Modificacion Conductal en Sala de Clases

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ACTA COLOMBIANA DE PSICOLOGA 12 (1): 67-76, 2009

EFECTOS DE UN PROGRAMA COMBINADO DE TCNICAS DE MODIFICACIN


CONDUCTUAL PARA LA DISMINUCIN DE LA CONDUCTA DISRUPTIVA Y EL
AUMENTO DE LA CONDUCTA PROSOCIAL EN ESCOLARES CHILENOS

EDUARDO CORSI SLIMINNG


UNIVERSIDAD ADOLFO IBEZ, VIA DEL MAR
PAULINA BARRERA MONTES*, CAROLINA FLORES BUSTOS,
XIMENA PERIVANCICH HOYUELOS Y CRISTBAL GUERRA VIO
UNIVERSIDAD DEL MAR, VIA DEL MAR (CHILE)

Recibido, enero 29/2009


Concepto evaluacin, abril 13/2009
Aceptado, mayo 11/2009

Resumen

El objetivo de la presente investigacin fue evaluar la eficacia de un programa de intervencin conductual en la disminucin
de la frecuencia de conductas disruptivas y en el aumento de la frecuencia de conductas prosociales en el contexto escolar.
Con este objetivo se entren a una profesora en el empleo de una serie de tcnicas de modificacin conductual (instrucciones,
alabanza verbal y economa de fichas) para que ella las aplicara a un curso de primer ao de enseanza secundaria que
presentaba serios desajustes conductuales. Se utiliz un diseo de reversin ABAB con seguimiento para evaluar el desempeo
de la profesora en las tcnicas de modificacin conductual enseadas y su efecto en el grupo-curso. Los resultados indican que
la profesora logr aplicar de manera apropiada las tcnicas de modificacin conductual produciendo los cambios deseados en
el comportamiento de los alumnos del curso.
Palabras Clave: conducta disruptiva, conducta prosocial, intervencin en clase, economa de fichas

EFFECTS OF A COMBINED PROGRAM OF BEHAVIOR MODIFICATION TECHNIQUES


FOR DECREASING DISRUPTIVE BEHAVIOR AND INCREASING PROSOCIAL BEHAVIOR
IN CHILEAN SCHOOL CHILDREN

Abstract

The objective of this research was to evaluate the effectiveness of a behavioral intervention program on the reduction of
disruptive behavior, and the increase of prosocial behavior in a classroom context. In order to do so, the class teacher received
training in the use of a series of behavior modification techniques (namely instructions, verbal praise and token economy). After
training the teacher, she implemented the procedures in a first year class of secondary school that presented severe behavioral
problems. A reversal design ABAB was used in order to evaluate the performance of the teacher in the implementation of the
behavioral modification techniques taught and to evaluate the effect of these techniques on the group. Results indicated that
the teacher was able to implement appropriately all the behavior modification techniques. The implemented procedures were
in turn able to generate the desired changes in student behavior during class time.
Key Words: disruptive behavior, prosocial behavior, classroom intervention, token economy.

*
Correspondencia: Instituto Chileno de Terapia Conductual Cognitiva. Calle Oriente 831, Oficina 307, Edificio Olympus, Via del
Mar, Chile. Correo electrnico: pbarreram@hotmail.com. Pagina web:www.terapia-conductual-cognitiva.cl.

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68 EDUARDO SLIMINNG, PAULINA MONTES, CAROLINA BUSTOS, XIMENA HOYUELOS Y CRISTBAL GUERRA

EFEITOS DE UM PROGRAMA COMBINADO DE TCNICAS DE MODIFICAO


DE COMPORTAMENTO PARA REDUZIR O COMPORTAMENTO PERTURBADOR E
AUMENTAR O COMPORTAMENTO PROSOCIAL EM ESCOLARES CHILENOS

Resumo

Esta pesquisa avaliou a eficcia de um programa de interveno comportamental para reduzir a freqncia de comportamentos
perturbadores e aumentar os comportamentos prosociais no contexto escolar. Portanto, uma professora treinada no uso de uma
srie de tcnicas de modificao do comportamento (instrues, louvor verbal e economia de fichas) as aplicou em um curso do
primeiro ano do ensino secundrio que tinha srios desajustes comportamentais. Foi utilizado um desenho de reverso ABAB
com seguimento para avaliar o desempenho da professora nas tcnicas ensinadas de modificao comportamental e seu efeito
no grupo-curso. Os resultados revelam a professora aplicou apropriadamente as tcnicas de modificao comportamental
produzindo os resultados esperados no comportamento dos alunos do curso.
Palavras-chave: comportamento perturbador, comportamento prosocial, interveno na classe, economia de fichas.

