EL NUEVO EIBRO DEL
YOGA
Una practica guía ilustrada con fotografías y dibujos paso a paso
A Swami Vishnu-devananda
Cómo usar este libro
Este libro ofrece al lector toda la información necesaria para empezar a practicar
el yoga en su hogar. La esencia de la práctica quoda establecida en «La sesión
básica», En las páginas 64-65 hay un simple diagrama que muestra al principiante
cómo ha de proceder y, en el capitulo «El cicio de la vida», se hallarán sesiones
de práctica modificadas para adaptarse a determinadas edades y diferentes
condiciones físicas, especialmente durante el embarazo y la tercera edad.
Haga de la sesión básica su punto de referencia constante a medida que vaya
incorporando a tas sesiones las técnicas expuestas en «La relajación» y en
«La respiración». Una vez familiarizado con la sesión básica y con las prácticas
de respiración y meditación más sencillas, podrá empezar a introducir el materia)
que se ofrece en «Las asarías y sus variaciones», y prácticas de respiración y de
meditación más avanzadas. Si trabaja de esta manera llegará a confeccionar
una rutina diaria que se adapte a su estilo de vida. Y si asiste además a clases
de yoga, esto favorecerá sus propias sesiones.
Nota
Es Importante que siga paso a paso las instrucciones para encontrar su propio
ritmo, y que proceda sistemáticamente de acuerdo con lo que se le sugiere
respecto al orden de las asanas, los períodos de relajación y la duración de la
práctica. Tenga siempre en cuenta cualquier advertencia que se haga y jamás
fuerce una postura. No hay necesidad de precipitarse ni de esforzarse: cada cuerpo
es diferente; ya irá encontrando el nivel adecuado para usted de manera natural,
Prólogo
En la actualidad, más que en cualquier otro momento de la historia de la humanidad, los
occidentales están sometidos a formas de estrés que escapan de su control. Miles y miles de
personas se refugian en tranquilizantes, somníferos, alcohol y otras sustancias, en un vano
intento de hacer frente a estas situaciones. En 1957 llegué a Estados Unidos enviado por mi
maestro Swami Sivananda. Mi maestro me dijo: «Ve, que la gente está esperando. Muchas
almas de Oriente están ahora reencarnándose en Occidente. Ve allá, despierta la conciencia
oculta de sus recuerdos y reencamínalos por la senda del yoga».
El yoga, la más antigua de las ciencias de la vida, puede enseñarlos a controlar
el estrés, no sólo a un nivel físico, sino también mental y espiritual. El cuerpo humano
se puede comparar con un coche. Cualquier automóvil, ya sea un Rolls Royce o un
cacharro viejo y oxidado, necesita cinco cosas para poder funcionar adecuadamente:
lubricación, un sistema de refrigeración, corriente eléctrica, combustible y un conductor
sensato sentado al volante. En el yoga, las asarías, o posturas, lubrican el cuerpo,
conservan los músculos y las articulaciones en buen funcionamiento, tonifican los órganos
internos y estimulan la circulación, sin provocar fatiga alguna. La relajación completa
refresca el cuerpo, en tanto que el pranayama o respiración yóguica aumenta el prana, la
corriente eléctrica. Los alimentos, el agua y el aire que respiramos nos proporcionan el
combustible. Finalmente, la meditación aquieta la mente, el conductor del cuerpo. Me
ditando, aprende uno a controlar y, en última instancia, a trascender el cuerpo, que es su
vehículo físico.
Cualquier persona, sea cual sea su edad, condición o religión, puede practicar el yoga
beneficiándose de esta disciplina. Después de todo todos necesitamos respirar; y todos
sufrimos de artritis si nuestra alimentación es incorrecta. Se aprende a meditar con una
flor, con la estrella de David o con Krishna o Rama. El objeto de la concentración puede
ser diferente, pero la técnica sigue siendo la misma. Los primeros yoguis buscaron
respuesta a dos cuestiones fundamentales: «¿Cómo puedo liberarme del dolor?»
y «¿Cómo puedo triunfar sobre la muerte?» Descubrieron que mediante las asanas
se puede controlar el dolor físico; mediante el pranayama, el sufrimiento emocional,
y gracias a la meditación se puede llegar a la auténtica comprensión de uno mismo.
Una vez libres de falsas identificaciones con nombres y formas, podemos trascender
completamente el cuerpo hasta encontrar el Sí Mismo, que es inmortal. Ya ven, pues, que
aunque el yoga se inicia con el cuerpo, termina por trascenderlo.
En conclusión, me gustaría decirles que el yoga no es una teoría, sino una práctica
de vida. A quien jamás haya saboreado la miel, de nada le sirve que le digan que es
buena: no lo entenderá hasta que la pruebo. Practiquen el yoga y comprenderán por
ustedes mismos los beneficios que aporta. Este libro les ayudará a iniciarse en esta
disciplina y, durante el camino, les servirá de inspiración y de compañía.
Sumario
10 Introducción al yoga
74
Los tres Bandhas
Ujjayi
Surya Bheda
Rhasstrika
Samanu
22 La relajación
24 La postura del
26 La relajación final
cadáver
28
La sesión básica
30
32
La secuencia de las asarías
Comienza la sesión:
La postura fácil
El cuello y los hombros
Ejercicios para los ojos
34
36
38
El saludo al sol
Elevación de las piernas
La postura sobre
40
42
44
46
48
50
52
54
56
58
60
62
64
Ejercicios de respiración avanzados:
76
La dieta
78
80
Las tres gunas
Los alimentos naturales
82
84
El cambio de dieta
El ayuno
86
La meditación
la cabeza
La postura sobre
88
90
92
El dominio de la mente
Los principios de ia meditación
Comenzar a meditar
los hombros
El arado
93
96
El tratak
Los mantras
98
Las asanas y sus variaciones
El puente
El pez
La flexión hacia
delante
.
La cobra
</
El saltamontes
El arco
La semitorsión de columna
El cuervo
La postura de las manos a los pies
El triángulo
Esquemas básicos para la práctica
66
La respiración
68
70
El prana y el cuerpo sutil
La respiración básica:
Kapaiabhati
Anuloma Vlloma
Brahmari
Sitkari
Sithali
100 El ciclo de la postura sobre la cabeza:
Variaciones de las piornas
El escorpión
Variaciones de los brazos
La postura sobra la cabeza en loto
Postura invertida con apoyo en una pierna
108 El ciclo de la postura sobre los hombros:
Variaciones de ios brazos y do las piernas
Variaciones del arado
Variaciones del puente y del pez
114 El ciclo de la flexión hacia delante:
Variaciones de la flexión hacia delante
La postura de la cabeza a las rodillas
Torsiones con abertura lateral de piernas
Estiramiento de piernas y brazos
El piano inclinado
122 El ciclo de la flexión hacia atrás:
Variaciones de la cobra y del saltamontes
Variaciones del arco
La rueda
La postura de rodillas
El guerrero
La rueda en posición arrodillada
El diamante
La luna creciente
La paloma
156 El ciclo de la vida
158 La maternidad:
El programa de práctica
164 Asanas especiales para el embarazo:
Modificaciones de la postura sobre los
hombros y del arado
Estiramientos contra la pared
El balanceo pélvico
Modificación de la cobra
El gato
Ejercicios perineales
La relajación
La postura en cuclillas
170 La niñez
172 La vejez:
Ejercicios de calentamiento
Las asanas modificadas
132 El ciclo de posturas sentadas:
La torsión de columna
El loto:
176 El yoga y la salud
Variaciones del loto
La postura del arquero
La postura de la pierna detrás de la cabeza
Las aberturas de las piernas
178 La armazón del cuerpo:
Los músculos
El esqueleto
Los discos invertebraies
Los movimientos de la columna
142 El ciclo de equilibrio:
El pavo real
La postura sobre las manos
Variaciones del cuervo
El águila
B árbol
Las aberturas de pie
La postura del león
La postura del Señor Nataraja
La postura de pie
La postura de la cabeza a ios pies
Variaciones del triángulo
152 Los ciclos de asanas
154 Los kriyas
182 Los ciclos de la nutrición:
La digestión
La respiración
La circulación
185 El equilibrio vital:
La tiroides y ia postura sobre los hombros
fas glándulas
Los nervios
188 Glosario de términos sánscritos
190
191
índice alfabético
Centros de yoga Sivananda Vedanta
10
INTRODUCCIÓN AL YOGA
A,
I ntrod ucción al yog
¿Cualquiera puede practicar el yoga. No se necesita ropa ni equipo especial:
basta con disponer de un pequeño espacio y con sentir un intenso deseo de llevar
una vida más sana y más satisfactoria. Las posturas -o asanas- del yoga ejercitan
todas las partes del cuerpo, estirando o tonificando músculos y articulaciones,
la columna vertebral y toda la estructura ósea, y operando asimismo sobre los
órganos internos, glándulas y nervios, a los que mantiene en un excelente estado
de salud. Al liberar la tensión mental y física, las asanas liberan nuestro caudal de
energía. Los ejercicios de respiración yóguica, conocidos corno pranayama,
revitalizan el cuerpo y ayudan a controlar la mente, haciéndole sentir calmado
y renovado; la práctica del pensamiento positivo y de la meditación incrementa
la claridad y el poder mental y la intensidad de la concentración.
El yoga es una ciencia holística de la vida, que se originó en la India hace muchos
miles de años. Es el sistema de desarrollo y evolución personal más antiguo del
mundo, y abarca el cuerpo, la mente y el espíritu. Los antiguos yoguis tenían una
comprensión profunda de la naturaleza esencial del hombre, y de sus necesidades
para vivir en armonía consigo mismo y con el medio ambiente. Concibieron el cuerpo
físico como un vehículo, en el cual la mente es el conductor, el alma, la verdadera
identidad del hombre, y la acción, las emociones y la inteligencia, las tres fuerzas
que movilizan el cuerpo-vehículo. Para que haya una evolución integrada, estas tres
fuerzas deben estar en equilibrio. Aquellos primeros maestros, teniendo en cuenta la
relación recíproca entre le cuerpo y la mente, dieron forma a un método especialísimo
para mantener dicho equilibrio, un método que combina todos los movimientos
necesarios para asegurar la salud física con las técnicas de respiración y de
meditación que han de garantizarnos la paz mental.
El yoga en su vida
Es mucha la gente que comienza a interesarse por el yoga como
una manera de mantener un cuerpo flexible y en forma, grato a la vista
y que le haga sentirse segura de sí misma. Otros se acercan a esta
disciplina en busca de ayuda o alivio para dolencias, como la tensión
o el dolor de espalda. Hay quienes vienen impulsados simplemente
por la sensación de que no están obteniendo suficiente de la vida.
Sea cual sea la razón que nos hace acercarnos a él, el yoga puede ser
para nosotros un instrumento, una herramienta para conseguir no
solamente aquello que andamos buscando, sino más. Para entender
qué es el yoga, es necesario experimentarlo personalmente. A primera
vista, no parece más que una serie de posturas extrañas, que mantienen
el cuerpo esbelto y flexible. Pero aquel que siga practicándolo con
constancia se dará cuenta de que su manera de encarar la vida ha
cambiado, pues mediante la persistencia en la tonificación y la relajación
del cuerpo, la mente comenzará a sentir un estado de paz interior que
es su verdadera naturaleza. En esto radica la esencia del yoga: realización
y comprensión de nosotros mismos que consciente o inconscientemente
todos buscamos y hacia la cual evolucionamos gradualmente.
12 INTRODUCCIÓN AL YOGA
SI podemos llegar a controlar la mente y los pensamientos, no habrá límites para
nuestra capacidad de logro, puesto que son nuestras propias Ilusiones y prejuicios
los que nos inmovilizan y nos impiden una total realización de nosotros mismos.
La fisiología del yoga
Del mismo modo que esperamos que nuestro coche se desgaste con el tiempo,
nos resignamos a que nuestro cuerpo pierda eficacia. Jamás nos preguntamos
si es en verdad inevitable, ni podemos, como parece que les sucede
a los animales, seguir funcionando bien la mayor parte de nuestra vida. De hecho,
el envejecimiento es, en buena parte, un proceso artificial, causado principalmente
por la autointoxicación o el autoenvenenamiento. Si mantenemos todo nuestro
cuerpo limpio y bien lubricado, podremos reducir de forma significativa el proceso
catabólico del deterioro celular.
En los últimos años, la investigación médica ha prestado más atención a los efectos
del yoga. Por ejemplo, hay estudios que han demostrado que la relajación en la
postura llamada «del cadáver» reduce eficazmente la hipertensión, y que
la práctica regular de las asanas y del pranayama puede aliviar dolencias tan
diversas como 'la artritis, la arteriosclerosis, la fatiga crónica, el asma, las venas
varicosas y las afecciones cardíacas. En pruebas de laboratorio se ha confirmado
también la capacidad de los yoguis de controlar conscientemente funciones autónomas
o involuntarias; tales como la temperatura, el latido cardíaco y la presión sanguínea.
Un estudio de los efectos de seis meses de prácticas del hatha yoga demostró
los siguientes efectos: un incremento significativo de la capacidad pulmonar
y de la respiración; reducción del peso corporal y del cinturón adiposo;
Impresiones de energía
El efecto vigorizador de las asanas
o posturas yóguicas se revela claramente
en la fotografía Kirliati que presentamos.
La impresión de la izquierda se hizo antes
de una sesión de 15 minutos de asanas.
Cenando se volvió a fotografiar la mano del
mismo sujeto después de la sesión, apareció
un aura mucho más intensa y completa.
Lo interesante es que una sesión de quince
minutos de gimnasia con el mismo sujeto
no produjo ningún efecto en el aura.
INTRODUCCIÓN AL YOGA 13
aumento de la capacidad de resistencia al estrés y disminución de los niveles de
colesterol y azúcar en la sangre; el resultado de todo ello es un efecto estabilizador
y restaurador de los sistemas naturales del cuerpo. Hoy ya no puede haber duda
alguna sobre la eficacia del yoga como medicina, tanto preventiva como curativa.
La historia del yoga
Los orígenes del yoga se desvanecen en las brumas del tiempo. Es considerado
como una ciencia divina de la vida, que fue revelada a los sabios iluminados durante
la meditación. La prueba arqueológica más antigua de su existencia se encuentra
en varios sellos de piedra que muestran figuras en posturas yóguicas, halladas en el
valle del Indo; se calcula que datan aproximadamente del año 3000 a. de C.
La primera mención del yoga está en la vasta colección de escrituras que constituye
los Vedas, de los cuales una parte se remonta por lo menos al año 2500 a. de C.,
aunque el pilar de las enseñanzas yóguicas y de la filosofía conocida como vedanta
se encuentra en los Upanishads, que forman la última parte de los Vedas.
En la filosofía vedanta prima la idea de una realidad o conciencia absoluta,
que se conoce como Brahman, y que subyace en el universo entero.
Krishna
Hacia el siglo VI a. de C. aparecieron dos grandes poemas épicos: el Ramayana,
de Valmiki, y el Mahabharata, de Vyasa, que contiene el Bhagavad Gita, quizá la
escritura yóguica mejor conocida. En el Gita, Dios o Brahman, en su encarnación
como Krishna, instruye al guerrero Arjuna en el yoga, y específicamente en la
forma de alcanzar la liberación mediante el cumplimiento de los deberes
de la vida. La espina dorsal del raja yoga está constituida por los Yoga
Sutras de Patanjali (p. 19), textos probablemente escritos en el siglo III a. de C.
Yogui en meditación
Son numerosas las tallas y pinturas
que dan fe de la antigüedad
de las prácticas yóguicas. Esta estatuilla
medieval de piedra muestra a un yogui
en la postura del loto.
023£43
INTRODUCCIÓN AL YOGA 15
El texto clásico sobre el hatha yoga es el Hatha Yoga Prndipka, que describe las
diversas asanas y ejercicios respiratorios que constituyen la base de la moderna
práctica del yoga.
El significado del yoga
La meta fundamental de todos los aspectos de la práctica del yoga es reunir
el Si Mismo individual (jiva) con la conciencia absoluta o pura (Brahman).
«El arco es el OM sagrado y la flecha
nuestra propia alma. Brahman es
el blanco de la flecha, el objeto
del alma. Así como una flecha se
une con su blanco, que el alma
vigilante se una con él.»
Mundaka Upanishad
De hecho, la palabra yoga significa literalmente «unión». La unión con esta realidad
inmutable libera el espíritu de todo sentimiento de separación, emancipándolo de la
ilusión del tiempo, del espacio y de la causalidad. Lo único que nos impide realizar
nuestra verdadera naturaleza es nuestra propia ignorancia, nuestra incapacidad para
distinguir entre lo que es real y lo que no lo es.
Tradicionaltnente,
se considera que el dios
Shiva es el fundador
Los gobernantes temporales de la India han buscado
originario del yoga.
siempre la sabiduría espiritual de los yoguis.
16 INTRODUCCIÓN AL YOGA
Pero incluso en esta ignorancia, es frecuente que el espíritu humano perciba que
algo falta en su vida: algo que no pueden satisfacer ni el logro de una rmela ni el
cumplimiento de un deseo, En la vida de cada Individuo, la búsqueda incesante
de amor, de éxito, de cambios y de felicidad es prueba de esa percepción
fundamental de una realidad que sentimos pero que no podemos alcanzar.
Según la enseñanza del yoga, la realidad es por definición inmutable e inmóvil;
por ende, el mundo, si universo manifiesto, que se encuentra en un estado de
flujo perpetuo, es ilusión, es Maya. Esta idea se simboliza con la imagen
de Shiva, el Señor de la Danza, al que se representa con un pie en el aire:
cuando lo apoye, el universo, tal como lo conocemos, dejará de existir.
El universo manifiesto no es más que algo superpuesto sobre lo real,
algo proyectado sobre la pantalla de la realidad de manera muy semejante
a como, en si cine, se proyecta una película en la pantalla. Así como,
caminando en la oscuridad, podemos confundir un trozo de cuerda
con una serpiente, de igual forma, sin luz, confundimos lo irreal con lo real:
superponemos o proyectamos nuestras ilusiones sobre el mundo real.
Las tres etapas de la evolución
La naturaleza ilusoria de la realidad temporal se refleja en la búsqueda
de la partícula final e Indivisible de la materia en la cual está empeñada la
ciencia moderna. Esto ha llevado a la comprensión de que materia y energía
son intercambiables, de que ¡a apariencia de solidez que percibimos en la
materia es algo creado por el movimiento o la vibración: cuando un ventilador
está en movimiento, lo vemos como un círculo completo. La mayor parte
de lo que percibimos como sólido es, en realidad, espacio vació; st pudiéramos
«eliminar» todo e¡ espacio de los átomos de nuestro cuerpo y conservar
solamente lo que «no es espacio», no podríamos alcanzar a ver lo que quedarla.
La creación de Maya
En la filosofía yóguica no había originariamente más que el Sí Mismo: energía
indiferenciada, infinita, inmutable y sin forma. El proceso de diferenciación que ha
conducido al universo manifiesto, al mundo físico que conocemos, se describe de
varias maneras diferentes. Primero estuvo el Espíritu, o Purusha; después sobrevino
un gran estallido (la teoría del Bíg Bang, la «gran explosión»), causante
de la evolución del universo objetivo, que es Prakríti, el mundo manifiesto que
percibimos. Una vez que emergió Prakríti, se diferenciaron las tres cualidades
conocidas como gunas (p. 78), que en el Purusha hablan estado en equilibrio.
El mismo proceso se describe a veces como la diferenciación del «yo» y el «esto»,
del sujeto y el objeto, y, mitológicamente, como Shakti. que emerge de Shiva;
en el ascenso de la kundaiini (p. 68), cuando se alcanza el estado
de supraconclencia, los dos principios se reúnen y ya no hay más ilusión.
En el diagrama superior, «yo»
representa la unidad, y «esto»,
la materia. Antes de la evolución,
todo es uno, el pi aña se halla
en estado potencia!. En la etapa
intermedia, el prana se activa
y da origen a la materia, percibida
todavía como parte de la unidad.
En ¡a etapa final del universo
manifiesto, hay dos pasos: primero,
se percibe la materia separada de la
unidad (izquierda); segundo, tanto
la inenle como la materia se perciben
separadas de la unidad (derecha).
El yogui y el pavo real
Este grabado del siglo XV!u
El karma y la reencarnación
representa un yogui que, como
Para un joven yogui, cuerpo y mente son parte del mundo ilusorio de la materia,
que tiene un periodo de vida limitado, pero el espíritu es eterno y, cuando un cuerpo
se desgasta, pasa a otro. Como dice la Bhagavad G/fa, «Así como un hombre
forma de devoción, da de comer a
un pavo real; en la mitología hindú,
el pavo real representa a Krishna.
18 INTRODUCCIÓN AL YOGA
se despoja de la ropa gastada para vestir prendas nuevas, también el Sí Mismo
encarnado se despoja de los cuerpos usados para entrar en otros nuevos».
Mediante el ciclo de las reencarnaciones vamos acercándonos a la reunión con el
Sí Mismo interior, a medida que el velo de la ignorancia se hace más tenue. La ley
del karma (de la causa y el efecto, de la acción y la reacción) es una idea central en
el pensamiento yóguico. Toda acción y todo pensamiento dan su fruto, ya sea en
esta vida o en vidas futuras. Cosechamos lo que sembramos, y con lo que
hacemos y pensamos en el presente vamos modelando nuestro futuro.
La rueda de la vida y de la muerte
La rueda simboliza el ciclo de la existencia:
el ciclo perpetuo de nacimiento, muerte y
Las sendas del yoga
renacimiento, del cual el hombre
En el yoga hay cuatro sendas principales: la del karma yoga, la del bhakti yoga,
la del jnana yoga y la del raja yoga. Cada una de ellas se acomoda a diferentes
se libera cuando alcanza la plena
realización del Sí Mismo.
INTRODUCCIÓN AL YOGA 19
temperamentos o maneras de encarar la vida, Todas conducen, en última instancia,
al mismo destino: a la unión con Brahmán o Dios, y es necesario integrar
las lecciones de cada una de ellas si se ha de alcanzar la auténtica sabiduría.
El karma yoga (el yoga de la acción) es la senda escogida, principalmente, por las
gentes de naturaleza extrovertida. El karma yoga purifica el corazón enseñándonos
a actuar desinteresadamente, sin pensar en logros ni recompensas.
Al desapegares de los frutos de la acción y ofrecérselos a Dios, el hombre aprende
la sublimación del ego, Para lograrlo, es una ayuda mantener la mente centrada
con ¡a repetición de un mantra (p. 97), mientras uno se entrega a cualquier actividad.
El bhakti yoga es el camino de la devoción, que atrae especialmente a las personas
de naturaleza emotiva. El yogui bhakti está motivado principalmente por la fuerza del
amor, y ve a Dios como la encarnación del amor. Mediante la plegaria,
la adoración y e! ritual, se entrega a Dios, canalizando y transmutando
sus emociones en un amor o una devoción incondicionales. Parte fundamental
del bhakti yoga es salmodiar las alabanzas del Señor. El pana yoga (el yoga del
conocimiento o de la sabiduría) es la más difícil de las sendas y exige al intelecto
y a la voluntad un esfuerzo tremendo. A partir de la filosofía del vedanta, el yogui
jnana usa la mente para indagar en la naturaleza de ésta. Del mismo modo que
diferenciamos ei espacio interior del espacio exterior de una copa, así nos vemos
a nosotros mismos en relación con Dios. El jnana yoga lleva a experimentar
directamente ta unidad con Dios, rompiendo la copa, disolviendo los velos
de la ignorancia. Antes de practicar el ¡nana yoga, es necesario que el aspirante
haya integrado las lecciones de las otras sendas yóguicas, porque, sin desinterés
y sin amor de Dios, sin fuerza de cuerpo y alma, ia búsqueda de la autorreallzación
puede convertirse en una mera especulación ociosa. El raja yoga (la senda
que nos ocupa principalmente en este iibro) es la ciencia del control físico y mental.
Llamado con frecuencia «la vía regia», el raja yoga ofrece un método global para
controlar los procesos del pensamiento, convirtiendo nuestra energía mental
y física en energía espiritual.
PRATYAHARA v
PRANAYAMA
ASANAS
Los ocho miembros del raja yoga
.
Compilados por el sabio Patanjali en los Yoga Sufras, los ocho miembros forman
una serie progresiva de pasos o disciplinas que, purificando la mente y el cuerpo,
conducen al yogui a ¡a iluminación; yarna, niyama, asanas, pranayama, pratyahara,
dharana, dhyana y samadhi. Los yamas, o restricciones, se dividen
en cinco mandamientos morales, que apuntan a la destrucción de la naturaleza
inferior y que son: no violencia; veracidad en la palabra, el pensamiento y la acción;
no robar; moderación en todas las cosas y no posesividad. Los niyamas,
u observancias, se dividen también en cinco. Fomentan las cualidades positivas y
son: la pureza; el contentamiento; la austeridad; el estudio de tos textos sagrados,
y vivir manteniendo constantemente la conciencia de la Presencia Divina.
Las asanas son las posturas, y el pranayama es la regulación de la respiración.
Pratyahara significa dirigir los sentidos hacía dentro para aquietar la mente,
en preparación para dharana, o concentración, que a su vez conduce a dhyana,
o meditación, que culmina en el samadhi o supraconcíenda.
NIYAMA
YAMA
Los ocho miembros del raja yoga
20 INTRODUCCIÓN AL YOGA
Swami Sivananda
Nacido en 1887, Swami Sivananda
fue un gran yogui y un sabio que
consagró su vida al servicio de la
humanidad y al estudio del vedanta.
Su prescripción para la vida espiritual
se resume en seis sencillas consignas:
«Sirve. Ama. Da. Purifica. Medita. Realiza.»
El yoga en el mundo moderno
El yoga es una ciencia viviente, que ha evolucionado a lo largo de miles de años,
y sigue haciéndolo de acuerdo con las necesidades de la humanidad,
Una de las figuras más importantes de su evolución reciente ha sido la de Swami
Sivananda. Este gran maestro hindú se formó y ejerció como médico antes de
renunciar al mundo para encaminarse por la senda espiritual. Hombre
de una energía y una fuerza prodigiosas, publicó más de trescientos libros,
folletos y periódicos que respaldaban, con la autoridad de su formación médica,
las enseñanzas del yoga, a la vez que explicaban, en términos simples y directos,
los más complejos temas filosóficos. Además de haber establecido un ashram
y una academia de yoga, en 1935 Swami Sivananda fundó la Divine Ufe Society
(Sociedad de la Vida Divina), dedicada a los ideales de verdad, pureza,
no violencia y autorrealización. En su ashram de Rishikesh formó a muchos
discípulos excepcionales en el yoga y en el vedanta, entre ellos a Swami Vishnudevananda, a quien envió a difundir la práctica del yoga en Occidente.
Swami Vishnu-devananda llegó en 1957 a San Francisco y pasó varios años
viajando por Estados Unidos, dando conferencias y haciendo demostración
INTRODUCCIÓN AL YOGA 21
Los cinco principios
La relajación adecuada libera la tensión de los músculos y aporta al
organismo una sensación de reposo tan reparadora como una noche de sueño
profundo. La rela jación repercute en todas tus actividades y te enseña
a conservar la energía y a desprenderte de preocupaciones o temores.
La dieta adecuada es nutritiva
y equilibrada, y a base de. alimentos
naturales. Mantiene el cuerpo ligero
y flexible y sosiega la mente, a la vez
que confiere una gran resistencia a
la enfermedad.
El ejercicio adecuado lo proporcionan
las posturas yóguicas, o asanas, que actúan
El pensamiento positivo
y la meditación ayudan a hacer
sistemáticamente sobre todas ¡as partes del
desaparecer ¡os pensamientos negativos
cuerpo, estirando y tonificando músculos y
y a silenciar la mente, hasta trascender,
ligamentos, manteniendo flexibles la
en última instancia, todos
columna y las articulaciones, y mejorando
los pensamientos.
la circulación.
La respiración adecuada es una respiración plena y rítmica
en la cual, para incrementar el aporte de oxígeno, se usa la totalidad
de los pulmones. Los ejercicios de respiración yóguica, o pranayama,
enseñan a recargar el cuerpo y a controlar el estado mental, regulando
la circulación del prana, es decir, de la fuerza vital.
de las asanas, antes de establecer una red internacional de centros y ashrams
de yoga Sivananda Vedanta. Además de ser uno de los principales exponentes
mundiales del raja y del hatha yoga, Swami Vishnu-devananda se dedicó
también activamente a la causa de la paz y de la fraternidad universal; en una
de sus misiones de paz, en 1971, pilotando un pequeño avión, sobrevoló los
puntos conflictivos del planeta (Belfast, el canal de Suez y Lahore, en Pakistán
occidental) «bombardeándolos» con folletos que clamaban el fin de la violencia.
Maestro de gran dinamismo personal, Swami Vishnu-devananda inspiró
en sus ashrams a miles de estudiantes y, mediante sus escritos, cambió la vida
de muchos más. Tras haber observado atentamente los estilos de vida y las
necesidades de los pueblos de Occidente, sintetizó la anligua sabiduría del yoga
en cinco principios básicos que son fáciles de incorporar a nuestra propia forma
de vivir y que constituyen la base de una vida larga y saludable. En torno a estos
cinco principios, que son los que resume la ilustración de esta misma página,
ha sido estructurado este libro.
_
U\ RELAJACIÓN 23
La relajación
cabeza. Esta alternancia de tensión y relajación es
Vivir con la mente y el cuerpo relajados es nuestro
necesaria, porque sólo aprendiendo a reconocer
estado natural, un derecho que por nacimiento nos
la sensación de tensión podrá estar seguro de
corresponde, pero el ritmo de vida que llevamos ha
que ha logrado relajarse. Entonces, así como
hecho que lo olvidemos. Quienes todavía con
en la vida normal la mente ordena a
servan el arte de la relajación poseen la
los músculos que se tensen y se
clave de la buena salud, la vitalidad y
«El alma que se
contraigan, tú podrás valerte
la paz del ánimo, pues la relajación
mueve en el mundo de los
de la autosugestión para enviar
es un tónico de todo el ser, capaz
sentidos y, pese a ello, mantiene
a los músculos el mensaje de que
de liberar vastos recursos de
en armonía los sentidos [...]
deben relajarse. Con la prác
energía.
encuentra descanso
tica aprenderás gradualmente a
El estado de la mente está
en la quietud.»
utilizar tu mente subconsciente
íntimamente vinculado al estado
para controlar los músculos invo
Bhagavad Gita
del cuerpo. Si los músculos están
luntarios del corazón, el aparato diges
relajados, la mente tiende a relajarse;
tivo y otros órganos.
si la mente se angustia, el cuerpo tam
Tanto para relajar como para concentrar la mente,
bién padece. Toda acción se origina en la mente.
hay que respirar regular y rítmicamente, concentrándose
Cuando ésta recibe un estímulo que la pone en alerta,
en el proceso de respiración. Sin embargo, hasta que no
indicándole la necesidad de acción, envía un mensaje a
se alcanza la paz espiritual, la relajación mental y física
través de las vías nerviosas a fin de que los músculos
jamás
puede ser completa, pues mientras uno se iden
se contraigan, preparándose para reaccionar. En el
tifique
con su cuerpo y su mente, seguirá albergando
continuo bullicio y acoso del mundo moderno, la mente
temores y preocupaciones, cólera y dolor. Relajarse
se ve constantemente bombardeada por estímulos, lo
espiritualmente significa desapegarse, convertirse en un
que puede causar una pauta reaccional de alerta
testigo del cuerpo y de la mente, con el fin de identificarse
perpetua, conocida como «respuesta de lucha o
con el Sí Mismo o Conciencia Pura, que es la fuente de la
huida». Como resultado, muchas personas se pasan
verdad y la paz que residen en el interior de todos nosotros.
gran parte de la vida -incluso cuando duermen- en un
Cuando te relajes, sentirás que te fundes, que te
estado de continua tensión mental y física. Todos
expandes, que te vuelves cálido y ligero. Cuando ya ha
tenemos nuestros propios puntos de tensión, ya sea la
desaparecido toda tensión muscular, una suave euforia
mandíbula contraída, el ceño fruncido o rigidez en el
se adueñará de todo tu cuerpo. La relajación no es
cuello. Esta tensión innecesaria no sólo es causa de
tanto un estado como un proceso, una serie de niveles
gran incomodidad, sino que también representa un
de profundidad creciente. Es cuestión de dejarse
drenaje constante de nuestros recursos energéticos, y
llevar, de no seguir autoafirmándose; de no hacer,
es la causa fundamental del cansancio y la mala salud;
más bien que de hacer. A medida que relajes todo el
porque, aunque no nos demos cuenta de ello, usamos
cuerpo y respires con lentitud y profundidad, se pro
energía para ordenar a los músculos que se contraigan
ducirán ciertos cambios fisiológicos: disminuye el
y también para mantenerlos contraídos.
consumo de oxígeno y se elimina menos anhídrido
En esta sección presentamos la técnica yóguica de
carbónico; la tensión muscular se reduce, y se observa
relajación, que constituye una parte esencial de la
una disminución en la actividad del sistema nervioso
práctica. Una buena relajación abarca tres aspectos:
simpático y un incremento en la del parasimpático.
relajación física, mental y espiritual. Para relajar el
Incluso unos pocos minutos de relajación profunda
cuerpo hay que tenderse en la «postura del cadáver»
reducirán más eficazmente la preocupación y la fatiga
(p. 24) e ir tensando y relajando sucesivamente cada
que muchas horas de sueño intranquilo.
parte del cuerpo, trabajando desde los pies hacia la
24 LA RELAJACIÓN
La postura del cadáver
La «postura del cadáver», o savasana, es la postura de relajación clásica,
que se practica antes de cada sesión, entre las asaras y en la relajación final (p. 26).
Parece engañosamente sencilla, pero en realidad es una de las asarías más difíciles
de ejecutar, además de que cambia y evoluciona con la práctica. Al final de una
sesión de asarías, tu savasana será más completa que al comienzo, porque las otras
asarías habrán estirado y relajado los músculos de forma progresiva. La primera vez
que te tiendas, procura mantener una posición simétrica, ya que la simetria ofrece
el espacio adecuado para que todas las partes del cuerpo se relajen. Ahora, empieza
a trabajar para lograr la postura. Haz rotar las piernas hacia dentro y hacia fuera,
y luego déjalas caer con suavidad hacia los lados. Haz lo mismo con los brazos.
Haz rotar la columna, volviendo la cabeza de un lado a otro para centrarla, Después
comienza a estirarte hada fuera, como movido por una fuerza centrífuga que tira de
tu cabeza en dirección opuesta a los pies, presiona tus hombros hacia abajo y separa
tus piernas de la pelvis. Déjate envolver por la fuerza de la gravedad. Siente cómo tu
peso te sumerge en una relajación más profunda, haciendo que tu cuerpo penetre y
se hunda en el suelo. Respira lenta y profundamente desde el abdomen {dcrccha),
y sube y baja con cada respiración, hundiéndote poco a poco con cada exhalación.
Siente cómo se hincha y se reduce tu abdomen. En tu cuerpo están produciéndose
muchos cambios fisiológicos importantes: la pérdida de energía se reduce,
desaparece el estrés, disminuyen el ritmo respiratorio y el cardíaco, y todo
el organismo descansa. Cuando entres en un estado de relajación profunda sentirás
que tu mente se aclara y alcanza una actitud de tranquilo desapego.
La «postura del cadáver»,
de bruces
’i iéndete boca abajo, con las piernas
ligeramente separadas, los pies hacia
dentro y los dedos de ambos pies en contacto.
Reposa la cabeza de lado, sobre las manos.
Estira el cuerpo, tensa y relaja los músculos.
Siente cómo tu cuerpo se hunde en el suelo
cuando exhalas. Practica esta postura después
de cualquiera de las asarías que se realizan boca
ahajo (como «la cobra» o «el arco»), apoyando
la cabeza alternativamente de ambos lados.
La postura del cadáver (derecha)
Tiéndele boca arriba, con una separación
de unos 45 cm entre ambos pies, y las
manos, con las palmas hacia arriba, a
unos 25 cm de los costados. Acomódate
a la postura, asegurtíndolede que tu cuerpo
esté en posición simétrica. Deja que las
piernas caigan hacía fuera, relajadas.
Cierra los ojos y respira profundamente.
Respiración abdominal
Para verificar si estás respirando
correctamente, exhala y pon las manos
sobre el abdomen, con los dedos
entrelazados, sin tensarlos. Cuando
inhales, el abdomen, al elevarse,
deberá separarte las manos.
26 U\ RELAJACION
La relajación final
La práctica del yoga te ayudará a estar más en contacto con tu cuerpo,
te permitirá ser más capaz de distinguir la tensión de la relajación y, por ende,
de someterlas a tu control consciente. Al final de una sesión de asanas debes
pasar por lo menos diez minutos en la postura de relajación final. Durante este
tiempo, irás relajando cada parte de tu cuerpo sucesivamente. Pero,
para alcanzar la vivencia de la relajación, primero has de experimentar la de la
tensión. Trabaja a partir de los pies, como se ve en las figuras. Empieza por
tensar y levantar cada parte y, después, déjala caer (no la deposites). Luego,
deja que la mente recorra todo tu cuerpo, ordenando a todas sus partes que
se relajen. Déjate llevar; sumérgete en el profundo remanso de ia mente.
Sí quieres devolver la conciencia a tu cuerpo, mueve con suavidad los dedos
de manos y pies, haz una inspiración profunda y, mientras exhalas, siéntate.
2 Manos y brazos
Levanta ¡a mano derecha un par de centímetros del
suelo. Cierra el puño, lema el brazo y después déjalo
caer. Repite la secuencia del otra lado. Relájate.
i Pies y piernas
Levanta el pie derecho del suelo, apenas
un par de centímetros. Tensa la pierna, sosténla
y después déjala caer. Repite la secuencia
del otro lado.
■a \ %
6 Cabeza
Con el mentón ligeramente hacia dentro,
gira la cabeza de un lado a otro. Vuelve
a centrar la cabeza en una posición cómoda
y bien apoyada sobre el suelo y relájate.
LA RELAJACIÓN 27
La autosugestión
Tras haber practicado la secuencia
que se muestra, visualiza en tu mente
tu cuerpo y repite, también
mentalmente, esta sencilla fórmula:
«Relajo los dedos de los pies, relajo
los dedos de los pies. Los dedos
de los pies están relajados. Ahora
relajo las pantorrillas, relajo las
pantorrillas. Las pantorrillas están
relajadas». Sigue recorriendo el cuerpo
hacia arriba, aplicando de forma
sucesiva la fórmula a todas sus partes:
estómago, pulmones, corazón,
mandíbula, cuero cabelludo, cerebro,
etcétera. Siente cómo una marea
de relajación va inundando tu cuerpo
a medida que vas recorriendo con la
conciencia sus diversas partes.
Cada vez que exhalas, siente cómo la
tensión fluye, abandonando tu cuerpo
y dejando la mente como las quietas
aguas de un remanso. Ahora,
sumérgete en profundidad en el centro
del remanso, húndete profundamente
en ti mismo y vive la experiencia
de tu verdadera naturaleza.
-n^gip^
3 Nalgas
Contrae inertemente las nalgas, levanta
un poco las caderas del suelo, arqueando
el cuerpo y mantón la posición. Afloja
la tensión y déjalas caer.
4 Pecho
Tensa y eleva la espalda y el pecho,
manteniendo las caderas y la cabeza
en el suelo. Relájate y déjalos caer.
5 Hombros
Levanta los hombros y encógelos, tensándolos
alrededor del cuello. Déjalos caer, relajados.
Ahora tira de cada brazo, por turno,
hacia abajo a lo largo del cuerpo, y relájate.
LA SESIÓN BÁSICA 29
La sesión básica
afecte, a medida que progreses Irás teniendo cada vez
En este capitulo se ofrece el conjunto básico de asanas
más conciencia de la circulación dei prana (la energía
(posturas) que constituyen el fundamento de tu práctica
vital) y de la importancia de una respiración
cotidiana del yoga. Para entender la natura
correcta (el pranayama). El propósito
leza de las asanas, es necesario que tú
final, tanto de las asanas como del
mismo experimentes sus efectos.
«Las asanas
pranayama, es purificar los naMás que ejercicios, las asanas
te
volverán
firme,
litare
dis, o canales nerviosos, para
son posturas que hay que
de
enfermedades
y
ligero
que el prana pueda fluir libre
mantener; se practicarán lenta
de
miembros.»
mente
a través de ellos y pre
y meditativamente, combina
parar el cuerpo para la movi
das con una respiración abdo
Hatha Yoga Pradipika
lización de la kundalini, la energia
minal profunda. Con toda su sua
cósmica suprema que conduce al
vidad, estos movimientos no solamente
yogui al estado de conciencia de Dios.
reavivan la conciencia y enseñan a controlar
La sesión básica es adecuada para todas las edades
el cuerpo, sino que tienen también un profundo efecto
y para cualquier nivel en que se encuentre el estudiante,
espiritual, porque nos liberan de nuestros temores y nos
desde el más absoluto principiante hasta aquel que
ayudan a cultivar la confianza y la serenidad. Al final de
cuente con años de experiencia, Si estás empezando,
una sesión de yoga te encontrarás relajado y pletórico
durante ¡as prirmeras semanas deberás seguir el curso
de energía, a diferencia de lo que suele ocurrir con
básico que encontrarás en las páginas 64-65. No te
otras formas de ejercitaclón física, que causan fatiga y
desalientes si te parece que tus progresos son lentos al
desgaste.
principio y que tus asanas no se parecen mucho a las
Hay tres etapas en cada asara: adoptar la postura,
que muestran las ilustraciones. Una práctica regular
mantenerla y deshacerla. En aras de la claridad, para
estrechará poco a poco esa brecha. Imagínate rea
enseñarte a adoptar correctamente la postura, la hemos
lizando perfectamente una asana, aun cuando no la
dividido en cierto número de pasos, Ninguno de estos pa
hayas dominado todavía. Al encarar cada asana con
sos preliminares, a menos que se especifique otra co
una actitud positiva y usando tus poderes de visa, ha de ser mantenido, sino que deben considerarse
sualización, podrás acelerar considerablemente tus
como un movimiento continuo, que conduce a la
progresos. Sobre todo, no te arriesgues nunca a
postura final. El verdadero trabajo de cada asana se
lesionarte forzando el cuerpo para adoptar una posición,
realiza mientras uno mantiene la posición; los adeptos
ni te esfuerces demasiado para ir más allá de tus
avanzados del yoga son capaces de permanecer horas
posibilidades. Sólo cuando los músculos estén rela
enteras en una misma postura. Mientras mantienes la
jados, consentirán en estirarse y te permitirán mejorar
pastura, procura permanecer inmóvil y respirar lenta y
una postura. .
profundamente, concentrando tu mente. Una vez que
Finalmente, y por más que hayamos presentado las
seas capaz de relajarte en una postura, puedes corregir
asanas
con la mayor claridad posible, ningún libro
la posición para ir consiguiendo un estiramiento mayor.
puede darte las observaciones e indicaciones que un
Cuando liberes el cuerpo de una asana, hazlo siempre
maestro realiza sobre la marcha, de manera que,
con la misma gracia y dominio que empleaste para
siempre que puedas, procura acudir a una clase para
adoptarla.
verificar si estás haciendo correctamente las posturas y
Las asanas actúan sobre la totalidad de los sistemas
aprender la forma de ritmar los ejercicios respiratorios
del cuerpo: flexibilizan la columna vertebral y las articu
y las asanas. También te resultará muy útil observar
laciones, y tonifican los músculos, las glándulas y los
a estudiantes que estén más adelantados que tú y
órganos internos, Aunque al principio la experiencia
hablar con ellos.
física de las posturas será lo que más Intensamente te
30 LA SESIÓN BÁSICA
La secuencia de las asanas
Cuando se practican las asanas es muy
importante ajustarse a una pauta de
trabajo. La secuencia que aquí ofrecemos,
preparada por Swami Vishnu-devananda,
es una amplia serie de movimientos de
calentamiento y de asaras, basados en un
sólido fundamento científico. Está pensada
para mantener ta curvatura adecuada de ¡a
columna y conservar todos los sistemas
orgánicos en buen estado de salud (pp.
