ARQUITECTURA ORGANICA
La arquitectura orgánica, también llamada “organicismo”, nació en EU cerca del año 1940 cuando se produjo una crisis del racionalismo, aunque acepta muchas de las soluciones técnicas aportadas por éste. El estilo orgánico es un movimiento arquitectónico que se deriva del funcionalismo o racionalismo y que puede considerarse promovido fundamentalmente por los arquitectos escandinavos en la década 1930-40 y por el arquitecto estadounidense Frank Lloyd Wright. El movimiento acepta muchas de las premisas del racionalismo, como son la planta libre, el predominio de lo útil sobre lo meramente ornamental, la incorporación a la arquitectura de los adelantos de la era industrial, pero procura evitar algunos de los errores en que cae el racionalismo y aportar nuevos valores a la arquitectura.
Este estilo fue una forma de ir en contra la escuela de Bauhaus. Para la arquitectura orgánica, las construcciones no deben desafiar a la naturaleza, sino que ser una proyección de ésta. La principal premisa es que el arquitecto se pone al servicio de la obra que ejecuta, interpretando a los usuarios, al entorno, los materiales, con amor y humildad. El arquitecto internaliza que él y su obra son parte de un todo y que sin ese todo él no es nada.
Los materiales utilizados son fundamentalmente naturales (arcilla, piedra, madera) y, ojalá, del mismo lugar en donde se hace la obra. La idea es utilizar materiales en su estado más natural posible. Si no es el caso, la opción es elementos reciclados o que hayan demandado un bajo nivel de energía en su fabricación.
Otra característica de la arquitectura orgánica es que la forma de las construcciones debe estar en armonía con el entorno natural y aceptar las modificaciones que éste induzca.
LA CASA DE LA CASCADA
La Casa de la Cascada o también conocida como Casa Kaufmann.
La Casa de la Cascada, la Casa Mito, la obra residencial por excelencia del siglo XX, es el efectismo máximo en obra de arquitectura, de gran belleza, que aparentemente y debido al impacto buscado por Wright nos deslumbra pero que precisamente por eso, y debido a su interés, debemos de tratar de analizar con perspectiva no artística, sino desde la integridad de la buena arquitectura y su eficacia.
Partiendo de una gran admiración tanto por el arquitecto como por la belleza de la obra, es por lo que la emplazamos como Obra de Arte y por lo que le hace daño a la Historia de la Arquitectura si se la analiza como Obra Arquitectónica, entendiendo que esta solo puede ser aquella que es poética, suma indisoluble de Verdad (constructiva), Bondad (funcional) y Belleza (razón geométrica).
El trinomio paisaje, agua y arquitectura evoca necesariamente a la Casa de la Cascada o Fallingwater, la casa que Frank Lloyd Wright diseñara para el comerciante y filántropo Edgar J. Kaufmann en 1935, en Pennsylvania, Estados Unidos.
La Casa de la Cascada, la residencia privada más famosa del siglo XX, pretende armonizarse con su entorno natural proponiendo una sucesión de volúmenes que dan la impresión de levitar sobre el agua. Como dijera Franklin Toker en su Fallingwater Rising, “Visitar la Casa de la cascada tiene poco que ver con arquitectura o ingeniería: la calidad que percibimos aquí es esencialmente espiritual “.
CONCEPTO
¨Japón aparece ante mí como lo más romántico y artístico, el país más inspirado en la naturaleza de todo el planeta. Si las estampas japonesas fueran sacadas de mi educación, desconozco que dirección pudo haber tomado” Frank Lloyd Wright, Autobiografía.
La influencia de la cultura oriental en Wright tiene principalmente dos vertientes, la primera en cuanto a la relación del edificio con su entorno, y la segunda en el valor de su espacio interior.
El diseño de la casa es una clara muestra de la arquitectura naturalista, ya que todas las decisiones tomadas para su construcción van encaminadas a integrar la edificación con el paisaje y hacer que la obra se convierta en un elemento natural más del entorno, en plena armonía con el mismo y el paso del tiempo.
