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GENTE

DE LA

PALABRA
Luchas, Victorias y Milagros de la
Evangelizacin Pblica Adventista

Edgardo D. Iuorno
DESCUBRA EDICIONES
Paran, Entre Ros
2015

GENTE DE LA PALABRA

Dedico este libro a los pastores Rubn Arn


y Jos Plescia, evangelistas de raza,
agradecido por lo que me ensearon y
contagiaron.

GENTE DE LA PALABRA

PREFACIO
La identidad del pueblo de Dios se basa en recordar con
gratitud las luchas pasadas. Un pueblo sin memoria es un
pueblo sin rumbo. Pero cuando estudiamos la historia de la
Iglesia Adventista, se hace evidente el derrotero poco derrotado
que ha seguido y la conduccin divina en todo el trayecto.
Pero el pueblo de Dios ser tambin el pueblo de la
Biblia. Se trata de Gente de la Palabra, que la lee, la estudia y la
comparte de manera personal y pblica, en busca de otros
pecadores a los que reunir entre los que avanzan a un mundo
nuevo.
En este libro no pretende ser una historia de la
evangelizacin pblica sino la presentacin de los trazos ms
gruesos del desarrollo de la misma, atendiendo a las enseanzas
que los sucesos del ayer nos proveen a los predicadores de hoy.
Esta reflexin se hace necesaria en tiempos cuando la
evangelizacin no se encuentra precisamente en su poca
soada. Cada vez parece ms difcil llamar la atencin de las
personas a las verdades de este tiempo. O quiz las dificultades
se deban al olvido de los principios que aplicaron los grandes
evangelistas adventistas?
Es mi deseo que al leer este libro crezca tu amor por la
Biblia, tu sabidura para predicarla, y puedas contarte entre la
Gente de la Palabra.

El Autor.

GENTE DE LA PALABRA

NDICE
CAPTULO UNO: LA EVANGELIZACIN PBLICA, UN
DEBER ADVENTISTA
Panorama General del Evangelismo Adventista

Elena De White Estimula La Evangelizacin Metropolitana En


Estados Unidos
14

CAPTULO DOS: CONTRA VIENTO Y MAREA


El Ocupado Pastor de Iglesia Como Evangelista

22

Predicando A Miles Al Aire Libre

24

Predicando en Estaciones Lluviosas

26

Ciclos En Plena Depresin Econmica

27

Evangelismo Pese a los Pequeos Presupuestos

28

CAPTULO TRES: MTODOS SIEMPRE EFICACES


Tres Tipos de Evangelismo

32

Un Enfoque Amplio

35

La Necesidad de un Equipo de Evangelismo

36

Publicidad Callejera

39

Utilizando la Prensa

40

El Arte en el Evangelismo

41
4

GENTE DE LA PALABRA

Ayudas Visuales Efectivas

42

La Evangelizacin Pblica Tribal

45

Evangelizacin Interracial

46

Tabernculos Porttiles

49

La Reunin de Oracin Previa Al Evangelismo

50

Comienza a Combinarse La Evangelizacin Con la Tarea


Mdica.

51

Repaso de Temas Anteriores e Inclusin de los Nios en la


Conferencia

52

La Vinculacin con Ministros de Otras Denominaciones

53

Mujeres Evangelistas

55

Pastores Y Laicos Entusiasmados Por Igual

56

Docentes en la Evangelizacin

59

La Evangelizacin Y La Correcta
Interpretacin De La Profeca

60

Valor De Las Profecas En La Evangelizacin

60

CAPTULO CUATRO: HOMBRES E HITOS QUE


MARCARON UNA ERA
Evangelista Desde la Cuna

67

El Equipo Evangelizador de H.M.S. Richards

74

GENTE DE LA PALABRA

J.L. Shuler: Maestro de Evangelistas

76

Walter Schubert, Innovador y Adaptador

80

La Contribucin de Edward Earl Cleveland

101

La Notable Campaa en Trinidad

109

Llamado a Predicar

117

La Influencia de Cleveland en Daniel Belvedere

126

Protesta Ante Nuevos Enfoques y Conceptos


Sobre Evangelismo

127

CONCLUSIN

130

BIBLIOGRAFA

132

GENTE DE LA PALABRA

APTULO UNO:
LA EVANGELIZACIN PBLICA, UN DEBER
ADVENTISTA
Panorama General del Evangelismo Adventista
Los adventistas creen que tienen un mensaje que debe
ser predicado antes de la segunda venida de Cristo, por lo cual
han hecho hincapi en el evangelismo toda su historia. En el
siglo XIX la denominacin consideraba principalmente como
ministros mayormente a los evangelistas no tanto a los pastores
de la iglesia. De hecho cuando un joven deseaba aspirar al
ministerio se lo enviaba a fundar una iglesia de manera que
diera evidencias de su llamado1. As, individuos como Joseph
Bates, John Loughborough, Stephen Haskell, y James White
viajaban constantemente en bsqueda de nuevos creyentes. Ellos
realizaban sus reuniones en una variedad de lugares, incluyendo
casas, escuelas, iglesias y carpas2. Cuando la denominacin
comenz a celebrar reuniones campestres en 1868, utiliz estas
sesiones tanto para el reavivamiento entre sus miembros como
para la evangelizacin de los dems. El desarrollo editorial
1

Ella M. Robinson, S. N. Haskell--Man of Action (TEACH Services,


Inc., 2004).,16,17.
2
John Skrzypaszek, The heart of the Seventh-day Adventist health
message, Ministry Magazine, accedido 14 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2014/12/the-heart-of-the-seventh-day-adventist-health-message. El uso de
carpas resolvi el problema de conseguir auditorios amplios a bajo costo, y
rindi muchas conversiones ni bien se implement.George R. Knight, Joseph
Bates: The Real Founder of Seventh-Day Adventism (Review and Herald Pub
Assoc, 2004).,191. Richard W. Schwarz, John Harvey Kellogg, M.D.: Pioneering
Health Reformer (Review and Herald Pub Assoc, 2006)., 17.

GENTE DE LA PALABRA

fortaleci el evangelismo ya que los ministros organizaban sus


itinerarios en respuesta a las inquietudes de los lectores. En este
sentido la implementacin del colportaje en la dcada de 1880
abri nuevas opciones para ampliar las actividades
evangelizadoras, siendo ste a menudo el principal medio de
difundir el mensaje adventista en nuevos territorios.
Casi todo el evangelismo adventista en Amrica del
Norte antes de 1880 se concentr en zonas rurales1.
Reconociendo que la iglesia deba llegar a la creciente poblacin
de las ciudades, S.Haskell desarroll un plan para establecer
misiones metropolitanas, y por el ao 1886 esas misiones
estaban operando en 25 ciudades, entre ellas Nueva York2,
Chicago, San Francisco y Washington D.C. Aunque estas
misiones establecieron la presencia adventista en varias ciudades,
sus costos llevaron a que se cerraran la mayora de ellas a
principios de la dcada de 1890.
Mientras tanto, los adventistas estaban tratando de
penetrar en el sur de Estados Unidos. Robert M. Kilgore
comenz a trabajar en Texas en 1877 y un afroamericano,
Charles M. Kinney, comenz a evangelizar ms hacia el norte en
1889. Unos aos ms tarde, en 1895, James Edson White y Will
Palmer tripulaban un barco de vapor por el ro Mississippi3.
Comenzaron una escuela nocturna para los afroamericanos, y
1

Denis Fortin, Adventism in Quebec: The Dynamics of Rural Church


Growth, 1830-1910 (Andrews University Press, 2004).,177.
2
Norma J. Collins, Heartwarming Stories of Adventist Pioneers (Review
and Herald Pub Assoc, 2005).,111
3
Benjamin Baker, Crucial Moments: Twelve Defining Events in Black
Adventist History (Review and Herald Pub Assoc, 2005).,55

GENTE DE LA PALABRA

pronto construyeron una pequea capilla en Vicksburg. Dos


aos ms tarde White us mtodos similares en Yazoo City y
comenz a publicar un pequeo peridico. Los esfuerzos de
Kinney y White lograron que el adventismo estableciera una
base entre los afroamericanos del sur.
Con la eleccin de Arthur G. Daniells como presidente
de la iglesia mundial, en 1901, la denominacin puso un nuevo
nfasis en el evangelismo1. Haskell, una vez ms hizo hincapi en
la necesidad de evangelizar las ciudades, esta vez combinando el
colportaje con los estudios bblicos y, a partir de las clases 1902,
la educacin para la salud. Ese mismo ao comenz a publicar
una revista evangelstica que se venda en las calles de la ciudad.
Durante los siguientes aos surgieron evangelistas
metropolitanos prominentes, como Otto O. Bernstein, James K.
Humphrey, Elmer L. Cardey, y K.C.Russell. Debido a que
algunas de las tcnicas utilizadas por estos hombres eran
polmicas, Daniells convoc una reunin de unos 50
evangelistas en 1912 en el que l y otros lderes de la iglesia
hicieron hincapi en que la publicidad deba evitar el
sensacionalismo, los mtodos teatrales y predicar slo "la
salvacin por medio de Jesucristo". En parte como resultado de
esta llamada de atencin los evangelistas pronto
complementaban sus conferencias con visitacin en los hogares
y temas de salud y temperancia.
En cuanto a innovaciones Judson S. Washburn
introdujo un curso bblico por correspondencia; y Carlyle B.
Haynes y E.L. Cardy aprendieron a trabajar efectivamente
con los peridicos como para obtener la cobertura de sus
1

George R. Knight, Lest We Forget: Daily Devotionals (Review and


Herald Pub Assoc, 2008).,337.

GENTE DE LA PALABRA

reuniones. La msica tambin se convirti en un elemento cada


vez ms importante. Henry de Fluiter, quien trabaj con el
evangelista R.E. Harter, compuso muchas canciones,
popularizadas luego en las audiencias adventistas1.
El estallido de la Primera Guerra Mundial incentiv an
ms los esfuerzos evangelsticos, al mismo tiempo que renov la
tentacin hacia el sensacionalismo. El presidente Daniells
present interpretaciones profticas particulares acerca de los
acontecimientos mundiales antes grandes multitudes en
Portland y Pittsburgh en 19162. En todo el pas los evangelistas
adventistas se centraron en los acontecimientos de la guerra.
Algunos incluso predijeron que Turqua caera, y entonces
llegara la gran batalla final de la historia, conocida como
Armagedn. Volveremos sobre este punto ms adelante.
El editor de la Review and Herald, Francis Wilcox,
advirti que nadie saba cmo conflicto europeo iba a terminar.
Para disgusto de los evangelistas, Turqua no cay, y eso sirvi
como una leccin acerca de cmo abordar la profeca con
humildad y cautela.
Por la dcada de 1920 la denominacin cambi su
enfoque de evangelismo, diferenciando ms entre las funciones
del pastor y el evangelista y dedicando ms fondos al apoyo de la
iglesia local. Las conferencias tambin comenzaron a emplear
instructores bblicos, generalmente mujeres, cobraban menos
que los ministros y se abocaban a realizar estudios bblicos en
hogares y grupos pequeos. Tambin se comenz a alentar ms
1

Wayne W. Hooper y Edward E. White, Companion to the SeventhDay Adventist Hymnal (Review and Herald Pub., 1988).,430.
2
Arthur Grosvenor Daniells, A World in Perplexity (Review and
Herald, 1918). Albert Dittes, Three Adventist Titans: The Significance of Heeding
Or Rejecting the Counsel of Ellen White (TEACH Services, Inc., 2013).,63.

10

GENTE DE LA PALABRA

la participacin laica en la evangelizacin, preparando una


variedad de materiales para apoyar esta tarea, y ste evangelismo
por parte de los feligreses tuvo un papel ms importante en la
difusin del en Amrica Latina, Asia y frica, sobre todo en la
segunda mitad del siglo XX.
Los evangelistas profesionales continuaron explorando
nuevas tcnicas. Charles T. Everson y Taylor G. Bunch,
influenciados por el evangelista protestante Billy Sunday,
construan tabernculos provisorios de madera en los que
celebran sus reuniones1. Philip Knox incorpor diapositivas del
espacio en sus presentaciones. J.H. Tindall desarroll "la
evangelizacin mdico- misionera " para atender coherentemente
tanto las necesidades fsicas y espirituales de sus oyentes.
Siendo que el evangelismo se convirti en una rama
especfica del ministerio se hizo evidente que se necesitaba
formacin especial. En 1937 John L. Shuler, con el apoyo de la
Unin del Sur, introdujo una escuela prctica en conjuncin
con una campaa evangelstica en Greensboro, Carolina del
Norte. Escuelas de campo similares tuvieron lugar en otras
partes y Shuler public un libro de texto, Evangelismo Pblico
(1939). Estimulado por las escuelas de campo, los colegios
nombrados instructores de evangelismo, empezando por R.
Allan Anderson en La Sierrra College en 1938.
Pero el ms importante desarrollo del evangelismo
adventista entre las guerras mundiales fue el uso de la radio.
Comenz H. M. S. Richards con transmisiones en el sur de
California, en 19262. Otros evangelistas continuaron,
1

Malcolm Bull y Keith Lockhart, Seeking a Sanctuary: Seventh-Day


Adventism and the American Dream (Indiana University Press, 2007).,141.
2
H. M. S. Richards, Harold Marshall Sylvester Richards, y Kenneth
W. Wilson, Walking Through Your Bible with H.M.S. Richards (Pacific Press

11

GENTE DE LA PALABRA

incluyendo a John Ford, Fordyce Detamore1, Shuler, y


Anderson. Las transmisiones de Richards se convirtieron en La
Voz de la Profeca, programa de radio, que en 1942 estaba
transmitiendo a todo Estados Unidos2. Ese mismo ao Braulio
Prez comenz el mismo espacio en castellano, destinado a
Amrica Latina, y oportunamente adapt el ttulo del mismo
llamndolo La Voz de la Esperanza3. El xito radial condujo a
explorar con la televisin. William A. Fagal comenz en 1950 el
programa Fe para Hoy, transmitido semanalmente4. En 1958
George Vandeman introdujo Est Escrito. Aunque originalmente
diseado como una serie de programas que promoveran una
campaa evangelstica, Est Escrito pronto se convirti en una
emisin semanal regular5. En 1974 la denominacin estableci
un tercer programa de televisin, Aliento de Vida, dirigido al
pblico afroamericano.

Publishing, 1983).,10. John Dunning, On the Air: The Encyclopedia of Old-Time


Radio (Oxford University Press, 1998).,574. Luther F. Sies, Encyclopedia of
American Radio, 1920-1960 (McFarland & Company, 2008)., 722
1
Gordon Mahlon Hyde, A Selected Anthology of Adventist Sermons
(University of Wisconsin--Madison, 1957).,166.
2
La dcada del 40 manifest un renovado inters en todas las facetas
del evangelismo. David O. Moberg y Norris A. Magnuson, Current trends in
evangelism, Journal of Pastoral Care 10, n.o 1 (1 de marzo de 1956): 16-26.,16
3
Marcos Antonio Ramos, Panorama del protestantismo en Cuba/
panorama of Protestantism In Cuba: La presencia de los protestantes o evangelicos en
la historia de Cuba desde la colonizacion espanola hasta la R (Ediciones Universal,
1986).,428.
4
Gary Land, Adventism in America (Andrews University Press,
1998).,191.
5
John Ernest Monteith, Malcolm Graham, y Lorine Graham, The
Lord Is My Shepherd: A History of the Seventh-Day Adventist Church in Canada
(Canadian Union Conference of the Seventh-Day Adventist Church,
1983).,78.

12

GENTE DE LA PALABRA

Despus de la Primera Guerra Mundial el evangelismo


adventista parece haber vuelto menos sectario, enfocando ms
en el hogar y la vida cristiana que en el sbado y la profeca. Al
tener que competir con la televisin y otras actividades, los
evangelistas trabajaron para encontrar mtodos efectivos a fin de
alcanzar a la sociedad de la posguerra. Las campaas de dos
semanas, introducidas por Detamore en 1953, reemplazaron a
los esfuerzos de tres meses ms propios de una poca anterior1.
Leo R. Van Dolson y William Lovelace, entre otros,
desarrollaron seminarios de Apocalipsis que an son importante
medio de evangelismo adventista. En Amrica Latina, como
desarrollaremos luego, Walter Schubert desarroll un gran xito
un enfoque especial para sociedades catlicas romanas,
comenzando por las cuestiones familiares y sociales en lugar de
hacerlo con las profecas de Daniel y Apocalipsis.
Por ltimo, siempre alerta a las posibilidades de las
nuevas tecnologas2, la denominacin comenz evangelizadoras
transmisiones de la mano de Mark Finley en 1995, destinadas a
cerca de 4000 iglesias en Estados Unidos3. Al ao siguiente, se
incluyeron 1900 sitios en Amrica Latina, Europa y frica, con
1

Adventist Heritage (Department of Archives and Research, Loma


Linda University, 1982).,58
2
Acerca del abordaje comunicacional de la evangelizacin Cristiana
actual ver David Lowes Watson, The church as journalist: evangelism in the
context of the local church in the United States, International Review of
Mission 72, n.o 285 (1 de enero de 1983): 57-74.
3
Ray Dabrowski, Images of Mission: Seventh-Day Adventists: People of
Faith, Love, Courage, and Hope: Souvenir Book (Review and Herald Publishing
Association, 1995).,195. La tecnologa tambin ha sido vista por el mundo
evanglico como una manera de facilitar el evangelismo en las iglesias
cristianas. David Neff, Personal Evangelism on a Mass Scale: Europeans to
participate electronically in crusade, Christianity Today 37, n.o 3 (8 de marzo
de 1993): 64-64.

13

GENTE DE LA PALABRA

traduccin simultnea del programa a 12 idiomas. Desde ese


momento el evangelismo por satlite se ha convertido en el
mtodo adventista estndar, utilizando canales adventistas
propios de la denominacin o sostenidos por ministerios de
apoyo laicos1.
Asimismo el adventismo, en consonancia con otras
iglesias cristianas, est desarrollando el evangelismo web. Sin
embargo, aunque los costos sean infinitamente menores a los de
un ciclo masivo, la cantidad de tiempo que un internauta pasa
delante de la pantalla es breve, y el mensaje no puede ser
impartido de la misma manera que en vivo. La transmisin de
informacin no necesariamente es evangelizacin. La
evangelizacin es un proceso de comunidad, no un evento
online2.
Habiendo dado un vistazo panormico al desarrollo
general del evangelismo adventismo, conviene detenerse en la
manera en la que este ministerio fue reavivado por Elena de
White.

Elena De White Estimula La Evangelizacin Metropolitana En


Estados Unidos

Gary Land, Historical Dictionary of Seventh-Day Adventists (Scarecrow


Press, 2005).,95-98. Nikolaus Satelmajer, Evangelism--The heartbeat of the
church: An interview with Mark Finley, Ministry Magazine, accedido 14 de
abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2008/06/evangelism-the-heartbeat-of-the-church.html.
2
Sarah Eekhoff Zylstra, Do Digital Decisions Disciple?, Christianity
Today 59, n.o 2 (marzo de 2015): 17-19.,18.

14

GENTE DE LA PALABRA

A.G. Daniells, inspirado en los consejos de Elena G. de


White, llev a los adventistas del sptimo da a un avance
espectacular en la evangelizacin metropolitana dirigiendo una
notable serie de reuniones en Portland, Maine, durante enero y
febrero de 19161.
Algunas de las respuestas a las cuestiones
desconcertantes que desvelaban a los lderes adventistas en 1900
llegaron con el regreso de Elena G. de White, que haba estado
en Australia desde 1891. Mientras que la iglesia haba
experimentado un rpido crecimiento en el exterior durante su
ausencia, sufra bajo la falta de una organizacin central
adecuada2. Muchos diversos intereses denominacionales estaban
en aparente competencia, y haba muchas asociaciones, comits
y juntas superpuestas.
En detrimento de la evangelizacin, mientras que los
adventistas parecan enredados en una introspeccin
improductiva y el continuo examen doctrinal, su pblico ms
receptivo (de perfil rural, creyente en la Biblia y protestante),
estaba migrando en grandes nmeros desde el campo a la
ciudad. Muy poco se estaba haciendo entonces como para tener
un impacto entre los habitantes de la ciudad3.

Howard Weeks, Adventist Evangelism in the Twentieth Century,


Ministry Magazine, accedido 2 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1966/02/evangelism.
2
Eugene V. Gallagher y W. Michael Ashcraft, Introduction to New and
Alternative Religions in America: African Diaspora Traditions and Other American
Innovations (Greenwood Publishing Group, 2006).,48.
3
George R. Knight, A Brief History of Seventh-Day Adventists (Review
and Herald Pub Assoc, 1999).,124.

15

GENTE DE LA PALABRA

La Sra. White continu presionando por un plan


agresivo de evangelizacin pblica en las ciudades, comenzando
por los Estados Unidos1. Probablemente vea en este nfasis otra
ventaja: superar ms rpidamente la crisis generada por J.H.
Kellogg2. Pero Daniells y los otros lderes eran muy lentos para
responder a la insistencia de la Sra. White. En primer lugar,
estaban muy implicados en la reorganizacin administrativa de
la iglesia. En segundo lugar, compartan la prevalente falta de
entusiasmo eclesistico para el evangelismo metropolitano.
Teman exaltar personalidades por encima del mensaje en s
mismo.
Por otra parte, tenan poca evidencia de xito reciente en
la evangelizacin de las ciudades. En realidad el premilenialismo
adventista no apelaba a la clase media protestante tanto como
otros enfoques evangelizadores. La asistencia a las reuniones
evangelsticas adventistas eran escasas y los resultados pequeos.
Pero lo que ms perturbaba a la Sra. White no era la
falta de un plan de evangelizacin integral, sistemtico instado
por la sede administrativa central de la iglesia. Le preocupaba
que los avances institucionales y de las misiones extranjeras eran
ms veloces que los relacionados a la evangelizacin citadina3.
Elena G. de White no entenda por qu Daniells, al igual

George R. Knight, If I were the devil: seeing through the enemys


smokescreen: contemporary challenges facing adventism (Hagerstown, MD: Review
and Herald Pub, 2007).,282.
2
Gilbert M. Valentine, W.W. Prescott: Forgotten Giant of Adventisms
Second Generation (Review and Herald Pub Assoc, 2005).,228.
3
George R. Knight, Historical Sketches of Foreign Missions (Andrews
University Press, 2005).,xx.

16

GENTE DE LA PALABRA

que su difunto esposo, James White1, no poda delegar algunas


de sus cargas rutinarias a los dems para convertirse en el lder
de las fuerzas evangelizadoras con su ejemplo personal. En varias
cartas record a Daniells y sus asociados de su responsabilidad
de ponerse personalmente en la obra de la evangelizacin de la
ciudad.
Mientras tanto haba una conciencia creciente de la
necesidad de mayor crecimiento entre las filas del ministerio, y
hasta un poco de descontento, justificado por el pobre historial
de crecimiento adventista en Norteamrica durante estos aos
de preocupacin administrativa. Tras una breve oleada de xito
evangelstico momentneo en 1905 (en el que J.S. Washburn,
Luther Warren, y W.W. Simpson eran las figuras principales), la
tasa de crecimiento decay. En 1907, la membresa adventista
superaba apenas en un uno por ciento al ao anterior, 1906. Y
en 1908 la tasa de crecimiento cay an ms, a pesar de que la
poblacin de Estados Unidos estaba creciendo a buen ritmo, y al
suceso de evangelistas fundamentalistas como Torrey, Chapman,
y otros2.
Daniells pronto se dio cuenta de una manera ms
personal lo grave que era la situacin. Durante una visita a
California tena la intencin de visitar a la Sra. White, como de
costumbre, y hablarle de sus planes de reunirse pronto con los
obreros adventistas de la ciudad de Nueva York para discutir su
trabajo evangelstico en el lugar. Para su sorpresa y
consternacin, ella se neg rotundamente a verlo, hasta que l
1

Terrie Dopp Aamodt, Gary Land, y Ronald L. Numbers, Ellen


Harmon White: American Prophet (Oxford University Press, 2014).,130.
2
Timothy L. Hall, American Religious Leaders (Infobase Publishing,
2003).,63.

17

GENTE DE LA PALABRA

comenzara a encabezar personalmente la obra de evangelizacin,


de modo que se inspirara un compromiso denominacional total.
Daniells entonces fue liberado de sus itinerarios y viajes
habituales para que pudiera dar toda su atencin durante un
ao completo al problema de la evangelizacin en las ciudades.
Al irse concientizando de la enormidad de la tarea a ser realizada
exclamaba Oh, qu tarea que tenemos en nuestras manos!"
Rpidamente cont con la aprobacin de Elena de White, y
Daniells declar sentirse como los viejos soldados que escuchan
el toque de corneta. Se estremece mi corazn, acelera mis
actividades, y me da placerMe gustara que pudiera disparar el
corazn de cada ministro en esta denominacin con la sensacin
que tengo con respecto a la importancia y el gran valor de la
obra de evangelizacin".
Inspirados por el ejemplo de su lder mundial, los
presidentes de las asociaciones de Norteamrica buscaron su
ayuda en el desarrollo del trabajo evangelizador en las ciudades
de sus territorios de trabajo sus campos. El lder y sus
colaboradores administrativos hicieron todo lo posible para
dispersar el limitado talento evangelstico disponible en los
lugares ms necesitado y receptivos.
Reconociendo que el ministerio adventista
histricamente rural necesitaba una formacin especial para el
trabajo en las grandes ciudades1, el Consejo Otoal de 1910
1

Las sociedades rurales y urbanas son muy diferentes. El mundo


rural contiene elementos de homogeneidad familiar donde los valores
sagrados, comunales y tradicionales se expresan a travs de las comunidades
de manera personal, primaria y directa. Es un mundo esttico de estmulos
simples y formas institucionales sencillas. Su espritu es emocional y subjetiva.
Caracterizado por la integracin social, la solidaridad y la estabilidad a travs

18

GENTE DE LA PALABRA

autoriz una serie de institutos ministeriales que prepararan a


los pastores a entrar en las grandes ciudades, sin demora, y
proclamar las verdades del mensaje, y sabiendo muy bien que
nuestro ministerio se siente totalmente desigual a la tarea sin
preparacin especial". Daniells destac que haban pasado veinte
aos desde que se celebraran los ltimos institutos similares.
Como estudiara Howard Weeks, la dcada 1910-1920
fue altamente productiva en el evangelismo. El impacto
sociolgico del creciente movimiento catlico y la Primera
Guerra Mundial proporcionaron un terreno frtil para el
esfuerzo evangelstico. La gente, preocupada por los
acontecimientos aparentemente fuera de control, buscaba
significado y certeza1.
Los resultados de este y otros aspectos del nuevo nfasis
institucional adventista no tardaron en aparecer. Una vez ms la
tasa de crecimiento de la feligresa adventista en Norteamrica
comenz a subir. Mientras que en 1910 se haba hundido a -1,5
por ciento, en 1911 aument a ms el 2,5 por ciento, en 1913 a
de la uniformidad laboral y la unidad de residencia, el trabajo y recreacin, se
trata de un sistema cooperativo. Por el contrario el urbanismo es un mundo
de heterogeneidad cvicamente orientada donde los valores seculares,
racionales, y existenciales se expresan a travs de estructuras de tono
impersonal y hasta burocrtico. Se trata de un mundo dinmico de mltiples
estmulos sociales y masivos y complejas formas institucionales. Su espritu es
pragmtico y utilitario. Implica la estratificacin y segmentacin social, y el
cambio a travs de la especializacin en el trabajo, y la separacin entre
residencia, trabajo y recreacin. Es inherentemente competitivo aunque
interdependiente. Francis M. Dubose, The practice of urban ministry:
urban evangelism, Review & Expositor 80, n.o 4 (1 de septiembre de 1983):
515-21.,515.
1

Valentine, W.W. Prescott.,256.

