Investigación y Formación Docente - Achilli E.
Investigación y Formación Docente - Achilli E.
Investigación y Formación Docente - Achilli E.
A ellos
que dan sentido
a todo esto
Agradecimientos
Alguna vez le que la preparacin de una publicacin
. puede ser tambin una excusa para 'agradecer a los que nos ayudan a construir ya pensar una temtica. Como as lo siento, mis
agradecimientos son para muchos y por distintos motivos.
Agradezco a los docentes con los que interactu en distintos seminarios, cursos y talleres 'por posibilitar que contine
"rumiando" y discutiendo varias ideas muc.qo ms all de los
encuentros en s, Tambin, a los representantes de instituciones
u organizadores de eventos acadmicos que, con sus invitaciones, me estimularon a escribir los documentos base de esta publicacin,
Agradezco especialmente a las escuelas y docentes con
quieres comparto una lnea de investigacin desde hace varios
aos por sumergirme en las viscisitudes cotidianas del queha-/
cer educativo en contextos de pobreza urbana y en los permanentes desafios cognocitivos que ello supone.
Agradezco a las compaeras de ruta de la docencia universitaria y a los estudiantes por perturbar mis esquemas con
sus crticas, sus diferencias y sus acuerdos.
Agradezco a los compaeros del equipo de investigacin por las reflexiones, los aportes y el extraordinario desafio
de continuar apostando a la construccin de conocimientos resistiendo las condiciones laborales universitarias. Por ello y por
la alegria del trabajo colectivo mi gratitud es profunda.
Agradezco a muchos de los que no menciono pero estn en este texto como una trama silenciosa en la que reconozco mltiples voces que me acompaan amorosamente para pensar, trabajar, vivir.
Rosario, octubre de 1998
lndice
Prlogo
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L El sentido de la Investigacin
en la Formacin Docente
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Qu significa "investigacin"?
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33
33
40
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Investigacin socioantropolgica
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46
53
53
58
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61
65
67
Taller de Educadores.
La lgica de su implementacin
69
79
83
Referencias bibliogrficas
89
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Prlogo
Los textos que componen esta publicacin remiten a documentos que elabor par circunstancias particulares como respuestas a distintas invitaciones recibidas. Aun cuando ello podra imprimirle cierta diversidad, los mismos se sustentan, sin
embargo, en una lnea de trabajo en la que hemos articulado
investigacin socioeducativa con "perfeccionamiento" de docentes en actividad. Una lnea que, en parte, pondera lo que en
esta publicacin ser objeto de una reflexin crtica
En la primera parte, problematizar la relacin entre Investigacin y Formacin docente retomando las ideas bsicas
trabajadas en la Primera Jornada Regional de Investigacin
Educativa de Instituciones de Formacin Docente organizadas
conjuntamente entre la Universidad Nacional del Comahue e
Institutos Terciarios de Formacin docente de la ciudad de
Neuqun en setiembre de 1998. No obstante, muchas de estas
consideraciones fueron compartidas, con anterioridad, en varios encuentros organizados por dlstintas instituciones -universitarias y, en especial, institutos de formacin docente- como
as tambin por organizaciones gremiales, preocupadas por la
incorporacin de la investigacin a los procesos educativos. En
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El sentido de la
investigacin en la
Formacin Docente
.1.
QU SIGNIFICA "INVESTIGACIN"?
De hecho, estamos frente a una nocin a la que no podemos otorgarle un significado unvoco. En un sentido amplio,
los significados varan desde el que puede adquirir en el lenguaje cotidiano hasta el que toma cuando hablamos de "investigar" en el campo de las distintas disciplinas cientficas.
17
Por lo tanto, se abre a una variedad de significados. Puede remitir a la bsqueda que realizamos todos los sujetos -desde que somos nios y a lo largo de toda la vida- como un modo
de apropiarnos de los usos y costumbres del medio en que nos
desenvolvemos. Supone otras cargas de significados cuando
hablamos de "investigar" en el campo de la justicia o en el contexto policial.
En relacin a esto puedo contar una ancdota de mi experiencia como docente universitaria a cargo de una asignatura
de "metodologa de la investigacin".
En una oportunidad, al iniciar un curso realic un ejercicio de asociacin de ideas con la expresin "investigacin"
con el objetivo didctico de retomarlas para construir una
categorizacin que nos permitiera plantear, ms tarde, las consideraciones acerca de diferentes enfoques metodolgicos en
el campo de las ciencias sociales. Muchas de las palabras claves que surgieron relacionaban la idea de "investigacin" con
"lo policial". El episodio podra hacemos reflexionar sobre esta
fuerte presin a nivel de nuestros imaginarios sociales que, aun
en el contexto de un curso universitario sobre "metodologa de
la investigacin" -que, de hecho, ya le confiere un sentido- se
impone al pensar la expresin "investigacin". Sin embargo,
otro aspecto de la ancdota se vincula a cmo, esta idea de investigacin, se relacion con determinado estilo de la investigacin so'cial caracterizado como "positivismo". Estilo que, al
interior del imaginario de estas nociones previas, desde luego,
era rechazado y satanizado.
La ancdota tambin nos presenta la multiplicidad de
significados que la nocin de "investigacin" puede tener aun
en el mismo campo "acadmico". As, en la "academia" se abren
diferentes significados segn los criterios de cientificidad que
orientan la idea de produccin de conocimientos en el campo
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b) niveles de explicacin conceptual en los que, sin abandonar las relaciones constitutivas de la particularidad
coprensencial se las inscriben y construyen al interior de relaciones estructurales/generales.
En cuanto a lo que aqui nos interesa -la vinculacin de
la investigacin con la formacin docente, aun cuando podra
pensarse tambin para otros campos- es posible realizar otra
diferenciacin al interior de los procesos de construccin de
conocimientos.
Por un lado, investigaciones sustentadas, a nivel de lo
terico y metodolgico, por los requerimientos que supone aportar al avance cientfico de determinado campo de las ciencias
sociales si bien ello tenga implicancias prcticas/polticas determinadas.
