Matria (Antonio Silva)

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Matria

la pera fue ensayada da y noche, una pieza


sentimental para los comensales
una pequea ventanita de cholgun y visillo
color muerto permite al lector fisgonear -y por
qu no rer de la india travestida de selva lrica.

Yo no eleg el opertico decorado de la


cordillera
pero pint de sal y rosa los Andes
para contemplar en l, el blancor de una patria,
Me vest con los atavos de mi madre.
Me saqu los ojos para nombrar
Edipa santificada de coronas
En la ceguera vi a la india que cuelga de mis
vrtebras,
loca que ejercita en mapuol
el celular corro de las soledades.
Cmo comprender el pajaral canto de tu boca en el
/nveo anonimato de las
palabras?
A quin preguntarle por el sur o el norte?
He inventado una patria para los despatriados,
mi pequea taca, mi futura lengua
Para el ignoto fulgor que vibra en ventanas tapiadas,
Para el hechizo que una mujer despliega en la finitud
de las tiendas
Para la carcajada cesante en la fugacidad de un
atardecer alcohlico
en un tempo fono y fasico
Para el cuenco donde las cosas caen y,
donde cada sentido riza la concavidad de un cuerpo
Para la pequea distancia de tus huesos
que imita un futuro da blanco Blanco
de mi memoria

Para el espejal gesto de tu mano


en la trenza de la selva
Para la disposicin de lo bello;
el oxgeno de tu boca sobre
el pelaje de mis dedos
Para tu cabeza india
Ramera Amancebada de sol Azteca
Ona Maya Zapoteca araucanita
Quechua Aimar Naguatl
De sangre mi vestido jams americana
Huk Indiapa Minueto
Trompanne Gapachacun Tzay Ichisaj
/Selvapita
Uchkunkaj

Zapatos de campesina
Adornada con la pobreza
de su vestido
Como en un film Italiano
En sonora banda de hambruna
Una trenza de amor que en rufulo indiaje
Deviene ABECEDARIO
En el fosforescente amanecer de una plaza
Todas tus indias todas tus madres
Una lumbre hispana
sombreada de banderitas de los Andes
Una musiquilla de cros en el pliegue de los zapatos
La cosmtica de un da cansado

Yo fui elegida Miss esperanza


en la primavera de 1970
A la maana siguiente mi corazn
es un charco

Tu nombre es una huella dactilar


en la ventanilla de un banco
La molka borr mi cuerpo

Comillas almbricas
en la crin azabache
Tu pequeo nombre en la nica calle que amaste
[al costado de una carretera
mis zapatos son una jitanjfora]

Cuartos de Escritura
(para una constitucin de guin)
"la nuestra es una era de simulacros, no de

documentos... antes de su "verdad" la cita es un


efecto del texto"
Omar Calabresse

l. Int. Cuarto de escritura. Maana.


La area sombra de un pjaro corta en dos el visillo
matutino. Las solares agujetas rubean an ms el
detalle capilar de las meninas, ubicadas al norte y
que por extensin de sus miradas todo ser un sur.
En el sur un espejo de lenguas acarameladas atrapa
en su doble al rey y la reina (en trinal musiqueo).
Sobre una mesa China: mapas, planos, radiografas
etc... y, en el borde, en la orladura del mantel
(nacarado de gorriones que en la cabeza de chileno
baile trinan) un sobre lacrado. Primer plano. Desde el
exterior Anglica Mara en mexicano paladar tensiona
la escritura facial de la infanta Margarita. Corte A:
2. Int. Cuarto de escritura. Atardecer.
En calipso lente angular una sombra interrumpe el
gemelar panorama de los monarcas. El cuarto es un
incendio Boreal. El detalle de una mano, una trinidad
quiz, gira en decibel estereo, al tiempo que Haydn
recompone la mueca pber de la infanta. Alguien
abre una puerta y con ello el tropel de un programa
de televisin: Miss Universo, que en brocatto ingls
domina la escena; un gesto en filoso lamento hace
del instante un chronos de puerta y zapatos. Sobre la
mesa China que ahora es ms que amarilla: un
espejo de mano y ms documentos serpentean en la
vrtebra sombra de una lmpara Tailandesa. Haydn
aun gira sobre su eje. La violada carta deja ver en el
ahora escarlata escenario, su mensaje:
[(( [poema] ))]

corte A:
3. Ext. Calle de Santiago. Noche.
(Lente en Travelling) Un semforo verde esperanza
en la cabellera rala que mira y espanta en metlico
peine el dibujo crocante de una manzana, en perplejo
silencio una ciega canta. Primer plano: el miserocordo
ojo del Padre Hurtado en boreales tonalidades deja
ver un cielo de angelical indiaje, una escena a lo
Melton Prior. El ltimo decorado oriental tapiza de
crneas el asfalto popular; zarcillos, alfileres,
espejetos, mostacillas y perfumes, rosetones, nudillos
flotantes, gasas y enlaces, polvos y chapes, y acantos
helnicos, en plstica factura de callejo cocktail.
Shakira en trinico cross-over muda nalgas de tienda
en tienda. (desde un lente angular) El taglio de un
rostro maquillado esconde una varona (almendreo
de sombras en egipcio rabillo ojal y dos lunas que en
niveo pmulo -Phobos y Deimos- eclipsan la voz de
una ciudad) Quiz el poema an est ah.
corte A:
4. Int. Supermercado. Noche.
Nuevamente angular y subjetiva: zapatos taco reina
jeans elasticados tensionantes de artificial
alumbrado, un cinturn de mariposa Esfinge que en
simulacro vuelo robar pretende el ovillo de Lquesis,
imita ud. a las osamentas? Alguien difcil de precisar
(taglio, perfil, franger) un pincelaje de esmalte
esteriliza cada paso (so quiet); conservas de tiempo a
la espera de su fruicin y deglute; transgnicos y
saturados, glucoso silabeo de persa en angar que,
salvo el ojo de Al, en nada envidia al popular

laberinto de un mercado Iran. Ariadna qu ves en el


ojo del minotauro? Angular. En vitrina soledad Phbos
y Deimos progresan su creciente y, que aguda o tal
vez menguante es una nube de lloicas, orquestada en
un [easy listening] "bsame mucho", ella y sus lunas
de rufula nocturna desalojan la opereta que fue salida
y entrada en su transfugo mirar.
Corte A:
5. Int. Cuarto de escritura. Madrugada.
La ventana deja or el prostibular timbre de las
lucirnagas y que en el plugo de sus carcajadas, que
es carnada, despiden vulveos aromas en el triangular
bulto de los jovenetos -que es bermudas en deseo- .
Cumbia y farra en soprano estertor. Alguien enciende
un mnimo sol tailands [que por el pincelar de sus
uas y, que en gtico carmes emergencia la cutcula
abisal, se advierte que es una varona, una saxfraga
umbra, la desesperacin del pintor] que en fluvial
electricidad es secuencia de ua, mano y dedo en
colibr parpadear. El poema ha adquirido
independencia, o quiz an permanezca ah.
En fiero juego la infanta ocult en el espejo las
alas del poema. Contemplad, contemplad.
La enana sostiene una carta.

