Importancia de La Mujer para Dios y para El Hombre

IMPORTANCIA DE LA MUJER PARA DIOS Y PARA EL HOMBRE
GENESIS 2 :18
Y dijo Jehov Dios: No es bueno que el hombre est solo; le har

ayuda idnea para l
De ah la importancia de la mujer para Dios, la define como compaa, ayuda
idnea y apoyo.
En cumplimiento a la palabra de Dios el hombre debe amarla, as como Cristo
am a la iglesia, amarla como a su mismo cuerpo, sustentarla, cuidarla y dejar a
padre y madre para as ser junto a ella una sola carne, recrendose en su amor
siempre, an en la vejez alegrarse con la mujer de su juventud.
PRINCIPIOS Y VALORES DE LA MUJER

La mujer que agrada a Dios debe ser como dice Prov. 31.10-31:
Prudente
Teme a Jehov
Virtuosa
Su marido confa en ella
Laboriosa
Cuida de su familia
Generosa
Buena administradora
Buena negociante
Sabia
Bienaventurada
Alabada por sus hijos y esposo
Hace el bien
MEREDIT DICE LO AZUL
DESEMPEO DE LA MUJER EN LA IGLESIA

La mujer como lo muestra el Antiguo Testamento, fue una creacin especial, sin
embargo, la humanidad se ha encarado de degradar ese papel. En el Nuevo
Testamento en el libro de Lucas se ve la restauracin dada por Jess colocndola
en el lugar de honor que deba ocupar la mujer, teniendo en cuenta tambin que
Jess muri en la cruz por todos y as se complet la restauracin para la mujer.
Al hablar de su desempeo en la iglesia podemos tomar como ejemplo el trabajo
hecho por las mujeres en la iglesia primitiva:
Perseguidas al igual que los hombres pero de igual forma ayudaron a publicar
el evangelio Hch. 8.3
Priscila le ayud a Apolo a tener un conocimiento ms profundo de la verdad
Hch. 18.
Las 4 hijas de Felipe tenan el don de profesa Hch. 21. 9
Rom.16.1-2. nombra a varias mujeres que se destacaron como obreras dentro
de la iglesia entre ellas estaba Febe, diaconisa que trabajaba junto con Pablo para
la expansin del evangelio al igual que Evodia y Sntique Fil. 4. 2-3,
Las mujeres cristianas reciban los mismos dones y milagros que los hombres 1
Cor. 12.14
A travs de toda la biblia podemos ver ejemplos de mujeres que agradaron a Dios
y desempearon un buen papel en la sociedad, siendo prudentes, sabias,
temerosas de Dios y obedientes a su voz, que con su fe marcaron la diferencia;
como tambin otras que no hicieron lo correcto ante los ojos de Dios ni la
sociedad. JESU
LO ROJO
MUJERES QUE AGRADARON A DIOS:

En el caso de las mujeres que agradaron a Dios y que se dejaron usar por l,
rescatamos la prudencia, fe, valor y sabidura de:
Vemos primero en el Antiguo Testamento
1. Eva, madre de todos los vivientes. Y llam Adn el nombre de su mujer, Eva,
por cuanto ella era madre de todos los vivientes. Gen 3.20.
Eva fue el punto y final de la creacin de Dios. Su presencia sealaba la

conclusin de toda la creacin. Fue la encarnacin viviente de la gloria de la
humanidad (1 Corintios 11.7).
En su estado original, incontaminada por ningn mal, libre de cualquier

enfermedad o defecto, preservada de toda imperfeccin, Eva era el arquetipo
perfecto de excelencia femenina. Era magnfica en todo sentido
2. Sara, fue la esposa de Abraham y madre de Isaac. Segn el libro de Gnesis su

nombre original era Sarai pero Dios lo cambi a "Sara" antes de concederle el
milagro de tener un hijo a la edad de 90 aos. Sara era un nombre para mujeres
distinguidas y Sarai significa princesa.
Sara, siendo anciana y estril y deseando que se cumpliese la voluntad de Dios

respecto a la descendencia de Abraham, le incit a tener un hijo con su esclava
Agar pero ms tarde, despus del nacimiento milagroso de su propio hijo Isaac,
expuls a la mujer y a su hijo Ismael.
Sara es la nica mujer en la Biblia a la que Dios habla directamente. Abraham

admiraba su don de profeca y su inteligencia, escuchando todos sus consejos.
3. Ruth. El Libro de Ruth narra la historia de Elimelec, un hombre de Beln de

