Recomendaciones Manejo Paciente Politraumatizado
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Gmez Martnez V et al. Recomendaciones de buena prctica clnica: atencin inicial al paciente politraumatizado
formacin continuada
RECOMENDACIONES DE BUENA PRCTICA CLNICA
The initial management of the polytraumatized patient involves knowledge and establishment of a systematic methodology of evaluation and treatment in order to achieve two
principal objectives:
Aceptando el mtodo universal desarrollado por el Advanced Trauma Life Support (ATLS), el manejo del paciente
debe consistir en 6 etapas claramente diferenciadas:
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rpidas, no es menos cierto que en el campo de las urgencias/emergencias es una de las patologas cuya adecuada
resolucin es ms dependiente de procesos metodolgicos
claramente establecidos y reglados.
OBJETIVO
Esta gua pretende servir de referencia para la atencin inicial bsica de los pacientes politraumatizados por parte del
personal de los Servicios de Urgencia prehospitalarios y
Sistemas de Emergencias Mdicas (SEM), as como personal de Atencin Primaria de la salud en general. Siendo dirigida especficamente a:
1) Mdicos generales y de familia de equipos de Atencin Primaria.
2) Enfermera de equipos de Atencin Primaria.
3) Mdicos de los Servicios normales de Urgencia de
Atencin Primaria.
4) Enfermera de los Servicios normales de Urgencia de
Atencin Primaria.
5) Mdicos de los SEM.
6) Enfermera de los SEM.
7) Tcnicos de Emergencias Sanitarias.
8) Mdicos residentes.
9) Otros profesionales de la salud con responsabilidades en el manejo de pacientes politraumatizados.
ELABORACIN
El proceso empleado para la elaboracin de la presente
gua se ha basado en una bsqueda sistemtica de la evidencia, tanto a travs de bases de datos de revisiones sistemticas de la Cochrane Library, como de bases de datos
electrnicas de MEDLINE. Se ha complementado con la
revisin de artculos de revistas especializadas (impresos y
electrnicos) y con manuales y otras guas clnicas.
CONCEPTO
Entendemos por paciente politraumatizado todo aquel
herido de origen traumtico que presente afectacin de
dos o ms rganos, o ms de un sistema (incluida la esfera psquica en el nio), y en el cual al menos una de estas
lesiones entraa un potencial riesgo vital. Se considerar
que en el paciente peditrico, dadas sus caractersticas particulares (escasa volemia, reducido tamao, etc.) las fracturas mltiples constituyen tambin un politraumatismo.
A su vez, y a efectos prcticos, esta gua utilizar el trmino politraumatizado para referirse tambin al paciente traumatizado grave.
En la actualidad se mantiene que al hablar de traumatismos convendra hacerlo en relacin con el concepto
enfermedad accidente, no slo en funcin de los cambios fisiopatolgicos producidos en el paciente como respuesta al traumatismo, sino tambin al constituirse como
un endemismo de las sociedades desarrolladas modernas.
la tercera despus de esta edad, dejando tras de s una terrible lacra de discapacitados y prdidas millonarias, al incidir fundamentalmente entre los jvenes adultos econmicamente activos. Los accidentes de trfico suponen la
etiologa prnceps del traumatismo, siendo otras causas las
cadas fortuitas y accidentes domsticos, accidentes laborales (con ms de 1.000 muertes/ao en Espaa), agresiones, etc. En nuestro pas constituye una verdadera pandemia; as, si agrupsemos sus consecuencias en los ltimos
20 aos nos encontraramos con alrededor de 150.000 fallecidos y 2.500.000 heridos (de ellos 750.000 graves)[1].
Analizando pormenorizadamente los diferentes tipos de
lesiones los traumatismos craneoenceflicos (TCE) constituyen la principal causa de mortalidad por accidente de circulacin en Espaa Los trastornos craneoenceflicos graves son causados mayoritariamente por accidentes de
trfico (78%) a gran distancia de la segunda causa (accidentes laborales, 9,13%)[2], calculndose una incidencia
de 200 casos/100.000 habitantes/ao1, y son origen de graves secuelas. Los trastornos craneoenceflicos, con sus
graves secuelas de alteraciones neurolgicas tanto fsicas
como psicolgicas, generan cada ao en Espaa 800 cuadros de discapacidad severa. De las vctimas de un TCE
grave slo un 30% podrn deambular libremente tras su
recuperacin; un 40% quedarn invlidas; un 14% precisarn la ayuda de una tercera persona; y un 16% necesitarn caminadores o bastones ingleses para deambular[2].
