SILVA CASTILLO El Nomadismo A Través Del Tiempo PDF
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SILVA CASTILLO El Nomadismo A Través Del Tiempo PDF
1 UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO FACULTAD DE HUMANIDADES Y ARTES ESCUELA DE HISTORIA HISTORIA DE ASIA Y FRICA I PROFESORA TITULAR: CRISTINA I. DI BENNARDIS
SILVA CASTILLO, Jorge Nomadism Through the Ages en: SNELL, Daniel (Ed.) A companion to the ancient Near East, Blackwell, Oxford, 2005, pp. 126-140 Traduccin: Mara Soledad Eschoyez Garca y Melisa Gmez, 2008 Revisin: Leticia Rovira
[126] Los nomadismos contemporneos en el Cercano Oriente. El nomadismo toma varias formas en diferentes partes del mundo, dependiendo del ambiente natural, pero tambin dependiendo del ambiente econmico, social y poltico de los grupos sociales que lo practican como una respuesta a circunstancias geogrficas y humanas particulares. En el Cercano Oriente, una regin que fue el escenario del surgimiento de las primeras culturas neolticas y de la civilizacin urbana, los nmades han arriado animales por un largo tiempo. Hay ejemplos de nomadismo de camellos y de diferentes formas de seminomadismo practicado por comunidades que incluyen tanto pastores con ovejas y cabras como campesinos.
Nomadismo Camellero En la mayor parte de la pennsula arbica el promedio anual de precipitaciones no es superior a 100 mm o cuatro pulgadas. Los beduinos, guerreros aristocrticos y propietarios de rebaos de camellos, dominaron el rea hasta la Primera Guerra Mundial. Forzaban al pago de tributos para proteger a las caravanas y tambin a las tribus de pastores seminmades. Los beduinos sometan tribus compuestas por artesanos, grupos de parias y esclavos en los oasis (Coon 1951_ 198 210). Gracias a los camellos, que desde el tercer milenio AC les suministraron leche y carne para su subsistencia y les sirvieron como montura y bestias de carga, desafiaron las condiciones adversas de su hbitat. Los dromedarios pueden marchar sin beber agua durante varios das en verano y varias semanas en invierno, lo que permita a sus amos, y an les permite, hacer largos viajes.
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 2 Pero este tipo de nomadismo no corresponde a lo que est documentado en los textos de historia antigua. Los rabes aparecieron tarde en la historia del Cercano Oriente, al comienzo del primer milenio antes de nuestra era. Sin embargo, slo muchos siglos despus su control monoplico de las caravanas les permiti obtener caballos y armas, y as incrementar su poder militar (Bulhet 1990: 87 110). El pueblo presente en [127] la regin desde el amanecer de su historia y al cual algunos se refieren como nmades en realidad corresponde a lo que los antroplogos prefieren designar seminmades.
Formas de Seminomadismo En las regiones que reciben 200 mm u ocho pulgadas de lluvia al ao la labranza en seco es posible, aunque debido a los recurrentes perodos de sequa, slo un promedio anual de precipitaciones de 300 mm o 12 pulgadas permite una productividad agrcola realmente confiable (Sanlaville 2000: 8 13). Las poblaciones agropastoriles saban cmo explotar esta zona de transicin entre el desierto y las zonas que tenan suficiente lluvia que podan ser irrigadas artificialmente. Los rebaos que pastaban en las estepas de las tierras altas durante la estacin lluviosa en el invierno eran guiados al final de la primavera a las orillas de los ros o a los wadis, lechos de ros secos. Las ovejas y cabras se alimentaban de las pasturas a lo largo de las orillas de los ros o de los rastrojos en los campos frtiles, y fertilizaban los campos con su abono. Es difcil de clasificar las diversas formas de nomadismo en categoras como seminomadismo, semisedentarismo, trashumancia y nomadismo ocasional. Las combinaciones son muy variadas: el movimiento del grupo puede ser parcial o total; el establecimiento de la comunidad puede ser temporal o permanente, en un lugar fijo, en dos lugares, o ms. Dos ejemplos de patrones de movimiento son ilustrativos. La tribu de Ogueidat estaba establecida al comienzo del siglo XX de nuestra era en la confluencia del ro Habur con el Eufrates en Siria. Toda la comunidad se mudaba en un eje entre tres niveles: una terraza baja en la orilla del ro, una terraza ms alta intermedia, y las colinas sobre el ro que disfrutaban ms de 250 mm o 10 pulgadas de lluvia y ofrecan buenas pasturas de invierno. Entre mayo y junio, todo el grupo armaba tiendas en la terraza intermedia; comenzando mediados de junio se trasladaban a la terraza baja donde los rebaos se alimentaban de las pasturas a orillas del ro, y all los seminmades cultivaban grano y vegetales. En otoo, la comunidad se dispersaba en varios grupos pequeos sobre las estepas vecinas, pero si la lluvia no era suficiente, todos los grupos se movan juntos a la tierra de pasturas de la meseta superior. A comienzos de los aos 20 los grupos
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 3 se transformaron en agricultores, y crearon pequeas aldeas. Pero a partir de los 80, algunos de los miembros que haban emigrado a los Emiratos rabes volvieron a la regin y una vez ms adoptaron el pastoralismo semisedentario (DHont 1991: 205 6). En el segundo ejemplo, el patrn de movimiento es ms complicado. Varios grupos de los Mawali y de los Haddidini establecieron aldeas permanentes en el distrito de Salamiyeh, alrededor de Hama en Siria, donde cultivaban en aos de buenas lluvias. En invierno parte de la comunidad se dispersaba con los pequeos rebaos hacia las estepas al este. Los pastores volvan a las aldeas al final de la primavera, pero en pleno verano la comunidad completa se trasladaba al oeste en busca de pasturas a orillas del Orontes (Al-Dbiyat 1980: 172 9). El intercambio de productos y servicios entre los grupos de pastores y los agricultores era fluido debido a que la administracin comunal de los recursos naturales apoya la solidaridad grupal. Pero si los pastores, regresando de la estepa, se asentaban [128] en tierras comunales pertenecientes a otras tribus, el permiso para apacentar los rebaos y dejarlos comer el rastrojo, deba ser negociado. Los habitantes de las ciudades y los pueblos rurales integrados en el estado urbano no miran favorablemente a los grupos de pastores que se establecen en