Armas Antiguas. Historia y Colecciones
Armas Antiguas. Historia y Colecciones
Armas Antiguas. Historia y Colecciones
2014
Las armas nacen al mismo tiempo que el hombre y su necesidad de alimentarse, a travs de la caza, y de defenderse de un entorno hostil. La adaptacin de los primeros utensilios elaborados por el hombre con estos fines es muy temprana, y as queda reflejado a travs de los numerosos hallazgos arqueolgicos en los que se localizan diferentes
armas elaboradas con piedra o huesos, como puntas de flecha, hachas de taln, arpones, etc
As mismo pronto tambin, y derivada de su importancia vital y la fuerte carga simblica que de inmediato adquieren estos objetos, su aparicin en las primeras manifestaciones artsticas, especialmente en pinturas parietales, donde se aprecia el uso y manejo de de estas primitivas armas.
Tipologas
Una de las primeras dificultades que nos encontramos a la hora de estudiar la armera histrica, es la gran complejidad y variedad tipolgica existente. Si a esto aadimos las
variables geogrficas y cronolgicas, nos encontramos ante un vastsimo campo de estudio. Por tanto aqu nos centraremos en el tema a tratar en este curso, las espadas y las
armaduras, tratando de dar una breve pincelada sobre las tipologas ms comunes en la zona europea, y especialmente la peninsular, en el periodo que abarca desde la Edad
Media hasta mediados del siglo XX. El objetivo es dotar al alumno de una serie de instrumentos que le permita enfrentarse con las piezas posible objeto de un tratamiento de
restauracin. Identificar el objeto y enmarcarlo dentro de un espacio cronolgico y social correcto resulta fundamental a la hora de poder afrontar una posible intervencin
en el objeto, ya que nos proporcionar mucha informacin sobre el mismo y sus caractersticas tcnicas y morfolgicas.
El marco geogrfico establecido viene determinado por ser el ms frecuente y presente en las colecciones hispanas, y por ser el que ms influencia ha tenido en el armamento
de nuestro entorno ms cercano. Por ello tambin trataremos del origen y evolucin de las colecciones de armera a nivel internacional y de nuestro pas con el fin de conocer
mejor a qu tipo de piezas y en qu circunstancias han llegado hasta nosotros.
La cronologa la marca, el hecho de que el armamento prehistrico e histrico hasta la Edad Media, ha sido objeto de numerosos estudio de tipo arqueolgico, dentro de cada
periodo, al encontrarse frecuentemente en estos yacimientos, y haber sido objeto de numerosos y minuciosos estudios, quedando establecidas tipologas y usos de las mismas
dentro de cada una de las civilizaciones de una manera bastante clara.
Resulta bsico encuadrar a estos tipos de armas en un contexto ms amplio y fijarlos en el mismo. La primera gran diferenciacin que permite crear los grandes grupos tipolgicos comnmente aceptados por la comunidad cientfica que se dedica a este campo viene determinada por su uso, ofensivo o defensivo. Es decir si est concebida para
hacer dao o para prevenirlo o contrarrestarlo.
Las armas defensivas son todas aquellas que buscan proteger al combatiente de una forma pasiva. Slo el mero hecho de portarla confiere una defensa frente a cualquier
ataque externo. Aqu existen tambin varios grandes grupos, siendo quizs el ms grande y conocido el de las armaduras completas, que en sus diferentes variantes, dan una
proteccin total o parcial al que las porta; o los elementos sueltos de las mismas que pueden formar parte o no de una armadura. Es decir escudos, cascos, cotas de malla,
petos, espaldares, etc. Estas no tienen por qu ser metlicas, aunque es el material ms comn por su mayor resistencia y proteccin. As existen numerosos ejemplos de armas defensivas que por razones culturales, econmicas o blicas estn realizadas en su mayor parte con otros materiales, como las adargas de cuero, los broqueles de corcho
o madera, etc..
Dentro del ofensivo otra gran compartimentacin la encontramos entre las armas de fuego; y las armas blancas. Las primeras son las que utilizan en alguno de sus sistemas la
plvora como propulsor de los proyectiles que arrojan. Mientras que las segundas son aquellas que poseen una hoja de naturaleza metlica, que es la que produce el dao.
Este grupo pese a ser uno de los ms recientes, ya que no es hasta el siglo XV cuando se populariza la produccin y uso de este tipo de armamento, es quizs uno de los ms
numerosos y complejos, ya que a diferencia de otros, sigue en plena vigencia y desarrollo multiplicndose de forma exponencial.
Este tipo de armas se subdividen a su vez en varios grupos dependiendo de factores que actan sobre su propia naturaleza como armas. Es decir segn los mecanismos de
ignicin, funciones (caza, guerra, deportivas, etc.), sistemas de carga, repeticin, etc. La Artillera, aqu se engloba todas las piezas de artillera que utilizan la plvora u otros
propelentes para arrojar grandes proyectiles de piedra o metal a larga distancia.Ni que decir tiene que cada uno de los grupos se subdividen a su vez en diferentes agrupaciones
que vienen dadas por diferentes parmetros como su longitud (arma de fuego larga o corta); su funcin (militar, de caza, de representacin, etc.);
Despus habra una serie de otros grupos de menor importancia como las armas de lanzamiento (jabalinas, flechas, arcos, ballestas); o las de percusin (mazas, hachas, etc.).
Las espadas se engloban por tanto dentro del grupo de las denominadas armas blancas, que son aquellas que poseen una hoja metlica. Dentro de las mismas se pueden
subdividir a su vez en dos grandes grupos divididos por la longitud de las hojas: las largas y las cortas. Dentro de las primeras estaran englobadas toda la tipologa de espadas,
machetes, sables, etc. Mientras que en las cortas estaran aquellas que la longitud de la hoja es menor y son susceptibles de poder portarse escondidas o camufladas, como
por ejemplo los puales, dagas, cuchillos, almaradas, estiletes, navajas, etc.