176-187). Durante la secuencia, todo el
cuerpo se dobla, se estira y se tonifica.
Cada asara complementa o contrapesa la
que ia antecede. Cada serie ds asanas va
seguida de una que ofrece el estiramiento
contrario. Así, las tres asanas de flexión
hacia atrás -«la cobra», «el saltamontes» y
«el arco»- se suceden después de la
flexión hacia delante, De la misma manera,
cualquier as ana que actúe principalmente
sobre un lado del cuerpo se repite siempre
hacia el otro. Independientemente de que
el lector esté apenas empezando a
practicar el yoga o sea ya un practicante
avanzado, ha de considerar la secuencia
como un diagrama que se puede variar:
una vez pasadas las primeras etapas,
puede ir incorporando a la secuencia
asanas nuevas, tomadas de la sección
«Las asanas y sus variaciones» (pp. 98
155). No hay por qué preocuparse si no
se dispone de tiempo para realizar todas
las asanas: el esquema que aparece
en las páginas 64-65 incluye una «Clase
de medía hora». Ahora, echemos un
vistazo a los elementos que configuran la
secuencia.
La sesión se Inicia con dos o tres minutos
de relajación en la postura del cadáver o
savasana (p. 24). Es un tiempo que has de
emplear para relajarte, respirando
profundamente y concentrando la mente
en la respiración, No olvides relajarte en
esta postura después de cada asana,
hasta que el ritmo cardíaco y el respiratorio
hayan vuelto a su frecuencia normal.
(Después de «la cobra», «el saltamontes»
y «el arco», descansa boca abajo.)
y facilitando la realización de las demás
asanas que integran la secuencia.
Ahora, tiéndete en el suelo para practicar la
serie de elevaciones de las piernas, que
refuerzan los músculos del abdomen y de
la parte inferior de la espalda, con lo que
preparan el cuerpo para ia postura sobre
la cabeza.
A continuación, siéntate en la postura fácil
(o en una de las otras posturas
de meditación) para practicar el
pranayama, o ejercicios de respiración (pp,
67-75), que te recargarán de energía. Sin
cambiar de postura, alivia cualquier rigidez
que pueda haber en la parte superior del
cuerpo practicando los ejercicios para
cuello y hombros y, después, los
ejercicios para los ojos, que fortalecerán
unos músculos poco ejercitados.
Ii
En la postura sobre la cabeza -una
de las asanas más Importantes-, sólo
la cabeza y los antebrazos están en
contacto con el suelo, y el cuerpo está
completamente invertido. Mantener esta
posición aporta enormes beneficios.
Para hacer «el saludo al sol» te pondrás
de pie. Los movimientos de flexión y
extensión de esta secuencia de doce
asanas calientan y entonan el cuerpo
entero, dando flexibilidad a la columna
A continuación viene una serie de tres
posturas (la postura sobre los hombros, «el
arado» y «el puente») que se ejecutan todas
ellas a partir de la misma posición del cuello
y los hombros. En la postura sobre los
hombros, el cuerpo vuelve a estar invertido,
y el torso y las piernas se elevan, como en la
postura sobre la cabeza, pero ahora el peso
del cuerpo descansa sobre los hombros, los
brazos, la cabeza y el cuello, y la parte alta
de la columna y el cuello están estirados.
LA SECUENCIA DE LAS ASANAS 31
«El arado» aumenta el estiramiento del
cuello y de la parte superior de la
columna, y lleva el tronco y ¡as piernas
hacia atrás, haciendo que los pies vayan
a descansar detrás de la cabeza, En
«el puente», el torso vuelve hacia delante
hasta que los pies descienden frente
a¡ cuerpo, arqueando la columna en
dirección opuesta a la del arado.
Los principiantes necesitarán relajarse
en la postura de! cadáver entre estas tres
asanas, pero con la práctica se alcanzará
el control y la flexibilidad suficientes
para bajar desde la postura sobre los
hombros al «arado», de éste volver a la
postura sobre los hombros, y pasar
directamente al puente sin tener
necesidad de tenderse y relajarse.
El pez actúa como contrapostura de las
tres asanas anteriores, comprimiendo, en
vez de estirarlos, el cuello y la parte
superior de la columna, y aliviando la
rigidez de esta zona.
Viene ahora la flexión hacia delante,
que intensifica la postura del arado, pero
aqui es más bien en ¡a base de la
columna donde se da el mayor
estiramiento. La postura va seguida por
una serie de tres asanas que se trabajan
boca abajo: «la cobra», «el saltamontes»
y «el arco», que aumentan la flexibilidad
de toda la espalda. En «la cobra»,
la cabeza y la parte superior del cuerpo
se elevan y se arquean hacia atrás,
En «el saltamontes», la cabeza
y el pecho se mantienen en el suelo,
mientras que se elevan las piernas
y las caderas. «El arco» combina
los movimientos de las otras dos
posturas de flexión hacia atrás,
arqueando simultáneamente ambas
mitades del cuerpo, con apoyo exclusivo
sobre el abdomen. Tras haber flexionado
el cuerpo hacia delante y hacia atrás,
ahora te sentarás para practicar
la media torsión de columna, que hace
rotar el cuerpo hacia cada lado, impo
niendo a la columna una torsión lateral.
Sigue ahora «el cuervo», un buen ejercicio
de equilibrio y de concentración, en el cual
sólo las manos permanecen en el suelo,
soportando todo el peso del cuerpo.
Las asanas terminan con dos posiciones
de pie: la postura de las manos
en los pies, que flexiona el cuerpo hacia
delante, inviniendo el torso, y finalmente
«el triángulo», que estira la columna hacia
uno y otro lado sucesivamente. Todas las
sesiones concluyen con la relajación final.
Tendido sobre la espalda en la postura
del cadáver, durante diez minutos por lo
menos, se van relajando sucesivamente
las diversas partes del cuerpo como se
describe en la página 24. Es importan
tísimo que desde el comienzo integres
este tiempo de relajación en tu sesión de
asanas. De no ser así, es probable que la
mente encuentre una excusa para excluirlo,
lo que no te permitirá beneficiarte
plenamente de la práctica de las asanas.
Cuestiones prácticas
Lo único que realmente necesitas para la
práctica de las asanas es tu cuerpo y el
suefo, además de un poco de disciplina.
Procura habituarte a hacer las asanas
todos los días a la misma hora, ya que es
más beneficioso realizar diariamente una
secuencia breve que hacer sesiones largas
pero más espaciadas, Resérvate un tiempo
especial que puedas dedicarte a ti mismo,
libre de las distracciones del mundo
exterior. Las horas ideales son por la
noche, antes de comer o por la mañana
temprano, aunque a esta hora notarás
que el cuerpo está un poco más rígido.
Sea cual fuere el momento que escojas,
siempre debes hacer las asanas con el
estómago vacío; procura no comer nada
desde por lo menos una hora antes de
la sesión. Practica las asanas sobre una
manta, con ropa holgada y cómoda,
que no obstaculice la respiración ni la
circulación. Descálzate y quítate el reloj y
cuaJquíer joya. Sobre todo no debes sentir
frío, porque los músculos se tensarían.
Practica en una habitación bien ventilada
o, si el tiempo ¡o permite, al aire libre.
32 LA SESIÓN BÁSICA
Comienza la sesión
La postura fácil
Después de haberte relajado unos
minutos en la postura del cadáver,
levántate y siéntate en la postura fácil,
sukhasana, para la práctica
del pranayama (pp, 67-75) y de los
ejercicios para cuello, hombros y ojos
que aquí presentamos. Esta asana es una
de las posturas de meditación clásicas
y ayuda a enderezar la columna, reduce
el ritmo del metabolismo y tranquiliza
la mente. Si mantener la postura le resulta
incómodo, apoya la parte posterior de las
nalgas sobre una manta doblada.
Para estirar de manera uniforme los
músculos de las piernas, cuida, al adoptar
la postura, de alternar siempre la posición
de las piernas, Cuando estés
en condiciones, sustituye la postura fácil
por la del medio loto o el loto.
La postura fácil
Senlotio en el suelo, dobla las rodillas
y, cogiéndotelas con los brazos,
oprímelas contra el pecho para
enderezar la columna. Ahora suelta
los brazos y cruza las piernas, dejando
que las rodillas caigan hacia el suelo
mientras mantienes la cabeza
y el cuerpo erguidos.
El cuello y los hombros
Muchas personas acumulan tensión
en el cuello y los hombros, y la tensión
produce rigidez, malas posiciones
y dolor de cabeza. La repetición de
estos cinco ejercicios afloja la tensión,
aumenta la flexibilidad y tonifica
los músculos. Hazlos lentamente,
manteniendo la columna recta, el cuello
relajado y los hombros centrados.
Primero, deja caer la cabeza hacia atrás,
y después directamente hacia delante.
Ahora, manteniendo erguida la cabeza,
gírala hacia la derecha todo lo que
puedas, vuelve al centro y gírala todo lo
que puedas hacia la izquierda. Después
deja caer la cabeza hacia delante y hazla
rotar, describiendo un círculo tan amplio
como te sea posible. Repítelo en la
dirección opuesta, Ahora levanta el
hombro derecho y déjalo caer. Haz lo
mismo con el izquierdo. Finalmente,
levanta los dos hombros juntos y vuelve
a dejarlos caer.
3 Rotaciones de cuello:
empezando desde atrás,
luego a la derecha,
2 Oreja derecha hacia
adelante, a la izquierda
el hombro derecho; oreja
y de nuevo atrás fx 5);
Las rotaciones deL cuello
izquierda hacia el
después en dirección
1 Cabeza hacia atrás, cabeza
hombro izquierdo (x 5).
opuesta (x 5).
hacia delante, con la barbilla
contra el pecho fx 5).
Elevación de los hombros
1 Hombro derecho arriba y abajo;
hombro izquierdo arriba y abajo (x S).
2 Ambos hombros arriba; ambos
hombros abajo (x 5).
COMIENZA LA SESIÓN 33
Ejercicios para los ojos
Como cualquier otro grupo muscular,
los músculos de los ojos necesitan ejercicio
para mantenerse fuertes y sanos. Durante la
mayor parte del tiempo apenas si efectuamos
desplazamientos mínimos de la mirada de
izquierda a derecha, como cuando leemos, y
si queremos mirar hacia otra parte, volvemos
la cabeza. En la medida en que hacen mover
los ojos en todas las direcciones, sin volver la
cabeza, estos cinco ejercicios refuerzan
los músculos oculares y ayudan a
prevenir la vista cansada, al mismo tiempo
que mejoran la visión. Respira normalmente
mientras los practicas. Primero, mira hacia
arriba y, después, hacia abajo. Ahora mira lo
más lejos posible hacia la derecha, y luego
hacia la izquierda. Ahora, mira hacia arriba a la
derecha, y luego, diagonalmente, hacia abajo
a la izquierda. Repite todos los movimientos
en la dirección opuesta. Ahora, imagínate un
reloj muy grande. Empieza por mirar hada
arriba, a las 12, y después recórrelo con la
vista en el sentido de las agujas, dos vueltas
muy lentamente, y luego tres más con mayor
rapidez. Repite el ejercido en sentido contrario.
Finalmente, coloca el pulgar a unos treinta
centímetros de la cara, y mira alternativamente
el dedo y la pared del fondo. Para terminar,
no olvides dedicar unos momentos
al «palmeo» de los ojos.
\
/
Ejercicios para los ojos
1 Mira hacia arriba y hacia ahajo (x 5).
2 Mira lo más lejos posible hacia ¡a derecha y luego hacia ¡a izquierda (k.
3 Mira hacia arriba a la derecha y hacia abajo a la izquierda (x 5);
hacia arriba a la izquierda, hacia abajo a la derecha (x 5).
4 Mira hacia arriba y describe un círculo con la vista en el sentido
de las agujas del reloj (x 5); repítelo en sentido contrario fx 5).
5 Mírate, el pulgar, después la pared, y ve alternando el enfoque próximo
con el lejano (x 5).
Palmeo
Frótate vigorosamente las palmas hasta
que las sientas calientes. Ahora apoya
suavemente las líjanos huecas sobre
los ojos, sin presionarlos. El calor
y la oscuridad calman y relajan la vista.
34 LA SESIÓN BÁSICA
El saludo al sol
El «saludo al sol», o surya namaskar,
flexibüiza todo el cuerpo, preparándolo
para las asanas. Es una graciosa
secuencia de doce posturas que se
practican hilvanadas en un solo
ejercicio. Cada posición contrarresta
la que la precede, estirando el cuerpo
en diferente sentido y expandiendo
y contrayendo alternativamente el pecho
para regular la respiración. Practicada
diariamente, dará gran flexibilidad a la
columna y a las articulaciones y reducirá
la cintura. Una ronda de «saludo al sol»
está formada por dos secuencias: en
la primera, el pie izquierdo guía el
movimiento en las posiciones 4 y 9;
en la segunda, lo hace el pie derecho.
Manten las manos en el mismo lugar
desde la posición 3 a la 10, y procura
coordinar los movimientos con la
respiración. Comienza practicando
cuatro vueltas y ve aumentando poco
a poco hasta llegar a doce.
12 Mientras exhalas,
vuelve suavemente
a la posición erguida
y baja los brazos
a los costados. /■■
'
.
11 Mientras inhalas, estira
tos brazos hada delante y después hacia
arriba y hacia atrás, por encima de la
cabeza, mientras te. inclinas lentamente
hacia atrás desde ¡a cintura, como
en la posición 2.
10 Mientras
exhalas, lleva
la otra pierna al
frente y dóblate,
hacia delante
desde la cintura,
colocando .
las palmas de las
manos como en
la posición 3.
9 Mientras inhalas, da un paso hacia
delante y coloca el pie izquierdo
(o. derecha) entre las manos. Apoya
la otra rodilla en el suelo y mira
hacia arriba, como en la posición A.
8 Mientras exhalas, vuelve a apoyarte
sobre los dedos de. los pies, eleva
las caderas y estírate hasta formar
una «V» invertida, Procura empujar
tos talones y la cabeza hacia abajo,
y mantener los hombros hacia atrás.
7 Mientras inhalas, baja las caderas, estira
los dedos de los pies y arquéate hacia atrás.
Mantén las piernas juntas y los hombros hacia
abajo. Mira hacia arriba y hacia atrás.
En la mitología hindú se adora al
dios Sol como símbolo de salud y
de vida inmortal. El Rig Veda declara
que «Suyra es el Alma, tanto de las
cosas móviles como de las
Inmóviles». El «saludo al sol» se
originó como una serie de
postraciones ante el sol.
Tradicionalmente se realiza al
amanecer, de cara a! sol naciente.
Con el tiempo, cada una de las
doce posturas llegó a tener su
propio mantra, que celebra aspectos
de la divinidad solar.
EL SALUDO AL SOL 35
1 Ponte de pie, erguido, con los
pies juntos y las manos en
actitud de oración, frente al
pecho. Asegúrate de que tu peso
2 Inhalando, estira
esté distribuido de manera
los brazos hacia arriba
uniforme. Exhala.
y arquéate hacia atrás desde
la cintura, empujando las
caderas hacia delante,
con las piernas rectas.
Relaja el cuello.
3 Exhala, dóblate hacia
delante y apoya las
palmas en el suelo, con
las puntas de los dedos
de las manos en línea
con los dedos de los pies,
'z-íV-'r
jlexionando las rodillas
si es necesario.
/ ''ívx.-'
V/‘í
4 Inhala mientras te agachas y llevas la
pierna izquierda (o derecha) hacia atrás
y apoyas la rodilla correspondiente en el
suelo. Arquéate hacia atrás y mira hacia
arriba, levantando el mentón.
5 Mientras retienes el aliento,
lleva la otra pierna hacia
6 Mientras exhalas, baja
¡as rodillas y luego la
frente, mientras mantienes
levantadas las caderas.
atrás y soporta el peso
del cuerpo con las manos
y los dedos de los pies. Mantén
la cabeza y el cuerpo en línea,
y mira al suelo, entre ambas
manos.
A
36 LA SESION BASICA
Elevación de las piernas
Los siguientes ejercicios preparan el
cuerpo para ias as anas, reforzando
en particular los músculos abdominales
y de la parte inferior de la espalda, que se
usan para levantarse aJ adoptar la postura
sobre la cabeza, y estilizan y fortalecen
la cintura y los muslos. Si tienes
los músculos débiles, es probable que te
encuentres arqueando la parte inferior de
la espalda o apoyándote en los hombros
para ayudarte a levantar las piernas.
Para sacar el máximo beneficio de los
ejercicios, asegúrate de que la totalidad de
la espalda se apoya en el suelo, y manten
relajados el cuello y los hombros. Todos
estos ejercicios se inician con las piernas
juntas y las palmas de las manos
apoyadas en el suelo a los costados.
Elevación de una sola pierna
1 Mientras inhalas, levanta la pierna derecha
lo más alto que puedas; después, mientras exhalas,
bájala. Repite e! movimiento con la pierna
izquierda. Haz todo el ejercicio tres veces.
2 Mientras inhalas, levanta la pierna derecha,
luegu cógela con ambas manos y tira de ella hacia
ti, manteniendo la cabeza en el suelo. Haz unas
cuan tas respiraciu nes.
Elevación de una sola pierna
Se eleva una pierna, mientras
que la otra permanece firme en el suelo.
Al principio, puedes apoyarte en las
manos para ayudarte a levantar la pierna.
Una vez hayas fortalecido los músculos,
apoya las manos a los costados
con las palmas hacia arriba. Mantén
ambas rodillas estiradas y presiona
hacia abajo la parte inferior de
la espalda para enderezar la columna.
3 Ahora levanta el mentón hasta la espinilla
y mantén la postura durante una inspiración
profunda; después, mientras exhalas, baja la
cabeza y la pierna. Repítelo tres veces de cada lado.
La simple liberación
de los vientos
Simple liberación de los vientos
1 Mientras inhalas, dobla la rodilla derecha
sobre el tronco, rodéala con las manos
y oprímela contra el pecho. Suéltala
mientras exhalas y repite con la pierna
izquierda.
t,.
2 Procede como en l, y después lleva
el mentón hasta la rodilla fiexionada.
Respira y vuelve a la posición inicial.
Repite la secuencia con la pierna izquierda.
Corno su nombre da a entender,
este ejercicio (rafayanasana) efectúa
un suave masaje del aparato
digestivo y alivia el exceso de gases
en el estómago y los intestinos.
Además, tonifica y estira la parte
inferior de la espalda. Mientras
lo practiques, resiste la tendencia
a despegar del suelo la parte inferior
de la espalda o las nalgas, y procura
mantener todo lo firme que puedas
la pierna que permanece
en el suelo.
ELEVACIÓN DE LAS PIERNAS 37
Elevación de ambas piernas
De los movimientos de elevación de piernas
que ensenamos aquí, éste es el que exige
más esfuerzo, sobre todo si los músculos
abdominales están poco ejercitados.
Al principio quizá no puedas levantar del
todo las piernas, o tal vez tengas que doblar
ligeramente las rodillas mientras las levantas
y sólo puedas enderezarlas una vez
elevadas. (Es más fácil levantar las piernas
si se apoyan las palmas de las manos
contra el suelo.) Si tienes especialmente
débiles los músculos de la parte Inferior de
la espalda o los abdominales, entrecruza
los dedos y apoya las manos sobre
el abdomen, para crear un sostén adicional.
Presiona hada abajo con los dedos cada
vez que necesites contraer los abdominales,
Sea cual sea el método que adoptes, cuida
de mantener siempre ias nalgas y la parte
inferior de la espalda bien apoyadas contra
el suelo, En cuanto puedas levantar sin
esfuerzo ambas piernas, bájalas lo más
lentamente posible y, entre una y otra
elevación, deja los pies a dos o tres
centímetros del suelo, para hacer trabajar
más los músculos.
Elevación de ambas piernas
Acostado boca arriba en el suelo,
levanta ambas piernas mientras
inhalas, manteniendo ¡os rodillas
rectas y las nalgas pegadas al nielo;
después exhala y bájalas. Repítelo
diez veces.
Nota. Procura que la parle inferiür de la espalda
permanezca apoyada en el suelo mientras bajas
las piernas, para no hacerte daño en la columna.
La doble liberación
de los vientos
Doble Liberación de los vientos
1 Mientras inhalas, dobla las rodillas,
abrázalas y oprímelas contra el pecho.
Mientras exhalas, suelta las piernas.
2 Mientras inhalas, lleva las rodillas al pecho,
como antes, y después levanta el mentón
hasta las rodillas. Ahora, mécele suavemente
hacia, delante y hacia atrás, y de un lado
a otro. Mientras exhalas, suelta las piernas.
Al igual que la versión en que se trabaja
con una sola pierna, de la página
anterior, también este ejercicio masajea
los órganos abdominales y ayuda
a liberar los gases intestinales.
En la posición 1, mantén bajos la cabeza
y fos hombros, y empuja contra el suelo
la parte inferior de la espalda.
Cuando hagas el movimiento de
balanceo, procura mantener un ritmo
constante y controlado. El balanceo
libera la columna de cualquier rigidez,
masajeando suavemente las vértebras,
los músculos de la espalda y los
ligamentos.
38 LA SESIÓN BÁSICA
La postura sobre la cabeza
La reina de las asanas, la postura sobre la cabeza, o sirshasana, es una de las
más beneficiosas tanto para el cuerpo como para la mente. Al invertir los efectos
normales de la gravedad, descansa el corazón, mejora la circulación y alivia
la tensión en la parte inferior de la espalda. Si se practica con regularidad, ayudará
a prevenir problemas de espalda y a mejorar la memoria, la concentración y las
facultades sensoriales. Al invertir el cuerpo, también se profundiza la respiración,
aportando al cerebro una mayor provisión de oxígeno mediante la sangre;
cualquier dificultad respiratoria que puedas sentir al comienzo no tardará en pasar.
Para dominar la postura sobre la cabeza no se necesita mucha fuerza; se trata,
principalmente, de dominar el miedo y convencerte de que la puedes hacer.
La clave del equilibrio está en el trípode formado por los codos y las manos.
Has de cuidar que los codos no se muevan de su posición.
«Quién practique diariamente durante
tres horas la postura sobre la cabeza
conquistará el tiempo.»
Yoga Tattva Upanishad
1 Arrodíllate y apoyo el peso sobre
los antebrazos. Rodea los codos
con las manos.
3 Coloca la parte trasera de la cabeza
sobre las manos entrelazadas y la
Vs
coronilla en el suelo. Las manos y
los codos forman un trípode, con
2 Suelta las manos y colócalas
lo que ejercen de firme base del
4
frente a ti, con los dedos
cuerpo invertido.
y eleva las caderas.
Ahora endereza las rodillas
entrelazados. Los codos ya
no se moverán de esta posición.
3 Sin doblar las rodillas, aproxima tanto
como te sea posible los pies a la cabeza.
Empuja las caderas hacia atrás para que
el cuello no se incline hacia delante
ni hacia atrás, sino que forme una
línea recta con la columna.
6 Dobla las rodillas, acercándolas al
pecho, y levanta los pies del suelo,
empujando las caderas hacia atrás
mientras lo haces. Cuando llegues a este
7
punto, detente: no intentes levantar más
dobladas, lleva los muslos a la vertical,
tas piernas de momento.
valiéndote de los músculos abdominales.
Entonces, manteniendo las rodillas
8 Ahora estira lentamente las piernas.
Sentirás que la mayor parte del peso
del cuerpo descansa sobre los antebrazos.
Para bajar, invierte los pasos 5, 6 y 7,
y descansa en la posición fetal durante seis
respiraciones profundas.
La posición fetat
Esta postura de relajación se usa para
normalizar la circulación después de la
postura sobre la cabeza, y para estirar
la columna en sentido contrario después
de las flexiones hacia atrás. Arrodíllate
y siéntate sobre los pies, con los talones
hacia fuera. Apoya la frente en el suelo
y después coloca los brazos laxos a lo largo
del cuerpo, con las palmas hacia arriba.
Advertencia. Las personas que sufran de
hipertensión, glaucotna o desprendimiento
de retina deben abstenerse de practicar la
postura sobre la cabeza.
40 LA SESIÓN BÁSICA
La postura sobre los hombros
De acuerdo con Swaml Sivananda, hay tres posturas que, por sí solas, mantienen
el cuerpo en perfecta salud: la postura sobre la cabeza, la postura sobre los hombros
y la flexión hacia delante. La posición sobre los hombros vigoriza y rejuvenece el cuerpo
entero; su nombre en sánscrito, satvangasana, significa literalmente «postura de todas
las partes». Ideal para levantar el ánimo, esta asana proporciona muchos de los
beneficios de la postura sobre la cabeza, con la diferencia de que, al colocar el cuerpo
invertido en ángulo recto con la cabeza, se estira el cuello y la parte superior de la
columna y, lo que es más importante, se estimulan las tiroides y la paratiroides
al presionar el mentón contra la base de la garganta. La postura favorece la respiración
abdominal profunda, porque limita el uso de la parte alta de los pulmones. Al comienzo,
puede producir una sensación de constricción, pero pronto te acostumbrarás a relajarte
mientras mantienes la postura. Para deshacer la postura sobre los hombros deberás
siempre desenroscarte como se explica en esta misma página.
«Este yoga debe ser realizado con fe,
con corazón fuerte y valeroso.»
Bhagavad Gita
1 Tiéndete en el suelo boca arriba con
las piernas juntas y los brazos a los
2 Separa las caderas del suelo y eleva
costados, con las palma de las manos
las piernas por encima y por detrás
hacia abajo. Mientras inhalas, apóyate
de la cabeza, hasta formar con el
en las manos para levantar las piernas
tronco un ángulo de unos 45°.
rectas por encima de ti.
Para deshacer la postura
sobre los hombros
3 Mientras exhalas, dobla
Para deshacer la postura, desciende
las piernas hasta un ángulo de unos
45° por encima de la cabeza, pon las
manos en el suelo con las palmas hacia
abajo y ve desenroscándote lentamente
vértebra por vértebra. Respira con
normalidad hasta que toda la columna
descanse en el suelo y tengas las
piernas en ángulo recto con respecto
a ella. Entonces exhala mientras
vas bajando poco a poco las piernas,
manteniendo firmes las costillas.
apoyando las manos en la espalda,
los brazos para sostener el cuerpo,
tan cerca de los hombros como te sea
posible, con los pulgares hacia los costados
y los demás dedos hacia la espalda. Empuja la
espalda hacia arriba, mientras levantas las piernas.
4 Ahora endereza la columna y lleva las piernas
a la posición vertical. Presiona firmemente el mentón
contra la base de la garganta. Respira lenta y
profundamente en esta postura, tratando poco a poco
de aproximar más los codos entre sí y de bajar más
las manos por la espalda hacia los hombros,
para así enderezar el torso. Mantén los pies relajados.
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42 LA SESION BASICA
El arado
«El arado», o balasana, completa el movimiento de la postura sobre los hombros,
llevando pies y manos hacia abajo hasta tocar el suelo, con lo que el cuerpo toma
la forma de un arado primitivo. La postura comparte muchos de los efectos de la
postura sobre los hombros: da flexibilidad a la columna y al cuello, nutre los nervios
espinales y fortalece los músculos de la espalda, los hombros y los brazos, a la vez
que los libera de tensiones. Al comprimir el abdomen, da masaje además a los
órganos Internos. Cuando practiques «el arado», cuida de mantener la columna bien
estirada y las rodillas bien extendidas. Quizás al principio no llegues con los pies al
suelo, pero a medida que la columna se vuelva más flexible, el peso de las piernas
terminará por hacerlos descender. Los estudiantes avanzados pueden pasar
directamente al «arado» desde la postura sobre los hombros, pero ios principiantes
necesitarán relajarse entre ambas asanas. Para deshacer el arado, usa ia misma
técnica de desenroscarte que para la postura sobre los hombros.
«Siembra amor, cosecha paz: [...]
Siembra meditación, cosecha sabiduría.»
Swami Sivananda
efe
1 Tendido de espaldas, con las piernas
¡untasy las manos a los costados con las
palmas hada abajo, inhala y levanta
las piernas, Exhala, y después vuelve
a inhalar y levanta las caderas del suelo.
JIM3
Si alcanzas cómodamente el sítelo con
los pies> llévalos lo más lejos que puedas
detrás de la cabeza y; con ¡os dedos doblados
como se ve en la jigura, empuja el torso hacia
arriba y los talones hacia atrás. Ahora estira
los brazos hacia fuera por detrás de la espalda
2 Susténte la espalda con las manos,
con las palmas de las manos contra el suelo.
manteniendo fas codos tan próximos entre
Respira lenta y profundamente.
si como te sea posible. Después, sin doblar
¡as rodillas, exhala y lleva las piernas hacia
ahajo por detrás de la cabeza. Si todavía no
puedes tocar el suelo con los pies, quédate
respirando profundamente en eifu
posición.
44 LA SESIÓN BÁSICA
El puente
Complemento del «arado», «el puente» también hace descender
los pies a partir de la postura sobre los hombros, pero en la dirección
opuesta, invirtiendo el estiramiento de la columna y aliviando la presión
ejercida sobre el cuello. Su nombre sánscrito, sethu bandhasana,
significa «la postura de construcción de puentes», refiriéndose
a la forma en que el cuerpo dibuja un arco perfecto, desde la cabeza
hasta los pies. Al hacer y deshacer la postura se refuerzan
los músculos abdominales y los de la parte inferior de la espalda,
y tanto la columna como las muñecas ganan flexibilidad. Para Hogar
al puente desde la postura sobre los hombros se necesita una
espalda bastante flexible; al principio, tendrás que elevarte desde
el suelo para adoptar la postura, como se ve en esta página.
Los estudiantes avanzados pueden practicar la postura sobre
los hombros, «el arado» y «el puente» como una misma serie.
«Hay un puente entre el tiempo y la eternidad;
y ese puente es Atman, el Espíritu del hombre.
Chandogya Upanishad
Paso 1 para principiantes. Acuéstate de espaldas con las
rodillas dobladas y los pies juntos. Pon las manos en la parte
inferior de ¡a espalda, como en la postura sobre los hombros,
y después eleva las caderas lodo lo que puedas. Ahora procede
como se explica en el paso 2 (abajo). Lentamente, vuelve a
1 Adopta la postura sobre
invertir los pasos para salir de la postura.
los hombros, sosteniéndole
la cintura con las manos.
Dobla una pierna, y baja
Advertencia. Es esencial que para el puente
el pie hacia el suelo.
se use la misma posición de las manos que para
la postura sobre los hombros, con los pulgares
hacia arriba, ya que se corre el riesgo de sufrir
un esguince si se apoyan debajo de la espalda.
2 Haz lo mismo con la otra pierna,
manteniendo los codos tan juntos como
puedas. Mantén la postura durante tres
o
cuatro respiraciones profundas por lo
menos. Inhala y regresa a la postura sobre
los hombros, y deshazla desenroscándote.
Una vez que puedas mantenerte en la
postura sobre los hombros, con las manos
bien próximas a los hombros, podrás
bajar las dos piernas juntas para.
-•iriir- .'iin'v*- pasar a la postura del puente.
46 LA SESIÓN BÁSICA
El pez
Matsya, «el pez», fue una de las encarnaciones del dios hindú Vishnu, que asumió
esta forma para salvar al mundo del Diluvio. Matsyasana, la postura del pez, es
la contrapostura de la postura sobre los hombros, y se debe practicar siempre
después de ella. Tras haber estirado el cuello y la parte superior de la columna
en la postura sobre los hombros, «el arado» y «el puente», ahora se comprimirán,
arqueándose hacia atrás, con lo que se alivia la rigidez de los músculos del cuello
y los hombros y se corrige la tendencia a cargarse de hombros. Al mantener la postura
se ejercita el pecho, se tonifican los nervios del cuello y de la espalda y se asegura
que la tiroides y la paratiroides obtengan el máximo de beneficio de la postura sobre
los hombros. También se expande plenamente la caja torácica, con lo que se favorece
la respiración profunda y se incrementa la capacidad pulmonar. Para equilibrar los
respectivos estiramientos se ha de permanecer en esta postura durante por lo menos
la mitad del tiempo que se haya dedicado a la postura sobre los hombros.
“Aquel que nada a través del océano del
tiempo contempla la grada dei Señor.»
Swami Vishnu-devananda
1 Tiéndete de espaldas con ¡as piernas estiradas
y los pies juntos. Coloca las manos, con las
palmas hacia abajo, debajo de ¡as nalgas.
Nota. En la postura del pez,
las manos deben descansar
con las palmas hacia abajo, ana
2 Mientras ejerces presión sobre los codos, inhala y arquea la espalda,
junto a otra, y los codos deben
hasta llegar a apoyar ligeramente el peso sobre la coronilla. Exhala.
estar tan próximos entre sí comu
Respira profundamente mientras mantienes la postura, dejando
sea posible, debajo de ¡a espalda.
relajadas ¡as piernas y la parte inferior dei torso. Para abandonar
la postura, empieza por levantar la cabeza y volver a apoyarla
lentamente hasta la posición normal, y después libera lus brazos.
48 LA SESIÓN BÁSICA
La flexión hacia delante
La flexión hacia delante, o paschimothanasana, da la falsa impresión de ser
una postura fácil, pero en realidad se trata de una as ana muy importante que
exige gran atención. El término sánscrito paschima significa «el oeste»
y se refiere a la parte posterior de la columna. La práctica de esta postura
vigoriza los órganos Internos, reduce la grasa y estimula en su totalidad
el sistema nervioso. Antes de mantener la postura, afloja el cuerpo inhalando
y volviendo a salir de la postura, y luego, exhalando, vuelve a adoptarla,
tres veces, No intentes llevar la cabeza a las rodillas, porque al hacerlo curvarás
la columna. Procura, en cambio, llevar el torso tan adelante como te sea
posible, mientras mantienes rectas las rodillas y la columna.
«Ésta, la más excelente de todas las
asanas [...], hace que el aliento fluya a
través de sushumna, estimula el fuego
gástrico, reduce la cintura y hace
desaparecer todas las enfermedades
de los hombres.»
Hatha Yoga Pradipka
1 Desde 1aposición acostada, con los brazos
rectos extendidos hacia atrás, inhala
y yérguete hasta quedar sentado. Apunta
con los pies hacia el techo y acomódate
de manera que la porción carnosa de las
nalgas quede hacia atrás, de. modo que estés
sentado directamente sobre los isquioues.
Estira los brazos por encima de. la cabeza
para alargar la columna.
2 Entra el abdomen y exhala, mientras
te indinas hada delante desde la pelvis;
el pedio dirige, el movimiento y la espalda
se mantiene recta. Lleva el mentón hacia
las espinillas y el pecho hacia ¡os muslos;
no le dobles desde la mitad de la columna.
3 Continua descendiendo y cógete de
cualquier parte, de las piernas o de los
pies que puedas alcanzar cómodamente
sin doblar las rodillas. Con la práctica,
podrás cogerte los dedos gordos de
los pies con los índices, y bajar los codos
-w .--------
hasta el suelo, o estirar los brazos más
allá de los pies, como se ve a la derecha.
Una vez en la posición, respira profundamente, sintiéndote
avanzar un poco más cada vez que exhalas. Mantén ¡a postura
durante tres o cuatro respiraciones profundas at principio, y ve
aumentando gradualmente su número a medida que puedas
relajarte, en la postura. Cuando deshagas la asana, hazlo
estirándote hacia delante al subir.
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50 LA SESIÓN BÁSICA
La cobra
En bhujangasana, la cabeza y el tronco se arquean graciosamente hacia arriba,
como una cobra con la caperuza levantada, La columna recibe un poderoso
estiramiento hacia atrás, se refuerzan los músculos que la rodean y los órganos
abdominales resultan tonificados y masajeados. Esta postura es particularmente
eficaz para combatir el dolor y las irregularidades menstruaies, y además alivia
el estreñimiento. Realiza esta asara por etapas, tal como se muestra en las
ilustraciones, visualizando el movimiento grácil y flexible de una serpiente
a medida que flexionas poco a poco la columna hacia arriba y hacia atrás, vértebra
por vértebra. Mantén los hombros hacia abajo, ios codos contra los costados y
el rostro relajado mientras practicas la postura. Quizás al principio la cobra te resulte
una postura difícil de adoptar, pero con el tiempo la columna se te flexlbilizará
lo bastante como para que puedas poner en contacto la cabeza y los pies.
«Mediante la práctica de esta postura
la diosa serpiente (la tuerza de la
kundalini) despierta.»
Gheranda Samhita
1 Tiéndete boca abajo con tas piernas juntéis
y las manos debajo de los hombros, con las
palmas hacia abajo, y apoya la frente en el suelo.
2 Mientras inhalas, levanta la cabeza, rozando
el suelo primero con la nariz y después con el
mentón. Ahora levanta las manos y usa los músculos
de la espalda para levantar el pecho tan alto como
te sea posible. Mantén la posición durante unas pocas
respiraciones profundas y después, exhalando, vuelve
lentamente a la posición 1, manteniendo levantado
el mentón hasta el final.
4 Mientras inhalas, levanta el tronco
como antes, pero esta vez sigue
el movimiento hacia arriba y hacia
3 Mientras inhalas, levántate
atrás hasta que puedas sentir que toda
como antes, pero esta vez sírvete
la espalda se dobla hacia atrás, desde
de las manos para seguir
el cuello hasta la base, de la columna.
elevando el tronco. Sigue
Respira normalmente. Mantén
la postura tanto tiempo como
levantándote hasta llegar
a doblarte desde ¡a mitad de ¡a
te resulte cómodo; luego, vuelve
columna. Mantén ¡a posición
a bajar lentamente y relájate.
durante dos o tres respiraciones
profundas y después exhala
y desciende lentamente.
O'-S-
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52 LA SESIÓN BÁSICA
El saltamontes
A diferencia de la mayoría de asanas, «el saltamontes» o salabhasana, exige
un movimiento brusco para adoptar ía postura. Sus efectos complementan los
de «la cobra», pero así como “la cobra» se concentra sobre la mitad superior del
cuerpo, «el saltamontes» actúa principalmente sobre la mitad inferior, fortaleciendo
el abdomen, la parte inferior de la espalda y las piernas. Como las otras flexiones
hacia atrás, masajea los órganos internos, asegurando un buen funcionamiento
del sistema digestivo y evitando el estreñimiento. Al empezar, quizá no puedas
levantar las piernas del suelo más que unos cuantos centímetros; en realidad,
en esta etapa es cuando la postura se asemeja más a la de un saltamontes,
con la cola en el aire. Con una práctica regular irás descubriendo cómo contraer
los músculos de la parte inferior de la espalda para levantar más las piernas, e irás
consiguiendo al mismo tiempo la fuerza necesaria. Con el tiempo, lograrás que
las piernas se extiendan más allá de la cabeza, como se ve en la fotografía.
«Una espalda verdaderamente flexible
asegura una larga vida.»
Proverbio chino
1 Tendido boca abajo, haz una inspiración y
rueda para ponerte de lado. Cierra los puños
y colócalos uno junto al otro, con los pulgares
mirando hacia fuera. Mantén los codos
tan ¡untos como te sea posible.
Nota. Quizás encuentres que una
posición diferente, de las manos
te permite un mayor efecto
de palanca: con las palmas huecas,
apoyadas contra el suelo, o con
las manos entrelazadas.
4 Ahora, haz tres respiraciones profundas y,
2 Mientras exhalas, rueda hasta ponerte boca abajo, de modo
con la tercera inhalación, conten el aliento
que quedes tendido sobre los brazos, con la cabeza apoyada
en el mentón y los pulgares presionando contra el suelo.
y levanta ambas piernas. Mantén
la postura, respirando normalmente,
Haz unas cuantas respiraciones normales en esta posición.
y después exhala y baja ¡as piernas con un
movimiento controlado. Repítelo cuando
se te haya normalizado la respiración.
3 Inhala y levanta la pierna derecha,
usando las manos como palanca. Haz dos
Medio saltamontes
respiraciones completas, exhala y después
baja la pierna. Repite lo mismo con la
pierna izquierda. Mantén ambas piernas
rectas y no dejes oscilar las caderas.
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54 LA SESIÓN BÁSICA
El arco
«El arco», o dhanurasana, eleva simultáneamente ambas mitades del cuerpo,
combinando los movimientos de «la cobra» y del «saltamontes", y haciendo
de contrapostura del «arado» y de la flexión hacia delante. Como un arquero
que tensa el arco, te valdrás de las manos y los brazos para tirar del tronco
y de las piernas hacia arriba, y así formar una «U». Esto tonifica los músculos
de la espalda y mantiene la elasticidad de la columna, mejorando la postura
e intensificando la vitalidad. Equilibrar el peso del cuerpo sobre el abdomen
reduce, además, la grasa abdominal y mantiene sanos los órganos digestivos
y reproductores. «La mecedora», en particular, representa un poderoso masaje
para los órganos internos. Al comienzo te resultará más fácil levantar las
rodillas con las piernas separadas, pero los estudiantes más avanzados
deben procurar hacer «el arco» con las piernas juntas.
«El Om es un arco; la flecha
es e! alma; Brahman es el blanco
al quo apunta la flecha.»
Swami Víshnu-devananda
1 Tiéndele boca abajo, con la cabeza
apoyada sobre la frente, Inhala y dobla
las rodillas, y después lleva las manos hacia
atrás para agarrarte los tobillos. Exhala.
2 Mientras inhalas,
eleva la cabeza y el pecho y,
simultáneamente, tira de los
tobillos hacia arriba, levantando
del suelo muslos y rodillas.
Arquéate y mira hacia arriba.
En esta postura, haz tres
respiraciones profundas, exhala
y deshaz la asan a.
La mecedora
Colócale en la postura del «arco» y mécete hacia delante
mientras exhalas y hacia atrás mientras inhalas (no uses
la cabeza para mecerle). Repite el movimiento unas diez
veces y después relájale.
56 LA SESIÓN BÁSICA
La semitorsión de columna
La torsión de columna, cuyo nombre en sánscrito se deriva del gran sabio yogui
Matsyendra, es una de las pocas posturas que forman parte de la sesión básica y
que hacen rotar la columna. La mayor parte de las asarías la (lexionan, ya sea hacia
delante o hacia atrás, pero para que la columna llegue a ser verdaderamente flexible
es menester, además, girar el tronco lateralmente. Este movimiento tonifica también
los nervios y los ligamentos espinales y mejora la digestión. La semitorsión de
columna, o ardha matsyendras&ia, que es la que enseñamos aquí, aporta beneficios
similares y prepara el cuerpo para la postura completa (p, 132). Mantón ia columna
erguida y los hombros nivelados mientras practicas la postura, y respira de manera
sosegada y constante, acentuando un poco más la torsión cada vez que exhales.
Gira primero hacia la Izquierda, como se ve en las figuras, y repite después
la secuencia girando hada la derecha.
«Aquel que oye la música dei,
representa bien su papel en la'
Swami Sivananda
1 Arrodíllate con
¡as piernas juntas,
sentado sobre los
tahnes_
•
2 Después siéntate
a la derecha de tus
3 Pasa la pierna izquierda
pies, como se ve
por encima de la derecha,
en la ilustración.
apoyando el pie izquierdo
contra la parte externa del
muslo derecho. Procura pegar
el talón derecho a las nalgas
y mantén la columna recta.
4 Estira los bruzas
en cruz, a la altura
de los hombros,
y gira hacia la
izquierda.
5 Ahora, baja ambos brazos, pero
de modo que el derecho pase por
fuera de la rodilla izquierda
y cógete el pie izquierdo con la
mano derecha, apoyando ¡a mano
izquierda en el suelo, detrás
de ti. Mientras exhulas, vuélvete
todo lo que te sea posible hacia
la izquierda. Mira por encima
del hombro izquierdo.
58 LA SESIÓN BÁSICA
El cuervo
Esta asana ¡mita sorprendentemente la postura de un cuervo que grazna,
con el peso del cuerpo apoyado sobre los codos y las manos, y la cabeza
apuntando hada delante. «El cuervo» o kakasana, una de las más valiosas
posturas de equilibrio, es en realidad bastante fácil de lograr, aunque
pueda parecer una postura avanzada. El secreto radica en inclinarse hacia
delante lo suficiente y en impedir que la mente divague, concentrando la
atención exclusivamente en mantener el equilibrio. La práctica de esta asana
fortalecerá muchísimo las muñecas, los brazos y los hombros, aumentando
la capacidad de concentración e incrementando la capacidad pulmonar al
expandir el pecho. (En las páginas 98-155, en la sección «Las asanas
y sus variaciones» encontrarás gran variedad de posturas de equilibrio,)
«[El yogui] se ve a sí mismo en el
corazón de todos los seres, y ve a
todos los seres en su corazón.»