los campos en torno a las aldeas o cerca de tierras de cultivo, aunque los aldeanos y los agricultores que tienen ovejas usan pastores de origen nmade (Al-Dbiyat 1980: 180 2). No existe una lnea social divisoria de hecho entre nmades y sedentarios, sino entre aquellos que se identifican como pertenecientes a una tribu y aquellos que no afirman una lealtad tribal. La sedentarizacin no necesariamente implica destribalizacin. En Sukhna, una aldea situada sobre los tributarios orientales del macizo Palmira en Siria central, que ha sido el centro de abastecimiento de varias tribus, algunas familias de grupos seminmades pasar un largo tiempo en la aldea, pero los miembros siguen identificndose como beduinos como tales y como tribu sin importar si son sedentarios (Metral 2000: 126 7). Ahora el nomadismo se est adaptando a la modernizacin tecnolgica y a la globalizacin de los mercados mundiales. Hay muchos factores que han contribuido a su decadencia. La autonoma tribal siempre ha sido percibida como un problema de seguridad para el estado; la estrategia poltica y econmica de los gobiernos coloniales, tanto como la de los estados postcoloniales, vieron en el nomadismo una reliquia de un pasado obsoleto y en el tribalismo un obstculo para la construccin del estado moderno y el desarrollo econmico (Fabietti 2000). Los sistemas legales tradicionales basados en la costumbre han sido abolidos, la explotacin de los depsitos de aceite y la industrializacin en torno a zonas urbanas han actuado como polos de atraccin para el trabajo excedente entre nmades y seminmades; los automviles han sustituido
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 4 a los camellos en el transporte y flete. Algunos grupos de nmades que criaban camellos los han reemplazados con ovejas, que son ms demandadas en el mercado urbano. La cra de ovejas, considerada despreciable por los beduinos aristocrticos, ha hecho que el nomadismo de camellos d lugar a un nuevo tipo de pastoralismo que prevalece tanto entre los beduinos del desierto como entre los seminmades. Los rebaos no necesitan ser guiados a las pasturas y al agua, en tanto puede llevarse forraje a lugares ridos y se puede transportar agua en camiones cisterna. No obstante, los rebaos fijos destruyen la flora natural del rea en la que se encuentran porque usan siempre la vegetacin disponible. La alarmante degradacin de la biomasa de las estepas ha ocasionado una reconsideracin de las polticas adoptadas para promover la agricultura sin tener en cuenta las consecuencias y a fomentar la sedentarizacin de los seminmades, pero hasta la fecha no hay estudios de los resultados (Bocco 2000: 213 17). Uno podra preguntarse si el modo de explotacin tradicional de las zonas ridas al final es ms racional que los programas desarrollados por los expertos gubernamentales.
El nomadismo en el antiguo Cercano Oriente. Los textos cuneiformes, por supuesto, no eran escritos por o para antroplogos; en sumerio y en acadio no hay equivalentes en los textos a conceptos como nomadismo o seminomadismo, ni trminos que puedan ser traducidos estrictamente como clan o tribu. Sin embargo, [129] el historiador puede deducir que algunas poblaciones que ocupaban territorios en las regiones ridas pueden haber practicado algn tipo de nomadismo. Se le dar aqu mayor consideracin a los amorreos de los primeros siglos del segundo milenio porque estn mejor documentados.
Los amorreos: tercer milenio a.C. Segn el punto de vista de los historiadores del siglo XIX y principios del XX era imprescindible asumir que los pueblos semitas venan originalmente del desierto rabe, y que todos eran nmades que en olas sucesivas haban invadido el Cercano Oriente (Kupper 1957: XIV). Todava hay un debate sobre el origen de cada poblacin que usaba lenguajes semitas, pero se acepta que, aunque comparten la misma familia de lenguajes, no necesariamente tenan un origen comn, ni eran todos nmades. No es imposible que algunos de ellos estuvieran presentes en la regin sirio-mesopotmica desde tiempos muy remotos. A mitad del tercer milenio Ebla en Siria era un poderoso estado
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 5 semtico completamente urbanizado. Los acadios haban alcanzado Mesopotamia al final del siglo XXIV. El logro de Sargn no fue una invasin sino la toma de poder por parte de un grupo tnico no sumerio que ya estaba completamente establecido en la Baja Mesopotamia urbanizada. En contraste, los amorreoss (los occidentales, Martu en Sumerio, Amurru en acadio) se haban infiltrado en la tierra de Sumer y Acad, viniendo muy probablemente desde el final del tercer milenio del noreste de Siria, pero no siempre como invasores. Se podra deducir que su organizacin sociopoltica era tribal porque los nombres que se les atribuan designaban entidades polticas basadas en ascendencia, en otras palabras, lo que nosotros llamamos clanes o tribus: los Yahmadum, los Yamutum y los Didanum (Buccellati 1966: 242-5). Los Amorreos aparecan ms frecuentemente en los textos sumerios desde el tercer milenio como grupos que saqueaban territorios sedentarios, a tal punto que bajo el reinado de u-Sin, monarca de la tercer dinasta de Ur, se construy una pared de los amorreos que detiene a Didnum (Buccellati 1966: 243). Contemporneamente se deca que vivan en el desierto, la estepa o la montaa, habitaban tiendas y eran considerados enemigos extranjeros. Est menos claro que se deca que no doblaban la rodilla y no enterraban sus muertos (Edzard 1981: 40-1). Sin embargo algunos soldados amorreos y sirvientes civiles s vivan en ciudades de Sumeria y Acad, sin que esto implicara que haban roto sus vnculos tnicos (Edzard 1981: 43). En muchos textos las personas llamadas amorreas no eran consideradas sumerias o acadias, sino un grupo tnico culturalmente distinto (Edzard 1981:39). Justo despus de la cada de la III Dinasta de Ur en el ao 2004 a.C la penetracin de los Amorreos en zonas urbanas de toda la regin sirio-mesopotmica se intensific a tal punto que se constituy en el grupo tnico predominante. A travs de los primeros tres siglos del segundo milenio muchos de sus jefes tomaron el poder en muchas de las antiguas ciudades-estado de la Baja Mesopotamia y en otras ciudades que no haban sido importantes hasta entonces, como Babilonia.