Las armas enastadas son aquellas que poseen un asta larga de madera, y en cuyo extremo aparece un elemento metlico que puede tener muchas formas y usos, que se denomina genricamente moharra. Dependiendo de su forma y de la longitud del asta reciben una denominacin u otra: alabarda, corcesca, partesana, pica, etc.
La armera vienesa adems se viene considerando como una de las primeras manifestaciones
del coleccionismo moderno, e incluso de la ciencia musestica. Ya que a la mera recopilacin de objetos de armera, hay que sumarle la bsqueda activa de armas pertenecientes a
personajes importantes de la poca, y la exhibicin ordenada dentro de un recinto estable.
Adems hay que sumar a esto la realizacin de un catlogo de la coleccin, el conocido como
Armamentarium Heroicum.
Este mismo origen, armeras dinsticas ligadas a las grandes monarquas y familias nobles
europeas es el origen del resto de las grandes armeras europeas como el Musee de lArme
(Pars), con las armas de los Valois; la Royal Armouries britnica; la Livrustkammaran de Suecia o, el ex Porte de Hal, actual Musee Royal des Arms et de Histoire Militaire de Bruselas,
etc..
Un caso destacado por la calidad y cantidad de las colecciones que alberga, es la armera,
Staatliche Kunstsammlungen (Rstkammer) , de Dresde que posee uno de los conjuntos ms
lujosos y exclusivos recopilados por los Electores de Sajonia.
Todas estas grandes armeras dinsticas sufrieron diferentes vicisitudes a lo largo de los aos,
y eso ha provocado la existencia de diferentes museos y colecciones actuales. A mayor potencia del territorio en el que estaba enmarcada la coleccin mayor desarrollo obtuvo.
Otros pases por diferentes motivos, no tienen concentradas en una sola coleccin que contenga todo el patrimonio de armas perteneciente a la realeza y nobleza de los siglos XVI y
XVII principalmente, pero si lo tienen repartido en diferentes colecciones. En algunas ocasiones durante el siglo XIX se intent suplir esta carencia creando una como parte de la creacin
de un sentimiento de unidad nacional. As naci por ejemplo es la Armeria Reale de Turn
bajo el impulso del rey Carlo Alberto en 1837 con armas de sus propias colecciones, otras adquiridas en el mercado internacional y otras procedentes de los arsenales de Gnova y Miln.
Las armeras pertenecientes a grandes familias nobles que han subsistido hasta nuestros
das, con mayor o menor fortuna, las encontramos repartidas por toda Europa, como la coleccin Trapp en Churburgo; o la de los duques de Sajonia-Coburgo-Gotha en Veste Coburg.
Otro origen de las grandes colecciones de armas existentes en la actualidad fueron los arsenales que las diferentes ciudades, casas nobiliarias posean para su defensa y que han perdurado hasta nuestros das. As varias ciudades Suizas poseen este tipo de colecciones, como
Solothurn o Zurich; el arsenal de Grasz en Austria; el del Palacio de Dogos en Venecia, o el de
la Valleta (Malta) de los caballeros de la Orden de San Juan.
Italia como centro productor puntero posee un magnfico legado de armera, aunque por su historia poltica reciente se encuentra disperso por diversas colecciones muchas
de ellas de origen privado como la Luigi Marzzoli, la Poldi Pezzoli en Miln, o la Stibbert de Florencia.
A finales del siglo XIX hay un resurgir en el inters por las armas antiguas, y la eclosin de los museos que se produce en este siglo recoge multitud de estas colecciones o
reactivando las ya existentes.
Siguiendo las corrientes de coleccionistas potentados de origen estadounidense fascinados por la antigedades europeas, se produjo un auge en la adquisicin de armas y
armaduras. Este hecho unido a las grandes crisis econmicas que se dieron en la vieja Europa, especialmente en las familias nobles venidas a menos que les obligaba a la venta de su patrimonio, produjo un transvase de objetos hacia colecciones extranjeras, especialmente las norteamericanas, como la venta de la coleccin Dino al Metropolitan
Museum en 1904.
As el Metropolitan, con el Dr. Bashford Dean (18671928) al frente, cre un Departamento en 1912 de Arms and Armour, que se vera enriquecida con numerosas aportaciones de ricos neoyorquinos que adquiriran en el mercado internacional gran nmero de objetos relacionados con la armera, como el caso de John Rutherfurd Stuyvesant.
Otro ejemplo es, el Philadelfia Art Museum, con el legado de Carl Otto Kretzschmar Von Kienbusch (1884-1976), un rico tabaquero interesado en la armera histrica y que
atesor una magnfica coleccin. O la recientemente desaparecida John Higgins Collection en Worcester, Massachusets, formada por el industrial del acero John Woodman
Higgins. Adems de las colecciones existentes en Louisville,Dallas, Cleveland y Chicago.
El mundo anglosajn, histricamente relacionado e interesado en este tipo de materiales, posee al margen de sus colecciones reales, magnficas colecciones de tipo privado
formadas por nobles potentados, Wallace Collection, o en secciones de Museos de nueva creacin a las que se dedica un apartado por estar relacionado con su temtica, como
el Victoria and Albert. En otras zonas de la Gran Bretaa encontramos tambin colecciones importantes como la Kelvingrove Art Gallery and Museum en Escocia.