Bhagavad Gita
1 Ponte en cuclilbs y coloca los brazos
entre las rodillas. Apoya fas palmas
de las manos en el suelo, frente a ti,
a una distancia equivalente a la anchura
de los hombros, con los dedos abiertos
y mirando ligeramente hacia dentro.
Entonces dobla los codos hacia fuera,
haciendo que los dorsos de los brazos
se conviertan en puntales
donde se apoyarán las rodillas.
2 Escoge en el suelo, frente a ti, un punto
sobre el cual concentrarte. Inhala y,
mientras retienes el aliento, inclínale hacia
ese punto, transfiriendo el peso a las munus
y levantando los dedos de los pies.
Exhala y mantén la postura durante
tres o cuatro respiraciones profundas.
60 LA SESIÓN BÁSICA
La postura de las manos a los pies
Esta postura, cuyo nombre en sánscrito es pada hastasana, proporciona muchos
de los beneficios de la flexión hacia delante: estiliza la cintura, devuelve la elasticidad
a la columna y estira los ligamentos de las piernas, especialmente los tendones que
hay detrás de las rodillas. Favorece también la irrigación sanguínea del cerebro.
Repitamos que, tal como ocurre con la flexión hacia delante, el propósito de la asana
es doblarse hacia delante -en esta postura, hacia abajo- todo lo que sea posible,
mientras se mantienen rectas la columna y las piernas. Sujetarse los dedos de los pies
y llegar con la cabeza a las tibias serán pasos que alcanzarás naturalmente cuando la
espalda haya adquirido más flexibilidad. Respira profundamente mientras mantienes
la postura y déjate descender, doblándote un poco más hacia abajo con cada
exhalación. Para que el pecho se aproxime más a las piernas, «camina» con las manos
hacia atrás, a tus espaldas, con las palmas en el suelo como se ve en la fotografía.
<La naturaleza está constantemente
modelándote a imagen de Dios.»
Swami Sivananda
1 Erguido, con los pies juntos, exhala.
Después, inhala y levanta los brazos por
encima de la cabeza. Yergue la cabeza,
estirándote al máximo, para alargar
la columna. Mientras exhalas, dóblate
hacia delante desde la pelvis. Mantén
las rodillas y la columna tan rectas
como te sea posible.
2 Baja lodo lo que puedas, ya sea hasta que puedas
sujetarle los tobillos, o bien hasta cogerte los dedos
gordos entre el pulgar y el índice, como se ilustra
arriba. Estira la cabeza hacia tas espinillas y respira
profundamente en esta postura. Sal de la posición
lentamente. Estira los brazos por encima de la cabeza
y después bájalos lentamente hacia los costados.
62 LA SESIÓN BÁSICA
El triángulo
En el arte hindú, «el triángulo» es un poderoso símbolo del principio divino
y se encuentra con frecuencia en las yantras y marídalas que se usan para la
meditación. Con la punta hacia abajo, el triángulo representa a Shakti, el principio
femenino y dinámico; con la punta hacia arriba representa a Shiva, la fuerza masculina
y pasiva. Con trikonasana, «el triángulo», concluyen las posturas de nuestra sesión
básica. Esta postura acentúa el movimiento de semitorsión de columna e impone a
ésta un excelente estiramiento lateral, tonificando los nervios espinales y ayudando
al adecuado funcionamiento de! aparato digestivo. El cuerpo se agiliza y la realización
de las otras asarías mejora. Cuando practiques «el triángulo», fíjate en mantener ambas
rodillas rectas y en que las caderas miren directamente hacia el frente, en vez de girar
hacia atrás. Inclínate primera hacia la derecha y luego repite el movimiento ¡
doblándote hada la izquierda, como se ve en las figuras. Procura mantener
perfectamente el equilibrio en estas posturas básicas, ya que así obtendrás el control
y la concentración necesarios para practicar las variaciones más avanzadas.
«El júbilo es eterno y jamás morirá; el
dolor es ilusorio y jamás vivirá.»
Swaml Sivananda
1 En posición erguida, con las pies bien
separados (entre 90 cm y 1,20 m),
apunta con el pie izquierdo hacia la
izquierda, y con el pie derecho
ligeramente hacia la izquierda. Coloca
2 Mientras exhalas, dóblate hacia
el brazo izquierdo en cruz, al nivel
del hombro, y lleva el brazo derecho
para evitar las costillas. Desliza ¡a mano
directamente hacia arriba, contra
pierna izquierda, y sostente en la parte
la oreja derecha. Ahora, inhala.
más baja que puedas alcanzar. Mira
la izquierda y ligeramente hacia delante,
izquierda hacia abajo, a lo largo de la
hacia fuera, a la mano derecha. Antes
de deshacer la posición, haz unas cuantas
respiraciones completas y después repite
la anana, doblándote hacia ¡a derecha.
ESQUEMAS BÁSICOS PARA LA PRÁCTICA 65
i
cuánto debes estar trabajando en una postura, no durante cuánto tiempo debes mantener
ía posición final, Con cada asterisco f) que te encuentres en la secuencia, relájate
en ia postura de! cadáver, por lo menos durante un lapso equivalente a seis respiraciones
profundas completas. Para los días en que andes demasiado escaso de tiempo para
realizar toda la sesión, hemos incluido una «clase de media hora». Se trata de una
conjunto de asanas de mantenimiento, que mantendrán tu cuerpo en forma hasta
que tengas tiempo para hacer una sesión completa. Sea cual sea el esquema que sigas,
procura convertir el yoga en una parte de tu rutina cotidiana. Tal como dice Swami
Sivananda, «unos pocos gramos de práctica equivalen a una tonelada de teoría»
I
re
Pez
Arad0
11
12
13
Cobra
14
15
16
Arco
17
Cuervo
18
19
Triángulo
20 21
22
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2 min
1 min*
42
44
46
48
50
52
54
56
60
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1 min
Fase 3 g
’w
—----------- -O
O
;-í>V _
Fase 4 i5
o
1 min 1 min 5 min
Ciase de
media hora
2 min 2 min 10 min
Clase típica
(1 h, 30 min)
62 64
24
\
Puente
Flexión hacia
delante
3
Fase C0
1^
cg
Saltamontes Semitorsión
de columna
Manos
a lospies
Postura
del cadáver
LA RESPIRACIÓN 67
La respiración
El aliento es vida. Podemos vivir días enteros sin ali
cada respiración: inhalación, retención y exhalación.
mento o sin agua, pero si nos privan de respirar, la
Con frecuencia, la gente cree que la inhalación es la
muerte sobreviene en pocos minutos. En vista de ello,
etapa esencial del proceso, pero, de hecho, la clave
es pasmosa la poca atención que prestamos en la vida
de éste se encuentra en la exhalación, puesto que
normal a la importancia que tiene respirar correcta
cuanto más aire viciado se exhale, más aire fresco
mente. Para un yogui, una adecuada respi
se podrá inhalar (p. 183). Los ejercicios de
ración cumple dos funciones principales:
respiración yóguica ponen el acento
aportar más oxígeno a la sangre
especialmente en la prolongación
«Cuando
y, por consiguiente, al cerebro, y
de la retención y de la exhalación;
controlar el prana o energía vital
en algunos ejercicios, incluso, la
el aliento va y viene,
(p. 68), con lo que se llegará a
duración de la exhalación du
la mente está inquieta, pero
controlar la mente. El pranayama
plica el tiempo de la inhalación,
cuando el aliento se serena,
(la ciencia del control de la res
en tanto que la retención lo
también se serena la mente.»
piración) consiste en una serie de
cuadruplica.
Hatha Yoga Pradipika
ejercicios pensados especialmente
Cuando se inhala por la nariz, el
para satisfacer ciertas necesidades y
aire se calienta y se filtra en el pro
mantener el cuerpo en un estado de
ceso. Pero, desde el punto de vista del
vibrante salud.
yoga, la más importante de las razones para la
Hay tres tipos básicos de respiración: clavicular (su
respiración nasal es el prana. Así como es necesario
perficial), intercostal (media) y abdominal (profunda).
inhalar por la nariz para recibir los aromas del aire,
La respiración yóguica completa combina las tres
también se debe inspirar por la nariz para absorber la
clases, comenzando con una inhalación profunda,
máxima cantidad posible de prana, pues en la parte
que se continúa después en la zona intercostal y
del fondo de la nariz están los órganos olfatorios a
finalmente en la clavicular.
través de los cuales pasa el prana para alcanzar el
La mayoría de las personas ha olvidado la correcta
sistema nervioso central y el cerebro.
manera de respirar. Hacen una respiración superficial,
Los ejercicios de respiración yóguica enseñan a
por la boca, y hacen poco o ningún uso del diafragma,
controlar el prana y, por ende, a controlar la mente,
ya sea porque levantan los hombros o porque con
dado que ambos son interdependientes. Cuando uno
traen el abdomen cuando inhalan. De esta manera se
está enfadado o asustado, la respiración es super
incorpora una pequeña cantidad de oxígeno, y sólo
ficial, rápida e irregular; por el contrario, cuando uno
se usa la parte superior de los pulmones, lo que da
está relajado o sumido en sus pensamientos, la
por resultado una carencia de vitalidad y una resis
respiración se vuelve lenta. Puedes comprobarlo muy
tencia disminuida a las enfermedades.
fácilmente por ti mismo. Escucha durante un mo
La práctica del yoga exige de sus adeptos que
mento el ruido o sonido más quedo que haya en la
inviertan estos hábitos. Respirar correctamente
habitación y te darás cuenta de que, al concentrarte,
significa respirar por la nariz, manteniendo la boca
inconscientemente, has enlentecido la respiración o
cerrada, y pone en juego una inhalación y una
incluso la has contenido.
exhalación completas, que hacen trabajar los pul
Como el estado de ánimo se refleja en la forma en
mones en su totalidad. Cuando se exhala, el abdo
que respiramos, se deduce que al controlar el aliento
men se contrae y el diafragma sube, masajeando
somos capaces de aprender a controlar nuestra mente,
el corazón; al inhalar, el abdomen se expande y el
nuestros estados anímicos. Al regular la respiración,
diafragma desciende y masajea los órganos abdo
pues, no estamos solamente intensificando la pro
minales.
visión de oxígeno y de prana, sino también pre
Así como en una asana hay tres etapas (p. 29),
parándonos para la práctica de la concentración y de
también en el pranayama se distinguen tres partes en
la meditación.
68 U\ RESPIRACIÓN
El prana y el cuerpo sutil
El punto central de todas las prácticas del yoga es el movimiento del prana, la fuerza vita!
o energía vital, El prana se encuentra en la materia, pero no es la materia, Está en el aire,
pero no es el oxígeno. Es una forma sutil de energía que, transportada por e! aire, el
agua, los alimentos y la luz solar, anima todas las fuerzas materiales. Mediante la práctica
de las asanas y del pranayama, se absorbe mayor cantidad de prana, que se almacena
en el cuerpo, con lo que se logra gran vitalidad y energía. Además del cuerpo físico, los
yoguis consideran que el hombre posee otros dos cuerpos que lo rodean: el cuerpo
astral y el cuerpo causal. El prana es el vínculo vital entre el cuerpo astral y el físico, pera
fluye, principalmente, como se ve en esta misma página, por los nadis del cuerpo astral.
Existe a la vez como energía positiva y como energía negativa, y en este caso se lo
conoce como apaña. El prana como tal es un impulso aferente, cuya naturaleza consiste
en moverse hacia arriba; el apaña es eferente y se mueve hacia abajo. Cuando ambos se
unen en el muladhara chakra, se despierta la energía kundaiini.
La kundaiini y los nadis
Los nadis son canales o tubos nerviosos
del cuerpo astral, a través de los cuales
fluye el prana. Las asanas y el pranayama
están destinados a la purificación de los
nadis, porque cuando éstos se hallan
bloqueados, el prana no puede fluir
libremente, de lo cual resulta Lina mala
salud. De acuerdo con los antiguos yoguis,
hay unos setenta y dos mil nadis. De todos
ellos, el más importante es el sushumna,
cuya contraparte en el cuerpo físico es la
médula espinal. A cada lado de sushumna
hay otros dos nadis, llamados ida y píngala,
que corresponden a los ganglios
simpáticos de la médula espinal, tal como
se ve en la sección transversal de una
vértebra que aparece arriba a la derecha.
La kundaiini es una energía cósmica,
dormida o estática, a la que se suele
representar como una serpiente enroscada.
Se halla situada en la base de! nadi
sushumna, en e! muladhara chakra,
y es posible excitarla o activarla mediante
el pranayama y otras prácticas yóguícas.
El camino de la energía cósmica
Ida)' pingafa describen una espiral en torno de
sushumna, el nadi principa! del cuerpo astral.
Cuando la kundaiini durmiente se despierta,
comienza a moverse hacia arriba por el nadi
sushumna, atravesando los siete c.hakras.
1 Nadi sushumna (médula espinal)
2 Nadi píngala (ganglio simpático)
3 Nadi ida (ganglio simpático)
EL PRANA Y EL CUERPO SUTIL 69
Los siete chakras
Chakra sahasrara
Los chakras son centros de energía
situados en el cuerpo astral. Seis de
ellos se encuentran localizados a lo largo
del nadi sushumna, y el séptimo,
el sahasrara chakra, en lo alto de la
cabeza, en la coronilla. Los chakras
suelen representarse con una cantidad de
pétalos, que corresponde al número
de nadis que emanan de ellos. Cada
pétalo representa una vibración sonora
que se produce cuando la energía
kundalini atraviesa el chakra. Además,
todos los chakras, excepto el sahasrara,
tienen su propio color, su elemento y su
bija mantra, tal como se ilustra a la
derecha, y los seis se corresponden,
en el cuerpo físico, con los plexos
nerviosos situados a lo largo de la
columna. En la base del sushumna está
muladhara, que corresponde al plexo
sacro. Es allí donde duerme la kundalini.
Le sigue swadhisthana, correspondiente
al plexo prostético. Manipura, el tercer
chakra, corresponde al plexo solar y es
el centro principal de almacenamiento
del prana. Anahata, localizado en la
región del corazón, corresponde al plexo
cardíaco; vishuddha, en la región de la
garganta, al plexo laríngeo, y el ajna
chakra, situado entre las cejas, al plexo
cavernoso. Sahasrara, el séptimo chakra
y el más elevado, corresponde en
el cuerpo físico a la glándula pineal.
A medida que la kundalini va pasando
a través de los diversos chakras,
se experimentan diferentes estados
de conciencia. Cuando la kundalini llega
al sahasrara, el yogui alcanza el samadhi.
Aunque sigue funcionando en el plano
material, ha llegado a un nivel de
existencia que trasciende el tiempo,
el espacio y la causalidad.
La corona de mil pétalos de este chakra
corresponde a lo Absoluto. Cuando la
kundalini llega a este punto, el yogui
alcanza el samadhi, o supraconciencia.
Chakra ajna
Este chakra, blanco como la nieve, tiene dos
pétalos. Asiento de la mente, su mantra
es OM.
Chakra vishuddha
Este chakra, de color azul marino, tiene
dieciéis pétalos. Su elemento es el éter
y, su mantra, Ilam.
Chakra anahata
Este chakra, de color de humo, tiene doce
pétalos. Su elemento es el aire y, su mantra,
Yam.
Chakra manipura
Este chakra rojo tiene diez pétalos;
su elemento es el fuego y, su mantra, Rain.
Chakra swadhisthana
Este chakra blanco tiene seis pétalos.
Su elemento es el agua y, su mantra, Vam.
Chakra muladhara
Este chakra amarillo tiene cuatro pétalos;
su elemento es la tierra y, su mantra, Lam.
70 LA RESPIRACIÓN
La respiración básic
La respiración yóguica, o pranayama, revítaliza el cuerpo, templa las emociones y genera
gran claridad menlal. Antes de practicar los ejercicios, conviene que estés seguro de que
sabes respirar correctamente, haciendo pleno uso del diafragma, como se explicó
en la página 67. Con el fin de facilitar el flujo del prana y asegurarse de que hay espacio
para la expansión de los pulmones, los ejercicios de respiración yóguica se hacen en
posición sentada, con la columna cervical y la cabeza en línea recta, ya sea en la postura
fácil (p, 32), «el loto» (p. 134) o, si ninguna de ellas resulta cómoda, sentado en una silla
(p. 172), La respiración básica consiste en cinco ejercicios. Kapalabhati y anuloma viloma
son equivalentes, por su importancia, a la sesión básica de asanas. y deben conformar
la espina dorsal de los ejercicios de pranayama. Para comenzar, practica exclusivamente
estos dos ejercicios, antes de tu práctica cotidiana de asanas. Anuloma viloma es el
mejor ejercicio para la purificación de los nadis, con lo que se prepara el cuerpo para
formas de pranayama más adelantadas. Brahmari, sitkari y sithali son pranayamas
menores, que puedes incorporar cuando tengas tiempo para una sesión más larga.
Kapalabhati
Kapalabhati es uno de los seis kríyas, o
prácticas de purificación (p. 154), aparte
de ser un pranayama. La exhalación
forzada libera de aire viciado la parte
inferior de los pulmones, dejando espacio
para una nueva inspiración de aire fresco,
rico en oxígeno, y limpiando asi todo el
aparato respiratorio. Es un ejercicio
maravillosamente vigorizante, adecuado
para iniciar un pranayama. Traducido
literalmente, su nombre significa
«el ejercicio que hace brillar el cráneo»,
y la verdad es que, al aumentar la cantidad
de oxígeno en el cuerpo, tiene un efecto
«iluminador», que aclara la mente y mejora
la concentración. Consiste en una serie
de exhalaciones e inhalaciones, seguidas
por una retención del aliento. Para exhalar,
se contraen bruscamente los músculos
abdominales, elevando el diafragma y
provocando una salida forzada de aire de
los pulmones; para Inhalar, se relajan los
músculos, permitiendo que los pulmones
se llenen de aire. La exhalación debe ser
breve, activa y audible; la inhalación más
larga, pasiva y silenciosa. El movimiento
repetido del diafragma hacia arriba y hacia
abajo tonifica el estómago, el corazón y el
hígado. Comienza practicando tres vueltas
de veinte bombeos cada una, y
gradualmente ve aumentando hasta hacer
vueltas de sesenta bombeos.
«El pranayama es el vínculo entre las
disciplinas mentales y físicas. En tanto
que la acción es física, el efecto
es aportar calma, lucidez y
tranquilidad a la mente.»
Swami Vishnu-devananda
Una vuelta de kapalabhati
Haz dos respiraciones normales. Ahora
exhala, entrando el abdomen, y vuelve a
inhalar, aflojándolo. Repite el movimiento
veinte veces, manteniendo un ritmo
omítante, y acentuando cada vez más
la exhalación. Después inhala,
haz una exhalación completa, luego
una inhalación completa y retén el aliento
tanto tiempo como puedas hacerlo
con comodidad. Fxhaltt lentamente.
LA RESPIRACIÓN BÁSICA 71
AnuLoma viloma
En este ejercido, que alterna la respiración por
ambas fosas nasales, se inhala por una de ellas,
se retiene el aliento y después se exhala por la otra
fosa nasal, en una proporción de 2:8:4. La fosa
nasal izquierda es la vía del nadi liamado ida; la
derecha, la de píngala. En las personas realmente
sanas, la respiración se da predominantemente por
la fosa nasal correspondiente a ida durante más o
menos una hora y cincuenta minutos; después pasa
a píngala. Pero en muchas personas, este ritmo
natural se halla alterado. Anuloma viloma restablece
la paridad de este flujo, con lo que se equilibra la
circulación del prana en el organismo. Esto es
esencial para que se pueda llegar a hacer subir el
prana a lo largo de sushumna, el nadi central
(p. 68). Una vuelta de anuloma viloma está integrada
por los seis pasos que se describen y se muestran
abajo, Comienza practicando tres vueltas y ve
aumentando lentamente hasta veinte, ampliando
la cuenta de acuerdo con la proporción señalada,
EL Vishnu mudra
En anuloma viloma, se adopta con la mano
derecha el Vishnu mudra para cerrar las fosas
nasales. Dobla los dedos índice y corazón hacia
la palma, como se muestra en la figura contigua,
y llévate la mano a la nariz. Coloca el pulgar
junto a la fosa nasa! derecha y los dedos anular
y meñique junto a la izquierda. Ahora sigue
el procedimiento que se indica abajo.
Una vuelta de anuloma viloma
1 Inspira por la fosa nasal izquierda, cerrando la
derecha con el pulgar, y cuenta hasta cuatro,
2 Retén el aliento, cerrando ambas fosas nasales,
y cuenta hasta dieciséis.
3 Exhala por la fosa nasal derecha, manteniendo la
izquierda cerrada con los dedos anular y meñique,
y cuenta hasta ocho.
4 Inhala por la fosa nasal derecha, manteniendo
cerrada la izquierda, y cuenta hasta cuatro.
5 Retén el aliento, cerrando ambas fosas nasales,
y cuenta hasta dieciséis.
6 Exhala por la fosa nasal izquierda, manteniendo la derecha cerrada con el pulgar, y cuenta hasta ocho.
I
72 LA RESPIRACIÓN
Brahmarí
Sitkari
A fin de practicar brahmarí, se cierra
parcialmente la glotis mientras se inhala por
ambas fosas nasales, con lo que se produce
un mido semejante a un ronquido; después
se exhala lentamente, con un zumbido como
el de una abeja, La inhalación despeja y hace
vibrar la zona de la garganta. Producir un
zumbido mientras se exhala le permite a uno
prolongar la respiración, controlando la salida
del aliento. Esta exhalación extendida
es un ejercicio muy beneficioso para
las embarazadas como preparación
para el parto. Llamada a veces “la respiración
del zumbido», esta variante de pranayama,
además, dulcifica y aclara la voz
y es sumamente recomendable para los
cantantes. Brahmarí se ha de repetir
entre cinco y diez veces.
Sitkari y sithali (abajo) son, entre los ejercidos
de respiración yógulca, excepcionales en
cuanto que la inhalación se efectúa por la
boca y no por la nariz, En sitkari se presiona
la punta de la lengua contra el paladar,
mientras se inhala lentamente por la boca,
produciendo un sonido sibilante. Después
de haber retenido el aire durante tanto tiempo
como sea posible, se exhala despacio por
la nariz. Repite de cinco a diez veces.
Tradicionalrnente, se dice que sitkari mejora
el semblante. El Hatha Yoga Pradipika
prescribe: «Al practicar de esta manera,
uno se acerca en belleza al Dios de Amor».
Tanto sitkari como srthali refrescan el cuerpo
y alivian el hambre y la sed, por lo cual son
especialmente útiles en tiempo muy caluroso
o durante un ayuno.
Sithali
Aqui, has de sacar un poco la lengua,
curvando hacia arriba los bordes, como
se ve arriba, para formar una «cañlta»
por la cual sorberás el aire a medida que
vayas inhalando. Cierra la boca mientras
retienes el aliento y luego exhala
lentamente por la nariz. Si al principio
no eres capaz de curvar la lengua, limítate
a extenderla ligeramente por encima de
los labios y a sorber el aire por encima
de la superficie superior, Repítelo de
cinco a diez veces.
EJERCICIOS DE RESPIRACIÓN AVANZADOS 73
Ejercicios de respiración avanzados
Una vez que hayas estado practicando kapalabhati y anuloma viloma durante
algunos meses y puedas hacerlos sin esfuerzo ni incomodidad, podrás empezar
a pensar en ampliar tu sesión de pranayama con ejercicios más avanzados.
Pero primero debes asegurarte de que estás preparado. Los pranayamas avanzados
que siguen no se han de tomar a la ligera, ya que son poderosos instrumentos
para controlar la circulación del prana y elevar la energía latente de la kundalini.
Lo ideal seria que, antes de encararlos te hubieras fortalecido y purificado, tanto
en el nivel físico corno en el espiritual, por obra de varios meses de asanas
cotidianas, ejercicios de pranayama y de meditación, y una saludable dieta
vegetariana. Además de estos ejercicios avanzados, continúa practicando
por lo menos veinte vueltas de anuloma viloma al día.
Los tres bandhas
Los bandhas o «cierres», son posturas
especiales que han sido adaptadas para
conservar y aprovechar las vastas reservas
de prana que se generan por mediación de
los ejercicios de respiración avanzados. Los
bandhas no solamente impiden la disipación
del prana, sino que también permiten al
practicante regular el flujo pránico y convertir
el prana en energía espiritual. Se deben
practicar por separado durante algunos días
antes de aplicarlos a la práctica del
pranayama. Jalandhara bandha y muía
bandha se usan simultáneamente durante la
retención para lograr la unión de prana y
apaña (p, 70); uddiyana bandha se usa
después de una exhalación para impulsar
hacia arriba el prana por el nadi
sushumna y así elevar la kundalini.
Jalandhara bandha
Mientras retienes el aliento, oprime
firmemente, el mentón cuntía el
pecho (como en la postura sobre los
hombros). Esto impide que el piaña
se escape de la parte superior del
cuerpo. Al exhalar, cuida de aflojar
el bandha y levantar la cabeza.
Uddiyana bandha
Tras haber exhalado completamente, hunde el
abdomen hacia arriba y hacia atrás, en dirección
a la columna. Eslü obliga a! prana a subir
por el nadi sushumna.
Muía bandha
Mientras retienes el aliento, contrae
el esfínter anal y luego los músculos
abdominales. Esto impide que el apaña se
escape de la parte inferior del cuerpo y lo
lleva hacia arriba, para unirse con el prana.
EJERCICIOS DE RESPIRACION AVANZADOS 75
UÜayi
Surya bheda
Bhastrika
Ujjayi fortalece el sistema nervioso y el
aparato digestivo, y libera de flemas. De
acuerdo con los antiguos textos yóguicos, la
enfermedad está causada por un exceso de
flema, de viento o de bilis. Tanto ujjayi como
surya bheda son pranayamas que calientan
el cuerpo, de modo que la exhalación se
limita a la fosa nasal izquierda, refrescante,
que es la vía del nadi ida. Para practicar
ujjayi, inhala completamente por ambas
fosas nasales, mientras cierras ligeramente la
glotis (menos que en brahmarí, p. 72). Esto
produce un débil gemido, ya que el aire es
absorbido por detrás de la nariz. Retén el
aliento, aplicando jalandhara bandha y muía
bandha, y luego suelta ambos bandhas,
tápate la fosa nasal derecha con el pulgar
derecho y exhala por la fosa nasal izquierda.
Comienza practicando cinco vueltas cada
vez, y ve aumentando gradualmente su
número hasta llegar a veinte.
En surya bedha se inspira lentamente por
la fosa nasal derecha, cerrando el orificio
nasal izquierdo con el anular y el meñique
de la mano derecha; contén el aliento,
cerrando ambos orificios nasales y
presionando firmemente el mentón contra
el pecho, en jalandhara bandha-, después,
manteniendo el orificio nasal cerrado con
el pulgar, exhala por la fosa nasal
izquierda. Gradualmente se ha de ir
aumentando el período de retención.
Surya significa «sol», y se refiere a la fosa
nasal derecha, vía del nadi píngala.
Cuando se inhala solamente por esta fosa
nasal, en el cuerpo se genera calor, y las
impurezas que obstruyen el fluir del prana
se disipan. Repite surya bedha diez veces
al principio, y poco a poco ve aumentando
hasta cuarenta.
Éste es el más poderoso de todos los
ejercicios destinados a movilizar la kundalini.
Bhastrika (que significa «fuelle») consiste en una
serie de bombeos seguidos por una retención
del aliento, como en kapalabhati. Pero entre
ambos ejercicios hay importantes diferencias:
aquí los pulmones bombean con más rapidez
y esfuerzo, usando todos los músculos del
aparato respiratorio; ambas fosas nasales se
cierran y, mientras se retiene el aliento,
se aplican jalandhara bandha y muía bandha,
y se exhala únicamente por la fosa nasal
derecha, ya que durante este ejercicio el
cuerpo se calienta y se refresca luego por obra
de la transpiración. Después, practica uddiyana
bandha. Bhastrika es el mejor pranayama para
los sistemas circulatorio y nervioso, y deja la
mente clara y concentrada. Comienza con tres
vueltas de diez bombeos cada una y ve
aumentando lentamente hasta llegar a cien
bombeos y a un máximo de ocho vueltas.
Samanu
Samanu es una práctica avanzada,
destinada a la purificación de los nadis,
que combina el pranayama con la
visualización de los chakras y el japa
(p. 96) de los bija mantras del aire,
el fuego, la luna y la tierra.
1 Concéntrate en el ana ha t a
chakra y repite mentalmente
«yarn» ocho veces mientras inhalas
por la fosa nasal izquierda, treinta
y dos veces mientras retienes, y
dieciséis veces mientras exhalas
por la fosa nasal derecha.
2 Al tiempo que te concentras
en manipura chakra, repite
mentalmente «ram», usando la
misma proporción, pero inhalando
por la fosa nasal derecha y
exhalando por la izquierda.
Aplicación de los bandhas
(izquierda)
r.n bhastrika, que se describe arriba,
se usan todos los bandhas para unir
prana y apaña y para despertar la
kundalini dormida.
3 Procede de la misma manera
que en l, pero concéntrate en el
centro lunar, en la punta de la
nariz, mientras repites
mentalmente «tam». Mientras
retienes el aliento, imagínate que
el néctar de la luna te inunda
todo el cuerpo. Exhala lentamente,
concentrado en el muladhara
chakra, y repitiendo «lam».
LA DIETA 77
La dieta
Somos lo que comemos, he aquí una afirmación
anatomía y la fisiología de los primates, consumidores
verdadera en más de un sentido. El alimento es,
de fruta, las que más se aproximan a las nuestras.
naturalmente, necesario para nuestro bienestar
Pero, aparte de importantísimas consideraciones
tísico. Pero, además de ello, ejerce también un
de salud y de bienestar naturales, comer carne
efecto sutil sobre nuestra mente, puesto que la
es Ineficaz, además de suponer un desperdicio.
esencia del alimento forma la mente,
Para producir medio kilo de carne que
Una dieta natural -es decir, pura o
podamos llevar a la mesa se ne
«sátvica»- se basa en alimentos
cesitan muchos kilos de cereales;
frescos, ligeros y nutritivos, tales
«Que el yogui coma
la alimentación que se “dilapida»
como la fruta, los cereales y las
es la usada para proveer de
con moderación y sea
verduras. Mantiene el cuerpo
energía al animal. En cuanto
abstemio; de otro modo, por
esbelto y flexible, y la mente
procesadores de proteínas, los
inteligente que sea, no podrá
aguda y clara, eí estado más
animales
vivos son ineficaces.
alcanzar el éxito.»
adecuado para la práctica del
Una hectárea sembrada de ce
Siva Samhita
yoga, Una dieta pura y moderada,
reales producirá cinco veces más
rica en prana, resulta la mejor garantía
proteínas que una hectárea dedi
de salud mental y física y aporta armonía y
cada a la cría de anímales para consu
vitalidad tanto al cuerpo como a la mente. En esta
mo humano. Y jas cifras correspondientes a las
sección estudiaremos las razones en que se funda la
legumbres -diez veces más- y a las verduras de hoja
dieta yóguíca y aconsejaremos la mejor forma de
-quince veces más- resultan todavía más sorpren
cambiar a una manera de comer más sana y equi
dentes. E incluso hay algunas verduras que son más
librada.
rendldoras.
La manera yóguica de comer es, simplemente, la más
Para establecer una dieta natural debemos, además,
natural. El sol, el aire, el suelo y el agua se combinan
preguntarnos si podemos consumir con la conciencia
para producir los frutos de la tierra: verduras, frutas,
tranquila ía carne de un ser viviente, de un ser que en
legumbres, frutos secos y semillas. Todo lo bueno que
ocasiones ha sido sometido a las formas de matanza
obtenemos de estos alimentos nos llega de primera
más bárbaras que cabe imaginar. En el llamado
mano. Por el contrario, ío bueno que se obtiene de
mundo civilizado nos hemos abstraído y distanciado
comer carne, pescado o aves nos viene de segunda
de los horrores de las industrias cárnicas. Enfrentados
mano: consumimos fa carne de seres que antes han
con porciones pulcramente empaquetadas de carne
procesado la energía natural extraída de diferentes
o de pescado, ya no establecemos conexión alguna
plantas. (Es Interesante observar que comemos
entre el producto y el animal al que, innecesariamente,
sólo animales herbívoros, como las vacas, ovejas y
se ha dado muerte por causa nuestra. Ahimsa, ía
cabras; sólo muy excepcionalmente comemos criatu
santidad de todas las criaturas vivientes, se cuenta
ras carnívoras, como los perros.) La carne animal con
entre las leyes supremas de la filosofía yóguíca, y no
tiene una elevada proporción de toxinas -el 80 % de
podemos pasarla por alto si nuestro objetivo es el
los casos de envenenamiento alimentarlo están
crecimiento espiritual. Para el yogui toda la vida es
causados por la carne o por productos cárnicos- y
sagrada: cada criatura es una entidad viviente, dotada
tiende a ser causa de enfermedades. También carece
de corazón y emociones, que respira y siente, de
de las vitaminas y los minerales vítales, y contiene más
modo que la sola idea de comer carne o pescado es
proteínas de las que necesitamos. At comer carne,
inconcebible. Una vez que toma uno conciencia de
estamos obligando a nuestro cuerpo a que se adapte
cuál es ei origen de lo que come y de la forma en que
a una dieta antinatural, para la cual no está diseñado.
le afectan los alimentos, la mente va abriéndose poco
La dentadura y los Intestinos del hombre son muy
a poco y llega a darse cuenta de que todas las
diferentes de los de un carnívoro; de hecho, son la
criaturas son tan divinas como nosotros mismos.
78 LA DIETA
Las tres gunas
En el universo aún no manifiesto, la energía tiene tres cualidades, conocidas como
gunas, que coexisten en equilibrio: sativa (la pureza), rajas (la actividad, la pasión
el proceso de cambio) y tamas (la oscuridad, la inercia). Una vez que la energía
cobra forma, una de las tres cualidades predomina (p. 18). Así, en un manzano,
algunos frutos están maduros {sátvicos), otros, muy maduros (rajásicos) y otros
ya pasados (íamásicos). Pero, independientemente de cuál sea la cualidad que
prevalece, estará también presente un elemento de las otras dos. La mayor parte
de una manzana, tomada aisladamente, estará madura, pero una parte estará
podrida, aunque a simple vista no se advierta, y otra parte estará en el proceso
de transformación de un estado a otro. Las tres gunas abarcan toda existencia y
toda acción. Si'una persona comete un robo, la acción es básicamente rajásica,
pero la decisión de robar, y el motivo para hacerlo pueden ser predominantemente
tamásicos, rajásicos o sátvicos, de acuerdo con la situación. En todas las personas
hay una guna predominante que se refleja en todo lo que hacen y piensan,
Sólo la iluminación permite trascender completamente las tres gunas.
Más allá de (as tres gunas
(derecha)
Sólo el Sí Mismo iluminado, el estado
de conciencia ivtioáda coma siimadhi,
trasciende las tres gimas. En esta imagen,
todos los otras elementos (el cuerpo
y la mente del hombre, el árbol y ¡os
escalones) están sometidos a las gunas.
Los alimentos sátvicos
Los alimentos rajásicos
Los alimentos tamásicos
Constituyen la dieta más pura y más
adecuada para cualquier estudiante serlo
de yoga. La alimentación sátvta nutre el
cuerpo y !o mantiene en un estado de paz.
Además, serena y purifica la mente,
permitiéndole alcanzar su máximo potencial
de funcionamiento. Una dieta sátvica
conduce, pues, a la verdadera salud: una
mente en calma que controla un cuerpo en
forma, con una adecuada circulación de
energía entre el uno y la otra. Los alimentos
sátvicos incluyen ¡os cereales, el pan
integral, las frutas y verduras frescas, los
zumos de frutas naturales, la leche, la
mantequilla y el queso, las legumbres,
frutos secos, semillas y semillas
germinadas, la miel y los tés de hierbas.
Son rajásicos todos aquellos alimentos
demasiado picantes, amargos, ácidos
o salados. Destruyen el equilibrio entre
cuerpo y mente, alimentando el cuerpo
a expensas de la mente. Una
alimentación excesivamente rajásica
sobreestimula el organismo y excita
las pasiones, sembrando inquietud en
la mente y volviéndola incontrolable.
Los alimentos rajásicos incluyen las
sustancias picantes, tales como
las especias o las hierbas fuertes, los
estimulantes como el té y el café,
el pescado, los huevos, la sal y el
chocolate. Comer deprlsa es algo que
también se considera rajásico.
Una dieta tarnásica no es beneficiosa ni
para la mente ni para el cuerpo. Produce
una pérdida de energía, o prana, con lo
cual las capacidades de razonamiento
se ofuscan y sobreviene una sensación
de inercia. Se destruye la resistencia del
cuerpo a la enfermedad, y la mente se
llena de emociones oscuras, como el
enojo o la codicia. Tamásicos son la
carne, el alcohol, el tabaco, et ajo
y la cebolla, los alimentos fermentados,
como el vinagre, y las sustancias rancias
o excesivamente maduras. También se
considera tamúsico comer en exceso.
80 LA DIETA
Los alimentos naturales
Hasta hace poco, (os consumidores de carne, en su mayoría, miraban con cierto recelo
a los vegetarianos, considerándolos chiflados o fanáticos de la alimentación, que se
mantenían con una dieta insípida de arroz integral y '‘hamburguesas» vegetales a base
de frutos secos. Actualmente, la gente está mejor informada, pero todavía se desdeña
en ocasiones la dieta vegetariana como algo aburrido, sin Interés y además carente de
sustancias nutritivas esenciales. Los hechos demuestran precisamente lo contrario,
es decir, que si alguien necesita defenderse de semejante acusación son precisamente
los consumidores de carne. Hay amplias pruebas médicas de que una dieta
vegetariana equilibrada es sumamente saludable y proporciona todas las vitaminas,
los minerales y las demás sustancias que necesita el cuerpo. Estadísticamente, en los
vegetarianos se observa una menor incidencia de ataques cardíacos y cerebrales,
La cuestión proteínica
El temor a la deficiencia de proteínas es la
principal objeción que los consumidores
de carne plantean a las dietas vegetarianas.
Y sin embargo, Irónicamente, los propios
consumidores de carne son los que
obtienen de su alimentación las proteínas
de peor calidad, ya que son proteínas
muertas o en vías de estarlo. Nosotros
mismos somos animales y podemos
obtener las proteínas que necesitamos del
mundo vegetal, de la misma manera que
los demás animales hervíboros. La proteína
animal contiene demasiado ácido úrico
para que el hígado pueda descomponerlo,
de forma que una parte de este ácido
se elimina, pero el resto va a depositarse
en las articulaciones, causando rigidez,
y termina por provocar problemas, como la
artritis, Los frutos secos, los productos
lácteos, las algas marinas y las legumbres
-especialmente las judías de soja y
derivados, como el toíu y la leche de sojaproporcionan proteínas de primera clase,
Los occidentales están obsesionados con
las proteínas y las consideran necesarias
en mucha mayor medida de lo que en
realidad son. En realidad, entre los diversos
científicos hay discrepancias notables
en cuanto a las exigencias proteínicas
cotidianas. Actualmente, la Organización
Mundial de la Salud recomienda un
consumo diario de 25 a 50 g, como aporte
suficiente para mantener y reemplazar los
tejidos corporales.
La grasa y la fibra
Una dieta vegetariana está, además,
llena de fibra y es rica en grasas
poliinsaturadas. La falta de fibra
-contenida en los alimentos vegetales
sin retinar- en la dieta provoca varios
trastornos Intestinales. Los vegetarianos
consumen casi el doble de fibra que tas
que comen carne; consumen también
menos grasas, y las que comen tienden
a ser poliinsaturadas, en lugar de las
grasas saturadas que elevan el nivel
de colesterol en la sangre.
Comidas proteínicas completas
Hay sencillas comidas vegetarianas, bien
equilibradas en cuanto a ¡as proteínas, que
incluyen pan integral y queso o legumbres
-ya sea guisadas o en ensalada-y cereales
con leche.
LOS ALIMENTOS NATURALES 81
enfermedades renales y cáncer, su resistencia a la enfermedad es mayor, y es menos
probable que padezcan obesidad que los consumidores de cama La variedad de
frutas, verduras, legumbres, semillas, frutos secos y cereales es grande, y estos
alimentos se pueden preparar de múltiples maneras, además de ofrecer una enorme
diversidad de sabores y texturas. Para que el cuerpo se mantenga sano, la dieta debe
incluir, además de agua, cada uno de los elementos que figuran en la tabla que
ofrecemos en esta misma página, Los hidratos de carbono y las grasas son los
alimentos que aportan energía; las proteínas, vitaminas y minerales constituyen los
«materiales de construcción» esenciales para el cuerpo, Las necesidades exactas varían
de una persona a otra. La gente activa, por ejemplo, necesita más hidratos de carbono
y grasas; los niños y las embarazadas, más proteínas y calcio.
Tabla de valores de los alimentos
Clave Na
K
Ca
Mg
P
S
a
El análisis de unos pocos alimentos
comunes revela valores sorprendentemente
diferentes. Por ejemplo, los frutos secos y el
queso son muy ricos en proteínas, y el pan
es rico en minerales.
Alimentos
(100 g)
Manzanas
Plátanos
Naranjas
Col cruda
Patatas al horno
Tomates
Proteínas
(9)
0,3
0,7
0,6
1,9
Hidratos
de carbono
(g)
(g)
11,9
11,4
6,2
A, C
K Ca Mg P
K Mg P S Cl
K Mg P S Cl
B, C
B, C
A, B, C
Na K Ca Mg P S
K Ca Mg P S Cl
B
A, B, C
2,7
Na K Ca Mg P S Cl
K Mg P S Cl
KPS
B
B
Na K Ca P Cl
Na K Ca Mg P S Cl
Na K Ca Mg P S Cl
Na K Ca Mg P Cl
A
A
A
53,5
K Ca Mg P S
A, B
81,0
Na P S Ct
-
-
Na K P Cl
-
0,2
-'
3,8
0,9
Lentejas
Guisantes
7,6
17,0
Pan Integral
Pastas
Arroz
0,7
2,2
29,6
0,3
0,3
Mantequilla
0,4
-
82,0
Queso (cheddar)
Leche entera
Yogur natural
Frutos secos (almendras)
Margarina vegetal
Miel
5,8
4,2
26,0
3,3
5,0
16,9
0,1
0,4
10,6
41,8
26,0
-
4,7
6,2
4,3
0,1
76,4
Vitaminas
(más 10 mg)
K
K Mg P C!
K Ca Mg P
-
25,0
2,8
2,6
Minerales
(más 10 mg)
Grasas
Sodio
Potasio
Calcio
Magnesio
Fósforo
Azufre
Cloro
0,1
■-
0,5
0,4
33,5
3,8
1,0
A
B
-
82 LA DIETA
El cambio de dieta
Hacerse vegetariano es dar un paso positivo. Quien lo hace no sólo está diciendo que
dejará de comer carne; está abriendo la puerta que conduce a un modo de vida nuevo,
Para algunos, el cambio es fácil; a otros puede llevarles algo más de tiempo. Lo mejor
es cambiar gradualmente de dieta, en vez de hacerlo de forma drástica, excluyendo
poco a poco la carne y el pescado hasta sustituirlos por alimentos vegetarianos bien
equilibrados. No tardarás en notar que tu deseo de comer carne va desapareciendo.
