Tema 2B. El Sistema Cardiopulmonar-Respiratorio
Tema 2B. El Sistema Cardiopulmonar-Respiratorio
Tema 2B. El Sistema Cardiopulmonar-Respiratorio
EL SISTEMA
CARDIOPULMONAR:
APARATO
RESPIRATORIO
1. EL APARATO RESPIRATORIO https://www.youtube.com/watch?v=CEmcS_FPu2k La respiración.
https://www.youtube.com/watch?v=_34K0TbTrRY Erase una vez la vida
El aparato respiratorio tiene la función
de intercambiar gases entre la atmósfera y la sangre, y está estrechamente relacionado con el circulatorio, que se encarga
de transportar dichos gases.
El aparato respiratorio humano está constituido por:
- Las vías respiratorias: son simples conductos o cavidades por las que pasa el aire. Estas vías son las fosas nasales, la
faringe, la laringe, la tráquea, los bronquios y los bronquiolos.
- Los pulmones: son los órganos en los que se produce el intercambio gaseoso entre el aire y la sangre. Los pulmones
son dos órganos esponjosos que ocupan la mayor parte de la cavidad torácica. El pulmón derecho es mayor que el izquierdo,
ya que éste presenta una depresión en la que se aloja el corazón. Dentro de los pulmones hay millones de pequeñas
cavidades denominadas alvéolos pulmonares.
Una serie de procesos se relacionan con la función respiratoria; en ellos no sólo interviene el aparato respiratorio, sino que
también participan el aparato circulatorio y todos los tejidos, donde se efectúa la respiración celular. Dichos procesos son:
• Ventilación: flujo de aire entre el exterior y los pulmones.
• Hematosis o respiración externa: difusión de oxígeno y dióxido de
carbono entre los alvéolos pulmonares y la sangre.
• Transporte de gases en sangre: traslado de oxígeno desde los
pulmones hasta las células y de dióxido de carbono desde las células hasta los pulmones.
• Respiración interna o tisular: difusión de oxígeno y de dióxido de
carbono entre la sangre y los tejidos.
• Respiración celular.
El sistema respiratorio comprende los siguientes órganos: fosas nasales, faringe, laringe, tráquea, bronquios y pulmones.
Los cuatro primeros forman la vía respiratoria, cuya función es la conducción del aire. Los pulmones son los órganos donde
se cumple el intercambio gaseoso.
En primer lugar describiremos los órganos respiratorios y luego analizaremos cada uno de los procesos mencionados.
https://www.youtube.com/watch?v=wNAiyhcDWBI
1. ANATOMÍA DEL APARATO RESPIRATORIO
A) FOSAS NASALES
Son dos amplias cavidades situadas sobre la cavidad bucal. Se abren al exterior por los orificios o ventanas nasales y
comunican con la faringe a través de dos orificios denominados coanas. El suelo está constituido por el paladar, y el techo
por los huesos nasales, el frontal y el etmoides. Las dos fosas nasales están separadas entre sí por el tabique nasal, que está
constituido por el etmoides, el vómer y el cartílago nasal. De las paredes laterales salen tres repliegues laminares
denominados cornetes.
Las fosas nasales están en comunicación con los senos paranasales (cavidades llenas de aire que proporcionan moco y
sirven de cámara de resonancia en fonación) y con las glándulas lacrimales a través de los conductos lacrimales.
Las ventanas de las fosas nasales están provistas de unos pelos, que dificultan la entrada de objetos voluminosos
suspendidos en el aire, en particular de insectos. El epitelio interno es ciliado y posee glándulas secretoras de mucus, que
captan el polvo y humedecen el aire. Gracias al movimiento de los cilios, el mucus es dirigido hacia la faringe. La mucosa que
recubre los cornetes está muy vascularizada, se denomina pituitaria roja y su función es humidificar y elevar la
temperatura del aire.
En la parte superior de las fosas nasales está la pituitaria amarilla, que contiene las terminaciones de los nervios sensitivos
olfatorios.
Cuando el aire pasa por las fosas nasales, el aire es modificado de tres formas:
1) el aire se humidifica casi por completo;
2) el aire se filtra.
