Morfología y Semántica

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UNIDAD 5.

Morfología y
semántica

Lengua castellana y
Literatura
2º Bachillerato
La morfología
La morfología es la parte de la gramática que se ocupa de la estructura o constitución interna
de las palabras.

Niveles lingüísticos
La lengua es un sistema de signos que está organizado en distintos niveles
interrelacionados:
• Nivel fónico. Está compuesto por unidades mínimas carentes de
significado. El estudio del nivel fónico se centra, por lo tanto, en los
sonidos (realidades físicas emitidas por los órganos articulatorios y
perceptibles por los sentidos: [a], [b], [s]...), los fonemas (imágenes
mentales de los sonidos: /a/, /b/, /s/...), y las grafías (la representación
escrita de los sonidos de la lengua).
• Nivel morfológico. Su unidad característica es el morfema, o mínima
unidad lingüística dotada de significado.
• Nivel léxico-semántico. Estudia el origen y el significado de las palabras.
• Nivel sintáctico. Se ocupa de cómo se combinan las palabras para formar
grupos y oraciones.
• Nivel textual. Analiza cómo los enunciados se articulan para formar textos
con sentido completo, dotados de adecuación, coherencia y cohesión.
Los morfemas
El morfema es la mínima unidad lingüística dotada de significado.

La palabra posguerra puede descomponerse en dos morfemas:

{
pos- («después de»)

posguerra +
-guerra («lucha armada entre dos o más naciones o bandos»)

Algunas palabras están formadas por un solo morfema. Los morfemas que aparecen asociados
a otros se denominan morfemas ligados (lent-itud); los que se presentan aisladamente reciben
el nombre de morfemas libres (mañana, torre). Un mismo morfema puede ser libre en una
palabra (fiel) y ligado en otras (in-fiel, fiel-mente).
La segmentación en morfemas
Recurrencia Sustitución
Un segmento de una palabra constituye un Un segmento constituye un morfema si
morfema si aparece en otras palabras con puede conmutarse por otros morfemas del
un significado semejante. mismo tipo, aunque con distinto
barcelon-és significado.
genov-és rápid-o (género masculino)
malt-és rápid-a (género femenino)
El afijo derivativo sufijo -és se encuentra canta-mos (1.ª persona del plural)
con idéntico significado: «origen o canta-s (2.ª persona del singular)
procedencia». Indican género, número, persona.

Para evitar errores en la segmentación, debes tener en cuenta dos factores:


• Alomorfia. Los alomorfos son variantes formales del mismo morfema. Así, el morfema tierra aparece
como terr- (sin diptongo ni -a final) en la palabra terrestre; noche, como noct- en noctámbulo; y -ble
(amable), como -bil- en amabilidad.
• Morfemas homónimos. Si la misma secuencia aparece en varias palabras con significados distintos,
no se trata del mismo morfema. Así, el sustantivo soledad se segmenta sol-edad porque existe el
adjetivo sol-o, y no por el sustantivo sol.
Clases de morfemas
Raíz o lexema Afijos
Es la parte de la palabra que Son morfemas que se combinan con
contiene su significado la raíz y añaden otras informaciones
fundamental y es común en todas al significado aportado por esta.
las palabras de la misma familia o releerán
campo léxico.
El lexema -le- (presente en el
sol infinitivo leer), está combinado con
resol los afijos re- («repetición»), -e- (vocal
soleado temática de la 2.ª conjugación), -rá-
insolación (futuro simple de indicativo) y -n
Comparten el segmento -sol-. (tercera persona del plural).

Los afijos se clasifican, a su vez, en dos tipos: afijos flexivos y afijos derivativos.
Afijos flexivos
Los afijos flexivos son aquellos que aportan informaciones de tipo gramatical:
• Género y número en sustantivos y adjetivos: gat-o-s, felic-es.
• Persona, número, tiempo y modo —además de la llamada vocal temática— en las formas
verbales: cant-a-ba-n.
Los morfemas flexivos no sirven para formar nuevos términos: lent-o y lent-a no son dos
palabras, sino un solo término cuya raíz se combina con dos afijos flexivos distintos.