Te será do gran ayuda que dediques algún tiempo a investigar a fondo el lema. Lee
algo sobre cómo equilibrar la dieta y sobre los inconvenientes y riesgos que acarrea
comer carne. Si estás mentalmente convencido de los principios del vegetarianismo
y de su concepto, te será más fácil hacer el cambio. Además de renunciar a la carne y
al pescado, cualquiera que se interese seriamente por el yoga debe ir suprimiendo los
huevos, el alcohol, los cigarrillos, et café, el té y otras drogas. En ocasiones, a la gente
le preocupa que salir a comer fuera de casa le suponga un problema si se hace
vegetariana, pero en los últimos diez años han ido apareciendo cada vez más
restaurantes vegetarianos, e incluso en los que no tienen específicamente esta
orientación casi siempre hay algo que un vegetariano puede comer sin problemas.
Una dieta más pura nos facilitará el trabajo con las asarías, ya que cuanto menos carne
se coma, menor será la rigidez del cuerpo. Y de la misma manera que una dieta más
sátvica ayudará a la práctica del yoga, también la práctica regular de las asanas,
el pranayama y la meditación hará que la conciencia cambie y que los alimentos
rajásicos o tamásicos empiecen a perder atractivo.
«Toda hierba que da semilla [...] y
todo árbol que da fruto de semilla:
eso os servirá de alimento,»
Génesis, 1, 29
EL CAMBIO DE DIETA 83
He aquí algunas sugerencias para facilitar el cambio.
1 Asegúrate de consumir regularmente buenas proteínas, como las que contienen los frutos secos, las
legumbres, los granos enteros y el queso.
2 Come todos tos días una ensalada de verduras crudas; para obtener una buena variedad de texturas,
corta o ralla algunas y deja otras enteras.
3 Incluye en tu dieta muchas verduras verdes de hoja.
4 Si cocinas las verduras, hazlo con la mayor rapidez posible, para preservar sus cualidades. Los mejores
métodos son la cocción al vapor y la freidura rápida de ios alimentos.
5 Come todos los días un poco de fruta fresca. Si cocinas la fruta, hazlo rápidamente, ya que una
cocción larga y lenta destruye muchas vitaminas.
6 Procura que la comida que tomas sea fresca y sana, ya que los frutos secos rancios, las frutas y
verduras mustias o podridas se vuelven tamásicas y pierden gran parte de su valor alimenticio original.
7 Evita los alimentos «desnaturalizados», como las harinas refinadas, el pan blanco, los cereales refinados,
frutas, verduras y bebidas envasadas y las grasas saturadas (por ejemplo, los aceites hidrogenados).
8 Cocina solamente la cantidad que vayas a comer. El recalentamiento priva a las comidas de buena
parte de su valor nutritivo,
9 Despliega tu inventiva y prueba cosas nuevas; introduce variedad en tu dicta experimentando con
ingredientes nuevos.
10 Aprende a sustituir los alimentos rajásicos por los que sean más sátvicos: prefiere el tofu a los huevos,
la miel al azúcar o los tés de hierbas al té negro.
«Por la pureza del
alimento se obtiene la
purificación de la
naturaleza Interna.»
Swami Sivananda
84 DIETA
El ayuno
Como medio de purificación y de autodisciplina, ei ayuno se remonta a épocas
lejanas, Los primeros indios americanos ayunaban para ver al Gran Espíritu;
Cristo ayunó cuarenta días y cuarenta noches en el desierto y, Moisés, en ei
Monte Sinai. Los yoguis ayunan, principalmente, para controlar la mente y los
sentidos, pero también para limpiar el cuerpo y, de esa manera, rejuvenecerlo.
De hecho, el ayuno es la forma natural que tiene el cuerpo de hacer frente a la
enfermedad o al dolor; los animales en estado salvaje dejan de comer cuando
están heridos o no se sienten bien, y también nosotros perdemos el apetito
cuando tenemos fiebre. En la vida normal, gran parte de nuestra energía se
dedica al proceso de la digestión. Dejar descansar el aparato digestivo libera
energía, encauzándola hacia el crecimiento espiritual y la autocuraclón y
permitiendo que el cuerpo elimíne toxinas, El ayuno no se ha de confundir de
ninguna manera con seguir una dieta; su finalidad es purificar el cuerpo y ¡a
mente, no perder peso. Es más: hay personas que aumentan de peso
después de un ayuno.
Cómo ayunar
Primero has de decidir cuándo y durante cuánto tiempo quieres ayunar.
Escoge un momento en que no estés demasiado ocupado ni estés tomando
ningún tipo de medicación, ya que un ayuno es una forma de medicina por
derecho propio.
Ayunar un día a la semana es una buena disciplina para reforzar la voluntad,
pero si quieres desintoxicar tu organismo tendrás que hacerlo durante más
tiempo. Se pueden emprender sin peligro ayunos de 4 días, sin necesidad
de supervisión, pero no más prolongados. Decide qué tipo de ayuno te
propones seguir (de agua, de zumo de frutas o de zumo de verduras), y aténte
rigurosamente a él. En un ayuno de agua, bebe de cinco a siete vasos de agua
pura, embotellada o de manantial, por día, y bébeíos lentamente para absorber
el prana. En un ayuno de zumo de frutas, bebe la misma cantidad, pero
«mastica» el zumo en vez de limitarte a tragarlo. Los enemas y las kriyas
acelerarán el proceso de limpieza, especialmente al comienzo de un ayuno,
Los enemas, o el bastí (p. 155), limpian los intestinos de desechos, en tanto
que un kunjar kriya es útil el primer día de ayuno para liberarse de las toxinas
de la base del estómago. Bebe cuatro vasos de agua tibia, cada uno con
una cucharadita de sal. Después contrae el vientre y ponte dos dedos en la
garganta, hasta que devuelvas toda el agua,
Los tres primeros días de ayuno son los más difíciles. Mientras el cuerpo se
esfuerza por liberarse de Impurezas, es probable que experimentes cualquiera
de los siguientes efectos: dolores de cabeza, lengua sucia, mal aliento y
vómitos. Si tienes palpitaciones, bebe zumo de frutas si estás haciendo un
ayuno de agua, y come fruta si ayunas con zumos. También suelen producirse
dificultades respiratorias, pero generalmente se superan con pranayama. Si las
palpitaciones o los problemas respiratorios persisten, abandona lentamente el
ayuno. El ayuno hace que la circulación sea más lenta, de manera que
necesitarás usar más ropa de la habitual para mantenerte abrigado; también es
posible que te sientas un poco mareado si te mueves con demasiada rapidez
o bruscamente. Durante ei ayuno, muchas impurezas se eliminan por la piel,
El camino intermedio
Shakyamuni vivió muchos años como
asceta errante, privándose de agua y
de alimento hasta que quedó reducido
a piel y huesos. Finalmente, cansado de
tales esfuerzos, tomó alimento y se
sentó bajo una higuera sagrada,
haciendo votos de no moverse mientras
no hubiera alcanzado la Iluminación.
Durante toda la noche lo acosaron los
demonios, pero al romper el día alcanzó
su objetivo y llegó al Nirvana. Como
Buda, se dedicó a predicar la sabiduría
del camino intermedio entre los dos
extremos: el extremo del desenfreno y
el de la aulomortíficación.
EL AYUNO 85
de modo que no uses maquillaje ni antitranspirantes que bloqueen los poros.
Debes aprender a conservar tu energía mientras ayunas: haz una tranquila
caminata todos los días, pero evita cualquier ejercicio fuerte, como el jogglng.
Practica por lo menos una serie de asanas y de ejercicios respiratorios al día,
a fin de descomponer las toxinas acumuladas y acelerar su eliminación.
Y déjate algún tiempo para la meditación: tu mente estará mucho más estable
durante un ayuno. Después de unos días, el estómago dejará de reclamar
comida y empezarás a observar algunos de los beneficios: una intensificación
del sentido del olfato, por ejemplo, y un aumento de la energía vital y de la
concentración. Abstenerse de comer le da a uno ocasión de dedicar más
tiempo a su crecimiento espiritual, y de darse cuenta de la medida en que
es posible controlar las propias pautas de pensamiento, comportamiento,
alimentación, etcétera. Para no perder lo que has aprendido, es importante
que abandones el ayuno con prudencia y sistemáticamente, como se
describe en la página siguiente.
Buda ayunador en meditación
Escultura del norte de la India, del siglo XIX.
Cómo salir del ayuno
Quizá la parte más difícil de un ayuno sea salir de él con
sensatez, ya que tan pronto como pruebes alimentos, la
mente te exigirá comer y comer. Pero, así como cuando
hemos dormido no nos gusta tener que responder a un
bombardeo de preguntas al despertarnos, también el
cuerpo debe reacostumbrarse gradualmente a comer,
para lo cual has de escoger con precaución tu primer
alimento. Para estar seguro de que no empiezas
excediéndote, rompe el ayuno por la noche y no vuelvas
a comer mientras ese primer alimento no haya sido
eliminado. Los vegetarianos deben comer alrededor
de medio kilo de fruta fresca: uva (sin semillas), cerezas
u otras frutas jugosas, pero no plátanos ni cítricos.
La gente que siga una dieta más pesada, como los
consumidores de carne, deben comer más o menos la
misma cantidad de espinacas cocidas al vapor o tomates
en compota. Después de un ayuno de dos días, procede
de la forma siguiente:
Día 1 - loma solamente fruta fresca, más una
cucharardita de yogur natural para ayudar a la digestión.
Día 2 - solamente ensaladas.
Día 3 - verduras cocidas al vapor con un cereal ligero,
como mijo o trigo sarraceno.
Día 4 - ve retornando gradualmente a tu dieta normal.
Si has ayunado durante 4 días, duplica el esquema:
los dos primeros días, fruta fresca;
los dos siguientes, sólo ensaladas, etcétera.
El té, el café, el alcohol y los condimentos han de evitarse
mientras se abandona un ayuno, y el primero y tercer
días hay que usar un enema. Procura atenerte
estrictamente a este régimen, para no sobrecargar
tu organismo. Como decía George Bernard Shaw,
«Cualquier tonto puede hacer un ayuno, pero para salir
de él como es debido se necesita a un sabio».
LA MEDITACIÓN 87
La meditación
Consciente o Inconscientemente, todos buscamos
desviándose, es más adecuado hablar de con
la paz que la meditación aporta a la mente, Todos
centración. La diferencia entre concentración y
tenemos nuestras propias maneras de hallar esa
meditación no es técnica, sino de grado. Swarni
paz, nuestros propios hábitos de meditación: desde
Vishnu-devananda lo explica de esta manera: «Du
la ancianita que se sienta a tejer junto al fuego,
rante ta concentración, uno tiene que mantener
al navegante que en una tarde de verano se
firmes las riendas de la mente; durante
desliza ociosamente por el río, olvi
la meditación, las riendas ya no son
dado del transcurso del tiempo.
necesarias, porque la mente
Porque, cuando la atención
se mantiene por sí misma
«La meditación es un
está totalmente absorta, la
en
una única onda de pen
flujo continuo de la percepción
mente guarda silencio; cuan
samiento».
o el pensamiento, como el flujo
do conseguimos restringir
En los Ocho Miembros de
del agua en un río.»
nuestros pensamientos a un
Patanjali, la concentración y
Swami Vishnu-devananda
solo objeto, el incesanle par
la meditación son el sexto y el
loteo interno se detiene. En reali
séptimo pasos dei raja yoga (p.
dad, el contento que sentimos cuando
19). El octavo es eí samadhi, o supraconciencia, un estado que trasciende el
la mente está absorta no proviene tanto de la
actividad misma como del hecho de que, al
tiempo, el espado y la causalidad, en que se superan
concentrarnos, nos olvidamos de nuestros probíemas
el cuerpo y la mente y existe la total unidad. En
y preocupaciones.
samadhi, el meditador y el objeto de la concentración
Pero estas actividades no pueden aportarnos más
se unifican, pues lo que crea un sentimiento de
que un breve interludio de paz, que dura mientras
separación o dualidad es el yo. De acuerdo con los
absorben nuestro interés. Una vez que la mente
antiguos Vedas, la concentración, o dharana, consiste
vuelve a distraerse, regresa a su rutina de vagar sin
en fijar la mente en un solo pensamiento durante doce
rumbo, dilapidando su energía en recuerdos del
segundos; meditación, o dhyana, equivale a doce
pasado o sueños del futuro, que continuamente se
dharanas -unos dos minutos y medio-, y samadhi
superponen con lo que tenemos entre manos. Para
equivale a doce dhyanas, poco menos de media hora.
lograr un contento más perdurable, es necesario
De la misma manera que concentrar los rayos del
sol a través de una lupa los calienta hasta el punto de
entrenar la mente con la meditación.
La meditación es la práctica mediante la cual hay una
que pueden quemar, también concentrar los rayos
observación constante de la mente. Esto significa
dispersos del pensamiento hace que la mente
enfocar la mente en un punto y silenciarla para percibir el
se vuelva penetrante y poderosa. Con la práctica
Si Mismo. Al detener la marea de los pensamientos,
continua de la meditación, se descubre un sentido
llega uno a entender su verdadera naturaleza y a des
intensificado de finalidad, se refuerza la voluntad, y el
cubrir la sabiduría y la tranquilidad que lleva dentro.
pensamiento se aclara y se concentra más, de
Concentrándose en la llama de una vela, por ejemplo,
manera que afecta a todo lo que hacemos,
o en un mantra (p. 96), se devuelve reiteradamente la
Tal como ha escrito Swami Vlshnu-devananda,
atención al objeto de la concentración, con lo que el
«La meditación no se logra fácilmente. Un árbol
movimiento de la mente se reduce a un pequeño
hermoso crece con lentitud. Es menester esperar el
círculo. Al principio, los pensamientos insistirán en su
florecimiento, la maduración del truto y el sabor
tendencia errabunda, pero con la práctica se
definitivo. El florecimiento de la meditación es una paz
conseguirá ampliar el tiempo de focalización de la
inexpresable que penetra en la totalidad del ser. Su
mente. Al comienzo, mientras la atención aún sigue
fruto [...] es indescriptible».
88 LA MEDITACIÓN
El dominio de la me
nte
La mente es como un lago cuya superficie rizan las suaves olas del pensamiento.
Para ver el Si Mismo subyacente, debes empezar por saber cómo aquietar
esas olas y convertirte en el dueño de tu mente, en vez de estar a! servicio de ella.
Durante la mayor parte de nuestras horas de vigilia, nuestra mente se ve arrastrada
de un pensamiento a otro, tironeada por deseos y aversiones, por emociones
y recuerdos, tanto agradables como desagradables. De todas las tuerzas que
agitan la mente, son los sentidos los que con mayor frecuencia perturban la
concentración, dando origen a fantasías y deseos. Suena por radio una melodía
grata y, a la carrera, la mente vuelve al momento en que la oímos por vez primera,
pero también un olor apetitoso o una súbita corriente de aire pueden desbaratar
nuestra línea de pensamiento. De todos los sentidos, la vísta y el oído son los más
poderosos, los que interminablemente atraen la mente hacia el exterior y dilapidan
la valiosa energía mental. Por esta razón, la meditación se vale ya sea de sonidos
(mantras} o de imágenes (en el tratak).
Por naturaleza, la mente está constantemente en pos de la felicidad,
en la vana esperanza de que alcanzará la satisfacción una vez que logre lo que
desea. Al adquirir el objeto deseado, la mente se acalla temporalmente, pero
después de un breve tiempo todo el juego vuelve a Iniciarse, porque la mente
misma sigue sin haber cambiado, y el verdadero deseo no ha sido satisfecho.
Imaginemos, por ejemplo, que nos hemos comprado un coche nuevo. DuranLe
algún tiempo nos sentimos orgullosos y satisfechos: la mente está en paz. Pero
pronto empezamos a codiciar un modelo más nuevo o de un color diferente,
o a preocuparnos por la probabilidad de que nos lo roben o de que alguien nos
lo abolle. Lo que empezó siendo un placer se ha convertido en una fuente más
de descontento, porque, al acallar un deseo, se crean muchos otros.
El yoga nos enseña que poseemos una fuente de regocijo y de sabiduría que
está dentro de nosotros mismos, un pozo de tranquilidad que podemos percibir
y del cual podemos alimentarnos cuando el movimiento de la mente se aquieta.
SI podemos canalizar hacia dentro ese deseo de contento, en vez de orientarlo
hacia los objetivos externos que, por naturaleza, son efímeros, podremos
descubrir la forma de vivir en paz.
■•Así como la belleza y la dulce
fragancia de la flor de loto se revelan
solamente cuando se eleva desde el
agua fangosa y se vuelve hacia el sol,
así nuestras vidas sólo han de crecer
en beatitud cuando dejemos atrás
el mundo de Maya, o la ilusión,
y, mediante la meditación,
miremos hacia Dios.»
Swami Vishnu-devananda
Testigos del juego de los pensamientos
Durante la meditación, tenemos la vivencia de la mente como un Instrumento.
Basta con que nos concentremos diariamente durante un breve periodo para
que empecemos a ver la cantidad de movimiento que existe en la mente y lo
poco que vivimos en el presente. A partir de este breve encuentro con un modo
de percepción diferente, podemos aprender a observar y, por ende, a cambiar
nuestra manera de pensar. Uno de los instrumentos más sutiles para controlar
la mente es dejar de asociarnos con nuestras emociones, pensamientos
y acciones. En vez de identificarnos con ellos, damos simplemente un paso atrás
para ponernos en el papel de testigos, como si estuviéramos observando a alguna
otra persona. Al observarnos desapasionadamente de esta manera, sin juicio
y sin elogios, los pensamientos y emociones pierden el poder que tienen
sobre nosotros; así comenzamos a ver tanto la mente como el cuerpo
en su condición de Instrumentos que podemos controlar. Al tomar distancia
frente a los juegos del yo, se aprende a asumir la responsabilidad por uno mismo.
.
EL DOMINIO DE LA MENTE 89
La meditación en La vida diaria
Es improbable que en nuestra breve sesión de meditación consigamos dominar
la mente si durante el resto del tiempo soltamos las riendas. Cuanto más tiempo
se pase con la mente concentrada, tanto más pronto será uno capaz
de enfocarla cuando se siente a meditar. Aparte de las técnicas de meditación
que encontrarás en las páginas siguientes, es mucho lo que puedes hacer
para mantener centrada la mente. Mientras caminas, por ejemplo, procura
sincronizar la respiración con el ritmo de los pasos, inhalando durante tres pasos
para después exhalar durante los tres siguientes. Una respiración lenta
y controlada también aquieta la mente (p. 67).
Cuando leas un libro, pon a prueba tu concentración deteniéndote al final de
una página para ver cuánto has logrado retener. Y no limites la práctica
de /apa a la sesión de meditación; repite el mantra mientras vas al trabajo,
por ejemplo, o durante la sesión de asarías o mientras preparas la comida.
Y, lo que es más Importante de todo, mantén el pensamiento en una actitud
tan positiva como te sea posible. Los días en que la cólera o la tristeza vengan
a perturbar la paz de tu ánimo, con frecuencia podrás calmarte concentrándote
en la emoción opuesta, contrarrestando los sentimientos de odio con el amor,
por ejemplo, o la duda con la fe o la esperanza. Mediante el uso de estas
sencillas técnicas es posible acostumbrar lentamente la mente al estado
de concentración. Comenzarás a observar que las influencias externas tienen
sobre ti un efecto menos directo. Independientemente de que tengas una
semana difícil en el despacho o un grato día de esparcimiento en el campo,
tu estado anímico seguirá siendo el mismo, porque tu núcleo central se estará
fortaleciendo, Así se adquiere la seguridad de saber que, en medio de los
cambios que son la esencia de la vida, podemos mantener la constancia
y la serenidad de ánimo.
Meditación saguna
y meditación nirguna
Imagínute sentado en el centro de una
esfera que representa lo Absoluto.
Los tipos de meditación
En la meditación saguna (arriba),
En el yoga hay dos tipos principales de meditación: concreta, o saguria
(literalmente, «con cualidades»), y abstracta, o nirguna (sin cualidades).
En la meditación saguna, uno se concentra en un objeto concreto, -sobre
el cual la mente puede fácilmente detenerse y que puede ser una imagen o
símbolo visual, o un mantra que lleva al meditador a la unidad. En la meditación
nirguna, el punto focal es una ¡dea abstracta, como puede serlo el Absoluto,
un concepto que no se puede describir con palabras. La meditación saguna
es dualista, ya que el meditador se considera separado del objeto de la
meditación, en tanto que en la meditación nirguna el meditador se percibe como
fundido con el objeto. Las técnicas de meditación que se dan en esta sección
son predominantemente saguna, ya que, por más que el concepto que el lector
liene del Absoluto pueda ser abstracto, es más difícil fijar la mente en un
concepto abstracto. Pero, para los lectores que puedan hacerlo, hemos incluido
dos mantras nirguna (p. 97), om y soham. Independientemente de que practique
uno la meditación saguna o nirguna, el objetivo es en última instancia el mismo,
es decir, la trascendencia de las gunas. Como dice en sus enseñanza Swaml
Vishnu-devananda: «El propósito de la vida es fijar la mente en lo Absoluto».
le concentras en un símbolo, corno el om
(p. 94), o la Cruz que hay en la superficie
de la esfera, y te unificas con él. En la
meditación nirguna (sobre estas líneas) no
te itienlifkas con ninguno de los símbolos
o aspectos de lo Absoluto. Tu conciencia
se expande hasta abarcar la esfera misma
y fundirse con ella.
90 LA MEDITACIÓN
L o s p r i n c i p i o s d e l a m ed i t a c i ó n
La meditación, como el sueño, no se puede enseñar; llega por sí misma, en su
momento. Pero, si empezamos por seguir los pasos adecuados, podemos acelerar
considerablemente el proceso. Para ayudar a quienes deseen entender los pasos
básicos de la meditación y sus etapas, Swami Vishnu-devananda formuló los doce
principios que se resumen en la columna de la derecha. Lo esencial es establecer
la meditación como un hábito regular en la vida, meditando todos los días
«El Sí Mismo no es el cuerpo
individual ni la mente individual, sino
más bien ese aspecto profundo
que hay dentro de cada persona y
que conoce la Verdad.»
Swami Vishnu-devananda
en el mismo lugar y a la misma hora. Así, la mente se acostumbrará a responder
sin demora cada vez que nos sentemos a meditar, de la misma manera que el
estómago está condicionado para esperar alimentos a las horas de las comidas.
Después de unos meses de práctica regular, la mente, por sí sola, reclamará ese
momento de quietud. Para la meditación, los momentos más favorables del día son
el amanecer y el crepúsculo, cuando la atmósfera está cargada de energía espiritual.
Pero si ninguna de esas horas es posible, limítate a escoger un momento en que
puedas estar solo y sin que te molesten. Comienza practicando durante veinte
minutos, y poco a poco ve aumentando el tiempo hasta llegar a una hora.
Siéntate mirando al este o al norte, para beneficiarte de los efectos sutiles del campo
magnético de la Tierra. Quizá te convenga, antes de empezar, envolverte en una
manta para no enfriarte. Es muy importante que tu postura de meditación sea firme
y relajada, ya que la concentración se resentirá si no estás cómodo. Antes
de comenzar, instruye a la mente para que guarde silencio y se olvide de todo
pensamiento del pasado, el presente o el futuro. Luego regula la respiración;
eso controlará el flujo del prana, que, a su vez, ayudará a silenciar la mente.
No se trata de combatir la inquietud de la meqte, ya que esa actitud no hace
más que generar nuevas ondas de pensamiento. Simplemente, hay que
desapegarse de los pensamientos y observar la mente.
Los doce principios
1 Reserva para la meditación un lugar
especial; la atmósfera que construyas te
ayudará a silenciar la mente.
2 Escoge un momento en que ¡a mente
esté libre de las preocupaciones cotidianas;
la aurora y el crepúsculo son ideales.
3 Practicar todos los días en el mismo
lugar y a la misma hora condiciona la
mente para que se aquiete más
rápidamente.
4 Siéntate con la espalda, el cuello y la
cabeza en línea recta, mirando hacia el
norte o el este.
5 Instruye a la mente para que se
mantenga tranquila mientras dure tu
sesión de meditación.
6 Regula la respiración; comienza con
cinco minutos de respiración profunda y
Las posturas de meditación
después hazla más lenta.
Tanto «el loto» como la postura fácil
proporcionan una base firme y un recorrido
7 Establece una pauta rítmica para la
triangular para contentarla circulación
segundos.
del prana. Si las rodillas no te llegan al suelo,
8 Al principio, deja vagar la mente; si la
respiración, inhalando durante unos tres
ponte un cojín bajo las nalgas.
obligas a concentrarse, sólo conseguirás
Si lo prefieres, siéntate en una silla (p. 172).
que se vuelva más inquieta.
Pon las manos sobre las rodillas, con las
9 Ahora, lleva la mente a descansar en el
palmas hacia arriba y formando el chin
punto focal que hayas escogido, ya sea al
mudra, con los dedos Indice y pulgar unidos.
ajna chakra o al anahata (p. 69).
10 Aplicando la técnica que hayas
escogido, manten el objeto de tu
concentración en ese foco durante toda la
sesión.
11 La meditación se produce cuando
alcanzas un estado de pensamiento puro,
pero sigues reteniendo tu conciencia de la
dualidad.
12 Después de larga práctica, la dualidad
desaparece y se alcanza el samadhi, el
estado de supraconciencia.
I
92 LA MEDITACIÓN
Comenzar a meditar
En la larga tradición de la meditación, hay gran variedad de técnicas
diferentes: algunas se valen del poder del sonido; otras, de símbolos
visuales o de la respiración. Pero todas tienen un objetivo común,
que es enfocar los rayos dispersos de la mente en un único punto y,
de esta manera, conducir al meditador a un estado de autorrealización.
La técnica que recomendamos para una práctica prolongada es el ¡apa,
la repetición de un mantra, tal como se describe en la página 96.
Pero un meditador principiante quizá quiera iniciarse con otra técnica,
además de la del mantra, para ayudarse inicialmente a disciplinar la mente.
Yoni mudra
Yoni mudra es un ejercicio de pratyahara, o retracción de los sentidos.
Al bloquear los ojos, los oídos, la nariz y la boca se retira uno dentro de sí
mismo, como una tortuga que repliega las patas y la cabeza bajo el caparazón.
Durante el dia, la mente está constantemente bombardeada por la información
y los estímulos provenientes de los cinco sentidos. Sólo cuando los sentidos se
ven sometidos a control y los continuos redamos externos dejan de avasallar la
mente, es posible tener la esperanza de poder concentrarse. Ya habrás tenido
una muestra de lo que se siente al desconectar uno efe los sentidos
practicando asanas con el estómago vacío, y además -quizá- con los ojos
cerrados. Al permitirnos que descansemos sin ser perturbados en el Interior de
ia mente, yoni mudra nos hace tomar conciencia más cabal de la tiranía
de los sentidos. Se trata de una técnica a la cual se puedo volver cada vez
que se sienta uno especialmente inquieto o agitado. A medida que la
concentración se profundiza, mientras lo practicamos comenzaremos a oír
el anahata, los sonidos místicos internos que son señal de una elevación de la
conciencia, y que se perciben como flautas, tambores o campanas, entre otras
cosas. El Siva Samhita, uno de los textos yógulcos, dice de este mudra:
■Al tener así firmemente confinado el aire, el yogui ve su alma en forma de luz».
Yoni mudra
Tápale tus uidos con los pulgares. Ciérrate
los párpados cu?i los dedos índices; las fosas
nasales con los dedos cordiales, y con los
otros dedos oprime los labios para cerrarlos.
Afloja suavemente ¡os dedos cordiales
para inhalar y exhalar mientras meditas.
La concentración por categorías
Cuando se aprende a meditar, es difícil mantener la atención enfocada
en un objeto desde el comienzo. Para entrenar la atención, se puede probar
a reducir inicialmente el ámbito de la concentración a una sola categoría
de objetos, donde la mente todavia disfruta de cierta libertad de movimiento.
En el ejercicio de concentración por categorías. tal como se ve a la derecha,
se escogen cuatro flores como objetos de concentración. Después
de haberte concentrado en una, cuando la mente comienza a dispersarse,
puedes pasar a la siguiente. SI no te resulta cómodo concentrarte en flores,
escoge una categoría de objetos diferente, como, por ejemplo, árboles
o frutas. Lo único que Importa es que restrinjas la mente a un grupo
de objetos y que elijas objetos que puedas mirar con distancia y desapego.
La práctica de este ejercicio afinará la mente, permitiéndole enfocar con más
precisión, e irá enseñándote el principio de la concentración unidireccional.
Una vez que no tengas dificultades en visualizar una categoría de objetos
y en mantenerte concentrado en ella, ya estarás en condiciones de pasar
a concentrarte en un único objeto.
1
Concentración por categorías
Con los ojos cerrados, imagínale un jardín con
una flor dijeren le en cada ángulo. Comienza
explorando las cualidades de una flor, y cuando la
mente comience a inquietarse, pasa a concentrarte
en la flor siguiente, y así sucesivamente. Debes
visualizar con claridad cada una de las flores.
COMENZAR A MEDITAR Y EL TRATAK 93
El tratak
El tratak, o fijación de la mirada, es un excelente ejercicio de concentración,
consistente en contemplar un objeto o un punto, alternando la contemplación
con la visualízacíón mental del objeto, con los ojos cerrados, festa práctica
estabiliza el vagabundeo mentai y concentra la atención hasta permitir que la
imagen sea enfocada con absoluta precisión. Allí donde van los ojos, va la
mente, de manera que cuando fijas la mirada en un punto único, también
la mente se vuelve unidireccional. Aunque su finalidad principal es reforzar los
poderes de concentración y purificar la mente, el tratak mejora también la vista
y estimula el cerebro por vía del nervio óptico. Es una de las seis prácticas
de purificación conocidas como kriyas.
Lo más común es practicar el tratak con una vela (como se describe en la
página 94), pero también se puede hacer tomando como blanco de la mirada
otros objetos. Puedes dibujar un grueso punto negro sobre una hoja de papel
y pegarlo en la pared, o bien usar un chakra (p. 69) o un yantra (p. 94).
Los yantras son diagramas geométricos que sirven para enfocar la mente.
Lo mismo que los mantras, cada yantra tiene un significado místico
especifico. Otras opciones son que Intentes contemplar un símbolo, como
puede ser el OM (p. 94), o la imagen de una deidad. No es necesario que
limites tu práctica a los objetos que hay dentro de la casa, ya que el mundo
natural ofrece gran variedad de puntos de concentración adecuados. Durante
el día, una floro una concha pueden servir como objeto de atención, mientras
que por la noche puedes tratar de fijar ia mirada en la luna o en una estrella
bien visible. Siempre y cuando tu objeto de concentración esté inmóvil y sea
relativamente pequeño a la vista, centrarte en él producirá el efecto deseado.
Con frecuencia, como se ve en la ilustración, los yoguis usan para el tratak
el entrecejo, o la punta de !a nariz,
La técnica del tratak sigue siendo muy semejante sea cual sea el blanco
de ia mirada, aunque naturalmente necesitará alguna ligera adaptación cuando
medites al aire libre. Pon el objeto escogido al nivel de los ojos y a una distancia
aproximada de un metro. Regula primero la respiración y después empieza a
contemplar sin pestañear, el objeto elegido. No lo mires fijamente ni tampoco
vagamente; flmítate a no apartar la vista de él, sin forzarte. Después de más o
menos un minuto, cierra los ojos y, controlando la mirada interior, visualiza el
objeto en el apa chakra o en el anahata (p. 9). Cuando la imagen residual se
desvanezca, vuelve a abrir los ojos y repite el ejercicio. El Hatha Yoga Pradipika
enseña: «Mira fijando los ojos con concentración un objeto pequeño hasta que
fluyan las lágrimas». Si efectivamente te lagrimean los ojos después de
mantener durante breve rato la concentración, es simplemente la señal para
que los cierres; poco a poco podrás ir ampliando el período de contemplación.
A medida que la concentración se profundice y la mirada se haga más
resistente, ve aumentando el tiempo que pasas con los ojos abiertos y luego
cerrados, hasta que puedas prolongar la práctica a una hora. Las primeras
veces que practiques el tratak es probable que te encuentres con la intrusión
de pensamientos indeseables. Limítate a volver a prestar atención al objeto de
concentración, y la mente Irá enfocándose cada vez más. Con la práctica serás
capaz de visualizar el objeto escogido muy claramente cuando cierres los ojos.
Contemplación frontal y nasal
Contemplar el entrecejo, sede ele! «tercer
ojo» (arriba), o la punta de la nariz (ahajo)
fortalece los músculos de lus ojos, además de
mejorarla concentración. Un minuto
de contemplación es suficiente para
empezar; después se irá aumentando
la duración hasta diez minutos. No fuerces
los ojos; si se cansan o te duelen, ciérralos
enseguida. La contemplación frontal
despierta la kundalini, en tanto que la
concentración nasal afecta al sistema
nervioso central.
94 LA MEDITACIÓN
OM
Para un yogui no hay símbolo más
poderoso que la sílaba om, de lo cual
dan testimonio estas palabras del
Mandukya Upanishad: «om. Esta
palabra eterna es todo: lo que fue,
lo que es y lo que será». En la letra
sánscrita, la curva inferior larga
representa el estado de despertar,
y la que parte del centro simboliza
el dormir profundo y sin sueños.
La medialuna creciente es la
representación de Maya, el velo
de la Ilusión, y el punto es el estado
trascendental. Cuando el espíritu
individual que hay en el hombre
atraviesa el velo y descansa en lo
trascendental, queda liberado de
los tres estados y de sus cualidades.
Tratak con om
Cuando uses el om en sánscrito (arriba,
a la izquierda) para practicar tratak,
deja que los ojos lo recorran en el sentido
opuesto al de las agujas del reloj.
En el yanlra
om
del siglo
xvin
(abajo
a la izquierda), la sílaba sagrada está
representada deforma diferente.
El yantra se origina en Rajasthan,
en la India.
Contemplación de una vela
(derecha)
La llama de una vela es el objeto
más usado para el iratak, ya ¡jue es
fácil retener una imagen residual del
brillo de la llama cuando se cierran
los ojos. La vela se ha de colocar a la
altura de los ojos en una habitación
a oscuras y sin corrientes de aire.
96 IJ\ MEDITACIÓN
Los mantras
El sonido es una forma de energía constituida por vibraciones o longitudes
de onda; ciertas longitudes de onda tienen el poder de curar; otras son
capaces de hacer añicos una copa. Los mantras son sílabas, palabras
o frases sánscritas que, cuando se repiten en la meditación, llevan al
Individuo a un estado de conciencia superior. Son sonidos o energías que
han existido siempre en el universo y que no se pueden crear ni destruir.
Hay seis cualidades comunes a cualquier verdadero mantra: fue
originariamente revelado a un sabio que mediante él alcanzó la
autorrealización y después lo transmitió; tiene cierto «metro» [medida] y una
deidad que lo preside; tiene en su esencia un bija, o semilla, que lo Inviste de
un poder especial; tiene energía cósmica divina, o shakti; y, finalmente,
tiene una dave que ha de ser descifrada mediante la repetición constante
antes de que se revele la conciencia pura. El ¡apa, o repetición del mantra,
no sólo proporciona un punto tangible sobre el cual concentrar la mente,
sino que también libera la energía encapsulada en ese sonido. La energía
se manifiesta literalmente, creando en la mente una pauta específica
de pensamiento, por lo que la pronunciación correcta es de suma
importancia. Mediante una práctica sincera, la repetición de un mantra
conduce al pensamiento, y no hay percepción del significado. De esta
maner^ el mantra te conducirá a la verdadera meditación, a un estado
de unidad, de no dualidad. Hay tres tipos principales de mantras-, los
mantras saguna invocan deidades o aspectos específicos de lo Absoluto;
los mantras nirguna son abstractos y declaran la Identificación del meditador
con lo Absoluto; y los bija o mantras seminales son aspectos de! om y se
derivan directamente de los cincuenta sonidos primitivos. Lo mejor es que
a uno lo ¡nicle en el mantra un gurú, que lo investirá con su propia energía
pránica, pero si esto no es posible, practica repitiendo los mantras y escoge
uno con el que te sientas cómodo. No se incluyen aquí mantras bija,
que son demasiado poderosos para que los usen los principlantes.
La cuenta de las líneas
de los dedos
Coloca el pulgar derecho sobre la ¡mea
superior de! dedo meñique y muévelo
cada vez que repilas el mantra, primero
hacia ¡a línea del medio y luego hacia
la inferior; después pasa a las líneas dei
segundo dedo, y así sucesivamente. Usar
las tres líneas de los cuatro dedos da doce
repeticiones; nueve vueltas equivalen a
ciento ocho repeticiones, o sea, un mala.
Formas de ¡apa
Puedes repetir tu mantra en voz alta -dlciéndolo o salmodiándolo-,
en un susurro o mentalmente. El japa mental es el más eficaz, porque
los mantras están en una longitud de onda que trasciende el sonido físico.
Pero, al principio, cuando a uno le cuesta más mantener la concentración
mental, se ha de comenzar la meditación pronunciando el mantra, y después
susurrándolo, antes de pasar a la repetición mental. Sea cual sea la forma
de japa que uses, te ayudará si coordinas el mantra con la respiración.
Además, estas tres técnicas de japa aumentarán tus poderes de
concentración. Puedes usar una sarta de cuentas, lo que se llama un mala,
y repetir el mantra mientras vas pasando las cuentas con los dedos.
También puedes usar el pulgar de la mano derecha como marcador para ir
contando las lineas que señalan las articulaciones de los dedos.
Y, finalmente, puedes escribir el mantra al mismo tiempo que lo vas
repitiendo mentalmente.
Cómo usar un mala
Un mala tiene denlo ocho cuentas, más
ana mayor, la cuenta meru. Con ei mala en
la mano derecha, comienza por el meru y
pasa las cuentas, una por una, entre el pulgar
y el tercer dedo, mientras repites el mantra.
Citando llegues til meru, recorre el mala en la
dirección opuesta, sin pasar por encima de la
cuenta meru.
LOS MANTRAS 97
Mantras saguna
^ Ram
El patrón energético de la verdad, la rectitud y la virtud en su aspecto masculino, Este
poderoso mantra está constituido por tres sonidos seminaies.
¿i Á . t J*/*
( ffosnsfc. dr -
ÁfST Sita
Éste es el aspecto femenino del patrón energético de RAM. Representa el descenso de
PRAKRiTt, o la naturaleza (p, 16) en la forma de ¡a madre. También se puede repetir con ram,
en ¡a forma sitaram; cuando ambos mantras están unidos, encarnan la energía existente en
una unión o matrimonio ideal.
3*
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sS iS iPi 3¡r 3S *»
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ür,jüj; sí jí ^
¿ft jt»
14
Al representar el amor cósmico y la compasión en su aspecto masculino, este mantra
transmuta todas las emociones en amor incondicional.
¿í aí £
£& &
í¿ £
tf'lT Radha
ü íiti lí *f íi
^ ^ ^ **
**' **
i» tó- £* A? i»
*7 * *
*\ ^ ^ **
-í-í i-? i-»
15 3X
^
íí^ ^ *■35
radha es el aspecto femenino de shyam, y simboliza el amor cósmico de la madre divina.
•3“ 'Fí feHH Om Namah Sivaya
Éste es un patrón energético purificador que destruye nuestras cualidades negativas, y lo
escogen especialmente quienes son de naturaleza ascética. «La danza de Siva» representa
el movimiento inherente en la materia. Cuando Siva deja de danzar, la Ilusión de la materia
se destruye.
Likhita ¡apa
Si quieres practicar likhita japa, o la es
critura mántrica, debes reservar para
hacerlo un cuaderno especial. Antes de
comenzar, decide cuántas veces repetirás
■¡3*' rTTT
Om Ñamo Narayanaya
El patrón energético de la armonía y el equilibrio en su aspecto masculino. Este mantra es
usado especialmente por quienes se encuentran en dificultades, para que les traiga la fuerza
necesaria para recuperar la armonía en sus vidas.
Om Aim Saraswatyai Namah
El aspecto femenino del patrón de energía creativa y sabiduría. Este mantra suele ser el
escogido por artistas y músicos.
Mantras nirguna
3*’ Om
Om es el mantra original, la raíz de todos los sonidos y las letras, y por ende de todo
lenguaje y pensamiento. La o se genera en lo profundo del cuerpo, y es llevada lentamente
hacia arriba, hasta que se junta con la eme, que resuena entonces en toda la cabeza.
La repetición del om durante veinte minutos relaja hasta el último átomo del cuerpo.
Soham
Repetimos inconscientemente este mantra cada vez que respiramos: la inhalación es so, la
exhalación, ham. Significa «yo soy Eso»: más allá de ias limitaciones de la mente y del
cuerpo, me unifico con lo Absoluto.
el mantra a durante cuánto tiempo.
El objetivo no es escribir con la mayor
rapidez posible, sino prestar la debida
atención a cada repetición. Para escribir
el mantra que elijas puedes optar por el
sánscrito o por ¡a versión transliterada.
En vez de trabajar simplemente de
izquierda ti derecha, intenta hacer dibu
jos mientras escribes el mantra.
Lo que se ve arriba es una muestra
de la práctica de likhita japa de Swami
Sivananda.
LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES 99
L a s asanas y sus variaciones
pecialmente si al comienzo te notas relativamente
En la sesión básica hemos aprendido el esquema fun
rígido. Esto no sólo es aconsejable para evitar sobredamental de la práctica diaria. Este capítulo amplía
estiramientos
de los músculos o de las articulaciones,
el alcance del esquema, presentando una amplía gama
sino
también
para que los órganos internos se acos
de variaciones y de asanas nuevas para ir incorporán
tumbren
a
esos
movimientos que los desplazan de
dolas a la pauta inicial. En aras de la claridad, hemos
maneras nuevas y desconocidas.
dividido las asanas en seis ciclos: el ciclo de la pos
Qu\zás encuentres que en un comienzo
tura sobre \a cabeza, e\ cic\o de \a postura
haces progresos bastante rápidos,
sobre los hombros, el ciclo de la flexión
pero que después comienza una
hacia delante y el de la flexión hacia
«La postura se jjgj^,
especie de estancamiento en el
atrás, el ciclo de posturas sentadas
vuelve perfecta cuando^
que, al parecer, no percibes me
y el de posturas de equilibrio. Es
el esfuerzo por lograrla
jora alguna. Si eso sucede, no
tos ciclos no han sido pensados
te descorazones: aunque tú no te
con el fin de establecer divisiones
des cuenta, estás progresando.
rígidas entre las posturas, sino más
Continúa como siempre con tu
bien para demostrar qué lugar co.práctica cotidiana, intentando diferen
rresponde a cada asana en la presen
tes variaciones para mantener estimulada
tación esquemática.
la mente, y pronto habrás superado ese tramo. Con
Cada ciclo contiene variaciones de las asanas
el tiempo alcanzarás una visión más amplia del papel
provenientes de la sesión básica y además asanas
que desempeñan las asanas en tu vida diaria, y dejarás
nuevas que pertenecen al mismo grupo familiar. En
de estar pendiente de la excitación placentera del
general, cada presentación a doble página está
«adelanto».
organizada de tal manera que las asanas más fáciles
La gran mayoría de las personas necesita evo
sean las que aparecen primero y, las más avanzadas,
lucionar de forma gradual, elaborando gran diversidad
después. Con frecuencia, las variaciones más avan
de movimientos. Las diferentes asanas afectan
zadas son, simplemente, progresiones naturales de las
a partes diferentes del cuerpo y de la mente. A
posturas más fáciles, a las cuales irás llegando poco a
medida que las distintas partes del cuerpo se van
poco a medida que tu cuerpo gane en fortaleza y en
abriendo y sometiéndose a tu control, se produce
flexibilidad. Pero no importa a qué categoría de adeptos
con frecuencia la correspondiente «apertura» de
pertenezcas; para calentar el cuerpo y prepararlo para
la personalidad, además de una intensificación del
las posturas más difíciles debes proceder sistemá
conocimiento consciente. Estos cambios pueden
ticamente, en vez de ir saltando al azar de una postura
manifestarse de diversas maneras, tanto física como
a otra.
espiritualmente; quizá descubras, por ejemplo, que
No creas que la primera vez podrás practicar la
te sientes más abierto y relajado en compañía, y que la
totalidad de cada ciclo. Escoge unas pocas asanas
meditación te resulta más fácil. Mientras estás
nuevas o algunas variaciones de cada ciclo e incor
manteniendo una asana es cuando tu cuerpo empieza
póralas a tu sesión básica, que a estas alturas ya debe
realmente a abrirse. Cierra los ojos y dedica el tiempo a
ser para ti como una segunda naturaleza. Procura
concentrarte en la respiración o en la repetición de un
repartir equitativamente tu tiempo entre los ciclos: es
mantra. La práctica de las variaciones de una de las
esencial que mantengas cierto equilibrio si no quieres
asanas básicas -digamos, de la postura sobre los
reforzar un aspecto de las asanas a expensas de otros.
hombros- te fortalece en tu dominio de esa asana y te
De manera similar, habitúate a equilibrar las variaciones
permite mantenerla con firmeza. Cuanto mayor sea la
que practiques (por ejemplo, a contrarrestar una
firmeza con que puedas mantener una postura, tanto
variación de la flexión hacia delante con una postura
más libre estará tu mente para sumergirse en la
que estire el cuerpo hacia atrás). Siempre que aprendas
meditación.
asanas nuevas procede con mucha suavidad, es
100 U\S ASANAS Y SUS VARIACIONES
E l ciclo de la postura sobre la cabeza
Una vez que hayas dominado la postura básica sobre la cabeza y estés acostumbrado
a la posición Invertida, podrás empezar a explorar el espacio que envuelve tu cuerpo
«cabeza abajo», para agregar movimiento y profundidad a la postura central. En
realidad, todas las variaciones de este ciclo son derivados naturales de la postura sobra
la cabeza, hasta el punto de que, librados a nosotros mismos, terminaríamos por
encontrarla solos de manera Intuitiva. Una de las principales lecciones que se aprenden
mediante la práctica de las posturas invertidas es considerar las piernas y los brazos
como «piezas» intercambiables. Con la práctica, los brazos cargarán tan fácilmente
como las piernas con el peso del cuerpo, permitiéndote cuando estás en una postura
invertida la misma diversidad de movimientos de que disfrutas estando de pie. La
postura sobre la cabeza, por su naturaleza misma, se presta mucho a la meditación.