Del terreno del lugar se extrajeron rocas que conforman mamposterías de la parte baja de las fachadas del edificio, colocadas en ese lugar para crear una progresión desde la roca natural del suelo hasta el hormigón de las partes altas. El resto de las fachadas es de color crema, color contrastante con el entorno verde o marrón (según la estación). Otro elemento contrastante de la casa son las formas ortogonales que tienen los voladizos y las paredes, imponiéndose así la casa como “arquitectura”.
La verticalidad del "corazón" de la casa contrasta con las terrazas y voladizos horizontales.
El edificio guarda una relación con el entorno que llega a ser de respeto o adaptación al medio. Así, los cimientos de la casa son las rocas del lugar, y algunas de ellas sobrepasan el ancho forjado de la primera planta asomándose junto a la chimenea. Gran parte de la casa está en voladizo, situado encima del arroyo. Los ingenieros de Wright no confiaron en que esa estructura fuese a aguantar y aconsejaron a Wright que rectificara. El orgullo de este arquitecto le permitió ceder poniendo únicamente unas piezas metálicas que sostienen al voladizo, el cual aún sigue en pie después de sufrir los efectos de un tornado. La casa, de dos plantas, se extiende horizontalmente con prominentes voladizos y terrazas, sin embargo, hay un núcleo que crece verticalmente, en el que está la chimenea. Tiene unas ventanas que se extienden verticalmente y que pasan de una planta a otra, mostrando así los forjados. Este núcleo vertical es el “corazón” de la Casa de la Cascada.
Serie de pérgolas.
En la cara norte de la casa, la opuesta a la que “vuela” sobre el arroyo, hay una serie de pérgolas a modo de toldo que transcurren desde la pared exterior hasta un talud de piedra que se eleva sobre el camino que conduce a la entrada. A este sitio se le conoce como el “bosque de la casa”. Dos pérgolas describen un arco que esquiva el tronco de dos árboles. Este recurso lo usó Wright para dejar claro el respeto a la naturaleza con el que está diseñada la casa. Las sombras que proyectan las pérgolas se asemejan a las de los troncos, efecto que hace que la sombra de la casa se difumine en las de los árboles. En el suelo de la terraza del despacho del señor Kaufmann se dejó dos huecos para que fuera traspasada por dos árboles. Éstos se murieron durante la construcción de la vivienda y no se llevaron a cabo dichas aberturas.
ESPACIOS
La casa de la Cascada consta de dos partes: La casa principal de los clientes que se construyó entre 1936-1938, y el cuarto de huéspedes que se completó en 1939.
En el interior de la Casa de la Cascada encontramos habitaciones singulares por su distribución, ubicación y acabados.
Escalera del agua.
Sala de estar y comedor.
Al entrar en la casa por la entrada principal, situada en la cara norte, accedemos a una pequeña habitación con función de recibidor ubicada bajo las escaleras que conducen a la segunda planta. Pasada dicha habitación se entra en la sala de estar, el habitáculo más grande de la casa desde el que se divisan unas vistas espléndidas del bosque que rodea la vivienda. Al entrar, frente por frente está el llamado “rincón de la música”, cuya etimología se desconoce, a la derecha está la zona con sofás y detrás del “rincón de la música” está la “escalera del agua”, llamada así porque baja a una pequeña plataforma que está junto al arroyo. Para bajar por ésta es necesario abrir unas mamparas correderas de vidrio. Los escalones de la “escalera del agua” están colgados de unos cables en tracción unidos al primer forjado.
Imagen de la ¨bola del vino¨.
Las paredes de la sala de estar, al igual que las del resto de la casa, son iguales que las de fuera, con partes de mampostería de piedra del lugar. El suelo es de piedra marrón y el techo tiene un diseño que envuelve a las lámparas incluidas en el mismo, diseñadas expresamente para esta casa. Según se entra al comedor, a mano derecha, está la chimenea, rodeada de piedras naturales que afloran del suelo. A su izquierda está la “bola del vino”, un contenedor rojo circular provisto de una bisagra que posibilita colocarlo sobre el fuego para calentar la bebida que contiene. A ambos lados de la habitación hay una puerta que conduce a una terraza. La del lado este tiene a su vez una escalera exterior que lleva a la terraza del dormitorio del hijo de los Kaufmann. A la izquierda de la chimenea está la puerta que conduce a la cocina, una habitación más pequeña que la sala de estar con muebles diseñados por Wright y exclusivos para esta casa, al igual que sucede con el resto de mobiliario de la vivienda. Entre la puerta de la cocina y la escalera está la mesa para comer, empotrada a la pared norte de la sala de estar.