En nuestro pas la incidencia del traumatismo medular
es de 2 casos /100.000 habitantes/ao2. Segn datos facilitados en el Forum Barcelona de Seguridad Vial por la
Dra. Bernabu, de la Unidad de Dao Cerebral del Instituto Guttman, los accidentes de trfico son la primera causa provocadora de lesiones medulares en nuestro pas. De
los mil nuevos casos de lesiones medulares que cada ao
se producen en nuestro pas, el 50% fueron provocados
por un accidente de trfico frente a las cadas (20%), los
accidentes laborales (18%) o las prcticas deportivas
(11%). El 54% de las lesiones medulares traumticas afectan a jvenes entre 16-30 aos[2].
Por su parte, el traumatismo torcico supone un 25%
de las muertes por traumatismo, y a su vez contribuye de
forma importante en un 25% adicional3. El traumatismo
abdominal representa el 4% de las muertes traumticas
iniciales y un 44% de las muertes tardas.
Una buena aproximacin a lo que significa el brutal impacto del traumatismo en la sociedad es la La estimacin
cuantitativa de la gran cantidad de aos potenciales de vida perdidos (APVP) que provoca. En este sentido cabe
destacar que de 784 muertes estudiadas, en nuestro mbito, stas fueron responsables de la prdida de un total de
26.148 APVP. Esta ingente cantidad de aos perdidos nos
acerca al grave impacto emocional, social y econmico del
problema, mxime si la mitad de la cantidad de vida per[1]Perales, 1990.
[2]Casado JL. III Jornadas
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Fisiolgicas
Lesionales
Agravantes
- Volet costal
Dificultad respiratoria,
frecuencia< 10 > 30
Alteracin de conciencia,
Dos o ms fracturas
de huesos largos
Herida penetrante en cabeza,
cuello, dorso, ingle
Quemaduras aadidas
Embarazo
GCS < 13
Sospecha de quemadura
de va area
Amputacin proximal a
la mueca o tobillo
Parlisis de cualquier extremidad
Marca de cinturn de seguridad
ASPECTOS CLNICOS
Al tratarse de una lesin multisistmica la presentacin clnica ser variable dependiendo del tipo, nmero y severidad de la afectacin de los diferentes rganos y aparatos.
Pero lo que s cobra realmente importancia desde un inicio es la determinacin precoz del nivel de gravedad del
paciente, o los pacientes (incidentes con mltiples vctimas [IMV]). Esta consideracin, por tanto, obliga a la realizacin de un despistaje clnico de tal circunstancia que
deber realizarse en funcin de los hallazgos fsicos del herido y de la cinemtica implicada en el traumatismo, y de
efectuar un triage o clasificacin preliminar en caso
de IMV. No se considera necesario el uso rutinario de ndices de gravedad en estos pacientes, al menos de forma
precoz.
Sospecha de traumatismo grave
La existencia de un traumatismo grave debe sospecharse en cualquier paciente con antecedente de traumatismo que presenta alguna de las condiciones siguientes
(tabla 1).
356
Tipos de traumatismo
A efectos acadmicos bsicamente podramos diferenciar 6
tipos o situaciones diferentes en el paciente politraumatizado:
1)
2)
3)
4)
5)
6)
Situacin de shock.
Traumatismo craneoenceflico.
Traumatismo torcico.
Traumatismo abdominal.
Traumatismo raquimedular.
Traumatismo de extremidades.
Presencia de lesiones que amenazan la vida en forma inmediata, por ejemplo: lesiones con riesgo inminente de
muerte (lesiones RIM [3]), lesiones altas de columna cervical y shock severo.
[3]El concepto de lesiones RIM incluye: neumotrax a tensin, neumotrax
aspirativo, hemotrax masivo, volet costal, taponamiento cardiaco y
contusin pulmonar grave bilateral.
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Prioridad elevada
Presencia de lesiones severas, pero que permiten la estabilizacin del enfermo y que no son una amenaza inmediata para la vida: deben ser atendidas entre los primeros 30 y 60 minutos (lesiones encefalocraneanas,
lesiones medulares, lesiones intrabdominales, quemaduras, traumatismo extenso de tejido blando y fractura de
pelvis).
Prioridad retardada
Heridos que tienen poca probabilidad de vida por presentar lesiones graves que, dependiendo de los recursos de la
institucin, sern atendidas o no.
