22.- Privación de rentas.- La Función Ejecutiva no podrá privar de sus rentas o asignaciones presupuestarias, o retardar las transferencias a ninguna institución del sistema, salvo en los casos previstos en esta Ley.
Las clases laborales se debaten en una lucha doble: la que llevan a cabo en defensa de sus intereses como clase y la que desarrollan intergremialmente, al debatirse al calor de pasiones y egoísmos, con lo que sólo han logrado debilitar sus filas y retardar el logro de sus aspiraciones.
Por esta causa, y por la desconfianza renacida á causa de noticias relativas á mi persona, comunicadas por los indios Aucaches que habitan del otro lado de los Andes, fui obligado á retardar tres días mi viaje á la citada laguna.
Y como la razón por sí sola demuestra claramente que entre las verdades reveladas y las verdades naturales no puede existir oposición verdadera y todo lo que se oponga a las primeras es necesariamente falso, por esto el divino magisterio de la Iglesia, lejos de obstaculizar el deseo de saber y el desarrollo en las ciencias o de retardar de alguna manera el progreso de la civilización, ofrece, por el contrario, en todos estos campos abundante luz y segura garantía.
En obedecimiento a este doble propósito, se ha creído necesario, por una parte, simplificar en lo posible la tramitación y adoptar al mismo tiempo una serie de medidas encaminadas a hacer ineficaces los expedientes dilatorios a que apela la mala fe para retardar la solución de los pleitos; y, por otra parte, dar a los magistrados mayor latitud en sus atribuciones a fin de que puedan hacer sentir en mayor grado que hasta ahora su acción en la formación y marcha de los procesos.
Otras compañías expropiadas, lejos de utilizar esta vía de arreglo han querido acentuar todavía su actitud de protesta oponiendo las dificultades de procedimiento que tuvieron a su alcance para impedir o retardar la tramitación del juicio de avaluó previsto en la ley, en cuyo procedimiento por cierto, aquellas no quisieron tener ninguna otra intervención.
Se ha estimado necesario limitar los casos en que pueden sacarse de la secretaría los procesos, tanto para la seguridad de éstos, cuanto para evitar en lo posible un trámite que, a más de retardar la marcha de los juicios, causa a las partes gastos inútiles.
La promoción de incidentes, con el solo fin de retardar la entrada en la litis o de paralizar su prosecución, es arbitrio de que con frecuencia usan los litigantes de mala fe.
A promulgarse en el acto la real cédula, iban a sufrir las autoridades refractarias a la moral y al deber pérdidas macuquinas, peligro del que podían salvar si el virrey se allanaba a
retardar por pocos meses la ejecución del mando regio.
Ricardo Palma
26.- Prohibiciones a los servidores públicos.-Prohíbese a los servidores públicos: a) Abandonar injustificadamente el trabajo; b) Ejercer otros cargos o desempeñar actividades extrañas a sus funciones durante el tiempo fijado como horario de trabajo para el desempeño de sus labores oficiales, excepto aquellos que sean autorizados para realizar sus estudios o ejercer la docencia en las universidades e instituciones politécnicas del país, reconocidas legalmente, siempre y cuando aquello no interrumpa el cumplimiento de la totalidad de la jornada de trabajo; c) Retardar o negar injustificadamente el oportuno despacho de los asuntos...
Cuando un jugador es sancionado con tarjeta amarilla (conducta incorrecta) y tarjeta azul al mismo tiempo dicho jugador cumplirá un castigo de 7 (siete) minutos. 15. Retardar inicio o reanudación de juego.
Simulación Todo jugador que intente engañar al árbitro simulando lesión o pretendiendo haber sido objeto de infracción será culpable de simulación y se le amonestará por conducta antideportiva. Retardar la reanudación del juego Los árbitros amonestarán a jugadores que retarden la reanudación del juego mediante las siguientes tácticas: • Lanzar un tiro libre de un lugar erróneo con la deliberada intención de obligar al árbitro a ordenar su repetición • Jugar con el pie lejos el balón o llevárselo en las manos después de que el árbitro ha detenido el juego • Provocar deliberadamente una confrontación tocando el balón después de que el árbitro ha detenido el juego.