Capítulo 3:
3.1
Modelación de la Máquina de Inducción.
La necesidad de nuevos modelos de la máquina de inducción.
En el capítulo 2 se presentaron a grandes rasgos, tres métodos para la
determinación de modelos matemáticos de sistemas físicos. Estas técnicas son de
gran utilidad para la representación del comportamiento dinámico o de régimen
permanente de los convertidores electromecánicos de energía. Estas metodologías
son perfectamente aplicadas al caso particular de la máquina de inducción.
La máquina de inducción es uno de los convertidores electromecánicos más
ampliamente difundidos en la actualidad. Las razones fundamentales para esta
enorme popularidad, residen fundamentalmente en la economía de su diseño y en
su robustez constructiva.
Desde que Tesla desarrolló el principio de
funcionamiento de esta máquina y construyó los primeros prototipos a finales del
siglo XIX [24], se han desarrollado varios modelos que representan con una
precisión adecuada a las aplicaciones prácticas tanto la operación equilibrada como
desequilibrada, en régimen permanente y excitada mediante fuentes de tensión
sinusoidal. Durante más de medio siglo, estas herramientas fueron satisfactorias
para diseñar, construir y operar estas máquinas, pero el desarrollo sostenido de los
convertidores electrónicos de potencia, especialmente en las décadas de los años
ochenta y noventa, hicieron necesaria la utilización de técnicas de modelación más
potentes, capaces de analizar el comportamiento de la máquina de inducción en
régimen transitorio, y excitada con fuentes no sinusoidales de tensión o corriente.
Mas aun, muchos de los controladores electrónicos que se han adaptado
recientemente a estas máquinas se fundamentan en los nuevos modelos.
Los modelos clásicos interpretan a la máquina de inducción como un
transformador con un grado de libertad adicional, el movimiento o giro del rotor.
Para simplificar el análisis de este convertidor, la modelación clásica considera que
los fenómeno eléctricos son mucho más rápidos que los fenómenos mecánicos.
Esta hipótesis desacopla los subsistemas eléctrico y mecánico, permitiendo el
análisis independiente de cada uno de ellos. En la práctica este razonamiento no
siempre es válido, en ocasiones los fenómenos eléctricos y mecánicos tienen
constantes de tiempo similares.
-1-
Por otra parte, la modelación clásica de la máquina de inducción se justifica
en varios hechos concretos tales como que el sistema eléctrico industrial es casi
siempre trifásico, prácticamente equilibrado y posee un contenido armónico de
poca importancia, al menos hasta hace pocos años. Además, estas máquinas se
utilizan en muchas aplicaciones, o en un régimen fijo de carga y velocidad, o en un
ciclo de carga que es considerablemente más lento que las constantes de tiempo del
convertidor.
El problema que plantean los desequilibrios de la red, o las máquinas
monofásicas y bifásicas, pueden ser analizados aplicando la teoría general de
componentes simétricas instantáneas para sistemas polifásicos [14,76]. Con estas
herramientas el diseñador de máquinas o accionamientos industriales, el
planificador, y el operador de una planta disponen de modelos precisos para cada
uno de sus propósitos.
Al introducir la regulación de la velocidad de la máquina de inducción
mediante fuentes controladas electrónicamente, comienzan algunas dificultades.
Uno de los principales problemas aparece cuando se intenta obtener de estos
accionamientos características dinámicas rápidas, semejantes a las que son posibles
empleando máquinas de corriente continua. Los modelos clásicos pueden ser
utilizados en primera aproximación, pero cuando se intenta obtener mejores
características es necesario mejorar estas representaciones. Aparece entonces la
necesidad de modelos más precisos, donde se reproduzcan las características
transitorias y dinámicas de la máquina de inducción alimentada por fuentes de
tensión o corriente no necesariamente sinusoidales. Por otra parte, el vertiginoso
desarrollo de los microprocesadores, de los controladores programables y de los
sistemas de adquisición de datos, hicieron posibles la supervisión, estimación y
control en tiempo real de las variables internas o medibles de la máquina de
inducción. Estos modelos además de incrementar la precisión, y tener la capacidad
de analizar los procesos transitorios y dinámicos, deben ser sobre todo muy
rápidos.
Los modelos clásicos de la máquina de inducción se obtienen normalmente
de la aplicación directa de las ecuaciones de Maxwell, a una geometría simplificada
[22,51,52]. Con la información espacial de la máquina, filtrada mediante ciertas
hipótesis simplificativas, es posible la integración analítica de estas ecuaciones.
Aplicando la ley de Ampère 2.6, en una trayectoria cerrada y la ley de Gauss para
-2-
el campo magnético 2.8, se obtiene la fuerza magnetomotriz FMM y la intensidad
de campo magnético H, cuando se desprecia la variación temporal de la densidad
de campo eléctrico D, que en las máquinas de tensiones industriales es varios
órdenes de magnitud inferior a las densidad de corriente J de diseño. La densidad
de campo magnético B, se obtiene de la relación constitutiva 2.10, considerando
que la corriente inyectada en las bobinas es la variable independiente. Con la ley
de Faraday 2.5 y la ley de Gauss para el campo eléctrico 2.7, se calcula el campo
eléctrico E, y su integración en la trayectoria de las bobinas de la máquina
determina las fuerzas electromotrices generadas sobre los devanados del estator y
del rotor de la máquina.
Las leyes de Maxwell combinadas determinan el modelo circuital clásico
[49]. A este modelo se le incluyen resistencias para considerar el efecto de las
pérdidas en los conductores y en el material ferromagnético. El resultado final es
un circuito eléctrico equivalente, semejante al circuito equivalente del
transformador, pero con una carga resistiva que depende de la velocidad del rotor
y que representa la potencia disponible en el eje mecánico. El análisis del lugar
geométrico que describe la corriente del estator, cuando se utiliza como parámetro
la velocidad del rotor, determina el diagrama de círculo de la máquina de
inducción [52]. Este diagrama de las corrientes de la máquina de inducción se
utilizaba frecuentemente en el pasado cuando los métodos de cálculo numérico
eran más primitivos. Aunque en la actualidad esta necesidad ha sido superada,
muchos fenómenos se pueden interpretar con gran simplicidad y elegancia
mediante el diagrama de círculo.
En la década de los cincuenta surge el interés por los modelos dinámicos de
la máquina de inducción [1,29,54]. Muchas técnicas se habían desarrollado para el
análisis transitorio de la máquina sincrónica; la estabilidad del sistema eléctrico de
potencia fue el motor que impulsó este avance [16,62,63]. Los primeros intentos
siguieron las mismas ideas básicas de la transformación de Park [62,63], pero
pronto se observó que estos métodos no producían resultados tan satisfactorios
[2,76]. La razón fundamental por la que estos métodos tienen problemas para
modelar una máquina constructivamente más simple, reside en el grado de
libertad adicional que poseen estos convertidores. Mientras que en la máquina
sincrónica la posición del campo resultante está definida por la posición del rotor y
la intensidad de la corriente del estator, en la máquina de inducción la posición del
-3-
campo magnético resultante depende además de la velocidad mecánica del eje.
Este hecho complica el análisis dinámico de estos convertidores.
El desarrollo de un modelo matemático de la máquina de inducción en
coordenadas primitivas es una tarea relativamente simple [1,2,67,76]. Sin embargo,
el modelo resultante en estas coordenadas depende de la posición angular del
rotor. Además, esta dependencia es no lineal. Las máquinas convencionales de
inducción posee un número importante de bobinas, normalmente tres en el estator
y tres o más en el rotor. Por esta razón, el sistema de ecuaciones diferenciales que
determina el comportamiento dinámico del convertidor, dependen de la posición
angular del rotor, masiva y no-linealmente. Analizando el problema a la luz de los
métodos modales [19,48,64], es posible identificar las transformaciones de
coordenadas que reducen el problema a dimensiones manejables.
Las
componentes simétricas instantáneas cumplen un papel importante en este
cometido [19,64]. Simplificando el problema, es posible adecuar las técnicas
utilizadas para representar el comportamiento dinámico de la máquina sincrónica,
a la modelación transitoria de la máquina de inducción. Es necesario considerar
siempre la existencia de un grado de libertad adicional en este caso. Los modelos
que se obtienen finalmente para el análisis dinámico y transitorio de la máquina de
inducción son más simples, completos y precisos que el circuito equivalente
clásico. A pesar de esto, existen aun ciertos problemas prácticos que es necesario
resolver, y en esa dirección se realiza un esfuerzo importante de investigación en la
actualidad.
Durante las dos últimas décadas se han venido introduciendo nuevos
conceptos en el área de las máquinas eléctricas, tales como el de los vectores
espaciales [53], los fasores espirales [79] o las coordenada de campo orientado
[7,53,75]. Aun cuando en este trabajo no se pretende discutir la eficacia de estos
conceptos en la simplificación del modelo de la máquina de inducción, si se intenta
presentar una visión general que identifica estas ideas relativamente nuevas, con
los desarrollos clásicos de transformación de coordenadas, que se venían
utilizando varias décadas atrás [1,2,67,76].
Como resultado de esta investigación se propone un método general,
fundamentado en los principios variacionales, el cálculo matricial, y el análisis de
la variable compleja. Este método simplifica notablemente el procedimiento
requerido por los desarrollos previos [53,68,69,79] para obtener el modelo final de
-4-
la máquina de inducción en régimen transitorio. Los desarrollos propuestos han
sido aplicados en cursos de pregrado y postgrado impartidos por el autor, y sus
resultados han sido publicados recientemente [4,12].
Al simplificar el
procedimiento necesario para la determinación de los nuevos modelos, se puede
ampliar el alcance de este tratamiento a muchas personas que en los próximos años
deberán trabajar con estas ideas.
3.2
Hipótesis simplificativas utilizadas en los diferentes modelos de la máquina
de inducción.
Reproducir cualquier fenómeno físico mediante un modelo es una tarea que
solamente puede ser alcanzada con cierto grado de aproximación al
comportamiento real. La dinámica de los sistemas físicos depende de infinidad de
detalles y condiciones, algunos más importantes que otros. Una determinada
consideración o hipótesis puede ser muy importante en algunas aplicaciones del
modelo y completamente despreciable en otras circunstancias. Cuando se
desarrolla un modelo concreto de la máquina de inducción es necesario imponer
ciertas condiciones, hipótesis, aproximaciones y restricciones que definirán el
ámbito de validez de la representación obtenida [1,2,53].
En los diferentes modelos de la máquina de inducción que se desarrollan en
este capítulo, se supone que el convertidor electromecánico posee una pieza fija
denominada estator, solidaria a un sistema de referencia inercial, y una pieza
móvil, denominada rotor.
El estator es prácticamente un cilindro hueco de material ferromagnético. El
material se encuentra laminado en la dirección axial y posee ranuras en su parte
interna, capaces de albergar los conductores correspondientes a las bobinas de la
máquina.
El rotor es aproximadamente un cilindro de material ferromagnético. Está
laminado en forma semejante al estator, y las ranuras por donde pasan las bobinas
o las barras de material conductivo son helicoidales, con la finalidad de eliminar
los efectos que produciría una reluctancia variable. El diámetro del rotor es
ligeramente inferior al diámetro interno del estator. La diferencia entre estos dos
diámetros se denomina entrehierro de la máquina y es aproximadamente
constante cuando se desprecia el efecto de las ranuras estatóricas y rotóricas.
-5-
En el rotor existe una pieza sólida, denominada eje mecánico. Se encuentra
centrado con respecto al eje geométrico del cilindro rotórico. Esta pieza es el único
puerto mecánico de la máquina de inducción, y a través de él se realizan todos los
intercambios de par y velocidad con los sistemas externos. El eje mecánico está
construido normalmente de acero y posee chavetas que transmiten el par cuando
se acopla el eje con otras máquinas o accionamientos.
El rotor está prácticamente ubicado en el centro del cilindro hueco del
estator y tiene la libertad de girar con una fricción prácticamente despreciable.
Esto se debe a la existencia de dos o más rodamientos mecánicos que centran el
cilindro del rotor en el interior de la cavidad estatórica. En la carcasa se encuentra
fijo el estator de la máquina, la caja de conexiones y los rodamientos que permiten
el centrado y giro del rotor.
El estator de la máquina posee varias bobinas repartidas en sus respectivas
ranuras. Aun cuando pueden existir máquinas de inducción con una o dos
bobinas, lo más habitual es que en el estator de la máquina se distribuya un
bobinado trifásico de múltiples pares de polos. En cualquier caso el espacio
interior de la máquina y de sus ranuras, se distribuye por igual entre cada una de
las fases y cada uno de los polos. Las bobinas pueden conectarse interna o
externamente, en diferentes combinaciones serie-paralelo para ajustar la tensión de
la máquina a las tensiones nominales normalizadas, en las conexiones delta y
estrella.
El rotor de la máquina de inducción puede ser de dos tipos, devanado o de
jaula de ardilla. Si el rotor es devanado, la estructura y disposición de sus
enrollados es semejante a los del estator. Las bobinas del rotor suelen ser
diferentes a las del estator, porque el número y la forma de las ranuras del rotor no
coincide normalmente con la geometría y cantidad de las ranuras del estator. Es
conveniente que los números de ranuras no coincidan para evitar vibraciones
mecánicas por cambios periódicos de la reluctancia. Por esta razón, las ranuras del
rotor se distribuyen helicoidalmente en la periferia del cilindro. Los rotores
bobinados pueden o no tener cortocircuitados sus enrollados.
Los rotores de jaula de ardilla, poseen barras de cobre o aluminio en lugar
de bobinas. Las barras están cortocircuitadas por dos anillos conductores que las
unen eléctricamente. Los rotores de jaula de ardilla pueden ser de barra profunda
-6-
o de doble jaula, esto con el propósito de mejorar el rendimiento de la máquina en
el punto nominal e incrementar el par de aceleración durante el proceso de
arranque.
La corriente que se inyecta en cada una de las bobinas del estator produce
una distribución prácticamente sinusoidal de la fuerza magnetomotriz en el
entrehierro. En el entrehierro de las máquinas reales existen varias armónicas
espaciales de la fuerza magnetomotriz, pero la distribución de los conductores en
las ranuras, reduce considerablemente sus magnitudes. En cualquier caso, es
posible incluir este efecto en los análisis de la máquina aplicando la
descomposición de la distribución periódica de la fuerza magnetomotriz en series
de Fourier y el principio de superposición, siempre y cuando el comportamiento
del circuito magnético de la máquina sea aproximadamente lineal.
El material magnético del estator y del rotor se encuentra laminado para
reducir las pérdidas por corrientes parásitas, sin embargo en este material se
producen pérdidas por efecto Joule y por histéresis. Aun cuando en el desarrollo
de los modelos no se consideran estos fenómenos, es posible tenerlos en cuenta
posteriormente, incluyendo resistencias adicionales en los circuitos equivalentes.
Algunos modelos permiten modelar la saturación del material magnético. Hasta
ciertas intensidades de campo magnético, la permeabilidad relativa es
prácticamente infinita, y el potencial magnético se consume casi totalmente en el
entrehierro de la máquina. A medida que aumenta la intensidad de campo, el
material reduce su permeabilidad relativa.
Los modelos del convertidor
electromecánico que se desarrollan en este capítulo consideran que existe una
relación biunívoca, lineal o no, entre la intensidad del campo magnético H y la
densidad del campo magnético B del material ferromagnético. La histéresis del
material sólo se tiene en cuenta desde el punto de vista de las pérdidas que
ocasiona.
Los modelos clásicos de régimen permanente, equilibrados o
desequilibrados, y los modelos transitorios o dinámicos de la máquina de
inducción necesitan utilizar un conjunto mínimo de hipótesis que simplifican
razonablemente el problema, manteniendo siempre un compromiso entre la
exactitud y la simplicidad. Las principales hipótesis que se utilizan para este fin
son [1,2,53]:
-7-
•
La máquina de inducción se compone de dos piezas cilíndricas, una fija
denominada estator y otra centrada en su interior, con un diámetro
ligeramente inferior, denominada rotor.
•
Se desprecian los efectos de las ranuras del estator y del rotor, con lo cual el
entrehierro de la máquina es prácticamente constante.