[130] Los haneos de Mari Desde la primera mitad del tercer milenio, la ciudad de Mari, que apareca en la lista real sumeria como el asiento de la X dinasta post-diluviana, fue un importante punto de control para el comercio fluvial de la Baja Mesopotamia en el Eufrates medio (Jacobsen 1939: 102). En el ltimo cuarto del siglo XXIV la ciudad fue conquistada por Sargn de Acad. Los gobernadores acadios rpidamente se comportaron como gobernantes independientes y fundaron una dinasta que dur
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 6 ms de tres siglos. No sabemos bajo qu circunstancias perdieron su poder. Slo podemos afirmar que hacia fines del siglo XIX el trono de Mari fue ocupado sucesivamente por dos lneas dinsticas de origen amorrea, como el resto de toda la vasta regin de Siria y Mesopotamia. Pero haba una diferencia fundamental: en la Baja Mesopotamia, que estaba densamente urbanizada y donde la economa estaba basada en la explotacin intensa de la agricultura en las planicies del ro, los inmigrantes Amorreos adoptaron el modo de vida de los estados urbanos. Algunos vivan en barrios donde estaban agrupados de acuerdo a sus filiaciones tribales; otros vivan en reas agrcolas; entre estos haba algunos que eran pastores (Postgate 1992:76,81/2). Pero los grupos pastoriles en la Baja Mesopotamia no constituan entidades polticas autnomas entre los estados. Slo mucho despus, en la primera mitad del primer milenio antes de Cristo, algunos grupos tnicos de inmigrantes que venan de afuera de la regin, los caldeos, pudieron constituir entidades polticas autnomas en los territorios de los estados urbanos. En Mari, en contraste, los haneos vivan en el lugar de origen de los grupos tnicos Amorreos, en las estepas del noreste de Siria, donde muchos de ellos mantenan sus vnculos tribales. (Postgate 1992: 86) Hacia el final del siglo XVIII los reyes y sus oficiales con afiliaciones tribales adoptaron formas de gobierno apropiadas para el estado urbano y trataron de someter a los grupos tribales. Pero las comunidades subordinadas frecuentemente se resistieron e incluso se rebelaron. La tensin entre las estrategias de centralizacin del estado y las tendencias autnomas de los grupos tribales dieron origen a una serie de compromisos y conflictos a los cuales debemos mucha de nuestra informacin sobre estos grupos.
Haneos, Benjaminitas y Bensimalitas. Dos grandes confederaciones estaban activas en la regin noreste de Siria de hoy en da: los Bensimalitas Los hijos del Norte, que originariamente ocupaban la regin del tringulo de los tributarios del Habur superior, y los Benjaminitas Los hijos del Sur, que ocupaban la estepa siria a lo largo del ufrates, de la zona alrededor de Mari, conocida como las Orillas del ufrates, ro arriba entre el ufrates y el ro Balih (Anbar 1985: 24). Los Bensimalitas en algn momento llegaron a ocupar el ufrates Medio y entonces fueron llamados Yaradu, aquellos que descendieron, y desplazaron a algunos grupos de los Benjaminitas, subyugando a aquellos que se quedaron. Este hecho fue el origen de la hostilidad Benjaminita hacia los Bensimalitas. Los gobernantes de Mari, Yahdun-lim y Zimri-lim, de ascendencia Bensimalita, as se atribuyeron el ttulo de Rey de Mari y de las tierras de los Haneos con el que trataron de reclamar al [131] mismo tiempo la soberana sobre los estados urbanos de Mari al igual que sobre todos los grupos tribales, incluyendo
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 7 Bensimalitas y Benjaminitas, ambos bajo la comn denominacin de Haneos (Charpin y Durand 1985: 337). Haneos y Acadios. Haneos lleg a designar grupos que, sin importar sus lealtades tribales polticas, no se identificaban culturalmente con los sujetos de Mari. Mari haba sido conquistada por Sargn, se convirti en un estado acadianizado y desde ah su gente se identific como acadios. La oposicin entre Haneos y acadios aparece claramente en un texto muy llamativo. Los caballos, todava raros en el Cercano Oriente antiguo, eran considerados animales salvajes por los acadios, quienes fueron integrados en el marco econmico y social de los estados urbanos. Zimri-lim, un hombre duro y polticamente insensible, al principio de su reinado aparentemente sola desfilar por la ciudad montando a caballo como un jefe tribal. Un ingenioso oficial de alto rango con ms gusto poltico se tom la libertad de darle al rey un sabio consejo: Si (es cierto que) usted es el rey de los Haneos (tambin es verdad) que usted es en segundo lugar el rey de los acadios. (As que), mi Rey no debera andar a caballo sino (el debera entrar en la ciudad) slo en litera o sino, (montando) mulas. Podra mi Seor darle peso a la dignidad de su realeza! (Durand 1998: 2: 484-8 texto 732). La misma oposicin cultural entre los acadios y las poblaciones tribales apareci en un banquete de un ritual funerario de comunin con los difuntos que databa del periodo en que amiAdad era soberano de Mari (Birot 1980: 142). En este documento se indica que el rey deba ofrecer el banquete a los reyes acadios muertos, Sargon y Naram-Sin, y a Hana, lo cual probablemente significa los ancestros tribales del ufrates medio, y tambin a Numha, lo cual probablemente significa los ancestros tribales del Tigris medio. Reyes de Mari. Bensimalitas Yahdun-Lim 1815-1799 Sumu-Yaman 1798 Zimri-Lim Asirios ami-Addu 1812-1780 Yasmah-Addu 1798-1780
