Qué es la conservación del medio ambiente
Qué es la conservación del medio ambiente
Qué es la conservación del medio ambiente
La conservación del medio ambiente es producto de razones de diversa índole, como son:
La defensa medioambiental es clave en el mundo industrial que inauguró el siglo XXI, ya que
constituye uno de los pocos frenos a la ambición económica del ser humano y a su deseo de
transformación y comercialización de las materias primas, lo cual suele conllevar consecuencias
nefastas para las otras formas de vida, cuando no para el ser humano mismo.
Epidemias, catástrofes climáticas, extinciones, agotamiento de recursos y un largo etcétera son
las consecuencias de una política industrial irresponsable, que eventualmente se le devuelve al
ser humano como un búmeran.
La educación ambiental para niños debe comenzar en la escuela. El destino del planeta está en
sus manos y es importante que desde pequeños aprendan a racionalizar los recursos y a aportar
su granito de arena en la lucha contra el cambio climático. En este difícil examen se juegan un
mundo mejor, más sostenible y habitable.
Es importante que los niños, desde pequeños, adquieran hábitos de respeto y amor por el medio
ambiente.
La educación ambiental para niños pretende que estos hagan del cuidado de la naturaleza un
estilo de vida, en lugar de limitarse a estudiarla. Esta disciplina busca que los menores
desarrollen un pensamiento ecológico firme y potente, y lo utilicen para enfrentarse a los
actuales retos medioambientales desde la participación y el compromiso.
La educación ambiental tiene, asimismo, otros efectos positivos para los más jóvenes. La
Universidad de Stanford analizó en 2017 cómo beneficia esta asignatura a los escolares desde la
etapa infantil al bachillerato. Después de revisar más de un centenar de estudios científicos
publicados entre 1994 y 2013 por otras instituciones sobre este tema, concluyó que el 83 % de
los escolares mejoró su comportamiento ecológico y que el 98 % amplió su conocimiento en
otras materias como matemáticas y ciencias.
Métodos de enseñanza ambiental para niños
Muchas de estas actividades se pueden realizar en el patio del centro o en cualquier parque de
la ciudad. En la calle es posible aprender de las plantas, los árboles, los ríos, los pájaros o los
insectos, pero también de problemas medioambientales como la contaminación, la emisión de
gases, el consumo energético, el reciclaje, el aprovechamiento del agua, etc.
Según la Unesco, los cuatro objetivos de la educación ambiental para niños son:
Concienciarlos y sensibilizarlos ante los problemas medioambientales.
Desarrollar en ellos la capacidad para aprender acerca del medio que les rodea.
Educar a las nuevas generaciones es responsabilidad de todos, no solo de los padres. Los niños
de hoy serán los gobernantes y líderes mundiales del mañana, y tendrán que hacer frente a
grandes desafíos —como el calentamiento global o el estrés hídrico— y tomar decisiones
cruciales para la humanidad. ¡El futuro está en sus manos!
Cuando se habla de la ecología se habla del estudio que relaciona los seres vivos con su
entorno, con el medio ambiente, analizando cuál es la influencia que tienen unos sobre otros, la
interacción de los seres vivos con su medio. Es decir, es la biología de los ecosistemas.
Sin embargo, cuando se habla del cuidado del medio ambiente se está hablando de la
protección del planeta adquiriendo hábitos o costumbres sencillas que permitan reducir la
contaminación, ahorrar energía y conservar los diferentes recursos naturales.
Como es lógico, cuidar del medio ambiente no implica que, en la actualidad, los seres humanos
deban abandonar sus actividades diarias ni renunciar a su vida. Solamente hay que
cuidar pequeños hábitos que pueden marcar una gran diferencia.
El cuidado del medio ambiente no ha de ser únicamente una preocupación de las empresas,
también son los hogares los que han de poner su granito de arena y ponerse cuanto antes
manos a la obra para colaborar en el cuidado de nuestro entorno.
Con unos pequeños cambios puede lograrse mucho. Algunos propósitos ecológicos que ayudan
a cuidar del medio ambiente que pueden marcar la diferencia son:
Es obvio que durante los meses de calor apetece disfrutar del aire acondicionado, pero es
conveniente encenderlo solamente cuando resulte completamente necesario, de lo contrario
supondrá un importante gasto de energía y para tu bolsillo. Los climatizadores consumen mucha
energía, lo que conlleva un empeoramiento del calentamiento global por las altas emisiones de
CO2 a la atmósfera. Aunque su uso esté generalizado, no es bueno para la salud, ¿cuántos de
ustedes no se han cogido un buen resfriado en verano por los aires acondicionados? Hay que
pensar en construir edificios sostenibles, con un diseño bioclimático, que conserven calor en
invierno y el fresco en verano, mediante técnicas como los tejados ajardinados, jardines
verticales, etc
El plástico es uno de los desechos que más tarda en descomponerse, así como uno de
los productos más contaminantes que existen. Comienza a sustituir el uso de bolsas de plástico
por bolsas de tela. Evita comprar fruta y verdura empaquetada en bandejas de plástico y compra
fruta a granel. Apuesta por las botellas de vidrio en lugar de las de plástico, ya que existen más
posibilidades de reutilizarlas.
La creación de espacios verdes dentro de la vivienda ayuda a mejorar tanto la humedad como la
temperatura, de modo que apuesta por instalar un pequeño jardín en su vivienda, por pequeño
que resulte.