•
Las bobinas del estator son simétricas, y están repartidas uniformemente en
la periferia o manto del cilindro. Normalmente la máquina posee tres fases
en el estator, pero también es posible que en algunas ocasiones disponga de
tan solo una o dos fases.
•
La distribución espacial de la fuerza magnetomotriz producida por las
corrientes inyectadas en cada una de las fases es prácticamente sinusoidal.
Cuando esta hipótesis no es válida para una máquina en cuestión, se puede
utilizar el principio de superposición para modelar la máquina en armónicos
espaciales, considerando que el material ferromagnético no se satura en el
rango de operación.
•
La saturación puede ser considerada en los diferentes modelos, pero
siempre se desprecia la no linealidad introducida por la histéresis. Las
pérdidas ocasionadas en el núcleo magnético por el efecto Joule y por los
ciclos de histéresis pueden ser consideradas, incluyendo resistencias
adicionales en los circuitos equivalentes.
•
El rotor de la máquina puede ser bobinado o de jaula de ardilla, pero se
supone por simplicidad que el número de fases y que el número de pares de
polos del rotor siempre coincide con los del estator. La coincidencia entre el
número de fases del estator y rotor no es necesaria, pero simplifica los
modelos. Los rotores de jaula de ardilla tienen siempre cortocircuitadas sus
barras.
3.3
Modelación directa de la máquina e inducción a partir de leyes físicas
[50,51,52].
Para modelar la máquina de inducción aplicando directamente las leyes
físicas, es necesario comenzar con una representación geométrica del estator que
-8-
respete las hipótesis definidas en la sección anterior. En la figura 3.1 se ilustra el
esquema geométrico básico del estator.
+Ni
a
A
-N i b
trayectoria
de Ampère
c
b
-N i c
θ=0
θ
B
C
+N i
eje de
referencia
+Ni
c
b
a
-N i a
Fig. 3.1 Esquema simplificado del estator de una máquina de inducción trifásica
Cada una de las fases de la máquina, se encuentra repartida uniformemente
en un tercio de la periferia del estator. Las fases están formadas por bobina de N
vueltas. Los retornos de las bobinas están separados 180° eléctricos de las
respectivas entrada. En la figura 3.1 se ha representado el primer par de polos de
la máquina, o en otra palabras se ha desarrollado el estator en ángulos eléctricos.
La trayectoria de Ampère seleccionada, tiene en cuenta la simetría impuesta por la
ley de Gauss para el campo magnético. La fuerza magnetomotriz resultante en
función de la posición angular θ, se puede obtener por superposición de las fuerzas
magnetomotrices producidas por cada una de las fases. En la figura 3.2 se
representa mediante un gráfico la distribución espacial de la fuerza magnetomotriz
de la fase a, utilizando como referencia su propio eje magnético.
-9-
Distribución Espacial de la Fuerza Magnetomotriz - Fase a
NI
θ
0
-NI
0
60
120
Posición angular θ
180
240
300
360
Fig. 3.2 Distribución espacial de la fuerza magnetomotriz de la fase “a”
La fuerza magnetomotriz ilustrada en la figura 3.2 se puede descomponer
en series de Fourier [44,64]. Debido a la simetría impar de la función, la fuerza
magnetomotriz se puede expresar de la forma siguiente:
FMM a (θ , ia ) =
π
12 N e .ia
∑n
∞
n =1
2
1
2nπ
nπ
cos
− cos
2
3
3
.cos nθ
3.1
En la figura 3.3 se representa mediante un gráfico, la distribución armónica
espacial de la fuerza magnetomotriz de la fase a.
Las fuerzas magnetomotrices de las fases b y c poseen exactamente la misma
distribución espacial que la de la fase a, pero la orientación tiene desfasajes de 120°
y 240° respectivamente, con respecto al eje magnético de la fase a. Por esta razón
se obtiene el siguiente resultado:
FMM b (θ , ib ) =
12 N e .ib
FMM c (θ , ic ) =
12 N e .ic
π
π
2
2
∑n
∞
n =1
nπ
1
2nπ
cos
− cos
2
3
3
∑n
∞
n =1
nπ
1
2nπ
cos
− cos
2
3
3
- 10 -
2π
.cos n θ −
3
4π
.cos n θ −
3
3.2
3.3
Distribución Armónica de la FMM - Fase "a"
1
Amplitud Relativa
0.75
0.5
0.25
0
-0.25
1
3
5
7
9
11
13
15
17
19
21
23
25
Armónica
Fig. 3.3 Distribución armónica espacial de la fuerza
magnetomotriz de la fase “a”
La fuerza magnetomotríz resultante se obtiene superponiendo las fuerzas
magnetomotrices de las tres fases obtenidas en las expresiones 3.1, 3.2 y 3.3. La
solución depende de los valores instantáneos de las tres corrientes que circulan por
cada una de las bobinas del estator. En este punto es conveniente suponer que en
las bobinas se inyecta un sistema de corrientes trifásico, balanceado, sinusoidal, de
secuencia positiva y frecuencia constante. Esta hipótesis simplifica notablemente el
modelo, pero también limita su aplicación al análisis en régimen permanente de la
máquina de inducción. El modelo pierde validez cuando no se satisface cualquiera
de las condiciones impuestas sobre las corrientes.
Para obtener el modelo clásico de la máquina de inducción, se supone que
por las bobinas del estator de la máquina de inducción se inyectan un sistema
trifásico y balanceado de corrientes de secuencia positiva, tal como se presenta a
continuación:
ia ( t ) = 2 I cos (ω t + ϕ )
ib ( t ) = 2 I cos (ω t + ϕ − 2π 3 )
ic ( t ) = 2 I cos (ω t + ϕ − 2π 3 )
- 11 -
3.4
Al introducir este sistema de corrientes, en las expresiones 3.1, 3.2 y 3.3, aparecen
tres productos de cosenos. Al descomponer los productos de cosenos en sumas y
diferencias, se obtiene la siguiente expresión para la fuerza magnetomotriz
resultante:
FMM r (θ , t ) =
=
π
6 2Ne I
2
∑n
2nπ
nπ
).[cos(nθ + ω t + ϕ ) + cos(nθ − ω t − ϕ ) +
− cos
3
3
n =1
. 3.5
(2n + 1)π
(2n − 1)π
+ cos(nθ −
+ ω t + ϕ ) + cos(nθ −
− ωt − ϕ ) +
3
3
(4n + 1)π
(4n − 1)π
+ cos(nθ −
+ ω t + ϕ ) + cos(nθ −
− ω t − ϕ )]
3
3
∞
1
2
(cos
Cuando el orden armónico n es par o múltiplo de tres, la fuerza
magnetomotriz resultante es nula. El primer armónico espacial que aparece en la
distribución de la fuerza magnetomotriz resultante es el 5º. La magnitud de esta
armónica es 1/25 de la magnitud de la componente fundamental de la
distribución. Para la mayoría de las aplicaciones prácticas, se puede considerar
que la distribución espacial y temporal de la fuerza magnetomotriz corresponde
aproximadamente a los valores de la componente fundamental -n=1-. En la figura
3.4 se presenta una comparación entre las fuerzas magnetomotrices
correspondientes a la componente fundamental y a la superposición de las
cincuenta primeras armónicas.
En la mayoría de los casos, el estator de las máquinas de inducción se diseña
utilizando dos capas para cada bobina, desfasadas entre sí un cierto ángulo, que
reduce aun más los contenido de quinta y/o séptima armónica. Esto refuerza la
hipótesis que considera la existencia de una distribución prácticamente sinusoidal
de la fuerza magnetomotriz en el entrehierro. Cuando se desprecia todo el
contenido armónico diferente a la componente fundamental de la fuerza
magnetomotriz, se obtiene la siguiente distribución espacio-temporal:
FMM r (θ , t ) ≈
π2
18 2 N e I
cos(θ − ω t − ϕ )
3.6
La ecuación 3.6 es la expresión matemática aproximada de la fuerza
magnetomotriz rotatoria que se origina en las bobinas del estator de la máquina de
inducción, cuando se alimentan sus devanados con un sistema trifásico,
- 12 -
balanceado y sinusoidal, de corrientes de secuencia positiva, de frecuencia
constante. Una vez determinada la fuerza magnetomotriz resultante, se aplica la
ley de Ampère 2.6, a la trayectoria ilustrada en la figura 3.1. En el material
ferromagnético la caída de fuerza magnetomotriz es prácticamente despreciable.
Por esta razón, toda la caída de potencial magnético tiene lugar en el trayecto por
el aire. La densidad del campo magnético resultante en el entrehierro es:
Br (θ , t ) ≈
donde:
2g
18 2 µ 0 N e I
cos(θ − ω t − ϕ ) ,
2 gπ 2
3.7
es el espesor total del entrehierro de la máquina.
18 2 N I
π2
FMMr (Total)
FMMr( θ,ω t=- φ)
FMMr (Fundamental)
0
π/2
π
3π/2
2π
θ
Fig. 3.4 Comparación entre las distribuciones espacio-temporales de las fuerza
magnetomotrices resultantes de la componente fundamental y de la superposición
de las cincuenta primeras armónicas.
Una vez determinada la distribución espacio-temporal de la densidad de
campo magnético B en el entrehierro, es posible calcular la fuerza electromotriz en
cualquier bobina del estator o del rotor de la máquina, aplicando simplemente la
ley de Faraday 2.5, a la trayectoria espacial descrita por dicho devanado. Para un
conductor ubicado en la posición angular θ, con su retorno en la posición θ+π, se
obtiene el siguiente valor para la fuerza electromotriz inducida:
- 13 -
θ +π
dλ d
d
ec (θ , t ) =
= ∫ B r (θ , t ).dS = ∫ B r (θ ', t ) r l dθ ' =
dt dt S
dt θ
9 2 µ 0 r l N e I e d θ +π
θ
ω
ϕ
θ
t
d
cos(
'
)
'
=
−
−
=
gπ 2
dt θ∫
3.8
18 2 µ 0 r l ω N e I e
cos(θ − ω t − ϕ )
gπ 2
=
La fuerza electromotriz sobre la fase “a” del estator se puede obtener
integrando las fuerzas electromotrices sobre cada uno de los conductores
distribuidos uniformemente entre las posiciones angulares − 2 π 3 ≤ θ ≤ − π 3 .
Considerando que en un diferencial de ángulo dθ , existen
3Ne
π
dθ conductores, la
fuerza electromotriz inducida sobre todos los conductores de la fase “a” del estator
es:
eae (t ) =
−
π
∫π
−
3
2
3
18 2 µ 0 r l ω N e I e
3N
cos(θ − ω t − ϕ ) e dθ =
2
gπ
π
=−
54 2 µ 0 r l ω N e2 I e
sen(ω t + ϕ )
gπ 3
3.9
Por otra parte, en la fase “a” del rotor la situación es:
ear (t ) =
=−
π
− +ω m t
3
−
∫
π
2
+ω m t
3
18 2 µ 0 r l ω N e I e
3N
cos(θ − ω t − ϕ ) r dθ =
2
π
gπ
54 2 µ 0 r l (ω − ω m ) N e N r I e
sen ( (ω − ω m )t + ϕ )
gπ 3
3.10
De las expresiones 3.9 y 3.10, se puede obtener la relación de transformación
entre las amplitudes o entre los valores efectivos de las fuerzas electromotrices del
estator y del rotor:
Eae
Ear
donde:
s
=
Ne ω
N 1
= e
N r ω − ωm N r s
3.11
se define como el deslizamiento de la máquina de inducción.
- 14 -
Si las bobinas del rotor se encuentran en cortocircuito, la fuerza
electromotriz que aparece sobre ellas, fuerza la circulación de corrientes
sinusoidales de secuencia positiva en el rotor. Las corrientes originadas por la
inducción de fuerza electromotriz en el rotor, producen un campo magnético
rotatorio de frecuencia de deslizamiento. Como el material ferromagnético tiene
una permeabilidad muy alta, la caída de fuerza magnetomotriz ocurre casi
completamente en el entrehierro. Si se supone, tal como se hace en la deducción
del circuito equivalente de un transformador, que la caída de fuerza
magnetomotriz es despreciable, se obtiene del balance de las fuerzas
magnetomotrices estatóricas y rotóricas, el siguiente resultado aproximado:
FMM rg (θ , t ) = FMM re (θ , t ) + FMM rr (θ , t ) ≈ 0
=
π2
18 2 N e I e
cos(θ − ω t − ϕ ) +
π2
18 2 N r I r
cos(θ − [(ω − ω m ) + ω m ] t − γ ) ≈ 0
3.12
De la expresión 3.12 se obtiene la relación de transformación idealizada entre las
amplitudes o entre los valores efectivos de las corrientes del estator y del rotor de
la máquina de inducción:
Ie
N
≈− r
Ir
Ne
3.13
Las expresiones 3.11 y 3.12, se pueden combinar para determinar la relación
de transformación existente entre las impedancias del estator y del rotor de la
máquina:
Ze
N e2 1
≈− 2
Zr
Nr s
3.14
Considerando que el circuito del rotor está formado por la resistencia y por
la inductancia de las correspondientes barras o bobinas, se pueden representar por
un circuito equivalente formado por una resistencia en serie con una inductancia.
Cuando este circuito equivalente se refiere al estator mediante la relación de
transformación 3.14, se obtiene el resultado siguiente:
Z re ≈ −
N e2 1 r
N e2 1
Rre
Z
=
−
R
+
j
ω
−
ω
L
=
−
+ j ω Ler ) .
(
(
)
)
(
r
r
m
r
2
2
Nr s
Nr s
s
- 15 -
3.15
Si al modelo del rotor, referido al estator se le añade la resistencia y
reactancia de dispersión del estator, una reactancia de magnetización para corregir
la hipótesis 3.12, y una resistencia en paralelo con esa reactancia para reproducir
las pérdidas en el hierro, se obtiene el modelo clásico de la máquina de inducción
que se ilustra en la figura 3.5 [49,51,52].
R
jX
e
I
V
I
e
R
e
jX
e
E
e
m
jX
r
r
R
r
s
m
Fig. 3.5 Modelo circuital clásico de la máquina de inducción en régimen
permanente
Para determinar por medio de la ley de Lorenz 2.19, el par desarrollado por
la máquina de inducción, se integran las fuerzas producidas por el campo
magnético rotatorio del estator sobre las corrientes que circulan por los
conductores del rotor:
τ e = 2.
π
3 N r .r.l
=
{
π
∫π
−
3
2
−
3
π
Br (θ , t ).iar (t ) dθ + ∫ Br (θ , t ).ibr (t ) dθ +
3
0
∫ B (θ , t ).i
π
2π
3
r
162 µ 0 N e N r I e I r .r.l
3
sen(ϕ − γ ) = Eae .I e sen(ϕ − γ )
3
gπ
ω
cr
(t ) dθ } =
3.16
Se puede demostrar que la expresión 3.16, coincide con el cálculo del par
eléctrico realizado utilizando el circuito equivalente clásico, si se recuerda que:
- 16 -
Re
Ea = I a . r + X r2
s
; sen(ϕ − γ ) =
2
τe =
Rre
s
⇒
R
2
+ Xr
s
e
r
2
R
3
R
= I a2
I a . + X r2 .I a .
2
ω
ω
s
s
Rre
2
+
X
r
s
3
e
r
Rre
s
2
3.17
e
r
Si se intenta utilizar el modelo clásico de la máquina de inducción en el
análisis transitorio, los resultados discrepan del comportamiento real del
convertidor debido a que las corrientes que circulan por el estator no se
corresponden con las hipótesis de partida. La modelación directa a partir de las
leyes fundamentales del electromagnetismo ofrece una interpretación física de los
principios de funcionamiento básicos de la máquina de inducción. A nivel de
diseño y construcción, este enfoque es de gran utilidad porque tiene en cuenta los
aspectos geométricos y constructivos de la máquina de inducción.
En esta sección se ha presentado un modelo simplificado de la distribución
de los conductores en el estator y rotor. Sin embargo, distribuciones más
complejas o distribuciones discretas de los devanados, se traducen solamente en
variaciones de las relaciones de transformación de las tensiones, corrientes e
impedancias entre el estator y el rotor de la máquina. El circuito equivalente es
independiente de la distribución de los conductores en las ranuras de la máquina,
pero los parámetros de este circuito si son dependientes de esta geometría.