Derivado de ello los principales estudiosos del mundo de la armera, y la principal bibliografa existentes se debe al mundo anglosajn. Autores como Samuel Rush Meyrick,
Baron de Cosson, Guy Francis Laking, Sir James Mann pusieron las bases del estudio de la armera sobre la que despus se desarrollaron otros estudios.
Finalmente existen multitud de pequeas colecciones de armera que forman conjuntos musesticos por s mismos, o se encuentran recogidas dentro de museos generalistas
de gran tamao, como el Rijsmuseum, el Louvre, el Ermitage, etc.
EL CASO ESPAOL
En el caso espaol las colecciones ms destacadas con las pertenecientes a la casa Medinaceli, hoy Museo del Ejrcito, e Infantado, hoy repartida entre varias instituciones
culturales espaolas. Varias colecciones como las de Osuna, Tres Aguas, etc.. fueron objeto de ventas durante el ltimo tercio del siglo XIX.
Como se ha indicado anteriormente una de las colecciones ms importantes a nivel mundial es la que adquiri y conserv el Emperador Carlos I. Aunque realmente se considera a su hijo Felipe II como su creador al vincularla a la corona espaola a partir de su testamento de 1594.
Se trata de una coleccin de carcter dinstico que se fue creando en base a las compras y regalos que la casa imperial espaola fue adquiriendo. Ese es el motivo por el cual
son pocas las armas existentes en la Real Armera anteriores a dicha dinasta. Se conservan algunos ejemplares pertenecientes a la poca de los Reyes Catlicos, y unos escasos
ejemplos de armas anteriores de carcter mtico o con una fuerte carga simblica.
Todos los miembros de la casa de Austria fueron incrementando con nuevas piezas la Real Armera. Tambin llegaron trofeos adquiridos en diferentes guerras y conflictos en
los que estuvo presente el Imperio espaol, como Lepanto, Pava, las guerras de religin etc.
De una manera similar al caso austriaco la Armera posea un espacio propio visitable, y varios inventarios, alguno de ellos grficos, como el Inventario Iluminado, que
la convertan en un protomuseo.
En el caso espaol nuevamente las grandes casas nobiliarias fueron las poseedoras
de colecciones de armera, algunas en clara competencia con la imperial, como fue
la de los Duques del Infantado en Guadalajara.
Algunas las colecciones ms destacadas que se han preservado hasta la actualidad
son la de la casa Medinaceli, hoy Museo del Ejrcito, e Infantado, hoy repartida entre
varias instituciones culturales espaolas. Varias colecciones nobiliarias como la de
Osuna, Tres Aguas, etc... fueron diseminadas por diferentes colecciones, especialmente en el extranjero, objeto de ventas durante el ltimo tercio del siglo XIX.
En nuestro pas, al margen de las colecciones dinsticas, el ejrcito, a travs fundamentalmente del cuerpo de artillera y su museo, han sido los grandes recopiladores y conservadores de todo tipo de armamento. Otros cuerpos y armas, como Ingenieros, caballera, Infantera, etc.. crearon sus propios museos a lo largo del siglo XIX atesorando
magnficas colecciones, que hoy en da se encuentran en su mayora formando parte del Museo del Ejrcito de Toledo.
El inters por el coleccionismo de armas antiguas tuvo un escaso reflejo en nuestro pas. Siendo los mximos representantes el industrial cataln Juan Estruch y Cumellas;
algunos miembros de la nobleza y la poltica, Marqus de Cerralbo; coleccionistas y empresarios, Jos Lzaro Galdiano, etc
Ya ms tardo, y como nico ejemplo de coleccionista particular con inters en colecciones de Armera, que se han mantenido y se exhibe en la actualidad es la coleccin del
Museo de Armera de Vitoria formada por el industrial alavs Heraclio Fournier durante la segunda mitad del siglo XX.
La consecuencia de este falta de inters por este patrimonio a veces considerado menor frente a otras disciplinas ha dado como resultado que salvo la magnfica Real Armera
de Madrid, la coleccin Medinaceli salvaguardada en el Museo del Ejrcito, y la desintegrada coleccin del Infantado, sean muy pocos las colecciones de armera histrica que
se conservan en colecciones pblicas espaolas.
Las armaduras
Se trata quizs de uno de los tipos de armamento ms conocidos y ms desconocidos de toda la panoplia armera. La mayor parte de la sociedad est familiarizada con su
existencia, aunque debido al cine y la televisin estos conocimientos son muy bsicos y en ocasiones errneos.
En primer lugar hay que tratar de enmarcar el concepto de armadura, y cuya denominacin correcta sera arns. Slo nos referiremos en este apartado a aquellos conjuntos
de prendas defensivas metlicas cuyo conjunto daba al combatiente una proteccin eficaz y total de su cuerpo.
De guerra S. XV
Maximiliana S. XV
De justar 1 XVI
De justar rennen S. XV
Slo podramos hablar de este tipo de arneses en un marco geogrfico y cronolgico muy concretos. El primero se refiere al periodo que abarca desde finales del siglo XIV hasta
finales del siglo XVIII. El comienzo de la cronologa viene dado por el momento en el cual se consigue proteger todas las partes del combatiente por placas metlicas articuladas
que le permiten combatir y estar protegido al mismo tiempo. Lo que se conoce por una armadura de punta en blanco, desde la cabeza hasta los pies. A este punto se llega por
una serie de circunstancias que abarcan desde la tecnologa hasta la forma de combatir en occidente. El final del periodo se produce cuando este tipo de protecciones dejan
de ser eficaces frente a los avances en el armamento ofensivo y las tcnicas de combate que aparecen desde finales del siglo XVII.