Afijos derivativos
Los afijos derivativos son afijos no flexivos que se combinan con la raíz para formar nuevas
palabras.
Elementos compositivos
Los elementos compositivos, también llamados formantes clásicos o temas cultos, son
morfemas con origen en raíces grecolatinas que no existen como palabras en español.

Los interfijos
Los interfijos o infijos son
Estos morfemas presentan rasgos específicos: morfemas situados en el interior
de la palabra que no aportan
• A diferencia de los lexemas, no pueden formar palabras ningún significado y actúan solo
solos o mediante la mera adición de morfemas flexivos, como elementos de enlace:
sino que necesitan otra raíz, otro elemento polv-ar-eda
compositivo o un afijo derivativo: antropó-fag-o, te-t-era
insecti-cida... nub-ec-ita
• A diferencia de los afijos derivativos (prefijos y sufijos), largu-ir-ucho
roj-i-blanco
la unión de dos elementos compositivos puede dar
lugar a una palabra: neur-algia, biblio-teca, geó-log-o... Puesto que el morfema se ha
definido como la mínima unidad
lingüística con significado, a los
interfijos se los considera falsos
morfemas o morfemas vacíos.
La derivación
La derivación es un procedimiento de formación de palabras por el que se crea un vocablo a
partir de otro mediante la adición de un morfema afijo derivativo (prefijo o sufijo).

Por tanto, una palabra derivada es aquella formada por la raíz o lexema y al menos un afijo
derivativo, además de los afijos flexivos propios de su categoría gramatical:

pino (palabra simple) > pinar (palabra derivada)

Palabra simple y base léxica


Una palabra simple o primitiva es aquella que no procede de otra palabra del idioma:
aquí jardín pequeño
Por tanto, está formada por una sola raíz o lexema que puede ir acompañado solo por morfemas flexivos.
La palabra de la que se parte en un proceso morfológico (derivación, composición o parasíntesis) recibe
el nombre de base léxica. Así, la base léxica de la palabra jardinero es el vocablo jardín, a cuyo lexema se
añade el afijo derivativo -er- en un proceso de derivación.
En el análisis morfológico de las palabras derivadas ten en cuenta los siguientes aspectos:
• A menudo, las palabras derivadas contienen varios afijos derivativos que se han ido
añadiendo sucesivamente en una secuencia de procesos de derivación. Así, la palabra
injusticia procede del adjetivo justo, al que se ha añadido, primero, el sufijo nominalizador
-icia y, a continuación, el prefijo negativo in-:
justo > justicia > injusticia

• Salvo en formaciones recientes (antiarrugas, multiusos), los prefijos no alteran la categoría


gramatical de la palabra base. Así, en los procesos de derivación con sufijos, la palabra
resultante es denominal si procede de un sustantivo; deverbal, si procede de un verbo;
deadjetival, si procede de un adjetivo, y deadverbial, si procede de un adverbio:
culpar (V) > exculpar (verbo deverbal)
amargo (Adj) > amargura (sustantivo deadjetival)

• Los términos derivados de verbos conservan, a veces, la vocal temática de la palabra de


procedencia. Así, las palabras labrador, vendedor, servidor comparten el sufijo -dor,
precedido de la correspondiente vocal temática:
caz-a-r > caz-a-dor vend-e-r > vend-e-dor serv-i-r > serv-i-dor
La composición
La composición es un proceso de formación de palabras en el que dos o más bases léxicas se
unen para formar un nuevo vocablo.

