Cerebelo y Conducta
Cerebelo y Conducta
Cerebelo y Conducta
Introducción. Teniendo en cuenta el número creciente de artículos aparecidos en las últimas décadas que han llamado la Unidad de Rehabilitación
Neurológica; Clínica Ubarmin;
atención sobre la posible relevancia de la participación del cerebelo en funciones no motoras, Schmahmann y Sherman Elcano, Navarra (P. Hernáez-Goñi,
han descrito el patrón cognitivo, conductual y emocional de lo que han denominado síndrome cognitivo afectivo cerebe- J. Tirapu-Ustárroz, P. Luna-Lario).
loso, en el que un aspecto central es la disregulación del afecto que aparece cuando las lesiones afectan a lo que se ha Centro de Salud Mental; Tudela,
Navarra (L. Iglesias-Fernández).
denominado cerebelo límbico (vermis, principalmente).
Correspondencia:
Desarrollo. Se ha realizado un trabajo de revisión, no sistemática, de la bibliografía más relevante sobre la participación Dra. Pilar Hernáez Goñi. Unidad
del cerebelo en la regulación emocional y conductual. Se han seguido dos líneas de análisis: la primera de ellas ha sido el de Rehabilitación Neurológica.
Clínica Ubarmin. Elcano, s/n.
estudio de los síntomas psicopatológicos o trastornos neuropsiquiátricos que presentan los pacientes que padecen dife- E-31486 Elcano (Navarra).
rentes patologías cerebelosas, desde patologías congénitas, como agenesia del cerebelo, displasia o hipoplasia, a otras
enfermedades adquiridas, como tumores de la fosa posterior, cerebelitis o siderosis superficial, y donde se ha visto que E-mail:
phernaeg@cfnavarra.es
cuando el vermis cerebeloso está afectado, los pacientes muestran alteraciones de conducta y de las emociones, así como
mayor frecuencia de patología psiquiátrica; y en la segunda hemos analizado la participación del cerebelo en distintos Aceptado tras revisión externa:
03.09.10.
trastornos psicopatológicos en los que se han evidenciado alteraciones en la estructura del cerebelo, que no son universa-
les, pero sí consistentes, ya que implican al vermis cerebeloso. Cómo citar este artículo:
Hernáez-Goñi P, Tirapu-Ustárroz J,
Conclusiones. Aunque el cuerpo de evidencias es creciente, la revisión crítica de la literatura científica nos lleva a reflexio- Iglesias-Fernández L, Luna-Lario P.
nar sobre el desarrollo en el estudio del sustrato cerebral de las funciones cognitivas y la evolución que ha llevado este Participación del cerebelo en la
regulación del afecto, la emoción
estudio. y la conducta. Rev Neurol 2010;
51: 597-609.
Palabras clave. Autismo. Déficit de atención. Depresión mayor. Esquizofrenia. Risa y llanto patológicos. Síndrome cogniti-
vo afectivo cerebeloso. Trastorno bipolar. Vermis. © 2010 Revista de Neurología
el tipo de alteración emocional predominante des- concreto de funciones ejecutivas, generalmente aso-
cribiendo la aparición de psicosis diferida en niños ciadas al córtex prefrontal. Sin embargo, analizando
con tumores cerebelosos tras su resección, cambio estudios de neuroimagen funcional, mantienen la hi-
de personalidad persistente en la línea de la impul- pótesis de que el sistema que está afectado en la es-
sividad e inmadurez tras la escisión del tumor, des- quizofrenia es más extenso y complejo, e implica no
control conductual y heteroautoagresividad en pa- sólo redes corticales, sino también subcorticales.