Se han elaborado mltiples mtodos de triage en IMV
(SHORT, START, MRCC, Sieve, etc.) la aplicacin de uno u
otro estar en funcin de la cualificacin de los intervinientes, la relacin entre el nmero de vctimas y el de respondedores, la seguridad de la escena, los protocolos locales, etc.
MTODOS DIAGNSTICOS
Y ABORDAJE TERAPUTICO
La metodologa de atencin inicial al politraumatizado
est basada en el seguimiento de un procedimiento sistemtico bien establecido, donde se imbrican simultneamente procesos diagnsticos y teraputicos, y cuyos objetivos son fundamentalmente dos:
1) Detectar de forma precoz lesiones de riesgo vital y
solucionarlas de inmediato.
2) Efectuar un examen completo y sistemtico del paciente, evitando obviar lesiones que de otra forma podran
pasar desapercibidas.
Acadmicamente podramos dividir el mencionado proceso en 6 etapas:
Valoracin primaria y resucitacin.
Valoracin secundaria.
Categorizacin y triage.
Derivacin y transporte.
Reevaluacin continua.
Cuidados definitivos.
Valoracin primaria y resucitacin
Su objetivo es evitar la muerte inmediata del paciente detectando las situaciones que ponen en riesgo su vida, resolvindolas de inmediato. Lo realizamos siguiendo la clsica regla del A, B, C, D, E, donde A representa la va area
y control cervical bimanual, B la ventilacin, C la circulacin, D el estado neurolgico y E la exposicin corporal
completa y control ambiental. Se iniciar con la A y finali-
zar con la E; no se pasar de una letra a otra sin haber resuelto previamente la anterior.
A
Ventilacin y oxigenoterapia suplementaria. Una vez lograda una va area permeable evaluaremos si existe un correcto intercambio de aire entre el medio ambiente y los
pulmones; escuchamos, vemos y sentimos si el paciente
ventila, y se valorarn signos de hipoxemia y trabajo respiratorio. En caso de que exista paro respiratorio iniciaremos el protocolo con ventilacin de rescate. Si la ventilacin est presente debemos enriquecer el aire inspirado
con oxgeno suplementario (el oxgeno es la medicacin
fundamental del traumatismo), administrado a travs de la
mascarilla con bolsa reservorio a 15 litros por minuto; debemos administrar oxgeno suplementario para garantizar
una FIO2 mayor a 0,85. Posteriormente se valora la forma,
la simetra en la expansin y la integridad de la pared torcica con objeto de detectar la presencia de neumotrax
hipertensivo (en cuyo caso se efecta puncin torcica
descompresiva), neumotrax abierto (sellando con un dispositivo de vlvula), o trax inestable (procediendo a fijar
el segmento afectado, en caso necesario). Con la finalidad
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punto es decisivo porque permite determinar la localizacin y extensin de las lesiones. Una situacin a considerar es que la evaluacin en la calle debe circunscribirse slo a aquellas reas donde se sospeche lesin, cuidando en
todo momento la integridad y pudor del paciente. En
todo paciente con traumatismo multisistmico se debe
proceder al empaquetamiento integral, realizando slo
aquellos procedimientos de estabilizacin que sean estrictamente indispensables; no se debe perder tiempo valioso
para el paciente intentando procedimientos que no hayan
demostrado su efectividad o que retrasen el traslado. El
manejo definitivo del paciente y de sus lesiones slo puede llevarse a cabo en el hospital adecuado.
Valoracin secundaria
Una vez completada la valoracin primaria, iniciada la resucitacin y los parmetros del ABC se encuentren controlados, se comienza la valoracin secundaria, evaluando
al herido de cabeza a pies (centmetro a centmetro, como
si de una tomografa se tratara).
En la valoracin secundaria se atender a 4 aspectos
fundamentales:
1)
2)
3)
4)
Reevaluacin constante
Durante la evaluacin secundaria todos los aspectos relacionados con los mecanismos del traumatismo, la escena
del accidente, el estado inicial, la evolucin y los antecedentes se indagarn interrogando al paciente, a sus familiares o al personal que prest la atencin preliminar.
En el registro de los antecedentes se harn constar las
alergias, el empleo de medicamentos, las patologas previas (de base), la hora de la ltima comida y la ingestin
de alcohol o el consumo de otras sustancias psicoactivas.
Segundo examen fsico
La revisin secundaria incluye el examen completo, detallado y exhaustivo del paciente, desde la cabeza hasta los
pies, por delante y por detrs, pasando por todos y cada
uno de los segmentos corporales.
