Manual de Gestion Penitenciaria
Manual de Gestion Penitenciaria
Manual de Gestion Penitenciaria
Este documento ha sido elaborado con la ayuda financiera de la Unión Europea. Su contenido es responsabili-
dad exclusiva de la Procuraduría General de la República y en ningún caso se debe considerar que refleja la
opinión de la Unión Europea.
III
Sección 8 Cacheo Personal y Requisa de Dependencias 63
Sección 9 Sustancias y Objetos Prohibidos 66
Capítulo III. Seguridad Exterior 67
Sección 1 Conducciones y Traslados 67
Sección 2 Vigilancia Perimetral 72
Sección 3 Anillos de Seguridad 73
Capítulo IV. Comunicaciones con el Exterior y Visitas 74
Sección 1 Personas Autorizadas a Comunicar 74
Sección 2 Tipos de Comunicaciones 74
Sección 3 Desarrollo de la Comunicación 77
Sección 4 Ingreso de Dinero 78
Sección 5 Procedimiento a Seguir desde el Interior 78
Sección 6 Normas Básicas de Seguridad 81
Sección 7 Registros de Entrada y Salida de Personalidades en Vehículos 83
Sección 8 Transmisiones y Comunicaciones 83
Capitulo V Libro Rojo de Emergencias (Actuaciones en Casos de Emergencia) 89
Anexos 123
Ficha de Ingreso 125
Informe de Salud para Internos/as de Nuevo Ingreso 126
Protocolo Unificado del Interno/a 127
IV
Evaluación Psicológica 131
Genograma en la Evaluación Familiar 135
Programa Individualizado de Tratamiento 139
Ficha de Actividad 141
Acta de Reunión de la Comisión de Vigilancia, Evaluación y Sanción 143
Hojas de Sanciones 144
Hojas de Méritos 145
Modelo de Carta de Conducta 146
Formulario de Reporte de Conducta 147
Modelo de Carta de Amonestación a un Interno/a 148
Horario Regimental 149
Anexo Horario Regimental 150
Objetos Prohibidos 151
Reglas para los visitantes 152
Protocolo de Realización de las Visitas al Centro 153
Sobre el Servicio del Economato 154
Al Personal de Salud 155
Negativa de Salida a Hospital 156
Orden de Licencia Médica para Reposo en Celda 157
Personal Autorizado para el Manejo de las Llaves del Consultorio 158
Registro de Medicación Según Prescripción Médica Nuevo Ingreso 159
Retirada Medicamentos del Consultorio Médico por el Supervisor 160
Hoja de Control de Licencias Médicas 161
Registro de Paquetes de Entrada 162
Indicaciones a Seguir para el Funcionamiento de las Paqueterías 163
Informe de Cacheo de Internos/as 164
Formato de Recuento de Internos/as 165
Informe de Registro de Dependencias 167
Libro de Servicios 168
Informe de Notificación de Huelga de Hambre 169
Respecto a las Guardias para el Traslado de Internos/as 170
Hoja de Novedades 171
Relación de Entrada y Salida del Personal que labora en el Centro. 172
Control del Estado del Vehículo del Centro 173
Relación Oficial de Medios Coercitivos y Comunicadores 174
Solicitud de Dietas para Internos/as 175
Controles Internos Fondo de Caja Chica 176
Control de Asistencia del Personal Técnico 178
Reporte para control del Personal Técnico 179
Formulario para el Levantamiento de las Áreas e infraestructuras
exteriores (Perímetro exterior frontal) 180
Formulario para el Levantamiento de las Áreas e infraestructuras
exteriores (Perímetro lateral derecho) 181
V
Formulario para el Levantamiento de las Áreas e infraestructuras
exteriores (Perímetro posterior y lateral izquierdo) 182
Formulario para el Levantamiento Condición de las áreas verdes
y jardines 183
Formulario para el Levantamiento Condición de los Pabellones 184
Relación mensual de viáticos a VTPs 186
Asientos contables del Economato 187
Bibliografía 389
VI
PRESENTACIÓN
La articulación de las medidas y acciones sustantivas para producir y administrar el
nuevo modelo penitenciario está presente en el “Manual de Gestión Penitenciaria” que
la Procuraduría General de la República, con el auspicio de la Unión Europea y la
asesoría técnica de UTG-PARME publica para organizar en un texto la normativa a
aplicar en todos los recintos carcelarios del país.
La redacción y publicación de este manual se inscribe dentro del ingente esfuerzo que
la Procuraduría realiza para dotar a nuestro sistema penitenciario de características
modernas y humanas, buscando sancionar el delito, proteger a los ciudadanos y ciu-
dadanas, proporcionando a la vez las medidas adecuadas para reinsertar a la sociedad
a los que delinquen.
Como es sabido, las leyes y procedimientos escritos solo tienen la fuerza para producir
transformaciones importantes cuando son conocidas, estudiadas y asumidas plena-
mente por quienes han de aplicarlas.
Recordemos que solo con recursos humanos calificados y conscientemente motivados se pon-
drá en marcha un sistema penitenciario modelo, como el que diseña y regula este manual.
VII
En las manos de esos servidores penitenciarios, fiadores morales de su ejecución,
depositamos el Manual de Gestión Penitenciaria, que garantizará pulcritud, decencia,
ética, organización y humanismo en los recintos carcelarios de la República
Dominicana.
VIII
MANUAL DE GESTIÓN PENITENCIARIA
INTRODUCCIÓN
El Sistema Penitenciario Dominicano sustenta su base legal en la ley 224 del 26 de junio del
año 1984, la cual está basada en la Constitución de la República y las Reglas mínimas apro-
badas en la Convención sobre tratamiento del Delincuente celebrada en Ginebra en 1955.
Este nuevo modelo penitenciario está sustentado en los Principios básicos para el trata-
miento de los reclusos adoptados y proclamados por la Asamblea General de las
Naciones Unidas en su resolución 45/111, del 14 de diciembre de 1990:
1. Todos los reclusos serán tratados con el respeto que merecen su dignidad y valor inhe-
rentes al ser humano.
2. No existirá discriminación por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión políti-
ca o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento u otros factores.
3. Sin perjuicio de lo que antecede, es necesario respetar las creencias religiosas y los pre-
ceptos culturales del grupo a que pertenezcan los reclusos, siempre que así lo exijan las
condiciones en el lugar.
4. El personal encargado de las cárceles cumplirá con sus obligaciones en cuanto a la cus-
todia de los reclusos y la protección de la sociedad contra el delito de conformidad con los
demás objetivos sociales del Estado y con su responsabilidad fundamental de promover el
bienestar y el desarrollo de todos los miembros de la sociedad.
5. Con excepción de las limitaciones que sean evidentemente necesarias por el hecho del
encarcelamiento, todos los reclusos seguirán gozando de los derechos humanos y las liber-
1
tades fundamentales consagrados en la Declaración Universal de Derechos Humanos y,
cuando el Estado de que se trate sea parte, en el Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos
y su Protocolo Facultativo, así como de los demás derechos estipulados en otros instru-
mentos de las Naciones Unidas.
7. Se tratará de abolir o restringir el uso del aislamiento en celda de castigo como sanción
disciplinaria y se alentará su abolición o restricción.
8. Se crearán condiciones que permitan a los reclusos realizar actividades laborales remu-
neradas y útiles que faciliten su reinserción en el mercado laboral del país y les permitan
contribuir al sustento económico de su familia y al suyo propio.
9. Los reclusos tendrán acceso a los servicios de salud de que disponga el país, sin discri-
minación por su condición jurídica.
El presente Manual, basado en los preceptos anteriormente citados, establece los procedi-
2
mientos básicos de gestión del nuevo modelo penitenciario. Pretende ser un recurso de capa-
citación y una guía para el personal del sistema penitenciario que enfatiza la explicación pro-
cedimental del trabajo en el interior de los centros penitenciarios con el fin de establecer unos
protocolos unificados de actuación que permitan el cumplimiento de la Ley Nº 224.
La tarea es ardua pero no imposible, siempre que los actores del proceso; Procuraduría
General de la República (PGR), la Dirección General de Prisiones (DGP) y la Escuela
Nacional Penitenciaria (ENAP), junto a otras instituciones gubernamentales e instituciones
de la sociedad civil como entes de apoyo en todos los procesos donde se generan cambios;
se mantengan unidos en una misma dirección y dentro de un mismo punto cardinal, donde
solo deberá primar un elemento común “la rehabilitación de las personas privadas de liber-
tad, de forma honesta, responsable y decidida, pero sobre todo humana e igualitaria”.
3
4
Título I
ORGANIZACIÓN DE LOS CENTROS DE CORRECCIÓN Y REHABILITACIÓN
La prisión, por sus características como institución total, cuenta especialmente con un sis-
tema de normas que regulan su vida cotidiana y su trasgresión supone algún tipo de con-
secuencia a menudo de naturaleza coercitiva.
Estas normas son los mecanismos para garantizar la seguridad jurídica de los internos/as
y dotar de los medios y herramientas al personal penitenciario para que, en el ejercicio de
sus funciones, puedan remitirse siempre a una normativa legal que les respalde en sus
decisiones y refrende sus acciones.
1) De observación
2) De tratamiento
3) De prueba
Las normas establecidas en este manual deben ser aplicadas imparcialmente, no pudien-
do existir diferencias de trato fundadas en raza, opinión política, religiosa, nacionalidad o
cualquier otra circunstancia o condición personal o social.
5
Ningún Interno/a será sometido a torturas, a tratos crueles, inhumanos o degradantes, de
palabra o acción, ni será objeto de un rigor innecesario en la aplicación de las normas esta-
blecidas en este manual.
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ORGANIGRAMA DE UN CENTRO DE CORRECCIÓN Y REHABILITACIÓN
7
8
Título II
PERSONAL PARA LA PUESTA EN MARCHA Y FUNCIONAMIENTO DE UN CENTRO
Estas tres áreas tienen un responsable llamado Subdirector/a, que trabajará de manera
coordinada y siguiendo las instrucciones del Director/a.
La suma de todas ellas contempla todos los aspectos de un centro penitenciario, y son:
Los miembros del personal penitenciario quedan sujetos a la obligación de seguir, antes de
ser nombrados y durante el desempeño de su cargo, los cursos de formación y de actuali-
zación que establezca la Escuela Nacional Penitenciaria (ENAP).
En función de las necesidades que se desprenden del cumplimiento de la Ley 224 sobre
Régimen Penitenciario, se establece una relación del personal para laborar en un Centro
aplicable a la estructura organizacional de un Centro Penitenciario prototipo.
Equipo Directivo
• Director/a
• Subdirector/a de Asistencia y Tratamiento
• Subdirector/a de Seguridad
• Subdirector/a Administrativa
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CAPÍTULO I
FUNCIONES Y OBLIGACIONES PARTICULARES
Sección 1
Dirección del Centro
Sección 2
Subdirección de Asistencia y Tratamiento
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Equipo Técnico y Profesional bajo su dirección
Puestos base:
• Médico
• Enfermero(a)
• Maestro(a)
• Asistente Jurídico
• Psicólogo(a)
• Trabajador(a) social penitenciario
• Promotor(a) Deportiva y Cultural
• Encargado de Taller
• Odontólogo(a)
Médico:
a) Recoger información sobre su ámbito.
b) Hacer estudio médico y sanitario para fines de clasificación, diagnóstico y pro-
nóstico.
c) Realizar evaluación médico-sanitaria.
d) Redactar informes individuales y en colaboración con el equipo multidisciplinar.
e) Redactar informes periciales para otras autoridades judiciales.
f) Asistir, atender e informar a los internos/as.
g) Dar asesoramiento técnico a otros profesionales.
h) Tener bajo su estricta responsabilidad los medicamentos enviados al Centro y
vigilar el suministro en cada caso.
i) Realizar otras tareas afines y complementarias, conforme a lo asignado por su
superior inmediato.
Enfermero(a):
a) Recoger información sobre su ámbito.
b) Aperturar el expediente médico a todo interno/a que ingrese al Centro.
c) Auxiliar al médico en sus labores asistenciales.
d) Realizar gestión técnica y administrativa de los protocolos y expedientes
colegiados.
e) Manejar el suministro de medicamentos.
f) Realizar la selección y preparación de pacientes para una adecuada y oportuna
consulta médica.
g) Participar en las actividades que realice la Junta de Tratamiento, donde se
solicite su participación.
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Odontólogo:
a) Recoger información.
b) Realizar evaluación odontológica para fines de clasificación y diagnóstico.
c) Coordinar operativos odontológicos.
d) Elaborar programas de prevención y rehabilitación bucal.
Maestro(a):
a) Recoger información sobre su ámbito.
b) Evaluar el historial educativo y escolar de la población interna.
c) Preparar redacción de informes individuales y en colaboración con el equipo
multidisciplinario.
d) Trabajar gestión de la escuela.
e) Coordinar y dinamizar los internos/as integrantes de la escuela.
f) Diseñar y ejecutar programas educativos.
g) Participar en la Junta de Tratamiento.
h) Realizar otras tareas afines y complementarias, conforme a lo asignado por el
Director o su superior jerárquico.
Asistente Jurídico:
a) Recoger información sobre su ámbito.
b) Realizar Estudio legal, jurídico y procesal-penal para fines de clasificación, diag-
nóstico y pronóstico.
c) Redactar informes jurídicos-criminológicos para la valoración de aplicación de
beneficios penitenciarios.
d) Redactar informes individuales y en colaboración con el equipo multidisciplinario.
e) Brindar atención, información y asistencia a los internos/as.
f) Participar en la Junta de Tratamiento.
g) Asesorar a otros profesionales.
h) Realizar y ejecutar programas de asesoramiento jurídico a la población interna.
i) Realizar gestión técnica y administrativa de los protocolos y expedientes colegiados.
j) Realizar otras tareas encomendadas por el Director o su superior jerárquico, las
cuales estén en relación con sus funciones.
Psicólogo(a):
a) Recoger información sobre su ámbito.
b) Realizar evaluación de la personalidad para fines de clasificación, diagnóstico y
pronóstico de los internos.
c) Efectuar evaluación de la evolución del tratamiento.
d) Redactar informes individuales y en colaboración con el equipo multidisciplinario.
e) Realizar y ejecutar programas de prevención y terapéuticos para la población interna.
f) Participar en la Junta de Tratamiento.
g) Fijar y ejecutar métodos de tratamiento.
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h) Brindar atención e información a internos/as.
i) Realizar gestión técnico y administrativa de los protocolos y expedientes colegiados.
j) Dar asesoramiento técnico a otros profesionales.
k) Redactar informes periciales para la valoración de aplicación de beneficios
penitenciarios.
l) Redactar informes periciales para las autoridades judiciales.
m) Realizar las tareas encomendadas por el Director o superior jerárquico las cua-
les están en relación con la labor del psicólogo.
Encargado de Taller:
a) Recoger información sobre su ámbito.
b) Evaluar el historial laboral y profesional de la población interna.
c) Redactar informes individuales y en colaboración con el equipo multidisciplinar.
d) Diseñar, ejecutar y evaluar programas profesionales y formativos laborales.
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e) Realizar gestión técnica y administrativa de los protocolos y expedientes cole-
giados.
f) Administrar el taller productivo y/o formativo laboral.
g) Dar asesoramiento técnico a otros profesionales.
h) Realizar las tareas encomendadas por el Director o superior jerárquico.
Sección 3
Subdirección de Seguridad
a) Emitir informes técnicos y estadísticos de su área.
b) Coordinar al personal adscrito a su área, y supervisar su funcionamiento.
c) Asistir y participar en la Comisión de vigilancia, sanción y evaluación.
d) Promover el diseño y la elaboración de planes, así como supervisar la ejecución
de los mismos.
e) Ofrecer atención e información a los internos/as y sus familias.
f) Mantener informada a la dirección del centro de las incidencias y novedades.
g) Supervisar el funcionamiento del área.
h) Gestionar el suministro de bienes y servicios.
i) Cumplir con las metas individuales que le sean asignadas, así como los compromisos
que conlleve la naturaleza de su cargo.
j) Las encomendadas por el director del Centro.
Supervisor de Servicios:
c) Designar a los Agentes para los diferentes puestos de vigilancia, control y traslados.
d) Coordinar con los responsables de los centros de salud, tribunales u otros luga-
res donde se trasladen internos/as.
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e) Coordinar los servicios de vigilancia perimetral e interior.
h) Hacer buen uso de los recursos y materiales puestos al servicio de los agentes.
Encargados de Área
La responsabilidad del encargado de área es asegurar el buen funcionamiento y
organización de un área concreta de trabajo asignada. Esta área, con independen-
cia de que esté relacionada con un espacio físico del establecimiento o una activi-
dad o servicio, tendrá asignados un número concreto de recursos humanos de los
cuales también será responsable.
Agentes de vigilancia exterior y perimetral: Control exterior del perímetro de los cen-
tros penitenciarios. En el desempeño de sus funciones estos Agentes harán uso de
armas de fuego y por lo tanto deberán extremar el cuidado en el uso de las mismas.
Sección 4
Subdirección Administrativa
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e) Promover el diseño y la elaboración de planes o programas para el funcionamien-
to interno/a administrativo del Centro.
f) Coordinar y gestionar convenios interinstitucionales o contratos comerciales,
según se trate de instituciones gubernamentales, no gubernamentales o empresas
privadas; con miras a obtener colaboración o relaciones comerciales de suminis-
tros y servicios.
g) Recibir las quejas y peticiones de los(as) internos/as, facultad otorgada por el
artículo 34 de la ley 224, sobre Régimen Penitenciario.
h) Asistir y participar con voz y voto en la Comisión de Vigilancia, Evaluación y
Sanción.
i) Levantar información de incidencias y novedades del Centro.
j) Emitir informes técnicos, económicos y estadísticos del Centro para ser presentados
a la Dirección del Centro y a la dependencia oficial por las vías correspondientes.
k) Realizar turnos extraordinarios.
l) Realizar otras tareas afines y complementarias, conforme a lo asignado por el
Director(a) del Centro.
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Título III
FUNCIONAMIENTO DE UN CENTRO PENITENCIARIO
Sección 1
Horario Regimental del Centro
En dicho horario se contemplarán unas franjas horarias diferenciadas que permitan realizar
las diferentes acciones de control, suministro de alimentos, distribución de actividades for-
mativas/lúdicas, descanso y tiempo libre de los internos/as.
• Control de presencia: Son los controles presenciales sobre la población reclusa, con el
objetivo de comprobar la presencia física de todos ellos, así como comprobar que todos los
internos/as se encuentren en buen estado físico.
Se realizarán tres controles de este tipo:
• Alimentación: Se crearán tres franjas horarias destinadas al suministro de desayuno,
almuerzo y cena.
• Actividades, talleres y tiempo libre: Se crearán franjas horarias destinadas a a c t i v i -
dades lúdico/formativas, talleres productivos y tiempo libre de lo internos/as. Estas franjas
horarias deberán iniciarse siempre después de los controles de presencia o recuentos.
• Descanso: Se deberá respetar un mínimo de ocho horas diarias de descanso nocturno
para los internos/as, que sólo podrán ser interrumpidas por orden del Director/a o del
Supervisor de Servicios.
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jas horarias quedarían destinadas a otras necesidades, como turnos de comunicaciones,
asistencia a actos religiosos, etc. Los apartados de control de presencia, alimentación y
descanso no se verán afectados por el tipo de horario.
En la siguiente tabla se exponen de forma cronológica las diferentes actividades que pue-
den darse en una unidad modular tipo.
Horario Regimental
El articulo 13 de la ley 224 expresa que “El régimen penitenciario aplicable a los condena-
dos por sentencias definitivas, en aquellas penas que por su duración lo permitan, tendrá
un carácter progresivo y contará de tres periodos fundamentales:
1.- De observación
2.- De tratamiento
3.- De prueba
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Flujograma de aplicación de estos periodos.
Durante la implementación del régimen progresivo el interno/a pasará por diversas fases de
intervención tendentes a lograr su rehabilitación y que se cumplen de la siguiente manera:
• Ingreso
• Fase de Observación
• Fase de Tratamiento
• Fase de Prueba
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CAPÍTULO I
EL INGRESO
Uno de las momentos más difíciles por las que debe pasar toda persona imputada o con-
denada es el proceso de ingreso a un Centro penitenciario. Por lo tanto no sólo se debe-
rá ser cuidadoso con la integridad física y el derecho a la vida sino especialmente delicado
en lo relativo al estado anímico y psicológico del ingresado. El primer contacto con la insti-
tución será determinante en su conducta futura y el ingresado deberá percibir desde este
primer contacto las características básicas del lugar en que va a permanecer recluido, por
lo tanto la actitud del personal responsable del ingreso deberá ser a un tiempo firme, como
corresponde a una institución donde debe primar el orden y el respeto a la normativa, pero
no rigurosa en exceso sino más bien comprensiva y proactiva.
Ninguna persona será admitida en el Centro Penitenciario sin la correspondiente orden judi-
cial de encarcelamiento.
Sección 1
Protocolo de actuación para la recepción e ingreso
1.- Recepción.- En el momento de la entrada en el Centro se conducirá al imputado o con-
denado, a las dependencias de Recepción o sala de espera.
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El registro personal o cacheo de los internos/as se ceñirá a los siguientes principios:
• Los Agentes que hayan llevado a cabo el cacheo elevarán al Director/a un informe
relativo al mismo en cualquier caso, tanto si se detecta alguna anomalía como en el
caso de haber sido infructuoso.
A todos los internos/as le será asignado un número de identificación carcelaria (NIC) que
en ningún caso servirá para denominarlos, siendo formal el uso de su nombre y apellidos
para ser designados, pero que a efectos identificativos este tiene una importancia sustan-
cial y dicho número será permanente y válido aún cuando el interno/a haya salido del cen-
tro y nuevamente vuelve a ingresar.
b) Filiación
En la ficha que se confeccionará y que debería contar con soporte informático que permi-
tiera su recuperación, se consignarán también, los datos de filiación del ingresado tales
como:
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• Nombre.
• Apellidos.
• Lugar y fecha de nacimiento.
• Nombre del padre y de la madre.
• Número de Cédula o pasaporte o cualquier otro documento de identificación si lo
tuviere.
• Domicilio, nombre del cónyuge y número de hijos.
• Datos descriptivos y antropomórficos que facilitarán su identificación en caso de
necesidad (sexo, estatura, color de la piel, color del cabello y los ojos, señales par-
ticulares si las hubiere, etc.).
4.- Chequeo médico.- El interno/a pasará a ser visitada por el médico quien implementa-
ra el cuestionario de salud. En caso de que el ingresado/a tuviera que administrarse algún
tipo de medicamento bajo receta medica, este/a informará por escrito al encargado de área,
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a efectos de que estos no le sean retenidos en el chequeo y le puedan ser suministrados.
Los internos/as serán informados en el momento del ingreso del motivo del mismo, de la
normativa del Centro, de sus derechos y obligaciones así como del régimen de sanciones
y recompensas. Esta información le será facilitada por el Director o el Subdirector de
Tratamiento.
El interno/a recibirá un ejemplar del reglamento del interno/a, horario regimental y los ins-
tructivos y manuales del Centro, así como la explicación de su contenido. En caso de inter-
nos/as analfabetos o que no conozcan el idioma español se les hará saber el contenido del
documento buscando un intérprete.
De conformidad con lo dispuesto en el artículo 44 de la Ley No. 224 sobre Régimen peni-
tenciario, el interno/a será informado de la posibilidad de poner en conocimiento de sus
familiares, representantes legales o personas que él señale, la circunstancia de su encar-
celamiento, o bien que el propio Centro penitenciario lo haga en su nombre. Si el interno/a
es extranjero deberá ponerse en conocimiento de las autoridades consulares de su país el
internamiento si este lo desea.
Estos actos informativos serán reflejados en un documento de ingreso que el interno/a fir-
mará en señal de conformidad y en expresión de su voluntad. Este documento será inclui-
do en su expediente personal.
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-Los objetos de valor serán custodiados por el Subdirector de Seguridad en la caja del
Establecimiento o en lugar seguro dispuesto exclusivamente para esos fines y se le expe-
dirán los resguardos que acrediten el depósito de los objetos de valor.
Los(as) internos/as podrán autorizar por escrito, que los valores u objetos intervenidos se
haga cargo algún familiar u otra persona particular de su confianza y, en tal caso, la entre-
ga se hará mediante presentación de identificación de la persona autorizada, debiendo fir-
mar con el Subdirector de Seguridad o el Administrador, según proceda, la diligencia de la
entrega.
Cuando la autoridad judicial disponga la intervención de todo o parte de los objetos de valor
del interno/a, se procederá a inmovilizar las cantidades indicadas en la orden correspon-
diente, que quedarán a disposición de dicha autoridad para el destino que proceda, de todo
lo cual se dará conocimiento al interesado, y se entregará la orden judicial que autoriza o
da lugar a la intervención.
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Flujograma de Actuación del equipo técnico
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CAPÍTULO II
EL PERÍODO DE OBSERVACIÓN
El Art. 14 de la Ley 224 expresa que “Durante el período de observación que durará entre
diez y treinta días se mantendrá al recluso en dependencia separada del resto de la pobla-
ción penal que se encuentre en otros períodos de tratamientos, y se efectuará el estudio
de su personalidad, de su medio social y de sus antecedentes personales, para determinar
la sección o establecimiento a que deba ser destinado y la naturaleza del tratamiento que
sea conveniente aplicarle”.
Sección 1
Procedimiento para el cumplimiento de la fase de observación
Sección 2
Protocolo Básico de Observación
Se habilitará una dependencia exclusiva para realizar esta tarea de observación denomi-
nada Pabellón de Observación.
El interno/a deberá ser visitado dentro de las 24 horas de su ingreso por un médico del esta-
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blecimiento quien extenderá informe relativo a su estado de salud y aconsejará al Director/a
acerca de la ubicación del mismo en caso de necesidad.
1. Estudio de la personalidad
2. Del medio social
3. De los antecedentes personales
Para realizar este estudio será necesaria la intervención de los miembros del
Equipo de Tratamiento:
1. Psicólogo
2. Trabajador Social
3. Abogado o Jurista-criminólogo
4. Maestros y Educadores
4. Entrevista y valoración por parte del equipo educativo de centro, para la evaluación del
nivel escolar y trayectoria laboral del interno/a.
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mientos serán limitados a los que permitan sus actividades y a las intervenciones que se
van a realizar.
Sección 3
Instrumentos a utilizar
a) Récord de Tratamiento:
Es la carpeta que incluirá el conjunto de documentación sobre cada uno de los internos/as
y que se iniciará con la Ficha de ingreso a la llegada del interno/a y se cumplimentará en
el periodo de observación con la siguiente documentación:
1. Informe Psicológico
2. Informe Social
3. Informe Criminológico/legal
4. Informe Educativo-laboral
Las informaciones deberán extraerse de las entrevistas mantenidas con el interno/a, pero
también podrán dirigirse a otras fuentes para confirmar y completar la información que se
precise, así como sería el caso de las entrevistas del Trabajador social con las familias de
los internos/as. La custodia de la información será responsabilidad de los profesionales y
se regirá por las normas corporativas en cuanto a ética y secreto profesional.
Los datos o constancias de cualquier naturaleza que estén en los archivos de los Centros
tienen carácter confidencial y no podrán ser proporcionados, sino a las autoridades judicia-
les y administrativas legalmente facultadas para solicitarlas.
Queda prohibido al personal que no está expresamente autorizado para ello el acceso a los
expedientes, libros, registros o cualquier otro documento que este en los archivos del
Centro.
Una vez recogidos los datos se reunirá el Equipo Técnico en Junta de Tratamiento
Multidisciplinar que emitirá un diagnostico-pronóstico integral acompañado de un Plan de
Intervención Individualizado al tratamiento que sea conveniente aplicarle a través de las
distintas actividades que el Centro desarrolla.
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CAPÍTULO III
PERÍODO DE TRATAMIENTO
Los programas que se lleven a cabo en los Centros Penitenciarios deben enmarcarse en
las siguientes categorías:
En el tratamiento que se de a los internos/as, no habrá más diferencias que las que resul-
ten por razones médicas, psicológicas, psiquiatricas, educativas o de aptitudes y capacita-
ción en el trabajo.
En el Centro existirá una biblioteca básica que contendrá, libros de apoyo para la enseñan-
za fundamental, obras de literatura, revistas, así como ejemplares de la Constitución, la Ley
224, Reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos, etc.
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Sección 1
Actividades y destinos de los internos/as
Además de las diferentes actividades productivas, instructivas, deportivas y religiosas, los
internos/as podrían dedicarse a la realización de tareas o destinos dentro de los Centros.
Estas tareas o destinos las realizarán los internos/as de manera voluntaria, y tendrían
repercusión en una mejor calificación mensual, con los beneficios que marca el Capítulo XV
de la Ley 224, con lo que se lograrían varios objetivos:
• Crear hábitos en el interno/a, como podrían ser el del horario de trabajo, fomentar las tareas
en común con otros internos/as, higiene personal y laboral, etc.
• Involucrar al interno/a en el mantenimiento de las dependencias del Centro, promoviendo
entre ellos el buen uso de las mismas.
• Iniciar al interno/a en los conocimientos de una profesión.
• El interno/a vería ocupada una franja horaria de manera diaria, por lo que su estancia
mientras dure la condena seria más llevadera.
Los destinos que proponemos que deben desarrollar los internos/as dentro de los centros,
son aquellos que en función de las necesidades del Centro establezcan las autoridades
entre las que podríamos nombrar:
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Sección 2
El Equipo Técnico o Equipo Multidisciplinar
Los miembros del Equipo Técnico tendrán voz y voto a excepción del secretario,
quien levantará acta de las reuniones. En caso de empate el voto del Director/a diri-
mirá. Podrán contemplarse votos particulares.
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Recursos documentales a utilizar:
Récord de Tratamiento
Es la carpeta que incluirá el conjunto de documentación sobre cada una de los internos/as.
• Ficha de ingreso
Es un registro manual, nominal que se inicia en el área del Subdirector Tratamiento cuan-
do llega el ingreso. La ficha contempla los datos esenciales del interno/a y una exploración
general pero completa de la misma. La finalidad de la ficha de ingreso es la obtención de
los datos generales mas importantes del interno/a para poder determinar si existen proble-
mas de interés que se deban atender desde el primer momento, con el fin de actuar sobre
los mismos si fuera necesario. Otro objetivo fundamental es poder ubicar al interno/a en
Fase de Observación junto con los demás internos/as.
Informe Psicológico
Informe Social
Informe Criminológico
También se incluirá la información escolar y laboral del interno/a, su nivel escolar y su tra-
yectoria laboral, emitiendo los profesionales de la educación un informe Educativo-laboral.
• Ficha de actividad
Es la ficha en la cual se asentarán las actividades planificadas en función del programa indi-
vidualizado de tratamiento establecido para cada interno/a. La misma estará adaptada a la
realidad y necesidades del interno/a con el objetivo de reforzar todas las carencias detec-
tadas en la evaluación del mismo.
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Sección 3
La Junta de Tratamiento
Es el órgano colegiado que regula el funcionamiento de las actividades del Centro, aunque
no queda específicamente determinada en la ley 224, a través de la Comisión de Vigilancia,
Evaluación y Sanción, se evidencian algunos aspectos y decisiones desde el punto de vista
de tratamiento, que motivan la creación y la incorporación de La Junta de Tratamiento de
manera independiente a la Comisión de Vigilancia, Evaluación y sanción, con el objetivo de
potenciar los aspectos tratamentales de los internos/as y desarrollar las funciones de diag-
nóstico, tratamiento y evaluación de los mismos a lo largo del proceso de tratamiento de los
internos/as.
La Junta de Tratamiento estará presidida por el Director/a del Centro o por el subdirector/a
de Tratamiento, y compuesta por los siguientes miembros:
• Doctor/a en Medicina
• Licenciado/a en Psicología
• Licenciado/a en Trabajo Social o Asistencia Social
• Abogado
• Maestros y educadores
• Subdirector de Seguridad
Como Secretario de la Junta de Tratamiento y del Equipo Técnico actuará, sin voto, un pro-
fesional designado por la Dirección del Centro.
Los acuerdos de la Junta de Tratamiento se adoptarán sobre las propuestas elevadas por
los Equipos Técnicos para la adopción de las medidas necesarias para ejecutar los progra-
mas de tratamiento o los programas individualizados de ejecución, y se ejecutarán por los
Equipos Técnicos, bajo el control inmediato y directo de los encargados de dichos equipos.
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Funciones de La Junta de Tratamiento
• Adoptar los acuerdos que estime pertinentes sobre las peticiones y quejas que formulen
los internos/as a los Equipos Técnicos sobre su clasificación interior, tratamiento o progra-
ma de intervención.
• Elevar las propuestas que, con respecto a los beneficios penitenciarios y a la libertad con-
dicional, les estén atribuidas.
• Organizar la ejecución de las prestaciones de carácter asistencial que precisen los inter-
nos/as o sus familiares, fomentar las actividades laborales de los internos/as, cuidando que
las mismas se desarrollen con arreglo a las normas vigentes, así como organizar, por uni-
dades de separación interior, los procedimientos de designación de aquellos internos/as
que hayan de participar en actividades o responsabilidades de orden educativo, formativo,
laboral, sociocultural recreativo, deportivo o religioso.
• Facilitar a la Unidad Docente las valoraciones de las aptitudes de los internos/as que rea-
licen cursos de formación, así como aquellas otras informaciones contenidas en el proto-
colo que puedan serle útiles en la programación y ejecución de las tareas formativas o edu-
cativas.
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Recurso documental a utilizar:
• Libro de actas
Tal como se ha especificado el secretario del establecimiento levantará acta de los acuer-
dos y resoluciones de la Junta de Tratamiento. Las actas serán firmadas por los asistentes
a la reunión, y se remitirá copia a la Dirección General de Prisiones.
El libro de actas será custodiado por el secretario del Centro y los acuerdos y resoluciones
tomadas solo podrán ser notificados verbalmente o por escrito a las personas interesadas.
Sección 4
La Comisión de vigilancia, evaluación y sanción como órgano colegiado
La definición y funciones del órgano colegiado, están reguladas en el Art. 20 de la Ley No.
224, y recibe el nombre de Comisión de vigilancia, evaluación y sanción.
Art. 20.- En las penitenciarias, presidios, cárceles y centros abiertos funcionará una comi-
sión formada por el director del penal, el secretario, un psiquiatra, un visitador
social y cualquier otra persona que preste servicio en un departamento del penal,
quienes se reunirán una vez al mes y tratarán sobre el progreso, tratamiento, adap-
tación, permisos y sanciones de los reclusos que se encuentren en el penal.
Podrá ser convocada una reunión que no sea en la fecha señalada cuando el caso lo ame-
rite.
Los pormenores de las reuniones se asentarán en dos libros de actas que se lleven al efec-
to.
Ante esta comisión pueden dirigirse los internos/as a realizar sus reclamos o solicitudes,
siempre y cuando no sean atendidos por el director del penal.
Funcionará como comisión de apelación, la que estará formada por el Procurador General
37
de la República o su representante y el Director General de Prisiones, quienes tienen voz
y voto y estarán obligados a fallar el mismo día que se reúnan a conocer el caso.
Los miembros de la Comisión tendrán voz y voto a excepción del secretario, quien levan-
tará acta de las reuniones, y que en caso de empate el voto del Director/a dirimirá. También
podrán contemplarse votos particulares.
Sección 5
El Juez de la Ejecución de la Pena
El artículo 437 del Código Procesal Penal expresa: “El Juez de la ejecución controla el cum-
plimiento adecuado de las sentencias condenatorias y resuelve todas las cuestiones que
se suscitan durante la ejecución”.
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De conformidad con el artículo 437 el puede disponer inspecciones y visitas a los estable-
cimientos penitenciarios cuantas veces sean necesarias. Y puede hacer comparecer ante
él a los condenados y a los encargados de los centros penitenciarios con fines de vigilan-
cia y control.
El Director del Centro Penitenciario debe informar al Juez de la Ejecución Penal todo inci-
dente grave que afecte el orden, la disciplina y la seguridad del Centro y que concierne a
los internos condenados.
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CAPITULO IV
PERIODO DE PRUEBA
El articulo 17 señala que “serán considerados como medidas de prueba del recluso:
a) El permiso de salidas del establecimiento por el tiempo que rigen los reglamentos;
b) El alojamiento en instituciones especiales;
c) La concesión de la libertad condicional.”
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CAPÍTULO V
LIBERTAD Y OTROS TIPOS DE SALIDAS DE LOS INTERNOS/AS
Se entiende por libertad el acto de salida de un condenado/a o imputado/a del Centro con
carácter definitivo. Esta se otorgará mediante:
• Cumplimiento de la condena.
• Sentencia de descargo u orden de autoridad judicial competente
• Indulto o amnistía
El acto de la salida es uno de los procesos más importantes que se lleva a cabo en la
Oficina de Admisión y Egreso del Centro Penitenciario. Mediante este acto se procede a
otorgar la salida a un interno/a del centro, sea en libertad, diligencia, permiso o traslado a
otro Centro, y por ello el personal encargado de efectuar esta tarea deberá llevarlo a cabo
con extremo cuidado por motivos de seguridad.
Salidas definitivas
Se entiende por salida definitiva del Centro cualquier acto de egreso de un condenado o
imputado, con carácter definitivo. Por tanto las salidas que se efectúen con la previsión de
que el interno/a reingrese de nuevo en el Centro a lo largo de las horas inmediatamente
siguientes o durante el mismo día no serán consideradas salidas en el Centro y se enten-
derán por lo general como diligencias o permisos.
El artículo 41 de la Ley No. 224, considera causas de egreso del recluso las siguientes:
• Cumplimiento de la condena.
• Libertad condicional.
• Indulto o amnistía.
• Salidas temporales
• Sentencia de descargo u orden de autoridad judicial competente.
Asimismo debemos añadir las salidas producidas por traslado a otro centro penitenciario así
como las que se produzcan por fallecimiento del interno/a, tanto si la muerte se produce en
el interior como en el exterior del establecimiento siempre y cuando el finado permanezca
bajo la tutela de la Dirección General de Prisiones y, finalmente, las salidas por evasión.
Los internos/as que abandonen un centro penitenciario deberán portar consigo todas sus
pertenencias, tanto las que eran de libre disposición como aquellas que les hubieran sido
retiradas y retenidas en depósito en la dependencia del establecimiento habilitada para
esos fines.
Si por el contrario la salida es consecuencia del fallecimiento del interno/a, en el exterior del
Centro serán los Agentes de Vigilancia y Tratamiento quienes se encarguen de identificar
el cadáver y llevar el informe del fallecimiento al Centro, produciéndose entonces la salida
administrativa del mismo.
En todos los casos deberá el Centro tener un documento válido que justifique la orden de
salida del sistema. Una vez llenada esta formalidad se notificará a la autoridad judicial que
hubiera dispuesto la prisión o de quien dependiera el interno/a.
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Salidas condicionales o provisionales
Estas salidas son las denominadas condicionales o provisionales y su acuerdo es compe-
tencia de los juzgados y tribunales de quienes dependan los internos/as o bien, según esta-
blece el artículo 17 c) de la Ley No. 224, parte del periodo de prueba del sistema progresi-
vo. A efectos prácticos no hay grandes diferencias entre estas salidas y los de libertad defi-
nitiva, salvo por el hecho de que normalmente la autoridad judicial habrá acordado algún
tipo de condición que será necesario comunicar al interno/a en el momento de su salida del
Centro. Estas condiciones pueden ser, por ejemplo, la obligación de comparecer ante dicha
autoridad judicial en una determinada fecha o con una cierta regularidad, el depósito de una
fianza, la obligación de asistir a una vista judicial en determinada fecha, etc. Esta notifica-
ción será entregada al interno/a egresado con copia para su expediente y para la autoridad
judicial correspondiente, ambas deberán ser firmadas por el interno/a y por el agente peni-
tenciario que se lo notifique.
Por otra parte los permisos y diligencias pueden ser considerados también como salidas no
definitivas y por lo tanto pasamos a describir aquí la forma en que deben llevarse a cabo.
Permisos
Los permisos o salidas temporales son parte del periodo de prueba del sistema progresivo
y se regirán por lo dispuesto en los artículos 18 y 19 de la Ley No. 224, Una vez acordada
la salida, el Director/a emitirá la correspondiente orden junto con un certificado que será
entregado al interno/a a efectos identificativos en el exterior. En ambos documentos figura-
rán los datos básicos del interno/a, los de la condena o condenas que estuviera extinguien-
do en ese momento, mención a la autoridad judicial de quien dependa y los relativos a la
salida en sí, esto es: fecha y hora de salida y de reingreso, persona que se hace respon-
sable de su acompañamiento y finalidad principal de la salida. El interno/a deberá portar
consigo el certificado que le fuera entregado en el momento de la salida.
También son consideradas permisos o salidas temporales las dispuestas por el art.79 de la
Ley 224: “En caso de enfermedad grave o de muerte de algunos de los parientes del reclu-
so, el director del establecimiento podrá autorizarlo por escrito, para que concurra al lecho
o a los funerales”.
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Diligencias
En cuanto a las salidas de los internos/as que deben ser conducidos ante una instancia
judicial, a un centro hospitalario, a una diligencia policial o cualquier otra en que el interno/a
sea acompañado por agentes penitenciarios encargados de su custodia exterior deberá
seguirse el procedimiento de identificación protocolizado. Las órdenes de salida, al igual
que sucederá con las de permisos, serán conservadas en la Oficina de Admisión y Egreso,
hasta que el interno/a sea reingresado por los Agentes y se comprobará de nuevo la hue-
lla al reingresar.
Sección 1
Protocolo para reingreso:
• Reingreso de diligencias judiciales, policiales u hospitalarias: el interno/a ha salido del
mismo centro penitenciario y, salvo indicación expresa de los agentes penitenciarios encar-
gados de su traslado, no ha tenido contacto con personas de las que se presuma que pue-
dan haberle hecho entrega de ningún objeto o sustancia peligrosa por lo que se seguirá
simplemente el trámite de identificación dactiloscópica consistente en tomar de nuevo su
huella en la orden de salida que ha sido previamente cumplimentada a la salida y se cote-
jará dicha huella con la que se tomó en el momento de la salida y se procederá a un
cacheo, por agentes VTPS que no estuvieron en la custodia de salida del interno/a. El inter-
no/a será a continuación conducido a su celda.
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Título IV
GESTIÓN ADMINISTRATIVA
Procurar las condiciones para que todas las autoridades, empleados y agen-
tes de seguridad, puedan desempeñar sus funciones de forma eficiente.
Para ello la persona que desempeñe el cargo de Subdirector Administrativo debe tener un
amplio conocimiento no solo de las funciones inherentes a su cargo, sino también de las
funciones de las Subdirecciones de Tratamiento y Vigilancia.
Cualquier otra gestión que pueda contribuir al cumplimiento de esta función, previa
autorización de la Dirección del Centro y/o la dependencia oficial.
a.2) Infraestructura y equipos
La subdirección administrativa debe velar por el mantenimiento de toda la infra-
45
estructura y equipos del Centro, evitando el deterioro, organizando una brigada de opera-
rios que lleven a cabo pequeñas reparaciones o con el auxilio de la División de
Edificaciones y Mantenimiento de la Procuraduría General de la República.
Estas medidas repercutirán en una mejor calidad de vida de los(as) internos/as, y en mejo-
res condiciones para que los distintos profesionales que desarrollan su tarea diaria en los
centros puedan llevar a cabo sus funciones, para ello debe:
b.3) Ocuparse de que los uniformes de los empleados estén siempre en buen estado;
b.4) Cualquier otra gestión que entienda necesaria para el cumplimiento de esta función.
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Gestionar el suministro de insumos y Custodiar los objetos de valor y dinero efecti-
vo de los internos.
c.3) Ocuparse de que los uniformes tanto de empleados como los internos/as y
del resto del personal, estén siempre en buen estado y en cantidad suficiente a
la requerida;
La vestimenta, está regulada por los Art. 26 y 28, de la ley 224 que establecen
que el Centro debe proporcionar uniformes a los(as) internos/as y que estos no
deben ser humillantes ni degradantes.
c.6.1) Cuando las autoridades del Centro determinen que el dinero que le haya
sido ocupado a un(a) interno/a, deba ser objeto de intervención oficial por sospe-
cha de la legalidad de su procedencia, se cumplirá lo que al respecto establezca
la legislación correspondiente, sin perjuicio de asegurarlo en la caja como otro
valor cualquiera y de entregar al recluido recibo de descargo, suficientemente
expresivo de las cantidades depositadas, pero no se le dará ingreso en el pecu-
lio de libre disposición o sistema de tickets, hasta tanto sea aclarada la situación;
Manejo de la contabilidad
Esta debe llevarse organizada y transparentemente, a fin de estar en condiciones de
presentar los estados de cuenta, balances e informes ante las autoridades fiscaliza-
doras correspondientes, en el momento en que éstos lo requieran.
47
La fiscalización financiera estará a cargo de los representantes de la Contraloría General
de la República y los funcionarios o auditores que la Procuraduría General de la República
designe para tales efectos, directamente o a través de la dependencia oficial.
d.1) Manejo de fondo de caja chica, conforme a las disposiciones vigentes entre-
gadas por la Subdirección Administrativa de la Dirección General de Prisiones.
(Ver Controles Internos/as para Fondo de Caja Chica)
d.2) Manejo del Fondo en Avance, o cualquier fondo de esta naturaleza que sean
puestos a la disposición del Centro para su desenvolvimiento.
d.3) Manejo de los recursos económicos o peculio libre de los internos(as) a tra-
vés del sistema de ticket.
Recibirá las cantidades indicadas en el conduce emitido por la institución o empresa, com-
probando cantidad, peso y calidad de los artículos que se reciba.
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Deberá llevar un control de las mercancías recibidas para la preparación de los alimentos.
d.6) Inventarios
Igualmente, es responsabilidad de la Subdirección Administrativa el manejo de
los siguientes controles:
La lista actualizada de productos y precios deberá exponerse en un lugar visible para los
internos/as, dentro del economato. Los Productos autorizados para la venta en el econo-
mato son:
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d.6.1) Además de llevar estos controles debe realizar los inventarios de todos los
implementos, artefactos y posesiones de la institución, llevando cuenta, bajo la
responsabilidad del titular, de las altas, bajas y de las modificaciones que se pro-
duzcan en la estructura de las instalaciones y la dotación general de implemen-
tos del Centro:
50
trial, semi-industrial, artesanal artístico y de servicios, que ayude a que el cien por
ciento de los internos/as tenga trabajo, de tal manera que contribuya a reducir la
carga que implica el sostenimiento de los mismos.
A partir de los programas de acción laboral desarrollados, deberá realizar el pago de los
salarios a los internos/as en forma directa y sin participación de otras personas físicas o
morales ajenas a la institución, haciendo los descuentos a que se refiere el Art.61 de la Ley
224 sobre Régimen Penitenciario u otras legislaciones que pudiesen entrar en vigencia
posterior a la publicación de este manual.
Recibir las quejas y peticiones de los(as) internos/as, facultad otorgada por el artícu-
lo 34 de la ley 224, sobre Régimen Penitenciario.
Mantener informado al Director(a) del Centro de las incidencias y novedades del Centro.
Emitir informes técnicos, económicos y estadísticos del Centro para ser presentados
a la Dirección del Centro y a la dependencia oficial por las vías correspondientes.
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Realizar otras tareas afines y complementarias, que le sean asignadas por el Director
del Centro, el Director General de Prisiones y el Procurador General de la República
u otra persona en las que estos deleguen.
Chofer
Mayordomo
Conserje
Mensajero
Cocineros
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Título V
GESTIÓN DE SEGURIDAD
CAPÍTULO I
FUNCIONES DEL AGENTE DE RECEPCIÓN
a) Control de entradas y salidas del Centro
b) Actualización de tablillas de recuentos (control de entradas y salidas de internos/as)
c) Poner en conocimiento del supervisor cualquier movimiento que se produzca durante su
servicio (ingresos, traslados, etc.)
d) Deberá tener en todo momento conocimiento del personal que se encuentra en el inte-
rior del Centro (personal de tratamiento, equipo directivo, agentes, visitas, etc.)
e) Prohibir la salida de cualquier interno/a que no vaya acompañado por un agente, sin
excepción.
f) Control de llaves del Centro
g) Antes de permitir la entrada de cualquier visita en el Centro, asegurarse de que no son
portadores de armas de fuego.
h) Mantenerse informada de todo el personal que acceda al Centro por parte del primer
acceso.
La ubicación y custodia de las llaves de los Centros es una medida de seguridad básica, y
más en los Centros que no cuentan con un sistema de llaves maestras que permitan la
apertura rápida y eficaz de las dependencias en caso de necesidad.
La clasificación y control de todas y cada una de las llaves es fundamental para evitar que
estas puedan ser sustraídas o extraviadas y de esta forma se facilite una evasión.
Es necesario separar las originales de las copias. Las llaves originales serán guardadas y
custodiadas por el Subdirector de seguridad del Centro.
Es fundamental que se confeccione una relación oficial de llaves en que se incluya la referen-
cia de la dependencia que abre cada llave y un código asignado a la misma. En las llaves ori-
ginales se mantendrá la denominación de la dependencia y en las copias se incluye el códi-
go. Al utilizarse únicamente las copias en el trabajo diario se garantiza, que en caso de pér-
dida o sustracción, los internos/as no puedan saber a qué estancia corresponde esa llave.
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Las copias serán las que los agentes utilizarán diariamente y al final del turno de la tarde
se llevará a cabo un recuento de las mismas para asegurar su custodia.
