Hombres Buenos
Hombres Buenos
Hombres Buenos
Huerta de Murcia
Patrimonio Cultural Inmaterial
NDICE
Presentacin
pag. 3
pag. 6
pag. 8
Conclusin
pag.11
Bibliografa
pag. 12
PRESENTACIN
El concepto de patrimonio inmaterial supone la ltima y ms interesante ampliacin de la
nocin de patrimonio, que mucho tiene que ver con la sustitucin del trmino patrimonio
histrico-artstico por la de patrimonio histrico o patrimonio cultural. La consagracin
del concepto de patrimonio inmaterial se debe indudablemente al influjo de las
propuestas referentes a la materia emprendidas por la Organizacin de las Naciones
Unidas para la Educacin, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Hacia mediados de los aos setenta, la UNESCO comenz su labor de valorizacin y
conservacin del patrimonio inmaterial en respuesta a la demanda de medidas de
proteccin de las manifestaciones de la cultura tradicional - desde
la ptica de la
propiedad intelectual y los derechos de autor llevada a cabo distintos Estados miembro
de la comunidad internacional. Es significativa para el caso que nos ocupa, la aprobacin
por la UNESCO en 1972 de la Convencin sobre la Proteccin del Patrimonio Mundial,
Cultural y Natural, sin embargo, dicha convencin, pese a significar un garan avance en la
ampliacin del concepto de patrimonio, limitaba la definicin de patrimonio cultural a
bienes tangibles (monumentos, conjuntos y lugares).
Los primeros pasos en materia de patrimonio inmaterial surgiran del trabajo comn entre
la UNESCO y otra organizacin hermana del sistema de Naciones Unidas, la
Organizacin Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). El encuentro entre ambos
organismos dara lugar en 1982 a la aprobacin de unas Disposiciones Tipo para las
Leyes Nacionales sobre Proteccin de las Expresiones del Folclore contra la Explotacin
Ilcita y otras Acciones Lesivas. Esta convencin hizo posible que la nocin de patrimonio
hasta entonces establecida comenzara a ampliarse, dando pie a nuevas perspectivas de
anlisis del hecho cultural como la vinculacin de la conservacin del patrimonio
inmaterial con la afirmacin de la identidad cultural de los pueblos, su carcter estratgico
para el mantenimiento de la diversidad cultural a escala mundial, la importancia de su
consideracin para un desarrollo social y econmico sostenible, o la insuficiencia de las
normativas vigentes en el sector del patrimonio cultural.
Los nuevos planteamientos empezaran a dar sus frutos en 1989, momento en que la
no eran an lo bastante rotundas. Es por ello que la posicin del patrimonio inmaterial
dentro de la Ley espaola resulta peculiar.
La legistacin espaola excluy los bienes inmateriales respecto del rgimen general de
proteccin establecido en favor de los bienes muebles e inmuebles, no obstante, en el
apartado dedicado al patrimonio etnolgico como patrimonio especial, s se establece un
sistema sui generis de proteccin para los bienes intangibles, basado en la aplicacin de
medidas administrativas. Pero, como ya hemos sealado, este dbil sistema deja
bastante que desear en comparacin con la rotundidad de la legislacin dedicada a la
salvaguardia de los bienes muebles e inmuebles, declarados de Bien de Inters Cultural,
y de los muebles inscritos en el Inventario General.
Es la legislacin desarrollada posteriormente por las Comunidades Autnomas la que en
cierta medida ha venido a mitigar el relativo vaco legal que sufre el patrimonio intangible
espaol, aunque mediante medidas de proteccin dispares y tampoco exentas de crtica.
Sin embargo, pese a esa laguna legal en la que ha permanecido tanto tiempo el
patrimonio cultural inmaterial, no podemos negar que en Espaa, siempre se han
respetado y conservado los fenmenos culturales de esta clase, siendo considerados
como la expresin viva de la tradicin de los pueblos. As pues, podemos destacar el caso
del Misterio de Elche, que fue declarado Monumento Nacional en 1931 por el Estado
Espaol emplendose la legislacin reservada para bienes inmuebles, y que fue
proclamado en 2001 Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial por el Director
General de la UNESCO en la primera convocatoria de esta nueva distincin.
