies relativamente resistentes al fuego
para poder combatir los enormes incendios forestales que año tras año
afectan la región.

11.3. Se capturan 16,5 toneladas de carbono por hectárea

Aparte de un análisis de la viabilidad económica el estudio tiene un


fuerte enfoque ambiental e incluye una evaluación de diversos
beneficios ecosistémicos. Los datos recolectados muestran que una
hectárea de sistema agroforestal en promedio captura 16,5 toneladas de
carbono por año resaltando su potencial para la mitigación del cambio
climático. Además se ha encontrado altos niveles de biodiversidad, y
dentro de los sistemas no solamente se puede encontrar especies de
árboles cada vez más raros como la mara y el cedro, incluso se encontró
especies de animales amenazadas.

“En este sentido, los SAF tienen potencial para formar parte de
mecanismos de conservación y mitigación del cambio climático, además
de una elevada viabilidad económica, mucho mayor que la de
propuestas tradicionalmente aplicadas por políticas públicas para la
conservación y la mitigación ambiental”, se constata en el resumen
ejecutivo.

Además, se recabó información acerca de las percepciones que los


productores campesinos e indígenas tienen de los beneficios
económicos, ambientales y sociales de estos sistemas productivos. El
estudio revela que los productores mismos además valoran altamente
otros beneficios ambientales de los sistemas, desde aportes a escala
global como la contribución a los ciclos de agua y la producción de
oxígeno, hasta beneficios más locales como el mejoramiento de la
humedad y fertilidad del suelo.
Una familia de productores desconchando el cacao de su parcela
agroforestal; foto: CIPCA
“Dentro de esta visión, los sistemas agroforestales (SAF) forman un
componente importante para la producción en las comunidades de
Santa Cruz, Beni y el Norte Amazónico. En los Sistemas Agroforestales
las familias campesinas e indígenas producen una gran diversidad de
cultivos anuales y árboles frutales, maderables y medicinales, con un
enfoque de diversificación y de desarrollo integral que combina
propósitos económicos con objetivos sociales, culturales y políticos, en
un marco de gestión integral sostenible de bosques y suelos“,
comentó Roberto Menchaca, director de CIPCA Norte Amazónico.
“Estamos contentos con la recepción del libro y nos parece muy
importante que instituciones públicas como la Autoridad Plurinacional de
la Madre Tierra (APMT) y la Autoridad de Control y Fiscalización de los
Bosques y Tierra (ABT) han resaltado el valor del estudio para poder
fomentar las iniciativas a favor de la gestión integral de bosques”.

“A partir de los resultados mencionados, se concluye que los SAF tienen


gran potencial para el desarrollo sostenible de la Amazonía boliviana,
más allá de la subvaloración de esos beneficios por parte del enfoque
financiero propio de los modelos tradicionales de desarrollo.
Consecuentemente, se recomienda revalorar el potencial de los SAF en
todas sus dimensiones e incorporar su promoción dentro de políticas
públicas, con un enfoque más integral para el desarrollo de la Amazonía
boliviana”, concluyen los autores del libro.

11.4. La explotación petrolera, el cambio climático y las áreas


protegidas de Bolivia

En mayo pasado se promulgó el Decreto Supremo 2366 que estipula la


apertura de las áreas protegidas de Bolivia a las operaciones petroleras,
justo meses antes de la Conferencia Climática COP 21 en París. Las
áreas protegidas albergan y protegen no solamente poblaciones
humanas y una gran biodiversidad, sino también tienen funciones
primordiales en la mitigación y adaptación al cambio climático.