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 8 1780-1758 La organizacin poltica de los Haneos Benjaminitas y Bensimalitas. Un documento legal sobre la transferencia de algunas propiedades comunales registraba los nombres de jefes de familias extendidas que haban participado, incluyendo cinco hijos [132] de Awin que vivi en Apan ocho hijos de Awin de la seccin del campo (Boyer 1958: 8-10, 20-1). Esto muestra que la comunidad estaba dividida en dos secciones, aquellos que vivan en una pequea aldea y aquellos miembros de la seccin del campo, el grupo de pastores que se fue con los rebaos de ovejas a la estepa, donde acampaban durante la estacin lluviosa1i. Aqu estamos lidiando, entonces, con seminmades, una comunidad tribal que inclua un grupo de familias que vivan en un pueblo y otro grupo que se especializaba en pastoralismo. Pero no todos los grupos tribales eran seminmades. Leemos en una carta que los jefes de Dabish, de la tribu Yahrureana, a pesar de no ser parte de los Yaradu que haban descendido a conquistar Mari, estaban dispuestos a unirse a los Bensimalitas, y a sacrificar un burro como signo de su nueva alianza (Durand 1992:117). Declararon que no tenan una seccin del campo ni ningn campo de pastoreo2. Est claro que no eran seminmades, aunque se vean a s mismos como un grupo tribal, los Yahrureanos, parte de la confederacin Benjaminita. Los Bensimalitas no tenan subgrupos grandes, quiz porque estaban fuertemente integrados en la estructura estatal de Mari. Pero tenan alguna docena de subgrupos menores llamados gaum, un trmino tambin usado para los grandes grupos de los Benjaminitas, as que no debe ser estrictamente equivalente a clan o tribu (Talon 1985). Los Benjaminitas ms autnomos incluan grandes subgrupos, Yahrurianos, Yariheanos, Amnaneanos, Rabbeanos (Charpin y Durand 1985: 337), y Ubrabeanos, que eran subdivisiones de una confederacin mayor. As podan ser llamados Tribus, mientras que los grupos ms chicos, que podemos llamar clanes, estaban representados en este texto por los jefes de las familias extendidas (Bardet 1984: 361). El gobierno de las comunidades de aldea: ancianos, sugagum y meru En otros textos de Mari los ancianos realizaban funciones muy diversas e importantes. En uno de ellos iban tan lejos como a ejercer el poder cuando un gobernador muri (Durand 1998: 2: 271-3 texto 607). La institucin colegial de los ancianos aparece en numerosos documentos de otras
1
El trmino que aqu traducimos como campo se refera en Mesopotamia Sur a la zona entre las ciudades, pero en Mari era un sustantivo colectivo que designaba el campo incluyendo pastores y rebaos.
2
El trmino ka-di lo traducimos como campos de pastoreo, pero es nico para este texto. Deseamos relacionarlo a kidu, que significa lo que est afuera, campo abierto.
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 9 ciudades y perodos, pero con menos responsabilidades que en Mari. En contraste, los oficiales de gobierno de los grupos tribales y las comunidades aldeanas, llamados sugagu y meru, aparecen nicamente en Mari. El sugagu serva como jefe de las comunidades tribales de seminmades y de aldeas ms pequeas. Era un intermediario entre las comunidades y la administracin del estado (Durand 1998: 2: 494-7). Originalmente los sugagus eran elegidos por los miembros de su comunidad. En el caso de los sugagu de clanes que vivan bajo el reinado de Mari, el puesto tena que ser confirmado por el rey mismo, tras el pago de un impuesto calculado normalmente en cabezas de ovejas o el equivalente en plata. Una carta explicaba: Antes Yatarum haba ejecutado la funcin de sugagum de Yail, pero muri. Hoy cinco hombres de entre los principales personajes de Yail, de la seccin (del campo) vinieron a verme. Los hombres de Yail dijeron: Pon uno de nuestros parientes como nuestro gobernante. Eso fue lo que dijeron. [As que] yo puse a YarkabAddu como reemplazo de Yatarum para llenar el oficio de sugagum. l entregar X minas de plata y X cientos de ovejas y yo recibir de l X minas de plata y X cientos de ovejas como pago parcial adeudado por Yatarum (el sugagu que haba muerto) (Durand 1997: 1: 209-10 texto 81). [133] Cuando los grupos de pastores partan para las estepas, su gobierno requera otro tipo de control ms especfico, el oficio de los meru. Los meru eran una clase de gobernadores que eran nombrados directamente por el rey mismo para los grupos migratorios. Otra carta deca: Los Haneos no salen de sus aldeas porque fueron retenidos por el trabajo de los bueyes. Cuando estuve en Terqa para ver a mi Seor, comision a dos hombres para hacer salir a los Haneos a los campos. Yo les dije: Los meru ya han partido, por qu ustedes se quedan? El mismo da todos los Haneos partieron! (Durand 1998: 2: 504 texto 742). En este documento se revela muy claramente la tensin entre los intereses de la administracin y los de las tribus. Los meru tenan su propio plan de trabajo y tenan que partir para las zonas pastoriles en un momento determinado por decisiones burocrticas. Los aldeanos tenan que combinar el trabajo de los cultivos y el pastoreo. El trabajo en los campos estaba sujeto a un ritmo impredecible. La necesidad de arar los campos, una actividad a la que los textos se refieren como el trabajo de los bueyes, mantena ocupados a los aldeanos probablemente por el retraso de las primeras lluvias. Los sugagus, intermediarios entre las comunidades aldeanas y la administracin, a menudo se encontraban entre la espada y la pared, la espada del estado y la pared de la resistencia de la gente.
