Resumen Tributario Del 1 Al 10 Último
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Resumen Tributario Del 1 Al 10 Último
Concepto de finanzas
Aquella actividad estatal mediante la cual el estado obtiene ingresos a través de los recursos
públicos en orden a su administración a fin de solventar los gastos públicos tendientes a satisfacer
las necesidades básicas mediante la prestación de los servicios generales y servicios públicos.
a. Finanzas públicas y privadas
Las diferencias son las que siguen:
Por el objeto: las públicas buscan la consecución de recursos públicos, mientras que las privadas se
refieren a la problemática del sector bancario y la economía de los particulares.
Por los medios que utiliza: las finanzas públicas recurren al poder de imperio del estado para
imponer coercitivamente impuestos y tributos (en esencia, el tributo es un recurso que el Estado
obtiene por medio de la coerción que nace de su soberanía, ya que el termino poder de imperio está
mal empleado ya que hace referencia por ejemplo a una monarquía), poder que no posee el sector
privado.
Por los fines perseguidos: las finanzas públicas persiguen fines inmateriales (ej., defensa, servicio
de justicia, educación, etc.); las privadas, en cambio, se desenvuelven siempre en un ámbito de
finalidad de lucro.
Por las necesidades que satisfacen: las finanzas públicas buscan satisfacer necesidades públicas
(Primarias o absolutas defensa, seguridad, justicia, etc. y secundarias o relativas jubilaciones, salud
pública, asistencia social, transporte, comunicaciones, etc), las cuales tienen su origen y
justificación en la Constitución Nacional y se van modificando y aumentando conforme su
evolución, mientras que las necesidades privadas son satisfechas por los particulares por sí mismos.
Por la naturaleza de su gestión: el estado no gestiona a su libre albedrío, sino que su actividad
financiera se encuentra reglada (en los Estados modernos de Derecho, el poder coercitivo estatal se
ejerce a través de la ley. La administración fiscal posee poderes discrecionales y la ley determina
precisamente cuando, en cuales casos y en cual medida ella puede recaudar el tributo sobre la
riqueza privada) (ej. Ley de Administración Financiera y Control del Sector Público Nacional No
24.156); en las finanzas privadas, por el contrario, el particular puede escoger libremente el modo
de gestionar sus finanzas (siempre sin contrariar a la ley obviamente).
En los Estados modernos de Derecho, el poder coercitivo estatal se ejerce a través de la ley. La
administración fiscal posee poderes discrecionales y la ley determina precisamente cuando, en
cuales casos y en cual medida ella puede recaudar el tributo sobre la riqueza privada.
Conjunto de operaciones del estado que tiene tanto por objeto la obtención de recursos como el
gasto público para garantizar las funciones y servicios que satisfacen necesidades de la comunidad.
Y el objeto es ver como el estado obtiene sus ingresos
Estado: es una organización jurídica de un pueblo asentado en un territorio en orden a la
ejecución de bienes genéricos (seguridad, defensa, salud, progreso económico, educación,
etc.)
c. Sujetos y fines
El estado es el único y exclusivo sujeto de la actividad financiera. En nuestro país es así por nuestro
sistema federal que adopta la constitución nacional y de ello deriva el ejercicio del poder tributario
en los tres niveles (nacional, provincial y municipal). Tanto los intereses individuales como los
colectivos se coordinan para la obtención de los fines superiores, unitarios y duraderos del Estado,
diferentes de los fines efímeros y perecederos de los individuos que lo componen.
Sociológica: Discutieron sobre la existencia del estado y lo que se esconde sobre sus atributos de
mando. Pareto dice que el estado esconde a una clase dominante y que las necesidades e intereses
no surgen realmente de la sociedad, sino de esta clase en relación a su convivencia. El estado es una
ficción en cuyo nombre se imponen gravámenes a los contribuyentes y luego se gastan para cubrir
los gastos de la clase dominante.
Histórica:
a. Necesidades públicas
Son aquellas que nacen de la vida colectiva y se satisfacen mediante la actuación del estado. Como
esas necesidades son de imposible satisfacción mediante esfuerzos aislados, el ser humano asociado
tiende buscar a alguien para lograr esos esfuerzos. El hombre pretende vivir en sociedad, en esta
sociedad colectiva surgen ideales comunes que son defenderse, crear normas de convivencia,
castigar las infracciones, etc. A su vez estas necesidades se dividen en:
Absolutas o primarias: son esenciales, constantes, vinculadas existencialmente con el
estado y de satisfacción exclusiva para él. Defensa exterior, orden interno y administración
de justicia.
Relativas: Son ocasionales, mudables y no vinculables a la existencia misma del estado. La
satisfacción incumbe al estado como instrucción, salubridad, asistencia social, transporte,
etc.
b. Servicios públicos
En cuanto a los servicios públicos, hemos visto que estos constituyen las actividades que el Estado
(representado por el gobierno) realiza en procura de la satisfacción de las necesidades públicas,
siendo esta actividad desarrollada dentro de la administración y pueden clasificarse en:
Esenciales: son inherentes a la soberanía del Estado, puesto que sólo pueden ser prestados
por él en forma exclusiva e indelegable. También atañen al interés público, ya sea porque
hacen a una mejor convivencia social: comunicación, transporte, gas, electricidad, etc o por
motivos especiales que inducen al estado a proteger intereses particulares: suministros de
vivienda.
No esenciales: En el caso de que los servicios no sean atendidos en forma directa por el
Estado y lo sean indirectamente por la intervención de particulares, intermediarios o
concesionarios estaremos en presencia de una actividad estatal manifestada en forma de
control pero que no tiende siempre a satisfacer necesidades humanas.
A su vez podemos hacer una subdivisión entre divisibles e indivisibles, el primero que si bien es útil
para toda la colectividad son concebidos para actividades determinadas y concretadas con relación a
los particulares como por ejemplo administración de justicia, DNI, instrucción pública y servicios
potestades, en tanto que los indivisibles favorecen a numerables componentes de la comunidad
siendo imposible efectuar su particularización por ejemplo defensa exterior.
Caracteres
c. Hacienda Pública
A la ciencia de las finanzas (o finanzas públicas) suele también denominársela — especialmente por
los tratadistas españoles— ciencia de la hacienda (o de la hacienda pública). En consecuencia,
tomaremos los términos y expresiones mencionados (finanzas, finanzas públicas, hacienda,
hacienda pública) como sinónimos y les asignaremos idéntico significado.
e. Provisión de públicos
a. Derecho Financiero
El derecho financiero es el conjunto de normas jurídicas que regulan la actividad financiera del
Estado. Iniciar su estudio significa penetrar en el mundo de lo jurídico, y eso hace necesario
examinar la actividad financiera desde un punto de vista disímil del hasta ahora empleado. La
actividad financiera constituirá el objeto del derecho financiero, pero solo en tanto pueda ser
considerada actividad jurídica.
Ley.
Es la manifestación de la voluntad del Estado, emitida por los órganos a los que la Constitución
confía la tarea legislativa y es la fuente inmediata de mayor importancia en el derecho financiero.
Según el principio de legalidad financiera, todos los ingresos y los gastos estatales deben ser
dispuestos o autorizados por el organismo legislativo.
Reglamentos.
Actos unilaterales de sustancia legislativa que dicta el poder ejecutivo (importa la formulación de
una norma genérica abstracta).
El término “decreto” es una denominación que puede referirse a un acto administrativo, a un
reglamento, incluso a determinados reglamentos como las circulares (ej. Circulares del banco
central), etc. Decreto es una denominación que se da a actos del poder ejecutivo con prescindencia
de su contenido.
En nuestra constitución la potestad reglamentaria se le asigna al poder ejecutivo, incluso la corte a
convalidado que el poder reglamentario se les asigne a otros órganos a sujetos públicos incluso
entes autárquicos (Ej. El Banco Central de la república mediante la facultad de enviar circulares,
surge de la carta orgánica; la ley de entidades financieras)
Dentro de los reglamentos, hay que diferenciar:
REGLAMENTOS DE EJECUCIÓN Potestad atributiva desde el origen del a constitución del
poder ejecutivo. -Son aquellos reglamentos que dictan el poder ejecutivo. Son aquellos reglamentos
que dictan el poder ejecutivo y otros entes autárquicos, estableciendo los pormenores necesarios
para que la ley sea aplicable (no la completan ni la suplantan).
Solo se puede reglamentar las leyes que establezcan medidas que deba aplicar el ejecutivo.
REGLAMENTOS DELEGADOS En el S. XX comienzan aparecer otros tipos de reglamentos
que no estaban previstos en nuestra constitución, esto coincide con la ampliación del poder del
estado.
Comienza a revelarse que la estructura del poder legislativo no tiene los estamentos técnicos
suficientes como para regular al detalle todo, en cambio el poder de la administración es el que
mayor cantidad de cuadros técnicos tiene (tiene los ministerios, las oficinas etc.)
Es así como comienza un fenómeno de delegación legislativa.
La ley sentaba pautas, pero partes del contenido de la ley lo difieren al poder ejecutivo.
El primer antecedente fue la ley 9688 (ley de enfermedades y accidentes laborales) en los que la
nómina de las enfermedades las establecía el poder ejecutivo.
En lo que hace a la materia financiera los reglamentos delegados pueden funcionar; menos en
materia tributaria.
Los reglamentos delegados para ser válidos y no incurrir en exceso reglamentario deben cumplir
con ciertas reglas.
El contenido del reglamento debe encontrarse razonablemente preanunciado en el contenido de la
ley formal que habilitaba el dictado de ese reglamento.
o Con la reforma del 94 estos reglamentos se blanquearon (art. 76)
Principio Prohibición de la delegación legislativa en el ejecutivo
Excepción Salvo en materias determinadas de administración o defensa pública
Requisitos:
- Debe determinarse el contenido por una ley marco.
- La delegación debe ser por tiempo determinado, no indefinidamente
REGLAMENTOS AUTÓNOMOS: La palabra autónomo proviene de una concepción que en
parte es errónea y que refiere a la concepción de que, así como hay un área de reserva del
legislador, también habría un área reservada a la administración. En la práctica no hay materia
reservada para la administración.
Si decide regular sobre esa materia el legislativo no hay ninguna invalidez
Se trata de la reglamentación de procedimientos internos.
REGLAMENTOS DE NECESIDAD Y URGENCIA: En estado necesidad y urgencia
(circunstancias excepcionalísimas) se permite que el ejecutivo legisle en materia reservada al
legislativo.
En materia tributaria, penal y electoral no está permitida esta fuente.
5. El poder financiero.
El poder de imperio, en cuya virtud se ejerce la actividad financiera, es la autoridad que tiene el
Estado para exigir contribuciones coactivas a los particulares que se hallan bajo su jurisdicción
(potestad tributaria), pero ésa no es su única manifestación. En efecto, cuando el Estado planifica su
actuación financiera decidiendo qué gastos van a efectuarse, cómo se repartirán en el espacio y en el
tiempo, mediante cuáles fuentes se lograrán ingresos, qué medidas financieras serán adoptadas, así
como cuando concretamente procede a obtener ingresos y a emplearlos en sus destinos, está
también ejerciendo su poder financiero. Es decir, está utilizando el poder de mando que le ha sido
conferido por la comunidad para atender debidamente las necesidades, que según la concepción del
Estado moderno son consideradas como públicas. El poder financiero en un Estado de derecho se
encuentra consagrado en sus en sus constituciones.
Efectos.
El gasto nace de una necesidad que ve el Estado. Cualquier modificación en los gastos significara
una modificación en la economía, ya sea generando déficit o superávit.
Efecto multiplicador: Fue desarrollado por Keynes. Si se incrementa la obra pública, genera puestos
de trabajos; esos trabajadores compran con lo que ganan demandando bienes de consumo, los que
venden mercaderías vuelven a proveerse y así se re-activa el sector privado.
Hace jugar la relación entre los gastos públicos y los gastos de consumo de los particulares.
Efecto acelerador: Al aumentar la demanda de bienes de consumo, en teoría tiene que aumentar la
demanda de bienes de capital. Ej: los obreros en invierno demandan más puloveres entonces tienen
que abrir nuevas fábricas de pulóveres.
Consiste en el efecto que crea la mayor demanda de bienes de consumo que a su vez demanda
mayor cantidad de bienes de inversión. ¿Por qué? Porque necesita producir más.
Efecto amplificador: que ese efecto se extienda en la economía.
RECURSOS PUBLICOS:
Concepto: son las riquezas que se devengan a favor del estado, para cumplir sus fines y en tal
carácter ingresa al tesoro. En otras palabras, se puede decir que son los ingresos en la tesorería del
Estado, cualquiera que sea su naturaleza económica o jurídica.
Cabe destacar que no se deben confundir los recursos con los ingresos, dado que los ingresos son
obtenidos por los recursos.
A grandes rasgos el Estado puede obtener recursos de la siguiente manera:
Explotando sus bienes
Privatizando empresas publicas
De actividades que resultan productivas (ej. la quiniela).
Por los tributos (tasas, contribuciones e impuestos)
Del crédito público: obtener recursos del público de forma voluntaria (a diferencia del
impuesto que es coactivo). Tiene límites para evitar que el Estado entre en un
endeudamiento. Solo puede pedirlos para gastos que aumenten la economía y no para
gastos normales.
Emisión monetaria: es peligrosa, porque si se altera en gran medida puede provocar una
inflación.
Evolución:
Tradicionalmente se he entendido que la finalidad de los recursos públicos era la de cubrir los
gastos públicos. Modernamente se entiende que, además de esa función, los recursos por sí mismos,
pueden ser instrumentos para que el Estado desarrolle su política intervencionista en la economía
general; de allí la importancia de su estudio detallado. Etapas de la evolución:
antigüedad, puede decirse que las necesidades financieras eran cubiertas mediante
prestaciones de los súbditos y de los pueblos vencidos, con rentas patrimoniales y por
medio de monopolios estatales; se nota, sin embargo, un neto predominio de los ingresos
patrimoniales provenientes de bienes del dominio particular del monarca, tales como minas
y tierras. Sucede que en esas épocas remotas no se distinguía, por lo general, entre
patrimonio del Estado y patrimonio particular del soberano. Sin embargo, existieron en esas
épocas rudimentos de tributación. Así, se afirma que los griegos conocían una especie de
impuesto progresivo sobre la renta y que los egipcios tenían gravámenes sobre los
consumos y los réditos. En cuanto a Roma, nos encontramos con diferentes tributos
importantes, que incluso han servido como antecedente para formas impositivas actuales.
Edad Media, el patrimonio del Estado continuó confundido con el del soberano y era la
principal fuente de recursos, ya que los tributos perdieron toda importancia y se
convirtieron en fuentes excepcionales de ingresos. En ese período histórico se desarrolló el
sistema de regalías, que consistían en contribuciones que debían pagarse al soberano por
concesiones generales o especiales que el rey hacía a los señores feudales (por ejemplo, el
derecho de acuñación de moneda o el derecho de utilización de agua). También se
difundieron las tasas, que los súbditos debían pagar a los señores feudales por determinados
"servicios" que éstos le prestaban. Así, los vasallos debían pagar tributos para que los
señores les permitieran ejercer profesiones o empleos, para transitar ciertas rutas o cruzar
los puentes, por utilizar las tierras del señor feudal, etc. Como vemos, primitivamente el
impuesto se fundamentaba sólo en la soberanía absoluta del rey. Predominaba una
concepción autoritaria y, por lo general, arbitraria con respecto al impuesto
Con posterioridad a la Revolución Francesa, esta concepción se modificó sensiblemente.
Surgieron las ideas liberales que repudiaban la discrecionalidad y el autoritarismo, y que
querían encontrar justificativos éticos en el impuesto considerándolo como un precio que se
paga al Estado por los servicios generales que éste presta. Ganó terreno también la idea de
graduar ese precio según la potencialidad económica de los ciudadanos. En el siglo XIX el
Estado obtenía la mayor parte de sus ingresos de los recursos tributarios. Pero en el siglo
XX es dable observar un resurgimiento de los recursos patrimoniales vinculado al cambió
en la concepción del Estado. El Estado moderno asume ciertas actividades económicas e
industriales, antes desconocidas, y la empresa pública pasa a constituirse en fuente de
ingresos.
Clasificación:
Criterio económico: según esta los distingue en
Ordinarios: son los percibidos por el estado de forma regular y continua.
Extraordinarios: son aquellos excepcionales u ocasionales. Ejemplos: impuestos
patrimoniales por única vez, los obtenidos por prestamos (deuda pública)
Criterio por rubros: lo clasifica así la ley 24156 en su artículo 14 inciso d.
Recursos corrientes: estos se dividen en tributarios describiéndose allí los diferentes
gravámenes e inclusos los aportes de previsión social y en no tributarios, entre los cuales se
consignan rentas, utilidades, tarifas, etc.
Recursos de capital: como lo pueden ser la venta de activos fijos con el detalle de los
bienes de que se trata, el reembolso de los préstamos distinguiendo los efectuados por el
sector público y privado, el uso de crédito, remanentes de ejercicios anteriores.
Recursos de financiamiento: son los adelantos otorgados a proveedores y contratistas en
ejercicios anteriores
Criterio según su origen: es decir, de acuerdo a su fuente económica.
Originarios: provienen de los bienes patrimoniales del estado o de diversos tipos de
actividades productivas realizadas por aquel.
Derivados: son los que las entidades públicas se procuran mediante contribuciones
provenientes de las economías de los individuos. Comprende una variada gama de ingresos
y también de diversa naturaleza jurídica.
A continuación, se
explicará el siguiente
esquema;
Recursos patrimoniales: o
también conocidos como
de dominio, son los
ingresos que el estado
obtiene de los bienes de
dominios públicos y
privados.
ARTICULO 235.- Bienes pertenecientes al dominio público. Son bienes pertenecientes al dominio
público, excepto lo dispuesto por leyes especiales:
a) el mar territorial hasta la distancia que determinen los tratados internacionales y la legislación
especial, sin perjuicio del poder jurisdiccional sobre la zona contigua, la zona económica exclusiva
y la plataforma continental. Se entiende por mar territorial el agua, el lecho y el subsuelo;
b) las aguas interiores, bahías, golfos, ensenadas, puertos, ancladeros y las playas marítimas; se
entiende por playas marítimas la porción de tierra que las mareas bañan y desocupan durante las
más altas y más bajas mareas normales, y su continuación hasta la distancia que corresponda de
conformidad con la legislación especial de orden nacional o local aplicable en cada caso;
c) los ríos, estuarios, arroyos y demás aguas que corren por cauces naturales, los lagos y lagunas
navegables, los glaciares y el ambiente periglacial y toda otra agua que tenga o adquiera la aptitud
de satisfacer usos de interés general, comprendiéndose las aguas subterráneas, sin perjuicio del
ejercicio regular del derecho del propietario del fundo de extraer las aguas subterráneas en la
medida de su interés y con sujeción a las disposiciones locales. Se entiende por río el agua, las
playas y el lecho por donde corre, delimitado por la línea de ribera que fija el promedio de las
máximas crecidas ordinarias. Por lago o laguna se entiende el agua, sus playas y su lecho,
respectivamente, delimitado de la misma manera que los ríos;
d) las islas formadas o que se formen en el mar territorial, la zona económica exclusiva, la
plataforma continental o en toda clase de ríos, estuarios, arroyos, o en los lagos o lagunas
navegables, excepto las que pertenecen a particulares;
e) el espacio aéreo suprayacente al territorio y a las aguas jurisdiccionales de la Nación Argentina,
de conformidad con los tratados internacionales y la legislación especial;
f) las calles, plazas, caminos, canales, puentes y cualquier otra obra pública construida para utilidad
o comodidad común;
g) los documentos oficiales del Estado;
h) las ruinas y yacimientos arqueológicos y paleontológicos.
ARTICULO 236.- Bienes del dominio privado del Estado. Pertenecen al Estado nacional, provincial
o municipal, sin perjuicio de lo dispuesto en leyes especiales:
a) los inmuebles que carecen de dueño;
b) las minas de oro, plata, cobre, piedras preciosas, sustancias fósiles y toda otra de interés similar,
según lo normado por el Código de Minería;
c) los lagos no navegables que carecen de dueño;
d) las cosas muebles de dueño desconocido que no sean abandonadas, excepto los tesoros;
e) los bienes adquiridos por el Estado nacional, provincial o municipal por cualquier título.
Recursos de las empresas estatales: son unidades económicas de producción que desarrollan
actividades de índoles diversas produciendo bienes o servicios con destino al mercado interno o
externo. El estado genera empresas que le pertenecen (algunas para prestar servicios públicos, gas,
energía, teléfono). Luego se dan actividades industriales con objetivo estratégico en la economía
(por ejemplo, la producción de acera, SOMISA, YPF, etc.), y otras no esenciales (producción de
vestimenta). Existen cuatro regímenes posibles:
a) Empresas de Estado: Son unidades económicas de producción que desarrollan actividades de
índole diversa, produciendo bienes o servicios con destino al mercado interno o al externo. El
patrimonio es puramente estatal.
b) Sociedades del Estado: Los socios tienen que ser exclusivamente estatales. No admiten la
inserción de capitales privados.
c) Sociedades de economía mixta: se admite la concurrencia de capital público y privado.
d) Sociedades anónimas con participación estatal mayoritaria: el capital público supera el 51%
Recursos mixtos: conocidos como los monopolios fiscales. Actividad que realiza el Estado con
exclusividad, por ser una actividad estratégica (ej. producción de pólvora en algunos países). En
Argentina sólo la del juego (en algunos casos la desarrolla un particular, pero con estricto control
del Estado, como el hipódromo o el casino). Ejerciendo potestad de imperio el Estado se arroga
carácter exclusivo y excluyente en el ejercicio de algunas actividades. Son altamente redituables.