Una palabra compuesta presenta, por tanto, al menos dos raíces:


mal + gastar > malgastar claro + oscuro > claroscuro

Siglas y acrónimos
Las siglas son palabras formadas por la letra o letras iniciales de los términos que integran una denominación
compleja: ONU (Organización de las Naciones Unidas).
No existe acuerdo entre los gramáticos acerca del concepto de acrónimo:
• Para algunos, es un caso de sigla que puede leerse como se escribe (sida, pyme, OTAN...), frente a las siglas
propiamente dichas, formadas por iniciales que deben pronunciarse por deletreo (ONG, DNI, FMI...).
• Para otros autores, los acrónimos serían términos formados por el principio de dos palabras o por el
principio de una y el final de otra (docudrama: docu- [mental] + drama; ofimática: ofi[cina] + [infor]mática).
En el análisis de palabras compuestas, debes considerar los siguientes aspectos:
• Entre las dos raíces puede aparecer una vocal de enlace que se considera un interfijo:
maniatar, blanquiazul.
• Pueden incluir afijos derivativos y flexivos: baloncestistas: balon-cest-ista-s.
• En general, se consideran también compuestos aquellas palabras formadas por dos raíces
cultas (teléfono), o por un lexema común y una raíz culta (herbívoro). Con frecuencia, estos
compuestos admiten, después, procesos de derivación (teléfono > telefonista).
La parasíntesis
La parasíntesis es un proceso de formación de palabras que consiste en la adición simultánea
de un prefijo y de un afijo pospuesto a una base léxica.

La palabra aterrizar es parasintética porque en ella se añaden


simultáneamente un prefijo y un sufijo a la base léxica tierra:
tierra > aterrizar (a-terr-iz-a-r). En ciertos casos, se añaden un
prefijo y los afijos flexivos del verbo: viudo > enviudar (en-viud-a-r).
Para reconocer una palabra parasintética, comprueba que no
existe sin el prefijo (*terrizar, *viudar). Así, renacer no es
parasintética porque existe nacer; abotonar, sin embargo, sí lo es,
porque *botonar no existe.
Las palabras parasintéticas pueden derivarse (descabezar >
descabezamiento). Estamos, en este caso, ante palabras derivadas
de términos parasintéticos.
Algunos gramáticos consideran parasintéticas las palabras con dos
lexemas y un sufijo [Lex1 + Lex2 + sufijo] en las que no existen las
combinaciones [Lex1 + Lex2] ni [Lex2 + sufijo], como quince-añ-er-o
(no existen ni *quinceaños ni *añero).
Caracterización morfológica del
verbo
El verbo es una categoría o clase de palabras que presenta variación de tiempo, aspecto,
modo, número y persona.

Así, cuando decimos que la forma verbal cantábamos está en primera persona del plural del
pretérito imperfecto de indicativo, estamos especificando, en efecto, la persona (primera), el
número (plural), el tiempo (pretérito), el aspecto (imperfecto) y el modo (indicativo).
Estas informaciones morfológicas se expresan por medio de los morfemas flexivos del verbo.

Los morfemas flexivos del verbo se denominan también desinencias.

Verbos regulares e irregulares


Los verbos pueden ser regulares —aquellos cuya conjugación se ajusta a los modelos de amar, temer y partir
— e irregulares —aquellos que presentan alguna variación en su raíz o en sus desinencias con respecto a los
paradigmas anteriores—.
Así, no existe correspondencia entre las formas del pretérito perfecto simple de temer (temí) y las de hacer
(hice) o poder (pude), por lo que hacer o poder son verbos irregulares.
Estructura morfológica de las formas verbales
Raíz. Aporta el significado léxico del verbo, es decir, aquel que aparece recogido en el diccionario.

Vocal temática. Es el morfema flexivo que distingue las conjugaciones: primera (-ar), segunda (-er) o
tercera (-ir).

Morfemas flexivos de tiempo, modo y aspecto. Los significados gramaticales de tiempo


(presente, pretérito, futuro, condicional), modo (indicativo, subjuntivo, imperativo) y aspecto (perfectivo e
imperfectivo) se amalgaman en un solo morfema, denominado desinencia TM.