3) el aire se calienta, por el contacto con la extensa superficie que ofrecen los
cornetes y el tabique;
En la nariz del ser humano hay 400 tipos de receptores olfativos diferentes que se
organizan en función de una escala que coloca los más agradables en un extremo
del epitelio y los más fétidos en el polo opuesto. La distribución de los receptores
en el epitelio olfatorio no es al azar. Si olemos una rosa, por ejemplo, a pesar de
que esta flor emite hasta 172 moléculas olorosas distintas, será un área concreta
de nuestro epitelio nasal la que reaccionará específicamente a sus aromas
dominantes y nos permitirá percibirlos. Esto revela que hay algo en el epitelio
que se ajusta para recoger cierta información en determinadas zonas.
http://www.eltanquematematico.es/lossentidos/olfato/olfato.swf
https://campus.usal.es/~histologia/practica/5-respiratorio-digestivo/lamina104/olfato.html
B) FARINGE
Conducto común al aparato digestivo y al respiratorio. Comunica cavidad nasal y bucal con esófago y laringe. Mide de 11 a
14 cm. La mucosa presenta abundantes glándulas. Comunica exactamente con:
- Las fosas nasales, a través de las coanas.
- La cavidad bucal, a través del istmo de las fauces.
- La laringe.
- El oído medio, a través de las trompas de Eustaquio (comunican la faringe con el oído medio y equilibran la presión del
aire a ambos lados del tímpano).
- el esófago.
Tiene una válvula para regular el tránsito: epiglotis que controla el paso del aire de tráquea a cavidad nasal o bucal y la
deglución: paso del bolo alimentario al esófago.
En sus proximidades se encuentran ganglios linfáticos, las anginas, que sirven para proteger de infecciones en boca, cavidad
nasal, esófago y tráquea.
La faringe puede cerrarse por desplazamiento del paladar blando en reflejos como salivación, succión y producción de
determinados sonidos.
C) LARINGE https://www.youtube.com/watch?v=TXyerK_u6Jc https://www.youtube.com/watch?v=IdDFkkxUTJ0
Es un conducto de unos 4 cm, sujeto por medio de ligamentos al hueso hioides (hueso con forma de herradura situado en la
base de la lengua). Está formada por nueve piezas cartilaginosas unidas por músculos y ligamentos. Los cartílagos
principales son el tiroides, el cricoides y la epiglotis.
El cartílago tiroides está formado por dos placas verticales que se unen en ángulo en la parte delantera del cuello. La unión
de estas placas forma la llamada nuez o bocado de Adán, que es más prominente en los hombres que en las mujeres. Las
porciones posteriores del cartílago tiroides abrazan el cartílago circular cricoides, que mantiene la laringe siempre abierta.
La epiglotis es un cartílago ancho, con forma de lengüeta, que se abate durante la deglución, cerrando así la glotis e
impidiendo que los alimentos se introduzcan en las vías respiratorias.
En el interior de la laringe se encuentran dos pares de repliegues de naturaleza muscular ligamentosa: las bandas
ventriculares (o cuerdas vocales superiores o falsas) y las cuerdas vocales (cuerdas vocales inferiores o verdaderas,
formadas en gran parte por fibras elásticas), separados por un ensanchamiento denominado ventrículo laríngeo o de
Morgagni. El espacio que queda entre las cuerdas vocales se denomina glotis y da paso a la tráquea.
La laringe es el órgano fonador. En la respiración normal, las cuerdas vocales están abiertas para permitir el paso del aire con
facilidad. Cuando se tensan y se juntan, el aire espirado provoca una vibración que da lugar a la emisión de sonido.
El tono de la voz es tanto más agudo cuanto más estrecha es la hendidura de la glotis; los músculos de la laringe pueden
modificar la tensión de las cuerdas vocales para emitir sonidos de diferentes frecuencias.
La intensidad es tanto mayor cuanto más aire es expulsado.
El timbre de la voz depende de la caja de resonancia que forman la laringe, más estrecha en las mujeres, la cavidad bucal y
la cavidad nasal, principalmente.
D) TRÁQUEA
Cilindro constantemente abierto que comunica la laringe con los bronquios que van a los pulmones.
En una persona adulta mide entre 10 y 11 cm de longitud por 2 a 2,5 cm de diámetro.
A lo largo del tubo se encuentran veinte anillos de cartílago en forma de herradura; con la parte anterior de cartílago, y la
parte posterior de músculo liso. Estos anillos mantienen constantemente abierta la tráquea tanto en inspiraciones como en
espiraciones.
La tráquea es extensible para permitir los movimientos de la faringe. También puede variar su diámetro por la musculatura
lisa
La pared de la tráquea tiene abundantes glándulas mucosas y su epitelio es ciliado.