Recursos gratuitos: el estado puede obtener ingresos en virtud de liberalidades, de la entrega no
onerosa por parte de terceros. Estos pueden provenir de particulares donaciones o legados, de entes
internacionales o estados extranjeros, como la ayuda internacional por daños bélicos.
Recursos por sanciones patrimoniales: consiste en asegurar el ordenamiento jurídico, castigando
mediante sanciones o penalidades a quienes lo infrinjan. Ejemplos multas.
Recursos monetarios: el manejo de la banca central y el derecho de emitir moneda que corresponde
al Estado moderno constituyen, una forma de obtener ingresos. El emisionismo monetario puede ser
considerado desde dos puntos de vista:
1) Como procedimiento estatal de regulación económica: por cuanto la existencia de medios de
pagos debe estar en correcta proporción con el volumen de bienes y servicios disponibles en una
economía nacional. Los medios de pago deben aumentar al mismo ritmo que se incrementa el
volumen producido de bienes y servicios a pagar.
2) Como medio de procurarse ingresos: El Estado sube su déficit presupuestario con la emisión de
moneda. Debe ser utilizado como último recurso.
Dominio Financiero: El Banco Central de la República Argentina (BCRA). Recursos
monetarios. Política monetaria.
El dominio financiero del Estado se manifiesta cuando el Estado:
impone contribuciones coactivas a los particulares,
emitir moneda, planifica su actuación financiera decidiendo qué gastos van a efectuarse,
cómo se repartirán en el espacio y en el tiempo, mediante cuáles fuentes se lograrán
ingresos,
toma medidas financieras para producir resultados directos, etc.
El dominio financiero del Estado se manifiesta en el manejo de la banca central y el derecho a
emitir moneda que corresponde al Estado moderno, y constituye también una forma originaria de
obtener ingresos.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA)
El Banco Central de la República Argentina es una entidad autárquica del Estado nacional, quien
garantiza las obligaciones asumidas por éste (art. 1 Ley 24.144 – Carta Orgánica del BCRA). Es
cabeza y superintendencia de todo el sistema bancario argentino y tiene por finalidad promover, en
la medida de sus facultades y en el marco de las políticas establecidas por el gobierno nacional, la
estabilidad monetaria, la estabilidad financiera, el empleo y el desarrollo económico con equidad
social.
Emitir moneda es un acto de soberanía (artículo 1 CN). Esta entidad se crea en 1935. La carta
orgánica de los bancos es la ley 20.539
Son funciones y facultades del banco (art. 4):
a) Regular el funcionamiento del sistema financiero y aplicar la Ley de Entidades Financieras y las
normas que, en su consecuencia, se dicten;
b) Regular la cantidad de dinero y las tasas de interés y regular y orientar el crédito;
c) Actuar como agente financiero del Estado nacional y depositario y agente del país ante las
instituciones monetarias, bancarias y financieras internacionales a las cuales la Nación haya
adherido, así como desempeñar un papel activo en la integración y cooperación internacional;
d) Concentrar y administrar sus reservas de oro, divisas y otros activos externos;
e) Contribuir al buen funcionamiento del mercado de capitales;
f) Ejecutar la política cambiaria en un todo de acuerdo con la legislación que sancione el Honorable
Congreso de la Nación;
g) Regular, en la medida de sus facultades, los sistemas de pago, las cámaras liquidadoras y
compensadoras, las remesadoras de fondos y las empresas transportadoras de caudales, así como
toda otra actividad que guarde relación con la actividad financiera y cambiaria;
h) Proveer a la protección de los derechos de los usuarios de servicios financieros y a la defensa de
la competencia, coordinando su actuación con las autoridades públicas competentes en estas
cuestiones.
En el ejercicio de sus funciones y facultades, el banco no estará sujeto a órdenes, indicaciones o
instrucciones del Poder Ejecutivo nacional, ni podrá asumir obligaciones de cualquier naturaleza
que impliquen condicionarlas, restringirlas o delegarlas sin autorización expresa del Honorable
Congreso de la Nación.
Sistema monetario. Supone:
Regulación del Congreso (art. 75 inc. 11).
Existencia de un Banco Central.
El sistema se registra en asientos contables. Por eso fue por ignorancia que se depositó en dólares,
y se generaron préstamos en dólares. Y qué pasó cuando quisieron retirar los depósitos y el BCRA
no tenía dólares, por supuesto que no iba a tenerlos porque el único que puede emitir dólares es la
Reserva Federal de los Estados Unidos. Un representante del FMI, cuando había salido el proyecto
de ley de convertibilidad, fue consultado y el portorriqueño dijo que era lo mismo que meterse en
una jaula con fieras y tirar la llave para afuera. Si un sistema acepta depósitos en moneda extranjera
va a ser un desastre; y el desastre vino diez años después.
Mecanismos:
Fijación del efectivo mínimo (encaje) = sirve para regular la creación de dinero bancario (lo fija
unilateralmente el BCRA, a través re circulares). Si quiere una expansión monetaria reduce la
tasa. Si quiere limitarla aumenta el %.
Operaciones de redescuento = descuento de segundo grado. Le da liquidez a los bancos. Si el
Banco Central decide subir la tasa de redescuento sube también la de los bancos.
Operaciones de mercado abierto = emisión de títulos con fines de regulación monetaria.
Cuando quiere provocar una astringencia monetaria emite esos títulos, porque los compran
generalmente los bancos y los pagan con medios que salen así de la circulación y van al Banco
Central. Inversamente, cuando quiere insuflar dinero al mercado, sale a rescatar los títulos, los
paga, y al pagarlos insufla medios de pago al circuito. Todo título tiene un plazo de
vencimiento, generalmente de 6 meses. Los puede rescatar antes o canjearlos por nuevos títulos.
Política monetaria: inflación, estas pueden ser
De demanda: exceso de demanda global, la producción a pleno. Beneficia a los
empresarios.
De costos: los aumentos de los precios se dan por decisiones unilaterales de ciertos grupos,
no por la demanda. Regla del capitalismo. Se beneficia el empresario y no así el
consumidor.
Estructural: oferta de un determinado bien divisa, dólares. La única forma de obtenerla es
exportando
Crédito Público. Concepto. Desarrollo histórico. Concepciones clásicas y actuales sobre su
utilización. Su carácter ordinario y extraordinario.
Concepto: Entre los ingresos con los que cuentan los gobiernos para hacer frente a su cometido
deben ser comprendidos los que provienen del crédito público. Crédito es la autorización que se
concede a la Administración para realizar gastos hasta una cierta cuantía.
Crédito público: etimológicamente proviene de credere, quiere decir creer tener fe, en realidad
hablamos de la confianza que se le tiene al Estado. “Es la fe o confianza de que goza un Estado
para poder recurrir al ahorro de los particulares”. La confianza en que los compromisos asumidos
serán cumplidos. El crédito público es la aptitud de un Estado para obtener dinero o bienes en
préstamo, ósea la capacidad que tiene para endeudarse.
En nuestro país, la ley establece cuales son los destinos a los cuales los préstamos deben volcarse
Es necesario distinguir tres conceptos:
Crédito público es la aptitud política, económica, jurídica y moral de un Estado para obtener
dinero o bienes en préstamo.
Empréstito es la operación crediticia concreta mediante la cual el Estado obtiene dicho
préstamo.
Deuda pública consiste en la obligación que contrae el Estado con los prestamistas como
consecuencia del empréstito.
Desarrollo histórico
El hecho de que el crédito público se base actualmente sobre la confianza y buena fe, es producto de
su evolución histórica. El auge de este recurso estatal comenzó en el siglo XIX. Los préstamos entre
los Estados de la antigüedad se hacían muy difíciles ya que el nuevo soberano generalmente
repudiaba la deuda de su antecesor. Por ello, los préstamos se hacían a breve plazo y por pequeñas
sumas con garantías reales (joyas, fuentes impositivas, las tierras de la corona, etc.) o personales
(por ejemplo, algún tercer soberano que aceptaba ser fiador) A partir del siglo XIX los Estados se
organizan jurídicamente, la gestión administrativa mejora, los recursos pasan a ser permanentes,
elásticos y productivos, y la noción sobre la responsabilidad del Estado adquiere relevancia.
Concepciones clásicas y actuales sobre su utilización.
Los clásicos distinguen los recursos públicos propiamente dichos (ej. el impuesto) de aquellas otras
medidas como las del crédito público.
Del empréstito no derivan recursos en sí mismos, sino tan solo la anticipación de recursos futuros.
El empréstito nunca puede ser un ingreso en sí mismo, ya que se limita a hacer recaer sobre las
generaciones futuras la carga de los gastos efectuados mediante el empréstito: esto sucede porque
como el empréstito es solo un préstamo, deberá ser devuelto posteriormente junto con los intereses,
y esa devolución solo podrá ser solventada mediante nuevos impuestos que deberán pagar las
generaciones venideras.
El crédito público debe ser utilizado excepcionalmente.
Las teorías modernas consideran que el crédito público es un verdadero recurso y que no puede
estar limitado por circunstancias excepcionales.
El empréstito significa una reducción a la renta nacional actual, al disminuir el poder de compra de
los particulares, dado que el dinero es empleado para financiar gastos públicos en vez de ser
destinado a fines privados. Además se dice que si bien es cierto que el empréstito constituye una
carga para los contribuyentes futuros, que ven aumentados sus impuestos para hacer frente al
servicio del interés y reembolso, no es menos cierto que esa carga esta compensada por la ventaja
correlativa obtenida por los prestadores que reciben dichos intereses y reembolsos.
Entonces, este es un recurso que nada tiene de anormal y que no pueden estar limitados a
circunstancias excepcionales.
Su carácter ordinario y extraordinario: Una de las características del crédito público es que el
empréstito ha perdido el carácter de recurso extraordinario que le atribuía la escuela liberal clásica,
para pasar a ser un recurso totalmente normal, similar al impuesto.
Conversión
Conversión significa la modificación, con posterioridad a la emisión, de cualquiera de las
condiciones del empréstito. Una de las formas más importantes de conversión es la trasformación
de la deuda a corto plazo en deuda a largo o mediano plazo, trasformación en la cual el tipo de
interés puede no variar. La doctrina distingue tres tipos de conversión:
Conversión forzosa: el tenedor se ve obligado a aceptar el nuevo título sin alternativa alguna, ya
que, si no acepta el canje, pierde el título. Evidentemente se trata de un procedimiento
arbitrario, que está en pugna con la naturaleza jurídica del empréstito.
Conversión facultativa: en este caso el prestamista puede libremente optar entre conservar el
título viejo o convertirlo por el nuevo. Claro que para que adopte esta última actitud es
necesario que el nuevo título le reporte ventajas de algún tipo (ej., puede ampliarse el plazo de
reembolso, pero en compensación ofrecerse más interés)
Conversión obligatoria: en esta forma de conversión, se da al prestamista la siguiente
alternativa: optar por el nuevo título o ser reembolsado.
Incumplimiento: Modos anormales de conclusión del empréstito.
Repudio a la deuda: el estado niega la obligación nacida del empréstito, importa una lesión al
principio de buena fe. El estado no se hace cargo
Bancarrota y moratoria: en estos casos, el incumplimiento se produce por la carencia de fondos
para atender las obligaciones contraídas por medio del empréstito. Si se trata de un mero atraso
y el pago se reanuda en breve plazo, habrá mora, si en cambio, el atraso es a largo plazo habrá
moratoria y habrá bancarrota cuando el estado suspende los pagos en forma indefinida.
Conversión: una novación de la deuda. Repactar la deuda ya sea logrando un mayor plazo o
rebaja de interés, etc. Todo esto es competencia del congreso, pero el art.65 le da atribución al
ejecutivo. Cuando es deuda interna se ha establecido compulsivamente, en la deuda externa no
se puede y entran las operaciones de negociación. En los casos de incumplimiento se suele
recurrir hasta el uso armado, para lograr que un estado pague lo que adeuda.
La financiación del Tesoro a través del sistema monetario y crediticio: Las letras de tesorería. La
emisión monetaria
Presupuestos múltiples Su formulación obedece a la ampliación del campo de acción del Estado,
que ahora persigue fines económico – sociales, y emprende actividades industriales por lo cual se ha
tornado imposibles reunir en un solo documento el conjunto de las actividades.
Presupuestos funcionales Presupuesto basado en funciones, actividades y proyectos,
caracterizado por erogaciones discriminadas en términos de servicios, actividades y proyectos de
trabajo, antes que en términos de cosas compradas.
Presupuesto por programas Cada una de las grandes funciones del Estado establece programas o
planes a realizar, que establecen metas concretas y los gastos necesarios. Se controla más la
actividad del Estado.
Su carácter político, económico y social.
Suele decirse que el presupuesto cumple las siguientes funciones:
a) Políticas: porque mediante su análisis podemos apreciar cuales fueron las decisiones del E° y
respecto a determinadas necesidades privadas que en el presupuesto son elevadas a necesidades
públicas. Refleja los postulados políticos que prevalecen en el momento de su elaboración y es,
además, elaborado por el PE conforme su plan político de gobierno.
b) Económicas: representa una exposición completa de los gastos e ingresos ponderados en un
período y demuestra la marcha de la economía de la nación. Además, permite apreciar que
beneficios reciben los sectores de menos ingresos, por ejemplo pensiones y subsidios.
c) Sociales: porque mediante él pueden asignarse y reasignarse partidas presupuestarias para hacer
frente a cuestiones sociales como la pobreza, la ancianidad, los sectores más vulnerables, etc.
Caracteres: principio de reserva de ley. Las cuatro derivaciones del principio de tipicidad: unicidad,
universalidad, generalidad y especificación.
Principio de competencia o de reserva de ley: reserva un determinado espacio de la realidad social
(en nuestro caso la tributaria) al ámbito de la ley. El principio de legalidad se basa en la frase:
"Nullum tributum sine lege", es decir, no hay tributo sin ley. Todo tributo debe estar creado por ley.
UNIDAD: todos los gastos y recursos del Estado deben reunirse o agrupados en un único
presupuesto. Sus ventajas, consisten en poder apreciar el presupuesto en su conjunto, permitiendo el
debido control presupuestario, y dificultar las maniobras de disimular economías u ocultar gastos en
presupuestos y "cuentas especiales". Sin embargo, este principio ha sufrido un detrimento al ir
ampliándose las funciones del estado debido a que es prácticamente imposible reunir en un solo
documento todas las actividades que a éste se le encarga
UNIVERSALIDAD: según este principio, no puede haber compensación entre gastos y recursos, es
decir que tanto unos como otros deben figurar consignados por su importe bruto, sin extraer saldos
netos. Así, por ejemplo, en materia de impuestos aduaneros la regla de la universalidad obliga a
incluir en los ingresos de la aduana el monto total de lo percibido por impuestos aduaneros, y en los
gastos deben incluirse los de personal, edificios, materiales, etc.; vale decir, los gastos originados en
el funcionamiento del servicio aduanero. En cambio, si no se siguiera el principio de universalidad,
cabría incluir en el presupuesto sólo el "producto neto", es decir, la diferencia filtre lo ingresado por
impuestos de aduana y los gastos que ese ingreso supone.
GENERALIDAD: Los tributos deben abarcar las distintas formas de exteriorizar la capacidad
contributiva. Deben abarcar íntegramente a las distintas personas y a los diferentes bienes
ESPECIALIDAD: significa que la autorización parlamentaria de los gastos no se da en forma
global, sino que se concede en forma detallada para cada crédito
Otros principios: equilibrio, periodicidad, anualidad, no afectación de recursos, exclusividad.
EQUILIBRIO: según este principio, los gastos efectuados siempre deben contar con la financiación
por algún recurso, en última instancia mediante alguna operación de endeudamiento, aunque fuera
de corto plazo o emisión monetaria. Un presupuesto es equilibrado cuando durante su vigencia
gastos y recursos totalizan sumas iguales; es deficitario cuando los gastos exceden los recursos y
tiene superávit cuando los recursos son superiores a los gastos.
ANUALIDAD: en la generalidad de los países, y por influencia de las prácticas inglesas, se adoptó
el término anual del presupuesto. El afianzamiento de esta práctica surgió de la circunstancia de que
el plazo de un año no es arbitrario, sino representativo de una unidad de tiempo natural, y
corresponde a la medida normal de las previsiones humanas. En nuestro país, la Constitución
nacional establece expresamente la anualidad en el art. 67, inc. 7; y conforme a lo dispuesto por la
ley 16.662, de 1965, el año financiero coincide con el año calendario, es decir, comienza el 1 de
enero y termina el 31 de diciembre.
NO AFECTACIÓN DE RECURSOS: el objeto de este principio es que terminados recursos no se
utilicen para la atención de gastos determinados, es decir que no tengan una afectación especial sino
que ingresen en rentas generales; de modo tal que todos los ingresos entren en un fondo común y
sirvan para financiar todas las erogaciones. En la realidad actual existen numerosos e importantes
recursos afectados en forma especial (por ejemplo, el impuesto a la primera trasferencia en el
mercado interno de automotores, destinado a gastos de Vialidad, contribuciones especiales para
fondos diversos, etc.).
3.3 Preparación, sanción y ejecución presupuestaria
Se acepta actualmente que la preparación del presupuesto corresponde al P.E. y, en la Argentina
recae sólo sobre el presidente, como jefe del poder ejecutivo6. El órgano específico de preparación
es el Ministerio de Economía. El proyecto es sometido a la consideración del presidente de la
Nación. En uno o varios acuerdos de ministros se examina el proyecto, y una vez redactado en
forma definitiva, se remite al Congreso para su sanción, acompañado de un mensaje explicativo.
Así como se reconoce al poder ejecutivo la facultad de preparar el presupuesto, en nuestra
Constitución Nacional la sanción de la Ley de Presupuesto corresponde al Congreso, donde la
Cámara de Diputados actúa como cámara de origen.
El proyecto debe remitirse antes del 15 de septiembre de cada año. Si así no lo hace, la Cámara de
Diputados debe iniciar la consideración del asunto tomando como anteproyecto el presupuesto en
vigencia. Esta disposición tiene por objeto evitar que por omisión del ejecutivo se generen
dificultades financieras para el país.
Una vez sancionado, el presupuesto pasa, como todas las leyes, al poder ejecutivo para su
aprobación y promulgación (art. 69, CN). Pueden presentarse las siguientes hipótesis:
▪ Si el presidente no observa lo sancionado en el plazo de diez días, el presupuesto se considera
aprobado y adquiere fuerza obligatoria (art. 70, CN).
▪ Puede vetar la ley sancionada. Se trata de la facultad de desechar, en todo o en parte, el proyecto
sancionado, devolviéndolo con sus objeciones a la cámara de origen para una nueva consideración.
Si al tiempo de iniciarse el ejercicio no tuviese aún vigencia legal el presupuesto, debe regir el que
estuvo en vigencia el año anterior, a los fines de la continuidad de los servicios.
Ejecución del presupuesto.
Una vez en vigencia legal, el presupuesto comienza la fase de su ejecución, tanto en cuanto a los
gastos como a los recursos.
Las operaciones de ejecución en materia de erogaciones, son las que revisten mayor importancia
jurídica desde el punto de vista presupuestario, mientras que en lo relativo a ingresos, la función que
cumplen otros organismos estatales es de gran trascendencia y complejidad, pero ajena al
presupuesto.
UNIDAD 4
Concepto. Diferencias con otros tributos. Teoría política, económica y jurídica.
Fines fiscales y extrafiscales.
Introducción.
Antes de definir al impuesto es preciso dar una noción sobre los tributos en general,
independientemente de sus especies (impuestos, tasas y contribuciones especiales), para establecer
los elementos comunes a todas las ellas y las notas que los diferencian del resto de los ingresos
públicos.
Tributos son “prestaciones en dinero que el Estado exige en ejercicio de su poder de imperio en
virtud de una ley y para cubrir los gastos que le demanda el cumplimiento de sus fines”.
Del concepto dado podemos inferir las siguientes características:
a. Es una prestación dineraria: es una característica de nuestra economía monetaria que las
prestaciones sean en dinero, aunque no es forzoso que así suceda.
b. Exigidas en ejercicio del poder de imperio: Elemento esencial del tributo es la coacción, o sea, la
facultad de "compeler" al pago de la prestación requerida.
c. En virtud de una ley: no hay tributo sin ley previa que lo establezca, lo cual significa un límite
formal a la coacción (principio de legalidad).
d. Para cubrir los gastos que demanda el cumplimiento de sus fines: el objetivo del tributo es fiscal,
es decir que su cobro tiene su razón de ser en la necesidad de obtener ingresos para cubrir los gastos
que le demanda la satisfacción de las necesidades públicas.
Conforme a la clasificación más aceptada por la doctrina y el derecho positivo, los tributos se
dividen en impuestos, tasas y contribuciones especiales; a las que Folco agrega el ahorro forzoso.
Concepto de impuesto.
El impuesto es el tributo típico por excelencia. El que representa mejor el género, confundiéndose
prácticamente con él. Es también el más importante de las finanzas actuales y el que tiene más valor
científico, razones por las cuales la doctrina le presta preferente atención.
Podemos definir al impuesto como “el tributo exigido por el Estado a quienes se
hallan en las situaciones consideradas por la ley como hechos imponibles, siendo estos hechos
imponibles ajenos a toda actividad estatal relativa al obligado”.
