El Regreso de La Sulamita

El regreso de la Sulamita
Apóstol Sergio Enríquez O.

Guatemala, 20 de Agosto del Año Del Reinicio
Debemos ser como los hijos de Isacar, a quienes la Biblia los describe como personas con
discernimiento o conocedores de los tiempos, pero lo más importante, es que ellos sabían lo que
tenían que hacer; si logramos entender el tiempo que estamos viviendo y lo que nos corresponde
hacer, entonces podremos prepararnos para nuestro regreso a la Patria Celestial, lugar al cual
pertenecemos.
Vemos en el Antiguo Testamento, como Dios liberta al pueblo de Israel de su esclavitud en Egipto
y fueron conducidos por el desierto hasta llegar a la tierra prometida, Canaán; sin embargo,
muchos de ellos quedaron postrados en el desierto porque a pesar de haber salido de Egipto, aun
anhelaban, en sus corazones, todo lo que anteriormente habían poseído en esa Tierra de
esclavitud; o sea, no había surgido un cambio de manera de pensar en ellos. En el sentido
espiritual, la salida de la cautividad significa para nosotros la salida del mundo, pero es necesario
que ocurra en nosotros un cambio de manera de pensar y de actitudes; de otra manera, nos
veremos afectados y corremos el riesgo de quedar postrados en el camino y no alcanzar las
bendiciones que Dios tiene para nosotros.
1 Juan 2:28 LBLA Y ahora, hijos, permaneced en El, para que cuando se manifieste,
tengamos confianza y no nos apartemos de El avergonzados en su venida.
Hemos estado enseñando acerca de los seis escenarios, las señales bíblicas que se han cumplido
y los acontecimientos que actualmente estamos viviendo, ya que estos apuntalan la pronta venida
del Señor, pero no sólo debemos estar escuchando al respecto, sino que también debemos
prepararnos para recibir al Señor en las nubes, pues Su venida en secreto cada día está más
cercana. Debemos buscar al Señor, no buscando en Él la solución a nuestros problemas, sino
que, debemos tener amores con Él y pedirle sabiduría, tal como lo solicitó Salomón, pues en lugar
de riquezas y la caída de sus enemigos, él pidió sabiduría y Dios, al ver en el corazón de Salomón
la motivación correcta para lo que pedía, entonces se la concedió y aún le dio todo aquello que él
no había pedido, pero que anhelaba tener en su corazón. Dios quiere que le busquemos por los
motivos correctos y como añadidura nos dará lo que no hemos pedido, pero que necesitamos.
Cantares 6:13 RV 1960 Vuélvete, vuélvete, oh Sulamita; Vuélvete, vuélvete, y te

miraremos. ¿Qué veréis en la Sulamita? Algo como la reunión de dos
campamentos.
El contexto de este versículo nos da a enteder que había personas que dudaban de quién era esta
mujer Sulamita, quien es figura de la iglesia que será levantada. Luego se nos habla de lo que
ésta mujer hizo para prepararse en su regreso. Debemos poner atención a la palabra “Vuélvete”,
puesto que la palabra dice que cuando algo se repite dos veces es porque Dios está en el asunto y
sucederá muy pronto; sin embargo, llama la atención que se está repitiendo cuatro veces, lo cual
significa que el asunto es muy importante.
Como parte de la preparación de la Sulamita, ella debía volverse o regresar de algo o de algún
lugar, lo que nos deja ver a nosotros que Dios espera que nos regresemos de algún lugar o que
Este estudio puede imprimirse y reproducirse por cualquier medio siempre y cuando se cite la fuente de donde se obtuvo.
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ocurra un cambio en nosotros antes del momento de nuestro encuentro con el Señor, por lo que es
muy importante que entendamos de qué cosas nos debemos regresar.
Rut 1:6 LBLA Entonces se levantó con sus nueras para regresar de la tierra de
Moab, porque ella había oído en la tierra de Moab que el SEÑOR había visitado a su
pueblo dándole alimento.
La palabra “regresar” en el original es la misma que “vuélvete”, lo cual nos hace pensar que el
término “volver” está relacionado con alimento, es decir, al pan como figura de la Palabra de Dios,
puesto que Noemí oyó en la tierra de Moab que el Señor había bendecido a Su pueblo con
alimento. Podemos poner como ejemplo también la parábola del hijo prodigo, quien luego de
volver en sí, decidió levantarse e ir a la casa de su padre, donde el alimento era abundante.
Lucas 15:17-18 LBLA Entonces, volviendo en sí, dijo: "¡Cuántos de los trabajadores
de mi padre tienen pan de sobra, pero yo aquí perezco de hambre! "Me levantaré e
iré a mi padre, y le diré: 'Padre, he pecado contra el cielo y ante ti;
El versículo dice “volviendo en sí”, lo cual significa que el hombre, al alejarse de la casa del padre,
perdió la razón. Damos gracias a Dios que un día nosotros volvimos en sí y regresamos a la casa
de nuestro Padre. Algunos pueden estar “locos” y no quieren saber de Dios, ni de Su casa. La
Biblia nos muestra que tanto Noemí como el hijo prodigo de la parábola, se levantaron para
regresar; ahora bien, ¿de dónde se levantaron? ¿a dónde regresaron? Se levantaron del polvo y
regresaron a la casa del padre o lugar de procedencia.
Isaías 52:2 LBLA Sal del polvo, levántate, cautiva Jerusalén; líbrate de las cadenas
de tu cuello, cautiva hija de Sion.
1 Samuel 2:8 LBLA Levanta del polvo al pobre, del muladar levanta al necesitado
para hacerlos sentar con los príncipes, y heredar un sitio de honor; pues las
columnas de la tierra son del SEÑOR, y sobre ellas ha colocado el mundo.
El polvo significa humanismo, mucho pueblo de Dios, aunque no hayan caído en un vicio como las
drogas o el alcoholismo, igualmente se encuentran esclavizados por el humanismo; esto como
consecuencia de no leer la Biblia ni buscar el pleno conocimiento de Dios, pues una persona que
no procura tener intimidad de amores con el Señor, se vuelve presa fácil de la ola de engaños y
doctrinas de demonios que arropan a toda la humanidad.
Génesis 16:9 LBLA Y el ángel del SEÑOR le dijo: Vuelve a tu señora y sométete a
su autoridad.
Este pasaje habla de Agar, la esclava de Sara, quien huyó de su señora como rebeldía por el trato
que de ella recibía; sin embargo, cuando estaba en el desierto se le aparece un ángel y le dice
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que regresara y se sometiera a su señora. Esto nos habla a nosotros de sujeción y reconocimiento
de autoridad. Debemos regresar al lugar donde Dios nos ha puesto y, en amor, sujetarnos a las
autoridades delegadas por Dios sobre nuestra cabeza, de esta manera, alcanzaremos la bendición
de Dios.
2 Samuel 22:38 LBLA Perseguí a mis enemigos y los destruí, y no me volví hasta
acabarlos.
Este versículo nos enseña que no debemos regresar hasta acabar con nuestros enemigos,
nosotros somos vencededores en las fuerzas del Señor Jesucristo, no podemos regresar sin una
victoria. Tal como algunos siervos que han sido enviados al ministerio y han tenido luchas fuertes,
pero aún con eso, no han regresado a la casa que los envió, sino que han vencido y permanecen
en el ministerio hasta hoy. Dios nos ha enviado a terminar con nuestros enemigos, a derrotarlos, a
vencerlos, aunque sean gigantes, debemos ser una iglesia poderosa y valiente, cuyo Dios es más
grande que cualquier gigante.
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