cientes con displasia cerebelosa, trastorno de páni- Para expresar la diversidad de alteraciones que pre-
co en ictus de la parte lateral y medial del lóbulo sentan estos pacientes y llamar la atención sobre el
posterior, rasgos obsesivos y autísticos, depresión, y componente subcortical, proponen un modelo en
risa y llanto patológico. el que los diversos síntomas reflejan anomalías en la
Los estudios de pacientes que sufren siderosis su- conectividad en el circuito que une las regiones pre-
perficial, enfermedad que se produce por depósitos frontales y talámicas y en las que la conexión con el
de hemosiderina en las membranas subpiales, que cerebelo también está afectada. Utilizan el término
típicamente afecta a estructuras cerebrales posterio- ‘dismetría cognitiva’, que se expresa como dificultad
res, especialmente el cerebelo, y cursa con ataxia ce- para la coordinación del procesamiento, prioriza-
rebelosa insidiosa e hipoacusia neurosensorial prin- ción, recuperación y expresión de la información. Su
cipalmente, han hallado la presencia de alteraciones manifestación clínica se puede expresar como cual-
neuropsicológicas, como deterioro de la memoria quiera del amplio rango de síntomas de la esquizo-
episódica, disminución de la fluencia verbal y cam- frenia, como alucinaciones, delirios, desorganiza-
bios conductuales caracterizados por desinhibición ción del habla, del pensamiento y de la conducta,
social, afectación de la habilidad para la representa- alogia, embotamiento afectivo o incongruencia, an-
ción de los estados mentales de los otros y falta de hedonia o deterioro de la atención. Asumen que la
espontaneidad, retraimiento y alteraciones afectivas. anomalía o disfunción es en origen del neurodesa-
Estas alteraciones se han descrito cuando en la RM rrollo y que puede producirse en cualquier momen-
está afectada la zona superior del vermis [31,33]. to desde la concepción hasta el adulto joven, ya que
Según todo lo expuesto, se ha evidenciado que el cerebro continúa desarrollándose hasta entonces.
son las lesiones del vermis principalmente, y tam- Para Andreasen et al, la esquizofrenia se debe a una
bién las del lóbulo posterior, las que están asociadas anormalidad en el circuito corticocerebeloso-tala-
a embotamiento afectivo y patología psiquiátrica. mocortical. Los indicadores blandos de pobre coor-
Por otra parte, cabe destacar que en los pacientes dinación en pacientes esquizofrénicos proveen una
con sintomatología afectiva marcada, el vermis está clave sobre la alteración del proceso básico que re-
sistemáticamente afectado. gula la sincronización entre pensamiento y acción.
Hasta ahora hemos estudiado los cambios emo- Para esta autora, la incapacidad para filtrar, procesar
cionales y conductuales que presentan los pacientes y enfocar la atención puede explicar el amplio rango
con patología cerebelosa. Pero también existen evi- de síntomas de la esquizofrenia; por ejemplo, un de-
dencias de anomalías cerebelosas en diferentes pa- fecto en el procesamiento de la información puede
tologías psiquiátricas, como se señalaba anterior- llevar a experimentar alucinaciones, delirios, desor-
mente y que vamos a analizar más en profundidad. ganización del lenguaje, conducta desorganizada y
todo el rango de síntomas negativos.
Estos hechos permiten suponer que en la esqui-
Participación del cerebelo en zofrenia no existe una alteración de un proceso es-
distintos trastornos psicopatológicos pecífico, sino que corresponde a un metaproceso.
La cognición es una variable dimensional que debe
Cerebelo y esquizofrenia tenerse en cuenta en la esquizofrenia, y podría
arrojar luces sobre la participación de los circuitos
La esquizofrenia se presenta con una diversidad de implicados en la formación de los síntomas, sobre
síntomas que representan múltiples dominios psico- la respuesta a los tratamientos farmacológicos y no
lógicos, como son la percepción, inferencia, forma- farmacológicos, y sobre el pronóstico y la calidad
ción de conceptos, lenguaje, volición, actividad mo- de vida de los pacientes y sus familiares.
tora, interacción social y emociones. No todos los Si bien algunos autores apuntan que el tamaño
pacientes tienen síntomas de todos los dominios, del cerebelo no presenta alteraciones en pacientes
pero Andreasen et al [3,42] asumen que el proceso masculinos [43,44], sí hay alteraciones en el vermis
común que subyace a estos diversos síntomas es en pacientes masculinos, relacionándose una re-
cognitivo en el amplio sentido de la palabra y más ducción del vermis anterior con un menor cociente
intelectual general y verbal [43]. A su vez, se obser- rrelaciona con la puntuación en las subescalas de
va una importante asimetría (favorable al hemisfe- depresión y paranoia de la Brief Psychiatry Rating
rio izquierdo) de la materia gris, y también una re- Scale. Al parecer, la reducción del vermis en pacien-
lación entre el volumen de materia blanca del ver- tes esquizofrénicos está presente desde el inicio de
mis y la memoria lógica: a mayor volumen, peor la enfermedad y se incrementa con el paso del tiem-
rendimiento [44]. po, y podría relacionarse con la fisiopatología de la
También existen algunos elementos específicos a enfermedad [49]. No todos los estudios han demos-
la esquizofrenia, en particular en varones. Algunos trado un menor volumen del cerebelo. Levitt et al
patrones que se observan en pacientes sanos y en [51] observaron que el vermis era mayor en la po-
mujeres esquizofrénicas no se observan en pacien- blación esquizofrénica y que el volumen de la sus-
tes masculinos. Estos patrones son: una correlación tancia blanca del vermis correlacionaba con la gra-
entre un mayor volumen del cerebelo (bilateral) y vedad de los síntomas positivos, el trastorno del pen-
un mejor rendimiento cognitivo (cociente intelec- samiento y el deterioro de la memoria lógica verbal.