Los arneses gozan durante este periodo de diferentes fases evolutivas marcadas por las modas y las tcnicas decorativas de cada periodo histrico, con variantes geogrficas,
y tipologas determinadas por el uso de las mismas. Podemos hablar de tres grandes tipos dependiendo de este ltimo factor: los arneses deportivos, los militares y los de
aparato o gala. Dentro de los mismos existen a su vez diferentes clases como por ejemplo dentro de los deportivos: los de justar a caballo, a pie, de barrera, o incluso variantes
regionales como el Giocco di ponte florentino.
Las armaduras de tipo deportivo se caracterizan por una mayor calidad y cuidado en los temas y tcnicas decorativas. Adems debido a los movimientos y utilizacin de las
mismas frente a armas ofensivas concretas se encontraban preparadas y reforzadas para dicha actividad. As para las justas a caballo el lado expuesto se sola reforzar con
guanteletes y brazales de un mayor tamao y grosor, as como la propia prenda de cabeza, cuyo mximo exponente son los yelmos de cabeza de sapo. Estos eran fijos y solo
permita visualizar al frente una delgada lnea abierta en el yelmo. Tambin se utilizaban elementos de refuerzo aadidos como sobrepetos, un peto encima de otro, o piezas
de refuerzo como las tarjas. El caso ms extremo eran las armaduras reforzadas que se utilizaban para las justas alemanas, Rennen.
Este tipo de actividades deportivas, que servan de entrenamiento para la guerra, y como distraccin y forma de reconocimiento social entre los caballeros y nobles, se dieron
principalmente en Centroeuropa, aunque se trasladaron a otras zonas del continente. En la Pennsula Ibrica, debido a sus especiales caractersticas, no se dieron este tipo de
torneos, aunque si se produjeron otro tipo de actividades deportivas con armas como los pasos honrosos, los juegos de caas, de anillas, etc..
Tambin se dieron enfrentamientos a pie en zonas cercadas o valladas entre dos o ms combatientes, meles, en los que se utilizaban diferentes tipos de armas ofensivas con
el fin de derribar al contrincante. Eso se traduce en variantes y formas diferentes de arneses, como las denominadas armadura de tonel por la forma de las defensa de la parte
inferior de la cintura, y que permita mxima seguridad al mismo tiempo que la libertad de movimientos que precisaba el luchador.
Uno de los principales factores que determinan el tipo de armadura o armamento defensivo es el de la finalidad blica para el que estaba concebido. La caballera pesada
centroeuropea, tambin denominada franca, que domin los campos de batalla desde el siglo XV hasta parte del siglo XVI, tena su base en la proteccin total de caballo y
caballero que se convertan en un nico cuerpo acorazado ante el que era difcil contraponer otra fuerza. Por tanto estos combatientes estaban protegidos desde los pies, con
los escarpes, hasta la cabeza, con celadas articuladas.
El caballo era una pieza esencial en este conjunto de caballera pesada ya que era el que proporcionaba la fuerza y la velocidad. Por lo tanto de nada serva un caballero acorazado si el caballo quedaba expuesto al enemigo. Por ello, al igual que en las justas, al caballo se le coloca la barda, compuesta por capizana y testera para la cabeza, grupera,
flanquera y petral para el cuerpo. En el caso de los grandes arneses pertenecientes a los seores mas poderosos, estas se hacan a juego de las armaduras.
Estas armaduras eran resistentes, pero al mismo tiempo tenan que resultar cmodas para su manejo. Por tanto la existencia de armaduras extremadamente pesadas es slo
un mito. Se podan reforzar zonas especialmente delicadas, como el peto, e incluso se realizaron armaduras especiales mucho mas resistentes para por ejemplo zapadores o
minadores ms expuestos a los ataques de los defensores de una posicin.
En lineas generales, las armaduras de guerra, sobre todo de la caballera pesada, estaban formadas por una celada de engole articulada con visera y vista, lo que permita tener
visibilidad o ms proteccin segn las necesidades; gola para el cuello y encima un peto con ristre, para apoyar la lanza, y espaldar. Los brazos se protegan con hombreras
articuladas con coderas y brazales y unos guanteletes tambin articulados para la manos. Del peto pendan unas launas metlicas superpuestas, denominadas escarcelas que
protegan la cintura y la parte superior de los muslos cuando se montaba a caballo. La proteccin de las piernas se lograba a travs de unas musleras o quijotes, rodilleras y
grebas, cerrando la proteccin de los pies con unos escarpes.
Normalmente al ser para la guerra carecan de decoracin, salvo para los superiores jerrquicos, que portaban vistosas armaduras de guerra para poder al mismo tiempo ser
vistos y reconocidos por sus hombres, y por el enemigo.
La infantera o peones, tambin se protegan pero en menos medida dependiendo de varios factores como sus posibilidades econmicas y las funciones que tenan en el campo de batalla. As un ballestero y espingardero, que necesitaban libertad de movimientos para manipular sus armas ofensivas, contaban con menos elementos de proteccin
que por ejemplo un piquero. En muchas ocasiones no se eliminaba la proteccin sino que se sustitua por otra, que proporcionaba una menor oposicin a las armas contrarias,
pero que resultaban ms cmodas o ligeras, como es el caso de las brigantinas o coracinas, en lugar de las corazas.