una india seala su artesana menor a un grupo


de japoneses y gringos

Minueto para una india huk indiapa


( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)
Minueto para una india huk indiapa
( miniuet for an ndian)

minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto
minueto

TRILOGO

De sangre mi vestido
jams americana
(mai drs in blod never
amrican)
De sangre mi vestido
jams americana
(mai drs in blod never
amrican)
De sangre mi vestido
jams americana
(mai drs in blod never

amrican)

Pieza XVI de un Hotel


"No moderno artificio
borr designios, bosquej modelos
al cncavo ajustando de los cielos
el sublime edificio"
Gngora

Privada de toda duda aparece ante ti, como un


dorado spot de televisin la halgena sonrisa de una
torrecita de Babel: lugar de lenguas, sangre y
"pequeas muertes". La noche redobla su nigredo
para que el rubedo de tan mnimo palacete deje en ti
la estampida nuclear de hienas y cebras en el glande
de tu beso El curioso asedio de lmparas japonesas
(que dispuestas como baratos rubes ms bien
parece la cofia frutal de una feria en Curepto)
Estacin porno. Las llaves del cuarto cuelgan de tu
anular y en su chasquido recuerda un dilogo de aros
y lenguas.
[corte a NEGRO]
El interior de un cuerpo fue el interior de otro cuerpo
en la
/residualidad de lo
extemo.
Apenas el ropaje de la noche.
Apenas nuestros besos que en lunar disparo
fue amor en otro cuarto...
Cuando el toro se presente
en la casa de las bodas, y se aferre

como nbil gigante a las cintas del


corazn
En fstula caravana
la minucia de tu boca guinda negra
sobre un cuerpo que no hall
en alquimias su linaje.
Para el toro la vigilia es maldiciente
para ti un linceo refocilar
en el adorno de una copa
Entra y sale la babucla
mancha que deglute tu corazn
que es un pjaro
que es un ptalo
tu jardn.
el saha maithuna es interrumpido
por
artificio de un lector.

el museo de la pobreza

Bungalow
[Geometras de un sueo]

"CUANDO NIA SOABA CON SER


LA SIRVIENTA DE UNA TELESERIE MEXICANA
-(muchacha italiana viene a casarse)AQU LOS RESTOS

PARADA EN CUATRO TABLAS


EN CUATRO BOCAS CUATRO
QUE PREFIGURAN UNA CASA
UNA MEMORIA
CARDUMEN DE CHOZAS
ENDEUDADAS HASTA EL BRASERO DEL ALMA
DIGNOS PERO DIGNOS
SERVIU ES LA CATEDRAL DE MIS
HERMANAS
LA DOMINGA TERMIN CON EL CORAZN
/HECHO GREDA
LA MIKAELA DESAPARECI BAJO LA
/DENTADURA DE LAS BALAS
TAN ORGULLOSA
NO FREGAR EN UNA ARTESA MODERNO
/FREGADERO DE CEMENTO
LA SANDRA TENDR SU NICA SOLA EN LA
/PIEZA SOLA LA SANDRA
TANTO TODO ME CUESTA TANTO
ORA PUEDO SENTARME TRANQUILA A RIZAR
/GUAIPE
LA TELESERIE
LA EXTENSA GEOMETRA DE UN SUEO
TAN ORGULLOSA
LA COCINA 2X1
LA PIEZA DE SANDRITA 2X2
2X3 EL LIVING COMEDOR
LA MARQUEZA ME CABE JUSTO EN 3X2
EL BAO 1X1 Y CON TAZA DE LOZA!
EL PAISAJE LO PINT EN EL CALLAMPERO

LA CASA; MI BELLA Y FUGAZ ESTADA


SERVIU ES LA CATEDRAL DE MIS
/HERMANAS"
Temporera
I
Al taquicrdico pulsar de una estrella
abres el cortinaje, imitando la abertura de tu sexo
-lentamente al nauseabundo hedor de la complicidadLa oquedad de un msero pasaje,
Un territorio siempre ajeno.
II
Bajo una luna igual de hocicona vuelves con el azote
del taco reina
su chasquido enciende el lenguaje de la muerte
Algo ms de las 2 de la madrugada; un bazar abierto
/slo para la venta de cigarrillos sueltos
Una dbil msica filtra la orladura de la noche
El quejido de una reja de tablas.
La ampolleta es un ojo atmico
que todo lo tie de amarillo siniestro.
III
Un lar inscrito en el doblemente tercer mundo el
/trastero de ollas espejea en la fatua
lumbre la agona de una casta en desintegracin total
Separado por una sbana grasienta, tu pedestre e
ingenuo mundo;
un pster de Emmanuel, un estuche que
irnicamente
/te
dice
"mis
cosas"

Enciendes un cigarrillo y al volumen de la


promiscuidad
Te internas en el dial de las abandonadas, guias
perla
/y pestaa y tu labio es un tendido
elctrico
Balbuceas el nombre de tu hijo el de un hombre.
IV
MIHUACMTOMICABIUTOMINIITOMIAMORCITO
MICABRITOMINIITOMIAMORCITOMIHUACHITO
AL FONDO MI GRITO DE LAS NALGAS DE LA
/TIERRA YERBAMOTO RUDA PALTO
JARDN DE PAS YO MARA LEVITANDO SIN
/CALZN
SIN AMOR LA MIRADA FIJA EN UN ORGASMO
LA CASA TIEMBLA VACA PATE'VACA MARACA
/LACHA SUELTA
RAMERA AMANCEBADA TEMPORERA
EL INCENDIO EL AMOR SE TE FUE.
YO LA MUERTA LA MESERA LA MAMONA LA
/CARA PARTIDA
V
Envuelto en el tsico sudor de una preez
el cuerpo de una nia babeante
Pupila honda, sal y tiempo en la cicatriz de un tero
La radio mastica el evangelio, azote perfecto. La
culpa.
VI
Tu sollozo se confunde
en el oreo de los lamos
Descalza con una tirilluda enagua

te paseas en el pequeo patio interior


y untas tu rostro en el agua estancada de una artesa
que parece calmar la sed de un corazn fabricado a
/patadas
pareces una bruja intentando salvar algo
quiz slo a ti misma
VII
Tres o cuatro palabras
la gestualidad de una cruz
el hipntico cojeo de una mujer
internndose en la finitud de la noche
hablando sola o con los gatos -que esta noche pase
luegoEl paso de un tren y el ladrido de lo irracional
anuncian con hocico metlico el futuro devenir
en la frgil oracin de una mujer.
VIII
"Soy Mara Jorquera Melenao pertenezco a esa ralea
de mujeres en las cuales se deposita toda la
animadversin de una moral rudimentaria, sostenida
en el ejercicio de lapidacin y exilio de la concubina"
El msero monlogo voltea los ojos de la noche,
transparentando el seo lunar
La nica ebria es la muerte y slo ella deja flores y
besos frente a la pequea puerta de las venganzas.
Una polilla anula el farol de tu casa
El ruido del mar se interna en la ciudad,
hacia potreros y eriales.
IX
LMPARA ECLOSIONA MI CASA MI CAMA MI
/HERMANA