INTRODUCCIN ficacin conductual a los alumnos. Se ha incorporado la


figura del profesor ya que diversos autores (Kochender-
Esta investigacin busca evaluar la efectividad de fer-Ladd & Pelletier, 2008; Lorion, 2004) advierten que
un programa de intervencin conductual, posible de ser su comportamiento incide en el mantenimiento de con-
aplicado por el propio profesor, en la disminucin de una ductas disruptivas en los alumnos.
serie de conductas disruptivas y aumento de la frecuencia Adems, se decidi incluir la figura del profesor,
de conductas prosociales en los alumnos de un curso de ya que es sabido que stos son propensos a desgastarse
primer ao de enseanza secundaria de un colegio pbli- laboralmente (Hoffman, Palladino & Barnett, 2007). Este
co de la ciudad de Via del Mar, en Chile, ya que existe desgaste sera generado por la escasez de herramientas
evidencia de que los escolares que presentan conductas para afrontar los problemas conductuales de los alumnos
disruptivas pueden ser tratados mediante el refuerzo de y por la consecuente baja sensacin de autoeficacia pro-
conductas prosociales habitualmente en dficit (Alberto fesional (Miramn, 2007). En esta lnea, Abel y Sewell
& Troutman, 1999; Prez, Fernndez, Rodrguez & De la (1999) indican que el desgaste del docente genera un de-
Barra, 2005). terioro en la relacin con el alumno y una disminucin
Las consecuencias de no intervenir en los desajustes en la calidad de la educacin. Adems, destacan que los
conductuales de escolares estn documentadas en varias cursos difciles y los problemas conductuales de los alum-
investigaciones. Por ejemplo, existe relacin entre los nos son dos de los principales factores de riesgo para el
problemas conductuales en el contexto escolar con el bajo desgaste laboral.
rendimiento acadmico (Lozano & Garca, 2000) y con la De este modo, la presente investigacin pretende ser-
desercin escolar (McClellan & Katz, 1996, 2001, citados vir de ayuda a dos grupos de beneficiarios: a los alumnos,
en Herrero & Pleguezuelos, 2008). Por otro lado, Kellam, que estn en riesgo de desarrollar patrones de conducta
Rebok, Ialongo y Mayer (1994) sealan que las dificulta- disruptiva con todos los efectos ya sealados para su fu-
des en la adaptacin a las exigencias del sistema escolar turo, y a los profesores, que se encuentran propensos al
son predictores de comportamiento violento y consumo desgaste laboral.
de drogas en adultez. Finalmente, las conductas disrupti- Se eligi un programa de orientacin conductual, sus-
vas y agresivas de los nios han demostrado ser predic- tentado en la economa de fichas, debido a que existen
toras de conductas antisociales durante la adolescencia y investigaciones que avalan su uso en la modificacin
de desrdenes psiquitricos en la adultez (De la Barra, del comportamiento en el contexto escolar. Por ejemplo,
Toledo & Rodrguez, 2003; Klomek et al., 2008). Kellam, Mayer, Rebok y Hawkins (1998), aplicando un
El programa aqu propuesto incorpora el entrenamien- programa de tratamiento conductual a nios de primaria,
to a una profesora (docente de la asignatura de matemti- lograron disminuir significativamente sus conductas agre-
cas) para que sea ella quien aplique las tcnicas de modi- sivas y prevenir el desarrollo de conductas de consumo de
PROGRAMA DE MODIFICACIN DE CONDUCTA PARA ESCOLARES 69