Saca partido de este hecho mientras practicas manteniendo las variaciones: deja que la
mente se aquiete y se vuelva unidireccional.
Variación i
Variaciones con elevación de las piernas
Si quieres disfrutar de las asanas más avanzadas y
poder meditar en ellas, es menester que seas capaz
de soportar sin esfuerzo tu propio peso.
Los movimientos de elevación de las piernas
que aquí se muestran constituyen un medio
para el logro de ese objetivo. Al aprender
a soportar el peso de las piernas a partir de
la posición supina, irás obteniendo ia tuerza
necesaria para soportar y contralar el peso
total del cuerpo en otras posturas. Con el
"
tiempo, podrás reemplazar estos ejercicios por
variaciones de elevación de las piernas en diversas
asanas, ya sea ds pie o invertidas. En la variación 1,
las piernas se usan como «pesas», describiendo con
ellas un arco de lado a lado. La variación 2 estira las
'piernas y favorece la movilidad de las articulaciones
de la cadera. Procura repetir cada ejercicio por lo
menos tres veces, asegurándote de que los hombros
siguen apoyados en el suelo y de que mantienes las
rodillas estiradas.
Acuéstate con las piernas juntas y las manos
a los costados, con las palmus hacia abaja
Inhala, levanta ambas piernas y llévalas hacia
la derecha. Después exhala y bájalas, rozando
apenas el suelo con ellas mientras vuelves
a inhalar y a levantarlas hacia la izquierda.
cf. ,.io
Variación 2
Con los brazos en cruz y las palmas hacia
arriba, inhala y levanta la pierna derecha;
después exhala y baja el pie hasta tocarte la
palma izquierda. Manten la postura y después
inhala y levanta la pierna al centro. Luego,
exhalando, bájala.
Variaciones de La postura
sobre la cabeza con
movimientos de piernas
Para poder hacer cualquiera de las
variaciones que se ven a la derecha y en
la página opuesta, debes estar bien seguro de tu sirshasana.
Mientras estés en las posturas, manten ambas piernas rectas y
permanece en la posición durante tanto tiempo como te resulte
cómodo. Una vez que llegues a hacer sin esfuerzo estos
movimientos de piernas, podrás prescindir de los ejercidos de
elevación de las piernas desde el suelo
Variación i
Abre las piernas hacia los 'costados.
Tensa bien los talones y los dedos
para aumentar el estiramiento y
después relaja los pies. Respira
normalmente en la postura. El peso
de las piernas irá aumentando
gradualmente la abertura.
Variaciones 2 y 3
2 Empujando ¡as cutieras hacia atrás, exhala
y baja una pierna hasta el suelo, sin
transferir ningún peso al píe. Inhala
y ¡minia la pierna.
3 (Derecha.) A partir de la variación I,
exhala y baja una pierna hacia el costado.
Inhalando, vuelve a levantarla.
Variación 4
Mueve la pierna derecha hacia delante
y la izquierda hacia atrás. Tensa los
talones y después los dedos. Deja que
ia gravedad las haga descender. Ahora,
vuelve las piernas a la posición de ia
postura sobre la cabeza y repite,
invirtiendo las piernas.
102 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El escorpión
1 Arquea la espalda y, doblando
Llegar a dominar vrischikasana,
«el escorpión», es més bien cuestión
de confianza y de concentración que de
fuerza. Piensa en tus manos y tus brazos
como si fueran «pies» gigantescos y no
tardarás en superar el temor a las caídas.
En realidad, cuando descansas sobre las
manos y los antebrazos, tu peso está
distribuido sobre una base de sustentación
mucho más amplia que cuando estás de
pie. Antes de Intentar el escorpión completo,
acostúmbrate a arquear el cuerpo hacia
atrás, desentrelazando los dedos y
modificando la posición de las manos, para
después volver a trabar las manos y adoptar
de nuevo Sa postura sobre la cabeza.
Cuando aprendas la asana, Intenta acercar
el pecho y las piernas al suelo en ¡a mayor
medida que puedas y lleva las caderas
hacia atrás, apartándolas de los pies, para
estabilizarte. Que consigas mantener la
postura depende principalmente de que
lleves las piernas lo bastante lejos para
equilibrar el peso del torso, y de que
te valgas de las manos para mantener
el equilibrio. Después de practicar
«el escorpión», estira la columna en
sentido contrario haciendo una flexión
hacia delante en la postura sobre
la cabeza, bajando los pies al suelo,
frente a la cara (p, 101).
las rodillas, separa las piernas
y bájalas por detrás de ti.
Desenlaza fos dedos y apoya una
mano en el suelo, junto a la
cabeza.
2
Apoya la otra mano
y después mueve
ligeramente las muñecas
hacia Juera, de modo que
las manos y los antebrazos
queden paralelos. Empuja
los hombros hacia arriba,
descargando todo el peso
de la cabeza.
3 Ahora, levanta la cabeza
y mantón la postura. Con ¡a
práctica, las piernas llegarán
a doblarse hasta el punto
de que las pies te tocarán
la cabeza. Para bajar, invierte
el orden de los pasos.
>■
Variación i
Cuando adquieras más
38»'-.
■
práctica, procura enderezar
las piernas part iendo de la
posición clásica. Una vez
la itomines, podrás adoptar
directamente la postura del
Variación 2 (derecha)
escorpión con las piernas rectas,
En esta variación avanzada es donde la
sin empezar primero
postura se parece más a un escorpión con la
a doblarlas.
cola arqueada por encima del dorso. Estira
y baja las piernas acercándolas cuanto
puedas al suelo. Empuja hacia atrás las
caderas todo lo que puedas y procura
enderezar las rodillas.
104 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
Variaciones de los brazos
Una vez que estés seguro ds tu postura
sobre la cabeza, prueba a reemplazar el
«trípode» que le sirve de base por
posiciones alternativas de los brazos,
Adoptar y mantener estas variaciones
constituye una lección de equilibrio. Si te
resulta demasiado difícil mover los brazos
con las piernas en la posición clásica de
sirshasana (tal como se muestra), abre las
piernas hacia los costados (p. 100);
cuanto más cenca está el cuerpo del
suelo, más fácil es mantener el equilibrio.
Cuando desplaces el peso para alterar la
posición de los brazos, mantón la mente
en calma, controlando la respiración. Cada
vez que tropieces con un nuevo obstáculo
en la realización de las asanas y lo
superes, ganarás confianza en tu
capacidad para trascender tus propias
limitaciones.
1b Ahora repite lo
mismo del otro lado,
llevando hacia atrás
la mano izquierda.
Muntén la postura,
1 a Desenlaza las manos y transfiere la
respirando
mayor parte del peso a tu lado izquierdo.
normalmente.
Cuando te sientas en equilibrio, inhala y,
mientras retienes el aliento, lleva hacia
atrás la mano derecha y colócala donde
estaba el codo.
2a Transfiere nuevamente
el peso al lado izipiierdo,
inhala y, mientras retienes
la respiración, estira el
brazo derecho hacia fuera,
3b Repit i el movimiento,
directamente frente a ti,
colocando el antebrazo
con la palma hacia abajo.
izquierdo encima del
derecho y cogiéndote los
brazos con fus manos.
2b Repite lo mismo del otro lado,
estirando hacia fuera el brazo
izquierdo. Los brazos deben quedar
separados por la anchura de los
hombros. Mantón la postura,
respirando normalmente. En una
&%
variación más avanzada, los brazos se
desplazan directamente /lacia delante,
Wi*3a De nuevü> desplaza el peso al
lado izquierdo, hihata yy mientras
retienes el uliejito, dobla el brazo
derecho y baja d antebrazo,
colocándolo ante la frente.
con los codos y los antebrazos muy
próximos (página siguiente).
La postura sobre la cabeza en loto
Cuando practicas la postura sobre la cabeza
en loto (Oarühwapadmasana), ostás haciendo
el cuerpo, en posición invertida, más
compacto. Con ias piernas bien dobladas, en
realidad, es más fácil equilibrar el peso y
mantenerse firme en la postura sobre la
cabeza. Tener las piernas trabadas, además,
ayuda a liberar la mente de las distracciones
del cuerpo, permitiendo la introspección,
La postura sobre la cabeza hace descender
el prana al cerebro; «el (oto» lo contiene en los
miembros inferiores. Cuando se combinan
ambas asanas, se puede sentir la energía
pránica centrada en ¡a columna. Además de la
torsión que se muestra a la izquierda, también
es posible plegarse hacia delante mientras se
mantiene la postura. Con las piernas en
posición de loto se ejerce menos presión
sobre la parle inferior de la espalda, lo que
permite una flexión más completa.
La postura sobre La cabeza en Loto
Mientras estás en ¡a pastura snbre. la cabeza,
cruza las piernas en ¡oto. Después de haber
doblado una pierna, inclina las caderas un poco
hacia delante, para ayudarte a colocar la otra.
Variación (izquierda)
(lira las caderas hacia la derecha mientras ejerces
presión hacia abajo sobre el antebrazo izquierdo
para ayudarte a mantener el equilibrio. Repite
el movimiento girando hacia Li izquierda.
Postura invertida con apoyo
en una pierna
Ésta es una de las posturas más adelantadas
del ciclo sobre la cabeza, que exige gran
habilidad y fuerza. Arqueando la columna
hacia atrás, apoya los pies en si suelo detrás
de la cabeza y después levanta las piernas,
primero una y luego la otra, to que provocará
un enérgico estiramiento a cada lado del
cuerpo alternativamente. La postura fortalece
también las piernas y los pies, porque
además de soportar el peso del cuerpo,
el pie que está en el suelo proporciona
a las manos el punto de apoyo para tirar
hacia atrás la parte alta de la columna y la
cabeza. Cuando practiques esta asara,
concéntrate en levantar la cabeza en
dirección a la pierna que te sirve de apoyo.
1 En la postura sobre la cabeza, arquea la
espalda y lleva ambas piernas detrás de
hi cabeza. Después, presiona, firmemente los
codos contra el suelo, relaja la espalda e
impulsa las calleras Inicia arriba mientras,
suavemente, te defas caer sobre los pies.
(Si no estás preparado para dejarte caer
desde la postura sobre la cabeza, toma esta
posición levantándote desde el suelo, con los
brazos formando el «trípode» de la pastura
sobre la cabeza.)
2 Ahora desenlaza los dedos y retrocede
con un pie hacia la cabeza. Mientras te
sujetas el pie con ambas manos, levanta
la otra pierna estirada, como se ve en la
foto, y separa la cabeza del suelo. Repítelo,
levantando la otra pierna.
108 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El ciclo de la postura sobre los hombros
Las asanas de este ciclo son mentalmente mucho más accesibles que las que integran
el ciclo de la postura sobre la cabeza, por la sencilla razón de que con la cabeza en ol
suelo, y de cara arriba, uno puede ver lo que está haciendo. Esto no sólo reduce el
temor de poner a prueba el cuerpo en posiciones nuevas, sino que significa también
que uno puede actuar como su propio maestro, verificando que el cuerpo esté recto
y los miembros, en posición simétrica. El ciclo concentra el prana en el cuello y en la
parte alta de la columna vertebral, lo que a su vez beneficia mucho la parte inferior de
la espalda, ya que cualquier trabajo que se haga en un extremo de la columna se refleja
automáticamente en el otro, Con el fin de practicar correctamente estas variaciones,
lleva los hombros hacia abajo y estira el cuello, apartándolo de los hombros, mientras
estés todavía en la postura del cadáver (pp. 2*1-25).
Variaciones de los brazos
Cuanto mayor sea tu habilidad con las asanas, tanto
menos necesitarás del apoyo de los brazos para
sostener el cuerpo; por ejemplo, no tardarás en
descubrir que puedes levantarte de una posición de
sentado en el suelo sin ayuda de las manos. Para
mantener el equilibrio en satvangasana con los
brazos invertidos a los costados {como en la
variación 3), debes tener la espalda bien musculada
y buena concentración. Una vez que puedas
adoptar esta postura, prueba a practicar las
variaciones de las piernas con los brazos
levantados.
Variación 1
Con la parte superior de la espalda
apoyada, exhala y baja la pierna
derecha al suelo, detrás de la cabeza.
Inhala y vuelve a levantarla. Manten
ambas piernas rectas. Repítelo tres
veces con cada pierna.
Variaciones de las piernas
Una de las lecciones principales de las posturas
invertidas es enseñarte a considerar las piernas
como «balancines» y no sólo como
transportadoras de peso. Tanto en la postura
sobre los hombros como en la postura sobre la
cabeza, las variaciones de las piernas cambian la
percepción del equilibrio y modifican la forma en
que está distribuido el peso.
Variación 2
Baja ¡a pierna derecha, como en la variación
7. Estira el brazo izquierdo hacia fuera en el
suelo, por detrás de la espalda, dobla la pierna
derecha y lleva la rodilla junto a la oreja.
Cógete el pie con la mano derecha. Repite la
variación con la pierna izquierda.
Variación 3
Adopta la postura sobre los hombros, sosteniéndote la
espalda de ¡a manera normal. Ahora, lentamente,
Nota Sólo se ha de practicar esta variación si
levanta primero el brazo derecho y después el
quien Ja hace es capaz de mantener ¡a espalda
izquierdo hasta, colocarlos a lo largo de los costados.
recta; si el cuerpo vence cuando levantas los
Manten la posición mientras respiras normalmente.
brazos, vuelve a dar apoyo a la espalda.
Variación 4
Con la espalda apoyada, dobla ligeramente
la rodilla derecha, después cruza por
encima de ella la pierna izquierda y rodea
el tobillo derecho con el izquierdo. Presiona
ambas piernas una contra otra. Después
de mantener la postura, repítela con la
pierna derecha alrededor de la izquierda.
Esta asana es «el águila» en postura sobre
los hombros.
EL CICLO DE LA POSTURA SOBRE LOS HOMSI
Variaciones del arado
Lis variaciones del arado (halasana)
curvan o estiran sucesivamente todas las
partes de la columna. Con las piernas
estiradas y alejándolas de la cabeza estás
trabajando el cuello y la parte alta de la
columna, en tanto que hacer avanzar los
pies acercándolos a la cabeza desplaza
el estiramiento hacia la parte inferior de la
espalda. Antes de practicar cualquiera
de estas variaciones, empieza siempre
por mantener la postura clásica, con las
manos entrelazadas detrás de la espalda.
Siempre que al adoptar una postura te
sientas rígido, lleva brevemente los brazos
al suelo, detrás de ti, para aliviar la tensión
en la parte superior de la espalda.
Si compruebas que con estas variaciones
adoptas una forma de respiración rápida
y superficial, relájate en la postura y
concéntrate en la respiración. El problema
pronto quedará superado.
Variación i
Las rodillas a la orejas
En !n postura de! arado, exhala, dobla laspfa
y baja las rodillas al suelo, llevándolas junto a las
orejas. Pasa los antebrazos sobre ¡a parte posterior
de ¡as rodillas y oprime las palmas contra las orejas.
Variación 2
Con las piernas rectas, ábrelas separando hspies
todo lo que lesea pasible. Estira los brazos
directamente hacia arriba por entre las
"v piernas, con las manos en posición
„ ■' <, \
de plegaria. En estapostura,
más que los hombros,
la que carga con todo
el pesa es la
V.
%
columna.
Variación 3
3a Entrelaza los dedos detrás de la espalda. Luego
avanza con los píes lo más tejos que te sea posible
hacia un costado, manteniendo las rodillas derechas
y tas piernas como se ve. en la figura de la izquierda.
3b Exhala, dobla las rodillas y bájalas
hasta colocar la cara externa del muslo
junto a la oreja. Repite los dos pasos
de esta variación del otro lado.
Variación 4
Ve alejando hs pies tanto como lesea
posible detrás de la cabeza. Exhala, dobla
Variación 5 (izquierda)
las rodillas y bájalas al suelo. Presiona con
Toma la postura sobre los
los brazas y ¡as manos contra el suelo.
hombros y coloca las piernas
en ¡oto. Lentamente, baja
las rodillas al suelo, justo
detrás de la cabeza.
112 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
Variaciones del puente
La práctica de sethu bandhasana y sus
variaciones desarrolla una fuerza enorme en
la parte inferior de la espalda y en el
abdomen. Al mantener levantadas las
caderas, se ejerce resistencia a la fuerza de
la gravedad. En la variación 1, la postura es
un poco más fácil de mantener, ya que la
pierna levantada ayuda a mantener elevado
el cuerpo. Una vez que no tengas dificultad
para pasar de la pastura sobre los hombros
al «puente» bajando ambas piernas.juntas,
mueve las manos para acercarlas un poco
más a los omoplatos. Asegúrate de que los
codos no se desplacen hacia fuera cuando
adoptas la postura. Siempre que una asana,
o una variación de ella, dejen de significarte
esfuerzo, busca maneras de perfeccionarla;
no te vuelvas complaciente. Por más
habilidad que tengas, hay siempre un paso
más por dar. En el caso del «puente», por
ejemplo, quizá podrías tratar de salir de la
postura sobre los hombros bajando con una
pierna en loto y con la otra recta.
Variación i
Toma la postura del puente y avanza
con ¡os pies hacia fuera hasta que las
piernas estén rectas. Inhala y levanta
una pierna, manteniendo la rodilla
estirada. Respira normalmente
mientras mantienes la postura,
y después exhala mientras
bajas la pierna. _ v.-.. - ■
/
Variación 2
A partir del puente, lleva los pies hacia atrás
en dirección a las caderas. Cógete los tobillos
v empuja las caderas hacia arriba.
Variación 3 (derecha)
Cruza tas piernas en loto en la
postura sobre los hombros.
Mientras sostienes la espalda
con firmeza, exhala y baja
Variaciones del pez
Los yoguis usan «el pez en loto» para flotar durante largo rato en el agua,
combinando la postura con una técnica de respiración especial. Cuando
la columna se arquea hacia atrás en estas variaciones de mafsyasana,
el prana es dirigido hacia arriba, en dirección al pecho y la cabeza, y el '
hecho de tener las piernas trabadas en loto impide las pérdidas de prana
a través de los miembros inferiores. Para acentuar el arqueamiento de la
espalda y abrir la región del pecho, expandiendo los pulmones,
elévate más, tirando de los pies y haciendo presión hacia abajo
con los codos, intenta apoyar la coronilla en el suelo,
dé'manera que puedas sentir que la curvatura se extiende
a la parte superior de la columna.
lentamente las rodillas. Manten
h cabeza y los hombros bajos
y los codos en posición.
Variación i (EL pez en loto)
Tiéndete boca arriba con las piernas
;
cruzadas en loto. Apoyándote sóbre
las codos, arquea la espalda hacia
arriba hasta que estés apoyado sobre,
Variación 2 (El pez Ligado)
la coronilla. Sujétate los pies desde
Partiendo del «pez en luto», transfiere el peso
ahajo, con las palmas hacia arriba,
al codo derecho, manteniendo la espalda arqucttdn
y procura presionar los codos contra
como se ve a la derecha. Pasa el hrazn derecho por
el suela y bajar las rodillas.
debajo de la espalda, inhala y cógete el pie derecho.
Exhala y haz lo mismo con el otro brazo.
114 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El ciclo de la flexión
hacia delante
Este ciclo abarca no solamente las asarías de flexión hacia delante y sus
variaciones, sino también su contrapostura, el plano inclinado. Las flexiones hacia
delante estiran y alargan la curvatura natural de la columna, creando espacio enlre
las vértebras. Con el tiempo, y gracias a una práctica constante, este ejercicio de
estiramiento educa los músculos de la espalda para que mantengan las vértebras
en su alineación correcta. Permite también que ¡a columna se arquee más hada
atrás; es decir, que a medida que progreses con las asarías de este ciclo, mejorarán
también tus flexiones hacia atrás. Si aprietas una parte de tu cuerpo (el brazo, por
ejemplo), enrojecerá, porque (a presión aporta más sangre a la zona. Las flexiones
hacia delante oprimen los órganos abdominales, nutriéndolos con sangre nueva,
con lo que mantienen la salud de todo el aparato digestivo. El ciclo, como tai, ejerce
también efectos benéficos sobre la mente.
Variaciones de La flexión
hacia delante
La clave del dominio de esta serie reside en
aprender a extenderse hacia delanle
directamente desde la base de la columna,
mientras se mantiene apoyada en el suelo
la parte de atrás de las rodillas. La variación
de los puntos de sujeción de las manos
altera la tracción ejercida sobre la columna
y los hombros y ofrece diferentes métodos
de ir trabajando la postura con más
intensidad. La variación 5 exige un buen
sentido del equilibrio, además de fuerza,
en tanto que la variación 6 significa un
enérgico estiramiento del torso y tonifica los
órganos abdominales. Procura mantener
durante largo tiempo todas estas
variaciones de paschimothanasana,
reajustando el cuerpo para intensificar el
estiramiento. Así podrás alargar muchísimo
la columna, hasta que con el tiempo quizá
llegues a tocarte los pies con la cabeza.
Variación i
Envuelve las plantas de los pies con las
palmas, colocando los dedos de las manos
bajo los talones. Esta variación aumenta
e! estiramiento en ¡os músculos de la parte
posterior del muslo.
Variación 2
Con los codos apoyadas en el suelo,
entrelaza los dedos alrededor
de ¡os arcos plan lares.
Variación 3
Con los codos en el suelo, estira el
brazo izquierdo más allá de ¡espíes
y con la mano derecha cógele la
muñeca izquierda. Después de haber
mantenido la postura, repítela,
inviniendo la posición de las manos.
Variación 4
Siéntate erguido, con las piernas juntas y extendidas al frente. Une
las manos por detrás de la espalda y estírale hacia delanle desde la
base de la columna, usando los músculos del abdomen y de til
espalda. Esta postura abre, los hombros y te permite ejercer una
suave presión hacia abajo sobre la columna con las manos unidas.
Variación 5
Siéntate colocando las rodillas dobladas contri 1
el pecho. Sujetándote tos dedos de los pies, indínate
un poco hacia atrás, balanceándole sobre las nalgas.
Endereza lentamente las piernas, llevando los muslos
contra el pedio y acercando la cabeza y la columna
11 los pies. Para desarrollar los músculos abdominales,
procura levan lar las piernas con las manos a los
castados y las palmas hacia aba jo.
Variación 6
Desde la flexión hacia delante, gira el cuerpo hacia
la derecha, llevando d codo izquierdo al suelo, junto
a la espinilla derecha. Apóyate en el codo para
conseguir la torsión del torso. Ahora cógete el pie
derecho con la mano izquierda y lleva la mano derecha
por encima de la cabeza para sujetar el pie izquierda.
Mira hacia arriba, entre los codos. Mantén la posición
respirando normalmente y después repítela, girando
hacia la izquierda.
116 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
La postura de la cabeza
a las rodillas
En janu sirasana, la pierna doblada sirve de
apoyo y de palanca, mientras que la que
permanece extendida se estira por la acción
del peso del torso, con lo que se aflojan los
tendones de la parte do atrás de las rodillas.
Comprobarás que te puedes doblar más hacia
abajo sobre una sola pierna que sobre las dos,
ya que es más fácil estirar un costado cada vez.
Esta serie de asanas tiene un poderoso efecto
sobre los órganos abdominales. El masaje que
éstos reciben en janu sicasana propiamente
dicha (centro derecha) se Intensifica si se
practica la postura en posición de medio loto.
Los movimientos de torsión de las variaciones 2
y 3 alcanzan profundamente el interior
del organismo, purificando el organismo, y
mantienen el cuerpo esbelto. Comienza cada
asana inclinándote sobre la pierna derecha para
tonificar el colon ascendente; después, repítela
hacia la izquierda, para actuar sobre el colon
descendente. En la variación 2, procura llevar el
pecho hacia fuera. Una vez que puedas realizar
la postura sin esfuerzo, pasa a la variación 3.
1 Siéntate erguido con las piernas
extendidas al frente, dobla la pierna
derecha y lleva el talón al perineo,
haciendo presión con la planta de! pie
contra el muslo izquierdo. Estira
los brazos por encima de la cabeza,
con las palmas juntas, inhalando.
2 Exhala y dóblate hacia delante desdi’ la base
de la columna. Cogiéndote el pie izquierdo con
ambas manos, lleva la cabeza liaciu abajo a lo
largo de la pierna, tan lejos como te sea posible.
Respira profundamente en la posición y luego sal
lentamente de ella.
Variación i
Coloca el pie izquierdo en medio loto y pasa la
mano izquierda por detrás de la espalda para
Variación 2
sujetártelo. Inhala y luego exhala mientras te
Lleva la rodilla derecha hacia atrás,
inclinas hacia delante sobre la pierna derecha.
en línea con la pierna izquierda.
Si ¡apostura te resulta demasiado avanzada,
Exhala y dóblate hacia la izquierda;
Variación 3 (derecha)
inclínate hacia delante sin sujetarte el pie.
mientras te sujetas el pie, haz
Suelta la mano izquierda y mueve
palanca con el codo izquierdo para
el hombro hacia fuera para llevar
llevar el brazo derecho hacia atrás.
la cabeza al suelo. Después, vuelve
a subir la cabeza a la pierna, con la
cara hacia arriba, y cógete el pie.
118 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
Torsiones con abertura lateral
de piernas
Variación i
Un buen estiramiento es como un bostezo:
si no llegas a completarlo te sientes
Insatisfecho, Sigue estirando y separando
suavemente las piernas, y con el tiempo
llegarás poco a poco a conseguir la abertura
lateral. Comienza estas dos asaras de
torsión separando las piernas hasta donde
te sea cómodo, rotándolas hacia atrás
desde las caderas; cuanto más abiertas y
estiradas estén, tanto más fácil te resultará
la torsión lateral. Procura alargar la columna
cuando te dobles hacia el costado, para
poder llevar la cabeza hasta el pie. Una vez
en posición, tira de los dedos del pie, en
dirección a la cabeza, y empuja con los
talones hacia fuera para Intensificar el
estiramiento y mantener mejor el equilibrio.
con la mano izquierda, cógete la cara interna
Pasa el brazo derecho por del ras ¿Je ¡a espalda y,
de i muslo izquierdo. Exhala y apoya el torso
sobre la pierna izquierda. Cúsete el pie
con la mano
izquierda.
Variación 2
A partir de la variación !, suelta la mano derecha y
llévala a sujetar el pie izquierdo. Mueve el brazo
y el codo izquierdos hacia fuera, apartándolos de
la pierna, y apoya la cabeza sobre la espinilla.
Estiramiento de piernas y brazos
En estas dos variaciones de hastha
padasana, las piernas están ligeramente
giradas y estiradas por el peso del cuerpo,
a medida que uno ss inclina hacia delante.
Aquí la gravedad es una ayuda, en cuanto
que atrae el cuerpo hacia abajo, Cuida de no
excederte en el estiramiento de las piernas,
cargando, al principio, la mayor parte del
peso sobre las manos. Centímetro a
centímetro, ve avanzando hasta que puedas
bajar los codos. En el momento en que
puedas apoyar el mentón y el pecho en el
suelo, ya se te habrán estirado lo suficiente
los músculos de la parte inferior del muslo.
Variaciones 1 y 2
1 Exhala y dóbhile hacia delante, caminando
con las manos por el suelo hasla que ambas
piernas y la columna alcancen el máximo
estiramiento.
2 Estira las piernas hacia fuera y cógete
los dedos de las pies. Ahora inclínale
hacia delante, haciendo que el
pecho guíe el movimiento
y separando
las piernas.
La tortuga
P,ara practicar kurmasana, siéntate con las piernas
separadas, las rodillas encogidas y los pies apoyados
en el suelo. Inclínate hacia delante y desliza los
brazos por debajo de las rodillas, con las manos
apuntando hacia atrás y las palmas hacia abajo.
Lentamente, estira ¡as piernas
y lleva el torso hacia delante.
,
La tortuga en equilibrio (derecha)
Para tomar la postura de uthitha kurmasana,
inhala, vuelve a exhalar y levanta la pierna
derecha hasta llevarla por detrás de la cabeza.
Repítelo, llevando la pierna izquierda hacia
arriba y por detrás de la derecha, para trabar los
tobillos. Respira normalmente en la postura yt
$■
O
itmi inhalación, levanta el cuerpo y mantente
en equilibrio sobre las manos.
120 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El plano indinado
1 Siéntate con las piernas juntas extendidas al
Esta asana es una contrapostura de las
flexiones hacia delante, así como «el pez»
complementa las asanas que integran el
ciclo de la postura sobre los hombros. Tras
haber doblado la cabeza y la columna hacia
delante, sobre las piernas, inclina el cuerpo
hacia arriba, dejando caer la cabeza hacia
atrás. Así se estira toda la parte frontal del
cuerpo, desde la coronilla hasta los dedos
de los pies. Cuanto más arriba empujes las
caderas, más se intensificarán el
estiramiento y el fortalecimiento de piernas,
hombros y brazos. Una vez que puedas
levantar las caderas lo suficiente, la columna
y los músculos de la espalda participarán en
el trabajo de sostener el cuerpo. La práctica
de las variaciones fortalece sucesivamente
todas las partes del cuerpo y ayuda a
percibir cualquier desequilibrio que pueda
haber entre los lados derecho e izquierdo.
Es probable que al comienzo te resulte
incómodo mantener estas posiciones o
equilibrarte en ellas, pero sigue repitiéndolas
y relajándote después; con el tiempo,
te fortalecerás en la medida suficiente para
realizar la secuencia completa.
frente y las palmas de las manos apoyadas en el
suelo, detrás de ti y con los dedos apuntando
en dirección opuesta al cuerpo.
Recuéstale ligeramente
sobre las manos.
2 Mientras haces presión hacia abajo con
las palmas, levanta las caderas lo más alto que
puedas y apoya los pies en el suelo. Manten las
piernas estiradas y deja caer la cabeza hacia
atrás. Mantén la postura del plano inclinado
durante unas pocas respiraciones profundas.
/[
.A
It
Variación i
A partir del plano inclinado, inhala y
levanta la pierna derecha estirada, mientras
mantienes el pie izquierdo apoyado en el
suelo. Mantén la posición, respirando
profundamente, y después de deshacer
la asana, repítela levantando la
pierna izquierda.
/
Variación 2
A partir del plano inclinado, inhala y levanta el
brazo derecho, para lo cual necesitarás inclinarte
ligeramente hacia la izquierda. Después de haber
mantenido la postura, repítela con el brazo izquierdo.
EL CICLO DE LA FLEXIÓN HACIA DELANTE 121
Variación 3
A partir del plano inclinado, transfiere el peso a la mano izquierda
y al borde externo del pie izquierdo, y estira hacia arriba la pierna y
el brazo derechos. Mientras mantienes la postura, mira hacia delante
y ligeramente hacia arriba. Después de deshacer la asana, repítela
levantando el brazo y la pierna opuestos.
X.
Variación 4
Adopta la misma postura que en la
variación 3, pero esta vez cógete el pie
derecho con la mano derecha.
Variación 5
A partir del plano inclinado, coloca la
pierna derecha en medio loto. Desplaza
el peso a la mano y el pie izquierdos,
y estira hacia arriba el brazo derecho.
Después de haberla mantenido, repite
¡a postura hacia el otro lado.
Variación 6
A partir de la variación 3, dobla la rodilla derecha
y llévala hacia atrás hasta cogerle el pie con la
mano derecha (como en la página 124). Gira un
poco más el cuerpo hacia la izquierda, de modo que
el torso esté casi de frente al suelo, y lira del pie
derecho hacia la cabeza. Repítelo del otro lado.
Esta postura es más fácil de mantener
que la 3. Repítela del otro lado.
122 L7\S ASANAS Y SUS VARIACIONES
El ciclo de la flexión hacia atrás
Tras haber estirado la columna en el ciclo de la flexión hacia delante, ahora se comprimen las
vértebras y se estira toda la parte frontal del cuerpo, abriendo el pecho y el abdomen para
facilitar la respiración profunda. En ocasiones, la gente se deja fascinar tanto por las flexiones
hacia atrás que se dedican a practicarlas excluyendo otras asanas. Para mantener la columna
sana se ha de respetar un equilibrio entre las flexiones hacia delante y hacia atrás. Es más,
después de una sesión especialmente intensa de flexiones hada atrás es aconsejable pasar
algún tiempo en una flexión hacia delante, para que ia columna vuelva a una posición neutra.
Otro error común es doblarse exclusivamente a partir de una zona de la columna, que
generalmente es la parte inferior de la espalda. Asegúrate de que siempre adoptas las
posturas y sales de ellas lentamente y con control, de modo que puedas sentir cómo el
movimiento se extiende desde el cuello hasta la base de la columna.
Variaciones de la cobra
Variación i
Una vez hayas desarrollado los músculos
de la espalda y tengas la suficiente
flexibilidad en la columna, podrás mantener
cómodamente bhujangasana con muy
poco apoyo de los brazos.
Ahora estás en condiciones de levantar los
brazos y valerte de las manos para cogerte
las rodillas o los pies y tirar del cuerpo para
arquearlo todavia más. Estas variaciones
imprimen un estiramiento sumamente
satisfactorio a la parte superior de
la espalda y, al curvar el cuerpo
en redondo, establecen un circuito
completo para la circulación del prana.
A partir de «la cobra» completa, mueve tina
mana hacia el centra, frente a ti. Estira Ut
atra mano hacia atrás para cogerle ia
rodilla. Can este apoya, estira hacia alrás la
primera mano para sujetarte hi otra rodilla.
Tira de las rodillas y exhala para acentuar
la curvatura de la columna. Invierte estos
pasos para salir de las variaciones.
Variación 2 (derecha)
Apóyate en una mano para extender la otra
hacia atrás y sujetarte ambos pies, usando
e! agarre que se explica en la página 124.
Ahora extiende hacia atrás la otra ¡nano
Variaciones del saltamontes
para cogerte cada pie con su mano resptám,
En estas variaciones se proyecta el cuerpo
hacia delante, alargando la columna y las
piernas en vez de llevarlas hacia arriba con
un impulso, como en «el saltamontes».
Puedes intentar estas posturas tan pronto
como puedas mantener salabhasana sin
necesidad de sostener tu peso con los
brazos. Aquí los brazos empujan las
piernas hacia fuera a partir de las caderas
y doblan el cuerpo hacia atrás desde la
parte superior de la columna y el cuello.
Antes de practicar estas variaciones, tira
de los brazos y los hombros apartándo
los de la cabeza y empuja el mentón hada
delante, deslizándolo por el suelo; con esto
se incrementa el estiramiento de la
columna y se reduce Ja presión. Sal
de la postura muy lentamente,
volviendo a transferir el peso
de las piernas a los brazos.
Tira de fos pies para levantarlas.
Variación 1
junta las piernas y extiéndelas más allá
de la cabeza. Cuando consigas que los
pies lleguen al suela, transfiéreles una
parte de tu peso.
Variación 2 (derecha)
Separa las piernas y estíralas hacia
fuera por delante de li, llevando los
talones hacia fuera. Una vez que estén
horizontales, junta las piernas.
Para mantener el equilibrio debes
llevar las caderas hacia atrás hasta el
punió exacto en que compensen
el peso de las piernas.
1
124 LAS SANAS Y SUS VARIACIONES
El agarre de las manos en las
posturas de flexión hacia atrás
Esta forma de agarre se usa para varias
asanas, entre ellas «el arco» y «la paloma».
Estira la mano derecha al costado y hacía
fuera, con la palma hada abajo. Gira la mano
a la derecha, de manera que la palma mire
hacia arriba y el pulgar apunte hacia atrás.
Ahora, volviendo un poco el cuerpo hacia la
derecha, lleva el tarazo hada atrás y sujeta
la parte exterior del pie derecho con la mano
derecha, colocando el pulgar contra la planta
y los dedos en el empeine. Doblando el codo,
llévalo hacia fuera y arriba, y tira del pie hada
delante. Repite el proceso con la mano y el pie
izquierdos, si la postura lo requiere.
Variaciones del arco
Si alguna vez has deseado poder coger
tu cuerpo con ambas manos y darle
forma a voluntad, estas variaciones se
aproximan a la realización de ese sueño.
Simplemente tirando de las piernas,
tienes el poder de modificar la naturaleza
de la flexión hacia atrás, y de hacer que
se unan partes del cuerpo que
normalmente jamás se encuentran
En la variación 3, por ejemplo, los pies
son atraídos hacia los hombros, mientras
que en la número 1 los talones llegan a
apoyarse en la frente, lo que te permite
mirarte, hacia arriba, las plantas de los
pies. La diferencia principal entre estas
variaciones y la dhanurasana básica (p.
54) reside en el agarre y en la posición
de los brazos, tal como se muestra
arriba. Esto acorta el alcance de los
brazos y, por ende, provoca en el cuerpo
un estiramiento mucho más intenso que
el agarre con ios brazos rectos. Con los
pies firmemente sujetos por las manos,
es posible llevar las piernas hada delante
o hacia arriba con mucho control, como
si se arrojara una pelota a cámara lenta,
A medida que vayas flexibilizándote,
mueve las manos hacia los tobillos o
hacia la espinilla, para tensar más las
cuerdas del arco, y junta las rodillas.
Con esto se intensificará el estiramiento,
Vy. .}
Tiende la mano hacia atrás, con la
palma hacia arriba y el pulgar
apuntando hacia atrás, para
sostener ía parle externa del pie,
con el pulgar debajo y ¡os dedos
encima. Tira del pie para llevarlo
hacia la cabeza.
Variación 1
Dobla la pierna derecha, inhala y tiende
hacia atrás la mano derecha para cogerte
el pie, coma se muestra en la figura.
Sosteniendo la pierna izquierda estirada
para mantener el equilibrio, inhala y cógete
también el pie con la mano izquierda.
Variación 2
Adopta la postura del arca, con el agarre
que se ilustra arriba. Mientras respiras
profundamente, con cada exhalación tirn______ _
tmpoco más de te pies hum
el tiempo, serás capaz de extenderlos más
allá de la cabeza.
Variación 3 (derecha)
Después de haber adoptado la
variación 2, procura estirar las
piernas y los brazos hacia arriba.
Variación 4
Pa?a dominar purna dhanurasana has
de tener los hombros relajados. Mantén
la variación 2 Jurante el tiempo
suficiente para calentar el cuerpo.
Después tira suavemente de los pies hasta
llevarlos a los hombros, manteniendo la
cabeza echada hacia atrás.
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126 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
La rueda
»EI que practique esta asana tendrá un
perfecto control de su cuerpo», dice Swami
Sivananda. La rueda, o chakrasana, es una
flexión hacia atrás sumamente dinámica,
que estimula todos los chakras, o centros
de energía, y te deja con una sensación
maravillosa de renovación y estímulo.
Para empezar, y a menos que seas ya ■
muy flexible, debes practicar levantándote
desde el suelo hasta alcanzar la postura.
Cuando comiences a aprender a arquearte
hacia atrás a partir de la posición de pie para
llegar a ¡a postura, procura reducir al mínimo
la distancia entre brazos y piernas antes de
dejarte caer. Baja el cuerpo todo lo posible,
separando bien las piernas y doblando las
rodillas. Y, lo que es más importante, centra
el peso en las rodillas mientras te arqueas
hacia atrás, ya que, de esta manera, si por
cualquier motivo perdieras el equilibrio,
caerías de rodillas. Para mantener la postura
con seguridad, coloca las manos y los pies
separados por la misma distancia; piensa
en tu cuerpo como si fuera una mesa
con las cuatro patas bien firmes. Con el
tiempo, conseguirás hacer que manos
y pies se toquen hasta completar el circulo,
como se ve abajo, a la derecha,
1 Tiéndete en el suelo con las
rodillas flcxionadas. Lleva tus
pies hacia las nalgas. Levanta
los brazos, dóblalos hacia atrás
y apoya ¡as manos detrás de los
hombros, con ¡os dedos
apuntando hacia los pies.
Tanto ¡os pies como ¡as manos
deben estar bien separados.
2 Inhala, levanta las
caderas y, haciendo presión
hacia abajo con las man
apoya la coronilla en el
suelo. Descansa brevement
3 Inhala y endereza ¡os brazos, levantando
¡a cabeza como se ve abajo. Levanta bien
alio las caderas y respira normalmente en
la postura. Con la práctica podrás acercar
más manos y pies. Si estás trabajando sobre
una manta, agárrate a ella con las manos
para acercarte más a los pies. Para salir de
la postura, invierte la sucesión de los pasos.
Forma alternativa de tomar la postura
de la rueda
Con hs pies bien separados y las manos sobre ¡as
caderas, arquéate lentamente hacia atrás. Manten
el peso en las rodillas y empu ja las caderas hacia delante. Inhala,
levanta los brazos por encima y por detrás de la cabeza y déjate
caer hacia alrás sobre las ruanos. Para volverá enderezarte,
desplaza el peso a las rodillas y, después, impúlsate hacia delante
y levanta hs brazos, ya sea uno por vez o los das al misrn '
Variación i
Doblándote hacia atrás, ve bajando
gradualmente las manos por la parte
posterior de las piernas. Cuando llegues a tu
Variación 2 (derecha)
limite, empuja las caderas hacia delante para
Para formar eka pada chakrasana, lleva una
mantener la postura. También puedes usar
pierna a una posición cenital para [omitir
esta variación para tomar la postura básica
un trípode firme con los brazos. Inhala y
de la rueda: cogiéndote firmemente una pierna,
levanta la otra pierna, llevando el talón
levanta el otro brazo por encima de la cabeza y
hacia arriba. Deja que el cuerpo se eleve por
baja la mano. Cuando te sientas firme, repite
acción de la pierna levantada. Repite,
lo mismo con el otro brazo.
invirtiendo la posición de las piernas.
128 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
La postura de rodillas
Ehipta vajrasana prepara el cuerpo para
el diamante (abajo), por cuanto estira las
rodillas y los musios, y hace que la parte
Inferior de la espalda se doble más. Cuando
practiques esta posición, asegúrate de que tos
hombros y la parte posterior de la cabeza
descansen en el suelo y, para obtener el
máximo estiramiento, mantén las rodillas tan
juntas como te sea posible. Deja que el cuerpo
vaya relajándose hasta llegar al suelo.
La postura de rodillas
Arrodíllate y ve reclinándote hacia
atrás, apoyándote alternativamente en
ambos codos, hasta que estés tendido
en el suelo. Cruza los brazos y rodea
con ellos la cabeza.
