Me he aferrado a una fe conveniente, Esperando librar el pecado de la culpa. Las decisiones corruptas han propagado plagas, En esta alma concebida para el paraíso. Esta alma que entró en el calvario, Por su propio pie, Con los labios sangrantes De clamar por respuestas correctas A través de preguntas equivocadas. - ¡Dios mío, Dios mío! ¿Por qué me has abandonado?
Sobre los amigos y alejarse...
Los caminos separados van a pasar, en algún momento de la historia tienen que suceder.
Tal vez no sea necesariamente alejarse a millas de distancia, los kilómetros no cuentan porque siempre han estado presentes, pero el alejamiento que surge por las nuevas metas, los nuevos intereses, los distintos placeres… esos en algún momento iban a llegar.
Ahora ya no se ven como antes, se siente su falta en el ambiente y cuando mencionan su nombre se hace un silencio incómodo que solo el dolor abraza y un cambio de tema es el único capaz de remediarlo.
Pero está bien, ya sabíamos que iba a ocurrir. No siempre vamos a permanecer en el mismo lugar por siempre, las ocupaciones nos alejan, los anhelos nos guían y el querer algo propio nos mueve. Porque es lo normal, es lo esperado, estamos en el camino para formar nuestra vida y no siempre este camino coincide con el de nuestros amigos y allegados y por eso nos alejamos.
Vale, está bien. No sé cuántas veces lo diré, tal vez las necesarias para convencerte o para convencerme; sin embargo, por más repetitivo que suene es la verdad: está bien.
No sabemos si esa brecha que provoca la lejanía se hará más grande, pero si realmente es tu amigo, no te olvides de desearle lo mejor desde la distancia, de celebrar desde tu casa cuando ves que alcanza un nuevo logro en su vida. Tal vez él no lo sepa, pero tú lo sabes, sabes que siempre estuviste orgulloso, que las lágrimas bailaron por tus ojos cuando veías su sonrisa en cada foto.
No dejes que el resentimiento por el no hablar tome protagonismo en una verdadera amistad. Tal vez escuece en el fondo no poder tenerlo todos los días, ya no saber de él tan a menudo, pero ¡Oye! ¡Él está bien! Y eso es lo importante.
Ya llegará el momento en que puedan juntarse y contarse personalmente qué ha sido de sus vidas, por mientras, solo recuérdale entre cada mensaje que te tiene y siempre te tendrá, que su amistad es mucho más que la distancia y que brindas por sus logros desde aquí.
Porque estoy segura de que él igual brinda por los tuyos…
Calma…
Ya sé, ya sé. Todo parece aterrador ahora mismo, lo comprendo.
No te preocupes, todo se va a solucionar.
Ten calma…
Respira… Mira al cielo que tan bonitas se encuentran las estrellas esta noche.
¿Asombroso cierto? Concéntrate en ellas, están aquí para ti. Vinieron especialmente a verte, no le hagas el desaire, por favor, aprécialas. Son únicas, cada una brilla de una forma distinta y se complementan para brindarte un espectáculo digno de admirar.
¿Ves algún defecto? ¿No, verdad? Exacto. Tal vez algunas son raras, pero no importa, se complementan unas con otras y eso las hace asombrosas.
Como tú.
Cada parte de ti es como esas estrellas en el cielo.
No hay nada que temer ni nada que reprochar.
Podrás tener algo en ti que no es común con los demás, pero eso te hace único, exclusivo, inigualable.
Cada parte de ti se complementa para formar a la persona especial que eres. Atrapando lo que la belleza física podría representar e incluso mucho más profundo que eso.
Apréciate, quiérete, valórate, amate y brilla.
Brilla tanto… como las estrellas en el cielo.
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