Universidad: Universidad Tecnológica Empresarial de Guayaquil.

Tema: Ensayo de la importancia de los procesos psicológicos.

Estudiante: Carmen Viviana Romero Ortega.

Carrera: Licenciatura en Educación Básica.

Materia: Desarrollo de la Niñez y la Adolescencia.

Docente: Edison Francisco Martínez Rivas

Taller: 03

Fecha: 01 de diciembre del 2024.

 Introducción.

Los procesos psicológicos elementales y avanzados son esenciales para entender el

comportamiento humano y su relación con el medio ambiente. Estos procesos incluyen un extenso

espectro de actividades mentales, desde destrezas básicas como la percepción, la atención y la memoria,

hasta habilidades sofisticadas como el pensamiento, el lenguaje y la solución de problemas. No solo es

crucial su análisis para la psicología, sino también para campos como la neurociencia, la educación y las

ciencias sociales, dado que ofrecen un esquema completo para comprender cómo los individuos

perciben, comprenden y reaccionan ante su realidad.

Los procesos fundamentales, como la percepción y la atención, posibilitan la interpretación inicial

del mundo mediante los sentidos, simplificando la obtención de la información requerida para

interactuar con el ambiente (Redalyc, 2011). En cuanto a los procesos superiores, tales como el

pensamiento crítico y la creatividad, proporcionan al ser humano la habilidad de organizar, meditar y

generar nuevas ideas, superando los confines de lo tangible y creando respuestas adaptativas frente a

circunstancias complejas (Vygotsky, 1934).

Estos procesos no son entidades separadas; en cambio, están fuertemente vinculados y se

desarrollan gradualmente a lo largo de la vida, afectados por elementos biológicos, sociales y culturales.

Entender esta conexión es esencial para promover el crecimiento personal y social, particularmente en

entornos educativos y terapéuticos, donde potenciar estos procesos aporta de manera significativa al

bienestar humano y a su habilidad para adaptarse en un mundo en constante cambio.

 Desarrollo.

Los procesos psicológicos elementales son esenciales para la primera interacción con el

ambiente. Por ejemplo, la percepción facilita la interpretación de los estímulos externos, mientras que la

atención elige datos pertinentes para la acción. Sin estos mecanismos fundamentales, el ser humano no

tendría los recursos requeridos para las capacidades cognitivas avanzadas. De acuerdo con Woolfolk

(1990), estas capacidades constituyen el fundamento de toda actividad cognitiva, desde el recuerdo

hasta el aprendizaje.

En cambio, los procesos psicológicos avanzados, como el razonamiento abstracto y el lenguaje, se

forman mediante la interacción social, según lo propone Vygotsky en su teoría sociocultural. Estas

competencias no son innatas, sino moldeadas a partir de los procesos fundamentales a través del

aprendizaje y la experiencia. Por ejemplo, el lenguaje no solo promueve la comunicación, sino que

también organiza el pensamiento, facilitando a las personas la planificación, la reflexión y la resolución de

problemas complejos (Vygotsky, 1978).

La interdependencia entre estos procesos es evidente. Aunque los procesos fundamentales

proporcionan las bases, los procesos superiores refuerzan la habilidad del ser humano para adaptarse a

diferentes entornos. Esta interacción también se manifiesta en campos como la educación, donde se nota

que habilidades avanzadas como el pensamiento crítico se ven afectadas por la calidad de procesos

elementales como la atención sostenida y la memoria laboral (Díaz-Barriga & Hernández, 2010).

Los procesos mentales fundamentales y avanzados representan el fundamento del

funcionamiento mental y social del ser humano. Estos procesos no funcionan de manera independiente,

sino como un sistema vinculado que se transforma y se mejora a lo largo de la existencia. Su relevancia
reside en que no solo facilitan la interacción con el medio ambiente, sino que también promueven el

desarrollo de habilidades complejas que superan lo biológico y llegan a lo cultural.

Procesos psicológicos básicos: el fundamento del aprendizaje y la interacción inicial.

Los procesos fundamentales, tales como la percepción, el enfoque y la memoria, resultan

cruciales para el procesamiento inicial de la información. Por ejemplo, la percepción estructura los

estímulos sensoriales en patrones relevantes, facilitando que la persona entienda y reaccione a su

ambiente cercano (Redalyc, 2011). Además, la atención elige información pertinente, filtrando los datos

no pertinentes, lo que resulta vital para actividades como aprender o solucionar problemas elementales.