El guerrero
El guerrero
Somos muchos los que cargamos una tensión
enorme en tos hombros y en la parte superior
de la espalda. Esto no solamente es causa
de mala postura y de rigidez, sino que también
restringe la circulación del prans. Veeiasana
ayuda a abrir estas zonas, relajando los
músculos y permitiendo que el prana fluya
libremente. Además, estira las piernas y da
flexibilidad a los tobillos. Si al comienzo no
puedes cogerte las manos, aproxímalas
sujetando entre ambas un pañuelo,
Arrodíllate con la pierna derecha cruzada sobre
La rueda en posición
arrodillada
Tanto la variación del ohakrasana como la
postura del diamante estiran la parte frontal del
cuerpo y fortalecen la musculatura abdominal.
Para empezar, practícala con las rodillas
separadas y, para salir óe la postura, ve
soltando una mano cada vez. Mantén el
equilibrio inclinándote ligeramente hacia el iado
opuesto a la mano que sueltas. A medida que
progreses, ve juntando más las piernas y
suelta los dos tobillos al mismo tiempo,
permitiendo que sea la presión de las caderas
hacia delante la que te levante.
la izquierda, los talones en dirección al cueipo
y los dedos de los pies apuntando hacia fuera.
Mantén la espalda erguida, sube el brazo
derecho por la espalda, baja el izquierdo por
encima del hombro y sujétate ambas manos
entre sí. Mientras mantengas la postura, tira
con la mano izquierda hacia arriba para
intensificar el estiramiento del hombm opuesto.
Repite, inviniendo la posición de brazos y
pienms.reversing arms and legs.
La rueda en posición arrodillada
Arrodíllate con ¡as piernas bastante juntas.
Mientras empujas hacia delante con fas
caderas, arquéate hacia atrás y ligeramente
hacia la derecha para cogerle el tobillo
derecho; luego, extiende hacia atrás la otra
mano para sujetar e! tobillo izquierdo.
Cuando alcances ¡apostura, echa ¡a cabeza
hacia atrás y respira normalmente. Para
deshacer la asana adelanta el peso, y luego
inhala y suelta las manos, ya sea una después
de otra o las dos al mismo tiempo.
El diamante
El diamante y su variación
En esta postura, purna supta vajrasana,
y la variación que se muestra a la derecha,
has de modelar el cuerpo hasta imprimirle
una tensa forma de diamante, cerrada en sí
misma. Si no puedes alcanzarte los pies en
la postura, tira de la manta sobre la cual
practicas para ir acercando más la cabeza a
los pies. Si puedes cogértelos, tira
suavemente de ellos con las manos y
empuja con los codos, para lentamente ir
aproximando más la cabeza a los pies.
Para salir de estas posturas, hazlo con
tanta lentitud como te sea posible, para
dar tiempo a que el cuerpo se reajuste.
A partir de la rueda arrodillada, arquéate
lentamente hacia atrás hasta descansar ¡a
cabeza en el suelo. Si el arco te lo permite,
cógete los pies o los tobillos valiéndote del
agarre que se explica en la página 124.
Mientras mantienes la postura, respira
profundamente.
Variación (derecha)
■J A partir de la postura anterior, estira las
manos hacia delante, para cogerte las rodillas.
Intenta intensificar el estiramiento tirando de
las rodillas a cada exhalación.
130 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
Variación i (derecha)
La luna creciente
En anjaneyasana, el cuerpo se curva hasta
tomar la forma de una luna creciente, a la que
con frecuencia se llama «el símbolo del yoga».
Para alcanzar la postura se necesitan flexibilidad
y un buen sentido del equilibrio, pero -a
diferencia de la paloma (abajo)- con esta asana
puedes tener la vivencia de cómo se siente uno
en la postura ya desde los primeros días de
práctica. El peso está sostenido en equilibrio
sobre tres puntos: la rodilla y los dedos del pie
de atrás y el pie de delante. La pierna de atrás
es el principal soporte del cuerpo, lo que te da
seguridad para arquearte hacia atrás. Esta
postura constituye una preparación para las
aberturas de piernas (p.140). Tanto la luna
creciente como su variación expanden el pecho,
de manera que respira profundamente mientras
haces las posturas y, en cada exhalación,
estírate un poco más hacia atrás. Cuida siempre
de practicar estas posturas de ambos lados,
invirtiendo la posición de las piernas.
Pon las piernas en la postura
de la luna creciente, arriba a h
izquierda. Después, sujétate el
pie de atrás, procediendo de
la misma manera que en la
paloma (abajo).
La luna creciente (arriba)
Dobla la rodilhi izquierda y
estira hada atrás la pierna
derecha, empujando el muslo
hada abajo. Con las palmas
y. /
jimias, inhala y arquéate
hacia atrás, estirando bien
lus brazos y la cabeza.
Variación 2 (arriba)
Pon las piernas en la postura que se muestra arriba,
a la izquierda, inhala, cógele las manos a la espalda
y estíralas desligándolas por el dorso de la pierna
La paloma
Aquí se empuja el pecho hacia delante,
como hace una paloma cuando saca el
buche. Si eres novato en esta postura,
quizá te sea más fácil la práctica de
kapotha asaría si curvas un poco el cuerpo
hacia el lado de la pierna que se levanta y,
cuando ya estés equilibrado, te enderezas
y te vuelves hacia el frente. Una vez que
hayas ganado flexibilidad, deberás
prescindir de este truco y estirarte hacia atrás
para cogerte el pie con ambas manos a
la vez. La posición de la pierna que se ve
a la derecha es la que te proporciona una
base más estable, pero también puedes
practicar la postura con la pierna de
adelante en una posición alternativa, como
la que se ve en las aberturas de piernas
(p.140); con la pierna inferior doblada hacia
atrás por luera y no por dentro del muslo; o
bien la luna creciente, tal como se ve en la
página opuesta. Cuanto más tiempo lleves
practicando as anas, más te dará la
sensación de que se superponen. Con los
ojos cerrados y la mente concentrada, se
pierde conciencia de las distinciones entre
las posturas; de lo único que se termina
por ser consciente es de una sensación
de ligereza y energía.
hasta que llegues a tu máxima curvatura. Ahora
cógele la pierna y lira para doblarle más hacia
1 Siéntate con el pie izquierdo contra el
perineo y la pierna derecha estirada detrás
de. ti. Dobla la pierna derecha para
sujetarte el pie, tal como se explica e.n la
página 124.
2 Apoyándote en la mano izquierda para mantener
el equilibrio, tira del pie correspondiente hacia
arriba con la mano derecha y arquéate hacia atrás,
mientras llevas la cabeza hacia la planta del pie.
k.
¡wis ; /. •- ¡«
-V’.
^“-<1 /-'i ;í»,;
3 Una vez que estés en equilibrio, inclínate
un poco hacia la derecha y lleva hacia atrás
la mano izquierda para que pueda coger
también el pie. Después, vuelve a girar el
pecho hacia el frente. Repite la postura
invirtiendo la posición de las piernas.
alrás-
132 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El ciclo de posturas sentadas
Este ciclo abarca una amplia variedad de asanas, que van desde las torsiones de columna y
las variaciones del loto a la postura del arquero y las aberturas de piernas, Todas estas
posturas prestan atención a las piernas, los pies y las caderas, y todas se originan
en una posición sentada básica. Esta base estable lo libera a uno de la preocupación
de equilibrar o soportar e! cuerpo y le deja más energía para los movimientos de
estiramiento, encorvamiento o torsión que requieren las posturas. Sin embargo, debido a
hábitos sedentarios y a! uso de zapatos de tacón alto, es frecuente que sea necesario algún
trabajo preliminar antes de poder disfrutar plenamente de estas asanas. Incluso es posible
que un estudiante avanzado tenga que proceder de forma gradual para hacer desaparecer
la rigidez causada por años de alimentarse mal y de no hacer el ejercicio adccuado, pero,
sí practicas con persistencia y vigilas la dieta (pp. 78-85), conseguirás aflojar las tensiones
y cosecharás la totalidad de los beneficios que aporta esta serie.
La torsión de columna
Variación i (abajo y a La derecha)
La práctica de matsyendrasana y de sus
variaciones tiene efectos muy reanimadores
después de las flexiones hacia delante y
hacia atrás, y favorece muchísimo la
flexibilidad de la columna. Como on muchas
de las asanas en posición sentada, se usan
a modo de palancas tanto el suelo como
ciertas partes del cuerpo; se tira de los
tobillos y se empuja el dorso del brazo contrg
la rodilla para acentuar el estiramiento.
Mientras practicas la torsión del tronco,
imagínate que estás retorciendo un trapo
mojado. Este movimiento de estimular la
circulación de la sangre en la columna
previene los estancamientos de sangre en
los órganos internos, liberando el cuerpo
de toxinas y desintegrando el tejido adiposo.
El prana inunda toda la reglón de la columna
y proporciona al adepto fuerza y
concentración adicionales, En la medía
torsión de columna (p. 56) aprendimos
ya la importancia de mantener la columna
recta. Esta condición se vuelve aún más
esencial en estas posturas avanzadas,
en que la torsión se acentúa. Procura estirar
la columna hacia arriba mientras estás
rotando el cuerpo. Respira normalmente
cuando realices estas asanas, acentuando
la torsión cada vez que exhales. No olvides
repetir cada postura en la dirección
opuesta, para obtener la misma,
torsión del otro lado.
Siéntate a la derecha de tu pie derecho. Levanta la pierna
izquierda por encima de la derecha y pon el pie junto a la
cadera derecha. Ahora, iticlinute hacia delante y extiende
la mano izquierda por detrás de la espalda, para cogerle
con ella el tobillo izquierdo. Baja el brazo derecho por fuera
de la rodilla izquierda y sujétate la rodilla derecha.
“'■-v
La torsión de columna (izquierda y derecha)
(Jon la pierna izquierda en medio loto, ayúdate con la mano
izquierda para pasar ¡apierna derecha doblada por encima
de la izquierda}' apoyar el pie junto a la rodilla izquierda.
Pasa el brazo izquierdo por encima de la rodilla derecha y
sujétate el pie derecho, girando el torso a la derecha.
Variación 2 (más a la derecha)
Adopta la postura de torsión de columna. Después,
corno en la variación I, tiende la mano izquierda
hacia atrás para cogerte el tobillo izquierdo.
Al comienzo te será tílil poner una manta doblada
debajo de la nalga de (a pierna levantada.
sil
4^
401
134 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El loto
«El loto» simboliza la evolución espiritual del hombre: las raíces en el barro
representan su naturaleza inferior; el tallo que se eleva a través del agua, su
búsqueda intuitiva, y, la flor que se abre a la luz del sol, la autorrealización.
En el yoga, «el loto» o padmasana es la postura clásica para la meditación
y el pranayama. Estar sentado con la columna vertebral erguida y las piernas
dobladas de manera que proporcionen una base firme induce el cuerpo a un
estado de reposo sin esfuerzo. Cuanto más tiempo se mantiene la postura, más
se enlentece el metabolismo y la calma y la claridad mental van en aumento.
Con la columna recta, el prana fluye sin obstrucciones e incrementa la capacidad
de concentración. La postura flexibiliza los tobillos, las rodillas y las caderas y es
beneficiosa para los nervios de las piernas. Antes de adoptarla, haz los ejercicios
de calentamiento para «el loto» y practica el «medio loto».
Postura
de tobillos
y rodilla.
padmasana, y estabilizando la
respiración, el yogui [...] se libera.
De esto no cabe la menor duda.»
Hat ha Yoga Pradipika
Precalentamiento para el loto
La práctica de estas posturas bhadrasana
te ayudará a conseguir «el loto». Siéntate con la
columna recta y las plantas de los pies juntas, con
los talones próximos al cuerpo. Para la postura de
tobillos y rodillas, que se muestra a la izquierda,
ejerce presión hacia abajo sobre las rodillas,
manteniendo la espalda recta. Para «la mariposa»,
representada a la derecha, sujétate los pies y
mueve las rodillas arriba y abajo.
Mariposa
■4/ ■ X
s -■-:& A-
$,'■ i '$É*. ■ \
Medio loto
El loto
Para adoptar la postura del loto, comienza por sentarte con
las piernas abiertas en «V» y la columna recta. Dobla una
rodilla y lleva el pie correspondiente hacia dentro,
colocándolo sobre la parte superior del muslo opuesto.
Ahora, lleva hacia dentro el otro pie. Si lo colocas debajo del
muslo opuesto, formarás el «medio loto» (ardha padmasana),
que es más fácil para empezar y que puede emplearse para
la meditación y el pranayama mientras tus piernas adquieren
flexibilidad. Para el «loto completo», levantas la segunda
pierna y la pones por encima de la primera, colocando el pie
en lo alto del muslo opuesto. En el «loto clásico», es la pierna
izquierda la que colocas encima, y las rodillas tocan el suelo.
136 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El loto, variación 1 (derecha)
Adopta la postura sobre U1 cabeza en loto y procede
Variaciones del loto
después como para «el escorpión». No te preocupes
El loto, o padmasana, es una postura de una
versatilidad maravillosa, que se puede
combinar con una gran cantidad de asanas.
Eleva cualquier as ana de la cual forme parte,
al aquietar la mente y, con ello, incrementar el
poder de control sobre el cuerpo. En «el loto»
las piernas están cruzadas formando una
unidad pequeña y fácilmente manejable,
lo que proporciona una base sólida para estar
sentado y una masa compacta para levantarse
en el aire. También aqui se usa tanto ei suelo
como los propios miembros, a modo de
palancas, para conseguir, en algunas
variaciones, llevar el cuerpo a posiciones
de gran complejidad, como pueden serlo
«el feto” o «el loto ligado». El yoga mudra
tonifica los netvlos espinales y favorece
muellísimo el adecuado funcionamiento del
aparato digestivo. Tanto esta postura como
«el loto ligado» ayudan a despertar la kiindalim
latente. Aunque la variación 1 no es
estrictamente una postura sentada, la hemos
incluido aquí para borrar los límites que
pudieran existir en tu mente entre asanas
provenientes de diferentes ciclos. Cualquier
asana -y cualquier variación- incluye
elementos tomados de más de un ciclo;
«el escorpión en loto» puede ser considerado
como una variación de la postura sobre la
cabeza, una postura de equilibrio y una
postura sentada. El loto clásico se hace con la
pierna izquierda arriba, pero por cuestiones de
equilibrio se han de repetir estas variaciones
también con la pierna derecha arriba. Cuando
alternes la posición de las piernas sentirás
la diferencia en la base de la columna.
por la posibilidad de caerte: tus reflejos empezarán
por liberar automáticamente la pierna de arriba.
El yoga mudra (izquierda)
1 Con la columna recta, cierra /os/juñes
y colócalos detrás de los talones, con los
pulgares hada juera. Suave pera firmemente,
haz presión con ellos hacia dentro en la parte
inferior del abdomen. Inhala.
2 Mientras exhalas, dóblate hacia delante
y lleva la cabeza hasta el suelo. Mantén la
postura. Una respiración abdominal
profunda hará que los puños, bajo ¡a presión
de los talones, efectúen un masaje de los
órganos internos.
El loto ligado
Mientras exhatas, haz una ligera
torsión hacia la derecha y pásate
la mano derecha por la espalda para
cogerte el dedo gordo del pie derecho.
Inhala. Exhala, haz una ligera
torsión hacia la izquierda y pasa
la mano izquierda por la espalda
para cogerte el dedo gordo del pie
izquierdo. Endereza el cuerpo y
respira profu ndametile.
Esta postura es bandha
.
padmasana, «el loto ligado».
El loto, variación 2
El feto
Con las piernas en ta postura del loto, y
Para practicar garbhasana, inserta las manos
valiéndote de las manos, levántate sobre las
entre las piernas, como en el gallo, hasta ¡¡ue los
rodillas para después tenderte boca abajo.
codos pasen a! otro lado, enganchando las piernas,
F.n este, momento, si es necesario, haz una ■:
y puedan levantarlas. Dobla los codos, de muñera
pausa para descansar con la cabeza
que lleves las piernas hasta el pecho, y cógete las
apoyada en los brazos cruzados (p. 104).
orejas corno se muestra en la /biografía.
Después, apoya las manos bajo los hombros,
cotí las palmas hacia abajo, y procede como
para «la cobra» (p. 50).
Mantén las caderas
apoyadas
en el suelo.
El gallo
Para practicar kukulasana, siéntate en loto. Aliora
inserta las manos entre laspantorrillus y los
^
muslos, inspira y haz presión con ¡as palmas hacia
abajo, hasta que las piernas suban a lo largo de los
brazos. Mantén el torso tan erguido como puedas.
1 3 8 IJ\S ASANAS Y SUS VARIACIONES
La postura del arquero
El arquero
En akarna dhanurasana tienes que llevar
una pierna hacia atrás como un arquero
que tensa el arco. En realidad, a partir de
la posición clásica (arriba), puedes exhalar
y soltar la pierna corno una flecha,
disparándola con el talón hacia delante.
En todas estas asanas. un lado del cuerpo
mantiene una flexión hada delante
mientras se abren las articulaciones de la
cadera y dél hombro del lado contrario.
Los músculos de la pierna se estiran, y se
fortalecen tanto las piernas como ios
brazos, lo que hace de la poslura
del arquero una preparación útil para la
postura de la pierna detrás de la cabeza
(abajo). Endereza el cuerpo tanto como
puedas y mira al frente mientras
mantengas estas posturas, respirando
lenta y profundamente, lo que no sólo te
ayudará a llevar la pierna más hacia atrás,
sino que también te permitirá mantener
mucho más fácilmente el equilibrio.
Siéntate con ambas piernas
extendidas ai frente. Cun
las manos, cógete ¡üs dedos
gordos. Manteniendo la pierna
izquierda estirada, con la otra
mano tira del píe derecho hacia
arriba y hacia atrás.
Variación i
Adopta la postura i
llevarlo por enciinu t
rquero, pero tira del pie derecho hasta
i cabeza, con la pierna estirada.
Variación 2 (derecha)
Cógete el dado gordo del pieizquierdo con la mano derecha,
y viceversa, cruzando el brazo
izquierdo por encima del derecha
Ahora dobla la rodilla izquierda y
tira del pie para acercarlo til pecho,
con el codo derecho apuntando
hacia arriba y hacia fuera.
La postura de la pierna
detrás de la cabeza
Para preparar el cuerpo para estas
asanas, intenta primero este calentamiento. Dobla la pierna y llévala
hacia arriba, paralela al pecho. Cógete
la pantorrilla con ambos brazos, como si
fueran una cuna, y mécela de un lado a
otro. Ahora, cogiéndote el tobillo, lleva la
planta del pie al pecho, y después levanta
el pie para tocarte primero la frente y
después la oreja con los dedos, Repite
lo mismo con la pierna izquierda. Con la
práctica, podrás llevar la pierna por detrás
de la cabeza y tratar de que una parte
cada vez mayor del cuerpo quede
delante de la pierna. Finalmente, la pierna
llegará a quedarte detrás del hombro;
entonces ya no necesitarás sostenerla en
su lugar con las manos. También puedes
tomar la postura a partir de la posición
acostada; eso la facilita. Esta asaría
ejerce gran presión sobre tos órganos
abdominales. Levanta primero la pierna
derecha para masajear el colon
ascendente, y después la izquierda para
masajear el colon descendente. Seguir
este orden es importante.
La postura de La pierna detrás de la cabeza
1 (derecha) Siéntate con el talán izquierdo contra el
perineo. Levanta suavemente la pierna derecha,
pasando por debajo de ella el brazo y el hombro
derechos, mientras con la mano izquierda tiras del pie
hacia arriba y hacia atrás, como se ve a la derecha.
2 (abajo) Ahora inclina la cabeza y tira del pie
para llevarlo por detrás de la cabeza y del
hombro. Después une ¡as manos en ademán de
oración. Estas sentado en eka pada sirasana.
Variación 1 (derecha)
Para practicar umkamnana, pon ¡a pierna
izquierda en medio loto, inclínate hacia delante
y lleva la pierna derecha hacia arriba y por
detrás de la cabeza. Apóyate en las manos y
procura enderezarte.
Variación 2 (más a La derecha)
Para hacer dwipada sirasana, tiéndete de
espaldas y lleva primero una pierna detrás de lu
cabeza y después la otra, cruzando los tobillos.
140 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
Las aberturas de las piernas
Para dominar anjaneyasana, las aberturas
de piernas, debe realizarse la repetición
constante. Si lo intentas una vez al año,
nunca lo conseguirás, pero sí Incorporas
este intento a tu serie cotidiana de asanas,
paco a poco las piernas se abrirán con más
facilidad, Si te parece una postura
exagerada, tal vez te convenga saber que
las piernas son capaces de una extensión
mucho mayor, hasta llegar a separar un poco
del suelo tanto la pierna de adelante como
ia de atrás, con las rodillas rectas, Una vez
que te encuentres cómodo en las aberturas,
la postura te dará una sensación estupenda
de equilibrio y simetría. Es una asana muy
estable, ya que proporciona la base más
alargada sobre la cual puede descansar
el cuerpo. Las aberturas te dan acceso
a muchas otras posturas; algunas de las
posiciones invertidas o de equilibrio más
avanzadas se vuelven más accesible cuando
puedes levantar o bajar así la pierna para
adoptarlas. Y como la práctica de las
aberturas mejora la circulación en las piernas,
es muy beneficiosa para todas las posturas
de pie. Tan pronto como hayas dominado
«la paloma» y las aberturas, puedes
combinar ambas para practicar la variación
3. Esta asana pondrá de manifiesto cualquier
asimetría antre los dos lados del cuerpo y te
dará la posibilidad de corregirla; por ejemplo,
si tienes el lado derecho más flexible, tira
un poco más cuando tengas cogido el pie
izquierdo. Una vez que puedas hacer esta
variación, ya no necesitarás practicar
«la paloma» con ninguna otra posición de las
piernas, puesto que mantener la pierna
delantera presionada hacia abajo en las
aberturas te proporciona la más completa
de las flexiones hacía atrás.
1 Con el pesa apoyado en las manos
estira tina pierna hacia delante
para apoyarla en el talón, y la otra
hacia atrás, manteniendo
estirada la rodilla.
2 Gradualmente ve retirando el peso
de ¡as manos, haciendo suaves
rebotes hacia arriba y haría abajo,
para que las piernas se estiren y se
aparten más. Un cuanto puedas
apoyar totalmente ambas piernas
en el suelo, junta las palmas en la
posición de oración.
í*
Variación i
A partir de la abertura de piernas, con las manos
en ademán de oración, inhala. Después exhala y,
conduciendo el movimiento con las manos,
inclínate hacia delante desde, la cintura y apóyate
Variación 2
Variación 3 (derecha, arriba)
Con las piernas en posición de abertura y
Cógete los dedos del pie derecho cotí la
las manos en ademán de oración, inhala.
mano derecha. Ahora dobla la rodilla
Después exhala y arquéate hacia atrás,
izquierda y estírate hacia atrás para
¡levando los brazos por encima de la
sujetarte, el pie con la mana izquierda.
cabeza. Apóyate en la respiración para
mantener el equilibrio en la postura y
Variación 4 (derecha)
para concentrar la mente.
Dobla la rodilla izquierda; estírate hada
atrás para cogerte el pie con la mano
izquierda (como en la página 124).
Después tira del pie hacia la cabeza y
sujétalo también con la mano derecha.
142 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El ciclo de equilibrio
Mantenerte en equilibrio te será más fácil si puedes distribuir el peso del cuerpo sobre una
superficie o un número de puntos de mayor amplitud, como en el «trípode» de la postura
sobre la cabeza. Cuando necesites estar en equilibrio sobre una pierna o sobre las manos,
el secreto reside en multiplicar tus puntos de apoyo. En «el árbol», por ejemplo, piensa
que tienes dos puntos de equilibrio en vez de uno, y deja alternar el peso entre los talones
y los dedos de los pies al comienzo, hasta que encuentres el punto de equilibrio. Para
todas las asanas, es esencial que trabajes con los pies desnudos, ya que necesitarás
poder separar los dedos y pegarlos al suelo para mantenerte firme. Mientras practiques
las posturas de equilibrio, fija la mirada sobre un punto, ya sea real o imaginario. Como un
marinero que arroja un cabo a tierra, tiende mentalmente una cuerda hacia ese punto,
de manera que puedas sostenerte en él con la mente.
El pavo real
Para mantenerte en equilibrio en mayurasana,
«el pavo real», necesitarás fuerza y una
concentración total. Cuando se practica bien
esta asana, la cabeza, el cuerpo y las piernas
forman una línea recta, paralela al suelo.
La postura es sumamente beneficiosa para la
digestión -ya desde antes de que puedas
mantenerte en equilibrio sobre las manos-,
puesto que el peso del cuerpo presiona los
codos hacia el interior de la parte alta del
abdomen, masajeando el páncreas
y el bazo. Una vez que estés acostumbrado a
esta postura, podrás intentar practicarla con
una posición de las manos más avanzada, ya
sea usando los puños o asentando las manos
en el suelo con los dedos apuntando hacia la
cabeza y no hacia atrás.
1 Con las rodillas separadas, siéntate sobre los
talones. Apoya las palmas en el suelo, con los dedos
apuntando hacia atrás, en dirección a los pies.
Manten juntos y apretados los codos y antebrazos.
2 Usando los brazos como puntales, inclínate
hacia delante y apoya la coronilla en el suelo.
Mantén los codos juntos ejerciendo presión hacia
dentro sobre la parte alta del abdomen.
3 Estira las piernas hacia atrás, una después
de otra, manteniendo las rodillas separadas del
suelo y los pies juntos. Debes hacer recaer
el peso en los dedos de los pies, las manos
y la cabeza. Ahora, levanta la cabeza.
4 Inhala, cambia el apoyo hacia
Variación i (derecha)
delante, sobre los brazos, levantando
Toma la postura del pavo real, pero,
los dedos de los pies y equilibrándote
en el paso 3, en vez de levantar la
sobre las manos. Mantén las piernas
cabeza, apoya el mentón en el suelo y
estiradas. Mantén la postura
después levanta verticalmente ambas
durante todo el tiempo que puedas,
piernas, como en «el saltamontes».
respirando normalmente; después
Es en esta posición cuando la postura
exhala y sal de la asana, bajando
recuerda a un pavo real que despliega
los dedos de los pies.
las plumas de su cola.
EL CICLO DEL EQUILIBRIO 145
La postura sobre Las manos
Como sucede con «el escorpión», llegar
a dominar la postura sobre las manos
(vríkshasana) es no sólo cuestión de equilibrio,
sino de pensamiento positivo, Piensa que tus
brazos son piernas y separa los dedos para
tener una base más amplia y adherirte ai
suelo. Si tienes miedo de caerte, procura
comenzar la práctica de esta asana contra
una pared. Adopta la postura con los codos
rectos y las manos a una distancia mínima de
unos sesenta centímetros de la pared
dejando que los pies vayan a caer contra ella.
Entonces sepáralos de la pared y manténte
unos segundos en equilibrio, de manera que
empieces a tener la vivencia de lo que se
siente en esta postura, sin apoyo, Tan pronto
corno llegues a sentirte seguro, prescinde de
la pared. Con el tiempo, llegarás Incluso a
poder dar algunos pasos con fas manos.
La postura sobre las manos
A partir de la posición de pie, inclínate hacia delante
y apoya ambas palmas en el suelo, separadas por la
anchura de los hombros. Manteniendo los codos
recios, inclínate hacia delante de modo que los
hombros se encuentren sobre las manos. Con una
inhalación, levanta rápidamente una pierna por
encima de la cabeza; el impulso arrastrará consigo a la
otra. Mantente atento para inmovilizar las piernas en
el punto de equilibrio, tan pronto como la segunda
pierna suba. Una vez que hayas encontrado el
equilibrio, podrás mover las piernas en esta postura
sin riesgo de caerte.
Variaciones del cuervo
Estas posturas son mucho más sencillas de
realizar de lo que parecen. El secreto consiste
en formar con los brazos una repisa flrme.que
soporte el peso de las piernas. Una vez
que hayas dominado la kakasana básica (p.
58), puedes fortalecer el torso, trabajando
alternativamente cada uno de los lados del
cuerpo e intentando enderezar las piernas. Te
resultará más fácil mantener el equilibrio en las
variaciones 1 y 3 si te acuerdas de inclinarte
un poco hacia el lado opuesto a aquel donde
se encuentran las piernas. Repite siempre
estas variaciones tanto a la izquierda como a
la derecha de las manos. La práctica de estas
posturas ayuda a imprimir a brazos y
muñecas la fuerza necesaria para la postura
sobre las manos, ai mismo tiempo que
aumenta la seguridad de ser capaz de
mantener el equilibrio. Con la práctica
podrás incluso, a partir del «cuervo básico»,
desplegar las piernas y levantarlas hasta
llegar a la postura sobre las manos.
El cuervo, variación i
Con las manos en ¡a posición básica del cuervo,
lleva ambas piernas hacia la derecha, dobla las
rodillas y apóyalas sobre ía repisa que te ofrece'el
brazo derecho. Al levantar las piernas, inclínate
hacia delante y ligeramente hacia ¡a izquierda.
Variación 2
Hstira las piernas bien separadas y coloca las
manos entre ellas. Refuerza el interior de
las piernas apoyándolas contra los brazos,
inclínate hacia delante y levanta las piernas,
enderezando las rodillas.
§:^
.
4bÉ&¡
Variación 3
Variación de la postura
sobre las manos (izquierda)
Con ambas piernas hacia el lado izquierdo,
apoya entre ellas la mano izquierda. Cruza los
'loma la postura sobre tus manos y después
tobillos para que te sea más fácil levantarlos, y
dobla las rodillas, bajando gradualmente los
después inclínate hacia delante y un poco más
pies hacia la cabeza. Mantén el equilibrio
hacia la derecha y levanta las piernas, como se
entre las talones y los dedos de las manos.
muestra a la derecha. Esta postura es vakrasana.
146 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
El águila
El nombre sánscrito de esta postura proviene
de Garuda, el águila mítica (p. 108) que tenía
pico y alas de pájaro, pero cuerpo de hombre.
Esta asana hace por los brazos y las piernas
lo que la torsión de columna hace por la
columna vertebral; es decir, los entrelaza
y retuerce primero hacia un lado y después
hacia el otro, con lo que aumenta la
circulación hacia los miembros. Es un remedio
excelente para las venas varicosas y, corno
la pierna que sirve de apoyo está flexionada,
fortalece los músculos de las piernas.
Entrelazar estrechamente brazos y piernas
unos con otros mientras se mantiene la
postura mejora la circulación y permite cobrar
mayor conciencia de las extremidades, desde
las caderas y hombros hasta los dedos.
Mantén la postura mientras respiras
profundamente y luego repítela cambiando
la posición de brazos y piernas.
El águila
Afírmate sobre la rodilla ligeramente
flexionada. Enrosca en torno a ella
la pierna izquierda, de tal manera que los
dedos del pie izquierdo se encuentren sobre
el interior del tobillo derecho. Pon frente
a tu cara el antebrazo derecho y enrosca
alrededor de él el brazo izquierdo, desde
dentro, cogiéndote las manos. Inclínate
todo lo que puedas y mantén la posición,
apretando brazos y piernas entre sí.
El árbol
La práctica de esta asana proporciona una
sensación maravillosa de paz interior. Apoyado
en una sola pierna, con la otra firmemente
plegada en la postura del medio loto y las
manos juntas y elevadas en ademán de
oración, puedes mantener el equilibrio sin que
el cuerpo te moleste. Antaño, los yoguis solían
permanecer durante varios días en la postura
del árbol, como forma de tapas, o austeridad.
Incluso hoy, en las riberas del Ganges y en
otros lugares sagrados, es posible encontrar
a muchos de ellos en esta posición. Divide en
etapas la práctica del árbol. Antes de hacerlo
con la pierna en medio loto, equilíbrate con la
pierna apenas levantada y luego hazlo con
la planta del pie apoyada contra el lado interno
de la rodilla opuesta. (Hacer fuerza hacia atrás
con la pierna que te sostiene te ayudará
también a mantener el equilibrio.) Respira en
profundidad mientras mantienes las
posturas y repítelas de ambos lados.
Ponerse de pie a partir de la postura del árbol
adoptada de rodillas o en cuclillas exige gran
concentración y control; trabaja muy
lentamente para salir de estas asanas,
valiéndote de la respiración para levantarte.
Como en todas las posturas de equilibrio,
fija la mirada en un punto enfrente de ti, para
enfocar la concentración. Una vez que puedas
realizar las posturas sin esfuerzo, practícalas
con los ojos cerrados.
El árbol y sus variaciones
Para hacer la postura clásica, a la izquierda,
coloca una pierna en medio loto, une ¡as
manos en ademán de oración y después
levántalas por encima de la cabeza.
La postura
en una rodilla y un pie
En vatyanasana, dobla la
pierna que sirve de apoyo,
inclínate ligeramente hacia
delante y desciende hasta
apoyarte en la otra rodilla.
)
La postura sobre
los dedos de un pie
(derecha)
En padangusthasana dobla
la pierna de apoyo y siéntate
suavemente sobre el talón.
Las aberturas de pie
Estas variaciones de anjaneyasana
son, por naturaleza, a la vez posturas
de equilibrio y flexiones hacia delante,
que participan de los beneficios de
ambos ciclos. A diferencia de las
aberturas que se practican en posición
sentada, donde la gravedad ayuda
a aumentar el estiramiento, aquí se
trabaja en contra de la gravedad,
usando los brazos para tirar de la
pierna levantada y sostener su peso.
La práctica de estas asanas te dará
nueva fuerza, flexibilidad y sentido del
equilibrio. Separa los dedos del pie que
te sirve de apoyo para aterrarte
al suelo y tener una base más amplia.
Y cuando adoptes las posturas,
levanta la pierna lentamente y sin
perder la concentración mental.
Haz fuerza hacia arriba con la pierna
de apoyo, y procura mantener rectos
torso y piernas, alargando el cuerpo
hacia atrás.
La postura del león
En simhanana, aumenta la circulación
en la lengua y la garganta, se
fortalecen los músculos de la cara
y la garganta, y se estimulan los ojos.
Siéntate sobre los talones. Apoya las
manos sobre las rodillas, con las
palmas hacia abajo y los dedos
extendidos, e inhala por la nariz.
Ahora inclínate ligeramente hacia
delante y exhala enérgicamente por
la boca, emitiendo un sonido «AAAH»
Al mismo tiempo, estira la lengua
hacia fuera y hacia abajo, estira los
dedos y mira hacia arriba. Mantén la
postura durante todo el tiempo que
puedas, y después cierra la boca
e inhala por la nariz. Repítelo tres
o cuatro veces.
La postura del Señor Nataraja
Nataraja es uno de los nombres dados
a Shiva, el Danzarín Cósmico, a quien
frecuentemente se representa en esta
postura. Se dice que cuando Shiva baje
el pie, el universo quedará destruido y
sobrevendrá la creación de un mundo
nuevo. Cuando practiques natarajasana
o su variación, inclínate hacia delante para
ayudarte a levantar la pierna, y luego
intenta volver a enderezar el cuerpo. Para
estabilizarte, mantón firme y recta la pierna
en que te apoyas. Cuando mantienes la
cabeza vertical, se acentúa el movimiento
hacia arriba, mientras que al dejarte
caer hacia atrás la postura se asemeja
más a una flexión hacia atrás y exige
mayor equilibrio y control. En la postura
clásica, el pie levantado se sostiene con
una sola mano, pero con las dos el
estiramiento que se logra es mayor.
<•
-
Natarajasana y sus variaciones
Dobla la pierna izquierda y levántala hacia
atrás. Sujétate el tobillo con la mano izquierda
(como en la p. 54) y tira de la pierna hacia
arriba. Cambia el agarre (p. 124) y estira hacia
atrás la mano derecha, para sujetar el pie.
Deja caer la cabeza para apoyarla en el pie.
Variación (derecha)
Procede como se indica arriba, pero, en vez
de llevar la cabeza hacia el pie, tira del pie
llevándolo sobre la cabeza. Manténte erguido.
150 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
La postura de pie
Estas asanas no sólo exigen flexibilidad
y fuerza, sino que desarrollan estas
cualidades. Por esta razón, te resultará
más fácil mantenerlas si ya puedes
hacer .las aberturas. En la postura de pie
(variación 1) debes tratar de crear una
línea recta que vaya desde las puntas
de los dedos hasta el pie de atrás, de
manera que el cuerpo forme una «T».
En la variación 2, estira las manos en
direcciones opuestas y cuida de que el
pie de atrás esté bien apoyado en el
suelo. Puedes usar esta postura para
pasar a la variación 1. Inclínate hacia
delante, llevando el pecho hacia el
muslo. Estira ambos brazos hada
delante y después endereza la
pierna de delante y levanta la de atrás.
SI practicas con regularidad estas
posturas, obtendrás firmeza en piernas,
brazos y caderas. No olvides que has
de practicarlas de ambos lados.
Variación i
Con los pies bien separados, apunta el pie
izquierdo hacia la izquierda y el derecho
ligeramente hacia la izquierda. Vuélvete
hacia la izquierda. Une las palmas por
encima de ¡a cabeza y levanta ¡apierna
derecha. Ahora, inclínate hacia delante,
enderezando la pierna levantada. ....
Variación 2
Procede como en la variación
1, pero dobla la pierna
izquierda de numera que
el muslo quede paralelo a!
suelo, manteniendo estirada
la pierna derecha y el cuerpo
erguido, Estira el brazo
izquierdo hacia delante y el
derecho hacia atrás, y mira
hacia fuera por encima del
brazo izquierdo.
La postura de la cabeza
a los pies
Postura de la cabeza a los pies
A medida que vayas teniendo más y
más sentido del equilibrio, te irás
sensibilizando cada vez más en lo que
se refiere al papel vital que desempeñan
los pies. Si tienes los pies rigidos e
inmóviles, no podrás aterrarte bien al
suelo con los dedos ni mantenerte
correctamente de pie. Llevar la cabeza
al encuentro de los pies en pada
hasthasana incrementará la conciencia
que tienes de estas partes del cuerpo
tan infravaloradas. Estirar los brazas
hacia atrás te ayudará a mantener el
equilibrio y te permitirá flexionarte hada
delante con la espalda recta.
manos cogidas detrás de la espalda,
Cotí
las piernas separadas y las
vuélvele hacia la izquierda
-
e inclínate cuanto puedas,
llevando el mentón
sobre la pierna.
Variación
Scpimi un poco nuís las piernas y después procede
como en la postura básicat pero> aí inclinare!
cuerpo hacia delante, dobla la rodilla e intenta
•'
llegar a tocarte los dedos del pie con
la nariz, Endereza los brazos.
rart
EL CICLO DEL EQUILIBRIO 151
Las variaciones del triángulo
Con el fin de alcanzar la libertad de
movimiento necesaria para la práctica de
las asanas más avanzadas, es importante
mantener los costados del cuerpo bien
estirados y con buen tono muscular.
Estas variaciones de tríkonasana alargan
ios costados del cuerpo, imprimiéndoles
un movimiento de torsión, e imponen a la
columna un poderoso estiramiento lateral.
Cada una de las tres posturas tiene tres
puntos importantes: la mano extendida, el
pie y la otra mano adyacentes, y el pie de
atrás. Si pasáramos un hilo entre esos
puntos, obtendríamos un triángulo, y de
ahí viene el nombre de ¡a postura. Los
triángulos, una vez más, cultivan el
sentido del equilibrio, especialmente en
las variaciones 1 y 3, en que las piernas
miran en dirección opuesta a ¡a del torso.
Asegúrate de que el muslo de la pierna
que va hacia delante esté paralelo al suelo
en las variaciones 2 y 3, y repite todas las
variaciones, dedicando el mismo tiempo
en ambos lados del cuerpo.
ti
Variación i
Separa las piernas alrededor de un metro,
enn el pie izquierdo apuntando hada la
izquierda, y el derecho sólo ligeramente
hacia ¡a izquierda. Inhala y, mientras
exhalas, gira el tronco hacia la izquierda
y dóblate hacia ahajo, llevando la pahtia
de la mano derecha al lado externo del p¡
izquierdo. Estira hacia arriba el brazo
izquierdo y mírate las puntas de los
dedos de la mano izquierda.
•'■-i*,-
Variación 2
Coloca las piernas en la misma posición que en
la variación anterior, pero con un palmo más
de separación. Ahora dobla fu rodilla izquierda,
llevando sobre ella la axila izquierda, y apoya
la palma de la mano izquierda sobre el suelo,
frente a la cara interna del pie izquierdo. Estira
el brazo derecho hacia fuera, a lo largo de la
oreja derecha, de manera que lodo el fado
derecho del cuerpo, desde el pie hasta la nuino,
forme una ¡mea recia. Mira hacia arriba
??iientras mantienes la postura.
Variación 3
A partir de la variación 2, haz girar el torso
para que mire, en dirección opuesta, llevando
la axila derecha sobre la rodilla izquierda y
apoyando la pahua derecha en el suelo, del
lado externo del pie izquierdo. Estira el brazo
izquierdo hada fuera junto a la oreja
izquierda y mira hacia arriba.
152 LAS ASANAS Y SUS VARIACIONES
Los ciclos de asanas
Este esquema proporciona una visión
general de todas las asanas que debes
consultar cuando planees tu propia
rutina, de la misma manera que, cuando
decides la ruta que has de seguir para
atravesar un país, utilizas un mapa.
Las asanas de la sesión básica están
¡lustradas en negro, para mostrarte la
forma en que has de incorporar
las posturas nuevas a! patrón básico. Las
figuras de color rosado representan
las asanas completamente nuevas que
se enseñan en esta sección de
«Las asanas y sus variaciones»,
Todas las variaciones, tanto de las
asanas básicas como de las nuevas,
se describen en estilo taquigráfico, cada
una dentro del ciclo que le corresponde.
Naturalmente, tendrás que aprender las
asanas y variaciones nuevas con las
instrucciones que se dan en las páginas
respectivas, antes de que puedas usar
las versiones taquigráficas, que no tienen
otra intención que la de servir de
recordatorio de las posturas, y no
de explicaciones, Como no hay dos
cuerpos iguales, una as ana que resulta
fácil de hacer para un alumno puede
exigirle más esfuerzo a otro,
Por esta razón, no es posible dar una
secuencia intermedia o avanzada.
Cada uno ha de avanzar, simplemente,
a su propio ritmo, teniendo siempre
cuidado de equilibrar las asanas que
escoja para su práctica.
I
I
Ciclo post sobre cabeza
Ciclo flexiones adelante
(100-101)
Vars elev piernas:
1 tí&v arribas piornas
(114-115)
Vars flexión adelante:
7 Palrms rofieando plantas
2 fíe a palma mano
y dados bajo tal
2 Codos en suelo, dedos
rodeando ancos
3 Meno coge muñeca
delante pies
4 Manos ¡untas detrás de la
espalda
5 Balanceo sobre nalgas
6 Torsión en flex adelante
Vars piernas en pos sobre
cabeza:
1 Piornas a lados fabcrt)
2 Bajar píenla frente
3 Corno 1, pierna bajo laclo,
4 Pierr¡as adelante y atrás
(102-103)
El escorpión
Vars escorpión:
1 Enderezar piernas
2 Piernas horizontales
(104-105)
Vars brazos pos a cabeza:
7 Subir codos palrms suelo
2 Brazos extendidos
3 Brazos doblados a cato
(106-107)
Pos sob cabeza en loto:
Loto en pos sob cabeza
Var: giro caderas en loto
Pos invert apoyo 1 pierna
7 Rueda en pos sobre cabeza
con oiov pierna
í
4.