En cuanto a su naturaleza jurídica, el impuesto es jurídicamente, como todos los tributos, una
institución de derecho público. Se trata, pues, de una “obligación unilateral impuesta coactivamente
por el Estado en virtud de su poder de imperio”.
Diferencia con otros tributos.
En el impuesto, la prestación exigida al obligado es independiente de toda actividad estatal relativa
a él, mientras que en la tasa existe una especial actividad del Estado materializada en la prestación
de un servicio individualizado en el obligado. Por su parte, en la contribución especial existe
también una actividad estatal que es generadora de un especial beneficio para el llamado a
contribuir.
Teoría política, económica y jurídica.
La doctrina financiera se ha preocupado desde antiguo por encontrar un fundamento ético-político
que justifique las exigencias impositivas del Estado. Entre las teorías sobre el fundamento del
impuesto destacamos las siguientes:
Teoría del precio de cambio: sostienen que el impuesto no es otra cosa que una compensación
que satisfacen los contribuyentes por los servicios que les presta el Estado.
Teoría de la prima del seguro: sostuvieron que en realidad lo que los individuos pagan
mediante el impuesto es una contraprestación por la seguridad que el Estado brinda a personas y
bienes. El impuesto es entonces una prima de seguro pagada por aquellos que poseen bienes, para
asegurarlos contra todo riesgo que perturbe la posesión o goce de tales bienes.
Teoría de la distribución de la carga pública: los autores franceses piensan que la obligación
impositiva es consecuencia de la solidaridad social. La obligación individual no se mide por las
ventajas que se obtienen del Estado, como sostenían las teorías precedentemente analizadas. Esa
obligación se establece en virtud de la capacidad personal del individuo para contribuir a los gastos
de la comunidad. Si los ciudadanos han creado el Estado es lógico que contribuyan a su
sostenimiento.
Fines fiscales y extra-fiscales.
Ya adelantamos que el principal objetivo del tributo es fiscal, es decir que su cobro tiene su razón
de ser en la necesidad de obtener ingresos para cubrir los gastos que le demanda la satisfacción de
las necesidades públicas.
Pero este objetivo puede no ser el único. En esencia, el tributo puede perseguir también fines extra-
fiscales, o sea, ajenos a la obtención de ingresos. Así vemos los casos de tributos aduaneros
protectores, de impuestos con fines de desaliento o incentivo a determinadas actividades privadas,
etc.
Sin embargo, este objetivo extra-fiscal adicional (aun siendo la motivación prevaleciente de alguna
determinada medida tributaria) no constituye la esencia jurídica de la institución del tributo, sino la
utilización para objetivos económico-sociales de una herramienta de intervencionismo. El Estado
puede intervenir activamente en la economía nacional orientándola en virtud de medidas tributarias,
y es lógico que así lo haga si de ello se generan beneficios a la comunidad organizada.
Clasificación de los impuestos. Impuestos directos e indirectos. Reales y personales. Generales
y especiales. Periódicos e impuestos por una sola vez. Fijos, graduales, proporcionales,
progresivos y regresivos.
A. Impuestos directos e indirectos: esta es la clasificación de mayor importancia en nuestro país
dado que la delimitación de competencias entre Nación y Provincias se realiza teniéndola en cuenta.
Se han sostenido varios criterios para su diferenciación:
− Criterio económico: también llamado de la traslación o incidencia, considera impuestos directos
a aquellos que no pueden trasladarse, es decir, que deben ser soportados por el sujeto sobre el que
recae (ej. ganancias); mientras que impuestos indirectos son aquellos cuya carga tributaria puede
trasladarse a un tercero (ej. iva).
− Criterio administrativo: toma en cuenta la situación de empadronamiento o no del sujeto
obligado al pago. Si el impuesto recae sobre un sujeto empadronado o individualizado (ej. inscripto)
se tratará de un impuesto directo; si, por el contrario, recae sobre sujetos no individualizados (no
empadronados), se considerará indirecto.
− Criterio de exteriorización de la capacidad contributiva: según este criterio, son directos los
impuestos que gravan inmediatamente el patrimonio o la renta e indirectos los que gravan el gasto o
el consumo. En los primeros hay certeza sobre la capacidad contributiva (exteriorización inmediata)
y en los segundos una presunción (exteriorización mediata), sin importar su posibilidad de
traslación (criterio de Villegas).
B. Reales y personales: son reales si tienen en cuenta la renta o la riqueza del contribuyente con
prescindencia total de elementos subjetivos (ej. iva, inmobiliario); son personales cuando se tiene en
cuanta la persona del contribuyente (ej. ganancias).
C. Generales y especiales: generales son los que gravan la totalidad de los bienes y servicios y
luego otorgan las exenciones a determinados productos (ej. iva) y especiales gravan determinados
bienes o servicios (ej. patente automotor, cigarrillos, nafta, etc.).
D. Periódicos e impuestos por una sola vez: se refiere al carácter de permanencia o transitoriedad
del impuesto. Los primeros son aquellos que tienen vigencia permanente, es decir, sin límite de
tiempo; los segundos son transitorios o de emergencia ya que tienen un lapso determinado de
duración.
E. Fijos, graduales y proporcionales: en los fijos el monto de la exacción es el mismo para cada
contribuyente, mientras que en los graduales el monto varía según la capacidad contributiva (ej.
ganancias). Los proporcionales son parecidos a los graduales, la diferencia radica en que mientras
que en los segundos la alícuota (%) sube o baja de acuerdo a la capacidad contributiva (ej.
ganancias = a mayor renta mayor alícuota), en los primeros es un % fijo (ej. iva = 21%).
F. Progresivos y regresivos: son progresivos aquellos que varían según la capacidad contributiva
del contribuyente (ej. ganancias); son regresivos aquellos que no la tienen (ej.iva).
Concepto de capacidad contributiva y de presión tributaria.
Capacidad contributiva.
La capacidad contributiva es la “aptitud económica de los miembros de la comunidad para
contribuir a la cobertura de los gastos públicos”.
El principio de capacidad contributiva constituye el límite material en cuanto al contenido de la
norma tributaria (así como el principio de legalidad o reserva es el límite formal). Ambos principios
constituyen el estatuto básico del contribuyente que la Constitución ampara.
Giuliani Fonrouge critica esta distinción sosteniendo que modernamente ha perdido gran parte de su
vigencia.
A diferencia de otros países, en el nuestro se habla de una "igualdad fiscal" que estaría contenida en
la fórmula según la cual "la igualdad es la base del impuesto" (art. 16, in fine).
Pero si bien la Constitución argentina no consagra en forma expresa el principio de capacidad
contributiva, sí lo hace implícitamente cuando, al referirse a los tributos, lo hace con una
terminología que no puede dejar dudas sobre la intención de los constituyentes. Vemos así que:
a. en el art. 4 se habla de contribuciones que equitativa y proporcionalmente a la población,
imponga el Congreso;
b. en el art. 16, in fine, se dice que la igualdad es la base del impuesto;
c. en el art. 75, inc. 2, al otorgarse al Congreso la facultad excepcional de imponer contribuciones
directas, se estipula que ellas deben ser proporcionalmente iguales en todo el territorio de la Nación.
Presión tributaria.
La presión tributaria es la relación existente entre la exacción fiscal soportada por los
contribuyentes, y la renta de que disponen.
La presión tributaria puede ser:
− Individual: se obtiene comparando el importe total de los impuestos que paga con el total de las
rentas que percibe.
− Sectorial: se calcula comparando el importe total de las exacciones tributarias de un sector
(agrícola, industrial, comercial, profesional), con el total de las rentas que produce el sector.
− Nacional: es la relación entre el conjunto de tributos y la riqueza de la colectividad.
Formula común Formula común (cambia PBI x R) Formula compleja (tiene en cuenta el gasto
público)
T (tributos)
P=
R (renta nacional)
T (tributos)
P=
PBI (Prod. Bruto Int.)
T – G (gasto público)
P=
R o PBI
Observando el derecho comparado, vemos que numerosos países han incluido la capacidad
contributiva como principio de imposición en los textos constitucionales. Así, el art. 53 de la
Constitución italiana expresa que "todos son obligados a concurrir a los gastos en razón de su
capacidad contributiva", y también lo hallamos expresamente consagrado en las Constituciones de
España, Grecia, Albania, Venezuela, Ecuador, Turquía, Santo Domingo, Jordania, Bulgaria,
Marruecos, Somalia, etc.
En criollo: “es la relación ente lo que tienen o ganan y lo que le pagan al fisco.
De ahí el dicho: “en ese país se pagan muchos/pocos impuestos”.
Sistemas tributarios: unidad o multiplicidad de impuestos.
Mucho se ha discutido sobre si el ideal en materia tributaria es la sustitución de todo el conjunto
tributario por un impuesto único. La idea sedujo desde antigua data a numerosos escritores que
propusieron diversos tipos de impuesto único.
Pero tampoco faltaron desde tiempo atrás quienes se manifestaron en contra del impuesto único.
Resumiendo las objeciones más importantes:
a) No hay impuesto perfecto en cuanto a la distribución de la carga tributaria, y en consecuencia se
considera conveniente la existencia de los impuestos correctores en una pluralidad que actúe como
compensadora equilibrando las anomalías individuales que pudieran surgir.
b) Un sistema de impuestos múltiples hace más difícil y atenúa en gran medida la posibilidad de
evasión tributaria mediante la correlación entre sí de diversos tipos de tributos (p.ej., cotejo de las
declaraciones del impuesto a las ganancias de una persona fallecida, con los bienes que deja en
herencia).
c) La capacidad contributiva de los particulares se exterioriza de muy diversas formas, lo que lleva
a la consiguiente multiplicidad de hechos imponibles, a los cuales se hace imposible comprender en
un único tributo.
d) Por último, y desde un punto de vista pragmático, ningún sistema de impuesto único tendría la
productividad suficiente para cubrir las necesidades financieras del Estado.
En consecuencia, han sido desechados tanto teórica como prácticamente los intentos de imponer un
sistema de impuesto único, aunque no deja de reconocerse que tampoco es aconsejable una excesiva
multiplicidad tributaria
Efectos económicos de los impuestos en general: percusión, traslación (análisis de los distintos
supuestos). Incidencia. Difusión.
Hemos visto que el impuesto es exigido a quienes se hallan en las situaciones consideradas por la
ley como hechos imponibles. Esa persona obligada a tributar por estar comprendida en el hecho
generador es el “contribuyente de jure", o sea, la persona designada por la ley para pagar el
impuesto. Pero suele ocurrir que quien paga el impuesto no es en realidad quien soporta su carga.
Esta carga recae en un tercero, a quien se denomina “contribuyente de facto”.
La trasferencia de la carga impositiva (traslación) a veces es prevista por el legislador; así, la mayor
parte de los impuestos al consumo son soportados por el comprador; en otros casos la traslación se
produce sin estar prevista por el Estado e incluso contra su voluntad.
Para estudiar debidamente la repartición de hecho de los impuestos, es necesario considerar
separadamente los siguientes fenómenos:
a) Percusión: es el acto por el cual el impuesto recae sobre el “contribuyente de jure”, o sea, aquel
que por estar comprendido en el hecho imponible, debe pagar por designación y coacción
legislativa (ej. el obligado a pagar ganancias).
b) Traslación: es el fenómeno por el cual “el contribuyente de jure” consigue trasferir el peso del
impuesto sobre otra persona “contribuyente de facto”. Esta trasferencia está regulada
exclusivamente por la economía y se efectúa con total prescindencia de disposiciones legales que
expresamente faculten el traspaso de la carga impositiva (ej. el propietario del inmueble arrendado
que traslada el costo de los impuestos al inquilino). Las formas de traslación son:
1) Traslación hacia adelante, hacia atrás y oblicua: la traslación hacia adelante (o protraslación)
es aquella que sigue la corriente de los bienes en el circuito económico; es el caso más común. La
traslación hacia atrás (o retrotraslación) es aquella que ligue el proceso inverso al de la corriente de
los bienes en el circuito económico (ej. el comerciante que compra un mercadería gravada con un
impuesto y recibe un descuento de su proveedor en compensación). La traslación hacia atrás es
menos frecuente que la traslación hacia adelante, pero en algunos casos suele ocurrir. A su vez, la
traslación es oblicua o lateral cuando el contribuyente de jure trasfiere el peso del impuesto a sus
compradores o proveedores de bienes diferentes a aquellos que fueron gravados con el tributo.
2) Traslación simple y de varios grados: traslación simple es la que se cumple en una sola etapa;
una persona traslada a otra el peso impositivo, y esta última es la que sufre la respectiva carga (ej.
inquilino que paga el impuesto del inmueble que alquila). Pero puede suceder que esta segunda
persona transfiera a su vez esa carga impositiva a una tercera persona, ésta a una cuarta, y así
sucesivamente. En este último caso estaremos ante una traslación de varios grados (ej. IVA).
3) Traslación aumentada: el contribuyente de jure traslada el impuesto con exceso aumentando
sus beneficios, o sea, valiéndose del impuesto para incrementar sus ganancias.
c) Incidencia: este fenómeno significa el peso efectivo que grava al contribuyente de facto o
definitivo. Puede producirse por vía directa cuando el contribuyente de jure es incidido, y por vía
indirecta cuando se verifica la traslación de ese contribuyente de jure hacia la persona incidida, que
es quien sufre en realidad el sacrificio impositivo (ej. IVA).
d) Difusión: la difusión es la irradiación en todo el mercado de los efectos económicos del
impuesto mediante lentas, sucesivas y fluctuantes variaciones, tanto en la demanda como en la
oferta de mercaderías y también en los precios. Como consecuencia del impuesto se verifican
variaciones en los consumos, en las producciones y en el ahorro.
Condiciones de un buen sistema de impuestos. Elasticidad y adecuada suficiencia.
Un sistema progresivo y eficiente de impuestos es aquel que logra cumplir dos principios
fundamentales:
a) Eficiencia: el sistema tributario debe poder cubrir las necesidades financieras del Estado, por lo
que se deben tomar en cuenta dos aspectos: el gasto público a cubrir y los ingresos necesarios para
ello.
b) Elasticidad: la elasticidad del sistema impositivo o de los impuestos componentes de aquél,
indica la adaptabilidad automática o procurada mediante ajustes cualitativos sobre los impuestos
mismos, para producir mayor o menor recaudación, según las exigencias de las variaciones de los
gastos públicos. Se trata de variar la alícuota o la base imponible sin tener que crear nuevos tributos.
Hoy, en vez de elasticidad del sistema impositivo, se prefiere hablar de la flexibilidad de dicho
sistema y de los impuestos que lo componen. Se conocen dos tipos de flexibilidad fiscal:
flexibilidad automática o intrínseca y flexibilidad de fórmula.
Concepto y contenido del derecho financiero. Divisiones. Relaciones del derecho financiero
con otras ramas de las ciencias jurídicas, sociales, económicas y políticas. Historia del derecho
financiero.
Concepto y contenido del derecho financiero.
El derecho financiero es el conjunto de normas jurídicas que regulan la actividad financiera del
Estado.
Se trata de una rama del Derecho Público que, por un principio de división del trabajo, se ha
convertido en una disciplina jurídica particular y tiene su campo de acción. Ese campo de acción
está constituido por la regulación jurídica de la actividad financiera.
Dentro del contenido del derecho financiero encontramos varios sectores con caracteres jurídicos
propios:
a) La regulación jurídica del presupuesto (derecho presupuestario).
b) Las relaciones concernientes a la tributación en general (derecho tributario).
c) La regulación jurídica de la administración del patrimonio del Estado o
"gestión patrimonial".
d) La regulación legal de todo lo atinente al crédito público.
e) El conjunto de normas jurídico-económicas relacionadas con la moneda (derecho monetario).
Relaciones del derecho financiero con otras ramas de las ciencias jurídicas, sociales,
económicas y políticas.
Con la ciencia económica: todas las medidas financieras están relacionadas con hechos económicos.
Por un lado, los fenómenos de la actividad económica privada dentro de la producción, circulación
y consumo, son elementos causales de fenómenos financieros. Por otra parte, las teorías de la
economía nacional son premisas de las corrientes teóricas y doctrinas financieras.
Para algunos autores esto corresponde al Derecho Administrativo y no al financiero.
Con las ciencias jurídicas: toda la vida financiera debe ceñirse a formas jurídicas. Las medidas de
tipo financiero aparecen normalmente bajo forma de leyes y se refieren a hechos jurídicos.
Además, las finanzas tienen especial vinculación con el derecho administrativo.
Con respecto al derecho constitucional, La configuración de las finanzas suele estar delineada en las
cartas fundamentales (constituciones) que rigen a los pueblos. En nuestra Constitución existen, por
otra parte, una serie de disposiciones relacionadas a la actividad financiera del Estado. Tales, por
ejemplo, los arts. 4, 8, 9, 10, 11, 16, 67, 104, etc.
Tampoco debe olvidarse la vinculación de las finanzas con el derecho privado (civil y comercial).
La actividad financiera es ejercida por el Estado, pero quienes están sujetos a ella son las personas
físicas y las entidades, que son sujetos de derecho privado.
Con la historia: la actividad financiera del Estado se ha ido modificando a lo largo del tiempo.
Existe, por lo tanto, una historia de la actividad y pensamiento financiero, cuyo examen tiene
singular importancia para comprender el estado actual de los estudios en la materia.
Con la estadística registra sistemáticamente los datos cuantitativos de ciertos fenómenos y establece
las diferentes relaciones posibles entre los datos referidos a un mismo fenómeno.
Historia del derecho financiero.
El derecho financiero -no confundir con las ciencias de las finanzas-, como rama autónoma del
derecho, no surgió sino hasta principios del s. XX.
La obra básica en la formulación del derecho financiero fue la del autor austríaco Myrbach
Rheinfeld. Este autor fue el primero que señaló la necesidad de estudiar la materia desde el punto de
vista estrictamente jurídico, diferenciándolo del derecho administrativo y del derecho privado.
Es decir, planteó la necesidad de existencia de un derecho financiero como rama jurídica
independiente. Sostenía el autor mencionado que el derecho financiero debía ser caracterizado
como un derecho público cuyas relaciones jurídicas e instituciones jurídicas podían ser extrañas al
derecho privado, en cuyo caso no eran aplicables los principios ni las normas del derecho privado
El derecho tributario. Concepto y divisiones. Autonomía del derecho financiero y del derecho
tributario.
Concepto y divisiones.
El derecho tributario, en sentido lato, es el conjunto de normas jurídicas que se refieren a los
tributos, regulándolos en sus distintos aspectos.
Contemplado el contenido del derecho tributario en general y en forma panorámica, observamos
que comprende dos grandes partes: una primera parte, o parte general, donde están comprendidas
las normas aplicables a todos y cada uno de los tributos, y una parte especial que contiene las
disposiciones específicas sobre los distintos gravámenes que integran un sistema tributario.
La ley 11.683 divide al derecho tributario en:
a. Sustancial o material: se encarga del estudio de la relación jurídica tributaria estricto sensu (arts.
5 y 6).
b. Formal: atinente a la ejecución del derecho tributario material y orientado al estudio de la
administración, es decir, la gestión del crédito público, la determinación del tributo, la recaudación,
fiscalización, verificación, etc.
c. Procesal: regula el procedimiento tributario (arts. 71, 55, 81 y ss.)
d. Penal: referido a las infracciones y sanciones para quienes incumplen las obligaciones tributarias
a su cargo. Las sanciones se encuentran en la ley 11.683 y la tipificación de delitos en la ley
26.735).
e. Constitucional: sirve como límite al poder financiero del Estado y regula las distintas
competencias en materia de imposición tributaria.
f. Internacional: complementa a la Constitución y brinda soluciones a conflictos entre imposiciones
de distintos Estados soberanos.
2.2. Autonomía del derecho financiero y del derecho tributario.
Teorías negatorias: las que niegan todo tipo de autonomía científica al derecho tributario (aun la
didáctica), porque lo subordinan al derecho financiero. Otros los sostienen que el derecho tributario
es una rama del derecho administrativo. Esta corriente doctrinal adquiere singular relevancia,
porque no sólo la sostienen administrativistas sino también destacados especialistas en derecho
tributario.
Teorías afirmativas: aquellos que consideran al derecho tributario material o sustantivo tanto
didáctica como científicamente autónomo (Jarach).
Teorías privatistas: afirman su dependencia con respecto al derecho privado (civil y comercial) y le
conceden al derecho tributario tan sólo un particularismo exclusivamente legal. Esto significa que el
legislador tributario puede crear regulaciones fiscales expresas derogatorias del derecho privado,
pero si no lo hace, sigue rigiendo éste.
Villegas dice que puede aceptarse una autonomía didáctica del derecho tributario.
También es aceptable una autonomía funcional derivada de que constituye un conjunto de reglas
jurídicas homogéneas; pero descarta la autonomía científica.
Las fuentes del derecho financiero y del derecho tributario.
Son fuentes del derecho financiero los medios generadores, de las normas que regulan la actividad
financiera del Estado:
1. La constitución y tratados internacionales con jerarquía constitucional: en nuestra
Constitución existen principios generales de derecho que no pueden ignorarse al crear normas
financieras: tales, los principios relativos a la libertad (individual, de cultos, de prensa, de
propiedad, de trabajar) y la igualdad (ante la ley, el impuesto y las cargas públicas). Lo mismo
ocurre con los convenios y tratados internacionales.