Morfemas flexivos de persona y número. Las nociones morfológicas sobre la persona


(primera, segunda o tercera) y el número (singular o plural) se condensan en un solo morfema, al que nos
referiremos como desinencia NP.

La estructura morfológica de las formas cantábamos, temeríais y partirán sería la siguiente:


El análisis de los componentes flexivos del verbo entraña algunas dificultades:
• Las desinencias TM pueden variar según las personas o la conjugación. Así, por ejemplo, la
desinencia del futuro imperfecto de indicativo es -ré- para la primera persona del singular, y
para la primera y la segunda persona del plural (am-a-ré, am-a-re-mos, am-a-ré-is), y -rá-
para las demás (am-a-rá-s, am-a-rá, am-a-rá-n); y la desinencia del pretérito imperfecto de
indicativo es -ba- para la primera conjugación (am-a-ba), y -a- para la segunda y la tercera
(tem-í-a, part-í-a).

• Algunos constituyentes carecen de expresión en determinadas


formas verbales. Así, en am-a-s no aparece desinencia TM,
y en am-a-ré no hay desinencia NP.

• La vocal temática experimenta variaciones en la


conjugación, como cambios de timbre o diptongaciones:
part-i-mos, part-e-n, part-ie-ron.
El léxico
El conjunto de unidades léxicas de una lengua (palabras y locuciones) recibe el nombre de
léxico o vocabulario.

Diccionario de la lengua española


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(2014)

Es preciso distinguir el léxico de una lengua del lexicón mental o conocimiento que de este tiene
cada hablante. El lexicón mental comprende:

Vocabulario activo o Vocabulario pasivo o receptivo


productivo Es el conjunto de unidades léxicas que un
Es el conjunto de unidades léxicas que un hablante es capaz de interpretar como
hablante emplea efectivamente en sus receptor de un mensaje.
mensajes orales o escritos.
15 000 – 30 000 términos
6 000 – 20 000 términos

Entendemos más palabras de las que somos capaces de utilizar.


Configuración del léxico del
castellano Factores que influyen en
la configuración del
castellano

Origen de la lengua Aportación de otras Creación de nuevas


El castellano es una lengua lenguas palabras
románica o un romance, pues El castellano ha recibido El vocabulario de una lengua no
procede del latín. Entre los préstamos de otras lenguas. En es un conjunto estable, sino
siglos VIII y XI, el latín vulgar algunos casos (palabras que de forma permanente se
hablado en la península ibérica procedentes de las lenguas añaden nuevos vocablos
experimenta una lenta prerromanas, helenismos y (neologismos o palabras de
transformación, a la vez que se germanismos de origen reciente creación o
fragmenta en distintas visigótico), se incorporaron a incorporación) y otros
variedades geográficas. La través del latín; en otros desaparecen, convertidos en
mayor parte del léxico del (arabismos, galicismos, arcaísmos; y el significado de
castellano procede, en italianismos o anglicismos), las palabras se restringe, se
consecuencia, del latín. llegaron de otras lenguas, en amplía o se matiza, en función
épocas distintas y con distintos de las necesidades de los
grados de adaptación. hablantes.
Las palabras procedentes del
latín Palabras patrimoniales
Las palabras patrimoniales, tradicionales o populares son aquellas que se han empleado
ininterrumpidamente en la lengua oral, y han experimentado sucesivas transformaciones a lo
largo de los siglos: nebula > niebla, flamma > llama.

Los grupos -ct- y -ult- latinos dan en castellano el sonido correspondiente a la grafía ch:
nocte > noche lacte > leche multu > mucho

Las consonantes p, t, k (transcritas en español como ca, que, qui, co, cu) pasan a ser, en posición
intervocálica, b, d, g (sonidos ga, gue, gui, go, gu), respectivamente:
lupu > lobo catena > cadena inimicu > enemigo

La f- inicial desaparece: filiu > hijo, fartu > harto, ferire > herir. Solo se conserva ante diptongo
(fonte > fuente), r (fricare > fregar) y, en ocasiones, l (flore > flor).