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 10 Los pastores seminmadas En tiempos de paz la administracin quera que los pastores se fueran al pas alto. Pero si haba rebeliones preparndose, la dispersin de los pastores levantaba la sospecha de que podran unirse a la insurreccin. La misma persona que enviaba la ltima carta intent en otra ocasin detener a los pastores de partir a las tierras altas bajo el pretexto de que los rebeldes podan atacar las aldeas; l escriba: Los hombres que estn en las aldeas estn listos para partir a las tierras altas. Ellos ponen a sus ovejas, que son alimentadas en Lasqum, en camino hacia las tierras altas. Cuando se les pregunta (por qu), ellos responden: Aqu no hay pasturas y (entonces) nos vamos a los campos altos. Mis policas son fuertes. (Si) sorprenden a uno de los Benjaminitas, movindose del pas bajo al pas alto, l ser aprehendido. (Durand 1998: 2: 423-4 texto 680). La leva de los pastores Los nmades eran requeridos para apoyar las filas de los ejrcitos, en parte porque eran considerados valientes y en parte porque tenan un exceso de mano de obra. Algunos documentos de Mari proveen informacin sobre las muchas maneras en las cuales se organizaba la leva por medio de un tebibtum, un trmino que ha sido traducido como censo (Durand 1998: 2: 332-9). Tales documentos no se ocupan de determinar el tamao y la composicin de la poblacin completa, sino que simplemente registran el nmero de hombres que podan ser reclutados para las campaas militares inminentes, por lo tanto, el [134] preferible traducir tebibtum como cuenta ms que como censo. ami-Addu escriba a su hijo Yamah Addu: Ve al corazn de la estepa y hazte acompaar por los empleados de Laum y los sugagus de las Orillas del Eufrates (un cuarto del reino de Mari). En los campos hay mil hombres que no han dado el juramento. Cudate del centro de la estepa. Laum y el sugagus de las Orillas del Eufrates deberan viajar por todos los campos y los sugagus de los campos deberan hacer el juramento por la vida del dios (Durand 1998: 2: 502-3 texto 740). A cambio de su servicio militar, los Haneos reciban tierras del palacio. ami-Addu orden que las tierras que haban sido concedidas a algunos Haneos (probablemente Bensimalitas), en tiempos de la anterior dinasta rival, no fueran redistribuidas. Que los Haneos de los campos que tenan tierras antes en las Orillas del Eufrates las conserven (Durand 1998: 2: 342-4 texto 641).
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 11 Los grupos tribales en la economa del estado de Mari Los miembros de las comunidades de aldea tambin eran requeridos para suministrar fuerza de trabajo para cosechar los campos del palacio y para el esquilado de sus rebaos, que deben haber tenido un gran nmero de animales en tanto que en cualquier momento dado se necesitaban ms de 500 hombres para esta tarea durante varios das (Durand 1998: 2: 671-5 textos 852, 853). Las comunidades tribales tambin contribuan a la economa del reino con la entrega de ovejas. Teniendo en mente que la carne no constitua la base de la dieta, uno puede inferir que el deseo de ovejas del palacio se puede explicar por su necesidad de tener provisiones de lana para sus talleres para hacer textiles y ropa; una industria que debe haber sido de importancia, en tanto haba un considerable nmero de textos administrativos que se refieren a esta actividad econmica (Silva Castillo 1981). Resistencia y rebeliones Estos requerimientos de la administracin eran mal recibidos por los grupos tribales; algunos textos hablan de su resistencia, otros de la represin que sufran. En una carta queda claro que el gobernador de la ciudad de Terqa haba intentado reunir gente para cosechar as tierras en el territorio benjaminita bajo del pretexto de la amenaza de un ataque enemigo. Pero el chantaje no tuvo el efecto deseado: Envi personal de Terqa a reunir la gente de Zurubban, de Hishamta, de Himmaran, y de Hanna. Envi un mensaje a las aldeas de los Benjaminitas y los sugagu de Dumtan me respondieron as: Que el enemigo venga y tome nuestras aldeas. Eso respondieron! As, en la cosecha de las aldeas benjaminitas no he podido obtener nada. (Durand 1998; 2: 428-9 texto 686). En otro documento la resistencia de los aldeanos choc contra el fuerte brazo del estado. Un oficial escriba: [135] Durante cinco da he estado esperando a los Haneos en el lugar acordado y esas personas no han venido. Los Haneos (ya) vinieron de los campos y estn en sus aldeas. Una vez, dos veces, envi mensajes a las aldeas. Yo los he convocado! Y ellos no se reunieron. Y al menos tres veces! Y no se reunieron. As que entonces, si est de acuerdo mi Seor, que un criminal sea ejecutado en la prisin y que su cabeza sea cortada y se la haga circular a travs de las aldeas de Hutnim a Appan. De este modo la gente tendr miedo y se reunir rpidamente. (Durand 1998: 2: 176-7 texto 559).
