Moral de Las Bienaventuranzas-2
Moral de Las Bienaventuranzas-2
Moral de Las Bienaventuranzas-2
TEXTO EVANGÉLICO
LAS BIENAVENTURANZAS
(Mt. 5:1-12)
de los Cielos.
tierra.
serán saciados.
misericordia.
de los judíos conversos; mediante el abordaje de: "cinco temas principales: 1) el espíritu
que debe animar a los hijos del Reino,...2) el espíritu con que deben <<dar
riquezas,...4) las relaciones con el prójimo,...5) la entrada en el Reino por una elección
actitud esencial del individuo, una verdadera conciencia moral de índole colectiva y la
Reino de Dios,
1 IBID
Contexto Literario
Ubicación.
sección dos: "Promulgación del Reino de los Cielos". Esta sección principia con la
de su vida pública, con las enseñanzas en la sinagoga y las primeras curaciones que
Jesucristo realizó.
desierto, estremece a los que esperan al Mesías. Pero el Reino anunciado no será el que
todos aguardan; no supondrá una vinculación física a la familia de Abraham, sino que
nacerá del Espíritu y requerirá la conversión del corazón"; de ahí la necesidad de normar
las actitudes con las bienaventuranzas, que se alcanzan como bendiciones en la posesión
del Reino de Dios, donde el "bautismo de Juan es la señal que lo anuncia. Pronto
2 BIBLIA DE JERUSALÉN; Evangelio según San Mateo; monición del capítulo 3; Edición pastoral conmemorativa; V
Centenario de Evangelización en América Latina; CEPAL, Bilbao, 1984; p.1472.
Género Literario.
forma retórica en tercera persona del plural, donde ellos son espectadores del proceso
en cuanto a su relación con las actitudes, expresiones y hechos de la existencia del ser
básica de la posesión del Reino de Dios, apelando a la intuición del ser humano, más que
a su instinto.
Su propósito final es citar, exaltar, persuadir y contar, todos los componentes de las
actitudes generadas que alcanzarán la bendición del Creador, lo que fluctúa en los
Para realizar un mejor análisis que nos permita una aproximación conceptual, a partir
las palabras en dos columnas relacionadas; de tal manera que cada expresión tiene su
alcanzada:
Ellos Bienaventurados
mentira toda clase de mal contra recompensa será grande en los cielos
.
Generalidades del Mensaje Teológico.
la búsqueda del Reino, para el bienestar o felicidad de la humanidad, cuyo logro está
"La vida vivida en la perspectiva del Reino cambia completamente de sentido. Los
que se han independizado del concepto humano del éxito, los que sienten los
sufrimientos del mundo, los que se apoyan únicamente en la fuerza de Dios, los que
esperan que se establezca la debida relación con Dios, los que saben perdonar, los
que están poseídos por un anhelo puro de Dios, los que participan de la naturaleza
divina teniendo por amigos a sus enemigos, los que por ello se condenan a que el
Por todo ello, "Jesús recuerda , en el espíritu de los profetas, que también los pobres
que son aptos para recibir la bendición del Reino. Las bienaventuranzas siguientes
fundamental, y el hombre dividido es aquel que ha roto la unidad al pretender 'servir a dos
3 IBID p.1474.
4 BIBLIA DE JERUSALÉN...;monición de Mateo Cap.5; Ed. Porrúa, "Sepan Cuantos"; op.cit., p.1393.
amos': Dios y las riquezas, con un criterio de vida cuantificador de todas las cosas que
dividido lleno de egocentrismo, para con sus adquisiciones (mío, tuyo, suyo), y en la
transición de su modo de vida existencial del 'tener' al 'ser', porque, el egocentrismo lleva
De este modo, la teología moral parte del ser pacífico como elemento unificador y
paradigma de paz; de armonía que construye el Reino, bajo una concepción del mundo y
de las cosas (más que una fórmula), acorde con lo esencial. De ahí que la división por el
que nos hace agradables, ante nosotros mismos y con los demás; y sólo alguien sensible
"es capaz de encontrar las condiciones necesarias para la paz. Las cosas de este mundo
no pueden dar paz; ésta se alcanzará en la medida en que nos elevemos por encima de
las cosas materiales, hasta llegar al punto en el que no las ambicionemos más" 5.
La desgracia se genera cuando se obra sin pensar y se juzga lo bueno o mejor, a partir
de lo material, y en este sentido, hay que buscar el equilibrio entre el tener y el ser, y dar
espiritual>> necesaria para entrar en el Reino...Si bien la fórmula -de Mateo- subraya el
que se establecen entre el ser esencial y el ser existencial; y con esta base, asumirse
como ser mortal, y corpóreo, y concebir las bienaventuranzas como fuentes de armonía
en la búsqueda de la paz.
Ser cristiano es ser esclavo de la humildad, con una actitud unificadora para con el
como justicia. Y sobre la Trinidad como máxima expresión de unidad, hablaba Jesucristo
<< 20 No ruego sólo por estos, sino también por aquellos que, por medio de su
palabra -de los apóstoles-, creerán en mí, 21 para que todos sean uno. Como
tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que
diste, para que sean uno como nosotros somos uno; 23 yo en ellos y tú en mí,
enviado, y que los has amado a ellos como me has amado a mí. 24
Padre, lo que tú me has dado, quiero que donde yo esté estén también
conmigo, para que contemplen mi gloria, la que me has dado porque me has
conocer, para que el amor con que tu me has amado esté en ellos>>
conservarse hasta el fin de los tiempos, por sucesión continua y comunicando lo que se
ha recibido, porque encierra lo necesario para que el pueblo de Dios viva santamente y
aumente su fe, como Iglesia que es, para que tanto en su doctrina como en su vida y en
su culto, perpetúe y transmita a todas las generaciones lo que ella es y en lo que cree.
Esta tradición que se deriva de los apóstoles progresa en la Iglesia por la asistencia
del Espíritu Santo, puesto que va creciendo en la comprensión de las cosas y de las
palabras transmitidas:
corazones.
Ya por el anuncio de aquella que por la sucesión del episcopado, recibieron el carisma
cierto de la verdad.
verdad divina, reconstruyendo la unidad perdida, viviendo en el ser más que en el deber
ser, teniendo presente que somos los últimos seres de los espirituales (divinidad
incorpórea) y los primeros de los corporales (humanidad corpórea), y como tales hay que
Palabra de Dios.
La observancia de los mandamientos, como verdad que nos hace libres, será por
entender y el amar; más en el ser que en el deber ser, donde se originan los apegos