Por el otro, investigaciones ms cercanas a las caractersticas de un estudio. Es decir, investigaciones que implican
resoluciones conceptuales y metodolgicas, -no siempre explcitas- al modo de una "investigacin para" concretar alguna
accin enjuego. Dentro de estas modalidades de estudios, orientadas desde y para alguna "accin prctica" definida, las diferencias son mltiples tanto en estilos, tipos, diseos como en
las concepciones en que se sustentan. Cercanas a estas formas
de "investigaciones para" -a las que, a fin de evitar confusiones, prefiero denominar "estudios" - ubico modalidades dirijidas
a la objetivacin de la cotidianeidad escolar en las que nos
detendremos ms adelante. Es decir, "investigaciones" 0, mejor dicho, "estudios" orientados "para" concretar acciones tendientes a re-pensar/transformar dterminadas problemticas del
quehacer escolar y, para nuestro caso, de la "prctica" o la "formacin docente".
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QU SIGNIFICA
"FORMACIN DOCENTE"?
Aclarar nociones ayuda a comunicarnos. Adems, mi
intencin apunta a problematizar no slo cada trmino sino,
tambin, el modo en que se resuelve la relacin entre "investigacin" y "formacin docente" ya que considero que, tal modo,
no es autnomo de determinada concepcin terica/conceptual
e ideolgica en la que se sustenta.
En este sentido, nada ms pertinente que aclarar una
nocin como la de "formacin" que se encuentra, tambin cargada de diferentes connotaciones en el discurso que ltimamente
circula. Sera muy interesante, aunque trasciende el objetivo
que aqu nos proponemos, analizarla en el discurso de los "expertos" ministeriales y en las documentaciones elaboradas.
Despejarla en esa retrica "yuxtapuesta" que, sin embargo, no
oculta la lgica "productivista", "empresarial" con la que se
impregnan los procesos educativos. As el sentido que se le
otorga a la prctica docente cruzada por las "gestiones"
curriculares y los tecnicismos didcticos/pedaggicos tendientes a su "profesionalizacin". En:fin, una revisin que aqu no
realizar ya que excede lo que nos proponemos.
Es evidente que cuando se halba de "formacin docente" se ponen en juego un conjunto de supuestos en tomo a diversas cuestiones: ya sea la concepcin de sujeto "a formar", el
tipo de formacin que se considere pertinente e, incluso, la misma idea de "formacin" en tanto proceso de enseanza y de
aprendizaje.
A los fines especficos de este trabajo voy a ente:qder
por "formacin docente" a determinado proceso en el que se
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23
que van desde las "planificaciones" del trabajo ulico a las actividades de asistencias alimenticias, de salud, legales -colaboracin con la documentacin de alumnos "indocumentados" u
otras. Actualmente, habr que sumar los mltiples relevamientos
poblacionales, los diagnsticos y la elaboracin de diferentes
"proyectos innovadores" necesarios para alguna "incentivacin"
financiera para la institucin. Tal vez, un modo -burocratizadode "obligar" a la "investigacin".
Ese conjunto de actividades, a su vez, se imbrica con el
entramado de significaciones socioculturales que van configurando los procesos constitutivos de las identidades docentes.
Tal diferenciacin conceptual - entre "prctica pedaggica" y
"prctica docente"- nos permite poner de manifiesto una fuerte
hiptesis con la que venimos trabajando desde hace aos. Suponemos que la prctica docente se va disociando/ enajenando de la especificidad de su quehacer: la prctica pedaggica.
Para ampliar esta hiptesis decimos que se produce una neutralizacin del trabajo con el conocimiento tras ese conjunto
de actividades, interacciones y significaciones que configuran
la prctica docente. En otras palabras, las condiciones de trabajo docente, las actividades burocrticas y externas a lo pedaggico, la estructuracin jerrquica que caracteriza las relaciones intitucionales -en el sentido de transformar al docente en
mero "transmisor" o "ejecutor" de lo que disean o generan
otros-, son algunos de los lmites que lo diluyen como sujeto
"intelectual". Es decir, que lo "alejan" del trabajo reflexivo y
crtico del conocimiento. Ms adelante, nos a detendremos en
algunas caractersticas que adquiere la prctica docente en su
relacin con el conocimiento.
que ubicamos las prcticas de "formacin" - fundamentalmente, por dos motivos. Por un lado, como un modo de esclarecer
algunos supuestos desde los que orientamos los planteamientos que realizamos y, por lo tanto, posibilitar al lector una critica a los mismos a partir de dicha contextualizacin. Por el otro,
como un modo de transferir estas nociones que nos fueron tiles para conocer y describir aspectos de la cotidianeidad escolar, con la intencin de mostrar -aunque esquemticamente- el
uso de ciertas categorias para que se utilicen o generen otras
que permitan analizar situaciones educativas. .
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INVESTIGACIN Y
FORMACIN/PRCTICA DOCENTE:
LAS LGICAS DE OFICIOS DIFERENTES
Realizadas las anteriores aclaraciones conceptuales estamos en condiciones de plantear que tanto la "Investigacin"
como la ''Formacin Docente" -en su carcter de prctica pedaggica- tienen en comn el trabajo con el CONOCIMIENTO,
En este sentido, el conocimiento se configura en el campo de
interseccin entre los procesos de investigacin -mbito en el
que se generan/construyen- y los procesos derivados de la prctica docente -mbito de re-trabajo al interior de los procesos de
enseanza y de aprendizaje,
Investigacin, Formacin I
Prctica Docente y Conocimientos
Formacin ,.
Prctica Docente
Pedaggica
'---.!
Conocimientos
1-----'1
En la Investigacin se realiza un trabajo metdico y reflexivo en la generacin de nuevos conocimientos sobre un determinado campo disciplinario
En la Formacin/prctica docente tambin se produce
un trabajo metdico y reflexivo sobre el CONOCIMIENTO.
Sin embargo, es un trabajo centrado, fundamentalmente, en tomo
a los criterios de la accin pedaggica con los que se pondr
26
27
i.