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 12 Los Benjaminitas opusieron mayor resistencia al estado y claramente identificaron a los Bensimalitas con la monarqua en el poder en sus dos rebeliones abiertas contra Zimri-lim. Ellos dijeron, Vayamos a las Orillas del Eufrates a atacar (a las poblaciones bensimalitas) (Durand 1998: 2: 444-6 texto 700). La unidad cultural de los grupos haneos Otros documentos parecen ofrecer un panorama en el cual el sentimiento de unidad prevaleca sobre la divisin. De acuerdo con el jefe de los Benjaminitas Ubrabeanos, si la amenaza vena de un enemigo totalmente extranjero, las dos ramas de los Haneos se uniran para hacer un frente comn contra el enemigo. Las metforas de los Ubrabeanos son muy elocuentes: Que tu dios Dagan, como patrn del pas, quiebre las armas de los Elamitas! Si ellos llegaran a venir a las Orillas del Eufrates, no se diferenciaran por casualidad como las hormigas que son blancas de un lado del ro (mientras) del otro lado son negras? Es cierto que se dice: Tal ciudad es bensimalita y tal otra es benjaminita. A pesar de todo, no son sus choques como aquellos de la inundacin del ro cuando las (impetuosas) aguas ro arriba chocan con las (gentiles aguas) ro abajo? (Durand 1998: 2: 488-92 texto 733). Los Suteos Adems de los Benjaminitas y Bensimalitas, el grupo en los Suteos fue un tercer actor tribal en la historia de Mari. Los Suteos eran una poblacin de lengua y cultura semtica pero, aparentemente, no de la misma rama de los Haneos. Los Suteos estaban activos en torno a las estepas del desierto sirio y el Jebel Brishir, un macizo montaoso entre Mari y Palmira (Kupper 1957: 90). Algunos textos de Mari se refieren a saqueos cometidos por ellos, otros a las derrotas que sufrieron (Durand 1998: 2: 505-11). La afirmacin de que antes de la introduccin de los camellos los seminmadas slo pueden haber sobrevivido en estrecha relacin con los agricultores no implica que algunos de ellos no podran haber subsistido viviendo en tiendas. La tradicin dada en la Lista Real Asiria que los primeros 17 ancestros vivan en tiendas sugiere que los editores antiguos saban de grupos contemporneos que vivan en tales condiciones. No es imposible pensar que estas poblaciones representaban un modo de vida ms precario que el de los Haneos. Los Suteos, que durante el Paleobabilnico aparecan como actores secundarios, estuvieron en el papel central en la historia de las tribus pastoriles en los siglos posteriores al colapso de Mari hacia el 1758 antes de nuestra era.
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 13 Los Suteos y los Ahlamu en la segunda mitad del segundo milenio [136] Mari, ocupada por las tropas de Hammurabi alrededor de 1760 y quemada dos aos despus, no recuper su importancia. Terqa se convirti en el centro de un aparentemente menor Reino de Hana. Este fue muy probablemente una jefatura tribal, pero no lo sabemos. Babilonia, a su turno, sucumbi al ataque de los Hititas en 1595 antes de nuestra era, lo que abri el camino a los Casitas, pueblo montaoso que luego se convirti en amo de Mesopotamia. Las fuentes histricas fueron escasas hasta el siglo XIV, y por lo tanto ces la informacin sobre las tribus que haban mantenido relaciones a veces pacficas, a veces hostiles con los gobernantes del perodo Peleobabilnico. En el siglo XV un documento de Alalah, una ciudad sobre el ro Orontes, ofrece informacin interesante. Idrimi, un rey fugitivo, atraves la tierra de los Suteos, que debe haber sido el desierto de Siria. Una vez reinstalado en su trono, afirm que apoyara a los Suteos que no tienen un lugar de residencia (Kupper 1957: 97-8). A mediados del siglo XIV los Suteos fueron mencionados en los textos de Amarna interceptando a algunos mensajeros entre Egipto y Babilonia. Adems de una campaa del rey asirio Arik-den-ili contra los Suteos, los Ahlamu y los Yauru, algunos Suteos aparecan entre los grupos que pagaban tributo a Shalmanesar I de Asiria hacia el final del siglo XIII. Otro grupo tribal, los Ahlameos, eran llamados Suteos en algunos textos. Quizs los Ahlamu eran subgrupos de los Suteos que al principio eran de poca importancia, pero luego con el tiempo predominaron polticamente hasta el punto de ensombrecer a otros grupos Suteos. O quizs los seminmadas haban sido identificados como Suteos en Siria pero como Ahlamu en la Alta Mesopotamia (Liverani 1988a: 716). No es imposible que esta clasificacin se deba simplemente a una confusin de los burcratas y escribas que editaron los documentos, en tanto para ellos las tribus del desierto haban sido Suteos durante siglos. A mediados del siglo XIII el rey hitita Hatushili III se excus de no poder ir a Babilonia porque el camino era inseguro debido a los Ahlamu, aunque para ese momento el rey asirio Shalmanesar I los mencionaba entre los aliados de los hititas. La estructura tribal de estas dos grandes formaciones se verifica por el modo en el que los grupos se identifican como la casa de X y los individuos como el hijo de X. Conocemos apenas algunos nombres de subgrupos de Suteos (Postgate 1981: 53). Acerca de su modo de vida los documentos del perodo que emanan tanto de las administraciones urbanas como de textos literarios nos ofrecen slo los clichs estereotpicos: vivan en la estepa como los onagros y las gacelas, no tenan casas, vivan en tiendas, su refugio era la montaa, no conocan la agricultura,