La tráquea se bifurca en un ángulo denominado “carina”, dando origen a los bronquios fuente. La tráquea se divide al llegar
a los pulmones, quedando el lado izquierdo con una luz menor que el derecho: el izquierdo mide 1,5 cm de diámetro y el
derecho 2 cm
E) BRONQUIOS Y BRONQUIOLOS
Los bronquios son la continuación de la parte conductora del aire que
van desde la tráquea hasta los bronquiolos y finalmente a los alveolos.
Es por este motivo que, en primer lugar se ramifica en dos bronquios
principales, uno derecho (que se introduce en el pulmón derecho de
forma bastante vertical) y otro izquierdo (con una penetración en el
pulmón izquierdo más horizontal, ya que está el corazón en este lado y
por tanto, no puede descender tanto).
Los bronquios principales son histológicamente muy similares a la
tráquea. A continuación aparecen los bronquios lobares primarios (3 en
el pulmón derecho y 2 en el izquierdo). Estos bronquios ya no tienen un
cartílago continuo aunque las placas forman un anillo. A continuación
vienen los bronquios secundarios y los terciarios y finalmente los
respiratorios los cuales acaban en los sacos alveolares, lugar donde se
realiza la respiración o intercambio gaseoso entre la sangre y el aire
inspirado.
Los bronquiolos que dan acceso a los alveolos son decenas de millones y
en ellos comienza a realizarse algo de intercambio gaseoso. http://www.youtube.com/watch?v=aXuaQZkdK_c
Broncoscopia.
F) PULMONES http://recursostic.educacion.es/secundaria/edad/3esobiologia/3quincena8/imagenes/pulmones.swf
Los pulmones son dos órganos muy elásticos y esponjosos, de color rosado y de forma cónica, alojados en la caja torácica
(formada por las costillas, el esternón y la columna vertebral). El pulmón derecho tiene tres lóbulos; el izquierdo sólo tiene
dos, con una concavidad hacia la parte interna, donde se aloja el corazón. Cada lóbulo pulmonar se divide en cientos de
lobulillos.
Los bronquios penetran en los pulmones junto con las arterias y las venas pulmonares por una zona denominada hilio. El
bronquio derecho se divide en tres ramas (bronquios secundarios) y el bronquio izquierdo en dos (una para cada lóbulo).
Todas ellas se ramifican apareciendo una serie de finos conductos denominados bronquiolos. Cada bronquiolo penetra en
uno de los lobulillos y allí se vuelve a ramificar, formando los bronquiolos respiratorios que se subdividen en varios
conductos alveolares que terminan en un racimo de pequeñas vesículas denominadas alvéolos pulmonares.
Los pulmones están formados por el conjunto de bronquiolos, alvéolos y capilares, rodeados por tejido conjuntivo. Su pared
inferior es cóncava y se adapta a la convexidad del diafragma.
Los pulmones están recubiertos por una membrana doble: las pleuras. La capa externa de las pleuras está unida a la cavidad
torácica (pleura parietal) y la interna se encuentra adherida a los pulmones (pleura visceral). El espacio comprendido entre
ambas pleuras se denomina cavidad pleural y contiene una pequeña cantidad de líquido lubricante (líquido pleural), que
favorece el movimiento de los pulmones durante la respiración.
El espacio que hay entre los dos pulmones se denomina mediastino, y en él se encuentran el esófago,
el corazón y las arterias y venas que entran y salen de él.
Las paredes de los alvéolos están formadas por un delgado
epitelio simple plano y están rodeadas por una red de
capilares sanguíneos, de modo que los gases pueden difundir
con facilidad entre ambos: sólo dos capas de células separan
el aire del interior de los alvéolos de la sangre: el epitelio de
la pared alveolar y el endotelio de los capilares.
Cada pulmón tiene unos 150 millones de alvéolos, lo que
proporciona una enorme superficie para el intercambio de
gases; si se extendieran los alvéolos de los dos pulmones de
un adulto ocuparían una superficie de más de 150 m2. A
través de dicha superficie se produce el intercambio gaseoso
entre aproximadamente medio litro de sangre y unos cinco litros de aire.
http://www.youtube.com/watch?v=ZhjCcG71eS8 Los pulmones
3. VENTILACIÓN PULMONAR
La ventilación es la renovación del aire pulmonar. La ventilación se logra por medio de una mecánica respiratoria, un
conjunto de movimientos que producen la entrada del aire a los pulmones – lainspiración- y la salida del aire de los mismos
– la espiración- a través de la vía respiratoria.