JS
Ciclo post sobre hombros
(108-109)
Vars piernas y brazos en pos
sobre hombros:
7 Pierna a sueio
2 Piorna doblada, br fuer a
3 Brazos a caderas
4 Águila sobre hombros;
Piernas enroscadas
5 Piernas abajo, otra medio
loto ¡a'ado en medio loto)
(110-111)
Vars arado:
J Rodilla a! costado
2 Rodillas detrás cabeza
3 Arado en loto
Pos rodillas a orejas
(112-113)
Vars puente:
í Puente c pierna elevada
2 Puente, q caderas arriba,
tobillos cogidos
3 Puente on loto
Vars pez:
1 Pez en ioto
2 Pez en loto ligado
(116-117)
Pos cabeza a rodillas
Vers cabeza a rodillas:
7 Mano sujeta pie por detrás
espalda
2 Flexión al costado, brszo
superior hacia atrás
3 Flexión al costado, cabeza
en el suelo
(118-119)
Vars tors o abert piernas:
7 Mano coge muslo detrás
espalda; torso estirado a lo
largo pierna
2' Ambas manos a pies,
espalda sobre pierna
Vars estiramiento piernas
y brazos:
7 Piernas afuera, cuerpo
adelante (flex adelante en
abort piernas)
P. Piernas aluera, ouerpo
adelante, manos a pies
La tortuga
La tortuga en equilibrio
Tobillos defrás cabcza,
eauilibric sobre muras
(1 20-1 21)
El plano inclinado
Vars plano inclinado:
7 Elevación pierna
2 Elevación brazo
3 Elev pierna y brazo
4 Bev pierna y brazo, mano
sujeta pie
5 Elev pierna y brazo en
meato loto
6 Mano sujeta pierna
levantada sobre cabeza
(pl inel o natarajasanaj
LOS CICLOS DE ASANAS 153
Ciclo flexiones
hacia atrás
A
(122-123)
Vars de la cobra:
1 Manos a rodillas
2 Manos sujetan pies
Vars saltamontes:
1 Pies al suelo
2 Piernas horizontales
J¿1 (124-125)
Vars arco:
1 Pierna sujeté), una estirada
(1/2 arco)
2 Pies más alia cabeza
3 Pies detrás cabeza manos
y piernas arriba
4 Pies a hombros
(126-127)
La rueda
Vars de la rueda:
/ l'/tanos a dorso piernas
2 Una pierna levantada fEka
pada chakrasanaj
(128-129)
La postura de rodillas
El guerrero
Rueda en pos arrodillada:
De rodillas, tobilkjs cogidos
El diamante
Var del diamante:
Manos sujetan rodillas
(130-131)
La luna creciente
Vars luna creciente:
1 Cogiendo pie de atrás fcomo
en paloma)
2 Brazos extendidos atrás
sobre pierna
La paloma
Ciclo posturas sentadas
(132-133)
Torsión de columna
Vars torsión columna:
1 Sujetando tobillo
Sujetando tob por detrás
espalda en medio loto
2
(134-137)
Vara loto:
t Loto con escorpión
P Loto en pos cobra
El yoga mudra:
Ciclo de equilibrio
(142-143)
El pavo real
Var pavo real:
■
Piernas elevadas en
saltamontes, mentón suelo
(144-145)
Postura sobre las manos
Var sobre manos:
Píes a cabeza (escorpión en
pos sobre manos)
Puños en abdomen,
inclinación adelante
Vars raifirvo:
í Lateral, piernas costado
Manos cogen dedos píes por
detrás espalda
2 Piernas separadas
3 Lateral, brazo entre las
piernas
El loto ligado:
(146-147)
El águila
El árbol
Pos en 1 rodilla y 1 pie:
El feto
Rodilla a suelo en m loto
El gallo
Medio loto, sentado sobre
talón
Pos sobre los dedos:
(138-139)
El arquero
1 Pierna recta, pie oncima
cabeza
2 Manos sujetan pie contrario
Post de la pierna detrás
de la cabeza
Vars pierna detrás cabeza:
1 Pierna inj en medio loto
2 tendido de espaldas,
piernas detrás cabeza
(140-141)
g Aberturas de piernas
jp í Con flexión adelante
•¿esa&a mmefvtanos pos plegaria,
arquear torso hacia atrás
3 Pie de atrás a cabeza,
manos sujetan pies
4 Con pierna doblada,
manos sujetan pie atrás
(148-149)
Pos abertura piernas
El león
Pos del Señor Nataraja
Var Natarajasana:
Caíieza, cuello y columna
rectos
(150-151)
.^«Postura de pie
Vars pos de pie:
- 1 Eshram sobre 1 pierna,
en equilibrio
2 Estiramiento de pierna y
brazo
Pastura de cabeza a pies
Var cabeza a pie:
Piernas sep, rodilla doblada,
cabeza a pie
Vars triángulo
Torsión hacia atrás
2 Más separac piernas,
rodilla bajo brazo
3 Como 2, torsión h atrás
154 LAS SANAS Y SUS VARIACIONES
Los kriyas
El yogui considera su cuerpo como un vehículo en el cual se encuentra en
su camino hacia una conciencia superior. Para que pueda funcionar sin
problemas, el vehículo debe estar limpio, tanto por dentro como por fuera;
de la misma manera que nos lavamos las manos, también debemos
mantener limpios los pasajes internos, que después de todo son
continuaciones de cubierta exterior que es la piel. Los seis kriyas son
prácticas de purificación que limpian o tonifican partes del cuerpo que con
frecuencia descuidarnos, y son; kapalabhati (p. 70); tratak (pp. 93-95); neti,
que despeja los conductos nasales; dhauti, que es principalmente para el
tubo digestivo y que incluye kunjar kriya (p. 84} y agni sara (p.182), y vastra
dhauti, que se muestra abajo; naulí, que tonifica las visceras abdominales,
y bastí, que lava ei colon. Al limpiar de toxinas el organismo, los kriyas,
cuando se practican con regularidad, agudizan la mente y los sentidos
e incrementan la resistencia del cuerpo a la enfermedad.
Sutra neti
Humedece la cuerda con agua tibia salada e
insértala en el orificio nasa!. Cuando sientas salir
Neti
Neti ha de ser practicado diariamente.
Hay dos métodos: en sutra neti se pasa
un catéter o un trozo de cordón encerada
de unos treinta centímetros por el interior
de tina de las fosas nasales y se saca
por la boca; después se repite la
operación pasándolo por el otro orificio
nasal. Puede ser necesaria cierta
práctica para estar seguro de que el
cordón sale por la boca, en vez de seguir
hacia arriba por la fosa nasal o bajar
por la garganta. En /a/a neti se usa un
pequeño recipiente con un pico para
echarse agua salda por una de las fosas
nasales y hacerla salir por la otra. Si la
otra fosa nasal está obturada, ei agua
fluirá hacia la boca y será fácil escupirla.
Después de haber practicado jala neti
por ambos lados, conviene sonarse
primero una fosa nasal y luego la otra
para expulsar ei resto de agua.
Vastra dhauti
Sumerge la gasa en agua tibia
salada. M ¡entras sorbes
el agua, ve tragándote
lentamente la gasa, hasta
donde puedas, y después
vuelve a retirarla suavemente
y sácatela de ¡a boca.
¡íi punta por el fundo de la boca, cógela para
sacarla, tirando lentamente de ella Inicia fuera.
jala neti
Con la cabeza inclinada
hacia la izquierda, viértete
el agua en la fosa nasal
derecha y déjala salir por la
izquierda (o por la boca).
Vastra dhauti
Los yoguis practican este kriya una vez a la
semana y con el estómago vacío. Consiste
en tragarse una lira de gasa doblada de
4,5 m de largo, y después tirar de ella para
sacarla nuevamente, y limpiar así el
estómago y el esófago de mucosidades
y residuos acumulados. Es probable que al
principio te provoquen náuseas y que sólo
consigas tragar unos pocos centímetros,
pero si practicas tragándote algunos más
cada día, con el tiempo llegarás a tragártela
toda. Después de esta práctica se ha
de beber un vaso de leche. Vastra dhauti
exige la supervisión de un maestro de
yoga cualificado.
Nauli
En este kriya se hacen rotar los músculos
rectos abdominales en un movimiento como
de batido. Esto requiere tanto control
como concentración, ya que estamos
aprendiendo a manipular músculos que
habitualmente tratamos como si fueran
involuntarios. Por eso es útil concentrarse
en el abdomen cuando se practica el nauli.
La práctica de agni sara (p. 182) sirve de
preparación para este ejercicio. Comienza
por tratar de aislar los músculos, do manera
que formen un saliente vertical a lo largo
del centro del abdomen, y luego practica
empujando hacia abajo con la mano
izquierda, moviendo el músculo hacia la
derecha, y viceversa. Finalmente, lograrás
un movimiento de vaivén suave, como
el de una ola, que dará vigor y fuerza a los
órganos internos. Es un masaje que tonifica
el estómago, los intestinos y el higado, alivia
los problemas menstruales y estimula
la circulación del prana.
Nauli (derecha)
Ponte de pie con las piernas separadas, las
rodillas ligeramente flexionadas y las manos
sobre los muslos. Exhala y haz el uddiyana
bandha. Contrae los costados del abdomen,
aislando los rectos abdominales (arriba).
Ahora presiona alternativamente con las
manos para mover los músculos de. un lado
a otro (abajo).
Bastí
Es un método natural de limpieza de la parte
inferior do los intestinos. Como en un enema,
en el bastí se introduce agua en los
intestinos. Siéntate en una bañera con agua,
introdúcete en el recto un tubo de bordes
redondeados de unos 10 cm de largo
y a través de él aspira el agua haciendo
uddiyana bandha y nauli. Una vez retirado
el tubo, practica cl nauli para hacer circular el
agua antes de expulsarla. Mientras que
con los enemas el agua se introduce
forzadamente en el cuerpo, con bastí se
crea un vacío que la absorbe naturalmente.
El ciclo de la vida
La disciplina del yoga se constituye en guía a lo largo
continuarán a lo largo de un lapso de setenta u ochenta
de toda ¡a vida. Es una ciencia versátil y de vasto alcan
años, y aún después. No puede haber momento más
ce, que puede ser modificada para adaptarse a todas
importante para que una mujer cuide de sí misma, tanto
las etapas y condiciones de ia vida. Es posible que
en lo físico como en lo mental y espiritual. Si tú y tu
inicialmente te hayas sentido atraído hacia las asarías
compañero podéis establecer una buena rutina
como medio para mantenerte delgado o en
de asanas, pranayama y meditación, eso
forma, y hayas descubierto luego el va
os ayudará a pasar más fácilmente por
lor de los ejercicios respiratorios o de
el período que sigue, los primeros
«Hay un Espíritu que
meses repletos de las ocupacio
la meditación cuando te encuen
es puro y que está más allá
tras en momentos de cambio. En
nes que trae consigo la atención
de ia vejez y de la muerte. [...]
esta sección veremos maneras
de
un recién nacido,
Es Atman, el Espíritu que hay
de adaptar tas asanas para que
Los
movimientos suaves y len
en el hombre.»
se adecúen a diversas nece
tos de las asanas son ideales para
Chandogya Upanishad
sidades. Hemos escogido tres pe
los últimos años de la vida y ayudan
ríodos de la vida (ia maternidad, la
a que tanto ja mente como el cuerpo
infancia y la vejez) para prestarles especial
se mantengan jóvenes y activos, mientras
atención, pero aunque ninguna de estas categorías se
los ejercicios respiratorios aumentan el aporte de
adecúe a tu situación actual, igualmente puedes sacar
oxígeno al cerebro. Muchas asanas se pueden practicar
del material que aquí te presentamos ideas que te
sentado en una silla, y algunas incluso en la cama, Pero
ayuden a avanzar desde lu propio punto de partida,
si por alguna razón no pudieras realizar físicamente las
refiriéndote siempre a la sesión básica como fundamento
asanas puedes tratar de visualizarte practicándolas.
para esta secuencia de asanas.
Hacerlo supone un tremendo ejercicio de concen
La serenidad mental que genera el yoga, y la vitalidad
tración, pero acarrea muchos de los beneficios que
y la flexibilidad físicas que crea son fundamentales tanto
imparte la práctica física. Cuando se hace con plena
para el joven como para el viejo. A los niños ies ofrece
conciencia y atendiendo a la respiración, un mínimo
una manera de mantener una buena salud a lo largo de
movimiento puede convertirse en una asana. Una
toda la vida. Con su elasticidad natural y su sentido
estudiante de yoga que sufría de esclerosis múltiple se
del equilibrio, para los niños las asanas son fáciles, de
pasó varias sesiones trabajando para unir las manos en
manera que las sesiones les resultan tan gratificantes
la postura de oración, algo que para elia era ciertamente
como divertidas. También los adolescentes obtendrán
una asaría, y una con cuya práctica y perfeccionamiento
enormes beneficios de todos ios aspectos de la prác
obtenía gran placer.
tica. La timidez y la torpeza, tan habituales, no tardarán
Todos pasamos en la vida por períodos de estrés, ya
en ser reemplazadas por un nuevo sentimiento de con
sean causados por problemas de trabajo, por la rup
fianza y aplomo. Las técnicas del pranayama y de la
tura de una relación o por dejar de fumar. En estos
relajación son especialmente eficaces para ayudar a
momentos, la práctica regular del yoga puede
enfrentar los problemas emocionales que son parte
proporcionar un refugio en medio de la tormenta, y
integrante de este proceso de crecimiento.
darnos ia seguridad y la sensación de continuidad que
Muchas mujeres empiezan a hacer yoga cuando
necesitamos. Muchas de nuestras tensiones y de
están embarazadas de su primer hijo, en busca de la
nuestros miedos se generan por una concepción
mejor manera de mantenerse tan fuertes y sanas como
básicamente errónea de quienes somos. Sólo cuando
sea posible durante el embarazo. La creación de una
aprendas a identificarte con el Si Mismo,. que es
nueva vida es uno de los milagros más grandes, que
inmutable e inmortal, serás capaz de hacer frente a las
pone en marcha una serie de acontecimientos que
vicisitudes de la vida con serenidad y ecuanimidad.
158 EL CICLO DE U\ VIDA
La maternidad
Los meses durante los cuales se espera un hijo son preciosos y pasan pronto.
El primer embarazo, en particular, es un viaje de descubrimiento, una época de
grandes cambios. Estás consagrada a la creación de una nueva vida, no sólo
con tu cuerpo, sino también con tus emociones, tu mente y tu espíritu. El yoga
te ayudará a tener el mejor de los embarazos y de los partos posible, y desde
el comienzo mismo proporcionará al niño un medio positivo para su crecimiento.
Con el yoga te sería más fácil evitar problemas tales como el exceso de peso, las
estrías y tos dolores de espalda. En esta sección te enseñaremos a modificar
las asanas como y cuando sea necesario, e introduciremos posturas especiales
para el embarazo y ejercicios preparatorios para un parto fácil. (Lee toda la
sección, incluso la parte dedicada a ios últimos años; es posible que allí también
encuentres algunas sugerencias útiles.) Aun si jamás has practicado antes
el yoga, te encontrarás con que la realización de las posturas más simples
mejora tu condición física y hace que te sientas mejor, mientras que la relajación,
los ejercicios respiratorios y la meditación te ayudan a enfrentarte con el proceso
en su totalidad, desde la concepción al nacimiento y ta crianza, con mayor
seguridad y calma. Todas las mujeres temen en alguna medida el trabajo del
parto, que es precisamente eso: un trabajo, un duro trabajo. El yoga te enseña
a enfrentarlo de forma directa, a vivir el presente, tomando las cosas tal como
vienen. Con su práctica no solamente conseguirás un parto más fácil, sino
que también te ayudará a enfrentar cualquier eventualidad con calma, a partir
de profundos recursos propios de fortaleza y energía. La meditación puede ser
muy importante durante el embarazo: estudia los movimientos de la mente,
vuélvela hacia dentro, y te verás libre de todo temor o incomodidad.
Especialmente con el primer hijo, es muy importante establecer una rutina que
incluya la práctica de las asanas. el pranayama y la meditación; después
que llegue el niño al mundo, ese hábito te mantendrá bien y te ayudará
a superar momentos de estrés y de fatiga. El yoga será una fuente de fuerza
que te ayudará a ser una madre más amante y generosa.
La meditación (derecha)
El embarazo es una época excelente
para la meditación, ya que la jornia en
que tú sientas y pienses afectará también
al bebé. Como parle de tu meditación,
envía conscientemente piaña ai niño
que ¡levas en ti,
Los comienzos del embarazo
Imagínale que e! bebé se mueve
contigo mientras practicas
las asanas.
Los últimos meses
A medida que el bebé crece, son
útiles las asanas modificadas.
La práctica regular te mantendrá
en conlaclo con los cambios que se
irán produciendo en tu cuerpo.
160 EL CICLO DE LA VIDA
El programa de práctica
Este programa abarca la misma
secuencia de posturas que la sesión
básica (pp, 30-31), e incluye
sugerencias para modificar las asanas
y para adoptar nuevas posturas
especialmente indicadas durante el
embarazo. Usa el programa al mismo
tiempo que las enseñanzas de la sesión
básica, y toma como referencia los
esquemas de las páginas 64-65 si
quieres hacer una sesión más breve o
necesitas un programa para
principiantes. SI ya tienes suficiente
experiencia en la práctica del yoga,
durante el embarazo has de limitarte a
una práctica suave, de «mantenimiento».
Durante este período, el cuerpo segrega
una hormona llamada «relaxlna», de
modo que incluso es posible que
adviertas una mejoría general en tus
asanas. Por más voluminosa que llegues
a estar, puedes continuar trabajando las
posturas en posición sentada,
especialmente en «el loto». Estas asanas
son, en este momento, muy importantes
para ti, ya que te ayudan a abrir la
pelvis para el nacimiento, También
lo son las posturas de pie, que
fortalecen las piernas y te ayudarán
a cargar el peso del niño. Como las tres
flexiones hacia atrás del ciclo básico
(«el saltamontes», 4a cobra» y «el arco»)
se realizan boca abajo, te sugerimos
posturas alternativas. Presta atención
a tu cuerpo y escúchalo: eres tú quien
mejor puede juzgar lo que puedes y lo
que no puedes hacer mientras estás
embarazada, y cómo has de adaptar
las asanas para que se adecúen
a tus especiales necesidades. Nunca
mantengas una postura si te sientes
tensa o incómoda en ella, pero tampoco
seas demasiado indulgente contigo
misma: eí bebé está bien protegido,
tanto por tus músculos abdominales
como por el saco amn ¡ótico dentro
del cual flota en el útero.
El comienzo de la sesión empieza, como de
costumbre, con algunos minutas de relajación.
Si la postura del cadáver comienza a parecerte
incómoda, prueba con las posturas modificadas
que aparecen en ia página 164. A medida que
el niño crezca, para deshacer cualquier postura
acostada, rueda hacia un costado y ayúdate
con las manos para levantarte. El pranayama
es importante por el aporte deprana que
significa para ti y para el niño, además de que
Incrementa el consumo de oxigeno y te ayuda a
serenar la mente. Durante el parto, concentrarte
en la respiración te ayudará a mantenerte en
calma y relajada, dueña de ti.
En las posiciones 3 y 10 (flexión hada
delante),
como se ve arriba, no tendrás mucho
Es posible que cuando hagas el «saludo al
problema,
siempre que separes las piernas
sol» tengas que modificar ligeramente algunas
para
dar
cabida
al bebé.
de las posturas, especialmente durante los
últimos meses, cuando el abdomen se
agrande. Vuelve a consultar las páginas 34-35 Durante estos meses sólo debes practicar
la elevación de una sola pierna, alternando
para refrescar tu recuerdo de las doce
ambas (p. 36). También puedes ensayar la
posiciones que constituyen ia secuencia.
versión adaptada para la vejez (p. 174), pero
evita la elevación de ambas piernas, porque
supone un gran esfuerzo para el abdomen
Practica en cambio un ejercicio de
enderezamiento de cabeza y torso
especialmente adaptado al embarazo,
que fortalecerá los músculos abdominales
sin Imponerles esfuerzo. Cuando se ejercitan
correctamente, los abdominales ayudan a
sostener en buena posición al niño, de manera
que
ambos os sintáis cómodos, Tiéndete de
En las posiciones 2 y 11 (flexión hacia
espaldas con las piernas recogidas y los pies
atrás) puedes apoyar las manos en las
apoyados en el suelo ccrca de las nalgas, y
caderas en vez de levantarlas, y apartar
entrecruza los dedos de las manos detrás del
un poco los pies para hacer que el
cuello. Haz una inspiración, levanta la cabeza
estiramiento alcance mejor la parte baja
y los hombros y gíralos hada la Izquierda, Exhaia
de la espalda. Entre las posiciones 6 y 7,
mientras los bajas y repite el movimiento hacia
ari que normalmente el abdomen se desliza el lado derecho. Debes hacer este ejercicio unas
rozando el suelo, usa las manos para
cinco veces hacia cada lado, sintiendo cómo
sostener el peso del cuerpo y pasar de una los músculos se tensan y se ponan firmes cuando
postura a la siguiente. Siente cómo el bebé levantas suavemente la cabeza y los hombros,
está acurrucado dentro de ti.
para después relajarse gradualmente al bajarlos.
EL PROGRAMA DE PRÁCTICA 161
La postura sobre la cabeza y la postura sobrs hasta que las piernas estén rectas. Luego
postura de la cabeza a las rodillas (p, 116).
los hombros son valiosísimos durante el
puedes tratar de separar de la pared primero Lo más importante cuando practiques las
embarazo, ya que representan un descanso una pierna y después la otra, hasta que
flexiones hacia delante es mantener
para la parte interior de la espalda, las venas ypuedas equilibrarle sin apoyo, Sí te mantienes la columna recta; durante eí embarazo,
loa músculos de las piernas, como también cerca de la pared, eso te dará más confianza el abdomen puede servirte como recordatorio
para los músculos de la parte baja del abdomen.
y perderás el miedo a caerte. Para deshacer la de que has de enderezar la espalda.
Además, ayudan a que el útero vuelva a su postura, vuelve a descender con los pies por
posición normal después del nacimiento. Sin la pared,
0 cambio más importante en tu sesión de
embargo, después de las primeras semanas
asanas estará relacionado con las flexiones
puede resultarte un poco incómodo adoptar y
hacia atrás; tal vez encuentres que las tres
mantener estas posturas, y también es probable
básicas, »!a cobra», «si saltamontes» y «el
qua tu sentido del equilibrio haya cambiado,
arco» (pp. 50-55), ejercen demasiada presión
incluso si ya tienes un buen dominio de estas
sobra el abdomen. En este caso, sustituyelas
asanas, debes practicarlas poco a poco, y
por «la cobra» modificada y »el gato» (pp,
renunciar inmediatamente a hacerlas si no tienes
166-167), y reemplaza «el arco» por «la rueda»
la absoluta seguridad de que puedes continuar.
de rodillas (p, 128).
Si eres principiante, estudia la postura sobre laTras haber practicado la postura sobre la cabeza,
cabeza (p. 38) para familiarizarte con sus ochocompleta o modificada, dascansa en la posición
pasos, y practica los pasos 1, 2 y 3 («el trípode»)
del niño (p. 39) o en la versión modificada can
para obtener algunos de sus beneficios, Cuandolas rodillas separadas, como se ve arriba y en la
ya la posición 3 te resulte cómoda, puedes página 169, y respira profundamente hasta que
Intentar levantarte hasta la 4 y luego caminar la circulación se normalice.
hasta llegar a la 5. Entonces, puedes modificar
el paso número 6, doblando y levantando una Para la postura sobre los hombros y para
rodilla por vez y quedándote en esta postura, ■■el arado» puedes usar las posiciones modifi
manteniendo la columna tan recta como te seacadas que encontrarás en ía página 164. en
posible y respirando profundamente.
esta sección. Si eres principiante,
ntenta simplemente tenderte con ..
los pies levantados, apoyados s£"~
en una pared. Después del «arado» puedes También puedes practicar «la luna creciente»
agregar los estiramientos contra
(p. 130), usando la posición modificada que se
la pared. Practica normalmente el pez, que muestra arriba, con las manos sobre la rodilla
es espocialmenle beneficioso para ayudar
para tener un apoyo suplementario, si con ella
a combatir la depresión. Para «el puente», te sientes mejor.
adopta la postura levantándole desde ei
Las posiciones sentadas deben constituir una
buena parte de las asanas que practiques
durante el embarazo, ya que abren la reglón
pélvica, con lo que facilitan el parto, y
fortalecen las piernas y la parte inferior de la
Esta media postura sobre la cabeza (arriba)
columna. Incluso es posible que te encuentres
proporciona la mayor parte de los beneficios
con que has mejorado en «la mariposa» y en
de la postura completa, No intentas seguir
«el loto» (p. 134), porque la cintura pelviana se
más adelante a menos que tengas un gran
estira durante el embarazo para facilitar el
dominio de ella. Sin embargo, si te sientes
parto. También puedes intentar posturas
dispuesta, puedes probar con la postura
arrodilladas como «el guerrero» (p. 128) y la
completa, practicando contra una pared como
postura en cuclillas (p. 169) para favorecer
apoyo, pero solamente en los primeros meses suelo, ya que descender desde la postura
la elasticidad de los músculos vaginales. Si
de embarazo. Arrodíllate con las nalgas
sobre ¡os hombros representa un trabajo
te parece que la torsión o la media torsión de
cerca de la pared, forma «el trípode» con
abdominal excesivo.
columna (pp, 56 y 132) ejercen demasiada
los codos tocando las rodillas y camina hasta En la flexión hacia delante, no olvides
presión sobre el abdomen, Inclínate un poco
tomar las posiciones 4 y 5. Entonces, en la 6, acomodar al bebé separando los muslos.
hacia atrás para darte más espacio. Eso te
trepa lentamente con los pies por la pared, A medida que el abdomen te vaya creciendo, resultará más fácil si practicas la versión que
deteniéndote cada vez que lo necesites,
es probable que te resulte más cómoda la se describe en la página 174.
162 EL CICLO DE LA VIDA
frente, mirando hacia el brazo de atrás,
Cuestiones prácticas
Invierte la posición de las piernas y replie la Durante la sesión, detente siempre que
torsión hacia ei otro lado. Las posiciones de
pie son útiles porque lortalecen las piernas, lo sientas cualquier tensión y descansa con
que te permitirá llevar bien al niño y, durante frecuencia en alguna de las posturas de
el parto, pujar con la fuerza necesaria. Ensaya relajación, Al final, relájate en la postura
algunas variaciones de las posturas de pie de! cadáver o en una versión modificada
y de las asanas que se ven en el ciclo de
(p. 169) durante diez minutos por lo
equilibrio (pp. 142-151) y practica «el águila» menos, y preferiblemente más. A medida
(p. 146), que es un ejercicio estupendo para que el embarazo avance, la práctica
mejorar la circulación y ayuda a prevenir las
regular de asanas te mantendrá
venas varicosas.
Alternativamente, siéntate con las piernas
cruzadas en la postura fácil para hacer una
torsión modificada. Apoya la mano izquierda
sobre la parte externa do la rodilla derecha
para que te sirva de palanca, y la mano
derecha en el suelo, detrás de ti, y gira
suavemente hacia la derecha, mirando en la
misma dirección. Mantón la posición mientras
respiras profundamente, y después repítela
hacia el otro lado,
»EI árbol» (arriba) tiene beneficios similares
y también -como todas las asanas de
equilibrio- te ayudará a mejorar la
concentración y a serenar la mente
La influencia calmante de las asanas te
resultará sumamente gratificante durante
los meses venideros. Practica primero los
pasos que llevan a tomar la postura del árbol,
tal como se describen en la página 146,
apoyando ei pie contra la parte alta del muslo
La torsión de columna en posición de pie
opuesto. SI eso te resulta fácil, inténtalo con
(arriba) no impone presión alguna al abdomen. la pierna levantada en medio loto, como se ve
Cruza las piernas, estira los brazos hacia los en la ilustración. Pronto podrás mantener la
costados y gira en la dirección efe la pierna delpostura Con ios OjóS cerrados.
en contacto con los cambios que
se producen en tu cuerpo y con
el crecimiento del niño. Debes tratar de
acudir a una clase de yoga con la mayor
frecuencia posible. El descanso y la
respiración profunda se vuelven cada
vez más importantes. Debes ampliar tus
períodos de relajación al comienzo y al
término de cada sesión, e incorporar a
tu rutina diaria momentos para relajarte,
En la relajación final, has de practicar
la secuencia que aparece en las páginas
26-27, contrayendo y relajando los
músculos de las diferentes partes de!
cuerpo en su momento, e incorporando
los ejercicios perineales que encontrarás
en la página 169. Estos ejercidos te
enseñarán gradualmente a reconocer
cuáles son los músculos que están
tensos y luego a relajarlos
conscientemente. Durante el parto
podrás relajarte entre las contracciones,
y con ello evitarás cansarte.
EL escorpión
Cuando tienen muchos años de
experiencia, las estudiantes de yoga
alcanzan una seguridad que les permite
seguir practicando posturas avanzadas
como «el escorpión» (derecha) durante
todo el embarazo. El propósito de esta
fotografía es darte ánimos, demostrándote
cuáles son los logros de que es capaz
el cuerpo de la embarazada.
164 EL CICLO DE LA VIDA
Asanas especiales para el embarazo
A medida que el bebé crece, es probable que empieces a sentirte un poco pesada
y que se le haga más difícil practicar de manera normal algunas de las asanas que
pueden serte más útiles. Puedes reemplazar [as posturas invertidas
básicas, que refuerzan la espalda y descansan el corazón y las piernas, por las
posiciones que te mostramos aquí (y en la página 161). En vez de las flexiones
habituales hacia atrás, practica «el gato» y «la cobra» modificada, que te ayudarán
a prevenir el aflojamiento del abdomen y las estrías, y te reforzarán las piernas,
con lo que podrás llevar bien al niña. Durante estos meses también deberás
preparar tu cuerpo para el nacimiento: los estiramientos contra la pared y la postura
en cuclillas te abrirán la pelvis, y los ejercicios perlneales tonificarán tus músculos
vaginales y pélvicos. Finalmente, si las necesitas para relajarte y dormir
cómodamente, ensaya las posturas modificadas def «cadáver».
Modificación de la postura
sobre los hombros
La postura sobre los hombros es
sumamente estimulante y vigorizante,
especialmente durante el embarazo,
época en que el exceso de peso
provoca fatiga en las piernas y en la
espalda. Pero si la expansión del vientre
hace que te resulte difícil tomar esa
posición, usa como apoyo y medida de
seguridad una pared, apoyándote en ella
con los pies para disminuir el peso
mientras vas subiendo. Asi obtendrás
todos los beneficios de la postura
invertida, sin el esfuerzo de tener que
soportar todo el peso del cuerpo.
,v
Modificación de La postura
sobre los hombros
Acuéstate con las nalgas contra la pared
y las piernas extendidas hacia arriba.
Ejerce presión con los pies
para levantarte lo suficiente para
insertar las ruanos y sosten ertc
.
la espalda (p. 40). Sigue caminando
por la pared hasta enderezar tas
piernas, y después practica separando
de la pared una de ellas (o las dos).
Modificación del arado
Para estar más cómoda en «el arado»
puedes separar las piernas o, si los pies
no te alcanzan el suelo, valerte de una
silla para apoyar en ella parte del peso.
Oprimir los pies contra una silla te ofrece
el beneficio adicional de mejorar el
estiramiento. Esta técnica también es útil
para principiantes, cuando todavía no
pueden alcanzar «el arado» completo.
Modificación del arado
A partir de la modificación de la postara
Advertencia: asegúrate de que no hay
ninguna posibilidad de que la silla se
mueva.
sobre los hombros, lleva una pierna, o ambas,
a descansar sobre una silla puesta ¿letras de ti,
empujando hacia atrás los talones.
ASANAS ESPECIALES PARA EL EMBARAZO 165
Estiramientos contra la pared
Son posturas que no requieren esfuerzo,
reaniman y abren suavemente la pelvis
para el momento del nacimiento. Estar
tendida en el suelo mantiene tu columna
recta, cosa que suele ser un problema
cuando se practican los estiramientos
de piernas a partir de la posición sentada.
Así, con el peso repartido entre el suelo
y la pared, puedes dedicar todas tus
energías al estiramiento. También
puedes practicar estos estiramientos de
forma pasiva, con los brazos relajados
en el suelo, a tos lados del cuerpo.
La mariposa contra la pared
En cuclillas contra la pared
Tiéndete con las nalgas y los pies contra
la pared y can las plantas de los pies
plantas sobre la pared. Suavemente, baja
Separa bien los pies y apoya ambas
juntos, y deja que las rodillas se abran
y ábrete las rodillas con las manos,
hacia fuera. Con las manos, haz presión
presionando los pies contra la pared.
sobre las rodillas para bajarlas y
Como variación, traía de practicar las
acercarlas a la pared. Descansa
aberturas laterales contra la pared.
disfrutando de h postura.
El balanceo de la pelvis
El balanceo pélvico
Este ejercicio refuerza el útero, la cuna
muscular donde crece tu hijo, además
de favorecer la respiración profunda y
aliviar el dolor de la parte inferior de
la espalda. La posición a cuatro patas
te hará sentir sana y fuerte; además,
algunas madres la encuentran cómoda
durante el parto. El balanceo de la pelvis
actúa estirando en ambos sentidos la
totalidad de la columna.
0
¥/ **
1 A cuatro patas, exhala y encórvate,
aplanando la parte inferior de la espalda.
Siente la fuerza can que el útero es llevado
hacia arriba. Respira naturalmente
y manlén brevemente la postura.
2 inhala y arquéate, ahuecando ¡a
parte inferior de la espalda. Levanta
la cabeza y la espalda y respira
nalunt/mcnte. Repite varias veces,
lentamente, los movimientos 1 y 2.
166 EL CICLO DE LA VIDA
Modificación de la cobra
Durante el embarazo, esta postura es más
adecuada que «la cobra» clásica (p. 50), ya
que evita la presión abdominal y fortalece las
piernas, sin dejar de constituir una buena
flexión hada atrás. Consiste en tres etapas,
en las que el arqueamiento va bajando de las
vértebras cervicales a las dorsales y
finalmente a las lumbares. Practícala poco
a poco; mantón cada una de las etapas,
respirando normalmente, y rio sigas
doblándote si ya no te sientes dispuesta.
Pronto podrás combinar las etapas en un
único movimiento fluido. Mantener ios pies
juntos te permitirá el mejor estiramiento, pero
puedes separarlos si así estás más cómoda,
Modificación de La cobra
Ponte de pie con los brazos ¡untos y las manos
entrelazadas detrás de ¡a espaUa.
1 Inhala y deja caer la cabeza hacia atrás. Mutilen
la postura, respirando suavemente.
2 Inhala y arquéate hacia atrás, llevando el pecho
hacia fuera y los brazos hacia atrás.
3 (Página siguiente.) Inhala y empuja hacia delante
con las caderas, llevando los brazos hacia atrás.
Descansa en la posición del niño.
EL gato
Esta asana, que se realiza cómodamente a cuatro
patas sin forzar el abdomen, sirve para
reemplazar «el saltamontes» en tus prácticas de
yoga durante el embarazo, La postura mantiene
la flexibilidad de la parte inferior de ia espalda y
fortalece las piernas, Además de los movimientos
que se ven aquí, intenta finalmente, como
contrapostura, llevar la rodilla de la pierna
levantada hasta la frente.
J
El gato
1 A galas inhala y levanta una pierna extendida
hacia atrás, elevando al mismo tiempo la cabeza.
Manten la postura, respirando normalmente; después
exhala y baja la pierna.
2 Procede de la misma manera, pero dobla la pierna
levantada, apuntando con los dedos del pie hacia la
cabeza. Cuando estés preparada, haz los dos pasos en
uno. Repite el ejercicio con la otra pierna.
ASANAS ESPECIALES PARA EL EMBARAZO 169
Ejercicios perineales
Modificación de la posición del niño
Estos ejercicios mantienen fuertes y sanos
los músculos pélvicos, anales y vaginales.
Como un buen elástico, estos músculos
deben estirarse totalmente durante el parto
y volver rápidamente a ia normalidad,
evitando asi problemas posnatales como
un prolapso o incontinencia de orina.
Ayudan también a mejorar la conciencia y
el control de los músculos, lo que permitirá
colaborar activamente, facilitando el
nacimiento,
Puedes adoptar la posición de! niño (p. 39)
Ejercicio 1 Tiéndete cómodamente de
espaldas, con los tobillos cruzados y sube
la pelvis un poco, presionando contra el
suelo la parte baja de la espalda. Exhala,
presiona entre sí los muslos, y endurece las
nalgas, contrayendo los músculos de la
pelvis. Manten la contracción mientras
cuentas hasta cinco, inspira y relájate.
Ejercicio 2 (asw/ra mudra) Siéntate, ponte
en cuclillas o de pie, cómodamente. Exhala
y contrae los músculos deí esfínter anal.
Mantén la contracción mientras cuentas
hasta cinco, inhala y relájate. Vuelve a
exhalar y contrae los músculos vaginales.
Mantén la contracción mientras cuentas
hasta cinco, Inhala y relájate,
separando simplemente las rodillas para dar
cabida al abdomen y sentándote sobre los talones.
La relajación
Especialmente durante los últimos meses
del embarazo -precisamente la época en
que el descanso es más Importante-,
puede resultar difícil encontrar posiciones
cómodas para relajarse y dormir. Las dos
posturas que se ven aquí pueden ser útiles
como alternativas. La posición del niño
modificada (arriba) no solamente
proporciona una postura de descanso
cómoda y una flexión suave hacia delante,
sino que también ayuda a abrir la reglón
pélvica. Tener una pierna flexionada
mientras se está tendida de bruces (abajo)
constituye un soporte para el peso del
abdomen y facilita la respiración. Al alternar
la pierna que se flexiona, estiras y
comprimes suavemente cada lado del cuerpo
alternativamente, como en una miniasana.
También puedes Intentar, valiéndote
de almohadas, encontrar posiciones más
cómodas; por ejemplo, intenta tenderte de
costado con una almohada entre las rodillas,
para aliviar la tensión en la pelvis y en la
parte inferior de la espalda.
La postura en cuclillas
Las mujeres en cuya tradición cultural
existe la costumbre de sentarse
o ponerse en cuclillas en el suelo tienden
a tener partos más fáciles, ya que estas
posturas abren la región pélvica y fortifican
las piernas. Mantienen, además, la flexibilidad
de la parte inferior de la espalda y provocan
una presión abdominal suave, que asegura la
buena circulación y previene el estreñimiento.
Si no estás acostumbrada a estar en
cuclillas, ayúdate apoyándote en una silla.
Modificación abdominal
de la postura del cadáver
Esta postura puede resultar más cómoda ya
avanzado el embarazo, porque ayuda a
Postura en cuclillas (izquierda)
Al comienza, agárrate a una silla para
descargar del abdomen el peso de! niño
y a distribuirlo por el resto del cuerpo.
apoyarte y baja sobre los dedos de los pies.
Apoya la cabeza sobre uno o ambos brazos,
Poco <j poco, los talones te irán llegando
como te resulte más fácil para respirar,
ai suelo.
y alterna la pierna encogida.
170 EL CICLO DE LA VIDA
La niñez
Practicar el yoga desde pequeños proporciona a los niños la mejor base que puedan
tener en la vida. Con su natural flexibilidad y sentido del equilibrio, por lo general les
resulta mucho más fácil que a los adultos adoptar posturas y pueden progresar
rápidamente. La mayoría de los niños son naturalmente animosos y emprendedores, y
lo único que necesitan es un poco de estímulo. Ayúdales a adoptar la posición correcta,
pero cuida de no foliarlos jamás a que adopten una postura, ya que en ellos los huesos
y músculos todavía están creciendo. La mayoria de los niños tiene gran capacidad
mímica y, si te ve practicar regularmente las asanas, querrá imitar lo que tú haces.
Generalmente, el único problema es la concentración, ya que normalmente la duración
de la atención en los niños no es muy larga. La solución, especialmente cuando son
pequeños, es estimular su interés haciendo que las sesiones sean divertidas. Aprovecha
Yoga para los pequeños
Los niños que aparecen fotografiados tienen
entre dos y once años. Abajo se ve ia rueda
(arriba, izquierda); la postura fácil y
«ei loto» (arriba, derecha); «el medio
saltamontes» y «el camello» (abajo,
izquierda); «bi cobra» (abajo, centro);
«el águila» (abajo, derecha), y la postura
del cadá ver (derecha).
ej hecho de que muchas a sanas ¡levan nombres de animales, pájaros y otros seras vivos
para dejar que el niño ruja como un león o se levante como la cobra de un encantador
de serpientes, Usa la imaginación: [a flexión hada delante es como cerrar un libro,
la postura sobre les hombros es como la vela que les pones en el paste! de
cumpleaños. También es importantísimo que desde tan temprana edad aprendan a
respirar correctamente. Trata de enseñar Sa respiración abdominal a un niño pequeño en
la postura del cadáver; ponle sobre la barriguita un pato de goma y hazle ver cómo nada
el pato cuando él deja que el aliento entre y salga suavemente. También la meditación es
de gran valor mientras crecen, ya que incrementa la capacidad de concentración de los
niños. En las escuelas donde se enseña meditación, los maestros han observado gran
mejoría, tanto en el trabajo de la clase corno en la interacción del grupo.
172 EL CICLO DE LIVIDA
La vejez
Jamás es demasiado tarde para acercarse al yoga, independientemente de que uno
tenga cinco años o ciento cinco; cada uno es exactamente tan viejo corno se siente.
La tercera edad puede ser verdaderamente una época de oro, en la que tiene uno
tiempo libre para dedicarse a sí mismo, tanto física como espiritualmente. Muchos
de los problemas de la última parte de la vida son una combinación de ejercicio
insuficiente, malos hábitos de comida y respiración superficial; de ahí derivan achaques
como ia mala circulación, la artritis y los trastornos digestivos. Pero el cuerpo tiene unos
poderes de regeneración increíbles, y ya después de un breve tiempo de práctica del
yoga estarás durmiendo mejor y tendrás más energía y una visión más positiva de la
vida. Si has pasado algún tiempo inactivo, al principio practica las asanas con lentitud y
suavidad. Comienza con los ejercicios de la página siguiente, y después ve incluyendo
gradualmente aigunas de las asanas de la sesión básica, incorporando más poco a
poco hasta que tas hayas aprendido todas. Para ti serán más beneficiosos los
movimientos tranquilos y que puedas disfrutar, que los ejercicios más enérgicos que te
resulten fatigosos. Si alguna postura te parece demasiado avanzada, empieza por
modificaría para que se adecúe a tu capacidad; en la página 174 encontrarás algunos
ejemplos que te servirán de guía. Sé benevolente contigo mismo y ten paciencia con
las limitaciones de tu cuerpo. Procura no esforzarle hasta el punto de quedarte sin
aliento, pero si te sucede, limítate a relajarte en la posición del cadáver hasta que
la respiración se te haya normalizado. Al mismo tiempo, tampoco seas demasiado
condescendiente: no te limites tú mismo por esperar demasiado poco de tu cuerpo.
Después de Linos meses de práctica te sorprenderás al descubrir que puedes hacer
cosas que jamás habrías creído posibles. Si por la mañana te encuentras rígido para
practicar las asanas, date primero un baño caliente, o bien hazlas por la tarde, cuando
el cuerpo ya ha tendido tiempo para aflojarse. No te olvides de practicar todos los días
meditación y pranayama. Respirar adecuadamente tiene mucha importancia hacia
el final de la vida (p. 67), y la meditación te ayudará a sentirte centrado en ti mismo y a
disminuir los sentimientos de miedo y soledad, Comprende que este cuerpo no es más
que un vehículo para el alma, y que el verdadero Sí Mismo es inmortal.
Modificación de Las posturas sentadas
Siéntate en una de las posturas de meditación
con un cojín bajo tas nalgas, o bien sobre una
silla, con la columna erguida. Ponte también
un cojín bajo bs pies, para no tenerlos colgando.
El pranayama de Sivananda
Este simple ejercicio respiratorio uijuieta la
mente, mejora la circulación y proporciona
un sentimiento de- paz y armonía. Puedes
incluirlo en tu sesión diaria de pranayama
usando ¡a postura sentada que prefieras,
o incluso practicando en ía cama. Inspira
por ambas fosas nasales, retén lentamente
el aliento y haz después una espiración
completa. Prolonga la inhalación,
la retención y la exhalación tanto tiempo
como te resulte, cómodo. Practica diez vueltas.