tabaco y alcohol, en comparacin con un grupo control curso con mayor frecuencia de conductas disruptivas y
que no recibi la intervencin. Ese programa de interven- que presentara una baja tasa de conductas prosociales.
cin se denomin el juego del buen comportamiento, y El curso estuvo conformado por 38 estudiantes (14
consisti en capacitar a un docente en la entrega de refor- hombres y 24 mujeres). La edad de los estudiantes fluctu
zadores tangibles a los grupos de alumnos que durante la entre los 14 y los 16 aos. El nivel socioeconmico de los
clase hayan emitido una menor frecuencia de conductas estudiantes era medio-bajo.
disruptivas o agresivas. Este tipo de programa emplea un Luego de seleccionado el curso, se procedi a elegir
procedimiento similar al de la economa de fichas y consi- al docente encargado de aplicar el programa de interven-
dera la aplicacin de contingencias a grupos de alumnos y cin. Para ello se consideraron los siguientes criterios: que
no a alumnos en forma individual. Antecedentes similares el docente realizara por lo menos 4 horas acadmicas (180
pueden encontrarse en el trabajo de Prez et al. (2005) minutos) de clases semanales en el curso seleccionado y
quienes, utilizando el mismo procedimiento, reportan re- que estuviera dispuesto a participar de forma voluntaria
sultados beneficiosos en la disminucin de la conducta en la investigacin.
disruptiva de escolares chilenos de primaria. Por su parte, Particip una docente de 35 aos de edad que posea
Ruiz (2005), mediante el entrenamiento a una profesora el titulo de profesora y el grado acadmico de licenciada
en tcnicas de modificacin de conducta similares a las en matemticas. Tena 5 aos de experiencia docente y
ya descritas, logr disminuir la frecuencia de la conduc- trabajaba 38 horas semanales.
ta disruptiva en escolares espaoles, y por ese medio au-
mentar el comportamiento prosocial en los nios. En la Instrumento
misma lnea, Alberto y Troutman (1999) sugieren utilizar El instrumento de medicin utilizado en esta investiga-
intervenciones grupales en poblacin de adolescentes, ya cin fue la observacin conductual con muestreo tempo-
que por sus caractersticas evolutivas tienden a motivarse ral de intervalo parcial, donde cada sesin de observacin
ms cuando estn siendo parte de un grupo. de 44 minutos fue dividida en 22 intervalos de 2 minutos.
La presente investigacin incorpora, adems de la Posteriormente se calcul el porcentaje de intervalos en
economa de fichas, la utilizacin de instrucciones ver- que estuvo presente cada conducta objetivo y se grafic
bales y alabanza verbal de conducta especfica pues han su frecuencia.
demostrado su efectividad en la modificacin del compor- Para asegurar la fiabilidad de las observaciones, se uti-
tamiento en nios (Corsi, Guerra & Plaza, 2007). liz el mtodo de observadores independientes en el 50%
Por ultimo, se opt por realizar la intervencin en el de las sesiones graficadas. En total se obtuvo un 95% de
contexto real, es decir, en el mismo colegio, ya que de confiabilidad interobservadores, lo que es adecuado se-
este modo tiene un mayor efecto positivo y sus resultados gn los criterios de Forehand y Mc. Mahon (1981).
tienden a generalizarse en el tiempo (Alberto & Trout- Adems, hay que destacar que se utiliz un diseo de
man, 1999). caso nico tanto para evaluar los resultados del entrena-
miento a la profesora, como para evaluar los resultados de
la implementacin del programa de modificacin conduc-
MTODO tual en el curso.
Se consider como caso de estudio al grupo-curso
Participantes completo (y no a cada estudiante de forma aislada) debido
Se trabaj en Via del Mar (Chile) con un curso de a que los excesos y dficits conductuales no respondan
primer ao de secundaria y con una profesora (docente a contingencias individuales sino que grupales. Por otro
de matemticas). El mismo colegio gestion el consen- lado, Castro (1982) justifica el uso de grupos como sujeto
timiento de los padres de los jvenes para realizar el es- de diseos de caso nico cuando se desarrollan investiga-
tudio. ciones aplicadas a resolver problemas de grupos de suje-
Se entrevist a distintos agentes educativos con el ob- tos, como es el caso de este estudio.
jeto de identificar cursos con una alta tasa de conductas Dentro de los mltiples diseos de caso nico se opt
disruptivas y una baja tasa de conductas prosociales. Pos- por el diseo reversible doble de tipo ABAB con segui-
teriormente, se realiz una observacin de campo en los miento, donde cada fase A representa la lnea base y
cursos seleccionados y se eligi, de forma intencionada, cada fase B representa la incorporacin de la variable
al curso que finalmente particip de la investigacin. Esta de tratamiento. El objetivo de este tipo de diseo es ase-
eleccin se tom considerando dos criterios: que fuera el gurar que los cambios en la conducta medida se deben a