Las llaves del consultorio médico quedarán depositadas en recepción bajo el control del
agente de servicio en ese puesto. El personal sanitario recogerá la llave cuando se incor-
pore al servicio, la cual deberá ser anotada en el formato habilitado para tal fin por el agen-
te de servicio en recepción, una vez finalizada la consulta el profesional deberá entregar la
llave en el mismo lugar de recogida.
CAPÍTULO II
SEGURIDAD INTERIOR
Para el interno/a las circunstancias propias del encarcelamiento, por norma general, pue-
den favorecer la desconfianza y el rechazo al agente de vigilancia en tanto que elemento
represor y símbolo de la institución que le priva de libertad.
La relación agente e interno/a estará en la mayoría de los casos presidida por la obligación
del primero de salvaguardar el buen orden del establecimiento y el cumplimiento de la nor-
mativa, esto puede chocar en algunos casos con los intereses y actividades de algunos/as
internos/as.
Para realizar sus funciones los agentes deben reunir una serie de características, todas
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ellas exigibles a un buen profesional desde la perspectiva de la competencia psicosocial:
• Autocontrol emocional
• Capacidad de resolución de problemas
• Empatía
• Capacidad para la comunicación interpersonal
• Autodisciplina
En este nuevo modelo penitenciario, el agente debe ser, a un tiempo, agente de vigilancia,
informador y orientador del interno/a, interlocutor y agente de tratamiento. Estas funciones
pueden parecer quizá contradictorias entre ellas, incluso incompatibles, pero no obstante la
práctica demuestra que no sólo no lo son, sino que además la correcta integración de todos
estos factores otorga calidad al profesional penitenciario y le convierte en un buen profe-
sional que concita la estima y el respeto de los internos/as y del resto de profesionales.
La captación de información es la tarea más importante que debe realizar un agente de vigi-
lancia y tratamiento penitenciario. Desde el inicio de la jornada se inicia la captación de
información y por lo tanto resulta necesario sistematizarla u ordenarla de alguna forma si
queremos darle utilidad. Por ello una norma a seguir será la de intentar objetivar la infor-
mación, es decir, recoger datos fácilmente contrastables y no impresiones que darán una
visión sesgada, condicionada por una apreciación subjetiva, falseando de este modo los
resultados. Deberemos por lo tanto tener claro en primer lugar qué es lo que buscamos, a
dónde queremos llegar, para a continuación escoger el mejor procedimiento para lograrlo,
finalmente deberemos ordenar la información y decidir en qué la queremos emplear.
Respecto a la primera premisa, qué buscamos, es necesario precisar que el agente peni-
tenciario debe preservar la seguridad y el orden del establecimiento y por lo tanto esa será
su principal tarea, una vez logrado esto deberá atender también a las necesidades trata-
mentales y no olvidemos que una misma información recabada puede servirnos en esta
doble finalidad.
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incluso de forma estadística, mientras que en el segundo caso se trata más bien de infor-
mación cualitativa que requiere un trabajo más riguroso y exige mayor dedicación y empe-
ño en su sistematización.
El agente penitenciario debe ser un buen conocedor de la normativa y de los servicios peni-
tenciarios para poder orientar al interno/a convenientemente, dándole la información que
solicite y que pueda resultarle de utilidad. El trato humano, la comprensión, la empatía e
incluso el consejo pueden ser elementos muy valorados por el interno/a que conferirán al
agente una valoración profesional y un respeto suplementarios.
Sección 1
Observación de los Internos/as
La observación directa del interno/a por parte del agente penitenciario es el recurso más
importante con la que cuenta éste, una buena observación y por lo tanto un conocimiento
de los internos/as ubicados en su departamento llevará a un mejor control de los mismos,
por lo tanto se incrementará la seguridad del centro, y se podrán detectar en muchos casos
posibles incidentes con anticipación.
56
capaces de prevenir, evitando o controlando con más eficacia cualquier incidente que
pueda darse en su departamento. Se detectan, por lo tanto, a través de una buena obser-
vación, amenazas para la seguridad en sus primeras fases, precisamente cuando son más
fáciles de controlar.
Una desestabilización en la conducta del interno/a no sólo puede producirse por hechos
relacionados con su entorno actual sino que también pueden y suelen estar relacionados
con el entorno exterior del interno/a (hijos, matrimonio, pérdida de la vivienda, posibles cau-
sas pendientes, reenvíos...) por todo ello es conveniente que el Agente de la unidad conoz-
ca el mayor número de datos posibles para poder avanzarse a los problemas que el inter-
no/a pueda producir a consecuencia de ello.
La información facilitada por el interno/a directamente deberá ser tenida en cuenta pero con
la prevención que nos merece debido a la manipulación que puede hacer el interno/a de la
misma, aunque no por ello carece de importancia ya que nos puede facilitar un conocimien-
to de su carácter y temperamento.
Sección 2
Grupos y bandas
En todo medio cerrado se crean grupos, algunos de ellos ya proceden de bandas organi-
zadas del exterior, otras se deben únicamente a la afinidad de caracteres sin mayor fin que
el compartir el tiempo, y otros pueden generarse para extorsionar y traficar con objetos o
sustancias prohibidas en el centro. Cada uno, en su medida, interesa que sean identifica-
57
dos para poder conocer las dinámicas que puedan establecer en el interior y/o exterior del
establecimiento. En el último supuesto es importante su identificación para poder intercep-
tar sus acciones y prevenir múltiples problemas personales y ambientales en la prisión.
Las acciones que realicen dichos grupos pueden ser muy variadas, y los beneficios econó-
micos no siempre son intramuros, en algunas ocasiones las propias familias se encargarán
de cobrar y pagar fuera del centro las deudas o pagos correspondientes a su actividad.
Para ello es importante el control de las cuentas económicas de los internos/as y sobre todo
la procedencia de sus ingresos, obsequios o similares.
Dentro del Centro resaltarán como días problemáticos los días de comunicaciones con las
familias y los días de recepción de paquete del exterior, momento aprovechado por los inter-
nos/as para la introducción en el centro de objetos prohibidos de diversa índole. Justo en
ese día y en los siguientes el Agente debe estar atento a los movimientos tanto del grupo ya
diferenciado como de aquellos internos/as no habituales que se acerquen a él. Estos últimos
comprarán o entregarán seguramente algo a los primeros, y es muy posible que no sean
internos/as de los que inicialmente se podría sospechar ya que precisamente debido a esta
condición de “poco sospechosos” han sido captados u obligados a trabajar para el grupo.
No podemos olvidar que siempre puede existir un grupo de internos/as que se dedique a
la extorsión del resto para sobrevivir en la prisión, por tanto, no necesitan traficar con nin-
guna sustancia prohibida. En este supuesto es muy importante observar la presencia de
marcas en el cuerpo de algún interno/a, así como el pago de gastos sin motivo aparente
por parte de uno o varios internos/as hacia miembros del grupo ya que puede revelarnos
que dicho interno /a está sufriendo algún tipo de extorsión.
Los grupos están liderados por un tipo de internos/as con unas características muy concre-
tas, son internos/as que mantienen una relación muy correcta con los Agentes y demás pro-
fesionales del centro, evitando enfrentamientos directos. No participarán directamente en
ningún tipo de incidentes, cumplirán siempre las órdenes recibidas y las normas de convi-
vencia establecidas, su círculo personal es muy reducido, su espacio físico es aún más
concreto que el del grupo que lidera.
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Solución de conflictos
Es fundamental que el personal penitenciario sepa prever y detectar los conflictos y la rele-
vancia en la que pueden desencadenar los mismos. Dependiendo del grado del conflicto,
dependerá el nivel de actuación para solucionarlo. Por ejemplo, no es comparable un con-
flicto de la magnitud de un motín o un secuestro, con un altercado de un interno aislado en
su celda, o las quejas de unos familiares por no poder entregar un paquete al interno/a que
una situación de crisis en un interno por no ser atendido por el médico ante la manifesta-
ción de una dolencia.
Los pequeños conflictos son prácticamente el día a día dentro de los establecimientos peni-
tenciarios. La resolución de éstos será, en cierto modo, una de las tareas principales del
agente de vigilancia y tratamiento penitenciario. Estar dotado en el conocimiento de técni-
cas y habilidades comunicativas es básico y fundamental para el desempeño de las tareas
de seguridad y vigilancia.
Los conflictos de máximo riesgo o de mayor relevancia, no debemos tomarlos como pro-
pios ni creer que está en nuestra mano resolverlos. En ese caso debemos de trabajar en
equipo y cumplir las directrices que se hayan protocolorizado para cada supuesto.
En conflictos individuales o de menor relevancia, debemos partir de la base del diálogo, uti-
lizando la persuasión para evitar el enfrentamiento. Nunca deben afrontarse estas situacio-
nes con hostilidad. Es importante que en ningún momento demos la sensación de no tener
la situación controlada, o de no ser concretos en nuestras palabras o posicionamiento. Es
importante en una negociación, sea individual o colectiva, no hacer promesas ni entrar en
pactos de los que no podemos responder.
Sección 3
Comunicación no verbal
La mirada.- Es importante mantener la mirada sobre nuestro interlocutor de manera fre-
cuente, dirigida a la cara y los ojos de éste y de manera fija, con seguridad, para transmi-
tir órdenes y consignas. La mirada debe procurar ser receptiva, evitando la hostilidad y el
reto. Es importante mantener la mirada mientras hablamos o escuchamos.
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Los gestos y la expresión facial.- La expresión facial es un indicador potente de emocio-
nes. Es conveniente que la otra persona reciba información también mediante nuestra
expresión facial. Una persona que no cambia el gesto en una relación interpersonal puede
dar a entender al otro sentimiento de indiferencia o de excesiva rigidez, por tanto debere-
mos mostrar gestos abiertos y espontáneos.
La postura corporal.- Para empezar, si queremos mostrar una actitud positiva, debemos
mostrar una inclinación ligeramente adelantada del cuerpo, ya que si la inclinación es hacia
atrás podemos aparentar rechazo. Una postura demasiado erguida mostrará una tenden-
cia orgullosa y engreída, en definitiva, hostil.
Sección 4
Componentes paralingüísticos:
Volumen.- Debe ser adecuado a cada situación. Normalmente debe indicar seguridad, es
decir no ser demasiado elevado pero sí lo suficientemente alto para que se entiendan nues-
tras indicaciones con claridad.
Tono.- Básicamente nos moveremos en torno a dos tipos de tono; cálido, suave y cercano
para persuadir o seguro y firme para ordenar.
Fluidez del habla.- No debemos dejar demasiados espacios de silencio, pues podríamos
indicar desprecio o enfado. Atención al uso indiscriminado de “argot”, puede resultar con-
traproducente tanto en un extremo como en el otro. Adecuar la velocidad a la capacidad de
entendimiento del interlocutor.
Sección 5
Utilización de medios coercitivos
En algunas ocasiones, por la tipología o desarrollo del conflicto, se hace necesario interve-
nir, en última instancia, mediante la utilización y aplicación de medios coercitivos.
Los medios coercitivos, deben ser directamente proporcionales al nivel del problema que
tengamos que resolver, sin olvidar que el Director, delegando en el Subdirector de
Seguridad o Supervisor de Servicios es quién autorizará a utilizarlos.
Es evidente que hay muchos casos en los que la necesidad hace inminente utilizar los
60
medios coercitivos, y lo haremos con la misma proporcionalidad y avisando de inmediato a
los mandos superiores.
La función de estas medidas es, como su nombre indica, coartar e intimidar al interno/a
para que desista de su actitud agresiva, o repeler cualquier acción violenta contra el perso-
nal penitenciario u otro interno/a.
Estos serían los medios coercitivos mas utilizados en el interior del centro penitenciario,
dejando para el apartado de material antidisturbios:
• Los “escudos”
• Los “chalecos” antitrauma, anticorte y si es necesario antibala”
• Las “defensas reglamentarias” o Macanas
• Los “cascos”
Es importante remarcar que el Director/a del centro, directamente o a través del Supervisor
de Servicios, será quien dé las órdenes para la utilización de tales medidas.
Sección 6
Recuentos: Finalidad y Tipologías
Se entiende por recuento el control presencial de la población reclusa de un establecimien-
to o departamento concreto.
El recuento es uno de los medios para garantizar la seguridad interior del establecimiento,
así como para la comprobación y prevención de fugas o evasiones.
Recuentos ordinarios
Se realizaran recuentos ordinarios diarios coincidiendo con el número de relevos de perso-
nal o guardias de los Agentes adscritos a los departamentos que configuren el estableci-
miento y en el horario que establezca la normativa que lo rija.
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Recuentos extraordinarios
Siempre que lo ordene y a discreción del Director, el Subdirector de Seguridad o el
Supervisor de Servicios.
Sección 7
Apertura y Revisión de Celdas
En cualquier apertura de celda y/o habitación se deberán adoptar las mismas medidas de
seguridad que en la realización de los recuentos.
Se entiende que la apertura y revisión de celdas y/o habitaciones se realizará siempre que
el interno/a deba abandonar la celda por cualquier motivo; visita médica, comunicación
familiar o con abogado, cumplimiento del horario establecido por la Comisión de vigilancia,
evaluación y sanción, etc.
Las celdas y/o habitaciones deben estar en perfecto estado de revista e higiene, la cama
hecha y los objetos autorizados y material de limpieza en los lugares habilitados para los
mismos. La Comisión valorará cuales son los objetos y material autorizados a tener en la
celda, reflejándolo en la normativa interna del centro.
Con independencia del control de los objetos personales autorizados al interno/a, el Agente
observará el estado del equipamiento de la celda y/o habitación y de su mobiliario.
Cualquier incidencia en la revisión (exceso de ropa, rotura de material del centro, marcas en las
paredes, etc.) será notificada al Encargado de área y éste por escrito al Supervisor de Servicios
si procediera (por ejemplo un expediente por mal uso o rotura de material del centro).
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Es recomendable realizar como mínimo una revisión de cada una de las celdas del depar-
tamento diariamente.
Sección 8
Cacheo Personal y Requisa de Dependencias
Los cacheos y registros tienen la finalidad de encontrar en el interior del establecimiento
objetos o sustancias peligrosas y/o prohibidas por la normativa que puedan menoscabar la
seguridad del centro poniendo en peligro la integridad física de los internos/as y de los
Agentes.
Requisas de celdas
Lo llevarán a cabo siempre un mínimo de dos agentes, con los internos/as presentes, pero
a distancia suficiente para no entorpecer el cacheo. Se utilizarán siempre guantes protec-
tores y si es posible medios mecánicos (detectores de metal) para colchones, paredes, o
similar.
Se iniciará el registro desde el fondo de la celda y/o habitación hacia fuera, siendo encar-
gado cada agente de una zona concreta. Hay que tener especial cuidado con las zonas no
visibles. También hay que ser especialmente cuidadoso y respetuoso con los objetos per-
sonales del interno/a, por ejemplo fotos o similar, que pueden acabar siendo un foco de
conflictos propiciatorios de incidentes.
Siempre se dejará constancia por escrito de la realización del registro mediante un informe
dirigido al Supervisor de Servicios en el que obligatoriamente deberán figurar los nombres
de los internos/as ocupantes de la celda, los agentes participantes y las incidencias si las
hubiera.
Las celdas pueden ser requisadas en cualquier momento con base a la observación perso-
nal del agente, sospechas o informaciones recibidas, en ningún caso se utilizará el cacheo
como un tipo de sanción encubierta o modo de presión.
63
Requisas de zonas comunes
Las zonas comunes son las que son utilizadas por la población interna sin estar asignada
a ninguna actividad específica; pasillos, corredores, escaleras, o incluyendo también las uti-
lizadas por los internos/as y los profesionales del centro para la realización de actividades;
escuela, talleres o similar, lavaderos, etc.
Todos los días, se requisarán y revisarán las diferentes zonas preferible y recomendable-
mente en horas en que la población reclusa esté en sus celdas.
Registro personal
Este registro, también llamado policial, consiste en la palpación del interno/a por encima de
la ropa. En la mayoría de los casos se buscan objetos prohibidos relativamente grandes.
Por este sistema es difícil detectar objetos prohibidos de menor tamaño.
Este tipo de cacheo debe realizarse de manera aleatoria o cuando se sospeche que algún
interno/a posea algún tipo de objeto prohibido. También siempre que el interno/a salga y
entre del establecimiento penitenciario.
64
Se debe hacer hincapié en que cualquier incidencia que se produzca en un cacheo o requi-
sa debe notificarse inmediatamente y por escrito mediante informe dirigido al Supervisor de
Servicios.
Cacheos integrales
Se trata del cacheo más minucioso. En este tipo de cacheo el interno/a se desprende de
toda su ropa para visualizar la totalidad de su cuerpo. El establecimiento penitenciario esta-
rá dotado de una dependencia habilitada y adecuada para llevarlos a cabo.
Este tipo de cacheo deberá reflejarse siempre por escrito, aunque no se produzcan inciden-
cias.
65
Sección 9
Sustancias y Objetos prohibidos
Quedarán prohibidos en el interior del Centro de Corrección y Rehabilitación, todos aque-
llos objetos que puedan suponer un peligro para la seguridad, la ordenada convivencia o la
salud, tales como:
66
CAPÍTULO III
SEGURIDAD EXTERIOR
Sección 1
Conducciones y traslados
De las conducciones y traslados de los internos/as se ocuparán los Agentes del Cuerpo de
Vigilancia y Tratamiento Penitenciario destinados a dicho servicio. Estos Agentes deberán
seguir una metodología de trabajo protocolizada que les permitirá reducir considerablemen-
te los riesgos que entrañan este tipo de situaciones, además les permitirá actuar con una
seguridad y disciplina que redundará en beneficio de los propios internos/as al ser mucho
más fácil respetar sus derechos y libertades individuales.
En primer lugar cabe reseñar que la Ley No. 224, en el artículo 43 nos dice que “Los tras-
lados de reclusos (…) se harán en carros celulares especialmente destinados para tal tra-
bajo. En todo caso se sustraerá el recluso de la curiosidad pública, estará exento de publi-
cidad y el traslado se efectuará respetando la dignidad de la persona”. La prohibición de
hacer públicas las conducciones debe ser objetivo prioritario de los agentes penitenciarios
ya que no sólo se evita con ello el escarnio del interno/a sino que además, y fundamental-
mente, se evita que desde el exterior de la prisión pueda orquestarse cualquier tipo de plan
de fuga que pudiera, aprovechando el propio traslado, poner en peligro la vida o la integri-
dad física del interno(a) y de los agentes que lo efectúan.
El protocolo de actuación de la unidad de traslados no diferirá demasiado del que sigan los
agentes de vigilancia interior: de idéntica forma se practicarán los registros personales y de
pertenencias cuando sea necesario, y el trato con los internos/as deberá ser el estrictamen-
te necesario, evitando la confraternización. Se diseñará un sistema de traslados que evite
en lo posible los itinerarios repetitivos, intentando no pasar siempre por el mismo lugar a la
misma hora.
67
mente con familiares o amigos de los que se suponga pueden favorecer una fuga, se toma-
rán las medidas oportunas para reducir este riesgo destacando agentes penitenciarios sin
uniformes en el lugar de llegada de la conducción que, además de servir de apoyo a los
agentes de la conducción, realizarán labores de contravigilancia e información. Los agen-
tes deberán estar atentos a las personas que se encuentren en las proximidades del vehi-
culo o de los conducidos, ya que sus familiares u otras personas pueden conocer el día y
hora de la consulta para facilitar una fuga.
Durante los traslados los internos/as pueden ir sujetos mediante las esposas. Será decisión
discrecional del responsable de la unidad de traslados hacer uso de las esposas, pero en
ningún caso se encadenará a unos internos/as con otros y nunca al propio vehículo.
Los traslados sólo se llevarán a cabo si existe la correspondiente orden firmada y cumpli-
mentada debidamente por autoridad competente para ello.
Los traslados serán ordenados, según dispone el artículo 42 la Ley No. 224, por el Director
General de Prisiones quien emitirá una orden para cada uno de los Centros implicados, el
de origen y el destino del interno/a. La orden de salida llegará al Director del Centro de ori-
gen quien emitirá una orden de salida por este motivo tras haber coordinado el traslado con
el responsable del equipo de conducciones y con el Centro receptor. En lo demás se segui-
rá el protocolo común a cualquier salida.
La información del interno o internos para estos casos es vital, el dispositivo táctico debe ir
siempre en función del nivel de riesgo o peligrosidad de quién vayamos a trasladar o para
las conducciones que debamos hacer.
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• Itinerario
• Medios materiales
• Medios humanos
• Alternativas de emergencia
Es importante revisar la información previa y la valoración del riesgo, con el fin de no come-
ter errores que puedan afectar a la seguridad del interno/a y de los agentes penitenciarios.
69
regla general, estos traslados o conducciones se pueden efectuar de forma conjunta con
otros internos/as a excepción de los catalogados en los grupos 1 y 2 que siempre se reali-
zarán separados del resto de los internos/as por unidades especializadas.
Los bultos de los internos/as deberán ser depositados en un lugar dentro de la conducción
donde ellos no tengan acceso a los mismos. La carga y descarga de los bultos será reali-
zada por sus propietarios hasta el vehículo, debiendo en todo momento estar supervisado
este traslado por miembros de la fuerza conductora y bajo ningún concepto se permitirá
una vez esté el bulto en el vehículo que el interno/a tenga contacto con cualquier otro inter-
no/a que no vaya a ser conducido.
Conducciones de internas
Cuando se realicen conducciones de internas dentro de la fuerza conductora deberá de
haber agentes femeninos.
Cuando tengan que viajar juntas internas con sus hijos pequeños, los traslados se harán
en vehículos idóneos e irán acompañados por personal de la Dirección del Centro.
Conducciones de militares
Los agentes VTP encargados del traslado de militares o policías podrán ir acompañados
de quien la Dirección general de Prisiones designe y que pertenezca al cuerpo al que per-
tenece el trasladado, debiendo guardar siempre el respeto y consideración a su dignidad,
sin que en ningún momento se merme la seguridad.
70
2.-Distribuir al personal de la conducción según considere, más oportuno, así mismo
situará adecuadamente a los conducidos dentro del vehículo, atendiendo a las cir-
cunstancias personales de cada uno de ellos.
3.-Podrá tomar las medidas de seguridad que estime necesarias para garantizar la
custodia durante la conducción, como el uso de grilletes metálicos o desechables,
colocar en sitio adecuado, observación permanente, etc.
6.-Deberá cerciorarse mediante informe emitido por el medio del Centro de origen
de la salud del o de los conducidos.
8.-Podrá disponer lo que crea más oportuno sobre la realización o no del servicio.
Cuando las circunstancias climatológicas adversas impidan o dificulten gravemente
la conducción, pudiendo solicitar apoyo a cualquier miembro de policía o ejercito así
como la utilización de sus instalaciones.
9.-Deberá disponer lo necesario para que sean los agentes que realizan la conduc-
ción los que en lugar apropiado procedan al cacheo de los internos/as que serán
conducidos.
71
Custodias e ingresos en centros hospitalarios
El equipo de agentes de traslados llevará al interno/a al lugar de la consulta. Los agentes
no permitirán que se establezca contacto físico con otras personas evitando con ello posi-
bles fugas o cualquier otra acción que pueda poner en peligro la integridad física del inter-
no/a, la de los componentes de la conducción o a terceros.
En caso de quedar ingresado en un hospital la vigilancia y custodia del interno/a pondrán
en conocimiento de esta incidencia a la mayor brevedad al Supervisor de Servicios para
que sea notificado al Subdirector de Seguridad y al Director del Centro.
Corresponde a los Agentes de Vigilancia la identificación de las personas que vayan a visi-
tar a los internos/as.
Evasión de Interno/a
En el caso de producirse una fuga esto será puesto inmediatamente en conocimiento del
Supervisor de Servicios y este al Subdirector de Seguridad y al Director del Centro para que
este a su vez informe a la Dirección General de Prisiones. El informe que se le redactará
al Director del Centro debe contener:
-Hora de la fuga
-Señas identificativas (Vestimenta)
-Lugar de la fuga
-Medios empleados (apoyo externo, vehículo)
-Dirección que tomó
-Armas utilizadas; y cualquier otra información que contribuya a su captura.
Sección 2
Vigilancia Perimetral
Los agentes de esta unidad se encargan de todo lo relacionado con las funciones de vigilan-
cia y control del centro penitenciario en las zonas de los anillos de seguridad y del exterior.
72
incidentes que puedan producirse.
• Posibilidad de ampliación de la iluminación en puntos determinados, donde el
agente de servicio tenga la opción de libre enfoque.
• Anotación en el libro de incidencias de vigilancia exterior, de cuantas novedades
pudieran surgir en el servicio.
• Control del perímetro exterior del centro y zonas de influencia del mismo tales
como áreas de trabajo exterior, granjas, talleres concertados, etc.
• Control armado de los accesos exteriores al centro y de los diferentes puntos perimetra-
les de vigilancia del mismo, así como el uso de las armas pertinentes en torres y garitas.
Sección 3
Anillos de seguridad
Los anillos de seguridad son los diferentes perímetros, establecidos como tal, para mante-
ner el control de acceso o salida del centro seguro, desde cualquier punto posible, asegu-
rando las distintas zonas y distribuyendo las funciones de vigilancia a las unidades que
corresponda o a la tecnología de que se disponga.
En la distribución de los diferentes sectores en los que esté dividido el centro se incluyen
los anillos de seguridad, que con un número de dos, podríamos centrar el trabajo a desa-
rrollar en su configuración, preferentemente sobre la zona donde deban aplicarse.
Todo esto, bajo la supervisión y coordinación (a ser posible) de un Centro de Control, el cual
de estar dotado con medios tales como cámaras y sensores, llevarían a un mejor control
de la seguridad del centro.
En relación a las zonas a cubrir y las dimensiones del terreno que debamos asegurar, dis-
pondremos los operativos o procedimientos a seguir en cada uno de los diferentes sectores.
73
CAPÍTULO IV
COMUNICACIONES CON EL EXTERIOR Y VISITAS
Las comunicaciones se realizarán en las salas habilitadas para tal fin, evitando que fami-
liares e internos/as accedan a la zona de dormitorios u otras dependencias, lo cual facilita
la seguridad, el orden y el control del establecimiento.
Los hijos menores de los internos/as tendrán un día especial para las visitas. En la medida
de lo posible se les facilitará toda privacidad. Únicamente se autorizará la entrada de meno-
res de edad cuando sean descendientes del interno/a.
En la zona de acceso al Centro, debe haber un letrero visible y claro en lo que se especi-
fiquen los requisitos de visitas, así como los derechos y obligaciones de los visitantes en el
transcurso de la misma. También se explicará cuáles son las consecuencias del incumpli-
miento de las obligaciones y a qué superior pueden acudir quienes consideren que no se
respeten su derechos.
Sección 1
Personas autorizadas a comunicar
• Visitantes hasta segunda relación de parentesco (esposos/as, hijos, padres, hermanos,
abuelos, tíos, cuñados...) que puedan demostrarlo documentalmente.
• Personas sin relación de parentesco que previa petición por parte del interno/a, hayan
sido autorizadas por la Dirección del Centro, en razón de que pueden contribuir a la reha-
bilitación del interno/a.
• Abogados apoderados.
Sección 2
Tipos de comunicaciones
• Comunicaciones familiares:
Personas con relación de parentesco que pueda ser demostrada documentalmente.
74
Amigos, previamente autorizados por la Dirección del Centro. Los amigos autorizados a
comunicar acompañados de familiares, no podrán hacerlo en ausencia de estos.
• Comunicaciones íntimas:
Personas que mantengan relación de pareja con el interno/a y que lo puedan acreditar
(acta de matrimonio, de convivencia, de empadronamiento, certificado de parroquia o cons-
tancia de comunicación íntima en otro centro penitenciario). Queda prohibida la autoriza-
ción de visita íntima con parejas eventuales.
La Dirección del Centro Penitenciario autorizará la visita en horario diurno fijando el día, la
hora y el lugar, debiendo realizarse, en principio, en un área especialmente asignada al
efecto, fuera del lugar de alojamiento de los internos o en su defecto, en un lugar que pre-
serve la discreción y tranquilidad del establecimiento.
Estas visitas se concederán cada quince días y su duración no será inferior a una hora ni
superior a dos horas, siendo hecha por su cónyuge o pareja estable. La prolongación de la
visita íntima se fijará de acuerdo con la demanda existente y a los espacios con que cuen-
ta cada Centro, sin perjuicio de que su duración mínima no podrá ser inferior a una hora.
La visita íntima estará condicionada a que tanto el interno/a como su pareja se sometan a
exámenes periódicamente.
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e) A solicitud del interno/a o su pareja
f) Cuando durante la visita trascendiere la comisión de hechos que haga presumir
peligro para la seguridad del interno/a o su pareja, o indicios que involucren falta de
respeto o consideración entre los mismos.
Procedimiento
Para cada interno se confeccionará un expediente iniciado con la solicitud pertinente y en
que se le adicionará: el consentimiento del cónyuge o concubino/a, las verificaciones res-
pecto a su identidad, vínculo y estado de salud.
El servicio médico del Centro informará inicial y trimestralmente acerca del estado de salud
de los internos y de la existencia de impedimentos de orden médico. Asimismo asesorará
a la población penal sobre toda medida medico-preventiva referida a enfermedades de
transmisión sexual y para control de la natalidad.
Las actuaciones de la Junta de Tratamiento como las informaciones médicas tendrán carác-
ter estrictamente reservado y en base a éstas se proveerán las autorizaciones de las visitas.
El cónyuge o concubino/a debe haber demostrado buen estado de salud mediante certifi-
cado expedido por la autoridad sanitaria.
El Supervisor/a de Servicios llevará un libro de visitas íntimas que será verificado y rubri-
cado por él al final de cada jornada en la que se hayan registrado visitas y se revisará
semanalmente por la Junta de Tratamiento.
Este libro debe contener lo siguiente: fecha, hora, expediente, interno/a, vínculo del visitan-
te, observaciones.
Reglamentación interna
El Centro suministrará la ropa de cama al interno/a para la visita íntima, quien la devolve-
rá limpia.
76
Los internos y sus parejas son conjuntamente responsables por el mantenimiento y la higie-
ne del área, debe ser dejada limpia después de cada visita.
Los internos/as como sus parejas se abstendrán de causar daño en el inmueble y mobilia-
rio; serán responsables de cualquier perjuicio ocasionado en el área propiedad estatal.
Los visitantes están obligados a respetar las normas del establecimiento así como las ins-
trucciones y las directivas particulares que complementariamente imparta la Dirección del
Centro.
Sección 3
Desarrollo de la comunicación. Procedimiento a seguir desde el exterior.
77
Entrada De Paquetes
Un agente penitenciario será el encargado de recoger los paquetes que los comunicantes
traigan a los internos/as, teniendo en cuenta que cumplan los siguientes requisitos:
El paquete irá en bolsas de plástico, de fácil manipulación, con una relación de los artícu-
los que contiene. Posteriormente pasarán a la sala de cacheo donde serán revisados minu-
ciosamente. Los artículos no autorizados, serán devueltos el mismo día al finalizar la comu-
nicación o pudiéndole hacer en la siguiente comunicación, identificando el nombre del
depositario.
Sección 4
Ingreso de dinero
Los comunicantes que deseen realizar un ingreso de dinero para un interno/a, deberán diri-
girse al agente de vigilancia encargado de esta tarea, el cual entregará un recibo donde
constará la identidad del depositario, nombre del interno/a y cantidad depositada.
Se utilizarán tickets de uso interno, con una cantidad de disposición máxima a la semana
y servirán para comprar en el economato.
Sección 5
Procedimiento a seguir desde el interior del Centro
• Los internos/as deberán hacer, obligatoriamente, la solicitud para las comunicacio-
nes, el primer día del mes (o según establezcan reglamentariamente en función del
establecimiento). Quedarán excluidos de este término los ingresos y reingresos de
fechas posteriores.
• En la instancia constará el día y la hora o turno de preferencia, fijando una segun-
da alternativa, por si el turno solicitado estuviese completo.
78
• Estarán claramente indicados los nombres de los comunicantes, así como la rela-
ción de parentesco que les une.
• El turno de la comunicación se notificará con suficiente antelación, el agente peni-
tenciario notificará con la entrega de unos recibos, el turno, la hora, y el día de la
comunicación a los internos/as.
• No se admitirán cambios una vez notificada la comunicación si no es por causa jus-
tificada.
• Las comunicaciones que no se hayan hecho el día señalado en la autorización, no
podrán recuperarse.
Desarrollo de la comunicación
• Los internos/as deberán estar preparados antes del horario previsto para su comu-
nicación y atentos a la llamada del agente penitenciario. Aquellos internos/as que no
se presenten en el término reglamentario, perderán la comunicación.
• Los internos/as esperarán a la familia 30 minutos siendo regresados al módulo si
ésta no se presenta.
• A la comunicación no estará permitido llevar objetos de valor, cartas, paquetes... Si
se llevaran, serán retirados por el agente penitenciario, elevando el correspondien-
te informe. Si los objetos de valor son considerables, se suspendería la comunica-
ción regresando nuevamente al interno/a a su módulo.
• El interno/a podrá acceder a la comunicación con una cajetilla de cigarrillos y un
máximo de cinco bebidas sin abrir, así como alimentos envasados de venta en el
Centro. Al finalizar la comunicación el interno/a tendrá que salir de la misma sin nin-
gún objeto. Los artículos que no se hayan consumido durante la comunicación serán
retirados por la seguridad y depositados en el Zafacón.
• Una vez finalizada la comunicación se trasladará a los internos/as a una sala
común donde se les realizará un cacheo elemental, a no ser que haya sospechas u
órdenes concretas de realizar un cacheo más exhaustivo. Estos últimos se realiza-
rán en habitaciones habilitadas para este fin y se harán individualmente. Una vez
realizados estos pasos se trasladará a los internos/as a su pabellón y posteriormen-
te se acompañará a la familia al exterior.
Una vez finalizada la comunicación los internos/as no podrán mezclarse con la familia.
79
Intervención de objetos y sustancias prohibidas
Dado que las comunicaciones son una de las vías más habituales de entrada de drogas y
otros objetos prohibidos a los centros penitenciarios, es necesario tener claro las actuacio-
nes a seguir ante tales situaciones.
Procedimiento de actuación
Una vez finalizada la comunicación se le indicará al interno/a que se tienen sospechas de
que es portador de alguna sustancia estupefaciente. Se le hará pasar a una dependencia,
siempre bajo la supervisión de un agente penitenciario, sin dejarlo solo en ningún momen-
to, para que no pueda deshacerse de la misma. Si accede voluntariamente a entregarla, se
estará presente hasta que la expulse o la saque, dependiendo de la vía utilizada para intro-
ducirla. Si aun así se tienen sospechas de que pueda llevar más cantidad, se pondrá en
conocimiento del médico del centro y del director para que tomen las medidas que consi-
deren convenientes. Si se cree que no es portador de otras sustancias, se le hará pasar a
su dependencia de origen.
El Director del Centro pondrá al portador y al objeto y sustancias a disposición del Ministerio
Público.
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Sospechas importantes de familiares portadores de objetos y sustancias prohibidas
En estos supuestos es importante que el director del centro comunique fundamentado la
sospecha al Ministerio Público para que en caso de que la misma fuese real procediera en
consecuencia.
Sección 6
Normas básicas de seguridad
Desde el exterior:
1. Se evitará la concentración de visitantes en las zonas de paso (entradas, salidas, pasillos...).
2. Se identificarán correctamente tanto a la entrada como a la salida, evitando que ningún
comunicante no autorizado pueda llegar hasta la sala de espera.
3. Es muy importante la identificación de los internos/as después de la comunicación, y
antes de la salida de los familiares, con la finalidad de evitar posibles fugas por suplanta-
ción de identidad.
4. Durante los días de las comunicaciones se incrementará el control de todo el personal
que entre o salga, exigiendo la documentación de aquellas personas que se desconozcan,
aunque lleven identificación.
5. Si se produjera algún incidente no controlable, se solicitará la presencia de los mandos
del centro y si se considerase necesario el refuerzo de los agentes de vigilancia exterior
para ayudar a desalojar al personal que altera el orden.
6. En el caso que se detecte una falsificación de documentos o indicio de delito, el Director
lo pondría en conocimiento del Ministerio Público para que tomase las medidas oportunas
en el caso.
Desde el interior:
1. Se evitará la coincidencia de turnos en las salidas y entradas a las comunicaciones, man-
teniendo los horarios previstos. Si se produjeran retrasos, nunca saldrían a comunicar los
internos/as de un turno sin que hayan regresado los del turno anterior.
2. Se deberá cachear a los internos/as a la entrada y salida de las comunicaciones. De
forma aleatoria y atendiendo básicamente a las sospechas de posible introducción, se rea-
lizará un cacheo más exhaustivo.
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• Observación directa de síntomas de consumo de drogas, nerviosismo, movimien-
tos extraños de los internos/as.
• Posibles presiones ejercidas sobre otros internos/as y conocidas a través de infor-
maciones confidenciales, declaraciones.
• Observación directa de síntomas de consumo de drogas en familiares.
• Antecedentes de incautación de droga y suspensiones anteriores de comunicacio-
nes.
• Los familiares no podrán entregar directamente los artículos autorizados a los inter-
nos/as; deberán hacerlo siguiendo el procedimiento establecido en el centro.
• Cuando se realice un cacheo integral a un interno/a se deberá poner inmediata-
mente en conocimiento del Supervisor de Servicios mediante el informe correspon-
diente y siempre motivado.
Turno de comunicaciones
El agente penitenciario avisará del inicio del turno y se encargará de identificar y recoger los
documentos de identidad de las personas que entran a comunicar, acompañándolos en todo
momento hasta la sala donde se realicen las comunicaciones y estando presente durante
las mismas.
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Durante la comunicación los agentes penitenciarios realizarán un control visual de la comu-
nicación para evitar que puedan intercambiar cosas entre ellos.
Sección 7
Registros de entrada y salida de Personalidades en Vehículos
Protocolo:
-Detener el vehículo
-Identificación mediante documento acreditativo de personalidad
-Abrir el baúl (sin excepción).
Nota: Si alguna de estas autoridades no están en ejercicio de sus funciones no está moti-
vada la visita a los establecimientos penitenciarios.
Todas las personas anteriormente descritas como personalidades deberán ser tratadas con
la mayor diligencia posible. Si son portadores de armas de fuego, deben dejarlas en sus
vehículos y no podrán acceder al interior de las edificaciones del establecimiento con las
mismas.Todo Vehículo que entre y salga del centro penitenciario debe ser revisado y ano-
tado el número de la placa y sus ocupantes así como la hora de entrada y salida del mismo.
Sección 8
Transmisiones y Comunicaciones
Para el funcionamiento del centro, es de vital importancia la utilización de equipos de radio
en las comunicaciones.
Estos medios son utilizados mediante protocolos de comunicaciones, con los cuales de ser
posible, se dispondrá de varias frecuencias, para no pasar en exceso las comunicaciones
por el mismo canal, con la excepción del centro de control que deberá comunicar por todas
83
las frecuencias, a fin de actuar como coordinador si ello fuera necesario, siempre en cone-
xión directa con el Supervisor de Servicios.
Frecuencias:
• Conducciones y Traslados
• Vigilancia Exterior – Perimetral
• Vigilancia Interior
Indicativos:
• Director/a.
• Subdirectores.
• Supervisor de Servicios.
• Encargado de área.
• Agentes de Vigilancia asignados a la Unidad de Conducciones y Traslados.
• Agentes de Vigilancia asignados a la Unidad de Vigilancia Exterior-Perimetral.
• Agentes de Vigilancia asignados a la Unidad de Vigilancia Interior.
• Vehículos.
• Accesos.
• Comunicaciones.
Códigos:
• Aislamiento Provisional.
• Avisar Servicios Médicos.
• Secuestro de personal penitenciario u otros colaboradores externos.
• Alteración GRAVE del orden (Peleas multitudinarias y motines)
• Intento de evasión del centro.
• Incendio detectado.
• Solicitud de apoyo.
• Posible incidente o agresión a un agente.
• Agresión confirmada o situación de peligrosidad.
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Debe existir otro indicativo genérico que determine la implicación de internos/as
entre sí:
• Posible incidente entre internos/as.
• Incidente pelea entre internos/as, confirmado.
• Interno/a herido caído.
• Pases, “carros”, intercambios o comercio ilícitos.
Los códigos asignados es oportuno revisarlos “in situ”, con el fin de adecuarlos a la reali-
dad tanto de la zona, como a las características arquitectónicas, para conocer con detalle
el terreno donde desenvolverse, y las funciones que se encomienden a los diferentes pues-
tos de trabajo.
El código universal alfanumérico es el código que se usa en todo el mundo para establecer
comunicaciones vía radio. Se aplica para deletrear nombres propios o matrículas. Tiene la
virtud de que las palabras utilizadas son muy diferentes entre sí y por lo tanto son fácilmen-
te identificables.
El código es el siguiente:
Redacción de Informes
Como resultado del trabajo de observación de los internos/as y las dependencias donde
conviven, y por la necesidad de transmitir a los superiores y compañeros los resultados de
esta observación, existen diferentes modelos de informes que engloban las situaciones en
que nos podemos encontrar dentro de un centro penitenciario.
• Informes formalizados
• Informes de hechos
• Informes de observación
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Informes formalizados: Se trata de situaciones cotidianas que no revisten una especial
gravedad ni necesitan una actuación inmediata, pero que requieren de una comunicación
escrita al superior inmediato. En dichos formularios se añadirá sólo el código identificativo
(nombre, número de placa, etc.), el nombre del interno/a involucrado y la dependencia o
unidad donde ha tenido lugar el hecho. Se pueden nombrar los informes sobre los desper-
fectos que se han producido sobre el material del centro, los informes sobre internos/as o
dependencias cacheadas y los informes en los que se comunicaría si determinado
interno/a, por ejemplo, se encuentra en huelga de hambre. En todos los informes se pon-
drá obligatoriamente la fecha y la firma.
Informes de hechos: Este tipo de informe sirve para comunicar al superior inmediato un
hecho ocurrido en la unidad de trabajo. Presenta un encabezamiento estándar al que sólo
hay que añadir el código identificativo del agente penitenciario y la unidad donde hayan
ocurrido los hechos. El resto del formato se encuentra en blanco y es donde el agente tiene
que describir lo ocurrido de manera objetiva y sin efectuar juicios de valor, tanto si se trata
de una actividad negativa, como si es de relevancia positiva para el interno. Al final del for-
mato se pondrá obligatoriamente la fecha y la firma.
• Cuándo ha ocurrido
• Dónde ha ocurrido
• Quién ha protagonizado los hechos
• Qué ha ocurrido
• Por qué ha ocurrido (en este apartado valorativo se debe ser especialmente cui-
dadoso)
Si se utiliza una buena técnica a la hora de redactar los informes, se hará comprender los
hechos ocurridos a la persona que no se encontraba presente.
1. La redacción del informe debe iniciarse situando los hechos ocurridos, señalando la hora
y el lugar donde se han producido los hechos y quienes son los internos/as protagonistas.
A modo de ejemplo el informe podría iniciarse de esta manera: “Sobre las 17:00 horas del
12 de enero de 2006 y encontrándonos en el patio del pabellón 2, observamos como los
internos Pedro Pérez Gómez y Alejandro Rodríguez García... “
86
3. En la descripción de los hechos se debe señalar sólo y exclusivamente lo visto en un pri-
mer momento, explicar la respuesta dada por el agente penitenciario y la reacción de los
internos/as.
5. En caso de tener conocimiento o sospecha de por qué han ocurrido los hechos, se hará
constar la procedencia de la información o el motivo de las sospechas, pero sin dar por
hecho la veracidad de estas.
6. Del mismo modo, si algún interno/a ha presenciado o participado en los hechos se soli-
citará su versión y se hará constar como fuente de dicha información en el informe.
A continuación, se volverá a utilizar el espacio en blanco del formato para describir la infor-
mación, utilizando de nuevo el mismo método de realización de informe anteriormente
explicado, es decir: desde CUÁNDO disponemos de la información y DÓNDE la hemos
conseguido, QUIÉN nos la ha facilitado (en ocasiones conviene preservar la fuente de infor-
mación) POR QUÉ, y finalmente QUÉ es lo que va a ocurrir.
En resumen, el informe es otro de los principales recursos de trabajo, pero mal realizada
puede traer consecuencias graves para los implicados; tanto internos/as como agentes, por
lo que es esencial tener un buen método para ser capaces de explicar a una tercera per-
87
sona lo ocurrido. Hay que tener en cuenta que es posible que esa tercera persona no
conozca el medio penitenciario y hemos de ser capaces de transmitir la situación con cla-
ridad y de manera objetiva.
Tramitación
El agente de vigilancia y tratamiento o cualquier otro profesional que trabaje en el centro
penitenciario, tiene la potestad de realizar alguno de los informes que se han explicado en
el punto anterior.
Normalmente será el encargado de área el responsable de realizar los informes, pero cualquier
agente de la unidad estará capacitado para ello si no se encontrase presente el encargado.
Estos informes, si no son susceptibles de alguna acción inmediata por parte de la dirección
del centro por la gravedad de los hechos que expliquen, quedarán depositados en la ofici-
na del Supervisor/a hasta que éste se reúna con la Comisión de Vigilancia, Evaluación y
Sanción, el Director o el Subdirector de Seguridad. Esta reunión podrá tener carácter dia-
rio y en ella se analizarían los informes y las consecuencias que puedan acarrear.
Circuito de información
Cuando incoamos un informe de hechos o del tipo informativo a uno o varios internos/as,
éste informe sigue un circuito administrativo que permitirá decidir si la conducta descrita en
el informe es merecedora de algún tipo de sanción.
88
CAPÍTULO V
LIBRO ROJO DE EMERGENCIAS
MOTÍN
1. Verificar el área que estaba amotinada, pasarle lista a los reclusos, identificar
si hubo víctimas mortales o heridos para informar y brindar atención médica a los
mismos si los hubiere.
2. Identificar a los cabecillas.
3. Rastreo del área en busca de armamentos utilizados por los reclusos amotina-
dos o posibles averías tales como: eléctricas, paredes rotas, barrotes rotos, entre
otras.
89
4. Sacar el personal amotinado al área de seguridad, aislarlo para tomar medi-
das tales como: instrumentarles expedientes por las víctimas si las hubiese, tras-
lado a otros centros carcelarios, entre otros.
5. Hacer un informe a la Dirección General de Prisiones indicando los pormeno-
res del incidente y las posibles averías en las instalaciones.
SECUESTRO
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INCENDIO
TERREMOTO
91
6. En caso de derrumbe utilizar los miembros de la Defensa Civil y Cuerpo de
Bomberos para el rescate de posibles víctimas atrapadas en los escombros.
7. Pase de lista general para identificar las víctimas y las posibles fugas.
8. Hacer un informe a la Dirección General de Prisiones indicando la estructura
afectada por el terremoto.
INUNDACIÓN
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Durante una Evacuación:
• Inicie la evacuación cuando la autoridad coordinadora de la evacuación lo indique.
• Procure priorizar la evacuación desalojando en primer orden los pasillos o pabe-
llones ubicados en la parte delantera.
• Siga la ruta de evacuación aprobada y coordinada por el Director General de
Prisiones.
• Procure que el proceso de evacuación sea organizado, sin gritos, sin detener-
se, sin correr, y sobre todo sin empujar.
• Procure que cada grupo de Internos/as sea debidamente chequeado.
• Recuerde que la evacuación no puede durar más de 20 minutos.
• Cada Centro Penitenciario debe tener un teléfono disponible las 24 horas del día al ser-
vicio de la seguridad para las llamadas de emergencias.
• Cada Centro debe tener un listado de teléfono de los diferentes organismos de seguridad
y emergencias, correspondiente a cada comunidad, (Procuraduría General de la Republica,
Dirección General de Prisiones, Policía Nacional, Ejército Nacional, Bomberos, Cruz Roja,
Ayuntamiento, Gobernación, etc.). Este listado debe ser actualizado periódicamente.
• Cada Centro tiene la responsabilidad de diseñar un plan de evacuación. El mismo debe
contener todos los aspectos anteriormente mencionados y periódicamente debe realizarse
un simulacro para verificar su eficacia.
• Tener identificado las posibles ubicaciones en caso de una evacuación.
• El Director General de Prisiones estará a cargo del manejo de las situaciones de emer-
gencia para ejecutar el plan de evacuación.
• El Director del Centro Penitenciario será el coordinador interno de evacuación, quien a su
vez tendrá subcoordinadores por pabellones y pasillos, siendo estos los responsables de
las maniobras de evacuación a ejecutar en su área de responsabilidad.
• Los miembros de la seguridad empleados en estas labores deberán estar dotados de los
equipos adecuados y necesarios para lograr los objetivos trazados. En caso de necesitar
el apoyo de otras unidades, su participación será coordinada desde el puesto de comando
que estará a cargo del Director General de Prisiones.
• El personal médico del Centro Penitenciario asistirá a cualquier interno/a lesionado y esta-
blecerá un servicio permanente en el punto de evacuación.
• El director General de Prisiones es el responsable de ordenar el traslado al lugar de eva-
cuación y una vez desaparecidas las causas que motivaron el mismo, el retorno de los
internos/as al Centro Penitenciario; todo lo cual se hará bajo coordinación y recomendación
de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
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Título VI
DE LOS SERVICIOS MÉDICOS
Para cuidar la salud física y mental de los internos/as y vigilar que se respeten las normas
de higiene dentro del centro, en cada establecimiento existirá un servicio médico compues-
to al menos por un médico general, un psiquiatra, un ginecólogo (en los Centros de muje-
res), un odontólogo y una enfermera(o).
Los centros penitenciarios estarán dotados de un consultorio médico y una enfermería que
contará con camas para la observación de los internos/as.