Por otro lado, la memoria vincula vivencias previas con el presente, favoreciendo la

memorización y la utilización de información en circunstancias futuras. De acuerdo con Piaget, la

memoria funciona como un mecanismo de asimilación y acomodación, incorporando nuevas vivencias en

esquemas ya existentes y facilitando un entendimiento gradual del ambiente (Vega, 1988). Sin estos

procedimientos fundamentales, las capacidades avanzadas no podrían desarrollarse, dado que no

tendrían el apoyo inicial para manejar información de forma eficaz.

Procesos psicológicos superiores: el salto hacia lo complejo.

Desde los procesos fundamentales, surgen los niveles superiores, tales como el pensamiento, la

comunicación y la solución de problemas. Estos procesos posibilitan que el ser humano se comporte de

forma deliberada y reflexiva, lo que favorece la adaptación a contextos sociales y culturales complejos.

Vygotsky (1934) sostiene que el lenguaje no solo se utiliza como medio de comunicación, sino que

también sirve para organizar el pensamiento y controlar el comportamiento. Este vínculo entre el

lenguaje y el pensamiento demuestra que los procesos superiores superan lo personal para

transformarse en instrumentos socioculturales.

 La creatividad y el razonamiento crítico, también conocidos como procesos superiores, resultan

fundamentales para la innovación y la toma de decisiones. Estas competencias posibilitan el análisis de

situaciones desde diversas perspectivas y la creación de soluciones innovadoras a problemas complejos.

La relación entre los procesos elementales y avanzados es especialmente clara en entornos educativos,

donde el progreso de la memoria y la concentración influye directamente en la habilidad de los alumnos

para razonar lógica y abstractamente (Díaz-Barriga & Hernández, 2010).

Relación e interdependencia entre los procesos básicos y superiores.

Los procesos psicológicos elementales y avanzados son complementarios y se afectan entre sí.

Por ejemplo, una falta de atención o memoria puede restringir la habilidad para razonar lógico, mientras

que el avance en competencias superiores puede mejorar la utilización de procesos fundamentales. Esta

interdependencia es fundamental para el aprendizaje y la adaptación, pues asegura que las personas

puedan afrontar eficazmente los retos de un ambiente que cambia continuamente.

Durante la infancia, los procesos fundamentales establecen los cimientos para el desarrollo de

habilidades avanzadas como el razonamiento simbólico y la utilización del lenguaje. Durante la adultez, el

ejercicio de competencias superiores puede potenciar procesos fundamentales, evidenciando la

flexibilidad del cerebro humano y su habilidad para progresar constantemente a lo largo de la vida

(UNAD, s.f.).

Aplicaciones en la vida cotidiana y en la educación.

La importancia de estos procedimientos se manifiesta en su influencia en la vida cotidiana. Desde

recordar un listado de tareas hasta solucionar problemas complicados en el trabajo, los procesos

fundamentales y avanzados se encuentran en una interacción continua. En el sector educativo, su

evolución es crucial para fomentar un aprendizaje relevante. Al elaborar tácticas que potencien la
concentración y el pensamiento crítico, los profesores pueden asegurar una educación completa que

capacite a los alumnos para los desafíos del mundo contemporáneo (Díaz-Barriga & Hernández, 2010).

Conclusión.

En conclusión, los procesos psicológicos fundamentales y avanzados son cruciales para el

correcto funcionamiento del ser humano. Su entendimiento y consolidación no solo favorecen el

bienestar personal, sino también el avance social y cultural.

La importancia de los procesos psicológicos elementales y avanzados reside en su interrelación

para construir un sistema cognitivo completo. Aunque los elementos básicos aseguran una vinculación

eficaz con el ambiente, los elementos superiores promueven el desarrollo de competencias que van más

allá de lo cotidiano, como la creatividad y el razonamiento abstracto. Es fundamental entender y

robustecer estos procesos para fomentar el aprendizaje, la adaptación social y el desarrollo personal en

diversas fases del crecimiento humano.

Referencias bibliográficas.

• Redalyc. (2011). Procesos psicológicos vinculados al aprendizaje y su relación con el

desarrollo personal-social en la infancia. Recuperado de https://www.redalyc.org

• UNAD. (s.f.). Introducción a los procesos psicológicos básicos y complejos. Recuperado de

https://repository.unad.edu.co

• Vygotsky, L. S. (1934). El desarrollo de los procesos psicológicos superiores. Recuperado

de https://archive.org

• Vygotsky, L. S. (1934). El desarrollo de los procesos psicológicos superiores. Recuperado

de https://archive.org