SALTERO DE RANCHAS
MI PADRE MI MADRE MI ENAGUA MI LENGUA
LA LOCA LA PASCUALA LA MENOR LA
/DIEZMADA
DAME UN HOMBRE UN HIJO UNA MAANA
X
La noche hunde tu cuerpo
hacia la calle ms inhspita de la tristeza
De la miseria siempre hay ojos vidos -el botn
/de
insignificancia-

la

XI
En la navaja de una maana dibujas una casa
y cuentas los nudos de tu trenza
El sol fermenta las bofetadas de una catstrofe
y en tu pelo graso alguien imprime un beso
mientras los evanglicos cantan un quejumbroso
/himno de amor
y una ronda de nias te obsequia una...
LA NIA MARA HA SALIDO AL BAILE
BAILE QUE BAILE QUE BAILE
Y SI NO LO BAILA CASTIGO LE DARN.

Para un muchacho perifrico


l, que naci para ser
contemplado, un Adonis algeno

y poblacional

Vi tu cabeza rodar en el vocablo


de la noche -muchachitoTu espureo talento de nen sudaca,
fotomontaje lingual -mapuolel peso de Dios sobre
tu prpado
Te vi caminar en la vitrina de
lo inevitablemente diario
[Hoy -a los treinta- no te falta un varoncito
que silbe al ngel de ojos muertos en cada
esquina]
Defines una cancin
en la vestidura de la risa
Una primavera atrapada en
la pobreza de tus ojos
Un hombre cay sobre tu cuerpo -tambin
callLa dictadura del DESEO
El carnavalesco idioma de un da de feria.
Te vi caminar en osamenta invierno
con lluvia en el hombro
en busca de un da claro
*hacia un lumnico futuro, l, otorga diecisiete
venganzas en preformativo paladar*

Pretexto
En el museo de peticiones
-Coatlicue borda un estrellaMuseo
y
mausoleo
son
palabras
conectadas por
algo ms que la asociacin fontica.
Los museos son los sepulcros familiares
de las
obras de arte.
Theodor. W Adorno
Una risa de nias: Una avispa blanca que en su seteo
atrapa el negro amor de los lirios -un pual de vida
en
/el corazn de un DuatPequeos apartamentos que musicalizados y
lacrados
hacen del paisaje, curiosamente, un cadver
exquisito.
Calas rosas claveles ilusiones yuyos capachitos
/orqudeas tulipanes
y un gorrioncillo conectan la escena con un nirvana
/mental.

La vidente se llama Coatlicue


Un diamantino temblor (la lmpara de dios)
asesina en floral mercanca el relato
En medio del collage la escritura recuerda un poema
Soy la virgen/que aparece de vez en cuando/soy la
nia
silbando/Al final del cementerio/la mal nacida me
decan/la
solitaria y la loca/...
[De aro y cielo y en mujeril artificio un colibr
decapita
epitafios y jacintos]
As como un Mall expone sus grasas y carbohidratos
El nigromante mercado avisa en su recorrido otro uso
para
tarros y latitas de bebidas: sostener el agua de tu
flor de mi flor.
Cruzas el prtico de una ltima belleza ornamental
Un pequeo puente para trinidades mayores
Un barullo botnico silenciado en su austeridad
Cirios vulgares sndalo y soledad
Un gato de loza siempreviva siempremuerta
Laurita Vicua en un vergel de nylon
Peluches y trapos
Angelitos de un dorado muerto
Y en el centro la india mirada de una hurfana
Una pequea Guadalupe patrida y coronada
que dispuesta como inmaculado teatro

de la maana hace un desastre un milagro


Coatlicue vigila ptalos y cadveres
Una carta sellada se descuelga
desde el rojo nudo de una rosa
Circundada de ilusiones. Las nuestras.
Coatlicue adopta la figura del medio
Da...

Beatitud
Cartas halladas en un cementerio. Juana Iris no pudo
evitar cleptmana comunin.

Malvinita te escribo esto pa pedirte un pequeo favor


que mi pap buelba aqu conmigo por que l esta en
Valparaso espero que me agas ese favor ya la otra
bes le vine aber como ust es poderosa yo se que
uste me ba acer ese favor y quiero que el hombre
que esta en mi casa se valla y quedemos con mi
mama otra gente escuchado de ti quiero pedirte otro

favor que este con el nio que me gusta porque el no


me quiere y yo me muero por el gracias.
Katherine A.
Te escribo esta carta para decirte y darte un milln
de gracias por el favor concedido ahora que estoy
con el... l se llama Juan Francisco Segundo Daz
Len por favor se lo suplico de todo corazn que me
quiera mucho y que nunca me deje sola ya no quiero
sufrir de nuevo porque siempre pierdo yo. la quiero
mucho
Mara Teresa A.Z.
15/09/01
Con todo respeto que usted se merece yo le escribo
esto yo no se quien abra ledo la carta pero eso yo
supongo que es malo acurdese de mi Alex ahora
que se va al servicio cudemelo que se acuerde de mi
siempre y que no vaya a encontrar a otra porque a el
yo lo quiero mucho. Gracias
Yenny Maribel M.U.
28/09/01
Malvinita aydame por favor te lo ruego que la biosia
salga negativa que no tengan lo que dicen por favor
que tambin papa nicolao salga bueno y que el sitio
que estamos vendiendo se venda por favor, espero
confiada en ti.
Letticia M.P.
Hola malvinita soy Katty no se si tu me conoces pero
yo a ti s soy rara estoy confundida no s que hacer
te cuento no se los hombres no merecen pero la

cuestin es as aydame malvinita que el Claudio del


cuarto F se fije en mi y me quiera y que la Juana pase
de curso por favor gracias
Katty
26/09/01

La insignificancia del gesto


I
Como una noviezuela
en la nocturna soledad de una plaza,
el amor se peina en una silla
calzones rados y zapatos de polvo de diamantes
dejan or el musiqueo de una campesina.
Se ve en las bocas y en las camas
en los luminosos en las lneas de una mano en las
iglesias
en la guerra y en la paz en las vitrinas de moda en la
/luz de una primavera
en la pestaa de una avispa en el prpado de un
ciego
en la confeccin de un vestuario en una mesa junto a
un ro
en el anillo de muerte de tu madre en una pistola
/equilibrada en las agujetas del
sol
en la inmaculada corona de un travest
en el museal laberinto de un supermercado
en una plaza imitando la sonrisa de los solitarios
en un bao pblico en una mnima teleserie

en la mirada de una pobladora


en el arete del marica que mira en pizca
o en el destello de una gota al final de una rama
o el agujero en el corazn de un nio Afgano
en la cojera del sol sobre la paz de un da de campo
en el trayecto de una lengua
o en una ciudad pintada sobre la piel de la sarna.
El amor contempla su gesto, su insignificancia
El amor es un nicho sin tapa ni nombre.
II
Una partcula de amor:
Que es un pjaro una amatista un fonema una cajita
musical
un prendedor la saliva de tu madre un armonio un
adaggio
en la piel de tu enamorado un rojo cardenal en el hilo
muerto de
tus ________ una prgola un disfraz una guirnalda en
el atardecer
de un verano
(el clmax desvanece el decorado y como en una pera
China, te entregas a lo misterioso)