3.4
Modelación de la máquina de inducción utilizando métodos matriciales y el
principio de los trabajos virtuales [1,2,48,67,76].
La máquina de inducción convencional posee tres bobinas idénticas en el
estator, espaciadas 120° eléctricos unas de otras. El rotor puede estar configurado
con una geometría diferente pero siempre es posible determinar un conjunto de
enrollados trifásicos que produzcan efectos equivalentes al devanado o a las barras
reales. De esta forma se dispone de un total de seis bobinas, tres en el estator y tres
en el rotor, estas últimas se encuentran normalmente en cortocircuito, en especial
cuando el rotor es de jaula de ardilla. Las bobinas equivalentes del rotor también
se encuentran separadas espacialmente 120° eléctricos entre ellas, pero el eje
- 17 -
magnético de la bobina “a” del rotor se encuentra en la posición angular θ con
respecto al eje magnético de la fase “a” del estator. En la figura 3.6 se muestran
esquemáticamente los puertos eléctricos y el eje mecánico de la máquina de
inducción trifásica.
+ N e iae
bobina
equivalente fase
"a" del estator
A
Estator
b
ωm
τm
+ N r i cr
Rotor
+ N r iar
C
+ N r ibr
θ=0
i ar
v ar
Eje
i ae
v ae
c
B
+ N e ibe
+ N e ice
a
θ(t)
bobina
equivalente fase
"a" del rotor
Fig. 3.6 Diagrama esquemático de la máquina de inducción trifásica
Cada una de las bobinas representadas en la figura 3.6, están repartidas en
el espacio de tal forma que produce fuerza magnetomotriz distribuida
sinusoidalmente en el entrehierro, cuando se le inyecta una corriente. En general,
las bobinas del rotor y del estator de la máquina pueden tener un número de
vueltas y una distribución espacial de los devanados diferentes. Si se recorren
cada una de las seis bobinas, tres en el estator y tres en el rotor, se obtienen seis
ecuaciones de mallas. En cada una de estas ecuaciones aparecen dos términos
igualando las tensiones externas aplicadas a las bobinas. El primero de estos
términos corresponde a la caída de tensión en la resistencia propia de la bobina. El
otro término es la fuerza electromotriz inducida en el circuito magnético de esa
bobina.
Es necesaria una ecuación adicional que defina el comportamiento
dinámico del eje mecánico. El conjunto de ecuaciones que determina el modelo de
la máquina de inducción en coordenadas primitivas es el siguiente:
- 18 -
[ v ] [ R ] [ 0] [ i ] [e ]
[ v ] = v e = 0e R i e + ee = [ R ][ i ] + [e]
[ r ] [ ] [ r ] [ r ] [ r ]
[v ]
donde:
[i ]
[e ]
dω
τ e + τ m = J m + α fric. .ω m
dt
3.18
Vector formado por las tensiones aplicadas a las 6 bobinas de
la máquina.
τe
τm
ωm
Vector de las corrientes que circulan por las 6 bobinas.
Vector de las fuerzas electromotrices conservativas inducidas
por el acoplamiento magnético de las 6 bobinas.
Matriz cuadrada de 6*6, con las resistencias de cada bobina en
la diagonal principal y el resto de los elementos nulos.
Par de origen electromagnético.
Par de origen mecánico aplicado por la carga.
Velocidad angular mecánica.
α fric.
Inercia total asociada al eje mecánico de rotación.
Coeficiente de fricción.
[R ]
J
Suponiendo que durante la operación transitoria o permanente del
convertidor, el material ferromagnético es completamente isotrópico y que no se
satura, es posible encontrar una dependencia lineal entre los enlaces de flujo [λ ] y
las corrientes [i ] de las seis bobinas de la máquina:
[λ ] [Le ]
=
[ r ] [Lre ]
[λ] = [L][i ] = λe
[Le ]
[Ler ][i e ] = [Le ] [Ler ][i e ]
t
[Lr ][i r ] [Ler ] [Lr ][i r ]
3.19
donde:
[Lr ]
[Ler ]
Inductancias debidas a los acoplamientos propios y mútuos entre las
bobinas del estator.
Inductancias debidas a los acoplamientos propios y mútuos entre las
bobinas del rotor.
Inductancias debidas a los acoplamientos mútuos entre las bobinas
del estator y las bobinas del rotor.
Los devanados del sistema estatórico o rotórico, se encuentran desfasados
espacialmente 120° eléctricos unos de otros. Si se excita con una corriente unitaria
la bobina “b” o “c” se obtiene una fracción del flujo mútuo sobre el devanado de la
fase “a” que es respectivamente cos(120°)=-1/2 y cos(240°)=-1/2. Por otra parte, el
- 19 -
flujo producido en una bobina por la corriente inyectada en el propio devanado
obtiene la fracción correspondiente al cos(0°)=1. Sin embargo, es necesario
añadirle el flujo de dispersión a la bobina excitadora. De esta forma es muy fácil
demostrar por simple inspección de la figura 3.6, que las submatrices de
inductancias propias del estator, y propias del rotor de la expresión 3.19, son:
Leaa
[ Le ] = Leba
Leca
Leab
Lebb
Lecb
− 1 2 Le
Leac Le + Lσ e − 1 2 Le
Lebc = − 1 2 Le Le + Lσ e − 1 2 Le =
− 1 2 Le Le + Lσ e
Lecc − 1 2 Le
1 − 12 − 12
1 0 0
= Le − 1 2 1 − 1 2 + Lσ e 0 1 0
− 1 2 − 1 2 1
0 0 1
Lraa
[L r ] = Lrba
Lrca
Lrab
Lrbb
Lrcb
Lrac Lr + Lσ r
Lrbc = − 1 2 Lr
Lrcc − 1 2 Lr
− 1 2 Lr
Le + Lσ r
− 1 2 Lr
− 1 2 Lr
− 1 2 Lr =
Lr + Lσ r
1 − 12 − 12
1 0 0
= Lr − 1 2 1 − 1 2 + Lσ r 0 1 0
− 1 2 − 1 2 1
0 0 1
3.20
3.21
Cuando se analizan las matrices de inductancia mútuas entre el estator y el rotor,
se observa que es necesario añadir el ángulo θ, al observar el flujo de acoplamiento
entre unas bobinas y otras. En este caso los resultados que se obtiene son los
siguientes:
[Ler ]= [Lre ]
t
Leraa
er
= L ba
Ler
ca
Lerab
er
L bb
er
cb
L
cos(θ − 2π 3 ) cos(θ − 4π 3 )
Lerac
cos θ
er
L bc = Ler cos(θ − 4π 3 )
cos θ
cos(θ − 2π 3 )
er
cos(θ − 2π 3 ) cos(θ − 4π 3 ) cos(θ − 4π 3 )
L cc
3.22
Para determinar el vector de fuerzas electromotrices [e ], se deriva con
respecto al tiempo el vector de los enlaces de flujo [λ ]. Esto corresponde a la
aplicación de la Ley de Faraday a un circuito acoplado magnéticamente:
- 20 -
[e] = [λ ] = {[ L] ⋅ [i ]} = [ L] [ i ] + θ$ ⋅ [ L] ⋅ [ i ] = [et ] + e g =
dt
dt
dt
dθ
d
[Le ]
=
t
[ L er ]
d
[ Ler ]
[L r ]
d
d
0
[ i e ] $ [ ]
p +θ
d [ L ]t
[ i r ]
dθ er
d
[ Ler ] [ i ]
dθ
e
⋅
i
[0] [ r ]
3.23
donde:
[e t ]
[e ]
g
θ$
p
se refiere a las fuerzas electromotrices de transformación, debidas a la
variación de las corrientes por las bobinas.
son las fuerzas electromotrices de generación, debidas al corte de los
enlaces de flujo por las bobinas en movimiento.
es la velocidad angular del rotor.
es el operador derivada temporal.
Los términos de generación se determinan calculando las derivadas
parciales de la matriz de inductancias con respecto a la posición angular θ. Debido
a que la máquina es de rotor liso, los únicos términos dependientes de la posición
angular son las inductancias mútuas entre el estator y el rotor. Realizando estas
operaciones, se obtiene el siguiente resultado:
sen(θ − 2π 3 ) sen(θ − 4π 3 )
sen θ
d
d
t
sen θ
sen(θ − 2π 3 )
[ Ler ] = [ L re ] = − Ler sen(θ − 4π 3 )
dθ
dθ
2π
4π
4π
sen(θ − 3 ) sen(θ − 3 ) sen(θ − 3 )
3.24
La determinación del par eléctrico instantáneo que desarrolla la máquina de
inducción se obtiene aplicando el principio de los trabajos virtuales. En el capítulo
2 se demostró la ventaja de utilizar el concepto de coenergía en el campo, cuando
las corrientes son las variables independientes, y los enlaces de flujo las variables
dependientes. Considerando que la máquina tiene su eje mecánico en una
posición angular θ completamente fija, toda la energía o coenergía entra al
convertidor inyectada desde los puertos eléctricos, En estas condiciones, la
coenergía en el campo se determina de la siguiente forma:
- 21 -
W c' = ∆W 'e =
∫
∑ λk (i' 1 ,…, i ' 6 )di 'k =
( i1 ,… ,i 6 ) 6
(0 ,… ,0)
k= 1
∫
∑ ∑ L i' di '
( i1 ,…,i 6 ) 6
(0,…, 0)
6
k =1 j =1
kj
j
i1
6
6 6
6
6
i
= ∑ 1 2 Lkk ik2 + ∑ ∑ Lkji j ik = ∑ ∑ 1 2 Lkji j ik = 1 2[i1 i2 … i 6 ][L ] 2 =
…
k =1 j =1
k=1
k = 1 j = k +1
i
6
1
k
=
[i] [L][i ]
3.25
t
2
Recordando la expresión 2.38, para el cálculo de la fuerza o el par a partir de
la coenergía en el campo, y reemplazando los resultados 3.24 y 3.25, en esta
ecuación, se obtiene el siguiente resultado para el par eléctrico de la máquina de
inducción:
∂ L
t
t
[ er ] [ie ]
[i e ] [0 ]
∂ W c' (θ ; [i] )
∂ 1 t
∂θ
( 2 [i] [L][i ]) = − 1 2
τe = −
=−
=
[ir ]
[i r ] ∂ L t
∂θ
∂θ
0
[ ] []
∂θ er
t ∂
t
t ∂
t ∂ L i
Ler ] [ie ] = −[i e ]
i
= − 1 2 [i e ]
[
[
[L ][i ] =
er ][ r ] + [ r ]
3.26
∂θ
∂θ
∂ θ er r
sen(θ − 2 π 3 ) sen( θ − 4 π 3 ) i ra
sen θ
sen θ
sen(θ − 2 π 3 ) ibr
= Ler [i ea i be ice ] sen( θ − 4 π 3 )
sen(θ − 2 π 3 ) sen(θ − 4 π 3 ) sen( θ − 4 π 3 ) i r
c
El sistema de ecuaciones diferenciales 3.18, modela completamente el
comportamiento dinámico, transitorio o de régimen permanente de la máquina de
inducción. Sin embargo, cuando se determinan las fuerzas electromotrices
inducidas en las bobinas, o el par eléctrico sobre el eje mecánico, se hace explícita
en las ecuaciones la dependencia no lineal y funcional con la posición angular θ.
Las matrices de inductancias mútuas estator-rotor, dependen de la posición
angular θ, y por esta razón el par eléctrico y las fuerzas electromotrices también.
Este ángulo varía continuamente durante la operación de la máquina, con la única
excepción de la condición correspondiente al rotor bloqueado.
Para obtener la solución numérica del sistema de ecuaciones diferenciales
no lineales 3.18, es conveniente despejar las derivadas de las variables de estado en
función de las propias variables de estado y de las fuentes independientes que
excitan el convertidor. La matriz de inductancia [L] acopla fuertemente estos
términos, y es necesaria la inversión analítica de esta matriz, cuya dimensión es
6*6. Debido a que la mitad de los elementos de la matriz de inductancias son
- 22 -
funciones trigonométricas de la posición angular θ, la inversión analítica de esta
matriz es una tarea laboriosa, que culmina con resultados finales de escasa utilidad
práctica.
Una alternativa para la integración numérica del modelo de la máquina de
inducción en coordenadas primitivas consiste en invertir numéricamente la matriz
de inductancia [L] en cada paso de integración, una tarea no menos ardua que la
inversión analítica, incluso para los computadores personales modernos. Sin
embargo, esta alternativa es viable en la actualidad [39].
A pesar de lo que se pueda pensar de las discusiones anteriores, este modelo
tiene algunas ventaja importantes. En primer lugar, está desarrollado a partir de
variables que es posible medir físicamente en los puertos o ejes de la máquina, al
menos aquellas que se encuentran asociadas a los devanados estatóricos. Por otra
parte, utiliza muy poca información geométrica sobre la construcción de la
máquina, esta información se encuentra condensada y agrupada en la matriz de
inductancia [L] . La deducción y comprensión del modelo es muy simple cuando
se utiliza este método, porque se circunscribe a formular las ecuaciones de un
circuito de seis mallas acopladas magnéticamente. Finalmente, con la aplicación
del principio de los trabajos virtuales, se obtiene el par electromagnético en el eje
mecánico.
El modelo de la máquina de inducción en coordenadas primitivas es muy
sencillo en su deducción, pero requiere un gran esfuerzo de cálculo si se desea
obtener resultados prácticos.
A continuación se cita una anécdota que
frecuentemente se cuenta a los estudiantes de los cursos de máquinas eléctricas
que se enfrentan con problema semejantes: “...Después de que el maestro ha
explicado a sus alumnos, con gran detalle y esmero, el famoso pero poco utilizado
sistema de los números romanos, les pide que realicen una operación aritmética
tan simple como puede ser la multiplicación o división de dos cifras representadas
en este sistema numérico. Los estudiantes aventajados pronto se darán cuenta de lo
difícil que puede ser este problema, porque no conocen las reglas para realizar
estas operaciones - el maestro es talentoso y abnegado, pero no tanto -. Los
alumnos más inteligentes pronto transformaran los números romanos en arábigos,
realizarán la operación deseada con las reglas conocidas para este sistema
numérico, y posteriormente algunos, en general los más trabajadores y dedicados,
antitransformarán la solución obtenida a números romanos nuevamente...”. La
- 23 -
transformación de un tipo de variables a otras, puede simplificar la estructura
matemática del problema, permitiendo una solución más rápida del modelo. La
antitransformación algunas veces es optativa.
Las ecuaciones de la máquina de inducción en coordenadas primitivas
representan su comportamiento mediante relaciones funcionales y no linealidades
extremadamente complejas. Por esta razón es necesario estudiar el proceso de
transformaciones de coordenadas que simplifica el problema.
Estas
simplificaciones permiten incrementar la comprensión del problema y acelerar la
rapidez en la determinación de las soluciones. Estas dos ventajas hacen posible el
empleo de los modelos transformados en una gran variedad de aplicaciones que
requieren el uso de cálculo y estimación en tiempo real.
3.4
Modelación de la máquina de inducción mediante métodos variacionales
[20,76].
Para modelar un convertidor electromecánico utilizando los métodos
variacionales discutidos en el capítulo 2, se debe comenzar por definir un conjunto
de coordenadas generalizadas que representen todos los grados de libertad
existentes en este sistema físico. En el caso particular de la máquina de inducción
estas coordenadas pueden ser las cargas eléctrica qk , y el desplazamiento angular
θ del eje mecánico. Las derivadas o velocidades de la coordenadas generalizadas
serían en este caso las corrientes ik , por las bobinas y la velocidad angular ω m . Las
variables generalizadas correspondientes al esfuerzo son las fuerzas
electromotrices ek inducidas en cada devanado, y el par eléctrico sobre el eje
mecánico τ m .
Finalmente las variables generalizadas de momentum
corresponderían a los enlace de flujo λ k , y al momentum angular mecánico p m .
