inflamación crónica de las vías aéreas en la que desempeñan un
papel destacado determinadas células y mediadores celulares
• Más de uno de los siguientes síntomas: sibilancias tos
seca, falta de aire, opresión o ruidos en el pecho, particularmente si: – Empeoran por la noche o de madrugada. – Ocurren en presencia o como respuesta a la exposición a desencadenantes – Son frecuentes o recurrentes o con carácter estacional. • Historia personal o familiar de enfermedades atópicas. • Presencia de sibilancias en la auscultación pulmonar. • Patrón obstructivo en la espirometría. • Mejoría de los síntomas como respuesta al tratamiento con broncodilatadores o corticoides inhalados. DIAGNOSTICO
• Más de uno de los siguientes síntomas: sibilancias tos seca, falta de
aire, opresión o ruidos en el pecho, particularmente si: – Empeoran por la noche o de madrugada. – Ocurren en presencia o como respuesta a la exposición a desencadenantes – Son frecuentes o recurrentes o con carácter estacional. • Historia personal o familiar de enfermedades atópicas. • Presencia de sibilancias en la auscultación pulmonar. • Patrón obstructivo en la espirometría. • Mejoría de los síntomas como respuesta al tratamiento con broncodilatadores o corticoides inhalados. MANEJO DE CUADRO ASMATICO SCORES DE SEVERIDAD neumonias La NAC es una infección aguda del parénquima pulmonar que afecta un paciente inmunocompetente expuesto a un microrganismo fuera del hospital FACTORES DE RIESGOS
Entre los factores de riesgo descritos1,6,7 se incluyen:
• Prematuridad y bajo peso (≤ 2,500 g). • Infecciones recientes del tracto respiratorio superior. • Exposición al humo del tabaco. • No recibir lactancia materna durante al menos los 4 primeros meses. • Malnutrición. • Asistencia a guardería. • Bajo nivel socioeconómico. • Antecedentes de sibilancias. • Antecedentes de otitis media. • Enfermedades subyacentes: fundamentalmente cardiorrespiratorias, inmunitarias o neuromusculares ETIOLOGIA
Bacterias. Entre estas encontramos de mayor a menor frecuencia las siguientes
Streptococcus Pneumoniae (Neumococo) supone la primera causa de neumonía bacteriana en la infancia, con una incidencia similar en distintas edades (20-40%). Predomina en los meses fríos, aunque suele extenderse de enero a mayo. Mycoplasma pneumoniae es la causa más frecuente de neumonía atípica en niños y adultos. Junto al neumococo es el agente más común en escolares y adolescentes. En raras ocasiones también afecta a niños pequeños que inician la asistencia a guardería o escuela. Causa brotes en comunidades cerradas e instituciones entre los meses de mayo a julio. Chlamydia pneumoniae se manifiesta sin predominio estacional y al igual que Mycoplasma, se presenta con más frecuencia en escolares y adolescentes. Ambos se han relacionado con la recurrencia de episodios de broncoespasmo en niños susceptibles. Haemophilus influenzae b prácticamente se ha eliminado tras la vacunación sistemática frente a este serotipo. Previamente su incidencia era similar a la del neumococo. Virus. Predominan en menores de 3 años, afectan sobre todo a lactantes y son excepcionales o están ausentes en mayores de 8 años. VRS es el más frecuente (19,8%) y la primera causa de hospitalización en lactantes y niños pequeños por patología respiratoria. Bocavirus (HBoV) es un virus emergente que causa con frecuencia infecciones respiratorias graves en niños, sólo precedido por VRS. En su mayoría afecta a lactantes con sibilancias recurrentes (55%). Produce bronquiolitis en 21% y neumonías en 14,2% de los casos12 . Rinovirus: datos recientes destacan su relación con neumonía en niños asmáticos13 aislándose en el 13,6% de casos y como coinfección en el 30%12 . Metaneumovirus causa el 12% de las infecciones respiratorias bajas en niños pequeños y ocasiona fundamentalmente bronquiolitis y reagudizaciones asmáticas. Es más frecuente en primavera y al final del invierno y origina neumonía en 11.5% de los casos12 . Adenovirus (sobre todo en verano), influenza A y B y parainfluenza 1, 2 y 3 también son comunes. Infecciones mixtas. Inducen más inflamación y manifestaciones clínicas que las bacterianas o virales individualmente14, por lo que los niños que las padecen requieren hospitalización con más frecuencia. Las combinaciones de estos agentes son: Coinfección viral: Es frecuente en las NAC que afectan a menores de 3 años. Puede ser un factor de mal pronóstico, producen neumonías más graves. En el 10-20% de los casos se detectan 2 o 3 virus. Bocavirus aparece en el 68.8%12 asociado a otros virus, sobre todo si se observan sibilancias. Coinfección viral-bacteriana: se evidencia en el 45% de las NAC. La combinación más frecuente ha sido VRS con neumococo. La varicela predispone a la infección por DIAGNOSTICOS CLINICO DIAGNOSTICO READIOLOGICO
Existen fundamentalmente dos patrones radiológicos de neumonías (alveolar e intersticial), y
aunque clásicamente cada uno se ha relacionado con un tipo de infección (bacteriana/vírica), ninguno es patognomónico de una etiología concreta. El patrón alveolar, atribuido a etiología bacteriana, se caracteriza por consolidación lobar y broncograma aéreo. Sin embargo, la consolidación lobar o segmentaria también se ha observado en lactantes menores de 6 meses infectados por VRS. El derrame pleural sugiere casi siempre neumonía bacteriana. El patrón intersticial, más propio de las neumonías víricas, se caracteriza por infiltrados perihiliares difusos bilaterales, atrapamiento aéreo, y en ocasiones atelectasias por tapones de moco, que se confunden con frecuencia con opacidades sugestivas de origen bacteriano y predisponen al uso de antibióticos. E CRITERIOS DE HOSPITALIZACION
Edad < de 6 meses.
Sospecha de derrame pleural por la auscultación o percusión. Apariencia de enfermedad grave: inestabilidad hemodinámica, afectación del estado de conciencia, convulsiones… Dificultad respiratoria marcada. Sat O2 < 92%. Enfermedades subyacentes. Vómitos y deshidratación que dificulten el tratamiento por vía oral. Falta de respuesta al tratamiento empírico. Dudas en la cumplimentación terapéutica. Problema social o incapacidad de los padres/cuidadores para controlar la enfermedad.