588.- Están exentos de responsabilidad penal y sujetos únicamente a la civil, por los hurtos, robos con fuerza en las cosas, defraudaciones, o daños que recíprocamente se causaren: 1.
Expansión y consolidación de la prevención integral y convivencia comunal a través del diseño, ejecución y monitoreo del plan de prevención integral dedicado especialmente a los jóvenes de sectores populares desocupados; de la aplicación de un plan especial de vigilancia de patrullaje en los municipios priorizados; de la activación a nivel nacional del Servicio de Policía Comunal; de la ejecución del plan de trabajo para lograr el control de armas, municiones y desarme; así como la intensificación del programa de fortalecimiento de la investigación, aprehensión y procesamiento de personas responsables de homicidios, secuestros, robos y hurtos de vehículos.
Fue con ellos Andrés a tomar la primera lición de ladrón; pero, aunque le dieron muchas en aquella salida, ninguna se le asentó; antes, correspondiendo a su buena sangre, con cada hurto que sus maestros hacían se le arrancaba a él el alma; y tal vez hubo que pagó de su dinero los
hurtos que sus compañeros había hecho, conmovido de las lágrimas de sus dueños; de lo cual los gitanos se desesperaban, diciéndole que era contravenir a sus estatutos y ordenanzas, que prohibían la entrada a la caridad en sus pechos, la cual, en teniéndola, habían de dejar de ser ladrones, cosa que no les estaba bien en ninguna manera.
Miguel de Cervantes
Apenas hubieron visto a mi amo, cuando todos se fueron a él con los brazos abiertos, y todos le brindaron, y él hizo la razón a todos, y aun la hiciera a otros tantos si le fuera algo en ello, por ser de condición afable y amigo de no enfadar a nadie por pocas cosas.» Quererte yo contar ahora lo que allí se trató, la cena que cenaron, las peleas que se contaron, los hurtos que se refirieron...
Los estafadores y superintendentes de todos géneros de flor tienen particular noticia de todos y, por oficio, inquirir y saber los hurtos que se han hecho, los buenos que han desollado, el que ha hecho la muerte o dado cuchillada por dineros, el que sufre escandalosamente y todo lo que se adquiere con trato ilícito y pernicioso.
El corregidor, creyendo que algunos
hurtos de los gitanos quería descubrirle, por tenerle propicio en el pleito del preso, al momento se retiró con ella y con su mujer en su recámara, adonde la gitana, hincándose de rodillas ante los dos, les dijo: -Si las buenas nuevas que os quiero dar, señores, no merecieren alcanzar en albricias el perdón de un gran pecado mío, aquí estoy para recebir el castigo que quisiéredes darme; pero antes que le confiese quiero que me digáis, señores, primero, si conocéis estas joyas.
Miguel de Cervantes
¿Pues sastres? ¿A quién no matarán las mentiras y largas de los sastres, y
hurtos? Y son tales que para llamar a la desdicha peor nombre, la llaman desastre, del sastre, y es el principal miembro deste tribunal que aquí veis.
Francisco de Quevedo
Temores de una crisis de negocios.-- Una gran cantidad de robos en casas y hurtos mayores.--Una mujer asesinada a sangre fría en New Haven para robarle el dinero.--Un cabeza de familia tiroteado por un ladrón de casas anoche en esta ciudad.--Un hombre se pega un tiro en Worcester porque no podía encontrar trabajo.
De errantes lilios unas la floresta 835 cubran, corderos mil que los cristales vistan del río en breve undosa lana; de Aracnes otras la arrogancia vana modestas acusando en blancas telas, no los
hurtos de Amor, no las cautelas 840 de Júpiter compulsen; que, aun en lino, ni a la pluvia luciente de oro fino, ni al blanco cisne creo.
Luis de Góngora y Argote
Hízolo así el paje, y agradó tanto a los demás gitanos, que le alzaron por señor y le dieron la obediencia; y, como en señal de vasallaje, le acuden con parte de los
hurtos que hacen, como sean de importancia.
Miguel de Cervantes Saavedra
En cuanto a la persona del gobernador aunque es persona honrada Vuestra Alteza sabrá que él es muy viejo para estas partes y está muy doliente de gran enfermedad que nunca ha estado un día bueno y después que aquí vino, es hombre muy acelerado en demasía, es hombre que no le pena mucho aunque se quede la mitad de la gente perdida en las entradas, nunca ha castigado los daños y muertes de hombres que se han hecho en las entradas, así de los caciques como indios, ha dejado de castigar hurtos de oro y perlas que los Capitanes han hurtado en las entradas muy claramente...
Ocúpanse, por dar color a su ociosidad, en labrar cosas de hierro, haciendo instrumentos con que facilitan sus
hurtos; y así, los verás siempre traer a vender por las calles tenazas, barrenas, martillos; y ellas, trébedes y badiles.
Miguel de Cervantes Saavedra