Los internos/as que requieran tratamiento y hospitalización serán atendidos en los hospita-
les públicos. En caso de que los hospitales no cuenten con los servicios especializados
requeridos, el médico del centro lo comunicará al director, quien, previa autorización de la
Dirección de Prisiones, dispondrá su traslado a un centro de salud especializado.
Los responsables de los servicios médicos de los centros, además de las actividades inhe-
rentes a sus funciones contribuirán en la elaboración y ejecución de los programas nutricio-
nales y de prevención de enfermedades en los internos/as y vigilarán que sean adecuadas
las condiciones sanitarias de las celdas. Además, deben supervisar constantemente que
todas las áreas del Centro se encuentren apegadas a los lineamientos de higiene.
Todos los internos/as a su ingreso al centro, serán examinados por un médico. Se dejará
constancia en el libro de ingreso y en la historia clínica individual que deberá serle abierta
a todo interno/a. Los internos/as tendrán derecho a ser informados sobre todo lo referente
a su estado de salud.
Las celdas de aislamiento o reflexión serán visitados diariamente por el médico, el psiquia-
tra y por el psicólogo del centro, informando al director respecto al estado en que se
encuentran los internos/as y las anomalías que puedan ser detectadas.
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Título VII
COLABORACIÓN DE INSTITUCIONES PÚBLICAS Y PRIVADAS
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Título VIII
REGLAMENTO BÁSICO DE RÉGIMEN DE INTERNO/A
CAPÍTULO I
De los Derechos de la Persona Interna
Art. 1.- Proscripción de la tortura y de malos tratos.- Ningún interno/a será sometido a
torturas ni a malos tratos de palabra o de obra. Tampoco podrá ser objeto de un rigor inne-
cesario o uso excesivo de la fuerza en la aplicación de las normas.
Art. 2.- Dignidad.- Toda persona interna tiene derecho a que se preserve su dignidad, así
como su intimidad, sin perjuicio de las medidas exigidas para la ordenada convivencia en
prisión. La persona interna tiene derecho a ser designada por su propio nombre.
Art. 3.- Derechos civiles y políticos.- Toda persona interna tiene la facultad de ejercer sus
derechos civiles, personales y políticos, salvo la suspensión en los casos de condena cri-
minal definitiva, conforme lo consagra la Constitución de la República.
Art. 5.- Alimentación y recreo.- Toda persona interna recibirá la alimentación adecuada
en cantidad y calidad para el mantenimiento de la salud. Asimismo, tendrá derecho a par-
ticipar de las actividades recreativas activas e interactivas previstas para los correspondien-
tes programas.
Art. 6.- Alojamiento.- Toda persona interna tiene derecho, atendiendo a la disponibilidad
de espacios físicos e instalaciones apropiadas, de un espacio ventilado e iluminado sufi-
ciente, incluyendo el necesario para dormir, asearse y descansar.
Art. 7.- Relaciones con el exterior.- La persona interna podrá recibir, con la frecuencia
que determinen los Reglamentos, las visitas de sus parientes, abogados y amigos sin ante-
cedentes penales, o de personas que representen a organismos o instituciones oficiales o
privadas que se interesen por su protección y rehabilitación.
Párrafo I. Cuando el establecimiento lo permita podrán autorizarse visitas íntimas del cón-
yuge o conviviente, debidamente predeterminado.
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Párrafo II. La persona interna podrá mantener comunicación epistolar y telefónica bajo los
controles que se establezcan en cada caso.
Art. 8.- Trabajo remunerado.- La Administración Penitenciaria hará los esfuerzos necesa-
rios para proporcionar trabajo apropiado a los internos/as, a fin de procurarles una justa
remuneración que les permita atender las necesidades de sus familias, costear gastos per-
sonales y formar un fondo de reserva para su egreso.
Art. 9.- Participación en las actividades.- Las personas internas tienen derecho a parti-
cipar en las actividades del centro, según el régimen y horarios fijados como normativa.
Art. 10.- Peticiones y quejas.- Toda persona interna tiene derecho a formular y dirigir peti-
ciones y quejas a la dirección del establecimiento, a las autoridades administrativas o judi-
ciales, a través de los canales correspondientes y aportar los medios de prueba en defen-
sa de sus derechos e intereses legítimos.
Párrafo I. Las peticiones o quejas podrán presentarse verbalmente o por escrito, siempre
a título individual y en primera instancia ante el director del centro, salvo que la queja esté
referida directamente a este funcionario, en cuyo caso podrá dirigirse a una autoridad jerár-
quicamente superior.
Párrafo II. El Director o quien este determine adoptará las medidas oportunas, después de
obtener los informes correspondientes y, en su caso, remitírselos a las autoridades u orga-
nismos competentes.
Art.11.- Informes sobre situación procesal y penitenciaria.- Toda persona interna tiene
derecho a recibir información completa, precisa y actualizada, de modo personal, sobre su
situación procesal y de ejecución penitenciaria. Asimismo, tendrá derecho a ser informada
de los acontecimientos más importantes de la vida nacional e internacional, mediante la cir-
culación de periódicos, libros, charlas, conferencias, programas de radio y televisión.
Art. 12.- Beneficios y asistencia social.- Toda persona interna tendrá derecho a los bene-
ficios penitenciarios y a la asistencia social previstos en la legislación, de conformidad con
100
su calificación y el período del régimen progresivo en que se encuentre. La calificación de con-
ducta tendrá valor para la concesión de beneficios tales como recibir visitas con mayor frecuen-
cia, prolongación de recreos, asistencia a actividades deportivas, culturales y recreativas.
Párrafo II. Las personas que se encuentren en el período de prueba, según lo establecen
los artículos 16 y siguientes de la Ley No. 224 sobre Régimen Penitenciario, podrán disfru-
tar de: permisos de salidas del establecimiento por el tiempo y bajo la modalidad que fijen
los reglamentos; el alojamiento en instituciones especiales y la concesión de la libertad con-
dicional.
Párrafo III. Los permisos de salida tienen por finalidad esencial: el afianzamiento de los vín-
culos familiares y sociales; la búsqueda de trabajo, de alojamiento, de documentación per-
sonal, y como etapa de preparación psicológica para la vida en libertad.
Art. 13.- Asistencia religiosa.- Todas las personas internas tienen derecho a solicitar el
servicio religioso de su preferencia, siempre que se preste con respeto a los derechos de
las demás. Las personas internas no podrán ser obligadas a asistir o a participar en actos
religiosos. La autoridad penitenciaria facilitará que los fieles puedan respetar y guardar los
ritos y los días de fiesta de su religión, siempre que lo permitan las disponibilidades mate-
riales, la seguridad, las normas de convivencia y los derechos de las demás personas.
Art. 14.- Visitas y comunicaciones.- Las personas internas tienen derecho a comunicar-
se en forma oral y escrita en su propia lengua con sus familiares, amigos y representantes
acreditados de organismos e instituciones de cooperación penitenciaria, salvo en los casos
de incomunicación judicial. Las sanciones de aislamiento en celda contienen también la
imposibilidad de mantener cualquier tipo de comunicación o recibir visitas, con excepción
de las comunicaciones y visitas de abogados y representantes legales.
Párrafo I.- Las visitas y comunicaciones se efectuarán de manera que se respete al máxi-
mo la intimidad y no tendrán más restricciones, en cuanto a las personas y el modo de rea-
lizarlas, que las impuestas por razones de seguridad, el interés del tratamiento y de la orde-
nada convivencia en el establecimiento.
Párrafo II.- Toda persona interna tiene derecho a comunicar a su familia y abogado, sin
demora innecesaria, su ingreso en un Centro Penitenciario, así como su traslado a cual-
quier otro establecimiento o lugar.
101
CAPÍTULO II
De los deberes de las personas internas
Art. 15.- Retención.- La persona ingresada, mediante orden judicial, está obligada a per-
manecer en el establecimiento hasta el momento de su liberación, a disposición de la auto-
ridad judicial o para cumplir las condenas de privación de libertad que se le impongan.
a) Acatar las normas de régimen interior y las órdenes que reciba del personal peni-
tenciario en el ejercicio legítimo de sus atribuciones.
b) Colaborar activamente y observar un comportamiento solidario en el cumplimien-
to de sus obligaciones.
c) Colaborar activamente en la consecución de una convivencia ordenada dentro del
centro y mantener una actitud de respeto y consideración hacia las autoridades,
agentes, trabajadores, colaboradores de instituciones penitenciarias, internos/as y
demás personas, tanto dentro como fuera del establecimiento, cuando hubiese sali-
do del mismo por causa justificada.
d) Asimismo el interno/a está obligado a utilizar adecuadamente los medios materia-
les que se pongan a su disposición y las instalaciones del establecimiento.
Art. 17.- Higiene.- La persona interna deberá observar una adecuada higiene y aseo per-
sonal, corrección en el vestir y acatar las medidas higiénicas y sanitarias establecidas a
esos efectos. También deberá realizar las tareas conducentes al buen orden y limpieza
común de los establecimientos, sin que deba recibir remuneración por estas tareas, salvo
en aquellos casos en que constituyan la única actividad que le fuere encomendada.
Art. 18.- Formación.- Toda persona interna deberá participar en las actividades formativas,
educativas y laborales definidas en función de sus necesidades para la preparación de la
vida en libertad.
Párrafo: En caso de que el interno/a se niegue a asistir a cualquiera de las actividades que
le correspondan, se asentará por escrito y se anexará a su expediente.
Art. 19.- Cumplimiento de sanciones.- La persona interna deberá cumplir las sanciones
que le fueran impuestas por la comisión de faltas previstas en el régimen disciplinario
según la Ley 224/84 sobre Régimen penitenciario y este Reglamento.
102
CAPÍTULO III
De las faltas
Art. 20.- Autoría.- Es autor de una falta quien comete la falta disciplinaria o designe a otro
a cometerla. Es cómplice quien contribuye a la realización de la conducta o preste una
ayuda posterior, por acuerdo previo o concomitante a la misma.
a) Incurrir en tres faltas leve durante un periodo de tiempo inferior a seis meses.
b) Promover o divulgar noticias falsas sobre la institución, los agentes o el personal
directivo con la voluntad de menoscabar su autoridad y credibilidad o la seguridad
del Centro.
c) Atentar contra la propia vida o integridad física.
d) Incitar a participar en pelea o agresión a cualquier trabajador del centro o a los
internos/as.
e) Sustraer, dañar o manipular los bienes de la institución o de otras personas.
f) Manipular objetos convirtiéndolos en potencialmente peligrosos.
g)Introducir en el establecimiento, poseer o fabricar objetos que las normas del cen-
tro prohíban.
h) Organizar apuestas, rifas o juegos de azar.
i) Resistirse a las órdenes recibidas de los agentes o personal directivo del centro de
forma pasiva.
j) La embriaguez producida por el consumo de bebidas alcohólicas o sustancias psi-
cotrópicas así como el consumo o posesión de las mismas.
k) Amenazar, coaccionar o faltar al respeto a otros internos/as o al personal de la institución.
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Art. 23.- Faltas muy grave.- Son faltas muy grave las siguientes:
a) Atentar contra la vida o la integridad física de otras personas en el interior del cen-
tro o en el exterior del mismo, si el interno/a hubiese salido por causa justificada.
b) Agredir sexualmente a otra persona.
c) Intentar, auxiliar o consumar la evasión.
d) Resistirse a las órdenes recibidas de los agentes o personal directivo del centro
de forma activa.
e) Sobornar o incitar al soborno.
f) Retener personas a la fuerza.
g) El tráfico de bebidas alcohólicas y sustancias psicotrópicas.
h) Sustraer, dañar o manipular los bienes de la institución causando un grave daño.
i) Introducir o fabricar objetos punzantes o armas blancas.
j) Adulterar los alimentos o medicamentos.
k) Sustraer documentos oficiales o el sello del centro, así como falsificarlos.
l) Asumir la identidad de otro con el fin de obtener beneficio propio o el de terceros.
m) Reunirse para planear actos delictivos o de indisciplina interna.
n) Participar o promover actos de indisciplina coletivas o motines.
CAPÍTULO IV
De las sanciones
Art. 25.- Escala de las sanciones.- En cada caso concreto, la determinación de la sanción
y de su duración se llevará a efecto atendiendo a la naturaleza de la infracción, a la grave-
dad de los daños y perjuicios ocasionados, al grado de ejecución de los hechos, a la cul-
pabilidad de los responsables y al grado de su participación en aquellos, así como a las
demás circunstancias concurrentes.
Art. 26.- Sanciones.- Las sanciones asociadas a las faltas serán las siguientes:
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4. De suspensión de actividades hasta por un mes.
5. De suspensión de llamadas hasta por un mes.
6. De suspensión de visitas y/o correspondencia de uno a quince días.
7. Encierro en su celda o en celda de aislamiento de uno a siete días.
Art. 27.- Del procedimiento sancionador.- La imposición de las sanciones y medidas dis-
ciplinarias corresponden a la Comisión de Vigilancia, Evaluación y Sanción, sin perjuicio de
que el Director del establecimiento pueda adoptar las medidas cautelares o de asegura-
miento que sean urgentes. Deberá iniciarse, a partir del informe de los hechos, una inves-
tigación sumaria que será llevada a cabo por el propio Director o la persona que en su caso
éste determine, con preferencia por los Supervisores de Servicios. En dicha investigación
se tomarán en cuenta las alegaciones del interno/a.
Párrafo I.- Una vez concluido el expediente sancionador se comunicará la resolución adop-
tada al interno/a afectado. Si la sanción acordada es de aislamiento no serán eximidos del
trabajo si éste pudiera ejecutarse dentro de la celda o dormitorio. Se les proporcionará
material de lectura adecuada, aunque no estarán permitidos aparatos de televisión, y serán
visitados diariamente por personal de la dirección, el médico y cuando lo solicite por el
capellán.
Párrafo II.- Antes de iniciarse el cumplimiento de una sanción de aislamiento se tiene que
escuchar la opinión del médico del establecimiento. Mientras dure la sanción el interno/a
estará bajo supervisión médica. Si la salud física o mental del interno/a se resiente por la
aplicación de las medidas disciplinarias, éstas podrán ser suspendidas o atenuadas por el
Director, previo informe médico.
Párrafo III.- La aplicación de toda sanción correspondiente a faltas grave y muy grave será
comunicada al juez de la ejecución de la pena.
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Párrafo IV.- Registro de Sanciones. De todas las sanciones impuestas a los internos, se
tomará nota en el expediente, firmada por el interno.
Art. 28.- Revocatoria o disminución de las sanciones.- La misma autoridad que impone
las sanciones corresponde revocarlas o disminuirlas cuando lo considere oportuno, conve-
niente o por motivo grave.
CAPÍTULO V
De los beneficios penitenciarios
Art. 30.- Calificación de la conducta.- La conducta del interno será calificada mensual por
la comisión de Vigilancia, Evaluación y Sanción mediante resolución motivada. La califica-
ción se hará tomando en cuenta las normas reglamentarias que rigen el orden, la discipli-
na y la convivencia del centro, atendiendo la siguiente escala:
• Óptima
• Muy buena
• Buena
• Regular
• Menos que regular
• Mala
• Pésima
106
e) Todas aquellas que, de común acuerdo, el encargado de área bajo cuya super-
visión esté el interno/a y uno de los (las) subdirectores (as) consideren oportuno.
a) En el expediente se anotarán todas y cada una de las notas meritorias, con inde-
pendencia de la situación procesal, penal o penitenciaria de la persona interna,
incluso si ésta se encuentra sancionada o privada de privilegios.
b) Para llevar a cabo cualquier anotación será necesaria la firma del encargado de
área bajo cuya supervisión se encuentre la persona interna y de uno (a) de los (las)
subdirectores/as; en su ausencia podrá hacerlo el Director/a.
Art. 32.- Los beneficios penitenciarios.- Son beneficios penitenciarios, que podrán ser
concedidos al interno/a en función de la calificación de su conducta, los siguientes:
Párrafo I.- En la oficina del Centro penitenciario se llevará un expediente personal o Récord
de Tratamiento de cada interno/a en el que se incluirán las medidas disciplinarias aplica-
das, las infracciones que haya podido cometer, los hechos meritables de los que haya sido
merecedor, las entradas y salidas del centro penitenciario, así como su origen y destino,
también se incluirá una hoja de admisión que será cumplimentada en su primera entrada
en el centro y que se completará con todas aquellas incidencias de relevancia que vayan
aconteciendo al interno/a. Este expediente se irá conformando de forma paulatina y servi-
rá para complementar la información que la dirección del centro aporta de cada interno/a al
Juez de la Ejecución de la Pena para acordar la concesión de beneficios y a los juzgados
o tribunales que entiendan de sus causas y así lo soliciten. Asimismo las calificaciones de
los internos/as de las que habla el artículo 52 de la Ley 224/84 se harán en función de los
datos contenidos en su expediente.
Párrafo II.- El expediente de cada interno/a debe ser custodiado por la dirección del cen-
tro penitenciario y no podrá ser enajenado, sustraído o alterado de ninguna forma o mane-
ra. Este expediente acompañará al interno en caso de traslado a otro centro penitenciario.
La información contenida en dicho expediente tendrá el tratamiento de confidencial y no
podrá darse información del mismo más que a las autoridades competentes, a los juzga-
107
dos o tribunales que conozcan los expedientes relacionados con el interno/a y a sus repre-
sentantes legales debidamente autorizados.
CAPÍTULO VI
De la organización del Centro penitenciario
Párrafo I.- En los Centros para mujeres existirá un pabellón para madres y embarazadas.
Párrafo II. Las autoridades de la prisión velarán para que dichas separaciones se respeten
adecuándose a los medios materiales e instalaciones del recinto carcelario.
Art. 34.- Del economato.- Los internos/as tienen derecho a procurarse a su cargo ciertos
objetos y alimentos suplementarios. Todos los internos/as pueden llevar a cabo compras en
el economato con las excepciones que se establecen en esta normativa.
Art.- 35.- Del trabajo penitenciario.- La administración penitenciaria facilitará los medios
necesarios para realizar actividades productivas o formativas. Se dará especial preferencia
a las actividades de formación o capacitación profesional.
108
a) La Dirección del Centro establecerá un sistema de turnos para cubrir las vacan-
tes que pudieran producirse. En dicho sistema tendrán preferencia los internos/as
que hayan observado una buena conducta y que tengan un mejor expediente.
También se tendrán en cuenta criterios de idoneidad y conocimientos previos para
los puestos de trabajo productivo.
b) La Dirección del Centro establecerá convenios laborales o mercantiles con aque-
llas empresas o profesionales que, respetando las leyes laborales de la República
Dominicana, deseen establecer toda o parte de su producción en la prisión.
c) El salario de los internos/as empleados en los trabajos productivos será entrega-
do a la Dirección del Centro, quien establecerá la siguiente partición:
I. Un 10% irá destinada al interno/a de forma directa para que éste lo destine al fin
que considere oportuno y para sus gastos de economato dentro del recinto confor-
mando de esta forma su cuenta de peculio.
II. Un 10% irá destinada a las arcas del propio Centro y estará destinado a las mejo-
ras en habitabilidad y seguridad del mismo.
III. Un 50% estará destinada a la familia del interno/a que podrá retirarlo de forma
directa una vez al mes mediante el mecanismo que se habilite al efecto. Los familia-
res deberán contar con la expresa autorización del interno/a y, en caso de que éste
no lo autorizará o bien careciera de familiares, este monto se irá acumulando en su
cuenta particular conformando un fondo de reserva. El fondo de reserva del interno/a
no puede ser enajenado o embargado por la Administración penitenciaria.
IV. Un 30% para la formación de un fondo de reservas que se le entregará a su egreso.
Art. 36.- De la cuenta de peculio del interno/a.- El interno/a tiene derecho a mantener
una cuenta de peculio. Esta cuenta se surtirá de dinero aportado por los familiares y de los
ingresos económicos por el trabajo tal y como se indica en el artículo anterior.
Párrafo I. El interno/a podrá disponer en dicha cuenta de una cantidad máxima mensual a
determinar por el administrador del centro pero que deberá ser igual para todos ellos.
Art. 37.- Del administrador.- De la gestión económica del Centro, la relación con los
empresarios o profesionales establecidos en el mismo, los economatos y las cuentas de
peculio de los internos/as se ocupará el administrador del mismo.
109
CAPÍTULO VII
De las relaciones con el exterior
Art. 38.- De las cartas o telegramas. Los internos/as tienen derecho a recibir y tramitar
correspondencia de forma ilimitada. Sin embargo, el Director podrá prohibir el intercambio
de correspondencia cuando:
Párrafo I.-El correo entrante será inspeccionado por los agentes de vigilancia y tratamien-
to penitenciario abriéndolo en presencia del interno/a destinatario. Salvo en virtud de orden
motivada del Director o autoridad judicial, los agentes se abstendrán de leer el contenido
de las misivas.
Párrafo II.- Los objetos o elementos prohibidos que se contengan en las cartas o telegra-
mas serán retenidos y, si el caso así lo requiere, se dará conocimiento a la autoridad judi-
cial competente.
Art. 39.-. De los paquetes.- Los internos/as están autorizados a recibir paquetes desde el
exterior del establecimiento. Los paquetes se recibirán por vía postal o mediante entrega
de los visitantes y deberán pasar por el control previo de la seguridad del recinto y el che-
queo de su contenido por parte de los agentes de vigilancia y tratamiento penitenciario.
Art. 40.- De las comunicaciones telefónicas.- Los internos/as podrán comunicar telefóni-
camente a través de las cabinas telefónicas colocadas en el interior del Centro a tal efecto
salvo en los casos de:
a) Prohibición judicial.
b) Sanción de aislamiento.
Art. 41.- De las comunicaciones y visitas.- Las comunicaciones y visitas se llevarán a cabo
siguiendo los siguientes principios básicos de actuación:
a) Los internos/as podrán recibir visitas regularmente, siempre que éstas favorez-
can el tratamiento y con la intención de evitar el desarraigo familiar del interno/a.
b) El Director podrá limitar o prohibir estas visitas cuando la seguridad o el orden
del Centro estén o puedan estar en peligro.
c) Las visitas deberán ser vigiladas por los agentes de vigilancia y tratamiento
penitenciario.
110
d) Las visitas podrán ser interrumpidas o anuladas mediante resolución motiva-
da del director.
e) En caso de mandamiento judicial de incomunicación se seguirá lo dispuesto
en el mismo.
f) En todo lo aquí no contemplado se seguirá lo dispuesto en la normativa de
comunicaciones del Centro penitenciario.
Art. 42.- De las visitas de abogados y representantes legales.- Los abogados y repre-
sentantes están autorizados a comunicar con los internos/as a quienes representen en el
lugar destinado para ello y en las horas reglamentarias del Centro.
Art. 43.- Los abogados representantes legales no podrán entrevistarse con más de un
interno/a simultáneamente.
Art. 44.- Los abogados y representantes legales únicamente podrán entregar a sus defen-
didos documentos relacionados con su proceso.
Art. 45.- De las visitas conyugales.- En cada Centro se dispone de un determinado núme-
ro de celdas conyugales en las cuales se llevarán a cabo las visitas de este tipo durante el
horario que la dirección del Centro establezca.
a) Los internos/as tienen derecho a disfrutar al menos de una visita conyugal al mes, sien-
do el máximo de cuatro. Esta gradación se llevará a cabo en función del expediente, la con-
ducta y el aprovechamiento de las actividades que haya realizado el interno/a a lo largo del
mes anterior. La valoración será llevada a cabo por la junta de tratamiento.
CAPÍTULO VIII
De los medios coercitivos y medidas de sujeción
Art. 46.- El orden y la disciplina en el interior del Centro deberán mantenerse con firmeza.
Las autoridades del Centro sólo harán uso de la fuerza en caso de resistencia organizada,
conato de motín, agresión al personal o disturbios que pongan en peligro al Centro.
Art. 47.- De los medios coercitivos permitidos.- Serán considerados medios coercitivos
permitidos en el Centro, los siguientes:
a) El aislamiento provisional.
b) La fuerza física personal.
c) Las defensas o macanas.
d) Las esposas.
111
Párrafo I.- Su uso será proporcional al fin pretendido, nunca supondrá una sanción encu-
bierta, y sólo se aplicarán cuando no exista otra manera menos gravosa para conseguir la
finalidad perseguida y por el tiempo estrictamente necesario.
Párrafo III.- Los medios coercitivos no podrán ser aplicados, salvo en el caso de que de la
actuación de los internos/as pudiera derivarse un inminente peligro para su integridad o
para la de otras personas:
a) A las mujeres gestantes y a las mujeres hasta seis meses después de la termina-
ción del embarazo, a las madres lactantes y a las que tuvieran hijos consigo.
b) A los internos/as convalecientes de enfermedad grave.
Párrafo V.- Las defensas o macanas y las esposas serán depositadas en aquel lugar o
lugares que el Subdirector de Seguridad determine, y de su estado y cantidad el Supervisor
de Servicios le dará cuenta diariamente.
Párrafo VI.- En los casos de grave alteraciones del orden con peligro inminente para las
personas o para las instalaciones, el Director con carácter provisional podrá ordenar el uso
de armas en el interior del establecimiento y recabar la colaboración de las fuerzas de
seguridad nacional.
112
CAPÍTULO IX
Del Régimen Interior
Art. 48.- La clasificación en el interior de los Centros deberá ser estricta. Por ningún moti-
vo se cambiara de celda o pabellón a un interno/a sin la previa reclasificación de la Junta
de Tratamiento.
Art. 49.- Los internos/as no podrán permanecer en sus celdas o pabellones durante día en
los horarios destinados a actividades fuera de las mismas, ni podrán ingresar a los otros
pabellones.
Art. 51.- El área de reflexión deberá ser visitada diariamente por el médico, el psicólogo,
el trabajador social, quienes le darán seguimiento a la evolución de los internos/as ubica-
dos en aislamiento y en su caso propondrán su cambio o salida de la misma.
Art. 52.- Ningún interno/a podrá tener acceso a las áreas de oficinas, servicios generales
o de mantenimiento del Centro.
Art. 53.-Los internos/as no podrán transitar solos por ninguna área del Centro y deberán
estar siempre acompañados por agentes de vigilancia.
Art. 54.- Queda prohibido introducir alimentos y bebidas en los talleres y aulas del Centro.
Art. 55.-Todos los internos/as, salvo aquellos que se encuentren en el área de reflexión o
enfermos, deberán acudir al área del comedor para recibir y consumir sus alimentos en el
horario que se fije.
Art. 56.-Queda prohibido tomar fotografías o películas en el interior de los centros, salvo
autorización de la Dirección General de Prisiones.
Art. 57.-Los internos/as y los visitantes tendrán la obligación de conservar y mantener las
áreas y el mobiliario destinados a las visitas en completa limpieza, orden, cualquier desper-
fecto será informado inmediatamente a la Dirección del Centro y si es responsable el inter-
no/a o su visita, estos tendrán la obligación de cubrir los gastos que genere su reparación
y la autorización de sus visitas quedará suspendida hasta que se subsanen las anomalías.
113
114
Título IX
REGLAMENTO INTERNO DE LOS AGENTES DE VIGILANCIA Y TRATAMIENTO
PENITENCIARIO
El presente reglamento pretende establecer las normas básicas a las cuales deberán ate-
nerse los agentes de vigilancia y tratamiento penitenciario, sea cual sea su graduación,
durante el desempeño de sus funciones en los Centros de Corrección y Rehabilitación.
Por todo ello en este reglamento se incluyen una serie de conductas prohibidas, estructu-
radas en faltas leve, grave y muy grave, asociando a estos comportamientos indebidos, su
correspondiente sanción disciplinaria.
CAPÍTULO I
De los Agentes de Vigilancia y Tratamiento Penitenciario.
Artículo 2. Para ser Agente de Vigilancia y Tratamiento Penitenciario deberá satisfacer los
requisitos de ingreso de la Escuela Nacional Penitenciaria (ENAP).
115
CAPÍTULO II
Obligaciones y Deberes de los Agentes.
a) Es deber de los Agentes VTPs el cumplimiento de las normas contenidas en este regla-
mento y de todas las normas y leyes de la República Dominicana. Los Agentes de
Vigilancia y Tratamiento Penitenciario (VTPs) deberán obedecer las órdenes del Director(a)
y del resto del equipo directivo, así como las de sus superiores jerárquicos.
b) Los Agentes VTPs deberán informar al Director(a) del Centro de cualquier incorrección
o abuso que observaren o del que sean conocedores, negándose a cumplir las órdenes
manifiestamente ilegales.
c) Los Agentes VTPs deberán, en caso de necesidades del servicio, cumplir con horarios
extraordinarios y prolongar su jornada si ello fuera necesario a requerimiento del
Director(a), subdirector del seguridad o un supervisor de servicios. Cualquier falta a esta
disposición, ameritara sanción que será impuesta por el Director del Centro.
d) Es competencia de los Agentes VTPs la vigilancia interior y exterior del recinto peniten-
ciario, así como de las conducciones y traslados que tengan como origen el mismo, evitan-
do cualquier incidente que altere dicho orden y el buen funcionamiento del Centro.
f) Revisar y asentar en los libros record a las personas, objetos o vehículos que ingresen a
las instalaciones del centro.
116
l) Efectuar revisiones periódicas en los alojamientos de los internos para verificar que no se
poseen sustancias u objetos prohibidos, previa instrucciones del director del Centro.
n) Atender en forma amable y respetuosa a los internos, a sus familiares y demás perso-
nas que visiten el Centro.
p) Los agentes deben requerir autorización expresa del Director(a) del Centro para ingre-
sar o permanecer en el mismo en horas distintas a las de su servicio.
q) Las demás que le asigne el director(a) del Centro, este reglamento o cualquier otra dis-
posición legal.
a) Los Agentes VTPs no podrán aceptar gratificación o premio alguno por su trabajo, úni-
camente recibirán el sueldo que les asigna la Procuraduría General de la República y, en
su caso, a lo viáticos a los que tuvieran derecho.
b) A los Agentes VTPs les está absolutamente prohibido mantener cualquier tipo de nego-
cio o transacción con los internos/as.
Los agentes de vigilancia y tratamiento penitenciario están autorizados a hacer uso de sus
armas de fuego estando de servicio, tanto vistiendo de uniforme como de civil, en las
siguientes circunstancias:
• Cuando se ejerza contra ellos violencia grave o sean amenazados por individuos
armados.
117
• Cuando sea necesario para defender de un ataque armado el recinto penitenciario
que custodian y las personas a su cargo.
• Cuando intenten la evasión de detenidos por la violencia o bien penetrar violenta-
mente en el establecimiento penitenciario.
• En caso de intento de evasión podrán realizar disparos intimidatorios contra el
interno/a y las personas que puedan ayudarle desde el exterior, pero nunca, salvo
en los supuestos anteriores, directamente contra personas.
Párrafo I. En el uso de armas de fuego el Agente VTP deberá actuar con diligencia extre-
ma, en especial cuando se haga en presencia de civiles o en zonas habitadas y se utiliza-
rán en primer lugar a modo de aviso. Sólo podrá hacerse uso de las armas de fuego sin
amenaza previa en la defensa de un riesgo inmediato para la vida o la integridad física y
en los supuestos del punto uno de este artículo.
Párrafo II.Las armas de fuego sólo podrán ser portadas por los Agentes VTPs en el área
perimetral del establecimiento, en la vigilancia exterior de los edificios y en los traslados de
internos/as. Nunca podrá portarse arma alguna en el interior de los establecimientos peni-
tenciarios salvo cuando el Director(a) así lo ordene con el fin de restablecer el orden ante
una situación de grave alteración del mismo.
Artículo 7.- El agente penitenciario deberá dedicar gran atención al cuidado y conserva-
ción de todos los materiales pertenecientes al Centro de Corrección y Rehabilitación, y en
especial, al armamento una vez les sean cargados.
CAPÍTULO III
Régimen disciplinario.
118
c) Falta de respeto a compañeros o superiores.
d) Usar o alterar los uniformes en forma no reglamentaria.
119
Artículo 12.- Faltas muy grave.
Serán faltas muy grave de los agentes de vigilancia y tratamiento penitenciario en el ejer-
cicio de sus funciones las siguientes:
Sin perjuicio de las actuaciones civiles o penales a que sus actos pudieran dar a lugar, las
sanciones administrativas se adoptarán según el sistema prescrito por este reglamento en
los términos siguientes. Las sanciones que podrán adoptarse serán:
120
Las faltas y las sanciones cancelan en el tiempo, perdiendo toda eficacia disciplinaria,
según el siguiente orden:
a) Las faltas y sanciones por faltas leve y mediana cancelan transcurrido un año.
b) Las faltas y sanciones por faltas grave cancelan transcurridos dos años.
c) Las faltas y sanciones por faltas muy grave cancelan transcurridos cinco años.
e) Los acuerdos de expulsión del cuerpo sólo podrán ser adoptados por el Director
General de Prisiones previo informe favorable de la Junta Disciplinaria del Centro.
121
CAPÍTULO IV
Derechos de los agentes.
La Administración estará obligada a velar por los derechos de los agentes, su seguridad
laboral, las condiciones higiénicas y sanitarias en el lugar de trabajo y a facilitarles los
medios materiales y humanos necesarios para el ejercicio de sus funciones. Los agentes
de vigilancia y tratamiento penitenciaria tienen derecho a desempeñar su labor sin que pue-
dan ponérsele obstáculos al desempeño del mismo, asimismo tienen derecho a percibir
una remuneración justa.
Los agentes tienen derecho a que sean respetados sus horarios de trabajo y sus periodos
de descanso, salvo en lo dispuesto en el artículo tres letra C de este reglamento.
Los agentes tienen derecho a ser tratados con dignidad y respeto por sus superiores jerár-
quicos así como por cualquier otra persona durante el ejercicio de sus funciones.
122
ANEXOS
Modelos de impresos y documentos
123
ANEXOS
Modelos de impresos y documentos
El buen uso de los documentos aquí recogidos, así como de otros que
puedan confeccionarse, otorga seguridad jurídica tanto a los internos/as
como a los Agentes responsables de su vigilancia.
124
125
126
Protocolo Unificado del interno/a:
Este protocolo incluye la información de cada uno de los profesionales que componen el
Equipo Técnico y cada uno de los informes:
•Informe Psicológico
•Informe Social
•Informe Criminológico/ Legal
127
128
129
1/4 parts
130
EVALUACIÓN PSICOLÓGICA
1. Evaluación del proceso de socialización (contrastarla con la Asistente Social)
131
1.3.3 Conflictos con las normas escolares
2.1 Antecedentes
2.3 Consecuencias
132
3.4 Tipo de consumo
5. Variables Psicológicas
5.2 Aptitudes
133
5.4 Variables cognitivas
6.1 Antecedentes
6.3 Consecuencias
9. Fuentes de información
134
135
136
menores
137
138
• Programa Individualizado de Tratamiento:
139
PROGRAMA INDIVIDUALIZADO DE TRATAMIENTO
Apellidos y Nombres
Área Psicológica
Área Toxicológica
Área Social
Área Formativa
Actividades / Intervenciones
140
• Ficha de actividad
El equipo de tratamiento planificará las actividades pertinentes al interno/a, en función del
programa individualizado de tratamiento y establecerá una ficha de actividad personaliza-
da y adaptada a la realidad y necesidades del interno/a con el objetivo de reforzar todas
las carencias detectadas en la evaluación del interno/a.
141
FICHA DE ACTIVIDAD
Apellidos y Nombres
Centro
Anotaciones Suplementarias
Fecha
142
ACTA DE REUNION DE LA COMISION DE VIGILANCIA,
EVALUACION Y SANCION
RESOLUCIONES TOMADAS
………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
FIRMA DE LOS ASISTENTES
143
HOJAS DE SANCIONES
Nombre y apellidos:____________________________________
No. De Orden:_____________________
144
HOJAS DE MÉRITOS
Hoja de meritos/Hoja No._____
Nombre y apellidos:____________________________________
No. De Orden:_____________________
145
MODELO DE CARTA DE CONDUCTA
Fecha_________
Oficio No.________
Referencia:
Num. Listado __________
Oficio No. __________
Fecha __________
CARTA DE CONDUCTA
___________________
El Director(a)
146
FORMULARIO DE REPORTE DE CONDUCTA
Protocolo No._______
Nombre del
Interno/a:________________________________________________
Pabellón:____________________ Celda:___________
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
Involucrados en el hecho:
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
__________________________________________________________________
147
MODELO DE CARTA DE AMONESTACION
A UN INTERNO/A
Fecha_________
A:
Asunto:
Se le informa por este medio que por falta al reglamento que rige este Centro, al
golpear al interno ____________, usted está amonestado a la vez que tiene suspen-
sión de llamadas por quince (15) días, advirtiéndole que deben continuar observan-
do las normas de disciplina que están contenidas en el reglamento de este Centro,
a los fines de que su conducta no tenga objeción de parte de esta dirección.
___________________
El Director(a)
148
ORDEN DE DIRECCION No._________
Horario Regimental
Los fines de semanas y días festivos, las franjas horarias de talleres y actividades
quedarán como tiempo personal para el descanso de los internos(as).
El Director(a)
Ciudad, fecha
149
ORDEN DE DIRECCION No._________
El Director(a)
Ciudad, fecha
150
ORDEN DE DIRECCION No._________
Objetos Prohibidos
Cualquier objeto que dificulte su cacheo se retirará, valorándose desde la oficina del super-
visor si queda retenido o bien se devuelve a su propietario.
De las requisas se deberá realizar la correspondiente hoja adjunta habilitada para tal fin.
Ciudad, fecha
151
Reglas para los Visitantes
1. Cumpla los horarios de visita, respete a las personas y el orden de llegada para
el ingreso al Centro.
2. Recuerde que sin documentos personales no puede ingresar. No se olvide traerlos.
3. Debe someterse a los registros rutinarios de personas y paquetes, solicite al
ingresar a la institución y mantenga en un lugar visible la ficha de identifi-
cación que se le entregará, la cual debe cuidar y conservar.
4. No traer productos o artículos prohibidos, los cuales pueden constituir una falta
o delito.
5. No ofrezca dinero por ningún concepto y denuncie a quien se lo solicite
6. No reciba ENCARGOS, podría tratarse de artículos prohibidos y se involu-
craría EN UN DELITO.
7. Si no va a ingresar a la institución no entregue encargos a personas ajenas al
Centro ni empleados no autorizados; podrían no llegar a su destino.
8. No haga caso a rumores mientras espera, ello genera discusiones y alteraciones
que perjudican el orden.
9. Si no sabe dónde se encuentra su familiar (interno), acuda a la Dirección del
Centro, ellos le informarán donde se encuentra.
10. En cada Pabellón o Sección hay un personal de seguridad (VTP), que vela por
la seguridad, al servicio de la institución. Es la autoridad inmediata, respételo
y si tiene algún problema acuda a él.
11. No salga después de las horas establecidas, salir a último momento crea con-
gestión en la puerta, pone en peligro su seguridad, y perjudica al interno con la
suspensión de la visita.
12. Usted es un ciudadano con derechos y obligaciones. Cumpla con las normas de
seguridad y denuncie sin temor si es faltado o maltratado e identifique al infractor.
152
ORDEN DE DIRECCION No._________
1. Las visitas deberán encontrarse en la puerta del recinto 30 minutos antes de los horarios asig-
nados para las comunicaciones.
El Director(a)
Ciudad, fecha
153
ORDEN DE DIRECCION No._________
___________________
El Director(a)
Ciudad, fecha
154
ORDEN DE DIRECCION No._________
Al personal de salud
__________________
El Director(a)
Ciudad, fecha
155
NEGATIVA DE SALIDA A HOSPITAL
Sr. (a).Director(a)
Por la presente le comunico que el interno/a-----------------------------------
Que tenía programada una salida al hospital--------------------------------
En la unidad de-------------------------------------el día-------------------------
A la hora------------------------
Se niega a realizar dicha salida, todo lo que pongo en su conocimiento para los
efectos más oportunos.
156
ORDEN DE LICENCIA MÉDICA PARA REPOSO EN CELDA
Nombre Médico-a…............................................................................................
Diagnostico………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………
157
ORDEN DE DIRECCION No._________
_________________
El Director(a)
Ciudad, fecha
158
ORDEN DE DIRECCION No._________
Protocolo No.____
3. Trae consigo medicamentos por indicación medica: Sí_____ No_____. (Anexar receta).
________________________________________________________________
________________________________________________________________
a) Este protocolo para el registro de medicamentos de las internos/as de nuevo ingreso debe ser
llenado por el encargado/a de área o agente designado para el chequeo de pertenencias.
_________________
El Director(a)
Ciudad, fecha
159
RETIRADA DE MEDICAMENTOS DEL CONSULTORIO
MÉDICO POR EL SUPERVISOR(A) DE SERVICIOS
160
HOJA DE CONTROL DE LICENCIAS MÉDICAS
161
REGISTRO DE PAQUETES DE ENTRADA
162
INDICACIONES A SEGUIR PARA EL FUNCIONAMIENTO
DE LAS PAQUETERÍAS
163
INFORME DE CACHEO DE INTERNOS/AS
OBSERVACIONES
164
FORMATO DE RECUENTO DE INTERNOS/AS
Internos/as Presentes
Internos/as Juicio
Internos/as Hospital
Total Internos/as
Internos/as Presentes
Pabellón A Internos/as Juicio _____
Internos/as Hospital
Total Internos/as
Internos/as Presentes
Pabellón B Internos/as Juicio
Internos/as Hospital
Total Internos/as
Internos/as Presentes
Pabellón C Internos/as Juicio
Internos/as Hospital
Total Internos/as
165
Internos/as Presentes
Pabellón D Internos/as Juicio
Internos/as Hospital
Total Internos/as
Total
Internos/as Presentes
Pabellón Reflexión Internos/as Sancionadas
Internos/as Inmovilizadas
Total Internos/as
166
INFORME DE REGISTRO DE DEPENDENCIAS
167
LIBRO DE SERVICIOS
TURNO_____________________________________________
Fecha_________________ Supervisor_______________________
Encargado de Área_______________________________________
Puesto 2 (Recepción)______________________________________
168
INFORME DE NOTIFICACION DE HUELGA DE HAMBRE
OBSERVACIONES________________________________________________
169
ORDEN DE DIRECCION No._________
1. Las guardias para los traslados deberán organizarse la noche anterior, a cuyo
efecto recibirán la relación de internos/as para traslado con anticipación.
2. Los supervisores deberán entregar a la Dirección por escrito los resultados del
recuento realizado, tanto en las horas de la mañana como de la noche.
Atentamente,
Director(a)
Ciudad, fecha
170
HOJA DE NOVEDADES
NOVEDAD:
171
RELACION DE ENTRADA Y SALIDA DE PERSONAL
QUE LABORA EN EL CENTRO
NOMBRE CARGO HORA LLAVES HORA OBSERVACIONES
ENTRADA SALIDA
172
CONTROL DEL ESTADO DEL VEHÍCULO DEL CENTRO
Ficha de Vehículo____________
Marca:_____________________
Modelo:____________________
Matrícula No.:_______________
Fecha de alta en el Centro:____________________
Kilometraje en el momento de alta en el Centro:_______________
Fecha Traslado:_______________________
Fecha Traslado:_______________________
173
RELACIÓN OFICIAL DE MEDIOS COERCITIVOS
Y COMUNICADORES
TOTAL
Macanas
Esposas
Esposas de pie
Llaves de esposas
Comunicadores
Cargadores
Petacas
Adaptadores
Transformadores
Adaptadores de enchufe
___________________________
Firma del encargado(a) de área
___________________________
Firma del supervisor(a) de servicios
174
SOLICITUD DE DIETAS PARA INTERNOS/AS
Nombre de médico-a……………………………………
Diagnóstico…………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
Tipo de dieta
……………………………………………………………………………..
Observaciones………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………
………………
Duración Desde…………………………
Hasta………………………………
Fecha Solicitud…………………………………………………………………...
Gestionado en fecha………………………………………………………………
Subdirector(a) Administrativa
175
CONTROLES INTERNOS FONDO DE CAJA CHICA
1. Los fondos de caja chica deberán ser utilizados solamente para pagos de poco monto.
2. Los desembolsos de caja chica no deben exceder de 10% del monto total del fondo.
3. Los pagos por caja chica se realizan mediante volantes definitivos prenumerados de
imprenta expedidos en secuencia, y volantes provisionales para controlar la entrega de
efectivo previo al desembolso real, el cual se liquidará con los comprobantes. Los volantes
provisionales no podrán permanecer más de tres días en caja.
4. Los volantes de caja chica deberán ser firmados por la persona que aprueba el pago y
por quien recibe el dinero.
5. Debe anexarse a los volantes definitivos de caja chica, toda la documentación justifica-
tiva por los pagos efectuados.
6. La documentación justificativa de los pagos por caja chica deberán cancelarse con un
sello fechador con la inscripción “pagado” y a la fecha del desembolso.
7. Para la reposición del fondo de caja chica debe haberse consumido el 60% del monto
total del fondo.
8. El cheque de reposición debe hacerse por el total de los comprobantes y a nombre del
custodia.
9. Los cheques de reposición deben indicar los números de los comprobantes que se repo-
nen.
10. Está prohibido el cambio de cheques a través del fondo de caja chica.
11. Está prohibido el pago de sueldos a través del fondo de caja chica.
12. El fondo de caja chica debe mantenerse separado de cualquier otro fondo que opere la
institución y el custodia no debe tener acceso al efectivo recibido de los clientes u otro
depósito.
176
13. Los volantes de caja chica deben ser autorizados por el funcionario del área donde se
solicite el desembolso y por el encargado del área financiera.
14. No se permitirá el manejo de dos fondos de caja chica por una sola persona.
15. Cualquier cambio en el monto de caja chica debe realizarse mediante una comuni-
cación del incumbente de mayor jerarquía.
16. Las políticas para el manejo adecuado de caja chica deben ser entregadas por escrito
al responsable del manejo de la misma.
17. Las facturas no deben ser fraccionadas para eludir el monto de desembolsos.
18. El encargado del fondo no debe tener acceso a los registros de contabilidad, relaciona-
do con el manejo del efectivo.
19. El fondo de caja chica debe ser arqueado esporádicamente y sorpresivamente por el
auditor interno o por cualquier otro departamento que sirva de control financiero.
20. Es responsabilidad del incumbente de mayor jerarquía, el encargado del área financiera
y del Auditor interno, velar por el cumplimiento de estos controles.
177
178
Reporte para Control de Asistencia de Personal Técnico
Relación Mes ___________2006
179
Formulario para Levantamiento Condición de las Áreas
e Infraestructuras Exteriores
180
Formulario para Levantamiento Condición de las Áreas
e Infraestructuras Exteriores
181
Formulario para Levantamiento Condición de las Áreas
e Infraestructuras Exteriores
182
Formulario para Levantamiento Condición de las Áreas
Verdes y Jardines
183
Formulario para Levantamiento Condición de los Pabellones
184
185
186
187
188
OTROS
ANEXOS
189
190
CONSTITUCIÓN
DE LA
REPUBLICA DOMINICANA
191
192
CONSTITUCION DE LA REPUBLICA DOMINICANA
Proclamada por la Asamblea Nacional
En fecha 25 de julio del año 2002.
LA ASAMBLEA NACIONAL
EN NOMBRE DE LA REPUBLICA
Constituida en Asamblea Revisora de la Constitución,
declara en vigor el siguiente texto de la
CONSTITUCION DE LA REPUBLICA DOMINICANA
TITULO I
SECCION I
De la Nación, de su Soberanía y de su Gobierno.
ART. 1.- El pueblo dominicano constituye una Nación organizada en Estado libre e inde-
pendiente, con el nombre de República Dominicana.
ART. 2.- La soberanía nacional corresponde al pueblo, de quien emanan todos los
poderes del Estado, los cuales se ejercen por representación.
La República Dominicana reconoce y aplica las normas del Derecho Internacional general
y americano en la medida en que sus poderes públicos las hayan adoptado, y se pronun-
cia en favor de la solidaridad económica de los países de América y apoyará toda iniciati-
va que propenda a la defensa de sus productos básicos y materias primas.
Se divide en Poder Legislativo, Poder Ejecutivo y Poder Judicial. Estos tres poderes son
independientes en el ejercicio de sus respectivas funciones. Sus encargados son
responsables y no pueden delegar sus atribuciones, las cuales son únicamente las
determinadas por esta Constitución y las leyes.
193
SECCION II
DEL TERRITORIO
ART. 5.- El territorio de la República Dominicana es y será inalienable. Está integrado por
la parte oriental de la Isla de Santo Domingo y sus islas adyacentes. Sus límites terrestres
irreductibles están fijados por el Tratado Fronterizo de 1929, y su Protocolo de Revisión
de 1936.
Son también partes del territorio nacional, el mar territorial y el suelo y subsuelo sub-
marinos correspondientes, así como el espacio aéreo sobre ellos comprendido. La
extensión del mar territorial, del espacio aéreo y de la zona contigua y su defensa, lo
mismo que las del suelo y subsuelo submarinos y su aprovechamiento, serán estable-
cidos y regulados por la ley.
La ley fijará el número de las provincias, determinará sus nombres y los límites de éstas
y del Distrito Nacional, así como los de los municipios en que aquellas se dividen, y
podrá crear también, con otras denominaciones, nuevas divisiones políticas del territo-
rio.
SECCION III
DEL REGIMEN ECONOMICO Y SOCIAL FRONTERIZO
ART. 7.- Es de supremo y permanente interés nacional el desarrollo económico y social
del territorio de la República a lo largo de la línea fronteriza, así como la difusión en el
mismo de la cultura y la tradición religiosa del pueblo dominicano. El aprovechamiento
agrícola e industrial de los ríos fronterizos se continuará regulando por los principios
consagrados en el Artículo 6to. del Protocolo de Revisión de 1936 del Tratado de
Frontera de 1929, y en el Artículo 10 del Tratado de Paz, Amistad y Arbitraje de 1929.