2. Tratados internacionales sin jerarquía constitucional.
3. La ley: es la fuente inmediata de mayor importancia en el derecho financiero. Según el principio
de legalidad financiera, todos los ingresos y los gastos estatales deben ser dispuestos o
autorizados por el organismo legislativo.
4. El decreto-ley: si bien la facultad de sancionar leyes es exclusiva del poder legislativo, aun
existen decretos y reglamentos de los gobiernos de facto que continúan vigentes.
5. El reglamento: reglamentos son las disposiciones emanadas del poder ejecutivo que regulan la
ejecución de las leyes, En derecho financiero, y especialmente en derecho tributario, el reglamento
tiene importancia como creador de normas jurídicas. Esto significa que el reglamento contiene
también normas jurídicas aun cuando no emane del poder legislativo sino del poder ejecutivo.
6. Usos y costumbres, jurisprudencia y doctrina: con efectos limitados.
4. La codificación del derecho tributario.
El derecho tributario ha sido elaborado intensamente por la doctrina, y se han manifestado
importantes tendencias en favor de la codificación. No obstante estas tendencias, se han formulado
algunas objeciones en contra de la codificación:
a) la multiplicidad de las situaciones fiscales impide su codificación;
b) la acción fiscal debe inspirarse en criterios de oportunidad, y no es apta para plasmar en normas
rígidas contenidas en un código;
c) la variedad de los preceptos fiscales impide someterlos a un esquema lógico.
En Alemania tuvo lugar la primera manifestación en este sentido, a través del Ordenamiento
Tributario del Reich, que fue sancionado en 1919. Esta codificación concentraba todas las normas
de orden sustancial y formal, tanto las de carácter general como penal.
En Méjico, y sobre la base del ordenamiento tributario alemán, se sancionó en 1939 el Código
Fiscal de la Federación.
En Brasil rige desde el 25 de octubre de 1986 el Código Tributario Nacional, que contiene
disposiciones de carácter sustancial y formal, no conteniendo, en cambio, disposiciones sobre el
ilícito tributario.
Países como Estados Unidos y Francia cuentan desde hace varios años con códigos fiscales, y a la
tendencia codificadora se han sumado últimamente varios países.
En nuestro país el doctor Giuliani Fonrouge elaboró un anteproyecto de código fiscal en 1943, el
cual, no obstante sus grandes méritos, no tuvo sanción legislativa. Posteriormente, en 1983, el poder
ejecutivo nacional confió a ese mismo tratadista la tarea de preparar otro proyecto de código
tributario, que fue remitido a consideración de las autoridades el 20 de julio de 1964. No obstante
sus méritos, este proyecto no fue sancionado.
La situación en la Argentina continúa como antes, con la ley 11.683 continuamente modificada, la
ley de Aduanas y disposiciones aisladas de leyes especiales.
Es visible la situación de atraso de nuestro país en esta materia con relación a otras naciones de
América Latina, como las que hemos mencionado precedentemente.
Esta situación que se advierte en el orden nacional no existe, sin embargo, en las provincias, que
han elaborado códigos fiscales que significan un verdadero progreso en cuanto a sistematización y
ordenamiento del régimen tributario.
Consideración muy especial merece el Modelo de Código Tributario para América Latina.
La interpretación de las normas tributarias. Alcances del principio de realidad económica.
Interpretar una ley es descubrir su sentido y alcance. Al intérprete corresponde determinar qué quiso
decir la norma y en qué caso es aplicable.
El intérprete puede y debe utilizar todos los métodos a su alcance: debe examinar la letra de la ley
(método literal), necesita analizar cuál ha sido la intención del legislador (método histórico), y tiene
que adecuar ese pensamiento a la realidad circundante (método evolutivo); debe coordinar la norma
con todo el sistema jurídico (método lógico), así como contemplar la calidad económica que se ha
querido reglar y la finalidad perseguida (método de la realidad económica).
En concordancia con este criterio, el art. 5 del Modelo de Código Tributario para América Latina
dice que "las normas tributarias se interpretarán con arreglo a todos los métodos admitidos en
derecho, pudiéndose llegar a resultados restrictivos o extensivos de los términos contenidos en
aquéllas...”
Entre los métodos podemos señalar:
MÉTODO LITERAL: se limita este método a declarar el alcance manifiesto e indubitable que
surge de las palabras empleadas en la ley, sin restringir ni ampliar su alcance. Este método usado en
forma exclusiva es insuficiente y puede llevar a conclusiones erróneas, porque el legislador no es
siempre un técnico en derecho tributario y, por tanto, puede suceder que la terminología empleada
no sea la adecuada a la realidad que se quiso legislar.
MÉTODO LÓGICO: este sistema interpretativo quiere llegar a resolver el interrogante de qué
quiso decir la ley. Quiere saber cuál es el espíritu de la norma. La ley forma parte de un conjunto
armónico, por lo cual no puede ser analizada en sí misma, sino relacionada con las disposiciones
que forman toda la legislación de un país.
MÉTODO HISTÓRICO: sus sostenedores dicen que la tarea del intérprete es desentrañar el
pensamiento del legislador, ya que conocer la ley no es otra cosa que conocer la intención de quien
la dictó. Este método identifica la voluntad de la ley con la voluntad del legislador.
Sin embargo, este sistema es objeto de crítica en materia fiscal. Se dice que la fiscalidad se
caracteriza por su movilidad, y no se puede interpretar las cláusulas impositivas según el
pensamiento del legislador cuando la ciencia tributaria está en constante evolución.
MÉTODO EVOLUTIVO: este método surge como reacción contra los métodos tradicionales.
La ley es base y fuente de todo sistema jurídico, pero debe adaptarse a las nuevas exigencias
determinadas por la evolución social. En materia tributaria, el principio de legalidad es una valla
para este método. No se puede, por ejemplo, por vía de una interpretación evolutiva de la ley,
modificar la integración del hecho imponible.
INTERPBETACIÓN SEGÚN LA REALIDAD ECONÓMICA: el derecho tributario se
interesa de la operación económica que hacen las partes, sin reconocer eficacia creadora de efectos
jurídicos tributarios a la voluntad individual. Por lo tanto, si las partes han distorsionado la realidad
de la operación mediante una forma jurídica inapropiada que se busca al solo efecto de defraudar al
fisco, mediante la aplicación de este criterio, los jueces tienen la herramienta necesaria para
apartarse del formalismo conceptual en los casos de evasiones fraudulentas y prescindiendo de las
formas o apariencias jurídicas engañosas, aplicar la legislación fiscal según la realidad de los
hechos económicos, sin necesidad de demostrar la nulidad del acto jurídico aparente o su
simulación.
La ley 11.683 adopta el criterio de la realidad económica en el art. 12: “se tendrán en cuenta los
actos, situaciones o relaciones que efectivamente realicen, persigan o establezcan los
contribuyentes, prescindiendo de las formas o estructuras jurídicamente inadecuadas”.
La interpretación que se basa en la realidad económica es aceptada legislativamente en casi todos
los países y proporciona a los intérpretes un medio adecuado para la aplicación de las normas
fiscales cuando se pretende soslayarlas mediante fraude.
Efectos de las normas tributarias en el tiempo: retroactividad o irretroactividad de la ley.
La determinación del momento a partir del cual son obligatorias las normas tributarias no ofrece, en
principio, mayor problema porque usualmente cada ley expresa la fecha de su entrada en vigencia.
Si tal mención se omite, es aplicable el art. 2 del Código Civil, en virtud del cual si las leyes no
expresan tiempo, serán obligatorias después de los ocho días siguientes al de su publicación oficial.
El problema de la retroactividad de las leyes surge con respecto a las relaciones jurídicas que
nacieron durante la vigencia de una ley anterior y cuyos efectos se prolongan durante la vigencia de
una nueva ley.
El principio general que debe regir estas situaciones es que las leyes deben regir para el futuro y no
retrotraerse al pasado.
En materia tributaria, y atento al principio de unidad del orden Jurídico, es de aplicación el art. 3 del
Código Civil, según el cual las leyes se aplicarán desde su vigencia a las consecuencias de las
relaciones jurídicas existentes. Agrega esta disposición que las leyes no tienen efecto retroactivo,
sean o no de orden público, salvo disposición en contrario. Este último párrafo significa el
reconocimiento de que en ciertos casos el legislador puede asignar retroactividad a algunas leyes,
pero la jurisprudencia nacional ha utilizado esta modalidad interpretativa en casos en que los
contribuyentes exteriorizaron dolosamente su propósito efectivo (voluntad empírica) con
apariencias formales distintas de las apropiadas. Por ejemplo, aquellos que encubren una donación
bajo el aspecto de una compraventa, o disimulan un arrendamiento mediante un contrato de
sociedad, documentan el pago de remuneraciones a dependientes como si fuesen honorarios de no
dependientes, etc. En estos casos, y en otros similares, la jurisprudencia se apartó de las apariencias
y determinó la obligación fiscal según la realidad ocultada, sin necesidad de demostrar la nulidad de
los actos o accionar por vía de simulación. Seguidamente el mismo art. 3 limita esta posibilidad
legislativa al estipular que esa retroactividad en ningún caso podrá afectar derechos amparados por
garantías constitucionales.
Trasladada la teoría al ámbito específicamente tributario, entendemos que el acaecimiento del hecho
imponible genera un derecho adquirido en el contribuyente: el derecho de quedar sometido al
régimen fiscal imperante al momento en que se tuvo por realizado o acaecido ese hecho imponible.
Ahora bien, el hecho imponible puede ser:
− De verificación instantánea (por ej., ganar un premio en el Prode), y en este caso la aplicación de
la ley tributaria no presenta problemas; o
− De verificación periódica, ello significa que ese hecho imponible es la resultante de un conjunto
de actos jurídicos o económicos que se desarrollan en un período temporal (p.ej., el impuesto a las
ganancias que grava los ingresos que se van produciendo a lo largo del período).
De tal manera, si se produce una modificación legislativa durante el curso del ejercicio, la alteración
es válida y no retroactiva, puesto que el hecho imponible no se tuvo aún por realizado.
Aplicación de las normas tributarias en el espacio: el derecho tributario internacional. La
doble imposición internacional e interna.
Conforme al principio de soberanía, cada Estado tiene amplias facultades para gravar todas las
situaciones imponibles situadas bajo su poder de imperio, lo cual implica, en primer lugar, que el
poder de imposición se ejerce dentro de los límites territoriales sometidos a la soberanía del Estado.
El art. 11 del Modelo de Código Tributario para América Latina dispone lo siguiente:
"Las normas tributarias tienen vigencia en el ámbito espacial sometido a la potestad del órgano
competente para crearlas".
Eventualmente, este principio puede ser modificado o atemperado mediante convenios tendientes a
evitar la doble imposición, y en sentido inverso puede suceder que en virtud del principio de
soberanía, el Estado grave a sus nacionales, residentes o domiciliados, por las riquezas obtenidas
fuera del territorio del país.
Bolilla 5
1) Potestad tributaria: El derecho constitucional tributario es una parte del derecho constitucional
que sólo puede considerarse "tributario" por el objeto al cual se refiere. Sobre su pertenencia al
derecho constitucional,poca duda cabe. Su tarea es la de las normas del derecho constitucional:
regular el poder de imperio estatal.
Así considerada, la potestad tributaria se subordina a las normas constitucionales, normas de grado
superior a las normas legales que prevén las concretas relaciones tributarias.
2. LA POTESTAD TRIBUTARIA. CARACTERIZACIÓN. — La potestad tributaria (o poder
tributario) es la facultad que tiene el Estado de crear unilateralmente tributos, cuyo pago será
exigido a las per-sonas somestidas a su competencia tributaria espacial (ver infra,
Esto, en otras palabras, importa el poder coactivo estatal de compeler a las personas para que le
entreguenuna porción de sus rentas o patrimonios, cuyo destino es el de cubrirlas erogaciones que
implica el cumplimiento de su finalidad de atender necesidades públicas. La potestad tributaria,
considerada en un plano abstracto, signi-fica, por un lado, supremacía, y, por otro, sujeción. Es
decir: la existencia de un ente que se coloca en un plano superior y preeminente, y frente a él, a una
masa indiscriminada de individuos ubi-cada en un plano inferior
Deseamos dejar bien en claro lo siguiente: la potestad tribu-taria es la capacidad potencial de
obtener coactivamente prestaciones pecuniarias de los individuos y de requerir el cumplimiento de
los deberes instrumentales necesarios para tal obtención. pero ella no es todavía un derecho de
crédito contra un deudor determinado sino un derecho a exigir prestaciones formales. Por el
contrario, no existen deberes concretos correlativos a la potestad.
LIMITACIONES A LA POTESTAD TRIBUTARIA. PRINCIPIOS JURÍ-DICOS DE LOS
TRIBUTOS. — Pero tal potestad no es omnímoda sino que se halla limitada en los modernos
Estados de derecho. En su origen el tributo significó violencia del Estado frente al particular y aun
siguió teniendo ese carácter cuando su aprobación quedó confiada a los "consejos del reino",
"representaciones corporativas “e incluso "asambleas populares". Mal podía hablarse de "garantías
“de los súbditos cuando la aprobación se otorgaba en forma genérica y sin normas fijas destinadas a
regular los casos individuales.
El cambio fundamental se produce cuando los modernos Estados constitucionales deciden
garantizar los derechos de las personas resolviendo que la potestad tributaria sólo pueda ejercerse
mediante la ley.
La potestad tributaria —entonces— se trasforma. La facultad estatal de crear unilateralmente
tributos se convierte en la facultad de dictar normas jurídicas objetivas que crean tributos y
posibilitan su cobro a los obligados.
Ya hemos visto que la potestad tributaria (o poder tributario) es la facultad que tiene el Estado de
crear unilateralmente tributos, cuyo pago será exigido a las personas sometidas a su competencia
tributaria espacial. Esto, en otras palabras, importa el poder coactivo estatal de compeler a las
personas para que le entreguen una porción de sus rentas o patrimonios, cuyo destino es el de cubrir
las erogaciones que implica el cumplimiento de su finalidad de atender necesidades públicas. Pero
tal potestad no es omnímoda sino que se halla limitada en los modernos Estados de derecho por los
siguientes principios:
A. LEGALIDAD: la potestad tributaria debe ser íntegramente ejercida por medio de normas legales
(principio de reserva). Es decir, no puede haber tributo sin ley previa que loestablezca. Dicha ley
debe contener por lo menos los elementos básicos y estructurales deltributo, a saber:
1. configuración del hecho imponible;
2. atribución del crédito tributario a un sujeto activo determinado;
3. determinación del sujeto pasivo del hecho imponible (contribuyente);
4. base imponible y alícuota;
5. las exenciones neutralizadoras de los efectos del hecho imponible
B. CAPACIDAD CONTRIBUTIVA: es el límite material en cuanto al contenido de la norma
tributaria, garantizando su "justicia y razonabilidad". La capacidad contributiva es la “aptitud
económica de los miembros de la comunidad para contribuir a la cobertura delos gastos públicos”.
La Constitución argentina no consagra en forma expresa el principio de capacidad contributiva, sí lo
hace implícitamente cuando, al referirse a los tributos, lo hace con una terminología que no puede
dejar dudas sobre la intención de los constituyentes. Vemos así que:
− en el art. 4 se habla de contribuciones que equitativa y proporcionalmente a lapoblación, imponga
el Congreso;
− en el art. 16, in fine, se dice que la igualdad es la base del impuesto;
− en el art. 75, inc. 2, al otorgarse al Congreso la facultad excepcional de imponer contribuciones
directas, se estipula que ellas deben ser proporcionalmente igualesen todo el territorio de la Nación.
C. GENERALIDAD: este principio, igual que el de igualdad, surge del art. 16 de la Constitución
nacional, y ordena que tributen —cualquiera que sea el carácter del sujeto, categoría social, sexo,
nacionalidad, edad o estructura exclusión arbitraria— todos los que están incluidos en el ámbito de
la capacidad contributiva. El límite de la generalidad está constituido por las exenciones y
beneficios tributarios, conforme a las cuales ciertas personas no tributan o tributan menos pese a
configurarse el hecho imponible. Estas exenciones y beneficios, sin embargo, tienen carácter
excepcional y se fundan en razones económicas, sociales o políticas, pero nunca en razones de
privilegios, y la facultad de otorgamiento no es omnímoda.
D. IGUALDAD: el art. 16 de la Constitución nacional, que ya mencionamos, establece que todos
los habitantes son iguales ante la ley y que la igualdad es la base del impuesto y de las cargas
públicas. No es una igualdad formal sino material, según la cual los ciudadanos deben contribuir al
Estado en proporción a sus respectivas capacidades.
E. PROPORCIONALIDAD: este principio exige que la fijación de contribuciones concretas de los
habitantes de la Nación sea "en proporción" a sus singulares manifestaciones de capacidad
contributiva, ya que lo deseado es que el aporte no resulte "desproporcionado" en relación a ella.
F. NO CONFISCATORIEDAD: la Constitución nacional asegura la inviolabilidad de la propiedad
privada, su libre uso y disposición, y prohíbe la confiscación (arts. 14 y 17). La tributaciónno puede,
por vía indirecta, hacer ilusorias tales garantías constitucionales3. La confiscatoriedad puede
provenir de:
a) Un solo tributo.
b) Una suma de tributos: es la situación que se produce cuando el exceso se origina no por un
tributo puntual, sino por la presión que ejerce sobre el contribuyente el conjunto de tributos que lo
alcanzan.
2) poder de eximir: una consecuencia del poder de gravar es la potestad de desgravar, de eximir de
la carga tributaria. Los problemas que se han presentado no tienen atinencia con la facultad de
eximir considerada en abstracto, sino con aspectos colaterales de su ejercicio: cual es la autoridad
que puede disponerla, En que medida y en que condiciones. El poder de eximir ofrece cierta
simetría con el poder tributario esta circunstancia explica el hecho de que prácticamente todos los
problemas que convergen en el ámbito del tributo pueden ser estudiados desde la exención, asi
como existen limitaciones constitucionales al poder tributario, hay limites que no pueden
trasponerse en el poder de eximir, porque ambos no son mas que el anverso y reverso de la misma
moneda
Clasificación de exenciones: aparte de las circunstancias de que las exenciones pueden otorgarse
por aplicación directa de una ley o por un decreto fundado en ley o también por contrato suscrito en
virtud de una ley regulatoria aquellas pueden ser:
- permanentes o transitorias: según el tiempo de duración del ejercicio
- condicionales o absolutas: cuando se hallan subordinadas a circunstancias o hechos determinados
o no lo están
- totales o parciales según comprendan todos los impuestos o uno o alguno de todos ellos.
- sub u obj :si son establecidas en función de determinadas personas físicas o jurídicas, o teniendo
en cuenta ciertos hechos o actos que el legislador estime dignos de beneficio. En algunos casos la
exención puede participar de ambos caracteres, es decir puede ser obj o sub, a la vez,por lo que se
habla de exenciones mixtas como ocurre en el banco de la nación
EXENCION,NO SUJECION E INMUNIDAD:
La execion
3) 1. La distribución de los poderes impositivos en el derecho constitucional comparado y
argentino. Facultades impositivas de la Nación, de las provincias y municipalidades en el sistema
argentino.
El derecho constitucional tributario estudia las formas fundamentales que disciplinan el ejercicio de
la potestad tributaria y que se encuentran en las cartas constitucionales en aquellos países en que
éstas existen. Estudia también las normasque delimitan y coordinan las potestades tributarias entre
las distintas esferas de poder en los países con régimen federal de gobierno
Según el art. 1 de la Constitución Nacional, nuestro país ha adoptado la forma federal de gobierno,
lo cual implica que existen diversos entes estatales: un Estado nacional o central y Estados
provinciales o locales. Por otra parte, el art. 5 establece que las provincias deben asegurar su
régimen municipal, surgiendo, en consecuencia, los municipios como un tercer orden de ente
estatal.Según el art. 104 de la Constitución Nacional las provincias conservan todo el poder no
delegado por la Constitución al gobierno federal. En cambio, la nación sólo tiene las facultades que
resulten de la delegación efectuada por la Constitución. Por otra parte, las municipalidades son
entidades administrativas autárquicasnacidas de la delegación de poderes provinciales.
La distribución y delimitación de los poderes tributarios entre nación, provincias y municipios
constituye uno de los problemas más dificultosos del derecho tributarioargentino. Sin embargo, de
la correcta interpretación de los textos constitucionalespertinentes (arts. 4, 9, 10, 11, 12, 67, 104 y
108 de la Constitución nacional) surge que:
A. los impuestos indirectos son concurrentes, es decir, pertenecen a la Nación y también a las
provincias que no han hecho delegación exclusiva de facultades, salvo en lo que respecta a los
gravámenes de importación y exportación (aduaneros), los cuales, en consecuencia, son
exclusivamente nacionales.
B. los impuestos directos, por su lado, son exclusivamente provinciales, pero son fuente de recursos
utilizables por la Nación durante un plazo limitado y siempre que la defensa,seguridad común y
bien general del Estado lo exijan (art. 75, inc. 2o).
La distribución de potestades tributarias mencionadas precedentemente, esaceptada por la mayoría
de la doctrina y fue también la que aceptó el CongresoNacional al establecer distintas imposiciones.
Así:
Corresponden a la Nación:
a) derechos aduaneros: exclusivamente (arts. 4, 9, 67, inc. 1, y 108);
b) impuestos indirectos: en concurrencia con las provincias (art. 4);
c) impuestos directos: excepcionalmente y con carácter transitorio (art. 67, inc. 2)
Corresponden a las provincias:
a) impuestos indirectos: en concurrencia con la Nación (art. 4);
b) impuestos directos: en forma exclusiva y permanente, salvo que la Nación haga usode la facultad
del art. 75, inc. 2.