II
I
28
hoy estamos en presencia de una explosin de trabajos que intenta realizar alguna vinculacin -entre investigacin y formacin/prctica docente o problemticas escolares-, perviven en
ellos algunas disociaciones reductivas. En principio, sealarla
ciertas cuestiones que se vinculan ms a determinados enfoques de investigacin que reducen la complejidad de los procesos socioeducativos. En tal sentido, podramos mencionar tanto a enfoques "globalizantes" de los sistemas educativos con
escaso o nulo tratamiento de sus niveles de articulacin e
implementacin. Tambin abordajes de un "detallismo" de los
cotidianos escolares cuya desjerarquizada fenomenologa -sin
establecer algn nivel de preponderancia explicativa de los fenmenos- desconoce las condiciones sociohistricas en que se
inscriben.
A su vez, en uno u otro, es posible detectar enfoques
homogenezantes que, por lo general, marcan las tendencias recurrentes des-conociendo otras prcticas y relaciones escolares. Por ejemplo, es comn leer trabajos centrados en las situaciones de "crisis" educativa, en las tendencias ms
desestructurantes de los procesos escolares actuales, perdindose otras experiencias, muchas de las cuales se toman "no
visibles" por carecer de herramientas conceptuales y
metodolgicas que posibiliten "otorgarle existencia". La importancia de estos aspectos "no documentados" reside en que
los mismos, podran ser indicios de nuevas prcticas/nuevos
sentidos de las relaciones escolares.
De tal modo, nos interesa -a nivel de la investigacin
socio educativa- desarrollar un enfoque integral y complejo que
posibilite conocer las distintas mediaciones estructurales y cotidianas de los procesos educativos en sus recurrencias y en sus
singularidades. Un enfoque con el que, adems, pretendemos
visualizar aquellos aspectos "no documentados" como las "uto-
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pas" escolares entendidas a modo de construcciones/ creaciones/opciones que los sujetos desarrollan como posibilidad de
apertura a nuevos horizontes en el campo de las prcticas y
relaciones educativas",
A su vez, entre otras de las distorsiones halladas en la
relacin entre investigacin y prctica docente sealara algunas "modas" que se presentan como modalidades para "formar", "perfeccionar" o "capacitar" a los/as maestros/as o profesores/ras. Fundamentalmente, me refiero a aquellas dirigidas
a formar "docentes investigadores" que hoy vuelven a tener
vigencia Ya a fines de los aos 80 hacamos una crtica -en el
mismo sentido que Eduardo Weiss lo haca en el contexto mexicano- por implicar una situacin doblemente engaosa. Primero, por desconocer que, al tratarse de "oficios diferentes" supone -como vimos- enfrentar distintas situaciones, distintas dificultades, distintos ritmos, distintas exigencias. Segundo, y tal
vez ms perverso, creemos que supone una desvalorizacin de
la prctica docente en toda la complejidad de su especificidad
Desvalorizacin que se oculta al incorporar otra prctica como
la "investigacin" que pareciera adquiere mayor legitimidad,
incluso entre los propios docentes.
Considero que hoy esta "desviacin perversa" vuelve a
plantearse en un doble movimiento de enajenacin de la propia
prctica docente.
.. Una aclaracin que corresponde hacer. Lo "no visible" o "no documentado" -por aislado/singular/no recurrente/- no siempre tiene una carga "utpica". Los contenidos de esos aspectos se confieren en el proceso de anlisis e
interpretacin de los mismos en relacin con los contextos generales en que
se inscriben.
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INVESTIGACIN Y FORMACIN/
pRACTICA DOCENTE.
ENCUENTROS Y DESENCUENTROS.
Hasta aqu hemos planteado a las prcticas de "investigacin" y "docencia" como oficios diferenciados. Nos referiremos ahora a las posibilidades de encuentros entre Investigacin -como generadora de nuevos conocimientos- y Prctica
Docente -en su especificidad de prctica pedaggica- para poner de relieve, en primer lugar, los modos de relacin con el
CONOCIMIENTO, eje de una y otra prctica y, de ah, campo
de interseccin de las mismas.
En segundo lugar, analizaremos algunos de los caminos
que hemos seguido desde la investigacin socioeducativa que
podran brindar concepciones, criterios y herramientas como
modos de pensar y re-pensar las prcticas y procesos escolares
y particularmente la FormacinlPrctica Docente. Es decir, extraer algunos usos de las investigaciones socioeducativas orientados a determinadas transformaciones educativas sin que implique un desplazamiento de la especificidad de la prctica docente.
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mtica, de hecho, opaca las mltiples situaciones que se construyen cotidianamente en la docencia-, es importante no entender a las diferenciaciones que marcaremos como situaciones en
las que pueden "clasificarse" el conjunto de prcticas docentes.
Por el contrario, las planteamos como grandes tendencias o,
seria mejor decir, como "construcciones claves" -en el sentido
de una abstraccin que acenta ciertos aspectos parciales de
una problemtica ms compleja-, con la intencin de re-marcar
y explicitar con ms claridad los condicionamientos que limitan a esta prctica. Por ende, no remite a situaciones "individuales"; ms bien parte de entender a los sujetos y a sus prcticas como sociales. Ello supone inscribirlas en un momento histrico que, como ha dicho el historiador CarIo Guinzburg (1981),
se transforma en la ''jaula flexible e invisible" donde los sujetos pueden desplegar una cierta "libertad condicionada".
Prctica Docente
Pedaggica
' - - - -. . 1
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Investigacin I Estudio
Socioeducativo
Prctica Docente
Pedaggica
r~_----~I
~I______~_
r
b) Un modo relacional de apropiacin
Prctica Docente
Pedaggica
de los conocimientos a trabajar que permite realizar selecciones pertinentes, evaluarlos en su interaccin con los sujetos de
aprendizaje, transformar y transformar-se en las prcticas de
enseanza. En este sentido, entendemos la prctica docente
como "trabajo intelectual" tal como lo plantearemos en el siguiente captulo.
del conocimiento
Bajo un modo de relacin con el conocimiento que caracterizamos de apropiacin nos interesa incorporar un conjunto de situaciones que podramos considerar como las ms
generalizadas en las prcticas docentes. La modalidad que mos-.