tual) [45] y neuropsicológico (escalas visuoespacia- Estudios post mortem también han revelado al-
les y de memoria) [46]. teraciones en la estructura del cerebelo, específica-
Por otro lado, estudios neuroanatómicos, neuro- mente una reducción del vermis anterior que pare-
patológicos y de imagen cerebral han descrito de ce correlacionada con la asimetría occipital [50].
forma consistente la presencia de alteraciones es- Análisis de la citoarquitectura cerebelosa han reve-
tructurales del cerebro, como agrandamiento de los lado una reducción de la densidad de las células de
ventrículos laterales, reducción del volumen cere- Purkinje en el vermis en pacientes con esquizofre-
bral total, alteraciones estructurales y funcionales nia y una reducción en el tamaño de las células de
de diversas estructuras de los lóbulos frontal –el Purkinje, y a nivel subcelular se han detectado ano-
córtex cingulado anterior se ha asociado a las aluci- malías en la arquitectura de la sinapsis [50,52].
naciones auditivas [42]– y temporales, sistema lím- Se han propuesto diferentes modelos funcionales
bico, tálamo y ganglios basales. Estudios neuroes- del cerebelo que permiten interpretar e integrar da-
tructurales han revelado un menor volumen cerebe- tos que pueden proceder de diferentes metodolo-
loso total, menor volumen del vermis [4,7] y asimetría gías. Los principales modelos ha sido recogidos por
hemisférica, mientras que estudios de neuroimagen Picard et al [53] y serían tres: el primero es el ‘des-
usando paradigmas cognitivos han demostrado una plazamiento de la atención’ expuesto por Courches-
hipoactividad del circuito frontotalamocerebeloso. ne y Allen [54], en el que destaca el papel del cerebe-
El estudio de Joseph et al [9] mediante tomografía lo en orientar recursos de la atención, preparando
axial computarizada (TAC) de pacientes con catato- rápidamente los sistemas relevantes para la tarea
nía también mostró una atrofia muy destacada del para mejorar la capacidad de respuesta neural; el se-
tronco del encéfalo y del vermis cerebeloso. gundo sería la ‘detección de errores y aprendizaje’,
En algunas enfermedades, los hemisferios cere- en el que los informes de salida cerebelosos modifi-
belosos pueden estar reducidos secundariamente a cados y los aumentos de la activación tras alteracio-
la atrofia cerebral de los hemisferios contralatera- nes sensoriales inesperadas indican que la detección
les, condición a la que se le ha denominado ‘dias- y corrección de errores podrían considerarse la fun-
quisis’, pero en la esquizofrenia existe evidencia de ción cerebelosa básica; y el tercero, la ‘predicción y
que la reducción no es sólo consecuencia de atrofia cronometraje’, donde el cerebelo funcionaría como
de estructuras superiores. Se han realizado estudios un sistema de cronometraje interno, ofreciendo la
de neuroimagen que corroboran la participación representación precisa de un rango de tareas. Esta
del cerebelo, ya que, tanto en pacientes con esqui- perspectiva más computacional podría superar teó-
zofrenia crónica, hombres y mujeres [47], en pa- ricamente la brecha entre las funciones sensorio-
cientes con un primer episodio [48,49], así como en motrices y cognitivas, ya que vincula la homogenei-
parientes sanos de primer grado de pacientes con dad estructural cerebelosa y la unidad funcional,
esquizofrenia se ha encontrado un volumen reduci- permitiendo el desarrollo de modelos computacio-
do en las subregión del vermis cerebeloso anterior y nales para el estudio de esta estructura, ya que sigue
posterosuperior, lo que sugiere que la atrofia cere- existiendo una brecha entre lo que se conoce del ce-
belosa podría ser un rasgo hereditario más que un rebelo en su función motriz y los indicios de su po-