El principal músculo respiratorio es el diafragma. La inspiración es causada por la contracción del diafragma.
Cuando el diafragma se contrae, se hace más plano y se desplaza hacia abajo. El descenso del diafragma aumenta el
diámetro longitudinal del tórax. Normalmente, entre la pared torácica y los pulmones existe tan solo una delgada capa de
líquido. Los pulmones se resisten a ser separados de la pared, de la misma manera que dos piezas de vidrio mojadas resisten
la separación. Por lo tanto, cuando se distiende la pared torácica, los pulmones lo hacen junto a ésta. Este fenómeno se
denomina “solidaridad tóraco-pulmonar”.
Cuando aumenta el volumen del tórax y solidariamente el volumen pulmonar, la presión intrapulmonar desciende,
haciéndose menor que la presión atmosférica. Ya que el aire se mueve desde la zona de mayor a la de menor presión, esta
diferencia de presión hace que el aire ingrese a la vía respiratoria, causando el movimiento de inspiración.
La espiración normal es un fenómeno pasivo, que ocurre cuando el diafragma se relaja. La relajación del diafragma provoca
su ascenso, con la consecuente disminución de los volúmenes torácico y pulmonar. Así, la presión dentro del tórax aumenta,
hasta que supera a la presión exterior. Como resultado, el aire abandona los pulmones y es expulsado al exterior.
En la respiración tranquila normal, el trabajo del diafragma alargando y acortando la cavidad torácica es suficiente para
producir la inspiración y la espiración. http://www.argosymedical.com/Muscular/samples/animations/Respiration/index.htm
En la respiración enérgica, sin embargo, se requiere la participación de otros músculos respiratorios accesorios que elevan
y bajan las costillas, aumentando o disminuyendo el diámetro
anteroposterior del tórax.
Los músculos más importantes que elevan las costillas son los
intercostales externos. También contribuyen accesoriamente los escalenos,
elevando las dos primeras costillas, el serrato anterior, levantando las
costillas, y el esternocleidomastoideo, que eleva el esternón. Estos últimos
cobran mayor importancia en situaciones de dificultad respiratoria.
Los músculos que hacen descender las costillas durante la espiración son
los intercostales internos. Los músculos rectos del abdomen tiran las
costillas hacia abajo y junto a otros músculos abdominales, comprimen el
contenido abdominal hacia arriba, contra el diafragma, colaborando en la
espiración forzada.
Los pulmones realizan 12 movimientos inspiratorios y espiratorios en el término de
un minuto. Esta cifra es la frecuencia respiratoria normal o eupnea. Se
denomina taquipnea al aumento de la frecuencia respiratoria y bradipnea a la
disminución de la misma. El volumen de aire que se moviliza en la ventilación es
variable y depende de los movimientos realizados y de la elasticidad pulmonar.
La suma de distintos volúmenes permite obtener las capacidades pulmonares.
• Volumen corriente: es el volumen de aire que se inspira y espira en una
respiración normal; es de 500 ml.
• Volumen de reserva inspiratoria: es el volumen de aire que ingresa al pulmón en
una inspiración forzada que sigue a una inspiración normal; corresponde a 3.000 ml.
• Volumen de reserva espiratoria: es el volumen que se puede expulsar en una
espiración forzada, después de una espiración normal. Son unos 1.100 ml.
• Volumen residual: hay unos 1200 ml que siempre permanecen en los pulmones y no pueden eliminarse ni aun en
espiración forzada. A ese volumen se lo llama volumen residual.
• Capacidad vital: es la mayor cantidad de aire que puede ser espirada después de un esfuerzo espiratorio máximo. Es la
suma del volumen corriente y los volúmenes de reserva inspiratoria y espiratoria. Equivale a 4.600 ml.
• Capacidad pulmonar total: todos los volúmenes suman una capacidad pulmonar total de 5.800 ml.
Los volúmenes pulmonares son aproximadamente un 20% menores en la mujer que en el varón.
Si se multiplica la frecuencia por el volumen corriente, se obtiene la cantidad de aire que los pulmones renuevan en un
minuto, la que equivale a 6 litros.