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la aplicacin de las variables independientes (en este caso cantar, bailar, lanzar papeles, decir groseras y decir
el programa de modificacin conductual) y no a otro tipo sobrenombres de forma ofensiva.
de variables. De esta forma, la validez experimental es - Conductas disruptivas severas o matonaje (mato-
otorgada por el mismo grupo que acta, en distintas fases, neo en Colombia) incluyeron a todo comportamiento
como grupo control y como grupo experimental (Cooper, agresivo que cause dao fsico o amenace a terceros,
Herond & Heward, 2006). como los golpes a otros estudiantes, la sustraccin de
Es necesario sealar que al elegir el diseo ABAB objetos, el dao al mobiliario del establecimiento y en
se tuvieron presentes criterios ticos (Colegio de Psic- los materiales de otros estudiantes.
logos de Chile, 1999) ya que es sabido que una de sus Las conductas prosociales fueron divididas en dos ca-
limitaciones tiene que ver con la necesidad de retornar a tegoras:
una fase de lnea base luego de haber obtenido cambios - Seguimiento de instrucciones: Se incluy toda con-
conductuales en la etapa de intervencin, generando con ducta compatible con el desarrollo adecuado de la cla-
esto un posible perjuicio en los participantes (Cooper et se, especficamente el desarrollar las labores indicadas
al., 2006). Considerando lo anterior, previo al inicio de la por la docente.
intervencin se evaluaron los peligros que podra tener, - Participacin voluntaria en clases: En esta categora
para los participantes, el retorno a lnea base. El resultado se consider el comportamiento proactivo de los estu-
de esta evaluacin sugiri que las conductas disruptivas diantes dirigido a actividades de la clase, tales como
(en frecuencia e intensidad) no presentaban riesgos para preguntar, dar ejemplos y opinar asuntos relacionados
los participantes. De este modo se cumple el criterio pro- con la clase.
puesto por Bellack y Hersen (1989) para justificar el uso En el caso de la profesora las conductas objetivo (eva-
de este tipo de diseo. luadas en dficit) fueron:
- Dar instrucciones de forma adecuada a sus alumnos.
Procedimiento Esto se refiere a dar instrucciones de pie, en forma de
Se ejecutaron las siguientes fases: evaluacin con- afirmacin, en un tono de voz alto (considerando el
ductual, definicin de las conductas objetivo, diseo del numero de alumnos) y describiendo claramente lo que
programa de intervencin, medicin de lnea base, inter- espera de los alumnos.
vencin, retorno a lnea base, retorno a la fase de inter- - Aplicar contingencias de refuerzo (mediante alabanza
vencin y seguimiento. Durante todas ellas se registraron verbal y refuerzo con fichas) y castigo (mediante costo
los datos mediante las tcnicas de observacin conductual de respuesta) de forma adecuada. Esto est referido a
ya descritas. reforzar de manera contingente la conducta prosocial
Definicin de conductas objetivo y diseo del pro- de los alumnos y a castigar de manera contingente la
grama de tratamiento: En funcin de los resultados de la conducta disruptiva de los mismos.
evaluacin conductual tanto de los estudiantes como de la Al capacitar a la profesora en estas conductas se espe-
profesora se definieron las conductas objetivo. r que fuera capaz de modificar las siguientes conductas
En el caso de los estudiantes, las conductas objetivo in- objetivo de sus alumnos:
cluyeron tanto conductas disruptivas (evaluadas en exce- - Aumentar la frecuencia de las conductas prosociales
so) como prosociales (evaluadas en dficit). Las conductas (seguimiento de instrucciones y participacin volunta-
disruptivas fueron organizadas segn su gravedad en: ria).
- Conductas disruptivas leves o fuera de tarea. Esta - Disminuir la frecuencia de las conductas disruptivas
categora incluy toda clase de conductas incompati- (leve, moderada y severa).
bles con la realizacin de actividades acadmicas. Las De esta forma el programa de tratamiento qued esta-
ms frecuentes fueron: no seguir las instrucciones de blecido en dos niveles (vase figura 1): el primero dirigi-
la docente, mirar por la ventana, leer asuntos no rela- do a entrenar a la profesora y el segundo dirigido a lograr
cionados con la clase, consumir alimentos, maquillar- que ella aplicara el programa de tratamiento y por esa va
se y conversar asuntos no relacionados con la clase. lograra los cambios en las conductas de los alumnos.
- Conductas disruptivas moderadas o de payaseo.
Formaron parte de esta categora todas aquellas con- Para entrenar a la profesora se planific el uso de:
ductas que interfirieran con el desarrollo de la clase y - Juego de roles: Mediante la simulacin de instancias
que distrajeran al resto del curso. Las ms frecuentes propias de la clase y de la pauta de interaccin entre pro-
fueron gritar, hacer ruido con la voz o con objetos, fesora y alumnos detectada en la evaluacin conductual.
PROGRAMA DE MODIFICACIN DE CONDUCTA PARA ESCOLARES 71

