La Naturaleza de La Realidad
La Naturaleza de La Realidad
La Naturaleza de La Realidad
Todo el mundo quiere algo todo el tiempo. Puede ser cosas tangibles como
el dinero, las posesiones, pareja o los hijos. O cosas intangibles como la fama
o el poder. Todo el mundo sin excepcin est buscando la felicidad, ya sea a
sabiendas o sin saberlo. Los diversos tipos de satisfacciones que vienen en
el cumplimiento de los deseos son meramente plidas sombras de lo que es
la satisfaccin verdadera ya que esta es temporal y parcial. Lo que buscamos
es la felicidad absoluta que es permanente.
Por qu es que aunque buscamos la felicidad todo el tiempo siempre nos
elude? Porque tomamos la direccin equivocada. La felicidad que buscamos
est dentro de nosotros. Dentro de nosotros est la fuente de la
bienaventuranza, la ambrosia de los dioses, la cual incluso una gota es
suficiente para intoxicarnos de felicidad para siempre y destruir
completamente nuestra miseria y dolor. Pero como somos tontos, creemos
que la felicidad est en algn lugar afuera y, en consecuencia, pasamos la
mayor parte de nuestra vida adquiriendo cosas como la riqueza, la
propiedad, la fama y la familia. Somos como el ciervo que sigue corriendo
tras un espejismo para saciar su sed y cae muerto en ltima instancia, sin
encontrar el agua. Pasamos nuestra vida buscando la felicidad y
encontramos que la vida est mayormente llena de dolor y sufrimiento.
Incluso los placeres ms exquisitos son temporales y al final tambin nos
abandonaran dejndonos vacos y exhaustos.
En realidad el placer y el dolor dependen del concepto mental de cada uno,
es la mente la que da significado a las cosas, la que atribuye cualidades y
vida, la que da color o lo quita. La mente proyecta ilusiones y se encarga de
creerlas despus, la mente hace real los espejismos; proyectamos ideas
sobre las cosas y creemos en estas dando valores absolutos a lo transitorio.
Debemos conocer la mente porque es la causa de todos los problemas en el
mundo. Es sumamente variable, no es estable. Cmo podemos controlarla?
Est persiguiendo objetos en el mundo exterior todo el tiempo. Cmo
podemos separarnos de su accin e influencia?
Perdido en la identificacin con la mente, piensas en un cuerpo particular
como "tu" hijo. Pero no entiendes que "tu" hijo es slo una cosa en tu
imaginacin. Quin es tu hijo? Si tomas el cuerpo como tu hijo, entonces si
el cuerpo muere no lo podrs ver nunca ms. As que ejercita tu inteligencia.
Conocer y ver la verdad es la nica manera de ser felices. Nosotros mismos
somos la causa de las ataduras que sufrimos. Hemos creado este mundo con
toda su desazn y sufrimiento y, a menos que lo destruyamos, no podremos
ser felices. Todo el mundo externo puede desaparecer, pero si no destruimos
el mundo mental que hemos creado, no habr libertad para nosotros.
As que trata de elevar tu atencin concentrando tu mente en el interior,
entonces as habr slo felicidad, felicidad y bienaventuranza. Si purificamos
nuestra mente y la hacemos transparente, entonces el Alma brillara
inmaculada a travs de esta.
Dentro hay un enorme y rugiente ocano de felicidad divina e infinita, una
sola gota de la cual puede destruir por completo todas nuestras aflicciones
para siempre y transportarnos a un alto estado de xtasis. Pero locamente
buscamos esto afuera. Imaginar que la esposa, los hijos, la riqueza, el
nombre, la fama, etc., puede traernos la felicidad es una mera ilusin.
Nuestro estado es como el de un ciervo que contiene el almizcle en su propio
ombligo, pero en su ignorancia busca este perfume divino en su entorno en
rboles, enredaderas, hierba, etc.
Sin el conocimiento de que todo esto es un espejismo, que todo esto es
impermanente, surgen grandes dificultades. Qu clase de grandes
dificultades? Las preocupaciones son la mayor dificultad. Las grandes
dificultades vienen porque basas tu vida en valores incorrectos. Cuando el
valor es incorrecto, siempre te equivocas. Si el valor es correcto entonces
siempre caminaras hacia la trascendencia. As que el valor desde el principio
es incorrecto. Intenta capturar tu propia sombra, pensando que tu sombra
lo es todo. Esto es una locura. Cuando el sol se ponga, la oscuridad se
fusionar en la oscuridad. Buscars tu sombra en la oscuridad y no la
encontrars porque te encontrars con mesas y sillas (obstculos).