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12. Leyes o normativas que protegen el amazonas

Bolivia tiene varias normativas ambientales destinadas a proteger la


Amazonía y sus ecosistemas. Algunas de las más relevantes son:

1. Ley de Medio Ambiente (Ley N° 1333): Establece principios y


normas para la protección del medio ambiente y el uso sostenible
de los recursos naturales.
2. Ley de Áreas Protegidas (decreto supremo N° 24781):
Regula la creación y manejo de áreas protegidas, incluyendo
parques nacionales y reservas, que son fundamentales para la
conservación de la biodiversidad en la Amazonía.
3. Código de Recursos Naturales: Incluye disposiciones sobre el
uso sostenible de los recursos forestales y la protección de los
bosques, que son cruciales para la Amazonía.
4. Ley de Protección de los Bosques y Áreas Forestales (Ley
N° 1700): Promueve la conservación y el manejo sostenible de los
bosques, regulando la deforestación y promoviendo la
reforestación.
5. Plan Nacional de Cambio Climático: Aborda la adaptación y
mitigación de los efectos del cambio climático, reconociendo la
importancia de la Amazonía en el ciclo del carbono.
6. Estrategia Nacional de Desarrollo Sostenible: Busca integrar
la conservación ambiental en las políticas de desarrollo y
promover prácticas sostenibles.

Estas leyes y estrategias son esenciales para la conservación de la


Amazonía boliviana, aunque su efectividad depende de la
implementación y el cumplimiento en la práctica.

13. ¿Qué es la OTCA?

La Organización del Tratado de Cooperación Amazónica


(OTCA) es una organización intergubernamental, constituida por los
ocho países amazónicos: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana,
Perú, Surinam y Venezuela, que suscribieron el Tratado de
Cooperación Amazónica (TCA), constituyéndose en el único bloque
socioambiental de América Latina. La OTCA, con una amplia visión
del proceso de Cooperación Sur-Sur trabaja en diferentes
dimensiones: político-diplomática, estratégica y técnica,
construyendo sinergias entre gobiernos, organismos multilaterales,
agencias de cooperación, sociedad civil organizada, movimientos
sociales, comunidad científica, sectores productivos y la sociedad en
su conjunto, en el marco de la implementación del TCA.

La Región Amazónica cuenta con cerca del 80.25% de las ecorregiones


asociadas a bosques húmedos tropicales, lo cual representa
aproximadamente 6,3 millones de km2 del total de la Región,
considerada Bioma Amazónico, lo que abarca más del 95% de la porción
amazónica que poseen los Países Miembros de la OTCA, con excepción
de Brasil, al que le corresponde entre el 80 y el 85% de los bosques
húmedos tropicales y cerca del 13.3% de los biomas de praderas y
sabanas.

13.1. Objetivos

Facilitar el intercambio y la cooperación entre los Países Miembros


promoviendo el desarrollo sostenible y modos de vida sustentable
con carácter estratégico en la región a fin de mejorar la calidad de
vida de sus habitantes, con énfasis en las poblaciones vulnerables,
los pueblos indígenas y otras comunidades tribales.
Velar por que los intereses y la soberanía de los Países Miembros
sean respetados y promovidos.
Facilitar y fomentar acciones tendientes a la preservación,
protección, conservación y aprovechamiento sustentable del bosque,
la biodiversidad y los recursos hídricos de la Amazonía.
Promover el aprovechamiento de los recursos Amazónicos dentro del
respeto y armonía con la naturaleza y el ambiente.
Promover y diseminar la cultura de los pueblos que habitan en la
Región Amazónica así como fomentar el respeto y la protección de
los conocimientos y saberes ancestrales y actuales de la Región
Amazónica.
Promover la articulación de los Planes y Programas de los Países
Miembros para el desarrollo de las poblaciones amazónicas,
prestando atención especial a las poblaciones vulnerables, los
pueblos indígenas y otras comunidades tribales.

13.2. Declaración de Belém

La Declaración de Belém fue un reconocimiento formal de la


necesidad de una mayor integración regional y desarrollo sostenible
para evitar el colapso de la selva amazónica. La declaración sienta las
bases jurídicas y políticas para una mayor cooperación entre los
países miembros de la OTCA.