Figura 1. Diagrama del programa de modificacin conductual para la disminucin de conductas disruptivas e incremento de
conductas prosociales en estudiantes

- Modelado en vivo: en el espacio del juego de roles se - Alabanza verbal de conducta especfica: Que la profe-
planific que los investigadores modelaran las conduc- sora, ya entrenada en este procedimiento, comenzara a
tas a entrenar en la profesora (dar instrucciones adecua- destacar verbalmente las conductas adecuadas de sus
das, aplicar contingencias de refuerzo y castigo de forma alumnos (conducta prosocial) de una manera contin-
adecuada, y utilizar programa de economa de fichas). gente a su ejecucin.
- Ensayo conductual: Luego de que la profesora alcan- - Economa de fichas: Que la profesora comenzara a
zara un nivel de dominio en las conductas entrenadas aplicar un programa de economa de fichas intercam-
se consider la prctica de las mismas en instancias biables por una serie de actividades.
reales de la clase. - Costo de respuesta: Donde los alumnos perderan un
- Moldeamiento: Parte importante del diseo de la in- nmero predeterminado de fichas de manera contin-
tervencin consider que durante el juego de roles y gente a la emisin de una conducta disruptiva por par-
posteriormente en las clases reales se entregara retroa- te de alguno de los integrantes del curso.
limentacin a la docente respecto de su desempeo en Lnea base: Durante esta etapa se observaron y midie-
las conductas entrenadas de tal manera que fuera acer- ron sistemticamente los dficits conductuales detectados
cando su ejecucin a la topografa final deseada. en la profesora y los excesos y dficit en los alumnos. La
- Automodelado: Se consider que una vez que la pro- fase de lnea base inicial se mantuvo por 4 sesiones.
fesora alcanzara un nivel adecuado en su desempeo Implementacin del programa de tratamiento: En un
se realizara un registro audiovisual de la docente rea- inicio la profesora fue entrenada individualmente en una
lizando clases reales con los estudiantes. Se planific sala de clases vaca, es decir en ausencia de los alumnos.
que dichas cintas de video fueran presentadas a la do- Esta etapa se desarroll durante 8 sesiones de 44 minutos1.
cente y sirvieran como material para anlisis y retroa- Luego, cuando la profesora alcanz una ejecucin adecua-
limentacin sobre su desempeo. da de las conductas objetivo (en un 80% de los intervalos)
Luego, para modificar la conducta de los alumnos se se procedi a realizar la aplicacin de las tcnicas en el con-
consider la utilizacin de los siguientes procedimientos: texto real, es decir en la sala de clases con los alumnos.
- Entrega de instrucciones adecuadas: Que la profesora, Al iniciar el segundo nivel de la intervencin, la pro-
previamente entrenada, comenzara a dar las instruc- fesora present el programa de economa de fichas al cur-
ciones de manera clara y en un tono de voz adecuado so como una nueva modalidad de trabajo que pretenda
para el nmero de alumnos. fomentar el buen comportamiento. Para clarificar el fun-