4. HEMATOSIS (RESPIRACIÓN EXTERNA)
La hematosis es el intercambio de oxígeno y de dióxido de carbono que se realiza entre el aire que llega a los alvéolos y
la sangre que circula por los capilares alveolares. Este intercambio se produce a través de la membrana respiratoria,
formada por las delgadas paredes de los alvéolos (un epitelio plano simple), el endotelio capilar y sus respectivas
membranas basales, que pueden estar fusionadas.
La hematosis consiste en un movimiento neto de oxígeno desde el aire alveolar hacia la sangre, y de dióxido de carbono
desde la sangre hacia el aire alveolar. Dichos movimientos corresponden a un fenómeno de difusión.
La difusión de los gases a través de la membrana respiratoria depende de los siguientes factores:
1. Presión parcial del gas. Las moléculas de los gases que forman el aire se hallan en constante movimiento. El impacto
causado por las moléculas sobre la superficie de la vía respiratoria y de los alvéolos es la presión del gas. La presión del
aire depende de la concentración total de partículas de gas.
La presión total del aire a nivel del mar es de 760 mm Hg o torr (=1 atmósfera). Sin embargo, como el aire es una
mezcla de gases, cada gas contribuye a la presión total en proporción directa a su concentración. La presión que ejerce
cada gas en particular es la presión parcial de ese gas. Por ejemplo, la presión parcial del oxígeno en el aire
corresponde a unos 160 mm Hg, es decir al 20,84% de la presión total, ya que éste es el porcentaje de oxígeno en el
aire. Los gases disueltos en los líquidos corporales también ejercen sus propias presiones parciales al encontrarse con
una superficie, como la membrana celular.
La difusión de los gases es directamente proporcional a su diferencia de presión parcial. El gradiente de presión
parcial de cada gas entre el aire alveolar y la sangre es el factor determinante de la difusión.
La sangre llega a los capilares pulmonares a través de la arteria pulmonar. Ésta transporta sangre carboxigenada
proveniente de los tejidos (es la única arteria que transporta sangre “venosa”). La presión parcial de CO2 en el extremo
arterial de los capilares es de 46 mm Hg, mayor que la del aire alveolar, de 40 mm Hg. El gradiente de presión parcial
impulsa la salida del CO2 hacia el alvéolo. Cuando la sangre sale de la red capilar, en el extremo venoso, la presión
parcial de CO2 es de 40 mm de Hg.
Por su parte, el O2 llega a los capilares alveolares con una presión de 40 mm Hg. Como su presión parcial en el aire
alveolar es de 100 mm Hg, este gas difunde hacia la sangre. Así, al llegar al extremo venoso de la red capilar alveolar,
la presión parcial de O2 alcanza unos 95 mm de Hg: la sangre se ha oxigenado.
Las venas pulmonares, que transportan la sangre oxigenada hacia el corazón izquierdo, son las únicas venas con sangre
“arterial”.
Composición del aire
atmosférico
Porcentaje
Gas
del total
Nitrógeno (N2) 78,62%
Oxígeno (O2) 20,84%
Dióxido de
0,04%
carbono (CO2)
Vapor de agua 0,50%
El aire alveolar no tiene las mismas concentraciones de gases que el aire atmosférico. Existen varias razones para
estas diferencias. 1) El aire alveolar sólo es sustituido parcialmente en cada ventilación. 2) Se está absorbiendo
oxígeno continuamente del aire alveolar. 3) El dióxido de carbono difunde constantemente desde la sangre. 4) El aire
alveolar, a diferencia del atmosférico, está saturado de vapor de agua, ya que se humidifica a su paso por la vía
respiratoria.
Con respecto al N2, su presión parcial prácticamente no varía. Esto es debido a la ausencia de un gradiente, ya que el
N2 no es consumido ni generado en las células.
2. Solubilidad del gas. Depende de la afinidad entre el gas y el solvente. Los gases de importancia respiratoria son muy
solubles en las membranas, pues son afines a los lípidos. La mayor limitación que encuentra el movimiento de los gases en
los tejidos no se debe a su solubilidad en las membranas, sino a su solubilidad en el agua de los líquidos corporales. El CO 2
es alrededor de 20 veces más soluble que el O2.
3. Peso molecular. La difusión es inversamente proporcional al peso molecular del gas.
4. Espesor de la membrana. Cuanto mayor sea el espesor de la membrana, mayor será la distancia a recorrer, y más lenta la
difusión. La membrana respiratoria es muy delgada. Sin embargo, en algunas patologías (como fibrosis o edema pulmonar),
este espacio puede estar engrosado, dificultando la hematosis.