En la segunda planta hay dos dormitorios, dos cuartos de baño y el despacho del señor Kaufmann, así como tres terrazas y las escaleras que conducen al mirador de la tercera planta. Según se accede a esta planta se entra en un pequeño pasillo que distribuye las dependencias. El dormitorio del hijo Kaufmann está sobre el “rincón de la música” de la primera planta, el cual tiene un pequeño cuarto de baño. Al este de este dormitorio está la terraza individual del hijo, en la que hay una escalera exterior que baja a la primera planta. Sobre la zona de sillones de la sala de estar está el dormitorio del matrimonio, el cual cuenta con un pequeño cuarto de baño y una extensa terraza que se extiende en voladizo en dirección sur. En la parte oeste de la segunda planta está el despacho del señor Kaufmann. En esta habitación hay una cama y una escalera que conduce al mirador que hay sobre la segunda planta. La chimenea asoma tanto en el dormitorio del matrimonio como en el despacho. En esta última habitación está la ventana acristalada corrida que se prolonga hasta la cocina. En la pared oeste del estudio hay una puerta que lleva a la terraza del mismo, en la que originariamente había dos árboles que atravesaban el forjado.
Las circulaciones dentro de la casa son oscuras, pasillos estrechos, para que los habitantes tengan una sensación de encierro en comparación con lo abierto a medida que se acercan hacia el exterior. Los techos de las habitaciones son bajos, con el fin de dirigir la mirada horizontal hacia afuera.
La belleza de estos espacios se encuentra en sus extensiones hacia la naturaleza, hecho con largas terrazas en voladizo. Éstas, que están proyectadas hacia afuera en ángulos rectos, aportan un elemento de escultura a la casa, aparte de su función.
ESTRUCTURA
El tipo de estructura de la casa es aporticado en hormigón, porque se observan columnas y vigas formando pórticos, y las placas, los elementos horizontales que se extienden como terrazas sobre la cascada, fueron realizadas con hormigón. Algunas paredes y otros elementos verticales que definen los espacios de la casa, al
igual que el piso, fueron revestidas de piedra nativa del lugar. Asimismo, se pueden observar algunos detalles de la casa en acero y otros en madera.
¿QUÉ HACE QUE SEA UNA ARQUITECTURA ORGANICISTA?
CONCLUSION (LAURA LOPEZ)
Creo que al diseñar edificios organicistas se debe tener en cuenta cómo será el mobiliario y el decorado del interior, asimismo en cómo se relaciona con el exterior, con la naturaleza. Un arquitecto tiene que pensar en la armonía que debe existir entre su obra y quienes la van habitar. En la Casa de la Cascada de Frank Lloyd Wright, se puede observar la cantidad de muebles y objetos ornamentales de madera, también los objetos en piedra: el piso que también es de piedra, los almohadones de piel y lana y las plantas interiores; todos estos elementos se relacionan con la misma casa hecha en piedra y con el paisaje, el bosque. Cabe destacar como la casa se convirtió en un mismo elemento junto con su entorno; el ambienta que la rodea, tal vez con tenga gran cantidad de formas orgánicas pero el hecho de que esté construida con materiales naturales yo creo que es suficiente para ser una arquitectura organicista.
Revista ARQHYS. 2012, 03. Arquitectura Organicista. Equipo de colaboradores y profesionales de la revista ARQHYS.com. Obtenido 09, 2017, de http://www.arqhys.com/arquitectura-organicista.html.
https://www.altonivel.com.mx/arquitectura-organica-armonia-entre-construccion-y-naturaleza/
Karina Duque. "Clásicos de Arquitectura: Casa en la Cascada / Frank Lloyd Wright" 24 sep 2010. ArchDaily México. Accedido el 24 Sep 2017. <http://www.archdaily.mx/mx/02-54599/clasicos-de-arquitectura-la-casa-en-la-cascada-frank-lloyd-wright>