1
Por tratarse de un entrenamiento previo a la ejecucin de las conductas objetivo en el contexto real se opt por no incluir los datos de
estas sesiones en los grficos de resultados.
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cionamiento del programa se explicitaron las conductas variables medidas (entrega de instrucciones y de contin-
deseadas e indeseadas, as como sus respectivos reforza- gencias de reforzamiento y castigo de forma adecuada).
dores y castigos en fichas. Posterior al entrenamiento, se observa que la profesora
Con el objeto de facilitar la comprensin de los alum- aumenta rpidamente su rendimiento, llegando a alcanzar
nos y aumentar su motivacin se introdujeron a la sala una ejecucin satisfactoria superior al 60% de los interva-
de clases 3 paneles informativos (de aproximadamente 90 los en ambas variables.
centmetros cuadrados); un primer panel detallaba los cri- Durante la segunda etapa de lnea base su rendimiento
terios de bonificacin de puntaje y de costo de respuesta; tuvo una baja respecto a las sesiones anteriores. De hecho,
un segundo panel sirvi como medio de muestreo de re- el rendimiento adecuado estuvo por debajo de 30% de los
forzadores intercambiables por cantidades determinadas intervalos de medicin. Luego, al retomar el tratamiento,
de fichas y en un tercer panel se insertaban las fichas que con la segunda fase de intervencin, la profesora rpi-
el curso iba obteniendo por su adecuado comportamiento. damente mejor su desempeo, estabilizndolo sobre el
Esta fase tuvo una duracin de 9 sesiones. 60% de los intervalos durante esa etapa y durante la fase
Retorno a lnea base: Con el objeto de asegurar la va- de seguimiento.
lidez de los resultados, se retir la variable independiente Con respecto a los resultados referidos a la conducta
(programa de intervencin) durante tres sesiones. de los miembros del curso, en la figura 3 se aprecia que las
Segunda fase de Intervencin: Siguiendo con los crite- conductas disruptivas leves y moderadas se encontraban
rios de control experimental propios del diseo reversible, presentes en un gran porcentaje de los intervalos tempo-
se procedi a retomar el tratamiento, es decir, a incluir rales de medicin (sobre el 80% y 40% respectivamen-
nuevamente las variables independientes para evaluar los te) durante la primera fase de lnea base. Respecto a la
efectos que esto genera en las conductas objetivo. La du- conducta disruptiva severa se observa que, pese a estar
racin de esta segunda fase de tratamiento fue de cinco presente en un porcentaje temporal inferior al 30%, se en-
sesiones. contraba con una tendencia al aumento en su frecuencia.
Para asegurar la generalizacin de los resultados, gra- Durante la primera fase de tratamiento los alumnos
dualmente se pas de programas de refuerzo de razn fija comenzaron a disminuir gradualmente la frecuencia de
(RF 1, 2 o 3 en diferentes perodos) a programas refuerzo conductas disruptivas. Posteriormente, en la segunda eta-
de razn variable ms exigentes. pa de lnea base, donde la profesora dej de dar instruc-
Seguimiento y evaluacin del programa de modifica- ciones y aplicar contingencias adecuadamente, los alum-
cin conductual: Finalmente, se realiz la evaluacin del nos empeoraron su rendimiento aumentando la frecuencia
programa de intervencin mediante la medicin de los de emisin de las conductas disruptivas.
cambios conductuales una vez finalizado el tratamiento. Luego, al retomar el tratamiento, los alumnos nue-
El seguimiento fue realizado en dos sesiones a los 15 das vamente mejoraron su desempeo, disminuyendo la fre-
y al mes despus de terminada la segunda fase de inter- cuencia de emisin de los tres tipos de conducta disrupti-
vencin. va medidos. La conducta disruptiva leve se estabiliz en
el 40% de los intervalos, mientras que la conducta dis-
ruptiva moderada lo hizo bajo el 10% de los intervalos.
RESULTADOS Por su parte, la conducta disruptiva severa no se present
durante ninguno de los intervalos de medicin de esta
A continuacin se presentan los resultados de la in- etapa. Estos resultados se mantuvieron durante la fase de
vestigacin. En las figuras 2, 3 y 4 se grafic el desem- seguimiento.
peo de la profesora y de los alumnos en las conductas Por ltimo, la figura 4 indica que el seguimiento de
entrenadas. Cada grafico permite observar el porcentaje instrucciones se presentaba en una frecuencia que no su-
de intervalos de medicin en que las conductas objetivo peraba el 10% de los intervalos de medicin y que la par-
estn presentes en cada una de las sesiones. Adems, cada ticipacin voluntaria se encontraba en descenso durante
grafico diferencia las etapas de lnea base, tratamiento y la lnea base.
seguimiento lo que permite apreciar con claridad los cam- Al comenzar con la intervencin mediada por la pro-
bios conductuales. fesora, los alumnos mejoraron su rendimiento en estas
Tal como se aprecia en la figura 2, la profesora que conductas. La primera fase de intervencin termina con
particip de la investigacin presentaba, durante la prime- un rendimiento adecuado sobre el 70% de los intervalos
ra fase de lnea base, un rendimiento deficiente en las dos de medicin para ambas conductas.
PROGRAMA DE MODIFICACIN DE CONDUCTA PARA ESCOLARES 73

Figura 2. Porcentajes de intervalos de las conductas de la profesora en las diferentes condiciones del estudio.

Figura 3. Porcentajes de intervalos de las conductas disruptivas de los alumnos en las diferentes fases de la
intervencin.

Tal como se esperaba, durante la segunda fase de lnea conductas disruptivas y en el aumento de la frecuencia de
base, los alumnos bajaron la frecuencia de emisin de am- conductas prosociales en estudiantes de secundaria. Para
bas conductas prosociales, pero al retomar la intervencin ello se entren a una docente de matemticas en el uso de
de la profesora, los alumnos nuevamente mejoraron su tcnicas de modificacin conductual (instrucciones, ala-
rendimiento. Este desempeo se mantiene durante la fase banza verbal y economa de fichas).
de seguimiento. Segn lo descrito en el anterior apartado, es posible
sealar que el programa de tratamiento result ser efec-
tivo en lo referido a la posibilidad de entrenar a una pro-
DISCUSIN fesora para que ella se haga cargo de aplicar una serie
de tcnicas de modificacin de conducta en un curso de
En esta investigacin se evala la eficacia de un pro- adolescentes. Los resultados de la investigacin indican
grama de intervencin conductual, susceptible de ser apli- la efectividad de la intervencin ya que la profesora lo-
cado por el profesor, en la disminucin de la frecuencia de gr modificar su comportamiento, y de ese modo, influir
en el cambio de conducta de sus alumnos.
74 EDUARDO SLIMINNG, PAULINA MONTES, CAROLINA BUSTOS, XIMENA HOYUELOS Y CRISTBAL GUERRA