Los grupos iniciales pl- y cl- producen el sonido que se representa como ll-:
pluvia > lluvia clamare > llamar

Las vocales e, o que, en el paso del latín al castellano quedaron en sílaba tónica, producen,
respectivamente, los diptongos ie y ue:
terra > tierra bonu > bueno
Cultismos
Los cultismos son palabras recuperadas tardíamente del latín escrito.

Se trata de vocablos que, al no haber estado vivos en la lengua oral, solo han
experimentado las transformaciones necesarias para acomodarse a la estructura
fonética y morfológica del castellano:
rectu > recto, consultare > consultar

Semicultismos
Los semicultismos son palabras de procedencia latina, utilizadas en la lengua hablada, que no
completaron su evolución fonética.

A diferencia de las palabras patrimoniales, en los semicultismos la transformación no


se culminó por tratarse de palabras empleadas en la liturgia o utilizadas por
hablantes cultos conocedores del latín (clérigos, notarios...):
saeculu > siglo (en vez de *sejo, como oculu > ojo)
Dobletes etimológicos Latinismos
Los latinismos son voces o expresiones
Se produce un doblete etimológico cuando de una latinas que se emplean tal cual en
voz latina se obtienen dos términos en castellano: castellano. Estos son solo algunos
una palabra patrimonial y un cultismo. ejemplos:
• alter ego: «otro yo».
Observa algunos ejemplos de dobletes en la tabla • a priori: «con anterioridad a un hecho
del margen. A los tipos anteriores habría que añadir o a una circunstancia determinada».
los términos formados a partir de voces latinas • ex professo: «a propósito,
mediante mecanismos morfológicos (derivación, deliberadamente».
composición, parasíntesis). Así, el vocablo latino • de facto: «de hecho, sin
pannu dio paño, a partir del cual se formó la palabra reconocimiento jurídico, solo por la
pañuelo con la adición del sufijo -uelo. fuerza de los hechos».
• grosso modo: «a grandes rasgos,
aproximadamente».
• in extremis: «en el último momento».
• ipso facto: «inmediatamente, en el
acto».
• numerus clausus: «número cerrado o
limitado».
• stricto sensu: «en sentido estricto».
Los préstamos
Un préstamo es una palabra procedente de otra lengua que, tras un proceso de adaptación
gráfica y fónica, el hablante siente como propia.

Los préstamos quedan, pues, definidos por tres rasgos:

La procedencia de otra La asimilación a la La conciencia


lengua distinta de la ortografía y a la lingüística del
que constituye la base pronunciación de la hablante, que no
principal del idioma (el lengua receptora. Así, percibe el préstamo
latín, en el caso del restaurante (del como una palabra
castellano). francés restaurant) es ajena a su idioma.
un préstamo, mientras
que show o pizza
serían extranjerismos.
Los neologismos
Un neologismo es una palabra o acepción incorporada recientemente a la lengua con la que
se designa una nueva realidad.

Palabras importadas de otras lenguas


Desde mediados del siglo XX, la preponderancia económica, científica y política de Estados Unidos y
el predominio de la cultura anglosajona en la música, el cine, el deporte, la publicidad, los medios
de comunicación o la informática han favorecido la proliferación de anglicismos. Aunque en menor
medida, en este periodo se siguen introduciendo en castellano galicismos o italianismos.

Extranjerismos o xenismos
Son palabras que se incorporan a la lengua con su ortografía y su pronunciación originarias. Es el caso de
camping, catering, casting, flash o hooligan, procedentes del inglés (los llamados anglicismos crudos);
dossier, boutique o affaire, del francés; o pizza, del italiano.