En la mendiga flor que no amamos en kundalini


y la antigua esperanza en la cascada matinal en la
androginia en la ceguera de tu canto
(s, in crescendo)

en
en
en
en

un film de Godard o Antonioni


un jacarand iluminado por un hombre
Juana Iris la matria la hurfana y los milagros
el oro seminal de un jovenzuelo

en tu culo herido
en tus partos
en la blanca msica de una morgue
en la transubtanciacin del arte (manicure, cosmtica
y pincelaje)
en la pobreza espiritual
en un corazn donde he cavado la tumba de
/mi padre
mi
madre
He aqu mi signo
He aqu mi diamante invertido
Nota: Luego de etlico trance caes desmayada sobre
un ramillete de soldados. La Iris no puede explicar
que su corazn ha muerto.
& Cuando un hombre penetra a una mujer -dicen los
/bellacos- forma
una cruz.
& cuando un hombre penetra a otro hombre -dice tu
/padre- disea la
inversin de
una cruz
& cuando una mujer frota su espejuelo con otro
/espejuelo -dicen las Erinniasse hechiza
a s misma y piensa en la geometra de una
cruz
penetrar y ser penetrado -digoes la ley del universo...

Gran Avenida
(una nocturna velocidad)
Gran avenida aparece como un pequeo Chile
un interminable da de feria
en su belleza y herida
Una transparente costilla de hambruna
diseccionada por tiendas y buses
un mnimo collar de
persas, topless y discotecas; un baritonal souvenir
de sordas palabras.
Slo experimentas algo parecido a aquel
confuso sentimiento en la noche de ao nuevo
donde el Himno Nacional no sabe definir
si odias o amas esta patria.
Gran avenida es un hombre
que corta en mltiples mitades
una cancin no elegida

en el dial de tu lengua
bastarda
Finitud
Qu hombre de juicio puede, efectivamente, ser partidario de

una doctrina tan ridicula? Basta mirar la multitud que la acoge


para despreciarla. Sus maestros no buscan ni encuentran ms
discpulos que hombres sin inteligencia y de un espritu grosero.
Celso

En un templo edificado por la demencia


Los evanglicos braman por un tiempo perdido
Azotan lepra en guitarras que jams les
pertenecieron
Un hombre se masturba en lenta cmara
Balbucea el nombre de una mujer desfigurada
Una lgrima de l es un ocano de amor en otro
mundo
En un patio interior
Un nio llora porque un pjaro ha muerto
El muchacho del ademn se interna
En el circuito de puales y taxis
rumbo a la fiesta
Una bailarina borda flores de guaipe
en el tendido elctrico
Y sus destellos son una corona intil de santos y
cristos
Nadie oye a los evanglicos
Cuando un nio llora porque un pjaro ha
muerto

lloicas en el abrevadero

Los Maricas

El andrgino es considerado superior a ambos sexos


Porque encarna la totalidad y por lo tanto la perfeccin
Mircea Eliade

Cruzados en un parque
En el filamento de las sombras
Entre destierro y farol
Hacen su entrada coja los maricas
Las bestias de gata, torcidos e inmundos
Tronchando con sus gestos
El decorado siempre bastardo de una ciudad felina
Los maricas y sus citas
De prpado en prpado, su lenguaje binario
Como polillas siempre atentos a una nueva antorcha
que surja en el vergel nocturno
Uno es la otra la otra es ella en mi y en el otro
Sus pequeos y violentos actos
Paridos en estertor de un circo pobre
En una luminaria se emborrachan los maricas
Y relatan siempre una misma historia
Despatriados los maricas levantan una bandera; un
paolete izado
en la fetidez de las muelas

De la mano van los invertidos


Al encuentro de matarifes, lumpenaje y soldados
Al encuentro de mi canto
Al encuentro de un plumaje abanical
Locos y tristes los maricas
Condenadamente alegres
Indeciblemente bellos, bellos.

Lingual

de

no conocemos el uso de las palabras -fue su grave


sentencia- y como colibr su lengua se pos en un juego
alas y slabas -segn ella Wittgestein y Lezama tarde o
temprano apareceran-

Liada en el lmite de un lunar venusto


Lees el lupanar latido de tu nombre
Lacrada y loca haces de tu voz un
Ltex lingual en el rosal de las vocales

La carcajada de limo en la verga de la noche


Liblula lustrosa; simulacro en el muecal
Jacinto de tu padre
Levitante lanar de liendres, orqudea nefasta
en el ulular de tus miembros, en el
Linceo parpadeo; silbico orinal de los hombres
Labial ligoso de tu cuello, aljfares que hacen de tu
boca
una cueva de deseos
Lengua perdida en el luminoso letral de un Chile que
deviene
Lgrima, pene y herida.
Juana Iris en alcohlico trance
recitaba a todos una pequea cancin de un
desaparecido
poeta "maricn es una palabra que invent mi
padre para
burlar tu vida" relinchaba en ayes y delicados
momentos
blancos donde el dulzor de su mueca alcanzaba
instantes
de beatitud La Iris se detena como una lechuza que,
posada
en el balcn de la noche, apretaba su pecho y su voz
era otra
La revista nocturna se tornaba en sepelio de monjas.
Entonces, el poema es una cascada de Koans:
Las razones para el espritu son las mismas
para la carne.
Entonces yo difunto
Pronuncio las mismas palabras

Cuatro veces cuatro.


Hay asanas, incluso
Para olvidar a los dioses.
Mi color para los ciegos es el negro.
No recuerdo su lengua
Pero su verbo agobiaba
Los pilares del anterior rito.
Este pesar
No deja amar al que me
ama
La nieve mata golondrinas
Y yo no puedo hacer nada
La noche es una jaula y la desnuda plaza una
inicitica
choza atestada de Lloicas Juana oficia de Sibila con
slabas enguantadas de blanco y terror.
Al amanecer Juana Iris es Jonathan Riquelme
Melenao.

paz

[primer escndalo febril:


Ella asiste a la nivea e inquietante
de un monitor]

De cmo llegu a or En las es


invertidas del corazn A aquel
ophanim nocturno y callejero De
cmo vi rodar su pequea boca
Bajo la lluvia -que hiere y purificaDe cmo tiembla el huesal de los
das Tus das que son tres
orqudeas en el ojo de un pjaro
De cmo tu cabeza se separ
totalmente de las cosas Y sola
parti en busca de una patria De
cmo trepaste al nocturno de los
rboles Y en hojal silencio
asesinaste a un joven verano De
cmo tu vestido se enred En los
stanos de la noche Y tu voz fue
un recuerdo En la mortecina luz
de un cuarto.