Las relaciones físicas y matemáticas que satisfacen este conjunto de variables se
resume en la tabla 3.1:
Variable
Sistema Eléctrico
Coordenada (z )
Velocidad ( z$ )
Carga Eléctrica ( qk )
Corriente ( ik = q$k )
- 24 -
Sistema Mecánico
Posición Angular ( θ )
Velocidad Angular ( ω m )
FEM ( ek = λ$ k )
Esfuerzo ( f = p$ )
Enlace ( λ k = ∑ Lkii j )
Momentum ( p = kz$ )
Par ( τ m = l$m )
Moment. ang. ( lm = J.ω m )
Tabla 3.1 Asignación de variables para el modelo variacional de la máquina de
inducción
Una vez que han sido definidas las variables de estado del convertidor, se
determina la función de Lagrange, evaluando las energías potenciales y las
coenergías cinéticas asociadas con el comportamiento del sistema. Recordando
que las bobinas rotóricas y estatóricas de la máquina de inducción se excitan
mediante fuentes independientes de tensión, y que sobre el eje mecánico existe
además del par eléctrico, una fuente independiente de par mecánico, la función
conservativa de Lagrange es:
L(qae , qbe , qce , qar , qbr , qcr ,θ m ; iae , ibe , ice , iar , ibr , icr , ω m ) =
= W pot ([q ] ,θ m ) + Wcin' ([q ] ,θ m ; [ i ] , ω m ) = 0 + 1 2 J ω m2 + 1 2 [ i ] [ L ][ i ] =
t
=
1
J ω m2 + 1 2 [ie ] [ Le ][ie ] + [ie ] [ Ler (θ m ) ][ir ] + 1 2 [ir ] [ Lr ][ir ]
t
2
t
3.27
t
Considerando que los conductores de las bobinas poseen resistencia
eléctrica, que está presente la fricción en la rotación del eje, y si se aplica el
principio variacional 2.64, a los ejes eléctricos y mecánicos del convertidor
electromecánico no conservativo, constituido por la máquina de inducción, se
obtienen las siguientes expresiones:
•
Para los ejes eléctricos:
d ∂L ∂L
∂L
∂L 6
v
t
r
i
−
=
−
−
−
=
= ∑ Lkj i j = λk
(
(
))
.
;
0;
k
k k
dt ∂ ik ∂ qk
∂ qk
∂ ik j =1
v (t ) = r .i + λ$ ; ∀ k = 1, 2, …, 6
k
k k
k
[ v ] = [ R ][i ] + [e]
•
Para el eje mecánico:
- 25 -
3.28
d ∂L ∂L
= − ( −τ m (t ) ) − α fric. .ω m
−
dt ∂ω m ∂θ m
(
)
∂L
∂L
t ∂ [ L er ]
t
= [i e ]
= J .ω m = lm
[i r ] = τ e θ m ; [i ] ;
∂θ m
∂θ m
∂ω m
(
)
3.29
τ e θ m ; [ i ] + τ m (t ) = α fric. .ω m + J .ω$ m
t
El conjunto de las expresiones 3.28 y 3.29, corresponden exactamente con el
sistema de ecuaciones diferenciales 3.18, que modela el comportamiento dinámico
de la máquina de inducción en el sistema de coordenadas primitivas. Por los
métodos variacionales se alcanza exactamente la misma representación matemática
que se obtiene a través de la formulación circuital o matricial del problema. De
hecho, los principios variacionales reproducen las leyes circuitales y mecánicas
básicas, debido a que han sido desarrollados a partir de la generalización de todos
los principios básicos que rigen el comportamiento de los sistemas físicos
[32,36,48,59,76].
Las ecuaciones de la máquina de inducción también pueden obtenerse
utilizando un sistema de coordenadas generalizadas alternativo. De cualquier
forma, los principios variacionales son exactamente los mismos. Un sistema de
coordenadas generalizadas alternativo podría utilizar los enlaces de flujo como λ
variable generalizada, la fuerza electromotriz e como velocidad generalizada, la
corriente i como variable de esfuerzo generalizado, y la carga q como momentum
generalizado. En este sistema de coordenadas alternativo, las variables mecánicas
pueden mantener las mismas asignaciones. En la tabla 3.2 se presenta un resumen
del sistema de coordenadas alternativo:
Variable
Coordenada ( z )
Velocidad ( z$ )
Esfuerzo ( f = p$ )
Momentum ( p = kz$ )
Sistema Eléctrico
Enlace de Flujo ( λ k )
FEM ( e = λ$ )
Corriente ( ik = q$k )
k
k
Carga ( qk = ∑ Ckj ej )
Sistema Mecánico
Posición Angular ( θ )
Velocidad Angular ( ω m )
Par ( τ = l$ )
Moment. ang. ( lm = J.ω m )
m
m
Tabla 3.2 Asignación de variables alternativas para el modelo variacional
de la máquina de inducción
- 26 -
Con el sistema de coordenadas eléctricas alternativas definidas en la tabla
3.2, se puede establecer la correspondiente función de estado Lagrangiana, para un
sistema conservativo:
L(λae , λbe , λce , λar , λbr , λcr ,θ m ; eae , ebe , ece , ear , ebr , ecr , ω m ) =
= W pot ([ λ ] ,θ m ) + Wcin' ([ λ ] ,θ m ; [e ] , ω m ) =
[ λ ] [L(θ m )] [λ ] + 1 2 Jω m2 = 1 2 [λ ] [Γ(θ m )] [λ ] + 1 2 Jω m2
t
t
t
= 1 2 [ λ e ] [ Γ e ][ λ e ] + [ λ e ] [ Γ er (θ m ) ][ λ r ] + 1 2 [ λ r ] [ Γ r ][ λ r ] + 1 2 J ω m2
=
1
t
−1
−1
t
3.30
2
Aplicando nuevamente el principio variacional 2.64, para sistemas no
conservativos, a la función de Lagrange calculada en la expresión 3.30, se obtiene el
siguiente modelo matemático de la máquina de inducción, en el sistema alternativo
de coordenadas generalizadas:
•
Para los ejes eléctricos:
d ∂L ∂L
∂L 6
∂L
(
)
.
;
i
t
g
e
−
=
−
−
−
= ∑ Γ kj λ j = ik ;
=0
(
)
k ,iny
k k
dt ∂ ek ∂λk
∂λk j =1
∂ ek
ik ,iny (t ) = g k .ek + ik
;
∀ k = 1, 2,…, 6
3.31
i iny = [G ][e ] + [ i ]
•
Para los ejes mecánicos:
d ∂L ∂L
= −(−τ m (t )) − α fric. .ω m
−
dt ∂ω m ∂θ m
∂L
∂L
t ∂ [Γ]
t
= − 1 2 [λ ]
= J .ω m = lm
[ λ ] = τ e (θ m ; [λ ] );
∂θ m
∂θ m
∂ω m
3.32
τ e (θ m ; [ λ ] ) + τ m (t ) = α fric. .ω m + J .ω$ m
t
La expresión 3.31 es una representación nodal de las bobinas de la máquina
de inducción, mientras que el modelo 3.28 es una representación en mallas de los
mismos circuitos [61]. En cambio, las expresiones 3.30 y 3.32 son idénticas entre sí,
como se puede comprobar fácilmente, cuando existe linealidad entre los enlaces de
flujo y las corrientes:
- 27 -
τ e = − 1 2 [λ ]
t
∂ [Γ]
t
t ∂ [L]
[ λ ] = − 1 2 [ L][ i ] − [Γ ]
[Γ ] [L ][i ] =
∂θ m
∂θ m
∂ [L]
t ∂ [L]
t ∂ [ L er ]
= 1 2 [i ] [L] [Γ]
[Γ ][ L][ i ] = 1 2 [i ]
[i] = [ie ]
[ir ]
∂θ m
∂θ m
∂θ m
t
t
3.33
t
El primer modelo se utiliza con mayor frecuencia, debido principalmente a
que en los sistemas eléctricos reales las fuentes de tensión independiente son
prácticamente ideales. Sin embargo, en la actualidad los convertidores electrónicos
de potencia pueden ser capaces de funcionar, con gran aproximación, como
fuentes de corriente independientes ideales. En estos casos el segundo modelo
ofrece claras ventajas para la modelación del convertidor.
Es interesante destacar que los conceptos de energía potencial y energía
cinética están relacionados estrechamente con el sistema de coordenadas que se
utiliza en un determinado momento. En el primer sistema de coordenadas, la
energía potencial tenía que ver con la capacidad de acumular carga eléctrica. En el
sistema alternativo, la energía potencial estaba relacionada con la capacidad de
acumular enlaces de flujo. La ventaja de los métodos variacionales es que
incrementan la generalización de los conceptos, pero en algunos casos puede
parecer confusa su aplicación debido a que no se respetan necesariamente las
líneas epistemológicas clásicas de razonamiento físico.
Los principios variacionales pueden suministrar modelos alternativos, que
utilizan diferentes tipos de variables. Los dos ejemplos que se han presentado en
esta sección son de gran interés práctico, porque permiten obtener directamente las
ecuaciones diferenciales básicas de la máquina de inducción, en la representación
por mallas o nodos, y en las coordenadas primitivas del convertidor. Además, este
método es muy práctico para incorporar ciertos elementos acumuladores o
disipadores de energía.
Los modelos de la máquina de inducción desarrollados consideran que
existe linealidad entre los enlaces de flujo y las corrientes por las bobinas, pero el
método variacional, al igual que los métodos fundamentados en el análisis de
circuitos y el principio de los trabajos virtuales, no están limitados por esta
hipótesis. Por el contrario, pueden ser extendidos al análisis de modelos
electromagnéticos no lineales de la máquina de inducción. La única diferencia
consiste en la necesidad de establecer una función de Lagrange, que caracterice el
- 28 -
estado del convertidor para cada uno de los casos. Esta función debe ser
independiente de la historia pasada, de las derivadas de las variables de estado del
sistema, y del instante de tiempo que se esté considerando.
3.5
Transformación de las ecuaciones diferenciales de la máquina de inducción
en coordenadas primitivas mediante métodos modales.
Cualquiera de los modelos desarrollados en las secciones 3.3 y 3.4,
representan el comportamiento de la máquina de inducción en régimen dinámico,
transitorio o permanente. Como ya se ha discutido, estos modelos no son prácticos
o eficientes cuando se requiere la solución analítica o numérica de un determinado
problema. Los dos obstáculos más importantes son el acoplamiento no lineal
existente entre las variables del sistema de ecuaciones diferenciales, y la
dependencia con la posición angular θ, de estos acoplamientos.
En la sección 2.7 se presentaron algunas ideas prácticas, pero de escasa
generalidad para la determinación de transformaciones útiles para la
simplificación de los modelos no lineales de la máquina de inducción. Debido a la
falta de generalidad del método propuesto, existen gran variedad de alternativas,
con diversos grados de simplificación y desacoplamiento de las variables. Se han
utilizado diversas técnicas a través de los años, pero hay una cierta convergencia o
unidad en los criterios y objetivos básicos.
Si el problema de la modelación de la máquina de inducción fuese lineal, se
podría determinar la matriz característica de este sistema de ecuaciones
diferenciales de primer orden. Con el análisis de la matriz característica se
obtendrían directamente los autovalores y autovectores del modelo.
Los
autovalores definen las constantes de tiempo del sistema, y los autovectores
constituyen la matriz de transformación que desacopla las variables primitivas del
modelo, y definen los grados de libertad existentes para la solución analítica.
Cuando el problema no es lineal, esta técnica no es aplicable en general. El
esfuerzo se dirige entonces hacia la búsqueda del desacoplamiento o
diagonalización de la matriz que presenta la dependencia en la variable de estado
θ, y que además acopla las derivadas del resto de las variables de estado. En el
modelo de la máquina de inducción en coordenadas primitivas esta matriz
corresponde con la matriz de inductancia [L] .
- 29 -
La matriz de inductancia [L] se puede particionar, tal como se ha hecho
anteriormente, en cuatro submatrices:
[ L ] [ L ] [ Lee ] [ Ler ]
=
[ L ] = Lee Ler = t
[ re ] [ rr ] [ Ler ] [ Lrr ]
cos(θ − 2π 3 ) cos(θ − 4π 3 )
− 1 2 Le
Le + Lσ e − 1 2 Le
cos θ
−1 L
1
cosθ
cos(θ − 2π 3 )
Ler cos(θ − 4π 3 )
2 e Le + Lσ e − 2 Le
− 1 2 Le
cos(θ − 2π 3 ) cos(θ − 4π 3 )
cosθ
− 1 2 Le Le + Lσ e
cos(θ − 4π 3 ) cos(θ − 2π 3 )
− 1 2 Lr
Lr + Lσ r − 1 2 Lr
cosθ
−1 L
L cos(θ − 2π )
1
cos θ
cos(θ − 4π 3 )
3
2 r Lr + Lσ r − 2 Lr
er
− 1 2 Lr
cos(θ − 4π 3 ) cos(θ − 2π 3 )
cos θ
− 1 2 Lr Lr + Lσ r
3.34
Las dos submatrices de inductancias propias y mútuas del estator o del
rotor, [Lee ] y [Lrr ] , son completamente simétricas e independientes de la posición
angular θ [43]. Las submatrices de inductancias mútuas entre las bobinas del
estator y del rotor, [Ler ] y [Lre ] , son cíclicas [19], y fuertemente dependientes de la
posición angular del rotor θ . Analizando los autovalores y autovectores de las
matrices completamente simétricas y de las matrices con simetría cíclicas, se
pueden encontrar transformaciones de coordenadas que simplifiquen la estructura
de la matriz de inductancias, y por tanto del sistema de ecuaciones diferenciales.
Una matriz completamente simétrica se caracteriza por tener todos los
elementos de la diagonal principal iguales entre sí (a), y los elementos fuera de la
diagonal principal también son iguales entre sí (b), pero entre ellos no
necesariamente son iguales (ab):
a b b
[ S ] = b a b .
b b a
Los autovalores de la matriz completamente simétrica [S ], son:
- 30 -
3.35
b
b
a − γ
det([ S ] − γ [ I ]) = det b
a −γ
b = (a − γ )3 + 2b3 − 3b 2 (a − γ ) = 0 ⇒
b
b
a − γ
γ 0 = a + 2b ; γ 1 = a − b ; γ 2 = a − b
3.36
El autovector asociado con el autovalor γ 0 es:
b V00 0
−2b b
1
([ S ] − γ 0 [ I ]) [ V0 ] = [ 0] ⇒ b −2b b V10 = 0 ⇒ [ V0 ] = V00 1
b
1
b −2b V20 0
3.37
Los autovectores asociados con los autovalores γ 1 y γ 2 son:
−(V1(1,2) + V2(1,2) )
b b b V0(1,2) 0
V1(1,2)
([ S ] − γ 1,2 [ I ]) V(1,2) = [ 0] ⇒ b b b V1(1,2) = 0 ⇒ V(1,2) =
3.38
b b b V2(1,2) 0
V2(1,2)
Con los tres autovectores obtenidos en 3.37 y 3.38, se construye la matriz de
transformación que diagonaliza las matrices completamente simétricas, algunos
autores denominan a esta matriz, transformación de Karrenbauer [19,43]:
k1
[TKarrenbauer ] = k1
k1
− ( k 2 + k3 ) − ( k 4 + k5 )
k2
k4
k3
k5
3.39
El determinante de la transformación 3.39 debe ser diferente de cero para
que exista la matriz inversa.