Palabras adaptadas o hispanizadas


La adaptación ortográfica y fonética es el paso necesario para que el hablante deje de sentir la nueva
palabra como ajena a su lengua. El neologismo hispanizado es un estado intermedio entre el extranjerismo
y el préstamo. A este grupo pertenecen cóctel (cocktail), escáner (scanner), eslogan (slogan), líder (leader),
tique (ticket) o zum (zoom), del inglés; carné (carnet) o debut (début), del francés; o espagueti (spaghetti),
del italiano.
Calcos léxicos Otros mecanismos de
Son compuestos o combinaciones de palabras en una lengua creación de
extranjera que se traducen al castellano, dando como resultado neologismos
una palabra —a menudo, un compuesto sintagmático— que no Los procedimientos de
existía previamente. Algunos ejemplos son lavado de cerebro formación de palabras
(derivación, composición,
(brainwashing), efecto invernadero (greenhouse effect), comida
parasíntesis o acronimia)
rápida (fast food)... son un mecanismo habitual
de creación de
Préstamos semánticos neologismos: hidromasaje,
multicultural, seropositivo,
Se producen cuando una palabra de otra lengua transfiere alguno banda ancha, pyme...
de sus significados a un término ya existente en castellano, que A los mecanismos ya
adquiere, así, una nueva acepción. Existen dos modalidades: citados cabe añadir:
• Acortamientos léxicos:
narco (narcotraficante,
narcotráfico), corto
(cortometraje)...
• Marcas registradas,
algunas de las cuales se
convierten en sustantivos
comunes: jacuzzi, chupa-
chups, celofán, rímel...
La semántica
La semántica es la rama de la lingüística que se ocupa del significado de las palabras.

La semántica centra su atención en los significados codificados de las palabras, en sus usos
figurados (metáfora, metonimia), en las relaciones de significado que pueden establecerse
entre distintos vocablos (sinonimia, antonimia, hiponimia, hiperonimia, campo semántico,
campo asociativo) y en los múltiples significados de un término (polisemia).

Implicaturas y actos de habla


El sentido de un enunciado depende no solo del significado de las palabras que lo constituyen, sino de la
intención comunicativa con la que el hablante lo emplea en un contexto determinado. De ello se ocupa una
disciplina lingüística denominada pragmática. Recuerda los conceptos de implicatura y de acto de habla que
estudiaste el curso pasado:
• Implicatura. Es la información no dicha explícitamente en un enunciado, que el receptor recupera
mediante un mecanismo de inferencia. Así, si un proveedor llama a una oficina preguntando por una
persona y la respuesta es: «Está en una reunión», puede interpretar que dicha persona no desea ponerse,
algo que, en realidad, su interlocutor no ha llegado a manifestar.
• Acto de habla. Es la acción que realiza el emisor con sus palabras: aconsejar, tranquilizar, reprochar,
insultar...
La recuperación de implicaturas y el reconocimiento de los actos de habla resultan imprescindibles para
interpretar correctamente un enunciado.
Significante, significado y
referencia
Un signo (la luz verde de un semáforo, una bandera...) es una realidad física, perceptible por
los sentidos, que remite a un concepto o una imagen mental. Las palabras son signos en los
que podemos distinguir tres elementos:

Significante. Es la dimensión física, material, de una palabra, es decir, la sucesión de sonidos que
escuchamos en la lengua oral, o la secuencia de grafías que leemos en la lengua escrita.

Significado. Es la idea, concepto o representación mental que se asocia a una palabra. El significado
es una abstracción, que puede expresarse por medio de otra palabra o de un conjunto de palabras (como
ocurre, por ejemplo, con las definiciones de los diccionarios).
El significado de un término puede subdividirse en componentes o rasgos básicos que se denominan
semas. Así, es posible descomponer el significado de silla en «mueble / para sentarse / individual / con
patas / con respaldo». Cada una de estas propiedades constituye un sema, y juntos conforman el
denominado semema o significado de la palabra.