194
TITULO II
SECCION I
DE LOS DERECHOS INDIVIDUALES Y SOCIALES
ART. 8.- Se reconoce como finalidad principal del Estado la protección efectiva de los
derechos de la persona humana y el mantenimiento de los medios que le permitan per-
feccionarse progresivamente dentro de un orden de libertad individual y de justicia
social, compatible con el orden público, el bienestar general y los derechos de todos.
Para garantizar la realización de esos fines se fijan las siguientes normas:
e. Todo arresto se dejará sin efecto o se elevará a prisión dentro de las cuarenta y ocho
horas de haber sido sometido el arrestado a la autoridad judicial competente, debiendo
notificarse al interesado dentro del mismo plazo, la providencia que al efecto se dictare.
g. Toda persona que tenga bajo su guarda a un detenido estará obligada a presentarlo
tan pronto como se lo requiera la autoridad competente.
195
h. Nadie podrá ser juzgado dos veces por una misma causa.
i. Nadie podrá ser obligado a declarar contra sí mismo.
j. Nadie podrá ser juzgado sin haber sido oído o debidamente citado ni sin observancia
de los procedimientos que establezca la ley para asegurar un juicio imparcial y el ejer-
cicio del derecho de defensa. Las audiencias serán públicas, con las excepciones que
establezca la ley, en los casos en que la publicidad resulte perjudicial al orden público
o a las buenas costumbres.
3. La inviolabilidad de domicilio.
Ninguna visita domiciliaria puede verificarse sino en los casos previstos por la ley y con
las formalidades que ella prescribe.
4. La libertad de tránsito, salvo las restricciones que resultaren de las penas impuestas
judicialmente, o de las leyes de policía, de inmigración y de sanidad.
6. Toda persona podrá, sin sujeción a censura previa, emitir libremente su pensamien-
to mediante palabras escritas o por cualquier otro medio de expresión, gráfico u oral.
Cuando el pensamiento expresado sea atentatorio a la dignidad y a la moral de las per-
sonas, al orden público o a las buenas costumbres de la sociedad, se impondrán las
sanciones dictadas por las leyes.
Se prohíbe toda propaganda subversiva, ya sea por anónimos o por cualquier otro
medio de expresión que tenga por objeto provocar desobediencia a las leyes, sin que
esto último pueda coartar el derecho a análisis o a crítica de los preceptos legales.
196
10. Todos los medios de información tienen libre acceso a las fuentes noticiosas ofi-
ciales y privadas, siempre que no vayan en contra del orden público o pongan en peli-
gro la seguridad nacional.
11. La libertad de trabajo. La ley podrá, según lo requiera el interés general, establecer la jor-
nada máxima de trabajo, los días de descanso y vacaciones, los sueldos y salarios mínimos
y sus formas de pago, los seguros sociales, la participación de los nacionales en todo trabajo,
y en general, todas las providencias de protección y asistencia del Estado que se consideren
necesarias en favor de los trabajadores, ya sean manuales o intelectuales.
a. La organización sindical es libre, siempre que los sindicatos, gremios u otras asocia-
ciones de la misma índole se ajusten en sus estatutos y en su conducta a una organi-
zación democrática compatible con los principios consagrados en esta Constitución y
para fines estrictamente laborales y pacíficos.
b. El Estado facilitará los medios a su alcance para que los trabajadores puedan adquirir
los útiles e instrumentos indispensables a su labor.
13. El derecho de propiedad. En consecuencia, nadie puede ser privado de ella sino por
causa justificada de utilidad pública o de interés social, previo pago de su justo valor deter-
minado por sentencia de tribunal competente. En casos de calamidad pública, la indem-
nización podrá no ser previa. No podrá imponerse la pena de confiscación general de
bienes por razones de orden político.
197
a. Se declara de interés social la dedicación de la tierra a fines útiles y la eliminación
gradual del latifundio. Se destinan a los planes de la Reforma Agraria las tierras que
pertenezcan al Estado o las que éste adquiera de grado a grado o por expropiación, en
la forma prescrita por esta Constitución, que no estén destinadas o deban destinarse
por el Estado a otros fines de interés general. Se declara igualmente como un objetivo
principal de la política social del Estado el estímulo y cooperación para integrar efecti-
vamente a la vida nacional la población campesina, mediante la renovación de los
métodos de la producción agrícola y la capacitación cultural y tecnológica del hombre
campesino.
14. La propiedad exclusiva por el tiempo y en la forma que determine la ley, de los inven-
tos y descubrimientos, así como de las producciones científicas, artísticas y literarias.
15. Con el fin de robustecer su estabilidad y bienestar, su vida moral, religiosa y cultural,
la familia recibirá del Estado la más amplia protección posible.
d. La mujer casada disfrutará de plena capacidad civil. La ley establecerá los medios
necesarios para proteger los derechos patrimoniales de la mujer casada, bajo cualquier
régimen.
198
educación primaria y secundaria, como la que se ofrezca en las escuelas agronómicas,
vocacionales, artísticas, comerciales, de artes manuales y de economía doméstica
serán gratuitas.
El Estado prestará, asimismo, asistencia social a los pobres. Dicha asistencia consis-
tirá en alimentos, vestimenta y hasta donde sea posible, alojamiento adecuado.
El Estado combatirá los vicios sociales con medidas adecuadas y con el auxilio de las
convenciones y organizaciones internacionales. Para la corrección y erradicación de
tales vicios, se crearán centros y organismos especializados.
SECCION II
DE LOS DEBERES
ART. 9.- Atendiendo a que las prerrogativas reconocidas y garantizadas en el artículo
precedente de esta Constitución suponen la existencia de un orden correlativo de
responsabilidad jurídica y moral que obliga la conducta del hombre en sociedad, se
declaran como deberes fundamentales los siguientes:
b. Todo dominicano hábil tiene el deber de prestar los servicios civiles y militares que la
Patria requiera para su defensa y conservación.
199
c. Los habitantes de la República deben abstenerse de todo acto perjudicial a su esta-
bilidad, independencia o soberanía y estarán, en caso de calamidad pública, obligados
a prestar los servicios de que sean capaces.
d. Todo ciudadano dominicano tiene el deber de votar, siempre que esté legalmente
capacitado para hacerlo.
TITULO III
DERECHOS POLITICOS
SECCION I
DE LA NACIONALIDAD
ART. 11.- Son dominicanos:
1. Todas las personas que nacieren en el territorio de la República, con excepción de
los hijos legítimos de los extranjeros residentes en el país en representación diplomáti-
ca o los que están de tránsito en él.
2. Las personas que al presente estén investidas de esta calidad en virtud de constitu-
ciones y leyes anteriores.
200
pre que, de acuerdo con las leyes del país de su nacimiento, no hubieren adquirido una
nacionalidad extraña; o que, en caso de haberla adquirido, manifestaren, por acto ante
un oficial público remitido al Poder Ejecutivo, después de alcanzar la edad de diez y
ocho (18) años, su voluntad de optar por la nacionalidad dominicana.
Párrafo II. La mujer dominicana casada con un extranjero podrá adquirir la nacionalidad
de su marido.
Párrafo III. La mujer extranjera que contrae matrimonio con un dominicano seguirá la
condición de su marido, a menos que las leyes de su país le permitan conservar su
nacionalidad, caso en el cual tendrá la facultad de declarar, en el acta de matrimonio,
que declina la nacionalidad dominicana.
SECCION II
DE LA CIUDADANIA
ART. 12.- Son ciudadanos todos los dominicanos de uno y otro sexo que hayan cumpli-
do 18 años de edad, y los que sean o hubieren sido casados, aunque no hayan cumpli-
do esa edad.
ART. 14.- Los derechos de ciudadanía se pierden por condenación irrevocable por
traición, espionaje o conspiración contra la República, o por tomar las armas, prestar
ayuda o participar en cualquier atentado contra ella.
ART. 15.- Los derechos de ciudadanía quedan suspendidos en los casos de:
201
a. Condenación irrevocable a pena criminal, hasta la rehabilitación.
b. Interdicción judicial legalmente pronunciada, mientras ésta dure.
c. Por admitir en territorio dominicano función o empleo de un gobierno extranjero sin
previa autorización del Poder Ejecutivo.
TITULO IV
SECCION I
DEL PODER LEGISLATIVO
ART. 16.- El Poder Legislativo se ejerce por un Congreso de la República, compuesto
de un Senado y una Cámara de Diputados.
ART. 18.- Los cargos de Senador y de Diputado son incompatibles con cualquier otra
función o empleo de la administración pública.
ART. 20.- La terna deberá ser sometida a la Cámara donde se haya producido la
vacante, dentro de los treinta días siguientes a su ocurrencia, si estuviere reunido el
Congreso, y en caso de no estarlo, dentro de los treinta primeros días de su reunión.
Transcurrido el plazo señalado sin que el organismo competente del partido hubiese
sometido la terna, la Cámara correspondiente hará libremente la elección.
SECCION II
DEL SENADO
ART. 21.- El Senado se compondrá de miembros elegidos a razón de uno por cada
provincia y uno por el Distrito Nacional, cuyo ejercicio durará un período de cuatro años.
ART. 22.- Para ser Senador se requiere ser dominicano en pleno ejercicio de los dere-
chos civiles y políticos, haber cumplido veinticinco años de edad y ser nativo de la cir-
cunscripción territorial que lo elija o haber residido en ella por lo menos cinco años con-
secutivos.
Párrafo.- Los naturalizados no podrán ser elegidos Senadores sino diez años después
de haber adquirido la nacionalidad, y siempre que hubieren residido dentro de la juris-
dicción que los elija durante los cinco años que precedan a su elección.
202
ART. 23.- Son atribuciones del Senado:
1. Elegir el Presidente y demás miembros de la Junta Central Electoral y sus suplentes.
2. Elegir los miembros de la Cámara de Cuentas.
3. Aprobar o no los nombramientos de funcionarios diplomáticos que expida el Poder
Ejecutivo.
4. Conocer de las acusaciones formuladas por la Cámara de Diputados contra los fun-
cionarios públicos elegidos para un período determinado, por mala conducta o faltas
graves en el ejercicio de sus funciones. En materia de acusación, el Senado no podrá
imponer otras penas que las de destitución del cargo. La persona destituida quedará sin
embargo sujeta, si hubiese lugar, a ser acusada y juzgada con arreglo a la ley.
El Senado no podrá destituir a un funcionario sino cuando lo acordare por lo menos el
voto de las tres cuartas partes de la totalidad de sus miembros.
SECCION III
DE LA CAMARA DE DIPUTADOS
ART. 25.- Para ser Diputado se requiere las mismas condiciones que para ser Senador.
Párrafo.- Los naturalizados no podrán ser elegidos Diputados sino diez años después
de haber adquirido la nacionalidad y siempre que hubieren residido dentro de la juris-
dicción que los elija durante los cinco años que precedan a su elección.
SECCION IV
DISPOSICIONES COMUNES A AMBAS CAMARAS
ART. 27.- Las Cámaras se reunirán en Asamblea Nacional en los casos indicados por
la Constitución, debiendo estar presente más de la mitad de los miembros de cada una
de ellas.
Las decisiones se tomarán por mayoría absoluta de votos.
203
cho de los asuntos que le son peculiares, y podrá, en el uso de sus facultades discipli-
narias, establecer las sanciones que procedan.
Párrafo.- Podrán también reunirse conjuntamente para recibir el mensaje del Presidente
de la República y las memorias de los Secretario de Estado, a que se refiere el Artículo
55, Inciso 22, y para la celebración de actos conmemorativos o de otra naturaleza que
no se relacionen con el ejercicio de las atribuciones legislativas de cada Cámara ni de
las que están señaladas por esta Constitución como exclusivas de cada una de ellas.
ART. 30.- En cada Cámara será necesaria la presencia de más de la mitad de sus
miembros para la validez de las deliberaciones. Las decisiones se tomarán por mayoría
absoluta de votos, salvo los asuntos declarados previamente de urgencia, en que
decidirán las dos terceras partes de los votos, en su segunda discusión.
ART. 31.- Los miembros de una y otra Cámara gozarán de la más completa inmunidad
penal por las opiniones que expresen en las sesiones.
ART. 32.- Ningún Senador o Diputado podrá ser privado de su libertad durante la legis-
latura, sin la autorización de la Cámara a que pertenezca, salvo el caso de que sea
aprehendido en el momento de la comisión de un crimen. En todos los casos, el Senado
o la Cámara de Diputados, o si éstos no están en sesión o no constituyen quórum,
cualquier miembro podrá exigir que sea puesto en libertad por el tiempo que dure la leg-
islatura o una parte de ella, cualquiera de sus miembros que hubiere sido detenido,
arrestado, preso o privado en cualquier otra forma de su libertad. A este efecto se hará
un requerimiento por el Presidente del Senado o el de la Cámara de Diputados, o por
el Senador o Diputado, según el caso, al Procurador General de la República; y si fuese
necesario, dará la orden de libertad directamente, para lo cual podrá requerir y deberá
serle prestado, por todo depositario de la fuerza pública, el apoyo de ésta.
204
Párrafo I. Cada Cámara designará sus empleados auxiliares.
ART. 35.- Cuando las Cámaras se reúnan en Asamblea Nacional o en reunión conjun-
ta, asumirá la Presidencia el Presidente del Senado; la Vicepresidencia la ocupará la
persona a quien corresponda en ese momento presidir la Cámara de Diputados, y la
Secretaría las personas a quienes corresponda en ese momento las funciones de
Secretarios de cada Cámara.
Párrafo I. En caso de falta temporal o definitiva del Presidente del Senado, y mientras
no sea elegido el nuevo Presidente de dicha Cámara Legislativa, presidirá la Asamblea
Nacional o la reunión conjunta el Presidente de la Cámara de Diputados.
Párrafo II. En caso de falta temporal o definitiva del Presidente del Senado y del
Presidente de la Cámara de Diputados, presidirá la Asamblea o la reunión conjunta el
Vicepresidente del Senado, y, en su defecto, el Vicepresidente de la Cámara de
Diputados.
ART. 36.- Corresponde a la Asamblea Nacional examinar las actas de elección del
Presidente y del Vicepresidente de la República, proclamarlos y, en su caso, recibirles
juramento, aceptarles o rechazarles las renuncias y ejercer las facultades que le con-
fiere la presente Constitución.
SECCION V
DEL CONGRESO
ART. 37.- Son atribuciones del Congreso:
1. Establecer los impuestos o contribuciones generales y determinar el modo de su
recaudación e inversión.
205
5. Disponer todo lo concerniente a la conservación de monumentos y objetos antiguos
y a la adquisición de éstos últimos.
10. Aumentar o reducir el número de las Cortes de Apelación y crear o suprimir tri-
bunales ordinarios o de excepción.
11. Crear o suprimir tribunales para conocer y decidir los asuntos contencioso-adminis-
trativos y disponer todo lo relativo a su organización y competencia.
12. Votar el Presupuesto de Ingresos y Ley de Gastos Públicos y aprobar o no los gas-
tos extraordinarios para los cuales solicite un crédito el Poder Ejecutivo.
13. Autorizar o no empréstitos sobre el crédito de la República por medio del Poder
Ejecutivo.
206
17. Conceder autorización al Presidente de la República para salir al extranjero cuando
sea por más de quince días.
18. Examinar anualmente todos los actos del Poder Ejecutivo y aprobarlos, si son ajus-
tados a la Constitución y a las leyes.
23. Legislar acerca de toda materia que no sea de la competencia de otro Poder del
Estado o contraria a la Constitución.
SECCION VI
DE LA FORMACION Y EFECTO DE LAS LEYES
ART. 38.- Tienen derecho a iniciativa en la formación de las leyes:
a. Los Senadores y los Diputados.
b. El Presidente de la República.
c. La Suprema Corte de Justicia en asuntos judiciales.
d. La Junta Central Electoral en asuntos electorales.
Párrafo.- El que ejerza ese derecho podrá sostener su moción en la otra Cámara, si es
el caso del Inciso a) de este artículo, y en ambas Cámaras mediante representante si
se trata de uno cualquiera de los otros tres casos.
ART. 39.- Todo proyecto de ley admitido en una de las Cámaras se someterá a dos dis-
cusiones distintas, con un intervalo de un día por lo menos entre una y otra discusión.
En caso de que fuere declarado previamente de urgencia deberá ser discutido en dos
sesiones consecutivas.
207
ART. 40.- Aprobado un proyecto de ley en cualquiera de las Cámaras, pasará a la otra para
su oportuna discusión, observándose en ella las mismas formas constitucionales. Si esta
Cámara le hiciere modificaciones, devolverá dicho proyecto con observaciones a la Cámara
en que se inició, y, en caso de ser aceptadas, enviará la ley al Poder Ejecutivo. Pero si aque-
llas fueren rechazadas, será devuelto el proyecto a la otra Cámara con observaciones; y si
ésta las aprueba, enviará a su vez la ley al Poder Ejecutivo. Si fueren rechazadas las obser-
vaciones, se considerará desechado el proyecto.
ART. 41.- Toda ley aprobada en ambas Cámaras será enviada al Poder Ejecutivo. Si éste
no la observaren, la promulgará dentro de los ocho días de recibida y la hará publicar
dentro de los quince días de la promulgación. Si la observare, la devolverá a la Cámara
de donde procedió en el término de ocho días a contar de la fecha en que le fue envia-
da, si el asunto no fue declarado de urgencia, pues en este caso hará sus observaciones
en el término de tres días. La Cámara que hubiere recibido las observaciones las hará
consignar en el orden del día de la próxima sesión y discutirá de nuevo la ley. Si después
de esta discusión, las dos terceras partes del número total de los miembros de dicha
Cámara la aprobaren de nuevo, será remitida a la otra Cámara; y si ésta la aprobare por
igual mayoría, se considerará definitivamente ley. El Presidente de la República estará
obligado a promulgar y publicar la ley en los plazos indicados.
Párrafo I. Los proyectos de ley que quedaren pendientes en cualquiera de las dos
Cámaras al cerrarse la legislatura, deberán seguir los trámites constitucionales en la
legislatura siguiente, hasta ser convertidos en ley o ser rechazados. Cuando esto no
ocurriere así, se tendrá el proyecto como no iniciado.
Párrafo II. Todo proyecto de ley recibido en una Cámara, después de haber sido aproba-
do en la otra, será fijado en el orden del día.
ART. 42.- Cuando fuere enviada una ley al Presidente de la República para su promul-
gación y el tiempo que faltare para el término de la legislatura fuere inferior al que se
determina en el precedente artículo para observarla, seguirá abierta la legislatura para
conocer de las observaciones hasta el agotamiento de los plazos y del procedimiento
establecido por el Artículo 41.
Las leyes, después de publicadas, son obligatorias para todos los habitantes de la
República, si ha transcurrido el tiempo legal para que se reputen conocidas.
ART. 43.- Los proyectos de ley rechazados en una Cámara no podrán presentarse en
la otra, ni nuevamente en ninguna de las dos, sino en la legislatura siguiente.
ART. 44.- Las leyes se encabezarán así: "El Congreso Nacional. En Nombre de la República".
208
ART. 45.- Las leyes, después de promulgadas, se publicarán en la forma que por la ley
se determine, y serán obligatorias una vez que hayan transcurrido los plazos indicados
por la ley para que se reputen conocidas en cada parte del territorio nacional.
ART. 46.- Son nulos de pleno derecho toda ley, decreto, resolución, reglamento o acto
contrarios a esta Constitución.
ART. 47.- La ley solo dispone y se aplica para lo porvenir. No tiene efecto retroactivo
sino cuando sea favorable al que esté sub-judice o cumpliendo condena. En ningún
caso la ley ni poder público alguno podrán afectar o alterar la seguridad jurídica deriva-
da de situaciones establecidas conforme a una legislación anterior.
ART. 48.- Las leyes relativas al orden público, la policía, la seguridad y las buenas cos-
tumbres, obligan a todos los habitantes del territorio y no pueden ser derogadas por
convenciones particulares.
TITULO V
SECCION I
DEL PODER EJECUTIVO
ART. 49.- El Poder Ejecutivo se ejerce por el Presidente de la República, quien será
elegido cada cuatro años por voto directo. El Presidente de la República podrá optar por
un segundo y único periodo constitucional consecutivo, no pudiendo postularse jamás
al mismo cargo, ni a la Vicepresidencia de la República.
ART. 51.- Habrá un Vicepresidente de la República, que será elegido en la misma forma
y por igual período que el Presidente y conjuntamente con éste. Para ser
Vicepresidente de la República se requieren las mismas condiciones que para ser
Presidente.
209
fecha en que deberá terminar el período de los salientes. Cuando el Presidente de la
República electo no pudiere hacerlo por encontrarse fuera del país o por enfermedad o
por cualquiera otra causa de fuerza mayor, ejercerá las funciones de Presidente de la
República interinamente el Vicepresidente de la República electo, y, a falta de éste, el
Presidente de la Suprema Corte de Justicia.
ART. 53.- Si el Presidente de la República electo faltare definitivamente sin prestar jura-
mento de su cargo, el Vicepresidente de la República electo lo sustituirá y, a falta de
éste, se procederá en la forma indicada en el Artículo 60.
"Juro por Dios, por la Patria y por mi honor, cumplir y hacer cumplir la Constitución y las
leyes de la República, sostener y defender su independencia, respetar sus derechos y
llenar fielmente los deberes de mi cargo".
2. Promulgar y hacer publicar las leyes y resoluciones del Congreso Nacional y cuidar
de su fiel ejecución. Expedir reglamentos, decretos e instrucciones cuando fuere nece-
sario.
6. Presidir todos los actos solemnes de la Nación, dirigir las negociaciones diplomáticas
y celebrar tratados con las naciones extranjeras u organismos internacionales, debien-
do someterlos a la aprobación del Congreso, sin lo cual no tendrán validez ni obligarán
a la República.
210
7. En caso de alteración de la paz pública, y si no se encontrare reunido el Congreso
Nacional, decretar, donde aquella exista, el estado de sitio y suspender el ejercicio de
los derechos que según el Artículo 37, Inciso 7 de esta Constitución se permite al
Congreso suspender. Podrá también, en caso de que la soberanía nacional se encuen-
tre en peligro grave e inminente, declarar el estado de emergencia nacional, con los
efectos y requisitos indicados en el Inciso 8 del mismo artículo. En caso de calamidad
pública podrá, además, decretar zonas de desastres aquellas en que se hubieren pro-
ducido daños, ya sea a causa de meteoros, sismos, inundaciones o cualquier otro fenó-
meno de la naturaleza, así como a consecuencia de epidemias.
9. Llenar interinamente las vacantes que ocurran entre los Jueces de la Suprema Corte
de Justicia, de las Cortes de Apelación, del Tribunal de Tierras, de los Juzgados de
Primera Instancia, de los Jueces de Instrucción, de los Jueces de Paz, del Presidente
y demás miembros de la Junta Central Electoral, así como los miembros de la Cámara
de Cuentas, cuando esté en receso el Congreso, con la obligación de informar al
Senado de dichos nombramientos en la próxima legislatura para que éste provea los
definitivos.
11. Cuando ocurran vacantes en los cargos de Regidores o Síndicos Municipales o del
Distrito Nacional, y se haya agotado el número de Suplentes elegidos, el Poder
Ejecutivo escogerá el sustituto, de la terna que le someterá el partido que postuló el
Regidor o Síndico que originó la vacante. La terna deberá ser sometida al Poder
Ejecutivo dentro de los 15 días siguientes al de la ocurrencia de la vacante; de no ser
sometida dicha terna en el indicado plazo, el Poder Ejecutivo hará la designación co-
rrespondiente.
211
13. Reglamentar cuanto convenga al servicio de las Aduanas.
14. Disponer, en todo tiempo, cuanto concierna a las Fuerzas Armadas de la Nación,
mandarlas por sí mismo o por medio de la persona o personas que designe para hacer-
lo, conservando siempre su condición de Jefe Supremo de las mismas; fijar el número
de dichas fuerzas y disponer de ellas para fines del servicio público.
15. Tomar las medidas necesarias para proveer a la legítima defensa de la Nación en
caso de ataque armado actual o inminente de parte de nación extranjera, debiendo
informar al Congreso sobre las disposiciones así adoptadas.
16. Hacer arrestar o expulsar a los extranjeros cuyas actividades, a su juicio, fueren o
pudieren ser perjudiciales al orden público o a las buenas costumbres.
17. Nombrar o revocar los Miembros de los Consejos de Guerra de las Fuerzas
Armadas y de la Policía Nacional.
25. Anular por Decreto motivado los arbitrios establecidos por los ayuntamientos.
212
27. Conceder indulto, total o parcial, puro y simple o condicional, en los días 27 de
febrero, 16 de agosto y 23 de diciembre de cada año, con arreglo a la ley.
ART. 56.- El Presidente de la República no podrá salir al extranjero por más de quince
días sin autorización del Congreso.
ART. 58.- En caso de falta temporal del Presidente de la República, después de haber
prestado juramento, ejercerá el Poder Ejecutivo, mientras dure esa falta, el
Vicepresidente de la República; y a falta de éste, el Presidente de la Suprema Corte de
Justicia.
ART. 59.- En caso de falta definitiva del Presidente de la República, después de haber
prestado juramento, desempeñará la Presidencia de la República por el tiempo que
falte para la terminación del período, el Vicepresidente de la República.
SECCION II
DE LOS SECRETARIOS DE ESTADO
ART. 61.- Para el despacho de los asuntos de la administración pública, habrá las
Secretarías de Estado que sean creadas por la ley. También podrán crearse por la ley las
Subsecretarias de Estado que se consideren necesaria, y que actuarán bajo la subordi-
nación y dependencia del Secretario de Estado correspondiente. Para ser Secretario o
Subsecretario de Estado se requiere ser dominicano en el pleno ejercicio de los derechos
civiles y políticos y haber cumplido la edad de 25 años.
213
TITULO VI
SECCION I
DEL PODER JUDICIAL
ART. 63.- El Poder Judicial se ejerce por la Suprema Corte de Justicia y por los demás
Tribunales del Orden Judicial creados por esta Constitución y las leyes. Este poder
gozará de autonomía administrativa y presupuestaria.
Párrafo II. Los funcionarios del orden judicial no podrán ejercer otro cargo o empleo
público, salvo lo que se dispone en el Artículo 108.
Párrafo III. Los jueces son inamovibles, sin perjuicio de lo dispuesto en el Acápite 5 del
Artículo 67.
Párrafo IV. Una vez vencido el período por el cual fue elegido un juez, permanecerá en
su cargo hasta que sea designado su sustituto.
SECCION II
DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA
ART. 64.- La Suprema Corte de Justicia se compondrá de, por lo menos, once jueces,
pero podrá reunirse, deliberar y fallar válidamente con el quórum que determine la ley,
la cual reglamentará su organización.
Párrafo I. Los jueces de la Suprema Corte de Justicia serán designados por el Consejo
Nacional de la Magistratura, el cual estará presidido por el Presidente de la República
y, en ausencia de éste, será presidido por el Vicepresidente de la República, y a falta
de ambos, lo presidirá el Procurador General de la República. Los demás miembros
serán:
1. El Presidente del Senado y un Senador escogido por el Senado que pertenezca a un
partido diferente al partido del Presidente del Senado;
214
4. Un Magistrado de la Suprema Corte de Justicia escogido por ella misma, quien fun-
girá de Secretario.
Párrafo II. Al elegir los Jueces de la Suprema Corte de Justicia, el Consejo Nacional de la
Magistratura dispondrá cuál de ellos deberá ocupar la Presidencia y designará un primero
y segundo sustitutos para reemplazar al Presidente en caso de falta o impedimento.
Párrafo III. En caso de cesación de un Juez investido con una de las calidades arriba
expresadas, el Consejo Nacional de la Magistratura elegirá un nuevo juez con la misma
calidad o atribuirá esta a otro de los jueces.
ART. 66.- El Ministerio Público ante la Suprema Corte de Justicia estará representado
por el Procurador General de la República, personalmente o por medio de los sustitu-
tos que la ley pueda crearle. Tendrá la misma categoría que el Presidente de dicha
Corte y las atribuciones que le confieren las leyes.
Para ser Procurador General de la República se requieren las mismas condiciones que
para ser Juez de la Suprema Corte de Justicia.
215
2. Conocer de los recursos de casación de conformidad con la ley.
4. Elegir los Jueces de las Cortes de Apelación, del Tribunal de Tierras, de los Juzgados
de Primera Instancia, los Jueces de Instrucción, los Jueces de Paz y sus suplentes, los
Jueces del Tribunal Contencioso Tributario y los Jueces de cualesquier otros tribunales
del orden judicial creados por la ley, de conformidad a lo establecido en la Ley de
Carrera Judicial.
5. Ejercer la más alta autoridad disciplinaria sobre todos los miembros del Poder
Judicial, pudiendo imponer hasta la suspensión o destitución en la forma que determine
la ley.
7. Crear los cargos administrativos que sean necesarios para que el Poder Judicial
pueda cumplir cabalmente las atribuciones que le confiere esta Constitución y las leyes.
8. Nombrar todos los funcionarios y empleados que dependan del Poder Judicial.
9. Fijar los sueldos y demás remuneraciones de los jueces y del personal administrati-
vo perteneciente al Poder Judicial.
SECCION III
DE LAS CORTES DE APELACION
ART. 68.- Habrá, por lo menos, nueve Cortes de Apelación para toda la República. El
número de jueces que deben componerlas, así como los distritos judiciales que a cada
Corte correspondan, se determinarán por la ley.
Párrafo I. Al elegir los Jueces de las Cortes de Apelación, la Suprema Corte de Justicia
dispondrá cuál de ellos deberá ocupar la Presidencia y designará un primero y segun-
do sustitutos para reemplazar al Presidente en caso de falta o impedimento.
Párrafo II. En caso de cesación de un juez investido con una de las calidades arriba
216
expresadas, la Suprema Corte de Justicia elegirá un nuevo juez con la misma calidad
o atribuirá ésta a otro de los jueces.
ART. 70.- El Ministerio Público está representado en cada Corte de Apelación por un
Procurador General, o por los sustitutos que la ley pueda crearle, todos los cuales
deberán reunir las mismas condiciones que los jueces de esas Cortes.
SECCION IV
DEL TRIBUNAL DE TIERRAS
ART. 72.- Las atribuciones del Tribunal de Tierras estarán determinadas por la ley.
Párrafo.- Para ser Presidente o Juez del Tribunal Superior de Tierras se requieren las
mismas condiciones que para ser Juez de una Corte de Apelación, y para desempeñar
el cargo de Juez de Jurisdicción Original, las mismas condiciones que para ser Juez de
Primera Instancia.
SECCION V
DE LOS JUZGADOS DE PRIMERA INSTANCIA
ART. 73.- En cada distrito judicial habrá un Juzgado de Primera Instancia, con las
atribuciones que le confiere la ley.
217
Párrafo.- La ley determinará el número de los distritos judiciales, el número de los
Jueces de que deben componerse los Juzgados de Primera Instancia, así como el
número de cámaras en que éstos puedan dividirse.
ART. 74.- Para ser Juez de Primera Instancia se requiere ser dominicano, hallarse en
el pleno ejercicio de los derechos civiles y políticos, ser licenciado o doctor en Derecho,
y haber ejercido la profesión de abogado durante dos años o haber desempeñado por
igual tiempo las funciones de Juez de Paz o de Fiscalizador.
ART. 75.- Para ser Procurador Fiscal o Juez de Instrucción se requieren las mismas
condiciones exigidas para ser Juez de Primera Instancia.
SECCION VI
DE LOS JUZGADOS DE PAZ
ART. 76.- En el Distrito Nacional y en cada municipio habrá los Juzgados de Paz que
fueren necesarios de acuerdo con la ley.
ART. 77.- Para ser Juez de Paz o Fiscalizador o Suplente de uno u otro, se requiere ser
dominicano, ser abogado y estar en el pleno ejercicio de los derechos civiles y políticos.
Tendrán las atribuciones que determine la ley.
No será necesaria la condición de abogado para desempeñar las antedichas funciones
en los municipios donde no sea posible elegir o designar abogados para las mismas,
excepto en el Distrito Nacional y en los municipios cabeceras de provincias donde estas
funciones deberán ser desempeñadas por abogados.
TITULO VII
DE LA CAMARA DE CUENTAS
ART. 78.- Habrá una Cámara de Cuentas permanente compuesta de cinco miembros
por lo menos, elegidos por el Senado de las ternas que le presente el Poder Ejecutivo.
Párrafo.- La Cámara de Cuentas tendrá carácter principalmente técnico.
ART. 79.- Sus atribuciones serán, además de las que le confiere la Ley:
1. Examinar las cuentas generales y particulares de la República.
2. Presentar al Congreso en la primera legislatura ordinaria de cada año el informe
respecto de las cuentas del año anterior.
ART. 80.- Los miembros de la Cámara de Cuentas durarán cuatro años en sus funciones.
ART. 81.- Para ser miembro de la Cámara de Cuentas se requiere ser dominicano en
el pleno ejercicio de los derechos civiles y políticos, haber cumplido la edad de 25 años
218
y ser doctor o licenciado en Derecho, licenciado en Finanzas, o Contador Público
Autorizado. La ley determinará las demás condiciones para ser miembro de dicho
organismo.
TITULO VIII
DEL DISTRITO NACIONAL Y DE LOS MUNICIPIOS
ART. 82.- El Gobierno del Distrito Nacional y el de los municipios estarán cada uno a
cargo de un ayuntamiento, cuyos regidores, así como sus suplentes, en el número que
será determinado por la ley proporcionalmente al de habitantes, sin que en ningún caso
puedan ser menos de cinco, serán elegidos, al igual que el Síndico del Distrito Nacional
y de los Síndicos Municipales y sus suplentes, por el pueblo de dicho Distrito y de los
municipios, respectivamente, cada cuatro años, en la forma que determinen la
Constitución y las leyes, mediante candidaturas que podrán ser propuestas por partidos
políticos o por agrupaciones políticas regionales, provinciales o municipales.
ART. 83.- Los ayuntamientos así como los Síndicos, son independientes en el ejercicio
de sus funciones, con las restricciones y limitaciones que establezcan la Constitución y
las leyes, las cuales determinarán sus atribuciones, facultades y deberes.
ART. 84.- La ley determinará las condiciones para ejercer los cargos indicados en los
Artículos 82 y 83. Los extranjeros mayores de edad podrán desempeñar dichos cargos
en las condiciones que prescriba la ley, siempre que tengan residencia de más de 10
años en la jurisdicción correspondiente.
ART. 85.- Tanto en la formulación como en la ejecución de sus presupuestos, los ayun-
tamientos estarán obligados a mantener las apropiaciones y las erogaciones desti-
nadas a cada clase de atenciones y servicios. Los ayuntamientos podrán, con la
aprobación que la ley requiera, establecer arbitrios, siempre que éstos no colidan con
los impuestos nacionales, con el comercio intermunicipal o de exportación, ni con la
Constitución o las leyes.
TITULO IX
DEL REGIMEN DE LAS PROVINCIAS
ART. 86.- Habrá en cada provincia un Gobernador Civil, designado por el Poder
Ejecutivo.
Párrafo.- Para ser Gobernador se requiere ser dominicano, mayor de veinticinco años
de edad y estar en el pleno ejercicio de los derechos civiles y políticos.
219
ART. 87.- La organización y régimen de las provincias, así como las atribuciones y
deberes de los Gobernadores Civiles, serán determinados por la ley.
TITULO X
DE LAS ASAMBLEAS ELECTORALES
ART. 89.- Las Asambleas Electorales se reunirán de pleno derecho el 16 de mayo de cada
cuatro años para elegir el Presidente y Vicepresidente de la República; asimismo para ele-
gir los demás funcionarios electivos, mediando dos años entre ambas elecciones. En los
casos de convocatoria extraordinaria, se reunirán a más tardar sesenta días después de
la publicación de la ley de convocatoria.
ART. 91.- Las Elecciones se harán según las normas que señale la ley, por voto direc-
to y secreto, y con representación de las minorías cuando haya de elegirse dos o más
candidatos.
ART. 92.- Las elecciones serán dirigidas por una Junta Central Electoral y por juntas
dependientes de ésta, las cuales tienen facultad para juzgar y reglamentar de acuerdo
con la ley.
Párrafo.- Para los fines de este artículo, la Junta Central Electoral asumirá la dirección
y el mando de la fuerza pública en los lugares en donde dichas votaciones se verifiquen.
220
TITULO XI
DE LAS FUERZAS ARMADAS
ART. 93.- Las Fuerzas Armadas son esencialmente obedientes y apolíticas y no tienen,
en ningún caso, facultad para deliberar. El objeto de su creación es defender la inde-
pendencia e integridad de la República, mantener el orden público y sostener la
Constitución y las leyes. Podrán intervenir, cuando así lo solicite el Poder Ejecutivo, en
programas de acción cívica y en planes destinados a promover el desarrollo social y
económico del país.
ART. 94.- Las condiciones para que un ciudadano pueda ser miembro de las Fuerzas
Armadas están contenidas en la ley de su creación.
TITULO XII
DISPOSICIONES GENERALES
ART. 95.- La bandera nacional se compone de los colores azul ultramar y rojo bermellón,
en cuarteles alternados, colocados de tal modo que el azul quede hacia la parte superior
del asta, separados por una cruz blanca del ancho de la mitad de la altura de un cuartel
y que lleve en el centro el escudo de armas de la República. La bandera mercante es la
misma que la nacional sin escudo.
ART. 96.- El escudo de armas de la República tendrá los mismos colores de la bandera
nacional dispuestos en igual forma. Llevará en el centro el libro de los Evangelios, abier-
to, con una cruz encima surgiendo ambos entre un trofeo integrado por dos lanzas y
cuatro banderas nacionales, sin escudo, dispuestas a ambos lados; llevará un ramo de
laurel del lado izquierdo y uno de palma al lado derecho; estará coronado por una cinta
azul ultramar en la cual se leerá el lema: Dios, Patria y Libertad, y en la base habrá otra
cinta de color rojo bermellón con las palabras: República Dominicana. La forma del
escudo nacional será de un cuadrilongo, con los ángulos superiores salientes y los infe-
riores redondeados, el centro de cuya base terminará en punta, y estará dispuesto en
forma tal que si se traza una línea horizontal que una las dos verticales del cuadrilongo
desde donde comienzan los ángulos inferiores, resulte un cuadrado perfecto.
ART. 97.- El Himno Nacional es la composición musical consagrada por la Ley Nº 700,
de fecha 30 de mayo de 1934 y es invariable, único y eterno.
221
ART. 99.- Toda autoridad usurpada es ineficaz y sus actos son nulos. Toda decisión
acordada por la requisición de la fuerza armada es nula.
ART. 100.- La República condena todo privilegio y toda situación que tienda a quebran-
tar la igualdad de todos los dominicanos, entre los cuales no deben contar otras diferen-
cias que las que resulten de los talentos o de las virtudes y en consecuencia, ninguna
entidad de la República podrá conceder títulos de nobleza ni distinciones hereditarias.
ART. 101.- Toda la riqueza artística e histórica del país, sea quien fuere su dueño, for-
mará parte del patrimonio cultural de la Nación y estará bajo la salvaguarda del Estado.
La ley establecerá cuando sea oportuno para su conservación y defensa.
ART. 102.- Será sancionado con las penas que la ley determine, todo aquel que, para
su provecho personal, substraiga fondos públicos o prevaleciéndose de sus posiciones
dentro de los organismos del Estado, sus dependencias o instituciones autónomas,
obtenga provechos económicos. Serán igualmente sancionadas las personas que
hayan proporcionado ventajas a sus asociados, familiares, allegados, amigos o rela-
cionados. Nadie podrá ser penalmente responsable por el hecho de otro ni en estos
casos ni en cualquier otro.
ART. 103.- Los yacimientos mineros pertenecen al Estado y solo podrán ser explotados
por particulares en virtud de las concesiones o los contratos que se otorguen en las
condiciones que determine la ley.
ART. 105.- Sin perjuicio de lo dispuesto por el Artículo 23, Inciso 5, de esta Constitución,
el Presidente y Vicepresidente de la República electos o en funciones no podrán ser pri-
vados de su libertad antes o durante el período de su ejercicio.
ART. 106.- La persona designada para ejercer una función pública deberá prestar jura-
mento de respetar la Constitución y las leyes, y de desempeñar fielmente su cometido.
Este juramento se prestará ante cualquier funcionario u oficial público.
ART. 107.- El ejercicio de todos los funcionarios electivos, sea cual fuere la fecha de su elección,
terminará el 16 de agosto de cada cuatro años, fecha en que se inicia el correspondiente perío-
do constitucional.
Párrafo I. Cuando un funcionario electivo cualquiera cese en el ejercicio del cargo por
222
muerte, renuncia, destitución, inhabilitación u otra causa, el que lo sustituya per-
manecerá en el ejercicio hasta completar el período.
Párrafo II. Una vez vencido el período para el cual fueron designados los Miembros de
la Cámara de Cuentas y el Presidente y demás miembros de la Junta Central Electoral,
permanecerán en sus cargos hasta que el Senado haga las nuevas designaciones para
el período que se inicia.
ART. 108.- Ninguna función o cargo público a que se refieren esta Constitución y las
leyes, serán incompatibles con cargos honoríficos y los docentes, sin perjuicio del
Artículo 18.
Párrafo II. Las monedas metálicas serán emitidas a nombre del Estado por mediación
de la misma entidad emisora, y se pondrán en circulación sólo en reemplazo de un valor
equivalente de billetes. La fuerza liberatoria de las monedas metálicas en curso y de las
que se emitieren en lo adelante será determinada por la ley.
223
responderán del fiel cumplimiento de sus funciones de conformidad con las normas
establecidas en la misma.
Párrafo IV. Queda prohibida la emisión o la circulación de papel moneda, así como de
cualquier otro signo monetario no autorizado por esta Constitución, ya sea por el Estado
o por cualquier otra persona o entidad pública o privada.
ART. 113.- Ninguna erogación de fondos públicos será válida, si no estuviere autoriza-
da por la ley y ordenada por funcionario competente.
ART. 114.- Anualmente, en el mes de abril, se publicará la cuenta general de los ingre-
sos y egresos de la República hechos en el año anterior.
ART. 115.- La Ley de Gastos Públicos se dividirá en capítulos que correspondan a los
diferentes ramos de la administración y no podrán trasladarse sumas de un capítulo a
otro ni de una partida presupuestaria a otra, sino en virtud de una ley. Esta ley, cuando
no sea iniciada por el Poder Ejecutivo, deberá tener el voto de las dos terceras partes
de la totalidad de los miembros de cada Cámara.
Párrafo I. No tendrá efecto ni validez ninguna ley que ordene o autorice un pago o
engendre una obligación pecuniaria a cargo del Estado, sino cuando esa misma ley
cree fondos especiales para su ejecución o disponga que el pago se haga de las
entradas calculadas del año, y de éstas quede en el momento de la publicación de la
ley una proporción disponible suficiente para hacerlo.
Párrafo II. El Congreso no podrá votar válidamente ninguna erogación, a menos que esté
incluida en el proyecto de Ley de Gastos Públicos sometido por el Poder Ejecutivo, en
virtud del Artículo 55 de esta Constitución, o que sea solicitada por el Poder Ejecutivo
después de haber enviado dicho proyecto, sino en el caso de que la ley que ordene esa
erogación haya sido apoyada por las dos terceras partes de la totalidad de los miembros
de cada Cámara; y todo sin derogación de la regla general establecida en el párrafo
primero del presente artículo.
Párrafo III. El Congreso no podrá modificar las partidas que figuren en los proyectos de
ley que eroguen fondos o en la Ley de Gastos Públicos sometidos por el Poder
Ejecutivo, sino con el voto de las dos terceras partes de la totalidad de los miembros de
224
cada Cámara; y de acuerdo con las disposiciones contenidas en el párrafo primero de
este artículo. El Congreso podrá, sin embargo, modificar las referidas partidas con la
mayoría ordinaria cuando sea a iniciativa del Poder Ejecutivo.
Párrafo IV. Cuando por cualquier circunstancia el Congreso cierre la legislatura sin
haber votado el presupuesto de Ingresos y Ley de Gastos Públicos, continuará rigien-
do la Ley de Gastos Públicos del año anterior.
Párrafo V. Cuando el Congreso esté en receso, el Poder Ejecutivo podrá disponer por
medio de decreto los traslados o transferencias de sumas dentro de la Ley de Gastos
Públicos que exijan las necesidades urgentes del servicio administrativo, así como las
creaciones o supresiones de cargos administrativos o servicios públicos que afecten
aquella ley, con la obligación de someter al Congreso en la próxima legislatura, para su
aprobación, las referidas disposiciones. Podrá, asimismo, en el caso previsto por este
párrafo, del mismo modo, erogar los fondos necesarios para atender gastos de la
administración pública, dando cuenta al Congreso cuando éste se reúna.
TITULO XIII
DE LAS REFORMAS CONSTITUCIONALES
ART. 116.- Esta Constitución podrá ser reformada si la proposición de reforma se pre-
senta en el Congreso Nacional con el apoyo de la tercera parte de los miembros de una
u otra Cámara, o si es sometida por el Poder Ejecutivo.
ART. 117.- La necesidad de la reforma se declarará por una ley. Esta ley, que no podrá
ser observada por el Poder Ejecutivo, ordenará la reunión de la Asamblea Nacional,
determinará el objeto de la reforma e indicará los artículos de la Constitución sobre los
cuales versará.
ART. 118.- Para resolver acerca de las reformas propuestas, la Asamblea Nacional se
reunirá dentro de los quince días siguientes a la publicación de la ley que declare la
necesidad de la reforma, con la presencia de más de la mitad de los miembros de cada
una de las Cámaras. Una vez votadas y proclamadas las reformas por la Asamblea
Nacional, la Constitución será publicada íntegramente con los textos reformados.
Por excepción de lo dispuesto en el Artículo 27, las decisiones se tomarán en este caso,
por la mayoría de las dos terceras partes de los votos.
ART. 119.- Ninguna reforma podrá versar sobre la forma de Gobierno, que deberá ser
siempre civil, republicano, democrático y representativo.
225
ART. 120.- La reforma de la Constitución sólo podrá hacerse en la forma que indica ella
misma, y no podrá jamás ser suspendida ni anulada por ningún poder ni autoridad ni
tampoco por aclamaciones populares.
226
Ley No. 224
Sobre Régimen
Penitenciario
227
228
Ley No. 224 Sobre Régimen Penitenciario.
G.O. 9640
CONSIDERANDO: Que esta ley debe contener principios generales que puedan ser
desarrollados a través de reglamentos, para su correcta aplicación;
En las penitenciarías cumplirán sus condenas los reclusos sujetos a penas de privación
de libertad superiores a dos años; en los presidios lo harán los condenados a penas
inferiores a dos años; en las cárceles permanecerán los reclusos mientras dure su
prisión preventiva.
Institutos especiales son aquellos donde son recluidos condenados con características
especiales, tales como: enfermos mentales, reclusos primarios o que se encuentren
dentro del período de prueba. Podrán ser establecimientos abiertos o granjas agrícolas.
Artículo 2.- La ejecución de las penas privativas de libertad tiene por objeto, fundamen-
talmente, la protección social y la readaptación del condenado, a fin de restituirlo a la
sociedad con voluntad y capacidad para respetar la ley. El régimen penitenciario deberá
usar, de acuerdo con las características de cada caso, el tratamiento educativo y asisten-
cial de que pueda disponer, de conformidad a los progresos científicos que se realizan en
la materia.
229
Artículo 3.- Recluso es toda persona que se encuentre privada de libertad, en virtud de orden
emanada de autoridad judicial competente e internada en alguno de los establecimientos a
que se refiere el artículo 1.
Artículo 4.- Las normas de la presente ley y los reglamentos correspondientes se apli-
carán a los reclusos sin que pueda hacerse discriminaciones o establecerse diferencias
de tratamiento fundadas en prejuicios de raza, color, religión, nacionalidad, clase social
y opinión política del interno.
Artículo 5.- Los reclusos no podrán ser objeto de torturas, maltratos, vejaciones o humilla-
ciones de ninguna especie. Solamente podrán usarse medidas de seguridad en los casos
que esta misma ley contemple.
El o los miembros del penal que ordenen o realicen tales excesos serán sancionados
con suspensión de su empleo, sin disfrute de sueldo hasta por treinta días, sin perjuicio
de la responsabilidad penal que le correspondiere. En caso de reincidencia serán san-
cionados con la destitución.
Los reclusos deben obediencia y respeto a todos los funcionarios del establecimiento,
y ejecutarán las órdenes que ellos reciban, sin la más mínima objeción. Podrán, sin
embargo interponer sus quejas, ante el Alcaide o quien haga sus veces, de acuerdo con
lo dispuesto en el artículo 34 de la presente ley cuando consideren que han sido vícti-
mas de una arbitrariedad. En caso de no ser atendida su queja, tendrán derecho a pre-
sentarla ante la Dirección General de Prisiones, que por esta ley se crea.
CAPÍTULO II
DIRECCIÓN GENERAL DE PRISIONES
Artículo 6.- Se crea la Dirección General de Prisiones como un organismo central depen-
diente de la Procuraduría General de la República Dominicana, y bajo cuya dirección y
control estarán todos los establecimientos penales del país.
Artículo 8.- Para la consecución de los fines expuestos en esta ley, la Dirección General
de Prisiones velará por la fiel ejecución y cumplimiento de todas las leyes y reglamen-
tos relativos al servicio de prisiones, cuyas normas, postulados y principios constituyen
230
los medios más eficaces para lograr la rehabilitación social de los reclusos y la base del
sistema penitenciario dominicano.