19

GENTE DE LA PALABRA

casi el 5 por ciento. Sin embargo, la mejor estaba por venir.


Los evangelistas y las campaas evangelsticas se
multiplicaron. En 1913, quince evangelistas, con la asistencia de
muchos otros colaboradores predicaban en el rea
metropolitana de Nueva York. Durante el verano de 1914,
nueve equipos evangelsticos fueron desplegados en Iowa.
Evangelistas como A.R. Ogdon, K.C. Russell, J.W. McComas,
A.S. Booth, J.W. McCord, R.E. Harter, G. P. Rodgers, Carlyle
B. Haynes, E.L. Cardey, y otros mencionados anteriormente
estaban en la vanguardia de un ejrcito de predicadores que
trataba de seguir de cerca el consejo dado por Elena de White
Los resultados fueron muy alentadores. Las audiencias
de los evangelistas ms prominentes oscilaban entre las 700 y
800 personas, y en ocasiones incluso tocaron la marca de mil.
Con el estallido de las hostilidades de la primera guerra
mundial, la iglesia fue estimulada a un nuevo celo evangelstico.
El deterioro de las condiciones del mundo reforz las
convicciones adventistas de un creciente desorden mundial
previo segunda venida de Cristo; en contraposicin a la de los
clrigos liberales, promotores de un movimiento de evangelio
social. Los adventistas apuntaron a lo que parecan ser algunos
cumplimientos muy especficos de sus puntos de vista profticos,
uno de los cuales era la pronta participacin de Turqua en la
lucha europea, considerada como una seal apocalptica
definitiva.
Estos acontecimientos mundiales fueron acompaados
por una profundizacin del compromiso espiritual de los
adventistas a esta tarea. Haba un sentimiento de reivindicacin
luego de muchos aos de ridiculizacin al pronosticar una
20

GENTE DE LA PALABRA

catstrofe mundial mientras avanzaba la proclama de


mejoramiento mundial en otras iglesias. Los eventos reales
parecan demostrar la certidumbre adventista y el error ajeno.
Los adventistas rpidamente aprovecharon su ventaja apelando a
los miembros descontentos de otras iglesias para que se unieran
a ellos en su gran movimiento. La denominacin se vio envuelta
en un nuevo espritu de confianza, unidad y compromiso.
Algunos defectos interpretativos1, sin embargo, echaran
por la borda mucho de lo ganado bajo estas circunstancias. El
saldo positivo, sin embargo, fue el establecimiento del
evangelismo pblico agresivo y extenso, reavivado gracias a la
insistencia proftica de Elena de White y al ejemplo personal
ofrecido por el presidente A. Daniells. Desde all en adelante los
evangelistas adventistas se lanzaron a proclamar su mensaje al
mundo con renovada urgencia, y contra viento y marea.

Para un estudio y refutacin de los defectos interpretativos referidos


vease Louis F. Were, Europe And Armaggedon (Melbourne, Australia, s. f.).

21

GENTE DE LA PALABRA

CAPTULO DOS:
CONTRA VIENTO Y MAREA

El Ocupado Pastor de Iglesia Como Evangelista


En la Iglesia Adventista del Sptimo Da, la
evangelizacin pblica es el recurso vital por el cual los mensajes
de los tres ngeles llegan a las masas1. Despierta la atencin de
aquellos que necesitan una conmocin con el fin de ser
despertado del letargo mortal de complacencia espiritual. Pero la
reunin pblica no compite con la tranquila eficacia de la
evangelizacin personal. Tampoco el nfasis prudente del
trabajo personal sugiere que el esfuerzo pblico deba reducirse.
Son compatibles y complementarios. Los intereses vitales de
nueve meses de estudios de la Biblia pueden ser canalizados en
la reunin pblica para la cosecha; y despus de la terminacin
de la campaa, el campo que ha sido trillado por la maquinaria
del esfuerzo pblico concentrado debe ser revisado
cuidadosamente por el trabajo constante y personal que el
instructor bblico hace en el hogar.
Pero qu pasa con las estrictas exigencias que la gran
reunin pblica acarrea sobre el pastor de iglesia ya de por s tan
atareado? La motivacin que impulsa la planificacin de la
campaa pblica es el llamado a un ministerio tan especial. Sin
1

Charles D. Brooks, Public Evangelism and the Busy Pastor,


Ministry Magazine, accedido 3 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1961/08/public-evangelism-and-the-busy-pastor.

22

GENTE DE LA PALABRA

rodeos, ese el privilegio sagrado del pastor, y la razn por la cual


es un predicador adventista del sptimo da en lugar de ser un
carpintero o un empresario adventista del sptimo da. La obra
ha de ser terminada, y el evangelismo pblico es una forma
importante entre muchas como para lograrlo. Es, sin rodeos, la
obra de Dios.
Si los programas de la iglesia se llevan a cabo en los
nueve meses previos al ciclo, el valioso tiempo de la campaa
evangelstica estar libre para este gran desafo.
No podemos permitirnos la dicotoma entre el trabajo
pastoral y la evangelizacin. El evangelismo pblico siempre
jugar un papel importante en la Iglesia Adventista; sin
embargo, nunca puede tomar el lugar de trabajo pastoral de
evangelizacin. Las iglesias deben aprender a entender su papel,
inspiradas y capacitadas para trabajar en armona con el pastor,
convirtindolas en centros evangelsticos y desarrollando
programas continuos1. La fidelidad del pastor a su llamado est
necesariamente entrelazada con su pasin por la evangelizacin
pblica2. Su entusiasmo por la predicacin no depender de un
1

John Fowler, Pastor and evangelist: closing the gap, Ministry


Magazine, accedido 14 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1983/02/pastor-and-evangelist:-closing-the-gap. Cuando las iglesias no son
integradas en el proyecto surgen rispideces que malogran el ciclo. Herman J.
Kregel, Kyodan questions 3-year campaign: sees in mass evangelism a threat
to church-centered programs--body defined as denomination, Christian
Century 64, n.o 16 (16 de abril de 1947): 500-502.
2
Peter Harry Ballis, Leaving the Adventist Ministry: A Study of the
Process of Exiting (Greenwood Publishing Group, 1999).,74.

23

GENTE DE LA PALABRA

determinado objetivo cuantitativo, ni de las expectativas de la


administracin de la cual dependa, sino de su propio impulso
por hacer lo mximo en relacin con la salvacin de las
personas.
Predicando A Miles Al Aire Libre
En algunos lugares es muy difcil conseguir un lugar
adecuado para reuniones. Por ejemplo esta dificultad se
encuentra en las ciudades ms grandes de Sierra Leona, frica
Occidental1. No hay salas pblicas, excepto el tribunal. Las
condiciones climticas hacen que el uso de una tienda de
campaa sea inviable por vientos huracanados y repentinos
seguidos rpidamente por lluvias tropicales torrenciales2. La
pericia de varios sera necesaria para mantener la carpa en buen
estado.
Por eso el evangelismo pblico se realiza en la estacin
seca. Slo entonces se puede asegurar una continuidad de las
reuniones. Con esto en mente se planificaron reuniones al aire
libre en Bo, la ciudad ms grande e importante del protectorado
de Sierra Leona, el centro del gobierno.
La publicidad de las reuniones fue confinada en su
totalidad a la utilizacin de equipos de sonido en un coche.
Antes de cada reunin, el coche fue conducido a travs de todos
1

Edgar Keslake, Evangelism: Evangelistic Effort at Bo, Ministry


Magazine, accedido 6 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1952/04/evangelistic-effort-at-bo.
2
Azcrate Luxn Blanca, Azcrate Luxn Ma Victoria, Y Snchez
Snchez Jos, Geografa Regional Del Mundo: Desarrollo, Subdesarrollo Y Pases
Emergentes (Editorial Uned, 2013).,432.

24

GENTE DE LA PALABRA

los puntos de la ciudad. Tal cosa nunca antes se haba visto ni


oda en Bo. Se cre una sensacin real. La gente hablaba de esto.
Una multitud de entre cuatro y cinco mil personas asistieron la
primera noche. En la noche diecisiete el recuento dio 3.986
presentes. Bo tiene una poblacin de slo diez mil, por lo tanto,
ms de un tercio de la poblacin asisti a cada reunin!
Casi todo el programa se llev a cabo en la lengua
verncula. El servicio de canto fue destacado por canciones
ilustradas. La conferencia de la noche fue ilustrada por una de
las pelculas producidas por el pastor Shuler. Se ofrecan
obsequios de diferentes maneras. A veces sera por venir al
micrfono para responder a una pregunta bblica. En otras
ocasiones para hacer una buena pregunta para que el pastor
Wilson, el evangelista, respondiera. Una noche, cuando se hizo
la oferta de un libro al hombre que se presentara con la familia
ms grande, el que recibi el regalo trajo ms de setenta
parientes con l. No hace falta ms que unas pocas familias de
este tamao para hacer una gran audiencia.
Uno de nuestros problemas es adaptar los mtodos
modernos de evangelizacin a las personas analfabetas que muy
mayoritariamente integran la audiencia en algunos lugares poco
desarrollados. No obstante, a pesar de que estas personas no
pueden ser capaces de leer por s mismos, la mayora de ellos
puede tener a alguien que les lea. De este modo cuando se
present el tema del da de reposo se ofrecieron sermones
impresos. Los ujieres y acomodadores ya haban ayudado a los
analfabetos a escribir sus nombres y direcciones en pedazos de
papel. Cuando se hizo la convocatoria de cada uno para tomar
una decisin se invit a los que no escriban tan slo a romper
una esquina de la tarjeta de decisin.
25

GENTE DE LA PALABRA

Si la publicidad es llamativa y el programa es atractivo la


falta de un auditorio no es un impedimento definitivo para un
ciclo de evangelizacin. Dios puede traer una audiencia aunque
no contemos con un auditorio, como en los tiempos apostlicos.
El deseo de predicar el evangelio suple multitud de carencias.
Predicando en Estaciones Lluviosas
Uno de los campos ms frtiles para la ganancia de almas
se halla en los trpicos. Es un verdadero placer ver cmo
hombres y mujeres abrazan el ltimo mensaje de advertencia de
Dios1. Hay una verdadera hambre de la Palabra de Dios. Como
resultado se han tenido experiencias gloriosas al llamar a los
hijos de Dios de otras iglesias a nuestra amada iglesia remanente.
Por cerca de cuarenta aos se oan excusas por no hacer
el trabajo de evangelizacin durante la poca de lluvias. Pero la
lluvia no es excusa para no llevar a cabo la gran comisin de
Dios. Por supuesto, una carpa no es lo ideal para el evangelismo
en tiempo lluvioso; por lo tanto, algunos han desarrollado una
especie de auditorio porttil lo suficientemente atractivo como
para que el ms alto funcionario de la tierra no se sienta molesto
al asistir, y que todos los hombres y mujeres desearan entrar.
Catalino Ocampo Bautista, graduado del Emmanuel
Missionary College, y C. Molina estaban trabajando juntos. El
pblico arribado la noche inaugural trajo una nueva emocin a
sus corazones. Por primera vez en el trpico se necesit una
1

C. Molina Basconcillo, Evangelism, Ministry Magazine, accedido


12 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1953/10/evangelism.

26

GENTE DE LA PALABRA

sesin triple en la noche de apertura. Se solicit un cuarto


perodo de sesiones, pero la fuerza y la voz del predicador no
podan soportar ms. No haba asientos para toda la audiencia
ya que quedaba una multitud de pie cada noche. Adems se
cerr el auditorio porque los seguidores de otras iglesias
preferan resguardo del qu dirn.
Predicar a tiempo y fuera de tiempo implica que no hay
estaciones ni climas que impidan encarar reuniones de
evangelismo. Junto a la decisin de predicar, no obstante, es
necesaria la prudencia de manera que las personas que visitan el
ciclo proveniente de otras iglesias no sean ahuyentadas antes de
escuchar todo el mensaje.

Ciclos En Plena Depresin Econmica


En 1933 Nevada contaba con cinco obreros
ministeriales, dos de los cuales eran aspirantes. Las finanzas no
nos permitiran el envo de tiendas de campaa, por lo que los
obreros reunan a sus interesados en esfuerzos al aire libre1.
El plan consista en obtener un lote en el centro de la
ciudad, cercarlo y adornarlo como auditorio. Un equipo entero
de personal era menos costoso que los gastos para transportar
una carpa hacia el lote. El pequeo gasto de iniciar los esfuerzos
fue asumido por diferentes personas del campo que creyeron en
un programa evangelstico agresivo. En algunos casos, el costo
1

R.S. Fries, Open Air Meeting Plans, Ministry Magazine, accedido 6


de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1933/08/a-greater-evangelism.

27

GENTE DE LA PALABRA

puede fue asumido por la iglesia local. Fries tambin cont de su


intencin de hacer un esfuerzo similar en una ciudad a nueve
kilmetros de la oficina de la conferencia, llevando consigo un
colportor joven, graduado en teologa y buen orador, como su
asistente. Un miembro de la iglesia le dara pensin y
habitacin, y recibira un pequeo estipendio adicional.
Uno de los aspirantes en la parte noroeste del Estado
despert inters en tres ciudades no muy separadas, por lo que
consigui un viejo automvil y lo arregl como una "iglesia
sobre ruedas." Un hombre interesado en nuestro mensaje, pero
an no bautizado, financi este proyecto. Este joven ministro
celebr reuniones en tres ciudades diferentes durante la semana
y las tardes de domingo, desarrollando un inters en cada uno
de estos lugares. Se puede recaudar dinero para la obra de
evangelizacin agresiva cuando los fondos no se pueden asegurar
para cualquier otro propsito1.
Esperar hasta tener fondos para planificar un ciclo de
evangelizacin coloca al dinero en un plano ms importante que
la salvacin de las personas. Es injusto que el perdido espere
hasta que la situacin econmica mejore. As como en tiempos
de la Gran Depresin se pudo predicar y ganar almas, se lo
puede hacer hoy con muchas ms ventajas.
Evangelismo Pese a los Pequeos Presupuestos
En tiempos de crisis suelen escasear los fondos para el
evangelismo2. Pero mediante una reconsagracin de la iglesia los
1

Aubrey Malphurs y Steve Stroope, Money Matters in Church: A


Practical Guide for Leaders (Baker Books, 2007).
2
Walter C. Moffett, Evangelism Despite Small Budgets, Ministry
Magazine, accedido 5 de abril de 2015,

28

GENTE DE LA PALABRA

fondos pueden aumentar.


En algunos campos, sumas considerables para la
evangelizacin han sido recibidas por el uso de programas de
recoleccin, pero este tipo de iniciativas se desvanece poco a
poco. Al apelar directamente a personas pudientes y a las
iglesias, no obstante, ellas suelen responder de manera positiva1.
Adems es importante optimizar los gastos
administrativos y generales de manera que se cuenten con
fondos adicionales para el evangelismo. Muchas asociaciones
llevan demasiada carga financiera.
En muchos lugares, los esfuerzos se estn celebrando en
los templos2. Esto resulta en un reavivamiento de los miembros
de la iglesia y en la recuperacin de ex adventistas.
Aunque es evidente la ventaja de contar con lugares
representativos de reuniones, mucho dinero para gastar, y un
gran cuerpo de obreros, tambin hay que reconocer que la obra
ser terminada a los esfuerzos de misioneros consagrados,
guiados por la uncin del Espritu de Dios, como lo hizo Juan el
Bautista.

https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1939/03/evangelism-despite-small-budgets.
1
DeWitt S. Williams, Highly Committed: The Wilson Family Story
(TEACH Services, Inc., 2012).,78.
2
I.C. Pound, Evangelism Without Money, Ministry Magazine,
accedido 14 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1940/04/evangelism-without-money.

29

GENTE DE LA PALABRA

Es bueno que todos los presidentes, secretarios y


departamentales con dones ministeriales se involucren en un
esfuerzo evangelstico de vez en cuando. Demasiados evangelistas
dotados han sido atrapados por la oficina. Por qu un hombre
que alguna vez haya probado este don celestial esconder ese
talento?1
Cuando los fondos son limitados, algunos pastores
entrenan hermanos laicos capaces de hacer la obra bblica, a
cambio de una pequea subvencin. Con un pequeo
desembolso de fondos, se puede capacitar un buen nmero de
colaboradores, y como resultado muchas ms personas pueden
ser alcanzadas. El aprovechamiento de los talentos de nuestros
laicos en el empeo de ganar almas es uno de los pasos ms
importantes en terminar la obra2.
A medida que avanzamos en un programa agresivo y de
fe, raspando el fondo del barril mes a mes, el Seor nunca falla.
El mismo Dios que aliment a miles de personas en los cinco
panes de cebada y dos peces, de modo que alcanzara y sobrara,
multiplicar nuestros recursos para alimentar a las multitudes
hambrientas con el pan de vida.
I. Pound recuerda cuando fue llamado a dirigir los
destinos de un pequeo campo misionero que tena un ministro
blanco, dos ministros de color, un empleado de oficina y un
indispensable director de colportaje. Las arcas estaban vacas, el
colegio insolvente tena solo cinco alumnos, y la carpa de
1

Ellen Gould White, Ministry to the Cities (Review and Herald Pub
Assoc, 2012).,53
2
DeWitt S. Williams, She Fulfilled the Impossible Dream: The Story of
Eva B. Dykes (Review and Herald Pub Assoc, 1985).,60.

30

GENTE DE LA PALABRA

evangelismo casi arruinada, con setenta parches y una multitud


de agujeros de moho. Rpidamente limpiaron y plantaron la
carpa. El Seor atemper los vientos, y vigilando la carpa da a
da ella sobrevivi a un esfuerzo exitoso. Cada recurso
disponible fue invertido en el evangelismo, y en cuatro aos el
campo estaba totalmente estabilizado, la membresa se duplic, y
el endeudamiento del colegio se cancel. La asistencia a la
escuela creci a casi un centenar, con veinte estudiantes que la
conocieron como resultado del esfuerzo pblico. La conferencia
comenz a dar supervit operativo, y compr seis carpas
alegremente pagadas por los laicos.
En otra conferencia pequea, con un diezmo anual de
slo $ 10.000, y ni un centavo para la evangelizacin, cada
trabajador se sumergi en los esfuerzos auto sostenidos. Se
aument neto el veintids por ciento en un ao, y el diezmo se
duplic en un ao de depresin. El presidente pas seis meses
felices de ese ao en esfuerzos evangelizadores para ganar almas,
a la vez que diriga tres departamentos de la asociacin. Una
pequea asociacin o misin puede ser un paraso para un
presidente evangelista.
El dinero no es la mayor necesidad de esta causa. Lo que
ms necesitamos es un verdadero reavivamiento y reforma que
preparar el camino para el derramamiento del Espritu de Dios
en el fuerte clamor del mensaje del tercer ngel. Entonces miles
se convertirn en un da, y los que creen verdaderamente que el
Seor viene otra vez vendern sus casas y tierras para que el
mensaje avance, como pas en el Pentecosts. Los fondos
pueden escasear o alcanzar, pero lo que no puede eludirse es el
empleo de los principios perennes de la evangelizacin,
encarnados en algunos de los mtodos que estudiaremos a
continuacin.
31

GENTE DE LA PALABRA

CAPTULO TRES:
MTODOS SIEMPRE EFICACES

Tres Tipos de Evangelismo


Para lograr los mejores resultados de evangelizacin debe
haber un reconocimiento de los diferentes tipos que involucra.
Algunos hombres pueden trabajar de manera excelente en
distritos rurales, mientras que otros estn ms adaptados a la
evangelizacin de la ciudad1. Sin sugerir que uno de los obreros
sea ms importante que otro, por razones de simplicidad
podemos diferenciar a los evangelistas en al menos tres tipos
diferentes: (a) el evangelista rural2; (B) el evangelista de la ciudad;
(C) el evangelista metropolitano.
El evangelista rural suele ser un lder de distrito que
supervisa un nmero de iglesias rurales dispersas. Es pastor de
estas iglesias y las utiliza como centros de evangelizacin,
llevando a los miembros a la accin. El abordaje en pequeas
localidades no puede ser el mismo que en los grandes centros
urbanos3. Pero con una planificacin correcta es posible realizar
1

Roy Allan Anderson, Evangelism in AustraliaNo. 2, Ministry


Magazine, accedido 12 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1946/10/evangelism-in-australiano.-2.
2
Rural Evangelism, Ministry Magazine, accedido 19 de abril de
2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1928/02/rural-evangelism.
3
Kevin E. Ruffcorn, Rural Evangelism: Catching the Vision (Fortress
Press, s. f.).

32

GENTE DE LA PALABRA

al menos un esfuerzo evangelstico al ao, usando una carpa o


una sala. Al igual que cada miembro de la iglesia debe tratar de
ganar a otros para Cristo, para que cada iglesia codicie el honor
de fomentar una nueva iglesia. En algunos campos existen
iglesias que tienen una docena de otras iglesias como hijas
espirituales. Este maravilloso logro ha sido posible gracias a los
pastores-evangelistas que han guiado a sus congregaciones a un
esfuerzo evangelstico agresivo.
El proceso de adaptacin al mbito urbano y el
reconocimiento de las necesidades de los probables conversos al
adventismo propici que la iglesia actualizara, refinara, y
aggiornara su mensaje con el fin de que fuera relevante para los
individuos que enfrentaban vicisitudes propias de la existencia
en una sociedad industrial urbana1. Con esto en vista, un
evangelista de la ciudad es un hombre que trabaja en las
ciudades ms pequeas, donde la poblacin podra oscilar entre
doce y cien mil personas. Se solan asociar al menos tres obreros:
el evangelista, el evangelista de canto, y el instructor bblico. Al
llevar a cabo su programa de evangelizacin, el evangelista de
ciudad tena por lo menos cuatro o cinco reuniones pblicas en
la semana en algn local cntrico, carpa, o tabernculo. Al igual
que el evangelista rural, su trabajo consista en aadir nuevos
miembros a la iglesia o iglesias, o levantar nuevas iglesias en
nuevos centros, movido por la gran preocupacin de que haya
tantos pueblos y ciudades donde no haya ninguna iglesia en
absoluto, o su influencia fuera tan dbil que la ciudad apenas
percibiera su existencia.

Robin Theobald, From rural populism to practical Christianity:


the Seventh-Day Adventist Movement, Archives de sciences sociales des religions
30, n.o 60 (1 de julio de 1985): 109-30.

33

GENTE DE LA PALABRA

El evangelista metropolitano sola entrar en una gran


ciudad con un plan de tres aos de evangelizacin pblica,
teniendo quiz una sala central o teatro para una o dos noches a
la semana, y desde esta base ir trabajando a travs de las
diferentes reas suburbanas en un programa simultneo. Se
llevaran a cabo reuniones seis noches a la semana en diferentes
lugares en un rea grande, combinando dichas reuniones en un
plan coordinado, permitiendo que las reuniones centrales del
domingo por la noche inspiraran las reuniones ms pequeas.
Estas, a su vez, se convertiran en alimentadoras a la gran
reunin central.
En este sentido tambin conviene adaptar el enfoque a
las corrientes inmigratorias existentes en una ciudad, un nicho
receptivo para la evangelizacin, dado el desarraigo natural en el
que se encuentran1.
Un programa metropolitano requiere de un equipo
grande, pero a su vez ofrece una maravillosa oportunidad para el
desarrollo de los trabajadores ms jvenes. Las escuelas de
evangelismo pueden llevarse a cabo dentro de este programa.
La planificacin de un amplio programa metropolitano
requiere visin y experiencia. Al comenzar un programa de este
tipo, el comit ejecutivo debe estudiar cuidadosamente con el
evangelista todo el trasfondo financiero del esfuerzo. Los
cuerpos ms grandes siempre se mueven lentamente, y se
requiere mucho ms tiempo para ganar a los hombres en un
gran esfuerzo metropolitano que en un pequeo pueblo. Con el
1

Ronald Lawson, When Immigrants Take Over: The Impact of


Immigrant Growth on American Seventh-day Adventisms Trajectory from
Sect to Denomination, Journal for the Scientific Study of Religion 38, n.o 1
(marzo de 1999): 83-102.

34

GENTE DE LA PALABRA

fin de ganar almas en los entornos ms difciles y caros de la


ciudad, debemos reconciliarnos con la necesidad de hacer una
mayor inversin financiera, con el fin de que las almas puedan
ser ganadas. Lo que se invierte en el evangelismo local rinde sus
frutos1.

Un Enfoque Amplio
Debemos revisar continuamente nuestro concepto acerca
de la ganancia de almas y su lugar en nuestro presupuesto
financiero y de tiempo2. El evangelismo es ms que un
complemento del ministerio; es una parte integral del avance del
movimiento triunfante final. El evangelista no es solo mero
aspirante a la realizacin personal, sino un engranaje vital en la
maquinaria del ministerio adventista.
Debemos facilitar la asistencia de las personas a nuestras
reuniones, eligiendo un lugar al que se pueda llegar fcilmente.
La seleccin de la ubicacin depende del tipo de esfuerzo a
realizar, siempre en el centro de la seccin a ser amonestada.
Vale la pena preguntarse cules son los alrededores de la
ubicacin prevista de la reunin? Es el lugar propicio para
adorar? Tiene una buena reputacin?
Dignidad sin rigidez es un requisito absoluto para el
evangelismo pblico. Se debe poner el mximo empeo en
1

Andy Nash, Un-Leash the Dream (Review and Herald Pub Assoc,

1999).,15
2

M.K. Eckenroth, A Larger Approach to Larger Evangelism,


Ministry Magazine, accedido 3 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1943/06/a-larger-approach-to-larger-evangelism.