Jud quien emigr con su familia al pas de Moab. Su esposa era Noem y sus
hijos Quilin y Majln. Al morir Elimelec sus dos hijos se casaron con Orf y con
Rut respectivamente, ambas de Moab.
Aos ms tarde murieron Quilin y Majln, y Noem decidi regresar a Beln de

Jud acompaada por sus dos nueras. Pero Rut decidi quedarse con Noem, por
lealtad hacia ella, a pesar de que sta pidi a ambas que regresaran con sus
familias a Moab.
Debido a la pobreza en que vivan Noem y Rut en Beln, sta se puso a trabajar
en el campo de Booz recogiendo los granos sobrantes de la cosecha. Booz era
uno de los goeles (descendientes de un antepasado comn, quienes se hacan
responsables de la familia, si sta no tena descendencia) de la familia de Elimelec
y, como otro goel no estuvo dispuesto a casarse con Rut ni a hacerse responsable
de la psima situacin en que se encontraban Noem y Rut, ese deber lo acept
Booz, quien ya se haba sentido atrado por la moabita. De ese matrimonio naci
un hijo, Obed, quien ms tarde fue el abuelo del rey David.
As Rut ingresa por sus propios mritos y virtudes en la religin juda, a pesar de
su ascendencia moabita y de adorar a un diferente dios.
4. Ana. Penina siempre molestaba a Ana y la haca sentir mal porque el Seor no
le permita tener hijos.
Un da, despus de comer, Ana se levant calladamente y se fue a orar al

santuario. El sacerdote El estaba all. Ana estaba muy triste y lloraba mucho
mientras oraba al Seor Le hizo una promesa a Dios: Seor, Todopoderoso, mira
lo triste que estoy. Acurdate de m! No me olvides. Si me concedes un hijo, te lo
entregar a ti. Ser un nazareo: no beber vino ni bebidas embriagantes, y nunca
se cortar el cabello.
Elcan tuvo relaciones sexuales con su esposa Ana, y el Seor se acord de Ana.
Ella concibi y para esas fechas al ao siguiente, dio a luz un hijo. Ana le puso por
nombre Samuel, pues dijo: Su nombre es Samuel porque se lo ped al Seor.
Ese ao Elcan fue a Sil con su familia para ofrecer sacrificios y cumplir las
promesas que le haba hecho al Seor. Pero Ana no lo acompa, sino que le dijo:
No ir a Sil hasta que el nio tenga la edad suficiente para comer alimento
slido. Entonces se lo entregar al Seor, ser un nazareo y se quedar en Sil.
Luego Ana entreg el nio al sacerdote El, y le dijo:
Perdn, seor, yo soy la misma mujer que usted vio orar al Seor. Le aseguro
que lo que digo es cierto. Or por este hijo, y el Seor contest mi oracin,
dndomelo. Ahora se lo entrego al Seor, y l le servir toda su vida. Entonces
Ana dej ah al nio y ador al Seor.
Y, en el Nuevo Testamento
5. La profetisa Ana. Lucas, en su Evangelio, cita y recoge el testimonio de los

pocos testigos que consiguieron ver al Mesas en el infante recin nacido: sus
padres, Mara y Jos, los ngeles, los pastores, los magos, Simen y Ana, de la
que dice Luc. 2,36-38 : Estaba tambin all, Ana, profetisa, hija de Fanuel, de la
tribu de Aser, de edad muy avanzada, haba vivido con su marido siete aos desde
su virginidad y era viuda haca ochenta y cuatro aos. Y no se apartaba del
Templo, sirviendo de noche y de da con ayunos y oraciones. Esta, presentndose
en la misma hora, daba gracias a Dios y hablaba del nio a todos los que
esperaban la redencin de Jerusaln
6. Mara Magdalena, de la que el Seor expuls siete demonios y luego, atrada