epifenómeno psicotrópico asociado [50]. Volúmenes sible papel en la esquizofrenia. Picard et al [53] no
menores del vermis posterior superior se asocian a han encontrado revisiones recientes sobre la biblio-
un peor funcionamiento cognitivo con respecto a los grafía clínica, cognitiva o funcional que apoyen la
controles sanos; además, el volumen del vermis co- función del cerebelo en la esquizofrenia. Hemos rea-
lizado una búsqueda en Medline centrada en las dis- tismo infantil precoz han encontrado ensanchamien-
funciones cerebelosas en la esquizofrenia. Se ha to del IV ventrículo, pérdida de células de Purkinje
dado mayor importancia a la bibliografía reciente en el córtex cerebeloso lateral e inferior, y disminu-
(después de 1998). El cuadro que se nos presenta a ción del número de neuronas en los núcleos cere-
partir de esta revisión es heterogéneo. Si bien en al- belosos profundos. Además, en estudios con RM
gunos dominios se define claramente el papel del funcional hay evidencia de atrofia del vermis y atro-
cerebelo (es decir, signos neurológicos blandos, pos- fia hemisférica cerebelosa, aunque estos hallazgos
tura o equilibrio), en otros dominios la contribución todavía son controvertidos. También se han produ-
cerebelosa parece limitada o indirecta (es decir, cog- cido hallazgos patológicos en otras regiones del ce-
nición), si es que llega a producirse. rebro, particularmente en el sistema límbico.
En los estudios realizados en pacientes esquizo- Stanfield et al [56] realizaron un metaanálisis para
frénicos se han obtenido datos que corroboran una conocer la neuroanatomía del autismo, y llegaron a
alteración cerebelosa: prevalencia elevada de signos la conclusión de que el autismo se relaciona con au-
neurológicos blandos, descoordinación, posturas y mentos generalizados de los hemisferios cerebrales,
propiocepción anormales, alteración del condicio- del cerebelo y del núcleo caudado, y con reducción
namiento del parpadeo, alteración de la adaptación del tamaño del cuerpo calloso y posiblemente del me-
del reflejo vestibuloocular o de los tests de aprendi- sencéfalo y de los lóbulos vermales VI-VII y VIII-X.
zaje de procedimientos. Recientemente, en los es- Sin embargo, Amaral et al [57], analizando cerebros
tudios de neuroimagen funcional se ha correlacio- post mortem de sujetos autistas y estudios de RM,
nado el escaso rendimiento cognitivo con anoma- concluyeron que las áreas afectadas son el córtex
lías en la activación cerebelosa. prefrontal, la amígdala y el cerebelo.
Diferentes líneas de investigación coinciden en En un artículo muy reciente [58] se ha estudiado
indicar que, en algunos pacientes con esquizofre- el cerebro de 28 adolescentes afectados por trastor-
nia, puede darse una disfunción cerebelosa, que nos del espectro autista y en estado de reposo. La
podría ser la causa de algunos de los síntomas psi- técnica utilizada para ello ha sido el análisis de la
quiátricos, neurológicos o cognitivos presentes en homogeneidad cerebral, que mide la sincronización
esta enfermedad, si bien también se han encontra- local de señales espontáneas en la RM funcional.
do informes contrarios a esta hipótesis. Los resultados señalan que existe una menor acti-
vación en el surco temporal superior derecho, en el
Cerebelo y autismo giro frontal medial derecho, en la ínsula y el giro
posterior central derecho, y en el cerebelo (crus I).
El autismo es un trastorno del neurodesarrollo, con En el mismo estudio se ha encontrado hiperactiva-
inicio generalmente antes de los 3 años, que se ca- ción en el tálamo derecho, lóbulo frontal inferior
racteriza por retraso o ausencia total de comunica- izquierdo y lóbulo VIII cerebeloso bilateral.