mientras contemplas una


estampita de la Virgen del
Carmen, circundada de neones
estalactita, el metaforn de una
mueca sepulta baratijas enjoyadas
de miserias

En tu jardn una rosa


Sobre la rosa una abeja cancionil
Sobre la abeja un diamante de sol
En el diamante el mofletudo dedo
de un querubn
En el querubn el floral pelaje de un corazn
En el corazn una mujer atrapada
en mueca relicarial

En la mujer una sonrisa que pretexta la paz y


en su paz un paisaje
En el paisaje una antigua edad
En la edad una casa gris
En la casa un almidonado cuarto de humo y msica
En el cuarto t atravesando un ventanal
En la transparencia tu sombra
En tu sombra comienza un jardn, tu jardn
En tu jardn una rosa
Sobre la rosa tu ojo que huye en la abeja tragada
Por un colibr
En el colibr, la maana el plumaje
en la maana tu cuerpo entumecido...
por algo

en un circo de obrera fama la tsica


se baaba en grgaras de

amor -sal, agua ardiente y unas


gotas de coca-cola, que en snico
gorjeo, daba a su soledad la
impronta de un calendario
tricolor-

El roce a la rosa
Y loca la rosa se
deshoja
Su acuarela en el espejo
La pedrera: plumaje en oloroso lenguaje
Hilvana de vocecillas el marco deste cuadro
Un sol bicfalo al unsono
Un ciervo despistado en un oleaje de luces
"si yo encontrar un alma como la ma"
-desde un camerino interiorToda ella
de la escena hace una Juana de Arco
Suspendida e incontrolada
-Una cruz en cruceGuillotina de un lamento que
Ofrece dos mitades y un santo por talento
Y vuelve al musiqueo de los rezos:
-San Sebastin, San Antonio, San Judas Tadeola reconstruccin, quiz, de una opereta:
Oro y esmeralda
Una lira de plstico para el divertimento
Una oscura perla en gargantillas y
palabras.
Su odio y su msica

Un minuet a tres voces, a tres iras.

el incandescente aparecer de una beata.

(Juana Iris)
Otra lamer el polen de tus labios
Aquel mariposeo de palabras
Las negras y las escarlatas
Otra leer un mantra de amor
en el fosforescente enmudecer de tu boca.
La costra el sigilo la decapitacin el vendaje
La burla el alquitrn una banderita
El postizo la plenitud el terror
Mi naturaleza tu naturaleza
El andamiaje la huida el despojo
Te pareces a alguien que vi morir anoche
Tal vez era yo, Iris en una colcha de sangre
Diez aos menos una solerita negra
Agujetas tafetn espejeante y,
una jilgerona risa a modo de aura.
Tal vez

era yo
sumergida
en un jardn de pas y esperanzas.
Otra confeccionar la bandera
Que t y yo hemos pintado en la herida de la noche...

Vienes de una ciudad


ms antigua que el cielo americano
de aquella palabra recuperada en la sangre
que no es ms que un deseo floral,
una vulgar imitacin de orqudeas y nomeolvides,
an cuando es tuyo el don de Polidectes

Un aliento de guirnaldas y navajas


una Hcate en el molino de tus labios
Vienes de una ciudad
ms antigua que el cielo americano
Nivea y lingual cae aquella palabra
tan comn para otros
y que para ti es una joya atrapada en la musiquilla de
tu nombre
siempre ajena
a un beso que olvidas
en la nenica vrtebra de un rbol
irresistiblemente solo y bello.
Vienes de una ciudad
de aquel sol que tie
el poema de tu cuerpo
Y solo
decides
que el amor es una hebra de alcohol en la avenida de
un pueblo.

Dos Escrituras
I
De la costilla de un ngel
puedes deducir el nfimo trazo de tus labios
como tambin la pulsin de tu hbrido ojo sealando
una direccin inefable en el santo satn santo de un
breve icono
rudimentariamente bello y pueril
Pjara que a pasos de hada cree vencer el abismo
y que con ligero canto despeina el salvaje aleteo de
/un ave del
paraso,
una pluma de l es una guirnalda en tu cuerpo
mas tu desnudez es la de una piedra
que suea la muerte, el oro y un nio.
II
Cristalino estado de poseer canciones y mapas en el
glande
Sumergida en el polleral de la hermana marica
Pfano y anodino, el diablo que te mima.
Cruzado e invertido en el goteo de tu miembro
Ave del paraso am cuanto quiso
en espejo
salino

en el rizo resonante de un amor.


Mitad varn mitad hembra
De sol la cabeza, de luna las vrtebras.

En este cuerpo/ en el cual


la vida ya anochece/
Vivo yo.
Ral Gmez Jattin.

Qu vas hacer con esta lengua difunta


con esta diadema sonora, con esta cabellera de amor
/que peina el deseo
con este hasmalin, sileno y perifrico
Qu vas hacer avecilla escarlata con aquel recado de
sol,

con la melindrosa meloda sepultada en la bella


/ ansiedad de un
adolescente
Qu vas hacer bartono incoloro con el juego de tus
/voces, tus voces que
anidaron
en la geometra de un enjambre
oh, muequita de huesos decorada de acantos y
madreselvas
Sabes la imposibilidad de tu viaje Alguien te
sorprender
bajo un farol, bajo tu peine.
Sabes que una bpeda gota de amor te espera en un
desierto
Sabes que los tulipanes te sonren esta noche
Sin embargo, tambin sabes que aquello es un ldico
/parloteo en la
rama
ms alta
de la locura

Passaro
ave plmbea
en el prtico de tus pestaas

Un pjaro sonre en tu ventana


su aleteo es una secuencia de luz y rbol
Plida la maana cae
en la iridiscente piel de un lagarto
Un verano oculto detrs de un sol
La certeza es un dibujo seo
tangible slo
al vaho de una sombra
tangible slo al abyecto poema de Dios.
Cuando un pjaro sonre en tu ventana
calla la maana calla.

un beso para pap

albinas y
Todas ellas

digamos que eran estpidas y feas;


ojerosas -unas Venus del siglo Vlas nias de la moda. En Juana Iris
despertaba una protagnica y

pasarela
seo crujido
de
de reality

fantasa, mas en la temporera el


de sus pmulos daba al programa
variedades una ldica combinacin
show y documental sudaca.

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
(Vestuario)
&
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
esta higuera que da ciruelas
Confeccionas un vestuario
Una manta para la nia
Que atraviesa el prostibular
Corazn en busca de un padre.
Hilvanas un idioma, cantatriz de los ros y la sangre
Cantatriz de todas las palabras que temen los
hombres.
Ve a pintar la sombra de tu lengua en la orfandad del
medioda
Ve a or el himno que gorjea en los aretes del verano
Y toma cada risa herbal como signo de un futuro
viaje.
Escribe el nombre que te dio la patria;
Aquella vocal bastarda -piel lodo ayesY bella
decapita
el nombre de tu Padre.