Especficamente, luego de un entrenamiento consisten- Abel y Sewell (1999) y Miramn (2007), no obstante se
te en juego de roles, modelado, ensayo conductual, auto- considera que debiera recibir mayor atencin en futuras
modelado y moldeamiento, la profesora logr mejorar su investigaciones que utilicen mediciones objetivas del des-
desempeo en lo referido a dar instrucciones y aplicar con- gaste y satisfaccin laboral.
tingencias de refuerzo (alabanza verbal y entrega de fichas Con respecto a los alumnos, se observ que adems
contingentemente a la emisin de conductas prosociales), de la mejora en su desempeo comportamental, con los
y de castigo (costo de respuesta) ante la conducta de sus beneficios ya descritos respecto de la prevencin de desa-
alumnos. A su vez, los alumnos mejoraron notoriamente justes en la vida adulta (De la Barra, et al., 2003; Kellam
su comportamiento al interior de la sala de clases, disminu- et al., 1994; Klomek et al., 2008), existieron una serie de
yendo la frecuencia de una serie de conductas disruptivas y ganancias asociadas a la intervencin. Dentro de estas se
aumentando la frecuencia de comportamiento prosocial. destacan:
Es importante sealar que, respaldando lo sealado - La adquisicin de la capacidad de regulacin conduc-
por Kochenderfer-Ladd y Pelletier (2008), Lorion tual entre pares. Especficamente se observ una se-
(2004) y Prez et al. (2005), se observ una relacin di- rie de refuerzos y contingencias de castigo emitidas
recta entre el comportamiento de la profesora y el de los por los propios alumnos una vez que alguno de sus
alumnos ya que, tal como puede observarse en las figu- pares ejecutaba una determinada conducta adecuada
ras de resultados, en la medida en que la profesora iba o disruptiva. Esto se asocia a lo sealado por Alberto
mejorando su desempeo, los alumnos tambin lo hacan. y Troutman (1999) respecto a la utilidad de intervenir
En este sentido se considera pertinente realizar interven- grupalmente con adolescentes.
ciones integrales que incluyan tanto a profesores como - Mejora en el clima grupal dentro del curso. Es impor-
alumnos como forma de intervenir en la pauta de refuerzo tante destacar que muchas de las conductas disruptivas
mutua entre estos dos agentes. observadas se asociaban a las disputas entre dos gru-
Los resultados se suman a los antecedentes previos pos rivales al interior del curso. Este tipo de disputas
(Alberto & Troutman, 1999; Prez et al., 2005) respecto a disminuy a medida en que avanz la intervencin.
la necesidad de intervenir en el contexto natural donde las Como elemento anecdtico se puede comentar que los
conductas meta debern ser ejecutadas. estudiantes privilegiaron el canje de sus fichas por ins-
Adems, se observa una ganancia adicional en la pro- tancias recreativas de interaccin entre los miembros
fesora, asociada a la mayor satisfaccin laboral que dijo del curso (Ej. Convivencia y expresiones artsticas),
experimentar al adquirir herramientas para trabajar de en lugar de actividades de menor contacto social (ej.
forma adecuada. Esta situacin confirma lo sealado por Ver televisin o escuchar msica en clases).

Figura 4. Porcentaje de intervalos de las conductas prosociales de los alumnos en las diversas fases del estudio.
PROGRAMA DE MODIFICACIN DE CONDUCTA PARA ESCOLARES 75