ción verbal, dificultades graves y mantenidas de la Para Verhoeven et al [59], la literatura sobre el
interacción social, patrones de comportamiento e estudio del autismo con RM señala diferentes resul-
intereses restringidos, y pobreza del pensamiento tados, entre los que destacan el aumento del tama-
abstracto de tipo simbólico o imaginativo. Casi siem- ño cerebral total, el volumen del cerebelo, núcleo
pre existen dificultades importantes del aprendizaje caudado, tálamo, amígdala y cuerpo calloso. En los
y bajo cociente intelectual. últimos cinco años, los resultados con RM funcio-
Numerosas investigaciones han puesto de mani- nal indican disfunción en la activación de regiones
fiesto regiones cerebrales que pueden estar impli- implicadas en la comunicación verbal y no verbal,
cadas en la génesis de este trastorno, como el siste- interacción social y funciones ejecutivas. Estos au-
ma límbico, amígdala, áreas prefrontales y cerebelo. tores señalan la importancia de la alteración de la
El cerebelo ha sido una de las primeras regiones sustancia blanca en el cerebro de sujetos autistas.
implicadas en esta enfermedad. Según recogen Ra- En esta línea, e intentado llegar a una mejor com-
poport et al [52] y Courchesne et al [10], el autismo prensión del autismo, Toal et al [60] estudiaron con
puede estar relacionado con una hipoplasia de los morfometría basada en vóxeles a 39 sujetos afecta-
lóbulos VI y VII del vermis cerebeloso, aunque es- dos de síndrome de Asperger y a 26 diagnosticados
tos hallazgos no han sido replicados. Con posterio- de autismo. En ambos grupos se observó una re-
ridad, en 1994 estos mismos autores [55] refirieron ducción de la sustancia gris en el lóbulo temporal
que, en estudios mediante RM, encontraron dos ti- medial y regiones fusiforme y cerebelosa, y una re-
pos de anomalías, hipoplasia e hiperplasia del ver- ducción de la sustancia blanca en las regiones cere-
mis posterior. Otros estudios de individuos con au- belosas y tronco cerebral. Sin embargo, los sujetos
permetabolismo puede que sea un hallazgo restrin- tomas nucleares, déficit de atención, impulsividad e
gido a los pacientes resistentes al tratamiento [62]. hiperactividad, y que en un 30-60% de los casos pue-
de persistir en la edad adulta.
Cerebelo y trastornos de ansiedad En cuanto a la fisiopatología del trastorno, toda-
vía no aclarada, los estudios funcionales resaltan la
La ansiedad es una reacción normal al estrés y, si no disfunción de la transmisión noradrenérgica y do-
es excesiva, es crucial para la homeostasis, pero esta- paminérgica. Cada vez existen más datos conver-
dos de ansiedad prolongados o excesivos se han aso- gentes de estudios de neuroimagen, mayoritaria-
ciado a daño cerebral, posiblemente mediado por hipe mente análisis morfométricos, neuropsicológicos,
ractividad del eje hipotálamo-hipófisis-adrenal [62]. genéticos y neuroquímicos, que consistentemente
Los trastornos de ansiedad representan un gru- involucran a la red frontoestriatal en la fisiopatolo-
po heterogéneo de trastornos que tienen en común gía de este trastorno, en el cual estarían implicados
la presencia de ansiedad patológica. Aunque no es el córtex prefrontal, el córtex cingulado dorsal an-
propósito de este trabajo, nosotros consideramos terior, el núcleo caudado y el putamen [65], pero un
que la ansiedad debe entenderse como el correlato número creciente de estudios demuestra anomalías
neurovegetativo de una emoción. En su fisiopatolo- que afectan a otras áreas cerebrales, principalmente
gía, todavía no aclarada, se han propuesto mecanis- al cuerpo calloso y al cerebelo, lo que sugiere am-
mos que afectan al flujo regional cerebral, metabo- plias reducciones en el volumen tanto del cerebro
lismo de ciertas partes del cerebro, sistemas de (córtex prefrontal, estriado, cuerpo calloso y córtex
neurotransmisión (gabérgico, noradrenérgico, sero- cingulado dorsal anterior) como del cerebelo. Una
toninérgico) y sistema neuroendocrino. mayoría de estudios detecta alteraciones morfomé-
Se cree que el cerebelo puede participar en la pre- tricas en el lóbulo frontal derecho o en sus regiones
sentación de la ansiedad manifestada como hipera- y en el núcleo caudado derecho [66], mientras que
lerta, síntoma que puede estar presente en diferentes los estudios de neuroimagen funcional sugieren que
trastornos de ansiedad, como el trastorno por estrés individuos afectos activan áreas más difusas que los
postraumático o por ansiedad generalizada. Un estu- controles al ejecutar tareas cognitivas [67].