EL PROGRAMA DE PRÁCTICA 173
Ejercicios de calentamiento
Puedes usar estos ejercicios ya sea para
prepararte para la sesión básica de asanas
o como una secuencia independiente,
mientras no te sientas listo para pasar a las
asanas. La idea es mover todas las partes
del cuerpo, aflojando cualquier rigidez que
haya en las articulaciones y mejorando la
circulación, especialmente hacia las
extremidades. Los ejercicios 1, 3, 4 y 5
puedes hacerlos en posición de pie o
sentada. Procura integrarlos con la
respiración y realiza los movimientos con
suavidad. Repite varias veces cada ejercicio.
2 Ponte de pie, con los pies separados y los
brazos a los costados. Mientras exhalas,
desplaza las caderas hacia la derecha;
inhala y vuelve al centro. Repite hacia
¡a izquierda.
3 Levatita ambos brazos.
Mientras exhalas, inclínate
hacia la derecha. Inhala y
&A vuélvelos al centro. Repite
"S^ el movimiento hacia la
izquierda. Si te resulta
demasiado esfuerzo,
apoya la mano
derecha sobre la
cadera mientras
le inclinas hacia
la derecha y
viceversa.
1 Estira los brazos hacia fuera, frente a ti.
Mientras exhalas, gira la cabeza y el cuerpo
hacia la derecha. Inhala y vuelve al centro.
Exhala y gira hacia la izquierda. Inhala y
vuelve al centro.
4 Haz rotar ¡as muñecas una
después de otra, primero en el
sentido de las agujas del reloj
y luego en el sentido contrario.
Después procura hacer lo
mismo con cada dedo.
6 En posición sentada,
dobla una pierna y apoya
el pie sobre el muslo
opuesto. Primero ayúdate
con las manos para hacer
rotar el pie en ambas
5 Uno después de otro haz
direcciones, y después
rotar los brazos desde el
procura hacerlo sin esa
hombro, primero hacia atrás
ayuda. Repítelo,
y luego hacia delante.
cambiando de pie, y
Después, con el brazo
después menea los dedos.
extendido, gira cada
antebrazo en uno y otro
sentido, de manera que la
palma de ¡a mano quede
alternativamente hacia arriba
y hacia abajo.
174 EL CICLO DE LA VIDA
Las asanas básicas (derecha)
La postura sobre la cabeza (arriba,
Las asanas modificadas
izquierda), la postura sobre
Si es ésta tu primera aproximación
al yoga, tal vez prefieras abordar
suavemente la sesión básica. Aquí
tienes algunos ejemplos de cómo puedes
modificar las asanas básicas, y en la
sección sobre maternidad (pp. 160-169)
también encontrarás algunas ideas más.
Antes de que te pongas a practicar,
procura tener a mano una almohada
grande y firme y una silla apropiada; de
ellas te valdrás como ayuda, pero no
para forzar el cuerpo más allá de lo que
te resulte cómodo. Cuando practiques
asanas, nunca te olvides de que has de
estar suficientemente abrigado.
los hombros (arriba, derecha)
y «el arado» (abajo).
l
l /■
vW
Elevación de una pierna
Manten una pierna doblada, con el pie
apoyado en el suelo, mientras levantas la otra.
Esto exigirá menos esfuerzo a los músculos
abdominales y a la parte inferior de la espalda.
Media torsión de columna
Con la pierna de abajo estirada es más
fácil mantener el equilibrio. Si es necesario,
La flexión hacia atrás
échate un poco hacia atrás mientras
haces la torsión a cada lado.
.
\,|jh
Si te apoyas en un cojín podrás ir
adquiriendo flexibilidad sin es fuerzo.
Échate hacia atrás apoyándote en los codos
y baja la cabeza al suelo. Inténtalo con las
piernas estiradas y luego arrodíllate y lleva
los brazos hacia atrás.
La flexión hacia delante
Puedes obtener muchos de los
beneficios de esta postura si
ÍÍPí \
la practicas sentado en una silla.
Divide esta asana modificada en
dos etapas. Primero, dóblate hacia
delante, manteniendo ¡a espalda tan
recta como te sea posible, y apoya
las manos en el suelo junto a los pies,
como se ve a la izquierda. Después,
para estirar los tendones de
la parte posterior de la rodilla,
sujétate un pie y tira de la pierna
hacia arriba, levantándola lo más que
V- : -y
puedas, como se ve a la derecha. Con
la otra pierna mantienes el equilibrio.
El yoga y la salud
Como no damos importancia a nuestro cuerpo, abu
A diferencia de la medicina occidental, que es en buena
samos de él sin consideración. Nos pasamos largas
medida una ciencia de la enfermedad y su tratamiento,
horas privados de aire y de sol, en asientos Incómodos,
el yoga es una ciencia de la saiud. Las enseñanzas
tragando presurosamente alimentos precocinados, sin
del yoga se basan en una comprensión intrincada
encontrar un momento para estirarnos, para conceder
y precisa del sano funcionamiento del cuerpo y de la
al cuerpo oportunidad de moverse libre
mente del hombre, y sus técnicas están
mente, de relajarse en profundidad,
destinadas a sacar el máximo partido
de disfrutar del aire fresco o de
a nuestro potencial de buena
«El yogui considera el
alimentos sanos y naturales. Y si
salud, vitalidad y juventud per
cuerpo físico como un
el cuerpo se queja, tomamos
durables. Cuando incorporas
instrumento de su viaje hacia
píldoras: silenciamos las se
el yoga a tu vida cotidiana,
la perfección.»
ñales que podrían alertamos
eres como el propietario de
' de un problema y con ello da
Swami Vishnu-devananda
un coche que se ocupa de su
ñamos aún més los sistemas
vehículo y lo cuida, mantenién
naturales de reparación del cuerpo,
dolo en funcionamiento, totalmente
Al volver a equilibrar esos sistemas na
en forma y tan reluciente como si fuera
turales, el yoga puede hacer mucho por restablecer la
nuevo, año tras ano. Sin esta disciplina, somos como
buena salud, incluso después de que años de vida
el conductor de un coche cuyo vehículo no quiere
malsana hayan dado por resultado las dolencias que tan
arrancar por las mañanas, necesita de una atención
familiares son para nosotros: estrés, fatiga, hipertensión,
onerosa y ocasionalmente de reparaciones Importantes,
insomnio, reumatismo y muchas más.
y que, en última instancia, puede averiarse en un
Gran parte de las enfermedades y de la pérdida
momento crítico, con graves consecuencias.
de vitalidad que sufrimos se deriva del prolongado des
El estado natural del cuerpo es la salud: hasta la mínima
gaste de los sistemas corporales, debido al uso y a la
parte y la mínima función tienen un objetivo biológico que
estimulación insuficiente de las funciones vitales.
predomina sobre cualquier otro, que consiste en buscar y
Actualmente, todos los profesionales de la salud
restablecer la salud en todo momento. Las hiendas se
recomiendan que se haga ejercido, pero los ejercicios
curan, los huesos se sueldan, la fiebre baja, las toxinas
del yoga no tienen parangón. El principio que los
se eliminan, la fatiga se repara... Tenemos a nuestra dis
yoguis entienden desde hace miles de años es que la
posición un milagro de la biomecánica, que debería
ejercitación adecuada no está destinada a desarro
durarnos hasta una vejez tranquila y saludable.
llar los músculos mientras consume nuestras fuerzas,
Esta sección describe el funcionamiento de este
sino a estirar y tonificar suavemente el cuerpo y, sobre
admirable sistema viviente, prestando especial atención
todo, a estimular la circulación, hasta el nivel celular
a tres funciones principales: el armazón fuerte y flexible
incluso, de manera que los tejidos estén bien nutridos,
de huesos, músculos y ligamentos que constituye el
los desechos se eliminen, los órganos vitales recuperen
cuerpo; los ciclos orgánicos de la digestión, la res
su eficacia plena y se restablezca el metabolismo de la
piración y la circulación, que alimentan y reparan células
salud.
y tejidos; y el vital servicio de mensajería constituido por
Para la filosofía del yoga, el cuerpo fisico no es más
los nervios y las hormonas, que equilibran y regulan
que un aspecto de la salud, para la cual son igualmente
nuestras reacciones físicas, emocionales y mentales. El
Importantes la mente y el espíritu. También la medicina
yoga, peculiar entre todas las formas de cultura corporal,
occidental ha comenzado a entender que, para que
trabaja sistemáticamente todas estas partes del cuerpo
el cuerpo se arregle, la mente debe curarse. Pero el
viviente para mantenerlas funcionando de manera
enfoque de la medicina occidental es fragmentario, en
equilibrada y en perfectas condiciones.
tanto que el yoga íntegra la ciencia de la mente con la
En la vida contemporánea, la experiencia de una salud
del cuerpo y el espíritu.
vital y plena es una rareza, una vez pasada la infancia.
178 EL YOGA Y LA SALUD
La armazón del cuerpo
El alarde de equilibrio más impresionante que hacernos todos los días es el simple
hecho de tenernos en pie. La armazón humana está hecha para soportar y distribuir
nuestro peso con la máxima economía de esfuerzo -el arco del pie, las exactas
curvas de la columna, el diseño de cada articulación, la inclinación de la pelvis- y
diseñado para combinar la libertad de movimientos con la fuerza y con la protección
de los órganos vitales, Las articulaciones están firmemente sostenidas por
ligamentos fuertes y elásticos, y la estructura como tal se halla soportada por los
músculos que la mueven y la mantienen en una alineación correcta.
Los músculos esqueléticos funcionan siguiendo el principio del equilibrio de las
fuerzas opuestas: cuando un músculo se contrae para producir un movimiento,
otro se relaja y se estira para permitírselo. Si el que ha de estirarse -el músculo
«antagonista»- está rígido y se halla debilitado por la inactividad, el que se contrae
no puede funcionar con eficacia; tal es fa razón de que, para poner el cuerpo en
movimiento, nos desperecemos y bostecemos. El estrés puede ser causa de que
haya músculos permanentemente tensos, que se oponen a cualquier movimiento
y hacen que cualquier opción resulte doblemente fatigosa. Hacer desaparecer
esa tensión mediante las técnicas yóguicas de relajación proporciona una
rejuvenecedora soltura de movimientos y libera además de molestias y dolores.
El proceso de envejecimiento también puede ser causa de que los ligamentos que
sostienen las articulaciones y ¡a superficie de los músculos pierdan tono y se tensen;
entonces, un esfuerzo repentino puede hacer que se desgarren,
Las posturas yóguicas imponen a músculos y ligamentos un estiramiento lento y
sin violencias, que no va seguido por una contracción brusca, como ocurre con la
práctica de la mayor parte de los deportes. Estirar un músculo ayuda a contraerlo
con más fuerza, en tanto que los movimientos lentos y la respiración profunda
incrementan el aporte de oxígeno que reciben los músculos, lo que impide la
acumulación de ácido láctico en las fibras. El estiramiento y la contracción de los
músculos estimulan la circulación de la sangre a tejidos y órganos, y causan un
incremento del retorno venoso,
De niños nos deleitamos ejercitando hasta el más pequeño de nuestros músculos,
y esa actividad natural mantiene el cuerpo en forma y la musculatura en equilibrio.
Pero cuando ya somos adultos, nuestra posibilidad de movimiento se ve restringida
por las tareas repetitivas. Largas horas de estar sentado ante un escritorio, con la
cabeza inclinada hacia delante y la parte inferior de fa columna curvada pueden
provocar el acortamiento de los ligamentos de la base del cráneo, de manera que
el Intento de enderezarse produce dolor, que en ocasiones se extiende a lo largo de
toda la columna (porque los ligamentos vertebrales están Interconectados) «El pez»
y la postura sobre los hombros son las asanas indicadas después de un día de
trabajo ante el escritorio, Generalmente, una mala postura provoca un estrés
exagerado en la parte interior de la columna y en las caderas y la pelvis. Resultado:
rigidez y dolor de espalda, incluso algo tan simple como cargar un bolso siempre en
el mismo hombro puede desequilibrar rápidamente toda la estructura, causando un
desarrollo excesivo de los músculos de un solo lado y, eventualmente, el
desplazamiento de una vértebra. En estos casos, la flexión hada delante es una
buena postura correctora. Pero para todos estos problemas de salud, tan comunes,
más vale prevenir que curar: la práctica regular de toda la secuencia de asanas,
que está pensada para estimular la circulación y para trabajar sistemáticamente
todas las parles del cuerpo, a fin de que los músculos se conserven sanos
y equilibrados, te mantendrá joven y ágil durante toda la vida.
Los músculos
Los músculos esqueléticos están dispuestos de
forma simétrica en relación con el plano sagital
del cuerpo, en capas que desempeñan acciones
diferentes, Cada músculo tiene una Inserción,
que es el punto sobre el cual ejerce tracción, y un
origen, o punto de anclaje. Los músculos trabajan
generalmente por pares; cuando uno dobla la
rodilla, por ejemplo, e¡ flexor se contrae para tirar
y el extensor se relaja para permitir la flexión;
al enderezarla, la situación se invierte. De modo
similar, los elevadores y depresores levantan
y bajan una parte del cuerpo; los aductores y
abductores acercan o alejan un miembro de ia
parte central del cuerpo. Hay también músculos
rotatorios, que hacen pivotar una parte del
cuerpo; tensores, que ponen rígida una
articulación, esfínteres, y algunos que posibilitan
movimientos especiales. Las asanas yóguicas
trabajan sistemáticamente cada conjunto de
músculos antagonistas de forma sucesiva (por
ejemplo, en las flexiones hacia dejante y hacia
atrás, como se ve abajo), manteniéndoios
jóvenes, elásticos y en buen equilibrio recíproco.
Las ilustraciones de la página siguiente dan una
idea de cuáles son los músculos principales de
las capas superficiales, (Los músculos profundos
de la columna vertebral no son visibles.)
La postura de la cabeza a la rodilb
trabaja las extensores de la rodilla, del pie y del
ruello, estirando los tendones de la parte trasera
de las rodillas y los músculos de la espalda.
La cobra trabaja los flexores de la rodilla,
del pie (plantares), de lu columna y de! cuello.
LA ARMAZÓN DEL CUERPO 179
deltoides
abducción
deltoides
pectoral mayo
aducción
del brazi
tríceps
extensión
sartorio
flexión, aducción y f ,f
rotación
1? It'í /
grácil
dobla y
gira la pierna
plantar
flexión
gastrocnemio
mueve la pierna
180 EL YOGA Y LA SALUD
EL esqueleto
Nuestro cuerpo depende de un intrincado
armazón formado por unos 206 huesos.
El esqueleto axial comprende el cráneo, el
esternón, las costillas y la columna vertebral,
que alberga una estructura vital: la médula
espinal. Las sucesivas curvaturas de la columna
(cervical, dorsal, lumbar y sacra) le dan elasticidad
y permiten una distribución eficaz del peso.
Cuando estas curvas de la columna tienen
problemas (hombros caídos, espalda encorvada
y desviaciones de la columna), éstas causan un
incremento de estrés sobre las vértebras
lumbares y sobre las articuiaciones de los
miembros, la pelvis y la cintura escapuiar.
Estas articulaciones están protegidas del
desgaste por cartílagos y mantenidas en la
posición correcta por músculos y ligamentos.
Las asanas están pensadas para liberar todas las
diferentes articulaciones del cuerpo, abriéndolas
para aliviar la presión que sufren los cartílagos
protectores y para restablecer la correcta
alineación de los huesos. Al mantener sanos
los músculos y los ligamentos, y permitir así
una postura correcta, se pueden prevenir los
problemas que dañan las articulaciones.
Los discos intervertebrales
Entre las vértebras hay almohadillas de cartílago
que tienen en ei centro un tejido blando y
gelatinoso y que actúan corno amortiguadores
que absorben choques y permiten los
movimientos. En reposo, cada disco tiene una
forma redondeada, como se ve abajo a la
Izquierda; en las posiciones erguidas normales,
el centro del disco se encuentra comprimido por
el peso del cuerpo (abajo, derecha). Un
movimiento brusco, o que cause esfuerzo,
puede provocar una «hernia discal»: ei cartílago
sobresale hacia fuera y ejerce presión sobre un
nen/lo espinal adyacente, lo que causa un dolor
intenso e inmoviliza la columna. Un maestro de
yoga puede recomendar asanas Lrtifes. y es
posible prevenir recurrencias de esta afección si
se trabaja para fortalecer la columna y se practica
la relajación para que los discos descansen.
LA ARMAZÓN DEL CUERPO 181
Los movimientos
de la columna
El cuerpo tiene un diseño tal que le permite
una notable variedad de movimientos de los
miembros y de la columna vertebral. De este
potencial hacemos un uso muy restringido,
en parte porque no tenemos conciencia de
él, pero mucho más porque dejamos que los
ligamentos de las articulaciones, la columna
y los músculos se anquilosen por falta de
uso, La columna vertebral se puede
«flexionar», o doblar hacia delante,
«extender», o doblar hacia atrás, y también
se puede doblar hacia los costados, rotar y
hacer movimientos de giro o «circunvalación»
que combinan varios movimientos.
El límite de los movimientos de la columna
depende de tres factores: la forma de las
vértebras, la longitud de los ligamentos
y el estado de los músculos antagonistas.
Las posturas que mostramos aqui ilustran
el máximo potencial de movimiento de una
columna y una pelvis sanas. La flexibilidad
de la columna varia de un individuo a otro,
y también con el uso, de manera que no es
cuestión de descorazonarse si uno no puede
adoptar las posturas de los ejemplos; lo
único que se interpone entre cada uno de
nosotros y la flexibilidad natural de nuestro
armazón es la práctica.
«El triángulo» imprimen toda la columna
vertebral una inclinación lateral hasta un
máximo de 85° (lumbar 2a, dorsal20°,
cervical 35-45°). Todos los ligamentos
y músculos laterales reciben un buen
estiramiento.
La variación de «la rueda» da a la columna
La posición del niño da al esqueleto una
su máxima curvatura hacía atrás, un total de 140“
inclinación hacia delante de I ¡0". La asaaa
refleja ¡os ligamentos de la columna, estira los
(cuello: 75°, región toracolumbar 65a).
Los músculos que intervienen son los flexores de
músculos de la espalda y alivia la compresión
la espalda, los de la pierna de. apoyo y los de las
de los discos ínter vertebrales de la región
muñecas, y los extensores de los brazos
lumbar, que existe normalmente cuando
y de la pierna levantada.
se está de pie.
La postura del cadáver berra todas las
tensiones de. la columna y restablece su
simetría natural El sacro empuja la pelvis
hacia arriba, permitiéndole que se abra hacia
los costados por acción de la gravedad, y
procurando a los discos Ínter vertebrales un
descanso completo.
■
La postura que libera los vientos
inclina la pelvis y flexiona las caderas,
separando la articulación sacroilíaca.
La flexión máxima de la pelvis en esta
postura es de 30ú.
182 EL YOGA Y LA SALUD
Los ciclos de la nutrición
El cuerpo es el templo del espíritu, y como tal debemos cuidarlo. En última
instancia, la salud daf cuerpo depende de la salud de las células vivas, que son
los elementos de construcción de los tejidos y órganos, cuyas diversas funciones
son vitales para nuestro bienestar. Células y tejidos necesitan Linas condiciones
adecuadas para mantenerse sanos, es decir, libres de toxinas, bien nutridos y
con un sistema de comunicaciones que funcione eficientemente. La necesidad
urgente de cada célula es obtener oxigeno -el combustible que requiere para su
trabajo- y eliminar rápidamente los desechos de anhídrido carbónico, Unos
pulmones y un corazón sanos son los requisitos esenciales para que las células
obtengan los nutrientes adecuados, Si comes ios alimentos que tu cuerpo
necesita, y a las horas correctas, tendrás una digestión sana, y la sangre
absorberá y excretará, sin dejar residuos, los productos de desecho.
La microclrculación que abastece las células es, en nuestro cuerpo, la base
de la salud y la vitalidad.
Cuando hacemos presión sobre la superficie de la piel, primero se vuelve más
pálida, ya que la sangre es rechazada en ese punto, y luego enrojece al
restablecerse la circulación. De esa manera actúan sobre los tejidos las asanas
yóguicas; es decir, como una mano que lenta y suavemente los estruja para
sacarles todos los fluidos rancios, portadores de desechos, y que después los
deja que se estiren, permitiendo asi que las sustancias nutritivas revitallzantes
y la energía circulen hasta ¡legar a la última célula. At respirar profundamente
mientras se mantiene una as ana, la sangre lleva más oxígeno a las células y
arrastra de ellas más anhídrido carbónico. El aumento de la circulación venosa
de retorno estimula el corazón para que se contraiga con mayor firmeza.
Además, las asanas masajean los órganos vitales y estimulan los músculos
del aparato digestivo, intensificando los movimientos peristálticos.
Las características de la vida moderna tienen efectos especialmente deletéreos
en el nivel de ios tejidos. Estar fargo tiempo sentado sin moverse ni estirar el
cuerpo hace que se entorpezca la mlcrocirculación, e incluso la macrocirculaclón.
Respiramos aire contaminado o humo de tabaco y comemos alimentos que
contienen diversas sustancias que el cuerpo no puede aprovechar o que incluso
son efectivamente tóxicas, Cuando la circulación se entorpece, los riñones
y el hígado no pueden trabajar con la eficacia deseable, y se forman toxinas que
bloquean los tejidos. La carne, por ejemplo, contiene más ácido úrico del que
normalmente podemos excretar, y eso puede dañar ¡os tejidos y es un factor
causante de gota y artritis reumatoide.
Hay síntomas Incómodos, como la indigestión, las venas varicosas o los dolores
de cabeza, que son como las luces de advertencia de un coche: nos avisan de
que algo está a punto de descomponerse. Aunque hay asanas especificas que
pueden aliviarlos, el tratamiento de los síntomas, mientras no se haga caso del
adecuado funcionamiento de la totalidad del sistema, es como desconectar las
luces de advertencia del coche para que no nos fastidien. El yoga nos enseña
que debemos tratar el cuerpo como un todo, ya que cada parte afecta a las
demás, y tener conciencia do las íntimas relaciones existentes entre cuerpo y
mente. Si piensas de manera positiva, eso afectará hasta fa última célula de tu
cuerpo, y si cambias tu modelo de vida y pasas a fundamentarlo sobre los cinco
principios de la salud (p. 21), conseguirás que todo tu organismo alcance un
funcionamiento óptimo, de manera que cada función de tu cuerpo operará
en un medio más sano.
La digestión
El masaje continuo que los movimientos
respiratorios imprimen a los órganos
digestivos por la acción del diafragma
contribuye a mantenerlos sanos. Las
flexiones hacia atrás y hacia delante y
la torsión de columna colaboran en este
proceso. Agni sara. la asana que se
muestra abajo, actúa directamente
sobre el diafragma.
Agní sara
La acción de hnmbeo de esta asana es
especialmente útil para la digestión. Ponte de pie.
con Jos pies bien separados y las rodillas
flexionadas, apoyando las manos sobre los musios y
mirándote el abdomen. Haz una exhalación, entra
el abdomen hacia arriba y, reteniendo el aliento,
imprime al vientre un movituienlo de bombeo
hacia dentro y fuera. Cuando necesites inhalar,
interrumpe el bombeo, haz una respiración
normal, exhala y continúa. Es suficiente con que
hagas entre diez y dieciocho bombeos por vez.
LOS CICLOS DE LA NUTRICIÓN 183
La respiración
Los pulmones son la entrada principal del
aporte de oxígeno al organismo, Cuando están
sanos y elásticos, los pulmones se expanden
por completo en cada inspiración profunda,
y todos los minúsculos sacos de aire donde
tiene lugar el intercambio gaseoso con la
sangre se hinchan para luego contraerse
profundamente y así expulsar los desechos
de anhídrido carbónico (aunque no
completamente, ya que en los pulmones
queda siempre cierta cantidad de aire residual).
Las asanas yóguloas, lo mismo que la
respiración abdominal, mejoran todas las
funciones respiratorias, Incrementando la
capacidad vital (el aire inhalado) y desarrollando
músculos fuertes y tejidos elásticos, en tanto
que el pranayama enseña a controlar el aliento
y mantiene despejados los conductos
respiratorios. «El saltamontes» y «el pavo real»
son especialmente útiles para conseguir una
inhalación profunda y para la retención del
aliento; el nauli y el uddiyana bandha favorecen
la exhalación completa, y kapalabhati es un
buen ejercicio para el diafragma.
Los músculos respiratorios
Los pulmones trabajan o. manera de
judies, en el vacío parcial de la cavidad
torácica. Para absorber d aíre, la
cavidad se ensancha, la caja torácica
se expande y el diafragma desciende,
masajeando los órganos abdominales.
Cuando exhalas, el aire es expulsado por
la contracción dd abdomen, la caja
torácica se encoge y el diafragma
sube; su movimiento ascendente
masajea el corazón.
Los pasajes del aire
lospasajes nasales filtran, entibian y
humedecen el aire a medida que éste va
pasajes
nasales
pasando hacia los pulmones por la vía de
la laringe y de la tráquea. En parte es
éste d motivo de que durante la práctica
de las asanas yóguicas se. respire por la
nariz Si tienes una congestión
o te duele ¡a garganta, te serán
bonquioios
útiles la postura sobre tos hombros,
«el pez» y ¡a postura del león.
pulmones
Los alvéolos pulmonares
diafragma
E>i los pulmones, tus bronquios se dividen
finalmente, hasta ir a terminar en los alveolos
pulmonares. Si la respiración es superficial,
los alveolos menos accesibles no trabajan y
se deterioran; se reduce d aporte de oxígeno
y hay mayor probabilidad de infecciones.
En los estados alérgicos o nerviosos, como
pueden serlo la fiebre del heno y el asma,
se producá una constricción de los
bronquiolos y de los alveolos pulmonares;
la relajación, el pranayama y la respiración
abdominal proporcionan alivio.
184 EL YOGA Y LA SALUD
La circulación
El torrente sanguíneo es el principal sistema de
transporte del cuerpo; es portador de los glóbulos
rojos, que aportan el oxígeno a los tejidos y arrastran
el anhídrido carbónico; de los glóbulos blancos,
encargados de combatir las infecciones, y también
de sustancias nutritivas, mensajeros químicos y
muchos elementos más. Una circulación eficaz
depende de un corazón sano y de que los vasos
sanguíneos, desde las arterias y venas principales
hasta el más pequeño de los capilares, estén sanos
y sin obstrucciones. Todas las asanas son
beneficiosas para la circulación, especialmente las
posiciones invertidas, como se ve abajo. Nauli y
kapalabhati masajean el corazón, mientras que el
aumento y la disminución alternados de la presión
ejercida sobre el corazón que se crea durante la
secuencia de asanas ayuda a fortalecer el
músculo cardíaco.
arteria pulmonar
aorta
Las venas de las piernas y sus válvulas
El movimiento de los músculos de las piernas impulsa la sangre
usada por las venas periféricas a subir, atravesando las válvulas
(I) que se cierran (2) para impedirle el paso en sentido opuesto.
Estar de pie aumenta la presión sobre las válvulas.
Las venas varicosas
\
La presión mantenida durante largos
períodos de permanencia en pie y la
insuficiencia de las válvulas en las
venas periféricas pueden ser causa
de que la sangre regrese a las venas
superficiales. Cuando éstas se dilatan y se
retuercen, forman lo que llamarnos venas varicosas.
Las posturas invertidas
i
La inversión del cuerpo invierte, a su vez, el efecto de la
gravedad, permitiendo que las paredes y las válvulas
venosas descansen. La sangre afluye en abundancia
a la cabeza y el cuello, sin imponer esfuerzo al corazón.
La práctica regular de estas posturas previene y alivia
las afecciones varicosas.
vena pulmonar
EL EQUILIBRIO VITAL 185
El equilibrio vital
Un día cualquiera, la mente y el cuerpo hacen frente a innumerables actividades
diferentes, destinadas a servir a nuestras necesidades, llevar a la práctica
nuestras Intenciones y asegurarnos salud y supervivencia.
El cuerpo es el perfecto instrumento de la mentó; responde a cada estímulo y
orden que ésta le envía valiéndose de sus sistemas de mensajería; la vasta red
de nervios y las hormonas que circulan por el torrente sanguíneo. SI el sistema
nervioso es como una compleja red telefónica, el sistema endocrino (hormonal)
es como el control climático del cuerpo, a la vez que su veleta;
el que te prepara para las tormentas o la calma que se avecinan. Ambos
sistemas proporcionan Información y, como respuesta a ella, provocan la
acción; y entre ambos regulan cada función del cuerpo: su estado de excitación
o descanso, su salida de energía y la estabilidad de su medio interno, tan vital
para la salud. También las emociones influyen sobre estos mensajeros y son,
a su vez, influidas por ellos; si tenemos miedo, el cuerpo muestra los síntomas
del miedo; aceleración del latido cardíaco, sudor, pupilas dilatadas y respuestas
semejantes; si el cuerpo está produciendo estos síntomas, uno siente miedo.
El trabajo más importante de las asanas yógulcas consiste en fortalecer y
purificar el sistema nervioso, especialmente ia médula espinal y la cadena de
ganglios, que corresponden a las rutas de circulación del prana on el cuerpo
sutil. Las diferentes as anas estiran y tonifican de forma sistemática todos
los nervios periféricos, ayudando a reforzarlos y a estabilizar la transmisión
neuroqulmica. Además, tonifican el sistema nervioso simpático y el
parasirnpático, que actúan en oposición recíproca para regular las funciones
voluntarias e Involuntarias. Las señales activas provenientes de los nervios
simpáticos estimulan nuestra respuesta ante situaciones de necesidad o de
emergencia, particularmente la reacción de «lucha o huida», característica de las
situaciones de estrés, al mismo tiempo que Inhiben las funciones controladas
por el sistema paraslmpático, tales como la secreción de saliva y de jugos
gástricos y la normalización de! pulso y de la respiración. Además, las asanas
masajean y estimulan todas las glándulas endocrinas.
Si tenemos un sistema nervioso y endocrino sanos, el cuerpo y la mente
responderán positivamente ante exigencias o amenazas y volverán con
rapidez a su funcionamiento normal. Pero si el sistema nervioso y los niveles
hormonales se desequilibran, si están enviando continuamente mensajes de
emergencia y mostrando escasa tolerancia al estrés, entonces el resultado será
agotamiento, hipertensión, angustia, depresión y trastornos nerviosos, Y si el
funcionamiento de las glándulas vitales se encuentra deprimido, es posible
que el metabolismo del cuerpo también se desequilibre y provoque obesidad,
problemas menstruales y, en última instancia, enfermedades graves.
La investigación demuestra que los ejercicios yógulcos queman sólo 0,8
calorías por minuto, frente a las 0,9 a 1,0 calorías que consume un sujeto en
reposo, y hasta 14 calorías por minuto en otros tipos de ejercicios. La práctica
de las asanas controla eficazmente la hipertensión y la angustia, restablece
la resistencia al estrés, corrige ei metabolismo y asegura una sana transmisión
nerviosa. Por su suavidad, los ejercicios yógulcos pueden ser practicados por
cualquiera, incluso en caso de enfermedad; sus saludables propiedades están
al alcance de todos.
La tiroides y la postura
sobre los hombros
Hay personas que parecen bolas de
fuego por su energía, y que son capaces
de comer lo que quieran sin aumentar de
peso, en tanto que otras necesitan un
ritmo más lento y engordan con facilidad.
Esas diferencias se deben en buena
medida a la tiroides, una glándula que se
encuentra en el cuello. Si su actividad
es escasa, todos los ritmos del cuerpo
se hacen más lentos: uno se siente
adormilado y con frío, no puede pensar
con rapidez, pierde el apetito, pero aun
así sigue aumentando de peso. Si la
tiroides funciona en exceso, el sujeto
quema energia, tiende a bajar de peso
y es posible que se muestre excitable
y nervioso. Una tiroides sana
es fundamental para el bienestar.
En la postura sobre los hombros,
la concentración y la circulación se dirigen
enteramente hacia esta glándula, que
resulta masajeada y estimulada, con lo
cual se restablece un metabolismo sano,
186 EL YOGA Y LA SALUD
Las glándulas
Todas las intrincadas funciones vitales de la
química corporal están reguladas por las
glándulas de secreción Interna, o endocrinas,
que envían sus mensajeros químicos
directamente al torrente sanguíneo.
De manera parecida a la posición de
los músculos en el sistema esquelético,
el sistema endocrino actúa rigiéndose por un
principio de equilibrio: una hormona estimula
un conjunto de respuestas, otra las inhibe, y
todas actúan en conjunto en una completa
relación recíproca y con el sistema nervioso
simpático, bajo el control de la pituitaria y,
en última instancia, del cerebro y de la mente.
El sistema endocrino actúa como mediador en
la íntima relación de cuerpo y mente;
emociones tales como el miedo o la cólera,
ei amor o la pena, reflejan la actividad
hormonal a la vez que influyen sobre ella.
Un shock grave o una tragedia trastornan
todo el sistema, y pueden ser causa de
enfermedad. El yoga es capaz de restablecer
el equilibrio del sistema antes de que se
produzcan daños a largo plazo.
Las hormonas sexuales
femeninas
Los ovarios son la principal fuente de.
estrógenu, la hormona que regula el ciclo
menstrual, el embarazo y ¡a lactancia,
como también la apariencia física y la
sexualidad de la mujer, t.as flexiones
hacia delante y hacia atrás masajean el
útero y los ovarios; «la cobra» es
especialmente útil en el caso de
menstruaciones irregulares o dolorosas.
Las hormonas sexuales masculinas
Los testículos son Iti fuente principal de la
hormona sexual masculina, la testosterona.
La práctica regular de las asanas, del
pranayama y de la relajación mantiene
el equilibrio hormonal masculino y ayuda
a aliviar problemas y trastornos sexuales.
La glándula pituitaria
Esta glándula maestra regula la secreción de todas las otras
glándula pituitai
glándulas endocrinas y está directamente controlada por el cerebro.
La a sana más beneficiosa para ella es la postura sobre la cabeza.
La tiroides y la paratiroides
La tiroides controla la tasa de metabolismo hasai,
tiroides y paratiroides
el crecimiento y tos procesos celulares.
La paratiroides controla la concentración de calcio
y de fosfatos en la sangre. Ambas reciben un
masaje por acción de la postura sobre ¡os hombros.
glándulas
suprarrenales
páncreas .
El páncreas y las glándulas suprarrenales
I.as secreciones de estas glándulas son esenciales para la vida,
y afectan grandemente al estado emociona! y físico.
F.I páncreas produce insulina para regular el azúcar en la
sangre, y resulta favorecido por «el pavo real», que masajea
bazo y páncreas. La corteza suprarrenal produce las
hormonas sexuales y una secreción vital, ¡os corticoesteroides;
la médula segrega adrenalina (que se libera también en las
terminaciones de los nervios simpáticos), para preparar
el cuerpo para la reacción de «lucha o huida». Las asanas,
la relajación y la meditación estabilizan las reacciones
de estrés e inhiben la secreción de adrenalina.
]
EL EQUILIBRIO VITAL 187
Los nervios
Un sistema nervioso sano nos permite
hacer frente a todos los acontecimientos
de la vida con calma y adaptabilidad.
Mantiene todos los músculos, órganos y
tejidos del cuerpo funcionando con plena
eficacia, agudiza la percepción sensorial
y crea en todo el organismo una
sensación de vitalidad y energía.
El sistema nervioso está constituido
por grandes cantidades de células
individuases, o neuronas, cada una de las
cuales tiene un cuerpo celular del cual
parten largas fibras que transmiten
rápidas series de impulsos o señales
nerviosas. Los nervios, que las asanas
tonifican y estiran, están formados por
haces de fibras. Al eliminar las toxinas
de los tejidos, las asanas benefician la
neurotransmisión en las terminaciones
nerviosas y en las sinapsis que hay entre
los nervios. Se ha demostrado que
el yoga estabiliza la reacción del sistema
nervioso ante el estrés, haciendo
desaparecer la tensión muscular
constante producida por las repetidas
señales de alerta provenientes
del sistema nervioso y calmando
los síntomas involuntarios de amenaza
(aceleración de los latidos cardíacos,
sudores, angustia) generados por el
sistema nervioso simpático.
El sistema nervioso periférico
Los nervios espinales salen de la médula
espinal a pares, a uno y otro lado de cada
segmento, y se ramifican finalmente para
formar el sistema periférico. Las fibras
motoras (eferentes) llevan instrucciones
a lodos los músculos, en tanto que
las sensoriales (aferentes) aportan
información proveniente de todos los
receptores. El sistema nervioso autónomo
(simpático/parasimpático), que rige
las funciones involuntarias, se origina
también en la columna: las fibras
nerviosas simpáticas son portadoras de
ganglios (centros de control) importantes,
que resultan tonificados por los
estiramientos de columna. Los yoguis
son capaces de influir voluntariamente
sobre el sistema nervioso simpático.
EL sistema nervioso central
El sistema nervioso centra! constituye
la central eléctrica y el centro de
comwúcaciones del cuerpo. Profundamente
arraigados en la médula, los nervios
espinales salen de la columna para abastecer
la totalidad del sistema. Dentro de la
médula tiene lugar una intercomunicación
incesante, y los impulsos recorren
rápidamente y en ambos sentido (hacia
y desde el cerebro) las fibras sensoriales y
motoras. Las asanas actúan enérgicamente
sobre todas las partes del la columna
vertebral, tonificando las raíces nerviosas
y liberando los nervios de cualquier presión
que pudieran sufrir en los puntos
donde emergen al exterior desde la
columna vertebral.
188
Glosario de términos sánscritos
A
Agni sara un kríya destinada a
masajear los órganos digestivos;
agni significa «fuego»
Ahimsa no violencia; un yama
Ajna chakra el sexto chakra, entre las
cejas
Akarna dhanurasana el arquero
Anahata chakra el cuarto chakra,
el del corazón
Ananda beatitud
Anjaneyasana la luna creciente;
las aberturas de piernas
Anuloma viloma pranayama
que alterna las fosas nasales
Aparta el aliento que desciende;
una manifestación del prana
Ardha matsyendrasana la media
torsión de columna
Ardha padmasana el medio loto
Asana postura (literalmente, «asiento»)
Ashram una ermita
Atman el Sí Mismo, el Alma, el Espíritu
D
Dhanurasana el arco
Dharana concentración
Dhauti un kríya destinado a la limpieza
del estómago, tragando una gasa
Dhyana meditación
para controlaría circulación del prana
Bandha padmasana el loto ligado
Basti un kriya destinado a la irrigación
de la parte final del colon
Bhakti yoga la senda yóguica de la
devoción
Bhastrika una variedad rápida de
pranayama; la respiración del fuelle
Bhujangasana Ia cobra
Bija mantra seminal, o letra sánscrita,
que denota el poder de una deidad
o de un elemento
Brahma en la Trinidad hindú,
el Creador
Brahman lo Absoluto
Brahmari una variedad de
pranayama; la respiración
«canturreante»
C
Chakra cada uno de los siete centros
de energía pránica
Chakrasana la rueda
Chin mudra un mudra de la mano,
que pone en contacto el pulgar
y ei índice
limpiar el estómago
Kurmasana la tortuga
M
Mala una sarta de cuentas, usada en
la práctica del japa
G
Garbhasana el feto
G a ruda asana el águila
Guna cada una de las tres cualidades
que constituyen la totalidad del
universo manifiesto, o Prakriti
Guru un maestro; literalmente, «el que
disipa la oscuridad»
H
Halasana el arado
Hatha yoga rama práctica del raja
yoga, que incluye las asanas, el
pranayama y los krlyas; hatha
significa «sol y luna»
I
B
Bandha traba o contracción muscular
Kunjar kriya un kriya destinado a
Manas la mente
Manipura chakra el tercer chakra,
el del plexo solar
Mantra una sílaba, palabra o frase
sagrada, que se usa en la
meditación
Matsyasana el pez
Matsyendrasana la torsión de
columna
Maya ilusión
Mayurasana el pavo real
Meru la cuenta mayor de una mala
Muía handha el cierre del ano
Mudra postura destinada a controlar
el prana
Muladhara chakra el primer chakra,
en la base de la columna
Ida uno de los nadis principales, que
fluye a través de la fosa nasal
izquierda
J
Jalandhara bandha el cierre del
mentón
Janu sirasana la postura de la
cabeza a las rodillas
Japa la repetición de un mantra
Jiva el alma individual
Jnana yoga la senda yóguica del
conocimiento
K
Kakasana el cuervo
Kapalabhat/ un kriya y pranayama
que limpia el sistema respiratorio
Kapotha asana la paloma
Karma la ley de causa y efecto;
literalmente, «acción»
Karma yoga la senda yóguica del
servicio desinteresado
Krishna una encarnación de Vishnu
Kriya una práctica de purificación
Kukutasana el gallo
Kundalini la energía espiritual
potencial
N
Nadi canal nervioso
Natarajasana la postura del Señor
Nataraja
Nauli un kriya que masajea los
órganos abdominales
Nirguna un tipo de meditación;
literalmente, «sin cualidades»
Niyama una de las cinco observancias
O
OM 0/ maritra original
Oordhwapadmasana la postura
sobre la cabeza en loto
P
Pada hasthasana la postura de la
cabeza a los pies; postura de las
/nanos a los pies
Padangusthasana la postura de
puntillas
Padmasana el loto
Paschímothanasana la flexión hacia
delante
Píngala uno de los nadis principales,
que fluye a través de la fosa nasal
derecha
189
Otros títulos de esta colección
Purna supta vajrasana el diamante
Prakriti la naturaleza, el universo
manifiesto
Swadhishthana chakra el segundo
chakra, el de ¡os genitales
Swami monte
Prana la energía vital, la fuerza de la
vida
Pranayama la regulación del aliento;
un ejercicio respiratorio
Pratyahara el retraimiento de los
sentidos
T
Tamas el guna de la inercia
Tratak contemplación continuada; un
kriya y una técnica de concentración
Trikonasana el triángulo
Purusha el espíritu
R
Raja yoga la senda yóguica de la
meditación
Rajas el guna de la actividad
S
Saguna un tipo de meditación;
literalmente «con cualidades»
Sahasrara chakra el séptimo y más
alto de los chakras, situado en ia
coronilla
Salabhasana el saltamontes
Samad h i la supraconciencia
Samanu una variedad de pranayama
que limpia los nadis
Sarvangasana la postura sobre los
hombros
Satchitananda existencia, conciencia
y bienaventuranza
Sattva el guna de la pureza
Sethu bandhasana el puente
Shakti el principio femenino activo
Shanti paz
Shiva en la Trinidad hindú, el
Destructor; la fuerza pasiva
masculina
Simhasana la postura del león
Sirshasana la postura sobre la
cabeza
Sithali, sitkari variedades del
pranayama que refrescan el cuerpo
Sukhasana la postura fácil
Supta vajrasana la postura de
rodillas
Surya el sol
Surya bheda una variedad de
pranayama que cura el cuerpo
Surya namaskar el «saludo al sol»
Sushumna el nadi principal, que fluye
a través de la médula espinal
Sutra un aforismo; literalmente «hilo»
U
Uddiyana bandha un cierre que ¡leva
Yoga y cocina
Centros de Yoga Sivananda Vedanta
Tu Feng Shui personal
Maestro Larn Kam Chuen
El poder curativo del chi
Maestro Lam Kam Chuen
fíeflejoterapia en casa
Ann Gillanders
Tu plan depurativo
Jane Alexander
el diafragma hacia arriba
Ujjayi una variedad de pranayama
Uthitha kurmasana la tortuga en
equilibrio
V
Vatayanasana la postura que libera
los vientos
Vatyanasana la postura de un pie y
una rodilla
Vedanta una escuela de filosofía;
literalmente «el fin del conocimiento»
Vedas la autoridad suprema de todas
las escrituras arias, revelada a los
sabios durante la meditación
Virasana el guerrero
Vishnu en la Trinidad hindú, el
Preservador
Vishnu mudra un mudra de ia mano,
que se usa en pranayama
Vishuddha chakra el quinto chakra,
el de la garganta
Vrikshasana la postura sobre las
manos
Vrischikasana el escorpión
Y
Yama una de las cinco restricciones
Yantra un diagrama geométrico que
se usa en la meditación
Yoga la unión del alma individual con
lo Absoluto
Yogui, yoguini alguien que practica
el yoga
Lecturas recomendadas
Ei libro dei Yoga. Alianza Editorial .
Meditación y mantras. Alianza Editorial
Yoga, mente y cuerpo. Editorial Vergara
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