35

GENTE DE LA PALABRA

hacer que el lugar de encuentro sea atractivo, con una entrada


bien arreglada, preferentemente con una rampa, y una mesa con
un sencillo refrigerio en la recepcin.
Al publicitar debe hacerse promocin intensa, bien
diseada, veraz, agresiva, elegante, intrigante y de buena calidad,
evitando lo sensacionalista. Es bueno tambin salir en la radio
un tiempo antes para despertar el inters en las reuniones.
Predicar el evangelio es tan importante como promover el
evangelio1.
La Necesidad de un Equipo de Evangelismo
Al principio de cada serie de evangelizacin el
evangelista, con el apoyo de la asociacin, se enfrenta con el
problema de reunir el equipo de trabajo, cuyo tamao
depender de la dimensin del esfuerzo2. La conformacin de
equipos de evangelismo es la antesala del crecimiento3. El hecho
es que no se cuenta con suficientes asociados como para
proporcionar un equipo equilibrado en todos los esfuerzos de
evangelizacin pblica que se deben hacer. La mies es mucha,
pero los obreros son pocos. La tentacin es seguir adelante de
todos modos, a veces sin la fuerza mnima necesaria para la
eficiencia. Pero, es esto sabio? Estamos honrando a Dios y
1

Jonathan K. Dodson, The Unbelievable Gospel: Say Something Worth


Believing (Zondervan, 2014).,cap.14 . Michael Daehn, Marketing the Church:
How to Communicate Your Churchs Purpose and Passion in a Modern Context
(Lulu.com, 2011).
2
Francis F. Bush, Need for Evangelistic Teams, Ministry Magazine,
accedido 5 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1947/10/need-for-evangelistic-teams.
3
Knight, Lest We Forget.,334

36

GENTE DE LA PALABRA

dejando en el pblico la impresin correcta de nuestro mensaje


si los esfuerzos pblicos ampliamente anunciados no son
compatibles con el talento adecuado?
A menudo hablamos de mantener nuestros esfuerzos
dentro de nuestras posibilidades financieras. Podemos gastar
dinero disponible para el evangelismo, pero no podemos gastar
lo que no tenemos, y a menudo debemos limitar nuestros planes
en consecuencia. No obstante los obreros talentosos y
consagrados son extremadamente ms importantes para ganar
almas que el presupuesto abundante. Nadie asume una campaa
sin los fondos necesarios, pero algunos s lo hacen careciendo
del personal adecuado. Adems contar con un equipo favorece
la mutua consulta1.
A mediados del 1800 un evangelista podra asegurarse
una multitud si se corra la voz de que una tienda de reuniones
se estaba levantando. Algunos de los interesados eran sus
propios carperos y sin msicos poda mantener atenta a una
muchedumbre. Solo con una carpa aceptable, algunos carteles, y
una respetable oratoria podra tener una reunin buena
evangelstica2. Incluso si careca de instructores bblicos tena
todo el da para hacer visitas, ya que l no era pastor distrital,
cargando con todas las modernas y variadas responsabilidades y
rutinas, problemas y detalles administrativos3. De hecho en la
mayora de los casos no haba iglesia adventista en la ciudad
donde celebraba sus reuniones.
1

James H. Hudson, The Work of the Ministerial Staff (Xulon Press,


2003).,80.
2
Canute Birch, A Third Great Disappointment for the Remnant
(TEACH Services, Inc., 2012).,48.
3
Richard Stoll Armstrong, The Pastor-Evangelist in the Parish
(Westminster John Knox Press, 1990).,16.

37

GENTE DE LA PALABRA

Pero los tiempos han cambiado y el pblico puede


disfrutar de lo mejor de la msica en cualquier momento,
incluso en casa. Las grandes reuniones pblicas siempre debern
tener un atractivo programa que presentar. Un buen ttulo para
el programa de evangelizacin, no puede tener detrs una
reunin mediocre. Uno de nuestros presidentes recientemente
dijo que "hoy en da un ministro debe ser ms interesante que la
radio, ms atractivo que el teatro, y ms emocionante que un
partido".
Por eso se necesita un equipo. Ningn esfuerzo citadino
puede durar mucho sin suficiente talento para proporcionar un
programa interesante y variado. Y cuando el inters es muy
grande, se necesitan ms obreros.
Arriesgar la reputacin del mensaje con un esfuerzo
pblico mediocre en esta era sofisticada es tan irresponsable
como seguir adelante con un esfuerzo pblico sin un
presupuesto suficiente. De hecho, lo es an ms, porque el
dinero perdido puede recuperarse ms fcilmente que el respeto
pblico.
La publicidad debe ser correspondiente a lo que se
puede ofrecer a las personas. El terreno es perjudicado por un
esfuerzo pblico muy publicitado que no cuenta con personal
suficientemente adecuado para dar lo que la publicidad ha
llevado al pblico a esperar. El pblico se desilusiona y la
asistencia es pobre. El evangelista no puede sobrevivir muchas
frustraciones deteriorarse en este proceso. Conviene tener en

38

GENTE DE LA PALABRA

cuenta los consejos sensatos antedichos, y ante todo, los


inspirados1.
Publicidad Callejera
La publicidad es indispensable en todo emprendimiento
humano, y la iglesia no puede prescindir del buen uso de la
misma2. Ni bien se empez a difundir, los evangelistas
adventistas sacaron provecho del uso de un automvil con un
altavoz conectado, lo cual en algunas localidades y pases an es
el medio ms rpido y efectivo para promover el evangelismo
pblico3. Se llega a la gente en todas partes. Dondequiera que
este auto con altavoz viajara sorprenda a la gente por los cantos
espirituales que se cantan. Estas canciones hablaban
directamente al corazn, y despus de la msica se invitaba por
medio del micrfono a la reunin evangelstica. Desde el coche
estacionado se distribuan volantes, esparcidos como un fuego
en la pradera, de casa en casa, por medio de nios siempre bien
dispuestos a colaborar. A continuacin, el auto se detena en
uno o dos puntos centrales de la ciudad y emita ms canciones
desde el altavoz. A veces se daban una o dos breves charlas
acerca de los temas previstos. As en pocas horas el pueblo o la
ciudad era invitado de forma sistemtica, a menudo de manera
tan eficiente que el evento se converta en el principal tema de
conversacin.

,128.Ellen Gould Harmon White, Evangelism (Review and Herald


Pub Assoc, 2002).
2
Malcolm Boyd, Crossroads in mass evangelism?, Christian Century
o
74, n. 12 (20 de marzo de 1957): 359-61.
3
E. Hennecke, The Sound Auto in Public Evangelism, Ministry
Magazine, accedido 3 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1952/01/evangelism.

39

GENTE DE LA PALABRA

Por la tarde, antes de la reunin nocturna, los nios


tenan su reunin, llegando a tener hasta 250 de ellos. Se
proyectaba una atractiva pelcula de la vida de Cristo, y despus
de una breve oracin se despeda a los nios, con una invitacin
para la reunin de la noche dirigida a sus padres.

Utilizando la Prensa
Un vasto campo de oportunidades se abri ante nuestros
misioneros en el uso de los peridicos para hacer avanzar la
causa de la verdad1. Algunos principios fundamentales rigen tal
trabajo de publicidad, y deben ser observados cuidadosamente.
En primer lugar, debemos ser sinceros en nuestra relacin con el
pblico. Es esencial ser perfectamente franco con la prensa.
Adems, si esperamos reciprocidad, tenemos que hacer algo que
valga la pena por el sitio de labor. Si esperamos recibir, debemos
dar de nuestra vida, nuestro tiempo, nuestros talentos y nuestro
servicio desinteresado. La prensa siempre va a estar interesada
en lo que concierne al servicio a la comunidad, y esto abre el
camino para nuestro mensaje. Es esencial que hagamos nuestro
mensaje efectivo en la vida de la comunidad. Por ejemplo, una
cosa es predicar sobre la hambruna de los ltimos das, y otra
muy distinta es alimentar a los hambrientos en estos ltimos
das, ms all que la misin cristiana fundamental no es la
justicia social2.
1

B.M. Heald, Utilizing the Press, Ministry Magazine, accedido 7 de


abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1933/08/a-greater-evangelism.
2
Ronald J. Sider, Good News ,and Good Works: A Theology for the
Whole Gospel (Baker Books, 1999).,33. Evangelismo y accin social son

40

GENTE DE LA PALABRA

La prensa tambin suele estar interesada en la simpata


desinteresada por las luchas de los pobres en nuestra
comunidad. Legtimamente podemos ser oportunistas. Donde
no hay inters, debemos crear un inters. Adems de la
celebracin de reuniones en carpa, podemos continuar el
servicio activo para los pobres de varias maneras1.
Algunos transmitan los servicios de la maana del
sbado en las radios cada semana. Y abran la biblioteca privada
que la iglesia tena con varios cientos de libros para su uso como
una biblioteca semipblica. Con cita previa, algunos jvenes
iban a pasar la tarde leyendo. El conjunto musical tambin
result de inters pblico. La emisin de msica especial en el
servicio de la maana del sbado interes a la prensa.
Nunca debemos dejar de expresar nuestro
agradecimiento por el apoyo de la prensa. Un agradecimiento
pblico en alguna gran reunin ser apropiado.
El Arte en el Evangelismo
Las artes pueden ser especialmente eficaces en la
evangelizacin, porque a menudo reflejan el hambre y la
bsqueda de Dios. Los artistas llegan con sus colores o las notas
conceptos relacionados pero no idnticos. Las obras solidarias de un ateo no
necesariamente sern parte de una misin cristiana. Debe tenerse en claro
cuales son los objetivos de la misin cristiana en general, y de la misin
adventista en particular. Harold S. Martin, Evangelism: a biblical approach,
Brethren Life and Thought 35, n.o 3 (1 de junio de 1990): 205-11.,211.
1
Raymond Fung, Evangelism and the struggle for dignity,
Christianity and Crisis 40, n.o 13 (18 de agosto de 1980): 230-230. El trabajo
en favor de los pobres debe ser continuo en la iglesia de manera que se los
conserve y dignifique en ella.

41

GENTE DE LA PALABRA

de una partitura musical, e interactan con la eternidad que


Dios ha puesto en sus corazones1.
Cuando se emplea el arte para el embellecimiento del
servicio cristiano, entonces se abren muchas oportunidades en la
evangelizacin2. El pastor Daniel Belvedere, mientras cursaba sus
estudios de Perito Mercantil, tambin estudi Dibujo, Pintura y
Artes Decorativas. Ya siendo evangelista, mientras predicaba
sobre el sacrificio de Cristo en el Calvario, dibujaba la escena
con tizas fosforescentes iluminadas con luces ultravioletas
(tambin llamada luz negra), interactuando as con el pblico.
La msica de fondo, sus dibujos y su predicacin combinadas,
generaba una tremenda impresin en la audiencia.

Ayudas Visuales Efectivas


Jess era el evangelista ms exitoso del mundo. Sus
mtodos eran perfectos, porque es un experto en la naturaleza
humana3. l saba que la gente recuerda slo el diez por ciento
de los discursos, pero aproximadamente la mitad de lo que viera
o escuchara. Por eso sealaba esas cosas a su alrededor que
inculcarles sus enseanzas.

Rory Noland, Thriving as an Artist in the Church: Hope and Help for
You and Your Ministry Team (Zondervan, 2009).,262.
2
J.L. Butler, Art Applied to Evangelism, Ministry Magazine,
accedido 5 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1928/07/art-applied-to-evangelism.
3
R.A. Hamm, Through the Eye to the Heart, Ministry Magazine,
accedido 3 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1952/01/evangelism.

42

GENTE DE LA PALABRA

Estos ejemplos deberan animarnos a buscar formas de


hacer la verdad ms prominente, nuevas formas, porque un
mundo cambiante necesita mtodos renovados. Todava hay un
campo muy abierto a las ideas originales con apelaciones
profticas modernas.
A principios de siglo el evangelista W.W. Simpson se
concentr en la manera de hacer las profecas de Daniel y el
Apocalipsis ms realistas. Elena de White le envi muchas cartas
animndole en su proyecto. En uno de ellos dijo:"
Usted han dado mucho estudio a la cuestin de cmo
hacer que la verdad interesante, y los carteles que ha
hecho estn en perfecto acuerdo con el trabajo que debe
llevarse adelante, porque son lecciones objetivas para las
personas. Ha puesto intenso pensamiento al hacer
ilustraciones llamativas El Seor los usa para
impresionar la mente. Segn la instruccin que se me ha
dado los carteles deben ser utilizados en forma clara y
distinta en la presentacin de la verdad". Carta 51, 1902.
"El pastor Simpson est despertando un buen inters en
sus reuniones. Las personas de todas las clases acuden a
or y ver las nuevas imgenes de tamao natural que l
tiene para ilustrar las bestias del Apocalipsis. Un gran
nmero de catlicos vienen a escucharlo." Carta 352,
1906.
"Los ministros designados por Dios deben hacer
esfuerzos extraordinarios a fin de atraer la atencin de las
multitudes.... Deben hacer uso de todos los medios que
se puedan concebir por hacer que la verdad se destaque
43

GENTE DE LA PALABRA

con claridad y distincin. Testimonios, vol. 9, p. 109.


No hay lmites a las ilustraciones que se puedan utilizar.
Ya sea en las profecas u otras doctrinas, crean y mantienen la
atencin, y hasta aumentan la asistencia1. Hay ciertas reglas, sin
embargo, que se deben aplicar para el uso de ayudas visuales: Las
ayudas visuales deben ser dignas, simples, con propsito,
reservadas para mostrarse en su momento especial, y progresivas,
para que los ojos de la audiencia no se desven del orador antes
de tiempo. Bien utilizadas las ilustraciones son el mejor vehculo
para el pensamiento2, y los evangelistas adventistas siempre han
hecho un uso extensivo de la misma3.

Lawrence Nelson, Preaching With Visual Aids, Ministry Magazine,


accedido 14 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1971/10/preaching-with-visual-aids.
2
Arthur Purdey, Pictures in Evangelism, Ministry Magazine,
accedido 14 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1949/12/pictures-in-evangelism.
3
Cushla Kapitzke, Literacy and Religion: The Textual Politics and Practice of
Seventh-Day Adventism (John Benjamins Publishing, 1995).,119,120. Entren
los recursos audiovisuals disponibles hoy en da bien podramos contar a los
medios de comunicacin. Cada vez hay ms insercin de las iglesias en la tv y
radio. Los objetivos de los programas apuntan a producir un impacto
intensivo y mltiple en toda la comunidad a travs de muchos contactos, para
dar a las iglesias locales un punto de partida en la evangelizacin, hasta que la
audiencia traspase las puertas de las iglesias. Matthew S. Ogawa y Vern
Rossman, Evangelism through the mass media and audio visual materials,
International Review of Mission 50, n.o 200 (1 de octubre de 1961): 429.

44

GENTE DE LA PALABRA

La Evangelizacin Pblica Tribal


En la planificacin de un programa de evangelizacin
para pueblos tribales, se abordaba directamente al jefe, ya que
ganando su favor como el gobernante del pueblo, no llevaba un
largo tiempo despertar la simpata general por el proyecto1. Los
africanos son muy humanos en estos asuntos, y explicando que
las reuniones en carpa llevarn algunos mensajes de la Santa
Palabra de Dios al pueblo se encontraba una respuesta amigable.
Se solicitaba un sitio cerca de la casa del cacique para contar con
su influencia protectora.
La colocacin de la carpa de la campaa era enseguida de
la concesin del permiso, y suscitaba la sorpresa y hasta la
colaboracin de nios y jvenes que llegaban de todas las
direcciones para ver lo que est pasando. Ellos mismos eran,
adems, mejores promotores de las reuniones.
Al contar con un proyector, todo lo que restaba era
anunciar que se mostraran imgenes tan pronto como
anocheciera, y a la puesta de sol o incluso antes la tienda se
llenaba de gente. En la primera noche se trataba de que el jefe
estuviera ah, en un sitio prominente, se le agradeca y se oraba
por l y el pueblo. Al trmino se le concedan las palabras
finales, casi siempre animando la asistencia a cada noche.
Cuidando de esa confianza gran parte de la obra quedaba

R.A. Buckley, Village Evangelism in Basutoland, Ministry


Magazine, accedido 3 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1949/09/village-evangelism-in-basutoland.

45

GENTE DE LA PALABRA

allanada. El respeto por la cultura tribal, hasta donde el


evangelio lo permitiera, facilita el testimonio cristiano1.

Evangelizacin Interracial
El continente africano es un lugar maravilloso para el
evangelismo pblico2. Sudfrica, pas de unos 14 millones de
habitantes, plantea muchos problemas a la evangelizacin
pblica3. Los asiticos, los africanos negros, africanos blancos y
africanos de color mestizo se mezclan en las calles de las
ciudades modernas y en la sabana interior, donde las chozas de
barro primitivas salpican el horizonte.
No hay tal cosa como la celebracin de una campaa
"para africanos negros" de Johannesburgo, por ejemplo. Se debe
decidir a qu africanos se destinar, porque se hablan unos
veintids idiomas diferentes en el marco de diferentes culturas.
Tampoco se simplifica el asunto si se restringiera la
evangelizacin a los blancos de Sudfrica. La lengua de la
mayora es el afrikaans, lenguaje local que fue tomando forma a
partir del holands entre 1652 y 1750, pero el ingls es el idioma
del cuarenta por ciento de las personas.

Will McRaney, The Art of Personal Evangelism: Sharing Jesus in a


Changing Culture (B&H Publishing Group, 2003).,159,160.
2
John Wesley Zwomunondiita Kurewa, An African Pilgrimage on
Evangelism: A Historical Study of the Various Approaches to Evangelism in Africa
(Abingdon Press, 2011).,72.
3
F.J. Pelser, Evangelistic Methods in South Africa, Ministry
Magazine, accedido 6 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1966/09/evangelistic-methods-in-south-africa.

46

GENTE DE LA PALABRA

El evangelismo entre la gente de color es interesante,


pero tambin problemtico. Sus lderes culturales consideran ser
los nicos verdaderos sudafricanos. Sostienen que mientras el
hombre blanco invadi el pas desde el sur y el hombre negro
desde el norte hace casi simultneamente cerca de trescientos
aos, la raza de color de casi un milln de personas se origin
aqu. Un nmero considerable de ellos son musulmanes,
adems de cristianos de alrededor de 150 denominaciones, y el
resto indiferente a los asuntos espirituales.
Aadir a esta olla de fusin racial los factores de
enormes distancias, la escasez reinante de obreros y dinero,
prejuicios arraigados en cada seccin racial de la poblacin, el
aumento de del nacionalismo irracional con la fuerza de una
nueva religin y una cultura primitiva preponderante en las
principales zonas del pas, reflejan en parte el reto al que se
enfrentaba la evangelizacin pblica.
A las personas de raza blanca se les impartan estudios
audiovisuales en ingls y afrikaans. Nuestros obreros realizaban
esfuerzos en reuniones de oracin o campaas en los
ayuntamientos y carpas, y nuestros evangelistas lideraban
campaas metropolitanas de ms de un ao. Un particular xito
en la evangelizacin ciudadana acompa las labores de los
pastores J. Van der Merwe, evangelista de la Unin de Sudfrica;
Alvin Cook y Ray Kent de la Divisin de Australasia, y A.
Bambury y C. Birkenstock de la Asociacin de Transvaal.
Algunas de sus campaas produjeron ms de un centenar de
almas cada uno, una cifra sorprendente en relacin con la
pequeez de la poblacin de la ciudad, y ms an cuando se
perciba que slo una fraccin de la poblacin puede ser apelada
en cualquier campaa debido a las peculiaridades de idioma,
cultura y consideraciones tnicas.
47

GENTE DE LA PALABRA

El pas se abra para el evangelismo de las personas de


color. En 1964 se celebr una campaa para ellos en Ciudad del
Cabo. El cine ms grande fue contratado y la publicidad
comenz. Se recibieron no menos de 10.000 solicitudes de
admisin en la primera reunin del domingo, por lo cual se
tuvieron seis turnos de predicacin ese da, a las 10:00 AM,
12:00 M., 02:00, 04:00, 06:00 y 20:00 Muchos fueron
rechazados. Nuestros recepcionistas casi fueron arrastrados por
la avalancha humana que se acerc al gran auditorio para la
sesin final del da. Dios bendijo, y los buenos hermanos de la
Conferencia del Cabo dieron un apoyo excelente y
desinteresado. El resultado fue de 154 bautismos.
Un trabajo permanente entre los bantes era casi
inexistente, pero la planificacin prudente y el equipamiento y
capacitacin de nuestros trabajadores africanos result ser una
buena inversin.
En 1965 se tuvo una campaa entre los bantes en
Kimberley. El eterno problema de Sudfrica no estaba ausente.
Se habl en Ingls, se tradujo en chuana, pero la gente de habla
xhosa qued lejos, incapaz de comprender lo suficiente de
chuana o ingls. Con el tiempo se hizo evidente que algunos de
los africanos interesados en el mensaje no entendan la lengua
bant, pero hablaban afrikaans casi exclusivamente!
La publicidad const del lanzamiento de un curso
bblico por correspondencia, cientos de carteles serigrafiados por
el equipo, entre 60.000 y 80.000 folletos distribuidos por los
miembros de la iglesia, y la publicidad en peridicos. Pero el
dispositivo ms exitoso fue el envo de miles de cartas
"personales" de invitacin. Las reservas se hacan por telfono y
48

GENTE DE LA PALABRA

en el teatro. Por lo general, una gran campaa comenzaba con


unas cuatro mil personas.
Dnde se realizaron las reuniones? En este pas religioso
todos los cines se cerraban por ley los domingos. As que se
contrataban los mejores auditorios disponibles las tardes del
domingo, cuando no haba competencia con ninguna de las
iglesias locales, reportando asn las mejores audiencias.
Despus de cinco meses de tres reuniones a la semana
(dos en salas alquiladas ms pequeas), se consolidaba la
audiencia. A partir de ese punto en adelante hasta el final del
ao se celebraban siete servicios bautismales, los ltimos tres o
cuatro en nuestra iglesia central en la ciudad.
Este trabajo es totalmente gratificante, aunque arduo. Se
bautizaron el hijo de un ministro anglicano, la esposa de un
ministro de la Congregacin, y el esposo de una hermana
adventista que haba resistido el mensaje durante quince aos,
entre tantos triunfos del mensaje.
Cmo funciona el evangelismo cuando se enfrentan a
este tipo de problemas raciales y geogrficos complejos? El
Espritu Santo no admite problemas insuperables, ya que el
corazn humano es accesible a su poder. Enfocando lo mejor
posible en cada audiencia, Dios llega a cada uno donde se
encuentra.

Tabernculos Porttiles
El problema de encontrar un edificio adecuado para la
realizacin de reuniones de evangelizacin se resolvi
parcialmente mediante un tabernculo porttil, capaz de ser
49

GENTE DE LA PALABRA

trasladada rpidamente de un lugar a otro1, una solucin ya


utilizada por evangelistas anteriores2. Las paredes estaban
construidas de madera resistente al agua y la parte superior era
de lona pesada. El piso estaba cubierto con una alfombra de
aserrn. Este tabernculo posea una gran plataforma para el
coro, y cinco oficinas pequeas, utilizadas para dar estudios
bblicos, consejera y entrevistas de decisin. En general era fcil
de aprobar por parte de los municipios visitados.
El tabernculo se eriga en menos de una semana, y
contaba con un sistema de calefaccin de gas porttil para las
campaas de primavera y otoo.
Hay una gran ventaja en tener un lugar propio de
reunin, de manera que no se estorbara los das y horarios de las
reuniones, lo cual era frecuente en los salones alquilados.

La Reunin de Oracin Previa Al Evangelismo


Una de las fases ms importantes de la evangelizacin
pblica es la preparacin del terreno para la siembra de las
semillas de la verdad. De hecho, habr poca efectividad en la
siembra de la semilla antes de que se haya hecho este trabajo3.
1

A.A. Leiske, Evangelism, Ministry Magazine, accedido 3 de abril de


2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1952/01/evangelism.
2
Norman H. Murdoch, Origins of the Salvation Army (Univ. of
Tennessee Press, 1996).,357.
3
H.T. Anderson, Evangelistic Cottage Prayer Meetings, Ministry
Magazine, accedido 3 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1952/01/evangelism.

50

GENTE DE LA PALABRA

A menudo las personas rechazan la sugerencia de que


estudiemos con ellos la Biblia, porque sienten que estamos
tratando de ganarlos para nuestra iglesia, y por lo tanto nuestros
esfuerzos se frustran. Pero las reuniones de oracin descongelan
ese prejuicio, estudiando temas que acerca de la piedad, lo cual
allana el camino para una rica cosecha de almas1 una vez que las
reuniones pblicas siguen. Sera bueno comenzar estas
reuniones dos o tres meses antes del esfuerzo pblico.

Comienza a Combinarse La Evangelizacin Con la Tarea


Mdica.
E. Seat apelaba a la combinacin de la tarea mdica con
la obra evangelizadora, declarando ya en 1938 que los pastores
debieran capacitarse en temas de salud2. La misma ya se estaba
promoviendo entre los estudiantes terciarios, dando como fruto
el bautismo de ms de trescientas personas.
Aunque algunos ministros eran renuentes por temor a
que se dificultara la asistencia, algunos estudiantes ya
combinaban la predicacin con la enseanza de los principios de
salud. El estudiante de medicina tomara la mitad del tiempo, y
el estudiante de teologa la otra mitad.
El trabajo mdico-evangelstico creca porque involucra
el ser completo de la persona, convocando unas 400 personas, y
abra las puertas de otras iglesias a los mdicos adventistas.
1

Lewis Sperry Chafer, True Evangelism: Winning Souls Through Prayer


(Kregel Publications, 1930).
2
E. Toral Seat, Medical Evangelism Pays, Ministry Magazine,
accedido 2 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1938/10/medical-evangelism-pays.

51

GENTE DE LA PALABRA

Adems permite que las personas, al liberarse de los vicios,


superen un escollo para convertirse al adventismo1. Incluso
algunos mdicos llegaban a plantar iglesias ellos solos. Otros
compraban literatura que otros miembros de la iglesia
distribuan, y una vez que el inters se despertaba la asociacin
enviaba una carpa de evangelizacin para invitar a las reuniones.
El mdico a cargo, una vez que se plantaba la nueva iglesia,
quedaba como anciano en ese lugar.
En una poca cuando la salud era un bien escaso, lo cual
hoy, en algunos mbitos, todava sucede, los mdicos y
estudiantes misioneros eran la cua de entrada y hasta el motor
de la plantacin de nuevas iglesias. Tal es el consejo inspirado2.
La Iglesia Adventista, sin embargo, an no ha aprovechado
completamente el potencial evangelizador de sus hospitales y
sanatorios, los cuales muchas veces se enfrascan en sus propias
vicisitudes financieras antes que en la misin evangelizadora que
les corresponde3.