tramos anteriormente resulta parcial ya que no siempre coincide investigacin y docencia y, an cuando sea as, la mayor
parte del conocimiento que circula en el aula es resultado de
procesos de apropiacin. Utilizamos la nocin de apropiacin
para diflnir ese proceso mediante el cual los docentes se
involucran activamente en la intemalizacin de un objeto o campo de conocimiento. En ese proceso, resulta transformado y
reconstruido. Es un modo de relacin que implica un trabajo
reflexivo que incorpora el conocimiento a partir de entender/
conocer su lgica, sus fundamentos, sus diferenciaciones. Un
trabajo de constrastacin crtica del conocimiento acumulado
como base para decidir qu recortes hacer, cmo, por qu.
modo de relacionarse con el conocimiento posibilta desarrollar una prctica docente/pedaggica caracterizada por un posicwnamiento
al mismo y, por tanto, consciente de las
selecciones y jerarquizacones que se realizan para trabajar en
el contexto del aula. En sntesis, una apropacinlinternalizacin
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Con el siguiente esquema pretendemos mostrar una modalidad relacional con el conocimiento que, a diferencia de la
anterior, implica un corte a modo de profunda discociacin,
entre eUlos conocimientos generados en el campo de la investigacin y aquellos conocimientos que circulan en el aula. 0, es
ms claro decir -aunque parezca ms duro- que se trata de una
prctica docente disociada del conocimiento.
Investigacin
I Conocimientos I
Prctica Docente
Pedaggica
I
IConOCimientos
Supone una relacin de "exterioridad" con los conocimientos generados. Un "contacto" con determinado campo de
conocimientos "obligado" por los requerimientos de la prctica
pedaggica. En este sentido, se construye una prctica reducida
a mera transmisin, a un trabajo de "ejecucin" de un conoci-
39
miento "externo" al docente. Una prctica limitada a la circulacin de un conocimiento "ajeno", "no perteneciente" ni incorporado a la propia experiencia de trabajo. Es decir, una prctica docente alienada en la medida que se trabaja con un conocimiento que ni se ha generado ni se lo ha apropiado
significndolo y re-significndolo en el proceso pedaggico.
Estas situaciones al entenderlas como generadas por distintos condicionamientos que cruzan las prcticas docentes trascienden lo que podra plantearse como "responsabilidad" individual del docente. Como ya expresamos, aqu nos proponemos mostrar situaciones que suponen un sujeto social en el sentido de un sujeto inscripto en determinado contexto
sociohistrico y cultural y, por lo tanto, dentro de la "jaula flexible" de una poca en la que puede jugarse determinada "libertad condicionada". Situaciones que, a modo de problemticas a
objetivar al interior de las propias prcticas de los sujetos
involucrados, podran "ampliar" los mrgenes de esas 'Jaulas
flexibles" si son consideradas y re-consideradas en procesos de
co-construccin colectivos.
~
Investigacin "para" I Estudio
sobre la Prctica Docente
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Pedaggica
"
Pnlctica Docente
.
Conocimientos de la
# Procesos de Objetivacin
# Identificacin de "ncleos problemAticos"
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42
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LA INVESTIGACIN SOCIOANTROPOLGlCA.
Trataremos de referimos brevemente a algunos aspectos de la investigacin socioantropolgica, destacando aquellos ejes que privilegio desde un enfoque orientado al conocimiento de la cotidianeidad escolar que, a la vez, podran desplazarse a las prcticas de formacin docente, al amparo de las
advertencias ya realizadas. O sea, un desplazamiento sin neutraliz~ la particularidad del oficio docente en toda la complejidad que supone la lgica de la accin pedaggica dirigida a
producir transformaciones en los sujetos mediante los aprendizajes correspondientes.
Ms bien, pensamos que pueden retomarse algunas de
las estrategias que utilizamos -en el trabajo de campo y el anlisis del material generado- como herramientas pertinentes para
generar procesos de objetivacin de las propias cotidianeidades.
Es lo que realizamos en los encuentros con docentes y, de modo
ms especfico, en lo que denominamos Taller de Educadores,
cuya lgica de implementacin desarrollaremos en el prximo
captulo.
De todos modos, para que estas estrategias no sean consideradas "tcnicas" vacas de contenido, me interesa inscribirlas dentro de un enfoque terico que le confiere sentido. A su ,
vez, agregara otra advertencia, la importancia de no sacralizarlas
a modo de nica posibilidad de lograr determinadas instancias
formativas.
Teniendo en cuenta que dicho enfoque recupera el quehacer "etnogrfico" -aun cuando' preferimos designarlo como
socioantropolgico asumiendo una concepcin ms abarcativa
e integradora- y que, en la investigacin educativa se ha extendido tanto la denominada "etnografia", trater, en principio, de
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45
Bajo el nombre de Etnografia se hace referencia a distintos supuestos, aWl dentro de la misma Antropologa, .campo
disciplinar en el que se origina. Se la considera Wla "rama"
antropolgica vinculada a la descripcin de los grupos tnicos.
Rama diferenciada de la "etnologa" tras el supuesto de que
sta trasciende el carcter descriptivo mediante la teorizacin y
comparacin de los diferentes "etnos" o pueblos. De ah que,
en la misma Antropologa, subyace Wl fuerte supuesto de entender la Etnografia como "etapa" descriptiva en el proceso de
investigacin de Wl grupo humano. De ello se desprende Wla
concepcin de la "descripcin" como momento a-terico. Concepcin discutible ya que pareciera ser posible "describir" como
si sac.ra.Inos Wla fotografia.
En realidad, la descripcin, como Wl detenninado nivel
de construccin de conocimientos, est siempre mediada por
algooa orientacin conceptual que -explcita o implcitamentejerarquiza algWlOS aspectos sobre otros.
En cuanto a la expansin de la etnografia como enfoque
de investigacin educativa en Amrica Latina, desde finales de
3 Aqu retomo algunas consideraciones planteadas en el Panel: "Investigacin en la Formacin Acadmica y en la Intervencin Profesional" del Encuentro Acadmico Nacional organizado por la Federacin Argentina de
Unidades Acadmicas de Trabajo Social-F.A.U.A. T. S. - en la ciudad de Santa
Fe el da 25 de Setiembre de 1998.