5. Área de la superficie de intercambio. La difusión es directamente proporcional al área de intercambio. El área superficial
de la membrana respiratoria es muy extensa, como ya se mencionara al describir la estructura del pulmón.
https://www.youtube.com/watch?v=nTyWFFk2TW0
5. TRANSPORTE DE GASES EN SANGRE E INTERCAMBIO CON LOS TEJIDOS
Una vez que el oxígeno ha difundido desde los alvéolos a la sangre, es transportado a los capilares tisulares, donde se libera
para ser utilizado por las células.
El oxígeno es transportado en la sangre de dos formas: disuelto en el plasma y unido a la hemoglobina.
La solubilidad del oxígeno en el plasma es muy baja, por lo que esta forma de transporte resulta insuficiente para hacer
frente a la demanda de los tejidos. Tan sólo un 3% del total de oxígeno presente en la sangre es transportado en disolución.
El 97% del oxígeno que ingresa a la sangre es captado rápidamente por la hemoglobina (Hb) en el interior de los glóbulos
rojos. La presencia de la hemoglobina permite a la sangre transportar entre 30 y 100 veces más oxígeno del que podría ser
transportado simplemente disuelto en el agua de la sangre.
La molécula de Hb posee 4 grupos hemo; en cada uno de ellos hay un átomo de Transporte de O2 en sangre
hierro capaz de unirse con una molécula de O2, formando la oxihemoglobina. En disolución en el plasma 3%
Para actuar como un transportador eficaz, la hemoglobina no solo debe poder
Como oxihemoglobina 97%
unirse al oxígeno, también debe poder cederlo allí donde sea necesario.
La unión entre el oxígeno y la hemoglobina es una unión reversible; así, el oxígeno se combina con la hemoglobina en los
capilares pulmonares y se disocia de ésta en los capilares sistémicos. De esta forma la oxihemoglobina transporta el oxígeno
desde el pulmón hasta los tejidos.
La formación y la disociación de la oxihemoglobina dependen de la presión
parcial de oxígeno. A altas presiones parciales, como las del pulmón, un alto
porcentaje de la hemoglobina está combinado con oxígeno. En cambio, a
bajas presiones, como las de los tejidos, el porcentaje de hemoglobina que
está ligada con oxígeno es mucho menor.
Se denomina porcentaje de saturación de la hemoglobina al porcentaje de la
misma que se encuentra combinada con oxígeno, como oxihemoglobina.
El siguiente gráfico representa el porcentaje de hemoglobina ligada con oxígeno a diferentes presiones parciales del gas. Es
la curva de saturación de la hemoglobina, leída de izquierda a derecha, o bien de disociación de la oxihemoglobina, si lee de
derecha a izquierda. Es una curva de tipo sigmoidea. El gráfico permite observar que en los extremos de la curva, tanto a
altas como a bajas presiones de oxígeno, los cambios de presión no se traducen en grandes cambios en los porcentajes de
saturación. Por ejemplo, a una presión de oxígeno de 100 mm Hg, como la de los pulmones, el 97 % de la hemoglobina se
encuentra saturada. La curva es casi horizontal entre los 100 mm Hg y los 60 mm Hg de presión parcial; a este último valor,
el porcentaje de saturación aún es del 90%. Significa que los cambios en la presión parcial de oxígeno a nivel pulmonar
influyen poco en la saturación.
En el otro extremo de la curva, a presiones menores de 10 mm Hg, los cambios de presión también tienen poca influencia
en la saturación.
Pero a valores de presión parcial comprendidos entre 60 y 10 mm Hg, la curva se hace casi vertical. El descenso abrupto de
la curva en este tramo indica que pequeñas disminuciones de la presión parcial de oxígeno provocan una acelerada
disociación de la oxihemoglobina. Esto significa que cuando la sangre arterial pasa por los tejidos, cuya presión parcial de
oxígeno está comprendida en ese rango, gran parte de la oxihemoglobina se disocia, permitiendo la difusión de oxígeno
hacia las células.
A una presión parcial de 40 mm Hg, la cual es la de un tejido en actividad normal, el porcentaje de saturación es del 75%, o
sea que un 25% de la oxihemoglobina está disociada. A una presión de 20 mm Hg, como la de un tejido en intensa actividad,
con alto consumo de oxígeno, el porcentaje de saturación es del 25%, vale decir que el 75% de la hemoglobina ha cedido el
oxigeno que llevaba unido.