Pasin y muerte del novicio ms amado de


nuestra religin
l (que toda su vida fue ella) desconsolado en el
caramelo de su encarnacin pareca intuir desde su
ptica (en tristsima tsiquez) el amargo pasaje en
aquel templo, la preez del instante presagiaba el
agobio y la miseria que el pequeo marucho y la
monja china urdan, cuales sastres de un desprecio
maysculo, en su oropelado cuerpo (desierto
diamantino) dispuesto al convite de nuevos
infortunios.
La monja china renda homenajes esdrjulos a un
pasado (una pequea edad de oro) consagrado a un
dicono ausente de toda religin, en cambio, el
marucho pareca ser slo una sombra en el teatro de
Pekn, una gata siamesa doblemente mala en la
ortiga reina de su lengua.
Una noche l (que toda su vida fue ella) olvid la
escritura en el ejercicio de su trascripcin. A decir
verdad su otra belleza ofenda el destello de una cruz
que en su mutilacin haca del prtico dos sortijas en
el dedo de mara, en el ojo del convento... "estoy
desapareciendo en la puerta de mi casa me veo con
sandalias y rostro de Cristo, con el cuervo en el

hombro hablndome de la muerte y sus prodigios,


estoy desapareciendo como una estrella de cabaret,
hambrienta" ltimo sueo signado en el muro sur de
su celda.
lo escuch de una mujer que no distingua clientela y
que como una liblula negra se daba al robo la intriga
y claro, al fellatio. Una putfula tropos que de hilos, oro
y seda, cortar no estilaba, mas bien su sastrera [que
dibujaba en gran parte de su mentn un calgrama
oscuro, iluminado por selenita perla en el pabelln de
su msica; un trobar clus] era un quirrgico argot
(venablos fresnos cuernos y dardos) que operaba en
fotomontaje la ridicula lnea del amor. Alguna vez
Yolanda Sultana le minti.

(Norte Sur)
Yo no s a que le temen la sangre y la noche
sopranos de tu pera
Si tuyo es el espejo y la carcajada
que urden los muchachitos y,
que asomados como jaguares nonatos
ofrecen su estrella por msica y manzanas
Yo no s qu murmuran la hierba y las ratas que
lucientes de envidia roen la piel de una sonmbula
Yo no s si es amarillo oro o amarillo hojal
el muchacho que en la ua de un charco canta
Debe ser la sangre y la noche
Meretrices asustadas
que violan un taxi y olvidan tu nombre
-yo dibujo el mapa de Chile en la soledad de una
garitaYo no s a qu le temen los hombres
si tu lengua desaparece en la esgrima lunar
de una carretera

S, deben ser las ratas y su presagio ftido y miserere


las que toman de mi boca el breve beso de una
noche.

] Cortometraje [
ms

Ms all de la necesidad, el objeto del deseo es,


humanamente el "milagro", es la vida soberana
all de lo necesario que el sufrimiento define. Este
elemento "milagroso", "que nos encanta", puede

ser
de
que,
pobre

simplemente el brillo del sol, que, en una maana


primavera, transfigura una calle miserable. (lo
incluso, endurecido por la necesidad, el ms
experimenta a veces).
Georges Bataille

Quiz en aquella cancin que detiene a la sangre


O en el confuso sentimentalismo de los encuentros
Halles la lengua que ocultan
las guirnaldas de la noche,

Aun cuando en tu boca


Las palabras se parecen a los prpados
Y los prpados a un felino muerto en el follaje.
Quiz en el celofnico secreto de los amantes.
En la cabellera, en el oleaje;
Melindre humoso, plumar de azotes
Lentejuela y caritide...
Quiz en el equvoco de sus nombres
o en el arete de vida en los ojos de la muerte
halles el diamante y la msica
Para un jardn que florece
slo de noche.
] tras el venezolano culebrn el lector deber
soportar el catdico lagrimeo de Mara Jorquera Melenao
temporera y bataclana [

un extrao sueo relatado por Juana Iris a un

grupo de colectiveros en natre noche y, dcil


silabeo. Entrada sur de Santiago.

(Postal)
Piensas en otro camino:
Un hombre medianamente feliz
Tal vez en un pueblo con nombre de santo
pradera rebaos cultivos:
Una pequea postal con un fondo de sables
Una breve belleza muerta.
Una mujer atiende tus cabellos
-un martillo de luz en la ventana que miro
cada maana
despus de tanto despertar, despus de tantos
despertaresUn aralim gorjeo
Parte en dos trigales y bosques
Grandes trozos de pan
Pequeos trozos de felicidad
Piensas en otro camino,
Tu amante, un carruaje...
En matinal silencio
Una breve belleza muerta.

luego de una fiesta perifrica la luna, que entre


tequilas y vodkas ha adquirido una marea
notoriedad, sermonea a sus invitados.

(Juventud)
Te dijeron flores y msica
toda la noche
Pero ella slo trae frgiles risas
labios de muchachos en indescriptible soledad
Un monlogo angelical disecta el barrio
(la vanguardia de las cosas, la extraa
confianza
/en el espritu)
Tu amante en sanguneo ejercicio
decora el asfalto
desde aguas oscuras hasta el ro de la vida
En la pblica soledad de una plaza
los murcilagos asedian a una lloica
No despiertes a la sonmbula

Ella atrapa al diablo y lo devuelve a la noche


Te dijeron flores y msica
pero slo bebes un fro t
aun cuando llevas sombrero de sol
y una juventud jams entregada.

Cotidiano
Una serpiente:
Una trenza de sol, labial umbrosa en la escama
Una terraza en Babilonia, un jardn bellamente
despreciado en la bruma matinal de las cosas
La desnudez de un muchacho en un villorrio
espejeante.

El da es una muerte constante


que reseca los triunfos anteriores.
La ceguera y los naranjos,
las calles y las promesas
Huye antes de que tu aura sea objeto de antropologa
barata;
una mnima coleccin de sonidos, un
/calidoscopio parlante.
Una serpiente:
perla ensortijada en el oreo de tus labios
en el plumaje de las palabras.

Accidentalidad
Un dbil paseo por los molinos de la ciudad,
una seal de vida
Un muchacho de azul divorcia el canto del sonido
y su cabellera es una polilla;
un diamante atrapado en el mueble de las
osamentas
Y de lo pblico a lo privado
no hay ms que un gentil jovenzuelo que te lleva
a cuartos donde el aroma no es el de las rosas,
sino la accidentalidad de una herida.
Una ciudad hunde tu lengua en la verde sbana de la
noche
Una avenida de percales y guindas es lo nico
terrestre.
Y te abandonas al destino de una mano

a la voz de un caballo sordo


a la voz de un cadver
rodeado de intiles palabras.

Una Patria

Toda bandera es un ro de sangre.