Referencia. Es el hecho u objeto del mundo al que remite una palabra.

Así, si dices: «Acércame la jarra, por favor», el significante de la palabra jarra es la secuencia de sonidos que
escucha tu interlocutor; el significado es la noción de jarra («vasija de barro, porcelana, loza, cristal, etc., /
con cuello y boca anchos, / y una o dos asas»); y la referencia es el objeto concreto que la persona con la que
estás comiendo te acercará (esa jarra y no otra ).
Denotación, connotación y sentido
La semántica ha acuñado otros términos que permiten completar y matizar el
concepto de significado.
Los fenómenos semánticos
Sinonimi
a el mismo significado y resultan, por tanto,
Dos palabras son sinónimas cuando presentan
intercambiables (empezar y comenzar).

Sinonimia absoluta o completa


Se da entre dos términos intercambiables en todos los contextos. Este fenómeno se produce, sobre todo,
en términos monosémicos y en tecnicismos: esdrújula / proparoxítona.

Sinonimia parcial
Se produce cuando dos palabras son sinónimas solo en alguna de sus acepciones (sinonimia selectiva o
acepcional). Así, rico es sinónimo de adinerado en Bill Gates es un hombre rico, pero no en El arroz estaba
muy rico o Es un niño muy rico, siempre está sonriendo.
También se incluyen en este grupo aquellos sinónimos que se corresponden con registros lingüísticos
diferentes, por lo que la sustitución de uno por otro en un determinado contexto resultaría inadecuada:
fallecer y palmar tienen, en efecto, el mismo significado («morir»), pero el término palmar sería
inapropiado en una situación comunicativa que requiriera un registro formal.
Antonimia
Dos términos son antónimos cuando presentan significados opuestos: rápido / lento, leal /
desleal.

Contrarios o propiamente Contradictorios o


antónimos complementarios
Aluden a circunstancias o propiedades Entre las cualidades a las se refieren los
entre las cuales puede establecerse una términos antónimos no existe una
gradación: alto / bajo, caliente / frío. En gradación, pues la negación de una implica
ocasiones, en la lengua existe un término la otra: muerto / vivo.
que indica el grado intermedio (mediano,
templado).

Dentro de las relaciones de oposición puede incluirse también la inversión, que se produce
cuando uno de los términos implica la existencia del otro: madre / hija.
Polisemia y
homonimia
Una palabra polisémica es aquella que presenta varios significados: manzana («fruto del
manzano» y «espacio urbano, generalmente cuadrangular, delimitado por calles por todos sus
lados»).

El significado de una palabra polisémica se infiere por el contexto. En la oración El otoño es mi


estación favorita, el término otoño permite deducir que estación significa «cada una de las
cuatro partes en que se divide el año», y no «en los ferrocarriles y líneas de autobuses o del
metropolitano, sitio donde suelen hacen parada los vehículos».

Dos palabras diferentes son homónimas cuando presentan el mismo significante: vino (verbo
venir) y vino (bebida).

Los términos homónimos presentan una etimología distinta y diferentes entradas en el


diccionario.
Se denominan homógrafos si se escriben igual (canto [piedra], canto [verbo
cantar]).

Se denominan homófonos si suenan igual, pero se escriben de manera diferente


(asta [cuerno], hasta [preposición]).
Campo semántico y campo asociativo
Un campo semántico es un conjunto de palabras de la misma categoría gramatical
que comparten un rasgo de significado o sema genérico. Cada uno de los términos del
campo se denomina hipónimo, mientras que el término general recibe el nombre de
hiperónimo. Así, fruta es el hiperónimo de los hipónimos uva, sandía, manzana,
melocotón...

Un campo asociativo incluye, sin embargo, términos de distintas categorías


gramaticales relacionados por alguno de sus rasgos de significado. Así, el campo
asociativo de la enseñanza incluiría términos como estudiar, aprobado, alumno, aula,
docente, corregir...

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