Debes saber que la mente tiene el dominio sobre el alma debido a la falsa
identificacin, y es por esta razn que est creando todo esto. Si quitas el
alma de la ecuacin, la mente no puede crear. No has visto a un hombre
muerto levantarse y decir: Estaba soando. No l est muerto. As como se
crea en el sueo, as tambin lo es aqu. Este es el conocimiento puro.
Parabrahman, el Ser supremo se dividi en nombres y formas, Imagina que
alguien hizo un florero hermoso. Mralo bien. Ahora, cmo llamas al
material del cual est hecho? Arcilla. Entonces imagina que ests separando
el jarrn de la arcilla. Sabiendo que en realidad lo que llamas jarrn es pura
arcilla, no es as? Es la arcilla la que ha tomado esta forma. Es Brahman (la
nica conciencia universal) que ha tomado todos estos nombres y formas. Y
debido a la diferencia de nombres y formas, dentro de s mismo, se est
disfrutando de uno a otro.
Ahora bien, por medio de una correcta educacin espiritual y una Sadhana
seria sabrs cmo mirar los nombres y las formas mirando el alma en ellos
en lugar de identificarte perdidamente con las apariencias. Entonces desde
los ojos del conocimiento, no pensaras que tu hijo es el cuerpo, entonces si
el nio llegara a dejar ese cuerpo, no ser tan triste para ti pues habras
reconocido el principio inmortal en lo interno. Sabrs que el nio nunca
muri. Pero si estas durmiendo en la ignorancia del alma, te identificas y
piensas que el cuerpo es tu hijo. Pero el cuerpo no es tu hijo. Es tan solo un
pedazo de arcilla.
Captas la idea? Si alguien me trae una caja con un diamante adentro, sera
ilgico sentarme a contemplar la caja da y noche olvidando la joya preciosa
que guarda. Del mismo modo, embriagarnos en el apego a lo externo es
olvidar lo que da vida, lo que verdaderamente tiene valor, el alma, porque la
caja en la que viene el diamante tarde o temprano tendr que irse.
Entonces, aunque Brahman toma estos nombres y formas. Todava es
Brahman. La Biblia cristiana tambin dice lo mismo. En el principio era el
Verbo y el Verbo estaba con Dios y el verbo era Dios y se hizo carne. Se hizo
carne - pero todava es Dios. Est en la materia pero no deja de ser Dios. La
arcilla se convirti en una olla, pero todava es arcilla.
El comprender que todo este mundo sigue siendo Brahman sin importar las
formas se llama conocimiento puro, pero lo que hace que no veas a Brahman
es porque ests identificado con ese nombre en particular y una forma
particular. Pinsalo. Esto es conocimiento puro y este desemboca en amor y
devocin. Todos estos nombres y formas que el Seor ha tomado, forman lo
que se llama maya o ilusin, pero maya es el poder divino, la naturaleza de
la realidad es como si estuvieras viendo una serpiente superponindola a
una cuerda, pero si observas con conocimiento, entonces arde el fuego de la
claridad y no encuentras ninguna serpiente, pues siempre ha sido una
cuerda.
En realidad no hay mundo. Slo Brahm es. Siempre lo ha sido y siempre lo
ser. Pero t, entretanto, lo has olvidado. Recordarlo es Autorrealizacin.
Vivir esto es traer el cielo a la tierra.
Como es all, es aqu; y como es aqu, tambin es all. Quien percibe alguna
diferencia entre ambos se condena a vagar de muerte en muerte. Cuando la
mente realiza a Brahman, no percibe ninguna multiplicidad. Quien percibe la
pluralidad se condena a vagar de muerte en muerte.
Katha Upanisad
Todos los Budas y los seres conscientes no son sino la Mente nica, ajena a la
cual nada existe. Esta Mente carece de principio, es no-nacida, es
indestructible, no posee un determinado color y carece de forma o apariencia
alguna. A ella no pueden aplicrsele las categoras de existencia o de no-
existencia y no puede ser concebida en trminos temporales como vieja o
joven. Carece de dimensiones y trasciende todo lmite, medida, nombre, rasgo
y comparacin. Es, en definitiva, aquello que ya se encuentra ah antes de que
empecis a pensar sobre ello y caigis en el error.
Crnicas de Chun Chou, de Huang Po