El reglamento que se dictará para la aplicación de la presente ley determinará las atribu-
ciones de cada departamento e indicará las secciones y sueldos de los funcionarios y
empleados que sirvan a la Dirección General de Prisiones, se consignará anualmente en
la ley de Gastos Públicos.
231
Artículo 10.- Mientras no se organice el Departamento de Vigilancia y Tratamiento
Penitenciario a que se refiere la letra e) del párrafo del artículo anterior, las funciones de
supervisión y custodia de los establecimientos y recintos carcelarios seguirán a cargo de
la Policía y Ejército Nacional. Los miembros de estas instituciones de servicios en los
establecimientos carcelarios, deberán atenerse a las leyes y reglamentos del servicio de
prisiones y estarán bajo la autoridad jerárquica del Director del establecimiento correspon-
diente, únicamente, mientras estén de servicio.
CAPÍTULO III
SEGREGACIÓN DE LOS RECLUSOS
CAPÍTULO IV
PERIODOS PROGRESIVOS DEL REGIMEN PENITENCIARIO
Artículo 13.- El régimen penitenciario aplicable a los condenados por sentencias definiti-
vas, en aquellas penas que por su duración lo permitan, tendrá carácter progresivo y
contará de tres períodos fundamentales:
1) De observación; 2) de tratamiento; 3) de prueba;
Artículo 14.- Durante el período de observación que durará entre diez y treinta días se
mantendrá al recluso en dependencia separada del resto de la población penal que se
encuentre en otros períodos de tratamientos, y se efectuará el estudio de su personali-
dad, de su medio social y de sus antecedentes personales, para determinar la sección o
establecimiento a que deba ser destinado y la naturaleza del tratamiento que sea con-
veniente aplicarle.
232
Artículo 15.- Durante el período de tratamiento se intentará la rehabilitación del recluso,
mediante la instrucción, el trabajo, la asistencia espiritual, la disciplina, la práctica de ejer-
cicios y de sanos pasatiempos y demás métodos que la naturaleza del caso aconseje.
Párrafo.- En todos los casos, cuando la pena es superior a 5 años el período de prue-
ba no podrá ser menor a 20 meses.
a) El permiso de salidas del establecimiento por el tiempo que rigen los reglamentos;
b) El alojamiento en instituciones especiales;
c) La concesión de su libertad condicional.
Artículo 18.- Las salidas fuera del establecimiento podrán concederse después que
haya cumplido por lo menos un tercio de su pena, bajo la palabra de honor del recluso,
con la compañía de un funcionario de vigilancia no uniformado, o confiado a la custo-
dia de alguna persona que merezca confianza.
Artículo 19.- Son finalidades primordiales de los permisos de salida del recluso: el afian-
zamiento de los vínculos familiares y sociales, la búsqueda de trabajo, y el alojamiento
y documentación personal, y como etapa de preparación sicológica para su futura vida
en libertad.
Artículo 20.- En las penitenciarías, presidios, cárceles y centros abiertos funcionará una
comisión formada por el director del penal, el secretario, un psiquiatra, un visitador
social y cualquier otra persona que preste servicio en un departamento del penal,
quienes se reunirán una vez por mes y tratarán sobre el progreso, tratamiento,
adaptación, permisos y sanciones de los reclusos que se encuentren en el penal.
Podrá ser convocada una reunión que no sea en la fecha señalada cuando el caso lo
amerite.
233
Los miembros de la Comisión de Vigilancia, Evaluación y Sanción tienen voz y voto a
excepción del secretario, quien es el secretario del penal.
Los pormenores de las reuniones se asentarán en dos libros de actas que se lleven al efecto.
Ante esta comisión pueden dirigirse los reclusos a realizar sus reclamos o solicitudes,
siempre y cuando no sean atendidos por el director del penal.
Esta misma comisión decidirá acerca de las quejas que pueda tener cualquier fun-
cionario o empleado del penal relacionada con el comportamiento de cualquier recluso.
Funcionará como Comisión de Apelación, la que estará formada por el Procurador General
de la República o su representante y el Director General de Prisiones, quienes tienen voz
y voto y estarán obligados a fallar el mismo día que se reúnan a conocer el caso.
Artículo 21.- Las salidas temporales de los reclusos serán concedidas por el director del
establecimiento, previa resolución motivada, dictada al efecto por la Comisión de
Vigilancia, Evaluación y Sanción a que se refiere el artículo anterior, y copia de la cual
será remitida al Procurador General de la República, al Procurador General de la Corte
de Apelación o Procurador Fiscal correspondiente, según el caso. Si el permiso se otor-
gare por enfermedad grave o muerte del cónyuge, padres o hijos del recluso, no será
necesaria la resolución.
234
CAPÍTULO V
HIGIENE
Artículo 24.- El aseo personal del recluso será obligatorio. Para tal objeto, los establecimien-
tos dispondrán de las instalaciones adecuadas y estarán provistos de los elementos indis-
pensables para su higienización.
CAPÍTULO VI
ALOJAMIENTO Y VESTIMENTA
Artículo 27.- Se proporcionará a los reclusos camas individuales con ropa adecuada y limpia.
Artículo 28.- Los reclusos serán responsables personalmente del estado de conser-
vación e higiene de las vestimentas, ropas de cama y demás objetos que se le propor-
cione para su vida en reclusión.
CAPÍTULO VII
ALIMENTACIÓN Y RECREO
Artículo 29.- Todo recluso recibirá alimentación adecuada en cantidad y calidad, para el
mantenimiento de la salud. La prohibición de bebidas alcohólicas en los establecimien-
tos penales es absoluta.
235
Artículo 30.- Los reclusos deberán salir diariamente a patios o dependencias al aire libre
por un plazo no inferior a una hora. Durante dicho tiempo se procurará la ejecución de
ejercicios físicos o juegos y deportes apropiados a su edad.
CAPÍTULO VIII
CONSERVACIÓN Y DEPÓSITO DE ESPECIES PERSONALES
Artículo 31.- El dinero, los objetos de valor, ropas y demás especies que el recluso
posea a su ingreso, o que posteriormente recibiere, y que el reglamento no lo autorice
a retener, serán mantenidos en depósito, previo inventario. Se tomarán las medidas
adecuadas para su conservación en buen estado. Con la debida autorización podrá
disponer el recluso de las especies referidas precedentemente.
Párrafo.- Los efectos de que no haya dispuesto el recluso le serán devueltos a su regre-
so. De los depósitos, disposiciones y devoluciones se dejará constancia escrita.
CAPÍTULO IX
DERECHOS DE PETICIÓN
Artículo 34.- Todo recluso tendrá derecho a formular y dirigir peticiones y quejas a la
dirección del establecimiento o a las autoridades administrativas y judiciales, sin otra
limitación que la de proceder en términos respetuosos o convenientes.
236
CAPÍTULO X
VISITA Y CORRESPONDENCIA
Artículo 35.- Los reclusos podrán recibir, con la frecuencia que determinen los reglamen-
tos, visitas de sus parientes, abogados, curadores, amigos de buena reputación o de
personas representantes de organismos o instituciones oficiales o privadas que se
interesen por su protección y rehabilitación.
Artículo 37.- Los reclusos podrán despachar y recibir correspondencia bajo la censura
que establezcan los reglamentos.
CAPÍTULO XI
EXPENDIO
CAPÍTULO XII
JUEGOS DE AZAR
Artículo 39.- Quedan terminantemente prohibidos todos los juegos de azar y todas las
apuestas de dinero o especies en los juegos de destrezas física y metal.
CAPÍTULO XIII
INGRESO, EGRESO Y TRASLADO DE RECLUSOS
Artículo 40.- Sólo podrá darse entrada a una persona en calidad de recluso en los
establecimientos penales, en virtud de una orden emanada de autoridad judicial com-
petente, la que se registrará en el libro de ingreso correspondiente.
237
Artículo 41.- Serán causas de egreso del recluso, las siguientes:
1.- Cumplimiento de la condena;
2.- Libertad condicional;
3.- Indulto o amnistía;
4.- Salidas temporales; y
5.- Sentencia de descargo u orden de autoridad judicial competente.
Artículo 42.- Los reclusos serán trasladados de un establecimiento a otro, o de una sección
a otra dentro de un mismo establecimiento, cuando así lo exigiere la extensión de la pena
o la naturaleza de tratamiento señalado en su caso.
Artículo 43.- Los traslados de reclusos desde un establecimiento a otro, a los tribunales
de justicia, hospitales, o en los demás casos que autorice la ley, se harán en carros
celulares especialmente destinados para tal trabajo. En todo caso se sustraerá el reclu-
so de la curiosidad pública, estará exento de publicidad y el traslado se llevará a cabo
respetando la dignidad de su persona.
Artículo 44.- Del ingreso, traslado o egreso de un recluso se dará aviso a sus familiares,
o a la persona que señalare el recluso, con indicación de la fecha del suceso y el nom-
bre del establecimiento o sección del mismo.
CAPÍTULO XIV
DISCIPLINA
Artículo 45.- La infracción por parte de los reclusos de cualquiera de los preceptos de
la presente ley y de los reglamentos que para su conveniente ejecución se dictaren,
constituirá falta disciplinaria y será sancionada con las medidas que se establecen más
adelante.
Artículo 46.- Solamente podrán imponerse como sanciones las siguientes medidas dis-
ciplinarias:
238
a) Amonestación;
b) Privación de visitas o correspondencias hasta por 30 días;
c) Encierro en su celda o en celda de castigo hasta por 30 días;
d) Traslado temporal por no más de 60 días;
e) Privación de otros privilegios que determinen los reglamentos.
Artículo 50.- Los reclusos sancionados con medidas de encierro no serán eximidos del
trabajo si éste pudiera ejecutarse dentro de la celda o dormitorio. Se les proporcionará
material de lectura adecuada y serán visitados diariamente por personal de la dirección
y cuando lo soliciten por el médico o capellán.
Si la salud física o mental del recluso se resiente por la aplicación de las medidas dis-
ciplinarias, éstas podrán ser suspendidas o atenuadas por el director, previo informe
médico.
Artículo 51.- En casos urgentes podrán imponerse a los reclusos medidas provisionales
de aislamiento por algún miembro del cuerpo de dirección, quien las comunicará en la
primera oportunidad al director del establecimiento para que resuelva lo que corresponde.
CAPÍTULOXV
CALIFICACIONES DE LOS RECLUSOS
Artículo 52.- Respecto de cada recluso se llevará una hoja de vida, en la que se ano-
tarán las medidas disciplinarias aplicadas a la calificación mensual, que merezca su
conducta y su grado de rehabilitación, expresados en una escala que comprenderá los
grados siguientes:
1.- Óptima;
2.- Muy buena;
3.- Buena;
239
4.- Regular;
5.- Menos que regular;
6.- Mala; y
7.- Pésima.
CAPÍTULO XVI
TRABAJO
Artículo 57.- El trabajo será obligatorio para todo recluso condenado por sentencia
definitiva. Aquel que se negare a trabajar o voluntariamente lo hiciere en forma imper-
fecta será sancionado con alguna de las medidas disciplinarias mencionadas en la pre-
sente ley, sin que pueda obligársele coactivamente a trabajar.
Artículo 58.- El Estado proporcionará trabajo apropiado a los reclusos, a fin de procu-
rarles una justa remuneración que les permita atender las necesidades de sus familias,
costear sus permanencias en el establecimiento y formar un fondo de reservas para sus
240
egresos; se les enseñará una profesión o labor que les permitan ganarse la vida deco-
rosamente en libertad, y formarse un hábito de disciplina y responsabilidad que sirva de
base a sus rehabilitaciones.
Artículo 59.- Los reclusos estarán obligados a prestarle al establecimiento aquellos ser-
vicios de carácter personal necesarios para su conservación y aseo, sin que deban
recibir remuneración por estas tareas, salvo en aquellos casos en que constituyan la
única actividad encomendada al recluso.
Artículo 60.- La Dirección General de Prisiones, con el informe del director del establecimien-
to respectivo, fijará el monto de las remuneraciones en los talleres penitenciarios, las que en
ningún caso podrán ser superiores a las que se perciban por trabajos de idéntica naturaleza
en la vida libre, ni inferiores a un 50% de las mismas.
Artículo 61.- Las remuneraciones que perciban los reclusos, sean éstas obtenidas en talleres
estatales, particulares o en trabajo por cuenta propia, se distribuirán en la siguiente forma:
Artículo 62.- Cuando no hubiere familiares a quienes se deba ayuda por ley, o las per-
sonas a que se refiere la letra b) del artículo anterior, dicho porcentaje pasará al fondo
de reserva.
Artículo 64.- Los valores destinados a los fondos de reservas, con las deducciones
señaladas en el artículo anterior, deberán ser depositados en cuentas de ahorro en un
banco preferiblemente del Estado.
Los fondos de reservas serán inembargables y constituirán, para todos los efectos
legales, patrimonio de los reclusos, de que sólo podrán disponer cuando estén en liber-
tad condicional o definitiva, sin perjuicio de lo señalado en el artículo 63.
241
Artículo 65.- Podrá entregarse la concesión de talleres dentro de los establecimientos
penales a patronatos, personas naturales o jurídicas, cuando no fuere posible su insta-
lación y explotación por cuenta del Estado.
Artículo 67.- La organización y dirección del trabajo penitenciario estará a cargo del
Estado, y sus métodos, modalidades, jornadas de labor, medidas de higiene y seguri-
dad serán, en cuanto su naturaleza lo permita, los existentes en la vida libre.
CAPÍTULO XVII
INSTRUCCIÓN
Se adoptarán las disposiciones de lugar para mejorar la instrucción de todos los reclu-
sos capaces de aprovecharla.
Artículo 69.- La instrucción a los reclusos deberá coordinarse con el sistema de instrucción
pública, a fin de que al ser puestos en libertad puedan continuar su preparación.
Artículo 71.- Las escuelas funcionarán en locales especialmente destinados para ellas
y serán servidas por profesores titulados, quienes estarán bajo el control del director del
establecimiento.
242
organización de cursos, charlas, conferencias y toda clase de actos culturales en los
establecimientos.
CAPÍTULO XVIII
VIDA RELIGIOSA
Artículo 75.- Los reclusos tendrán derecho a comunicarse y mantener contacto con repre-
sentantes autorizados de su religión.
Artículo 76.- En la medida en que sea posible, se autorizará a todo recluso a cumplir los
preceptos de su religión, permitiéndole participar en los servicios religiosos organizados
en el establecimiento y tener en su poder libros piadosos y de instrucción religiosa. Toda
actividad religiosa por parte de los reclusos será absolutamente voluntaria.
CAPÍTULO XIX
ASISTENCIA SOCIAL
Artículo 77.- Corresponderá a los trabajadores sociales la asistencia y amparo del reclu-
so y de su familia, con el fin de reducir al mínimo los inconvenientes que representa
para éstos la reclusión en el aspecto económico social.
Artículo 79.- En caso de enfermedad grave o de muerte de alguno de los parientes del
recluso, el director del establecimiento podrá autorizarlo por escrito, para que concurra
junto al lecho o a los funerales.
CAPÍTULO XX
SANIDAD
Artículo 80.- En cada establecimiento penal existirá una enfermería dotada del equipo
adecuado para la atención médica y dental de los reclusos.
La dirección de la enfermería estará a cargo de un médico perteneciente al servicio peni-
tenciario, quien efectuará las visitas e inspecciones que requieren la salud de los reclusos.
243
Artículo 81.- Corresponde al médico la supervigilancia de la higiene general del
establecimiento y de los reclusos, el control de la calidad y poder nutritivo de la ali-
mentación y la información a la dirección de aquellas características o circunstancias
que deban influir en el tratamiento aplicable a los reclusos.
En estos casos, se adoptarán todas aquellas medidas necesarias para asegurar la per-
sona del recluso.
Artículo 83.- Los reclusos alienados o los que padezcan enfermedades o anormali-
dades mentales graves deberán ser internados en el Hospital Psiquiátrico.
Las reclusas podrán conservar sus hijos dentro del establecimiento por el tiempo estric-
tamente necesario y, para tal efecto, se habilitarán dependencias apropiadas para la
permanencia y alojamiento del niño.
Antes de que el recién nacido cumpla el primer año, se tratará por todos los medios de
que abandone el penal, permitiéndose su estancia en el solo caso de que se com-
pruebe que no existe persona alguna que pueda hacerse cargo de él.
244
CAPÍTULO XXI
MEDIDAS DE SUJECIÓN
Artículo 86.- Se llaman medidas de sujeción aquellas que tienen por objeto asegurar la
persona del recluso, a fin de evitar su fuga, el daño de su persona o el de terceros. En
ningún caso podrán usarse las medidas de sujeción como castigo de los reclusos.
Artículo 87.- Las medidas de sujeción solo podrán emplearse por orden expresa del director
de quien lo reemplace y por el tiempo estrictamente necesario para el cumplimiento de sus
finalidades específicas.
CAPÍTULO XXII
RECLUSOS ENCAUSADOS
Artículo 90.- Los reclusos encausados o sujetos a prisión preventiva gozan de una pre-
sunción de inocencia y deberán ser tratados en consecuencia. En cuanto lo permita el
orden del establecimiento, los encausados podrán, si lo desean, alimentarse por su
propia cuenta, procurándose alimentos del exterior por conducto de la dirección, de su
familia o de sus amigos.
Artículo 91.- Se autorizará al preventivo para que si lo desea use sus propias prendas
de vestir y su ropa de cama, siempre que estén aseadas y decorosas.
Si el preventivo vistiere uniforme, éste será distinto que el de los reclusos condenados
por sentencia definitiva.
Artículo 92.- Se permitirá que los reclusos preventivos sean atendidos por su propio
médico o su dentista.
245
CAPÍTULO XXIII
ASISTENCIA POST PENITENCIARIA
Artículo 93.- Se presentará asistencia y protección moral y material a los reclusos egre-
sados, a fin de que puedan desarrollar normalmente su vida en libertad.
Cuando residieren en lugar distinto a aquel en que esté ubicado el establecimiento del
que egresan, se les proporcionarán los recursos indispensables para el traslado al lugar
de su residencia, si los reclusos no los tuvieren.
CAPÍTULO XXIV
PERSONAL PENITENCIARIO
Artículo 95.- Los establecimientos carcelarios estarán bajo la vigilancia y control de per-
sonal especializado e idóneo, capaz de cumplir la misión social que le impone la ley.
Los establecimientos destinados a reclusión de mujeres serán atendidos por personal
femenino de vigilancia.
Artículo 98.- El personal penitenciario no podrá exigir, cobrar ni percibir de los reclusos,
familiares o amigos, derechos, gratificaciones, dádivas o regalos de ninguna especie.
La infracción del presente artículo será sancionada con la pérdida inmediata del
empleo.
CAPÍTULO XXV
SISTEMA DE INSPECCION
Artículo 99.- El procurador fiscal del distrito judicial correspondiente deberá visitar una
vez al mes, por lo menos, los establecimientos penitenciarios.
En estas visitas oirá las quejas de los reclusos respecto de sus procesos o del trato que
246
se les diere en la prisión y se informará acerca del cumplimiento que dieren las autori-
dades penitenciarias de las leyes y reglamentos que rigen la vida en reclusión.
CAPÍTULO XXVI
EDIFICACIONES CARCELARIAS
Artículo 103.- Los establecimientos deberán contar con las celdas, dormitorios, servi-
cios higiénicos, patios, comedores, talleres, lavanderías, bibliotecas, cocinas, enfer-
merías, capillas, bodegas, instalaciones de oficina y demás dependencias necesarias
para que los reclusos puedan llevar una vida digna y recibir el tratamiento adecuado
para su rehabilitación.
Artículo 104.- Cuando se usaren establecimientos antiguos que no cumplan con las
condiciones que exige la presente ley, se efectuarán las reparaciones y adaptaciones
necesarias a fin de aproximarles en cuanto sea posible al cumplimiento de las pre-
sentes reglas.
247
Artículo 105.- El Poder Ejecutivo dispondrá todas las reglamentaciones necesarias para
el logro de los fines de la presente ley, incluyendo su calendario de aplicación, de acuer-
do a las posibilidades presupuestarias del país.
Artículo 106.- Se suprime la pena de trabajos públicos. En lo sucesivo las penas aflicti-
vas e infamantes serán solamente la detención y la reclusión. En todos los casos que
el Código Penal o leyes especiales señalen la pena de trabajos públicos deberá leerse
reclusión.
Artículo 107.- La presente ley deroga toda disposición legal anterior que le sea contraria
en todo o en parte.
248
Declaración Universal
de los
Derechos humanos
249
250
Declaración Universal de los Derechos humanos
Preámbulo
Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el
reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de
todos los miembros de la familia humana;
Considerando que el desconocimiento y el menosprecio de los derechos humanos han
originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad, y que se ha
proclamado, como la aspiración más elevada del hombre, el advenimiento de un mundo
en que los seres humanos, liberados del temor y de la miseria, disfruten de la libertad
de palabra y de la libertad de creencias;
Considerando esencial que los derechos humanos sean protegidos por un régimen de
Derecho, a fin de que el hombre no se vea compelido al supremo recurso de la rebe-
lión contra la tiranía y la opresión;
Considerando también esencial promover el desarrollo de relaciones amistosas entre
las naciones;
Considerando que los pueblos de las Naciones Unidas han reafirmado en la Carta su
fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona
humana y en la igualdad de derechos de hombres y mujeres, y se han declarado resuel-
tos a promover el progreso social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más
amplio de la libertad;
Considerando que los Estados Miembros se han comprometido a asegurar, en cooperación
con la Organización de las Naciones Unidas, el respeto universal y efectivo a los derechos y
libertades fundamentales del hombre, y
Considerando que una concepción común de estos derechos y libertades es de la
mayor importancia para el pleno cumplimiento de dicho compromiso;
La Asamblea General Proclama la presente
Declaración Universal de Derechos Humanos como ideal común por el que todos los
pueblos y naciones deben esforzarse, a fin de que tanto los individuos como las institu-
ciones, inspirándose constantemente en ella, promuevan, mediante la enseñanza y la
educación, el respeto a estos derechos y libertades, y aseguren, por medidas progresi-
vas de carácter nacional e internacional, su reconocimiento y aplicación universales y
efectivos, tanto entre los pueblos de los Estados Miembros como entre los de los terri-
torios colocados bajo su jurisdicción.
251
Artículo 1
Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como
están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
Artículo 2
1. Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración,
sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier
otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra
condición.
Artículo 3
Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.
Artículo 4
Nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre, la esclavitud y la trata de esclavos
están prohibidas en todas sus formas.
Artículo 5
Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
Artículo 6
Todo ser humano tiene derecho, en todas partes, al reconocimiento de su personalidad
jurídica.
Artículo 7
Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la
ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que infrinja esta
Declaración y contra toda provocación a tal discriminación.
Artículo 8
Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales com-
petentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales recono-
cidos por la constitución o por la ley.
Artículo 9
Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado.
252
Artículo 10
Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente
y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus
derechos y obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra ella en mate-
ria penal.
Artículo 11
1. Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mien-
tras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le
hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa.
Artículo 12
Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio
o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación. Toda persona tiene
derecho a la protección de la ley contra tales injerencias o ataques.
Artículo 13
1. Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el terri-
torio de un Estado.
2. Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar
a su país.
Artículo 14
1. En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo, y a disfrutar de
él, en cualquier país.
2. Este derecho no podrá ser invocado contra una acción judicial realmente originada
por delitos comunes o por actos opuestos a los propósitos y principios de las Naciones
Unidas.
Artículo 15
1. Toda persona tiene derecho a una nacionalidad.
2. A nadie se privará arbitrariamente de su nacionalidad ni del derecho a cambiar de
nacionalidad.
Artículo 16
1. Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen derecho, sin restricción
alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión, a casarse y fundar una familia, y
253
disfrutarán de iguales derechos en cuanto al matrimonio, durante el matrimonio y en
caso de disolución del matrimonio.
2. Sólo mediante libre y pleno consentimiento de los futuros esposos podrá contraerse
el matrimonio.
Artículo 17
1. Toda persona tiene derecho a la propiedad, individual y colectivamente.
2. Nadie será privado arbitrariamente de su propiedad.
Artículo 18
Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión;
este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la liber-
tad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en públi-
co como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia.
Artículo 19
Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho
incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir infor-
maciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio
de expresión.
Artículo 20
1. Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas.
2. Nadie podrá ser obligado a pertenecer a una asociación.
Artículo 21
1. Toda persona tiene derecho a participar en el gobierno de su país, directamente o por
medio de representantes libremente escogidos.
3. La voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder público; esta voluntad se
expresará mediante elecciones auténticas que habrán de celebrarse periódicamente,
por sufragio universal e igual y por voto secreto u otro procedimiento equivalente que
garantice la libertad del voto.
254
Artículo 22
Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social, y a
obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de
la organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción de los derechos económi-
cos, sociales y culturales, indispensables a su dignidad y al libre desarrollo de su per-
sonalidad.
Artículo 23
1. Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones
equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo.
2. Toda persona tiene derecho, sin discriminación alguna, a igual salario por trabajo igual.
3. Toda persona que trabaja tiene derecho a una remuneración equitativa y satisfacto-
ria, que le asegure, así como a su familia, una existencia conforme a la dignidad
humana y que será completada, en caso necesario, por cualesquiera otros medios de
protección social.
4. Toda persona tiene derecho a fundar sindicatos y a sindicarse para la defensa de sus
intereses.
Artículo 24
Toda persona tiene derecho al descanso, al disfrute del tiempo libre, a una limitación
razonable de la duración del trabajo y a vacaciones periódicas pagadas.
Artículo 25
1. Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su
familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asis-
tencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en
caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de pérdida de sus
medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad.
Artículo 26
1. Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos
en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental
será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acce-
so a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivos.
255
fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales;
favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos
los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las
Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz.
3. Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de
darse a sus hijos.
Artículo 27
1. Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comu-
nidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que
de él resulten.
2. Toda persona tiene derecho a la protección de los intereses morales y materiales que
le correspondan por razón de las producciones científicas, literarias o artísticas de que
sea autora.
Artículo 28
Toda persona tiene derecho a que se establezca un orden social e internacional en el
que los derechos y libertades proclamados en esta Declaración se hagan plenamente
efectivos.
Artículo 29
1. Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede
desarrollar libre y plenamente su personalidad.
2. En el ejercicio de sus derechos y en el disfrute de sus libertades, toda persona estará
solamente sujeta a las limitaciones establecidas por la ley con el único fin de asegurar el
reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades de los demás, y de satisfacer
las justas exigencias de la moral, del orden público y del bienestar general en una
sociedad democrática.
3. Estos derechos y libertades no podrán, en ningún caso, ser ejercidos en oposición a
los propósitos y principios de las Naciones Unidas.
Artículo 30
Nada en esta Declaración podrá interpretarse en el sentido de que confiere derecho
alguno al Estado, a un grupo o a una persona, para emprender y desarrollar actividades
o realizar actos tendientes a la supresión de cualquiera de los derechos y libertades
proclamados en esta Declaración.
256
Reglas Mínimas
para El Tratamiento
de los Reclusos
257
258
Reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos
Adoptadas por el Primer Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito
y Tratamiento del Delincuente, celebrado en Ginebra en 1955, y aprobadas por el
Consejo Económico y Social en sus resoluciones 663C (XXIV) de 31 de julio de 1957 y
2076 (LXII) de 13 de mayo de 1977.
Observaciones preliminares
1. El objeto de las reglas siguientes no es de describir en forma detallada un sistema
penitenciario modelo, sino únicamente establecer, inspirándose en conceptos general-
mente admitidos en nuestro tiempo y en los elementos esenciales de los sistemas con-
temporáneos más adecuados, los principios y las reglas de una buena organización
penitenciaria y de la práctica relativa al tratamiento de los reclusos.
3. Además, los criterios que se aplican a las materias a que se refieren estas reglas
evolucionan constantemente. No tienden a excluir la posibilidad de experiencias y prác-
ticas, siempre que éstas se ajusten a los principios y propósitos que se desprenden del
texto de las reglas. Con ese espíritu, la administración penitenciaria central podrá siem-
pre autorizar cualquier excepción a las reglas.
259
niles debe comprender, en todo caso, a los menores que dependen de las jurisdicciones
de menores. Por lo general, no debería condenarse a los delincuentes juveniles a penas
de prisión.
Primera parte
Reglas de aplicación general
Principio fundamental
6. 1) Las reglas que siguen deben ser aplicadas imparcialmente. No se debe hacer
diferencias de trato fundadas en prejuicios, principalmente de raza, color, sexo, lengua,
religión, opinión política o cualquier otra opinión, de origen nacional o social, fortuna,
nacimiento u otra situación cualquiera. 2) Por el contrario, importa respetar las creen-
cias religiosas y los preceptos morales del grupo al que pertenezca el recluso.
Registro
7. 1) En todo sitio donde haya personas detenidas, se deberá llevar al día un registro
empastado y foliado que indique para cada detenido: a) Su identidad; b) Los motivos de
su detención y la autoridad competente que lo dispuso; c) El día y la hora de su ingre-
so y de su salida. 2) Ninguna persona podrá ser admitida en un establecimiento sin una
orden válida de detención, cuyos detalles deberán ser consignados previamente en el
registro.
Separación de categorías
8. Los reclusos pertenecientes a categorías diversas deberán ser alojados en diferentes
establecimientos o en diferentes secciones dentro de los establecimientos, según su sexo
y edad, sus antecedentes, los motivos de su detención y el trato que corresponda aplicar-
les. Es decir que: a) Los hombres y las mujeres deberán ser recluidos, hasta donde fuere
posible, en establecimientos diferentes; en un establecimiento en el que se reciban hom-
bres y mujeres, el conjunto de locales destinado a las mujeres deberá estar completa-
mente separado; b) Los detenidos en prisión preventiva deberán ser separados de los que
están cumpliendo condena; c) Las personas presas por deudas y los demás condenados
a alguna forma de prisión por razones civiles deberán ser separadas de los detenidos por
infracción penal; d) Los detenidos jóvenes deberán ser separados de los adultos.
260
alojados en estas condiciones. Por la noche, estarán sometidos a una vigilancia regular,
adaptada al tipo de establecimiento de que se trate.
10. Los locales destinados a los reclusos y especialmente a aquellos que se destinan
al alojamiento de los reclusos durante la noche, deberán satisfacer las exigencias de la
higiene, habida cuenta del clima, particularmente en lo que concierne al volumen de
aire, superficie mínima, alumbrado, calefacción y ventilación.
11. En todo local donde los reclusos tengan que vivir o trabajar: a) Las ventanas ten-
drán que ser suficientemente grandes para que el recluso pueda leer y trabajar con luz
natural; y deberán estar dispuestas de manera que pueda entrar aire fresco, haya o no
ventilación artificial; b) La luz artificial tendrá que ser suficiente para que el recluso
pueda leer y trabajar sin perjuicio de su vista.
12. Las instalaciones sanitarias deberán ser adecuadas para que el recluso pueda satis-
facer sus necesidades naturales en el momento oportuno, en forma aseada y decente.
13. Las instalaciones de baño y de ducha deberán ser adecuadas para que cada reclu-
so pueda y sea requerido a tomar un baño o ducha a una temperatura adaptada al clima
y con la frecuencia que requiera la higiene general según la estación y la región geográ-
fica, pero por lo menos una vez por semana en clima templado.
14. Todos los locales frecuentados regularmente por los reclusos deberán ser man-
tenidos en debido estado y limpios.
Higiene personal
15. Se exigirá de los reclusos aseo personal y a tal efecto dispondrán de agua y de los
artículos de aseo indispensables para su salud y limpieza.
16. Se facilitará a los reclusos medios para el cuidado del cabello y de la barba, a fin de
que se presenten de un modo correcto y conserven el respeto de sí mismos; los hom-
bres deberán poder afeitarse con regularidad.
Ropas y cama
17. 1) Todo recluso a quien no se permita vestir sus propias prendas recibirá las apropiadas
al clima y suficientes para mantenerle en buena salud. Dichas prendas no deberán ser en
modo alguno degradantes ni humillantes. 2) Todas las prendas deberán estar limpias y man-
tenidas en buen estado. La ropa interior se cambiará y lavará con la frecuencia necesaria
para mantener la higiene. 3) En circunstancias excepcionales, cuando el recluso se aleje del
establecimiento para fines autorizados, se le permitirá que use sus propias prendas o vesti-
dos que no llamen la atención.
261
18. Cuando se autorice a los reclusos para que vistan sus propias prendas, se tomarán disposiciones
en el momento de su ingreso en el establecimiento, para asegurarse de que están limpias y utilizables.
19. Cada recluso dispondrá, en conformidad con los usos locales o nacionales, de una
cama individual y de ropa de cama individual suficiente, mantenida convenientemente
y mudada con regularidad a fin de asegurar su limpieza.
Alimentación
20. 1) Todo recluso recibirá de la administración, a las horas acostumbradas, una ali-
mentación de buena calidad, bien preparada y servida, cuyo valor nutritivo sea sufi-
ciente para el mantenimiento de su salud y de sus fuerzas. 2) Todo recluso deberá tener
la posibilidad de proveerse de agua potable cuando la necesite.
Ejercicios físicos
21. 1) El recluso que no se ocupe de un trabajo al aire libre deberá disponer, si el tiem-
po lo permite, de una hora al día por lo menos de ejercicio físico adecuado al aire libre.
2) Los reclusos jóvenes y otros cuya edad y condición física lo permitan, recibirán
durante el período reservado al ejercicio una educación física y recreativa. Para ello, se
pondrá a su disposición el terreno, las instalaciones y el equipo necesario.
Servicios médicos
22. 1) Todo establecimiento penitenciario dispondrá por lo menos de los servicios de un
médico calificado que deberá poseer algunos conocimientos psiquiátricos. Los servicios
médicos deberán organizarse íntimamente vinculados con la administración general del
servicio sanitario de la comunidad o de la nación. Deberán comprender un servicio
psiquiátrico para el diagnóstico y, si fuere necesario, para el tratamiento de los casos
de enfermedades mentales. 2) Se dispondrá el traslado de los enfermos cuyo estado
requiera cuidados especiales, a establecimientos penitenciarios especializados o a hos-
pitales civiles. Cuando el establecimiento disponga de servicios internos de hospital,
éstos estarán provistos del material, del instrumental y de los productos farmacéuticos
necesario para proporcionar a los reclusos enfermos los cuidados y el tratamiento ade-
cuados. Además, el personal deberá poseer suficiente preparación profesional. 3) Todo
recluso debe poder utilizar los servicios de un dentista calificado.
23. 1) En los establecimientos para mujeres deben existir instalaciones especiales para el
tratamiento de las reclusas embarazadas, de las que acaban de dar a luz y de las conva-
lecientes. Hasta donde sea posible, se tomarán medidas para que el parto se verifique en
un hospital civil. Si el niño nace en el establecimiento, no deberá hacerse constar este
hecho en su partida de nacimiento. 2) Cuando se permita a las madres reclusas conser-
var su niño, deberán tomarse disposiciones para organizar una guardería infantil, con per-
sonal calificado, donde estarán los niños cuando no se hallen atendidos por sus madres.
262
24. El médico deberá examinar a cada recluso tan pronto sea posible después de su
ingreso y ulteriormente tan a menudo como sea necesario, en particular para determi-
nar la existencia de una enfermedad física o mental, tomar en su caso las medidas
necesarias; asegurar el aislamiento de los reclusos sospechosos de sufrir enfer-
medades infecciosas o contagiosas; señalar las deficiencias físicas y mentales que
puedan constituir un obstáculo para la readaptación, y determinar la capacidad física de
cada recluso para el trabajo.
25. 1) El médico estará de velar por la salud física y mental de los reclusos. Deberá visitar
diariamente a todos los reclusos enfermos, a todos los que se quejen de estar enfermos y
a todos aquellos sobre los cuales se llame su atención. 2) El médico presentará un informe
al director cada vez que estime que la salud física o mental de un recluso haya sido o
pueda ser afectada por la prolongación, o por una modalidad cualquiera de la reclusión.
Disciplina y sanciones
27. El orden y la disciplina se mantendrán con firmeza, pero sin imponer más restricciones
de las necesarias para mantener la seguridad y la buena organización de la vida en común.
28. 1) Ningún recluso podrá desempeñar en los servicios del establecimiento un empleo
que permita ejercitar una facultad disciplinaria. 2) Sin embargo, esta regla no será un
obstáculo para el buen funcionamiento de los sistemas a base de autogobierno. Estos
sistemas implican en efecto que se confíen, bajo fiscalización, a reclusos agrupados
para su tratamiento, ciertas actividades o responsabilidades de orden social, educativo
o deportivo.
263
30. 1) Un recluso sólo podrá ser sancionado conforme a las prescripciones de la ley o
reglamento, sin que pueda serlo nunca dos veces por la misma infracción. 2) Ningún
recluso será sancionado sin haber sido informado de la infracción que se le atribuye y
sin que se le haya permitido previamente presentar su defensa. La autoridad compe-
tente procederá a un examen completo del caso. 3) En la medida en que sea necesario
y viable, se permitirá al recluso que presente su defensa por medio de un intérprete.
31. Las penas corporales, encierro en celda oscura, así como toda sanción cruel, inhu-
mana o degradante quedarán completamente prohibidas como sanciones disciplinarias.
Medios de coerción
33. Los medios de coerción tales como esposas, cadenas, grillos y camisas de fuerza nunca
deberán aplicarse como sanciones. Tampoco deberán emplearse cadenas y grillos como
medios de coerción. Los demás medios de coerción sólo podrán ser utilizados en los siguientes
casos: a) Como medida de precaución contra una evasión durante un traslado, siempre que
sean retirados en cuanto comparezca el recluso ante una autoridad judicial o administrativa; b)
Por razones médicas y a indicación del médico; c) Por orden del director, si han fracasado los
demás medios para dominar a un recluso, con objeto de impedir que se dañe a sí mismo o dañe
a otros o produzca daños materiales; en estos casos, el director deberá consultar urgentemente
al médico, e informar a la autoridad administrativa superior.
34. El modelo y los métodos de empleo autorizados de los medios de coerción serán
determinados por la administración penitenciaria central. Su aplicación no deberá pro-
longarse más allá del tiempo estrictamente necesario.
264
36. 1) Todo recluso deberá tener en cada día laborable la oportunidad de presentar peti-
ciones o quejas al director del establecimiento o al funcionario autorizado para represen-
tarle. 2) Las peticiones o quejas podrán ser presentadas al inspector de prisiones
durante su inspección. El recluso podrá hablar con el inspector o con cualquier otro fun-
cionario encargado de inspeccionar, sin que el director o cualquier otro recluso miembro
del personal del establecimiento se hallen presentes. 3) Todo recluso estará autorizado
para dirigir por la vía prescrita sin censura en cuanto al fondo, pero en debida forma, una
petición o queja a la administración penitenciaria central, a la autoridad judicial o a
cualquier otra autoridad competente. 4) A menos que una solicitud o queja sea eviden-
temente temeraria o desprovista de fundamento, la misma deberá ser examinada sin
demora, dándose respuesta al recluso en su debido tiempo.
39. Los reclusos deberán ser informados periódicamente de los acontecimientos más
importantes, sea por medio de la lectura de los diarios, revistas o publicaciones peni-
tenciarias especiales, sea por medio de emisiones de radio, conferencias o cualquier
otro medio similar, autorizado o fiscalizado por la administración.
Biblioteca
40. Cada establecimiento deberá tener una biblioteca para el uso de todas las cate-
gorías de reclusos, suficientemente provista de libros instructivos y recreativos. Deberá
instarse a los reclusos a que se sirvan de la biblioteca lo más posible.
Religión
41. 1) Si el establecimiento contiene un número suficiente de reclusos que pertenezcan
a una misma religión, se nombrará o admitirá un representante autorizado de ese culto.
Cuando el número de reclusos lo justifique, y las circunstancias lo permitan, dicho repre-
sentante deberá prestar servicio con carácter continuo. 2) El representante autorizado
nombrado o admitido conforme al párrafo 1 deberá ser autorizado para organizar per-
iódicamente servicios religiosos y efectuar, cada vez que corresponda, visitas pastorales
265
particulares a los reclusos de su religión. 3) Nunca se negará a un recluso el derecho de
comunicarse con el representante autorizado de una religión. Y, a la inversa, cuando un
recluso se oponga a ser visitado por el representante de una religión, se deberá respetar
en absoluto su actitud.
Traslado de reclusos
45. 1) Cuando los reclusos son conducidos a un establecimiento o trasladados a otro, se
tratará de exponerlos al público lo menos posible y se tomarán disposiciones para prote-
gerlos de los insultos, de la curiosidad del público y para impedir toda clase de publicidad.
2) Deberá prohibirse el transporte de los reclusos en malas condiciones de ventilación o de
luz o por cualquier medio que les impongan un sufrimiento físico. 3) El traslado de los reclu-
sos se hará a expensas de la administración y en condiciones de igualdad para todos.
266
Personal penitenciario
46. 1) La administración penitenciaria escogerá cuidadosamente el personal de todos los
grados, puesto que de la integridad, humanidad, aptitud personal y capacidad profesional
de este personal dependerá la buena dirección de los establecimientos penitenciarios. 2) La
administración penitenciaria se esforzará constantemente por despertar y mantener, en el
espíritu del personal y en la opinión pública, la convicción de que la función penitenciaria
constituye un servicio social de gran importancia y, al efecto, utilizará todos los medios
apropiados para ilustrar al público. 3) Para lograr dichos fines será necesario que los miem-
bros del personal trabajen exclusivamente como funcionarios penitenciarios profesionales,
tener la condición de empleados públicos y por tanto la seguridad de que la estabilidad en
su empleo dependerá únicamente de su buena conducta, de la eficacia de su trabajo y de
su aptitud física. La remuneración del personal deberá ser adecuada para obtener y conser-
var los servicios de hombres y mujeres capaces. Se determinarán las ventajas de la carrera
y las condiciones del servicio teniendo en cuenta el carácter penoso de sus funciones.
47. 1) El personal deberá poseer un nivel intelectual suficiente. 2) Deberá seguir, antes
de entrar en el servicio, un curso de formación general y especial y pasar satisfactoria-
mente pruebas teóricas y prácticas. 3) Después de su entrada en el servicio y en el curso
de su carrera, el personal deberá mantener y mejorar sus conocimientos y su capacidad
profesional siguiendo cursos de perfeccionamiento que se organizarán periódicamente.
48. Todos los miembros del personal deberán conducirse y cumplir sus funciones en
toda circunstancia, de manera que su ejemplo inspire respeto y ejerza una influencia
beneficiosa en los reclusos.
50. 1) El director del establecimiento deberá hallarse debidamente calificado para su fun-
ción por su carácter, su capacidad administrativa, una formación adecuada y por su
experiencia en la materia. 2) Deberá consagrar todo su tiempo a su función oficial que
no podrá ser desempeñada como algo circunscrito a un horario determinado. 3) Deberá
residir en el establecimiento o en la cercanía inmediata. 4) Cuando dos o más establecimien-
tos estén bajo la autoridad de un director único, éste los visitará con frecuencia. Cada uno
de dichos establecimientos estará dirigido por un funcionario residente responsable.
267
mayor parte de éstos. 2) Se recurrirá a los servicios de un intérprete cada vez que sea
necesario.
52. 1) En los establecimientos cuya importancia exija el servicio continuo de uno o varios
médicos, uno de ellos por lo menos residirá en el establecimiento o en su cercanía inmedia-
ta. 2) En los demás establecimientos, el médico visitará diariamente a los presos y habitará
lo bastante cerca del establecimiento a fin de que pueda acudir sin dilación cada vez que se
presente un caso urgente.
54. 1) Los funcionarios de los establecimientos no deberán, en sus relaciones con los reclu-
sos, recurrir a la fuerza, salvo en caso de legítima defensa, de tentativa de evasión o de
resistencia por la fuerza o por inercia física a una orden basada en la ley o en los reglamen-
tos. Los funcionarios que recurran a la fuerza se limitarán a emplearla en la medida estric-
tamente necesaria e informarán inmediatamente al director del establecimiento sobre el
incidente. 2) Los funcionarios penitenciarios recibirán un entrenamiento físico especial que
les permita dominar a los reclusos violentos. 3) Salvo en circunstancias especiales, los
agentes que desempeñan un servicio en contacto directo con los presos no estarán arma-
dos. Por otra parte, no se confiará jamás un arma a un miembro del personal sin que éste
haya sido antes adiestrado en su manejo.
Inspección
55. Inspectores calificados y experimentados, designados por una autoridad compe-
tente, inspeccionarán regularmente los establecimientos y servicios penitenciarios.
Velarán en particular por que estos establecimientos se administren conforme a las
leyes y los reglamentos en vigor y con la finalidad de alcanzar los objetivos de los ser-
vicios penitenciarios y correccionales.
268
Segunda parte
Reglas aplicables a categorías especiales
A.-Condenados
Principios rectores
56. Los principios que se enumeran a continuación tienen por objeto definir el espíritu
conforme al cual deben administrarse los sistemas penitenciarios y los objetivos hacia
los cuales deben tender, conforme a la declaración hecha en la observación preliminar
1 del presente texto.
57. La prisión y las demás medidas cuyo efecto es separar a un delincuente del mundo
exterior son aflictivas por el hecho mismo de que despojan al individuo de su derecho a
disponer de su persona al privarle de su libertad. Por lo tanto, a reserva de las mediadas
de separación justificadas o del mantenimiento de la disciplina, el sistema penitenciario
no debe agravar los sufrimientos inherentes a tal situación.
58. El fin y la justificación de las penas y medidas privativas de libertad son, en defini-
tiva, proteger a la sociedad contra el crimen. Sólo se alcanzará este fin si se aprovecha
el período de privación de libertad para lograr, en lo posible, que el delincuente una vez
liberado no solamente quiera respetar la ley y proveer a sus necesidades, sino también
que sea capaz de hacerlo.
59. Para lograr este propósito, el régimen penitenciario debe emplear, tratando de apli-
carlos conforme a las necesidades del tratamiento individual de los delincuentes, todos
los medios curativos, educativos, morales, espirituales y de otra naturaleza, y todas las
formas de asistencia de que puede disponer.
60. 1) El régimen del establecimiento debe tratar de reducir las diferencias que puedan
existir entre la vida en prisión y la vida libre en cuanto éstas contribuyan a debilitar el
sentido de responsabilidad del recluso o el respeto a la dignidad de su persona. 2) Es
conveniente que, antes del término de la ejecución de una pena o medida, se adopten
los medios necesarios para asegurar al recluso un retorno progresivo a la vida en
sociedad. Este propósito puede alcanzarse, según los casos, con un régimen prepara-
torio para la liberación, organizado dentro del mismo establecimiento o en otra institu-
ción apropiada, o mediante una liberación condicional, bajo una vigilancia que no
deberá ser confiada a la policía, sino que comprenderá una asistencia social eficaz.
269
los reclusos. Cada establecimiento penitenciario deberá contar con la colaboración de
trabajadores sociales encargados de mantener y mejorar las relaciones del recluso con
su familia y con los organismos sociales que puedan serle útiles. Deberán hacerse,
asimismo, gestiones a fin de proteger, en cuanto ello sea compatible con la ley y la pena
que se imponga, los derechos relativos a los intereses civiles, los beneficios de los
derechos de la seguridad social y otras ventajas sociales de los reclusos.
62. Los servicios médicos del establecimiento se esforzarán por descubrir y deberán
tratar todas las deficiencias o enfermedades físicas o mentales que constituyen un
obstáculo para la readaptación del recluso. Para lograr este fin deberá aplicarse
cualquier tratamiento médico, quirúrgico y psiquiátrico que se juzgue necesario.
63. 1) Estos principios exigen la individualización del tratamiento que, a su vez, requiere
un sistema flexible de clasificación en grupos de los reclusos. Por lo tanto, conviene que
los grupos sean distribuidos en establecimientos distintos donde cada grupo pueda
recibir el tratamiento necesario. 2) Dichos establecimientos no deben adoptar las mis-
mas medidas de seguridad con respecto a todos los grupos. Convendrá establecer
diversos grados de seguridad conforme a la que sea necesaria para cada uno de los
diferentes grupos. Los establecimientos abiertos en los cuales no existen medios de
seguridad física contra la evasión, y en los que se confía en la autodisciplina de los
reclusos, proporcionan por este mismo hecho a reclusos cuidadosamente elegidos las
condiciones más favorables para su readaptación. 3) Es conveniente evitar que en los
establecimientos cerrados el número de reclusos sea tan elevado que llegue a consti-
tuir un obstáculo para la individualización del tratamiento. En algunos países se estima
que el número de reclusos en dichos establecimientos no debe pasar de 500. En los
establecimientos abiertos, el número de detenidos deberá ser lo más reducido posible.
4) Por el contrario, no convendrá mantener establecimientos que resulten demasiado
pequeños para que se pueda organizar en ellos un régimen apropiado.
64. El deber de la sociedad no termina con la liberación del recluso. Se deberá disponer,
por consiguiente, de los servicios de organismos gubernamentales o privados capaces de
prestar al recluso puesto en libertad una ayuda postpenitenciaria eficaz que tienda a dis-
minuir los prejuicios hacia él y le permitan readaptarse a la comunidad.
Tratamiento
65. El tratamiento de los condenados a una pena o medida privativa de libertad debe
tener por objeto, en tanto que la duración de la condena lo permita, inculcarles la volun-
tad de vivir conforme a la ley, mantenerse con el producto de su trabajo, y crear en ellos
la aptitud para hacerlo. Dicho tratamiento estará encaminado a fomentar en ellos el
respeto de sí mismos y desarrollar el sentido de responsabilidad.