13.3. Proyecto cuenca amazónica

El Proyecto Cuenca Amazónica inició su ejecución en el año 2021 con


el objetivo de apoyar a los ocho Países Miembros de la Organización
del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) – Bolivia, Brasil,
Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela – en la
implementación del Programa de Acciones Estratégicas (PAE) para la
Gestión Integrada de los Recursos Hídricos de la Cuenca Amazónica.
El PAE es una estrategia regional construida sobre una visión
compartida entre los países, destinada a promover acciones clave
para la protección y conservación de la Cuenca Amazónica, con vistas
a la gestión integrada y sostenible de sus recursos hídricos (GIRH), en
beneficio de las poblaciones y los ecosistemas amazónicos.

Ejecutado por la OTCA en asociación con los países amazónicos, con


financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM) y
implementación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio
Ambiente (PNUMA), el Proyecto Cuenca Amazónica realiza actividades
e intervenciones nacionales y regionales para promover la capacidad
de dar respuesta a los principales problemas de la región, como la
contaminación del agua y la pérdida de biodiversidad, y adaptarse a
los impactos del cambio climático. De este modo, el Proyecto
permitirá a los países amazónicos avanzar en el cumplimiento de sus
Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y de las metas de las
convenciones medioambientales.

13.4. Observatorio Regional Amazónico (ORA)

El ORA es un Centro de Referencia de Información sobre la Amazonía


de la OTCA, creado en 2021 para propiciar el flujo y el intercambio de
información entre instituciones, autoridades gubernamentales,
comunidad científica, academia y la sociedad civil de los países
amazónicos.

A través de la Red Hidrológica Amazónica (RHA), la Red de Calidad del


Agua (RCA) y la Red HYBAM, el ORA monitorea la cantidad del agua y
eventos hidroclimáticos extremos así como la calidad del agua,
apoyando a los países en la toma de decisiones para prevenir las
consecuencias de fenómenos climáticos, así como enfermedades y
contaminación del medio fluvial, entre otros.

14. Los Sistemas Agroforestales, una herramienta para la


mitigación del cambio climático
En la cuenca amazónica encontramos dos modelos de desarrollo
diferentes. Por un lado, están los grandes proyectos, de infraestructura
caminera, represas hidroeléctricas, ganadería extensiva y la expansión
de la frontera agrícola, que conllevan la transformación del ecosistema
de selva amazónica a gran escala. Por otra parte, existen esfuerzos de
conservación de los espacios de vida mediante territorios indígenas,
áreas protegidas y modelos de desarrollo sostenible en base a la
producción agrícola familiar indígena e campesina.

En la parte boliviana, el Centro de Investigación y Promoción del


Campesinado (CIPCA) viene apoyando iniciativas de producción
alternativa. Los Sistemas Agroforestales promovidos por CIPCA ya
cuentan con hasta más de una década desde su implementación, por lo
que fue posible hacer una evaluación real de su viabilidad económica.
Además se han analizado otros beneficios de las parcelas agroforestales
como la captura de carbono, su contribución a la biodiversidad, y
beneficios sociales y psicológicos percibidos por los propios productores.
El libro “Sistemas Agroforestales en la Amazonía Boliviana, una
valoración a sus múltiples funciones a partir de estudios de caso”
presenta los resultados de una evaluación de los resultados obtenidos
en los últimos 10 años y fue presentado oficialmente el 18 de junio en el
Foro Expo Forest organizado por la Autoridad de Fiscalización y Control
Social de Bosques y Tierra dentro de la Expo Forest.

El estudio fue realizado por un gran equipo de técnicos de CIPCA e


investigadores asociados y una participación activa de las familias
productoras. Se realizó en 11 casos de Sistemas Agroforestales (SAF)
manejados por familias campesinas e indígenas en Pando, Beni y Santa
Cruz y presenta una de las evaluaciones más serias de los Sistemas
Agroforestales dentro del territorio boliviano.
Procesos del ciclo de carbono en Sistemas Agro Forestales (SAF)

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