Si los coeficientes indeterminados de la
transformación pueden ser números complejos, la transformación tiene diez
grados de libertad. Para garantizar que la matriz de transformación se pueda
invertir, requisito indispensable si es necesaria la transformación inversa, es
necesario satisfacer simultáneamente las dos condiciones siguientes:
k1
det [TKarrenbauer ] = det k1
k1
− ( k 2 + k3 ) − ( k 4 + k5 )
= 3k (k k − k k ) ≠ 0 ⇒
k2
k4
1
2 5
3 4
k3
k5
k1 ≠ 0 ∧ k2 k5 − k3 k4 ≠ 0
- 31 -
3.40
Estas dos restricciones, no reducen los grados de libertad, pero restringen
los posibles coeficientes al lugar geométrico del hiperespacio dimensional que
satisface simultaneamente las dos desigualdades. Una restricción que es de gran
utilidad cuando se transforman las variables de los convertidores electromecánicos
de energía, pero cuya aplicación no es indispensable, ni necesaria, consiste en
imponer la condición de hermitianidad sobre la transformación. Cuando se
utilizan transformaciones hermitianas, las potencias se conservan entre el sistema
de coordenadas primitivas y el sistema de coordenadas transformadas. Una
matriz es hermitiana si su inversa es igual a su traspuesta conjugada. Para la
transformación de Karrenbauer, la hermitianidad se asegura al cumplir las
siguientes condiciones:
k1* 1 0 0
k3* = 0 1 0 ⇒
k5* 0 0 1
k1k1* = 1 ; k2 k2* + k4 k4* = 2 ; k3 k3* + k5 k5* = 2 ; k2 k3* + k4 k5* = − 1
3
3
3
3
k1
k
1
k1
−(k2 + k3 ) −(k4 + k5 )
k1*
k1*
−( k * + k * ) k *
k2
k4
2
2 3
−(k4* + k5* ) k4*
k3
k5
3.41
Las igualdades obtenidas en el desarrollo 3.41, restringen en cuatro los
grados de libertad cuando se impone la condición hermitiana a la transformación
de coordenadas. Si además se exige que la transformación debe utilizar solamente
coeficientes reales, es suficiente con definir sólo uno de estos coeficientes para
obtener la transformación deseada, con la excepción del primer coeficiente k 1 , que
ya está determinado por la selección de transformaciones hermitianas. Cuando se
escoge arbitrariamente que la suma de los coeficiente k 4 y k 5 es cero, y que el resto
de los coeficientes deben ser reales, se obtiene la conocida transformación de Clark
[14,15]:
[TClark ] =
1
1
1
3
3
3
−
−
2
3
1
1
3
3
0
1=
−1
2
3
1
1
1
2
2
2
1
0
3
− 12
2
− 1 2 − 3 2
3.42
La transformación de Clark 3.42, se utiliza con gran frecuencia para transformar los
sistemas trifásicos equilibrados en sistemas bifásicos ortogonales equivalentes.
Como la transformación está desarrollada mediante coeficientes reales puros, se
puede realizar físicamente mediante transformadores ideales. Por esta razón, se ha
utilizado en los analizadores de redes analógicos para obtener la respuesta modal
- 32 -
de los sistemas eléctricos de potencia, o para analizar los desequilibrios de una red
en componentes de secuencia αβ o . Algunos autores obtienen esta transformación
a partir de la proyección a ejes ortogonales de los flujos producidos en las tres
bobinas de una máquina trifásica equilibrada [76].
La otra matriz que es necesario analizar para resolver el problema de la
diagonalización de la matriz de inductancias [L] , es la matriz cíclica de dimensión
3*3. Esta matriz está conformada por tres elementos diferentes - a, b y c -, que se
encuentran permutados en cada nueva fila, mediante la rotación de sus elemento
con un avance hacia la derecha:
a b c
[C] = c a b
b c a
3.43
Los autovalores correspondientes a la matriz cíclica [C] , son:
a − γ
det ([C] − γ [ I ]) = det c
b
b
a −γ
c
γ 0 = a + b + c ; γ 1 = a + be
c
b = (a − γ )3 + b3 + c 3 − 3bc(a − γ ) = 0
a − γ
j 23π
+ ce
j 43π
El autovector asociado con el autovalor γ 0 es:
; γ 2 = a + be
j 43π
+ ce
3.44
j 23π
b
c V00 0
−(b + c)
1
−(b + c)
b V10 = 0 ⇒ [ V0 ] = V00 1 3.45
([C] − γ 0 [I ]) [ V0 ] = [0] ⇒ c
b
1
c
−(b + c) V20 0
El autovector asociado con el autovalor γ 1 es:
1
2π
([C] − γ 1 [I ]) [ V1 ] = [0] ⇒ [ V1 ] = e j 3 V01
j 43π
e
Y por último, el autovector asociado con el autovalor γ 2 es:
- 33 -
3.46
1
j 4π
([C] − γ 2 [ I ]) [ V2 ] = [ 0] ⇒ [ V2 ] = e 3 V02
j 23π
e
3.47
Con los tres autovectores obtenidos en 3.45, 3.46 y 3.47, se construye la
matriz de transformación que diagonaliza las matrices cíclicas.
Esta
transformación, introducida inicialmente por Fortescue [25] para el análisis de los
sistemas de potencia trifásicos y desequilibrados, se conoce en la literatura como
transformación de componentes simétricas:
k2
k1
j 2π
TComp. Simét . = k1 e 3 k2
j 4π
k1 e 3 k2
k3
j 4π
e 3 k3
j 2π
e 3 k3
3.48
Si los coeficientes de la transformación de componentes simétricas son números
complejos, se obtienen seis grados de libertad. Para que la matriz tenga inversa, es
necesario que se cumplan las tres condiciones siguientes:
k2
k1
j 2π
det k1 e 3 k2
j 4π
k1 e 3 k2
k3
j 4π
j 3π
e 3 k3 = 3 3e 2 .k1k2 k3 ≠ 0 ⇒ k1 ≠ 0; ∧ k2 ≠ 0; ∧ k3 ≠ 0
j 2π
e 3 k3
3.49
Al establecer la condición de hermitianidad sobre la transformación de
componentes simétricas, se obtiene:
k2
k1
j 23π
k1 e k2
j 4π
k1 e 3 k2
k3 k1*
j 4π
e 3 k3 k2*
j 2π
e 3 k3 k3*
k1*
e
e
j 43π
j 23π
k2*
k3*
k1* 1 0 0
j 2π
e 3 k2* = 0 1 0
j 4π
e 3 k3* 0 0 1
k1k1* + k2 k2* + k3 k3* = 1
j 2π
j 4π
⇒ k1k1* + k2 k2*e 3 + k3 k3* 3 = 0
4π
*
2π
* j 3
*j 3
k1k1 + k2 k2 e + k3 k3 = 0
⇒ k1k1* = k2 k2* = k3 k3* = 1 ⇒ k1 = k2 = k3 =
3
3.50
1
3
Las igualdades obtenidas en el desarrollo 3.50, restringen tres de los seis
grados de libertad de la transformación hermitiana de componentes simétricas. Si
- 34 -
los coeficientes indeterminados se escogen dentro del conjunto de los números
reales, la transformación hermitiana de componentes simétricas queda
completamente determinada:
1
TComp. Simét . = 1
1
1
3
3
e
3
e
1
3
1
3
e =
3
j 2π
e 3
3
1
3
3
j 23π
1
j 43π
1
j 43π
1
1 1
j 23π
1
e
3
j 4π
1 e 3
1
j 4π
e 3
j 2π
e 3
3.51
La transformación de componentes simétricas o transformación de Fortescue 3.51,
se utiliza habitualmente en el cálculo de fallas, desequilibrios, y respuestas
modales [30]. Esta transformación tiene una enorme ventaja con respecto a la
transformación de Karrenbauer, desacopla tanto a las matrices cíclicas [C], como a
las matrices completamente simétricas [S ], debido a que estas últimas
corresponden al caso particular de las matrices cíclicas, cuando los coeficientes b y
c son idénticos entre sí. La transformación de componentes simétricas utiliza
coeficientes complejos en sus elementos, esto puede considerarse una desventaja
relativa. Por otra parte, esto es una dificultad menor en la actualidad debido a las
poderosas herramientas de cálculo existentes en el mercado.
La matriz de inductancia [L] se ha descompuesto en cuatro submatrices, dos
cíclicas y dos simétricas.
Cada una de estas submatrices pueden ser
diagonalizadas mediante la transformación hermitiana de componentes simétricas
3.51. Sin embargo, en algunas ocasiones resulta más ventajoso la aplicación parcial
de la transformación de Clark, en particular cuando se desea determinar mediante
circuitos analógicos o bloques de control, los valores de las coordenadas
transformadas a partir de las mediciones realizadas sobre las variables primitivas,
o viceversa. La aplicación de la transformación de componentes simétricas al
sistema de ecuaciones diferenciales 3.18, reduciría el acoplamiento existente entre
las derivadas de las corrientes, simplificando considerablemente la inversión
analítica de la matriz de inductancia transformada de dimensión 6*6:
- 35 -
[ Ve ] [ R e ]
=
[ Vr ] [ 0]
ˆ
[CS ]h V
e [ R e ]
=
[CS ]h V
ˆ [ 0]
r
ˆ
V
e
= [ R e ]
V
ˆ
[ 0]
r
donde:
[0] [ I e ] + p [Lee ] [Ler ] [ I e ] ⇒
[ R r ] [ I r ] [ Ler ]t [L rr ] [ I r ]
[0] [CS] Iˆ e + p [Lee ] [Ler ] [CS ] Iˆ e ⇒
[ R r ] [CS ]h Iˆ r [ Ler ]t [L rr ] [CS ]h Iˆ r
h
h
[ 0] Iˆ e + p [CS ] [L ee ][CS ] [CS ] [L er ][CS ] Iˆ e
[ R r ] Iˆ r [CS ] [L er ]t [CS ]h [CS ] [L rr ][CS ]h Iˆ r
h
3.52
h
[CS ] matriz de componentes simétricas.
h
[CS ] matriz [CS ] traspuesta y conjugada.
Lσ e
[CS ] [Lee ][CS ] = 0
0
h
Lσ r
[CS ] [L rr ][CS ] = 0
0
h
0
[CS ] [Ler ][CS ] = 0
0
h
[CS ] [Ler ]
t
0
[CS ] = 0
0
h
0
3 L +L
2 e
σe
0
3
2
0
Le + Lσ e
0
0
3
2
3
2
Ler e
0
0
3
0
Lr + Lσ r
0
0
2
Ler e
jθ
0
3 L e − jθ
2 er
− jθ
0
1 1
xae
4π
1
h
[ Xe ] = xbe = [CS ] Xˆ e = 1 e j 3
3
j 2π
xc
1 e 3
e
1 1
xar
4π
1
h
[ Xr ] = xbr = [CS ] Xˆ r = 1 e j 3
3
j 23π
xc
r
1 e
- 36 -
0
3 L +L
2 e
σr
3.53
3.54
0
0
3 L e jθ
2 er
3.55
0
1 x
0e
j 23π
e x1e
j 4π
e 3 x2e
1 x
0r
j 23π
e x1r
j 4π
e 3 x2r
3.56
3.57
3.58
El sistema 3.52 se puede reescribir mediante tres sistemas de ecuaciones
diferenciales completamente desacoplados: uno de secuencia cero, otro de
secuencia positiva y el último de secuencia negativa. Para las variables de
secuencia cero se obtiene el siguiente sistema:
v0e Re
v =
0r 0
0 i0e
+
Rr i0r
L
p σe
0
0 i0e
Lσ r i0r
3.59
Para la secuencia positiva, se tiene:
v1e Re
v =
1r 0
0 i1e
+
Rr i1r
3 L + L
p 2 e − jσθ e
3
2 Ler e
Ler e jθ i1e
i
3 L +L
2 r
σ r 1r
3
2
3.60
Las ecuaciones del sistema de secuencia negativa son:
v2e Re
v =
2r 0
0 i2e
+
Rr i2r
3 L + L
p 2 e jθσ e
3
2 Ler e
Ler e − jθ i2e
i
3 L +L
2 r
σ r 2r
3
2
3.61
El par eléctrico en el sistema de coordenadas correspondientes a las
componentes simétricas, se obtiene aplicando el mismo procedimiento anterior a la
expresión 3.26:
τ e = − [Ie ]
t d
d
h
h
[Ler ][ I r ] = [CS ] Iˆ e [Ler ] [CS ] Iˆ r =
dθ
dθ
t
d
3
h
= Iˆ e [CS ] [ L er ][CS ] Iˆ r = − j Ler ( e jθ ⋅ i1e ⋅ i1r − e− jθ ⋅ i2e ⋅ i2r )
dθ
2
t
3.62
Como se puede observar en la expresión 3.62, las componentes de secuencia
cero de las corrientes no contribuyen a la producción del par eléctrico. Las
componentes de secuencia positiva y negativa si contribuyen, pero en direcciones
contrarias. En esta ecuación se debe considerar únicamente la parte real. La parte
imaginaria de la expresión aparece debido a la descomposición de las funciones
trigonométricas reales en sumas de exponenciales complejas, y no tiene
implicaciones físicas en la producción de par eléctrico.
Los tres modelos de secuencia de la máquina de inducción son visiblemente
más simples que el modelo original en coordenadas primitivas. Sin embargo, aun
en estas ecuaciones existe una dependencia en la matriz de inductancias con la
posición angular θ. Ahora bien, estas matrices tienen una dimensión de 2*2, y este
- 37 -
hecho simplifica notablemente la inversión analítica. En las secciones siguientes se
analiza con mayor detalle este problema y sus alternativas de solución. Es
interesante destacar que la presencia de este ángulo en las ecuaciones, se debe a
que las referencias de los sistemas de coordenadas del estator y rotor son
diferentes, y esa diferencia es precisamente el ángulo θ. Esta idea se puede
desarrollar para encontrar transformaciones que eliminen la dependencia de las
ecuaciones con la posición angular del rotor.
3.6
Transformación de las ecuaciones diferenciales de la máquina de inducción
en coordenadas primitivas a vectores espaciales.
El siguiente paso en el desarrollo de modelos dinámicos de la máquina de
inducción consiste en definir el concepto matemático de los vectores espaciales
[53,75]. Si se multiplica la transformación hermitiana de componentes simétricas
3.51, por un vector de variables trifásicas instantáneas, se obtiene el siguiente
resultado:
[CS ][ x(t )] =
1
1 1
j 2π
1 e 3
3
j 4π
1 e 3
1 x (t )
a
j 43π
e xb (t ) =
j 2π
e 3 xc (t )
1
xa (t ) + xb (t ) + xc (t )
2
π
4
π
j
j
x (t ) + xb (t )e 3 + xc (t )e 3 =
3 a
j 4π
j 2π
xa (t ) + xb (t )e 3 + xc (t )e 3
x (t )
x0 (t )
x 0 (t ) x0 (t ) x0 (t )
0
jξ1 ( t )
jξ1 ( t )
= x1 (t ) = x1 (t )e
= x1 (t )e
= x1α (t ) + j x1β (t ) = x1 (t )
x 2 (t ) x2 (t )e jξ2 (t ) x1 (t )e− jξ1 ( t ) x (t ) − j x (t ) x1* (t )
1β
1α
3.63
Cada uno de los elementos de la transformación 3.63, sobre las variables
genéricas, trifásicas e instantáneas, es un vector en el espacio, cuyo módulo y fase
varían en el tiempo. El primer elemento es una función real que depende del
tiempo, y se conoce habitualmente como la componente homopolar o de secuencia
cero. El segundo y el tercer elemento, corresponden a las componentes de
secuencia positiva y negativa respectivamente. En el desarrollo de la expresión
3.63 se observa que estas dos funciones son complejas y conjugadas entre sí. Por
esta razón, la información contenida en estas variables es redundante. La
transformación matricial de componentes simétricas 3.51, se puede descomponer
en tres transformaciones vectoriales:
- 38 -
•
La transformación a vectores espaciales homopolares:
x0 =
•
1
3
( x (t ) + x (t ) + x (t )) = x (t )
a
b
c
La transformación a vectores espaciales de secuencia positiva:
=
1
{x
x1 =
x t + x t e j 3 + xc ( t ) e j 3 =
a( ) b( )
2π
1
4π
( t ) − 1 2 xb ( t ) + xc ( t ) + j
3
3
= xα 1 ( t ) + j xβ 1 ( t ) = xα21 ( t ) + xβ2 1 ( t ) e
•
3.64
0
3
a
2
}
xb ( t ) − xc ( t ) =
= x1 ( t ) e j ξ1 ( t )
j tg −1 ( xβ 1 ( t ) )
x
α1
(t )
3.65
La transformación a vectores espaciales de secuencia negativa:
x2 =
2π
( t ) − 1 2 xb ( t ) + xc ( t ) + j 3 2 xc ( t ) − xb ( t )} =
= xα 2 ( t ) + j xβ 2 ( t ) = xα 1 ( t ) − j xβ 1 ( t ) = x1 ( t ) e − jξ (t ) = x1*
=
1
3
{x
xa ( t ) + xb ( t ) e j 3 + xc ( t ) e j 3 =
4π
1
3
a
3.66
1
Es muy frecuente que la adición de tres magnitudes trifásicas instantáneas,
tales como corrientes o tensiones, sean cero. Reemplazando esta condición en las
expresiones 3.64, 3.65 y 3.66, se obtienen los siguientes resultados:
•
•
Para la componente homopolar de los vectores espaciales:
x0 =
3
[ xa (t ) + xb (t ) + xc (t )] = 0
3.67
Para los vectores espaciales de secuencia positiva:
x1 =
•
1
1
{ x (t ) − [ x (t ) + x (t )] + j [ x (t ) − x (t )]} =
=
3
a
3
2
xa (t ) + j [ 1 2 xa (t ) + xb (t ) ] = x1 (t )e
1
2
3
b
c
2
b
c
jξ1 ( t )
3.68
Para los vectores espaciales de secuencia negativa:
x2 =
1
=
3
{ x (t ) − [ x (t ) + x (t )] − j [ x (t ) − x (t )]} =
a
3
2
xa (t ) + j [ 1 2 xa (t ) + xb (t ) ] = x1 (t )e
1
2
3
b
c
2
b
c
− jξ1 ( t )
3.69
Una consideración interesante que cabe destacar en las expresiones 3.64,
3.65 y 3.66, es que determinan directamente la transformación de Clark obtenida en
3.42, pero en una versión no hermitiana:
- 39 -
x0 (t )
xα 1 (t ) =
xβ 1 (t )
1
1 xa (t ) xa (t )
1 1
1 − 1
− 1 2 xb (t ) ⇒ xb (t ) =
2
3
3
− 3 2 xc (t ) xc (t )
2
0
1
0 x0 (t )
1 2
1 −1
3 xα 1 (t )
3
1 −1 − 3 x (t )
β1
3.70
El vector espacial de secuencia cero resulta en muchas ocasiones de escasa
utilidad cuando se modelan máquinas de inducción, pero permite añadir grados
de libertad, si el sistema de fuentes independientes aplica tensiones con
componente homopolar, o si la conexión del convertidor a la fuente posibilita la
circulación de corriente por el neutro. En cualquier otro caso, la transformación a
vectores espaciales de secuencia positiva o negativa, de las diferentes magnitudes
trifásicas del modelo en coordenadas primitivas, contiene los grados de libertad
suficientes para representar el sistema.