- Otro elemento asociado a la efectividad de la interven- Alberto, P. & Troutman, A. (1999). Applied behavior analysis
cin tiene que ver con que el rendimiento acadmico for teachers. Londres: Prentice Hall.
del curso, en la asignatura intervenida, mejor nota- Bellack, A.S. & Hersen, M. (1989). Mtodos de investigacin
blemente, segn lo sealado por la profesora. en psicologa clnica. Bilbao: Descle de Brouwer.
Castro, L. (1982). Diseo experimental sin estadstica (4 edi-
- Finalmente, segn reportes de la profesora, la mejora cin). Mxico: Editorial Trillas.
conductual se generaliz a otras clases que no partici- Colegio de Psiclogos de Chile (1999). Cdigo de tica Pro-
paron de la investigacin. fesional. Recuperado el 20 de noviembre de 2007 de http://
Futuras investigaciones debern profundizar de una www.colegiopsicologos.cl/comisiones/codigoetica.PDF.
manera ms rigurosa en estos efectos positivos secun- Corsi, E., Guerra, C. & Plaza (2007). Diseo implementacin
darios. y evaluacin de un programa de manejo conductual para
padres de nios con Sndrome de Asperger. Psicologa con-
ductual, 15(2), 253- 266.
CONCLUSIN
Cooper, J. O., Heron, T. E. & Heward, W. L. (2006). Applied
behavior analysis (2 edicin). Nueva York: Prentice Hall.
Sobre la base de lo anterior se concluye que el tra- De la Barra, F., Toledo, V. & Rodrguez, J. (2003). Estudio de
tamiento conductual fue efectivo en la disminucin de salud mental en dos cohortes de nios escolares de Santiago
conductas disruptivas y en el aumento de las conductas Occidente: Predictores tempranos de problemas conduc-
prosociales en el grupo intervenido. Se considera adems tuales y cognitivos. Revista Chilena de Neuropsiquiatra,
que un tratamiento como el propuesto es viable de ser im- 41(1), 65-76.
plementado en diferentes realidades ya que se trata de un Forehand, R. & Mc Mahon, R. (1981). A clinicians guide to
parent training. Nueva York: Guilford.
tratamiento que implica poca inversin econmica y es
Herrero, M. L. & Pleguezuelos, C. (2008). Patrones de conduc-
fcilmente replicable en distintos establecimientos educa- ta interactiva en contexto escolar multicultural. Psicothema,
cionales. Por otro lado, el tratamiento puede ser flexible a 20(4), 945-950.
las necesidades de diferentes poblaciones ya que tanto las Hoffman, Sh., Palladino, J. & Barnett, J. (2007). Compassion fa-
conductas meta como los reforzadores de apoyo pueden tigue as a theoretical framework to help understand burnout
variar sin modificar la estructura de la intervencin. among special education teachers. Journal of Ethnographic
Pese a lo auspicioso de estos resultados, se considera & Qualitative Research, 2(1), 15-22.
que se deben tener presentes algunas limitaciones. En lo Kellam, S., Mayer, L., Rebok, G. & Hawkins, W. (1998). Effects
metodolgico es necesario sealar que no es posible ge- of improving achievement on aggressive behavior and of
improving aggressive behavior on achievement trough two
neralizar los resultados a otras poblaciones ya que se trata interventions: An investigation of causal paths. En B. P.
de un estudio de caso nico. En lo prctico, es importante Dohrenwend (Ed.), Adversity, stress, and psychopathology
considerar que el xito de la intervencin depende en gran (pp. 486-506). Nueva York: Oxford University Press.
medida de la motivacin del docente a cargo de la inter- Kellam, S., Rebok, G., Ialongo, N., & Mayer, L. (1994). The
vencin y del tiempo del que disponga para ser capacitado course and malleability of aggressive behavior from early
en las tcnicas de modificacin de conducta. Por ltimo, first grade into middle school: Results of a developmental
se considera que hay que ser cuidadosos respecto a la po- epidemiologically based preventive trial. Journal of Child
sible extensin temporal de los resultados de la interven- Psychology and Psychiatry, 35, 259- 281.
Klomek, A., Sourander, A., Kumpulainen, K., Piha, J., Tamminen,
cin ya que los seguimientos se realizaron a los 15 das
T., Moilanen, I., Almqvist, F. & Gould, M. (2008). Childhood
y al mes de terminada la segunda fase de intervencin, lo bullying as a risk for later depression and suicidal ideation
cual no asegura que los efectos de la misma perduren por among Finnish males. Journal of Affective Disorders, 109(1),
periodos de tiempo ms amplios. Futuras investigaciones 47-55.
debern aumentar sus esfuerzos por trabajar con muestras Kochenderfer-Ladd, B., & Pelletier, M. (2008). Teachers views
ms representativas e incluir mediciones de seguimiento and beliefs about bullying: Influences on classroom mana-
ms prolongadas en el tiempo. gement strategies and students coping with peer victimiza-
tion. Journal of School Psychology, 46(4), 431-453.
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