Pensó que tan amargo mal le había venido por meterse a redentor y explanar con independencia viril sus convicciones; decidió usar también la lima para
templar aquella vehemencia de sentimientos y aquel celo inconsiderado por el bien general.
Emilia Pardo Bazán
Por las retorcidas calles echa pestes y reniegos a cada lenta carreta, a cada corro interpuesto, que a
templar el paso obliga de los caballos ligeros, y anheloso a verse llega de la ciudad en el centro.
Ángel de Saavedra
Incluso en los distritos donde no hay posibilidad de que nuestro candidato salga triunfante, los obreros deben, no obstante, presentar nombres a los fines de mantener su independencia, templar sus fuerzas y presentar su actitud revolucionaria y los puntos de vista del partido ante el público.
Majd. y de su prudencia, de donde nacerá animar aquellos y templar a los otros sin dar ocasión de sentimiento ninguno. Desta jerarquía de personas se servía el señor rey don Felipe el segundo en los oficios de su casa y en otros puestos de Consejos y presidencias, porque, como está dicho arriba, siendo el poder destos particulares más moderado y ellos de menos séquito, juzgaba habían de estar más atentos a su proceder y más puntuales en la ejecución de las órdenes, por la facilidad mayor que hay en remover a estos cuando no cumplan con lo que deben, que a los más poderosos y de mayores parientes.
La Reforma abrió un nuevo campo a los pueblos de Alemania y de Inglaterra, que la abrazaron ansiosos; y si en Francia no triunfó, tuvo el influjo bastante para
templar y equilibrar el ciego impulso del fanatismo.
Mariano José de Larra
Es uno de los grandes lunares que tiene nuestra Catedral para su efecto de conjunto y esto que no lo pusieron alrededor del ábside, y que reclama necesariamente los calados para a lo menos templar este efecto y dar satisfacción a este efecto de unidad que requiere un edificio religioso como eminentemente artístico.
Del cautiverio de los Santos, y cómo jamás les faltó el divino consuelo Sí dijesen que muchos cristianos fueron llevados en cautiverio, confieso que fue infortunio grande si, por acaso, los condujeron donde no hallasen a su Dios; mas, para templar esta calamidad, tenemos también en las sagradas letras grandes consuelos.
Artículo Seis.- El Pueblo de Guayaquil quiere que -sea cualquiera la forma administrativa que se adopte- se reconozca siempre la necesidad de que las tres grandes secciones enlazadas entre si, con relaciones estrechas y nacionales formando un solo cuerpo político con el glorioso nombre de Colombia y se reconozca también un gobierno general, que deberá presidir la nación, ejecutar las leyes generales, templar el poder de las secciones independientes e intervenir en las relaciones diplomáticas con las naciones extranjeras.
Quando se le motejaba de apasionado del Almirante D. Fadrique, se le vió en Olmedo trabajar al lado de su padre por templar su acaloramiento contra la privanza de D.
¿Cómo ha de ser esto? Porque quiero más templar los gozos que enfrenar los dolores. Diráte Sócrates estas razones: «Hazme vencedor de todas las gentes y desde el nacimiento del Sol, hasta Tebas, me lleve triunfante el delicado coche de Baco: pídanme leyes los reyes de Persia, que con todo eso, cuando en todas partes me reverenciaren como a Dios, conoceré que soy hombre.» Junta luego a esta grande altura una precipitada mudanza, diciendo: «Que he de ser puesto en ajeno ataúd, habiéndome de despojar de la pompa de soberbio y fiero vencedor; que no por eso iré más desconsolado, asido al ajeno coche, de lo que estuve en el mío; pero tras todo eso deseo más vencer que ser cautivo.
Necesitas templar la sed ardiente que te devora, lo reconozco, y te permito calmarla en medio del río; pero bebe mucho más de lo que reclama tu ansiedad, hasta que arrojes por la boca el agua que acabaste de sorber.
Me hablabas tierna: con afable rostro y con trémulo acento la causa de mi mal saber querías, y la amargura de las penas mías
templar con tu amistad.
José María Heredia