por la misericordia de Jesucristo, se convirti en una de las mujeres valientes que
asistan a Jess. La primera persona a la que Cristo habl despus de su
resurreccin. Conforme Cristo anunci, all donde se predica el Evangelio se
habla de esta mujer que, con un gran corazn, supo hacer una conversin radical
de su vida.
7. La Mujer samaritana, cuyo nombre no conocemos, aunque era muy conocida en

su ciudad y, despus de su mala vida pasada, se convirti en evangelizadora al
conocer las fuentes de agua viva que Cristo le descubre.
8. Las hermanas Marta y Mara, de la familia de Lzaro en Betania, donde Cristo

encontraba un hogar de amigos en los que poda confiar y un lugar donde
encontrar reposo. Cristo las puso de modelo de cmo se hace compatible el
trabajo y la oracin.
9. Lidia: con un corazn hospitalario facilit la entrada del cristianismo en la

Europa de entonces, al acoger y proteger en su hogar a los discpulos que
necesitaban donde refugiarse. En Hechos 16,13 se narra su conversin. Lidia era
vendedora de prpura, de la ciudad de Tiatira. Se convirti y alberg a Pablo en su
hogar en ese da y posteriormente cuando Pablo sali de la crcel. Luc 16,40
De la misma manera que la Biblia enaltece y exalta a las mujeres, hoy nos unimos
en aplauso de admiracin hacia todas ellas. Por eso, donde quiera que se difunda
el Evangelio, la consideracin legal, social y espiritual de la mujer se eleva.
LAURA LO NEGRO
EL PAPEL DE LA MUJER EN LA SOCIEDAD
El desempeo de la mujer en la sociedad ha tenido grandes cambios, en un

principio la mujer tena el mismo valor que un esclavo, sin embargo, hoy en da el
rol de la mujer ha crecido acorde al desarrollo tecnolgico de la sociedad, ya que
el reto de hacer de este mundo cada vez ms progresista es tarea fundamental
tambin de la mujer.
la mujer es totalmente capaz de lograr con excelencia

sus objetivos y desempear el mejor papel tanto en la
iglesia como en la sociedad, reflejando as cada valor con
que fue creada MEREDIT DICE LO AZUL
MEREDIT DICE LO AZUL

LAURA LO NEGRO
JESU LO ROJO

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IMPORTANCIA DE LA MUJER PARA DIOS Y PARA EL HOMBRE

Y dijo Jehov Dios: No es bueno que el hombre est solo; le har

PRINCIPIOS Y VALORES DE LA MUJER

MEREDIT DICE LO AZUL

DESEMPEO DE LA MUJER EN LA IGLESIA

MUJERES QUE AGRADARON A DIOS:

Eva fue el punto y final de la creacin de Dios. Su presencia sealaba la

En su estado original, incontaminada por ningn mal, libre de cualquier

2. Sara, fue la esposa de Abraham y madre de Isaac. Segn el libro de Gnesis su

Sara, siendo anciana y estril y deseando que se cumpliese la voluntad de Dios

Sara es la nica mujer en la Biblia a la que Dios habla directamente. Abraham

3. Ruth. El Libro de Ruth narra la historia de Elimelec, un hombre de Beln de

Aos ms tarde murieron Quilin y Majln, y Noem decidi regresar a Beln de

Un da, despus de comer, Ana se levant calladamente y se fue a orar al

Luego Ana entreg el nio al sacerdote El, y le dijo:

5. La profetisa Ana. Lucas, en su Evangelio, cita y recoge el testimonio de los

6. Mara Magdalena, de la que el Seor expuls siete demonios y luego, atrada

7. La Mujer samaritana, cuyo nombre no conocemos, aunque era muy conocida en

8. Las hermanas Marta y Mara, de la familia de Lzaro en Betania, donde Cristo

9. Lidia: con un corazn hospitalario facilit la entrada del cristianismo en la

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