BOLILLA 6
Relación jurídica tributaria: La obligación tributaria. Concepto. Caracteres. Derechos y
obligaciones.
El Estado es el sujeto activo de la relación tributaria y es acreedor del impuesto que está
obligado a pagar el sujeto pasivo. Por tanto el estado está facultado a establecer el impuesto que
deberá pagar el contribuyente y realizar las actividades tendientes al cobro.
Con respecto al establecimiento del cobro de impuestos, corresponde únicamente al poder
legislativo.
Las obligaciones del sujeto activo radica en la de recaudar o percibir el producto de las
contribuciones, por sus órganos debidamente facultados para ello.
No obstante lo anterior, deben cumplir obligaciones complementarias como, control,
fiscalización y supervisión de los contribuyentes.
Sujeto pasivo: es la persona individual o colectiva a cuyo cargo pone la ley el cumplimiento
de la prestación y que puede ser el deudor (contribuyente) o un tercero.
Contribuyentes: Se define contribuyente tributario como aquella persona física con derechos y
obligaciones, frente a un agente público, derivados de los tributos. Es quien está obligado a
soportar patrimonialmente el pago de los tributos, con el fin de financiar al Estado.
Responsables por deuda ajena: Están obligados a pagar el tributo al fisco, con los recursos
que administran, perciben o que disponen, como responsables del cumplimiento de la deuda
tributaria de sus representados, mandantes, acreedores, titulares de los bienes administrados o
en liquidación, etc., en la forma y oportunidad que rijan para aquéllos o que especialmente se
fijen para tales responsables bajo pena de las sanciones de esta ley:
a) el cónyuge que percibe y dispone de todos los réditos propios del otro; b) los padres, tutores
y curadores de los incapaces; c) los síndicos y liquidadores de las quiebras, síndicos de los
concursos civiles, representantes de las sociedades en liquidación, los administradores
legales o judiciales de las sucesiones y, a falta de éstos, el cónyuge supérstite y los
herederos; d) los directores, gerentes y demás representantes de las personas jurídicas,
sociedades, asociaciones, entidades, empresas y patrimonios a que se refiere el art. 15 en
sus incs. b y c; e) los administradores de patrimonios, empresas o bienes que en ejercicio de
sus funciones puedan determinar íntegramente la materia imponible que gravan las
respectivas leyes tributarias con relación a los titulares de aquéllos y pagar el gravamen
correspondiente; y, en las mismas condiciones, los mandatarios con facultad de percibir
dinero;" los agentes de retención y los de percepción de los impuestos".
Responsabilidad solidaria: La solidaridad tributaria implica que dos o más sujetos pasivos
se hallan obligados al cumplimiento total de la misma prestación fiscal.
La responsabilidad solidaria requiere, a los efectos de que opere la solidaridad, que el fisco
intime a los deudores o contribuyentes del tributo, y si éstos no pagan dentro del plazo de la
intimación, surge la solidaridad.
La solidaridad de un tercero ajeno a la configuración del h.i. no se presume, ni puede surgir
implícitamente de la ley: requiere disposiciones expresas.
En forma resumida, anotamos que los efectos de la solidaridad tributaria son los siguientes:
a) Satisfecha la obligación por uno de los obligados solidariamente, ella se extingue
respecto de todos, sin perjuicio de las acciones de resarcimiento de quien pagó al fisco con
respecto a los otros obligados.
b) El fisco puede exigir la totalidad de la deuda a todos en conjunto o a cualquiera de los
obligados solidariamente.
c) La novación, compensación o remisión de la deuda que beneficie a uno de los obligados
extingue la obligación para todos.
d) La interrupción de la prescripción efectuada contra uno de los coobligados perjudica a
los demás.
e) La cosa juzgada lograda por el fisco en el juicio contra uno de los solidarios alcanza a los
otros, salvo que éstos puedan oponer una excepción particular o una defensa común no
planteada en tal juicio.
f) La solidaridad de uno de los coobligados que fallece no importa la solidaridad de sus
herederos, ya que cada uno de éstos adeuda únicamente el importe que resulta de la
proporción con su haber hereditario.
g) El coobligado demandado puede oponer al fisco las excepciones comunes a todos y las
personales suyas, pero no las personales de otros.
Responsables sustitutos: son los sujetos ajenos a la configuración del h.i. que están, por
disposición legal expresamente, obligados a pagar el tributo al fisco, desplazando al
destinatario legal de la relación jurídica respectiva. Pese a ser ajenos al h.i., tienen algún
nexo económico o jurídico con el destinatario legal tributario. Como bien dice Villegas,
pagan "en lugar de" los destinatarios legales tributarios, ya que surge un solo vinculum juris
entre el sujeto activo "fisco" y el sujeto pasivo "sustituto".
Causa: Éste es un elemento muy controvertido. Algunos entienden sin la "causa" carecería En
efecto: ante la pregunta acerca de cuál es la causa del tributo (¿por qué se paga?), se podría
contestar: porque se configuró el h.i.; porque la ley así lo manda (aquí se la confunde con la
fuente de la obligación); porque el Estado tiene el poder de imperio para crearlo conforme a la
Constitución (también se la confunde con la mencionada fuente); porque el Estado tiene la
necesidad de proveerse de recursos para satisfacer necesidades (explicación de carácter
económico-financiero); de validez la obligación tributaria, aunque a esta palabra le han dado
disímiles acepciones.
Condonación: la condonación debe ser dispuesta por ley; empero, queda facultado el Poder
Ejecutivo "para condonar la obligación tributaria cuando la misma se hubiere originado en la
comisión de un hecho ilícito respecto del cual se ejerciere la facultad de indulto".
En ningún caso podrá el Poder Ejecutivo nacional, en ejercicio de las atribuciones conferidas
en el presente artículo, establecer planes de facilidades de pago para la cancelación de
obligaciones vencidas.
Solo podrá hacerse por ley y según la cuantía que esta establezca.
En el caso de las personas de existencia visible, cuando el domicilio real no coincida con el lugar
donde este situada la dirección o administración principal y efectiva de sus actividades, este último
será el domicilio fiscal.
En el caso de las personas jurídicas del Código Civil, las sociedades, asociaciones y entidades a las
que el derecho privado reconoce la calidad de sujetos de derecho, los patrimonios destinados a un
fin determinado y las demás sociedades, asociaciones, entidades y empresas, cuando el domicilio
legal no coincida con el lugar donde esté situada la dirección o administración principal y efectiva,
este último será el domicilio fiscal.
Facúltase a la Administración Federal de Ingresos Públicos para establecer las condiciones que debe
reunir un lugar a fin de que se considere que en él está situada la dirección o administración
principal y efectiva de las actividades. (Párrafo incorporado por art. 175 de la Ley N° 27430 B.O.
29/12/2017. Vigencia: el día siguiente al de su publicación en el Boletín Oficial y surtirán efecto de
conformidad con lo previsto en cada uno de los Títulos que la componen. Ver art. 247 de la Ley de
referencia)
Sólo se considerará que existe cambio de domicilio cuando se haya efectuado la traslación del
anteriormente mencionado o también, si se tratara de un domicilio legal, cuando el mismo hubiere
desaparecido de acuerdo con lo previsto en el Código Civil. Todo responsable que haya presentado
una vez declaración jurada u otra comunicación a la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS está obligado a denunciar cualquier cambio de domicilio dentro de los
DIEZ (10) días de efectuado, quedando en caso contrario sujeto a las sanciones de esta ley. La
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS sólo quedará obligada a tener en
cuenta el cambio de domicilio si la respectiva notificación hubiera sido hecha por el responsable en
la forma que determine la reglamentación.
Sin perjuicio de ello, en aquellas actuaciones en las que corresponda el ejercicio de las facultades
previstas en el artículo 9°, punto 1, inciso b), del Decreto N° 618 de fecha 10 de julio de 1997 y
concordantes y en el Capítulo XI de este Título, el cambio de domicilio sólo surtirá efectos legales
si se comunicara fehacientemente y en forma directa en las referidas actuaciones administrativas.
Cualquiera de los domicilios previstos en el presente artículo producirá en el ámbito administrativo
y en el judicial los efectos de domicilio constituido, siéndole aplicables, en su caso, las
disposiciones de los artículos 41, 42 y 133 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.
En todos los casos deberá interoperar con la Plataforma de Trámites a Distancia del Sistema de
Gestión Documental Electrónica.
Términos
ARTICULO 4º — Para todos los términos establecidos en días en la presente ley se computarán
únicamente los días hábiles administrativos. Cuando un trámite administrativo se relacione con
actuaciones ante Organismos judiciales o el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, se
considerarán hábiles los días que sean tales para éstos.
Para todos los términos establecidos en las normas que rijan los gravámenes a los cuales es
aplicable esta ley, se computarán únicamente los días hábiles administrativos, salvo que de ellas
surja lo contrario o así corresponda en el caso.
Las respuestas que se brinden a los consultantes tendrán carácter público y serán publicadas
conforme los medios que determine la Administración Federal de Ingresos Públicos. En tales casos
se suprimirá toda mención identificatoria del consultante.
Un novedoso instituto introducido en la Ley 11.683 por la última reforma tributaria que merece
algunas reflexiones.
La relevancia de la inclusión del Acuerdo Conclusivo Voluntario (ACV) en la Ley de
Procedimiento Tributario (LPT) radica en el cambio de paradigma en la apreciación de la relación
fisco-contribuyente que lleva implícita. El propósito del nuevo instituto es buscar acercar las
posiciones de ambos actores y, mediante un trabajo conjunto, arribar a una solución que satisfaga
las pretensiones de las dos partes. Considerando las falencias que presentan los medios tradicionales
de solución de controversias en cuanto a tiempos y costes, el ACV se presenta como un
complemento a los medios ya existentes, una alternativa que ayudaría a descongestionar el sistema
judicial, reduciendo los niveles de litigiosidad y, por lo tanto, fomentando la celeridad y economía
en la resolución de conflictos. Asimismo, la incorporación del ACV va en consonancia con la
tendencia a nivel internacional y con los resultados positivos que en términos generales se han
obtenido mediante la utilización de medios alternativos de resolución de controversias en materia
fiscal. En virtud de lo expuesto, destacada doctrina (1) estima la inclusión del ACV en el
ordenamiento tributario argentino como un avance significativo en la promoción de instancias de
diálogo entre la autoridad fiscal y sus administrados. No obstante, el instituto introducido presenta
algunos claroscuros que consideramos deberían ser subsanados por la futura normativa
reglamentaria en aras de que su implementación efectiva resulte fructífera.
1|En cuanto a la oportunidad del ACV
De la redacción del artículo agregado a continuación del art. 16 de la LPT extraemos en primer
término que la instancia del ACV tiene lugar previo a la determinación de oficio prevista en el
artículo 17 de la misma ley. Es decir, en el marco de un proceso de fiscalización, pero anterior a la
resolución por parte del juez administrativo. Esto plantea ambigüedades sobre cuándo se dará
efectiva apertura a la instancia, que podría ser en algún momento de la fiscalización, con la Vista
otorgada o quizás incluso con la Vista ya contestada, antes de la resolución determinativa.
A su vez, que el Acuerdo tenga lugar previo a la determinación de oficio implica la no inclusión en
este nuevo instituto de aquellos casos que tramitan por otra vía, como podría ser a través de lo
regulado por el artículo 74 del Decreto 1379/79.
2| ACV: Aspectos habilitadores
De la letra del nuevo artículo incorporado se desprende que estamos frente a una instancia con
finalidad específica: para apreciar hechos, la correcta aplicación de las normas, realizar
estimaciones, valoraciones o mediciones de datos, elementos o características relevantes para la
obligación tributaria o ante situaciones novedosas, complejas o trascendentes que ameritan una
solución conciliatoria. Dicha enumeración de casos y situaciones que habilitan el ACV resulta lo
suficientemente genérica para generar dudas sobre cuáles serán las situaciones fácticas en las cuales
el Fisco dará realmente lugar a esta instancia. Es por ello que consideramos conveniente que la
reglamentación establezca con minuciosidad los supuestos (en qué casos y bajo qué condiciones)
que darán curso al mismo, impidiendo que la procedencia de la instancia quede librada al arbitrio
del Fisco.
3|Órgano a cargo de la conciliación
Aquí nos encontramos frente al comienzo del proceso: el sometimiento del caso al “órgano de
conciliación colegiado”. El mencionado artículo prevé que dicho órgano estará integrado por
funcionarios del Fisco y autoridades de contralor designadas al efecto. Lo primero que se pone de
manifiesto es la completa ausencia de participación del contribuyente inspeccionado en aquél, ya
sea por sí mismo o por un tercero que lo represente. Esta característica del órgano de conciliación le
imprime una clara falta de imparcialidad y neutralidad, al tiempo que difiere en gran medida con lo
previsto en los ordenamientos tributarios de otros países, en los cuales los cuerpos colegiados gozan
de la independencia necesaria (como el caso de la Oficina de Apelaciones norteamericana) o bien
cuentan con la intervención directa de organismos representantes de los intereses de
los contribuyentes (como ser la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente -Prodecon- en
México).El mencionado órgano recomendará una solución o el rechazo de esta vía.
4|Efectos del ACV para las partes
Según lo previsto en el artículo incorporado en la LPT, la aprobación y aceptación del Acuerdo
tendrá consecuencias tanto para el contribuyente como para el Fisco.
El primero de ellos es que el crédito surgido a favor del Fisco constituirá título ejecutivo,
habilitando en caso de incumplimiento el procedimiento de ejecución fiscal (conf. artículo 92 de la
LPT).
En segundo lugar, la AFIP no podrá ignorar los hechos que dieron fundamento al Acuerdo y
tampoco podrá oponerlos en otro fuero, con la obvia excepción de que se compruebe la falsedad de
los mismos.
En tercero, cabe destacar que la ley Ley N° 27.430 introdujo una modificación en el artículo 49 de
la LPT, según la cual no será de aplicación la reducción de sanciones prevista en dicho artículo
cuando proceda la instancia de conciliación administrativa. Esto resulta especialmente llamativo ya
que va a contrasentido de lo previsto en casi todos los ordenamientos que contemplan la transacción
en materia fiscal (Italia -Acuerdo con adhesión-, España -Acta con acuerdo-, Mé- jico -Acuerdo
conclusivo- y otros).
Por último, resulta necesario señalar que mediante el artículo 208 de la Ley 27.430 se introduce la
suspensión de la prescripción por el plazo de un año desde el acto que someta las actuaciones a la
instancia del Acuerdo (salvo que corresponda la aplicación de otra causal de suspensión de mayor
plazo) (artículo 65, inciso d) de la LPT).
5|Constitución del ACV como antecedente
Está previsto en la Ley que para que el acuerdo pueda constituirse como antecedente deben
cumplirse dos condiciones en forma simultánea: a) debe tratarse de cuestiones de puro derecho
(recordemos que los Acuerdos podrán versar tanto sobre materia de derecho como de hecho) y b)
siempre que el contribuyente se avenga al acuerdo conciliatorio y abone los importes en iguales
condiciones que el precedente en cuestión.
Al respecto consideramos que sería deseable que la Administración haga públicas las cuestiones de
derecho resueltas mediante este instituto con el objeto de que el universo de los contribuyentes y sus
asesores tomen conocimiento de cuál es la postura del Organismo en relación a las mismas,
reduciendo la incertidumbre en materias que puedan resultar, al menos, controvertidas. Sobra decir
que deberán arbitrarse los medios para salvaguardar el secreto fiscal y demás derechos del
contribuyente involucrado.
La creciente complejidad del ordenamiento jurídico tributario producto de la proliferación de
normativa, así como el carácter cambiante y muchas veces ambigua de ésta puede ser referida como
principal causante de situaciones litigiosas entre fisco y contribuyente. Un sistema tributario
complejo, que recibe constantes modificaciones y no está cristalizado es susceptible de tener
diversas interpretaciones, que derivan en controversias entre los actores en cuestión. Surge entonces
la necesidad de contar con mecanismos alternativos de resolución de controversias, rol que
consideramos podría ser desempeñado potencialmente por el ACV recientemente introducido en
nuestro ordenamiento tributario y otros institutos similares pasibles de ser legislados en el futuro.
(1) Recomendaciones de la Comisión N° 2 de las XLVIII Jornadas Tributarias organizadas por el
Colegio de Graduados en Ciencias Económicas – Ciudad de Mar del Plata – Noviembre 2018
3)Procedimiento Impugnatorios:
Recurso de Reconsideración ante la AFIP:
Se encuentra legislado en el artículo 76 de la Ley 11.683 de Procedimiento Tributario y su
procedencia responde a los siguientes casos:
a) Antes resoluciones del Fisco que impongan sanciones administrativas.
b) Contra resoluciones en donde la AFIP determine en forma cierta y/o presuntiva algún impuesto y
sus accesorios.
c) Ante la denegatoria del organismo fiscal a las presentaciones realizadas por los contribuyentes
solicitando la repetición de tributos.
Este recurso se interpone dentro de los quince días hábiles administrativos de notificado el acto
administrativo que el contribuyente pretende impugnar.
Se interpondrá ante la misma autoridad que dictó la resolución y se puede hacer por escrito o por
carta certificada con aviso de retorno.
La Apelación ante el Tribunal Fiscal de la Nación :(concepto, caracteres, procedencia,
consecuencias).
Como vía alternativa al recurso de reconsideración es el recurso de apelación ante el Tribunal Fiscal
de la Nación. La comunicación al Fisco es idéntica a la anterior: presentación de un escrito o carta
documento con aviso de retorno.
El contribuyente debe optar por una de las dos vías: o el recurso de reconsideración o el de
apelación. Es una opción del contribuyente. Ambas vías son excluyentes entre sí.
El juez administrativo que debe emitir la correspondiente resolución es el superior jerárquico
inmediato del funcionario que dictó el acto de recurso.
Debemos recordar que el artículo 12 de la 19.549 de Procedimiento Administrativo establece la
presunción de legitimidad del acto administrativo, por lo que si el contribuyente no lo recurre, le
habilita a la AFIP a la ejecución fiscal. Recordamos que la interposición de un recurso de
reconsideración genera efectos suspensivos sobre la ejecución del acto.
En cuanto al contenido se debe exponer los hechos, el derecho aplicable, las pruebas producidas,
dejar planteado el caso federal y el petitorio.
En cuanto a la prueba admisible, el artículo 55 del decreto reglamentario de la LPT dispone que el
plazo para producirla sea de treinta días improrrogables.
El artículo 80 de la LPT establece que deberá el juez administrativo dictar sentencia dentro de los
veinte (20) días desde la presentación del recurso.
El artículo 82 de la LPT aclara que si el juez administrativo no se expide en el plazo estipulado en el
párrafo anterior se lo considerará como una “denegatoria ficta”, habilitando a la AFIP a la instancia
judicial. Igualmente el artículo 116 de la LPT prevé la aplicación de la solicitud de “pronto
despacho”.
El juez administrativo una vez evaluada las pruebas ofrecidas dictará una resolución. Si la misma es
favorable al contribuyente, el acto administrativo queda sin efecto y pasa a archivo.
En caso de resultar desfavorable para el contribuyente, se presenta las siguientes situaciones:
a) Resolución en la que se determina tributos y accesorios. Si no se cancela la AFIP podrá iniciar un
juicio ejecutivo para su cobro
b) Resolución que impone sanciones. Para que no se aplique el contribuyente tiene quince (15) días
para interponer demanda contenciosa administrativa ante el Juez Nacional
c) Denegatoria a reclamos de repetición. Lo mismo que en el inciso b) anterior. El contribuyente
tiene quince (15) días para interponer demanda contenciosa administrativa ante el Juez Nacional
para continuar con el reclamo.
Recurso de Apelación ante el Director General:( concepto, procedencia, interposición).
El artículo 74 del decreto 1.397/79 reglamentario de la Ley de Procedimiento Tributario
instrumenta un recurso de apelación contra el acto administrativo de alcance individual cuando en la
ley y en el decreto reglamentario no se encuentre previsto un procedimiento recursivo especial y se
interpone ante el Director General dentro de los quince (15) días de notificado.
Este recurso no se rige por la LPT sino por la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA) y el
Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.
El recurso debe ser presentado ante el funcionario que dictó el acto recurrido. Se resolverá sin
sustanciación y revestirá el carácter de definitivo, pudiendo solo impugnarse a través de una
demanda contenciosa administrativa ante la justicia, tal como lo prevé el artículo 23 de la Ley
19.549 de Procedimiento Administrativo.
El artículo 12 de la LPA no le reconoce efecto suspensivo.
El plazo de resolución es de sesenta (60) días contados a partir de la interposición.
C)Tribunal Fiscal de la Nación (concepto, naturaleza, integración, procedimiento, dictado de
sentencia, inconstitucionalidad de leyes y reglamentos).
“El Tribunal Fiscal de la Nación es creado por la Ley 15.265 y actúa como una entidad autárquica
en el orden administrativo y financiero, en lo que se refiere a su organización y funcionamiento. A
esos fines, su patrimonio está compuesto por todos los bienes que le asigne el Estado Nacional y por
aquellos que les sean transmitidos por cualquier causa jurídica.” El T.F.N ejerce una jurisdicción
integra o plena, ya que examina el derecho cuya interpretación se controvierte, y también su
conocimiento comprende el análisis de los hechos sobre los cuales reposa un acto apelado.