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47
I
~.
r
En primer lugar, un ncleo que remite al inters o la
orientacin de la antropologa por 10 que muchos autores han
denominado la documentacin de lo no documentado. Es decir, un inters por conocer aquellos aspectos de la vida social
que habitualmente no se hacen pblicos. Situaciones que se
viven en el cotidiano -ya sea como formas rutinarias del quehacer o como singularidades aisladas- y que, no obstante ser el
modo en que se desenvuelve gran parte de la vida social, al no
tematizarse, no transformarse en "conceptos pblicos", quedan
desconocidos. El campo de lo no documentado puede remitir a
problemas de distintos rdenes: lo familiar, lo obvio, lo
intersticial, lo informal, lo paralelo. Parte de lo no documentado remite a 10 que A. Giddens (1982) -replanteando una nocin
que ya haba utilizado Marx:- llama "conciencia prctica" para
referirse a los modos tcitos de conocimiento que los sujetos
generan en los contextos de su vida diaria. Tambin, dentro de
lo "no documentado" se puede ubicar "10 oculto" ya sea como
el entramado de los intereses y poderes de quienes dominan y
que nunca ponen por escrito (E. Rockwell; 1987) como, 'as tambin, el de las resistencias o luchas de los sujetos.
De hecho, ese campo de 10 "no documentado" no es
autnomo ni adquiere intelegibilidad aislado de otros procesos
institucionales y estructurales en los que se inscriben. Desde un
punto de vista terico metodolgico supone recuperar aspectos
heterogneos y contradictorios del mundo social. Analizar aquello considerado como "residual" y abandonado para el conocimiento por las tradiciones del "consenso ortodoxo" como denomina A. Giddens (1982). Aquello que no es recurrente, que
no marca tendencia, que no puede ser disuelto en determinadas
formalizaciones del conocimiento y/o subsumidos en esquemas hipotticos deductivos que, por lo tanto, resulta residual.
En sntesis, conocer la vida social desde estos aspectos
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"no documentados" implica no slo inscribirlos en los contextos ms generales que le otorgan sentido sino, tambin, analizar los fenmenos heterogneos y contradictorios al interior de
aquellos que son recurrentes y marcan tendencias.
En segundo lugar, otro eje que jerarquizamos dentro de
este enfoque, remite a la importancia que otorgamos al "conoimiento local" (C. Geertz; 1994) El conocimiento, las representaciones, las significaciones, las expectativas e intereses que
representan y producen los sujetos involucrados en las prcticas y relaciones que son objeto de nuestros anlisis, se tornan
parte relevante del conocimiento de determinada cotidianeidad
contextualizada. Aqu resulta importante destacar con qu concepcin de sujeto trabajamos. Sujetos que, inscriptos en las condiciones de un determinado momento sociohistrico, juegan como ya dijimos siguiendo a C.Ginzburg (1981)- su propia libertad condicional dentro de la jaula flexible e invisible de su
poca. Es decir, sujetos que reproducen y resisten al mismo
tiempo. Sujetos con capacidad de transgredir y de zafar a los
imaginarios cristalizados aun cuando, al mismo tiempo pueden
colaborar en su reproduccin o fortalecimiento.
Finalmente, el acceso al conocimiento de la cotidianeidad -en la complejidad que suponen los cruces de los aspectos
no documentados con los institucionalizados, los estructurales
y con el conjunto de conocimientos y significaciones que coconstruyen los sujetos- implica rescatar el trabajo de campo
como experiencia prolongada del investigador en un mbito
delimitado.
'
Metodolgicamente, supone una estrategia interactiva
con los sujetos. Este espacio interactivo otorga determinadas
caractersticas al proceso de construccin de conocimientos.
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Taller de educadores e
identidades docentes.
Experiencias
en coordinacin
.2.
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direccionalidad a los procesos grupales de construccin y apropiacin de conocimientos sobre una problemtica socioeducatva acordada previamente con los participantes. Esta caracte- .
rizacin se basa en algunos supuestos que requieren ser aclarados.
En primer lugar, esta prctica no se inscribe en concepciones caracterizadas por un espontansmo grupal. Si bien se
entiende a la coordinacin a modo de una prctica facilitadora
de la participacin democrtica de los participantes, no significa que ello se realice sin un sentido direccional. Por el contrario, se facilita la participacin desde una clara direccionalidad
tendiente al logro de los objetivos acordados grupalmente.
Segunda aclaracin, tampoco se inscribe en concepciones empiristas al modo de las tcnicas de "dinmica grupal" o
de "movilizacin grupal". Como luego veremos, se sustenta en
un enfoque -socioantropolgico- integral que pone en tensin
el perfeccionamiento de educadores en ejercicio y la investigacin socioeducativa en campos problemticos acotados.
Tercera aclaracin, el lugar de la coordinacin en el proceso grupal se diferencia del conjunto de los participantes ya
que se coloca como un observador "externo" del proceso que
se generas. Aun cuando se trate de una prctica desarrollada a
modo de un co-pensor grupal, quien la ejerce se diferencia del
conjunto de los participantes por su posicin des-centrada del
grupo. Esta posicin es la que permite facilitar y orientar el
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trabajo grupal. Por ello es que se la ha comparado con la prctica del director tcnico de un equipo de ftbol quien facilita el
juego sin jugar (R. Vera; 1988).
Dicho lo anterior, y para entender como concretamos
de un modo particular este oficio de coordinacin, explicitar
las caractersticas de los denominados Talleres de Educadores
en los que se ponen en tensin un diseo didctico tendiente al
perfeccionamiento de docentes en actividad con un diseo orientado a la generacin de conocimientos socioeducativos. Prestar especial atencin al oficio de coordinacin como una prctica en la que se tensionan distintas dimensiones y niveles del
proceso grupal. Para su caracterizacin considerar la lgica
de los diseos de implementacin del Taller de Educadores, en
la que se articulan tanto los encuadres metodolgicos como las
secuencias del proceso general del mismo.
QU SE ENTIENDE POR
TALLER DE EDUCADORES?
Con el nombre de Talleres se entienden experiencias
muy dispares de propuestas pedaggicas que se han desarrollado en Amrica Latina desde la dcada de los '70. En las mismas podran reconocerse como elemento comn una concepcin de aprendizaje basado en el trabajo colectivo e integrado
de la "teora" y de la "prctica".