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 14 no reconocan acuerdos, ni razn humana, y su idioma era el de los animales (Malbran-Labat 1981: 74). Los Arameos en el primer milenio Como la confusin que suceda entre los Suteos y los Ahlamu, los Arameos tambin fueron llamados Ahlamu en la primera mencin de ellos (Postgate 1981: 49). En el Levante Mediterrneo, justo antes del cicln del siglo XII [137] provocado por la invasin de los Pueblos del Mar, algunas de las tribus arameas constituyeron pequeos estados, y la poblacin polticamente dominante se identificaba sobre bases de afinidad tnica (Liverani 1988a: 654-60). Los estados mesopotmicos de Asiria y Babilonia eran ms slidos y as, al comienzo, las grandes formaciones tribales arameas en y alrededor de la Baja Mesopotamia slo pudieron llenar los espacios de las zonas ridas entre las zonas urbanas y agrcolas. Muchos de los arameos de las zonas ridas inicialmente estaban dedicados al pastoreo seminmade con ovejas y cabras. Pero como resultado de su contacto con tribus rabes lentamente adoptaron tambin la cra de camellos. Mientras algunos grupos arameos continuaban practicando el seminomadismo pastoril, otros se establecieron en reas cultivables hasta el punto de volverse agricultores sedentarios e incluso habitantes de las ciudades sin perder una fuerte cohesin social y una identidad cultural tnica basadas en un supuesto origen comn. En el curso de los seis primeros siglos del primer milenio antes de nuestra era la lengua aramea lleg a prevalecer entre las poblaciones tribales y urbanas desde el Noreste del Mediterrneo hasta el Golfo Prsico. Los caldeos, un subgrupo arameo, se convirtieron en la elite que logr hacer de Babilonia la capital del poderoso imperio Neobabilnico, completando as la arameizacin de todo el Antiguo Oriente Prximo. Los rabes En los documentos mesopotmicos los rabes, a pesar de hablar una lengua semita, nunca eran confundidos con las poblaciones semitas occidentales. Aparecieron al comienzo del primero milenio en los textos Neo Asirios, desde Damasco a Aqaba y desde Palmira al Eufrates (Fales 1989: 122). Los clichs sobre su modo de vida eran similares a los atribuidos a otras tribus, pero se reconoca la aspereza de su hbitat. Eran descritos como habitantes del desierto donde no hay ni siquiera animales salvajes, donde los pjaros del cielo no construyen su nido (Malbrand- Labat 1981: 63). Eran distinguidos de otras tribus por sus grandes rebaos de camellos que les permitan mayor movilidad. Las tribus que vivan en Arabia tenan reyes que enfrentaban a los ejrcitos mesopotmicos o negociaban con ellos. De los textos sobre el tributo que pagaban los rabes a los asirios se puede
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 15 deducir que la economa de los rabes nmades estaba basada entonces en la cra de ganado en pie, especialmente camellos, y en su participacin en el comercio caravanero de especias provenientes de Yemen. Contrariamente a la imagen tradicional de rabes agresivos, la informacin de algunas cartas neo-asirias recientemente publicadas ofrece una descripcin ms matizada. Los asirios mostraban una tolerancia prudente y al mismo tiempo cautelosa hacia los grupos en el territorio de su imperio. Parece que las relaciones polticas con los rabes recin se estaban estableciendo, pasando de la batalla a la alianza, del pillaje a las relaciones econmicas (Fales 1989: 126-9).
A modo de conclusin De lo que ha sido escrito aqu sobre los grupos tribales antes y despus de la Edad de Mari, la desproporcin de la informacin cualitativa que tenemos se hace evidente. [138] Sobre los Amorreos, los Suteos, los Ahlamu, los Arameos y los rabes, adems de las imgenes estereotpicas de sus modos de vida, lo poco que sabemos es que asaltaban mercaderes y mensajeros, atacaban a los sedentarios, se enfrentaban a los ejrcitos de estados grandes y pequeos y terminaban por someterse a ellos, a juzgar por el hecho de que pagaban tributo o impuestos. Tenemos ms informacin sustantiva sobre los arameos, pero aqu predominaban en gran medida los asuntos militares y polticos. Los textos de Mari tambin ofrecen esa clase de informacin, pero agregan aspectos antropolgicos, sociales y econmicos invaluables. La naturaleza fortuita de los hallazgos arqueolgicos frecuentemente puede distorsionar nuestra perspectiva. Si tuviramos ms informacin sobre los Suteos, Ahlamu y Arameos, probablemente encontraramos algunos procesos que eran al menos similares, si no idnticos, a algunos de los revelados por los documentos de Mari. La visin de los semitas como siendo a la vez nmades e invasores fue modificada en la primera gran monografa dedicada a Mari. Su autor interpreta la inmigracin de los nmades no como una serie de olas sino como el fluir continuo de un ro que podra ser contenido por medio de diques si el estado urbano era fuerte, pero que se desbordara si era dbil (Kupper 1957: xiv-xvi y 1959: 124). Ms an, Kupper presenta a los nmades como siempre a la espera de arrojarse sobre los sedentarios, pero tambin los ve siempre en un proceso evolutivo hacia la sedentarizacin (Kupper 1957: xiii). Esta posicin fue mordazmente criticada por Luke, que insisti en la unidad social y econmica de los agricultores y pastores en una cultura aldeana (1965: 277-80). Los pastores para l no eran recin llegados o invasores hostiles sino que eran parte de las