270
66. 1) Para lograr este fin, se deberá recurrir, en particular, a la asistencia religiosa, en
los países en que esto sea posible, a la instrucción, a la orientación y la formación pro-
fesionales, a los métodos de asistencia social individual, al asesoramiento relativo al
empleo, al desarrollo físico y a la educación del carácter moral, en conformidad con las
necesidades individuales de cada recluso. Se deberá tener en cuenta su pasado social
y criminal, su capacidad y aptitudes físicas y mentales, sus disposiciones personales, la
duración de su condena y las perspectivas después de su liberación. 2) Respecto de
cada recluso condenado a una pena o medida de cierta duración que ingrese en el
establecimiento, se remitirá al director cuanto antes un informe completo relativo a los
aspectos mencionados en el párrafo anterior. Acompañará a este informe el de un médi-
co, a ser posible especializado en psiquiatría, sobre el estado físico y mental del reclu-
so. 3) Los informes y demás documentos pertinentes formarán un expediente individual.
Estos expedientes se tendrán al día y se clasificarán de manera que el responsable
pueda consultarlos siempre que sea necesario.
Clasificación e individualización
67. Los fines de la clasificación deberán ser: a) Separar a los reclusos que, por su pasa-
do criminal o su mala disposición, ejercerían una influencia nociva sobre los com-
pañeros de detención; b) Repartir a los reclusos en grupos, a fin de facilitar el tratamien-
to encaminado a su readaptación social.
69. Tan pronto como ingrese en un establecimiento un condenado a una pena o medi-
da de cierta duración, y después de un estudio de su personalidad, se establecerá un
programa de tratamiento individual, teniendo en cuenta los datos obtenidos sobre sus
necesidades individuales, su capacidad y sus inclinaciones.
Privilegios
70. En cada establecimiento se instituirá un sistema de privilegios adaptado a los diferentes
grupos de reclusos y a los diferentes métodos de tratamiento, a fin de alentar la buena con-
ducta, desarrollar el sentido de responsabilidad y promover el interés y la cooperación de
los reclusos en lo que atañe su tratamiento.
Trabajo
71. 1) El trabajo penitenciario no deberá tener carácter aflictivo. 2) Todos los condena-
dos serán sometidos a la obligación de trabajar habida cuenta de su aptitud física y
mental, según la determine el médico. 3) Se proporcionará a los reclusos un trabajo pro-
271
ductivo, suficiente para ocuparlos durante la duración normal de una jornada de traba-
jo. 4) En la medida de lo posible, ese trabajo deberá contribuir por su naturaleza a man-
tener o aumentar la capacidad del recluso para ganar honradamente su vida después
de su liberación. 5) Se dará formación profesional en algún oficio útil a los reclusos que
estén en condiciones de aprovecharla, particularmente a los jóvenes. 6) Dentro de los
límites compatibles con una selección profesional racional y con las exigencias de la
administración y la disciplina penitenciarias, los reclusos podrán escoger la clase de tra-
bajo que deseen realizar.
73. 1) Las industrias y granjas penitenciarias deberán preferentemente ser dirigidas por
la administración y no por contratistas privados. 2) Los reclusos que se empleen en
algún trabajo no fiscalizado por la administración estarán siempre bajo la vigilancia del
personal penitenciario. A menos que el trabajo se haga para otras dependencias del
gobierno, las personas para las cuales se efectúe pagarán a la administración el salario
normal exigible por dicho trabajo teniendo en cuenta el rendimiento del recluso.
76. 1) El trabajo de los reclusos deberá ser remunerado de una manera equitativa. 2)
El reglamento permitirá a los reclusos que utilicen, por lo menos, una parte de su remu-
neración para adquirir objetos destinados a su uso personal y que envíen otra parte a
su familia. 3) El reglamento deberá igualmente prever que la administración reserve una
parte de la remuneración a fin de constituir un fondo que será entregado al recluso al
ser puesto en libertad.
272
Instrucción y recreo
77. 1) Se tomarán disposiciones para mejorar la instrucción de todos los reclusos
capaces de aprovecharla, incluso la instrucción religiosa en los países en que esto sea
posible. La instrucción de los analfabetos y la de los reclusos jóvenes será obligatoria
y la administración deberá prestarle particular atención. 2) La instrucción de los reclu-
sos deberá coordinarse, en cuanto sea posible, con el sistema de instrucción pública a
fin de que al ser puesto en libertad puedan continuar sin dificultad su preparación.
78. Para el bienestar físico y mental de los reclusos se organizarán actividades recreati-
vas y culturales en todos los establecimientos.
81. 1) Los servicios y organismos, oficiales o no, que ayudan a los reclusos puestos en
libertad a reintegrarse en la sociedad, proporcionarán a los liberados, en la medida de
lo posible, los documentos y papeles de identidad necesarios, alojamiento, trabajo,
vestidos convenientes y apropiados para el clima y la estación, así como los medios
necesarios para que lleguen a su destino y puedan subsistir durante el período que siga
inmediatamente a su liberación. 2) Los representantes acreditados de esos organismos
tendrán todo el acceso necesario a los establecimientos y podrán visitar a los reclusos.
Se les consultará en materia de proyectos de readaptación para cada recluso desde el
momento en que éste haya ingresado en el establecimiento. 3) Convendrá centralizar
o coordinar todo lo posible la actividad de dichos organismos, a fin de asegurar la mejor
utilización de sus actividades.
273
83. Convendrá que se tomen disposiciones, de acuerdo con los organismos competentes,
para que, en caso necesario, se continúe el tratamiento psiquiátrico después de la liberación
y se asegure una asistencia social postpenitenciaria de carácter psiquiátrico.
85. 1) Los acusados serán mantenidos separados de los reclusos condenados. 2) Los
acusados jóvenes serán mantenidos separados de los adultos. En principio, serán
detenidos en establecimientos distintos.
86. Los acusados deberán dormir en celdas individuales a reserva de los diversos usos
locales debidos al clima.
87. Dentro de los límites compatibles con un buen orden del establecimiento, los acu-
sados podrán, si lo desean, alimentarse por su propia cuenta procurándose alimentos
del exterior por conducto de la administración, de su familia o de sus amigos. En caso
contrario, la administración suministrará la alimentación.
88. 1) Se autorizará al acusado a que use sus propias prendas personales siempre que
estén aseadas y sean decorosas. 2) Si lleva el uniforme del establecimiento, éste será
diferente del uniforme de los condenados.
90. Se autorizará a todo acusado para que se procure, a sus expensas o a las de un
tercero, libros, periódicos, recado de escribir, así como otros medios de ocupación, den-
tro de los límites compatibles con el interés de la administración de justicia, la seguri-
dad y el buen orden del establecimiento.
91. Se permitirá que el acusado sea visitado y atendido por su propio médico o su den-
tista si su petición es razonable y está en condiciones de sufragar tal gasto.
274
92. Un acusado deberá poder informar inmediatamente a su familia de su detención y
se le concederán todas las facilidades razonables para comunicarse con ésta y sus ami-
gos y para recibir la visita de estas personas, con la única reserva de las restricciones
y de la vigilancia necesarias en interés de la administración de justicia, de la seguridad
y del buen orden del establecimiento.
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276
Principios básicos para el
tratamiento de los reclusos
Adoptados y proclamados
por la Asamblea General
en su resolución 45/111
del 14 de diciembre de 1990
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Principios básicos para el tratamiento de los reclusos
Adoptados y proclamados por la Asamblea General en su resolución 45/111
del 14 de diciembre de 1990
1. Todos los reclusos serán tratados con el respeto que merecen su dignidad y valor
inherentes de seres humanos.
2. No existirá discriminación por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión
política o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento u
otros factores.
3. Sin perjuicio de lo que antecede, es necesario respetar las creencias religiosas y los
preceptos culturales del grupo a que pertenezcan los reclusos, siempre que así lo exi-
jan las condiciones en el lugar.
5. Con excepción de las limitaciones que sean evidentemente necesarias por el hecho
del encarcelamiento, todos los reclusos seguirán gozando de los derechos humanos y
las libertades fundamentales consagrados en la Declaración Universal de Derechos
Humanos y, cuando el Estado de que se trate sea parte, en el Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos y su Protocolo Facultativo, así como de los demás derechos estipu-
lados en otros instrumentos de las Naciones Unidas.
7. Se tratará de abolir o restringir el uso del aislamiento en celda de castigo como san-
ción disciplinaria y se alentará su abolición o restricción.
9. Los reclusos tendrán acceso a los servicios de salud de que disponga el país, sin dis-
criminación por su condición jurídica.
279
10. Con la participación y ayuda de la comunidad y de instituciones sociales, y con el
debido respeto de los intereses de las víctimas, se crearán condiciones favorables para
la reincorporación del ex recluso a la sociedad en las mejores condiciones posibles.
280
LEY 120-01
QUE INSTITUYE
EL CÓDIGO DE ÉTICA
DEL SERVIDOR PÚBLICO
281
282
LEY 120-01 QUE INSTITUYE EL CÓDIGO DE ÉTICA
DEL SERVIDOR PÚBLICO
283
HA DADO LA SIGUIENTE LEY:
Art. 1.- La presente ley instituye el Código de Ética del Servidor Público, en
cuyos actos están envueltos los intereses supremos de la ciudadanía y la dignidad del
Estado.
Art. 2.- Este Código tiene como objetivo principal, normar la conducta de los
servidores públicos respecto a los principios éticos que han de regir su desempeño en
la administración pública, a fin de garantizar y promover el más alto grado de honesti-
dad y moralidad en el ejercicio de las funciones del Estado.
Art. 3.- Las disposiciones de este Código se aplicarán a los empleados y fun-
cionarios de las Secretarías de Estado y sus dependencias, así como a los de las insti-
tuciones autónomas descentralizadas y otros órganos del Estado cuya conformación
jurídica se encuentre regulada por el derecho público.
Art. 4.- A los efectos de este Código, serán considerados como principios rec-
tores de los servidores públicos, todo lo concerniente a la práctica de las virtudes y de
manera particular, los siguientes:
La honestidad.
Atributo que refleja el recto proceder del individuo, contentivo de elementos vivos de
decencia y decoro; es compostura y urbanidad. La honestidad implica buen compor-
tamiento.
La justicia y la equidad.
Obliga a los servidores públicos a actuar, respecto de las personas que demandan o
solicitan sus servicios, sin ningún tipo de preferencias y sin consideración de género,
religión, etnia, posición social y económica u otras características ajenas al fondo del
asunto y a la justicia.
El decoro.
Impone al servidor público respeto para sí y para los ciudadanos que acudan en solici-
tud de atención o demanda de algún servicio.
284
La lealtad.
Manifestación permanente de fidelidad hacia el Estado, que se traduce en solidaridad
para con la institución, superiores, compañeros y subordinados, dentro de los límites de
las leyes y de la ética.
La vocación de servicio.
Se manifiesta a través de acciones de entrega diligente a las tareas asignadas e impli-
ca disposición para dar oportuna y esmerada atención a los requerimientos y trabajos
encomendados, apertura y receptividad para encausar cortésmente las peticiones,
demandas, quejas y reclamos del público. Excluye todo tipo de conducta e intereses
que no sean las institucionales.
La disciplina.
Significa la observancia y el estricto cumplimiento de las normas administrativas por
parte de los servidores públicos en el ejercicio de sus funciones.
La honradez.
Tiene como fin principal no engañar ni engañarse. Forma un ingrediente humano que
ayuda a mantener la frente en alto. Debe ser considerada siempre como el norte que
va anunciando el camino del hombre decente a lo largo de la vida.
La cortesía.
La palabra amable, los ademanes moderados y las maneras gentiles son elementos de
cortesía de los que nunca se debe apartar el servidor público.
La probidad.
Conducta humana considerada como reflejo de integridad, entereza y hombría de bien,
componentes de la personalidad distinguida.
Mientras más alto sea el grado de probidad en el servidor público, más fecundo y per-
durable será el recuerdo de moralidad dejado en sus relacionados.
La discreción.
El hecho de saber guardar silencio de los casos que se traten, cuando éstos ameriten
secreto, es un rasgo de altura moral del individuo.
285
Más que una simple actitud, es una verdadera virtud que se cultiva con la fuerza de la
voluntad y de la prudencia.
El carácter.
El conjunto de buenos hábitos que forman en el servidor público una conducta superior,
lo hacen suficientemente apto para afrontar con denuedo las contingencias diarias y, con
altura moral para decidir lo que debe hacerse rectamente.
El carácter es seriedad cumplimiento mando, voluntad definida y temple.
La transparencia.
La transparencia exige del servidor público, la ejecución diáfana de los actos del servi-
cio e implica que éstos tienen, en principio, carácter público y son accesibles al
conocimiento de toda persona natural o jurídica que tenga interés legítimo en el asunto.
La pulcritud.
Entraña el adecuado manejo y uso de los bienes del Estado, la preocupación por el
ambiente físico de trabajo, y, en todo caso, en no aumentar o permitir por desidia, su
deterioro.
Interpretar, aplicar y hacer cumplir las disposiciones de esta ley, las reglas y reglamen-
tos que establecen determinadas prohibiciones respecto a la conducta de ciertos fun-
cionarios y empleados públicos, o que rigen cuestiones de ética y conflictos de intereses;
286
prevenir los conflictos de interés y tomar u ordenar las medidas disciplinarias, administrativas
o penales autorizadas por esta ley, luego de las correspondientes investigaciones;
Solicitar y obtener de las instituciones del Estado, aquellos informes que estime necesarios;
Nombrar o contratar el personal que sea necesario para llevar a cabo las funciones y
deberes que se establecen en esta ley;
Promover y organizar conferencias, charlas y seminarios sobre ética en todas las insti-
tuciones del Estado;
Adoptar cualquier otra medida o acción que sea necesaria y conveniente para cumplir
con los propósitos de esta ley.
Art. 8.- A todos los funcionarios o empleados públicos sujetos al presente Código
de Ética, independientemente del nivel jerárquico que ostenten, les está prohibido:
Desacatar, ya sea personalmente o actuando como servidor público, las leyes en vigor
y las citaciones u órdenes de los tribunales de justicia, de la rama legislativa o de las
instituciones de la rama ejecutiva que tengan autoridad para ello;
Dilatar la prestación de los servicios que las instituciones del Estado están obligadas a
ofrecer o, entorpecer su funcionamiento;
Utilizar su cargo para obtener ventajas, beneficios o privilegios que no estén permitidos
por la ley, de manera directa o indirecta para él, algún miembro de su familia o cualquier
otra persona, negocio o entidad;
287
Solicitar o aceptar, además del sueldo, jornal o compensación a que tiene derecho por
su función o empleo público, algún bien de valor económico como pago, retribución o
gratificación, por realizar los deberes y responsabilidades de su cargo;
Aceptar o solicitar a alguna persona, directa o indirectamente para él, algún miembro de
su familia o cualquier otra persona, negocio o entidad, algún bien de valor económico,
incluyendo regalos, préstamos, promesas, favores o servicios a cambio de que la
actuación de dicho funcionario o empleado público esté influenciada a favor de esa o
cualquier otra persona;
Agilizar o redactar por paga o ratificación, los debidos procedimientos burocráticos legal
o institucionalmente establecidos para la prestación de los servicios públicos;
Ser parte o tener algún interés en las ganancias o beneficios producto de un contrato
con cualquier institución pública o privada;
288
Obtener préstamos y contraer obligaciones con personas naturales o jurídicas con las
cuales se tengan relaciones oficiales en razón de los cargos públicos que desempeñan;
Las demás prohibiciones que se establezcan por vía legal o reglamentaria, o que resul-
ten del buen entendimiento y observancia de la ética social y administrativa.
Párrafo I.- No podrán prestar servicios en una misma institución pública más de tres
parientes o familiares del titular de la misma o de cualquier otro funcionario que tenga
poder de mando y decisión en dicha institución.
Párrafo II.- Nadie podrá desempeñar de manera simultánea, dos o más cargos dentro de
la administración pública, excepto la actividad docente, artística, y de investigación
académica y la participación en juntas, Comisiones de Ética Pública (CEP), grupos de tra-
bajo u otras formas de acción conjunta que, por mandato de la ley o reglamento, correspon-
da a determinados funcionarios por la naturaleza de sus responsabilidades.
Párrafo III.- Participar en actividades oficiales en las que el empleado público resulte
ser juez y parte a la vez.
Sanciones y Acciones
Art. 9.- Todo servidor público que viole intencionalmente o por falta grave e inexplica-
ble, los principios rectores de este Código de Etica, pero sin que dichas faltas impliquen
violación a las leyes en general y que, por tanto, no fuesen susceptibles de ser juzga-
dos por la justicia ordinaria, será sancionado disciplinariamente de conformidad con la
gravedad de las faltas de la manera siguiente:
Amonestación privada;
Amonestación pública;
289
Suspensión sin sueldo por tres meses;
Cancelación definitiva del cargo.
Párrafo II.- Serán consideradas circunstancias atenuantes, entre otras, las siguientes:
Párrafo III.- En todos los casos previstos en el presente artículo, el tribunal discipli-
nario, que organizará el Departamento de Prevención de la Corrupción Administrativa
mediante reglamento que será dictado por el Presidente de la República, conocerá y
aplicará las sanciones disciplinarias. En todos los casos en que, los procesados disci-
plinariamente correspondan a poderes del Estado distintos al Poder Ejecutivo, deberá
integrarse dicho tribunal disciplinario con un representante de esos poderes designado
por el superior jerárquico de los mismos. Lo mismo que se prevé para los procesados
disciplinariamente dependientes de poderes distintos al Poder Ejecutivo, se observará
cuando se trate de instituciones descentralizadas del Estado.
290
Art. 11.- El Departamento de Prevención de la Corrupción podrá acudir a los tribunales
competentes para solicitar que se impida, suspenda o paralice la ejecución de cualquier
acción que constituya una violación a las prohibiciones que establece este Código.
Art. 12.- Cualquier otro ciudadano, funcionario o empleado público podrá solicitar del
Departamento de Prevención de la Corrupción, mediante denuncia o querella escrita y
bajo juramento, que este inicie una investigación bajo cualquiera de las disposiciones
de esta ley. Para tales fines, el promovente deberá exponer en su querella, todos los
hechos en que se fundamenta su creencia de que procede la investigación.
Art. 13.- Dentro de los sesenta (60) días siguientes a la fecha de presentación de la
denuncia o querella, el Departamento de Prevención de la Corrupción realizará una
evaluación y notificará el denunciante o querellante la acción que se propone seguir. Si
el Departamento de Prevención de la Corrupción entiende que es innecesario llevar a
cabo una investigación, así se lo informará al denunciante o querellante dentro del tér-
mino antes descrito.
Art. 15.- Todo servidor público que resulte afectado por alguna decisión, resolución,
orden o acción del Departamento de Prevención de la Corrupción tendrá derecho a una
revisión judicial, para lo cual someterá la correspondiente petición ante el Tribunal
Superior Administrativo, con notificación al Departamento de Prevención de la
Corrupción dentro de los treinta (30) días de haberle sido notificada la decisión, resolu-
ción, orden o acción.
Art. 16.- Será considerada como una violación grave al presente Código, cualquier
medida o represalia tomada por un funcionario público en contra de algún subalterno,
por este último haber divulgado o denunciado ante cualquier autoridad la comisión de
algún acto considerado “delito o crimen contra la cosa pública”
291
Informes anuales
a) Descripción detallada del trabajo realizado por el DPC, durante el año anterior;
Incentivos
Art. 18.- La conducta de los servidores públicos ajustada a los principios y las normas
de este Código será tomada en cuenta para la permanencia en sus cargos.
Art. 20.- A los efectos de este Código, los servidores públicos que durante el último año
de servicio hayan mostrado buena conducta serán propuestos para hacerse acreedores
de reconocimientos y condecoraciones que han de imponerse el día del servidor públi-
co o en ocasiones significativas.
292
Art. 21.- Todo funcionario que haya contribuido a una manera responsable a descubrir
o evitar la comisión de un acto de corrupción en la administración pública, no podrá ser
sustituido de su cargo por esas razones bajo ningún subterfugio y, será acreedor de una
promoción en la institución para la cual labora.
Disposiciones Generales
Art. 22.- Sin menoscabo de lo establecido en este Código, las oficinas públicas podrán
mantener, elaborar o instrumentar manuales, instructivos, normas y procedimientos
que, enmarcados en el espíritu y términos de este Código, contribuyen a su mejor y mas
efectiva aplicación.
Art. 24.- La presente ley deroga toda disposición legal o parte de ley que le sea contraria.
293
294
LEY N°50-88
sobre Drogas y Sustancias
Controladas
295
296
LEY Nº 50-88
Sobre drogas y sustancias controladas en República Dominicana
297
CONSIDERANDO: Que en la actual Ley N° 168 no están clasificados ni subsecuente-
mente enumerados, los delitos relacionados con las drogas, ni tampoco están delimi-
tadamente claras las sanciones penales y pecuniarias que han de imponéseles tanto a
patrocinadores, traficantes, intermediarios, distribuidores, o vendedores, lo mismo que
a los usuarios;
CONSIDERANDO: Que la denominación "drogas narcóticas", como se consigna en la
Ley N° 168, vigente, es muy confusa, simple y limitativa, y que toda tipificación de la
conducta prohibida del hecho ilícito debe ser concreta, precisa, amplia, inteligible y,
sobre todo, clara;
VISTA la Ley N° 573, de fecha 16 de abril de 1977, sobre Mar Territorial, Zona Contigua,
Zona Económica Exclusiva y Plataforma Continental;
VISTAS las, Leyes Nos. 5439, de 1915, y sus modificaciones, sobre Libertad Provisional
Bajo Fianza, la Ley N° 164 de 1980, sobre Libertad Condicional, y la Ley N° 223, sobre
el Perdón Condicional de la Pena;
VISTOS los Artículos 1, 2, 3, 6, 7, 11, 18, 21, 23, 39, 40, 56, 57, 58 y 59 del Código
Penal Dominicano y los Artículos 32 al 43 del Código de Procedimiento Criminal.
CAPÍTULO I
TÍTULO Y DEFINICIONES
Artículo 1.
- Esta Ley se denominará como Ley sobre Drogas y Sustancias Controladas de la
República Dominicana.
Artículo 2.
- Las palabras y frases definidas en este artículo tendrán el significado que se expresa
a continuación, a menos que del texto de la Ley se desprenda otro significado.
298
ACAPITE I.
- Adicción. Significa un patrón de conducta por el uso compulsivo de una sustancia, carac-
terizado por agobiante afección por el uso del fármaco, la necesidad de conseguirlo y una
gran tendencia a recaer después de su supresión.
ACAPITE II.
- Adicto o Fármaco-Dependiente -. Toda persona que usa habitualmente un estupefa-
ciente o sustancia peligrosa, con riesgo de poner en peligro su moral, salud, seguridad
y bienestar, que haya adquirido la adicción o dependencia perdiendo el auto-control
sobre ese hábito, constituyendo así una amenaza para la sociedad.
ACAPITE III.
- Administrar Suministrar tratándose de medicamentos, aplicarlos, darlos o hacerlos
tomar. Se entiende por eso, la aplicación directa al individuo, de una sustancia contro-
lada o bajo régimen de prohibición legal, sea por inyección, inhalación, ingestión o por
cualquier otro medio de ingreso al organismo.
ACAPITE IV.
-.Amapola Adormidera (Opium poppy) Planta de la especie Papaver Somniferum L,
exceptuando sus semillas.
ACAPITE V.
-.Comercialización Se entiende por comercialización las transacciones comerciales ile-
gales, venta, entrega, recepción, internación y exportación de estupefacientes y sustan-
cias controladas, bajo régimen de prohibición legal.
ACAPITE VI.
- Comercialización ilegítima Es cuando el sujeto activo, estando autorizado para comer-
cializar o transportar sustancias controladas, les da uso legítimo.
ACAPITE VII.
- Comercialización ilícita Es cuando el sujeto activo no tiene autorización debida para
comercializar o transportar sustancias controladas que estén bajo el régimen legal de
la prohibición.
ACAPITE VIII.
- Consumo Se entiende por consumo el uso esporádico, periódico o permanente de sus-
tancias controladas que estén bajo el régimen legal de la prohibición, y que encierren el
peligro de la dependencia.
299
ACAPITE IV.
- Controlar Significa incluir una droga o sustancia o precursor inmediato, en una cate-
goría, eliminarla de ella o cambiarla de categoría, de conformidad con el Capítulo II de
esta Ley.
ACAPITE X.
- Cultivo Es la actividad destinada al desarrollo de una plantación, en los términos
descritos en el numeral 2.33.
ACAPITE XI.
- Dependencia Física Síndrome específico y característico de síntomas físicos, provo-
cados por la suspensión brusca de la droga (Síndrome de abstinencia).
ACAPITE XII.
- Dependencia Psicológica Significa que existe una compulsión para continuar usando
una droga a pesar de las consecuencias adversas.
ACAPITE XIII.
- Dispensar Es la entrega de una sustancia controlada por orden o receta médica.
ACAPITE XIV.
- Dispensador Es el médico, dentista, veterinario o farmacéutico que entrega la sustan-
cia controlada.
ACAPITE XV.
- Distribuidor Es la persona que distribuye una sustancia controlada.
ACAPITE XVI.
- Distribuir Significa entregar una sustancia controlada, por otro medio que no sea
administrar o dispensar.
ACAPITE XVII.
- Droga Es una sustancia simple o compuesta de origen natural o sintético, que, al
ingresar al organismo, puede modificar la salud de los seres humanos y que se utiliza
en la preparación de medicamentos, medios diagnósticos, etc. Sustancia o preparado
medicamentoso de efecto estimulante, deprimente o narcótico.
ACAPITE XVIII.
-.Drogas Alucinógenas Las drogas que pertenecen a este grupo se caracterizan por
producir alucinaciones en los consumidores. Aunque ésta no es su única propiedad, se
exhibe como su efecto más destacado y dominante en el organismo de los consumi-
300
dores. Entre las drogas alucinógenas de mayor uso, se destacan las siguientes:
Dietilamida del Acido Lisérgico (LSD-25), Peyote, Mescalina y otras similares.
ACAPITE XIX.
- Drogas Deprimentes o Estimulantes Todas aquellas que contengan cualquier cantidad
de ácido barbitúrico o cualquiera de sus sales, cualquier derivado del ácido barbitúrico
que se determine como capaz de formar hábito; toda droga que contenga cualquier can-
tidad de anfetaminas o cualquiera de sus isómeros ópticos; cualquier sal de anfetami-
na o cualquier sal de un isómero óptico de anfetamina, dietilamida del ácido lisérgico.
Tienen potencial para el abuso, debido a su efecto deprimente o estimulante en el sis-
tema nervioso central o a su efecto alucinógeno.
ACAPITE XX.
- Drogas Narcóticas Significa cualquiera de las siguientes sustancias, ya sean produci-
das directa o indirectamente, extrayéndolas de sustancias de origen vegetal, indepen-
dientemente por medio de síntesis química, o por una combinación de extracción y sín-
tesis química:
a) El opio, las hojas de coca y los opiatos.
b) Cualquier compuesto, producto, sal, derivados o preparación de opio, hojas de coca
u opiatos.
c) Cualquier sustancia y cualquier compuesto, producto, sal, derivado o preparación de
la misma, que sea químicamente idéntica a cualquiera de las sustancias mencionadas
en los apartados a) y b) de este acápite, con la excepción de que las palabras "Drogas
Narcóticas" no incluyen las hojas de coca descocainizadas, ni extractos de hojas de
coca, si dichos extractos no contienen cocaína o ecgonina.
ACAPITE XXI.
- Entregarse considera como entregar, al suministro, traspaso o dispensa de sustancias
controladas o que estén bajo el régimen legal de la prohibición.
ACAPITE XXII.
- Entrega o Suministro. Es el traspaso o provisión entre personas de una sustancia con-
trolada, exista o no relación legal para tal acto.
ACAPITE XXIII.
- Fabricación. Es el proceso de preparación, elaboración, manufactura, composición,
conversión o procesamiento de sustancias controladas o que estén bajo el régimen
legal de la prohibición, ya sea directa o indirectamente por medio de síntesis química,
o por la combinación de extracción y síntesis química.
301
ACAPITE XXIV.
- Fabricante Persona que fabrica una droga u otra sustancia.
ACAPITE XXV.
- Grupos Alucinógenos. Dietilamida del Acido Lisérgico (LSD-25), Peyote, Mescalina,
Psilocibina, Psilocina, DMT (Dimetiltriptamina), DET (Dietiltriptamina), MDA
(Metilenedioxianfetamina), STP (Dimetoximetanfetamina), y el THC (Tetrahidrocannabinol) y
otras similares.
ACAPITE XXVI.
- Grupos Excitantes o Estimulantes. La coca y sus derivados (Coeaína y Clorohidrato
de Cocaína), Anfetaminas, Bencedrina, Dexedrina, y otras similares.
ACAPITE XXVII.
- Grupos Hipnóticos y Barbitúricos. Este grupo carece de interés en la comercialización
dirigida por el narcotráfico. Los sedantes hipnóticos más empleados pertenecen al
grupo de los barbitúricos.
ACAPITE XXVIII.
- Grupos Opiáceos. Morfina, Heroína, Codeina, Papaverina y otros similares en los
cuales intervienen el opio, como el Elixir Paregórico y la Tintura de Láudano.
ACAPITE XXIX.
- Marihuana. Significa todas las partes de la planta Cannabis Sativa L, esté en proceso
de crecimiento o no; las semillas de la misma, la resina extraída de cualquier parte de
dicha planta, y todo compuesto, producto, sal, derivado, mezcla o preparación de tal
planta, de sus semillas o de su resina, pero no incluirá los tallos maduros de dicha plan-
ta, ni las fibras obtenidas de dichos tallos, ni el aceite o pasta hecho de las semillas de
dicha planta, ni cualquier otro compuesto, producto, sal, derivado, mezcla o preparación
de tales tallos maduros. Esta planta ha recibido diversos nombres según los países
donde se cultiva o comercializa. En Norteamérica se le llama mariguana; en Perú
Marihuana; en México se denomina Grifa, en Siria y Líbano, Hashish, en La India, Bang
o Gania, en Argelia, Kif, en Turquía, Habak, en nuestro país, yerba, material, mafafa,
marihuana, maso, clavo, etcétera. Se le conocen unos trescientos nombres más exten-
didos por todo el mundo.
ACAPITE XXX.
- Opiato. Cualquier droga u otra sustancia capaz de crear adicción o de mantener la
adicción, en forma similar a la morfina, o sea susceptible de ser convertida en una droga
que posea dicha capacidad para crear o mantener la adicción.
302
ACAPITE XXXI.
- Paja de la Adormidera. Son todas las partes de la amapola adormidera luego de ser
segada, exceptuando las semillas.
ACAPITE XXXII.
- Persona. Es toda persona física o moral.
ACAPITE XXXIII.
- Plantación. Es la pluralidad de plantas en número superior a veinte (20), de las que
puedan extraerse drogas que causen dependencia.
ACAPITE XXXIV.
- Posesión. Es el acto material de tener sustancias controladas.
ACAPITE XXXV.
- Posesión Culposa. Tenencia o posesión para uso o consumo propio e inmediato, con-
traviniendo disposiciones legales que la prohíben.
ACAPITE XXXVI.
- Posesión Ilícita. Cuando el sujeto activo susceptible de comisión delictiva, realiza un acto
doloso contrario a la prohibición expresa de la Ley, de tenencia, guarda o posesión de sus-
tancias controladas a las que se les da un destino indebido, o que teniendo autorización
para tener, hace uso indebido de ellas.
ACAPITE XXXVII.
- Preparado. Toda solución o mezcla, en cualquier estado físico, que contenga una o
más sustancias controladas, o una o más sustancias controladas en forma dosificada.
ACAPITE XXXVIII.
- Precursor Inmediato. Significa cualquier sustancia que es un intermediario químico
inmediato usado o propenso a ser usado, en la fabricación de una determinada sustan-
cia controlada, y cuyo control se hace necesario para prevenir, reducir o limitar la fabri-
cación de tal sustancia controlada.
ACAPITE XXXIX.
- Prescripción o Receta. Significa una orden dada por un médico, dentista o veterinario,
autorizado para dispensar sustancias controladas.
ACAPITE XL.
- Producción. Es la siembra, plantación, cultivo, crecimiento, cosecha, recolección, etcétera, de
plantas que contengan sustancias controladas o que estén bajo un régimen de prohibición legal.
303
ACAPITE XLI.
- Producción Ilícita. Es cuando el sujeto activo susceptible de comisión delictiva, no
tiene autorización debida para producir o fabricar materias que contengan sustancias
controladas definidas y prohibidas por la legislación vigente.
ACAPITE XLII.
- Producción Ilegítima. Identifica la comisión delictiva cuando el sujeto activo estando
autorizado para producir o fabricar materias que contengan sustancias controladas, les
da a éstas un uso ilegítimo.
ACAPITE XLIII.
- Sustancia Controlada. Significa toda droga, sustancia química, básica y esencial, o pre-
cursor inmediato, incluida en las Categorías I, II, III, IV y V del Capítulo II de esta Ley.
ACAPITE XLIV.
- Sustancia Falsificada. Toda sustancia controlada o que su envase o etiqueta, exhiba
sin autorización, la marca de fábrica, nombre comercial u otra marca, señal, número o
diseño identificador, o su semejante, de un fabricante, distribuidor o dispensador que no
es la persona o personas que en realidad fabricaron, distribuyeron o dispensaron tal
sustancia y la cual así falsamente pretende o representa ser el producto de, o haber
sido distribuido por tal fabricante, distribuidor o dispensador.
ACAPITE XLV.
- Sustancia Sicotrópica. Cualquier sustancia natural o sintética, o cualquier material natu-
ral de las Categorías I, II, III o IV.
ACAPITE XLVI.
- Tráfico Ilícito. Es el acto ilegal de traslado o transporte de estupefacientes y sustancias
controladas, así como los actos anteriores o posteriores, dirigidos a las transacciones
comerciales ilícitas de entrega a cualquier título de sustancias controladas o que estén
bajo el régimen de prohibición legal.
ACAPITE XLVII.
- Tráfico Internacional. Es el tráfico ilícito organizado por bandas criminales que cubren
varios países en sus operaciones delictivas.
ACAPITE XLVIII.
- Uso-Consumo. Se conoce con este término, la utilización de sustancias controladas o
que estén bajo el régimen de la prohibición, entendiéndose que su frecuencia puede ser
esporádica, ocasional, periódica, continua o permanente, pero en todo caso que lleve
el peligro de dependencia y cuadro de peligrosidad social.
304
Artículo 3.
- Para fines de esta Ley, los usuarios de drogas controladas se clasifican en tres
Categorías:
a) Aficionados. Aficionado es la persona que se inicia en el uso de las drogas, sin llegar
al hábito.
b) Habituados. Habituado es la persona que abusa regularmente de una o varias dro-
gas sin consecuencias sociales u ocupacionales evidentes.
c) Adictos o Fármaco-Dependientes. Adicto o fármaco-dependiente es la persona que
depende psíquica y físicamente de la droga, manifestando síndrome de abstinencia,
luego de la cesación o disminución drástica de la dosis regularmente utilizada, de forma
tal que pone en peligro la moral, la salud, seguridad o bienestar públicos, o que está tan
dependiente del uso de las drogas, que ha perdido el autocontrol con respecto a su
adicción.
Artículo 4.
- Los que negocien ilícitamente con las drogas controladas, se clasificarán en las siguientes
Categorías:
a) Simples Poseedores. La simple posesión se determinará conforme a lo establecido
en esta misma Ley, en cada caso particular.
b) Distribuidores o Vendedores. Distribuidor o vendedor es la persona que realiza direc-
tamente la operación de venta al usuario.
c) Intermediarios. Intermediario es la persona que hace los contactos entre el usuario y
el distribuidor, o entre el distribuidor y el traficante.
d) Traficantes. Traficante es la persona que comercia con drogas controladas en las
cantidades especificadas en la presente ley.
e) Patrocinadores. Patrocinador es la persona que financia las operaciones del tráfico
ilícito, dirige intelectualmente esas operaciones, suministra el equipo de transporte o
dispone de cualquier medio que facilite el negocio ilícito.
Artículo 5.
- (Modificado por la Ley Nº 17-95, del 17 de diciembre de 1995). Cuando se trate de
cocaína, la magnitud de cada caso sometido a la justicia se determinará de acuerdo a
la escala siguiente:
a) Cuando la cantidad de la droga no excede de un (1) gramo, se considerará la simple
posesión, y la persona o las personas procesadas se clasificarán como aficionados. Si
la cantidad es mayor de un (1) gramo, pero menor de cinco (5) gramos, la persona o per-
sonas procesadas se clasificarán como distribuidores. Si la cantidad excede los cinco (5)
gramos, se considerará a la persona o las personas procesadas como traficantes.
b) No se considerará aficionado cuando la droga que la persona lleve consigo tenga
como fin la distribución o venta, cualquiera que sea su cantidad, en este caso, se con-
siderará al procesado como distribuidor o vendedor.
305
Artículo 6.
- Cuando se trate de marihuana, por la cantidad decomisada o envuelta en la operación,
se determinará la magnitud de cada caso.
Artículo 7.
- Cuando se trate de LSD o cualquier otra sustancia alucinógena, lo mismo que el opio
y sus derivados, en la cantidad que fuera, se clasificará a la persona o las personas
procesadas como traficantes.
306
Las determinaciones que se requieren para cada Categoría será como se expresa a
continuación:
1) Categoría I.
a) La droga u otra sustancia tiene un alto potencial de abuso.
b) La droga u otra sustancia no tiene uso medicinal aceptado.
c) Ausencia de condiciones aceptadas de seguridad para su uso bajo supervisión médica.
2) Categoría II.
a) La droga u otra sustancia tiene un alto potencial de abuso.
b) La droga u otra sustancia tiene uso medicinal aceptado, o uso medicinal aceptado
con severas restricciones.
c) El abuso de la droga u otra sustancia puede conducir a una grave dependencia
sicológica o física.
3) Categoría III.
a) La droga u otra sustancia tiene un potencial menor para el abuso que el de las dro-
gas u otras sustancias enumeradas en las Categorías I y II.
b) La droga u otra sustancia tiene uso medicinal aceptado.
c) El abuso de la droga u otra sustancia puede conducir a una dependencia física de
carácter leve o moderado o una fuerte dependencia sicológica.
4) Categoría IV.
a) La droga u otra sustancia tiene un bajo potencial de abuso en comparación con las
drogas y otras sustancias incluidas en la Categoría III.
b) La droga u otra sustancia tiene uso medicinal aceptado.
c) El abuso de la droga u otra sustancia puede crear dependencia física o dependencia
sicológica limitada en comparación con las drogas u otras sustancias incluidas en la
Categoría III.
5) Categoría V.
a) La droga u otra sustancia tiene un bajo potencial de abuso en comparación con las
drogas u otras sustancias incluidas en la Categoría IV.
b) La droga u otra sustancia tiene uso medicinal aceptado.
c) El abuso de la droga u otra sustancia puede crear dependencia física o dependencia
sicológica limitada en comparación con las drogas u otras sustancias incluidas en la
Categoría IV.
Las Categorías I, II, II, IV y V, salvo que sean enmendadas, comprenderán las siguientes
drogas u otras sustancias, conocidas por cualquier nombre oficial, usual o corriente,
químico o comercial con que se designen.
307
CATEGORIA I
Incluye drogas con alto potencial de abuso y sin uso médico aceptado actualmente. Se
deben utilizar únicamente para investigaciones, uso instruccional o análisis químico.
ACAPITE I.
- A menos que estén específicamente exceptuados o incluidos en otra Categoría, se enten-
derán incluidos en esta Categoría, cualquiera de los siguientes opiatos, incluyendo sus
isómeros, sales de sus isómeros, ésteres, y éteres, siempre que la existencia de dichos
isómeros, sales de sus isómeros, ésteres y éteres sea posible dentro de la designación
química correspondiente.
Acetilmertadol 9601
Alilprodina 9602
Alfacetilmetadol 9603
Alfameprodina 9804
Alfametadol 9605
Alfametilfenil 9614
Bencetidina 9606
Betacetilmetadol 9607
Betameprodina 9608
Betametadol 9609
Betaprodina 9611
Clonitaceno 9812
Dextromoramida 9613
Diampromida 9615
Dietiltiambuteno 9616
Difenoxina 9168
Dimenoxadol 9617
Dimefeptanol 9618
Dimetiltiambuteno 9619
Dioxafetilbutirato 9621
Dipipanona 9622
Etilmetiltiambuteno 9623
Etonitaceno 9624
Etoxeridina 9625
Furetidina 9626
Hidroxipetidina 9627
Ketobemidona 9628
Levomoramida 9629
Levofenacilmorfan 9631
Morferidina 9832
Noracimetadol 9633
308
Norlevorfanol 9634
Normetadona 9635
Norpipanona 9636
Fenaxodona 9637
Fenanpromida 9638
Fenomorfan 9647
Fenoperidina 9641
Piritramida 9642
Proheptacina 9643
Properidina 9644
Propiran 9649
Racemoramida 9645
Sufentanil 9740
Tilidina 9750
Trimeperidina 9646
ACAPITE II.
- A menos que estén específicamente exceptuados o incluidos en otra Categoría, se enten-
derán incluidos en esta Categoría, cualquiera de los siguientes derivados del opio, sus sales,
isómeros y sales de sus isómeros, siempre que la existencia de dichas sales, isómeros y
sales de sus isómeros sea posible dentro de la designación química específica.
Acetorfina 9319
Acetildihidrocodeína 9051
Bencilmorfina 9052
Metilbromuro de Codeína 9070
Oxido-N-Codeína 9053
Ciprenorfina 9054
Desomorfina 9055
Dihidromorfina 9145
Drotebanol 9335
Etorfina (excepto la sal de hidrocloruro 9056
Heroína 9200
Hidromorfinol 9301
Metildesorfina 9302
Metildihidromorfina 9304
Metilbromuro de morfina 9305
Metilsulfonato de morfina 9306
Oxido-N-morfina 9307
Mirofina 9308
Nicocodeína 9309
309
Nicomorfina 9312
Normorfina 9313
Folcodina 9314
Tebacon 9315
ACAPITE III.
- A menos que estén específicamente exceptuados o incluidos en otra Categoría, se
entenderán incluidos en esta Categoría, los materiales, compuestos, mezclas o
preparaciones que contengan una cantidad cualquiera de las siguientes sustancias alu-
cinógenas, sus sales, isómeros y sales de sus isómeros, siempre que la existencia de
tales sales, isómeros y sales de sus isómeros sea posible dentro de la designación
química específica.
310
ACAPITE IV.
- Los materiales, compuestos, mezclas o preparaciones que contengan cualquier can-
tidad de las siguientes sustancias depresoras del sistema nervioso central, incluyendo
sus sales, isómeros y sales de sus isómeros.
1. Meclocualona 2572
2. Metacualona 2565
CATEGORIA II
A menos que estén específicamente exceptuadas o incluidas en otra Categoría,
cualquiera de las siguientes sustancias ya sean producidas directa o indirectamente
mediante extracción de sustancias de origen vegetal, o independientemente por medio
de síntesis química, o mediante una combinación de extracción y síntesis química.
ACAPITE I.
- Cualquier sal, compuesto, derivado o preparación de opio, excluyendo la Apomorfina,
el Dextrorfan, la Nalbufina y la Naltrexona y sus sales respectivas, pero incluyendo las
siguientes:
311
Difenoxilato 9170
Fentanil 9801
Isometadona 9226
Levometorfan 9210
Levorfanol 9220
Metasocina 9240
Metadona 9250
Metadona-intermedio, 4-ciano-2-dimetilamino 4, 4-difenilbutano 9254
Moramida-intermedio, 2-metil-3-morfolino-1, 1-difenil-propanocar-boxílico-ácido 9802
Meperdidina (petidina) 9230
Meperidina-intermedio-A; 4-ciano-1-metil-4-fenil peridina 9232
Meperidina-intermedio-B; etil-4-fenilpiperidina-4-carboxilato 9233
Meperidina-intermedio-C-1-metil-4-fenilpiperidina-4-ácido carboxílico 9234
Fenazocina 9715
Piminodina 9730
Racemetorfan 9732
Racemorfan 9733
ACAPITE II.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquier cantidad
de las siguientes sustancias estimulantes del sistema nervioso central.
ACAPITE III.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquier cantidad
de las siguientes sustancias con efecto depresor sobre el sistema nervioso central,
incluyendo sus sales, isómeros y las sales de éstos.
Amobarbital 2125
Pentobarbital 2270
Secobarbital 2315
312
ACAPITE IV.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquier cantidad
de estos precursores inmediatos: anfetamina, metanfetamina y fenciclidina.
Fenilacetona 8501
1-fenilciclohexilamina 7460
1-piperidinociclohexanecarbonitrilo (PCC) 8603
A menos que estén específicamente exceptuados o incluidos en otra Categoría, se
entenderá incluidos en esa Categoría los liquidos inyectables que contengan cualquier
cantidad de metanfetamina, incluyendo sus sales, isómeros y sales de sus isómeros.
CATEGORIA III
ACAPITE I.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquier cantidad
de las siguientes sustancias con efecto estimulante sobre el sistema nervioso central
incluyendo sus isómeros, Sales (ya sea sus posiciones ópticas o geométricas), y las
sales de tales isómeros.
Benzfetamina 1128
Clorofentermina 1645
Clorotermina 1647
Fendimetracina 1615
ACAPITE II.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquier cantidad
de las siguientes sustancias con efecto depresor sobre el sistema nervioso central.
Clorehexadol 2510
Gluterimida 2550
Acido lisérgico 7300
Amina del ácido lisérgico 7310
Metiprilón 2575
Sulfonetilmetano 2605
Sulfondietilmetano 2600
Sulfonmetano 2610
Nalorfina 9400
Cualquier sustancia que contenga derivados del ácido barbitúrico y sus sales 2100
313
ACAPITE III.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquiera de las
siguientes drogas narcóticas o sus sales calculadas según la base anhídrica libre o
alcaloide en cantidades limitadas según se especifica a continuación:
No más de 1.8 gramos de codeína por 100 mililitros o no más de 90 miligramos por
dosis única, con una cantidad igual o mayor de un alcaloide isoquinolínico del opio 9803
No más de 1.8 gramos de codeína por 100 mililitros o no más de 90 miligramos de dosis
única, con uno o más ingredientes activos, no narcóticos, en cantidades reconocidas
como de valor terapéutico 9804
No más de 500 miligramos de opio por 100 mililitros o por 100 gramos o no más de 25
miligramos por dosis única con uno o más ingredientes activos, no narcóticos, en dosis
terapéuticas 9809
No más de 50 miligramos de morfina por 100 mililitros o por 100 gramos, con uno o más
ingredientes no narcóticos activos en dosis terapéuticas 9810
CATEGORIA IV
ACAPITE I.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquier cantidad
de las siguientes sustancias, incluyendo sus sales, isómeros y sus sales.
Alprazolam 2882
Barbital 2145
314
Betano de cloral 2460
Hidrato de cloral . 2465
Clorodiazepoxido . 2744
Clonazepam . 2737
Cloracepato 2768
Diazepam . 2765
Etclorovinol . 2540
Etinamato 2545
Flurazepam 2767
Halazepam 2762
Lorazepam 2885
Mebutamato 2800
Meprobamato. 2820
Metohexital 2264
Metilfenobarbital (mefobarbital) 2250
Oxazepam 2835
Paraldehido 2585
Petricloral 2591
Fenobarbital 2285
Prazepam 2764
Temazepam 2925
Triasolam 2887
Fenfluramina 1670
ACAPITE II.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que contenga cualquier cantidad
de las siguientes sustancias estimulantes:
Dietilpropion 1610
macindol 1605
Pemolina (incluyendo complejos organometálicos y chelatos) 1530
Fentermina 1640
Pipradol 1750
SPA (1-dimetilamino-l,2, difeniletano) 1635
Pentasocina en cualquier cantidad incluyendo sus sales 9709
CATEGORIA V
ACAPITE I.
- Cualquier material, compuesto, mezcla o preparación, que contenga cualquiera de las
siguientes drogas o sus sales, en cantidades limitadas como se especifica más ade-
lante, que incluyan uno o más ingredientes activos medicinales no narcóticos, en can-
315
tidades suficientes para conferirle al compuesto, propiedades medicinales de valor, dis-
tintas a las que poseen las drogas narcóticas por sí solas:
No más de 200 miligramos de codeína por cada 100 mililitros o por cada 100 gramos
No más de 100 miligramos de dihidrocodeína por cada 100 mililitros o por cada 100
gramos.
No más de 100 miligramos de etilmorfina por cada 100 mililitros o por cada 100 gramos.
No más de 2.5 miligramos de difenoxilato y no menos de 25 microgramos de sulfato de
atropina por dosis única.
No más de 100 miligramos de opio por cada 100 mililitros o por cada 100 gramos.
No más de 0.5 miligramos de difenoxina y no menos de 25 microgramos de sulfato de
atropina por dosis única.
PÁRRAFO.
- (Agregado por la Ley N °35-90, del 7 de junio de 1990). Se consideran como sustan-
cias controladas y por tanto sujetas a todas las disposiciones legales de esta ley, los
siguientes precursores, solventes y reactivos químicos.
Cloruro de Acetileno;
Acido Antranílico;
Acido N-Acetil-Antranflico;
Ergonovina;
Ergotamina;
Acido Fenilacético;
Fenil-2-Propanona;
Piperidina;
Anhídrido Acético;
Acetona;
Eter Etílico;
Benceno;
Tolueno;
Hexano;
Metil-Etil-Cetona (MEK);
Metil-Isobutil-Cetona (MIBK);
Metil-Isopropil-Cetona (MIK);
Di-Isopropil-Cetona;
Artículo 9.