El Repaso de los Temas Anteriores y la Inclusin de los Nios


en la Conferencia
El evangelista confronta constantemente el problema de
encontrar una manera de repasar sus temas anteriores, sin que

Samuel G. London, Seventh-Day Adventists and the Civil Rights


Movement (Univ. Press of Mississippi, 2009).,83.
2
Ellen G. White, A Call to Medical Evangelism and Health Education
(TEACH Services, Inc., 1997).,7.
3
Elvin Adams y Elvin Adams MD MPH, Handbook of Health
Evangelism (iUniverse, 2004).,3.

52

GENTE DE LA PALABRA

se note demasiado1. Mediante un concurso bblico para nios,


con incentivos y premios, se repasan los puntos menos
controvertidos de los temas anteriores y se asegura la asistencia
de ellos y sus familias. Tambin es un excelente mtodo para
mantener a los nios tranquilos y atentos durante la
predicacin. Es sorprendente ver lo mucho que recuerdan.
Algunos nios muy pequeos no slo daban las respuestas
correctas, sino tambin citaban un texto bblico de la prueba.

La Vinculacin con Ministros de Otras Denominaciones


Es bueno que nuestros ministros sean miembros de las
asociaciones ministeriales locales en las distintas ciudades donde
residen2. En varios lugares en los que se ha tratado de asegurar el
uso de un teatro para reuniones evangelsticas el domingo, los
gerentes han dicho que no iban a alquilar el teatro para
cualquier ministro a menos que la solicitud viniese de un
miembro de la asociacin de ministros de la ciudad. Tambin
indicaban que en caso de que la solicitud fuera de un pastor de
esa asociacin, no habra ningn cargo excepto unos pocos
dlares por el costo de las luces. Ahora, en estos casos, si nuestro
ministro en esa ciudad hubiera sido miembro de la asociacin
de los ministros, podra haber hecho la solicitud para el uso del
teatro, y los edificios que normalmente se alquilaban por $ 100
1

G.F. Williams, Evangelistic Bible Quiz, Ministry Magazine,


accedido 3 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1952/01/evangelism.
2
J.L. Schuler, Should We Join Local Ministerial Associations?,
Ministry Magazine, accedido 7 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1933/08/a-greater-evangelism.

53

GENTE DE LA PALABRA

la noche hubieran sido puestos a disposicin por slo unos


pocos dlares. Algunos teatros con capacidad para 1.200 o 1.500
personas podan asegurarse de esta manera a un costo de $ 7 por
cada domingo de noche.
En algunas ciudades la estacin de radio daba a las
iglesias media hora cada domingo para emitir un sermn. El
secretario de la asociacin ministerial asigna esta media hora
cada domingo a los diferentes pastores en turno. Al convertirse
en miembro de la asociacin, se recibe media hora junto con las
otras iglesias. Otra ventaja de pertenecer a la asociacin de
pastores es que se reciba turno para comparecer ante la Cmara
y el Senado. Estas oportunidades ayudaran a llevar nuestra
causa ante el gobierno. Estos son algunos ejemplos que ilustran
los beneficios que pueden brindar a la causa la pertenencia a la
asociacin ministerial local1.
1

No obstante la convivencia con ministros de otras denominaciones


no siempre es del todo amistosa. De hecho la agresividad evangelstica de los
adventistas ha suscitado movimientos en favor del descanso dominical
obligatorio de parte de algunos clrigos protestantes, acusaciones de hereja
teolgica, y mero proselitismo. Douglas Morgan, Adventism and the American
Republic: The Public Involvement of a Major Apocalyptic Movement (Univ. of
Tennessee Press, 2001).,41. Aecio Carus, Adventismo y Protestantismo,
DavarLogos 9, n.o 1 (2010): p. 79, nota 28. Cosmas Rubencamp, Seventh-day
Adventists and the ecumenical movement, Journal of Ecumenical Studies 6, n.o
4 (1 de septiembre de 1969): 548. Edwin Zackrison, In the Loins of Adam: A
Historical Study of Original Sin in Adventist Theology (iUniverse, 2004).,230.
Robert E. Webber, Evangelicals on the Canterbury Trail (Church Publishing,
Inc., s. f.)., 151. El mismo enfoque evangelizador adventista no da demasiado
espacio al ecumenismo. Gallagher y Ashcraft, Introduction to New and
Alternative Religions in America.,44. Por otro lado debe reconocerse que la
evangelizacin pblica adventista suele construye en base a lo que hacen otras
denominaciones. Holger Jebens, Pathways to Heaven: Contesting Mainline and
Fundamentalist Christianity in Papua New Guinea (Berghahn Books, 2006).,187.

54

GENTE DE LA PALABRA

Mujeres Evangelistas
En los mbitos adventistas estamos acostumbrados a ver
hombres realizando esfuerzos pblicos en iglesias, salones,
tiendas de campaa, y otros lugares1. Por costumbre, parece que
hemos dado este derecho exclusivamente a los varones. En el
trabajo de instructor bblico y en la evangelizacin personal en
general, aceptamos los servicios del sexo dbil. Pero se concibe el
evangelismo pblico como un trabajo para hombres.
Para sorpresa de algunos las damas que trabajaban en la
oficina de la Asociacin del Caribe Oriental se reunieron y por
medio de una vocera pidieron ver al presidente. La seora Bessie
Murray, esposa del entonces secretario-tesorero, y portavoz del
grupo, dijo: "Pastor Thompson, durante mucho tiempo las
damas hemos contemplando la realizacin de un esfuerzo
pblico, y ya no estamos satisfechas solo con orar cada maana
aqu en el culto, pidiendo que el Seor bendiga a nuestros
pastores y evangelistas que predican el evangelio. Queremos
tener un esfuerzo por nosotras mismas, y nos gustara tener una
tienda de campaa en el que llevar a cabo nuestra campaa! "
"Bueno", contest Thompson, "cuntas noches a la
semana, y cuntas semanas?" Ella respondi: "Cinco noches a la
semana durante seis semanas. Domingo, Lunes, Martes,
Mircoles y viernes por la noche."
"Quin ser el orador?", pregunt.

G. Ralph Thompson, A New Venture in Evangelism, Ministry


Magazine, accedido 5 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1965/09/a-new-venture-in-evangelism.

55

GENTE DE LA PALABRA

"La hermana Irisdeane Francis, veterana instructora y el


presidente los domingos ", fue la respuesta.
La entrevista termin con una palabra de oracin para
que Dios bendiga sus esfuerzos y honrara la fe de las hermanas.
La cruzada sera en St. Michael, Barbados, comenzando
la noche del domingo 28 de marzo de 1965. La tienda estaba
llena de personas interesadas y miembros de la iglesia, muchos
de los cuales haban sido atrados por la novedad de un esfuerzo
realizado por las damas de la oficina de la asociacin.
Este ciclo fue un modelo de eficiencia. Todo se movi
con la precisin de un reloj. El servicio alegre cancin, la hora
de la historia para los nios, la ofrenda, el sermn, todo cay en
un horario preestablecido. La instructora habl fielmente cuatro
noches a la semana, y el presidente de la asociacin habl los
domingos por la noche, como se haba planeado.
Todos los das en la oficina, justo antes de la hora del
medioda, las damas se reunan en una de las salas de oracin.
Reconocieron que todos los ganadores de almas tienen que ser
vaciados de s mismo y entonces pedan ser llenas con el Espritu
Santo.
Estas hermanas han demostrado que el evangelismo
pblico no pertenece slo a los hombres. El evangelismo pblico
est muy vivo; y Dios honrar la fe y el valor de los hombres y
mujeres que abrazarn la locura de la predicacin.
Pastores y Laicos Entusiasmados por Igual
En la Divisin Interamericana los obreros y laicos tienen
idntico entusiasmo misionero, motivado por la urgencia de
56

GENTE DE LA PALABRA

terminar la tarea asignada por el Cristo de predicar el evangelio1.


En 1975 tuvieron la alegra de bautizar a 49.315 personas.
A principios de 1975 Carlos Aeschlimann, Esteban
Lpez Porras, y Claudio Ingleton, junto con un equipo de
trabajadores y docentes de la Conferencia de Panam, realizaron
una campaa mltiple que result en ms de medio millar de
bautismos.
En Caracas, Venezuela, una ciudad difcil para el
evangelismo, el evangelista de la Unin Colombo-Venezolana,
Jos Osorio Brafia, junto con su equipo y un nmero de
estudiantes de teologa, llevaron a cabo una campaa en carpa
en la cual cuatrocientas personas fueron bautizadas.
En Guyana, K.S. Wiggins y su equipo, utilizando
tambin una tienda de campaa, hicieron un impacto en la
ciudad de George, ganando cerca de 350 personas para Cristo.
Cada pastor en la Divisin dedica una parte considerable
del ao a las actividades evangelsticas. Decenas de pastores
bautizan ms de un centenar de personas y se convierten en
centuriones. Por ejemplo, en Mxico, el pastor Castro Maheda
bautiz a ms de seiscientas personas el ao pasado.
Los administradores daban un tremendo impulso a la
evangelizacin en sus territorios. Estos presidentes han sostenido
grandes y exitosas campaas para ganar almas. Como resultado
1

Carlos Aeschlimann, Evangelism in Inter-America, Ministry


Magazine, accedido 6 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1976/07/evangelism-in-inter-america.

57

GENTE DE LA PALABRA

de ello, en Mxico, por ejemplo, todos los campos locales


alcanzaban sus metas bautismales, y en Centroamrica seis de los
siete campos locales tambin alcanzaron sus objetivos. En la
Conferencia del Sur de Mxico solamente fueron bautizados
4.444 personas. La Misin Rica Costa, que durante aos se
consider un campo muy difcil, lleg a 168 por ciento de su
meta anual bautismal. Mxico ha mostrado los resultados ms
destacados, con casi once mil personas unindose a la iglesia a
travs del bautismo.
Nuestros colegios y escuelas han cooperado plenamente
con el programa de ganar almas, inaugurando un programa
misionero diseado para ganar a los estudiantes a Cristo. Un
maestro en Panam prepar casi un centenar de estudiantes para
el bautismo. Los cursos de Teologa en nuestros colegios
superiores se organizaron para el evangelismo efectivo por
profesores y alumnos.
El programa de carteros misioneros del departamento de
comunicacin ha sido especialmente exitoso en Mxico,
Amrica Central y la Unin Colombo-Venezolana, y fue
responsable de miles de bautismos. El departamento de
publicaciones tambin, con su ejrcito de 4.500 colportores.
Probablemente el aspecto ms notable de la
evangelizacin Interamericana es la integracin directa de los
laicos en las actividades para ganar almas. Cientos de laicos
llevan a cabo campaas exitosas. En El Salvador se inici el ao
con 35 predicadores laicos celebrando reuniones en la ciudad
capital. Nuestros laicos son instructores bblicos eficientes, y
preparan a miles de personas cada ao.
En Ibagu, Colombia, Jos Osorio lanz una tienda de
58

GENTE DE LA PALABRA

campaa y llev a cabo un plan de cinco das, con una asistencia


de 3.000 personas. En la campaa evangelstica que sigui, casi
3.500 de estas personas asistieron a las reuniones de sesin
doble.
Docentes en la Evangelizacin
John Brunt, quien posee un Ph.D. en estudios del Nuevo Testamento
insiste: "Me sorprende que muchos se sorprendan de ver a los
docentes haciendo evangelismo, porque eso es lo que todos los
cristianos deben estar haciendo de una manera u otra. Y en mi
rea, no se puede estudiar el Nuevo Testamento sin llegar a un
fuerte sentido de la necesidad de la evangelizacin".
Brunt siente que el adventismo intelectual necesita la evangelizacin.
"Estamos preocupados por el hecho de que hay una gran
cantidad de adventistas del sptimo da para quienes la
evangelizacin se ha convertido prcticamente en una mala
palabra. Y no creemos que la iglesia pueda ser saludable si eso es
lo que piensa un segmento importante de la misma
John Brunt vive en un rea que tiene una de las mayores
concentraciones de adventistas en Norteamrica. Dice que es
fcil cuando ests en un gueto adventista no darse cuenta de
cuntas personas estn sufriendo y se beneficiaran de cosas que
damos por sentado.
El evangelismo ayuda a mantener la teologa del estudioso
1

W. Floyd Bresee, Pastors Pastor: The scholar-evangelist, Ministry


Magazine, accedido 6 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1988/04/the-scholar-evangelist.

59

GENTE DE LA PALABRA

bien prctica. Nuestros formadores de predicadores deberan


estar haciendo evangelismo. Slo los ganadores de almas
producirn ganadores de almas.

La Evangelizacin Y La Correcta Interpretacin De La Profeca


El evangelista y el intrprete de la profeca deben estar
alerta para ver las seales de los tiempos y llamar la atencin de
las personas a las mismas, pero no pueden ver correspondencia
histrica donde no la hubiere1, ni predicar lo que la misma
Biblia no autoriza. De hecho la interpretacin apocalptica
adventista se ha desarrollado continuamente y ha cambiado,
siendo corregida a la luz de los acontecimientos (o, ms a
menudo, a la luz de lo que no aconteci).2
Valor De Las Profecas En La Evangelizacin
El adventismo lleva ms de 150 aos y el mundo erudito
ya ha apreciado varias tendencias escatolgicas en su seno. Ven
que se ha perdido gran parte de su urgencia apocalptica3; que
1

Were, Europe And Armaggedon.77


Fritz Guy, Thinking Theologically: Adventist Christianity and the
Interpretation of Faith (Andrews University Press, 1999).,88. Una vez que se
corrigi la interpretacin de Armagedn los principales evangelistas de la
iglesia la popularizaron. Ver Edward Cleveland, The Leaping Frogs of the
Revelation, Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1968/02/the-leaping-frogs-of-the-revelation.
3
En esto pueden haber incidido las crticas del resto del mundo
cristiano al enfoque kerigmtico de la denominacin. E. Hanganu declara
que la obsesin adventista con las profecas escatolgicas en Daniel y
Apocalipsis ha causado daos colaterales en los crculos adventistas. La
mayora de sus reuniones evangelsticas parecen tener un enfoque singular,
que no es el evangelio, sino las extraas bestias de Daniel y Apocalipsis. El
2

60

GENTE DE LA PALABRA

aboga por un premilenarismo claramente diferente; entre otros


matices. Lo explican aduciendo que es difcil para cualquier
movimiento mantener candentes sus creencias escatolgicas. Se
reconoce el crecimiento en membresa; un mejor arraigamiento
en la sociedad y el establecimiento de muchas instituciones.
Todo este desarrollo no significa que los adventistas hayan
abandonado su escatologa. Mientras que las creencias
escatolgicas a menudo se han colocado en un segundo plano,
todava siguen siendo enseadas1. La iglesia es lo que es gracias a
sus enseanzas escatolgicas, y esconderlas sera privarse de sus
beneficios.
Declara A. V. Olsen: Por un nmero de razones nuestro
mensaje es impopular, porque reclama una separacin completa
del mundo con sus placeres, sus vicios y sus ambiciones.
Establece a sus seguidores aparte como peculiares, debido a la
modestia en el vestir y sus hbitos de temperancia en el comer y
beber. Tambin los distingue debido a la observacin de un
reposo diferente del resto del mundo cristiano profeso.
A pesar de estas caractersticas impopulares de nuestro
mensaje, se est haciendo un impacto en el mundo. Est
nfasis grandilocuente y triunfalista sobre los "eventos finales" y la
"inminente" segunda venida, que se considera la "verdad presente" ha
reemplazado al evangelio cristiano y causado el fracaso inexcusable en llegar
con el mensaje a un mundo hambriento de la verdad. Ver Eduard Hanganu,
Adventist Historicism Reexamined And Critiqued Basic Draft, accedido 29
de marzo de 2015,
https://www.academia.edu/11151060/Adventist_Historicism_Reexamined_
And_Critiqued_Basic_Draft., 74.

Richard G. Kyle, Apocalyptic Fever: End-Time Prophecies in Modern


America (Wipf and Stock Publishers, 2012).,315.

61

GENTE DE LA PALABRA

atrayendo la atencin de multitudes y gana muchos conversos.


Uno de las excepcionales razones para ello es que se encuentra
en su precisin proftica. Hay poder en las profecas, por la
manera que llegan a las personas. Bajo la influencia del Espritu
que lleva a los hombres a humillarse ante Dios. Su valor en
nuestro trabajo nunca puede ser sobrestimado 1.
Los adventistas de antao siempre tuvieron en claro la
singularidad de su movimiento, y esa peculiaridad antes que
verla como una desventaja la estimaron grandemente2. Adems,
en la interpretacin y predicacin de la profeca vieron un poder
especial, que daba relevancia y urgencia a su predicacin, a la vez
que motivaba a los proslitos a tomar una posicin junto a ellos.
Esta tarea no ha caducado3.
Pero el mundo ya no percibe tanta inminencia en la
evangelizacin adventista como antes. Se hace notar que
aunque se retrata un escenario escatolgico adventista sombro,
para muchos evangelistas adventistas todava esto es futuro. El
acceso irrestricto a las ventajas modernas, a los medios de
comunicacin y la satisfaccin con la buena imagen lograda por
1

Our Firm Foundation, Vol. 2 (Washington, 1953).,568.


El crecimiento y el poder de la Iglesia Adventista del Sptimo Da
se debe a la hecho de que tiene creencias distintivas, dogmticamente
establecidas, las cuales la iglesia siente que est divinamente comisionada
para proclamar. Hay un atractivo especial en el hecho de sentir que la verdad
divina se confa a la iglesia, y esto ha motivado un espritu de sacrificio
especial para adelantar la proclamacin.James E. Bear, Bible and modern
religions: The Seventh-Day Adventists, Interpretation 10, n.o 1 (1 de enero de
1956): 48.
3
Paul Boyer, When Time Shall Be No More: Prophecy Belief in Modern
American Culture (Harvard University Press, 2009).,7. Comprese con la
posicin de OLeary acerca de la inviabilidad de la apelacin proftica al
grueso de la sociedad luego de 1844. Stephen D. OLeary, Arguing the
Apocalypse (Oxford University Press, s. f.).,208.
2

62

GENTE DE LA PALABRA

sus instituciones en la sociedad, dejan ver cierto amoldamiento


al mundo actual1. Ser que la institucionalizacin y las
comodidades actuales menguan el fuego de la inminencia en la
predicacin del mensaje adventista?2

Thomas Robbins y Susan J. Palmer, Millennium, Messiahs, and


Mayhem: Contemporary Apocalyptic Movements (Psychology Press, 1997).,215.
2
Precisamente esta tensin es vista como la clave del xito adventista.
El adventismo contiene elementos pre y postmilenialistas. A nivel teolgico,
la tierra no ser purificada hasta despus del milenio, lo cual refleja en parte
al postmilenialismo. Pero la mayor confusin viene en el plano prctico. El
adventismo es premilenial pero se comporta como si fuera postmilenial. El
premilenialismo tiene una visin pesimista de la naturaleza humana, aunque
los adventistas del sptimo da mantienen una impresionante presencia
global. Su nmero ha aumentado significativamente. A nivel mundial, se ha
establecido muchas instituciones educativas, incluidas las universidades,
seminarios, escuelas secundarias y ms de 4.500 escuelas primarias. Este
equilibrio entre lo que se podra denominar premilenialismo proftico y
posmilenialismo institucional es lo que ha desarrollado el movimiento a
escala global. Kyle, Apocalyptic Fever.,317. Este rasgo es peculiar del
adventismo en comparacin con otros movimientos apocalpticos.
Podramos esperar que cualquier iglesia que espera que el mundo termine
en cualquier momento se concentrara en las preocupaciones puramente
religiosas. Esto es lo que hacen los Testigos de Jehov; no tienen hospitales,
hogares para ancianos, orfanatos, colegios, ni clnicas. Su nico inters parece
ser la de advertir a la humanidad de la inminente batalla de Armagedn. No
es as con los adventistas. Su creencia urgente en la Segunda Venida no ha
disminuido su compromiso con la educacin, la atencin mdica o el servicio
a los dems. William Whalen, Why the Seventh-day Adventists are
Succeeding, Ministry Magazine, accedido 2 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1966/04/why-the-seventh-day-adventists-are-succeeding.

63

GENTE DE LA PALABRA

Pero el valor de las profecas no tiene que ver solamente con la


evangelizacin sino tambin con la identidad, confirmacin y
crecimiento del creyente adventista1. Dado que el evangelismo
adventista enfatiza la escatologa, los conversos suelen sentirse
atrados por este tema. Sin embargo, cuando se unen a las
congregaciones adventistas, se encuentran con que sus pastores
suelen dar menos nfasis a los temas escatolgicos que los
evangelistas2. En los pases desarrollados la especializacin
teolgica adventista ha ido en detrimento del nfasis
escatolgico clsico del adventismo3. Este importante descuido
quiz merme la identificacin del creyente como siendo parte de
un pueblo peculiar y disminuya su compromiso con la
predicacin de un mensaje especial y urgente.
Al analizar los mtodos empleados por el evangelismo
pblico adventista en su poca ms enrgica se percibe una
variedad notable de abordajes, seguramente producto de la
continua bsqueda por adaptarse, innovar y superar lo realizado
hasta el momento. Ninguno de estos mtodos tiene todas las
ventajas, o est libre de limitaciones. Por cierto la misma

Las caractersticas duraderas del perfil adventista tomaron forma


en un crisol apocalptico. A pesar de importantes modificaciones de tono y el
nfasis, la interpretacin de la historia que surgi en la dcada de 1850 y la
identidad particular y la misin que conlleva, no ha dejado de impulsar y
orientar a los adventistas a travs de su historia. Se ha apuntalado la
persistencia de una identidad rigurosamente separatista. Douglas Morgan,
Adventism, Apocalyptic, and the Cause of Liberty, Church History 63, n.o 2
(1 de junio de 1994): 235-49.,239.
2

Robbins y Palmer, Millennium, Messiahs, and Mayhem.


Ibid., 216.

64

GENTE DE LA PALABRA

evangelizacin, por tener un componente humano, ya de por s


es imperfecta1.
Llama la atencin, sin embargo, que la evangelizacin
pblica era vista como un deber anual de la asociacin, pastor,
obrero y laico adventista, utilizando todos los avances y medios
legtimos posibles como para atraer a las personas a un programa
dinmico en el cual presentarles el mensaje de manera gradual y
completa. No se trataba de una variante ms de tantas, sino de la
manera ms apropiada de alcanzar a ms personas en el menor
tiempo posible. No se trazaban lmites entre naciones, lenguas o
territorios. Todas las lenguas, personas y denominaciones
intentaban ser abrazadas por la carpa o el auditorio disponible.
La efervescencia proftica del mensaje era la fuerza propulsora
de semejantes esfuerzos. En consecuencia, cuando esta nocin
singular empez a declinar, con ello tambin mengu el empeo
en la tarea.
La idea de esfuerzo evangelizador dej de escucharse.
No se trata de un cambio de nomenclatura, sino probablemente
1

Se han hecho crticas diversas al evangelismo masivo desde el


punto de vista psicolgico, asocindolo con lavado de cerebro,
manipulacin, etc. Algunos pastores de otras denominaciones desechaban
este enfoque por coercitivo, Moberg y Magnuson, Current trends in
evangelism.21. Se critica que muchos oradores revistan de floridas palabras
un contenido superficial, generando dependencia hacia el orador, y
procurando un rpido convencimiento de las personas, impidindoles un
detallado razonamiento de lo que van a afrontar. Erik Routley, Evangelism
and modern man. 3, Some techniques of mass evangelism are comparable to
the brainwashing methods used by the totalitarian interests and reveal as
little esteem for modern man, Christian Century 76, n.o 27 (8 de julio de
1959): 799-801. Estas crticas deben alertar acerca de la preparacin que
necesita el orador, su necesidad de continuo estudio, su abordaje de la
audiencia y la manera en la que tome decisiones por Cristo.

65

GENTE DE LA PALABRA

de un cambio de nimo. La disposicin al sacrificio fue


desapareciendo, y un evangelismo ms breve, de entrecasa,
menos costoso y ms relacional o hasta encarnacional1 fue
ganando protagonismo en todo el protestantismo2.
En procura de rescatar algo de ese optimismo
evangelizador ser inspirador sobrevolar las historias y el legado
de los hombres que marcaron una era.

Robert A. Seiple, From Bible Bombardment to Incarnational


Evangelism: A Reflection on Christian Witness and Persecution, Review of
Faith & International Affairs 7, n.o 1 (marzo de 2009): 29-37,
doi:10.1080/15570274.2009.9523378.,29.
2
Roderick R. Hewitt, Evangelism as Discipleship, International
Review of Mission, noviembre de 2014.

66

GENTE DE LA PALABRA

CAPTULO CUATRO:
HOMBRES E HITOS QUE MARCARON UNA ERA
Algunos argumentan que el evangelismo masivo es
particularmente propenso al culto de la personalidad, que es
cada vez ms desagradable para muchas personas, y
evidentemente peligroso hasta para el ms espiritual1. Hay una
medida de sospecha acerca de la auto-promocin tan a menudo
asociada con el evangelismo masivo. En consecuencia el
evangelismo masivo tiene un problema de credibilidad en
relacin con la autenticidad del predicador. Sin embargo, aun
cuando el evangelista llegue como un siervo sincero de su Seor
muy pocos tienen el carisma y el poder de atraccin suficiente
como para atraer a comunidades enteras a reuniones masivas,
sin considerar los esfuerzos de promocin y publicidad tan
costosos2.
Pese a los aparentes riesgos de la evangelizacin masiva y
lo costoso de organizarla, los adventistas siempre asumieron el
desafo de alentarla, organizarla y formar predicadores que la
llevaran adelante. Algunos de esos hombres decisivos son
retratados en las pginas siguientes3.
Evangelista Desde la Cuna

John Mark Terry, Evangelism: A Concise History (B&H Publishing


Group, 1998).,12.
2
William Thomas, An Assessment of Mass Meetings as a Method of
Evangelism: Case Study of Eurofest 75 and the Billy Graham Crusade in Brussels
(Rodopi, 1977). ,277.
3
El perfil de los evangelistas adventistas se acerca mucho al de
evangelistas conservadores como Billy Graham. John Mark Terry, Billy
Grahams Contributions to World Evangelism, Baptist History and Heritage
30, n.o 1 (1 de enero de 1995): 5-13.