La transformación hermitiana de componentes simétricas 3.51, es
conservativa en potencia. Esto quiere decir que al calcular la potencia instantánea
en las coordenadas primitivas, o en el sistema de coordenadas transformadas, se
obtiene exactamente el mismo resultado:
t
h
ˆ . [CS ]h Iˆ = V
ˆ
ˆ ˆ ˆ
p ( t ) = [ V ] .[ I ] = [CS ] V
.[CS ] .[CS ] . I = V . I
⇒
t
t
va .ia + vb .ib + vc .ic = v0 .i0 + v1.i1 + v2 .i2
3.71
Para que la transformación a vectores espaciales sea conservativa en
potencia, es necesario realizar algunas consideraciones adicionales. En primer
lugar es necesario definir el concepto de potencia, calculada a partir de los vectores
espaciales. La definición de potencia activa, reactiva y aparente, utilizada en la
operativa con fasores, ofrece el punto de partida para esta definición. Como los
vectores espaciales son funciones complejas y los fasores son números complejos,
es posible utilizar la misma definición:
j
1
s (t ) = p ( t ) + j q (t ) = v.i =
va + vb e
3
*
2π
3
+ vc e
j
4π
3
4π
2π
j
j
1
3
3
.
ia + ib e + ic e =
3
1 3
3
= ( va .ia + vb .ib + vc .ic ) + j
( vab .ic + vbc .ia + vca .ib )
3 2
2
- 40 -
3.72
Las potencias activas y reactivas instantáneas definidas en la expresión 3.72,
corresponden a la mitad de los valores calculados a partir de las variables reales.
Esto se debe a que se está utilizando solamente la componente de secuencia
positiva para definir el vector espacial. Considerando vectores espaciales de
secuencia negativa, se obtendría el resto de la potencia necesaria. Como la
representación en secuencia positiva o en secuencia negativa aportan la misma
información, es conveniente añadir una constante a la definición de los vectores
espaciales de secuencia positiva, para que la transformación vectorial sea
conservativa en potencia, si se utiliza solamente esta componente en la
representación del sistema. El factor de corrección en potencia es dos, y para que
las definiciones de los fasores espaciales de tensión y corriente coincidan, es
aconsejable añadir en la definición de la transformación vectorial el factor 2 . La
definición del vector espacial de secuencia positiva, conservativo en potencia es:
x (t ) =
j
2
xa ( t ) + xb ( t ) e
3
4π
3
+ xc ( t ) e
j
2π
3
3.73
Aplicando la transformación de vectores espaciales de secuencia positiva, y
conservativos en potencia, definidos por la expresión 3.73, a las ecuaciones del
estator del modelo en coordenadas primitivas 3.18, se obtiene el siguiente
resultado:
2
3
1 e j 3
2π
e
j 43π
v e = Re i e +
[ ve ] =
d
dt
{
2
3
2
3
1 e j 3
2π
1 e j 3
2π
v e = Re i e +
e
e
j 43π
j 43π
Re [ I ][ i e ] + d ([ Lee ][ i e ] + [ Ler ][ i r ]) ⇒
dt
[ Lee ][ i e ] +
2
3
1 e j 3
2π
d 3
( 2 Le + Lσ e ) i e + 32 Ler e jθ i r }
{
dt
e
j 43π
}
[ Lee ][ i e ] ⇒
3.74
Realizando las mismas transformaciones sobre las ecuaciones del rotor, se
obtiene:
d
v r = Rr i r + {( 32 Lr + Lσ r ) i r + 32 Ler e − jθ i e }
3.75
dt
El par electromagnético sobre el eje mecánico, en vectores espaciales se puede
obtener de la siguiente forma:
- 41 -
τ e = − [ie ]
t
iae
d
dθ [ L er ][ i r ] = Ler ibe
ic
e
ia
Ler e
=
ib
2j e
ic
e
t
jθ
e
1
j 4π
e 3
j 2π 3
e
ej
2π
1
e
3
j 4π 3
t
sen(θ − 2π 3 ) sen(θ − 4π 3 ) iar
senθ
sen(θ − 4π )
senθ
sen(θ − 2π 3 ) ibr =
3
sen(θ − 2π 3 ) sen(θ − 4π 3 )
icr
senθ
2π
e j 3 − e − jθ
1
ej
4π
3
1
− j 4π
e 3
− j 2π 3
e
e− j
2π
3
1
e
− j 4π 3
i
ar
− j 2π 3
e
ibr =
i
1 cr
e− j
4π
3
1
1
jθ j 4π 3
3Ler * jθ
− jθ j 2 π *
i e e i r − i e e − jθ i*r } =
{
e e i r − e e 3 i r =
j 2π 3
e j 4π 3 4 j
e
3
3
τ e = Ler ℑm {i*e (e jθ i r )} = − Ler ℑm {i e (e jθ i r )*}
2
2
iae
3
2 Ler
ibe
=
2j
ic
e
t
3.76
Las expresiones 3.74, 3.75 y 3.76, representan el comportamiento dinámico
de la máquina de inducción en vectores espaciales. Las siete ecuaciones
diferenciales, implícitas en la expresión 3.18, pueden ahora representarse de la
siguiente forma:
v e Re
v = 0
r
3
2
0 i e d 32 Le + Lσ e
+
Rr i r dt 32 Ler e − jθ
Ler ℑm {i*e (e jθ i r )} + τ m = J
Ler e jθ i e
3
i
2 Lr + Lσ e r
3
2
dθ
dθ
+ α fric.
2
dt
dt
3.77
2
Las siete ecuaciones diferenciales en variables primitivas, se han reducido a
tan solo tres ecuaciones diferenciales en la representación mediante vectores
espaciales. Obviamente, las nuevas variables, y la matriz de inductancia, son ahora
números complejos, pero de cualquier modo la simplificación obtenida es de gran
importancia. La dependencia no lineal en la posición angular θ aparece solamente
en tres términos, y es posible invertir la nueva matriz de inductancias con relativa
facilidad.
La solución numérica del modelo de la máquina de inducción expresado
mediante vectores espaciales puede realizarse, después de desarrollar
explícitamente el término correspondiente a la fuerza electromotriz de la expresión
3.77, e introducir la velocidad angular ω m como variable de estado en el modelo:
- 42 -
v e Re
v = 0
r
0 i e 32 Le + Lσ e
+
Rr i r 32 Ler e − jθ
0
Ler e jθ d i e
3
dt + jω m 2 Ler − jθ
3
i r
−e
2 Lr + Lσ r
dω m
jθ
*
3
+ α fric.ω m
2 Ler ℑm {i e (e i r )} + τ m = J
dt
dθ
= ωm
dt
3
2
e jθ i e
0 i r
3.78
Posteriormente, se despejan las primeras derivadas de las variables de
estado, en función de las fuentes independientes, y en función de las propias
variables de estado. De esta forma, se obtiene el sistema de ecuaciones
diferenciales en su forma canónica:
−1
jθ
3
d i 3 L + L
v e
Re
e
σe
2 e
2 Ler e
=
−
− jθ
− jθ
3
3
3
dt i r 2 Ler e
v r − jω m 2 Ler e
2 Lr + Lσ r
dω m 1 3
jθ
*
=
2 Ler ℑm {i e (e i r )} + τ m − α fric .ω m
J
dt
dθ
dt = ω m
{
donde:
}
32 Le + Lσe
32 Lere− jθ
Ler e jθ
1 32 Lr + Lσr
=
3
∆ − 32 Lere − jθ
2 Lr + Lσr
3
2
−1
jω m 32 Ler e jθ i e
Rr
i r
3.79
− 32 Lere jθ
3
2 Le + Lσ e
∆ = (32 Le + Lσ e )(32 Lr + Lσr )− 94 L2er = 32 (Le . Lσr + Lr. Lσe ) + Lσ e. Lσr
3.80
El sistema de ecuaciones diferenciales 3.79, se puede resolver utilizando
métodos de integración numérica tales como el algoritmo de Euler, la regla
trapezoidal implícita, el método de Runge Kutta en diversos órdenes, o los
procedimientos combinados denominados genéricamente Predictor Corrector, que
utilizan pasos de integración variables para ajustar el error de cada integración
[13,39]. Aun cuando las derivadas de las variables de estado dependen de la
posición angular θ, la evaluación de estas funciones explícitas puede ser obtenidas
a gran velocidad por un computador personal ordinario.
3.7
Transformación de las ecuaciones de la máquina de inducción de vectores
espaciales a un sistema arbitrario de referencia.
- 43 -
El sistema de ecuaciones diferenciales 3.78, es un paso importante en la
solución eficiente del modelo de la máquina de inducción, pero como ya se ha
destacado, la dependencia de estas ecuaciones con la posición angular θ, dificulta
la integración numérica, y complica la interpretación de los resultados obtenidos.
Es conveniente desarrollar transformaciones adicionales de las variables
vectoriales que eliminen esta dependencia.
Si se analiza el sistema de ecuaciones diferenciales 3.78, se observa la
presencia de tres términos exponenciales complejos en la variable θ. El primero de
ellos, aparece en la ecuación de tensión del estator, y multiplica al vector espacial
de la corriente del rotor. Como se discutió en la sección anterior, esta corriente se
encuentra referida a un sistema de coordenadas que se mueve solidario con el eje
magnético de la fase “a” del rotor. Entre el eje magnético de la fases “a” del estator
y del rotor existe el ángulo θ, tal como se puede observar en la figura 3.6. La
multiplicación de un vector espacial determinado, por el término e jθ , le añade a su
respectivo ángulo el valor θ, pero no altera su magnitud. De tal forma que el
producto e jθ .i r , corresponde a la expresión de la corriente del rotor referida al
sistema de coordenadas del estator. Se puede concluir con un razonamiento
similar, que el producto e − jθ .i e , es el vector espacial de la corriente del estator
referida al sistema de referencia del rotor.
Otra consideración importante en la simplificación del modelo reside en el
hecho de que en la mayoría de las ocasiones, las variables del rotor de la máquina
de inducción no son accesibles, e incluso las tensiones en estas bobinas son
generalmente nulas. Sin embargo, durante la deducción del modelo se utilizaron
dos sistemas de referencia: uno para el estator y otro para el rotor. La consecuencia
de esto ha sido la presencia del ángulo θ, en las ecuaciones diferenciales que
modelan la máquina de inducción en el nuevo sistema de coordenadas. Por esta
razón, es razonable (?) la proposición de utilizar solamente el sistema del
referencia del estator para representar todas las ecuaciones de la máquina de
inducción. De acuerdo con esta idea se definen los vectores espaciales del rotor en
el sistema de referencia estatórico como:
- 44 -
i er ≡ i r e jθ
e
jθ
vr ≡ vre
⇒
di
di j θ
jθ
= r e + jθÝi r e
dt
dt
3.81
e
r
Sustituyendo las expresiones 3.81, en la ecuación del estator 3.74, se obtiene el
siguiente resultado:
v e = Re i e + ( 32 Le + Lσ e )
di e 3
di
+ 2 Ler e jθ r + j 32 ω m Ler i r e jθ ⇒
dt
dt
di
di e
v e = Re i e + ( 32 Le + Lσ e ) e + 32 Ler r
dt
dt
3.82
Reemplazando las definiciones presentes en la expresión 3.81, en la ecuación del
rotor 3.75, resulta:
e jθ v r = R ri r ejθ + (32 Lr + Lσ r )
di r jθ 3
di
e + 2 Lere− jθ e jθ e − j 32 ω mLeri ee− jθ e jθ ⇒
dt
dt
di e
di
v er = R ri er + (32 Lr + Lσ r ) r − jω m i er + 32 Ler e − j 32 ω mLeri e
dt
dt
3.83
Y si finalmente se reemplazan las mismas definiciones en la ecuación del par
eléctrico 3.76, se obtiene el siguiente resultado:
3
2
Lerℑm {i *e( e jθ i r )}+ τ m = J
dω m
+ α fric.ω m ⇒
dt
dω
3
i *e .i er }+ τ m = J m + α fric.ω m
2 Lerℑm {
dt
3.84
En el nuevo modelo de la máquina de inducción, con las variables del rotor
expresadas en el sistema de referencia del estator, las ecuaciones dinámicas son
independientes de la posición angular θ. En cambio, las ecuaciones diferenciales
3.82, 3.83 y 3.84, son ahora dependientes de la velocidad angular del rotor ω m . Esta
dependencia reduce la rapidez con la que cambian los parámetros que definen el
modelo dinámico. Además, la velocidad mecánica es constante durante la
operación en régimen permanente. Incluso, cuando se considera como hipótesis
que las constantes de tiempo eléctricas y mecánicas son muy diferentes, se puede
desacoplar la ecuación correspondiente al puerto mecánico, de las ecuaciones que
- 45 -
representan el comportamiento de los puertos eléctricos. Como el problema
eléctrico resultante es lineal, se puede resolver mediante una integración analítica
del sistema de ecuaciones diferenciales, utilizando la técnica de los autovalores y
autovectores o la transformada de Laplace [44,45,64].
Al reflexiona sobre el alcance de la transformación anterior, surge una
posible duda sobre la razón de peso que conduce a la eliminación de la posición
angular θ , cuando se refieren todas las variables del modelo al sistema de
referencia del estator. La respuesta a este cuestionamiento es interesante, la razón
fundamental no reside en la selección de un determinado sistema de referencia,
sino en el hecho de utilizar el mismo sistema de referencia para describir a todas las
variables del modelo. De hecho, es posible definir un sistema de referencia
arbitrario y expresar todas las variables en el nuevo sistema. El resultado de esto
es un modelo más general que el anterior, y completamente independiente de la
posición angular θ .