Cabeza. Se examina completamente la cabeza para identificar heridas, contusiones, depresiones, hemorragia
nasal u otorragia, equimosis y hematomas periorbitarios
(ojos mapache) o retroauriculares (signo de Battle); estas
ltimas hacen sospechar de fracturas de la base del cr-
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Respuesta motora
Respuesta verbal
Puntuacin: ojos
abiertos
Puntuacin: mejor
respuesta
Puntuacin: mejor
respuesta
4 Espontneamente
3 A la voz
2 Al dolor
6 Cumple rdenes
5 Localiza el dolor
4 Solo retira
1 No responde
3 Flexin anormal
2 Extensin anormal
1 No responde
5 Orientado
4 Confuso
3 Palabras
inapropiadas
2 Sonidos
incomprensibles
1 No responde
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Electrocardiograma
Lavado peritoneal
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puede administrar dentro de las 8 horas despus de haberse producido la lesin. Un ensayo reciente indica beneficios
adicionales al prolongar la dosis de mantenimiento de 24 a
48 horas, si se debe retrasar el inicio del tratamiento entre
tres y 8 horas despus de producida la lesin17.
Sobre el control de hemorragias
No existe evidencia suficiente de los ensayos controlados
aleatorios de los agentes antifibrinolticos en el traumatismo para apoyar o refutar un efecto del tratamiento clnicamente importante. Se requieren ms ensayos controlados aleatorios de los agentes antifibrinolticos en el
traumatismo18.
Sobre tcnicas invasivas
Una longitud del catter de 4,5 cm puede no penetrar la pared del pecho de una cantidad importante (9,9-35,4%) de
la poblacin, dependiendo de la edad y del sexo. Se necesitan agujas de longitud variable para la evacuacin de un
neumotrax a tensin en ciertos grupos de la poblacin19.
Acerca de las pruebas complementarias de diagnstico
1) La evidencia a partir de los ECA es insuficiente para
justificar la promocin de algoritmos clnicos basados en
la ecografa para el diagnstico de pacientes con sospecha
de traumatismo abdominal contuso5.
2) Instrumentos como la elaboracin de criterios clnicos
(sencillos y generalizables) pueden ser muy tiles para identificar pacientes con traumatismo por contusin con bajas
probabilidades de tener lesin de columna a nivel cervical.
La aplicacin prctica del instrumento reducira al menos
un 12% las radiografas solicitadas. La probabilidad de no
encontrar una lesin cervical utilizando este instrumento sera algo inferior a 1 por cada 4.000 pacientes, o dicho de
otro modo, cada mdico de Urgencias necesitara 125 aos
de prctica clnica para que le ocurriera una vez20.
3) A pesar de la alta sensibilidad y del valor predictivo
negativo (VP-) de instrumentos como la elaboracin de criterios clnicos determinantes de baja posibilidad de lesin
intracraneal, y ante la posibilidad de la existencia de lesiones inadvertidas, tan slo se considera apropiado reducir
mediante estos criterios un 10% el nmero de TAC que se
solicitan para pacientes con lesiones menores de cabeza21.
Principales lneas de investigacin
Nuevos productos hemostticos para su aplicacin en el
control de las hemorragias en los pacientes traumatizados
graves.
Comparative Efficacy of Granular and Bagged Formulations of the Hemostatic Agent QuikClot22. QuikClot (QC),
producto basado en zeolita (mineral inerte), que ha sido
aprobado recientemente por la Food and Drug Administration (FDA) y desplegado por el Ejrcito Norteamericano
(US Army) para la detencin de hemorragias severas secundarias a heridas de combate. Una formulacin de este
producto (QuikClot ACS) se ha propuesto para facilitar el
uso de las preparaciones hemostticas bajo las condiciones
del campo de batalla. Este estudio compara la eficacia he-
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en la Unidad de Politraumatizados se considera que ha beneficiado a una gran parte de la poblacin en cuanto a la
valoracin inicial, estabilizacin hemodinmica, valoracin secundaria, mtodos diagnsticos y tratamientos definitivos, y con ello ha contribuido a la disminucin de la
morbimortalidad en el paciente con traumatismo.
En Estados Unidos las lesiones se reportan como tercera
causa principal de muerte en todas las edades, en especial
en sujetos de 25 a 44 aos. Burch et al reportan que los
traumatismos son an la causa ms comn de muerte en
personas de 1 a 44 aos y la tercera en todas las edades en
los Estados Unidos, lo cual es similar a lo reportado en este estudio, en el que las edades ms comunes para la presentacin de traumatismos son de 21 a 35 aos, siendo esta la poblacin econmicamente activa.
Ecografa porttil
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