Lo que nosotros denominamos "Taller de Educadores"
implica una modalidad grupal de trabajo orientada tanto al perfeccionamiento docente como a la investigacin socioeducativa. Un espacio de coparticipacin entre docentes en actividad
y equipo de investigacin socioeducativa alrededor de una problemtica socioeducativa acordada grupalmente.
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EL TALLER DE EDUCADORES
COMO ESTRATEGIA DE
INVESTIGACIN SOCIOEDUCATWA
Desde la perspectiva de la investigacin socioeducativa, los objetivos y la lgica que se despliegan estn orientados
por la bsqueda y construccin de conocimientos acerca de deM
tenmnada problemtica escolar.
Supone considerar al Taller de Educadores como un "espacio recursivo/dialctico" de construccin de conocimientos
teniendo en cuenta el proceso de interaccin producida por la
coparticipacin entre los talleristas y el equipo de investigacin. Ese proceso de coinvestigacin conformado por la
interaccin de conceptos y episodios cotidianos de la vida eSM
colar -registrados por los propios docentes- se funda, en cierta
direccionalidad terica y en un particular diseo metodolgico
centrado en la recuperacin e integracin crtica del conjunto
de prcticas, representaciones y saberes que los educadores despliegan en el mbito del Taller.
En ello los aportes tericos y metodolgicos de la Antropologa Sociocultural se tornan relevantes teniendo en cuenta que, el proceso de investigacin toma las caractersticas de
una investigacin intensiva. Una investigacin implementada
en pequea escala, con prolongada interaccin con los sujetos,
con el uso de estrategias dirigidas a un acceso de la informacin exhaustivo ya su anlisis interpretativo simultneo y "en
profundidad" (E.Achilli; 1992). Por lo tanto, el Taller de Edu60
cadores se constituye en un mbito privilegiado para la produccin de ese tipo de informacin que hemos entendido como
"datos convergentes" (C. Geertz; 1994). Como ya dijimos, una
informacin heterognea y no estandarizada que, no obstante,
permite analizar y explicar diferentes procesos escolares en la
medida que los sujetos que la producen se hallan implicados
unos con otros en esa "red mutuamente reforzada de comprensiones sociales". Metodolgicamente, ello nos permite incorporar al anlisis las propias categoras y significados que los
sujetos producen sobre ese mundo escolar en el que estn
involucrados.
La incorporacin del lenguaje de los sujetos, posibilita
que algunas de sus propias categoras -lo que en la tradicin de
la investigacin socioantroplgico se ha denominado "categoras micas"- puedan transformarse en clave para entender procesos socioculturales de un modo integral. Esto no significa
que se excluya la posibilidad de trabajar otro tipo de informacin en el mismo Taller. Se puede incorporar documentos, informacin secundaria derivada de otras investigaciones, de censos, de encuestas.
En sntesis, aqu estamos pensando al Taller de Educadores como estrategia grupal de investigacin socioeducativa.
Veamos ahora el otro componente en que se sutenta.
EL TALLER DE EDUCADORES
COMO MODALIDAD DE
PERFECCIONAMIENTO DOCENTE
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TALLER DE EDUCADORES.
PROCESO DE COINVESTIGACIN
E IDENTIDADES MAGISTERIALES
(...) la nocin de alienacin no es operacional ni formalizable. y, sin
embargo, revela las condiciones y situaciones concretas. Acaso no
se acanza un grado superior de conocimiento si se lleva al lenguaje,
al concepto terico lo "vivido ", el hecho de que el sentimiento de
alienacin suscita actos y energas? (L.Lefebvre; 1984)
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T
Tal proceso de objetivacin de la propia cotidianeidad,
de construccin y apropiacin de conocimientos en el que se
integra su prctica docente, se va generando mediante la
implementacin de algunas "estrategias investigativas" a las
que ms adelante nos referiremos. Ello posibilita no slo sistematizar la informacin generada, sino tambin producir un
movimiento de desestructuracin de las "conciencias prcticas"
-conocimientos incorporado al trabajo diario, que se "desconoce" por rutinario (A Giddens; 1982)- Y de aquellas posiciones
no problematizadas, que suelen cristalizarse en estereotipos o
ideas preconcebidas como irrefutables.
En este sentido, el Taller de Educadores pone en tensin un proceso de coinvestigacin. Sin embargo, nos interesa
dejar en claro que, si bien el encuadre terico metodolgico de
los mismos se basa en "estrategias investigativas", las mismas
estn orientadas a reforzar la profesionalizacin docente en
toda la complejidad que ella implica. Por lo tanto, no debe confundirse con los planteamientos que se han generalizado en los
ltimos aos acerca de la transformacin del docente en "investigador". Como dijimos en el captulo anterior, esta tendencia de expandir la "investigacin" produce profundas
distorsiones tanto por desconocer las especificidades de cada
prctica, con sus lgicas, sus tiempos, sus objetivos diferenciados; como, por subsumir, perversamente, la "prctica docente"
detrs de otra que, pareciera, estar ms valorizada.
De ah que, en la concepcin de estos Talleres, subyace
una fuerte re-valorizacin de la prctica docente como un campo de tal complejidad cuyo desenvolvimiento requiere de sujetos "profesionalizados", en el sentido que hemos expuesto.
En la experiencia que estamos desarrollando desde principio de los 90 con educadores de escuelas primarias, insertas
en contextos de pobreza, se han implementado distintas modalidades de Taller de Educadores.
Estas diferentes modalidades suponen distintos diseos
metodolgicos teniendo en cuenta dos aspectos: a) el tiempo
total de desarrollo de cada experiencia -Talleres de Corta o Larga
Duracin- b) el espacio institucional en donde se implementa diferenciamos el Taller de Educadores, propiamente dicho, que
se organiza en espacios externos al mbito laboral de los participantes y Taller de Educadores Institucional que se implementa
en el mismo espacio escolar en el que, cotidianamente, los participantes despliegan sus actividades docentes ll . Adems, estas experiencias se acotan y se orientan a partir de determinados objetivos especficos con que se considera el correspondiente diseo de cada Taller. Detrs de estos objetivos especficos subyacen los objetivos generales que han sido comunes a la
implementacin del conjunto de estos Talleres, los que pueden
sintetizarse para este caso particular, en los siguientes:
a) realizar una caracterizacin de la prctica docente
desarrollada en contextos de pobreza urbana, identificando los
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Estudios Antropolgicos en Contextos Urbanos -CEACU-; Facultad de Humanidades y Artes; Universidad Nacional de Rosario.