Stella Daz Varn

De la mano de un poeta
junto a las aves de la noche,
hacia el quejumbroso amanecer de una lagartija
hacia el diestro y manco de un corazn:
el luminoso Santiago su cojera su msica;
una droga espiritual, indecorosa.
Un lunar paseo en la noche zalamera
De tu viaje y el mo, amor mo; sombra y pluma
Dejas caer una liendre de plata
Instalas tu dedo en una nube de moscas
donde las alas son puertas y ventanas.
T y mi guaipe; cosmetloga de una derrota
en esta pretensin de viaje
Humedece el futuro en la boca de un muchacho
y no toques al que canta.
Eres una ruina de aromas y amores en el incendiado
/pasillo de una patria
Una india violentada por una ciudad de balcones y
alamedas
Por las uas de Santiago Por los muslos de Espaa

Por el glande de Santiago Por el ombligo de Espaa


Por las caderas, las arterias, el hgado
Y la bronquial de un relato
pista y dorsal.
Dnde est tu casa
Dnde estn tus pjaros de polen
Dnde est tu foto, tal vez en aquella vitrina pintada
/en la orfandad de una calle.
Subir por la dorsal
Bajar por la hipfisis
periferia de tu canto.

Exilio
una cancin menor, que alguna vez,
tmidamente balbuceo en el aniversario de un
colegio de machitos, en un pueblo miserable.

Con temor has llegado a or el paso de los trenes


San Bernardo mi odio; mi antigua patria
nunca sal de tu horror
Un hombre agita un pauelo
y cree espantar a la muerta
que re detrs de las ortigas,
el mismo que una vez cant

en la turba de los evanglicos.


en el tren de las diez no viene Dios
Con temor abandonas este pueblo
Alguien dice "se va loca"
Una tormenta de risas diluye un beso
y agudiza una tristeza
que nunca sabes de dnde viene
tu tren

simulando aprend a ser verdadero

Escritas en dos servilletas y ante la pacal mirada

de los subalternos -sin comprender nada- la


mensajera de la Iris brot, como una gota ms
de sangre. nicos documentos -cual tesoroshallados en calipsa cartera.

La preciosa caja contena inestimables papeles, as como tres


hojitas de notas manuscritas. Todos estos venerables
documentos eran extremadamente frgiles, pues la antigedad
los haba resecado y hecho quebradizos... El hermano Francis se
puso a descifrarlos lentamente, reconociendo las palabras pero
sin acabar de comprender su significado. En una de las hojitas
poda leerse: 1 libra de salchichas, 1 lata chourote para Emma.
La segunda hoja deca: pensar en recoger impreso 1040 para
declaracin de impuestos. La tercera, en fin, slo contena cifras
y una larga suma, y despus un nmero que evidentemente
representaba un porcentaje sustrado del total anterior y
seguido de la palabra "uff. Incapaz de comprender una palabra
de tales documentos, el monje se limit a comprobar los
clculos y los encontr exactos.

Walter M. Miller (Cntico a San


Leibowitz)
El pecado consiste, en mi opinin, en la voluntad de penetrar de
manera prohibida en otra esfera ms alta. Esto explica que sea
tan raro. En realidad, pocos hombres desean penetrar en otras
esferas, sean altas o bajas, y de manera autorizada o prohibida.
Hay pocos santos. Y los pecadores, son todava ms raros. Y los
hombres de genio (que a veces participan de aquellas dos)
tambin escasean mucho... Pero puede ser ms difcil
convertirse en un gran pecador que en un gran santo.

Arthur Machen (El Gran Dios


Pan)
La vida subjetiva
Cuando eras un hombre
las manzanas eran amadas por la sangre,
Y el pjaro aleteo de la vida
tena el color que otorgan los santos a las cosas.

Tu corazn mutaba.
Recurr a la hechicera
a los fluidos corporales...
Aprend a eyacular hacia adentro
llevo la muerte colgando de mis uas
(rubio cncer en platinado escorpio)
Cuando eras un hombre
el sol era un punto amarillo,
una ampolleta de fonda en tus crneas de vidrio
Y la luna un disfraz menor
para cantarle a hurfanos y serafitus
Una tarde me encontr
con la vida
Y le arranqu sus aros de campesina china
Dise unos ojos para contemplar
la nueva vihda
Cuando yo era un hombre
Tena un padre y una madre
Ora yo soy mi madre
Y mi padre una foto sin boca
clavada en el pecho de Cristo

Lo mutante

Ms calva en su madre dispone


cualquier estrella menor antesala
de un mutante en la plaza de los
acantilados franquea y rompe collar
de palabras las nuestras en deleite
El ms mnimo terror en cabellera
platinada en desastre Toma el
agujero en donde por minucias
juega a enfermera en tropel los
delantales ya lo dijo Ud.: ella es
malvada como msica en fucsio
anonimato opertica de ayes
revienta el signo, hiprtelica en su
ultraje Ms que las palabras
escritas todas en la balda zona de
las identidades Ms que su
teleserie negra morena translcida

el encaje de las vocales Ella y el


mutante en soplidos hieren la paz
hecha sangre en todo altiplano, su
nombre: Miss Andes. Ud. dibuja la
geometra de un pene en el
agujerito de un ngel se llamaba la
vctima en malinches miradas Ms
ac en el cuarto de su escritura el
mutante traza y chilla un ldico
tejido en la lengua glande de su
vulva Y de pus y risa la bella y el
mutante a horcajadas desaparecen
en la hoja que antes fue
sonambular de bosque sonambular
piel de Samotracia sonambular
crnea en vitrina local

cuatro voces intencionalmente desnudas


y expuestas en el fossalario de la noche.

Yo me compr un vestido lindo, pero lindo, cuando


tena catorce aos, lo ocult por un ao, como

tambin yo, al ao siguiente mi padre me exili. Pero


mi vestido mis pinturas descoyaron en una quinta de
recreo en Buin. Ah conoc la vida antes yo estaba
muerta.
La Gaby (Gabriel
Ricardo)
Cuando estuve en cana conoc al Mario, mi marido,
creo que eso fue hace nueve aos l saba que yo era
ladrona y maraca. Me soseg. Ahora estoy juntando
plata pa, operarme y vivir tranquila con el Mario. Lo
quiero tanto.
Denisse (Rafael
Jimnez)
El jueves mataron a la Marin en la panamericana.
Un camionero jalao le puso dos tunazos en la cara, el
culiao dice que le queran robar, pero est cagao. Mi
primo es paco y yo ya le cont todo. Al funeral de la
Marin no fue nadie de su familia, lloramos todas. En
el atad le dejamos su ms bello odio. Quiz maana
sea yo.
La Mueca (Luis Vidal)
A los diez aos me arranqu de Temuco y mi familia.
Pasaba hambre. Ac en Santiago conoc a la Gaby y
la Juana Iris, hemos peleado a madres pero nos
necesitamos.
Rachel (Jos Melenao)
Koans
Cantar en una maana cualquiera
Al abrigo de un muchacho pendenciero
Juana iris es telpata cosmetloga
De su cuerpo hizo un hogar para las videncias
Yo pint de cogulos los ojos de mi padre

Dios te salve Mara derrotada.