67

GENTE DE LA PALABRA

H.M.S. Richards, decano de los comunicadores


adventistas, tuvo una vida totalmente comprometida con la
evangelizacin - la predicacin de las buenas nuevas del
evangelio1. De hecho su ascendencia consta de varias
generaciones de predicadores. Uno de ellos fue un predicador
laico y compaero de viaje de John Wesley. Su abuelo, William
Jenkins Richards, se convirti en una de las reuniones
evangelsticas realizadas por el general William Booth y se
transform en un predicador laico en Redruth, Cornualles,
Inglaterra. Se desempe tambin como predicador del circuito
Metodista Episcopal en Estados Unidos. Su hijo, Halbert M.J.
Richards (padre de H.M.S. Richards), viaj extensamente como
evangelista por todo Iowa, Colorado, Nuevo Mxico, Texas,
Oklahoma, Pensilvania, Arkansas, California y otros estados
norteamericanos .
A finales del verano de 1894, H.M.J. Richards dej su
tienda de reuniones en el Medio Oeste, y tom un tren de carga
con destino a Davis City, Iowa, para ver a su primognito y su
esposa. Al verlo dijo: "Vamos a tener la oracin y voy a poner
mis manos sobre su cabeza para que sea del Seor".
A los dos aos, H.M.S. casi muere por comer manzanas
verdes. El mdico le dio poca esperanza de recuperacin. Pero su
madre or por su sanacin, prometiendo a Dios dedicarlo a su
servicio. La oracin fue contestada, y desde entonces le
ensearon a Richards que perteneca a Dios. Esto influy en su
decisin vocacional futura, desechando la carrera de abogado.
1

Orley M. Berg, H. M. S. Richards--Committed Evangelistic


Preacher, Ministry Magazine, accedido 4 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1970/10/h.-m.-s.-richards-committed-evangelistic-preacher.

68

GENTE DE LA PALABRA

A menudo predicaba a un crculo de sillas vacas y a su


hermano menor Kenneth. A la edad de diez aos, H.M.S. y su
hermano, jugaban un da con plvora, cuando se sopl el polvo
en su cara. Las partculas se incrustaron en sus ojos, y semanas
despus HMS podan ver tan solo un poco de luz. Despus que
fueron sanadas las heridas, se le produjo una notable miopa,
hacindole necesario el uso de gruesas gafas por el resto de su
vida.
Harold era un nio muy activo en su iglesia local, donde
fue dicono y anciano. Tambin ayud a su padre en reuniones
evangelizadoras durante sus aos de escuela secundaria. Durante
el verano de 1912 en Fort Lupton, Colorado, su padre encontr
una excusa para irse la tarde del sbado, diciendo a Harold que
tendra que predicar. Encantado aunque temeroso, pregunt
qu tema deba elegir. Su padre dijo: "Predica sobre los ngeles.
H.M.S. tena diecisiete aos1.
Se prepar, predic, y unos das despus una anciana fue
a la carpa y le dijo: "Oh, usted no sabe lo que signific ese
sermn para m! Vivo sola y tengo slo unos pocos pollos. Tena
miedo de que alguien me matara. Cuando usted predic sobre el
tema de los ngeles, pens, seguro que los ngeles me estn
vigilando. Y quiero que sepa que ya no tengo ms miedo. "
El testimonio alent a Richards. Recordando el
incidente, dice, "No s su nombre, pero espero que el buen
1

H. M. S. Richards, Wikipedia, the Free Encyclopedia, 4 de abril de


2015,
https://en.wikipedia.org/w/index.php?title=H._M._S._Richards&oldid=654
977851.

69

GENTE DE LA PALABRA

Seor la recompense algn da porque estaba a punto de creer


que era un fracaso como un predicador".
Con su amigo Kenneth Gant, Richards gan su primer
converso. Durante una campaa de recoleccin los muchachos
encontraron una mujer gravemente enferma de tuberculosis.
Ella estaba dispuesta a que estudien con ella, por lo que cada
jueves por la noche caminaban tres kilmetros y medio a lo largo
de las vas del tren para visitarla. Sin saber nada acerca de dar
estudios bblicos, la visitaron durante casi tres aos. Sin saber
tampoco cmo llevar a la mujer a una decisin, vieron con
asombro como ella misma pidi el bautismo. Pocos meses
despus falleci.
En el verano de 1914, los dos jvenes predicadores
sintieron que estaban listos para convertirse en grandes
evangelistas de carpa. El presidente de la asociacin les prest
una tienda de campaa con goteras, con la que empezaran la
tarea. El tamao de la congregacin, diecinueve para empezar, y
el espritu de los jvenes predicadores se encoga noche a noche.
La campaa de verano les dio mucha experiencia, pero poco
fruto.
Indeciso entre ir a la universidad o entrar directamente
en el ministerio despus de su graduacin, Richards se uni de
nuevo con Kenneth Gant para celebrar reuniones en Woodland
Park, Colorado, un pequeo pueblo cerca de Pike. Un incidente
que Richards nunca olvid es el siguiente:
"Despertamos una maana por una perturbacin general
y vimos que los aldeanos estaban sacando del lago el
cuerpo de una mujer que haba asistido cada noche a las
reuniones. Habamos ido el domingo a visitarla. Tena
70

GENTE DE LA PALABRA

una hermosa casa, un buen esposo, hermosos hijos, y ella


pareca feliz.
Cuando llegamos haba un extrao visitante en la casa, y
pensamos que era mejor no hablar de religin o tener
una oracin. Entonces saludamos y prometimos volver.
Esa noche ella no vino a la reunin, sino que se lanz al
lago desde atrs de nuestro tabernculo! Antes de
hacerlo dej una nota pidiendo que yo predicara su
sermn fnebre.
El extrao visitante result ser un antiguo novio.
Cuando lo vio, ella cay en pecado, y desesperada por la
culpa abandon a su marido y a sus hijos, y se ahog.
Es de imaginar cmo nos sentimos Gant y yo. La mujer
a la que deberamos haber hablado y con quien pudimos
haber orado, pero no lo hicimos, se haba quitado la
vida! Este episodio nos llev a un profundo examen de
conciencia y muchas lgrimas delante del Seor
Una vez ingresado en el Colegio Misionero de
Washington, Richards predic dos veces por semana en el
invierno, y todas las noches durante el verano. Iba a escuchar a
grandes predicadores de la poca, tales como Billy Sunday. Al
llegar la primera guerra mundial, Richards fue cuidadoso de no
decir en sus sermones: "Esta es la ltima guerra". Pero senta que
la hora en la que l estaba predicando podra ser la ltima de la
tierra. En dos veranos resucit a dos iglesias.
Los lderes de la iglesia, convencidos de que este joven
evangelista, an en la universidad, haba sido llamado de Dios,
lo ordenaron al ministerio evanglico. En este servicio sagrado el
21 de septiembre de 1918, eligi como lema 1 Corintios 2: 1, 2:
71

GENTE DE LA PALABRA

"Y yo, cuando fui a vosotros, no fui con excelencia de palabras o


de sabidura anunciaros el testimonio de Dios. Porque yo no me
propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a
ste crucificado"1.
Mientras trabajaba en la evangelizacin a tiempo
completo en Mont, Canad, Richards recibi un llamado del
Union College para ensear evangelismo. W.W. Prescott hizo
un viaje a Montreal para asegurarse de que aceptara la
invitacin. Prescott, un hombre destacado y de imponente
personalidad, inst a Richards para aceptar la llamada como un
mandato de Dios. En gran angustia Richards luchaba por tomar
una decisin, y luego de gran angustia decidi no aceptar,
creyendo que Dios lo llamaba a otra cosa. Y ese destino result
ser cuarenta aos de predicacin radial.
En 1926, el joven evangelista y su esposa llegaron a
California para llevar a cabo cruzadas en Los ngeles, Long
Beach, San Diego, Bakersfield y Fresno. Fue durante la estancia
en Bakersfield y Fresno que su carrera en la radio comenz a
despuntar.
De vuelta en Los ngeles comenz con audiciones
devocionales matutinas en radio KNX, y un ao ms tarde con
el "Tabernculo del Aire," en la KMPC, que por lo general
consista en la transmisin de una de las reuniones de la cruzada
de Richards. Las transmisiones posteriores se emitieron
regularmente en KGER, Long Beach. Aunque algunos de sus
colegas crea que la radio era una herramienta del diablo2,
1

Richards fue muy influenciado por la predicacin cristocntrica que


enseaba W.W.Prescott. Valentine, W.W. Prescott.,114.
2
Clinton A. Valley, Help! Im Being Followed: What to Do When Youve
Been Asked to Lead (Autumn House Publishing, 2007).,49

72

GENTE DE LA PALABRA

Richards reconoci rpidamente su potencial evangelizador.


En 1937, junto con el cuarteto Lone Star Four, Richards
sali al aire con un programa nocturno de media hora los
domingos, emitido por nueve emisoras.
El siguiente avance importante se produjo en 1942.
Fordyce Detamore se uni al personal como director asociado,
trayendo con l el nuevo concepto de un curso bblico por
correspondencia.
A travs de estos aos de ministerio fructfero, el pastor
Richards se bas firmemente en el brazo poderoso de su
Salvador personal, y reflej su bondad. El poder de su propia
vida espiritual fue una fuente de inspiracin y aliento de miles,
por medio de su predicacin y sus conmovedores relatos1. Esto
puede deberse, al menos en parte, a una experiencia que tuvo en
el momento de la muerte de su abuelo de Sylvester.
"La noche que mi abuelo Sylvester muri yo estaba solo
con l. Era un hombre muy fuerte, se acerc al aparador,
y consigui su Biblia."Ahora, Harold, ', dijo, 'vas a ser un
ministro, y si vas a serlo tienes que ser un hombre
espiritual. Nunca se puede entender la Biblia a menos
que seas espiritual. Ningn hombre tiene el derecho de
ser un ministro si no es espiritual.
Si las virtudes de la espiritualidad y la sencillez son las
marcas de un verdadero hombre de Dios, H.M.S. Richards las
tuvo2. Fue un hombre comn que lleg a ser extraordinario
1

Larry Yeagley, Beyond Anger (Review and Herald Pub Assoc,


2006).,119.
2
Morris L. Venden, Why Didnt They Tell Me?: Sharing Jesus Isnt
Something We Do, Its Who We Are (Pacific Press Publishing, 2005).,54.

73

GENTE DE LA PALABRA

gracias a su comunin con Dios1. De esta manera logr influir


en tres generaciones de oyentes y motivar a muchos jvenes para
que entraran al ministerio2. Luego de llevar a miles a los pies de
Cristo3, se retir del programa radial a la edad de 75 aos, y fue
reemplazado por su hijo H.M.S. Jr.4 El evangelismo por medio
de las comunicaciones del cual fue pionero lleg a extensiones
que nunca imagin5.
Pero Richards era parte de un equipo. Y el armado de
ese equipo fue la clave de sus exitosas conferencias.
El Equipo Evangelizador de H.M.S. Richards
A travs del esfuerzo grupal, unido y continuo que
comprende la distribucin extensa de literatura, el intensivo
trabajo radial, las conferencias bblicas eficaces, la instruccin
completa de los candidatos al bautismo, las instalaciones
atractivas y funcionales (carpa, suelo, calefaccin, atril,

Penny Estes Wheeler, Tugging on Gods Hand: Stories You Love from
Women of Spirit (Review and Herald Pub Assoc, 2003).,31.
2
Lawrence S. Dorsey, Born to Preach (WestBow Press,
2013).,28,154,172. Larry Yeagley, A Tree Across My Road (Review and Herald
Pub Assoc, 2006).,30.Richards siempre se ocupaba de recalcar la importancia
de la buena predicacin, que segn l, moldeaba a la iglesia para bien o para
mal. Larry Yeagley, Touched by Fire: Igniting a Passion for Ministry to Others
(TEACH Services, Inc., 2012).
3
Edwin Sili, Its Not About Me!: Preaching to the Man In the Mirror
(WestBow Press, 2011).,87.
4
Del Delker y Kenneth R. Wade, Del Delker: Her Story (Pacific
PressPub Assn, 2002).,134.
5
David B. Smith, E. Lonnie Melashenko, y Voice of Prophecy,
Galactic News from Three Angels (Voice of Prophecy, 2000).,13.

74

GENTE DE LA PALABRA

bautisterio, etc.) se han obtenido resultados notables1.


En la evangelizacin son necesarios todos los dones
disponibles de manera que el impacto de la campaa en la
ciudad se multiplica. Ningn hombre puede llevar el peso de
una gran campaa de evangelizacin. Cuando un hombre trata
de hacerlo solo, el desarrollo sistemtico y el cultivo del inters
suscitado por las reuniones sufre, y la presentacin pblica del
mensaje se resiente. Incluso a veces la salud se hace aicos en
esos intentos.
En el equipo evangelizador de "La Voz de la Esperanza"
el pastor Howard A. Curran asista al pastor H.M.S. Richards
como tesorero, archivista, y coordinador de los obreros bblicos.
Todos los visitadores se hacan responsables de la atencin de las
personas interesadas en cada seccin designada, y en cada
reunin se informaba la situacin de cada participante de las
conferencias.
Cada miembro del cuarteto Los Heraldos del Rey
tambin tena responsabilidades en la campaa, adems de las
visitas. Robert Johnson era mecangrafo, Vernon Stewart era
buen artista y un experto carpintero. Wesley Crane y su esposa
tenan a cargo la plataforma. Ray Turner, por su parte, era
superintendente de la construccin de tiendas de campaa, y
tambin se ocupaba de los sistemas de amplificacin.
Cuanto ms estable sea el staff de evangelizacin ms y
mejor trabajar. Bajo este plan, cada uno sabr que debe hacer, y
1

H.M.S. Richards, The Company Form of Evangelism


(Symposium), Ministry Magazine, accedido 2 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1941/04/the-company-form-of-evangelism.

75

GENTE DE LA PALABRA

la prdida de tiempo se reduce al mnimo. Para evangelizar las


ciudades ms populosas se requieren muchos grupos fuertes y
estables en la tarea. Una campaa fuerte no significa ser
necesariamente costosa, pero una campaa llevada a cabo por
un grupo bien entrenado y balanceado, har el trabajo de
manera minuciosa y fructfera.
Si tales equipos no cuentan con el apoyo comprensivo de
los pastores locales, nunca deberan comenzar. Aunque una
asociacin local no siempre puede darse el lujo de contratar a un
equipo semejante de manera permanente, si el grupo est
organizado a nivel regional contar con una base ms amplia, y
cada asociacin apoyar al grupo mientras est trabajando en su
territorio. Esto har posible que las campaas fuertes se
desarrollen tambin en las ciudades donde las asociaciones son
menos pudientes.
Aunque la era de los equipos de evangelismo parece
superada, ya que la iglesia local se entiende como la base
evangelizadora de la regin que la circunda, no se encontr
todava mejor manera de alcanzar las ciudades importantes
donde hay nula o escasa presencia adventista.
J.L. Shuler: Maestro de Evangelistas
John Lewis Shuler, (1887-1984) sirvi como presidente
de campo en la dcada de 1920, pero se destac en la dcada
siguiente como un evangelista influyente, realizando varias
campaas exitosas en el sur de Estados Unidos1. Entre sus
tcnicas, desarroll una publicidad efectiva, cre las clases
1

Land, Historical Dictionary of Seventh-Day Adventists.,272.

76

GENTE DE LA PALABRA

bblicas, e introdujo una serie progresiva de decisiones en el


pblico en preparacin de la gran decisin por el bautismo al
final de la campaa. En 1937 comenz a ensear estas tcnicas a
los pastores jvenes en una escuela de campo realizada en
combinacin con un ciclo evangelstico realizado en
Greensboro, Carolina del Norte, seguido de escuelas similares
en otras ciudades. Dos aos ms tarde se uni al Seminario
Teolgico donde introdujo un curso sobre filosofa y otro sobre
mtodos de evangelizacin. Tambin public Evangelizacin
Pblica1 (1939), que se convirti en el libro de texto estndar
sobre evangelismo en los colegios adventistas en la dcada de
1940. Shuler se mantuvo activo como evangelista en grandes
campaas urbanas hasta 1950, y dej la bandera en otros
hombres al iniciar la dcada en la que explot el evangelismo
pblico adventista2.
Rememorando sus inicios declar que fue ordenado
como anciano de la iglesia en 1905 en Farmington, Illinois,
cuando tena 18 aos de edad3. Comenz a predicar en los
servicios de la maana del sbado y llev a cabo los servicios
evangelsticos de los domingos por la noche para el pblico en
general.
1

John Lewis Shuler, El evangelismo publico: su aproximacin y sus


problemas (Departamento de Educacin de la Divisin Interamericana, 1963).
2
Laura Lee Vance, Seventh-Day Adventism in Crisis: Gender and
Sectarian Change in an Emerging Religion (University of Illinois Press,
1999).,104.
3
Daniel R. Guild, The Life and Work of J. L. Shuler, Ministry
Magazine, accedido 12 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1972/10/the-life-and-work-of-j.-l.-shuler.

77

GENTE DE LA PALABRA

An con 85 aos cuando diriga una serie de nueve


sermones de decisiones en la iglesia de Paradise Valley, National
City, California. En ese momento cumpla sesenta y siete aos
como predicador.
Ocurre que comenz a predicar siendo un jovencito de
17. Sus primeros sermones fueron presentados en la mina de
carbn donde trabajaba. Los mineros paraban al medioda para
comer. John sola comer un poco antes del medioda para
predicar a sus compaeros mientras almorzaban, con un barril
de plvora vaco sirviendo de plpito.
No haba tenido ningn tipo de formacin sobre cmo
predicar. Cuando decidi hacerlo pas una semana entera
estudiando cada materia doctrinal. Entonces organiz sus
conclusiones como le pareci mejor antes de su primera
conferencia el domingo por la noche.
El presidente de la asociacin, habindose enterado de
lo que estaba haciendo en la iglesia lo invit a una campaa en
durante el verano. Shuler respondi que no estaba calificado
para dicho trabajo, y rechaz la invitacin. Pero al ser invitado
de nuevo el siguiente verano respondi que s. As fue que el 31
de agosto de 1909, recibi una licencia para predicar de parte de
la Conferencia del Sur de Illinois.
Trabajando en la mina de carbn ganaba $1 la hora.
Cuando empez a predicar para la conferencia, el Comit fij su
salario en $ 5 a la semana. Pero Shuler estaba feliz de todas
maneras. Esto era mucho ms de lo que los pioneros adventistas
reciban. Pidi al presidente que le descontara el diezmo como
para no tentarse de tocar esta parte, ya que ganaba tan poco. Y
dio testimonio de que Dios ha cumplido Malaquas 3:10 en su
78

GENTE DE LA PALABRA

vida.
En agosto de 1912 fue ordenado al ministerio en una
reunin celebrada en un campamento en Tennessee, donde se
haba trasladado, conmovido por lo que dijo Ellen G. White
sobre la necesidad de obreros en el Sur. All predic de 1911 a
1939, cuando acept el llamado del Seminario de Washington.
Su tiempo en el Seminario marc el mayor desarrollo de
su carrera. Lo llev a desarrollar tres cursos de enseanza en el
Seminario: un curso de crdito de posgrado de dos horas en
mtodos de evangelizacin, un curso de una hora en
evangelismo pastoral, y un curso de dos horas en la obtencin
de decisiones.
Las grandes campaas de seis meses que haca con
estudiantes del seminario lo ayudaron a ampliar y mejorar sus
mtodos. Este fue el pinculo de su carrera. Mientras ayudaba a
cientos de personas revisaba y mejora sus mtodos, sermones, y
tcnicas. Ayudar a los jvenes ministros fue la gran alegra de su
alma.
Una de sus hazaas tuvo lugar durante una campaa en
el Templo Masnico de Detroit. En la decimotercera noche del
domingo present una conferencia sobre la marca de la bestia.
Al cierre invit a los no adventistas a mantener el sbado como
el da de reposo, y 250 no adventistas se adelantaron, tres de los
cuales se convirtieron en ministros adventistas.
Sobre los ciclos breves de veintids o veinticinco
reuniones opinaba que encajaban mejor en el ritmo de tiempos
ms rpidos, pero no podan igualar a la minuciosidad de las
largas campaas.
79

GENTE DE LA PALABRA

Shuler declaraba que en las largas campaas de antao


no aceleraban la preparacin de los candidatos al bautismo. No
creo que esta velocidad haga bien a nuestra causa. Es mejor
construir ms lenta pero slidamente. Las cosas fuertes en la
naturaleza no son el producto de un crecimiento rpido. La
historia de la victoria de Geden nos dice que la calidad es ms
deseable que la cantidad.

Walter Schubert, Innovador y Adaptador


Otro de los hombres que marcaron una era fue Walter
Schubert, uno de los evangelizadores ms prominentes del
mundo adventista1.Esta distincin se debe a sus brillantes ideas
innovadoras y a su fuerza de pionero. Marc el inicio de una
nueva era en la evangelizacin en Sudamrica, Interamrica, y
ms all, porque adapt el mensaje adventista a la cultura de las
naciones catlicas de Amrica Latina2.
Schubert naci en Bremen, Alemania, el 8 de diciembre
de 1896. Fue el mayor de cuatro hermanos. Su padre, George,
fue pastor, administrador y evangelista en Europa y luego en
Estados Unidos, donde fue secretario de la Asociacin General.
La madre de Walter emigr de joven a Estados Unidos, donde
conoci las doctrinas adventistas y las acept. Con el tiempo fue
enviada a Alemania como instructora bblica, y conoci all a
George.

Daniel Plenc, ed., Misioneros fundacionales del Adventismo


sudamericano (Libertador San Martn, Entre Ros, Argentina: Universidad
Adventista del Plata Editorial, 2012).,210-229.
2
Bull y Lockhart, Seeking a Sanctuary.,144.

80

GENTE DE LA PALABRA

El hogar de George Schubert fue un lugar donde se


practic el afecto y el amor entre padres e hijos. Los padres
tuvieron un firme inters en criar a sus hijos en la fe cristiana y
por ello organizaban reuniones diarias de adoracin donde
relataban a sus hijos historias bblicas y de misioneros. Estas
historias impresionaron la mente de Walter cuando nio, y
creci con la ambicin de ser un misionero en frica.
En el hogar de los Schubert, los padres se preocuparon
por ensear el respeto por el otro, el orden, la cortesa y la
amabilidad. La msica tambin era parte de la vida familiar.
Walter estudi piano y violn. En el hogar de los Schubert cada
miembro tena una parte activa que desempear en forma
responsable segn la tarea que se le haba asignado. A Walter se
le asign la limpieza de los zapatos durante los viernes de tarde.
Pero el objetivo especfico de los padres fue que sus hijos
aprendieran modelos de vida basados en las enseanzas de la
Biblia.6
Despus de realizar sus estudios secundarios en
Alemania, Walter asisti al Colegio Newbold, en Inglaterra.
Ante la inminencia de la Primera Guerra Mundial, los Schubert
decidieron enviar a Walter a la Argentina junto con un amigo
adventista que haba llegado de visita y regresaba nuevamente a
ese pas.
Luego de trabajar en diferentes empleos, una voz pareci
decirle que fuera a la oficina de correo pues haba all una carta
para l. Pens que eso era imposible, pues nadie conoca su
paradero. Pero para calmar su conciencia fue y se encontr con
que realmente haba un cheque por $ 35,00 para l enviado por
Ernesto Roscher, un adventista del sptimo da, residente en
81

GENTE DE LA PALABRA

Crespo, provincia de Entre Ros. ste no slo le envi dinero


sino que le ofreci un buen trabajo.
Desde 1916 y durante dos aos, Walter fue empleado
como maestro en la escuela adventista de Segu, Entre Ros, y
trabaj corno colportor durante los veranos. A fines de 1917
viaj a Chile, pues haba sido llamado a trabajar, a inicios de
1918, como ayudante de oficina y contador en la Asociacin all.
El 7 de marzo de 1921, cuando contaba con cerca de 25 aos, se
cas con Amera Balada, con quien tuvieron una hija.
Aunque de nio Walter Schubert soaba con ser
misionero en frica, las circunstancias de la vida lo trajeron al
sur del continente americano. En este continente inici un largo
camino que lo llev desde los inicios ms humildes como
maestro de escuela hasta entusiasmar a muchos lderes y
miembros de iglesia en la obra evangelizadora, desarrollando sus
actividades como pastor de iglesia, presidente de asociaciones,
director de departamentos de unin y divisin, y culminando su
fructfero ministerio como director asociado de la Asociacin
Ministerial de la Asociacin General de los Adventistas.
En Chile se encargaba del control de la venta de libros y
mantena correspondencia con los colportores. Los sueos de
Walter como misionero incluan predicar y compartir
activamente el evangelio. Por eso, coment con sus jefes este
anhelo, y aunque no fue considerada su peticin pues se
pensaba que su problema de tartamudez era un impedimento,
continu participando activamente como miembro laico.
Su fiel trabajo hizo que en ocasin del 13o Congreso
Anual de la Asociacin Chilena, realizado el 16 de marzo de
1919, fuera escogido como secretario del Departamento de Obra
82

GENTE DE LA PALABRA

Misionera de Iglesia y de los Jvenes Misioneros Voluntarios.


Durante otra reunin anual para las iglesias del sur de Chile,
celebrada en Pitrufqun, del 18 al 23 de diciembre de 1919, el
pastor Roscoe Baer inform que Walter Schubert trabaj con
entusiasmo y evidenciaba que su corazn estaba en la tarea de
promover la difusin del evangelio. Durante 1920, R. Baer,
inform que Walter Schubert dedicaba la mayor parte de su
tiempo a esto y que ese departamento se estaba convirtiendo en
uno de los ms importantes del campo.
Walter Schubert dirigi las reuniones para los jvenes
durante la sesin anual de la Asociacin Chilena de 1923. Ese
ao recibi un llamado para trabajar en otro lugar, pero el
presidente de la Asociacin de Chile, para no perder su ayuda,
le ofreci trabajar como pastor de la iglesia de Valparaso, Chile.
En realidad, se pens que no tendra xito en esa labor pues
Schubert evidenciaba ciertos problemas de tartamudeo. Sin
embargo, en lugar de ser un impedimento, esto se transform en
un rasgo atractivo de su personalidad. Ese fue el momento que
Walter Schubert haba estado esperando por tanto tiempo,
brindar sus servicios como pastor y evangelizador. Y sus xitos
en Valparaso fueron la muestra de lo que vendra despus1.
Durante 1924, la obra realizada por un colportor dio
frutos en Via del Mar, Chile, y el pastor Schubert comenz
reuniones de evangelizacin en ese lugar. En 1925, fue
ordenado al ministerio pastoral en la localidad de Puiggari,
provincia de Entre Ros, Argentina.

Floyd Greenleaf, The Seventh-Day Adventist Church in Latin America


and the Caribbean (Andrews University Press, 1993).,273.