dio reciente con niños maltratados que padecen Otro estudio realizado con RM para cuantificar
trastorno por estrés postraumático ha encontrado el volumen del cerebelo y del vermis encontró que
menor volumen de los hemisferios cerebelosos en la el vermis es significativamente menor en varones
RM que no se han replicado en otros estudios [62]. con TDAH comparado con los controles ajustados
También se ha estudiado la participación del ce- por edad, volumen cerebral y cociente intelectual, y
rebelo en la fobia social y trastorno de pánico. Sch- que esta reducción afecta principalmente al lóbulo
mahmann [14] recoge un estudio realizado con posteroinferior (lóbulos VIII a X), pero no al lóbu
PET que revelaba que la activación del vermis cere- lo posterosuperior (lóbulos VI y VII) [68,69], y se
beloso con lactato induce pánico en sujetos predis- encontró una correlación negativa entre el volumen
puestos a padecer trastorno de pánico. Otro estudio cerebeloso y los test de atención [62].
realizado también con PET [64] en pacientes con El TDAH persiste en gran número de pacientes
trastorno de pánico muestra que presentan mayor en la edad adulta, pero se ha estudiado poco cuáles
ansiedad antes de la prueba y niveles significativa- son las anomalías cerebrales que se pueden hallar
mente más altos de metabolismo de la glucosa en en los adultos. En un estudio conducido por Caste-
varias áreas cerebrales –amígdala bilateral, hipo- llanos et al [70], en el que se valoró a niños y adoles-
campo, tálamo, parte inferior del puente, médula–, centes a lo largo del tiempo, se encontró que las
entre ellas el cerebelo. anomalías del cerebro y cerebelo persisten, mien-
En general, parece que el cerebelo está implicado tras que las diferencias en el núcleo caudado desa
en la fisiopatología de los trastornos de ansiedad, parecen con respecto a los controles, lo que se ha
pero faltan estudios que exploren las implicaciones relacionado con el tratamiento con estimulantes.
clínicas de estos hallazgos. Los individuos con TDAH tienden a presentar
alteraciones de coordinación motora, como dificul-
Cerebelo y trastorno por déficit tades con el equilibrio, ejecución anómala de movi-
de atención/hiperactividad (TDAH) mientos alternos rápidos o dificultad para el control
de la escritura [65]. Por otro lado, hay estudios que
Como es bien conocido, el TDAH es un trastorno muestran alteraciones de conducta y cognitivas si-
neuropsiquiátrico de la infancia que afecta al 3-9% milares al TDAH en pacientes con lesiones poste-
de los niños, y se caracteriza por tres grupos de sín- riores del cerebelo.
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The role of the cerebellum in the regulation of affection, emotion and behaviour
Introduction. In recent decades there has been a significant increase in the number of articles that have drawn attention
to the possible importance of the role of the cerebellum in non-motor functions. Schmahmann and Sherman, for example,
have described the cognitive, behavioural and emotional pattern of what has been called cerebellar cognitive affective
syndrome. A central aspect of this disorder is the dysregulation of affect that occurs when lesions involve what has been
called the limbic cerebellum (mainly the vermis).
Development. A non-systematic review of the most important literature on the role of the cerebellum in emotional and
behavioural regulation was carried out. Two lines of analysis were followed. The first of them was the study of the psycho
pathological symptoms or neuropsychiatric disorders presented by patients suffering from different cerebellar pathologies
ranging from congenital pathologies such as agenesis of the cerebellum, dysplasia or hypoplasia to other acquired
diseases like tumours in the posterior fossa, cerebellitis or superficial siderosis. In such cases it has been seen that when
the cerebellar vermis is compromised, patients display disorders affecting their behaviour and emotions, and psychiatric
pathologies are more frequent. In the second line, we analysed the role played by the cerebellum in different psycho
pathological disorders in which the structure of the cerebellum was found to be altered. Although not universal, these
alterations were consistent, since they involve the cerebellar vermis.
Conclusions. Although the body of evidence continues to grow, a critical review of the scientific literature leads us to
reflect on evolution in the study of the cerebral substrate underlying the cognitive functions and the evolution undergone
by this study.
Key words. Attention deficit. Autism. Bipolar disorder. Cerebellar cognitive affective syndrome. Major depression. Pathological
laughter and crying. Schizophrenia. Vermis.