- Entre todas las drogas peligrosas enumeradas en el Artículo 8, para los fines de esta
Ley se considerarán como de las más peligrosas, las siguientes:
El opio en todas sus formas, todos sus derivados (alcaloides, sales, preparados o susti-
tutos sintéticos).
316
La heroína.
La coca (Erythroxylon Coca).
La cocaína, sus derivados o sustitutos sintéticos, o cualquier compuesto en el cual entre
como base.
El LSD o cualquier otra sustancia alucinógena.
Todas las semillas y plantas de la familia de las Cannabináceas, y productos derivados
de ellas que contengan propiedades estupefacientes o estimulantes (como Cannabis
Indica, Cannabis Sativa, Marihuana, y otras yerbas que tengan propiedades similares).
El control del sistema de inteligencia nacional antidrogas, para colectar, analizar y disemi-
nar informaciones de inteligencia estratégica y operacional, con el fin de contrarrestar las
actividades del tráfico ilícito de drogas en la República Dominicana, pata cuyo fin se crea
como una dependencia de esta Dirección Nacional de Control de Drogas, el CENTRO DE
INFORMACION Y COORDINACION CONJUNTA (CICC).
El decomiso, incautación y custodia de los bienes y beneficios derivados del tráfico ilícito,
hasta tanto pese sobre éstos, sentencia irrevocable y definitiva.
317
La coordinación y cooperación con gobiernos e instituciones extranjeras para reducir la
disponibilidad de drogas ilícitas en la República Dominicana y el Área del Caribe, desarrolladas
dentro del contexto de los Convenios y Tratados Internacionales suscritos y ratificados por la
República Dominicana.
Ser contacto y representante ante la INTERPOL, así como ante cualquier otro organis-
mo internacional, en materia de programas de control internacional de drogas y sustan-
cias controladas.
Artículo 11.
- La Dirección Nacional de Control de Drogas estará a cargo de una Junta Directiva
integrada por cinco miembros, que serán nombrados por el Poder Ejecutivo.
PARRAFO I.
- La Junta Directiva estará formada por:
Un representante de la Presidencia de la República;
Un representante de las Fuerzas Armadas o la Policía Nacional;
Un representante de la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social;
Un representante de la Secretaría de Estado de Relaciones Exteriores, y
Un miembro prominente de la Iglesia Católica Dominicana.
PARRAFO II.
- El Presidente de la República designará la persona que presidirá la Junta.
PARRAFO III.
- Las decisiones de la Junta Directiva que correspondan con el ejercicio de sus atribu-
ciones, serán determinadas por el voto positivo de cuatro de sus miembros.
Artículo 12.
- El Departamento de Drogas Narcóticas y Peligrosas de la Policía Nacional, pasa a ser
dependencia de esta Dirección Nacional de Control de Drogas.
PARRAFO:
Los oficiales superiores, oficiales subalternos y alistados, que en la actualidad prestan
sus servicios bajo la dependencia del Departamento de Drogas Narcóticas y Peligrosas
de la Policía Nacional, pasarían a ser miembros de esta Dirección Nacional de Control
de Drogas, luego de la evaluación correspondiente.
Artículo 13.
- El personal que laborará en esta Dirección Nacional de Control de Drogas provendrá
318
de los diferentes Departamentos de las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y el
Departamento Nacional de Investigaciones, así como de cualquier otra institución públi-
ca, a consideración del Poder Ejecutivo.
PARRAFO I.
- Los oficiales superiores, oficiales subalternos y alistados, seleccionados previa evaluación
correspondiente, para ingresar a la Dirección Nacional de Control de Drogas, deberán recibir
entrenamiento y capacitación especializada en materia de investigación y drogas.
PARRAFO II.
- Para estos fines se crea mediante esta Ley y bajo la dependencia de esta Dirección,
la ACADEMIA DE CONTROL DE DROGAS DE LA REPUBLICA DOMINICANA.
Artículo 14.
- El personal militar, policial y civil de esta Dirección Nacional de Control de Drogas no
podrá ingresar, ser trasladado, sustituido o cancelado, sin la previa autorización del
Presidente de la República, en su condición de Jefe Supremo de todas las fuerzas
armadas y de los cuerpos policiales, en virtud de lo estipulado en el artículo cincuenta
y cinco (55) de la Constitución Dominicana.
Artículo 15.
- (Modificado por la Ley N° 35-90, del 7 de junio de 1990). El presidente de la Dirección
Nacional de Control de Drogas queda facultado previo los requisitos correspondientes
a asignar Armas de Fuego a los miembros de la Dirección Nacional de Control de
Drogas.
Artículo 16.
- Los miembros de esta Dirección Nacional de Control de Drogas, militares, policiales y
civiles, serán provistos de carnets y placas especiales que los acreditarán como tales.
Artículo 17.
- ta Dirección Nacional de Control de Drogas tendrá derecho a requerir, para el
cumplimiento de su misión, la cooperación de todas las dependencias gubernamen-
tales, cuando se considere que tal cooperación es necesaria para la consecución de
sus objetivos.
Artículo 18.
- Las autoridades militares, policiales, civiles y judiciales, deberán prestar su colabo-
ración para el fortalecimiento de los programas y operaciones que lleve a cabo esta
Dirección Nacional de Control de Drogas.
319
Artículo 19.
- Se crea bajo dependencia del Poder Ejecutivo el CONSEJO NACIONAL DE DRO-
GAS, que estará formado por siete personas de reconocida solvencia moral que serán
designadas por el Presidente de la República. Este Consejo Nacional de Drogas tendrá
como objetivos principales:
Asesorar al Poder Ejecutivo en materia de la problemática de las drogas en la
República Dominicana.,
Revisar, diseñar, desarrollar e implementar la estrategia y campaña nacional contra el
consumo, distribución y tráfico de drogas ilícitas en la República Dominicana.
Propiciar la coordinación de todos los sectores públicos y privados de la República
Dominicana, para detener el tráfico ilícito de drogas a nivel nacional e internacional.
Artículo 20.
- El Consejo Nacional de Drogas tendrá derecho a requerir, para el cumplimiento de su
misión, la cooperación de todas las dependencias gubernamentales, cuando se con-
sidere que tal cooperación es necesaria para la consecución de sus objetivos.
Artículo 22.
- Queda prohibida la producción, fabricación, extracción, síntesis, elaboración y fraccionamien-
to de los estupefacientes y sustancias controladas, enumeradas en la Categoría I del Artículo
8 de la presente Ley.
Artículo 23.
- Se prohíbe asimismo, la extracción, purificación, cristalización, recristalización y sín-
tesis parcial o integral de los estupefacientes y demás drogas sujetas al régimen de la
fiscalización, salvo las excepciones señaladas por la presente Ley.
Artículo 24.
- La Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, a través de su departa-
mento correspondiente, en coordinación con la Dirección Nacional de Control de Drogas,
que se encargará de realizar las investigaciones y depuraciones correspondientes, podrá
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según los casos, autorizar a instituciones científicas, oficiales o privadas, de enseñanza
superior o de investigación, aquellas actividades que, de manera general, se prohíben
en los Artículos 21, 22 y 23 de esta Ley. Estas instituciones quedarán sujetas al control
periódico de dicha secretaría y dirección.
Artículo 25.
- Los establecimientos farmacéuticos y organismos sanitarios que fabriquen drogas y
medicamentos que produzcan dependencia física o sicológica, o ambas a la vez,
estarán sometidos a la inspección y vigilancia de la Dirección Nacional de Control de
Drogas, así como de la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social.
PARRAFO.
La producción, fabricación, refinación, transformación, extracción y preparación o cua-
lesquiera otras operaciones de manipulación de estas sustancias, o de sus preparados, a
que se refiere la presente Ley, estarán sometidos al régimen de autorización y fiscalización
de la Dirección Nacional de Control de Drogas, así como de la Secretaría de Estado de
Salud Pública y Asistencia Social.
Artículo 26.
- Los laboratorios que contemplen producir, fabricar, extraer, preparar, transformar o
refinar sustancias estupefacientes o controladas indicadas en las Categorías II, III y IV,
destinadas a la elaboración de productos farmacéuticos, deberán solicitar por escrito a
la Dirección Nacional de Control de Drogas, para la debida investigación y depuración,
la autorización correspondiente, debiendo hacer conocer la cantidad, contenido y natu-
raleza de lo que serán sus producciones.
Artículo 27.
- La fabricación, refinación, transformación, extracción, preparación, producción y cua-
lesquiera otras actividades similares de las sustancias a que se refiere esta ley, sus
derivados, sales, preparaciones y especialidades farmacéuticas, quedan limitadas
estrictamente a las cantidades necesarias para el tratamiento médico, la producción
legal de medicamentos o investigaciones científicas, y sólo las personas legalmente
autorizadas podrán intervenir en todo lo relacionado con ellas. Se declara ilícito
cualquier otro destino que se les dé a dichas sustancias.
Artículo 28.
- Ninguna persona podrá mantener en su poder, ya sea en sus ropas o valijas, ya tam-
bién en su domicilio, oficina de trabajo u otro lugar, bajo su orden o responsabilidad; sin
autorización legal, cantidad alguna de los estupefacientes y de las sustancias contro-
ladas mencionadas en la Categoría I.
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Artículo 29.
- Todas las acciones que se relacionen con las transacciones comerciales ilícitas de
sustancias controladas, quedan involucradas en el concepto de "tráfico ilícito". La figu-
ra también comprende las acciones ilegítimas que se realicen transgrediendo la prohibi-
ción de importar y comercializar sustancias químicas, básicas y esenciales, así como
precursores inmediatos, que para el efecto precisan de licencia expresa de la
Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, así como la prohibición de
fraccionar, comercializar, importar y exportar estupefacientes y sustancias controladas.
PARRAFO I.
- La Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, es la única facultada
para dar licencia para la adquisición, importación, exportación y comercialización de
estupefacientes y sustancias controladas, las que para uso médico sólo podrán ser ven-
didas mediante receta médica, expedida en formulario oficial, diseñado por la Dirección
Nacional de Control de Drogas. La prohibición alcanza a las muestras médicas, las que
están sujetas a registro.
PARRAFO II.
- Queda terminantemente prohibida la importación o exportación de las sustancias
puras o contenidas en especialidades farmacéuticas a que se refiere esta Ley, en
encomiendas, bultos postales, correspondencias, etcétera, dirigidas a almacenes de
aduanas, almacenes habilitados, almacenes generales de depósitos, zonas francas o
puertos libres. Las infracciones a lo dispuesto en este artículo serán sancionadas con
el decomiso y se procederá de acuerdo a lo establecido en esta ley.
Artículo 30.
- La Secretaría de Estado de Salud pública y Asistencia Social, en coordinación con la Dirección
Nacional de Control de Drogas, que realizará la investigación y depuración correspondientes,
autorizará la adquisición limitada de estupefacientes y sustancias controladas indicadas en la
Categoría I, a instituciones científicas, oficiales o privadas, o de enseñanza superior o de inves-
tigación; las mismas deberán informar periódicamente los resultados de los estudios de inves-
tigaciones, así como la forma y cantidades utilizadas.
Artículo 31.
- Los medicamentos que contengan sustancias controladas indicadas en las Categorías II,
III y IV, se expenderán al público en farmacias o establecimientos de comercio autorizado,
sólo mediante receta médica en formularios diseñados por la Dirección Nacional de Control
de Drogas, vendidos en las estafetas de Rentas Internas ubicadas en la Secretaría de
Estado de Salud Pública y Asistencia Social.
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Artículo 32.
- Las muestras médicas gratuitas que contengan sustancias controladas, estarán suje-
tas a su registro en la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, para
su ingreso, distribución o salida del país.
Artículo 33.
- Serán decomisadas e incautadas las sustancias químicas, básicas y esenciales, así
como los precursores inmediatos, insumos, fábricas, laboratorios, alambiques, imple-
mentos y enseres empleados en la producción y fabricación ilícita de drogas. Los cul-
tivos serán destruidos. Igualmente serán decomisados e incautados los terrenos de cul-
tivos. También será decomisado e incautado el dinero empleado u obtenido en la
comisión del delito de tráfico ilícito.
Artículo 34.
- Los bienes muebles e inmuebles, equipos y demás objetos donde se compruebe que
ilícitamente se almacene, conserve, fabrique, elabore, venda o suministre a cualquier
título, heroína, cocaína, marihuana o cualquier otra droga clasificada por esta Ley como
peligrosa, al igual que los vehículos y demás medios de transporte, incluyendo las
aeronaves, embarcaciones marítimas, así como los semovientes, utilizados para la
comisión del delito de tráfico ilícito, lo mismo que los dineros y efectos provenientes de
tales actividades, serán decomisados e incautados, y puestos a disposición del Estado
Dominicano.
Artículo 35.
- Los bienes sujetos a incautación especial como cuerpo del delito, sin que su
numeración sea limitativa, estarían entre:
Los bienes raíces, incluidos lo que crezca en la tierra, se le haya incorporado o se
encuentre en ella.
Los bienes muebles, tangibles e intangibles, incluidos los derechos, privilegios, intere-
ses, acciones y valores.
Todos los derechos reales sobre los bienes descritos, en el momento en que se cometa
el acto que dé lugar a la incautación, en virtud de lo dispuesto por esta Ley. Cualquiera
de esos bienes que se transmita ulteriormente a persona distinta del acusado, podrá ser
objeto de una sentencia especial de incautación en beneficio del Estado, salvo si el
adquiriente demuestra ante los tribunales competentes, que lo adquirió de buena fe, a
título oneroso, y que en el momento de la compra no tenía ninguna razón válida para
creer que dichos bienes fuesen producto del tráfico ilícito de drogas controladas.
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Todos los libros, récords, estudios e investigaciones, incluyendo fórmulas, microfilms,
cintas registradoras, diskettes de computadoras, etcétera, así como informaciones que
se usen o se proyecten usar infringiendo esta Ley.
PARRAFO I.
La propiedad incautada o retenida de acuerdo con esta Ley, no será reivindicable, sino
que se considerará bajo la custodia del Estado, a través de sus órganos competentes,
y sujeta a las órdenes y sentencias de los tribunales.
PARRAFO II.
- Los bienes decomisados e incautados, descritos en los Artículos 33, 34 y 35, sobre los
que pese sentencia irrevocable de incautación a nombre del Estado Dominicano, serán
administrados y cuando se considere necesario, distribuidos o subastados por la
Comisión Nacional de Drogas, salvo cualquier otra disposición del Poder Ejecutivo.
Artículo 36.
- Se prohíbe cualquier tipo de publicación, publicidad, o propaganda o programas a
través de los medios de comunicación, que contengan estímulos y mensajes sublimi-
nales, auditivos, impresos o audiovisuales que tiendan a favorecer el consumo y el trá-
fico ilícito de drogas y sustancias controladas.
Artículo 37.
- Se consideran insumos para fabricación de sustancias peligrosas, por lo que se
recomienda que se les preste atención especial y prioridad por parte de las autoridades,
las siguientes sustancias químicas, básicas y esenciales:
El ácido antranílico y ácido-N-acetilan-traníflico, usados para fabricar metacualona.
Fenil-2-propanona y ácido fenilacético, usados para fabricar anfetamina y metan-fetamina.
Piperidina, usada para fabricar fenciclidina (PCP).
Los alcaloideas del cornezuelo del centeno, ergotamina y ergonovina, usados para fabricar
dietilamida de ácido lisérgico (LSD).
Acetona, usada en la extracción, síntesis y elaboración de heroína y cocaína.
Éter etílico, usado en la síntesis de heroína y cocaína, anhídrico acético, usado para
fabricar heroína.
Cloruro acetílico, usado para fabricar heroína.
Artículo 38.
- Se establecen dos Categorías de Certificados de Inscripción de drogas controladas:
Clase A.
- Certificados para tener el derecho de prescribir o administrar drogas controladas, para
los médicos, dentistas o veterinarios, legalmente autorizados por la Secretaría de
Estado de Salud Pública y Asistencia Social, para quienes su uso será obligatorio, los
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que tendrán una duración de tres (3) años partir de la fecha de su expedición, debien-
do ser renovados al término de este período.
Clase B.
- Certificados para la importación, exportación, fabricación o comercio de drogas con-
troladas, que tendrán una duración de un (1) año a partir de la fecha de su expedición,
debiendo ser renovados al término de este período.
Artículo 39.
- Los Certificados de inscripción de drogas controladas, diseñados por la Dirección
Nacional de Control de Drogas, pagarán un derecho del siguiente modo:
Los de clase A, pagarán un derecho de ciento cincuenta pesos (RD$150.00).
Los de clase B, pagarán un derecho de quinientos pesos (RD$500.00).
Artículo 40.
- Para importar o exportar cualquier sustancia controlada, sus preparaciones o especiali-
dades farmacéuticas que las contengan, es indispensable un Certificado de Inscripción
Clase B. Los fabricantes, importadores, exportadores, distribuidores y vendedores de
insumos para la fabricación de sustancias controladas, deberán proveerse de un
Certificado de esta clase en las condiciones señaladas por esta Ley.
Artículo 41.
- Los importadores o exportadores de especialidades farmacéuticas o de cualquier sus-
tancia química, básica y esencial, lo mismo que los precursores inmediatos, así como
de los insumos a que se refiere el Artículo 8 de esta Ley, solicitarán por escrito al depar-
tamento correspondiente de la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia
Social, un permiso especial que se extenderá en unos formularios diseñados por la
Dirección Nacional de Control de Drogas, impresos específicamente para este fin.
PARRAFO:
Estos formularios deberán hacerse por quintuplicado, los cuales se distribuirán, uno al
importador o exportador para que éste lo envíe a la casa exportadora o importadora,
otro a la oficina encargada del control de drogas controladas en el país exportador o
importador, otro se le enviará al Colector de Aduanas, otro para el archivo de la
Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, y el otro para el archivo de
la Dirección Nacional de Control de Drogas.
Artículo 42.
- Los permisos de importación o exportación de drogas controladas o de especialidades
farmacéuticas que las contengan, así como de sus insumos, tendrán validez por un
período de noventa (90) días a partir de la fecha en que se expidan.
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Artículo 43.
- La Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social suspenderá los
Certificados de Inscripción indicados en el Artículo 38 de la presente Ley, a cualquier
persona física o moral que se encuentre acusada de violación de la presente Ley, hasta
tanto intervenga la sentencia irrevocable correspondiente.
Artículo 44.
- Cuando cualquier partida de sustancias controladas importadas no llegue dentro del
plazo concedido en el permiso, el interesado lo participará a la Secretaría de Estado de
Salud Pública y Asistencia Social, a fin de obtener un nuevo permiso.
Artículo 45.
- (Modificado por la Ley N °35-90, del 7 de junio de 1990). Las sustancias controladas en
general no podrán se introducidas al país, sino por el Puerto de Haína, el Puerto de Santo
Domingo, o el Aeropuerto Internacional de las Américas, y su uso y comercio estará rigurosa-
mente sujeto a las previsiones y prohibiciones establecidas en la presente Ley.
PARRAFO:
Las autoridades aduanales se encargarán de recibir las sustancias químicas, básicas y
esenciales, así como los precursores inmediatos, lo mismo que los insumos especifica-
dos en el Artículo 8 de esta Ley, correspondiendo a la Dirección Nacional de Control de
Drogas, verificar su cantidad, autenticidad y legalidad.
Artículo 46.
- la Aduana de Santo Domingo, entregará a la Secretaría de Estado de Salud Pública y
Asistencia Social, y contra recibo de ésta, cuyo duplicado se dará al importador intere-
sado, todas las sustancias 'controladas importadas, y los insumos a que se refiere el
Artículo 8 de esta Ley, pasando éstos a ser guardados en los depósitos destinados por
la Secretaría para tal fin. Esta entrega será hecha después que el importador haya
pagado los impuestos correspondientes, y en la persona del funcionario o empleado de
dicha secretaría especialmente autorizado por escrito para recibirla y conducirla a los
depósitos indicados, de conformidad con lo dispuesto por esta Ley.
PARRAFO:
La Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social conservará las drogas en
sus depósitos y entregará a los interesados, mediante orden de éstos dirigida por
escrito a dicha secretaría, la cantidad necesaria para cubrir sus ventas o las que nece-
sitaren usar durante un período aproximadamente de treinta días, para el despacho de
las atenciones normales de sus establecimientos. En la citada orden se mencionará los
nombres y las direcciones de las personas a quienes se destinen las cantidades de sus-
tancias controladas retiradas.
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Artículo 47.
- Es obligatorio para los fabricantes o vendedores, mantener un récord de las reducciones
en peso o volumen de drogas controladas o insumos, cuando éstas obedezcan a
acciones atmosféricas, y comunicarlo por escrito a la Secretaría de Estado de Salud
Pública y Asistencia Social, así como a la Dirección Nacional de Control de Drogas, tan
pronto sean comprobadas.
Artículo 48.
- Toda persona o entidad que despache una prescripción de un médico, dentista o veteri-
nario, deberá conservarla por el espacio de un (1) año a contar de la fecha en que la
despachó, de modo que sea fácilmente inspeccionada por la Dirección Nacional de
Control de Drogas, o por cualquier funcionario o empleado autorizado por la Secretaría
de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, y enviar una copia a dicha dependencia
gubernamental por lo menos diez (10) días después del expendio.
Artículo 49.
- Los médicos, dentistas y veterinarios provistos del Certificado Clase A, para prescribir
o administrar drogas controladas, podrán tener en su maletín de urgencia, hasta dos
ampolletas de las drogas controladas especificadas en las Categorías II, III y IV del
Artículo 8 de la presente Ley, las cuales serán reponibles por receta expedida a favor
de la persona a quien se le haya aplicado, debiendo hacer llegar esta receta a la
Secretaría de Estado de. Salud Pública y Asistencia Social, en un plazo no mayor de
diez (10) días.
Artículo 50.
- Los talonarios de Rentas Internas para la compra y venta de drogas controladas, diseña-
dos por la Dirección Nacional de Control de Drogas, sólo podrán ser manejados por las per-
sonas o establecimientos provistos de Certificados de Inscripción Clase B, y las órdenes
de compra sólo podrán ser firmadas por los propietarios o por los farmacéuticos regentes
de los establecimientos en cuestión. La firma de estas órdenes por otra persona que no
sea el propietario o el farmacéutico regente, a menos que esté avalada por un poder autén-
tico autorizado y firmado por la persona competente, será considerada como una violación
a la presente Ley.
Artículo 51.
- La Dirección General de Rentas Internas hará que se preparen y suministren a todos
los Colectores de Rentas Internas, talonarios oficiales para esas órdenes, numerados
en serie y en triplicado, encuadernados en libros o en bloques, con papel polígrafo que
deber usarse entre el impreso original y los duplicados.
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PARRAFO I.
- Los bloques o libros serán vendidos por los colectores de Rentas Internas, a un precio
que fijará la Dirección, y que no excederá a su costo de impresión, el ciento de folios, a
cualquier persona debidamente registrada, de acuerdo con las disposiciones de esta Ley.
PARRAFO II.
- La Dirección General de Rentas Internas, con la aprobación de la Secretaría de
Estado de finanzas, preparará y suministrará todos los modelos de formularios diseña-
dos por la Dirección Nacional de Control de Drogas, que se requieran para la aplicación
de esta Ley.
Artículo 52.
- La producción Industrial, extracción, síntesis, elaboración, importación, exportación,
transporte o distribución en cualquier forma, comercio, todo acto relacionado con el tráfi-
co o suministro de drogas controladas, de sus derivados o de cualquier producto reputa-
do como tal, así como los insumos previstos en el Artículo 8 de esta Ley, quedan sujetos
a lo establecido en los Tratados y Convenios Internacionales en, esta materia, suscritos y
ratificados por el país.
Artículo 53.
- Se crea bajo la dependencia de la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia
Social, una Comisión Multi-disciplinaria, que asesorará al Magistrado Procurador Fiscal
competente, constituida por un médico representante de dicha Secretaría de Estado, un
representante de la Asociación Médica Dominicana (AMD), un oficial médico de la
Dirección Nacional de Control de Drogas, y un médico representante de la Procuraduría
General de la República, para determinar la condición de adictos o fármacos-dependientes
de los consumidores que caigan en la categoría de simples poseedores de las drogas con-
troladas previstas en esta Ley, puestos a disposición de la justicia. Dicha Comisión tendrá
su asiento en la Capital de la República Dominicana, pero con jurisdicción nacional, y nom-
brará Sub-Comisiones donde sea posible designar los funcionarios mencionados. Donde
no sea posible, dicha Sub-Comisión queda constituida por el Procurador Fiscal y un médi-
co de la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social.
PARRAFO:
(Modificado por la Ley N° 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Esta comisión emitirá
su juicio y recomendará al tribunal apoderado si procede enviar al procesado a un cen-
tro público o especializado en tratamiento para la desintoxicación, rehabilitación y rein-
serción social, o someterlo a la acción de la justicia represiva.
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Artículo 54.
- La condición de adicto o fármaco-dependiente se establecerá luego de que el
Magistrado Procurador Fiscal envíe a las personas puestas a disposición de la justicia
por consumo de drogas en la categoría de simples poseedores, por ante la Comisión
Multi-disciplinaria, la que habrá de recomendar al tribunal apoderado del caso de vio-
lación a la presente Ley, la rehabilitación del acusado sometido a evaluación, y que se
determine sea adicto o fármaco-dependiente, en un centro público o privado, hasta
curación, y/o sometimiento por ante la justicia represiva, en caso de no serlo.
PARRAFO I
(Agregado por la Ley N° 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El tribunal apoderado del
caso tendrá la potestad de otorgarle un plazo de quince (15) días a la Comisión
Multidisciplinaria para rendir su informe sobre la condición de adicto del inculpado.
PARRAFO II.
- El período de rehabilitación será computado a la pena que se le imponga al violador
como sanción prevista por esta Ley, liberándolo definitivamente del cumplimiento de
ésta, en el caso de que la curación haya sido total.
PARRAFO III.
- El Magistrado Procurador Fiscal está facultado a dictar todas las medidas de seguri-
dad y vigilancia del sometido a rehabilitación, que crea oportunas.
Artículo 55.
- En ausencia de un centro de rehabilitación público, el tribunal podrá disponer que el
acusado sea internado en un centro privado, corriendo en este caso los gastos por
cuenta del acusado, sus familiares, u otras fuentes.
Artículo 56.
- Toda persona que haya cumplido los requisitos exigidos para su total rehabilitación,
deberá presentar un certificado de la institución en la cual fue internado. Dicho certifi-
cado será presentado al juez encargado del caso, el cual expedirá sentencia de descar-
go definitivo del acusado.
PARRAFO:
En caso de que la persona internada para fines de rehabilitación, no cumpla con la
misma., en ningún momento se le tomará en cuenta el tiempo que estuvo en tratamiento.
Artículo 57.
- La Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, a través de la Comisión
Multidisciplinaria que funcionará bajo su dependencia, asumirá la responsabilidad del
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tratamiento y rehabilitación de las personas adictas al uso de las drogas que se haya
ordenado su tratamiento.
Artículo 58.
- Se considerarán como delitos graves en esta Ley, y por tanto sancionados con el máxi-
mo de las penas y las multas:
El tráfico ilícita.
La fabricación o posesión de material o equipo que sea usado o se intente usar en la
producción o fabricación ilícita de drogas o sustancias Controladas.
La adquisición, posesión, transferencia o "lavado" de dinero o cualesquiera otros valores,
así como las ganancias derivadas de, o usadas en el tráfico ilícito.
PARRAFO:
Se considerará el tráfico ilícito como un delito internacional.
Artículo 59.
- El que introduzca drogas controladas al territorio nacional o las saque de él, en tráfi-
co internacional con destino a otros países, será sancionado con prisión de cinco (5) a
veinte (20) años, y con multa no menor de doscientos cincuenta mil pesos
(RD$250,000.00).
PARRAFO I:
Si como último destino del tráfico, el agente introduce drogas controladas en el territo-
rio nacional, la sanción será de treinta (30) años y multa no menor de un millón de pesos
(RD$1,000,000.00).
PARRAFO II:
Se aplicará la ley penal dominicana, a los hechos cometidos en el extranjero, cuando
dentro del territorio nacional se hubieren realizado actos encaminados a su con-
sumación, o cualesquiera transacciones con bienes provenientes de dichos delitos rela-
cionados con drogas controladas.
Artículo 60.
- Cuando dos o más personas se asocien con el propósito de cometer delitos previstos
y sancionados por esta Ley, cada una de ellas será sancionada por ese solo hecho, con
prisión de tres (3) a diez (10) años, y multa de diez mil (RD$10,000.00) a, cincuenta mil
pesos (RD$50,000.00).
330
PARRAFO:
A los promotores, jefes o dirigentes de la asociación ilícita, se les sancionará con el
doble de la prisión y multa prevista en este artículo.
Artículo 61.
- El que con fines ilícitos use o destine un establecimiento para el consumo, venta o el
suministro de drogas controladas, será sancionado con prisión de tres (3) a diez (10)
años, y multa de diez mil (RD$10,000.00) a cincuenta mil pesos (RD$50,000.00), y se pro-
cederá a la clausura temporal del establecimiento por un período de dos años. En caso
de reincidencia o si el establecimiento ha sido destinado primordial o exclusivamente para
los fines que se indican en este artículo, la clausura del mismo será definitiva.
PARRAFO:
Con igual pena de prisión será sancionado el propietario, arrendatario, administrador o
poseedor a cualquier título de un inmueble o establecimiento que lo use o proporcione
a otra persona, a sabiendas de que lo está usando o lo usará, para elaborar, almace-
nar, expender, cultivar o permitir el consumo de drogas controladas en forma ilícita.
Artículo 62.
- Quienes con fines ilícitos, compren, vendan o traspasen, a cualquier título, especiali-
dades farmacéuticas controladas por esta Ley, serán sancionados con prisión de tres
(3) a diez (10) años, y multa de diez mil (RD$10,000.00) a cincuenta mil pesos
(RD$50,000.00).
Artículo 63.
- (Suprimido por la Ley N °17-95 del 17 de diciembre de 1995).
Artículo 64.
- Los que sin permiso de la autoridad competente, cultiven plantaciones de marihuana,
o más de una (1) libra de sus semillas, así como cualquier otra planta de la que pueda
producirse cocaína, heroína o cualquier droga controlada que produzca dependencia, o
más de un cuarto (1/4) de kilogramo de semillas de dichas plantas, serán considerados
traficantes, y por tanto sancionados con prisión de cinco (5) a veinte (20) años, y con
multa de cincuenta mil (RD$50,000.00) a doscientos cincuenta mil pesos
(RD$250,000.00).
PARRAFO I:
Si la cantidad de plantas a que se refiere este artículo excedieren de veinte (20), pero
sin sobrepasar, de la cantidad de cien (100), la pena será de tres (3) a diez años (10)
de prisión, y multa de diez mil (RD$10,000.00) a cincuenta mil pesos (RD$50,000.00).
331
PARRAFO II:
Si la cantidad de plantas de que se trata en este artículo no excediera de veinte (20), la
pena será de dos (2) a cinco (5) años de prisión, y multa de dos mil (RD$2,000.00) a
diez mil pesos (RD$10,000.00).
Artículo 65.
- Los que produjeren, extrajeren, purificaren, cristalizaren, recristalizaren o sintetizaren,
parcial o integralmente las drogas controladas en la Categoría I, consignadas en el
Artículo 8 de esta Ley, serán sancionados con prisión de cinco (5) a veinte (20) años, y
multa de cincuenta mil (RD$50,000.00) a doscientos cincuenta mil pesos
(RD$250,000.00).
Artículo 66.
- Los importadores, fabricantes, distribuidores y vendedores de sustancias químicas,
básicas y esenciales, precursores inmediatos, así como de insumos autorizados para la
fabricación de sustancias controladas o de preparaciones o especialidades farmacéuti-
cas que las contengan, que no cumplan lo previsto en los Artículos 32, 40, 41, 42 y 47
de la presente Ley, serán sancionados con la suspensión por un (1) año de su Permiso
o Certificado de Importación, y multa de cincuenta mil (RD$50,000.00) a cien mil pesos
(RD$100,000.00).
Artículo 67.
- Las firmas importadoras, de fabricantes, de distribuidores y vendedores, así como far-
macias o locales comerciales autorizados para el expendio de sustancias controladas
o de preparaciones o de las especialidades farmacéuticas que las contengan, cuyas
existencias en depósitos no guarden relación con sus inventarios y registros, serán san-
cionados con la clausura temporal por un (1) año de sus establecimientos y multa de
cincuenta mil (RD$50,000.00) a cien mil pesos (RD$100,000.00).
Artículo 68.
- Los propietarios, regentes o empleados de farmacias o locales de comercio autoriza-
dos para la venta de medicamentos, que despachen estupefacientes o drogas con sus-
tancias controladas, sin llenar las formalidades previstas en los Artículos 31 y 48 de la
presente Ley, serán sancionados en la siguiente forma:
Los propietarios, con la clausura de sus establecimientos por el término de seis (6)
meses y multa de veinticinco mil (RD$25,000.00) a cincuenta mil pesos
(RD$50,000.00).
Los regentes, con un (1) año de suspensión del ejercicio profesional y multa de diez mil
pesos (RD$10,000.00).
332
Los empleados con seis (6) meses de prisión correccional, y multa de quinientos pesos
(RD$500,00).
Artículo 69.
- El que ilegalmente tenga en su poder, elementos que sirvan para el procesamiento de
cocaína o de cualquier droga que produzca dependencia, tales como éter etílico, acetona,
amoníaco, permanganato de potasio, carbonato liviano, ácido sulfúrico, diluyentes, disol-
ventes u otras sustancias que se utilicen con el mismo fin, será sancionado con prisión de
dos (2) a cinco (5) años, y multa de dos mil (RD$2,000.00) a diez mil pesos
(RD$10,000.00).
Artículo 70.
- Los médicos, dentistas y veterinarios que no cumplan con lo previsto en los Artículos
31, 38 y 49 de la presente Ley, serán sancionados con la inhabilitación para el ejercicio
de sus respectivas profesiones por el término de un (1) año, y multa de cinco mil pesos
(RD$5,000.00).
PARRAFO:
El profesional inhabilitado por infracción a esta Ley, que continúe prestando servicio o
atención médica durante el período de inhabilitación, será sancionado con prisión de
dos (2) a cinco (5) años, y multa de cinco mil (RD$5,000.00) a diez mil pesos
(RD$10,000.00).
Artículo 71.
- Quien después de cometido un delito relacionado con drogas controladas, sin haber
participado en él, ayude a asegurar a provecho, eludir las investigaciones de la autori-
dad, sustraerse a la acción de ésta o del cumplimiento de la condena, será sancionado
como encubridor, con prisión de dos (2) a cinco (5) años, y multa de dos mil
(RD$2,000.00) a diez mil pesos (RD$10,000.00).
Artículo 72.
- El que a sabiendas, por sí o por interpuesta persona, física o moral, realice con otras
personas o con establecimientos comerciales o de cualquier naturaleza, transacciones
comerciales de cualquier tipo, o suministre información falsa para la apertura de cuen-
tas o para la realización de operaciones de la misma naturaleza, con dinero proveniente
de las actividades del tráfico ilícito de drogas controladas, será sancionado como
encubridor, con prisión de dos (2) años a cinco (5) años, y multa de dos mil
(RD$2,000.00) a diez mil pesos (RD$10,000.00).
PARRAFO:
En caso de que el encubridor fuera una persona moral, se sancionará con la suspen-
333
sión por un (1) año de sus actividades, y con multa de cincuenta mil (RD$50,000.00) a
cien mil pesos (RD$100,000.00).
Artículo 73.
- Quien después de cometido un delito relacionado con el tráfico ilícito de drogas con-
troladas, sin haber participado en él, oculte, adquiera o reciba dinero, valores u objetos,
o de cualquier otro modo intervenga en su adquisición, captación u ocultación, será san-
cionado como encubridor, con prisión de dos (2) a cinco (5) años, y multa de dos mil
(RD$2,000.00) a diez mil pesos (RD$10,000.00).
Artículo 74.
- Los establecimientos comerciales o de cualquier otra naturaleza, que encubran las
actividades relacionadas con los dineros y valores provenientes del tráfico ilícito de dro-
gas controladas, violando las disposiciones de esta Ley, serán sancionados con el
cierre definitivo e irrevocable, y con multa de cien mil (RD$100,000.00) a quinientos mil
pesos (RD$500,000.00).
Artículo 75.
- Cuando se trate de simple posesión, se sancionará a la persona o a las personas
procesadas, con prisión de seis (6) meses a dos (2) años, y con multa de mil quinien-
tos (RD$1,500.00) a dos mil quinientos pesos (RD$2,500.00).
PARRAFO I:
Cuando se trate de distribuidores o vendedores, así como de intermediarios, se san-
cionará a la persona o a las personas procesadas, con prisión de tres (3) a diez (10)
años, y multa de diez mil (RD$10,000.00) a cincuenta mil pesos (RD$50,000.000)
PARRAFO II:
Cuando se trate de traficantes, se sancionará a la persona o a las personas proce-
sadas, con prisión de cinco (5) a veinte (20) años, y multa no menor del valor de las dro-
gas decomisadas o envueltas en la operación, pero nunca menor de cincuenta mil
pesos (RD$50,000.00).
PARRAFO III:
Cuando se trate de patrocinadores, se sancionará a la persona o a las personas proce-
sadas, con prisión de treinta (30) años, y multa no menor del valor de las drogas
decomisadas o envueltas en la operación, pero nunca menor de un millón de pesos
(RD$1,000,000.00).
334
Artículo 76.
- Las sumas provenientes de las multas impuestas por las violaciones a la presente Ley,
los derechos de los Certificados de Inscripción pagados, así como el producto de las
ventas de los bienes incautados, serán destinadas para financiar las actividades de las
instituciones públicas y privadas legalmente establecidas para desarrollar e implemen-
tar programas de prevención, rehabilitación y educación, contra el uso, abuso, con-
sumo, distribución y tráfico ilícito de drogas y sustancias controladas en la República
Dominicana, así como de cualquier otra institución pública o privada legalmente
establecida para la implementación de programas de salud.
PARRAFO:
(Modificado por la Ley N °17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El Consejo Nacional de
Drogas administrará y distribuirá los fondos de la siguiente manera:
15% para las instituciones dedicadas a la regeneración de los adictos a drogas.
15% para la Secretaría de Estado de Deportes, Educación Física y Recreación, para la
práctica de los deportes.
40% para la Dirección Nacional de Control de Drogas, para ser utilizados conforme sus
necesidades.
20% para el Consejo Nacional de Drogas, para prevenir y educar contra el uso de las
drogas.
El 10% para el Patronato Nacional de Ayuda a los Cuerpos de Bomberos Civiles, para
ser distribuidos entre los mismos equitativamente.
Artículo 77.
- Los cómplices en cada caso, serán sancionados con la pena inmediatamente inferior,
pero en el caso de simple posesión, se le impondrá a la persona o a las personas proce-
sadas, las mismas penas que al autor principal.
Artículo 78.
- La tenencia o posesión ilegal de cualquier fármaco controlado por esta Ley, será san-
cionada con las penas establecidas para la simple posesión, a menos que por sus can-
tidades, caiga en otras clasificaciones ya establecidas y penalizadas.
Artículo 79.
- No podrán se deportadas, repatriadas o expulsadas del país, las personas extranjeras
que se encuentren involucradas en la ejecución de cualquier delito previsto en esta Ley,
hasta tanto concluya el proceso penal, y de ser condenadas, cumplan las penas que les
sean impuestas.
PARRAFO:
Los extranjeros que hayan cumplido la condena impuesta, serán deportados o expulsa-
335
dos del país, aún cuando tuvieran domicilio legalmente establecido en el territorio
nacional, quedando prohibido su reingreso.
Artículo 80.
(Modificado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Los allanamientos, cuando se
trata de violación a esta Ley, se harán a cualquier hora del día y de la noche, con una orden
escrita y motivada del Procurador Fiscal o Procurador General de la Corte correspondiente
o del Procurador General de la República y con la presencia de un representante del
Ministerio Público.
Artículo 81.
- Ninguna persona convicta por violación a esta Ley, así como de cualquier país extranjero, o
que haya sido declarada adicta a las drogas, podrá obtener licencia de las autoridades com-
petentes, para la tenencia, o por posesión de armas de fuego, a partir de la sentencia definiti-
va e irrevocable o a partir de la declaración de adición. Los funcionarios o empleados públicos
a cargo de expedir dichas licencias, estarán impedidos de extenderlas cuando concurra algu-
na de las circunstancias ya señaladas en el solicitante.
Cualquiera de tales licencias que hubiese sido expedida con anterioridad a la sentencia o
declaración de adición, será inmediatamente cancelada por las autoridades competentes.
Artículo 82.
- La Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, a través de su departa-
mento correspondiente, cooperará con las instituciones públicas, nacionales o interna-
cionales, en todo lo concerniente a la prevención y represión del tráfico ilícito de sustan-
cias controladas y a la supresión de su abuso. Para lograr este fin, queda autorizado a:
336
Artículo 83.
- Las investigaciones de los delitos relacionados con el tráfico ilícito de drogas contro-
ladas, por parte de las autoridades competentes, podrán ser iniciadas a petición o en
cooperación del Estado en el que se hayan cometido los delitos.
PARRAFO:
Las pruebas provenientes del extranjero, relativas a la investigación de los delitos pre-
vistos y sancionados por esta Ley, serán valorados de acuerdo con las normas que
sobre el particular existan en la República Dominicana, así como las del Dercho
Internacional.
Artículo 84.
- Los Tribunales de Primera Instancia serán los competentes para conocer como juris-
dicción de primer grado, de las infracciones a la presente Ley.
Artículo 85.
- Son circunstancias agravantes del tráfico ilícito de drogas controladas, y en conse-
cuencia caerán bajo la esfera de los Artículos 56, 57 y 58 del Código Penal Dominicano:
La exportación o importación, producción, fabricación, distribución o venta de drogas
controladas o especialidades farmacéuticas, adulteradas o a base de sustancias adul-
teradas.
La participación de grupos criminales organizados.
El hecho de haberse cometido el delito en banda, o en calidad de afiliado a una banda
destinada al tráfico ilícito de drogas controladas. Si además de haber cometido el deli-
to en banda, el agente la hubiese promovido, organizado, financiado o dirigido.
El uso de armas de fuego o de la violencia.
Cuando el agente autor del delito, hubiese ingresado al territorio nacional, con artificios
o engaños o sin autorización legal, sin perjuicio del concurso de delitos que puedan pre-
sentarse.
El empleo de menores para la ejecución del delito, así como de personas con trastornos
mentales o habituados, lo mismo que imputables.
El hecho de haber cometido el delito en un inmueble que se tenga a título de tutor o
curador.
Cuando el que cometa el delito ostente un cargo público, ó fuese funcionario o servidor
público encargado de la prevención o investigación de cualquier delito, o tuviese el
deber de aplicar penas o de vigilar su ejecución, o tuviese la profesión de educar o se
desempeñase como tal en cualquiera de los niveles de enseñanza, o fuese profesional
que ejerciese cualquier profesión sanitaria.
El uso de escuelas y universidades, así como de sus alrededores, hasta una distancia
de veinticinco (25) metros a partir de donde terminen los límites de la entidad, de insti-
tuciones públicas o privadas, como cárceles, cuarteles, oficinas, de entidades dedi-
337
cadas a la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de adictos a las drogas,
de instalaciones asistenciales, culturales, deportivas, recreativas, vacacionales, de
lugares donde se celebren espectáculos o diversiones públicas o actividades similares,
etcétera, como centros de consumo o de operaciones.
Las reincidencias.
PARRAFO I:
La reincidencia se sancionará con el máximo de la pena que corresponde de acuerdo
con la clasificación de la violación cometida.
PARRAFO II:
Cuando se trate de traficantes o patrocinadores reincidentes, se sancionarán además
en cada caso, con el doble de la pena o multa prevista para los mismos, sin que en
ningún caso la prisión pueda exceder de treinta (30) años.
Articulo 86.
- Los culpables de violación a las disposiciones de esta Ley, ya sean personas físicas
o morales, no gozarán del beneficio de las circunstancias atenuantes establecidas en
el Artículo 463 del Código Penal Dominicano.
Artículo 87.
- Para los fines de esta Ley, no tendrán aplicación las Leyes que establecen la Libertad
Provisional Bajo Fianza, la Libertad Condicional y el Perdón Condicional de la Pena.
Artículo 88.
- En los casos en que las sanciones por la violación a las disposiciones de esta Ley lleven
prisión, o multa, o ambas penas a la vez, la prisión preventiva será siempre obligatoria.
Artículo 89.
- Una (1) copia de todas las sentencias dictadas por los tribunales competentes, en
cada caso de violación a la presente Ley, deberá ser enviada inmediatamente a la
Dirección Nacional de Control de Drogas para los fines estadísticos correspondientes.
Artículo 90.
- Por la presente Ley se crea el pergamino de reconocimiento público que se titula
RECONOCIMIENTO NACIONAL DE LUCHA CONTRA LAS DROGAS, que lo podrá
otorgar el Poder Ejecutivo a su discreción, luego de ponderar las recomendaciones de
los organismos competentes, a las personas físicas o morales que se destaquen acti-
vamente en la implementación de programas preventivos y campañas de lucha contra
las drogas en beneficio de la sociedad dominicana.
338
Artículo 91.
- Las donaciones que hagan las personas físicas o morales para la realización de pro-
gramas preventivos o campañas de lucha contra las drogas que lleven a cabo institu-
ciones legalmente establecidas para tal fin, serán consideradas como gastos
deducibles de la renta neta imponible conforme a la Ley N° 5911 del 22 de mayo de
1962 y cualquier otra Ley que la modifique.
Artículo 92.
(Modificado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Las drogas decomisadas
por violación a esta Ley, deberán ser destruidas, pero previamente deberá ser analiza-
da y comprobada su calidad y grado de pureza.
La destrucción deberá realizarse en la capital de la República, en presencia de un rep-
resentante del Ministerio Público, de la Secretaría de Estado de Salud Pública y
Asistencia Social, de la Asociación Médica Dominicana, de la Dirección Nacional de
Control de Drogas y del Consejo Nacional de Drogas, con acceso a invitación a la pren-
sa y al público en general, levantándose un acta que deberá ser firmada por los repre-
sentantes de las instituciones mencionadas, a quienes se les entregará una copia del
documento.
Artículo 93.
- Aparte de las autoridades mencionadas en la presente Ley, queda a cargo de la
Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas de la Nación, velar por el fiel cumplimiento
de las disposiciones de la misma.
Artículo 94.
- Queda a cargo del Poder Ejecutivo la REGLAMENTACION para la viabilización, eje-
cución y aplicación de esta Ley.
Artículo 95.
- La presente Ley deroga y sustituye la N ° 168 del l2 de mayo de 1975, así como
cualquier Ley o disposición legal que le sea contraria.
Artículo 96.
(Agregado por la Ley N° 35-90, del 7 de junio de 1990).- Será suspensiva la ejecución
de la sentencia dictada en materia de Hábeas Corpus, cuando contra ella se interpon-
ga el recurso ordinario de la apelación o el extraordinario de la casación, siempre que
la misma recaiga sobre cualquiera de los delitos previstos y sancionados por la Ley N°
50-88, del 30 de mayo del año 1988.
339
Artículo 97.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El procedimiento de los deli-
tos y crímenes definidos en esta Ley se regirá, con relación a los medios de prueba, por
lo dispuesto en los artículos subsiguientes, aplicándose subsidiariamente al Código de
Procedimiento Criminal.
Artículo 98.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El análisis de la sustancia
decomisada se realizará en presencia de un representante del Ministerio Público espe-
cialista en Análisis Químico.
Artículo 99.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El que a sabiendas, por
omisión o comisión convierta o transfiera bienes que sean producto de un delito de trá-
fico ilícito de drogas controladas o delitos conexos, previstos en esta Ley, será san-
cionado con reclusión de dos (2) a cinco (5) años y multa de RD$50,000.00 (Cincuenta
Mil pesos con 00/(100) a RD$100,000.00 (Cien Mil Pesos con 00/100).
Artículo 100.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Toda persona que adquiera,
posea, transfiera, tenga o utilice bienes a sabiendas de que tales bienes hayan sido pro-
ducto de un delito de tráfico ilícito de drogas controladas o delitos conexos previsto en
esta Ley, será sancionada con reclusión de dos (2) a cinco (5) años y multas de
RD$50,000.00 (Cincuenta Mil pesos) a RD$100,000.00 (Cien Mil Pesos).
Artículo 101.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Toda persona que a sabien-
das ocultase, encubriese o impidiere la determinación real de la naturaleza, origen, ubi-
cación, destino, movimiento o propiedad de bienes o de derechos relativos a tales bienes
que hayan sido producto de un delito de tráfico ilícito de drogas o delitos conexos pre-
vistos en esta ley, será sancionada con reclusión de dos (2) a cinco (5) años y multas de
RD$50,000.00 (Cincuenta Mil pesos) a RD$100,000.00 (Cien Mil pesos).
PARRAFO:
Son delitos conexos para los fines de la presente Ley las acciones o actividades
establecidas en los Artículos 99, 100 y 101, encaminadas a facilitar el lavado de dinero.
Artículo 102.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Cuando dos o más personas
se asocian para participar en la comisión de los delitos previstos o sancionados por los
340
artículos 100 y l01 de esta Ley, cada una de ellas será sancionada por este hecho, con
reclusión de tres (3) a diez (10) años y multa de RD$100,000.00 (Cien Mil pesos) a
RD$250,000.00 (Doscientos Cincuenta Mil pesos).