Hacas del paisaje un espejuelo un ornamento
teatral, pero, sin tu voz...
En la sangre, ese grave dulzor de la VIHDA.
UN MUCHACHO INTRODUJO SU MANO EN MI BOCA Y
DE ELLA ARREBAT EL CADVER DE MI PADRE
Pdele una cancin a los guindos y tal vez, slo tal
vez, yo sea un poema...

Veo a mi madre sentada sobre la T (te) de la muerte


y,
que anecdticamente forma una cruz...
Sus zapatitos de nia huesal desean tocar la
E del encanto (de la muerte)
La envidia de la R rebana en su doble mutilacin un
territorio.
Veo a mi madre huyendo hacia la U, que ella supone
muda en analfabeto viaje
Sentada en el ilusorio columpio de una mudez
Yo la espo desde la M (eme) de Matria Miedo
para no maldecir y decir que la M tambin oculta su
madre y su muerte

Poner a cubierto todas las imgenes del lenguaje y utilizarlas,


pues estn
en el desierto, adonde hay que ir a buscarlas.
Jean Genet

breve aparicin en un estelar


televisivo de la ms rara confesin de
su electrnico secreto

A veces quisieras despertar


cruelmente
Morir en s mismo, despertar en otro
a veces quisieras llorar tambin
por aquella posibilidad de hombre
que traicionas
a cada instante
Como tambin traicionas
a una hembra dormida
con rostro de spid
A veces quisieras doblar el doble
de tu nombre
y tomado a la mano de tu copia ser
un felino en las cejas de tu madre
A veces quisieras despertar
cruelmente
Despertar
perplejo single interpretado por "Matria
& the Fashion,s Queer", banda fantasma
(de aparicin y muerte fugaz), que alguna
vez cont con Iris en violento rol vocal.

No tuve piedad de sus osamentas


para por ellas usar los cuervos
obligaron a la noche
No tuve piedad de sus ropas ojos
para por ellas usar el rayo
aliment el incendio de la sangre
No tuve piedad de su legua
para por ellas usar las hienas
calipsaron el desastre

primersimo primer plano


en la comisura labial,
Bloody mary de su menstruacin.
Caf Europa.

Como si su cuerpo fuera un lucero de Cranach


Debut en los jardines colgantes del lumpenaje
Trazaba paisajes, una chilean postal, a lo Valenzuela
Llanos dir ud.?
No, tan slo un joven dios latinoamericano O quiz un
violento kouros sudaca
Su actitud por la vida... iba ms all de un mariano
dolor, ms bien dira yo, mi estimado comensal, Era
una Kiriotissa perifrica, Su pequeo pan de oro fue
devorado en la mesa de los crmenes y santos
invertidos Te contar, hablaba de arte tan
livianamente Como de tintes para el cabello, Y segn
ella su madre haba sido empleada en casa de Juan
Downey Y que ella y su muchacho prerrafaelista eran
una especie de David Bowie de la poesa En mi
opinin estos minessinger urbanos seducan no slo
el bulto de sus clientes, sino tambin sus almas y
bolsillos.
No crea Ud. Que la envidio, es slo la apreciacin de
su amiga y confidente.
Me disculpa un momento, ver si encuentro algo
Para el espritu, qu tal Cesar Frank?

El enunciado
Vnida troncha en tropeles violantes
Pajarillo estertor en saeta noctmbula
Clorada de escorpios maquilla de sed
La escritura de la madre
Dial calipso en ventanilla moribunda
Sorteada de rencores
Amarra y silencia electrnica ortopedia
Nieve dios
Velosa aborta la embarazada
/I (de la pregunta)

y no temas a las palabras


pues ellas slo estn de paso
sobre tu lengua
:
Barrnica la festa en la O
Dana de Aries domeo de Virgo
Precipita la fauna nia
Mazatln la indiecita y su domingo
Grilla la crina de viola(s)
En papudo tnacio de U
Ud. domina la androginia?
Iao banclara per piafulo jactarino
Visa y vega fenecillo jopal
Fioleciente Nuger trompe
De la I oculta_____________
Dara cula sarnemin jufeto
Tropa y truffa longo Iao

Mintroso feciese la pua rado


Deal faca luenne aprs
Levar la cuita que oblid
Ora contezca lazerio en albor finar
:
y no temas a las palabras
pues ellas slo estn de paso
sobre tu lengua

Apndice (avisos publicitarios)


Otros pequeos materiales sonoros y encatatorios, hallados en
un cofre carmes. El lector podr examinar y violentar cada
vocal, mas, si no comprende parte alguna, se le recomienda
mantenerse a distancia por su integridad fsica y espiritual.

* Uno de los nombres de la piedra filosofal es


Rebis "el ser doble", literalmente las dos cosas
* Maithuna = Detencin e inmovilizacin de las tres
principales funciones de un ser humano: respiracin,
emisin seminal y el pensamiento
* Dnde estn vuestros secretos, vuestras palabras...
Annimo
* El hombre del futuro ser Andrgino
Apcrifo de Juana
Iris
* Id y pingal_________________________El sol y la
luna

* El hombre bueno ser juzgado como un criminal


* (...) Qu pretendes decir, oh Trimegisto, que Dios
posee
los dos sexos? S, Asclepio. Y no slo Dios, sino todos
los
seres animados y vegetales...
Corpus Hermeticum
* Al resucitar no era ni varn ni hembra, aunque
naci y muri como varn
Annimo
* Yo Juana Iris de arco cielo Yo Androgynus
Hipertelicus...
* Tres momentos romnticos:
Medite en lo siguiente
Coincidencia Oppositorum
Anima Carnis Contra Naturam
Lo flamgero en el Fuego y en la
Sangre
* Bastan ciertas disposiciones geomtricas
de materiales extremadamente puros para
desencadenar
las fuerzas atmicas, sin necesidad de la electricidad
o
la tcnica del vaco
* Mata a tu Padre y maldice a tu Madre, toma lo que
resta de tu corazn y sigeme...
Apcrifo de Juana Iris
* a veces voy donde reina el mal
es mi lugar llego sin disfraz
F. Moura.

Los estatutos de mi Orden me prohiben revelar los


secretos de la mutacin a los seres simples y
vulgares,
a los heterosexuales.
Apcrifo de Juana Iris
* Ahora que el tiempo se ha muerto...
deseara decir a los prximos que vienen,
que en esta casa miserable
Nunca hubo ruta ni seal alguna
y de esta vida al fin, he perdido toda esperanza
J. L. M.
Nota: Si el lector se ofusca en el trnsito de estos
materiales,
se le recomienda repetir el siguiente Koan "si todo se
reduce
a la unidad a qu se reduce la unidad", no obtendr
sabidura, pero su mantralizacin le otorgar un
ilusorio
estado de bienestar y locura. Si se desvanece se le
recomienda tomar un bao de sal, quemar sus libros
y
dormir tres das con sus respectivas noches. Al cuarto
da
Ud. ser una flor maquillada en oro.
Esta nota se encontraba en un sobre magenta que
versaba
"mis cosas" junto a los documentos ya citados.

LA MADRE DE MI PADRE
SELL DE SAL
LOS OJOS DE MI NATURAL
MENTE
MADRE

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