Es un órgano administrativo que ejerce funciones jurisdiccionales, está compuesto por 7 salas (4
impositiva referidas a tributos (DGI) y 3 destinadas a aduanas).
Sus miembros son designados por el PE y gozan de ciertas garantías de independencia. Su
composición es específica de profesionales con conocimiento en materia tributaria (contadores y
abogados). Tiene sede en Capital Federal, pero puede sesionar en cualquier lugar de la República.
Además las reparticiones de Aduana y DGI en el interior funcionan como mesa de entradas para la
presentación de los recursos.
Competencia: entiende en los recursos de apelación que se interpongan contra resoluciones de la
DGI o de la ANA que determinen tributos, recargos o accesorios, que apliquen sanciones , que
denieguen repetición (o en las demandas de repetición que se entable directamente ante el tributo);
asimismo en los recursos de amparo por mora.
Representación y Patrocinio: además de los abogados, también pueden litigar los contadores.
Procedimiento:
Las etapas del procedimiento ante el T.F.N se pueden resumir en: interposición del escrito,
contestación del recurso, planteamiento de excepciones previas, apertura de la causa a prueba,
medidas para mejor proveer y sentencia. A continuación se desarrollan las etapas en detalle. a.
Interposición del escrito El procedimiento realizado ante el Tribunal Fiscal de la Nación comienza
con la interposición del escrito ante dicho organismo. Respecto al mismo deben cumplirse una serie
de requisitos comunes, formales y sustanciales, ya que la interposición del recurso de apelación
produce importantes efectos. Por ejemplo, se pude decir que importa la suspensión, durante todo el
desenvolvimiento del proceso, de la intimación de pago contenida en el acto administrativo que a
través de él se impugna. La actuación llevada a cabo por los contribuyentes en esta instancia, ante el
Tribunal Fiscal se efectúa personalmente (por derecho propio), o también por medio de sus
representantes legales o mandatarios especiales. Este patrocinio o representación puede ser ejercida
por las personas autorizadas para actuar en causas judiciales, y también, por doctores en ciencias
económicas o contadores públicos que se encuentren inscriptos en la correspondiente matrícula. b.
Contestación del recurso Habiendo cumplido formalmente la procedencia el recurso interpuesto y,
en principio, resultando competente el Tribunal para entender en aquél, el instructor confiere
traslado al Organismo Recaudador a efectos de que lo conteste, oponga excepciones, acompañe el
expediente administrativo y ofrezca su prueba, (art 69 L.P.T). En los casos de apelaciones, el
término para ello será de 30 días, en tanto que entablándose demandas directas de repetición (art 81
L.P.T) será de 60 días (art 178 L.P.T).
Apertura de la causa a prueba: Una vez que el Fisco Nacional conteste el recurso o resueltas las
excepciones previas indicadas por las partes, el vocal instructor debe pronunciarse sobre la
pertinencia y admisibilidad de las pruebas ofrecidas, proveyéndolas en su caso y fijando un término
para su producción, que no puede exceder de 60 días. El vocal podría ampliar ese plazo a pedido de
cualquiera de las partes por hasta 30 días, en tanto que si mediare acuerdo de ambos litigantes el
plazo podría llegar a no exceder 45 días. De no haberse propuesto ninguna diligencia probatoria o
rechazada ésta, el instructor elevará los autos a conocimiento de la Sala respectiva para su ulterior
pronunciamiento. Las resoluciones sobre las pruebas (medios legales por medio de los cuales las
partes litigantes demuestran a la autoridad judicial la verdad de un hecho alegado y comprobado)
sólo pueden ser objeto de recursos de reposición. La ley autoriza a producir todo tipo de prueba ante
el Tribunal, para asegurar que cualquier arbitrariedad de la A.F.I.P. en la etapa anterior pueda ser
superada. Se incluyen entre ellas los informes (Art. 175 L.P.T.), la prueba documental, la
testimonial y pericial. e. Alegatos Vencido el término de prueba, o diligenciadas las medidas de
mejor proveer ordenadas, o transcurridos 180 días del auto que las ordena (prorrogables por igual
plazo por única vez), el vocal 46 instructor declarará su clausura y elevará dentro de los 10 días los
autos a la Sala, la que de inmediato las pondrá a disposición de las partes para que produzcan sus
alegatos. De esta manera se les da la oportunidad a cada parte de valorar las pruebas para convencer
al juzgador sobre la veracidad de los hechos alegados. La audiencia para la vista de la causa no es
utilizada en la actualidad, debiendo ser el alegato escrito. El término para su presentación es de 10
días para ambos litigantes, entregando la Secretaría General el expediente a las partes por 4 días. El
alegato es limitado a las pruebas producidas, es decir, las partes no pueden argumentar sobre
elementos que no hubieran sido ofrecidos como prueba ni incorporados a la causa en la forma y
oportunidad establecida por ley procesal.
Medidas para mejor proveer: “Una de las atribuciones del Tribunal es aquella que establece que
hasta el momento de dictar sentencia, puede disponer medidas probatorias que favorezcan el
esclarecimiento de los hechos sobre los que trata la controversia”. Comprende cualquier tipo de
diligencia, incluso la pericial, que será practicada por funcionarios de la A.F.I.P. bajo la exclusiva
dependencia del Tribunal. Producida la prueba ordenada como medida para mejor proveer, el
Tribunal debe correr traslado a las partes, las que podrán hacer las aclaraciones e impugnaciones
que estimen pertinentes. No obstante esta atribución del Tribunal, éste no puede subsanar la omisión
o negligencia de una de las partes en el ofrecimiento y producción de la prueba. De lo contrario el
organismo perdería su imparcialidad.
Sentencia del Tribunal: de no tener que producir prueba alguna, el vocal instructor eleva los
autos a consideración de la Sala respectiva para que esta lo pase a sentencia. El mismo paso sigue la
Sala una vez vencido el plazo para alegar por escrito o habiéndose celebrado la audiencia para la
vista de la causa. La elevación de la causa a la Sala respectiva deberá efectuarse dentro de los 10
días de haber concluido las etapas señaladas anteriormente. La Sala efectuará el llamado de autos
dentro de los 5 o 10 días, desde que estos hayan sido elevados por el vocal instructor o de haber
quedado en estado de dictar sentencia, según se trate de los 47 casos previstos en los artículos 171 y
172 o 176, respectivamente, computándose los términos establecidos por el artículo 188 L.P.T. a
partir de quedar firme el llamado (transcurridos 3 días de su notificación). El Tribunal Fiscal por ser
un órgano colegiado, puede dictar sentencia impersonalmente o mediante la forma de votos
personales, adoptándose la resolución por mayoría de sus miembros. La Ley 11683 establece en su
artículo 188 que a partir del llamamiento de autos a sentencia, ésta debe dictarse dentro de los 15
días (caso de resolver cuestiones como de previo y especial pronunciamiento); y de 30 o 60 días,
respectivamente, si se tratara de sentencias definitivas sin o con producción de prueba. El plazo se
podría ampliar en 30 días si se hubieran ordenado medidas para mejor proveer (Art.177 L.P.T.).
Existen nuevos plazos de la mano del Decreto 633/2003, para la resolución de causas radicadas ante
el T.F.N. Para el caso de causas que se encuentren elevadas a Sala, cuando se trate de cuestiones
previas o en aquellos casos en que exista pacífica y reiterada jurisprudencia, la sentencia deberá
dictarse dentro de los 3 meses. En los demás casos, el plazo es de 6 meses. Si ya se hubiera dictado
autos a sentencia rigen los plazos previstos en el citado artículo 188. Al tener el Tribunal control
jurisdiccional pleno sobre los actos de la A.F.I.P., éste a través de su sentencia puede confirmar las
resoluciones, revocarlas totalmente o parcialmente o anularlas a pedido de parte o de oficio. Las
decisiones del Tribunal tiene restricción jurisdiccional como ser el pronunciamiento respecto de la
falta de validez constitucional de las leyes tributarias y sus reglamentaciones, salvo existencia de un
fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, caso en el cual podrá seguir dicho
pronunciamiento (Artículo 185 L.P.T.). La L.P.T. en su artículo 186 autoriza al Tribunal a declarar
que la interpretación ministerial o administrativa volcada en el acto administrativo impugnado no se
ajusta a la ley interpretada, comunicando tal decisión al organismo de superintendencia competente.
Las costas del juicio deberán ser pagadas por la parte vencida, correspondiéndole el pago de costas
y gastos causídicos de la parte contraria, aun cuando esta no lo hubiera solicitado. La Sala podrá
eximir total o parcialmente de esta responsabilidad al litigante vencido siempre que encontrare
mérito para ello.
Recurso de revisión y Apelación limitada a la Cámara Competente:
Podrá interponerse el Recurso de Apelación ante el T.F.N. en los siguientes casos:
Contra resoluciones que determinen tributos y accesorios (Determinación de oficio cierta o
presuntiva).
Contra resoluciones que impongan sanciones (excluida la sanción de clausura).
Contra resoluciones que denieguen reclamos por repetición en los casos autorizados por el
artículo 81 L.P.T. (Caso contra la resolución denegatoria del reclamo administrativo, exigida como
paso previo para intentar repetir pagos espontáneos).
Las principales características del recurso de apelación ante el Tribunal Fiscal según varios autores
son:
a. Optativo y excluyente Se refiere a que una vez optado por alguno de los recursos (Recursos de
Reconsideración ante el Superior o Recurso de Apelación ante el T.F.N.) no se puede hacer uso del
otro.
b. Suspende la ejecutoriedad de la decisión :La interposición de dicho recurso tiene la virtud de
suspender la eficacia del acto administrativo recurrido, paralizándose los efectos ejecutorios de la
decisión hasta el dictado de la sentencia por parte del T.F.N., cuando en ella se liquida el tributo y
los accesorios. Dicho efecto suspensivo ha sido previsto expresamente en la hipótesis de éste
recurso.
c. Interposición en plazo perentorio de 15dias hábiles: El término es improrrogable y es de 15 días
hábiles administrativos, contados desde el día siguiente al de la notificación del acto recurrido. d.
No interposición dentro del plazo Vencido dicho plazo y no interpuesto el Recurso de
Reconsideración o el Recurso ante el T.F.N., las resoluciones se tendrán por firmes (art 79L.P.T) y
pasan en autoridad de cosa juzgada formal cuando se trate de resoluciones que determinen tributos
y sus accesorios (la sentencia no es susceptible de ser revisada en el mismo proceso en el cual se
dictó, pero posibilita su revisión en otro procedimiento posterior, como la acción de repetición). En
el caso de las resoluciones que imponen sanciones o deniegan reclamos de repetición de impuestos,
las que en caso de no recurrirse por algunos de los mecanismos en análisis, pasarán en autoridad de
cosa juzgada material (la resolución es inimpugnable e insusceptible de ser modificada o revisada
en un pronunciamiento posterior).
4.
JUICIO DE EJECUCIÓN FISCAL.
Si el sujeto pasivo no paga su obligación fiscal, que puede consistir en importes tributarios, pagos a
cuenta, accesorios, multas ejecutoriadas (es decir, firmes), el Estado tiene derecho a perseguir su
cobro por el procedimiento especial de ejecución fiscal.
Atendiendo a la necesidad de la rápida satisfacción de las rentas públicas y la presunción de
legitimidad que acompaña a las liquidaciones de deuda expedidas por funcionarios públicos, se
estructura un proceso de ejecución, destinado a que el fisco perciba las cantidades dinerarias que le
adeudan; y en búsqueda de un mínimo de equilibrio, se contempla una restringida faz de
conocimiento, fuertemente simplificada con relación a los plenarios, en aras, precisamente, de
agotar fa coacción de la manera más acelerada posible.
Como ocurre con la totalidad de nuestros procesos de ejecución yen el marco de la garantía
constitucional del proceso justo (art. 18 C.N.), tolera actos procesales de instrucción, destinados a
proponer al conocimiento del órgano ciertos hechos y fuentes de prueba; bien que esta posibilidad
es limitada, restringida, (a ciertos hechos y fuentes de prueba), con lo cual la cognición del juez es
fragmentaria, caracterizándose la ejecución fiscal como un sumario propiamente dicho.
Es decir, es un juicio ejecutivo sumario basado en el principio del legitimidad de los actos
administrativos.
Dice Valdés Costa que en el derecho uruguayo, al igual que en otros países latinoamericanos, como
Argentina y Brasil, el cobro coactivo de las obligaciones tributarias se hace efectivo mediante
procedimientos judiciales, lo que garantiza la aplicación de las normas por un tercero idóneo. Este
sistema judicial no es el vigente en otros países latinoamericanos que, siguiendo la tradición de
España, tienen un sistema el cobro puramente administrativo, sistema aplicado también en los
Estados Unidos.
La ejecución en la ley 11.683:
En el régimen nacional y en el de la generalidad de las provincias, basta la boleta de deuda,
expedida por la autoridad fiscal para abrir el procedimiento, la que constituye el título ejecutivo.
La ley 11.683 no se detiene demasiado en los requisitos que debe reunir el título; no obstante,
existen recaudos generales -propios de todo título ejecutivo- y específicos impuestos por leyes y/o
reglamentaciones especiales que regulan la formación del mismo, añadiéndose otros, fruto de la
elaboración doctrinaria y jurisprudencia.
Agregan que el título debe reunir los recaudos genéricos, propios de todo título ejecutivo: 1)
individualización del acreedor y del deudor y 2) constancia de una obligación de dar una suma de
dinero, líquida o fácilmente liquidable y exigible, 3) los recaudos específicos.: lugar, fecha, firma de
funcionario autorizado, indicación del tributo, actualización, accesorios y multa liquidada y
períodos comprendidos. Además, domicilio fiscal, personería del apoderado y Clave Única de
Identificación Tributaria.
BOLETA DE DEUDA: es aquel documento público que contiene el título ejecutivo fiscal, el decir,
al acto jurídico unilateral emanado del órgano estatal con atribuciones fiscales, certificando la
existencia de una deuda dineraria tributaria o equiparada a ella, por parte de un contribuyente
obligado a su satisfacción, y que por disposición legal, funda el derecho a perseguir su cobro por
medio de un proceso especial establecido al efecto.
El Capítulo XI de la ley 11.683 regula el juicio de ejecución fiscal, disponiendo que el cobro
judicial de 1)los tributos, 2) pagos a cuenta, 3) anticipos, 4) accesorios, 5) actualizaciones, 6) multas
ejecutoriadas, 7) intereses u otras cargas cuya aplicación, fiscalización o percepción esté a cargo de
la Administración Federal de Ingresos Públicos, se hará por la vía de la ejecución fiscal establecida
en la ley, sirviendo de suficiente título a tal efecto la boleta de deuda expedida por la
Administración Federal de Ingresos Públicos.
En este juicio si el ejecutado no abonara en el acto de intimársele el pago, quedará desde ese
momento citado de venta, siendo las únicas excepciones admisibles a oponer dentro del plazo de
cinco (5) días las siguientes:
a) Pago total documentado. Ello implica que al oponerse la excepción, debe acompañarse la
constancia del pago total.
Los pagos efectuados después de iniciado el juicio, los pagos mal imputados o no comunicados por
el contribuyente o responsable, no serán hábiles para fundar excepción. Villegas critica que el pago
parcial no funde excepción; y en el mismo sentido, Giuliani.
Acreditados los pagos parciales, añade la ley, se deducirán, pero con costas al demandado.
b) Espera documentada. Se trata de aquellos supuestos en que el organismo recaudador haya
otorgado una facilidad o moratoria, y pese a ello iniciare la ejecución fiscal. Cabe aclarar que esta
situación no es usual.
c) Prescripción.
d) Inhabilidad de título. No admitiéndose esta excepción si no estuviere fundada exclusivamente en
juicios relativos a la forma extrínseca de la boleta de deuda.
Hay excepciones no enumeradas o defensas implícitas donde se combina el texto puro de la ley con
la doctrina legal de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y la aplicación de otras defensas que
la doctrina y la jurisprudencia han considerado implícitas, resguardando de tal modo la garantía
constitucional consagrada en ellos arts. 16 y 18 de la Constitución Nacional. Se enumeran las
siguientes:
INCOMPETENCIA. El ejecutado podrá proponer la cuestión de competencia por vía de
declinatoria o de inhibitorio; La excepción podrá poner de relieve la incompetencia en razón de la
materia o del territorio.
FALTA DE PERSONERÍA. Está destinada a poner de resalto los defectos de esa naturaleza que
afectan a los sujetos activo y/o pasivo: en la ejecución fiscal específicamente, la no presentación de
los documentos que justifiquen el mandato que invocan los apoderados del ejecutante, así como la
validez y suficiencia del mismo.
LITISPENDENCIA. Que se configura cuando se encuentran en trámite dos procesos con
pretensiones que exhiben iguales elementos, esto es, sujeto, objeto y causa (por identidad).
FALTA DE LEGITIMACION DE ACCIÓN. Esta excepción puede hacerse valer por vía de la
excepción de inhabilidad de titulo, ya que la legitimatio constituye un requisito de admisibilidad
intrínseco de la pretensión, observable, incluso, de oficio por el órgano judicial.
FALSEDAD. Debe entenderse que si el documento aparece adulterado por supresión, modificación
o agregado, se puede alegar la falsedad material. Ante la falta de presión legislativa, el ejecutado
debería acudir a la excepción de inhabilidad de título para oponerse a la ejecución, ya que, en esos
casos, sólo en apariencia se están en presencia de un título autorizado por la ley.
COSA JUZGADA. Si el título se exhibe completo, identificando correctamente la deuda que se
ejecuta y el excepcionante acompaña testimonio de la sentencia anterior, el conocimiento de la
excepción no requeriría profundización alguna. En suma, se considera que siempre que las
pretensiones sea idénticas, la excepción debe ser acogida favorablemente.
CONPENSACIÓN. Operada la compensación por resolución administrativa, se entiende que
deviene admisible la excepción.
INEXISTENCIA DE DEUDA. En numerosos precedentes se ha declarado que la regla que limita el
examen del título a sus formas extrínsecas no pude llevarse al extremo de admitir una condena
fundada en una deuda inexistente, cuando tal circunstancia resulta manifiesta de los obrados, pues
lo contrario importaría privilegiar un excesivo rigor formal con grave menoscabo de las garantías
constitucionales.
Representación Judicial
ARTICULO 96. En los juicios por cobro de los impuestos, derechos, recursos de la seguridad
social, multas, intereses u otras cargas, cuya aplicación, fiscalización o percepción esté a cargo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, la representación de éste, ante todas
las jurisdicciones e instancias, será ejercida indistintamente por los representantes del Fisco,
pudiendo estos últimos ser patrocinados por los letrados de la repartición.
ARTÍCULO 97. El Fisco será representado por representantes del Fisco los que recibirán
instrucciones directas de esa dependencia, a la que deberán informar de las gestiones que realicen.
La personería de representantes del Fisco quedará acreditada con la certificación que surge del título
de deuda o con poder general o especial.
ARTICULO 98. La disposición y distribución de los honorarios que se devenguen en los juicios en
favor de los abogados que ejerzan la representación y patrocinio del Fisco, será realizada por la
Administración Federal de Ingresos Públicos, en las formas y condiciones que ésta establezca.
Dichos honorarios deberán ser reclamados a las contrapartes que resulten condenadas en costas y
sólo podrán ser percibidos una vez que haya quedado totalmente satisfecho el crédito fiscal.
Cuando el contribuyente o responsable cancele la pretensión fiscal, u ofrezca en pago las sumas
embargadas de acuerdo con el procedimiento previsto en los párrafos undécimo y duodécimo del
artículo 92, antes del vencimiento del plazo para oponer excepciones, los honorarios que se
devenguen serán fijados en el mínimo previsto en la Ley de Honorarios Profesionales de Abogados,
Procuradores y Auxiliares de la Justicia Nacional y Federal, salvo que por lo elevado de la base
regulatoria corresponda reducir su monto.
En los juicios de ejecución fiscal a que se refiere el cuarto párrafo del artículo 92 no se devengarán
honorarios en favor de los letrados que actúen como representantes o patrocinantes de la
Administración Federal de Ingresos Públicos.
ARTICULO 99 — La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS anticipará a
su representante los fondos necesarios para los gastos que demande la tramitación de los juicios (de
publicación de edictos, diligenciamiento de notificaciones, mandamientos y otros análogos), con
cargo de rendir cuenta documentada de su intervención y de reintegrar las cantidades invertidas
cuando perciban su importe de la parte vencida a la terminación de las causas. A este efecto se
dispondrá la apertura de la cuenta correspondiente.
ARTICULO 160 — En la instancia ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION los interesados
podrán actuar personalmente, por medio de sus representantes legales, o por mandatario especial, el
que acreditará su calidad de tal mediante simple autorización certificada por el Secretario del
TRIBUNAL FISCAL o Escribano Público.
Representación y Patrocinio
ARTICULO 161 — La representación y patrocinio ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
se ejercerá por las personas autorizadas para actuar en causas judiciales.
Tales funciones podrán ser desempeñadas, además, por doctores en ciencias económicas o
contadores públicos, inscriptos en la respectiva matrícula y por todas aquellas personas que
estuvieran inscriptas y autorizadas a actuar ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION por
haber cumplido los requisitos exigidos por el Decreto Nº 14.631/60.
5.
6.
Acción de Amparo
ARTICULO 182 — La persona individual o colectiva perjudicada en el normal ejercicio de un
derecho o actividad por demora excesiva de los empleados administrativos en realizar un trámite o
diligencia a cargo de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, podrá
ocurrir ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION mediante recurso de amparo de sus
derechos.