Artículo 103.
- (Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- En todos los casos, la ten-
tativa de las infracciones señaladas precedentemente será castigada como el crimen
mismo.
Artículo 104.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Las instituciones financieras
que, con conocimiento de sus organismos rectores o las personas que tienen el poder
de dirigir la política y las operaciones de la misma y deliberadamente violen las disposi-
ciones de los artículos 99, 100, 101 y 102 y cualesquiera otras previsiones de esa Ley,
independientemente de la responsabilidad penal que pudiera corresponderle a las per-
sonas responsables por los delitos de tráfico ilícito de drogas, será sancionada con
multa de RD$100,000.00 (Cien Mil pesos oro) a RD$250,000.00 (Doscientos Cincuenta
Mil pesos oro). Cuando el caso lo ameritare el tribunal competente recomendará a la
Junta Monetaria, vía la Superintendencia de Bancos, la cancelación de la licencia que
ampara las operaciones de la institución sancionada Con la misma pena serán san-
cionados personalmente los empleados, funcionarios, directores y otros representantes
autorizados que, actuando como tales deliberadamente violen las disposiciones de los
textos legales arriba citados.
Artículo 105.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El tribunal apoderado de un
caso de lavado dictará en cualquier momento sin notificación ni audiencia previa, una
orden de incautación o congelación provisional, con el fin de preservar la disponibilidad
de los bienes, productos o instrumentos relacionados con el tráfico ilícito y otros delitos
conexos previstos en esta Ley.
PARRAFO I:
Las instituciones financieras que entreguen fondos en virtud de esta disposición, quedarán descar-
gadas frente a personas afectadas por la sola entrega a las autoridades de fondos incautados.
PARRAFO II:
Los bienes decomisados o incautados por la Dirección Nacional de Control de Drogas
pasarán de inmediato, bajo inventario, a la custodia y cuidado del Consejo Nacional de
Drogas hasta que intervenga sentencia que haya adquirido la autoridad de la cosa irrevo-
cablemente juzgada.
341
Artículo 106.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Serán decomisados todos
los bienes, productos o instrumentos relacionados con un delito de tráfico ilícito o deli-
tos conexos y si no pudieran ser decomisados como resultado de cualquier acto u
omisión del condenado, el tribunal ordenará el decomiso de cualesquiera otros bienes
del condenado por un valor equivalente u ordenará que pague una multa por dicho
valor.
Artículo 107.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El tribunal competente ordenará
la devolución de los bienes, productos o instrumentos al reclamante de buena fe, siempre
que tenga un interés jurídico legítimo y no se le pueda imputar ninguna falta o participación
directa o indirecta en un delito de tráfico ilícito de drogas o delitos conexos.
Artículo 108.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Los bienes o instrumentos
confiscados por sentencia definitiva e irrevocable que no deben ser destruidos, el
Consejo Nacional de Drogas dispondrá su venta en pública subasta adjudicando éstos
al mejor postor y último subastador. Los fondos así obtenidos se distribuirán conforme
a lo establecido en el Párrafo del Artículo 76.
Artículo 109.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Las instituciones financieras
estarán obligadas a proporcionar a los tribunales, a la Dirección Nacional de Control de
Drogas y a los organismos de seguridad del Estado, vía la Superintendencia de Bancos,
en el más breve plazo, cualquier información que le sea requerida relacionada con la
comisión de los delitos previstos en los artículos 99, 101, 102, 103, 104, y cualesquiera
otros previstos en la presente Ley.
PARRAFO I:
Las instituciones financieras, de crédito, las empresas transportistas de dinero o reme-
sadoras no reguladas por los organismos rectores del sector financiero proporcionarán las
informaciones requeridas por el tribunal, la autoridad competente o la Dirección Nacional
de Control de Drogas a través de la administración tributaria en el más breve plazo.
PARRAFO II:
La violación al presente artículo será condenada con las penas y multas establecidas
en el Artículo 104 de la presente ley.
Artículo 110.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de' 1995).- B tribunal apoderado cooperará
342
con el tribunal competente, de otro Estado, a fin de prestarse asistencia mutua en los casos
de delitos de tráfico ilícito conexos dentro de los límites de sus respectivos ordenamientos
jurídicos y de las normas de derecho internacional.
Artículo 111.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El tribunal competente podrá
recibir una solicitud de un tribunal o autoridad competente de otro Estado para identi-
ficar, detectar, incautar o decomisar bienes, productos o instrumentos relacionados con
un delito de tráfico ilícito o delitos conexos y podrá disponer las medidas necesarias,
incluidas las señaladas en esta Ley, siempre que dicha solicitud esté acompañada de
una orden judicial o sentencia expedida por la autoridad y de acuerdo a las normas
legales de la República Dominicana y del Derecho Internacional.
Artículo 112.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El tribunal podrá recibir o
tomar medidas apropiadas sobre una solicitud de un tribunal o autoridad competente de
otro Estado para la prestación de asistencia en relación con una investigación o proce-
so de carácter penal referente a un delito de tráfico ilícito o delitos conexos.
Artículo 113.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- Las disposiciones legales
referentes al secreto o reserva bancaria no serán un impedimento para el cumplimien-
to de la presente Ley cuando la información sea solicitada por el tribunal competente
por intermedio de los organismos rectores del sector financiero.
Artículo 114.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- El que a sabiendas, por si
o interpósita persona divulgue las informaciones o traicione la confidencialidad de la
misma, con la finalidad de eludir las investigaciones de la autoridad competente relati-
vas a los delitos de lavado de dinero, se sancionará con la pena de reclusión de dos (2)
a cinco (5) años y multa de RDS10,000.00 (Diez Mil pesos Oro) a RD$50,000.00
(Cincuenta Mil pesos Oro).
Artículo 115.
(Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- No estará sujeto a la
incautación para fines de confiscación, un bien mueble o inmueble arrendado o vendi-
do bajo venta condicional por una persona física o moral acreditada en el país que sea
usado en la comisión de un delito de tráfico ilícito de drogas, a menos que la autoridad
competente pruebe la existencia de un vinculo delictivo entre el propietario del bien y la
persona que lo alquile o venda.
343
Artículo 116.
(Transitorio). (Agregado por la Ley 17-95 del 17 de diciembre de 1995).- La presente
Ley entrará en vigencia conjuntamente con el Reglamento de aplicación y ejecución dis-
puesto por el Artículo 94 de la Ley 50-88, sobre Drogas y Sustancias Controladas de la
República Dominicana.
DADA en la Sala de Sesiones del Senado, Palacio del Congreso Nacional, en Santo
Domingo de Guzmán Distrito Nacional, Capital de la República Dominicana, a los cinco
días del mes de. mayo del año mil novecientos ochenta y ocho, año 145° de la
Independencia y 125° de la Restauración,
JOAQUIN BALAGUER
Presidente de la República Dominicana
JOAQUIN BALAGUER
344
Reglamento
de la Ley 50-88
sobre Drogas y
Sustancias Controladas
345
346
DECRETO NO. 288-96
que establece el Reglamento de la Ley 50-88 sobre Drogas y
Sustancias Controladas de la República Dominicana.
VISTA: LA LEY 50-88, del 30 de mayo de 1988 sobre Drogas y Sustancias controladas en
la República Dominica y la Ley No.17-95, del 17 de diciembre de 1995, que la modifica.
DECRETO:
Se aprueba el Reglamento que se copia a continuación:
REGLAMENTO DE LA LEY 50-88 SOBRE DROGAS Y SUSTANCIAS CONTROLADAS
EN LA REPÚBLICA DOMINICANA.
CAPÍTULO I
DISPOSICIONES GENERALES
"Este Reglamento se conocerá y podrá citarse como Reglamento No.1 de Drogas y
Sustancias Controladas".
Art. 1
El propósito de este Reglamento tiene la finalidad de regular la acciones tendientes a
combatir y erradicar la producción, oferta y tráfico ilícitos y uso indebido de Drogas y
Sustancias Controladas en la República Dominicana, así como establecer las normas y
procedimientos necesarios para el control de fabricación y dispensación de drogas y
sustancias controladas para la fijación de derechos razonables a pagarse por concepto
347
de registro requerido, de conformidad con la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias
Controladas de la República Dominicana y sus modificaciones.
Art. 2.-DEFINICIONES
Salvo indicación expresa en contrario, las siguientes definiciones se aplicarán con
exclusividad a todo el texto del siguiente Reglamento.
2.- Por "Clase Básica" en cuanto a las sustancias numeradas en los Arts. 8 y 38 de la
Ley 50-88.
3.- Por "Decomiso" se entiende la privación con carácter definitivo de algún bien
decisión de un tribunal.
8.- Por "Delitos Conexos" se entienden las acciones o actividades establecidas en los
Arts. 99 y 100 y 101 de la Ley 50-88 y sus modificaciones.
9.- Por "Envase comercial" cualquier frasco, cápsula, tubo, ampollas u otro envase que
348
contenga Sustancias Controladas para su distribución o dispensación. Este término es
directamente a la sustancia y no se refiere al empaque.
12.- Por "Fabricante" la persona que está autorizada para fabricar una droga o una sus-
tancia controlada.
14.- Por "Fiscalizador" funcionario o empleado de la sección que ha sido designado por
el Director de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
15.- Por "Incautación" se entiende la custodia o control temporal de bienes por man-
damiento expedido por un tribunal o la Dirección Nacional de Control de Drogas, luego
de cumplidos los requisitos legales correspondientes.
16.- Por "Instrumento" se entiende los objetos utilizados o destinados a ser utilizados
con la intención de cometer el delito de tráfico ilícito o delitos conexos.
17.- Por "Importador" cualquier persona que en República Dominicana importe o sea
para la importación de Drogas y Sustancias Controladas.
349
21.- Por "Ley" la Ley 50-88 sobre Drogas y sustancias Controladas de la República
Dominicana y sus modificaciones.
23.- Por "Nombre" la designación química específica o el nombre oficial, común o usual
o de marca de una sustancia controlada.
25.- Por "Persona" se entiende a todos aquellos entes naturales o jurídicos susceptibles
de adquirir derechos o contraer obligaciones; tales como una corporación, una sociedad
colectiva, un fideicomiso, una sucesión, una sociedad anónima, una asociación, una
empresa conjunta u otra entidad o grupo registrado o no como sociedad o comercial.
26.- Por "Producto" se entiende los bienes obtenidos o derivados directamente o indi-
rectamente, de la comisión de un delito de tráfico ilícito o delito conexos.
27.- Por "Propiedad" bienes sujetos a confiscación, cualquier acción de retención bajo la Ley.
29.- Por "Profesional Individual" el médico, el dentista, veterinario, que esté autorizado
por un registro expedido por el Director para dispensar sustancias controladas en el
curso de su práctica en República Dominicana. No incluye a un farmacéutico, una far-
macia o un profesional institucional.
30.- Por "Profesional Institucional" un hospital o institución con licencia, que esté autoriza-
do por un registro expedido por el Director para dispensar sustancias controladas. EI tér-
mino "Profesional Institucional", no incluye las farmacias.
350
31.- Por "Perjudicado" cualquier persona adversamente afectada por cualquier
reglamento, orden, resolución o acción del Director de la División de Drogas y Farmacias
de la Secretaria de Estado de Salud Pública y Asistencia Social y/o la dirección Nacional
de Control de Drogas.
33.- Por "Registrante" cualquier persona que esté registrada de acuerdo con la Ley y
sus Reglamentos.
34.- Por "Rótulo o Etiqueta" cualquier despliegue de material escrito, impreso sobre el
envase comercial de una sustancia controlada por el fabricante o por el dispensador.
35.- Por "Registro" El Certificado clase A que expida la Dirección Nacional de Control de
Drogas a través de la División de Drogas y Farmacias para tener el decreto de prescribir o
administrar drogas controladas a los médicos, dentistas y veterinarios, tendrá una duración
de tres años a partir de su fecha. El Certificado Clase B "anual" que expida la Dirección
Nacional de Control de Drogas a través de la División de Drogas y Farmacias autorizando
la fabricación, distribución dispensación o investigación con sustancias controladas.
"Registro" significa el certificado de registro que se expide al vencimiento del original.
36.- Por "Tráfico Ilícito" se entiende los delitos enumerados en la Ley 50-88 sobre
Drogas y sustancias Controladas en la República Dominicana y sus modificaciones, de
fecha 30 de mayo de 1988.
351
Art. 4.- DE LOS MIEMBROS
1.- Para ser miembro de la Dirección Nacional de Control de Drogas, se requieren,
además de los requisitos enumerados en los Arts. Nos.12 y 13 de la Ley 50-88 sobre
Drogas y sustancias Controladas en la República Dominicana, los siguientes:
a) Ser ciudadano dominicano, hombre o mujer, en el pleno goce de sus derechos civiles
y políticos.
b) Haber cumplido los dieciocho (18) años de edad, c) Ser bachiller, comprobado por el
certificado correspondiente, que deberá anexarse al expediente de ingreso, a excep-
ción del personal doméstico y limpieza.
f) No haber sido condenado por crimen o delito, ni haber sido excluido de otro servicio
público por mala conducta.
Art. 5. - CATEGORÍAS
1.- La(s) CATEGORÍA(s) en que caerá(n) (el) o (los) que negocien ilícitamente con las
drogas y sustancias controladas dependerá de la cantidad y tipo de droga o sustancia
controlada que se logre incautar al sujeto, tomándose como base para determinarlas,
las medidas de peso, en unas utilizando un cuerpo llamado kilogramo y en otras uti-
lizando una balanza para determinar el peso de las mismas.
2.- EQUIVALENCIAS.
a) Un (1) gramo equivale a mil (1000) miligramos.
b) Una (1) libra equivale a cuatrocientos cincuenta y cuatro (454) gramos.
c) Una ( 1 ) onza equivale a veintiocho punto treinta y ocho (28.38) gramos.
d) Un (1) kilo equivale a mil (1000) gramos. e) Un (1) kilo equivale a dos punto dos (2.2) libras.
Una (1) tonelada equivale a dos mil (2000) libras.
Cuando se trate de cualquier otra sustancia alucinógena, lo mismo que el opio y sus
derivados en la cantidad que fuere, se clasificará, a la persona o personas procesadas
352
como traficante en base a lo establecido por el Art. 7 de la Ley 50-88 sobre Drogas y
Sustancias Controladas en la República Dominicana y sus modificaciones.
3.- Cuando circunstancias especiales así lo ameritan, este plazo se podrá ampliar en
veinticuatro (24) horas, a solicitud de los oficiales que hubieren incautado las aludidas
controladas.
Dicho análisis deberá ser realizado a pena de nulidad en presencia de un miembro del
Ministerio Público, quien visará el original y copias del mismo.
5.- Dicho protocolo de análisis tendrá el valor probatorio de conformidad a las disposiciones
establecidas en los Art. 87 al 90 del Código de Procedimiento Criminal Dominicano.
6.- Realizado el análisis a que se refiere el inciso tercero de este artículo, las drogas y
sustancias controladas, deberán ser incineradas de conformidad con la Ley 50-88 sobre
Drogas y Sustancias Controladas en la República Dominicana y sus modificaciones.
Del procedimiento administrativo de incineración o destrucción se levantará acta, copia
de la cual deberá hacerse llegar al tribunal competente a más tardar diez (10) días de
haberse producido.
353
Art. 7.- ADMINISTRACIÓN, CONTROL, INCAUTACIÓN Y DEVOLUCION DE BIENES
INCAUTADOS.
1.- Los bienes muebles e inmuebles, los instrumentos, los equipos y los demás objetos
que se utilicen en la comisión de los delitos provistos en la Ley 50-88 sobre Drogas y
Sustancias Controladas en la República Dominicana y sus modificaciones, incautados
en virtud de los Artículos 33, 34 y 35 de la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias
Controladas en la República Dominicana y sus modificaciones, lo mismo que los diver-
sos bienes y valores provenientes de tales acciones, serán administradas por la
Dirección Nacional de Control de Drogas, en atención a lo establecido en el literal e) del
Artículo 10 de la mencionada Ley, hasta tanto recaiga sobre ellos sentencia definitiva e
irrevocable de decomiso.
Cuando resulte necesario, la Dirección Nacional de Drogas deberá asegurar los bienes
incautados, con el fin de garantizar un posible resarcimiento por deterioro o destrucción.
5.- El Consejo Nacional de Drogas, se encargará de dar fiel seguimiento a las sentencias
definitivas e irrevocables que dicten los tribunales competentes, para los casos de
decomiso.
6.- Cuando los bienes muebles e inmuebles, los instrumentos, los equipos y los demás
objetos que se utilicen en la comisión de los delitos previstos en la Ley 50-88 sobre
Drogas y Sustancias Controladas de la República Dominicana y sus modificaciones, no
fueren propiedad de los implicados serán devueltos a sus legítimos propietarios, siem-
pre y cuando se demuestre que no actuó con responsabilidad. Asimismo se devolverán
aquellos bienes que el tribunal apoderado, ordene su devolución por medio de senten-
cia definitiva que adquiera la autoridad irrevocable de la cosa definitivamente juzgada.
354
7.- El procedimiento en el inciso sexto será el siguiente:
9.- Si el tribunal ordenara el decomiso de los bienes referidos anteriormente, por medio
de sentencia definitiva e irrevocable, estos deberán ponerse a la orden del Consejo
Nacional de Drogas para que disponga de ellos de conformidad con el Artículo 76 de la
Ley 50- 88 sobre Drogas y Sustancias Controladas de la República Dominicana y sus
modificaciones.
b) El Fiscal, deberá a su vez contar con la debida autorización por escrito del
Procurador Fiscal o Procurador General de la Corte correspondiente o del Procurador
General de la República, para realizar la requisa, cuando se trate del período de tiem-
po comprendido entre las seis (6) de la tarde a las seis (6) de la mañana del otro día.
d) El encargado del allanamiento deberá hacer uso de su juicio para determinar el número
de ayudantes que necesitará para que lo acompañen en las acciones de la requisa. El
resto del personal lo usará como parte de la seguridad perimetral de las viviendas, lugares
públicos, y de los medios de transporte.
355
e) El encargado del allanamiento deberá siempre hacerse acompañar de un miembro
de la familia que mora la vivienda, de un empleado del lugar público o de un tribunal en
caso de barcos o aviones, en cada una de las diferentes áreas cuando están siendo
requisadas. El resto de la familia, empleados o tripulantes debe ser apartado y puesto
bajo su seguridad.
f) El encargado del allanamiento debe leer el acta de allanamiento y verificar que todo
está completo y correcto antes de estampar su firma en el referido documento.
2.- Cuando la Dirección Nacional de Control de Drogas actúe en caso de flagrante deli-
to de tráfico ilegal de drogas y sustancias controladas, cometido mediante el uso de
aeropuertos o pistas de aterrizajes de propiedad privada, podrá ocupar estos, y la licen-
356
cia de funcionamiento de los mismos será cancelada por la autoridad competente, tem-
poral o permanentemente, según el grado de partición de su propietario en la comisión
del delito.
5.- Igual sanción se impondrá cuando establecido que dichos locales o centros de diver-
sión hayan sido utilizados retiradamente para la realización de delitos contemplados en
la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas de la República Dominicana y sus
modificaciones, aún cuando los dueños o administradores, no hay participado en la
comisión de los delitos.
CAPÍTULO II
DISPOSICIONES GENERALES DE LA SECCION DE QUIMICOS Y PRECURSORES
Art. 3.- AUTORIZACIÓN PARA ACTUAR. Ninguna persona podrá participar en activi-
dades para las cuales se requiere un registro hasta que se apruebe su solicitud de registro
y se le otorgue el correspondiente certificado.
Art. 4.- QUIÉNES DEBEN REGISTRARSE. Deberá obtener anualmente una certifi-
cación de registro a tenor con este Reglamento:
357
1.- Toda persona que se dedique o desee dedicarse a la fabricación, distribución o dis-
pensación de cualquier sustancia controlada, a menos que esté exento de tal requisito
por la Ley 50-88 o por este Reglamento.
2.- Los laboratorios de la División de Drogas y Farmacias para llevar a cabo análisis quími-
cos, que no sean pruebas de campo u otras pruebas químicas preliminares realizadas por
personal exento de registro.
3.- Toda nave marítima y toda aeronave debidamente registrada en Aeronáutica Civil,
que tenga oficina en República Dominicana para poder dispensar y tener sustancias
controladas a bordo.
De tener su registro, a tenor con la Ley 50-88 y este Reglamento rendirá a la División de
Drogas y Farmacias un informe al 31 de diciembre de las sustancias controladas adquiridas
en República Dominicana, las dispensadas y el balance en su poder a esa fecha.
1. Todas aquellas personas exentas y/o exoneradas por la Ley 50-88 o este reglamento.
2. Cualquier nave marítima activa en el comercio internacional, o cualquier aeronave
comercial debidamente registrada en Aeronáutica Civil que no tenga oficinas en
República Dominicana, si las sustancias controladas que mantenga a bordo son
adquiridas por y guardas y dispensadas bajo la supervisión de:
Cuando una nave marítima o aeronave comercial sin oficina en República Dominicana
necesite sustancias controladas, el médico licenciado en República Dominicana, el ofi-
cial médico debidamente acreditado, el capitán o el piloto según fuese el caso, adquirirá
las sustancias controladas debidamente obteniendo la correspondiente autorización de
la Dirección Nacional de Control de Drogas, el cual se presentará a la División de
358
Drogas y Farmacias quien expedirá un certificado "Clase B" autorizando el que sean
adquiridas las sustancias controladas de un distribuidor registrado en la República
Dominicana.
c) El hospital u otra institución que lo emplee haya verificado que el profesional individual
está calificado para dispensar (recetar, prescribir o administrar) sustancias controladas en
República Dominicana.
e) El hospital u otras instituciones mantenga una lista al día de las codificaciones inter-
nas con el nombre de los profesionales individuales correspondientes, la que estará
siempre disponible para inspección por la División de Drogas y Farmacias, o al ser
solicitada por otro registrante o por la Dirección Nacional de Control de Drogas que vela
por el cumplimiento de la Ley 50-88 con el propósito de verificar la autoridad del profe-
sional individual que receta.
4.- Cualquier Médico del Ejército, la Fuerza Aérea, la Marina de Guerra, la Policía Nacional
que esté autorizado para dispensar (recetar o administrar, pero no solicitar o comprar) sus-
tancias controladas en el curso de sus deberes oficiales. Tales Oficiales o Funcionarios
seguirán los procedimientos indicados en este Reglamento en cuento a recetas, pero iden-
tificarán la rama del servicio y el número de identificación de servicio del Oficial que emite
la receta, en vez del número de registro que se pide en las hojas de recetas.
359
5.- Si algún funcionario oficial o empleado exento por la División de Drogas y Farmacias
participa además como individuo particular en cualquier actividad para la cual exige el
registro, tal Oficial Médico deberá obtener registro para esa actividad privada.
b) Todo solicitante que solicite registro para fabricar una sustancia controlada no tendrá
que divulgar detalles técnicos que considere como un secreto comercial incluyendo
temperatura, presión, volumen y el catalítico utilizado para ayudar en el proceso, pero
tendrá que identificar cada sustancia que se utiliza en o que se deriva de las etapas
sucesivas de la fabricación, con el de notificarle a la División de Drogas y Farmacias y
la Dirección Nacional de Control de Drogas sobre los Precursores narcóticos y produc-
tos secundarios.
c) Una persona registrada para dispensar con el propósito de hacer investigaciones con
sustancias controladas de acuerdo con el Art. 4 de la Ley 50-88 deberá someter:
1. Un protocolo de investigación que incluirá:
a. La duración en tiempo de la investigación.
b. La sustancia controlada o precursores que se utilicen.
c. Evidencia de la competencia profesional de los investigadores.
2. Los interesados, como información confidencial y sujeto a las peticiones del Artículo
30 de la Ley 50-88.
d) Toda solicitud de registro para fabricar una sustancia controlada narcótica, que
envuelva un proceso de síntesis química (ya se derive o no de materiales narcóticos),
vendrá acompañada de un resumen del proceso de síntesis. Dicho resumen debe:
2. Identificar las sustancias que se formarán como resultado de cada etapa sucesiva
del proceso.
360
Art. 7.- REGISTRO PARA LOCALES SEPARADOS
Se requiere un registro para cada local o establecimiento principal de negocio donde se
fabriquen, distribuyan o dispensen sustancias controladas.
2. El consumidor final.
3. Los visitadores médicos que podrán mantener la existencia de muestras a ser dis-
tribuidas en un período no mayor de 30 días, el almacenaje se hará en gabinete de
metal con llave.
361
tar los Formularios Clase B/A, los cuales podrán obtenerse en la División de Drogas y
Farmacias y/o Dirección Nacional de Control de Drogas.
a) A cada persona registrada le serán enviados los formularios de registro por correo,
aproximadamente 60 días antes del vencimiento de su registro. Cualquier persona que
no recibiera tales formularios 45 días antes de la fecha de vencimiento de su registro,
deberá notificarlo inmediatamente a la División de Drogas y Farmacias y/o Dirección
Nacional de Control de Drogas.
b) Cada solicitud de registro deberá incluir toda la información que se solicite en los
formularios a menos que el encasillado no sea aplicable, incluyendo su número de
licencia, nombre del establecimiento que solicite su renovación.
c) Cada solicitud anexo u otro documento sometido como parte de una solicitud estará
firmado por el solicitante, si es un individuo, o por el Presidente o Secretario, si se trata
de una corporación. Una persona previamente registrada podrá autorizar a uno o más
individuos a firmar solicitudes de registro por él, cumplimiento y radicando en la División
de Drogas y Farmacias el Formulario clase B y 20-65. Este formulario se le facilitará por
la División de Drogas y Farmacias y estará firmado por la persona que esté autorizada
para firmar las solicitudes, e incluirá la firma de la persona a quien se le esté autoriza-
do a firmar solicitudes, como aceptación de la delegación. La autorización tendrá
validez hasta tanto una de las partes le revoque. La intención de revocar deberá notifi-
carse por escrito y no será efectiva hasta tanto reciba la aprobación de la División de
Drogas y Farmacias.
362
Art.11.- ENMIENDAS A SOLICITUDES, RETIRO.
Una solicitud de registro podrá enmendarse o retirarse, al aceptarse una solicitud para
radicación si el solicitante pide que se le devuelva, cuando dicha correspondencia se
envía por correo certificado o registro con acuse de recibo, a la dirección que aparece
en la solicitud se considera que el solicitante retira la solicitud.
d) Todo registro se expedirá únicamente a nombre del dueño y/o razón social y nunca
a nombre del local o establecimiento, excepto en el caso de instituciones del Estado, en
cuyo caso se expedirá a nombre de la institución.
363
a) El Director de la Dirección Nacional de Control de Drogas podrá extender cualquier
registro bajo las circunstancias indicadas en este artículo (aunque el registrante no haya
solicitado su registro por lo menos 45 días antes del vencimiento del registro vigente)
motu propio o a petición del solicitante, cuando determine que tal extensión no será per-
judicial a la salud yseguridad pública y que el solicitante cumple con el requerido por la
ley y por este Reglamento.
364
b) Que no cuente el establecimiento con las facilidades necesarias y los requerimientos
legales exigidos por la Secretaria de Estado de Salud Pública y Asistencia Social.
c) Todo registrante cuyo registro sea suspendido bajo este artículo podrá solicitar una
vista pública con relación a la revocación o suspensión de su registro para una fecha ante-
rior a la indicada en la orden de mostrar causa. La Secretaría de Estado de Salud Pública
y Asistencia Social al conocerla fijará la fecha para la misma a la brevedad posible.
365
Art. 22.- FORMA DE LOS FORMULARIOS. Los formularios de recetas se expedirán
en bloques de 100 originales.
Estos formularios deberán ser prenumerados en secuencia para cada profesional y lle-
varán su nombre, dirección y número de registro, disponiéndose que cuando se trate de
un profesional individual se incluirá además su especialidad. Estos datos no podrán ser
alterados sin la previa autorización de la Dirección de Control de Drogas.
366
Art. 27.- DESGLOSE FORMULARIO 2064.
Los Talonarios de formularios de recetas oficiales 2064 serán encuadernados en blo-
ques con papel polígrafo que deberán distribuirse de la siguiente manera:
a) Original a la farmacia.
b) Duplicado al interesado.
c) Triplicado al profesional.
d) Cuadruplicado a la Dirección Nacional de Control de Drogas.
e) Quintuplicado a la Secretaría de Salud Pública.
Los formularios 2064 serán de uso exclusivo del profesional y no podrán transferirse ni
cederse a ningún título.
CAPÍTULO III
DISPOSICIONES GENERALES DE PRODUCTOS SICOTRÓPICOS.
Art. 2.- Las referencias que las leyes, reglamentos, decretos, productos farmacéuticos
que causan dependencia, se entenderán formuladas a los productos Psicotrópicos al
presente Reglamento.
367
Por parte a los servicios de salud les corresponderá el control de las actividades de
preparación, transporte, transferencia a cualquier título, expedido posesión, tenencia y
uso de los productos Psicotrópicos, dentro del territorio de su competencia.
Art. 5.- Las disposiciones del presente Reglamento son sin perjuicio de la aplicación a
las drogas, preparados y especialidades farmacéuticas psicotrópicas de la Ley 50-88 y
otras normas complementarias del Código Sanitario, en cuanto a ellas sean pertinentes
y compatibles con este Reglamento.
Art. 6.- Las drogas, preparados y productos Psicotrópicos solo podrán ser importados o
exportados del territorio nacional por laboratorios de producción médica o científica,
previa autorización de Salud Pública, y la Dirección Nacional de Control de Drogas.
Con ese objeto, los establecimientos o entidades interesadas comunicarán a Salud
Pública, en el mes de enero de cada año, sus previsiones de importación o exportación
de dichos productos para el año calendario siguiente, a f n de que ese organismo, sobre
la base de la información aportada por el solicitante, determine la cantidad que podrá
importar o exportar durante ese período.
Art. 7.- Para importar o exportar Psicotrópicos incluidos en las previsiones aprobadas
cada establecimiento deberá emitirse dentro de los treinta días siguientes a la fecha de
la solicitud.
La autorización o exportación, que deberá emitirse dentro de los treinta días siguientes
a la fecha de la solicitad.
368
e) Cantidad que desee importar.
Art.11.- Para cursar cualquier destinación aduanera de los productos Psicotrópicos cuya
importación haya sido autorizada, el servicio de aduana exigirá un certificado emitido
por Salud Pública, en el que señala el lugar autorizado donde deberán depositarse estas
sustancias, la ruta y las condiciones de transporte que deberán utilizarse para efectuarse
su traslado desde los recintos aduaneros hasta el lugar de deposito indicado.
Salud Pública Deberá pronunciarse respecto del certificado a que se alude en el inciso
anterior, a más tardar en el plazo de tres (3) días hábiles contados desde la fecha de
petición y, en caso de rechazo, deberá hacerlo por resolución fundada.
Si por cualquier razón el interesado no recibiera los Psicotrópicos en las cantidades indi-
cadas en el certificado, deberá comunicar de inmediato este hecho a Salud Pública a fin
de que se investiguen las causas de extravío, pérdida o substracción de las sustancias.
Art.12.- Los productos Psicotrópicos que ingresen al país en tránsito no podrán ser
sometidos a operación o manipulación alguna que pueda alterar su naturaleza ni modi-
ficar su embalaje, salvo en caso calificativos que autorice Salud Pública y la Dirección
Nacional de Control de Drogas.
369
PRODUCCIÓN Y EXPENDIO
Art.13.- La producción fabricación, fraccionamiento o preparación de Psicotrópicos solo podrá
llevarse a afecto en laboratorios de producción químico farmacia y otros establecimientos
autorizados.
Art. 14.- Todo establecimiento autorizado para extraer, producir, fabricar, fraccionar o
preparar Psicotrópicos llevará un registro actualizado, que estará permanentemente a
la disposición de las autoridades sanitarias y la Dirección Nacional de Control de
Drogas que deberá contener las siguientes anotaciones:
Los mismos establecimientos deberán comunicar a Salud Pública, antes del día 15 de
enero de cada año, la siguiente información:
Art. 15.- Los referidos establecimientos deberán llevar actualizados un libro de control
de productos Psicotrópicos con el visto bueno de Salud Pública y fiscalizado por la
Dirección Nacional de Control de Drogas a quien se asignará esta función en el que se
registrarán en forma preparada los siguientes datos, respecto de cada droga producto
psicotrópico, indicando su denominación comercial si ello procediera:
a) Ingresos:
1. Fecha.
2. Cantidad.
3. Número y fecha de la resolución que haya autorizado la internación, distribución o
transferencia en su caso.
370
4. Proveedor, número y fecha de la factura; guía u otro documento según corresponda.
5. Número de serie, cuando corresponda.
b) Egresos:
1. Fecha
2. Cantidad
3. Nombre de la droga, medicamento que le contenga o producto psicotrópico y número
de serie, cuando proceda.
4. Control interno del establecimiento, guía u otro documento de control interno del
establecimiento.
5. Número de la receta cheque, número de registro de la receta si es preparado magis-
tral.
6. Nombre del médico cirujano o profesional que haya extendido la receta, en su caso,
y cédula de identidad.
7. Nombre y domicilio del destinatario o paciente.
8. Nombre y cédula de identidad del adquiriente.
c) Saldos.
Art.16. Los envases de los productos Psicotrópicos no podrán contener una cantidad
inferior a diez ni superior a treinta unidades posológicas. El contenido de los envases
clínicos destinados a ser utilizados exclusivamente en establecimientos asistenciales,
podrá ser mayor del indicado anteriormente.
Las etiquetas de los envases deberán expresar la condición de venta del producto y la
leyenda en letras sobre fondo blanco:
"Sujeto a control de psicotrópicos". Las etiquetas llevarán además, una estrella de cinco
puntas de color azul, cuyo tamaño no podrá ser inferior a la sexta parte de su superficie.
371
CAPÍTULO IV
DISPOSICIONES GENERALES DE PRODUCTOS ESTUPEFACIENTES
Art. 1.- Corresponderá a la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social,
conjuntamente con la Dirección Nacional de Drogas, el control de la importación,
exportación, tránsito, producción, fabricación, fraccionamiento y distribución de los pro-
ductos estupefacientes.
Por su parte, a los Servicios de Salud les corresponderá el control de las actividades de
preparación, transporte, transferencia a cualquier título, expendio, posesión, tenencia y
uso de los productos estupefacientes, dentro del territorio de su competencia
IMPORTACIÓN Y EXPORTACIÓN
Art. 3.- Las drogas, preparados y productos estupefactos sólo podrán ser importados o
exportados del territorio nacional por Laboratorios de instituciones de investigación
médica, previa autorización de la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia
Social (SESPAS).
372
a) Nombre y domicilio del establecimiento o de su representante legal, si se trata de una
persona jurídica.
b) Individualización del director técnico del establecimiento o del profesional del área de
la salud responsable, en los casos de las Instituciones de Investigación Médica o
Científica.
Art. 6.- Los Certificados Oficiales de Importación y Exportación tendrán una validez de
cuatro meses contados desde la fecha de su emisión y la respectiva internación o
exportación, según corresponda, deberá efectuarse, en todo caso, dentro del plazo
máximo de 6 meses contados desde la misma fecha.
Art. 7.- Para cursar cualquier destinación aduanera de los productos estupefacientes
cuya importación haya sido autorizada, el servicio de Aduanas exigirá un certificado por
la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social (SESPAS), respectivo, en
el que señale el lugar autorizado donde deberán depositarse estas sustancias, la ruta y
373
las condiciones de transporte que deberán utilizarse para efectuar su traslado desde los
recintos aduaneros hasta el lugar de depósito indicado.
Art. 8.- Una vez concluida la tramitación del documento de destinación aduanera y retira-
dos los productos estupefacientes de los recintos primarios de Aduanas quedarán deposi-
tados bajo la responsabilidad del consignatario, quien no podrá producir, fabricar, fraccionar
ni distribuirlos, sin obtener la autorización de la autoridad sanitaria competente.
Esta autoridad deberá dictar la resolución otorgando o rechazando la autorización, o bien fijando
un período de seguridad con el fin de que se efectúen los controles sanitarios correspondientes,
durante el cual los productores no podrán ser comercializados. Dicha resolución deberá dictarse
dentro del plazo de tres días hábiles contados desde la fecha en que el interesado le comunique
haber ingresado esas sustancias a su lugar de depósito, acompañando copia del certificado emi-
tido por el Servicio de Salud que permitió su traslado a ese recinto.
Art. 9.- Los productos estupefacientes que ingresen al país en tránsito no podrán ser
sometidos a operación o manipulación alguna que pueda alterar su naturaleza ni modi-
ficar su embalaje, salvo en casos calificados que autorice la Secretaría de Estado de
Salud Pública y Asistencia Social (SESPAS).
DE LA PRODUCCIÓN Y EXPENDIO
Art. 10.- La extracción, producción, fabricación, fraccionamiento o preparación de estu-
pefacientes sólo podrá llevarse a efecto en laboratorios de producción químico farma-
céutica, farmacias y otros establecimientos autorizados.
374
Art. 11.- Todo establecimiento para extraer, producir, fabricar, fraccionar o preparar
estupefacientes llevará un registro especial que estará permanente a disposición de la
autoridad sanitaria y que deberá contener las siguientes anotaciones:
a) Ingresos:
- Fecha,
- Cantidad
- Número y fecha de la resolución que haya autorizado la internación, distribución o
transferencia en su caso,
- Proveedor, número y fecha de la factura, guía u otro documento, según corresponda,
y
- Número de serie, cuando corresponda.
b) Egresos:
- Fecha,
- Cantidad,
- Nombre de la droga, medicamento que la contenga o producto estupefaciente, y
número de serie, cuando procede,
375
- Número y fecha de la factura, guía u No. documento de control interno del establecimiento,
- Nombre del médico cirujano o profesional que haya extendido la receta en su caso, y
cédula de identidad,
Art. 13: Los envases de los productos estupefacientes no podrán contener una cantidad
superior a 12 unidades posológicas. El contenido de los envases clínicos destinados a
ser utilizados exclusivamente en establecimientos asistenciales, podrá ser mayor del
señalado anteriormente.
Las etiquetas de los envases deberán expresar la condición de venta del producto y la
leyenda en letras negras sobre fondo blanco: Sujeto o Control de Estupefacientes. Las
etiquetas llevarán, además, una estrella de cinco puntas de color rojo, cuyo tamaño no
podrá ser inferior a la sexta parte de su superficie.
Art.14: Los preparados o productos que contengan estupefacientes de las listas II y III
sólo podrán expenderse al público en farmacias o laboratorios mediante el formulario
2064.
CAPÍTULO V
PRECURSORES
Párrafo l.- Se consideran como sustancias controladas y por tanto sujeta a todas las
disposiciones legales de esta Ley, los siguientes precursores, solventes y reactivos
químicos.
376
(1) (2) NOMBRES SINÓNIMOS
N.C.C.A. S.A.
29.02 29.03 Cloruro de Bencilo Cloro metil benceno; alfa clorotolueno
29.13 29.14 3,4 metil 3,4 metil enodioxifenilacetona;
enodioxifenil 3,4 metilenodioxi fencil-metil-cetona-
2 propanona pirperonil-metilacetona
29.27 29.26 Cianuro de benceno Acetonitrilo de benceno, 2-fenil aceto
nitrilo, alfa toluinitrilo, cianotolueno
29.27 29.26 Cianuro de bromo, Bromobenceno acetato de nitrilo
bencilo
29.35 29.39 Piperidina Piperonal Hexahidro piridina; penta metilenamina
Heliotropina; 3,4 metilendroxi;
benzaldehido, aldehido piperonilico
29.42 29.39 Efedrina, sus sales alfa [ l-(metilamino)etil] benceno mitanol;
isomeras alcohol alfa [l-(metilamino) prpoilbencili-
co; 2 -metil amino-1- fenil-l-hidroxi-2
metil amino propano; alfa hidroxi-beta-
metil amino propil benceno
377
28.06 28.06 Ácido ácido muriatico, cloruro de hidrógeno
clorhidrico en solución acuosa
378
[*] Queroseno keroseno, kerosina, petroleo lampante
CAPÍTULO VI
DISPOSICIONES RELATIVAS SOBRE DELITOS Y LAVADO DE BIENES RELA-
CIONADOS CON EL TRÁFICO ILÍCITO DE DROGAS Y DE SUSTANCIAS CONTRO-
LADAS EN LA REPÚBLICA DOMINICANA
Art.1.- COMPETENCIA
1.- Los delitos tipificados en la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas en la
República Dominicana, de fecha 30 de mayo de 1988 y sus modificaciones, serán
investigadores por la autoridad competente y enjuiciados, fallados o sentenciados por
el tribunal, independientemente de que el delito de tráfico ilícito o delito conexos haya
ocurrido en otra jurisdicción territorial extranjera, sin el perjuicio de la extradición cuan-
do proceda conforme a derecho.
379
2.- Cuando cualquiera de los bienes, productos o instrumentos mencionados en el
numeral anterior, como resultado de cualquier acto u omisión del condenado, no pudieran
ser decomisados, el tribunal ordenará el decomiso de cualquier otros bienes del condena-
do, por un valor equivalente u ordenará al mismo que pague una multa por dicho valor.
3.- La falta de buena fe del tercero podrá inferirse a juicio del tribunal o como resultado
del proceso de investigación de la Dirección Nacional de Control de Drogas, y de las
circunstancias objetivas del caso.
4.- Conforme a las normas procesales y la Ley 50-88 y sus modificaciones, el tribunal
o la Dirección Nacional de Control de Drogas por efecto del proceso de investigación,
dispondrá la devolución al reclamante de los bienes, productos instrumentos incauta-
dos cuando haya indicado y concluido que:
380
Art. 6.- DESTINO DE LOS BIENES, PRODUCTOS O INSTRUMENTOS DECOMISADOS
1.- Toda vez que se decomisen bienes, productos o instrumentos conforme el Artículo 3,
que no se deban ser destruidos, ni resulten perjudiciales para la población, el tribunal
procederá, tal y como lo disponen los Artículos 35 y 108 de la Ley 50-88 y sus modifica-
ciones.
Art. 6.- BIENES, PRODUCTOS O INSTRUMENTOS DE DELITOS. COMETIDOS EN
EL EXTRANJERO.
c) Transferencias sistemáticas de fondos, sea por vía de las entidades financieras, por
correos especiales, por medios electrónicos o por cualquier otro medio,
381
Art. 8.- IDENTIFICACIÓN DE LOS CLIENTES Y MANTENIMIENTO DE REGISTROS
1.- Las instituciones financieras deberán mantener cuentas nominativas. No podrán
mantener cuentas anónimas ni cuentas que figuren bajo nombres ficticios o inexactos.
2.- Las instituciones financieras deberán registrar y verificar por medios fehacientes, la
identidad, representación, domicilio, capacidad legal, ocupación u objeto social de las per-
sonas, así como otros datos de identidad de las mismas, sean estos clientes ocasionales
o habituales, a través de documentos de identidad, tales como pasaporte, cédula de iden-
tidad y electoral, partidas de nacimientos, carnet de conducir, o cualesquier otros docu-
mentos oficiales, cuando establezcan relaciones comerciales, en especial, realización de
transacciones con efectivo que superen el contravalor en moneda nacional de
US$10,000.00.
3.- Las instituciones financieras deberán adaptar medidas para obtener y conservar
información acerca de la verdadera identidad de las personas (físicas o jurídicas en
cuyo beneficio se abra una cuenta o se lleve a cabo una transformación, en especial
cuando exista alguna duda de que tales clientes puedan no estar actuando en su pro-
pio beneficio.
4.- Las instituciones financieras deberán mantener, por lo menos durante cinco (5)
años, de la realización de la transacción, los registros de la información y docu-
mentación requerida en este artículo, sea por medio de los documentos mismos, de
microfilms, o cualquier otro medio electrónico de conservación de documentación e
información.
5.- Toda institución financiera estará obligada, a solicitud del tribunal y/o la Dirección
Nacional de Drogas, vía la Superintendencia de Bancos, a ofrecer información sobre
cualquier cuenta aperturada a un cliente.
382
de otra jurisdicción territorial extranjera, de conformidad con los ordenamientos jurídi-
cos y las normas de derecho internacional.
Art.10.-REGISTRO DE TRANSACCIONES
l.- Toda institución financiera deberá registrar en un formulario diseñado por la
Superintendencia de bancos, cada transacción en moneda nacional o extranjera, que
supere el contravalor en moneda nacional de US$ 10,000.00.
2.- Los formularios a que se refiere el numeral anterior, deberán contener por lo menos,
en relación con cada transacción, los siguientes datos:
3.- Dicho registro será llevado en forma precisa y completa por la institución financiera
en el día en que se realice la transacción y se conservará durante el término de cinco
(5) años a partir de la fecha de la misma.
383
4.- Las transacciones múltiples en efectivo que en su conjunto superen el contravalor en
moneda nacional de US$10,000.00, serán consideradas como una transacción única y son
realizadas por o en beneficio de determinada persona durante el día laborable. En tal caso,
cuando la institución financiera, sus empleados, funcionarios o agentes tengan
conocimientos de estas transacciones, deberán efectuar el registro en el formulario diseña-
do para tal fin.
5.- En las transacciones realizadas por cuenta propia entre las instituciones financieras
definida en el artículo 7, numeral 1) Inciso A), que están sujetas a supervisión por las
autoridades bancarias o financieras nacionales no se requerirá el registro en el formu-
lario requerido en este articulo.
8.- Las instituciones financieras definidas en el artículo 7, ordinal 1), Inciso a), del pre-
sente reglamento, por el intermedio de la Superintendencia de Banco y en caso, las enti-
dades definidas en los incisos b) y c) del mismo artículo, por intermedio de la adminis-
tración tributaria, deberá poner a disposición del tribunal de la Dirección Nacional de
Control de Drogas y de las Instituciones Internacionales, las informaciones solicitadas
cuando las mismas sean necesaria, siempre y cuando las mismas sean requeridas para
el esclarecimiento de los procesos criminales abierto por la comisión de tráficos y delitos
conexos.
9.- Las disposiciones legales referentes al secreto o reserva bancaria no serían un impedi-
mento para el cumplimiento del presente artículo, cuando la información sea solicitada, vía
la Superintendencia de Bancos, o del Tribunal o la Dirección Nacional de Drogas.
384
no habituales y las transacciones no significativas, pero periódicas, que no tengan un fun-
damento económico de legal evidente.
385
b) Programa permanente de capacitación de personal, como "conozca su cliente" e
instituido en cuanto a las responsabilidades señaladas en los artículos 8 y 10 de este
reglamento.
386
financieras conforme a este Reglamento, incluyendo aquellas fruto de un examen de
cualquiera de ellas, cuando así le sea solicitada,
f) Dictar instructivos o recomendaciones que ayuden a las instituciones financieras a
detectar patrones sospechosos en la conducta de sus clientes,
Esas pautas se desarrollarán tomando en cuenta técnicas modernas y seguras de
manejo de activos y servirán como elemento educativo para el personal de las institu-
ciones financieras.
g) Cooperar con la Dirección Nacional de Control de Drogas en el marco de investiga-
ciones y procesos referentes a los delitos de tráflco ilícito o delitos conexos.
3.- Una orden judicial o sentencia que ordene el decomiso de bienes, productos o
instrumentos, expedida por un tribunal competente de otro estado con relación al tráfi-
co o delítos conexos podrá ser admitida como prueba de que los bienes, productos o
instrumentos a que se refiere tal orden o sentencia pudieran ser sujetos a decomiso
conforme a la legislación vigente.
387
apropiadas sobre una solicitud de un tribunal o autoridad competente en relación con una
investigación o proceso de carácter penal referente a un delito ilícito o delito conexos o a
violaciones de este Reglamento. Dicha asistencia podrá incluir el suministro de origina es
o copias autenticadas de los documentos y los registros pertinentes, comprendidos los de
instituciones financieras y entidades gubernamentales, la obtención de testimonios en el
Estado requerido, la facilitación de la presencia disponibilidad voluntaria en el estado
requeriente de personas para prestar declaraciones, incluyendo aquellas que estén
detenidas, la localización o identificación de inspecciones e incautaciones, la facilitación
de información y elementos de pruebas, y medidas cautelares.
388
BIBLIOGRAFIA
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Reglamento del Juez de Ejecución de la Pena. Resolución SCJ No. 296-2005 del 6 de
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Andreu Estela Barnet, Informe Ejecutivo, Sobre la Supervisión y Puesta en Marcha del
Centro de Corrección y Rehabilitación de Mujeres y Hombre en San Felipe Puerto Plata.
Consultores Internacionales: UTG PARME, Componente de Justicia 2004.
Yolanda Martín, Arsenio Corral Gómez, Informe Ejecutivo, seguimiento del fun-
cionamiento técnico y operativo del los Centros de Tratamiento y Rehabilitación de
Najayo Mujeres y Puerto Plata, Hombre y Mujeres. Consultores Internacionales: UTG
PARME, Componente de Justicia 2005.
Andreu Estela Barnet, Informe Ejecutivo, Sobre la Supervisión y Puesta en Marcha del
Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Mujeres. Consultores Internacionales:
UTG PARME, Componente de Justicia 2005.
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Héctor Cabral Ortega, Reflexiones Criminologícas, ONAP, 1985
LEGISLACIONES EXTRANJERAS
392
Colofón
Esta edición del MANUAL DE GESTION PENITENCIARIA
de dos mil (2,000) ejemplares, se terminó de imprimir en
Editora Taller C. por A., Juan Vallenilla esq. Juanico Dolores,
Zona Industrial de Herrera, Santo Domingo, República
Dominicana, en el mes de enero del 2006.