83

GENTE DE LA PALABRA

Walter Schubert continu trabajando en la obra


evangelizadora. Durante los aos 1927 y 1928 realiz campaas
de evangelizacin en Santiago, Chile. Como resultado, 141
personas aceptaron el mensaje adventista y fueron recibidos
como miembros de la Iglesia Adventista. En esta tarea fue
auxiliado por dos mujeres que trabajaron como instructoras
bblicas, probablemente las jvenes Wheeler y Dnner.
En un informe del ao 1929, Walter Schubert relat los
progresos de la obra evangelizadora en Chile. Particularmente
sus continuos esfuerzos como evangelizador en la ciudad de
Santiago durante los meses de invierno. Su entusiasmo y
dedicacin dieron un nuevo rumbo a su ministerio. En 1930
comenz sus actividades como presidente electo de la Asociacin
de Chile.
El pastor Schubert sala todos los domingos a vender
ejemplares de El Atalaya. Daba el ejemplo porque durante esos
aos exista el lema Seis por miembro". El mismo haca alusin
a que cada miembro de iglesia asumiera el reto de distribuir seis
ejemplares del peridico El Atalaya para difundir las creencias
adventistas.
En 1931 realiz una campaa evangelizadora en la Iglesia
de Alameda, Santiago, donde daba tres charlas semanales. El 26
de diciembre, al finalizar esas reuniones, y como fruto del
esfuerzo de varios feligreses de distintos lugares, se bautizaron 32
personas.
A comienzos de 1932, visit la localidad de Cherquenco,
Chile, donde haba algunos interesados y realiz reuniones de
evangelizacin sin previo aviso junto con el pastor Pidoux. Las
84

GENTE DE LA PALABRA

reuniones estuvieron bien concurridas y los asistentes solicitaron


que las mismas se prolongaran.
C. Haynes, presidente de la Divisin Sudamericana,
deca que "la actividad preeminente de un predicador es
predicar, a pesar del accidente de que pudiera estar ocupando
un puesto ejecutivo". Los presidentes de Asociacin y Misin
tomaron en serio sus consejos. Durante los cinco aos anteriores
a las reuniones de Haynes, la membresa chilena haba crecido a
ms de 400 miembros, haciendo de la Asociacin Chilena el
campo ms grande de la Unin Austral. El pastor Hancock,
presidente de la Asociacin en aquel entonces, atribuye
parcialmente el xito de la iglesia a las condiciones polticas
moderadas y a la mejora en la estabilidad econmica.
Aprovechando esta bonanza Schubert bautiz a 75 personas en
1926. Inmediatamente despus de mitad de ao, en 1927,
complet otra serie con una clase bautismal de 60, y estaba
planificando ms reuniones en Valparaso. Para fin de ao la
congregacin de Santiago era la iglesia hispana ms grande de la
denominacin. Mientras Carlyle Haynes fue presidente de la
Divisin, la tasa bautismal anual de Chile nunca cay por
debajo de los 2001.
Como se ve, el trabajo de Schubert como administrador
no haba disminuido su actividad como evangelista sino que la
potenci. Aunque se deseaba que asumiera el liderazgo en la
Asociacin Bonaerense, finalmente se lo design presidente de
la Asociacin Argentina Central en 1933.
1

Floyd Greenleaf, A Land of Hope: The Growth of the Seventh-Day


Adventist Church in South America (Casa Publicadora Brasileira, 2011).,301.

85

GENTE DE LA PALABRA

Despus de la inauguracin de un nuevo templo en la


ciudad de Rosario, el 17 de junio se inici un ciclo pblico de
evangelizacin que dur tres meses, en el que Schubert colabor
junto con el pastor local, Conrado Aeschlimann. ste, en un
comentario, dijo: "El pastor Schubert ha bombardeado el fuerte
con muy buenos resultados. Sus esfuerzos apuntaron tambin a
incrementar la cantidad de colportores, a quienes vea como
"ganadores de almas.
A partir del 11 de mayo de 1934 comenz a colaborar
con las reuniones de evangelizacin en la Iglesia de Crdoba, y
como fruto en octubre se bautizaron varias personas. Schubert
predic en diecinueve de las conferencias.
Del 16 al 21 de octubre de 1934 se realiz el Congreso
Bienal de la Asociacin Argentina Central, en el cual se
eligieron las autoridades correspondientes al siguiente perodo.
Fue en ocasin de esas reuniones que se solicit que finalmente
Schubert asumiera la presidencia de la Asociacin Bonaerense y
que tambin fuera responsable del rea de evangelizacin de
dicha Asociacin. Del 12 al 16 de diciembre de 1934, particip
del congreso de jvenes de la Asociacin Bonaerense.
Los primeros meses de 1935, lo encontraron
intensamente activo haciendo planes y preparativos para la
evangelizacin de la ciudad ms populosa de la Argentina. Sus
planes apuntaron a iniciar el 7 de abril una campaa de
evangelizacin pblica en la Iglesia de Palermo. Las reuniones
fueron anunciadas por radio, en los principales peridicos y
mediante la distribucin de volantes. Schubert fue el orador, y
cont con el apoyo de varios pastores e instructores bblicos. El
86

GENTE DE LA PALABRA

predicador sola realizar fervientes llamados despus de cada


exposicin.
El 27 de abril de 1935 organiz, junto con el pastor
Walter Murray y el profesor Daniel Hammerly, la nueva Iglesia
de Liniers. A los pocos das, el 4 de mayo, comenz una serie de
reuniones de evangelizacin. La concurrencia fue muy
numerosa. Estas reuniones las dictaba simultneamente con las
de Palermo. La razn de esto fue la necesidad de probar un
nuevo mtodo de presentar el mensaje adventista, y se escogi
como lugar piloto la Iglesia de Liniers. Cmo ocurri? Segn
relata W. E. Murray, una seora adventista llamada
Hermenegilda Di Longhi, descendiente de italianos, tena
muchos familiares a los que deseaba comunicar el mensaje
adventista. Ella los invit a unas reuniones que se realizaron en
la Iglesia de Palermo. Despus de asistir a algunas de ellas, y a
causa de que al comienzo de las reuniones se exhort a los
presentes a aceptar las doctrinas adventistas, estos familiares
dejaron de asistir. La seora Di Longhi habl con el pastor
Schubert y le expres la situacin brevemente, preguntndole
porqu solicitaba a los catlicos que practicaran las creencias
adventistas antes de conocer cules eran.
Adems, le sugiri que condujese las reuniones como si
fueran ponencias acadmicas, eliminando los cantos
congregacionales, las oraciones y las ofrendas. Si necesitaba
dinero, ella poda darlo para apoyar las reuniones.
Esta intervencin de la seora Di Longhi tuvo
consecuencias de importancia histrica. Confirm en alguna
medida lo que ya estaban pensando Schubert y sus colegas. No
87

GENTE DE LA PALABRA

slo habl presentando su propio problema, sino el que exista


en el pensamiento y el corazn de varios otros.
Schubert y quienes trabajaban con l consideraron que
sera muy bueno comenzar las reuniones como si fueran
conferencias. Esto hara que se tuviera confianza en el orador. Se
dieron cuenta de la importancia que tena para los
latinoamericanos el hogar y la unidad familiar. Revisaron incluso las creencias religiosas que se haban practicado por siglos y
llegaron a la conclusin de que, en adelante, tenan que
presentar el mensaje bblico con ms simpata, bondad y
paciencia. Se haba empezado a comprender lo que significaba
para muchos ser adventista viviendo en una cultura y trasfondo
mayoritariamente catlico. Adems, se propusieron los
siguientes objetivos: (1) En lugar de condenar abiertamente las
creencias, haba que presentar las verdades bblicas en forma
sencilla, sincera y dejar los resultados al Espritu de Dios. (2) A
causa de que durante mucho tiempo se haban practicado varias
creencias en forma errada, tenan que dar tiempo a que
maduraran las decisiones en la mente y el corazn de los
interesados. (3) Deban estudiarse nuevos modelos de
predicacin. (4) Deban estudiar el establecimiento de nuevas
relaciones con familiares, amigos y empleadores, en forma
considerada y comprensiva.
La comisin de la Asociacin se reuni para considerar
los nuevos planes y procedimientos. Las decisiones se aplicaron
en las reuniones de la Iglesia de Liniers, en la que Schubert fue
elegido como expositor. El plan piloto incluy: (1) Realizar las
primeras seis reuniones de la campaa de evangelizacin como
lecturas expositivas (ponencias). (2) El orador deba ser
presentado por alguien que se encargara de presidir las
reuniones y anunciar todas las partes del programa. En el caso
88

GENTE DE LA PALABRA

de la Iglesia de Liniers, se escogi al pastor Daniel Hammerly.


(3) La seleccin musical consista en msica clsica en lugar del
canto congregacional. (4) El orador tena autoridad para decidir
cuando era oportuno introducir la prctica de elevar una
plegaria o de juntar ofrendas. (5) Los temas para iniciar las
ponencias tendran que ver con el hogar, el secreto de la
felicidad, el valor de la vida, las relaciones matrimoniales,
etctera1. Todos los ciclos deban contener una presentacin
completa del mensaje adventista.
Al poner en prctica este cambio, Schubert descart las
oraciones de apertura, los himnos y las ofrendas hasta establecer
una relacin con su auditorio, pero a medida que avanzaba con
sus conferencias introduca a sus oyentes en las profecas y otros
aspectos tradicionales de las reuniones religiosas. Estos cambios
demostraron ser efectivos, aunque estuvieran en agudo contraste
con el mtodo adventista tradicional de validar la Biblia
mediante la interpretacin de las profecas de Daniel a fin de
mostrar la intervencin de Dios en la historia, procedimiento
que los ministros haban usado desde el movimiento millerita2.

Walter Schubert, A Public Effort Among Catholics, Ministry


Magazine, accedido 15 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1949/11/a-public-effort-among-catholics. Alberto Timm, Building a
growing church: The South American experience, Ministry Magazine,
accedido 15 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2008/10/building-a-growing-church.html.
2
Richard W. Schwarz, Floyd Greenleaf, y General Conference of
Seventh-Day Adventists Department of Education, Portadores de luz: historia de

89

GENTE DE LA PALABRA

Con el cambio de enfoque las reuniones superaron la


capacidad del saln alquilado. Reciban con aplausos al orador.
Despus de unas pocas noches, Schubert consider oportuno
empezar con la prctica de hacer plegarias y juntar ofrendas
dando explicaciones especficas de su destino. A medida que el
tiempo transcurri, la audiencia fue guiada a estudiar temas con
lecciones bblicas vitales.
Despus de este exitoso trabajo, la seora Di Longhi y su
esposo donaron el terreno donde construir un lugar de
adoracin para los nuevos miembros bautizados. Esto se
concret en 1938. Schubert escribi sobre el progreso de la
difusin de las creencias adventistas y coment que se registr
un aumento significativo en el nmero de interesados que deseaban recibir estudios bblicos y tambin el entusiasmo que
generaron estos nuevos mtodos para esparcir el mensaje
adventista.
Schubert tambin se preocup por proveer edificios de
adoracin adecuados, incluso en el caso de las congregaciones
pequeas. Observ que las congregaciones crecan ms rpido
cuando exista un buen templo.
La gente latinoamericana del tiempo de Schubert no
tena mucha oportunidad de conocer las doctrinas bblicas. La
circulacin de la Biblia no era todava una prctica universal y la
Iglesia Catlica no alentaba su estudio. Schubert, en lugar de
criticar otras creencias, ense y predic las verdades de la Biblia
de modo que sus oyentes estuvieran en condiciones de sacar sus
propias conclusiones. Las personas se convencan de que las
la Iglesia Adventista del Sptimo Da (ACES, Asociacin Casa Editora
Sudamericana, 2002).,541

90

GENTE DE LA PALABRA

verdades bblicas eran el fundamento para el modelo de


creencias y prcticas cristianas. El tiempo era un elemento
importante en el proceso de enseanza-aprendizaje, y por esa
razn, Schubert extenda sus reuniones de evangelizacin por
tres o cuatro meses.
Schubert, aunque hablaba aceptablemente el espaol,
reconoci la necesidad de mejorar su conocimiento. Le daba
importancia a la preparacin intelectual, y por ello tom clases
privadas de idioma, asisti a clases de sociologa, psicologa,
historia, y otras ms en la Universidad de Buenos Aires por el
lapso de tres aos. Hizo todo esto mientras trabajaba tiempo
completo como evangelizador y presidente de la Asociacin
Bonaerense.
Inmediatamente, despus que termin con su campaa
en Liniers, comenz reuniones de reavivamiento en la Iglesia de
Florida, lugar donde se haba comenzado una campaa
evangelizadora a cargo de los pastores Marcelo Fayard y Jos
Ramos. Schubert tambin estaba interesado en la difusin del
mensaje adventista en la ciudad de La Plata. All se haba
iniciado un grupo bajo el liderazgo del pastor Enrique J.
Westphal. Schubert fue comisionado para dictar conferencias en
la campaa de evangelizacin que se realiz desde mediados de
1936 en esa ciudad. Tambin dio inicio a otra campaa de
evangelizacin en la Iglesia de Palermo.
Desde el 14 al 18 de octubre de 1935, particip de las
reuniones del Congreso Anual de la Asociacin Bonaerense. En
esa ocasin haba recibido indicacin mdica de descanso.
Estaba aquejado de intensos dolores, no obstante, colabor en
las reuniones y contribuy a su xito.
91

GENTE DE LA PALABRA

Su forma intensa de trabajar, sin embargo, quebrant su


salud. En 1937, Schubert tuvo que tomarse una licencia de seis
meses para descansar y recuperar sus energas. Para ello viaj a
Estados Unidos junto con su familia. Zarp el 17 de abril y fue
despedido por muchos hermanos que vinieron de diferentes
iglesias de Buenos Aires, quienes entonaron los himnos "Dios os
guarde en su divino amor y Jams se dice adis all en forma
emotiva.
Durante el ao 1939, estuvo participando de varios
congresos regionales organizados en distintos lugares de la
asociacin. Fue una oportunidad para presentar nuevos desafos
a los miembros de iglesia. Hasta ese ao haba tres iglesias en la
Capital Federal: Palermo, Liniers y Villa Urquiza. Schubert
present el plan de organizar otra iglesia en la zona de Parque
Patricios.
Entre el 5 y el 7 de enero inici y colabor con una serie
de conferencias realizadas en la ciudad de Junn, provincia de
Buenos Aires. Despus continu en la ciudad de Pergamino los
domingos y lunes de noche. Los informes de las actividades
evangelizadoras realizadas en la Asociacin Bonaerense
aparecieron en la revista del mismo campo misionero. El 17 de
mayo, visit nuevamente la localidad de Junn para participar en
la inauguracin de un nuevo local de cultos y la nueva aula para
la escuela primaria adventista.
Del 9 al 13 de octubre estuvo organizando el Congreso
Bienal de la Asociacin Bonaerense. Los comentarios sobre este
congreso y el liderazgo de Schubert fueron muy elogiosos. Se
consider a Schubert un lder "eficiente y enrgico". En este
informe consta que bajo su liderazgo en los meses anteriores, se
92

GENTE DE LA PALABRA

haban realizado quince series de reuniones pblicas dictadas


por diferentes pastores. Durante el congreso se realiz un
bautismo de 40 personas, fruto de esos trabajos de difusin del
evangelio. Es notable la manera como durante los pocos aos
que estuvo a cargo, la Asociacin Bonaerense creci en cantidad
de miembros y congregaciones. A fines de 1934, cuando asumi
como presidente de la misma, en la Capital Federal haba slo
una congregacin con edificio propio. Los tatarabuelos y
bisabuelos de este autor eran parte de esa iglesia, junto a otras
familias italianas. Unos cinco aos despus ya haba nueve
iglesias organizadas y cinco grupos en la Capital Federal y sus
alrededores. Esto ocurri tanto por la inspiracin que el pastor
Schubert le imprimi a la tarea, como por el fuerte apoyo que
logr de sus pastores, instructores bblicos y miembros de iglesia.
El sbado 24 de mayo de 1941, Schubert particip de la
dedicacin del templo de Villa Urquiza, Capital Federal.
Durante la reunin, present una historia de la obra adventista
en ese barrio. Tambin tuvo a su cargo el sermn de dedicacin.
Al sbado siguiente, Schubert comenz una serie de
conferencias pblicas en el lugar. Posteriormente, comenz a
funcionar all una escuela.
Del 24 al 31 de octubre, Schubert particip y colabor
en la asamblea de colportaje de la Asociacin Bonaerense.
Seguidamente, del 31 de octubre hasta el 2 de noviembre,
estuvo presente en el congreso de la Asociacin. Durante la
tarde del sbado, en ocasin del bautismo, Schubert organiz
una reunin donde los candidatos dieron su testimonio sobre
cmo haban llegado a conocer el evangelio. Se reconoci a
Schubert como "nuestro entusiasta e inspirador presidente".
93

GENTE DE LA PALABRA

Del 4 al 8 de octubre de 1944, se realiz el congreso


bienal de la Asociacin Bonaerense. Durante dicho congreso
"despus de haber trabajado durante diez aos en forma
incasable al frente de la presidencia, Schubert "se aleja para
desarrollar nuevas actividades". Estas nuevas actividades incluan
iniciar cursos de evangelizacin en el Colegio Adventista del
Plata para los graduandos de la carrera de Teologa. El primero
lo dirigi en la Iglesia de Palermo, Buenos Aires, y dur tres
meses. El propsito era que los alumnos participantes,
ingresaran luego como aspirantes al ministerio. Schubert dict el
curso mencionado desde noviembre a diciembre de 1945.
En ocasin del XLV Congreso de la Asociacin General
de la Iglesia Adventista realizado ese mismo ao, se nombr a
Walter Schubert como director del Departamento Ministerial de
la Divisin Sudamericana, cargo que ocup hasta junio de 1954.
Como evangelizador de la Divisin dirigi reuniones de
evangelizacin en Arequipa, Per, por dos meses 1948. En su
informe de ese ao, Schubert escribi que se llevaron a cabo 158
esfuerzos pblicos en toda la Divisin. En el mismo informe, y
para incentivar la evangelizacin, dijo: El Seor nos orden que
predicramos el Evangelio por todo el mundo. No nos dijo:
"Construid sanatorios", "publicad libros, ni "equipad escuelas",
sino: "Ve, y anuncia el reino de Dios. La predicacin del
Evangelio debe ser el tema que ms preocupe a nuestras juntas y
que ms se destaque en nuestros planes y en nuestro
presupuesto. No desmerezco en forma alguna la obra de los
dems departamentos, pues todos son necesarios; y me gusta
trabajar por todos ellos; pero debemos reconocer que la obra
terminar slo mediante la evangelizacin en gran escala.
94

GENTE DE LA PALABRA

Predic en Mendoza, Argentina, por dos meses y medio


en 1949. El 18 de marzo de 1950 comenz una serie de
conferencias en Valparaso, Chile, y luego en Guayaquil,
Ecuador. Realiz dos ciclos evanglicos en Brasil en 1952, uno
en San Pablo y otro en Ro de Janeiro. Al mismo tiempo dirigi
una escuela evangelizadora para unos 25 pastores y empleados
de la iglesia que colaboraron con l.
En 1953 se encarg de las campaas ms grandes
propuestas hasta entonces en la Divisin. Se realizaron en San
Pablo y Manaos, Brasil, desde el 24 de mayo y hasta el mes de
septiembre. Luego asisti como delegado de la Divisin al
Congreso de la Asociacin General, donde fue elegido Director
adjunto de la Asociacin Ministerial de la iglesia mundial.
Como vimos , en 1947 lleg a ser el primer secretario
ministerial de tiempo completo para la Divisin Sudamericana,
lo que le dio la oportunidad de preparar a otros evangelistas en
los mtodos de evangelismo urbano. El cambio fue
impresionante. Al ao siguiente los ministros de Sudamrica
condujeron 158 series de reuniones evangelizadoras formales.
Mientras que usualmente consideraban cincuenta bautismos
como una culminacin exitosa de una serie de reuniones, los
bautismos de una sola campaa comenzaron a alcanzar
comnmente un centenar
Durante la primera parte de la dcada de 1950 Schubert
aadi otras variaciones a sus mtodos, a veces conduciendo dos
series de reuniones evangelizadoras simultneamente en una
sola ciudad grande al alternar las noches cuando predicaba.
Tambin desarroll equipos evangelizadores incluyendo
personal mdico para dictar conferencias sobre temas de salud.
95

GENTE DE LA PALABRA

En Quito, Ecuador, aadi una transmisin radial diaria a su


programa evangelizador. En muchos casos conduca escuelas
prcticas de evangelismo para otros ministros quienes ms tarde
se independizaban para organizar campaas en busca de
feligreses en centros urbanos. La lista de ciudades grandes donde
predicaron ya sea Schubert o sus colegas inclua casi cada regin
metropolitana grande en la Divisin, pero comunidades
menores de slo 25.000 personas tambin llegaron ser el blanco
del nuevo evangelismo.
Cuando Schubert dej Sudamrica para unirse al
Departamento Ministerial de la Asociacin General en 1954,
haba instilado su ardiente consagracin al evangelismo a una
generacin de evangelistas que llevaron adelante su legado
incluso con mayor intensidad1.
En 1962 apareci un artculo suyo en la revista El
Ministerio Adventista. En dicho artculo hizo un anlisis de la
crisis de esos aos y de las dificultades que se deban enfrentar
para la predicacin del evangelio. La Iglesia Adventista estaba
plantendose muchos desafos y ponindose blancos pero, dijo
Schubert: Debemos recordar que estos blancos de ganancia de
almas pueden alcanzarse en esta terrible crisis nicamente bajo
las circunstancias ms desalentadoras y difciles. Requiere en
primer lugar un ministerio lleno del Espritu, un ministerio que
est dispuesto a soportar dificultades y al mismo tiempo ser
audaz y valiente; un ministerio que no permanezca inactivo
cuando se vea frente a las dificultades y los obstculos, no
importa cun insalvables parezcan. Pero ms que ninguna otra
cosa, requiere un ministerio que tenga pasin y amor por las
1

Ibid.,541

96

GENTE DE LA PALABRA

almas perdidas y sienta que ningn sacrificio es demasiado


grande a fin de ganarlas para Cristo.
Con estas palabras no slo describi lo que la Iglesia
Adventista necesitaba, sino, en cierta medida, resuma los
valores y las directrices que guiaron su propia vida.
Su metodologa para evangelizar logr dos grandes
objetivos, segn lo expres Salim Japas: (i) Abandonar el
enfoque protestante de los ministros norteamericanos que
utilizaban las profecas de Daniel como temas para llegar a la
audiencia. La tcnica que usaron era insuficiente e inapropiada
en el mbito latinoamericano. (2) Idear e introducir una
metodologa que concordara ms con la cultura a la que tena
que dirigir el mensaje. Esto consisti en dar conferencias
basadas bblicamente sobre cuestiones familiares y otros asuntos
sociales. Su concepto base era construir la confianza en la validez
de los consejos bblicos para responder a las inquietudes
personales. Es decir, presentar un enfoque social de abordaje de
las Escrituras antes que proftico. Esto ltimo lo dejaba para el
final.
Schubert comenz a aplicar su mtodo desde 1935, pero
otros lo incorporaron a partir de 1940. Recin cuando fue a
trabajar a la Divisin, en 1947, y le toc preparar a otros
evangelizadores se evidenci un cambio notable. En gran parte
debido a su influencia el crecimiento adventista en Amrica del
Sur se increment rpidamente1.
1

Land, Historical Dictionary of Seventh-Day Adventists.,297. R.A. Wilcox,


Evangelistic Expolsion in South America, Ministry Magazine, accedido 14 de
abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi

97

GENTE DE LA PALABRA

A partir de 1954, Schubert y otros tres evangelistas


sudamericanos, Arturo Schmidt, Carlos Aeschlimann y Salim
Japas, introdujeron el nuevo mtodo evangelizador en
Interamrica. Uno tras otro organizaron campaas de
evangelismo en las ciudades capitales de Cuba, la Repblica
Dominicana, Mxico y Colombia, como tambin en reas
urbanas menores. La poblacin adventista de Mxico se
expandi en ms de 34.000 miembros entre 1950 y 1970.
En Estados Unidos present tcnicas evangelsticas
similares a las que haba en Amrica del Sur. Schubert sugiri
que el evangelista debe ser consciente de que el hombre no est
particularmente interesado en el evangelismo como tal. Pero
como resultado de su indiferencia hacia Dios, sufre de miedo y
ansiedad. Por lo tanto l va a escuchar a alguien que pueda
ayudarle a resolver su ansiedad, inseguridad, complejo de culpa,
ve/1969/06/evangelistic-expolsion-in-south-america. El verdadero padre de
la evangelizacin de Amrica Latina fue Walter Schubert. El reconoci la
necesidad de entender la psicologa bsica de la sociedad catlica. La
metodologa que l y sus colegas desarrollaron todava est en uso hoy en da,
aunque modificado para cumplir con las condiciones actuales. Se pone
nfasis en hacer un impacto total en la ciudad o rea en la que una campaa
se llevar a cabo. Ninguna otra religin es atacada de ninguna manera. La
verdad es su mejor defensa y prueba. Los temas iniciales presentados estn de
acuerdo con las relaciones del hogar y la familia. Los temas doctrinales se
presentan habitualmente a travs de un enfoque de enseanza, de dos a tres
meses. James W. Zackrison, Church Growth In Inter-America, Ministry
Magazine, accedido 15 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1977/09/church-growth-in-inter-america.

98

GENTE DE LA PALABRA

etc. El xito en la evangelizacin, por lo tanto, requiere un


enfoque que enfatice los temas de inters social y psicolgico
definido. Lo que la persona promedio busca es la esperanza, la
paz, el perdn, la felicidad, un mejor nivel de vida, la seguridad y
la confianza, el reconocimiento y el compaerismo1.
Silvia Scholtus concluye en que Walter Schubert sigui
los pasos de su padre George Schubert, pues al igual que l, no
slo fue pastor sino administrador y evangelizador. Su vida
dedicada a la evangelizacin, su corazn entregado a la difusin
del evangelio dio frutos ms all de las expectativas de quienes
en un comienzo slo vieron un posible fracaso en su persona
debido a ciertas limitaciones personales.
Fue todo un modelo de personalidad con alta
motivacin interna. Su persona mostraba coraje, ingenio,
audacia, no se desanimaba frente a las dificultades y obstculos,
y, sin dudas, senta pasin y amor por las personas. Su entrega y
dedicacin eran un aliciente para otros. Se preocupaba por
alentar positivamente a quienes trabajaban junto a l destacando
su esfuerzo. Se dedic a educar y formar a otros. Esto hizo que
su liderazgo fuera apreciado y querido. Podra decirse que sus
lemas personales fueron. (1) No contentarse con lo bueno, sino
buscar lo mejor. (2) No slo decir lo que hay que hacer, sino dar
el ejemplo de cmo hacerlo. Esto se aprecia en las diferentes
actividades que foment siendo el primero en participar.
Numerosos futuros dirigentes se prepararon bajo su liderazgo.
(3) Avanzar y dar todo de s. Schubert coment que su trabajo
tuvo que realizarlo mayormente enfermo; constantemente tuvo
1

Howard B. Weeks, Adventist Evangelism in the Twentieth Century


(Review & Herald Pub. Association, 1969).,259.