En el presente texto, pretendemos reivindicar el gran valor del bien cultural inmaterial y la
necesidad de su proteccin, volcando nuestro inters concretamente en uno de estos
ejemplos de la cultura inmaterial espaola, El Consejo de los Hombres Buenos de la
Huerta de Murcia, que fue adems proclamado en 2009 como Obra Maestra del
Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad poe la UNESCO. Del mismo modo,
tendremos presente en este texto el caso de otro fenmeno cultural de carcter inmaterial
muy semajante a nuestro principal objeto de estudio, y que tambin ha sido reconocido
como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial por parte de la UNESCO: El Tribunal
de las Aguas de la Vega de Valencia.
En primer lugar, hablaremos de la importante Convencin para la Salvaguardia del
Patrimonio Cultural Inmaterial aprobada por la UNESCO en 2003, un hito en cuanto al
proceso de definicin, proteccin y valorizacin del bien cultural intangible. A continuacin
pasaremos a centrarnos en nuestro principal objeto de estudio, el Consejo de Hombres
Buenos de la Huerta, y su defensa como bien cultural inmaterial.
de
oinvestigacin;
la
aplicacin
de
medidas
jurdicas,
tcnicas,
En la actualidad son trece los artculos que regulan la Justicia del Regado que es el
Consejo, el cual falla y ejecuta las cuestiones de hecho y las demandas presentadas por
los regantes, corrige abusos, penaliza infracciones y estipula las indemnizaciones que los
infractores han de aportat a los damnificados.
Se establece as mismo, que el Consejo ha de estar constituido por un Presidente, un
Secretario y cinco vocales titulares, ms otros cinco suplentes (los dos procuradores
respectivos de las Acequias de Aljufa y Barreras, ms uno de la comunidad de
regantes de Churra Nueva). La eleccin de los procuradores se realiza a travs de
sorteo, y stos slo pueden ejercer su cargo una vez al ao.
El Consejo, tal y como antes hemos sealado, se celebra en audiencia pblica todos los
jueves, en el Saln de Plenos del Ayuntamiento, y falla cada juicio en la sesin de ese da,
o como muy tarde, en la siguiente audiencia. Tal como se en las ordenanzas medievales y
del siglo XIX, las resoluciones del tribunal se emiten de plano, - lo cual quiere decir que
este tribunal no est sujeto a formalidades judiciales -, si no que ha de impartir justicia
breve y sumariamente) y por mayora de votos, y en caso de empate decide el voto de
calidad el Presidente del Consejo.
Las sanciones impuestas por la justicia del Consejo son de naturaleza exclusivamente
monetario y los fallos emitidos tienen un carcter definitivo, firme y ejecutorio.
Destaca el hecho de que las resoluciones del Consejo se cosignan por escrito, y desde la
aprobacin del Reglamento de 1999 estn sometidas a proceso informtico, lo que
manifiesta la compatibilidad entre tradicin y modernidad. As mismo, el carcter
tradicional de este organismo de justicia queda a la vista con el hecho de que sus
integrantes son jueces legos que dictaminan de acuerdo a la costumbre, las ordenanzas y
unas frmulas antiguas que, no obstante, han demostrado su eficacia a lo largo de los
tiempos.
Declaracin del Consejo de Hombres Buenos de la Huerta de Murcia como
Patrimonio Inmaterial de la Humanidad
El hecho de que en definitiva los dictmenes del Consejo de Hombres Buenos de la
Huerta de Murcia sean inapelables consagran a este histrico rgano de administracin
de justicia como un tribunal de riego consuetudinario, tradicional, popular y peculiar, que
ha sobrevivido excepcionalmente hasta nuestros das demostrando su eficacia a lo largo
de los tiempos. Como tribunal supremo de justicia en la Huerta de Murcia, su prestigio es
notorio y tanto su peso jurdico como su papel histrico estn completamente
CONCLUSIN
La UNESCO lleva desde finales del siglo pasado sentando las bases en la definicin y las
recomendaciones para la salvaguardia del patrimonio inmaterial, no obstante la proteccin
del patrimonio intangible se debe a la conciencia que la soiedad tenemos de esta nocin
relativamente nueva de patrimonio. Es por ello que nuestro concepto de patrimonio
cultural debe superar las nociones simplistas de patrimonio artstico, histrico o
monumental, siendo capaces de otorgar el debido valor al patrimonio etnogrfico, a la
cultura tradicional, al paisaje y territorio, y entenderlos, desde una perspectiva amplia,
como otra obra ms de la historia y de la cultura que ha de conservarse.
BIBLIOGRAFA