La aparicin de una infantera organizada que haca de la utilizacin de grandes lanzas en formaciones cerradas su principal arma frente a la caballera pesada, ofreci un nuevo
campo al equipamiento de armaduras de infantera, que se convirtieron en medias armaduras, ya que se trataba de proteger del tronco hacia arriba, la parte ms expuesta
dejando el tren inferior ms libre y ligero. Este armamento conocido en la corona espaola como coselete estaba formado por un peto, para el pecho, y un espaldar, para la
espalda, con una gola para el cuello y unas escarcelas articuladas formadas por varias launas metlicas que protega la parte inferior de la cintura sin quitarle movilidad. A
este conjunto se le sumaba el capacete para proteger la cabeza, se trataba de un casquete esfrico o calva con una visera y cubrenuca, en algunas ocasiones, y en otras con
un ala corrida en todo el permetro. Este tipo de prendas de cabeza daban proteccin sin perder visibilidad. Segn avanz el siglo XVI y XVII surgieron otros modelos como los
morriones que tenan una gran cresta central y el vuelo del ala era curvo.
En muchas ocasiones, especialmente en los destinados a la realeza y la nobleza desde mediados del XVI a mediados del XVII, en un mismo arns se podan conjugar varias
armaduras, al estar formadas por una multitud de piezas intercambiables que convertan al conjunto en un tipo de arns u otro.
En este tipo de arneses todos los elementos estaban hechos a juego, es decir se repetan los motivos y tcnicas decorativas dando al conjunto un sentido unitario. La decoracin de los arneses tambin sufri una evolucin lineal y transversal. Es decir se parti de los arneses blancos, del color del acero bruido sin motivos decorativos, a un
proceso de incorporacin de de repertorios iconogrficos a diferentes zonas, normalmente el permetro de las diferentes piezas y el peto; hasta llegar a cubrir completamente
la armadura.
Detalle de la decoracin de grabado al cido con restos de dorado en un peto milans de finales del siglo XVI
Cuadro del Infante Don Carlos de Austria de Sanchez Coello con armadura y detalle decorativo de una armadura similar sin pavonado y dorado
Transversalmente tambin porque al mismo tiempo se daban en focos concretos la alternancia de partes lisas con bandas verticales cubiertas totalmente de elementos decorativos
grabados al cido, como sucedi en el foco milans de finales del siglo XVI. Esta tcnica se
poda completar o combinar adems con otras como el pavonado y el dorado.
Esto no quiere decir que alguna de las tipologas sean excluyentes de las otras, existen arneses de aparato totalmente eficaces desde el punto de vista de su funcin defensiva, y al revs que tuvieran una funcin meramente de
aparato.
Muchos de los arneses posean piezas intercambiables para adaptarlos a las actividades a desarrollar. As pues si
se quera convertir en una armadura para justar a caballo se cambiaban determinadas piezas y se colocaban otras
como por ejemplo atornillando al peto una tarja barreteada ligeramente convexa.
Con ello se consegua un doble efecto defensivo para dar una proteccin extra ya la zona del impacto de la lanza y
al mismo provocar que la fuerza del impacto fuera desviada parcialmente lejos del caballero. Por supuesto todas
las piezas estaban decoradas con las mismas tcnicas y motivos decorativos dando una unidad al conjunto.
En algunos casos, los ms lujosos, algunas partes del arns puede reproducir aspectos antropomorfos del propietario.
Este es el caso de una celada de alemana de Carlos I que posee un pelo y barba rizado todo ello dorado, ya que el
Emperador era rubio. Adems en la parte inferior de la misma se observa el Toison de Oro cincelado en el metal.
Auna en una misma pieza los elementos fsicos, con los simblicos de su rango y status en la propia celada.
Tarja barreteada renacentista colocada sobre
un sobrepeto con escenas mitolgicas grabadas
Tambin pueden servir como base para representar escenas clsicas o con postizos tridimensionales con animales fantsticos,
entre destacan las piezas salidas salida de los talleres milaneses de los Negroli a finales del siglo XVI, repartidas por las mejores
colecciones del mundo.
Gran importancia, dentro de toda esta clasificacin tipolgica, juegan los centros de produccin, ya que determinadas tcnicas
tanto de fabricacin como de decoracin, tienen su origen en los focos de produccin. Aunque existieron multitud de centros de
fabricacin de armaduras desde el siglo XV al XVII, destacan dos por su potencia cuantitativa y cualitativa: el norte de Italia y Alemania central.
Los principales centros en la Pennsula itlica se concentraban en el norte, Miln y Brescia, mientras que las alemanas se concentraron en Renania Wetsfalia con Colonia como centro comercializador, y las ciudades imperiales de Augsburgo, y Nuremberg. Tambin
tuvieron importancia las armeras seoriales de Innsbruck y Landshutt. En el caso italiano fueron numerosos los talleres existentes
en localidades como Brescia o Miln donde desarrollaron sus actividades autnticas sagas de armeros como los Missaglia, Piccinino
o los Chiesa.
Tambin destacaron otros focos como el existente en Flandes, y otros menores que se crearon por el estmulo de sus cortes como
Greenwich para Inglaterra, Francia y Espaa, con Eugui (Navarra) como centros principales. En la mayora de los casos se importaban los artesanos desde Miln para tratar de crear centros similares utilizando las mismas tcnicas constructivas y decorativas.
En las armaduras de parada o de gala destinadas a los grandes nobles y reyes de la poca el tratamiento era personalizado. Se tomaba medidas al futuro propietario y se realizaba la misma siguiendo las especificaciones e indicaciones del mismo. Se realizaban
bajo las directrices de un maestro, aunque participaban varios talleres especializados en la fabricacin de alguno de los elementos,
y otro en la decoracin de los mismos. Han llegado hasta nosotros diversos libros de dibujos de diseos con los nombres de los fabricantes y de los destinatarios de las armaduras como el conjunto de 45 armaduras dibujadas por Jorg Srg de mediados del siglo
XVI o el conocido como Album Thun donde aparecen las creaciones del armero alemn Lorenz Helmschmid.