El recurrente deberá previamente haber interpuesto pedido de pronto despacho ante la autoridad
administrativa y haber transcurrido un plazo de QUINCE (15) días sin que se hubiere resuelto su
trámite.
ARTICULO 183 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, si lo juzgare procedente en
atención a la naturaleza del caso, requerirá del funcionario a cargo de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS que dentro de breve plazo informe sobre la causa de la
demora imputada y forma de hacerla cesar. Contestado el requerimiento o vencido el plazo para
hacerlo, podrá el TRIBUNAL FISCAL resolver lo que corresponda para garantizar el ejercicio del
derecho del afectado, ordenando en su caso la realización del trámite administrativo o liberando de
él al particular mediante el requerimiento de la garantía que estime suficiente.
El Vocal Instructor deberá sustanciar los trámites previstos en la primera parte del presente artículo
dentro de los TRES (3) días de recibidos los autos, debiendo el Secretario dejar constancia de su
recepción y dando cuenta inmediata a aquél.
Cumplimentados los mismos, elevará inmediatamente los autos a la Sala, la que procederá al
dictado de las medidas para mejor proveer que estime oportunas dentro de las cuarenta y ocho (48)
horas de la elevatoria, que se notificará a las partes.
Las resoluciones sobre la cuestión serán dictadas prescindiendo del llamamiento de autos y dentro
de los CINCO (5) días de haber sido elevados los autos por el Vocal Instructor o de que la causa
haya quedado en estado, en su caso.
Acción declarativa.
Podrá deducirse la acción que tienda a obtener una sentencia meramente declarativa para hacer
cesar un estado de incertidumbre sobre la existencia, alcance o modalidades de una relación
jurídica, siempre que esa falta de certeza pudiera producir un perjuicio o lesión actual al actor y este
no dispusiere de otro medio legal para ponerle termino inmediatamente. Los requisitos para que
proceda la acción son los siguientes:
1. Estado de incertidumbre sobre los aspectos de una relación jurídica.
2. Que la falta de certeza pueda producirle al accionante un perjuicio o una lesión actual.
3. La inexistencia de otro medio legal para ponerle término inmediatamente.
7.
GARANTIAS PROCESALES.
Derecho a la vista: fase de un proceso consistente en celebrar una audiencia pública en la que
las partes formulan o ratifican sus alegatos, proponen y se practican las pruebas que puedan
realizarse en el mismo acto. Su carácter público deviene del principio de publicidad que inspira
el Derecho procesal español. No obstante, por razones de orden público puede decretarse la
privacidad de la vista.
Es una ctuación que se celebra ante un tribunal, con citación de las partes, para realizar un juicio o
conocer de un incidente, para dictar el fallo, oyendo a los defensores o interesados que a ella
concurran.
Derecho a ser oído: una vez que ambas partes han comparecido, el principio de audiencia implica
que deben ser «oídos», «escuchados», «atendidos», es decir, deben tener la oportunidad de
defenderse en todo momento de los argumentos o pruebas presentados por la contraparte, de lo
contrario, nos encontraríamos ante un supuesto de indefensión o desprotección, contrario al derecho
a la tutela judicial efectiva. El derecho a ser oído implica, en términos generales, la posibilidad
cierta de recurrir ante los órganos del Estado que resulten competentes para adoptar una decisión
que pueda afectar derechos o intereses, a los fines de hacer valer una o más pretensiones, y explicar
sus razones.
Derecho a recurrir ante un tribunal imparcial: es el medio establecido en la ley para obtener la
modificación, revocación o invalidación de una resolución judicial, ya sea del mismo juez o tribunal
que la dictó o de otro de superior jerarquía.
Una resolución es impugnada (resolución recurrida); un litigante está agraviado por la resolución
que busca impugnar (recurrente); un juez o tribunal la ha dictado (juez o tribunal a quo); un juez o
tribunal conoce del recurso y debe ser imparcial (juez o tribunal ad quem); y una nueva resolución
que puede confirmar, modificar, revocar o invalidar la resolución recurrida.
Derecho a las correcciones asimétricas: está legislado en el articulo 41 penúltimo párrafo de la ley.
Se establece que cuando a raíz de una verificación fiscal en la que se modifique cualquier
apreciación sobre un concepto o hecho imponible, determinando tributo a favor del fisco, se
compruebe que la apreciación rectificada ha dado lugar a pagos improcedentes o en exceso por el
mismo u otros gravámenes. La AFIP compensará los aportes pertinentes (aun cuando la acción de
repetición se hallare prescripta) hasta anular el tributo resultante de la determinación.
Esta disposición es imperativa no facultativa.
PROCEDIMIENTO:
-Organismo recaudador: formula la denuncia una vez hecha la determinación administrativa de la
deuda o una vez formada la constatación administrativa de la presunta comisión del ilícito.
La formulación de la denuncia penal no impedirá la sustanciación de los procedimientos
administrativos y judiciales tendientes a la determinación y ejecución de la deuda. Pero la
autorización administrativa se obtendría de aplicar sanciones hasta que sea dictada la sentencia
definitiva en sede penal.
COMPETENCIA: CABA: Justicia Nacional en lo Penal Tributario (hasta que sea puesto en
marcha: Fuero en lo Penal Económico).
En las demás jurisdicciones: Justicia Federal.
BOLILLA 10
1)IMPUESTOS SOBRE LOS INGRESOS, BENEFICIOS, Y GANANCIAS DE CAPITAL
Concepto de renta. Diversas teorías.
Los intentos por definir la renta han motivado innumerables doctrinas. Las teorías más importantes
son:
a) TEORIA DE LA RENTA-PRODUCTO: esta concepción comienza por distinguir capital y
renta.
Capital: es toda riqueza corporal o incorporal y durable, capaz de producir una utilidad a su
titular.
Renta: es la utilidad (o riqueza nueva) que se obtiene del capital. Es el producto neto y periódico
que se extrae de una fuente capaz de producirlo y reproducirlo, tal fuente es el capital.
b) TEORIA DE LA RENTA- INCREMENTO PATRIMONIAL: Schanz consideraba renta como
todo ingreso que incrementaba el patrimonio e incluye no sólo los ingresos periódicos, sino
también aquellos ocasionales, como las plusvalías, donaciones, legados, ganancias del juego,
loterías, etc.
La diferencia entre ambas teorías es evidente, atenta al concepto mucho más extenso de la teoría de
renta como incremento patrimonial. Para obtener la renta producto se suman frutos o utilidades
derivados del capital, mientras que para obtener la renta-incremento patrimonial debe efectuarse un
balance estableciéndose la diferencia entre dos estados patrimoniales tomados en períodos distintos:
se considerará renta todo aquello en que haya aumentado determinado patrimonio en un espacio de
tiempo, computando también aquellos bienes que hayan sido consumidos.
La primera teoría pone de relieve el origen de la renta y es objetiva, por cuanto ve en la renta el
conjunto de productos o de frutos obtenidos. La segunda tiene especialmente en cuenta el resultado
y es subjetiva porque lo interesa es en cuanto aumenta la riqueza del particular en el período.
Los sistemas tributarios en general han evolucionado de la primera teoría (renta-producto) a la
segunda, muchas veces por razones prácticas o de innegable justicia. La ley argentina ha sufrido
esta transformación, y no obstante haber adoptado inicialmente como concepto genérico la doctrina
de la renta-producto, la evolución del sistema ha llevado a que tal concepto genérico vaya cediendo
paso a nuevas concepciones; a la vigencia de la tesis legalista, que admitiendo la plena autonomía
de la ley va mechando el sistema con conceptos extraídos de las teorías del rédito incremento
patrimonial.
Formas del impuesto a las rentas.
1) SISTEMA INDICIARIO: según este sistema se llega a establecer la renta mediante
presunciones o indicios. Por ejemplo el célebre impuesto francés de las puertas y ventanas, donde
la cantidad de estas aperturas en los inmuebles hacía presumir un mayor o menor ingreso del dueño
de la casa.
2) SISTEMA CEDULAR: el sistema se caracteriza por dividir las rentas en categorías o cédulas
según su origen y en aplicar una alícuota proporcional a cada una de esas rentas.
3) SISTEMA GLOBAL O SINTETICO: grava el conjunto de rentas de una persona con
prescindencia de su origen. La desventaja: al no tener en cuenta el diferente origen de las rentas
trata a todas en idéntica forma y ello pueda dar lugar a situaciones injustas. Este sistema es
personal, tiene una ventaja, la alícuota puede ser progresiva y son posibles las deducciones
personales.
4) SISTEMA MIXTO: es una combinación de los sistemas cedular y global. Existe un impuesto
cedular básico según el cual se forman categorías que distinguen la renta según su origen, pero el
impuesto adquiere carácter personal, ya que el importe de todas esas categorías es sumado y
en esa forma se obtiene la totalidad de la renta del contribuyente. Esta última forma de
imposición es la que adoptan los sistemas modernos y entre ellos el de nuestro país.
El impuesto a las ganancias en Argentina. Ley 20628 y sus modificatorias.
Fue implementado por la Ley 20268 en 1974 y sustituyó el impuesto a los réditos, el impuesto a
las ganancias eventuales y el impuesto sobre la venta de valores mobiliarios.
Sin embargo estas dos últimas sustituciones fueron dejadas sin efecto por las leyes 21280, 21284 y
21286.
Características del impuesto a las ganancias: la ley 20268 mantiene el sistema mixto de impuesto a
la renta. Se trata de un impuesto típicamente directo y, en tal carácter, es originariamente
provincial.
Sin embargo, la Nación ha hecho uso en forma permanente de la transitoria facultad que le otorga el
art.75 inc.2 de la CN.
Por tal razón el impuesto también está regulado fácticamente como de emergencia y tiene un
supuesto término de fenecimiento que se va renovando periódicamente. Su producto es
coparticipado según el sistema vigente.
Es esencialmente un impuesto de tipo personal, porque su alícuota progresiva tiene en cuenta
especiales situaciones subjetivas del contribuyente (origen de la renta y cargas de familia) pero esto
no es así en forma absoluta, ya que existe una imposición proporcional de carácter real en cuanto a
ciertos contribuyentes (las llamadas sociedades de capital) y en determinados casos de retención en
la fuente a titulo definitivo.
Hecho imponible:
-Aspecto material: el art. 2 establece que son ganancias:
i) Los rendimientos, rentas o enriquecimiento susceptibles de una periodicidad que implique la
permanencia de la fuente que los produce y su habilitación.
ii) Los rendimientos, rentas, beneficios o enriquecimientos obtenidos por los responsables
incluidos en el art.69 (sociedades de capital) y todos los que deriven de las demás sociedades o de
empresas o explotaciones unipersonales.
iii) Los beneficios obtenidos por la enajenación de bienes muebles amortizables, acciones,
títulos, bonos y demás títulos valores.
Las características del concepto legal de ganancia son:
Solamente son ganancias aquellos beneficios que sean realizados (que sean ciertos).
Las ganancias deben ser periódicas, salvo que se trate de beneficios obtenidos por empresas
o explotaciones comerciales en general, en cuyo caso dichos beneficios son ganancias con
prescindencia de la periodicidad.
La obtención de ganancias debe implicar la permanencia de su fuente productora.
A los efectos de este impuesto, el concepto de ganancia incluye a su contrario, o sea, al quebranto.
El hecho imponible de este impuesto y correlativamente la base imponible abarca los resultados de
los actos, actividades, inversiones, tanto positivos como negativos que deberán sumarse o restarse,
en su caso, para determinar el conjunto de ganancias imponibles o pérdidas compensables.
La noción comprende tanto la ganancia percibida como la devengada. Renta devengada es
aquella ganada y exigible, pero no cobrada, mientras que percibida es aquella cobrada o en
disponibilidad.
El concepto incluye tanto la renta consumida como la ahorrada.
Ganancias de actividades ilícitas: las ganancias obtenidas de actividades ilícitas o inmorales se
encuentran incluidas en la 20628. Es decir, están gravadas por la ley.
“Fuentes de ganancias”:
-Aspecto temporal: el impuesto a las ganancias es de verificación periódica y su hecho imponible
se tiene por acaecido el 31 de diciembre de cada año.
-Aspecto personal: se consideran destinatarios legales del impuesto a las ganancias las personas
de existencia visible o ideal y también las sucesiones indivisas (declaratoria de herederos).
-Aspecto espacial: respecto de las personas físicas y jurídicas residentes en el país la ley argentina
adopta el principio de renta mundial, combinado con el de la fuente como criterio espacial de la
atribución de la ganancia. Debemos distinguir entre sujetos residentes y no residentes en el país:
a) los sujetos residentes tributan sobre la totalidad de las ganancias obtenidas aquí y en el
extranjero. Son residentes en el país quienes posean nacionalidad argentina, nativas o naturalizadas
y las extranjeras que hayan obtenido residencia permanente o que sin haberla obtenido han
permanecido en el país durante 12 meses.
La ley considera residentes a las SA, SRL, asociaciones civiles, fundaciones, fondos comunes
de inversión y otros sujetos que enumera el art.69, con la condición de haber sido constituidos
en el país. También son residentes en el país las sociedades, asociaciones, empresas o
exploraciones unipersonales. Las sucesiones indivisas en las que el causante, a la fecha del
fallecimiento, revistiera la condición de residente en el país.
Cada país graba la renta de sus residentes tanto si se producen dentro como fuera de su territorio,
pero se acepta que el impuesto pagado en el extranjero por rentas allí producidas se deduzca como
pago a cuenta del impuesto local hasta los límites que cada país decida.
b) los sujetos no residentes tributan exclusivamente sobre ganancias de fuente argentina.
Conclusión sobre el aspecto espacial: doble encuadramiento.
El principio de la renta mundial es aplicable a todos aquellos a quienes la ley considera residentes
argentinos.
El principio de las fuentes rige exclusivamente para residentes en el exterior que obtienen ganancias
de origen argentino.
Sujetos.
SUJETO ACTIVO: es el fisco nacional, el impuesto a las ganancias es recaudado por la AFIP-
DGI.
SUJETO PASIVO: pueden ser contribuyentes las personas individuales que obtengan ganancias,
sean capaces o incapaces, estas últimas actuarán por medios de sus representantes legales.
En cuanto a las personas de existencia ideal, la ley considera sujeto pasivo a:
1) Sociedades que enumera el art.69. SA, Soc. en comandita por acciones, SRL y sociedad en
comandita simple; asociaciones y fundaciones, sociedades de economía mixta, fideicomisos
constituidos en el país excepto aquellos en los que el fiduciante posea la calidad de beneficiario,
organismos que se refiera el art.1 de la 22.016, fondos comunes de inversión constituidos en el país.
2) Los establecimientos comerciales, industriales, agropecuarios, mineros o de cualquier tipo
organizados en forma de empresa estable pertenecientes a asociaciones, sociedades o empresas,
cualquiera sea su naturaleza constituidas en el extranjero o pertenecientes a personas físicas
residentes en el exterior.
3) Sociedades constituidas en el país y empresas unipersonales.
4) Los sujetos residentes en el exterior beneficiarios de rentas ajenas a las resultantes de la
existencia de un establecimiento estable en el país.
Con respecto a las personas jurídicas de carácter público, la doctrina se encuentra dividida en
cuanto a su consideración como sujetos de este impuesto. Ciertos autores sostienen que son sujetos
de obligaciones por el hecho de que el art.20 inc. A establece una exención en su favor y eximir
significa reconocer que a su respecto se produce el hecho generador de la obligación. Otra postura
dice que no pueden ser destinatarios legales de tributos por cuanto técnicamente carecen de
capacidad contributiva.
La ley también considera contribuyentes a las sucesiones indivisas hasta la declaratoria de
herederos o declaración de validez del testamento.
No son contribuyentes las sociedades de personas, ni la sociedad conyugal.
Categorías.
Se forman categorías según el origen de la renta, pero se utilizan como medio de gravar la renta
integral.
A) PRIMERA CATEGORIARENTA DEL SUELO: Constituyen ganancias de la primera
categorías las producidas en dinero o en especie en la locación de inmuebles urbanos y rurales, el
valor de las mejoras introducidas en los inmuebles por los arrendatarios o inquilinos y en la parte
que no este obligado a indemnizar, el importe abonado por los inquilinos o arrendatarios por el uso
de muebles y otros accesorios o servicios que suministre el propietario.
Se incluyen las rentas reales o presuntas derivadas de los inmuebles ubicados en el país y en el
exterior, ello condicionado a que tales rentas no estén incluidas en la tercera categoría.
B) SEGUNDA CATEGORIARENTA DE CAPITALES: Son las ganancias que derivan del
producto de capitales o derechos no explotados directamente por el propietario, sino colocados o
cedidos y, consecuentemente, donde la actividad del propietario es nula o casi nula. Los ingresos
que en forma de uno o más pagos se perciban por la transferencia definitiva de derechos de llave,
marcas, patentes de invención, regalías y similares.
Se comprende en general las rentas de capitales, la inclusión está subordinada a que la renta no
integre la tercera categoría.
C) TERCERA CATEGORIABENEFICIOS DE LAS EMPRESAS Y CIERTOS
AUXILIARES DE COMERCIO:
-Las que obtienen los sujetos incluidos en el art.69, sociedades de capital.
-Las que deriven de otras sociedades o empresas unipersonales ubicadas en el país.
-Los beneficios obtenidos por comisionistas, rematadores, consignatarios y otros auxiliares de
comercio no incluidos en la cuarta categoría.
-Las derivadas de loteos con fines de urbanización, las provenientes de la edificación y enajenación
de inmuebles.
-Las derivadas de fideicomisos.
-Las demás ganancias que no estén incluidas en otras categorías.
Esta categoría tiene el carácter de predominante con respecto a las demás. No se definen a las
ganancias por las actividades que les dan origen, sino por el sujeto que las obtiene. Tratándose
de estos antes deja de interesar de dónde surge la ganancia, si es obtenida por estos contribuyentes
esa sola circunstancia la convierte en renta de tercera categoría. Además entran en esta categoría
todas las ganancias no incluidas en otras, se asigna a la tercera categoría carácter residual.
La tercera categoría incluye las ganancias de cualquier tipo que obtengan ciertos contribuyentes y
para ello adquieren la calidad de predominante por cuanto subordina a las restantes categorías.
Tiene también el carácter residual.
4) CUARTA CATEGORIARENTA DEL TRABAJO PERSONAL: Son las rentas derivadas del
trabajo o esfuerzo personal, ejercido en forma libre o en relación de dependencia. Se incluyen el
desempeño de cargos públicos y percepción de gastos protocolares, beneficios obtenidos de las
jubilaciones, pensiones, retiros, subsidios en cuanto tengan origen en el trabajo personal. También
los honorarios de los socios administradores de las SRL, en comandita simple por acciones, así
como los derivados de las actividades de corredor, viajante de comercio y despachante de aduana.
Determinación de la base imponible. Ganancia neta y ganancia neta sujeta a impuesto.
Según el art.17 para establecer la ganancia neta se restará la ganancia bruta (obtenida por la suma
de todas las categorías) los gastos necesarios para obtenerla o mantener y conservar la fuente,
cuya deducción admita esta ley.
Es decir, la ganancia neta se obtendrá una vez realizadas las deducciones generales, las
deducciones especiales para cuatro categorías y las especiales para la primera, la segunda y la
tercera.
Luego, para establecer la ganancia neta sujeta a impuesto, se restarán de la ganancia neta las
deducciones personales.
DEDUCCIONES: Son las erogaciones necesarias para obtener la ganancia o para mantener y
conservar la fuente productora, tales gastos, si son admitidos por la ley y en las condiciones que
ésta determina debe ser restados de las ganancias brutas obtenidas en el período y que son el
producto de sumar los ingresos de todas las categorías que el contribuyente obtiene.
Existen los siguientes tipos de deducciones:
-Generales: son las aplicables a todas las categorías sin distinción, entre ellas tenemos: los intereses
de deudas, sus respectivas actualizaciones, sumas que pagan los asegurados por casos de muerte,
donaciones a los fiscos, contribuciones o descuentos para fondos de jubilaciones, retiros, pensiones,
honorarios correspondientes a los servicios de asistencia sanitaria, medica.
-Especiales para todas las categorías (1°, 2°, 3° y 4°): como por ejemplo los impuestos y tasas
que recaen sobre los bienes que produzcan ganancias, las primas de seguro que cubran riesgos
sobre bienes que produzcan ganancias, las perdidas extraordinarias sufridas por caso fortuito o
fuerza mayor en los bienes que produzcan ganancias, los gastos de movilidad, viáticos y otras
compensaciones análogas, las amortizaciones por desgaste y agotamiento y las pérdidas por
desuso.
-Especiales de la 1°, 2° y 3° categoría: Artículo 85, 86 y 87. La ley estipula cuales deducciones no
son admisibles. Los gastos de consumo no son deducibles.
Deducciones personales: Son el mínimo no imponible y las cargas de familia. La ley determina
para ello importes fijos que son actualizados anualmente mediante coeficientes calculados por
AFIP.
a) Mínimo no imponible: es una suma que se deduce por cuanto se considera que es el importe
indispensable para la subsistencia física del contribuyente y por consiguiente no puede ser
gravado.
-Ganancia no imponible: es una suma fija aplicable a todos los contribuyentes que sean
personas físicas residentes y sin distinción de categorías.