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 16 comunidades que incluan tanto agricultores como pastores. Rowton, basado en el estudio del nomadismo ms reciente bien documentado, propuso en una serie de artculos (1965-81) que el caso de Mari poda ser explicado como un nomadismo circunscripto, una clase de seminomadismo tpico de las regiones en las que los grupos tribales conducen sus asuntos en el territorio bajo la jurisdiccin de un estado urbano (Rowton 1974) lo que implica una interaccin cercana entre nmades y sedentarios, entre tribu y estado... (Rowton 1973a: 201). Cada uno de estos autores ha apuntado factores que, si no son tomados como posiciones exclusivas, ofrecen elementos tiles para acercarse a la comprensin de los fenmenos revelados por los documentos de Mari. El modelo propuesto por Kupper, aunque probablemente no completamente adecuado para el caso de Mari en tanto all estaban implicados pueblos tribales, se aplica bastante bien a la Baja Mesopotamia. No se puede negar que gente de zonas ridas flua continuamente hacia las urbanizadas e irrigadas, donde lentamente tendan a volverse sedentarios, aunque el movimiento no era unidireccional o irreversible. El reino de Hana consiste en un buen ejemplo de esto; despus del colapso de Mari, Hana se convirti en una entidad poltica tribal que dur varios siglos pero que probablemente nunca fue un verdadero estado urbano. Las comunidades de aldea, como las presentadas por Luke, realmente estaban compuestas tanto de campesinos como de pastores seminmades cuyos propios intereses no siempre coincidan con los del estado, aunque a veces lo hicieran. Sin ir tan lejos como para concebir una simbiosis idealista entre los seminmades y el estado, podemos ver que su interrelacin apunta a una autonoma tribal en los territorios bajo jurisdiccin estatal, tanto como a una autonoma urbana en un entorno nmade como el imaginado por Rowton. [139] Lo que vislumbramos en los documentos de Mari es una especie de ambigua interaccin entre el estado y los grupos tribales. En algunos casos, encontramos oficiales estatales tratando de reunir aldeanos para cosechar los campos o esquilar las ovejas del palacio, pero en otros casos intentaban que los pastores partieran a las tierras altas y designaban un oficial para encargarse de ellos. An en otras ocasiones a los pastores se les prohiba partir a las tierras altas a pesar de la falta de pasturas para sus rebaos. Los pastores eran vistos como eventuales reclutas y como virtuales enemigos. Ms an, encontramos algunos individuos tribales interesados en ponerse a ancianos corruptos de su lado, encontramos a ancianos planeando la adhesin de su pueblo a los Bensimalitas y la lealtad al estado, y encontramos a otros Haneos dotados de tierras del palacio. El estado necesitaba las contribuciones provistas por las comunidades tribales, ovejas y lana como pago de impuestos, reclutamientos para sus tropas, y la mano de obra de aldeanos y pastores para la explotacin de las propiedades rurales del palacio. Las comunidades tribales, de acuerdo con los intereses de sus lderes, esperaban proteccin militar del estado y ventajas
Nmades a travs del tiempo. Jorge Silva Castillo. 17 econmicas derivadas de la estructura estatal. Colaboraban con l cuando pareca conveniente para ellos, pero resistan cuando no era as. Cuando eso suceda, los grupos tribales Haneos, ya fueran Benjaminitas o Bensimalitas, se rebelaban, y entonces el estado responda con represin. Todos los estados urbanos, antiguos o modernos, actan de acuerdo con su propia lgica. Las actitudes aparentemente contradictores de los oficiales de Maria muestran cmo los gobernantes de un estado urbano, sin importar su origen tribal, se suscriban a dicha lgica. Si no observamos las circunstancias superficiales y nos enfocamos en el significado profundo del fenmeno, las actitudes de los administradores del reino de Mari no nos recordaran las actitudes de los expertos tecnocrticos de hoy? Las peculiaridades de la historia antigua, por supuesto, difieren ampliamente de lo que sucede hoy en da entre las comunidades pastoriles tribales de la regin. Sin embargo, probablemente no sea demasiado riesgoso comparar las migraciones de las estepas a las zonas urbanas del pasado con las migraciones de las zonas rurales a las industrializadas actuales. Ellas son motivadas no por ninguna clase de agresividad de los inmigrantes hacia la gente de las ciudades, sino por una simple y comprensible estrategia de supervivencia. Lecturas recomendadas Sobre el reciente nomadismo ver Coon 1951, una visin antropolgica del modo de vida de los nmades. Mundi y Musallam 2000, sus artculos escritos por especialistas sobre la evolucin y presente situacin del pastoralismo nmade y seminmade en el Cercano Oriente [140] Sobre el pastoralismo tribal en la edad de Mari los recientes publicados Documents pistolaires du palais de Mari, Durand 1997, 1998, 2000, provee a los lectores no especialistas de una herramienta excelente para abordar la rica documentacin de la edad de Mari. En ingles ver Heimpel 2003. Matthews 1978, ofrece una sntesis til sobre la historia de Mari centrada en los problemas del nomadismo. Sobre el antiguo nomadismo fuera de Mari, ver Buccellati 1966, sobre los Arameos, Lipinski 2000, sobre los Tuteos, Heltzer y Arbeli-Raveh 1981, sobre los rabes Ephal 1982, complementado con Fales 1989. Los artculos de Edzard sobre los nmades del tercer milenio, Postgate para el segundo milenio y Malbran-Labat para el primer milenio, an muestran valorables sntesis en Silva Castillo 1981 [Hay traduccin al castellano, ver bibliografa N. de R.] Bibliografa
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