El monasterio de Vivarium debe su nombre a la dársena de pescadores que Casiodoro habría hecho acondicionar al pie del monasterio (situado en una colina); la iglesia del monasterio está dedicada a san Martín y, aledaña al monasterio se halla la colina de Mons Castellum, dedicada a los eremitas (nombre que Casiodoro dio en las Institutiones describiendo el lugar: De positione monasterii Vivarensis siue Castellensis –Inst.
Su vida y la de la comunidad de sus eremitas ha sido y es de gran provecho para el bien de muchas almas, y por su medio se han realizado muchas obras buenas.
Fue en Atenas donde comenzó a pensar seriamente en la religión y se decidió a buscar a los más famosos santos eremitas de Siria y Arabia para aprender de ellos el modo de alcanzar un estado de ferviente piedad y de mantener su cuerpo sometido mediante el ascetismo, lo que solía denominar “una vida filosófica”.
Abundaron los eremitas y los místicos, con una vida ascética, como Ibn Masarra, fundador de la primera escuela de espiritualidad andalusí, la escuela masarrí, que triunfó entre la aristocracia cordobesa.
En esta época era muy frecuente la cristianización realizada por los monjes eremitas, que posiblemente habitaran en estas cavidades.
Sin que se pueda precisar la fecha, pero antes de 1180, entró a formar parte de los Canónigos regulares de san Agustín de la Santa Cruz de Mortara (Pavía), mientras su hermano, San Bartolo, se unía a los eremitas carmelitas.
Los orígenes de esta, en el cristianismo, se pueden colocar ya en los primeros siglos del mismo, especialmente por la presencia de vírgenes consagradas y un tipo de orden de viudas y los eremitas, pero no estaban institucionalizados tal y como se conocen hoy.
En las cercanías se encuentran numerosas cuevas que podían haber siso refugio de antiguos eremitas, antecesores como en otras ocasiones de una vida cenobítica organizada.
a Orden de San Agustín (O.S.A), en latín Ordo Fratum Sancti Augustini, es una orden religiosa mendicante establecida por la Iglesia católica bajo el pontificado de Inocencio IV en el año 1244, ante la necesidad de unificar una serie de comunidades de eremitas que surgieron bajo la experiencia monástica de san Agustín y su Regla del siglo IV.
Incumbit nobis y Praesentium vobis fechadas el 16 de diciembre de 1243, sentaron las bases jurídicas de la erección canónica de la Orden de San Agustín. Incumbit nobis ordenó que los eremitas de Tuscia, " exceptis Fratribus S.
El nacimiento de la Orden de San Agustín se remonta al año 1243 cuando cuatro ermitaños (Esteban de Cataste, Hugo de Corbaria, Guido de Rosia y Pedro de Lupocavo) en representación de grupos de eremitas situados en la antigua Tuscia, Lacio superior y zonas limítrofes de Umbría, se dirigieron al papa Inocencio IV para pedirle una regla común y un prior general.
Existe desde el siglo debido a los eremitas instalados en el Convento de La Verde, que tras su abandono fue remodelado y reaprovechado como hospedería en los años 50.