Detalle de la media armadura para el Infante don Luis decorada con flores de lys
Muchos de estos armeros dependan de una corte concreta, y por lo cual reciban una cantidad fija que daba prioridad al seor a
la hora de fabricar armaduras respecto del resto de pedidos. Algunos de ellos creaban sus propios talleres en su corte como fue el
caso de Maximiliano I en Innsbruck en 1504. Se utilizaban estas armaduras muchas veces como regalos diplomticos o como muestras de amistad o lealtad como los regalos que Felipe IV recibi de su ta Isabel Clara Eugenia en 1624 y 1626.
Dentro del conjunto de elementos decorativos existentes en las armaduras como objeto dinstico que era, abundan los escudos y
smbolos herldicos que hacen referencia a la casa nobiliaria, real o imperial a la que pertenecan. Tanta importancia tenan estos
objetos para sus propietarios que se retrataban con ellas siendo las armaduras en algunos casos perfectamente reconocibles e
identificables en estos retratos.
Retrato de Francisco I con armadura portando smbolos herldicos de su casa
Desde mediados del siglo XVII los arneses comenzaron a tener una menor presencia en los campos de batalla, y eso tuvo su reflejo en los arneses de lujo con
destino a las cortes europeas. As comenzaron a fabricarse piezas de coraceros,
o como se llamaban en el Imperio espaol, caballos coraza coraceros, arneses
con menos piezas, pero ms resistentes en las zonas vitales, especialmente contra los mosquetes.
Los petos se reqalizaban menos abombados con una fuerte arista central. Mientras que las escarcelas muchas veces formaban parte de las musleras articulando estas para facilitar el manejo del caballo sin perder seguridad. Tambin
se colocaban piezas para proteger la zona de los riones denominados guardarrenes. Las prendas de cabeza se simplificaron dejando la cara al aire utilizando
borgootas descubiertas.
Poseemos gran cantidad de estas armas que se relacionan a travs de sus yacimientos con diferentes poblaciones o civilizaciones de la antigedad, ya que eran muy importantes como instrumento para la guerra y la
defensa, y por su valor simblico como smbolo de status. Y por ello se encuentran en muchos de los enterramientos de la antigedad como parte de los ajuares funerarios.
El primer hito de importancia en el mundo de la armera antigua y de la civilizacin, fue la aparicin del hierro como elemento principal en la construccin de espadas y puales. Ms resistentes que el bronce pronto
se abrieron camino dentro de los arsenales de las diferentes civilizaciones. Y as aparecieron armas como la
falcata, siglo V a.c., que con su hoja ancha y relativamente corta ligeramente curvada permita herir de punta
y de filo. Siendo un arma utilizada por los beros y que algunos autores la consideran antecesora del Gladius
utilizado por la legiones de Roma.
Las espadas se fueron especializando segn las necesidades y los conocimientos de cada una de las civilizaciones dando una gran variedad de piezas, como el sax sajn, la spatha romana, etc..
Pero no fue hasta la Edad Media cuando se produjo una eclosin tipolgica, quizs motivada por la necesidad
de armamento para las diferentes conflictos que se dieron durante ese periodo, y por las mejoras tecnolgicas y fuerte carga simblica que las espadas adquirieron, a la ya que ya posean con anterioridad.
As aparecen las espadas usadas por francos y vikingos con hojas largas y anchas con fuertes pomos para
equilibrarlas como los de nuez del Brasil, y que sern la base del desarrollo de toda una tipologa de espadas
que se darn en Europa hasta el siglo XVI. Aparecen largas espadas para combatir a caballo, y otras ms cortas para combatir a pie, nacen muchas armas militares que tenan ya unos antecedentes en aperos y armas
de uso civil, como gran parte de las armas enastadas, alabardas, partesanas, corcescas; hachas; machetes,
etc.
Se producen intercambios culturales con oriente y el mundo rabe a travs de las cruzadas y la presencia
musulmana en el Mediterrneo, especialmente en la pennsula ibrica. As se desarrollan diferentes tipos de
espadas segn su uso y funciones.
Se establece una morfologa comn desde mediados del siglo XIII, con diferentes variantes regionales y de uso,
pero que comparten elementos comunes importantes como fueron las hojas rectas y anchas con dos filos y
puntiagudas. Presentan un canal o vaceo central que aligera y robustece la hoja, y en donde pueden aparecer
marcas e inscripciones a veces en cobre embutido. Las piezas de mayor nivel pueden portar piedras preciosas
y materiales nobles como la espada de Carlomagno (Musee Louvre), adquiriendo valores mticos e incluso atribuyndoseles poderes sobrenaturales y humanizndolas a travs de la atribucin de nombres.
Una de las una de las ms desconocidas son las destinadas a la caza. Dentro de ella existen grandes espadas con
la punta lanceoladas que se utilizaron desde la segunda mitad del siglo XV para cazar osos y venados desde el
caballo. Otro conjunto interesante son los machetes de montera que servan para rematar jabales o ciervos, y
que a veces como en el caso de algunas zonas centroeuropeas iban estuchados con ms cuchillos y accesorios
destinados al despiece y el deshollado de la pieza. Las empuaduras y vainas de estas armas estaban hechas
con asta y estaban decoradas con motivos cinegticos.
Las espadas medievales generalmente constaban de un arriaz recto a veces ligeramente curvado hacia la hoja, pomos discoidales y
hojas anchas y rectas con canal central.
En nuestro pas, si partimos del siglo XV, nos encontramos con las primeras variedades especficas dentro de un
mbito geogrfico y cultural. No son otras que las denominadas espadas jinetas utilizadas en las cortes nazars
desde el siglo XIV y que a sus caractersticas morfolgicas, hay que aadirles la riqueza y calidad de los materiales
y tcnicas empleadas en su fabricacin. As el marfil en los puos, el cordobn en las vainas, los esmaltes y el pan
de oro en las guarniciones junto a hojas rectas y anchas conformaban una tipologa nica fruto del mundo musulmn peninsular y las influencias que sufrieron durante siglos tanto por el sur como por el norte.
