Las posteriores invenciones del envase hermético de hojalata y del autoclave para la esterilización a temperaturas por encima de 100 °C.
En el testero, como a una vara de altura, se levantaba un tabladillo, y sobre él un Nacimiento, el Belén clásico español, con su musgo en las praderías, sus pedazos de vidrio y de
hojalata imitando lagos y riachuelos, sus selvas de rama de romero, sus torres puntiagudas de cartón, sus pastorcicos de barro, sus dromedarios amarillos y sus Magos con manto de bermellón, muy parecidos a reyes de baraja.
Emilia Pardo Bazán
En el centro de la nave aparecía el sacerdote, revestido de casulla de plata y negro, mostrando una gran cabeza calva, cubierta en su vigésima parte por el solideo.Lo rodeaban varios acólitos, ante un improvisado altar, donde leía con mística unción los responsos, en un facistol de hojalata.
entado en el umbral de la puerta de la taberna, el tío Beseroles, de Alboraya, trazaba con su hoz rayas en el suelo, mirando de reojo a la gente de Valencia que, en derredor de la mesilla de
hojalata, empinaba el porrón y metía mano al plato de morcillas en aceite.
Vicente Blasco Ibáñez
III Una gran sala, muy alta, de paredes revocadas con cal, contraventanas interiores herméticamente cerradas, a lo largo de toda la estancia, mesas con cubiletes de hojalata blanca sujetos con cadenas.
Más tarde a la luz de dos o tres chonchones de parafina, se proyecta en las murallas de adobes sin enlucir la sombra gigantesca de los trabajadores que alimentan el horno con manojos de sarmientos, y recogen la espuma que hierve y se agita en la superficie, con la gran espumadera de hojalata.
Después de romper la envoltura, desbasté el bloque con una lima gruesa, fijando al cañón por medio de sunchos de
hojalata en una cureña fabricada con las tablas más gruesas de un cajón de kerosene.
Roberto Arlt
La estaban arrinconando, sepultándola bajo mundos de hojalata y líos de jergones -pues, como es sabido que en Montevideo no se da cama a los sirvientes, los emigrantes se llevan la suya-.
La caja en que le vino a papá El Médico Práctico es la base; el primer cuerpo, el molde de
hojalata, alto y estriado, en que mamá funde budines y natillas; el segundo, un tarro de salmón; forma el cimborio una tacita de porcelana boca abajo; y por remate y coronamiento de tan estupenda construcción, se yergue, blanca, estirada, las manitas puestas, el rostro al cielo, la "Virgen María" de terracota, regalo de "Maximito hermoso".
Tomás Carrasquilla
-Pirotécnico, pirotécnico, querréis decir -interrumpió una bengala-. Sé que es pirotécnico porque he visto la palabra escrita sobre mi caja de hojalata.
Dejando un rastro de sangre. Dejando un rastro de lágrimas. Temblando en los tejados farolillos de hojalata. Mil panderos de cristal herían la madrugada.
Su padre le interroga sobre la utilidad de todo aquello, pregunta que le asombra, pero a la cual da, sin embargo, la explicación pedida. Llegan después a un patio sobre cuyo suelo se extiende una gran plancha de
hojalata.
Sigmund Freud