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TALLER DE EDUCADORES.
LA LGICA DE SU IMPLEMENTACIN
Hemos planteado la prctica de coordinacin de los procesos grupales a modo de un oficio que se concretiza en relacin con los fundamentos tericos y metodolgicos en que se
inscribe, evalundola y ajustndola a los objetivos y particularidades de las diferentes modalidades. ~
Por lo tanto, el desarrollo de la prctica de coordinacin adquiere cierta particularidad en relacin a las diferentes
modalidades de los Talleres que se implementan. En nuestro
caso, esta prctica est definida por la concepcin que orienta ,
al Taller de Educadores -ya expuesta- y por lo que entendemos
como la lgica de implementacin de los mismos. Es decir, el
modo en que se articulan -al menos- dos niveles que interactan
entre s en los procesos grupales:
12 La dimensin tnica la trabajamos particulannente en las distintas experiencias en el Taller de Educadores que venimos desarrollando desde 1994
en una de las instituciones educativas vinculadas con la comunidad toba de
la ciudad. Una de las implementaciones centr su propsito en la elaboracin de una propuesta institucional intercultural por lo que el mismo Taller
result un espacio intertnico dada la participacin de los maestros tobas y
blancos" .
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Ce
,1
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cesos que resulten ms pertinentes a los objetivos del taller. Por
el otro, cuidar que no se produzcan "intermitencias". Estas
"intermitencias" pueden generarse, ya sea, por cortes internos
provocados por el mismo grupo -a veces, desde la misma coordinacin- o, ya sea, por interrupciones producidas por situaciones externas al Taller. La importancia del cuidado de los proce~
sos de los Talleres se funda en la generacin de modalidades de
trabajo fuertemente respetuosas de las lgicas de produccin,
circulacin y apropiacin de conocimientos que implican los
procesos de aprendizajes. Se trata de no reproducir las
"intermitencias" tan comunes en los mbitos escolarizados.
Encuadres metodolgicos
El equipo de investigacin/coordinacin debe tener en
cuenta un conjunto de situaciones organizativas que configuran distintos encuadres metodolgicos de un Taller. Entre las
ms relevantes mencionamos:
Primero, los encuadres constitutivos del Taller de Educadores. Se considerarn los aspectos relativos a la conformacin permanente del grupo: docentes -en ejercicio- y equipo de
investigacin/coordinacin.
En relacin a los docentes talleristas implica resolver,
con determinados criterios metodolgicos, las siguientes situaciones:
- la cantidad que participar, teniendo en cuenta lo que
favorezca la produccin grupal (como vimos no ms de 15120
participantes);
- la seleccin de los participantes -qu docentes, de qu
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niveles, de qu escuelas-;
- las modalidades para informar las caractersticas del
trabajo y acordar un compromiso conjunto -entrevistas individuales, grupales,etc.
En cuanto al equipo de investigacin/coordinacin adems de asegurar la presencia permanente, en el funcionamiento
del Taller, del equipo de Coordinacin y Observacin se tendr
que resolver los estilos de coordinacin, especificando las modalidades de intervencin de cada uno.
Segundo, los encuadres de funcionamiento en que el
equipo de coordinacin garantizar la unidad de tiempo, de espacio y el desarrollo de las actividades previstas.
Tercero, los encuadres metodolgicos, propiamente dicho, en que el equipo de coordinacin orienta el trabajo grupal
mediante un conjunto de procedimientos. Entre los procedimientos que utilizamos para la capacitacin figuran 13
l. la observacin y registro de prcticas cotidianas, incorporando el mximo de detalles que la situacin ofrece. Se
apunta al registro de la "textualidad" del evento, tratando de no
incorporar, en el registro, la carga valorativa del observador;
2. el anlisis interpretativo que permita caracterizar
distintas situaciones escolares atendiendo las condiciones en
que se producen y los significados que los sujetos les otorgan.
Se impulsa mediante el desarrollo de procedimientos que intentan identificar situaciones, describirlas, compararlas, diferenciarlas de otras, entender el significado que tiene para los
sujetos involucrados en ellas. Desde luego, tales actividades se
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propuestas autnomas.
4. en la construccin de argumentaciones que justifiquen sus prcticas y las propuestas que realizan.
5. en la elaboracin de docwnentos escritos donde se
plasmen sus propuestas l4
14 En el proceso de investigacin que estamos desarrollando hemos identificado a la escritura como un "ncleo problemtico" de la prctica docente,
ya que se pone de manifiesto de diferentes modos. Por un lado, a nivel del
aula, en los procesos de enseftanza y aprendizaje, pareciera que las orientaciones docentes tienen una mayor predisposicin hacia el trabajo oral, produciendo una neutralizacin del uso de la escritura en los cuadernos de los
"nmos. Situacin que, a su vez, genera reclamo por parte de los padres ya que
aquello que "queda escrito" en el cuaderno es expresin de "lo que se hace",
"se aprende" en la escuela. Por lo tanto, lo ''no e~crito" es como si 90 existiera. Por otro lado, se expresa a nivel de las propias dificultades y resistencias del maestro a escribir "creativamente", ms all de las "hojas y hojas"
que, segn ellos "escriben mecnicamente" dada las demandas institucionales.
Es decir, el uso cotidiano de la escritura en los maestros est marcada por
cierta "burocratizacin de la escritura" -llenado de planillas, ejercitaciones,
planificaciones, valorizadas por directivos y supervisores pero sin sentido
para el propio docente (E.Achilli; 1993) .
De ahi que, para nosotros resulta relevante que los talleristas construyan sus
propios documentos como capacidad de produccin creativa de la escritura
y como posibilidad de "aprender" desde lo escrito. As, en los Talleres podemos mencionar los siguientes documentos, entre otros: Propuestas desde
y para escuelas en contextos de pobreza urbana (Documento de Trabajo
elaborado en Taller de Educadores); Talleristas: J. Barbaro; C. Beltrn; H.