Tambin merecen la pena researse por su tamao y caractersticas a los montantes, tambin mal denominados
mandobles, que por su tamao necesitaban las dos manos para su manejo. Estas grandes espadas que nacieron
durante la Edad Media para dar respuesta a necesidades militares y deportivas poseen una tipologa que presenta
pocas variaciones desde su nacimiento hasta su ocaso en el siglo XVII. Se trataba de grandes hojas, en longitud y
anchura que posean un arriaz recto cruciforme, un puo que permitiera asirla con dos manos y pomos pesados
piriformes o troncopiramidales para tratar de equilibrar el peso de la hoja.
En muchos casos la hoja tena dos zonas separadas por dos ganchos que sobresalan de los laterales de la hoja.
La primera parte, llamada falso recazo, permita, al carecer de filos, utilizarla tambin para manejar la espada.
Son muchas las variantes regionales y de uso de las mismas, destacando los montantes pontificios, reglados y
bendecidos por el papa a defensores de la fe; de ceremonia o aparato utilizado para desfiles y ceremonias; o los
de florear, utilizados por los maestros de esgrima para arbitrar encuentros esgrimsticos y realizar exhibiciones.
Tambin en la Edad Media hay que buscar el origen de otro tipo de espada, cuyo origen no est todava claro. Estas armas reciben diferentes denominaciones segn las pocas y las zonas de origen, siendo el trmino anglosajn
de falchion el ms utilizado, aunque el italiano storta, el castellano alfanje, son trminos que se utilizan a piezas
similares. Las caractersticas principales de la misma son una hoja ancha y corta con un solo filo para herir de tajo.
Dentro de la determinacin o identificacin de las armas blancas en general y de las espadas en particular, se han
venido utilizando dos sistemas de clasificacin, que se basaban en alguna de las partes de la morfologa del arma
antes descritas. La ms comn y utilizada es aquella que se fija en la hoja. Este sistema tiene un origen anglosajn,
y trata de establecer sistematizaciones tipolgicas similares a las que utilizan en arqueologa. Uno de sus mximos
exponentes para las espadas medievales es la realizada por el especialista Edward Oaekshott. Una clasificacin
similar pero para espadas relacionadas con el mundo vikingo existe la realizada por Harold Petersen.
El otro elemento que ha sido utilizado para realizar clasificaciones tipolgicas ha sido la empuadura. El trabajo
ms notable utilizando esta parte de la espada es el realizado por A.V Norman, tomando como referencia a la
espada ropera, de tipo civil, utilizada en Europa en los siglos XVI y XVII.
Durante el final del siglo XV y el Renacimiento se producen una serie de cambios motivados por los cambios en
los gustos y por la evolucin de la tcnica militar, en la que cada vez tiene ms presencia la artillera y las armas
de fuego. Se da una evolucin en las guardas que se comienzan a complicar aadindose elementos como las
patillas, los pitones y la multiplicacin de gavilanes.
La produccin y las tipologas sufrieron un considerable aumento. En parte por la extensin de la utilizacin de la misma por la sociedad civil, no slo como un arma para la
autoproteccin, sino tambin como un elemento de fuerte carga simblica como elemento de distincin de clase y de hombra.
Al margen de variedades geogrficas las espadas sufrieron una lenta evolucin que complic la guarnicin, es decir la parte que serva para asir y manejar la espada y una
disminucin en la anchura de las hojas. Esto se debi a la paulatina imposicin de el uso de la esgrima de punta sobre la que utilizaba el filo con los tajos, sobre todo en el
mundo civil. Estas tcnicas se popularizaron por la aparicin de diferentes mtodos de sistematizacin de las tcnicas esgrimsticas, recogidas en numerosos tratados, como
los de Pacheco de Narvez o Carranza, y que a lo largo del siglo XVII trataron de convertir estas tcnicas en una ciencia, aplicando la geometra y la matemtica a la esgrima.
Los cambios en la esgrima tambin influyeron en la propia morfologa de las espadas, especialmente en las empuaduras que vieron como poco a poco fueron aumentando las
protecciones de la mano. As surgieron los denominados lazos que no eran ms que piezas metlicas curvas que trataban de impedir que la punta contraria llegara a la mano
que empuaba la espada. Despus se fueron colocando pequeas piezas metlicas, hasta convertirse en piezas enterizas en forma de veneras o de tazas bajo cuya proteccin
se situaba la mano entera.
Las hojas especialmente en las civiles, se van estrechando y hacindose ms largas y aguzadas, dando lugar a los denominados estoques, que algunas veces posean una seccin romboidal. Las tcnicas decorativas estn menos presentes en las espadas. Al margen de los ejemplares de mayor calidad, donde podan dorarse el recazo de las hojas, la
decoracin suele evitarse salvo en los calados geomtricos en el vaceo central, especialmente en caso hispano.
Los sistemas constructivos de las mismas son muy similares. Una hoja con dos filos y que suele poseer un vaceo o rebaje central en ambas caras, en algunos casos ms tempranos pueden poseer varios canales, donde normalmente aparecen inscripciones indicando el nombre del forjador, la ciudad, e incluso en algunos casos inscripciones religiosas.
La parte inicial de la hoja posee un recazo, es decir una zona sin filos que permita avanzar sobre ellos uno o dos dedos para facilitar su manejo. El resto de la hoja continuaba
en una espiga que se iba estrechando y sobre la que colocaba un puo de madera que forraba con hilo metlico.
