Para completar la victoria deshaciendo a los enemigos que van huyendo en completa dispersión he mandado, dos destacamentos de ciento cincuenta hombres cada uno bajo las órdenes de los capitanes don Francisco González de la Peña y don José Fernando de Hontaneda, a quienes se ha dado la instrucción que a la letra es como sigue: Derrotados los enemigos por la gloriosa victoria que consiguieron ayer los amos del Rey que están a mi cargo sin municiones para un solo obús aunque se hallan, y desmontado el único cañón que tienen se han retirado con dirección a Suipacha tomando el camino de la Ramada, y aunque desde luego los hubiera perseguido valiéndome de su situación, la falta de mulas ha entorpecido mis planes hasta ahora...
11º) Que se propenda y solicite la creación en Córdoba de sociedades patrióticas con el objeto de fomentar la agricultura, arte y comercio de acuerdo con los métodos puestos en práctica en Inglaterra. 12º) Que el ramo de sisa que pagan en Salta los comerciantes de mulas de Córdoba se divida por mitad con aquella ciudad.
Salían desde Alamor las piaras de mulas, cargando escasas pertenencias por un estrecho sendero fangoso, envuelto en el silencio absoluto, solo interrumpido por rugidos de fieras.
Finalmente, el hospedero en cuya casa se alojaba el hombre, aseguró que se había pasado toda la noche dando friegas y medicinas a una de sus mulas que estaba enferma.
Echaron luego ojo a la mula, y dijo uno dellos: -Ésta se podrá vender el jueves en Toledo. -Eso no -dijo Andrés-, porque no hay mula de alquiler que no sea conocida de todos los mozos de
mulas que trajinan por España.
Miguel de Cervantes
Mostráronse los hijos humildes y obedientes; lloraron las madres; recibieron la bendición de todos; pusiéronse en camino con
mulas propias y con dos criados de casa, amén del ayo, que se había dejado crecer la barba porque diese autoridad a su cargo.
Miguel de Cervantes Saavedra
-Pues así lo quiere el señor Andrés Caballero -dijo otro gitano-, muera la sin culpa; y Dios sabe si me pesa, así por su mocedad, pues aún no ha cerrado (cosa no usada entre
mulas de alquiler), como porque debe ser andariega, pues no tiene costras en las ijadas, ni llagas de la espuela.
Miguel de Cervantes
Y a los gritos del mayoral, y a los sonoros crugidos de su látigo, arrancaron las robustas mulas, arrastrando la diligencia, entre cuyos viajeros destacábase el rostro varonil y agitanado de Currito el Carabina.
La noche avanzaba, y los cuatro perros de edad, agrupados a la luz de la luna, el hocico extendido e hinchado de lamentos —bien alimentados y acariciados por el dueño que iban a perder—, continuaban llorando a lo alto su doméstica miseria. A la mañana siguiente míster Jones fue él mismo a buscar las mulas y las unció a la carpidora, trabajando hasta las nueve.
Cayé llevó compañera, y los tres borrachos como los demás peones, se instalaron en el puente, donde ya diez
mulas se hacinaban en íntimo contacto con baúles, atados, perros, mujeres y hombres.
Horacio Quiroga
de haber detenido el Cituado de Particulares, y según mis Planes sería tambien mui oportuno, q e se asegurase hasta q e variase de Govn o la Ciudad de B s Ay s, pues a los criminales se les debe oprimir p r todos los medios, y no es buena Política dar armas contra sí mismo. La compra de Mulas manzas q e V.
- Los barrios Carolina Pueblo, Hoyo Mulas, San Antón, Martín González, Trujillo Bajo y Cacao del municipio de Carolina; y los barrios Dos Bocas, La Gloria, Quebrada Negrito y Quebrada Grande del municipio de Trujillo Alto.