Canceda; A. Larrosa; B. Lpez de Ziliga; A. Marafies; S. Roimeser de
lrure; M. E. Verstrate y E. Zerda. Rosario, Diciembre de 1994. Convenio
Centro de Estudios Antropolgicos en Contextos Urbanos (CEA-CU), Fa-
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Las secuencias
cultad de Humanidades y Artes, Universidad Nacional de Rosario y Asociacin del Magisterio de Santa Fe, Delegacin Rosario; Donde la prctica
hacen la teora (taller de Educadores en mbito de Pobreza urbana) (Documento de Trabajo); 1995; Grupo T.E.M.A.; Amsafe; Rosario; Prctica
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dinmicamente- y, por lo tanto, con posibles momentos de superposicin y yuxtaposicin- que seran los siguientes:
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concepciones. De ah, la diferencia con los "cursos" de formacin que "bajan" conocimientos contribuyendo a nuevas modalidades de "enajenacin" al delegar la responsabilidad en elJ
la "especialista". No obstante, esta dificultad puede presentarse en el mismo Taller. Por ello, el papel de la coordinacin debe
enfrentar y tener en cuenta esta situacin.
3. Anlisis interpretativo
Significa el proceso mediante el cual se avanza en el
conocimiento d~ las situaciones escolares de que se traten, detectando no slo los aspectos ms manifiestos de los mismos,
sino tambin, penetrando tanto en los significados que le otorgan los distintos sujetos como, en los condicionamientos
-institucionales, estructurales- en que se producen.
Distintos procedimientos de identificacin de situaciones, de contrastacin, de comparacin, permiten desarrollar tal
proceso.
5. Evaluacin y reproblematizacin
Plantea el proceso de sntesis reflexiva acerca del pro-
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ceso de aprendizaje grupal realizado, reconociendo y recuperando los conocimientos producidos y las apropiaciones y modificaciones vividas. Proceso que, a su vez, pone de manifiesto
tanto, los vacoslhuecos dejados por el Taller, como las puntas
de nuevas problematizaciones que requieren continuar el trabajo.
TALLER DE EDUCADORES.
UNA LGICA DE COORDINACIN DE
APRENDIZAJES GRUPALES
En sntesis, la coordinacin de Talleres de Educadores
se trata de una prctica cuya lgica se define en la articulacin
de los fundamentos en que se sustenta esta estrategia grupal y
la lgica de su implementacin -encuadres metodolgico~ y las
secuencias- explicitadas. Esto indica que su aporte se realIza en
distintos niveles del proces grupal, desde los vinculados a los
aspectos organizativos hasta la atencin del proceso clave que
se pretende desarrollar en el Taller: el proceso de aprendizaje
grupal. En los aspectos organizativos, no slo se orientan sino
que se cuidan las reglas de juego de los distintos encuadres
metodolgicos con el propsito de configurar la constitucin
del grupo y de generar un "clima" facilitador del trabajo colectivo.
En cuanto al proceso de aprendizaje grupal, ste supone atender un proceso espiralado y complejo que se desenvuelve mediante los procedimientos y secuencias metodolgicas que
hemos expuesto. Presupone un proceso complejo en el que
interactan distintas dimensiones que pueden sintetizarse en dos
campos problemticos, slo diferenciados para su visualizacin.
Por un lado, el campo de la comunicacin intersubjetiva con el
que designamos al proceso dialgico entre diferentes esquemas referenciales que se intercambian, confrontan y, a veces,
luchan, en el devenir del Taller. Por el otro, el campo de la
interaccin con el conocimiento, con el que damos cuenta de
los modos en que los sujetos maestros conocen las problemticas socioeducativas en las que se involucran cotidianamente y
generan nuevos conocimientos en el proceso de aprendizaje
grupal.
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I
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Investigacin y
Formacin Docente.
Sintesis para seguir
.3.
"La realidad y el pensar como apertura a nueva configuraciones, a porvenir; memoria y utopia, principio y esperanza."
(Dnoan; Suplemento Antbropos/45; 1994)
Para finalizar, mostrar -a modo de una sntesis- algunas de las problemticas que pueden desprenderse del presente
texto con la intencin que las mismas sean consideradas como
ncleos para seguir trabajando la relacin entre investigacin y
formacin docente.
En primer lugar, he tratado de precisar las nociones de
"investigacin" y de "formacin docente" a fin de acotar el modo
de entender la relacin entre ambos campos. Creo que dentro
de este ncleo se abren varias lneas problemticas como para
continuar y profundizar su construcin. Sin pretender ser exhaustiva, sealo dos cuestiones:
l. La problemtica que supone, desde el mismo campo
de la investigacin socioeducativa, la socializacin
de los conocimientos generados entre los sujetos
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qu y cmo hacer/"ejecutar" aquello que ofrece, generalmente, con un conjunto de diferenciaciones y distinciones conceptuales que no hacen ms que ahondar en las mltiples "atomizaciones" del conocimiento y del pensamiento, atomizaciones de los aprendizajes realizados y, tal vez, de las orientaciones de las
enseanzas que se harn.
Termino este texto planteando problemticas
contextualizadas en el malestar que nos produce la destruccin
de la educacin pblica, resultante de un Estado que se debilita
y achica bajo la potencia de la lgica empresarial. Una lgica
que nos fue modificando lo mejor de nuestro sentido comn.
Aquel que construmos a la par de esa escuela pblica y de los!
as maestros!as que tensaron al mximo la articulacin entre
excelencia del saber e igualdad social.
El texto es una invitacin a recuperar las mejores huellas de ese pasado que, a veces, estn contenidas perversamente en los planteamientos que se presentan como "nuevos". El
desafio ser reconstruirlas con su sentido originario, recrearlas
Y, adems, inventar otras huellas de las que "nos enamoremos"
por estar cargadas de lo que pensamos, sentimos y hacemos.
Las problemticas con que termino, entonces, no son
ms que para seguir trabajando las "utopas educativas",
visualizando cuestiones an indeterminadas dentro de las prcticas y relaciones posibles de una poca. (H. Zemelman; 1994).
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