Tres ejemplos de empuaduras de lujo decoradas con diferentes tcnicas: cincelados, dorados,
pavonados incrustacin de piedras, etc.
La produccin se realizaba a travs de diferentes grupos de artesanos que estaban especializados en un determinado proceso. As estaban los forjadores de hojas, los fabricantes de guarniciones y vainas, los doradores encargados de decorar
las empuaduras, etc
Existen multitud de ejemplares especficos de una zona o de un uso especial. As
pues existen en la zona alemana, las espadas de ejecucin, destinadas para tal
fin (ver abajo); o por ejemplo espadas de zonas concretas como la esclavonia
veneciana, la cinquedea italiana, la claymore escocesa, o la espada de colloes
portuguesa
Durante los siglos XVI y XVII las tcnicas y materiales fueron similares, salvo en los
casos de piezas destacadas por su calidad. El acero, en sus diferentes calidades se
utilizaban para realizar las empuaduras y las hojas. Los puos eran de madera
y las vainas de cuero. Las guarniciones de calidad, pese a las prohibiciones de la
poca, se doraban a la sisa, e incluso se realizaban ataujas y nielados en pomos
y gavilanes. Poco a poco se impusieron las tcnicas de grabado y cincelado en las
empuaduras. Estas tcnicas tuvieron un especial desarrollo en las guarniciones
de taza o cazoleta y de conchas o veneras que se dieron en gran parte del siglo
XVII, donde se calaban motivos vegetales y geomtricos especialmente.
A lo largo del siglo XVIII las espadas sufren un importante cambio tanto en su aspecto civil como en
el militar.
En este ltimo pierde ms terreno frente a las cada vez ms modernas y eficaces armas de fuego y
artillera. Y en el campo de las armas blancas a finales de siglo son poco a poco sustituidas por los
sables de los que trataremos brevemente con posterioridad. Aun as continan existiendo espadas
militares, normalmente de caballera, con hojas anchas para combatir de tajo y empuaduras sencillas, de cochas en el caso espaol, en todos los ejrcitos europeos. Su produccin poco a poco se
va normalizando, reglamentando e industrializando.
Dentro del mundo civil perdi peso por la paulatina restriccin a portar este tipo de armas,
quedando relegado a un papel secundario en manos de oficiales, nobles, etc..., como arma
y como smbolo de status social o rango militar. En este contexto aparecen los espadines
que son la reduccin en longitud de las espadas renacentistas. Las hojas son estrechas y
puntiagudas para herir de punta, a veces de seccin triangular o lenticular. Las empuaduras se simplifican con aros guardamanos y plaquitas de metal, platillos frecuentemente,
que se decoran con diversas tcnicas como el cincelado, el dorado o incluso el lacado.
Espada militar espaola de mediados del siglo XVIII para caballera denominada de boca de caballo
Cuando la espada perdi presencia en los campos de batalla apareci un pariente cercano,
con el que lleg a convivir, el sable. Su principal diferencia era que se trataba de un arma
para combatir de tajo a caballo, probablemente tena su origen en los sabla que utilizaron
los hsares hngaros desde el siglo XVI. Por lo tanto su principal caracterstica era que tena
un solo filo y normalmente la hoja curva.
Desde el siglo XVIII se fue imponiendo como arma de combate y tambin como arma de
representacin y gala para la nobleza y la milicia. As surgieron infinidad de modelos destinados a los diferentes cuerpos, normalmente de caballera, aunque tambin la artillera, la
infantera e incluso los ingenieros poseyeron sus propios modelos.
El establecimiento de la Real Fbrica de Espadas en Toledo desde 1761 supuso un espaldarazo a la produccin de armas militares y civiles de este tipo. Poco a poco durante el
siglo XIX dej de tener un uso blico y pas a ser un elemento distintivo de los oficiales y
suboficiales.
Espadines del siglo XVIII y XIX
La armera y la conservacin
Son muchos los elementos en comn que tienen la conservacin y restauracin de la armera histrica con el de otras tipologas de objetos artsticos, pero tambin poseen
algunos elementos propios que aqu nos gustara comentar brevemenete.
En primer lugar hay que tener en cuenta que se trata de armas, aunque sean de aparato y lujo, y por tanto han podido estar expuestas a acciones que hayan dejado huellas
en su superficie y que han de respetarse de cara a una posible intervencin. Uno de los ejemplos ms claros son los denominados petos o capacetes a prueba de mosquete.
Este armamento defensivo posee huellas de impactos de proyectiles esfricos como demostracin por parte del fabricante de que eran capaces de resistir el impacto de un
mosquete. Por tanto forman parte de la historia de la pieza y ha de preservarse.
Muchas de las piezas han sufrido uno de los males ms comunes en los objetos histricos, intervenciones antiguas. Al haber sido objetos de uso muchas veces las intervenciones no buscaban recuperar la pieza con unos criterios modernos de restauracin, sino simplemente repararla o completar alguna de las piezas que pudieran faltar o estar
deterioradas por armeros especializados que conocan tcnicas y materiales muy similares a los originales.
La documentacin y el estudio de las piezas son fundamentales, mxime al tratarse de un campo con un escaso inters cientfico, sin tradicin historiogrfica como en otros
pases, y con una bibliografa pobre. Se trata de evitar intervenciones como en el pasado donde por ejemplo muchos de los pavonados que cubran los arneses se han perdido
al tratarlas con tcnicas inadecuadas.
La fabricacin de armamento presenta muchas veces la complejidad aadida de estar compuestas por materiales diversos, y que necesitan tratamientos y tcnicas diferenciados, a veces incompatibles entre si.
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