En otras palabras: la hemoglobina tiende a captar el oxígeno en donde éste abunda (en los pulmones) y a liberarlo en donde
éste escasea (en los tejidos).
La forma sigmoidea de la curva de disociación de la hemoglobina se explica por la interacción entre las subunidades de
globina que forman la molécula. La hemoglobina existe en dos conformaciones: tensa y relajada. La forma tensa es poco
afín al oxígeno, mientras que la forma relajada tiene mayor afinidad. Cuando una molécula de oxígeno se une a un grupo
hemo, la estructura de la globina cambia de la forma tensa a la relajada. Ese cambio se transmite a las otras subunidades,
que se hacen más afines al oxígeno. De esta forma, el ingreso de oxígeno a una subunidad facilita la entrada del oxígeno a
las siguientes.
Inversamente, la disociación de una molécula de oxígeno de una subunidad la devuelve a su forma tensa. Este cambio de
conformación influye en las demás subunidades, que también adquieren la forma tensa, disminuyendo su afinidad por el
oxígeno. Así, la liberación de oxígeno de una subunidad favorece la liberación en las subunidades restantes.
La interacción entre las subunidades de globina, llamada efecto cooperativo, es la causante de la parte abrupta de la curva
de disociación.
El efecto cooperativo entre las subunidades de globina y su consecuencia, la variación de la afinidad de la hemoglobina por
el oxígeno en función de las presiones parciales de éste, hacen de la hemoglobina un excelente transportador.
- La respiración tisular o interna es el intercambio de gases entre la sangre y las células. Dado que los tejidos consumen el
O2 en la respiración celular, poseen siempre una baja presión parcial de este gas. En conclusión, cuando la sangre arterial
pasa a través de los tejidos por los capilares sistémicos, la oxihemoglobina se disocia y el oxígeno difunde hacia las
células. Al salir la sangre por el sistema venoso, la presión de oxígeno en la misma es de 40 mm Hg.
El dióxido de carbono difunde desde los tejidos hacia los capilares sistémicos, siguiendo su gradiente de presión.
A consecuencia de estos intercambios, la sangre proveniente del sistema arterial de la aorta, que ingresa a la red capilar de
los tejidos como sangre oxigenada, sale de ella convertida en sangre carboxigenada. Ésta se dirige de retorno al corazón
derecho por intermedio de las venas cavas, completando así el circuito mayor.
CATABOLISMO AEROBIO
La reacción global de la respiración celular puede escribirse:
C6H1206 + 6 02 ------------> 6 CO2 + 6 H20 + Energía
dióxido de
glucosa oxígeno agua
carbono
Esta degradación o catabolismo es un complicado proceso químico que realizan las células mediante un gran número de
reacciones encadenadas, la mayoría de las cuales se llevan a cabo en las mitocondrias. La energía contenida en las
moléculas complejas que se degradan es liberada en cantidades discretas que son aprovechadas para producir ATP.
De los glúcidos y las grasas quedan, como productos resultantes, dióxido de carbono y agua. En el caso de las proteínas,
también se produce urea.
FERMENTACIÓN LÁCTICA (Falta de oxígeno suficiente en los tejidos)
Cuando se realizan ejercicios muy intensos, el organismo no llega a proveer a las células musculares del oxígeno suficiente
para la respiración aeróbica. Ante esta imposibilidad, el tejido muscular obtiene energía de la glucólisis, con la consecuente
producción de lactato. La acumulación de lactato en el tejido muscular produce calambres musculares. También puede
ocasionar una acidosis láctica leve, en la que el pH sanguíneo está por debajo de los valores normales.
Situaciones más extremas, como infarto de miocardio o hemorragias severas, producen un colapso circulatorio e hipoxia
tisular. En esos casos hay acidosis láctica grave.
El lactato presente en la circulación es captado por el hígado, donde se utiliza para la síntesis de glucosa(ciclo de Cori).
7. REGULACIÓN DE LA RESPIRACIÓN
Los músculos respiratorios se contraen o relajan en el momento adecuado, como
resultado de impulsos nerviosos procedentes del "centro respiratorio"
localizado en el bulbo raquídeo.
La concentración de CO2 actúa directamente sobre el centro respiratorio o sobre
receptores sensibles a este gas situados en la aorta y las arterias carótidas.
