Pese al apoyo de personajes relevantes como Elon Musk a Donald Trump, hay muchos CEO y fundadores de empresas de Silicon Valley que apoyan a Kamala Harris.
La entrada de Kamala Harris en la carrera presidencial fue un revulsivo para el partido demócrata, pero no ha sido suficiente para desempatar con Trump.
Biden abandonó a finales de julio. Pero Trump ha seguido hablando de su viejo oponente en entrevistas y discursos recientes y tilda a su dimisión de golpe de Estado.
Después de la Convención Nacional Demócrata, Kamala Harris está en "luna de miel" electoral, con las encuestas a favor y un Trump que no sabe cómo contraatacar.
En apenas 10 días, Harris ha conseguido más donantes que Biden en los 15 meses que duró su campaña de reelección. La candidata apela a generaciones más jóvenes.
Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos y candidata a las elecciones presidenciales, dio un discurso unificador durante la Convención Nacional Demócrata.
La relación entre Barack Obama, expresidente de Estados Unidos, y el antiguo vicepresidente (ahora presidente) Joe Biden no es tan amistosa como parece.
El equipo de redes sociales que dirige la campaña digital de Kamala Harris es el mismo de Biden, pero sus mensajes están siendo mucho más efectivos contra Trump.
Joe Biden ha dado una entrevista a la cadena de televisión estadounidense CBS. Ha dicho que sus compañeros demócratas le presionaron para que se retirase.
Una joven prisionera rusa que fue encarcelada por cambiar las etiquetas de los precios en los supermercados cuenta la historia de su liberación en el intercambio.
Trump está nervioso y ha vuelto a ser el candidato a la presidencia de siempre y eso está deteriorando sus opciones de alcanzar de nuevo la Casa Blanca.
Quedan 100 días para las elecciones en EEUU y todo está en el aire tras la entrada de Kamala Harris y la elección de J.D. Vance como candidato a vicepresidente.
Si gana, Donald Trump llevará a Estados Unidos, de nuevo, al camino de los aranceles a las importaciones para reducir el déficit en su balanza comercial.
La llegada de Kamala Harris, antigua fiscal del Estado de California, supone un cambio de rumbo bastante brusco para Donald Trump, que ya veía la victoria.