El sistema arbitrario de referencia se puede representar mediante un eje que
se ubica adelantado en un ángulo arbitrario δ , con respecto al eje magnético de la
fase “a” del estator de la máquina. Para transformar cualquier vector espacial
expresado en el sistema de referencia del estator es suficiente con multiplicarlo por
el número complejo e − jδ . Si el vector espacial está referido al sistema de referencia
del rotor, para expresarlo en el sistema de referencia arbitrario, primero es
necesario referirlo al sistema estatórico multiplicando por el término e jθ , y después
por e − jδ para expresarlo finalmente en el nuevo sistema. Esta idea conduce a las
siguientes definiciones de los vectores espaciales y de sus derivadas en el sistema
de coordenadas arbitrarias:
δ
j (θ −δ )
iδe ≡ i e e− jδ
i r ≡ i r e
δ
δ
− jδ
j (θ −δ )
v r ≡ v r e
v e ≡ v e e
diδe di e − jδ
=
e + jδ$iδe
dt
dt
diδr di r j (θ −δ )
=
+ j (θ$ − δ$ )iδr
e
dt
dt
3.85
Aplicando las definiciones 3.85, en la expresión 3.74, correspondiente a la
ecuación del estator en vectores espaciales, se obtiene el siguiente resultado:
- 46 -
v e e − jδ = Re i e e − jδ + ( 32 Le + Lσ e ) e − jδ
di e 3
di
+ 2 Ler e j (θ −δ ) r + j 32 ω m Ler e j (θ −δ ) i r ⇒
dt
dt
δ
δ
di
di
vδe = Re iδe + ( 32 Le + Lσ e ) e + jδ$iδe + 32 Ler r − j (θ$ − δ$ )iδr + j 32 ω m Ler iδr ⇒
dt
dt
δ
δ
di
di
vδe = Re iδe + ( 32 Le + Lσ e ) e + 32 Ler r + jδ$ {( 32 Le + Lσ e ) iδe + 32 Ler iδr }
dt
dt
3.86
La ecuación del rotor 3.75, conduce al siguiente resultado:
e j (θ −δ ) v r = Rr i r e j (θ −δ ) + ( 32 Lr + Lσ r )
di
di r j (θ −δ ) 3
+ 2 Ler e− jδ e jθ e − j 32 ω m Ler i e e − jδ e jθ ⇒
e
dt
dt
δ
δ
di
di
vδr = Rr iδr + ( 32 Lr + Lσ r ) r − j (θ$ − δ$ )iδr + 32 Ler e + jδ$iδe − j 32 ω m Ler iδe ⇒
3.87
dt
dt
diδ
diδ
vδr = Rr iδr + ( 32 Lr + Lσ r ) r + 32 Ler e + j (δ$ − θ$) {( 32 Lr + Lσ r ) iδr + 32 Ler iδe }
dt
dt
Por último, el par eléctrico de la expresión 3.76, es:
Ler ℑm{i *ee jδ e − jδ (e jθ i r )}+ τ m = J
dω m
+ α fric.ω m ⇒
dt
dω
3
(i e e− jδ )* (e j ( θ −δ )i r )}+ τ m = J m + α fric.ω m ⇒
2 L erℑm {
dt
dω
3
(i δe )* i rδ }+ τ m = J m + α fric.ω m
2 Lerℑm {
dt
3
2
3.88
En el modelo de la máquina de inducción definido por las ecuaciones
diferenciales 3.86, 3.87 y 3.88, es suficiente con asignar propiedades arbitrarias al
ángulo δ , ο a su derivada correspondiente δÝ, para obtener diferentes sistemas de
referencia. Asignando a la referencia δ y a su derivada δÝ valores nulos, se obtiene
el sistema de ecuaciones diferenciales 3.82, 3.83 y 3.84, donde se considera como
referencia al eje magnético de la fase “a” del estator. Las ecuaciones diferenciales
3.86 y 3.87 pueden representarse mediante el circuito equivalente que se ilustra en
la figura 3.7.
Este circuito equivalente está compuesto por resistencias,
inductancias y fuentes de tensión dependientes de los vectores espaciales de las
corrientes del estator y del rotor.
- 47 -
L'e − Mer'
Re
L'r − Mer'
i δe
Rr
i rδ
v δe
Mer'
j δÝλ δe
j(δÝ− θÝ)λrδ
+
+
λ δe L'e
δ= '
λ r M er
v rδ
M er' iδe
L'r iδr
Fig. 3.7 Circuito equivalente de la máquina de inducción en el sistema de
coordenadas arbitrarias
El circuito equivalente de la figura 3.7, además de representar
dinámicamente el comportamiento de las tensiones y corrientes de la máquina de
inducción, también puede ser utilizado para determinar el par electromagnético.
Si se evalúa la potencia real total entregada a las dos fuentes dependientes del
modelo, se obtiene la potencia instantánea transmitida al eje de la máquina. El
cociente entre la potencia instantánea transmitida al eje mecánico y la velocidad
angular mecánica, define el par electromagnético instantáneo.
El par
electromagnético se ha expresado anteriormente en el primer término de la
ecuación diferencial 3.88. Realizando estas operaciones, se obtiene el siguiente
resultado:
{
}
}
}
peje (t ) = ℜe jδ$ ( 32 Le + Lσ e ) iδe + 32 Ler iδr (iδe )* + j (δ$ − θ$) ( 32 Lr + Lσ r ) iδr + 32 Ler iδe (iδr )* =
= ℑm δ$ ( 32 Le + Lσ e ) iδe (iδe )* + 32 Ler iδr (iδe )* + (δ$ − θ$) ( 32 Lr + Lσ r ) iδr (iδr )* + 32 Ler iδe (iδr )* =
= 32 Ler ℑm δ$ iδr (iδe )* + (δ$ − θ$) iδe (iδr )* = 32 Ler ℑm δ$ iδr (iδe )* + iδe (iδr )* − θ$ iδe (iδr )* =
= 32 θ$ Ler ℑm iδr (iδe )* = ω mτ e
{
{
}
{
{
}
3.89
El circuito equivalente de la máquina de inducción, en vectores espaciales y
con sus coordenadas expresadas en un sistema de referencia arbitrario, es similar
al circuito equivalente clásico de la máquina de inducción, válido solamente para
- 48 -
el análisis del régimen permanente equilibrado. Las diferencias más importantes
entre estos dos modelos, se centran principalmente en: la presencia de fuentes de
tensión en las mallas que representan los circuitos del estator y del rotor, la validez
del modelo vectorial en el análisis de la operación transitoria y dinámica de la
máquina de inducción, el tipo de variables que utilizan, y la falta de la resistencia
en paralelo con la reactancia de magnetización que modela las pérdidas de
histéresis y Foucault en el hierro. Si la velocidad angular del sistema arbitrario de
referencia es cero, la fuente de tensión de la malla estatórica desaparece. En este
caso, la única fuente existente se encuentra en la malla rotórica. Es interesante
(1 −s )
s
del modelo clásico de la máquina, también
destacar que la resistencia R r
representa una fuente de tensión dependiente de la corriente del rotor. La
resistencia de pérdidas en el hierro se puede incluir en el modelo vectorial de
coordenadas arbitrarias con las mismas consideraciones e hipótesis realizadas en el
desarrollo del modelo clásico.
Para ilustrar más las semejanzas existentes entre los dos modelos, se puede
particularizar el circuito equivalente en coordenadas vectoriales arbitrarias para las
condiciones de operación del convertidor en régimen permanente equilibrado. En
régimen permanente, las tensiones y corrientes primitivas de la máquina son
trifásicas, sinusoidales, balanceadas y de secuencia positiva. La velocidad angular
del eje mecánico permanece constante cuando la máquina opera en este régimen.
El vector espacial de la tensión del estator resulta ser:
ve =
=
1
3
Ve 1 e
2
3
j 23π
cos(ω et )
1 e
e 2Ve cos(ω et − 23π ) =
cos(ω et − 23π )
1
1
jω t − j 2π − jω t j 2π
j 43π
e e e e 3 + e e e 3 = 3Ve e jωet
− j 43π
j 43π
e
e
j 23π
j 43π
3.90
El vector espacial de la tensión del rotor es:
vr =
2
3
1 e
j 23π
e
j 43π
La corriente del estator es:
- 49 -
0
2Vr 0 = 0
0
3.91
ie =
2
3
1 e
j 23π
e
j 43π
cos(ω et − φe )
2 I e cos(ω et − φe − 23π ) = 3I e e j (ωet −φe )
cos(ω et − φe − 43π )
3.92
Y el vector espacial de la corriente del rotor resulta ser:
ir =
2
3
1 e
j 23π
e
j 43π
cos(ω r t − φr )
2 I r cos(ω r t − φr − 2π ) = 3I r e j (ωr t −φr )
3
4
cos(ω r t − φr − 3π )
3.93
Expresiones donde es necesario cumplir las relaciones siguientes:
ωr = ωe − ω m
ω$ e = ω$ r = ω$ m = 0
3.94
Los vectores espaciales definidos entre las expresiones 3.90 a 3.93, cuando se
transforman al sistema de referencia arbitraria, son:
i eδ = 3 I e e j (ω e t −φ e −δ )
δ
j( ω et − φ r − δ )
i r = 3 Ir e
v δe = 3 V e e j ( ωe t − δ )
δ
vr = 0
3.95
Como la fuente de excitación de la máquina es sinusoidal, la solución
particular o de régimen permanente del modelo, también debe ser sinusoidal. Para
obtener la solución particular del problema, se sustituyen los cuatro vectores
espaciales de la expresión 3.95, en las ecuaciones diferenciales 3.86, 3.87 y 3.88.
Una vez que se simplifican los factores comunes, se obtiene el resultado siguiente:
Ve = Re + j (ω e + δ$ )( 32 Le + Leσ ) Ie + j (ω e + δ$ ) 32 Ler Ir
Vr = 0 = Rr + j (ω r + δ$ )( 32 Lr + Lrσ ) Ir + j (ω r + δ$ ) 32 Ler Ie
τ e = 3. 32 Ler I e .I r .sen(φe − φr )
3.96
Las variables negrillas con la barra superior representan los fasores tradicionales.
El módulo de estos fasores es igual al valor efectivo de la variable sinusoidal
primitiva. Los fasores que aparecen en la solución particular del modelo dinámico
son:
- 50 -
Ve = V ee j( ω e t )
j0
Vr = 0. e
Ie = I ee j (ω e t −φ e )
j ( ωe t − φ r )
Ir = I re
3.97
Si se escoge un sistema de referencia arbitrario, tal que δÝ= 0 , y se dividen
todos los términos de la ecuación rotórica, del sistema de ecuaciones diferenciales
3.96, por la definición del deslizamiento s = ω r / ω e , se obtiene nuevamente el
modelo clásico de la máquina de inducción:
R + jω e ( 32 Le + Leσ )
Ve e
=
jω e 32 Ler
0
jω e 32 Ler
Ie
Rr
3
+ jω e ( 2 Lr + Lrσ ) Ir
s
3.98
El par eléctrico se obtiene al despejar del sistema de ecuaciones 3.98, la
relación entre los fasores correspondientes a las corrientes del estator y rotor, y
reemplazando posteriormente esta relación en la expresión del par obtenida en la
ecuación 3.96:
Rr
Rr
+ jω e ( 32 Lr + Lσ r )
Ie
I
s
=− s
⇒ e sen(φe − φr ) =
⇒
ω e 32 Ler
Ir
jω e 32 Ler
Ir
τ e = 3. 32 Ler .I e .I r .sen(φe − φr ) =
ωe
3
.I r2 .
3.99
Rr
s
El par electromagnético calculado mediante los vectores espaciales definidos en el
sistema de coordenadas arbitrarias, coincide con el obtenido del circuito
equivalente clásico, cuando se restringe el análisis al régimen permanente,
sinusoidal y equilibrado.
El modelo vectorial arbitrario ofrece una gran flexibilidad en la modelación
dinámica y transitoria de la máquina de inducción. Es independiente de la
posición angular θ, e introduce un grado de libertad adicional que es de gran
utilidad para acelerar la evaluación numérica del problema. La selección adecuada
de la referencia, determina la rapidez de variación de las variables transformadas.
Si la referencia tiene una velocidad similar o igual a la de aquellas variables que se
están transformando, en el sistema transformado las variables son constantes o su
variación es muy lenta. Esto reduce el número de pasos de discretización
necesarios por los algoritmos de integración numérica para mantener una
determinada precisión.
- 51 -
Otra característica importante del sistema de coordenadas vectoriales
arbitrarias es la independencia absoluta del modelo con respecto al valor de los
parámetros de la máquina. Algunos sistemas de coordenadas se fundamentan en
la selección de algunas variables, de muy difícil medición u observación, como
referencias. En estos casos es imprescindible asegurar la determinación precisa de
los parámetros del modelo, para evaluar por medio de cálculos y mediciones
indirectas de otras variables, la posición instantánea de la referencia deseada.
Desafortunadamente, este proceso está repleto de posibles errores, imprecisiones y
retardos. La variabilidad de los parámetros con la temperatura o el grado de
saturación, y el tiempo requerido por los computadores convencionales para
realizar los cálculos necesarios, limitan la aplicación satisfactoria u óptima de estos
modelos. La representación de las ecuaciones de la máquina de inducción
mediante vectores espaciales con referencia arbitraria pueden resolver muchos de
los problemas que se presentan en los procesos de estimación de estado utilizados
en los controladores de par, velocidad o posición de estos convertidores.
El control preciso del par eléctrico es un requisito indispensable para el
ajuste rápido de la velocidad o posición de la máquina de inducción. El desarrollo
de modelos orientados al control automático de la máquina de inducción, está
fundamentado en la posibilidad de independizar las variables productoras del par.
En la próxima sección se presenta uno de los modelos de la máquina de inducción
que más difusión tiene en la actualidad y que resuelve este interesante problema.
3.8
Transformación de las ecuaciones de la máquina de inducción representadas
mediante vectores espaciales al sistema ortogonal de coordenadas de campo
orientado.
En la sección anterior se presentó un modelo de la máquina de inducción,
que es válido en cualquier régimen de operación, posee un circuito equivalente
similar al circuito equivalente clásico utilizado universalmente para el análisis
equilibrado y sinusoidal del régimen permanente, y además es independiente de la
posición angular θ del eje mecánico. Sin embargo, en este modelo las variables que
producen el par electromagnético se encuentran estrechamente acopladas. Este
hecho complica el control del par eléctrico, de la velocidad angular mecánica o de
la posición del eje de la máquina. No es evidente el impacto que tienen unas
variables del modelo sobre el comportamiento de las otras, y resulta complicado
- 52 -
establecer relaciones entre las consignas del controlador que garanticen una
respuesta rápida del sistema.
El ideal desde el punto de vista de la controlabilidad del accionamiento, lo
representa la máquina de corriente continua con excitación independiente. En una
bobina se produce el campo, y en la otra la corriente necesaria para producir el par
[53]. Adicionalmente el valor del par es casi siempre el máximo posible debido a la
ortogonalidad existente entre las fuerzas magnetomotrices de los dos circuitos.
La máquina de inducción convencional, se excita normalmente inyectando
corrientes en el estator. En el rotor se inducen fuerzas electromotrices debidas al
corte de sus conductores por la fuerza magnetomotriz estatórica. Las corrientes
del rotor producen una nueva fuerza magnetomotriz que iteractúa con la fuerza
magnetomotriz del estator para producir el par eléctrico. Un concepto interesante
puede ser controlar la corriente y/o la tensión en cada bobina, de tal forma que las
variables que producen el par puedan ser controladas independientemente. Esta
idea es central en el desarrollo del modelo de la máquina de inducción en
coordenadas de campo orientado [7].
Debido a que la corriente del rotor no es accesible a la medida u observación
directa, es conveniente eliminar o reducir esta variable del modelo. Por otra parte,
la inmensa mayoría de las máquinas de inducción convencionales tienen
cortocircuitadas las barras o bobinas equivalentes del rotor. En todos estos casos la
fuente de tensión independiente del rotor está definida y es cero.