Cuando la presión parcial de CO2 supera los valores normales, se estimulan los
quimiorreceptores y la velocidad de la respiración aumenta, tendiendo a eliminar
el exceso de CO2; un aumento de sólo el 0,3% en el nivel de CO2 da lugar a que
el volumen de aire inspirado y espirado se duplique.
El centro respiratorio tiene, también, conexiones con la corteza cerebral, por lo
que podemos alterar voluntariamente el ritmo respiratorio, o dejar de respirar
unos instantes. Este control voluntario impide la entrada, en determinadas
circunstancias, de agua o de gases irritantes en los pulmones.
Variación de la pO2 con la altitud
0 760 159
6.000 349 73
Efectos de la altitud sobre el organismo
9.000 226 47
Conforme aumenta la altitud, se produce un descenso en la presión atmosférica total y, por lo tanto, en la presión parcial del oxígeno. El resultado es que el
aire que se respira está empobrecido en oxígeno, tanto más cuanto más nos elevamos.
La reducción de la presión de oxígeno comienza a manifestar sus efectos a unos 3.000 m de altitud, produciendo un estado de somnolencia, fatiga muscular y
dolor de cabeza. A los 6.000m, los síntomas se acentúan y pueden aparecer espasmos y convulsiones, y a los 7.000 m las personas no aclimatadas pueden
entrar en estado de coma. A este fenómeno se le conoce como mal de altura.
El organismo puede adaptarse progresivamente a las bajas concentraciones de oxígeno y aclimatarse a vivir en las grandes alturas. Los principales
mecanismos a través de los que esto se logra son: Aumento de la ventilación pulmonar, Incremento en la concentración de hemoglobina en la sangre.
Estos efectos comienzan a manifestarse a las dos o tres semanas y tardan varios meses en alcanzarse por completo. La adaptación progresiva a las grandes
altitudes se utiliza para acondicionar físicamente a los atletas, cuya preparación supone muchas jornadas de entrenamiento en lugares de elevada altitud.
En las personas nacidas en altitudes superiores a los 4.000 m, como en los Andes o en el Himalaya, el proceso de aclimatación comienza en la infancia y
produce, entre otros efectos, mayores dimensiones del tórax y del volumen del corazón, así como mayor número de glóbulos rojos en su sangre, que pueden
alcanzar los 8 millones por mm3.
En alturas superiores a los 8.000 m, la capacidad de trabajo está muy disminuida y se producen cambios en el metabolismo (pérdida de peso, debido al
aumento de la producción de hormona tiroidea, que incrementa la tasa de respiración celular), y en la función cerebral.
8. PRINCIPALES ENFERMEDADES DEL APARATO RESPIRATORIO
Infecciones microbianas http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/lungsandbreathing.html
Afectan a diferentes partes del sistema respiratorio causando inflamación: sinusitis, rinitis, faringitis, bronquitis, neumonías,
pleuritis, enfisema...
Infecciones virales: Resfriados y Catarros virales, Gripe,…
Infecciones bacterianas: Tuberculosis, Tos ferina, Resfriados, Faringitis y Catarros bacteriano
Procesos alérgicos
Nuestro sistema inmunitario reconoce como peligrosas a sustancias que en realidad no lo son y desencadena una serie de
mecanismos para repeler la agresión inexistente.
Los principales procesos alérgicos afectan al sistema respiratorio por ser una vía habitual de entrada de patógenos y estar
muy protegida por el sistema inmunitario
Rinitis alérgica: Inflamación de la cavidad nasal con abundante producción de mucosidad, estornudos, tos ...
Asma bronquial: Reducción de la luz de los bronquios
http://www.argosymedical.com/Muscular/samples/animations/Asthma/index.html
Enfermedades sistémicas
El mal funcionamiento de muchos otros órganos puede afectar al respiratorio
Apnea del sueño: Falta de ritmo respiratorio durante el sueño por diferentes causas
Neumotórax: Entrada de aire entre pleura y pulmón
Reflujo gástrico: Vuelta del contenido estomacal hacia el esófago que puede dañar la laringe, faringe e incluso árbol
bronquial por su contenido ácido.
Enfisema pulmonar
Degradación de los alveolos que se destruyen y se funden aumentando de tamaño y disminuyendo sus capacidad de
intercambio de gases.
Causado por tabaquismo, tóxicos, enfermedades fúngicas o bacterianas o exposición continua al polvo.
5.Realizar un pequeño informe en función del sexo de las personas, de la edad, si son fumadores o
no, si realizan ejercicio habitualmente, etc.