99

GENTE DE LA PALABRA

que exigirse, casi contra toda razn, a trabajar. Pero a pesar de


ello, sinti que Dios lo sostuvo.
La tarea evangelizadora de Schubert influy profunda y
definidamente sobre el programa de evangelizacin de una
generacin completa de ministros de varias partes del mundo,
pero particularmente, de los pases que conforman la Divisin
Sudamericana de la Iglesia Adventista.
Su ministerio exitoso se caracteriz por impulsar
simultneamente todas las reas de la IASD: publicaciones
(colportaje), evangelizacin, recoleccin, escuela sabtica, etc. En
resumen, apoy la difusin del evangelio tanto fuera como
dentro de la iglesia.
Su preparacin paulatina en los distintos lugares que le
toc servir, hicieron que, a lo largo de sus aos de servicio en la
Iglesia Adventista oficiara como maestro, oficinista, director de
departamentos, tesorero, presidente de asociacin, secretario
ministerial de divisin y finalmente como asociado ministerial
de la Asociacin General.
Una de las frases inspiradoras de este hombre
consagrado a Dios fue: "Trabajar sin orar, es orgullo; y orar sin
trabajar, es hipocresa. Y, segn lo expres S. Japas: La
metodologa de Schubert no fue perfecta, su personalidad no
fue perfecta, pero su pasin por las almas si lo fue y eso significa
mucho".
Sin temor a equivocarnos podemos decir que en la
evangelizacin hubo un antes y un despus de Schubert. Un
100

GENTE DE LA PALABRA

hombre en el que pocos vean condiciones, aconsejado por un


ama de casa italiana logr torcer el rumbo de la historia de la
iglesia. Dios se vale de instrumentos sencillos.
Un caso similar se dio en el norte del continente
americano, por medio de un muchacho de raza negra y pocas
virtudes aparentes.

La Contribucin de Edward Earl Cleveland


E. E. Cleveland naci en Huntsville, Alabama el 11 de
marzo 1921 y muri en el Hospital Huntsville el 30 de agosto de
2009, tras una enfermedad. Su madre se llam Eunice. Su padre
fue William C., un veterano de la Primera Guerra Mundial,
acept el mensaje adventista como resultado de la lectura del
libro Lecturas Bblicas Para El Hogar.
William fue primer anciano de la iglesia de Chattanooga
durante muchos aos. El presidente de la asociacin se le acerc
con la idea de invitarlo al ministerio, pero William rechaz la
invitacin. Eran los tiempos de la Gran Depresin, y tema no
poder alimentar a su familia en el salario ministerial. Siempre
sinti pesar por rechazar este llamado, pero una vez que sus tres
hijos se convirtieron en pastores crey que el Seor le haba
perdonado. Adems de Edward, los otros hijos de William
sirvieron a la iglesia con distincin, siendo presidentes de
asociaciones.

101

GENTE DE LA PALABRA

Earl se prepar desde una edad temprana, predicando a


una congregacin de rocas en el bosque1. Comenz a predicar a
la edad de nueve aos, sin otra ambicin que la de proclamar el
mensaje del evangelio con tal que al menos una persona
escuchara.
Su padre lo llev a escuchar a los prominentes oradores
negros de la poca, lo cual tuvo un profundo efecto en el nio
Earl. Ms tarde E.E. reconocera que siempre quiso ser un
evangelista, y que su compromiso nunca vacil.
A la edad de 13 aos fue el secretario de la Escuela
Sabtica en su iglesia local en Chattanooga, Tennessee. Pese a
que le aconsejaron que cambiara de carrera, por no verle
cualidades para ser ministro, lleg a ser un renombrado
evangelista2. En el curso de su trabajo viaj extensamente,
visitando ms de 67 pases3, y ciertamente marc una era4. Sus
audiencias eran enormes y extendidas por todo el mundo, por lo
cual personalmente llev a ms de 15.000 personas a aceptar a
Jess como su Salvador y seguirle como Seor.
Earl comenz siendo predicador de sostn propio, ya que
no se le extendi llamado como pastor luego de su graduacin.
1

R. Steven III Norman, Elder Edward Earl Cleveland Memory and


Recognition of a Life of Service, accedido 31 de marzo de 2015,
http://eeclevelandministries.org/life.php.
2
Leonard I. Mullins, Father Father (AuthorHouse, 2004).,93.
3
E. E. Cleveland, Wikipedia, the Free Encyclopedia, 26 de diciembre
de 2014,
http://en.wikipedia.org/w/index.php?title=E._E._Cleveland&oldid=639718
393. Cleveland continu la tradicin de otros esforzados evangelistas
afroamericanos. Douglas Morgan, Lewis C. Sheafe: Apostle to Black America
(Review and Herald Pub Assoc, 2010).,280.
4
Morgan, Lewis C. Sheafe.,438.

102

GENTE DE LA PALABRA

Eran tiempos duros, no tena movilidad y muchas veces el


almuerzo era una pequea bolsa de papas fritas. Perdi tanto
peso que cuando visit a su hermano mayor, Jr., su cuada al
verlo se puso a llorar.
Con el tiempo recibi un llamado y comenz a trabajar
en la Asociacin de Carolina. En 1942 realiz su primera
campaa en carpa, que produjo 83 nuevos conversos. Al ao
siguiente su ciclo fue bendecido con 84 convertidos. Su
capacidad de evangelizacin impresion rpidamente a los
lderes de la iglesia, y fue asignado a hacer exclusivamente
evangelismo. En 1943, comenz un programa de radio, y Celia
su esposa, organiz un coro que cantara en esas audiciones, lo
cual lleg a ser muy popular en la comunidad.
Earl se convirti en el evangelista de la recin formada
Conferencia del Atlntico Sur en 1946. Su notable xito lo llev
a ser el evangelista de la Unin del Sur en 1950 y en 1954
secretario ministerial asociado de la Asociacin General. Ese
mismo ao se llev a cabo una reunin en Montgomery,
Alabama, lo que result en 500 bautismos, una cantidad
inaudita en ese momento.
En 1956, llev a cabo reuniones en el South Side de
Chicago. Aqu otra vez fue bendecido con gran xito,
bautizando 200 almas y rebautizando a 25. La msica se estaba
convirtiendo en una parte importante de las campaas de Earl.
Cuatro jvenes del colegio de Oakwood se unieron a su equipo
y emisiones de radio como el Cuarteto Catedral.
En 1957 fue llamado para dirigir reuniones en Kampala,
103

GENTE DE LA PALABRA

Uganda, donde se produjeron casi 200 bautismos, entre ellos el


hermano del prncipe heredero del pas1.
En 1958, Earl viaj a la capital de Estados Unidos,
donde llev a cabo reuniones en el Capitolio Arena. Aqu
predic cada noche a un pblico multirracial, y al final celebr
el bautismo ms grande de ese tiempo en el territorio de la
Conferencia de Allegheny: un total de 262 almas fueron
bautizadas.
Earl viaj de nuevo a frica, dirigindose a Monrovia,
Liberia, donde se ocup en una cruzada evangelstica junto con
una escuela de campo para los ministros. Aqu, de nuevo, ms
de 100 personas fueron bautizadas, con muchos ms anotados
en la clase bautismal. Earl luego fue a Accra, Ghana, con igual
xito.
Muchos aos antes, cuando era un nio, Earl haba sido
bautizado por el pastor A.B. Story, quien unos aos despus
dej la iglesia. En uno de los extraos giros de la vida, Earl tuvo
el privilegio de rebautizar a quien lo bautizara, hacindolo
retornar al pueblo de Dios.
En 1960, Earl fue elegido para ir a Polonia, detrs de la
Cortina de Hierro. Llev a cabo 13 reuniones pblicas en
Varsovia, lo que result en 50 bautismos. Su itinerario lo llev
tambin a Finlandia, donde predic en varias ciudades antes de
1

R.A. Delafield, Winning Souls in Kenya and Uganda, Ministry


Magazine, accedido 15 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1966/03/winning-souls-in-kenya-and-uganda.

104

GENTE DE LA PALABRA

hacer una parada en Dinamarca y volver a su casa.


Un gran reto se present en 1962. Earl acept una
invitacin para visitar la India. En el otoo de ese ao Earl vol
a Mumbai (Bombay entonces), donde llev a cabo una escuela
de campo a la que asistieron 45 pastores y obreros bblicos1. Por
la noche, se llevaron a cabo reuniones de evangelizacin. Las
leyes locales impidieron grandes reuniones, pero alrededor de
500 estuvieron presentes cada noche. Earl tambin predic en
Rangn, Birmania. Su presencia all tuvo efectos duraderos, ya
que se tradujo en un aumento dramtico en el nmero de
bautismos en los aos venideros.
En 1964, una serie de reuniones llevadas a cabo en St.
Louis cosech 150 bautismos, preparando el escenario para lo
que iba a ser la ms grande reunin evangelstica adventista en
Amrica del Norte.
En el verano de 1965, dos grandes carpas fueron erigidas
de lado a lado en Queens, Long Island. La capacidad total era de
3.000. Earl llevara a cabo reuniones cada noche al mismo
tiempo con una gran escuela de campo a la que asistieron
ministros locales y una clase del Seminario Teolgico
Adventista. El ciclo se combin con un programa de asistencia
social. Un total de 400 personas fueron bautizadas, y una nueva
iglesia fue organizada.

Brian De Alwis, Evangelism in Southern Asia, Ministry Magazine,


accedido 14 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1963/06/evangelism-in-southern-asia.

105

GENTE DE LA PALABRA

En 1968 llev a cabo una cruzada en Nueva Orleans,


Louisiana, que agreg 229 almas a la iglesia. All ense
nuevamente sus mtodos a un grupo de estudiantes durante la
campaa de verano. En 1970, una cruzada en Oakland,
California, dio como resultado 250 bautismos.
Luego de esto Detroit, Michigan, fue el escenario de un
tipo diferente de campaa dirigida hacia el interior de la ciudad.
Las reuniones se celebraron en una sala, y se abri una tienda
durante el da con el nombre de Centro Para Una Vida Mejor.
Desde este lugar, se distribuyeron alimentos y se brind servicio
mdico gratuito y tratamientos dentales. Este innovador
programa se convirti en un modelo para las futuras cruzadas
metropolitanas. Las personas suelen ser ms receptivas a quienes
cuidan de ellas1. No obstante la prioridad adventista siempre ha
sido la evangelizacin pblica, no la obra caritativa2.
Earl se retir de la Asociacin General en 1977. Su
motivacin era preparar una nueva generacin de evangelistas y
estar ms cerca de Celia, quien sufra de artritis paralizante.
Pese a la tristeza de ver fallecer a sus amados, Earl
continu aceptando invitaciones para predicar, incluso en una
serie de cuatro semanas realizada en 2007 en Las Vegas,
teniendo ya aos ochenta y seis aos de edad.
Muchos honores vinieron en sus ltimos aos,
doctorados honoris causa, un libro sobre su vida, pero el mayor,
posiblemente, fue el establecimiento del Centro de Liderazgo
1

Knight, A Brief History of Seventh-Day Adventists.,150.


Morgan, Adventism and the American Republic.,165.

106

GENTE DE LA PALABRA

Bradford-Cleveland-Brooks de la Universidad de Oakwood.


El 30 de agosto de 2009, el viaje de Earl por esta vida
lleg a su fin. Muri lleno de fe y seguro en la esperanza de la
resurreccin.
Este hombre notable en 1954, a la joven edad de 33, fue
elegido como secretario ministerial asociado de la Asociacin
General, en la que sirvi a la iglesia mundial durante 23 aos
(ms de la mitad de su carrera), siendo el primer ministro
afroamericano elegido para un departamento de la iglesia
mundial1.
Se cas con Celia Marie Abney Cleveland, hija de
pastor, el 29 de mayo de 1943 en Meridian, Mississippi y la
unin dur 60 aos hasta la muerte de ella en 2003. Tuvieron
un hijo, Clifford Earl Cleveland.
Si los masivos esfuerzos de evangelizacin pblica eran su
prioridad profesional, el ministerio en equipo con su esposa,
Celia, era su pasin. Desde el inicio de su matrimonio en 1943,
Earl y Celia Abney Cleveland trabajaron juntos como equipo. A
lo largo de su carrera se la vera a Celia tocar el piano, dirigir
coros, y coordinando instructores bblicos en sus programas de
evangelizacin. Celia afirm pblicamente su ministerio en todo
lugar donde su esposo predicaba.
Obtuvo tres doctorados, dos de ellos honoris causa. Se
hizo especialmente conocido por sus cruzadas evangelsticas en
1

Roy Allan Anderson, The Holy Spirit Moved Among Us, Ministry
Magazine, accedido 15 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1954/08/editorial. Cleveland fue designado como asociado junto a
Walter Schubert.

107

GENTE DE LA PALABRA

las grandes ciudades de todo el mundo, entre ellas Chicago.


Nueva York, Puerto Espaa, Varsovia, Johannesburgo,
Melbourne y Sydney1.
Cuando no estaba predicando, se lo poda encontrar
desafiando a cualquiera en un partido de ping pong. Su nica
condicin para jugar era que aquel a quien venciera asistiera a
sus reuniones de campaa. As muchos fueron a escucharlo y se
terminaron bautizando.
Predicando en Montgomery su carpa recibi dos
visitantes destacados: Ralph Abernathy, pastor de la
congregacin negra ms grande en la ciudad y Martin Luther
King, Jr., quien cancel sus vacaciones porque los adventistas
estaban robando sus ovejas. King le dijo a Cleveland: "Se me
inform que un Billy Graham negro estaba predicando el
Evangelio, pero todo lo que o fue" la Ley, la Ley y la Ley.
Cleveland, inmutable por el discurso teolgico, respondi;
"Usted debe haber llegado tarde porque todo lo que prediqu
fue 'el Seor, el Seor, y el Seor'"2.
En 1962, el pastor Cleveland, ya secretario asociado de
la Asociacin Ministerial de la Asociacin General, dirigi una
campaa evangelstica con escuela de campo incluida en Los
ngeles. Despus de cuatro meses se aadieron 319 nuevos
conversos a la iglesia.

Land, Historical Dictionary of Seventh-Day Adventists.,75.


Ciro Sepulveda, 1954, Edward Earl Cleveland in Montgomery,
Adventist History Library, accedido 7 de abril de 2015,
https://adventisthistory.wordpress.com/2009/03/05/1954-edward-earlcleveland-in-montgomery/. Esto tambin es un juego de palabras ya que ley y
Seor en ingls (law y Lord) suenan parecido.
2

108

GENTE DE LA PALABRA

En 1965 Cleveland, en asociacin con 13 pastores y un


nmero igual de instructores bblicos, llev a cabo una campaa
de cuatro meses en dos carpas contiguas en Long Island, con
una asistencia que fue de 1400 a 3200 personas. En esta serie los
conversos totalizaron 458, posiblemente, el mayor nmero en
una campaa en Norteamrica desde 19401.
Una de los ms notables ciclos de conferencias que
dictara Cleveland se desarroll en 1967. Esta campaa
emblemtica merece un apartado especial.

La Notable Campaa en Trinidad


E.E. Cleveland, en ese momento secretario asociado de
la Asociacin Ministerial mundial, llev de Jamaica a Trinidad
tantos pastores y evangelistas en ciernes como pudo conseguir
para una escuela de campo. Result ser un gran espectculo de
evangelizacin en s mismo, ya que ms de 1.000 personas
salieron cada noche para escucharlo. El sbado 1.500 acudieron
a la Iglesia Adventista en la ciudad espaola, donde Cleveland
estaba hablando, y al da siguiente 6000 abarrotaron la Sala
Nacional de Convenciones en Kingston2.
A pesar de su xito de reclutamiento, varios factores
parecan atentar en contra de la serie de Cleveland en la capital
de Trinidad, Port Spain. En primer lugar, las reuniones
1

Weeks, Adventist Evangelism in the Twentieth Century, 1969.,301.


Para una descripcin completa de la campaa de Trinidad ver
Edward Cleveland, Trinidad Triumph, Ministry Magazine, accedido 7 de
abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1967/02/trinidad-triumph.
2

109

GENTE DE LA PALABRA

evangelsticas anteriores en Trinidad haban obtenido no ms de


70 bautismos por campaa.
En segundo lugar, las reuniones tuvieron lugar en medio
de la temporada de lluvias, de octubre a noviembre. Pero a
pesar de este hecho ni una sola reunin fue suspendida por
precipitacin alguna. Se predicaba seis noches a la semana, y
despus de cuatro semanas, dos veces en el sbado. Se empez a
decir en la isla que "entre el momento en que las reuniones
comienzan y terminan la lluvia no puede caer". Pero la
colaboracin impresionante de la iglesia, la serie bien
promocionada, y el infatigable Cleveland unidos decidieron
convertir toda la isla a Jess.
Durante las primeras etapas del ciclo la oficina de
turismo aconsej a las personas que bajaban de los buques que
la carpa era uno de los principales centros de atraccin de la isla,
dignos de ser visitados. Esto llev a un periodista sueco y su
esposa que estaban visitando Trinidad a sentarse en una de
nuestras reuniones, y qued tan impresionado pidi una
entrevista con Cleveland, la cual se extendi por dos horas,
despus de la conferencia. El tema de esa noche fue "La llave de
la felicidad". No poda entender que alguien considerara que la
verdadera felicidad es posible en esta vida. Este reportero pudo
escuchar el evangelio gracias a la oficina de turismo de la ciudad.
El ltimo sbado de la campaa un trabajador lleg cerca
de la carpa con una gran excavadora, con la intencin de mover
un poco de tierra durante el tiempo de los servicios del sbado.
El motor de la excavadora se poda escuchar por lo menos a dos
cuadras de distancia. Inici su trabajo a las siete en punto. La
escuela sabtica iba a comenzar a las nueve y cuarto. Condujo la
excavadora en un solo viaje, quitando un poco de tierra, y luego
volva a hacer otra pasada cuando de repente hubo una
110

GENTE DE LA PALABRA

explosin en el motor. Dios debe haber tenido una


participacin directa en este asunto, alterando los mecanismos
para que el evangelio fuera predicado sin obstculos.
Una de las personas que se bautizaron era el ama de
llaves del obispo catlico de Trinidad, encargada de todas sus
comidas y las tareas de su casa. Ella tom su decisin la noche
previa al primer bautismo, pero se hallaba perpleja acerca de
cmo darle la noticia al sacerdote. Le aconsejaron que se
bautizara en el segundo bautismo de la semana como para darle
tiempo de informar al obispo de su decisin, y hacer planes para
su nuevo trabajo.
El siguiente domingo por la maana inform al obispo
de su decisin. Sus palabras fueron, "asegrese de pedir comida
suficiente para el resto de la semana, y que Dios la bendiga." La
dama se bautiz en el segundo bautismo, feliz en el Seor. De
pie en frente de la carpa la noche despus de su bautismo, ya sin
trabajo, preguntndose qu le deparara el futuro, un automvil
grande estacion en frente de la carpa y una mujer europea baj
delante de ella y le pregunt si saba de alguien entre el
numeroso pblico que pudiera trabajar en su casa. Nuestra
hermana inmediatamente acept el trabajo ella misma, con el
sbado libre.
Tambin se bautiz la hermana de la secretaria del
primer ministro, y un amigo cercano de ella. Estas personas de
los ms altos estratos de la sociedad de Trinidad y Tobago,
vivan en casas hermosas, una de ellas con tres autos en el
garage.
Cierto da una madre se acerc desesperada. Su
problema era que tena un hijo de 22 aos de edad que estaba
endemoniado. Dorma de da y gritaba de noche, amenazando
111

GENTE DE LA PALABRA

con matar a todos los que vivan en la casa. Esto se haba


prolongado durante aos. Lo haban hecho examinar por un
psiquiatra, y se determin que el joven estaba en su sano juicio.
Pero el muchacho no haba sido capaz de ir a la escuela o
mantener un trabajo. Ms tarde se supo que haba caminado
hasta la carpa y de repente se dio la vuelta impedido por un
poder ms fuerte que l, y se alej de la misma. No obstante
deseaba ser libre de este poder maligno.
Lo llevaron a la clase matutina que daba Cleveland a los
obreros de la escuela de evangelismo, y los 46 ministros de la
misma se arrodillaron alrededor de l en la oracin. No hubo
ninguna de las escenas salvajes que normalmente acompaan a
la expulsin de un demonio, pero el joven de all en ms logr
dormir en la noche, obtuvo un trabajo, y asisti a las reuniones.
Otra experiencia notoria se dio con una dama. Treinta
aos atrs ella y una amiga tomaron sus vacaciones en una de las
pequeas islas del Caribe. El anciano de una iglesia adventista
local predic en una campaa laica, y por curiosidad estas dos
mujeres fueron a escuchar su predicacin. Quedaron fascinadas
por las verdades bblicas desplegadas por este hermano, y
despus de cinco semanas de asistir estaban convencidas de que
los adventistas proclamaban la verdad de Dios. Factores diversos
impidieron su plena aceptacin del mensaje entonces, pero
durante treinta aos la semilla de la verdad estuvo latente en el
corazn, hasta germinar en la campaa de Trinidad, donde una
de estas mujeres finalmente se bautiz.
Otro joven de unos 27 aos fue a ver al pastor E.E. en
peligro evidente. Llevaba un ao en conversacin con un poder
espiritual que se comunicaba con l a travs de su esposa
mientras ella dorma. Era una voz diferente a la de ella, y le
despertaba a diferentes horas de la noche, le haca preguntas
112

GENTE DE LA PALABRA

acerca de s mismo, y le daba consejos. En aos anteriores haba


sido un joven muy tumultuoso, pero este poder le dijo que deba
dejar de vivir ese tipo de vida, que deba ser un marido amable
con su esposa y un buen padre para sus hijos. Atribua a esta voz
consejera haber vencido el alcoholismo y ser un hombre
trabajador y estabilizado.
Pero cuando escuch el sermn sobre el espiritismo supo
la verdadera identidad de la voz que le hablaba. Esto ocasion su
visita. Le preguntaron acerca de la naturaleza de los consejos que
le daba, los cuales aparentemente estaban por encima de toda
crtica. Despus de todo, haba corregido su vida, le haba dado
una orientacin positiva en relacin con su familia, etctera. Sin
embargo, si bien el consejo dado era bblicamente inobjetable, el
mtodo era obviamente satnico. El problema era cmo
convencer a este hombre joven de que estaba relacionado con el
enemigo.
La segunda entrevista no tuvo ms xito que la primera,
ya que las revelaciones que se hacan a este joven parecan
irreprochables. Pero en una tercera cita con l se devel el
engao.
El joven trajo una hoja escrita a mquina de una
conversacin mantenida con este poder la noche anterior. En
ella le pregunt (1) "Hay un Dios en el cielo?" La respuesta fue:
"S, lo hay." (2) "Hay tres all, el Padre, el Hijo y el Espritu
Santo?" La respuesta: "S, los hay." (3) "Cul es el nombre del
Padre, del Hijo y del Espritu Santo?" Sin respuesta. (4) "Hay un
cielo y un infierno est ah?" Respuesta: "No hay un cielo y un
infierno." (5) "Cundo los justos van al cielo y los impos al
infierno?" Respuesta: "En la muerte los malos van al infierno
inmediatamente, pero los justos van a un lugar de purificacin y
de all van a entrar en el cielo".
113

GENTE DE LA PALABRA

Esta fue la primera pista sobre la identidad de este poder,


que estaba repitiendo la misma mentira original que inici la
gran rebelin del hombre contra Dios. El joven recibi otro
estudio sobre el espiritismo, se tuvo una oracin con l, y se fue
como el joven rico, triste. Pero la semilla qued sembrada.
En Trinidad, los diaconisas y diconos de las diversas
iglesias alternaban en la oracin intercesora en un sector
determinado de la carpa, cada noche durante el sermn.
Cleveland declar que experiment en su corazn la influencia
renovadora del Espritu Santo noche a noche en la predicacin
de la Palabra, y en ningn momento durante el programa de
once semanas bajo de 2.200 la cantidad de personas que
asistieron. Es ms, la asistencia alcanz su pico en la noche final
con siete mil presentes!
Antes de las reuniones, al preparar el presupuesto, se
estimaba que los ingresos por ofrendas rondaran los $ 2,000. A
la conclusin de la campaa las ofrendas superaron los $ 9.000.
Esto fue indicativo no slo de la bendicin de Dios sino de que
personas pudientes estaban asistiendo a las conferencias.
Hubo 199 catlicos bautizados en la campaa. De las
personas bautizadas, 320 eran mayores de 30 aos de edad.
Ciento veinte y nueve de ellos estaban entre las edades de 21 y
30 aos. Doscientos cincuenta y cinco de ellos estaban entre las
edades de 13 y 20, y 108 estaban entre las edades de 10 y 12. El
primer bautismo fue notable: once autobuses transportaron a los
candidatos a la orilla del agua. El bautismo se celebr en una
gran lnea de playa con instalaciones adecuadas para vestirse. Los
funcionarios del gobierno fueron muy solcitos en la prestacin
de estos servicios para el uso de la iglesia. Despus del culto de
las once hubo un repaso bblico con los candidatos justo antes
114

GENTE DE LA PALABRA

de entrar en los autobuses, y luego esta procesin gigante se


abri camino a travs de la ciudad hacia la preciosa playa donde
esperaban entre ocho y nueve mil espectadores. Dos pastores
organizaron y supervisaron el servicio bautismal. Cuarenta
ministros entraron en el agua, y de a cuarenta candidatos
entraban all, de manera que se bautizaron 480 personas en
menos de dos horas.
Los nmeros hablan por s mismos. En las primeras
cuatro noches miles de personas llegaron a las reuniones, con un
promedio de alrededor de 2.500 a 3.000 por noche en las dos
tiendas de campaa masivos. El segundo domingo por la noche
vio a 4.500 asistentes. Ministros de docenas de pases de la
Divisin Interamericana eran estudiantes de esta escuela de
evangelizacin en tiempo real, sealando los mtodos utilizados
para obtener esos resultados impresionantes. Fue de lejos el ms
grande programa de evangelizacin que se celebrara en Trinidad.
Cuando Cleveland hizo su llamado a guardar el sbado,
1.329 no adventistas respondieron. El primer bautismo vio 480
almas descender a las aguas. El prximo sbado hubo 135
bautismos, y la final del sbado inform 135. En total, se
realizaron 820 bautismos mientras Cleveland estaba en la isla.
Despus de su regreso a los Estados Unidos, ms de 400 ms se
unieron a la Iglesia Adventista bajo la predicacin eficaz de
George H. Rainey, dando como resultado un total de ms de
1.300 nuevos miembros1.
Tres de las escuelas de evangelismo de Cleveland dieron
como fruto 6,945 nuevos miembros en la iglesia; y el Club de los
Centuriones, un programa organizado por Cleveland en 1954 en
1

Weeks, Adventist Evangelism in the Twentieth Century, 1969.,304.