En las ecuaciones de la máquina de inducción en vectores espaciales, las
derivadas de las corrientes están acopladas a través de la matriz de inductancias.
Si se calculan los autovalores de esta matriz se obtiene el siguiente resultado:
jθ
3
( 3 L + Lσ e ) − γ i
2 Ler e
det 2 3e
= 0⇒
− jθ
3
+
−
γ
L
e
L
L
(
)
σ
er
r
r
i
2
2
2
3
3
3
3
γ i − ( 2 Le + 2 Lr + Lσ e + Lσ r ) γ i + ( 2 Le .Lσ r + 2 Lr .Lσ e + Lσ e .Lσ r ) = 0
3.100
Con los dos autovalores que resultan de la ecuación característica 3.100, se
obtienen los autovectores de la matriz de inductancias:
- 53 -
( 23 Le + Lσ e ) − γ 1,2
− jθ
3
2 Ler e
(
k11
k
21
k11
Lr + Lσ r ) − γ 1,2 k21
3
2
3
2
Ler e jθ
k12 A
=
k22 Be − jθ
B.e jθ
A
k12 0 0
=
⇒
k22 0 0
3.101
Para obtener una transformación vectorial que desacople las derivadas de
las corrientes del modelo, se puede utilizar cualquiera de las dos filas de la matriz
de autovectores 3.101. La nueva transformación, puede ser la siguiente:
im = A ie + Be ir
jθ
3.102
Esta corriente, denominada por algunos autores corriente de magnetización
modificada [7,53,75], tiene dos grados de libertad que pueden ser utilizados para
simplificar el sistema de ecuaciones diferenciales que determina el
comportamiento dinámico de la máquina de inducción. En primer lugar se puede
despejar la corriente del rotor de la expresión 3.102 y sustituirla en el sistema de
ecuaciones 3.77, obteniéndose el siguiente resultado:
v e Re 0
ie
=
B −1e − jθ i − A i +
(m
e )
0 0 Rr
τ = L'er ℑm i*e . B −1 ( i m − A i e )
e
{
}
L'
p ' e− jθ
Ler e
ie
L'er e jθ
B −1e− jθ i − A i
'
(m
Lr
e )
⇒
ve
Re
0
i e L'e − AB −1 L'er
=
$ ( L' B − AL' ) R − jθ$L' i + L' B − AL'
θ
R
A
j
−
−
0
r
er
r
r
r
r
m er
−1
'
*
τ e = Ler B ℑm i e .i m
{
}
L'er B −1 i e
p
L'r i m
3.103
Es evidente en el sistema 3.103, que la selección apropiada de los valores de
los coeficientes A y B, puede simplificar notablemente estas ecuaciones. Tal vez la
simplificación más importante ocurre cuando se escogen los valores que anulan el
coeficiente asociado con la derivada de la corriente del estator, en la ecuación del
rotor. En ese caso, se tiene que:
L'erB − AL'r = 0 ⇒
AB −1 = L'er / L'r
3.104
Sustituyendo la condición 3.104 en el sistema de ecuaciones diferenciales
3.103, se obtiene el siguiente resultado:
- 54 -
2
v R
0
i e L'e − ( L'er ) / L'r
e = e
0
$ ' +
0
− Rr A Rr − jθ Lr i m
−1
'
*
τ e = Ler B ℑm i e .i m
{
}
L'er B −1 i e
p
L'r i m
3.105
Una simplificación menor aparece cuando se asigna el valor unitario al coeficiente
A. Las ecuaciones de la máquina de inducción en este caso son:
2
v R
0
i e L'e − ( L'er ) / L'r
e
e
=
+
'
0 − Rr Rr − jθ$Lr i m
0
2
L'er )
(
τ e =
ℑm {i*e .i m }
'
L
r
(L )
/ L'r i e
p
'
i
Lr
m
2
'
er
3.106
Además, la corriente de magnetización modificada queda definida entonces por la
relación vectorial siguiente:
i m ≡ ie +
L'r jθ
jδ
' e i r = im e
Ler
3.107
El último paso consiste en representar el sistema de ecuaciones diferenciales
3.106, en un sistema de referencia solidario con la dirección de la corriente de
magnetización modificada. Para esto, se multiplican las ecuaciones de tensión por
el término de rotación e − jδ . Los diferentes vectores espaciales, y sus derivadas
quedan definidos según las siguientes expresiones:
v e .e − jδ ≡ vd + j vq
− jδ
i e .e ≡ id + j iq
− jδ
i m .e = im
− jδ
$
e . pi e = pid + j piq + j δ ( id + j iq )
− jδ
e . pi m = pim + j δ$ im
3.108
Realizando estas sustituciones en el sistema de ecuaciones diferenciales
3.106, y agrupando los resultados en parte real y parte imaginaria, se obtiene el
siguiente modelo de la máquina de inducción:
- 55 -
vd
v
q
0
0
τ e
(
)
+ ( L − Lˆ ) .δ$.i
= Reid + Lˆe pid + L'e − Lˆe pim − δ$ Lˆe iq
= Re .iq + Lˆe . piq
'
e
e
= − Rr .id + Rr .im + L'r . pim
= − R i − θ$.L' .i + δ$. L' .i
(
r q
) {
} (
r m
r
m
m
+ δ$.Lˆe .id
3.109
)
= L'e − Lˆe ℑm i*e .i m = Lˆe − L'e .iq .im
donde:
Lˆe ≡ L'e
(L )
−
2
'
er
L'r
= ( Le + Lσ e ) −
3
2
( 32 Ler )
( 32 Lr + Lσ r )
2
3.110
El sistema de ecuaciones 3.109, está constituido por cinco ecuaciones. Las
dos primeras determinan las componentes directa y cuadratura de la tensión del
estator en el sistema de referencia definido por la posición espacial de la corriente
de magnetización modificada. Las ecuaciones tercera y cuarta están asociadas con
el circuito rotórico. La quinta ecuación determina el par eléctrico, en función de las
nuevas variables. Hay que destacar en este punto, que las ecuaciones tres y cuatro
son independientes de las derivadas de las corrientes del estator. En otras
palabras, si se utiliza como variable independiente la corriente del estator, las
ecuaciones primera y segunda no son necesarias para definir la dinámica del
sistema. Reescribiendo las ecuaciones tercera y cuarta se obtiene el siguiente
resultado:
T r .pim + im = i d
δ$ = θ$ +
donde:
iq
Tr .im
L'r ( 32 Lr + Lσ r )
=
Tr =
Rr
Rr
3.111
3.112
3.113
La ecuación diferencial de primer orden 3.111, determina el comportamiento
del módulo de la corriente de magnetización im , en función de la componente
directa de la corriente del estator - según la dirección del vector espacial i m -. Esta
ecuación es semejante a la del circuito de campo de una máquina de corriente
continua de excitación independiente.
La expresión 3.112, determina el
comportamiento dinámico de la dirección del vector espacial i m . Si se observa con
- 56 -
detenimiento, esta expresión es equivalente a la ecuación del circuito de armadura
'
de la máquina de corriente continua. El producto δ$. Lr .im corresponde con la
'
fuerza electromotriz aplicada, el producto θ$.L .i con la tensión inducida, y R i
r m
r q
representa la caída en el circuito de armadura. La analogía es completa cuando se
compara la ecuación del par eléctrico, en este sistema de coordenadas se
'
determina a través del producto de la constante Lˆ e − Le , por la corriente de campo
(
)
im , y por la corriente de armadura iq , tal como sucede en la máquina de corriente
continua.
La posibilidad de controlar la corriente del estator de la máquina de
inducción mediante fuentes electrónicas de potencia, simplifica los accionamientos
a velocidad variable. Esto se debe principalmente a que los modelos del
convertidor en campo orientado producen el par eléctrico mediante dos variables
independientes. Por una parte el módulo de la corriente de magnetización im se
puede controlar ajustando la componente directa de la corriente del estator id . Por
la otra, el par eléctrico depende directamente de la componente en cuadratura iq .
El modelo de la máquina de inducción en coordenadas de campo orientado
desacopla las variables que producen el par eléctrico. Sobre este modelo se pueden
aplicar las técnicas de control clásico de las máquinas de corriente continua [53].
En la máquina de corriente continua, el campo debe ajustarse al mayor valor
permisible por la saturación del material ferromagnético, y por las especificaciones
nominales de la máquina. Esto garantiza retardos mínimos en la respuesta de los
accionamientos a velocidad variable. El campo es un circuito que posee una
constante de tiempo lenta, por esta razón no es práctica su utilización como
regulador rápido del par eléctrico. Por otra parte, el circuito de armadura posee
constantes de tiempo mucho menores que facilitan el ajuste rápido de la corriente
correspondiente. Por estas razones, en la máquina de inducción se controla el flujo
mediante el ajuste de la componente directa de la corriente estatórica id , que define
la corriente de magnetización im . La componente en cuadratura iq , se utiliza para
controlar el par, la velocidad o la posición de la máquina.
Desde el punto de vista del control, el modelo de campo orientado tiene
múltiples ventajas: es simple, aplicable en controladores electrónicos prácticos, y
tiene una interpretación física concreta. Sin embargo, el modelo de campo
orientado de la máquina de inducción tiene algunos inconvenientes que limitan o
- 57 -
restringen su aplicación. El primer problema se debe a la necesidad de
transformar las variables externas y medibles de la máquina a una referencia que
en principio no se conoce. Esta referencia tiene que ser determinada a partir de la
solución del propio modelo, o medida utilizando transductores especiales
ubicados en el interior de la máquina. La solución del problema de estimación de
variables internas parte de la hipótesis del conocimiento, más o menos preciso, de
los parámetros del modelo. Esto constituye el segundo problema importante, los
parámetros de la máquina de inducción varían durante su operación. Esto
repercute en la aparición de errores importantes en la dirección estimada para la
referencia del modelo. Evidentemente, el resto de las variables expresadas en esta
referencia, también son erróneas o imprecisas. Por último, la velocidad de la
posición angular δ$ , depende del inverso de la corriente de magnetización im . En
otras palabras, cuando la corriente de magnetización es nula, la referencia de la
posición angular δ , queda indefinida, y el modelo no puede ser evaluado
numéricamente.
Durante estos instantes es imprescindible cambiar
momentáneamente la referencia para salvar la discontinuidad y poder continuar
con la evaluación del modelo.
La selección de una constante diferente a la obtenida en 3.104 para definir la
corriente de magnetización, podría simplificar la ecuación del estator o el conjunto
completo de ecuaciones. Esta constante en particular, simplifica la ecuación del
rotor, y desacopla la dependencia de las derivadas de la corriente del estator en
estas expresiones. El costo de esta simplificación es la dependencia de la referencia
con los parámetros, y por consiguiente con las condiciones de operación de la
máquina.
En la actualidad existen varias alternativas para obtener fuentes de corriente
independientes y controlables, requeridas por estas estrategias. Los sistemas de
adquisición de datos, y el procesamiento en tiempo real de la información, hacen
posible una determinación precisa de la referencia y de las consignas de control.
Para este fin es necesaria la aplicación de las técnicas de estimación de estado y de
estimación paramétrica. En la figura 3.8 se ilustra el esquema en diagrama de
bloques que representa el modelo de la máquina de inducción en coordenadas de
campo orientado.
- 58 -
Le ' − Lˆe
1
p im
Tr
Lˆe
δ
š
.
iq
va
vb
vc
2
3
12 π
ej 3
4π
j 3
e
vα
vd +
1⋅ 1
R e Te p +1
- +
t
e
−j δ
vq +
vβ
δ
-
im
+ id
id
1
1
⋅
Re Te p +1
iq
δ
im
.
+
÷
1
Tr
θ
Lˆe
š
δ
.
š
δ
.
iq
š
im
Le '− Lˆe
1
δ
+
.
id
Le ' − Lˆe
im
im
1
Tr p +1
p
τe
im
Fig. 3.8 Modelo de la máquina de inducción en variables de campo orientado
3.9
Análisis comparativo de las diferentes técnicas de modelación de la
máquina de inducción.
En las secciones precedentes se ha presentado en forma resumida la
aplicación de diferentes técnicas para la modelación de la máquina de inducción.
Las leyes físicas, la conservación de la energía y los principios variacionales más
generales, permiten la determinación de modelos matemáticos que reproducen con
diferentes grados de aproximación el comportamiento dinámico o estático de esta
importante familia de convertidores electromecánicos.
Los modelos en coordenadas primitivas tienen una aplicación limitada
debido al esfuerzo numérico requerido por la solución. Los modelos en régimen
permanente pueden solventar parcialmente estos problemas, pero es conveniente
utilizar una representación fasorial de las variables para simplificar los cálculos.
La transformación de coordenadas es un método eficaz para la determinación de
modelos simples de la máquina de inducción. Las transformaciones pueden o no
tener interpretaciones físicas concretas, pero son de gran utilidad en la medida que
desacoplan, independizan o simplifican las relaciones entre las variables. La
transformación de componentes simétricas es una herramienta fundamental para
- 59 -
este fin debido a las simetrías cíclicas que presenta la matriz de inductancia de la
máquina.
Los vectores espaciales son una expresión simplificada de la
transformación de componentes simétricas. Las transformaciones a sistemas de
referencia arbitraria o a la referencia de campo orientado, ofrecen un método
conveniente para eliminar la dependencia en la posición angular en las variables
de estado.
El sistema de referencia arbitrario elimina la dependencia en la posición
angular del rotor y es independiente del comportamiento dinámico o transitorio
del convertidor, así como de sus respectivos parámetros. Esta es una ventaja muy
útil cuando se plantea la necesidad de obtener controles universales para máquinas
con diferentes parámetros característicos. El sistema de referencia por campo
orientado depende de los parámetros y del comportamiento instantáneo de la
máquina, pero simplifica notablemente el modelo y hace compatible el control de
la máquina de inducción con las técnicas desarrolladas para el accionamiento de
las máquinas de corriente continua.
En definitiva, se puede asegurar que cada uno de los modelos tiene un
rango de aplicación que debe ser delimitado para evitar posibles problemas.
Desde el circuito equivalente clásico, pasando por las interpretaciones del
diagrama de círculo, o las representaciones más modernas de la máquina de
inducción, pueden ser de utilidad a cada una de las personas o sistemas que
utilizan estos convertidores. Es importante destacar la necesidad de conocer en
todo momento las hipótesis que limitan cada modelo para definir con precisión su
ámbito de aplicación. Para calibrar el ajuste de una protección no es necesario, y
probablemente tampoco es conveniente, utilizar el mismo modelo empleado por el
ingeniero de control en la memoria de un accionamiento moderno de alta precisión
y velocidad de respuesta.
No ha sido el objetivo de este capítulo presentar un resumen de todos los
modelos de la máquina de inducción. Tampoco se pretende ilustrar todas y cada
una de las técnicas básicas utilizadas para esta finalidad. Por el contrario, la
intención fundamental es la de ofrecer un abanico de posibilidades que permiten
afrontar el problema con diversas profundidades y conjuntos de hipótesis. Es
probablemente que no exista el mejor método de modelación, pero siempre es
necesario conocer la técnica más adecuada o conveniente para la solución de un
determinado problema.
- 60 -
En la medida que avanza la tecnología moderna serán necesarios más y
mejores modelos. Algunas hipótesis ampliamente aceptadas hoy en día, pueden
ser burdas aproximaciones mañana. También es posible que suceda lo contrario, el
exceso de refinamiento puede dejar de ser necesario. Nuevas herramientas
matemáticas y numéricas pueden y deben sustituir las actuales ideas, cada día es
más importante la unificación de conocimientos de diferentes áreas en la solución
de los problemas. Es necesario luchar contra la ultra especialización que puede
retardar o limitar la búsqueda de nuevos enfoques, pero al mismo tiempo es
indispensable profundizar en el conocimiento teórico y práctico de cada área. Tal
vez esto sea una contradicción, tal vez un reto que afrontar. El futuro de la
tecnología depende de las máquinas, seguramente durante el próximo siglo los
convertidores electromecánicos continuarán siendo muy importantes para el
desarrollo de la humanidad. Es necesario desarrollar más y mejor esta área del
conocimiento. No todo está dicho, es necesario recorrer con firmeza este camino.
- 61 -