-Deducción especial: rigen solo para algunos contribuyentes siempre que trabaje
personalmente en la actividad o empresa y los de cuarta categoría. La ley prescribe como
condición que los contribuyentes que hagan valer las deducciones sean personas de existencia
visible. Las deducciones son anuales y de importe fijo, pero si fallece el contribuyente durante el
período la deducción se aplica proporcionalmente por períodos mensuales, computándose la
deducción hasta el fin del mes en que el deceso ocurra.
b) Cargas de familia: la Ley la sujeta a ciertas condiciones.
-El familiar debe estar a cargo del contribuyente, debe haber una real y efectiva prestación
alimentaria.
-Debe residir en el país
-Sus entradas netas anuales no deben ser superiores a la suma que estipula la ley.
Configurándose tales condiciones las deducciones se discriminan así:
i) Un importe fijo cuya cantidad la ley determina por el cónyuge. Este monto es deducible aun
habiendo divorcio de por medio, por parte del cónyuge que tenga a su cargo la prestación
alimentaria del otro.
ii) Un importe fijo establecido por ley por cada hijo o hijastro siempre que sean menores de 24
o incapacitados para el trabajo.
iii) Un importe fijo legalmente estipulado por otros parientes que la ley señala (descendientes
en línea recta, ascendientes, hermanos, suegros e hijos políticos).
Período de imposición.
Los ingresos computables son aquellos obtenidos en el año fiscal que coincide con el año
calendario. El procedimiento varía según la categoría, ya que mientras para algunas se exige seguir
el método de percibido, para la primera y tercera debe adoptarse obligatoriamente el procedimiento
de lo devengado, por último existen casos en los que el sistema de imputación a seguir es optativo
para el contribuyente.
Renta devengada: Corresponde a aquella renta sobre la cual se tiene un título o derecho,
independientemente de su actual exigibilidad y de que constituya un crédito para su titular.
Renta percibida: Aquella renta que se ha ingresado materialmente al patrimonio de una persona.
Determinación y pago: la determinación se efectúa por declaración jurada anual en las fechas
que señala la DGI. Los contribuyentes se ven obligados a realizar ciertos anticipos del impuesto
tomando en cuenta lo pagado el año anterior.
Alícuotas:
A) SOCIEDADES DE CAPITAL: según el art.69 se estipulan dos alícuotas proporcionales:
-35%: las SA, Soc. En comandita por acciones en la parte correspondiente a los socios
comanditarios, SRL, Soc. En comandita simple, las asociaciones civiles y fundaciones, las Soc. De
economía mixta, las entidades y organismos, los fideicomisos, FCI. También deben pagar esta
alícuota los establecimientos comerciales, industriales, agropecuarios, mineros o de cualquier otro
tipo organizados en forma de empresa estable.
B) PERSONAS FISICAS: deben obtenerse la ganancia neta sujeta a impuesto sobre el monto total
se aplica una alícuota básica proporcional si la ganancia neta imponible anual llega hasta el primer
peldaño cuantitativo que la ley estipula. Cuando la ganancia excede esa suma, comienza a aplicarse
una escala de tipo progresivo doble.
Exenciones y beneficios: al ponerse en vigencia la ley 20628 se varió el criterio. Inclusión de
exenciones seleccionadas contenidas en el art.20 y tratamiento especifico de los alicientes fiscales
sectoriales o regionales por parte de leyes especiales.
Impuestos a los premios y sorteos (LEY 20630)
-Características: real/ directo/ instantáneo/ nacional (de emergencia)/ de aplicación, fiscalización
y percepción a cargo de AFIP.
-Hecho imponible: ganar un premio/ premios ganados.
-Aspecto temporal: es una aplicación instantánea, e perfecciona finalizado el sorteo o concurso.
-Aspecto espacial: se aplica el principio de la fuente, premios y sorteos organizados en el país.
-Sujetos: ganador del premio. No el ente organizador (agente de retención)
-Base imponible: constituido por el monto neto del premio (90%) menos las deducciones.
-Alícuota: 32,5%
-Exenciones: premios cuyos montos no exceden de $1200 y los que combinan azar y destreza.
IMPUESTOS INTENROS:
Son impuestos al consumo, que se denominan internos por oposición a los impuestos externos o
aduaneros.
Por una aparente paradoja, estos impuestos al consumo gravan hechos distintos del consumo.
Consumir significa el empleo de una cosa, gastándola, destruyéndola, haciéndola desaparecer súbita
o paulatinamente. Pero, por razones técnicas derivadas de las formas en que suelen organizarse
estos impuestos, se puede adoptar generalmente el sistema de gravar en el origen los bienes
destinados al consumo. Por una ficción, la ley da por configurado el consumo con la
transferencia dado por sentado que la incidencia del tributo que se aplica sobre ese hecho
imponible se operará finalmente cuando se concrete su desaparición, transformación o uso por el
efectivo consumidor.
Esto sucede cuando los pagadores del impuesto (productores, importadores, industriales) lo
incluyen en el precio, trasladando el impuesto (el costo del tributo esta en el precio).
Antecedentes históricos.
Estos impuestos han existido desde la antigüedad más remota; lo que ha variado es la elección
de los artículos gravados y de las tasas.
La primera tendencia histórica consistió en gravar la totalidad de artículos de consumo y fabricación
interna. Esto trajo consecuencias injustas, al establecer impuestos sobre artículos de primera
necesidad, que recaían pesadamente sobre las clases menos pudientes.
De estas formas primitivas, los E° han ido evolucionando hacia la selección de los productos.
Suelen clasificarse los artículos gravados en tres clases:
-Necesarios: son los de primera necesidad o consumo imprescindible.
-Útiles: son aquellos que, sin ser necesarios, son de fuerte consumo, pero sin llegar a ser suntuarios.
-Suntuarios: son los que satisfacen necesidades superfluas o de lujo.
Las legislaciones se inclinan a eximir a los artículos de primera necesidad y a gravar en la
máxima medida posible los suntuarios.
Por otra parte, en la evolución histórica se observan dos formas principales de recaudación de este
tributo:
-En Francia, era un recurso típicamente comunal; era percibido en ocasión de la introducción de los
artículos en las ciudades, y
-En Inglaterra, era un ingreso del poder central, y gravaba los artículos en el momento de su
producción o de su venta.
Fines económicos y sociales del impuesto.
El fin económico de todo tributo es la recaudación, es decir el ingreso de riqueza a las arcas del
Estado.
Además, estos impuestos internos suelen utilizarse con fines extra fiscales para desalentar
determinados consumos o actividades por ejemplo alícuotas altas en los cigarrillos.
Impuestos internos en la Argentina. Problemas constitucionales.
Surgen al ser implantados por la ley 2774 del año 1891, la implantación fue limitada a 3 años y
sobre determinados artículos.
En 1894 se decidió su prorroga y la inclusión de nuevos artículos gravados, por ejemplo vinos y
naipes; en esta oportunidad se produjo un importante debate en la Cámara de diputados. (Entre el
ministro de hacienda “Terry” respecto a su validez constitucional con el diputado Mansilla, artículo
4 impuestos directos +indirectos).
Por un lado, se sostuvo que la Nación no podía cobrar impuestos indirectos, por lo cual le estaba
vedado establecer impuestos internos al consumo, que eran indudablemente indirectos. Al respecto
Vicente Fidel López argumentó que la CN sólo autorizaba al Congreso de la Nación a imponer
impuestos directos y por tiempo determinado, mientras que al no decir nada de los indirectos, estos
quedaban vedados a la Nación, eran exclusivamente provinciales.
Esta imposición se refutó afirmando que los impuestos indirectos podían ser válidamente percibidos
por la Nación. Esta interpretación fue admitida en su momento, pero no por ello dejo de aceptarse
que las provincias tenían idéntica facultad de establecer impuestos internos al consumo, por no
haber delegado la materia en forma permanente (como sucedió con respecto a los impuestos
aduaneros), ni por circunstancias excepcionales (como en lo referente a impuestos indirectos).
De allí que se sostenga en la actualidad que los impuestos indirectos son de facultad concurrente.
Esto entendió la doctrina mayoritaria (Reforma constitucional del 94 art. 4).
Los recursos del Estado están establecidos en el art 4 de la CN, pero esta norma se complementa
con el 67 inciso 2 y 75 inciso 2, sólo el Estado Nacional puede realizar impuestos indirectos y por
tiempo determinado.
, o aquellos por cuya cuenta se efectúa la elaboración. Impuestos internos ley 24679.
CARACTERÍSTICAS DEL IMPUESTO: se trata de impuestos indirectos por cuanto gravan el
consumo selectivo que es una exteriorización mediata de capacidad contributiva. Son, además,
reales porque tienen en cuenta la cosa y no el sujeto, permanentes y de facultades concurrentes.
La ley 24679 dispone que el gravamen recaiga sobre el tabaco, bebidas alcohólicas, cervezas,
bebidas analcohólicas, jarabes, extractos y concentrados, automotores y naipes, motores
gasoleros, telefonía celular y satelital, champañas, objetos suntuarios, automóviles y motores,
embarcaciones de recreo o deportes, aeronaves, y vino.
HECHO IMPONIBLE:
Aspecto material: es el expendio de artículos nacionales o importados. Con respecto a artículos
nacionales, expendio significa transferencia a cualquier título (oneroso o gratuito) de la cosa
gravada en todo el territorio de la Nación.
Respecto de tabaco y bebidas alcohólicas se presume, salvo prueba en contrario, que toda salida de
fábrica o depósito fiscal implica la transferencia de los respectivos productos gravados.
En el caso de bebidas analcohólicas, jarabes, extractos y concentrados, se considera que el expendio
se produce exclusivamente por la transferencia efectuada por los fabricantes o importadores
Con relación a los productos importados para consumo, se entiende por expendio su despacho a
plaza y su posterior transferencia a cualquier título.
Aspecto temporal: el hecho imponible de este gravamen se configura en el momento del
expendio; sin embargo, al tributo se lo liquida y paga por mes calendario.
Aspecto personal: los destinatarios legales tributarios respecto de este gravamen pueden ser:
-Responsables por deuda propia: a) Los fabricantes, importador; b) Las personas por cuya cuenta
se efectúan las elaboraciones o fraccionamientos; c) Los intermediarios por expendio de champaña.
-Sujetos pasivos por cuenta ajena: son los responsables por artículos alcanzados por el impuesto
que utilicen como materia prima otros productos sometidos a gravamen, los que deben pagar a
efectos de retirar las especies de fábrica o depósitos fiscales, y los intermediarios entre
responsables y los consumidores por la mercadería gravada cuya adquisición no fuere
fehacientemente justificada, mediante documentación pertinente que posibilite la correcta
identificación del enajenante.
Aspecto espacial: este gravamen se aplica en todo el territorio de la Nación; esto implica
prescindencia de todo criterio de atribución fiscal ajeno al principio de la fuente.
BASE IMPONIBLE: es el precio neto de venta que resulte de la factura o documento
equivalente extendido por las personas obligadas a ingresar el impuesto salvo en el caso de los
cigarrillos que tributarán sobre el precio de venta al consumidor, inclusive impuestos excepto el
IVA.
Según la ley, se entiende por precio neto de venta el que resulta una vez deducido:
-las bonificaciones y descuentos en efectivo, hechos al comprador por fecha de pago y otros
conceptos similares;
-los intereses por financiación del precio neto de venta; y
-El débito fiscal del IVA que corresponda al enajenante como contribuyente de derecho.
La deducción de estos conceptos procederá siempre que los mismos correspondan en forma directa
a las ventas gravadas, y en tanto figuren discriminados en la respectiva factura y estén debidamente
contabilizados.
Deducciones prohibidas: En cambio, en ningún caso se puede descontar valor alguno en
concepto de impuestos internos o de otros tributos que incidan sobre la operación, excepto el
caso del IVA; esto significa que los gravámenes están comprendidos dentro del costo de los
productos dando lugar a la situación denominada de “impuesto sobre impuesto” .
No corresponde la deducción del flete o acarreo cuando la venta ha sido convenida sobre la base
de la entrega de la mercadería en el lugar de consumo (salvo el caso de los neumáticos, donde
puede deducirse el flete y el seguro del transporte).
Tampoco pueden deducirse los valores atribuidos a los artículos que complementen las mercaderías
(por ejemplo envases), el precio impuesto debe calcularse sobre el precio de venta asignado al todo.
-Transferencia gratuita: Cuando la transferencia es gratuita se toma como precio de venta el
valor asignado por el contribuyente en operaciones con productos similares, y en su defecto, el
valor normal de plaza.
-Consumo de productos de propia elaboración: se toma como base imponible el valor aplicado en
las ventas de esos mismos productos que se efectúan a terceros. Si no existen esas ventas se toman
los precios promedios que para cada producto determine la DGI.
-Importaciones: la base imponible es el precio normal definido para la aplicación de los derechos de
importación, al que se agregan todos los tributos a la importación o con motivo de ella, incluido el
impuesto interno de la ley que analizamos (art.76). En la hoja del AFIP dice que se debe aplicar
130% al precio normal definido para la aplicación de los derechos de importación.
-Base imponible en cigarrillos: la base imponible es el precio de venta al consumidor incluido el
impuesto, aunque exceptuando el IVA y deduciendo el impuesto adicional del 2% o 21%.
Objetos gravados.
Se distingue:
Titulo I: comprende tabacos, alcoholes, bebidas alcohólicas, cubiertas para neumáticos,
combustibles, cervezas y vinos.
Titulo II: artículos de tocador, objetos suntuarios, seguros, bebidas sin alcohol, automóviles,
aparatos de televisión, grabadores, barcos.
AFIP: en los rubros gravados más significativos pueden enumerarse los siguientes:
-Seguros de accidentes de trabajo: 2,5%, seguros generales 8,5%, seguros de personas o bienes
hechos por empresas radicadas fuera del país 23%.
-Cigarrillos: 60%, manufacturas de tabaco 16%, tabacos 20%, paquetes de cigarrillos (adicional de
emergencia) 21%.
-Bebidas alcohólicas, jarabes, extractos y concentrados 8%.
-Automotores y motores gasoleros 10%.
-Vehículos automóviles y motores, embarcaciones de recreo o deportes y aeronaves hasta un precio
de venta de 15 mil pesos está exento, desde 15 mil hasta 22 mil pesos 4%, más de 22 mil 8%.
-Servicio de telefonía celular 4%.
-Objetos suntuarios 20%.
Sujetos del impuesto.
SUJETOS PASIVOS:
1) Sujetos pasivos del titulo I:
-Por deuda propia: los fabricantes, importadores, los que encargan la elaboración a terceros,
los fraccionadores, los intermediarios de vinos y cervezas, etc.
-Por cuenta ajena: como sustitutos, los fabricantes actuando en remplazo de quienes fabrican la
materia prima con la cual los primeros elaboran sus productos.
2) Sujetos pasivos del título II:
-Por deuda propia: los fabricantes, importadores, fraccionadores, acondicionadores, los que
encargan la elaboración a terceros, comerciantes de objetos suntuarios, etc.
-Por cuenta ajena y como responsables solidarios: los intermediarios entre contribuyentes y
consumidores de la mercadería gravada.
Agentes de percepción: subasta de mercaderías. Debe agregarse otro sujeto pasivo, el adquirente de
mercadería subastada, donde el subastante actúa como agente de percepción, adicionando el
impuesto al precio y depositándolo luego a la orden del fisco.
Determinación y pago.
El impuesto debe determinarse en general, mediante el sistema de declaración jurada por el
sujeto pasivo, declaración esta que debe ser formulada conforme a las registraciones de los libros
comerciales, oficiales y dempas constancias o elementos que permitan establecer el monto sujeto a
gravamen. La presentación de la declaración jurada y oportunidad del pago del impuesto respectivo
debe hacerse en la forma y plazo que fije la DGI (arts. 78 y 79).
Los pagos deben hacerse mediante depósito en la cuenta “Impuestos Internos Nacionales” en el
Banco de la Nación Argentina.
Las mercaderías importadas se deben pagar antes de efectuarse el despacho a plaza.
4)OTROS:
RÉGIMEN SIMPLIFICADO PARA PEQUEÑOS CONTRIBUYENTES (LEY 24977).
Características generales.
La Ley 24977 de 1998 estableció un nuevo sistema para el ingreso de los impuestos nacionales y
los recursos de la seguridad social de los pequeños contribuyentes, conocido como “monotributo”.
Es un sistema integrado y simplificado de recaudación de gravámenes a cargo de la AFIP que
alcanza a los pequeños contribuyentes y abarca los siguientes conceptos (integra los 3 conceptos):
-Impuesto a las ganancias.
-Impuesto al valor agregado.
-Sistema de la Seguridad Social (jubilación y obra social).
Al tratarse de un régimen integrado significa que incluye obligatoriamente los impuestos a las
ganancias y al valor agregado y al sistema previsional en forma conjunta, esto es, el pequeño
contribuyente no puede elegir el impuesto que desea sustituir, porque el sistema comprende
obligatoriamente todos los conceptos mencionados y no alguno en particular.
Se trata de un impuesto que sustituye a los anteriormente mencionados en caso de optar por este
régimen, lo que significa que tiene normativa propia.
Por otro lado se trata de un régimen optativo y solo para pequeños contribuyentes; no cualquier
contribuyente puede optar, sino que debe reunir los requisitos para ser considerado pequeño
contribuyente. De lo contrario, la única posibilidad que le cabe es el Régimen General, tributando
impuesto a las ganancias, impuesto al valor agregado y régimen previsional de trabajadores
autónomos.
Sujetos.
El art. 2 del Anexo de la ley define los sujetos que se consideran pequeños contribuyentes del
régimen, estableciendo las condiciones que debe reunir según se trate de personas físicas que
realicen ventas de cosas muebles, obras, locaciones y/o prestaciones de servicios; personas físicas
integrantes de cooperativas de trabajo, sucesiones indivisas, sociedades de hecho y comerciales
irregulares; y trabajadores del servicio doméstico.
Actividades comprendidas en el régimen simplificado (hecho imponible).
-Venta de cosas muebles, obras, locaciones y /o prestaciones de servicios incluida la actividad
primaria.
-Locaciones de bienes muebles e inmuebles.
-NO están comprendidas las prestaciones financieras, compraventa de valores mobiliarios y
participaciones en sociedades no comprendidas en el Régimen Simplificado.
-Es incompatible la adhesión al Monotributo con el desarrollo de actividades por las que se
esté obligado a estar inscripto en el IVA, es decir, no se puede mantener las dos condiciones
(monotributo e IVA simultáneamente).
-Es compatible con el desempeño de actividades en relación de dependencia, con la percepción de
jubilaciones, pensiones o retiros.
Base imponible.
Esta determinada tomando como parámetros de capacidad contributiva los ingresos brutos
devengados y obtenidos y las magnitudes físicas (superficie afectada a la actividad y energía
eléctrica consumida), en función del tipo de actividad que realice, estableciendo la ley los límites
máximos correspondientes a los tres parámetros a considerar. El pequeño contribuyente deberá
encuadrarse en la categoría que le corresponda, la cual será aquella donde no supere ninguno de los
límites en forma conjunta para la categoría.
Si bien para categorizarse en el monotributo, estos parámetros deben considerarse según lo ocurrido
en los últimos doce meses calendarios, los contribuyentes deben re categorizarse en forma
cuatrimestral, por cuatrimestre calendario.
Obligaciones formales.
Los sujetos inscriptos en el régimen simplificado deberán exhibir en la vidriera del local o
establecimiento, en un lugar visible al público:
-La constancia de opción al monotributo, que indique su condición de pequeño contribuyente y
de la categoría en que está inscripto.
-El comprobante de pago de la última obligación mensual vencida, correspondiente a la
categoría en la cual el contribuyente debe estar categorizado.
-Si el pago lo efectúa por débito automático, no estará obligado a exhibir el comprobante de pago,
pero es recomendable guardar una copia del resumen bancario o de la tarjeta, ya que éstos no
emiten comprobante.
La falta de exhibición de estos elementos hace pasible al contribuyente de una multa graduable
desde $100 hasta los $3.000 y clausura de 1 a 5 días.
Si el incumplimiento se refiere a uno solo de los elementos a exhibir, será sancionado con clausura
o multa, según la evaluación del juez administrativo interviniente.
Facturación y registración.
El contribuyente está inscripto en el régimen simplificado deberá exigir, emitir y entregar las
facturas por las operaciones que realice, correspondiéndoles emitir facturas letra “C” con la
leyenda “Responsable Monotributo”.
No tiene obligación de emitir comprobantes mediante controladores fiscales, salvo que opten por
emitir tiquetes por ventas a consumidores finales, renueven o amplíen el parque de registradoras
instaladas.
Están exceptuados de la obligación de registración de operaciones, debiendo conservar en
archivo los comprobantes emitidos y recibidos por las operaciones que realicen ordenados en
forma cronológica y por año calendario.
Quienes realicen operaciones con los pequeños contribuyentes, deberán emitir las facturas o
documentos equivalentes clase B o C, según corresponda, consignando la leyenda “Responsable
Monotributo”.
Impuesto a ingresar.
Una vez calculada la base imponible presunta de las actividades que desarrolla el pequeño
contribuyente, debe procederse a la determinación del impuesto integrador.
La cuota de monotributo está conformada por dos componentes:
a) Componente impositivo: sustituye a los impuestos al valor agregado y a las ganancias del
régimen general.
b) Componente previsional: sustitutivo del régimen de trabajadores autónomos y obra social.
Respectos del componente previsional, hay sujetos que están exceptuados de ingresarlo, es decir,
que solo ingresan el componente impositivo de la cuota (ej. Menores de 18 años, locadores de
bienes muebles y/o inmuebles, etc.).