115

GENTE DE LA PALABRA

honor a los ministros que bautizaran cien personas o ms ha


reportado 17.000 miembros aadidos a la iglesia en un ao. Su
influencia se sinti tambin en las aulas de la Universidad de
Andrews y el Oakwood College.
Aport ideas entusiastas y demostr el poder de la
inclusin racial y los peligros mortales de la exclusin y la
discriminacin. El pastor Robert Spangler, declar: "Earl ha
hecho ms que nadie para demostrar la necesidad de la
cooperacin de todos los individuos, especialmente los
procedentes de diferentes orgenes raciales".
Otro ex secretario ministerial Asociacin General, N.R.
Dower, declar: "Cuando instrua a los ministros, saba por
experiencia personal lo que estaba enseando. En un momento
de su ministerio Earl pastore hasta ocho iglesias, predic en un
programa de radio semanal en tres ciudades, atendiendo as
ochocientos estudiantes por correspondencia, a la vez que
realizaba reuniones evangelsticas que duraban de doce a veinte
semanas, seis noches por semana ".
En 1977, al ser trasladado a la Universidad Oakwood
para servir como director del departamento de Misiones de la
Iglesia, Dower seal: "Dondequiera que vaya, Earl inspira a los
hombres con una visin de mayor evangelismo y les ayuda a ver
claramente cmo esta se puede lograr. Su sabidura y previsin,
junto con su cortesa y tacto cristiano, le han permitido desviar
muchas crisis que de otro modo podran haber trado una gran
vergenza y angustia a la causa de Dios".
116

GENTE DE LA PALABRA

A lo largo de su carrera combin la proclamacin


pblica con la tutora de predicadores jvenes que se
convertiran en los futuros evangelistas de la iglesia. Peter Prime,
secretario ministerial asociado de la Asociacin General, fue
influenciado en Trinidad por la notable serie de evangelizacin
realizada all. Declara que la voz de E.E. Cleveland tronaba con
el acompaamiento de su enorme puo en los pobres plpitos y
las gesticulaciones panormicas de sus poderosos brazos.
Fue su mayor virtud su elocuencia inconfundible como
un predicador, sus habilidades magistrales en la presentacin de
las doctrinas de la iglesia, o la naturaleza convincente de su
atractivo personal? Todos ellos deben haber jugado un papel,
pero ms importante, fui testigo de un ejemplo de vida, de un
hombre como Enoc, caminando con su Dios.
Llamado a Predicar
Cleveland declara que uno sabe si ha sido llamado al
ministerio de la predicacin cuando la necesidad de predicar el
evangelio eclipsa y excluye todas las dems profesiones. Desde
nio solo tuve eso en mente. Nunca he querido hacer otra cosa
o ser otra cosa. Por sesenta aos he predicado el evangelio en
todos los continentes excepto en la Antrtida. Hace demasiado
fro all para mi sangre de Alabama!
La predicacin es la funcin suprema de la uncin del
Espritu Santo. Es por la locura de la predicacin que las
personas son persuadidas para entrar en el reino de Dios. La
predicacin es el medio principal por el cual Dios salva a los
hombres y a las mujeres. La Palabra de Dios debe tocar esas
117

GENTE DE LA PALABRA

mentes a travs de la mente del predicador.


Cleveland siempre haca una apelacin cuando
predicaba. Lo haca porque Jess dijo a sus discpulos: "Yo os
har pescadores de hombres". El anzuelo y la carnada que se
lanza al agua estn diseados para capturar el pez. Consideraba
que persuadir a la gente es el objeto principal de la predicacin.
As que es importante hacer un llamamiento, dar una
invitacin. Un incidente confirm en su mente que el objeto de
la predicacin es conseguir decisiones.
Un domingo por la tarde estaba predicando en Chicago.
Haba predicado un sermn duro, y no pensaba que alguno
respondera. As que termin el sermn y se sent sin hacer
ninguna apelacin. Durante la cancin de cierre, un hombre
vino hacia el frente. Respondi a un llamado que no se haba
hecho! Earl decidi ese da que nunca volvera a predicar un
sermn sin hacer una invitacin.
Recuerda tambin que una vez estaba predicando en San
Petersburgo, Florida, donde una de las hermanas de la iglesia en
esa zona se haba casado con un asesino, un hombre muy malo.
Ella haba abandonado la iglesia, pero comenz a asistir a las
reuniones que E.E. estaba llevando a cabo. Un viernes por la
noche se acerc al predicador con lgrimas corriendo por su
rostro. Ella dijo: "Mi marido me dijo que si yo me bautizo, me va
a matar y va a matar a la persona que me bautice. Qu debo
hacer?
Cleveland respondio: "l no me puede matar y no te va a
matar". El prximo fin de semana estaba sentada en la iglesia,
118

GENTE DE LA PALABRA

lista para ser bautizada. Mientras predicaba Earl vio por la


puerta principal de la iglesia que un Chrysler rojo estacionaba
enfrente, y el marido de esta seora estaba en el coche. Ms
tarde supo que haba un arma cargada en el asiento de al lado.
Cleveland saba a qu haba venido, pero continu con la
predicacin. De repente se oyeron sirenas, y una ambulancia se
detuvo junto a su coche. Sacaron al hombre fuera del coche,
pero estaba muerto al llegar al hospital. El hombre que planeaba
asesinar al pastor termin perdiendo su propia vida.
En otra ocasin, predicando en Carolina del Norte, un
hombre vino a la reunin y se sent. Tena una pistola en el
bolsillo y el dedo en el gatillo. Cuatro veces durante el sermn,
el pistolero se movi hacia adelante y luego se movi hacia atrs.
Por ltimo, se volvi hacia el hombre que estaba junto a l y le
dijo: "Cada vez que trato de levantarme a matar a ese hombre,
algo nos separa." Entonces el hombre armado se levant y sali
del auditorio. Al bautizar al hombre que estaba sentado al lado
del hombre armado, comparti su testimonio de lo que haba
visto ese da! Era una guerra espiritual, pero la proteccin del
Todopoderoso estaba sobre m!, dijo Earl1. Continu la
realizacin de reuniones evangelsticas pblicas hasta su ltima
serie en 2006 en Las Vegas, Nevada.
Adems de su predicacin y enseanza, Cleveland fue un
prolfico autor de numerosos artculos y 16 libros.

Derek Morris, Called to preach: an interview with E. E. Cleveland


and Benjamin Reaves, Ministry Magazine, accedido 15 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2006/12/called-to-preach.html.

119

GENTE DE LA PALABRA

En noviembre de 2007, don su vasta coleccin de


manuscritos personales, incluyendo ms de dos mil sermones,
junto con otros documentos, al Centro de Investigacin
Adventista en la Universidad Andrews. Esta valiosa coleccin
constituye un legado duradero. Anticipando el final de su vida y
con el deseo de hacer una contribucin adicional a los
evangelistas en formacin lanz una ltima campaa de
evangelizacin mediante el establecimiento de una carpa
virtual donde sus sermones pueden seguir ganando almas hasta
el regreso de Cristo (www.eeclevelandministries.org). R. Steven
Norman III, que trabaj con diligencia para establecer este sitio
web dice: "el pastor Cleveland no ha depuesto su espada. La ha
pasado a nosotros, sus compaeros de armas, para ayudar a
levantar el estandarte del Prncipe Emanuel".
En homenaje a esta notable vida, el ex presidente de la
iglesia mundial, el pastor Jan Paulsen, dijo que Cleveland
ense a sus estudiantes que para ser un predicador adventista
efectivo primero se debe poseer una "santa audacia." Este
extraordinario hombre de Dios tuvo una santa pasin que
reconoci que no hay lmites para la predicacin. Su coraje y
liderazgo moral influyeron profundamente la Iglesia Adventista
del Sptimo Da en todo el mundo. Pero su legado ms
importante slo se dar a conocer cuando nuestro Seor
regrese1.

James A. Cress, Pastors Pastor: A tribute to E. E. Cleveland,


Ministry Magazine, accedido 13 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2009/11/a-tribute-to-e.-e.-cleveland.

120

GENTE DE LA PALABRA

En resumen, la contribucin de Cleveland ha dado un


nuevo impulso a la evangelizacin mundial en las filas de los
adventistas del sptimo da, y sus talleres de evangelismo han
inspirado a los evangelistas adventistas de todo el mundo a
luchar por una mayor cosecha1. Adems ayud a la iglesia a
superar problemas raciales y abri la puerta del liderazgo a otras
personas de su raza2.
Su funeral tuvo lugar en la iglesia de la Universidad
Oakwood, el 9 de septiembre, 2009. Su sermn de despedida
estuvo a cargo de C.D. Brooks, otro gran evangelista de raza
negra, fundador del ministerio Aliento de Vida, y discpulo de
Cleveland.
Todo comenz en el verano de 1947, cuando Cleveland
tom Greensboro, Carolina del Norte, por sorpresa. Preparando
su arribo, una flota de instructores bblicos satur la comunidad
con literatura y folletos de la campaa.
Brooks nunca haban odo a un hombre hablar como
Cleveland lo hizo una noche de 1947 en la carpa de
Greensboro. Expuso la verdad bblica sin miedo y directamente.
Motivado por lo que escuch, Charles no perdi un solo
servicio de la campaa de dos meses y medio despus de eso. El
poder del Seor comenz a descansar sobre Charles Brooks esa
primera noche, y desde entonces las cosas nunca seran iguales
para l. Aos antes haba sido bautizado, pero ahora se estaba
convirtiendo.
1

Stephen C. Finley y Torin Alexander, African American Religious


Cultures (ABC-CLIO, 2009).,364.
2
Larry G. Murphy, J. Gordon Melton, y Gary L. Ward, Encyclopedia
of African American Religions (Routledge, 2013).,684.

121

GENTE DE LA PALABRA

Una tarde mientras esperaba que llegue la gente a la


carpa Brooks reconoce haber sido llamado por Dios al
ministerio. Dijo sentir una voz que le deca Esto es lo que
quiero que hagas"1.
Al despedir a quien lo inspirara tanto dijo que
"Cleveland era un poderoso guerrero. Pis al enemigo con un
propsito. Abri la guadaa de la verdad en ambos sentidos,
como si fuera una hoja de doble filo. Y el error fue cortado a
mano derecha e izquierda.
Cleveland tena una meta especfica para sus campaas
de doce semanas y cada sermn contribua al desarrollo de ese
objetivo. El objetivo de las primeras tres semanas era crear
buena voluntad. Entre las semanas cuarta y sptima el
adoctrinamiento era el propsito principal.Entre las semanas
octava y novena se dedicaba a asegurar decisiones de bautismo.
Y entre las semanas once y doce destacaba la adhesin a la fe a
travs del bautismo.
Los mtodos y la predicacin de Cleveland tenan como
su cualidad esencial un alto respeto por las normas, valores y
competencias del orador2, el uso de material libre de prcticas
engaosas, y el rechazo por las tcnicas que no se correspondan
con los estndares ticos de juego limpio, la honestidad y la
verdad.
1

Harold L. Lee y Benjamin Baker, C. D.: The Man Behind The Message
(Review and Herald Pub Assoc, 2014). Derek Morris, Preaching the Word:
an interview with evangelist Charles D. Brooks, Ministry Magazine, accedido
8 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2005/04/preaching-the-word.html.
2
Bull y Lockhart, Seeking a Sanctuary.,229.

122

GENTE DE LA PALABRA

Los principios subyacentes a los mtodos de Cleveland


eran tanto espirituales como psicolgicos. Mientras Cleveland
pona ms nfasis en el principio espiritual que el psicolgico,
reconoca el valor complementario de ambos. Los principios
espirituales que destacaba eran (1) la centralidad de Cristo, (2) la
atencin; (3) la motivacin; (4) la sugerencia; y (5) la adaptacin
audiencia.
En cuanto a su metodologa se advierte que (1) su
predicacin se centraba Cristo; (2) sus campaas se prolongaban
durante un perodo de doce semanas; (3) su uso de la msica
evangelstica serva para polarizar, entretener, crear inters, y
proporcionar un ambiente emocional para sus apelaciones; (4)
su uso de la organizacin una a sus compaeros de campaa en
un eficiente equipo que funcionaba de manera suave, y su
programa se ejecutaba sin interrupciones; (5) el uso de eventos
especiales (6) su uso de la delimitacin, que se puede ver en el
recorte de eventos en las Iglesias Adventistas cercanas el tiempo
del ciclo, con el fin de centrar la atencin en su campaa (7) su
uso de la apelacin al solitario que se ilustra ampliamente en su
mtodo de sujecin de las decisiones, la variedad inherente a su
programa, y la emisin radial de sus charlas de radio; (8) su
apelacin al individuo en grupo se ve en sus sermones y en las
sesiones de preguntas y respuestas (9) su apelacin al individuo
en la muchedumbre se expresa particularmente en la utilizacin
de las muchas vas de aproximacin a la mente humana
disponibles a un orador; (10) su uso de decisin era la piedra
angular o recompensa de sus esfuerzos de evangelizacin.
1. En cuanto a la finalidad, los mtodos de Cleveland
ofrecieron un plan bien organizado por el cual el evangelista
123

GENTE DE LA PALABRA

podra comprobar el desarrollo de los objetivos de la campaa


de una semana a otra, y en cada parte del programa.
2. En cuanto a las prcticas ticas, los mtodos de
Cleveland dan nfasis a la integridad de propsito, el respeto a
las normas morales de la persuasin, y la honestidad.
3. En cuanto a los principios espirituales Cristo es el
centro de cada sermn, el tema de cada cancin, y el personaje
exaltado en cada oracin. La Biblia se presenta como la
autntica revelacin de Dios al hombre, y una gua infalible en
materia de crecimiento y conducta cristiana. El Espritu Santo y
su influencia sobre el corazn humano est claramente revelado
como el poder que trae conviccin de pecado, la conversin a
Cristo, y la realidad de Dios en la experiencia humana.
4. En cuanto a los principios psicolgicos subyacentes en
los mtodos de Cleveland, se encontr que Cleveland reconoci
la primaca de la atencin. Dado que las personas son
influenciadas por las cosas que les interesan, Cleveland se
identifica con su pblico mediante la asociacin de sus
pensamientos con aquellos factores que son de inters para su
audiencia, y se vale de la variedad, inters, curiosidad, suspenso,
puntos de inters comn, ilustraciones, demostraciones,
explicaciones, arreglo de ttulos de sermones, y el uso de ayudas
visuales.
Cleveland tambin adapt las tcnicas de a las
circunstancias cambiantes de la audiencia, y esta fue una de las
principales virtudes de su metodologa1.
1

Contrariamente a lo que algunos suponen la adaptabilidad


permanente ha sido una de las mejores virtudes de la evangelizacin pblica

124

GENTE DE LA PALABRA

El mtodo inductivo de razonamiento es predominante


en su lgica. Para dar validez a sus ideas, Cleveland emple
ejemplos, seales, el razonamiento causal, la explicacin y la
comparacin y el contraste. En sus apelaciones apuntaba a las
necesidades y deseos que mueven a la accin. En cuanto a su
estilo, Cleveland haca claras sus ideas a travs del uso de la
definicin, ejemplos, y la simplicidad de estructura de la
oracin. La fuerza se mantena a travs de la repeticin, la
franqueza a travs del uso del pronombre de primera persona, lo
concreto a travs de objetos especficos, y la belleza en el empleo
de figuras retricas.
Su mtodo extemporneo de predicacin le permita
mantener contacto visual con su audiencia. Sus gestos eran
espontneos y graciosos, y manifest su apego emocional a las
ideas expresadas. Su fuerte voz llenaba cada seccin del
auditorio, y la manera de enunciar permita a los que estaban
sentados en las filas de atrs escucharle claramente.
Su programa de capacitacin de colegas lo llev a tres
continentes y 42 pases de todo el mundo. Los testimonios de
los ministros en Amrica y en el extranjero revelan que muchos
recibieron conocimientos sobre evangelismo que revolucionaron
su acercamiento a este arte. Uno de ellos fue Daniel Belvedere.

adventista. W. Shipton, E. Coetzee & R. Takeuchi, Worldviews and Christian


Education (PartridgeIndia, 2013).,37. Stefan Hschele, Christian RemnantAfrican Folk Church: Seventh-Day Adventism in Tanzania, 1903-1980 (BRILL,
2007).,64

125

GENTE DE LA PALABRA

La Influencia de Cleveland en Daniel Belvedere


Cleveland no solo fue mentor de evangelistas
angloparlantes1. Daniel Belvedere, para muchos el ms grande
evangelista adventista nacido en Argentina, reconoce haber sido
muy influenciado por l, por ejemplo, al titular de manera
llamativa sus conferencias2, muchas de las cuales fueron luego
publicadas en el manual 63 Conferencias Pblicas.
La AG prepar una escuela de evangelismo para pastores
de la Divisin Sudamericana, la cual se celebr en Puiggari en
1968. Asistieron cerca de 140 obreros, mitad de las uniones
hispanas, y mitad de las uniones brasileas. Las reuniones
fueron dirigidas por el pastor Cleveland. Aunque no todos
aprovecharon debidamente la enseanza de Earl, Daniel la
absorbi y capitaliz al mximo.
El contacto con el pastor E.E. inculc en Daniel la
conveniencia de presentar el evangelio como un mensaje alegre y
con ttulos atractivos que promovieran el deseo de seguir
asistiendo. Las carpas producan un clima de tertulia creando un
ambiente apto para interactuar con la gente y eso amenizaba las
reuniones. El pastor Cleveland influy en la temtica y en la
forma de presentar los temas de manera informal. Fue una gran
inspiracin para la vida de Daniel, e influy en su estilo para ese
tipo de trabajo en las carpas.
Otras dos ideas de Cleveland que impactaron a Daniel
resultaron fundamentales para reorientar su estrategia
evangelizadora:
1

Donell Sr Morgan, The Call: To Hang Out with a Good God That
Keeps Bad Company (Tate Publishing, 2010).,91.
2
Cleveland siempre hablaba de la necesidad de publicitar a Cristo.
Dorsey, Born to Preach.,170

126

GENTE DE LA PALABRA

1. Realizar las reuniones en carpas.


2. Hacer reuniones 7 das a la semana, sin interrupciones.
La primera de estas ideas, la realizacin de las
conferencias en carpas, result ser una solucin providencial al
problema que haba para conseguir salones, teatros o auditorios.
Por un lado era muy complicado conseguir alquiler por un
perodo extenso de tiempo, por el otro, los sacerdotes catlicos
obstaculizaban la disponibilidad de sitios donde se predicasen
enseanzas diferentes a las mayoritarias. Esto generaba que
buenos talentos del evangelismo emigrasen a otras tierras en
procura de mayores oportunidades. Tal fue el caso de los
pastores Arteaga, Salim Japas y Carlos Aeschlimann.
Cuando Daniel Belvedere escuch a Cleveland, decidi
mandar a fabricar una carpa. Fue el primero en hacerlo en
Argentina. Encontr unos fabricantes en el barrio de Barracas,
en la Capital Federal. La carpa, vale decirlo, no era demasiado
vistosa: verde y con columnas dentro. Sin embargo sirvi para
innovar y experimentar.
Se instal la carpa verde entonces en un terreno cerca del
centro de San Nicols, en el norte de la provincia de Buenos
Aires. All exista ya un grupo de cerca de 20 hermanos que se
reunan en una casa alquilada. Se desarrollaron las reuniones
bien concurridas y por la gracia de Dios se ganaron 50 almas.
Protesta Ante Nuevos Enfoques y Conceptos sobre Evangelismo
Los abordajes evangelizadores ms bien eclesisticos no
eran del todo satisfactorios para algunos evangelistas veteranos.
Estos hombres, con cierta nostalgia, consideraban evangelismo
127

GENTE DE LA PALABRA

"real" al asalto vigoroso a las ciudadelas llenas de errores


teolgicos y sociales. La suya era una visin de personalidades
dinmicas que llevaban el mensaje apocalptico directamente al
pblico en general.
Ya en la dcada de 1960 protestaban enrgicamente
contra lo que consideraban como una disminucin del nfasis
en esta verdadera evangelizacin. Vieron una perversin del
mismo nombre, a travs de su invocacin en apoyo de todo tipo
de programas denominacionales, como en el evangelismo de
escuela sabtica, la evangelizacin en las relaciones pblicas, la
evangelizacin mediante la literatura, el evangelismo mdico, el
evangelismo educativo, etc. Walter L. Schubert, entonces
secretario asociado de la Asociacin Ministerial de la
Conferencia General, declar en 1960 que a menudo se
considera que todo lo que se hace para la obra del Seor, hasta
la limpieza del edificio de la iglesia, es evangelizacin. Se
considera que cualquier tipo de campaa de la iglesia, cualquier
tipo de obras de caridad, es evangelizacin. Estos son medios
para la evangelizacin. Pero la evangelizacin en el sentido puro
de la palabra significa presentar directamente la verdad a una
persona que no la sabe y rogarle que acepte a Jesucristo.
Evangelismo es predicar el evangelio en pblico. Sera bueno si
la palabra evangelismo se pusiera de nuevo en su lugar correcto.
Debe ser revitalizada para que recupere su lugar entre los
ministros y miembros.
E.E. Cleveland, otro secretario asociado de la Asociacin
Ministerial, tambin expres su pesar por lo que l consideraba
la corrupcin del concepto de evangelismo. l declar que en
128

GENTE DE LA PALABRA

cada iglesia hay quienes ministran indirectamente. Pero para ser


justos nadie puede ser llamado evangelistas a menos que desafe
las convenciones de la oficina y haga contacto personal con los
perdidos. El trmino "evangelizacin" en nuestro tiempo pronto
incluir al cuidador en la oficina de la asociacin. Y vamos a
denominar esto como "evangelismo de custodia? Si es as,
debiera concedrsele la ordenacin. En los tiempos apostlicos
un evangelista era quien buscaba a las almas y las capturaba para
Cristo! Dejemos que la historia se repite y la iglesia se sacudir
su modorra
Cleveland vea con alarma una tendencia creciente hacia
la creacin de un pastorado un tanto aislado del evangelismo
pblico, y una degradacin correspondiente del oficio de la
evangelizacin. Deca que esta idea de que el pastor puede ser
pastor sin evangelizar, de ser tolerada, solo puede dar lugar a un
pastorado elitista, dejando el evangelismo como una mera
empresa de los incultos. Que este ferviente lema se escuche por
toda la tierra, "Cada pastor un evangelista, y cada iglesia un
centro de evangelizacin! El trabajo ms difcil del mundo es
persuadir a los pecadores para que sean santos. Los hombres
estn siendo constantemente alejados del bien. Si esta tendencia
contina, los obreros siempre sern pocos. La solucin aqu es a
conceder al ganador de almas todos los privilegios y el estatus
concedido en cualquier actividad de la iglesia1.

Weeks, Adventist Evangelism in the Twentieth Century, 1969.,295,296.

129

GENTE DE LA PALABRA

CONCLUSIN
Algunos sostienen que el evangelismo pblico extenso ha
quedado obsoleto en la era de la posmodernidad, y que el
enfoque clsico debe ser reformulado o reemplazado
completamente por el evangelismo relacional1. Se argumenta
que el evangelismo pblico solamente apela al pblico de menor
nivel intelectual2, o a algunos inmigrantes3.
Si el mundo se mueve hacia lo urbano, hacia all deben
centrarse los mayores esfuerzos de la iglesia. Y la sociedad
urbana, por ser una sociedad masiva, debe ser alcanzada por la
comunicacin masiva. Es impensable que el evangelismo masivo
est ausente del evangelismo urbano. La evangelizacin
enseada en el Nuevo Testamento se especializ en la
1

David Ripley, Help! I Want My Church to Grow: 31 Myth-Busting Ideas


to Make Your Church the Place to Be (Review and Herald Pub Assoc, 2008).,82.
Just as we were: is mass evangelism dead?, Christianity Today 51, n.o 7 (1 de
julio de 2007): 54. El evangelismo pblico an tiene validez como medio de
alcance cristiano. Pero sus limitaciones son reales. Permite romper la inercia
de algunas iglesias, pero no es la panacea de la misin o un sustituto de la
continua evangelizacin de la iglesia local. En pueblos o ciudades
relativamente pequeas, donde prevalece la comunidad, y donde las iglesias y
el clero son resistentes, el evangelismo tiene el poder de la dinamita. En el
lugar correcto, en el momento adecuado, con los hombres y los mtodos
adecuados, con un seguimiento integral centrado en la iglesia, y con la
bendicin del Espritu Santo, la evangelizacin de masa sigue siendo una
forma viable de un ministerio eficaz cuya potencialidades superar su muchas
limitaciones obvias. Michael Cassidy, Limitations of mass evangelism and
its potentialities, International Review of Mission 65, n.o 258 (1 de abril de
1976): 202-15.
2
Jon Paulien, Everlasting Gospel, Ever-Changing World: Introducing Jesus
to a Skeptical Generation (Pacific Press Publishing, 2008).,174.
3
Ronald Lawson, From American Church to Immigrant Church:
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130

GENTE DE LA PALABRA

evangelizacin de masas. El evangelismo masivo debe ser propio


del lugar y contextualizado. El hecho de tener grandes reuniones
no es necesariamente el tipo de evangelismo masivo que ensea
el Nuevo Testamento1.
Adems del imperativo bblico, la realidad demuestra
que los que perseveran en este arte bendito obtienen frutos que
de otra manera no cosecharan. El evangelismo pblico y
personal an debieran combinarse2.
El xito en la evangelizacin tiene mucho que ver con el
entusiasmo con que se la desarrolle. El celo evangelizador
adventista debe crecer ms, especialmente en las zonas
desarrolladas del mundo3. La fama bien ganada de un
evangelismo pblico infatigable4 no puede quedar como una
reliquia del pasado. An hay gente de la palabra, personas que
leen la Biblia queriendo comprenderla, y personas que la
estudian y desean compartirla. Cuando ambas se encuentran se
da un milagro similar al de Hechos 8. Dios seguir uniendo al
que lee y no entiende con el que lee, oye y guarda las palabras de
la profeca, hasta que se complete el pueblo al que vendr a
buscar en su venida.

Dubose, The practice of urban ministry.,518.


Louise C. Kleuser, The Bible Instructor (TEACH Services, Inc.,

2007).
3

Roger L. Dudley, Research Note: Beyond the Ordinary and


Adventist Congregations, Review of Religious Research 48, n.o 1 (septiembre de
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4
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